All Over Again [Harry Styles]. Continuación II.

Poco sería decirte que estoy llorando. No puedo creer que haya hecho eso. En parte si, pues sólo quería ayudar a su amiga. Pero al hacer eso desmostró que no confiaba en ella. Kate se desmorono en el escenario. No puedo creerlo. Síguela pronto xx

Poco sería decirte que estoy llorando. No puedo creer que haya hecho eso. En parte si, pues sólo quería ayudar a su amiga. Pero al hacer eso desmostró que no confiaba en ella. Kate se desmorono en el escenario. No puedo creerlo. Síguela pronto xx

hola, soy nueva en el foro(? leo tu novela de hace mucho tiempo y WOW! eres magnifica escribiendo:)

no doy más 

te juro que no me esperaba eso no sé ni pensé en Nath

ya empezamos con la depresión

ah, otra cosa, esta piba es bipolar o algo. Quiere que Harry se olvide de ella xq dice que no soportaría verlo sufrir Y LA CONCHA DE TU MADRE EL PIBE VA A SUFRIR SI VOS TE VAS NO TE DAS CUENTA TARADA 

eso es todo por hoy, chau

me estas cargando
la puta q te pario


nosotras no merecemos esto

Pobresita la amoo que ya no le pase nada malo harry bebe ve por ella YAA!!

Holaaaa soy nueva en el foro y debes saber que sólo me hice esta cuenta por tu nove, que por cierto haaaa la amoooo, pero ahora la pregunta del millón... Kate y Harry tendrán un final feliz? Síguela plisss que amoo tu nove

yo ya no puedo mas con esta novela, terminala ya porque me voy a morir de algo al corazón.
se que lo que hizo kate lo hizo de "buena" pero me da una lastima nath, se dio cuenta que la mejor amiga no confia en ella, q feo todo
y kate que quiere a harry pero no quiero hacerlo sufrir, yo no entiendo, te juro. Ni que q fuera asesina la conchuda esta, perdón.
no se, ya es demasiado, se me mezclan todas las emociones
otra cosita, feliz cumpleaños ccccccccccccharlie, ojala la hayas pasado divino, ya te lo dije, y  creo que tambien es feliz legalidad si no me equivoco, 18.
Terminala antes del 10 de febrero x lo que mas quieras q no me quiero ir sin leer el final
igual terminala cuando quieras viste, te dejo besitos y te leo prontoooo

MUEROO )):

Que capítulo intenso!
Me encanto, esperando ansiosa el próximo!
Te adoro :)
besitos...

ESCRIBES COMO LOS DIOSES, NO PUEDO DEJAR DE AMAR TU NOVELA.
POBRE KATE, TIENE QUE ARREGLARSEEEEEEEE NO PUEDEN ESTAR PELEADAS, Y ELLA DE UNA VEZ POR TODAS TIENE QUE ACEPTAR A HARRYSITO

bueno me calmo me calmo, no se si me presenté, creo que si, en todl caso soy vic y soy tu lectora hace muchito. Empecé a escribir una nove, por si se quieren pasar aca se las dejo https://onlywn.activoforo.com/t73789-good-enough-harry-styles-y-tu?highlight=good+enough

besitosss

Síguela!!! Charlie quieres que muera o que? Harry debes de ir tras kate y decirle cuanto la amas!!

Ohhh que tonta no me he presentado me llamo Britney pero todos me dicen Brit, tengo 14 años, soy de México y emmm...AMO TU NOVELA!!!

