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Tócame despacio (Larry Stylinson) TERMINADA
O W N :: Archivos :: Novelas Terminadas
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Capitulo 13.
Louis se recostó sobre el sofá. Estaba mareado y sorprendido por lo bien que se sentía. Nada de lo que hubiera experimentado le había preparado para la sensación y el placer que acababa de inundar su cuerpo. La timidez se apoderó de él y trató de mantener los ojos cerrados.
—¿Estás bien?—preguntó Harry suavemente.
—Ajá. —No tenía palabras. Se las había robado la belleza de su orgasmo mutuo.
—¿Te has asustado? ¿Te has sentido bien?
Podía escuchar la incertidumbre en la voz de Harry y finalmente obtuvo el coraje para abrir los ojos. Sonrió y trató de expresar la felicidad que sentía con la mirada.
—No, no me he asustado. Y diablos, sí, me he sentido de maravilla.
Harry suspiró lleno de alivio, acarició la garganta de Louis un momento antes de alejarse y ver el desorden que habían dejado a su paso.
—Creo que debemos limpiarnos; nos hemos ensuciado un poco.
Louis rió e intentó ponerse de pie, pero Harry lo levantó.
—Juntos—dijo Harry seriamente.
El temor se apoderó de Louis, pero sabía que tenía confiar en él, así que asintió. Harry esbozó una enorme sonrisa y acomodó a Louis en sus brazos para poder apagar la televisión y la luz. Caminó hacia las escaleras y luego hasta su cuarto de baño para tener privacidad. Gemma no llegaría a casa hasta dentro de un par de horas, pero no quería arriesgarse y que Louis se sintiera avergonzado.
Colocó a Louis con cuidado sobre sus pies, abrió la ducha y dejó que el agua comenzara a calentarse antes de desnudarse.
Los ojos de Louis estaban fijos en el duro y musculoso cuerpo que se descubrió frente a él. Sin embargo, él se quedó inmóvil, cubriéndose el estómago con los brazos. Harry se dio la vuelta y notó que aún estaba vestido, caminó hacia él.
—Todavía estás vestido—señaló, con voz acusatoria.
Las manos de Louis temblaron y titubeó al quitarse la camisa. Sin embargo, Harry se dio cuenta de ello, se paró frente a él y tomó la camisa de Louis.
—Levanta los brazos.
Lo hizo, aunque reaciamente, y Harry le quitó la camisa. Su pálida piel estaba llena de cicatrices que variaban en forma y tamaño, desde sus hombros hasta su pecho, pero Harry lo tomó de las muñecas, alejándolas de su cuerpo.
Sintió como los labios del vaquero tocaban una de sus cicatrices.
—Jamás te escondas de mí. Eres bello y si debo besar cada marca de tu cuerpo para que lo creas, lo haré hasta el día que te mueras.
Las manos de Harry tocaron sus tejanos, deslizándose por sus piernas y animándole a que se los quitara. En seguida, estaba de pie, desnudo frente al vaquero, que lo guió hasta la ducha. Louis jamás se había sentido tan amado como en los siguientes veinte minutos. Harry enjabonó su cuerpo, cariñosamente lavó cada centímetro desde el cuello hasta sus pies. Cuando masajeó su cuero cabelludo con champú, Louis no pudo evitar suspirar de placer. Se sentía bien y podía notar el cuerpo del hombre contra el suyo, enviando deliciosas ondas de placer por su columna vertebral.
Harry terminó de bañar al chico, y luego lavó rápidamente su propio cuerpo. Envolvió a Louis en una enorme toalla, secándolo con cuidado y suavidad, llenó sus hombros y nuca de suaves besos. Cuando terminó, le dio una leve palmada en el trasero y dijo—: Vete a la cama. Yo iré en un momento. Sólo tengo que usar el baño.
Louis le miró como indignado; sacó la lengua antes de salir del baño y subirse a la cama. Se acomodó y cerró los ojos; estaba exhausto por todo lo que había ocurrido durante el día. No le llevó mucho tiempo quedarse profundamente dormido, no sintió cuando Harry se acomodó a su lado ni cuando esos poderosos brazos lo envolvieron, acurrucando su poderoso cuerpo junto a él.
La luz del sol se introdujo por la ventana a la mañana siguiente despertando a Louis. Éste parpadeó confundido. No sabía dónde se encontraba. Un cálido cuerpo estaba a su lado y recordó los sucesos de la noche anterior: esos acalorados momentos con Harry en el sofá, la maravillosa y erótica ducha, para terminar desnudo en la cama al lado de Harry.
