Disconnected.

Capítulo 012

dai: en primer lugar, las contraseñas del cel salvan vidas, gracias a dios existen y mi hermano no puede ver todo lo que tengo, sino literalmente estaría muerta. daiana, nombre falso, pechuga. me encantó todo tu capítulo, en serio, fue perfecto aunque no pienses lo mismo, me gustó mucho. odio barra amo a maximilian, y de kevin no puedo decir nada, su nombre me recuerda a un chico que me gustaba y es como que siquiera quiere escuchar ese nombre. en fin, perfecto, pechuga de pollo.
karly: me encanta karls, sinceramente no entiendo a esos padres que te dicen que dejes el cel pero al final no prestan atención, duh, es mi caso, mi papá pide que deje el cel y después siquiera hablan. bueno, sigo leyendo. terminé! no me lo creo a lo de la bicicleta, ja, pobree xd. y el beso! EL BESO! omfg, por qué le pego¿ why?
vic: che victoria, por las dudas, vos no estuviste en mi casa, no? me encanta como se llevan lara y nate, son tan mi hermano y yo, aunque de vez en cuando nos amamos xd. ay me encantó vic, solo que, detesto a lara cuando es muy forra, o sea mina como te puede caer mal un rubio teñido como ese, o sea no. eeeh, yo tiré la onda de que el hermano era bala, so, que no me venga james a copiar. me tente, james es un bicho de cuidad, gente. terminé, per-fec. la carrocidad del dos mil cuanto?
karly: antes que nada, le agradezco a dios que hagas caps cortos y entendibles, sino me hago un barullo y no cazo una xd. en fin, "Qué tal si me come un oso" jajaja hay no me mató, que onda? y si se la come? y si ella a él? ea ea ahr. "¿Crees que regrese con vida? Digo, tal vez muera porque alguien me vea bañándome en el lago y eso será totalmente tu culpa" ay no, la amo a esta boluda, mi idola. lo terminé, me encantó. che, si no parece, bailo tango entonces? eh.
dan: dan, cuando digo dan, me recuerda a danisnotonfire y fangirleo mal, sooo... me encantó, rose es una chica mala pero creo que tampoco exagera, es cool, ahq. y brandom, ay es super cute y creído, pero cute y siento que van a ser una pareja suuuuper cute, y dije cute muchas veces pero lo vale... me eeencantóooo y eso, el campamento se acerca y espero que me sorprendas ;)

surprise, primero quería comentar antes de publicar. en quince mi cap, quiero editar algunas cosas xd

Capítulo 013

Mi madre había dicho lo justo y necesario para que me tire a sus pies y suplique piedad para poderme quedarme en casa y no ir a un campamento de la edad de los dinosaurios, sin móviles y vida. Ella dijo “comienza a organizar y acomodar las cosas que llevaras al campamento” y yo poca importancia le di, ¡Cuando lo dijo semanas atrás! Y yo tenía mi móvil en la mano y una charla pendiente con Jenna.

—Es imposible, yo no iré y se acabo —inflé mis mejillas enojado. ¿Acaso tenía cinco años? De todas formas, siempre la convencía con mi actitud infantil y lograba sacarme de encima todo lo que no me convenía.
—Antonie, no te estoy preguntando —suspiró cansada, se volteó para mirarme y secó sus manos con su delantal cual la cubría si algo mal salía en la cocina—, te estoy obligando a ir y punto —usó el mismo tono de voz que yo había usado, haciendo que yo frunciera el ceño.
—Pero mamá —chillé, aunque ella enseguida alzó su dedo índice y pidió silencio sin siquiera abrir la boca—,  yo no quiero ir, mi vida está aquí… además, en estos días regreso a la escuela de modelos y siempre me necesitan, porque obviamente, soy el mejor.
—Ann, silencio —volvió a suspirar, cerrando sus ojos con cansancio y masajeando sus sienes—, tu padre dice que es lo mejor para desconectarte un poco de la tecnología, últimamente lo único que haces es usar el móvil, y no socializas-
—Si lo hago, Amy es mi amiga y hablo con ella, también lo es Jenna —crucé mis brazos sobre mi pecho, intentando hacerle entender nuevamente a mi madre que tener una amiga vía internet no era tan malo como lo pensaba.
—Pero Jenna vive en otro continente, y tampoco es bueno que tengas un solo amigo —y otra vez volvía a caer en la misma idea. También se cruzó de brazos y se recargó sobre la mesa. Su típica pose de victoria, o mejor dicho, de que iba a ganar y yo nuevamente derrotado como siempre.
—Por favor, si quieren comienzo a trabajar aunque suene asqueroso —le rogué arrugando la nariz con tal idea de pensar en trabajar y ensuciar mis manos en algún lugar.
—Mi palabra esta dicha, iras y tu papá también apoya la idea de que salgas un poco al aire libre —intentó sonreír aunque no había motivo para hacerlo, suspiró y rodó sus ojos—, Amanda también irá.
—Oh ya veo —dije, mi madre sonrió, como si por fin había dado en el blanco y yo dejaría de insistir para quedarme en casa junto a mi bebé— ¡Esto es un complot entre padres que necesitan tiempo a solas para hacer sus cosas! —Chillé asqueado.
—Creí que te pondría feliz —dijo confundida—, y además, tienes diecinueve años, mírame a la cara y dime que nunca has estado con algún noviecito —me miró divertida.
—Pffff, por favor, aquí no hay nada lindo.
— ¿Y qué hay del vecino? —Preguntó moviendo sus cejas.
—Es un caso superado, estoy libre de todo pecado, y no voy a volver a enamorarme nunca más, viviré con tres gatos, un perico…  aunque si ahora lo pienso, puede ser comida para los gatos —fruncí el ceño y ella rió—, en fin, soltero hasta los cuarenta.
—Pero no virgen —canturreó marchándose de la cocina y dejándome sonrojado hasta las orejas.