- Claro, ¡por supuesto que has ganado! -gritó, una vez que estábamos un poco más lejos del escenario y más cerca de los camarines.- Claro que lo has hecho. Ni siquiera arreglándolo y manejando personas has podido salirte con la tuya esta vez, Katelyn.
- No estaba tratando de salirme con la mía, Nath… -hablé, cortando mi llanto para intentar explicarle, aunque sabía que no había sentido racional en ello; sabía que tan enojada estaba y sabía que, una vez más, había jodido todo lo bueno que existía en mi vida.
- ¿Entonces qué estabas haciendo, Katelyn? ¿Qué diablos estabas pensando? -chilló y las lágrimas salieron aún con más fuerza de sus ojos, mientras se acercaba a mi para hacerme sentir incluso más pequeña de lo que me sentía a su lado.- Ni siquiera así he podido ganar, ¿sabes? Ni siquiera con trampa. -se lamentó, sin gritar esta vez, y la observé a través de mis pestañas, mojadas por las lágrimas.
- No digas eso…
- ¿De verdad estás diciendome esto? ¿Tú? -interrumpió mi consuelo, mirandome con odio una vez más, recomponiéndose de su pequeña debilidad mientras acomodaba su cabello.- Si mal no recuerdo, ni siquiera has tenido un pequeño voto de confianza en mis posibilidades. Has actuado de forma egoísta como siempre lo haces. Estoy cansada de esto. -musitó colocando el dorso de su mano sobre su frente, sus facciones retorcidas por el llanto de impotencia, tristeza y odio combinadas en la peor mezcla.
- Lo lamento, Nath. Lo lamento, en verdad lo siento.
- Oh, no empieces con eso, ¿quieres? Ni siquiera has tenido la dignidad ni el valor para contarme al respecto. -chilló una vez más, y supe que ya nada más tenía sentido si ella también estaba fuera de mi vida. No podía esperar nada bueno en ella, ni mucho menos en su forma de actuar, porque comprendía su furia.- Entonces… tú estabas primera en las malditas listas y yo quizás ni siquiera estoy en ellas.
- Lo estabas… -susurré, mi voz rota y desgarrada.
- No me interesa. Ni siquiera quiero escucharte. ¡No vales la pena, Katelyn! -gritó una vez más, y mi vista una vez más se fue al piso, completamente resignada a que tenía la razón, no importara que tan cruel estuviera siendo conmigo. Sentí una voz conocida a nuestro alrededor, acercándose a nosotros. Volví mis ojos a Nathalie, para encontrar a Daniel sosteniéndola por sus hombros.
- ¿Qué sucede? -nos preguntó a las dos, queriendo acercarse más a Nath, quien lo alejó con ambas manos.
- ¿Quieres saber que sucede? Ni siquiera puedo confiar en quien creía que era mi mejor amiga. Eso es lo que sucede. Resulta que todo terminó como termina siempre con sus relaciones, ¿no es así? -desafió y otra vez sentí un cristal estallar en mil pedazos dentro de mí, igual que la última pieza del rompecabezas que quedaba de mi patética autoestima.
- ¿Kate? ¿Estás bien? -preguntó Daniel, ignorando como Nathalie rodaba sus ojos y gruñía notablemente.
- ¿En verdad? No tendría que preocuparnos eso. Siempre que nos preocupamos por ella termina haciendo lo opuesto a lo que debería. Realmente creo que no sabe que no se debe engañar a las personas que uno tiene a su alrededor...
- Ya basta, Nathalie. -interrumpí, las lágrimas rodando por mis mejillas sin control ni filtro, comenzando a sentir la sangre hervirme con su degradación. Había estado mal. Pero nada le permitía hacerme sentir de esa forma, a pesar que lo merecía; y era algo que ella precisamente me había enseñado.
- ¿Qué diablos sucede? -cuestionó Dan, elevando su tono de voz.
- ¿Quieres saber? Katelyn ha manipulado a toda maldita persona que organiza esta competencia, incluyendo las endemoniadas base de datos y a Clarissa, para que yo entrara en una universidad, aunque fuese la más mediocre de todo Inglaterra.
- No fue así, Nathalie. -me levanté, mientras Dan me observaba con una extraña combinación de lástima y confusión por sentirse de esa manera. Ahora parecía un poco más entera, cansada de que me tratara de esa forma. Estaba equivocada y mi vida ya prácticamente carecía de sentido; lo que no implicaba que ella pudiera recordarmelo de una forma tan malditamente cruel.
- Si, por supuesto. -rodó sus ojos, desafiante.
- ¡Lo hice por tí! ¡Lo hice por tu bien, Nathalie! -grité, y ella se sorprendió al ver mi compostura, abriendo sus ojos por unos segundos antes de volver a su ceño fruncido.- ¡Quería que consiguieras un lugar decente en el que estudiar!
- ¿Haciendo trampa? ¿Terminando con lo poco que quedaba de mi autoestima en esto? ¡Por favor, Kate! Es estúpido. Es estúpido que no hayas confiado en mí, sabiendo las inseguridades que todo el maldito instituto nota con respecto a esto, aún más compitiendo contra tí.
- Quería que ganaras… -hablé, cuando sus palabras una vez más había logrando derrumbarme por lo ciertas que eran.
- ¡No me interesaba ganar, Katelyn! No me interesaba. Sabía que ganarías y lo tenía aceptado, pero esperaba ganar algún reconocimiento por mis propios medios, diablos. ¡No con tu maldita ayuda!
- Nath, cariño… cálmate. -habló Dan en su oído, mientras me observaba llorar con mayor intensidad, viendo como una vez más todo se salía de mi control. Todo otra vez.
- ¡No quiero calmarme! ¿Estás defendiéndola? ¡Ni siquiera tuvo razones para hacerlo, Dan! Mírala. Si las tuviera sabría defenderse.