Se quedó recostado un momento, disfrutando el sentirse seguro y cálido. Hoy quería mostrarle a Harry lo que había logrado hacer con Mantacor. La emoción y el orgullo se apoderaron de Louis. No podía esperar a ver la expresión de Harry cuando le viese con el semental. En secreto, con la ayuda de Gemma para que Harry no se enfadara, había trabajado con el caballo para que éste confiara cada vez más en él, hasta que por fin aceptó una silla de montar y le permitió cabalgarlo. Por supuesto, se había caído un par de veces porque asustó a Mantacor, pero por fin, después de varios días de trabajar con el animal, logró montar al caballo y cabalgarlo por el corral. Louis no confiaba lo suficiente en el semental para sacarlo de ahí, pero al menos había tenido un buen progreso. Sólo sería cuestión de tiempo antes de que pudiera hacerlo.
Louis se apoyó sobre un costado de su cuerpo para mirar a Harry mientras el vaquero despertaba. Colocó su cabeza sobre una mano y observó cómo el vaquero comenzaba a notar las cosas, fruncía el ceño por la luz que iluminaba su rostro y apretaba más los ojos. Luego sus labios y párpados se abrieron. Parpadeó varias veces para aclarar su visión, sus labios esbozaron una sonrisa para Louis.
Movió una mano y acarició la mejilla del chico.
—Buenos días, mi pequeño.
—Buenos días. Levántate, quiero mostrarte algo después del desayuno—dijo emocionado, sin percatarse de su aspecto, con el cabello desaliñado, las mejillas rojas y los ojos brillantes de emoción.
Justo cuando Louis estaba a punto de salir de la cama, Harry le tomó de la muñeca y le recostó en la cama. El chico parpadeó varias veces sorprendido por encontrarse en esa posición. Harry sintió alivio al notar la falta de temor en los ojos azules.
—Se supone que tienes que darme un beso de buenos días —dijo Harry con una sonrisa pícara.
Las comisuras de los labios de Louis se curvaron hacia arriba y arrugó la nariz al mirar a Harry.
—Tenemos mal aliento matutino...al menos deja que me lave los dientes.
—No. —Harry bajó la cabeza y posó sus labios sobre los de Louis antes de profundizar el beso e introducir la lengua en la boca del chico.
Un suave gemido escapó de los labios de Louis, envolvió el cuello de Harry con sus brazos y enredó sus dedos en la cabellera dorada. Sus cuerpos se tocaron y la fricción hizo que ambos jadearan a la vez. Louis sintió el pene de Harry tocar su muslo y el pánico se apoderó de él. Nerviosamente se alejó de su amante, cerró
los ojos y giró la cara. El vaquero se hizo a un lado, se acomodó sobre su espalda y colocó un brazo sobre su cara.
—Lo lamento, Louis. No quería asustarte.
—Está bien. Soy yo el que debería disculparse, sé que no puede ser fácil para ti lidiar con mis estúpidos...—Harry tapó la boca del chico con una de sus manos, interrumpiendo lo que fuera que iba a decir.
Una pizca de enojo se reflejó en los intensos ojos verdes mientras Harry lo regañó.
—Jamás te disculpes por tener miedo. No, después de todo lo que has sufrido, no quiero volver a escucharte decir esas palabras otra vez.
Louis asintió débilmente, sus ojos se abrieron de la sorpresa y sus labios temblaron cuando Harry alejó su mano.
—Vamos. Vete a vestirte y luego podrás enseñarme la sorpresa —dijo Harry con cautela, acariciando con sus dedos el brazo de Louis.
Harry observó cómo el adolescente se levantaba velozmente de la cama, se puso los vaqueros y tomó el resto de sus pertenencias antes de salir corriendo del dormitorio. Se dejó caer en la cama y se maldijo a sí mismo, se insultó de todas las maneras en las que pudo pensar por ser un verdadero idiota. El chico era tan tentador que no pudo resistirlo. Le tomaría tiempo ganarse la confianza de Louis para ser capaces de hacer el amor. Eso lo comprendía, pero su cuerpo quería ignorar lo que su mente le decía. Suspiró resignado, se dirigió al baño para tomar su enésima ducha de agua fría desde la llegada del joven.
