All Over Again [Harry Styles]. Continuación II.

OH DIOS PORFIN TE AMO CLARISSA<333

NOOO yo se que voy a llorar con el final ): 
Ya te lo pregunté por twitter, da igual xD, espero que si haya final feliz en Back :')

Ok, estoy 100% segura de que nos vas a hacer sufrir con el final :c demonioooos. No seas mala y haz que Kay reaccione y se quede con Harry, please? Ugh, pero se que no lo haras.Ella es tan... ugh. Me desespera.Harry se va a encontrar a otra y eso si que no t.t
Aunque morire al leerlo, ya quiero que subas el ultimo capitulo! 
Bueno, al menos espero que en Back si se den una oportunidad.
Y espero que tambien salga Louis. ;)

necesito leer cuando baila xfi dale si?????????????????
ya me imagino como va a ser así lo quiero leer ya 
subí hoy

No me jodas la maldita existencia Charlie

De verdad


No me jodas mi maldita existencia.

Bueno, antes de empezar con mi serie de reclamos me presento.

Como he sabido, por los pocos comentarios que he leído todos tienen como un nombre clave o algo así.

Y me parece excelente, yo soy Free, por mi nombre y porque se supone que soy "libre" aunque mis pensamientos me mantienen constantemente atrapada.

Me he roto la cabeza un mes para poder describir tu maldita novela.

"Perfección" es poco, tu manera de escribir me hace sentir mierda como escritora, me atrapa, me hace imaginar cada detalle, me hace llorar, me hace dudar mi existencia, me hace identificarme con ciertos aspectos, me hace querer ser como Kate algunas veces, tu novela literalmente me ha cambiado la maldita existencia por más de un mes  o más.

¿Sabes? Tenía un maldito plan, cuando empece por primera vez a leer esta novela en tres horas ya había acabado la primera parte.

JODER y odie eso, entonces pensé "No pienso esperar capítulos y estar al pendiente de Charlie ansiando cada día un capitulo nuevo" así que deje de leer, luego me pasaron una serie de sucesos físicos y emocionales que me hicieron olvidarme de este foro, me hicieron olvidar mi novela y por ende la tuya, cuando vi que ya estaba lo suficiente adelantada y decidí salir adelante con la patética vida de adolescente que tengo  retome y cada que tenía tiempo leía dos o tres capitulos, pero mi maldita y demandante escuela no me daba el tiempo suficiente.

Así que bueno, no se como, no se cuando y no se porque llegue a este punto en que tengo que esperar por un capitulo y creeme odio esperar, soy demasiado impaciente y dejo las cosas que me hacen esperar o nos son inmediatas pero JODER tu novela, no la puedo dejar Charlie, es tan  agh adictiva, me caga, jamás me había atrapado una novela así por lo regular, me burlo de la ortografía de la redaccion y de la fantasia de las novelas que he intentado leer, incluzo las dejo por ser aburridas, pero nada es aburrido en esto.

Con respecto a ti Charlie, solo una persona asombrosa y sorprendente puede escribir así. No se si creas que eres maravillosa o sorprendente y en verdad odiaria tu modestia porque lo eres. Puta madre lo eres, eres una escritora fenomenal y si me dices "no, no creo que lo sea pero gracias" te juro que te dare una fuerte patada en el rostro, tienes mucho talento Charlie, de verdad.

No suelo comentar y mucho menos biblias de este estilo, pero la vales, tu novela lo vale.

Con respecto a la novela

¿Qué demonios le pasa a Kate? Mierda, es Harry (Que por cierto, este personaje de Harry se me hace lo más parecido a la realidad, claro omitiendo ciertas cosas) Por Dios, que ya admita que lo ama, que no puede vivir sin el, que en verdad su relacion va a resultar ¿Que mierdas tiene en la cabeza? Bueno, a decir verdad así somos las chicas, como Kate que no extrañamos algo hasta verlo perdido.

Como sea, no soy de las chicas que leen novelas de sus artistas favoritos (Amo a One direction, me hacen salir de mi confort)

Me burlaba de las personas en Twitter que leían. Decía OMG que tetas ¿Que no tienen vida? Llegue a este foro para descargar mis emociones escribiendo. No para leer. Y mirame totalmente embriagada de tu novela.