Mientras escuchaba los gritos algo exagerados de Nathalie atentando contra mi integridad e intentando controlar mis lágrimas para mantener aunque sea una mínima parte de mi dignidad, escuché su voz pronunciando mi nombre, tan perfectamente melodiosa que quise suicidarme en ese preciso instante.

- Oh si, genial. -escupió Nathalie, cuando vio a Harry y mis dos amigas acercarse a mí, impidiendo que continuara con sus gritos.
- ¿Kate? ¿Qué está mal?

Harry se colocó delante mío, acercándome a él por la cintura mientras yo observaba primero a May y Jenn, antes de volver a sus ojos y fijar mi mirada en su pecho, inhabilitada a detener que pudiera leerme como un libro infantil una vez más. Quería abrazarlo allí mismo y no dejarlo jamás. Comprobar si era cierta su promesa de que seguiría intentando, de que él no me abandonaría.
Y quería pensar que hacía era. Quería pensar que Harry no dejaría de perseguirme jamás y que me enseñaría a quererlo de la forma que se merecía y también me merecía luego de tanto dolor. Pero sabía que, tarde o temprano, él sabría que no había nada que intentar, ni perder, ni ganar. Lo sabría y me dejaría como la mayoría de las personas a lo largo de mi adolescencia habían hecho; si es que yo no lo arruinaba y abandonaba primero, como estaba sucediendo en ese momento.

- Has ganado, cariño. Felicitaciones. -susurró, sonriendo debilmente, mientras tomaba mi rostro entre sus manos... y no podía mirarlo, ni mucho menos dejar de llorar.- Sabía que ibas a hacerlo. Deja de llorar, por favor. -suplicó, limpiando mis lágrimas y comprobar con mis ojos una vez más la presencia de mis amigas sólo me destrozó por mi completo, sabiendo que no sólo había arruinado todo con Nathalie, sino que también lo había hecho con ellas por las mentiras que les había contado en cuanto a mi relación con Harry.
- Si, ha ganado. -rió Nath, sonriendo hipócrita, y me separé de Harry para enfrentarla una vez más, dejándolo detrás mío junto con mis amigas.- ¿Quieres saber cómo?
- Que haya ganado no tiene que ver absolutamente en nada contigo, Nathalie. Para esto.
- No lo haré, ¿lo sabes? No lo haré, diablos. Eres mi mejor amiga. Eras… mi mejor amiga. Tenías que confiar en mí, tenías que apoyarme y ayudarme… no de la forma egoísta en la que haces todo. No de la maldita forma en la que lo arruinas por completo. No sólo te arruinas a tí, sino que siempre arruinas a tu alrededor.
- Hey, no le hables de esa forma… -se interpuso May, con su tono de voz de desafío, pero Harry la alejó antes de que se acercara a nosotras, aunque Nathalie se acercó con su sonrisa socarrona.
- Oh, ¿tú debes ser May? Dejemos en claro esto. Está usándolas. Igual que usa a todo el mundo para su conveniencia, al parecer. -rodó sus ojos, gesticulando con sus manos. Mis párpados se cerraron con fuerza, mi cabeza cayendo igual que mis lágrimas.- Literalmente estaba celosa de que estés cerca de Harry. Jodidamente celosa. Y tú, Jenn. -la señaló, y giré mi perspectiva visual para mirarla, confundida y sorprendida por toda la situación que estaban compartiendo a mi lado.- Pareces la más sincera y comprensiva con ella, pero quiero que sepas que ni siquiera está comentándote la mitad de las cosas que ha hecho aquí en Bradford. Quizás ni siquiera ha mencionado una de todas nuestras fiestas.
- Eso no es verdad, Jenn… May… -volteé, acercándome a ellas, mi maquillaje esparcido por todo mi rostro, empapado por el llanto. Mi voz estaba quebrada y ronca, casi sin fuerza por el nudo que estaba en mi garganta, dispuesto a quedarse allí por lo que parecía una eternidad.- No es así, no… -volví a girar, enfrentándome a Nath una vez más, ahora también sumando furia a mi organismo.- ¡No tienes derecho a hablarles así! ¡Nathalie, terminalo ya! -le grité, acercándome.
- ¿En verdad? Parece que la verdad realmente te duele, pero tienes que aprender de una maldita vez que es la única solución correcta. Estabas mintiéndoles. Y las llamas tus amigas, pero ni siquiera les has contado sobre…
- Ya basta. -interfirió Harry, con un grito amenazador, cuando vio el cuerpo de Nathalie acercarse al mío en forma de reto, sabiendo que la violencia física no era una idea tan lejana en esa situación. Sus cejas estaban fruncidas en su frente y sus labios eran una fina linea, al igual que sus ojos duros demostraban confusión, enojo y protección hacia mí.- Deja de hablarle así, Nathalie.
- Aléjate de ella. -se acercó Daniel, queriendo empujarlo, pero ella lo detuvo, colocándolo detrás una vez más.
- ¿Ahora la defiendes? -le preguntó a Harry, mientras soltaba su agarre de la camisa de Dan, una vez que lo dejó en su lugar.- Hablemos sobre esto, Harry. ¿Tienes una maldita idea de lo manipuladora que puede llegar a ser Katelyn? -preguntó retóricamente, y él se mantuvo firme detrás de mí. Apoyé mi cabeza en su espalda, debajo de sus omóplatos, mordiendo mi labio inferior, llorando con desahogo.- Hará lo mismo que hace con todos. Te abandonará. Y tú pensarás que todo este maldito tiempo ella tuvo interés en tí cuando en realidad sólo buscó un beneficio para ella, que en tu caso creo que sabes cual es. -habló, sin gritar pero exponiéndolo con una voz alta para su tono normal, buscando que tanto Jenn como May escuchen.
- Pudo haber cometido un error contigo, pero no lo ha hecho apropósito. -defendió, y tomé con ambas manos sus caderas, haciendo un puño en su remera con el fin de descargar a través de la fuerza un poco de mi frustración y del inexplicable mareo que recorría mi cuerpo, por el maldito estrés, la falta de azúcar, los nervios y toda la mezcla de sentimientos que sentía en ese momento.
- No lo entiendes, Harry. Está esperando la oportunidad para dejarte y terminar lo que sea que tengan, a decir verdad. Demonios, está esperandolo hace casi un mes. Y si no quieres creerme, pregúntale con quien ha estado teniendo contacto, como hace años no lo hace. Pregúntale por su padre…
- ¡Nathalie! -grité, corriendo a Harry del lugar, interrumpiéndola en su oración para enfrentarla.