Louis tarareó felizmente mientras preparaba el desayuno, una alegre sonrisa se dibujaba en sus labios sin importar cuánto intentara cambiar su expresión. Nada podía entristecerlo ahora. Se quedó mirando por la ventana en dirección al corral y vio a Mantacor bailar alrededor de su corral, moviendo su larga melena y la cola con felicidad por el amanecer.
—¡Parece que alguien está muy feliz esta mañana!—Escuchó a Gemma decir detrás de él y Louis se dio la vuelta para sonreírle.
—Buenos días, Gemma. Se lo mostraré hoy a Harry, así que tienes que mantenerlo dentro mientras preparo todo. —Le informó mientras servía en tres platos huevos y tocino, luego les agregó dos panes tostados a cada uno.
—¡Eso es genial!—Gemma se acercó, tomó tres vasos altos de la encimera y los colocó en la mesa antes de ir por la jarra de zumo a la nevera.
Louis se sirvió un vaso y a Harry una taza de café mientras Gemma colocaba los cubiertos sobre la pequeña mesa de la cocina. Harry entró en la cocina justo cuando los dos se estaban sentando a la mesa. Besó a Gemma en la cabeza y luego se acomodó al lado de Louis.
—¿Entonces, cuál es la gran sorpresa?—preguntó mientras comenzaban a comer.
Notó las miradas que los chicos intercambiaron.
—Tendrás que esperar hermano —Gemma le guiñó un ojo y a continuación dio un enorme mordisco a su pan.
Harry pudo ver el orgullo y la satisfacción en el rostro de Louis, y la calidez se apoderó de su cuerpo al ver al chico emocionado. El joven apenas podía estarse quieto. Tan pronto como terminaron de comer, se puso de pie y lavó su plato y los cubiertos.
—Iré a prepararlo todo —dijo saliendo por la puerta antes que Harry pudiera emitir palabra.
Miró a su hermana con curiosidad, pero ella simplemente sonrió satisfecha y terminó de desayunar.
—No te muevas de esa silla hasta que yo te lo diga —dijo Gemma mientras lavaba sus platos y tomaba los de su hermano cuando terminó. Miró por la ventana mientras lavaba los de él y Harry no tenía ni idea de lo que estaba
Ocurriendo —. Muy bien, hermano. Es hora de irnos. —Lo tomó de la mano y lo levantó de su asiento—. ¡Cierra los ojos!
Harry hizo un gesto de enfado, pero obedeció y siguió tranquilamente a Gemma. Ella le guió hasta las gradas del pórtico y hacia los corrales.
—Abre los ojos—dijo, y al abrirlos, Harry se encontró con Louis sentado sobre Mantacor. Sus ojos se abrieron de la sorpresa y su corazón comenzó a latir con fuerza.
—¿Qué diablos crees que estás haciendo?—gritó, asustando ligeramente a Mantacor.
La enorme sonrisa de satisfacción de Louis desapareció y miró con tristeza a Harry.
—Lo...lo siento. Pensé que estarías feliz. No lo hice solo, Gemma me ayudó todo el tiempo.
Harry giró la cabeza y miró con hostilidad a su hermana.
—¿En qué diablos pensabas, Gemma? ¡Pudo haberse lastimado seriamente! Ese caballo es peligroso.
Gemma le cubrió los labios con sus manos.
—De verdad eres un idiota, Harry. Por si no lo has notado, ese caballo le adora. Mantacor jamás lastimaría a Louis a propósito. ¡Es tan dócil con él como Brandy lo es conmigo! ¡Mira lo que has hecho! Louis, regresa a la casa.
Durante todo el tiempo que los hermanos estuvieron discutiendo, el corazón de Louis se había roto un poco y lentamente se bajó del caballo, deshizo los estribos de la silla. Mantacor le miró con curiosidad, Louis se limitó a sonreír. Le dio unas palmaditas en el cuello.
—Está bien, chico. Te sacaré a pasear otro día.
Harry se sintió como un patán al ver la expresión desalentada del joven.
—Lo siento, Louis. Por favor, muéstrame lo que has logrado. —No sólo había asustado al chico esa misma mañana, sino que acababa de cometer otro grave error. Pero al verle sobre el caballo, casi le da un infarto. Si algo le hubiese ocurrido a Louis, no sabía lo que hubiese podido hacer.
Louis lo estudió un momento.
—No te preocupes, te lo mostraré otro día.
—No, por favor. Quiero verlo ahora. —Harry trató de animar al joven con una sonrisa y se pateó mentalmente el trasero. El chico se había sentido tan feliz y orgulloso por ser capaz de montar ese caballo... y él se había comportado como un idiota. Maldición, estaba metiendo la pata una y otra vez.