Te odio por eso Charlie, te amo por eso igual

Y, okey, torturame haciendo esperar y teniendo que entrar a este foro todos los días a la busqueda de un nuevo capitulo.

Me voy, de verdad si leíste mi biblia más grane que cualquier discurso politico, te lo agradesco

Te aprecia desde lejos

La dramática y adicta a tu novela

Free xx.

Charlie!!! Aaaaaah ya está por terminar!
Cada capítulo es tan genial, son hermosos.
Ansiosa por saber como le va en su baile
espero la sigas hoy. Te adoro.
Besitos

DXOKZDKFJ NECESITO EL CAPÍTULO YAAA!!!
Necesito saber que pasa!
OMG
Te juro que estoy anonadada, necesito seguir leyendo!
Espero que subas capítulo pronto! Un besoteeeeeeee

Why do I just lie awake and think of you?
I need some sleep, tomorrow I have things to do.
Everytime I close my eyes I see your face,
so I try to read, but all I do is lose my place.

Y mientras la música empezaba a sonar, siguiendo su letra, me encontraba en el suelo. Mis brazos estaban extendidos mientras los movía, y respiraba profundamente esperando el momento para levantarme. Cerré mis ojos con fuerza y decidí concentrarme finalmente; tenía que hacerlo. Tenía que sincerarme con mi parte consciente si quería que todo saliera como lo esperaba.


¿Y estaba obsesionada con él? Estaba completamente obsesionada con él. Estaba desquiciada por saber que hacía a cada segundo del día, por saber que pensaba de mí, por saber si pensaba realmente en mí, por saber de qué forma lo hacía. Estaba obsesionada con sus besos; con su forma de mirarme y traspasar como una filosa daga cada espacio de mi alma. Estaba fascinada por lo idiota que era en un momento, y lo inteligente y comprensivo que era en otros. Loca por su forma de hacer preguntas existenciales incluso en un momento que es gracioso. Encandilada con la forma en que brillaba en todo momento, enferma de su sonrisa y adicta a su maldita forma de tenerme entre sus brazos haciéndome sentir la dueña de todo el mundo.

I

just have to call you up and say hello,
I know it’s 3AM, and I saw you a while ago.
But I still have this aching need to hear your voice,
to know you are there… I don’t seem to have any choice.

Estaba en la punta de mis pies, moviéndome al compás de la música casi de forma inconsciente, sin saber siquiera si realmente estaba siguiendo la secuencia de pasos o era lo que mi mente le ordenaba a mi alma.
Y no, no tenía opción. No tenía otra alternativa más que sentirme de esa forma. No tenía ninguna opción de no querer sentirlo cerca. No tenía más salida que obsesionarme con él. Porque él seguía acercándose a mí, cada día un poco más, cada segundo de una forma más dulce que la anterior y no podía resistirme a la forma en la que él me apreciaba. No podía resistirme a lo bueno que era sentirlo encima mío, abandonándome a él. No podía dejar de escuchar su voz susurrarme palabras de consuelo cuando llovía. No podía desistir ni frenar el conjunto de mariposas -si es que eso eran, porque lo sentía como una jauría de perros rabiosos atacando mi órgano vital, acelerando sus latidos- que se revoloteaban cada vez que lo escuchaba cantar, sólo para mí. No podía hacerlo, porque creía estar casi -o quizás completamente- enamorada -y obsesionada- de todo lo que él hacía.
Un estribillo más tuvo lugar, ya con Marcus en el lugar. Ni siquiera era consciente de las vueltas que daba alrededor de él, y sólo lo hice cuando sentí su mano apretar mi brazo para que volviera al suelo. Luego de algunas piruetas allí, comenzó el puente y la parte intensa de la canción que ya habíamos previamente practicado. Volví a mi lugar de origen, moviendo mis brazos hacia arriba, llegando una vez más a correr hacia él.
Era frustrante. La forma en la que me sentía era demasiado frustrante. Me había empeñado durante tres largos meses en evitarlo por completo y lo había logrado hasta que el destino nos hizo encontrarnos en Bradford. Desde ahí, en sólo un mes consiguió que mi paciencia se consumiera y que me rindiera ante él, en todos los sentidos que podía hacerlo. Porque no sólo me había acostado con él algunas veces, si no que le habría permitido la entrada a mi intimidad. Había aprendido cada uno de mis gustos y debilidades, la forma de complacerme en la cama y fuera de ella. Porque había memorizado mis manías, la forma en la que me enojaba y disimulaba no haberlo hecho, lo mucho que me disgustaba mi madre y sus actitudes y lo mucho que amaba comer un chocolate, al igual que sabía la forma en la que me gustaba tomar un té, amargo y fuerte, parecida a la suya. Y, porque de esa misma forma, yo me había memorizado sus pequeños gestos, la forma en la que sonreía con sus ojos más pequeños y rascaba su nuca cuando se sentía nervioso, igual que mordia sus labios con fuerza cuando no sabía que decir; porque amaba cada pequeño rasgo de su rostro y no podía evitar averiguar y conservar cada vez más -y solo para mí- cada uno de ellos.

