The game (Harry Styles y Tu)

Stage 2

Llevaba más de media hora mirando en la misma dirección. Llevaba más de media hora con la misma expresión de enojo en la cara. Sí, estaba enojado. Indignado. Celoso. Terriblemente celoso, hervía de celos. Llevaba más de media hora mirando cómo la castaña charlaba animadamente con Niall, otro de los chicos del grupo. La veía reírse de vaya uno a saber qué cosa y lo veía a él reírse junto a ella y claro que le molestaba. Él tenía que ser el que estuviera al lado de la castaña y no el impostor con cara de furby.

Suspiró molesto y apoyó su cabeza sobre su mano izquierda, sin dejar de mirar a la parejita que tenía a pocos metros. Tenía que hablar cuando antes con _____ y aclarar las cosas, no sabía cuánto tiempo más iba a soportar la cercanía de su chica con Niall sin asegurarse de que entre los dos no pasaba nada.

Porque una cosa era verla riéndose con Liam, que ya sabía que le gustaba a él, y también sabía que no tenía otras intenciones con la muchacha, pero Niall no sabía nada al respecto. Además, por lo que lo conocía, no era una persona de muchas palabras, le costaba abrirse, soltarse, pero con _______ al lado parecía todo lo contrario. Seguramente era un mujeriego, probablemente buscaba que la castaña cayera rendida a sus pies, así se aprovechaba de ella y después la dejaba tirada, porque seguramente también era un descorazonado. Lo que más le molestaba era que ella había caído en el (supuesto) juego de Niall.

Sintió que alguien se sentaba a su lado y ni siquiera se gastó en girar su cabeza para ver quién era, lo único que le importaba era no sacar la vista de los dos jóvenes que estaban más adelante. Tampoco se preocupaba por ser discreto, sabía quién se había sentado a su lado y no tenía nada que ocultarle.

-Si la seguís mirando así la vas a ojear-Dijo la persona que acababa de sentarse junto al rizado, mirando en la misma dirección que el muchacho.

-No me importa, quiero que se aleje de él-Le contestó Harry con agresividad.

-¡Hey! Conmigo no te enojes que yo no te hice nada.

-Perdón Cami, es que esta situación me supera. ¿Por qué tiene que estar con él? Encima están muy cerquita y se ríen, seguro que él es un mujeriego y la quiere enamorar y después de una noche, irse con alguna otra chica-Se disculpó explicándole a la morocha lo mismo que había estado pensando antes de que se sentara a su lado.

-Son amigos y nada más. Niall es un amor, se hizo bastante amigo de ___ y ella está en todo su derecho de hacerse amiga de quien quiera. Además-Agregó antes de que Harry pudiera interrumpirla-Creo que tiene novia, así que no va a hacer nada con ella-Finalizó con una sonrisa tratando de tranquilizar al rizado.

Soltó todo el aire que había en sus pulmones, como si de esa manera pudiera hacer que la ira se alejara de su cuerpo. Se sintió un poco mal al ver la mirada preocupada de Camila, así que pensó que lo mejor era decirle que estaba todo bien, que tenía razón y que no iba a pensar más en eso.

-Tenés razón, además es inteligente y no se va a dejar confundir por cualquiera-Respondió después de un rato, con tranquilidad, mirando a la morocha-¿Qué te parece si vamos a caminar y me contás un poco de tu vida? Hace mucho que no tenemos una charla seria-Propuso con una sonrisa sincera, a la que la morocha respondió.

-Me parece una idea genial-Admitió.

Ambos jóvenes se levantaron del sillón del living de la gran casa donde estaban parando. Harry rodeó con un brazo a la morocha y se dispusieron a caminar y charlar de cualquier cosa.


Todo el tiempo había sentido la mirada fija de Harry sobre ellos dos. Por un lado la hacía sentir incómoda y le molestaba un poco, pero por el otro le encantaba la idea de pensar que el casaño rizado podría estar celoso de Niall. No tenía motivos para estarlo, Niall tan solo era un amigo con el que se llevaba increíble, pero solo era amigo.

Habían cruzado sus primeras palabras el primer sábado en el que se habían reunido todos para ayudar a los nenes, y unos días más tarde se habían encontrado, de cuasualidad, en un restaurante. Se saludaron y decidieron comer juntos, ya que ninguno de los dos estaba compañado y a partir de ese momento tuvieron buena onda. Se habían quedado hablando durante horas, habían intercambiado celulares y hasta habían acordado volver a encontrarse.

Niall era cerrado, sí, pero la castaña le había sacado tanta charla y lo había hecho sentirse tan cómodo que no pasó mucho tiempo hasta que se soltó por completo con ella y, si bien no eran mejores amigos, se podía decir que eran grandes amigos. ______ le había contado lo que le pasaba con el castaño rizado, a lo que Niall contestó que Harry debía estar loco para jugar con una chica tan perfecta como ella, cosa que hizo sonrojar a la castaña. Niall le contó que estaba saliendo con una chica que se llamaba Candela, que había aparecido en su vida y todo dio un giro de 180 grados. Y cuando discutían, Niall corría a llamar a ______ para pedirle algún consejo, y cuando había alguna novedad respecto al rizado, ____ no dudaba en decírsela al joven rubio.

-¿Vos decís que se puso celoso?-Preguntó el muchacho, sacando a _______ de sus pensamientos.

-¿Eh?-Estaba confundida, se había dejado llevar tanto por el hilo de sus pensamientos que no entendía qué era lo que le preguntaba su amigo.