El adolescente titubeó un momento más antes de atar los estribos de nuevo, y se aseguró de que estuvieran bien ajustados antes de subirse a la silla. Louis volvió a sonreír, lentamente al principio mientras hacía todos los pasos que Gemma le había enseñado, montado sobre Mantacor. Sentía mucha paz al estar sobre el animal. Nadie entendía que el caballo necesitaba a alguien que lo comprendiera.
Como Harry había hecho con él. Mantacor sacudió la cabeza como si dijera: “Miradme” y comenzó a trotar alrededor del corral mientras Louis lo animaba.
—Buen chico, Mantacor. Eres un amor, ¿verdad chico? —dijo sonriendo a Gemma y Harry.
Harry comenzó a relajar los dedos con los que se aferraba a la cerca mientras Louis cabalgaba. Parecía que el semental realmente confiaba en el chico y supuso que el caballo no lo lastimaría a su jinete. Al parecer habían estado practicando varias semanas. Una verdadera alegría emanaba de todo el cuerpo de Louis y Harry se recostó en la cerca para disfrutar del espectáculo.
Después de mostrarle a Harry todas las cosas que le había enseñado a Mantacor, Louis se bajó de la silla en el centro del corral y estaba a punto de quitársela, cuando el caballo se alejó unos cuantos metros. Louis frunció el ceño y se acercó una vez más. Cuando estaba a punto de tocar la silla, Mantacor se volvió
a correr unos metros. De repente Louis se sorprendió porque el caballo continuaba huyendo. Estaba jugando. El chico sonrió.
—Así que eso es lo que quieres, ¿eh chico? Veamos quién puede derrotar a quién. —Habiendo dicho eso, comenzó a perseguir al caballo, jugando al “corre que te pillo” con el animal.
Gemma y Harry se reían y animaban a Louis, que se carcajeaba tanto que casi no podía alcanzar al caballo, hasta que finalmente, pareció que Mantacor se cansó del juego y dejó que Louis lo atrapara. El adolescente le quitó la silla y cepilló al caballo blanco, dándoles palmadas a sus patas traseras antes de llevar la silla al establo.
Gemma se dirigió a la casa y Harry siguió a Louis. Lo observó, con los brazos cruzados y recostado en la puerta del establo, mientras el chico guardaba la silla y las riendas. Cuando Louis salió, Harry le felicitó.
—Bien hecho, Louis. Has logrado hacer en un par de semanas lo que yo jamás pude en más de un año.
Louis esbozó una sonrisa y dijo—: Bueno, sucede que yo tengo talento, al contrario de un viejo como tú.
Harry alzó una ceja al escuchar esas palabras.
—Un viejo como yo, ¿eh? —El vaquero se alejó de la puerta, caminó lentamente en dirección al joven, que comenzó a caminar hacia atrás mientras sonreía. Louis notó que no tenía escapatoria, así que subió ágilmente por la escalera que dirigía al altillo. Harry le siguió, con la intención de vengarse por el insulto del adolescente. Al subir, Louis miró desesperadamente a todos los lados buscando un lugar en el que pudiera ocultarse y vio una puerta.
—No tienes dónde esconderte, Louis—dijo Harry, mientras una sonrisa pícara se dibujaba en sus labios.
Louis esperó la oportunidad de rodear a Harry y bajar por las escaleras. Lo hizo en el momento preciso, sólo para ser detenido por un brazo alrededor de su cintura que lo tiró sobre la paja. Harry rió mientras hacía cosquillas a Louis haciendo que el joven se carcajeara. Recorrió sus dedos por su delgado cuerpo, acariciando sus costillas. Louis trató de sostener las manos de Harry para detenerle; sin embargo, el vaquero tenía más fuerza que él y se dio la vuelta, tratando de quitarse las manos de encima.
—¡De acuerdo! Me… ri-rindo,—gritó, luchando por respirar, su pecho se movía por la falta de oxígeno. Apiadándose de él, Harry se detuvo y sonrió a Louis. Sus manos aún se encontraban a los lados del joven. Había paja enredada en el cabello de Louis y lentamente comenzó a retirarla, lanzándola al suelo. La luz de la puerta abierta comenzó a iluminar las facciones del joven y su sonrisa se amplió mientras miraba a esos ojos azules que amaba tanto y que no quería volver a ver tristes.
—Te quiero, Louis—susurró, acercando sus labios a los del joven.