Iba decidida a empujarla o tapar su maldita boca para que dejara de exponerme de esa forma, para que dejara de lastimarme. Había hecho las cosas mal pero no era razón para degradarme así. Tanto como ella se sorprendía de lo que yo había hecho -que al menos había sido con una buena intención equivocada en la realidad-, yo estaba jodidamente decepcionada de como estaba tratándome, y como estaba contando mi miedo más profundo frente a personas que no quería que jamás lo supiesen.
Pero antes de que pudiera accionar, mis ojos se cerraron incapacitados de ver, y una punzada recorrió todo mi cuerpo. Sentí el torso de Harry sostenerme, igual que sus manos en mi abdomen, impidiendo mi caída. Y sus palabras volvieron a cobrarme a la vida, aunque no creía que eso fuera posible pese a mi debilidad física. Había llegado demasiado lejos, incluso jodiendo con mi endemoniada falta de defensas ante momentos de presión extrema.

- Oh, ¿ahora vas a desmayarte? -cuestionó, falsa y arrogante, mientras mantenía sus ojos fijos en los míos.
- ¡Fue suficiente!

La empujé y logré tirar de un solo mechón de su cabello antes de verla alejarse de forma forzada, y encontrarme de la misma forma siendo arrastrada hacia atrás por Harry, sus manos en mi cintura. Comencé a llorar una vez más, sin reprimir ningún sonido que necesitaba soltar de mi garganta. El enredo allí ya era demasiado doloroso como para soportarlo, igual que lo comprimido que se encontraba mi corazón en ese momento.

- ¡Te dejará! ¡Ella va a dejarte, Harry!