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No iba a subir porque tengo cosas que hacer, pero acá está aunque sea corto. Falta una parte igual, y viene el drama en el próximo. Voy a responder todos los comentarios también la próxima vez que suba, que supongo será el miércoles a la tarde, o el miércoles a la madrugada. El jueves es mi cumpleaños, así que no se que tan ocupada estaré con eso hasta el viernes supongo. Gracias por los comentarios, a la chica que dejó ese gigantezco que ya me voy a ocupar de responder, aunque ya leí todo como siempre. Gracias por todo lo que hicieron por esto desde ya hace un año y un mes. Charlie loves you♥.

el mejor capítulo lejos. 

escribís muy muy muy muy bien sabias eso nena

ya sabía que iba a ser asi, que se iba a poner a pensar en él por eso lo queria leer

te kiero sabes

toy llorando, gracias por subir bebe

Oh dios tengo miedooo )))): me mueroo siguela porfavor!!!

Omg me encantó.  Fué tan bello como ella estaba pensando en él  :ilusion:.
Sguela cuando puedas linda y me alegro por tu birthday xx.
Byee :bye:

Estaba al borde de llorar en el momento en el que el salto importante estaba por tener lugar. Y no me interesaba caer; no me interesaba quebrarme un tobillo ni hacer el ridículo frente a casi mil quinientas personas, llorando de forma débil y patética. No me interesaba desplomarme en el suelo, porque así era como me encontraba si lo utilizaba como metáfora; me encontraba a punto de saltar -o mejor dicho, cayendo- en los brazos de una persona en la que no quería confiar, pero no tenía más remedio que hacerlo.

I’m so sorry I just had to wake you up,
I feel so lonely by myself.
Is this the way you feel when you’re in love?
Or is this something else?

Todavía dudaba eso. Dudaba estar enamorada de él y el sólo pensarlo me generaba escalofríos. ¿Qué había sentido con Louis? Porque todo había sido diferente con él. Había correspondencia, no sólo de ambas partes, sino de ambas familias y del momento y tiempo específico. En cambio con Harry, era una idea que dominaba a mi mente más allá de mi voluntad contraria; era una necesidad que no podía controlar, un deseo de tenerlo junto a mí y para mí a cada segundo. Era una maldita obsesión. A todo lo que él era.
Y anhelaba que esa fuera la verdad. Anhelaba que sólo fuera una obsesión que pudiera curarse con otra. Pero no sólo estaba esa sensación de ansiedad sino que también estaba mi deseo constante por ver su sonrisa y escucharlo reír. Mi protección discreta y continua aunque no precisamente actual; no quería lastimarlo de ninguna forma que fuese posible y no por la culpa que sentiría luego, sino porque no podría soportar una sola lágrima de Harry, ni su sufrimiento, causado o no por mí. Porque sabía que su dolor estaba íntimamente conectado con mi dolor.
Para mi desgracia, luego de saltar, no había caído. Estaba girando junto con Marcus de una forma casi perfecta y odiaba eso. Todo habría sido más sencillo si caía. Nathalie seguramente ganaría, y jamás se enteraría de todo lo que había hecho a espaldas de ella. No habría mentiras ni tampoco necesidad de aceptar todo lo que me sucedía con Harry.
Marcus me soltó y comenzó el instrumental. Abandonó el escenario para aparecer del otro lada una vez que el estribillo se repetía una última vez. En mi momento de soledad en ese gran escenario, observé al público por millonésima vez, pero por primera vez siendo consciente de ello. Como si mi mente me jugara una broma, lo busqué por inercia, encontrándolo mirando atónito y aplaudiendo en conjunto con otro grupo de personas en el teatro.
Mis ojos empañados no contuvieron sus lágrimas, cayendo con mi parpadeo por evitarlas. Dejé de mirarlo y continué moviéndome ágilmente, ya sin siquiera una motivación. No quería ganar; no quería irme. No quería perderlo, no quería dejarlo, y no quería pensar en cuánto debía hacerlo y en cuánta falta me haría a cada segundo.