¿Qué sabía? ¿Quién le había dicho? ¡Que alguien me explique por qué demonios había dicho eso!


—No logro entenderlo, tampoco es para tanto, no es como si viviera con el móvil en la mano —le dije a mi amiga al revés porque estaba recostado en la cama y mi cabeza colgaba hacia atrás.
—Oh no, claro que no —habló con ironía y ambos comenzamos a reír.

Ella estaba sentada cómodamente en mi puff color rosa mientras se entretenía usando su celular. Era una buena forma de pasar el rato, aun más cuando nos dedicábamos a husmear cuentas de Facebook, Twitter e Instagram de viejos compañeros de preparatoria. Nos divertíamos lo suficiente, además de que, hacíamos lo que ellos alguna vez habían hecho con ambos. Mis compañeros me rechazaban por mi forma de ser, tan extremadamente femenino y prefería jugar con niñas antes que fútbol con ellos, y Amy era diferente a mí. Aunque después de esa diferencia ambos nos pudimos conocer y entendernos bien. Cuando ingresamos a la preparatoria siguieron pasando las mismas cosas, pero ya no me encontraba solo, sino tenía a Amy quien me protegía y yo a cambio le enseñaba una buenas lecciones para usar tacones y vestirse adecuadamente para las millones de citas con muchas chicas que tenía cada mes. ¡Y después se quejaba de tener mala suerte en el amor!

— ¿Has visto el Facebook de June? —Preguntó, y yo negué repetidas veces—, ella está embarazada, ¿Puedes creerlo? No sé si es bueno o malo, pero pobre del niño que esté en su vientre, ella era una prostituta en la preparatoria y dudo que haya cambiado de un año al otro.
—Quizás si lo hizo —la interrumpí. Amy ensancho su sonrisa, y frunció su ceño.
— ¿En serio lo crees? —Preguntó y asentí—, es imposible que una persona cambie de la noche a la mañana, en su caso cree que es imposible que ella cambie ahora que es adulta y necesita trabajar para sobrevivir, ¿Y qué es lo que hace?
—Sexo por dinero. —Dije obvio.
—Exacto, nunca lo he pensado pero supongo que apenas cumpla veinte mi madre va a pedir que comience a aportar algo a la casa y no sea solo una boca cual alimentar.
— ¿Te refieres a vender tu cuerpo por dinero? —Pregunté curioso y a la vez confundido. ¿Cuándo Amanda hablaba en serio?
—Es solo una idea, no te lo tomes tan literal… aunque tú deberías intentarlo, aunque sea para divertirte —habló soltando una risita, y mirándome como si yo fuera una rebana fría de pizza que cualquier persona comería con gusto y hambre a las cuatro a.m. después de llegar de alguna disco.
— ¿Por qué lo dices? —Pregunté manteniendo mi ceño fruncido. Debería de buscar un emoji para esa expresión.
—Tienes un buen trasero, un buen culo necesita de una buena polla —dijo como si se tratará de algo tan común y cero vulgar.
— ¡Cállate, mi madre va a oírnos! —Chillé quedando paralizado al momento, rogando que mi madre no esté paseándose por los pasillos del segundo piso.
— ¿Cómo si nunca te escucho masturbándote o viendo algún vídeo
porno? —Soltó una risa después de sus palabras.
—Espero que no.
— ¡Aburrido! —Fingió un abucheo, con sus manos a cada lado de su boca.
—Claro que no, solo que no me gusta la idea de pensar que mi madre sepa que tengo relaciones o me masturbo, ¡Suena horrible!
—Quizá en el campamento tengas oportunidad para algo, digo, supongo que solos no vamos a estar —guiñó un ojo, y sonrió—. Oh, y hablando de eso, me enteré por Facebook que Lysandro va a ir
— ¿Hablas en serio?
—Más en serio imposible, de todas formas, irá él y no su zorra novia, ella se anda lamentando que estará de vacaciones en Tokio cuando nos estemos marchando y ella no puedo mover sus fechas ya que estará en la semana de la moda allí y quiere ponerse al día, es patética en su Facebook.
—Se lo agradezco a Dios, y que no me pongan cerca suyo.
—Dejé mi móvil sin contraseña en la mesa de noche de mi madre por agradecimiento a Dios.
— ¿Ha visto todo lo que tiene?
—No, fue a media noche y ella dormía… y roncaba, en fin, soy feliz, Félix también y nos iremos de vacaciones en unos días.

