"ROSE GARDEN" (Nick y Tu) 2° Temporada TERMINADA!!!

NICK SE VA A ENTERARAR SIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIII
SIGUELA SIGUELA

seguiii

ahhh regresar ... hacerle frente a los problemas... genial

ahhh se esta poniendo bien interesante esto!!

No la rayis solo tiene que estar con nick, :suspect:

por cierto.. Donde esta nick? como esta? :evil:

Me encanto el mini maratón.. :(L):

Sube mas. :P

SIGUELA!!!!!!
Pn máss capissssss!!!!!!!

—Si Meg gracias— escuche a Lucy, ¿Cuándo sonó su intercomunicador? No tengo idea —bien tu chico Windsor está ahí afuera, vamos— dijo levantándose —cariño déjame ayudarte, ese bebé esta muy grande para tener 5 meses—
—Lo sé, ya me pesa un poquito— dije al tiempo que me levantaba con su ayuda—
—Y el que comas tantas galletitas no ayuda querida—
—Eso creo— tome el folder con mi tarea para el próximo martes, agradecía que fuera viernes, y que no tendría nada que hacer hasta el martes.

—Hola _______— dijo sonriente Latham al tiempo que salíamos de la oficina de Lucy —hola Lucy— saludo —bien, yo creo que mejor nos vamos— dijo quitándome el bolso y el folder.
—Nos vemos el martes Lucy— me despedí de ella, y claro de Meg que estaba a un lado sentada mirando con ojos embelesados a Latham.
Caminábamos con rumbo al ascensor.
—Bien, yo creo que esperaremos a tu hermanito—
—viniste a pie o que— le dije
—nop, es que se me desinflo un neumático—
—Y no traes repuesto— Afirme
—no es eso—
—oh ya veo, el repuesto es el que esta puesto— afirme de nuevo con una risa al ver su expresión.
—No tampoco, lo que pasa es que la semana pasada que vino a casa mi prima, bueno sus hijos estaban aburridos así que les hice un columpio—
—Y de seguro no había otra rueda más que la tuya ¿no?— me burle
—Más bien me entro pereza por ir a buscar una al garaje— Solo reí de nuevo. Mi celular sonó y me apresure a contestar, era Ángel.
—Que pasa— conteste
—ya voy para allá, dile al torpe de Latham que me llego su mensaje—
—Ok— conteste.
—Hazme un favor¬— me dijo —había olvidado que hoy me van a llevar un contrato y hay que recogerlo, mi secretaria ya no ha de estar ahí, sale cuatro treinta y son casi las cinco, y bueno es un caso especial, es un viejo amigo de la abuela, así que por favor sube y recógelo tú misma, Va a ir creo yo que un sobrino del Señor Miller—
—de acuerdo, ya subo por ello y lo dejo en tu oficina, ¿te parece?—
—Bien, llego en unos minutos—
—Con cuidado— dije antes de colgar.

— ¿qué dice?—
—ya viene, pero quiere que suba por un contrato que olvido le traerían—
—bien, pues vamos— dijo al tiempo que oprimía el botón del ascensor.
—sabes hoy no te escapas— dijo mientras entrabamos al ascensor las puertas se cerraban y oprimía el botón de la última planta.
— ¿Del que?— pregunte.
—Pues no habías tenido tiempo y todo ha ido bien, pero tienes una cita hoy a las cinco treinta con Richard para una ecografía—
—Vaya que ustedes dos, planean todo sin avisarme eh—
—oye no nos culpes, esta vez no fuimos ninguno de los dos, Fue Richard el de la idea—
—está bien esta perdonado—
—no es justo a él le perdonas todo y a mí no, pido justicia— reclamo cuando ya dejábamos el ascensor y caminábamos con rumbo a la oficina de ángel.
—ya, te hare justicia—
—mas te vale, además es una buena idea sabes, ya quiero ver al bebé— dijo abrazándome por los hombros y acariciando mi vientre abultado. —estoy seguro de que será hermoso como su mami— dijo tomando mi rostro entre su mano al tiempo que nos deteníamos, lo mire a los ojos, y lo que vi en ellos no me agrado, no por el hecho de que fuera algo malo, sino porque no podía corresponder a eso.
—Latham— dije suavemente, el se acerco un poco más, y yo solo quería correr, pero en ese momento de pánico vislumbre una figura tras nosotros, lo aparte rápido para ver quien estaba ahí.
—no… ¿t…tu?— mi corazón comenzó a latir a marcha forzada, que hacia él ahí.
— Hola _______— dijo seriamente, mirando en tres direcciones, la mía, la de Latham, quien se paró un poco delante de mi protegiéndome, y por último, posando su mirada en lo evidente…mi bebé—

No aguante la impresión de verlo frente a mí, fue demasiado, mi cabeza dio vueltas y lo último que escuche fue a Latham.

NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO

QUIEN ERA? NICK? U.U AHORA VA A PENSAR QUE ESTA CON LATHAM Y QUE ES DE EL BEBE :(

PORFA NO LA DEJES AHÍ Ù.Ú :P

ahhhhhh quien era nicholas???

D: D: D:
AH PLEASEEE SEGUILAAAAA
me encanto :D

pase de pagina xD seguiiii

—Vamos linda despierta— escuchaba la voz de Latham a lo lejos
—Estás seguro que está bien, mejor vamos a llamar a tu hermano— escuche a Ángel
—no hace falta ya está reaccionando, solo fue…la impresión—
—te juro que si se le vuelve a acercar yo… ¿_______?— lo escuche nómbrame cuando me comenzaba a despabilar. Lance un suspiro leve y abrí lentamente los ojos, estaba dentro de la oficina de Ángel.
— ¿Qué paso?— pregunte sentándome en el sofá, con las miradas de ambos chicos bailando entre ellos dos, para luego mirarme.
—no vuelvas a hacerme eso— dijo Latham abrazándome con fuerza, con una mano, y con la otra acariciando mi crecido vientre —nunca, entendiste— hablo, separándose de mí y tomando mi rostro en sus manos para mirarme fijamente —dios, no sabes lo que me asustaste—
—Ángel— dije al recordar lo que había sucedido no se cuanto tiempo atrás, al tiempo Latham se separaba para darle espacio a mi corpulento hermano.
—Ven aquí pequeña— me abrazo al percatarse de mi estado.
—donde…donde esta, tengo que hablarle, dios si él está aquí…—
—Nicholas no está aquí _______— intento calmarme.
—pero…pero Kevin—
—solo vino él, se lo pregunte, ya debe estar por partir de nuevo a Estados unidos— lo mire sin entender, que hacía Kevin ahí, su mirada, dios solo recordar la mirada que me dio, su voz seca, Kevin nunca me había hablado en ese tono tan frio, estaba claro que la familia Jonas estaba con el miembro de su familia afectado en todo esto, y de paso Kevin debió pensar algo de Latham y de mi. —______ mírame, mírame— lo obedecí — ¿te sientes bien?— pregunto.
—No— dije apenas audiblemente. Como iba a estar bien, estaba más que segura que Kevin se fue con una idea errónea de Latham y yo, y si le decía a Nick algo, quizás cuando regresara el pensara otra cosa, y no creyera que mi bebé era de él.
—tranquilízate, antes de irse, bueno yo…ya sabes cómo me pongo, pero…me dijo que por él no hay ningún problema, que…Nicholas no sabrá que tu estas aquí, no se lo dirá— y aunque quisiera creer que eso me tranquilizaba, no era así, yo deseaba que fuera y le hablara a Nick y que el viniera, me buscara y que estuviera conmigo, pero no era así, por más que lo necesitara, el no regresaría a mi lado, eso lo escuche fuerte y claro la última vez que lo escuche, porque si yo hubiera visto su rostro al decir esas palabras, hubiera muerto en ese momento, aunque ya imaginaba la cara que puso al decir eso, sus palabras me atormentaban todos los días, y todas las noches al tratar de dormir, en cada momento que necesitaba de él, en cada momento que soñaba y añoraba con tenerlo a mi lado, tratando de sentir a su hijo, a nuestro hijo.

—Demonios, llama a Delaney, dile que la necesito aquí, de nuevo a tenido una crisis—
— ¿Una crisis?— pregunto Latham
—sí, la vez que fue a buscar al imbécil de Jonas se puso igual, y Bruce me dijo que cuando murió su madre estaba igual, dios me asusta que no responda, yo pensaba que todo estaba mejor ahora que va con Del, anda llámala—
—no….no hace falta— dije saliendo de mi mundo, haciendo todo acopio de fuerza, para no dejar que me afectara de nuevo, no de nuevo, por mi y principalmente por mi bebé.
—perdóname…de haber sabido que era él quien traía los documentos del señor Miller, jamás te hubiera permitido subir, perdóname por favor— su mirada claramente apenada me conmovió, era mi hermano y él no tenía la culpa, quien iba a imaginar que el cliente de mi hermano era familiar suyo, aunque sabía perfectamente que ellos llevaban el apellido Miller nunca se me ocurrió pensar que la familia Jonas tuviera algo que ver con alguien de otro continente, muy lejos de donde estaban ellos.

— ________, mírame, no te quedes así, me asustas mucho—
—Tranquilo, estoy bien— dije acariciando su mejilla para tratar de aplacar el pánico reflejado en su mirada.

Después de que ambos estuvieron seguros de verme bien, salimos del edificio, Ángel dijo que lo mejor era aplazar la consulta, incluso llamo a Richard para cancelarla, pero insistí en ir, no podía dejar que una persona que tal vez ya ni me recordaba, me afectara de esa manera.