But I do all the time,
I want you all the time.
Am I obsessed with you?

Apoyé mi espalda en la suya tomando su brazo izquierdo con una de mis manos, mientras Marcus se alejaba y la canción daba a su fin con mi cuerpo laxo sobre el suelo, aún más desprolijo que en un principio.
Los aplausos y murmullos se escucharon segundos después y me levanté del suelo, obligándome a sonreír porque así era el negocio; tenía que disimular que el llanto era parte de la actuación y no tan real como mi existencia. Saludé con mi brazo extendido sobre mi cabeza, limpiando las lágrimas que no dejaban de salir con mi mano restante, aún sonriendo. Y dolía sonreír. Porque no tenía motivo para hacerlo con lo que acababa de admitir con mi subconsciente y con sus cejas extendidas y sus ojos melancólicos mirándome fijamente.
Me incliné agradeciendo y finalmente me retiré del escenario, personas aún paradas aplaudiendo en sus asientos. Atravesé el telón rojo y me desmoroné detrás de él contra una de las construcciones, apoyando mi espalda en una columna y sosteniendo mis rodillas contra mi pecho. Escondí mi rostro allí, finalmente abandonándome al llanto y los sollozos incontrolables que salían de mi garganta, casi lastimándola.

Estaba jodidamente obsesionada con él, rendida por completo. Y no había absolutamente nada que pudiera hacer para quitar ese sentimiento de mí, porque era demasiado tarde para eliminarlo.

- ¡Kay! -me abrazó Nathalie, ya cambiada para los resultados finales- ¿Dónde estabas? Me dijeron que has estado increíble. -se separó, su sonrisa borrándose al ver mis lágrimas.- ¿Estás bien? ¿Que ha sucedido? Me dijeron que habías llorado pero… oh, ¿no era parte de ellos? -preguntó, y negué con mi cabeza, sonriendo levemente.
- Todo esta bien, Nath. Supongo que -me ventilé con mis manos, respirando profundamente para no seguir llorando.- fue la emoción del momento.
- ¿Segura?
- Completamente. -le sonreí de forma falsa y ella devolvió la sonrisa, tan sincera y radiante como después de cada presentación en la que estaba.
- Daniel logró entrar aquí, aunque no dejaran entrar visitantes hasta luego de los resultados. Voy a buscarlo, ¿te cambiarás aquí? -asentí, y besó mi mejilla, abrazándome por los hombros.- Probablemente has estado genial. Tranquilízate.

Se despidió de esa forma, dejando el camarín una vez más vacío, por mi tardanza extra una vez que mi presentación se había terminado. Respiré profundamente, mirándome al espejo para ver mi maquillaje desprolijo cubriendo mi rostro. Quité los papeles de mi bolso, desparramándolos por el lugar sabiendo que Nath no los tocaría, pensando que eran parte de la coreografía; los tiraría cuando terminara de prepararme.
Tomé el vestido strapless, blanco hasta la cintura, con una falda de tul prolijamente negra, cortada hasta mis tobillos. La curva de mi cintura se encontraba descubierta con lazos de tela cortados intercaladamente que dejaban ver la piel allí, el vestido sostenido por un simple cierre en la parte trasera. Coloqué mis zapatos negros en su lugar y salí del lugar para quitar el maquillaje y volver a colocarlo de forma más suave, sólo para emprolijar mi rostro desastroso por el llanto. Interrumpiendo los cortos minutos que quedaban de mi tiempo para prepararme antes de los resultados, Clarissa apareció por el umbral, acercándose a mí con una sonrisa atípica en ella.