Louis se sorprendió al escuchar las palabras de Harry y las lágrimas aparecieron en sus ojos al escuchar la confesión del gigante. Lo abrazó e intensificó el beso. Sus besos no eran lujuriosos ni apasionados, eran simples y amorosos. Aunque Louis no había dicho las mismas palabras, Harry sintió que el chico le quería de la misma forma. Le llevaría un tiempo poder expresar con palabras dichos sentimientos.
Esa noche surgió otro momento decisivo para su relación, para sorpresa y alegría de Harry. Después de la cena, Gemma se marchó porque tenía una cita con Ty.
Les dijo que no la esperaran, por lo que Harry gruñó y le dijo que esperaba que fuera una broma. La chica rió, guiñó el ojo y salió corriendo de la casa antes que pudiera detenerla.
Otra vez mil disculpas por la tardanza. Ya subire mas pronto, mientras les dejo esos 3 capitulos c: espero y lso disfruten, besos xx
—¿Estás bien?—preguntó Harry suavemente.
—Ajá. —No tenía palabras. Se las había robado la belleza de su orgasmo mutuo.
—¿Te has asustado? ¿Te has sentido bien?
Podía escuchar la incertidumbre en la voz de Harry y finalmente obtuvo el coraje para abrir los ojos. Sonrió y trató de expresar la felicidad que sentía con la mirada.
—No, no me he asustado. Y diablos, sí, me he sentido de maravilla.
Harry suspiró lleno de alivio, acarició la garganta de Louis un momento antes de alejarse y ver el desorden que habían dejado a su paso.
—Creo que debemos limpiarnos; nos hemos ensuciado un poco.
Louis rió e intentó ponerse de pie, pero Harry lo levantó.
—Juntos—dijo Harry seriamente.
El temor se apoderó de Louis, pero sabía que tenía confiar en él, así que asintió. Harry esbozó una enorme sonrisa y acomodó a Louis en sus brazos para poder apagar la televisión y la luz. Caminó hacia las escaleras y luego hasta su cuarto de baño para tener privacidad. Gemma no llegaría a casa hasta dentro de un par de horas, pero no quería arriesgarse y que Louis se sintiera avergonzado.
Colocó a Louis con cuidado sobre sus pies, abrió la ducha y dejó que el agua comenzara a calentarse antes de desnudarse.
Los ojos de Louis estaban fijos en el duro y musculoso cuerpo que se descubrió frente a él. Sin embargo, él se quedó inmóvil, cubriéndose el estómago con los brazos. Harry se dio la vuelta y notó que aún estaba vestido, caminó hacia él.
—Todavía estás vestido—señaló, con voz acusatoria.
Las manos de Louis temblaron y titubeó al quitarse la camisa. Sin embargo, Harry se dio cuenta de ello, se paró frente a él y tomó la camisa de Louis.
—Levanta los brazos.
Lo hizo, aunque reaciamente, y Harry le quitó la camisa. Su pálida piel estaba llena de cicatrices que variaban en forma y tamaño, desde sus hombros hasta su pecho, pero Harry lo tomó de las muñecas, alejándolas de su cuerpo.
Sintió como los labios del vaquero tocaban una de sus cicatrices.
—Jamás te escondas de mí. Eres bello y si debo besar cada marca de tu cuerpo para que lo creas, lo haré hasta el día que te mueras.
Las manos de Harry tocaron sus tejanos, deslizándose por sus piernas y animándole a que se los quitara. En seguida, estaba de pie, desnudo frente al vaquero, que lo guió hasta la ducha. Louis jamás se había sentido tan amado como en los siguientes veinte minutos. Harry enjabonó su cuerpo, cariñosamente lavó cada centímetro desde el cuello hasta sus pies. Cuando masajeó su cuero cabelludo con champú, Louis no pudo evitar suspirar de placer. Se sentía bien y podía notar el cuerpo del hombre contra el suyo, enviando deliciosas ondas de placer por su columna vertebral.
Harry terminó de bañar al chico, y luego lavó rápidamente su propio cuerpo. Envolvió a Louis en una enorme toalla, secándolo con cuidado y suavidad, llenó sus hombros y nuca de suaves besos. Cuando terminó, le dio una leve palmada en el trasero y dijo—: Vete a la cama. Yo iré en un momento. Sólo tengo que usar el baño.