—bien, esto se sentirá algo…bueno frio, y raro, ya que la última vez que te hicieron una ecografía estabas sin sentido, y no tenias un tremendo vientre, digo o este bebé está muy, muy grande, o ahí demasiado liquido ahí adentro, ya veremos— estaba ya tendida en una camilla, con una bata color rosa, y con el vientre descubierto, mientras Latham y Ángel estaban sentados no muy lejos, observando todo con lujo de detalle.
—Ten cuidado— dijo Ángel al ver que Richard colocaba un gel especial de color verduzco para poder revisar.
—oye, déjame hacer lo mío ¿de acuerdo? No soy un animal, se lo que hago, y además no podría lastimar a esta linda damita— me sonrió encantadoramente, claro, después de dedicarle una mirada asesina a mi hermano.
Lo veía mover el pequeño aparato de un lado a otro, mientras presionaba botones y giraba una pequeña bolita en el centro del aparato. Su semblante cambio de un momento a otro, las imágenes que se veían en el monitor eran raras, y no sabía qué era lo que él veía con tanto detenimiento.
— ¡Santo dios!— exclamo un tanto alterado, eso me altero, me aterro, y Ángel y Latham también lo hicieron pues se levantaron al instante y se acercaron a mí, Ángel se puso a un lado de mi, y tomo mi mano entre la suya y Latham se paro detrás de mi con su mano en mi hombro, mi corazón martilleaba a toda velocidad, tenía miedo, mucho miedo de que algo no andará bien con mi pequeño angelito.
—demonios Richard di algo, que no ves que la estas asustando— pero Richard no contesto, sino que siguió corriendo aquel aparato de un lado a otro y yo cada vez estaba más asustada.
—Richard, por favor, dime que tiene mi bebé— dije con la voz ahogada.
—Es que…no comprendo, no puedo creer que lo hayan pasado desapercibido la primera vez, ahora comprendo bien todo—
—Ya déjate de estupideces y dime qué demonios tiene mi bebé— siseo Latham, escuche muy claramente sus palabras, pero no era el momento indicado para decirle algo al respecto.
—Perdona, perdona linda, no…no es nada malo, es algo sorprendente, sorprendente, extraño, y, no puedo creerlo—
—solo dime qué cosa tiene mi hijo Richard, ¡ya!—
—bien, bien, veo que si tienes la vena de los Collingwood, mira…lo pondré en4D y…listo, está grabando—
—No te entiendo— le dije, pero al segundo, la imagen era casi real, se veía un pequeño bebé, en color mostaza, con los piecitos encogido, los brazos cerca del pecho, y una pequeña manita en su barbilla, la alegría me asalto, mire a ángel, y él me sonreía, con los ojos cristalizados, mientras yo, ya estaba llorando.
— Ahora quiero que veas esto— giro de nuevo el pequeño aparato en mi vientre y la imagen salió de nuevo, pero esta vez tenia ambas manitas en el pecho, enroscadas una en la otra.
—mira, se quito la manita de la cara— dijo Ángel.
—No es verdad— afirmo Richard, los tres, Latham, Ángel y yo no comprendíamos.
—como de que no, que no ves, hermano tu eres el médico, y no ves—
—claramente lo veo, pero no se cambio de posición…lo que pasa es…—
— ¡Es que!— Gritaron Latham y Ángel al mismo tiempo.
— Es que no es un bebé—
— ¡Eh!— Dije levantando la cabeza del almohadón—
— ________, tu vientre no es muy grande, porque el bebé lo sea, o porque tenga demasiado liquido dentro, la razón por la que estas así de gordita…es porque…porque vas a tener dos bebes, no uno— Me quede paralizada ante la afirmación, después de un instante, mis ojos tenían mas lagrimas que nunca.
— ¿Dos?— pregunte con un hilo de voz.
—dos, así es, dos pequeños en perfecto estado, y lo que lo hace increíble, es que son Gemelos idénticos, pero no cualquier par de gemelos idénticos, este es un caso especial, un caso entre millones, que cualquier medico querría presenciar, son gemelos idénticos pero uno es niña, y el otro es varón— dijo con emoción. Yo tenía la mano en la boca, no me cabía la impresión—
— ¡voy a ser tío por partida doble! — en ninguno de los cuatro había más que emoción, no sabía que sentir ¡dos, dos bebes, no uno! Esto era lo más hermoso que me podía suceder, estaba absorta en la alegría de saber que en unos meses tendría no uno sino dos pequeños en mis brazos, dos pequeños a los cuales dedicare mi vida entera.

GEMELOS, SIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIII
SIGUELA
YO PENSE QUE ERA NICK PERO NO, ERA KEVIN