Félix es su móvil, y la ¿persona? que más ama, momentáneamente. Para ella Félix es una persona, y punto.

—Estaremos sin móviles, ¿Lo sabes?
—Ni me lo recuerdes, él aun no lo supera y yo menos, de todas formas, irá conmigo como sea.

Mi madre al poco tiempo entró en la habitación ofreciendo sus cupcakes recién horneados y sonaba bastante raro, así que terminamos por preguntarle que necesitaba y ella con urgencia pidió que vayamos al centro comercial a comprar las cosas que necesitaría antes de marcharme a la jungla, también pidió que me distraiga un poco sin llevar el móvil, ¿Acaso estaba loca? Eran mis últimos días junto a él.


Teníamos una larga lista de cosas que deberíamos comprar, y en últimos lugares teníamos anotado ropa para ambos, ya que Amanda también había hecho una lista rápida para todo lo que tendría que tener antes de marcharnos dentro de dos días hacia la nada misma.

— ¿Un bikini? ¿Hablas en serio? —Pregunté, mi amiga se escondió debajo de su cabello chocolate—, ¿A quién quieres impresionar?
—Oh cállate, solo quiero dar otra impresión a personas que no conozco —se cruzó de brazos y siguió su camino, metiendo una que otra cosa dentro del carro.
—Irá Lysandro —le informe, aunque era obvio de que lo sabía. Ella misma me lo había dicho a mí, dah.
—Lo sé —dijo en un fluido español—, pero eso no impide que haya gente cual no me conozca y quiera algo conmigo.
—Hablaste en serio cuando dijiste lo de sexo por dinero —me afirmé. Amy me codeó en el estomago cuando una mujer cuarentona se volteó hacia nosotros y abrió sus ojos sorprendida.

Obviamente nos había escuchado.

—Degenerados —chilló la señora con asco y siguió su camino, con una velocidad bastante rápida alejándose de nosotros. Amy soltó una risa, y no pude evitar seguirla.
— ¿Desde cuándo la palabra degenerado está de moda? —Preguntó divertida.
— ¿Y puberto? —Me reí.
—Oye, mi madre aun la usa —dijo fingiendo un leve enojo, aunque nuestras risas no podían cesar y llamamos demasiado la atención en aquel lugar.

.

Para cuando había comenzado a oscurecer, ya teníamos todo listo y las cosas guardadas en el baúl del Smart ForTwo, si es que a eso se le podría llamar baúl.

—Creo que es todo, ¿No? —Pregunté. Por mi parte ya había conseguido todo, pero Amanda siempre olvidaba una que otra cosa.
—Ah ah —negó. Lo supuse—, aun falta algo más que vas a necesitar mucho.
— ¿Así?
— ¡Sí! —Chilló con alegría—, ¡Condones! —Gritó con la voz más aguda posible, y todo el mundo se había detenido para voltearse y ver cómo me encontraba tan rojo como una manzana.

Mi amiga soltó un ‘oops’ sin realmente sentirlo en ese momento. Mi mirada se fijo entre tantas personas a la misma mujer que habíamos visto horas antes, ¿Qué hacía allí? Bajé mi rostro avergonzado porque la mujer parecía ponerse roja de cólera.

— ¡Par de sin vergüenzas aléjense de mi! —Gritó. Y un hombre por poco se acerca a golpearme aunque se terminó deteniendo cuando Amy fingió estar embarazada y a punto de parir. ¿De dónde había sacado esa sandía? Y eso me recordaba, tenía que volver a ver Not Cool.

Después de todo, terminamos siendo echados del centro comercial, y volvíamos a casa (ya que Amanda se quedaría los últimos dos días a dormir), cantando la canción My Boyfriend is Gay de Hailey Rowe y riéndonos por la mujer que le había aconsejado a mi amiga que consiga un hombre que sea heterosexual porque yo aparentaba demasiado gay, y también la había felicitado por sus mellizos que pronto nacerían y se llamarían manzana y naranja por acompañar a la sandía que se dispuso a hacerse pasar por un vientre con dos niños. Un día loco. Pero merecía algo de diversión después de todo.

HolU:

Capítulo 014