Louis le miró como indignado; sacó la lengua antes de salir del baño y subirse a la cama. Se acomodó y cerró los ojos; estaba exhausto por todo lo que había ocurrido durante el día. No le llevó mucho tiempo quedarse profundamente dormido, no sintió cuando Harry se acomodó a su lado ni cuando esos poderosos brazos lo envolvieron, acurrucando su poderoso cuerpo junto a él.
La luz del sol se introdujo por la ventana a la mañana siguiente despertando a Louis. Éste parpadeó confundido. No sabía dónde se encontraba. Un cálido cuerpo estaba a su lado y recordó los sucesos de la noche anterior: esos acalorados momentos con Harry en el sofá, la maravillosa y erótica ducha, para terminar desnudo en la cama al lado de Harry.
Se quedó recostado un momento, disfrutando el sentirse seguro y cálido. Hoy quería mostrarle a Harry lo que había logrado hacer con Mantacor. La emoción y el orgullo se apoderaron de Louis. No podía esperar a ver la expresión de Harry cuando le viese con el semental. En secreto, con la ayuda de Gemma para que Harry no se enfadara, había trabajado con el caballo para que éste confiara cada vez más en él, hasta que por fin aceptó una silla de montar y le permitió cabalgarlo. Por supuesto, se había caído un par de veces porque asustó a Mantacor, pero por fin, después de varios días de trabajar con el animal, logró montar al caballo y cabalgarlo por el corral. Louis no confiaba lo suficiente en el semental para sacarlo de ahí, pero al menos había tenido un buen progreso. Sólo sería cuestión de tiempo antes de que pudiera hacerlo.
Louis se apoyó sobre un costado de su cuerpo para mirar a Harry mientras el vaquero despertaba. Colocó su cabeza sobre una mano y observó cómo el vaquero comenzaba a notar las cosas, fruncía el ceño por la luz que iluminaba su rostro y apretaba más los ojos. Luego sus labios y párpados se abrieron. Parpadeó varias veces para aclarar su visión, sus labios esbozaron una sonrisa para Louis.
Movió una mano y acarició la mejilla del chico.
—Buenos días, mi pequeño.
—Buenos días. Levántate, quiero mostrarte algo después del desayuno—dijo emocionado, sin percatarse de su aspecto, con el cabello desaliñado, las mejillas rojas y los ojos brillantes de emoción.
Justo cuando Louis estaba a punto de salir de la cama, Harry le tomó de la muñeca y le recostó en la cama. El chico parpadeó varias veces sorprendido por encontrarse en esa posición. Harry sintió alivio al notar la falta de temor en los ojos azules.
—Se supone que tienes que darme un beso de buenos días —dijo Harry con una sonrisa pícara.
Las comisuras de los labios de Louis se curvaron hacia arriba y arrugó la nariz al mirar a Harry.
—Tenemos mal aliento matutino...al menos deja que me lave los dientes.
—No. —Harry bajó la cabeza y posó sus labios sobre los de Louis antes de profundizar el beso e introducir la lengua en la boca del chico.
Un suave gemido escapó de los labios de Louis, envolvió el cuello de Harry con sus brazos y enredó sus dedos en la cabellera dorada. Sus cuerpos se tocaron y la fricción hizo que ambos jadearan a la vez. Louis sintió el pene de Harry tocar su muslo y el pánico se apoderó de él. Nerviosamente se alejó de su amante, cerró
los ojos y giró la cara. El vaquero se hizo a un lado, se acomodó sobre su espalda y colocó un brazo sobre su cara.
—Lo lamento, Louis. No quería asustarte.
—Está bien. Soy yo el que debería disculparse, sé que no puede ser fácil para ti lidiar con mis estúpidos...—Harry tapó la boca del chico con una de sus manos, interrumpiendo lo que fuera que iba a decir.
Una pizca de enojo se reflejó en los intensos ojos verdes mientras Harry lo regañó.
—Jamás te disculpes por tener miedo. No, después de todo lo que has sufrido, no quiero volver a escucharte decir esas palabras otra vez.
Louis asintió débilmente, sus ojos se abrieron de la sorpresa y sus labios temblaron cuando Harry alejó su mano.
—Vamos. Vete a vestirte y luego podrás enseñarme la sorpresa —dijo Harry con cautela, acariciando con sus dedos el brazo de Louis.