-Harry digo, ¿Vos pensás que está celoso?-Y realmente no dejaba de sorprenderla. Si ella no estuviera perdidamente enamorada de Harry, y él no estuviera felizmente de novio, probablemente hubiera querido que Niall fuera su novio. Era perfecto (aunque no tanto como el rizado), detallista, observador, caballero, sincero, bueno y varias cosas más, aunque le faltaba el toque especial que tenía Harry que hacía que _______ estuviera loca de amor por él.

-No sé, no creo...-Seguramente sí se había puesto celoso, pero quería sonar indiferente.

-A mí me parece que sí, desde que nos sentamos a hablar acá nos estuvo mirando y su cara no era la más alegre del mundo.

-¿Sí? Ni me di cuenta-Estaba mintiendo, claramente estaba mintiendo, ella lo sabía, Niall lo sabía, pero ella también sabía que él no le iba a decir nada, así que prefería seguir con esa postura.

-Yo creo que deberías escucharlo, quizás no todo es como vos pensás.

Se acercó para abrazarlo y él le correspondió el abrazo.


Habían estado hablando de todo. Se habían puesto al día, hacía un buen tiempo que no tenían una de sus largas charlas sobre la vida, y les había hecho bien a los dos. Se habían dejado llevar por la charla y, sin darse cuenta, habían caminado más de treinta cuadras y ahora tenían que volver.


-... Y bueno, esa es la situación...-Terminó de decir la morocha tras cruzar la última cuadra que los separaba del lugar en el que se estaban quedando.

-Consejo de hermano, no les prestes atención, de última te vas y que se queden discutiendo solos, no dejes que te contagien el mal humor. Y sabés que si Zayncito está ocupado, podés venir a casa cuando quieras-Contestó con una sonrisa el castaño y luego depositó un beso sobre la mejilla de la morocha.

-Gracias Hazza-Respondió ella abrazándola. El celular de la morocha comenzó a sonar-Hablando de Zayncito...-Dijo con una sonrisa de oreja a oreja tras leer el nombre de su novio en la pantalla.

-Mandale saludos, yo voy entrando-Avisó él dejando a su mejor amiga hablar tranquila.

Entró y se llevó una sorpresa. Lo qu eestaba viendo no era exactamente lo que quería ver, y mucho menos estando solo. Si hubiese estado Camila para apoyarlo y tranquilizarlo todo hubiera sido mucho más fácil, pero estaba solo frente a la parejita abrazándose. La ira y los celos le volvían al cuerpo, la tranquilidad que había adquirido durante la charla con su amiga se había dico muy lejos y ahora solo reinaban los celos y las ganas de dejarlo sin dientes a Niall. Respiró profundo y contó hasta diez antes de seguir avanzando a lo largo del living.

-Hola-Saludó por educación, pero fue un saludo cortante y frío.

-Hola-Respondieron al unísono Niall y ______, que no habían visto que el rizado había entrado.

El castaño siguió caminando. Tenía que hablar con ______ cuando antes. No iba a soportar mucho tiempo más esa situación. Escuchó que los dos seguían hablando en voz baja, pero intentó no darle importancia. Sabía que si lo hacía, todo iba a terminar mal. Caminó hasta su cuerto y se tiró en su cama, no quería que nada ni nadie lo molestaran.

-Harry... Harry...-Escuchó que lo llamaban. Sentía que todo era parte de un sueño, porque no lo estaba llamando cualquier persona, sino que lo estaba llamando ella.-Harry... está la cena, levantate que solo faltás vos...-Volvió a escuchar que lo llamaban y de a poco fue abriendo los ojos y la vio a ella, asomada por la puerta de su habitación.

-¡Uh me quedé dormido! Gracuas por llamarme, ahora bajo-Le agradeció, aunque todavía no había asimilado la idea de que la castaña hubiese entrado a su cuarto para despertarlo.

Se levantó, todavía medio dormido, y fue al baño a lavarse la cara antes de bajar al gran comedor.


Liam le había pedido que fuera a despertar al rizado para que fuera a cenar. Al principio se había negado, pero ante tanta insistencia de parte del muchacho, resignada, subió las escaleras que llevaban a las habitaciones y se dispuso a despertar a Harry.

Abrió la puerta intentando no hacer ruido y lo vio acostado, sumido en un profundo sueño y murió en ese mismísimo instante. El castaño rizado durmiendo le transmitía una paz inmensa, además de que le parecía extremadamente tierno. Por un minuto pensó la idea de no despertarlo y de quedarse mirándolo, pero no, no podía, y se odiaba por eso. Se odiaba porque no podía creer que estuviera tan sometida a los poderes encantadores de Harry, incluso cuando él estaba dormido y no tenía ni la menor idea de lo que estaba sucediendo a su alrededor. Lo escuchó decir cosas inentendibles y se llevó un pequeño susto, pero luego sonrió al verlo sonreír a él. "Vine a despertarlo, no a mirar cómo duerme" se dijo a ella misma y decidió llamarlo.

Volvió a morir de ternura cuando el muchacho se despertó sin entender absolutamente nada de lo que estaba ocurriendo. Claro, cómo iba a entender si era ella la que lo estaba llamando, después de haberlo tratado tan mal durante el viaje. Una vez que se aseguró que Harry estaba despierto, se dispuso a salir de la habitación para ir al comedor a comer con todo el resto.

Se acomodó al lado de Niall, quien la vio llegar con una sonrisa. En frente del rubio estaba sentada su mejor amiga, por lo que no dudó un segundo en sumarse a la conversación hasta que llegara la comida.