- Estoy orgullosa de tí. -abrazó mi cintura, mientras dejaba que aplicara mi maquillaje y la observara confundida por su reacción. Se alejó de mí para sentarse en una silla paralela a donde mis pertenencias se encontraban.- Has ganado prácticamente, Kate. Eres de lo que todos hablan. El llanto y la emoción que pudo sentirse a través de ello… maravilloso. No estoy bromeando ni siendo sarcástica por primera vez, Katelyn. Casi tienes a todo el público igual que tú estabas.
- Bueno no fue mi idea hacerlo, en realidad. -solté, rodando mis ojos. Exageraba, casi siempre lo hacía, porque me tenía aprecio- ¿Has hecho lo que te he pedido? -pregunté, terminando finalmente con mi rostro, poniendo perfume en mi cuello y muñecas.
- En parte. No puedo obligarlos a elegirla, de todas formas. -explicó, algo nerviosa.
- ¿Qué? -pregunté, confundida completamente. Sentí el enojo hervir dentro de mi cuerpo, recorriendo cada una de mis venas. Me giré para encontrarla con los papeles escondidos en sus manos, leyendolos con cuidado y con la misma expresión de ira que probablemente yo tenía.- No mires eso. -dije, casi introvertida y culpable por lo que había hecho.
- ¿Katelyn? ¡¿De verdad has hecho esto?! Pueden echarte de aquí. Te descalificarían si supieran que has hecho esto. ¡Esta es mi firma, Katelyn! ¡Ni siquiera me has consultado por Nathalie!
- ¡No querías hacerlo! La única forma de que Nath estuviera primera en esas malditas listas era con tu aprobación y con tu lista principal. ¡Eres parte del maldito comité, Clarissa! ¿Qué estás diciéndome con que no puedes obligarlos a elegirla? Tienes casi el cincuenta por ciento de las acciones de esto, diablos. Si yo no la hubiera hecho, no hubiera sido tenida en cuenta en esas universidades.
- Kate, la has anotado en otras tres más que incluso la han rechazado y que te tienen a tí como única sugerencia, ¿qué intentas?
- ¡Intento que ella gane esta maldita competencia y tenga el futuro que merece! -grité, tirando los papeles al suelo, girándome una vez más para evitar mirarla. Sin embargo, nuestros ojos se encontraron en el espejo.
- ¿No crees que ella tendrá el futuro que le toque, después de todo? Nathalie odiaría enterarse de esto.
- Lo se. Demonios, lo se. -insulté, cubriendo mi rostro con ambas manos.- Ella necesita ganar. Tendrá incluso más publicidad con esto y jamás se enterarán de todo lo que he hecho. Sólo está primera en las listas y seleccionada en algunas universidades que no la han realmente seleccionado.
- Todo eso es mérito tuyo, Katelyn. Tú has buscado la forma de cambiar el sistema. Nathalie es excelente y deberías dejarla que se forma por sus propios medios.
- ¡Estás diciéndome que yo ganaré, Clarissa! No me interesa nada de tus reproches. Habíamos acordado que ella ganaba, no yo. ¡Ha estado increíble! Se lo merece mucho más de lo que yo lo hago.
- Katelyn, ni siquiera te he sugerido realmente a tí. Ellos vinieron a tí por elección propia. No puedes manejar sus verdaderos intereses sólo por romper un sistema de computadoras cambiando los datos. Después de todo, ellos decidirán en vivo quien lo hace mejor sin importar las sugerencias.
- Ni siquiera me interesa ganarlo. Ni siquiera quiero hacerlo si eso significa que ella no tenga otras elecciones. -espeté dura, fulminándola con mi mirada una vez más.- ¡Ve, Clarissa! Habla una vez más. Di tu opinión sobre ella y van a cambiar la decisión. Por favor.
- Kate…

Miré a través del espejo para encontrarme a Nathalie allí, completamente paralizada. Mi respiración se cortó en ese momento y sentí lo poco que quedaba de mi vida derrumbarse hasta ser polvo. Mi corazón dio un vuelco brusco y cerré mis ojos con fuerza para volver a abrirlos esperando que la imagen de mi mejor amiga, destrozada y atónita por las palabras que había escuchado, fuera sólo un sueño. Pero no lo era.
Nathalie estaba allí y había escuchado probablemente todo. Había escuchado como no había confiado en ella y había manipulado todo un sistema desde una cuenta de Clarissa, con el fin de hacer trampa con sus resultados en tres universidades más de las que había sido calificada, además de colocarla en lista de prioridades en las cinco que legalmente la habían elegido. Estaba mirándome, de una forma tan triste que pensé que podría desmayarme allí mismo por el pánico que me generaba su reacción.