Harry observó cómo el adolescente se levantaba velozmente de la cama, se puso los vaqueros y tomó el resto de sus pertenencias antes de salir corriendo del dormitorio. Se dejó caer en la cama y se maldijo a sí mismo, se insultó de todas las maneras en las que pudo pensar por ser un verdadero idiota. El chico era tan tentador que no pudo resistirlo. Le tomaría tiempo ganarse la confianza de Louis para ser capaces de hacer el amor. Eso lo comprendía, pero su cuerpo quería ignorar lo que su mente le decía. Suspiró resignado, se dirigió al baño para tomar su enésima ducha de agua fría desde la llegada del joven.
Louis tarareó felizmente mientras preparaba el desayuno, una alegre sonrisa se dibujaba en sus labios sin importar cuánto intentara cambiar su expresión. Nada podía entristecerlo ahora. Se quedó mirando por la ventana en dirección al corral y vio a Mantacor bailar alrededor de su corral, moviendo su larga melena y la cola con felicidad por el amanecer.
—¡Parece que alguien está muy feliz esta mañana!—Escuchó a Gemma decir detrás de él y Louis se dio la vuelta para sonreírle.
—Buenos días, Gemma. Se lo mostraré hoy a Harry, así que tienes que mantenerlo dentro mientras preparo todo. —Le informó mientras servía en tres platos huevos y tocino, luego les agregó dos panes tostados a cada uno.
—¡Eso es genial!—Gemma se acercó, tomó tres vasos altos de la encimera y los colocó en la mesa antes de ir por la jarra de zumo a la nevera.
Louis se sirvió un vaso y a Harry una taza de café mientras Gemma colocaba los cubiertos sobre la pequeña mesa de la cocina. Harry entró en la cocina justo cuando los dos se estaban sentando a la mesa. Besó a Gemma en la cabeza y luego se acomodó al lado de Louis.
—¿Entonces, cuál es la gran sorpresa?—preguntó mientras comenzaban a comer.
Notó las miradas que los chicos intercambiaron.
—Tendrás que esperar hermano —Gemma le guiñó un ojo y a continuación dio un enorme mordisco a su pan.
Harry pudo ver el orgullo y la satisfacción en el rostro de Louis, y la calidez se apoderó de su cuerpo al ver al chico emocionado. El joven apenas podía estarse quieto. Tan pronto como terminaron de comer, se puso de pie y lavó su plato y los cubiertos.
—Iré a prepararlo todo —dijo saliendo por la puerta antes que Harry pudiera emitir palabra.
Miró a su hermana con curiosidad, pero ella simplemente sonrió satisfecha y terminó de desayunar.
—No te muevas de esa silla hasta que yo te lo diga —dijo Gemma mientras lavaba sus platos y tomaba los de su hermano cuando terminó. Miró por la ventana mientras lavaba los de él y Harry no tenía ni idea de lo que estaba
Ocurriendo —. Muy bien, hermano. Es hora de irnos. —Lo tomó de la mano y lo levantó de su asiento—. ¡Cierra los ojos!
Harry hizo un gesto de enfado, pero obedeció y siguió tranquilamente a Gemma. Ella le guió hasta las gradas del pórtico y hacia los corrales.
—Abre los ojos—dijo, y al abrirlos, Harry se encontró con Louis sentado sobre Mantacor. Sus ojos se abrieron de la sorpresa y su corazón comenzó a latir con fuerza.
—¿Qué diablos crees que estás haciendo?—gritó, asustando ligeramente a Mantacor.
La enorme sonrisa de satisfacción de Louis desapareció y miró con tristeza a Harry.
—Lo...lo siento. Pensé que estarías feliz. No lo hice solo, Gemma me ayudó todo el tiempo.
Harry giró la cabeza y miró con hostilidad a su hermana.
—¿En qué diablos pensabas, Gemma? ¡Pudo haberse lastimado seriamente! Ese caballo es peligroso.
Gemma le cubrió los labios con sus manos.
—De verdad eres un idiota, Harry. Por si no lo has notado, ese caballo le adora. Mantacor jamás lastimaría a Louis a propósito. ¡Es tan dócil con él como Brandy lo es conmigo! ¡Mira lo que has hecho! Louis, regresa a la casa.
Durante todo el tiempo que los hermanos estuvieron discutiendo, el corazón de Louis se había roto un poco y lentamente se bajó del caballo, deshizo los estribos de la silla. Mantacor le miró con curiosidad, Louis se limitó a sonreír. Le dio unas palmaditas en el cuello.
—Está bien, chico. Te sacaré a pasear otro día.
Harry se sintió como un patán al ver la expresión desalentada del joven.