Podía escuchar sus gritos por encima de los míos, que no decían absolutamente nada coherente, sino que eran gruñidos desgarradores con el fin de descargar mi furia. Mi furia conmigo misma y con el maldito hijo de puta que había escrito mi destino.
Forcé mis brazos y todo mi cuerpo para alejarme de Harry, cayendo al suelo mientras dejaba de escuchar a Nathalie a lo lejos. Rompí la cinta que estaba alrededor de mi cuello, sosteniendo la maldita medalla, para tirarla con fuerza contra el suelo a un costado. Tapé mi rostro con ambas manos, arrodillada sobre las baldosas frías, gritando y llorando sobre ellas intentando reprimir mi frustración. Sentí dos pares de brazos abrazarme, por detrás y por delante, y por el cosquilleo que me generaron sus cabellos, supe que eran Jenn y May. Ni siquiera merecía que ellas estuvieran de esa forma conmigo, y mucho menos que me aceptaran luego de haber escuchado la cruda verdad salir de los labios de Nathalie. Me solté minutos después, cuando con algunas de sus palabras me obligué a componerme. Tenía que haber una forma de arreglar las cosas y debía encontrarla.

- Iré a buscarla. -me levanté del suelo, limpiando mis pómulos con el dorso de mi mano, caminando hacia donde ella había desaparecido.
- No, no lo harás. -interrumpió su voz rasposa, abrazando mi cintura por detrás con uno de sus brazos, para impedir que pudiera moverme. Cuando giré mi cabeza para mirarlo, pude ver sólo cólera en ellos, mezclado con una parte mínima de angustia. Intenté evitar que todo mi interior no se desmoronara frente a él, probando su fuerza al querer alejarme de él una vez más, sin lograrlo.
- ¡Aléjate de mi, Harry! ¡Déjame! -grité, intentando rasguñar sus brazos para que perdiera su fuerza, aunque sólo logré que me levantara, imposibilitándome aún más de moverme. Jenn y May se levantaron del suelo.- Tengo que hablarle, ¡HARRY! -chillé, cuando aseguró su agarre y comenzó a caminar.
- Vayan a buscar todas sus cosas al camarín. Llamaré a Matt, esperen afuera por él.  
- ¡No! ¡No, no, no, Harry! ¡Dejame ir! ¡Tengo que ir a hablar con ella! Por favor, debo hablar con ella… -supliqué, quebrándome una vez más en gimoteos y muecas, mientras mis amigas asentían a sus palabras.
- Todo estará bien… cálmate… -consoló Jenn.

Cerré mis ojos para dejar caer más lágrimas saladas de mis ojos, antes de alejarme por la voluntad de Harry. Intenté de todas formas alejarme de él, pellizcándolo y hasta probando con patadas y mordiscones, pero su fuerza parecía no ceder.
Me resigné a seguir gritándole simplemente, palabras incoherentes por mi mente que ya se encontraba nublada y abrumada de todo lo vivido. Cuando cruzamos el pasillo que conectaba la salida con la entrada a camarines del público, me encontré con Mandy, concentrada en caminar rápidamente. La detuve por su brazo, sorprendiéndola, y haciendo que Harry suspire y frene.

- ¡Mandy! Mandy, Mandy. Por favor, india. Escúchame. No hagas lo mismo, por favor…
- Lo que has hecho está… demasiado mal como para perdonarte luego de irte, Kate. -habló, compasión en sus ojos reflejándose en los míos, pese a que intentaba mostrarse firme.
- Por favor, no lo he hecho para lastimarla, en realidad… diablos, en realidad queria ayudarla. Por favor, dile que lo siento. Lo lamento, lo lamento tanto. Lo siento... -repetí, y ella apretó mi mano, antes de volver por su camino.

Y podía decir que había continuado todo el recorrido hasta su automóvil de la misma forma; gritándole, llorando por el dolor que sentía -tanto físico como emocional- y golpeándolo para que me soltara. No había escuchado nada de lo que estaba diciéndome, ni había hecho nada cuando me había dejado en el asiento copiloto y había atravesado un cinturón de seguridad en diagonal a mi cuerpo. Ya no estaba haciendo nada más que llorar, casi sin consciencia de que lo hacía, mientras Harry manejaba con una velocidad extremadamente excesiva a la promedio, y hablaba por teléfono con alguien que aún no reconocía, su voz expresando cuan enojado estaba. Ya no podía hacer nada más al respecto, si estaba a unas simples palabras de perder absolutamente todo lo bueno que había tenido en mi vida.

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Si no lo separo, tres partes más y termina. Gracias por todos los comentarios, y el día en que termine voy a subir el soundtrack para que lo vean y relean los últimos capítulos hasta que suba la segunda parte, Back. Perdón por los errores, mañana quizás los corrija. Gracias por todo y perdón por la demora, pero mi cumpleaños me tuvo ocupada. Charlie loves you♥.