- Nathalie yo… y-yo -quise hablar, pero las palabras se cortaron de mi garganta, seca por el terror.- L-lo sient...
- Oh ¡¿lo sientes?! ¿No has querido hacerlo? Porque como hablabas recién parecía que lo habías hecho con suficiente confianza. -gritó, interrumpiéndome, sus brazos extendidos a cada lado de su cuerpo y sus manos en puños.
- N-no, no fue con la intención que crees, Nath…

Cerré mis ojos y una voz llamándonos por altavoces anunció que la entrega de los premios, solicitando nuestra presencia en el escenario en ese instante. Quería abrazarla, quería decirle que lo sentía y que había sido una imbécil por no creer en ella y dejar que las cosas sucedieran como fuera, sin mi intervención y con su esfuerzo máximo.
- Genial. Vamos, Katelyn. Salgamos allí. Así puedo ganar, de forma hipócrita y embustera, como tú.
- Nathalie. -advirtió Clarissa, colocando su mano extendida en su pecho para calmarla.
- Oh, ¿tú también querías ayudarla en ello? Probablemente. Porque todo lo que haces es complacerla con cada uno de sus pequeños caprichos infantiles e idiotas. Le has dicho que si porque te lo ha pedido y es tu maldita preferida aunque sigas repitiendo que no lo es. Siempre lo he sabido. Siempre has mostrado diferencia.
- Tienes que calmarte, ya. -la tomó por los hombros y ella se soltó, mirándola con el mismo odio que encontraba en sus ojos cuando me observaba en ese momento.- Kate, ve al escenario.
- No…
- Vete. Ahora, sin excusas.

La insulté y lo escuchó, porque tampoco había intentado disimularlo. Salí del lugar, escuchando la voz chillona de Nathalie invadir los pasillos con sus gritos, igual que el tono bajo y rasposo que Clarissa utilizaba para calmarla. Retuve mis lágrimas mientras me acercaba detrás del escenario para que colocaran mi número de participante, esperando en la fila en orden para atravesar una vez más el telón rojo. Mordí mis labios con fuerza, apretando mis dedos y queriendo desaparecer del maldito universo.

Nathalie me odiaba desde ese instante. Y no sabía cómo viviría con ese hecho atormentándome a cada segundo.

Un par de minutos luego ella se encontraba allí, con su número ya en su lugar, empujando mi hombro para ponerse delante mío, donde le correspondía por orden. Tiró su cabello hacia atrás con el objetivo de golpearme con él, además de cruzarse de brazos y ni siquiera dirigirme una mirada. Ni de desprecio, ni de nerviosismo, ni de cariño y consuelo como normalmente haría.
Y quería llorar. Quería gritar, quería lastimarme y romper todo lo que encontrara por el camino, soltar de alguna forma la impotencia que sentía por haber destruido hasta los detalles más mínimos e indispensables de mi vida entera.

- Nathie…
- No quiero hablar contigo. Ni ahora ni quiero volver a hacerlo, por el tiempo que considere necesario. No vuelvas a llamarme de esa forma.

Ella jamás se había enojado conmigo; de ninguna forma. Pero la frialdad con la que me trataba en ese momento parecía consumirme por dentro cada vez un poco más, apagando por completo la pequeña luz que aún quedaba en mi interior. Daba por perdido a Harry, igual que a Louis y a mi padre. Daba por perdido a mi único amigo Zayn; pero jamás hubiera pensado en perderla, ni a ella ni a Mandy. De ninguna manera.
Nos llamaron al escenario antes de que pudiera continuar con la conversación y ni siquiera me esforcé por fingir una sonrisa. Volvieron a nombrarnos junto con nuestros números, además de presentar y agradecer a los representantes de las universidades de Estados Unidos y Australia, además de Europa, por su presencia. Ni siquiera pude prestarle atención a ello, que era de lo que dependía mi futuro. Mi vista estaba nublada completamente y enfocada en Nathalie y su indiferencia. No podía perderla. No podía dejar que la única persona que jamás me había abandonado se alejara de mí de esa forma.
Más formalidades estúpidas tuvieron lugar mientras una mirada de Nathalie, tan fría como un hielo, logró romperme por completo. Lágrimas salieron de mi rostro sin control, y pude reconocer entre mi niebla de pensamientos mi nombre, el de Nath y otro más saliendo por los parlantes con la voz potente del presentador. Para mi suerte, no preguntó por qué me encontraba en ese estado tan patético, pero estaba explícito en el aire cuando observé al público. Estaban todos mirandome y detestaba esa atención. No la merecía en absoluto, ni la quería. No quería todo eso ni siquiera una mínima parte de lo que Nath lo hacía. Y sin embargo, la encontré negando su cabeza, convencida de que había hecho eso sólo para engañarla y ayudarla de una forma que no había sido la adecuada.
Había sido descartada la tercera participante en competencia con ambas, otorgándole el tercer puesto. Ambas dimos un paso hacia adelante, quedando más cerca de la otra, observándonos con tristeza, disimulada de su parte. Se acostumbraba que se tomaran de las manos las participantes, en símbolo de respeto al talento de quien fuera que ganara. Y lo hice pese a que ella intentó soltarse de mi agarre, mientras la observaba implorándole por clemencia y perdón por lo que había hecho.
Cerré mis ojos con fuerza esperando escuchar su nombre como le había rogado a Clarissa, pero no fue así. De un segundo a otro me encontraba sola en ese escenario, Nathalie detrás y sin su mano junto a la mía, el único gesto que nos había mantenido en amistad. Una mujer que consideraba modelo por su cuerpo y gracia al caminar se acercó con mi medalla, colocándola rápidamente. Y sentía que todo el mundo estaba girando a mi alrededor a una velocidad que jamás me sería posible alcanzar. Porque de un segundo a otro, no tenía absolutamente nada más que perder, pero tampoco que ganar.
Estaba frente al micrófono y sabía que el público estaba esperando mi reacción alegre y mi discurso largo y aburrido sobre lo que significaba para mí. Pero no fue eso lo que se encontraron. No podía dejar de llorar mientras sostenía la medalla con una mano y el ramo de flores en otro, observando a Nathalie casi de la misma forma detrás mío. Encontré a Harry en el público, preocupado y desconcertado por mi actitud igual que mis amigas de Holmes Chapel. Me sonrió y colocó su mano en su pecho, señalando su corazón. Lloré con mayor intensidad sin acercarme al micrófono, soltando la medalla para tapar mi boca y sofocar mis sollozos. Segundos después me obligué a sonreír, una mueca abandonado mi rostro cuando el presentador comenzó a preguntarme que sentía al respecto.

- Sólo… quería a-agradecer por este premio… es un honor haber participado y enfrentado a tantos talentos diversos y mejores que el m-mío… -tocí, mirando a Nathalie notablemente, quien se encontraba llorando libremente en ese momento.- Esto realmente es…realmente lo merecen mucho más otros participantes más que yo. Gracias.

Terminé mis palabras formales finalmente sin siquiera sonreir, casi corriendo del escenario, dejando al público igual de impactados que con mi llanto descontrolado. Nathalie me siguió y quise desaparecer cuando una vez más sus gritos inundaron el final, la presentación de cierre teniendo lugar en el escenario donde previamente nos encontrábamos.

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Spoiler:

Iba a agregar la parte de Harry, Jenn y May, pero quedó largo de esta forma y sería no denso, pero si raro como quedaría la distribución. No lo revisé, así que disculpen los errores. Supongo que el viernes podré subir, quizás el jueves a la noche si es que no hago nada por mi cumpleaños que es ese día. Gracias por los comentarios y respondí algunos arriba por la hora que es. Charlie loves you

wow esperaba otro cap totalmente distinto wow