—Lo siento, Louis. Por favor, muéstrame lo que has logrado. —No sólo había asustado al chico esa misma mañana, sino que acababa de cometer otro grave error. Pero al verle sobre el caballo, casi le da un infarto. Si algo le hubiese ocurrido a Louis, no sabía lo que hubiese podido hacer.
Louis lo estudió un momento.
—No te preocupes, te lo mostraré otro día.
—No, por favor. Quiero verlo ahora. —Harry trató de animar al joven con una sonrisa y se pateó mentalmente el trasero. El chico se había sentido tan feliz y orgulloso por ser capaz de montar ese caballo... y él se había comportado como un idiota. Maldición, estaba metiendo la pata una y otra vez.
El adolescente titubeó un momento más antes de atar los estribos de nuevo, y se aseguró de que estuvieran bien ajustados antes de subirse a la silla. Louis volvió a sonreír, lentamente al principio mientras hacía todos los pasos que Gemma le había enseñado, montado sobre Mantacor. Sentía mucha paz al estar sobre el animal. Nadie entendía que el caballo necesitaba a alguien que lo comprendiera.
Como Harry había hecho con él. Mantacor sacudió la cabeza como si dijera: “Miradme” y comenzó a trotar alrededor del corral mientras Louis lo animaba.
—Buen chico, Mantacor. Eres un amor, ¿verdad chico? —dijo sonriendo a Gemma y Harry.
Harry comenzó a relajar los dedos con los que se aferraba a la cerca mientras Louis cabalgaba. Parecía que el semental realmente confiaba en el chico y supuso que el caballo no lo lastimaría a su jinete. Al parecer habían estado practicando varias semanas. Una verdadera alegría emanaba de todo el cuerpo de Louis y Harry se recostó en la cerca para disfrutar del espectáculo.
Después de mostrarle a Harry todas las cosas que le había enseñado a Mantacor, Louis se bajó de la silla en el centro del corral y estaba a punto de quitársela, cuando el caballo se alejó unos cuantos metros. Louis frunció el ceño y se acercó una vez más. Cuando estaba a punto de tocar la silla, Mantacor se volvió
a correr unos metros. De repente Louis se sorprendió porque el caballo continuaba huyendo. Estaba jugando. El chico sonrió.
—Así que eso es lo que quieres, ¿eh chico? Veamos quién puede derrotar a quién. —Habiendo dicho eso, comenzó a perseguir al caballo, jugando al “corre que te pillo” con el animal.
Gemma y Harry se reían y animaban a Louis, que se carcajeaba tanto que casi no podía alcanzar al caballo, hasta que finalmente, pareció que Mantacor se cansó del juego y dejó que Louis lo atrapara. El adolescente le quitó la silla y cepilló al caballo blanco, dándoles palmadas a sus patas traseras antes de llevar la silla al establo.
Gemma se dirigió a la casa y Harry siguió a Louis. Lo observó, con los brazos cruzados y recostado en la puerta del establo, mientras el chico guardaba la silla y las riendas. Cuando Louis salió, Harry le felicitó.
—Bien hecho, Louis. Has logrado hacer en un par de semanas lo que yo jamás pude en más de un año.
Louis esbozó una sonrisa y dijo—: Bueno, sucede que yo tengo talento, al contrario de un viejo como tú.
Harry alzó una ceja al escuchar esas palabras.
—Un viejo como yo, ¿eh? —El vaquero se alejó de la puerta, caminó lentamente en dirección al joven, que comenzó a caminar hacia atrás mientras sonreía. Louis notó que no tenía escapatoria, así que subió ágilmente por la escalera que dirigía al altillo. Harry le siguió, con la intención de vengarse por el insulto del adolescente. Al subir, Louis miró desesperadamente a todos los lados buscando un lugar en el que pudiera ocultarse y vio una puerta.
—No tienes dónde esconderte, Louis—dijo Harry, mientras una sonrisa pícara se dibujaba en sus labios.
Louis esperó la oportunidad de rodear a Harry y bajar por las escaleras. Lo hizo en el momento preciso, sólo para ser detenido por un brazo alrededor de su cintura que lo tiró sobre la paja. Harry rió mientras hacía cosquillas a Louis haciendo que el joven se carcajeara. Recorrió sus dedos por su delgado cuerpo, acariciando sus costillas. Louis trató de sostener las manos de Harry para detenerle; sin embargo, el vaquero tenía más fuerza que él y se dio la vuelta, tratando de quitarse las manos de encima.
—¡De acuerdo! Me… ri-rindo,—gritó, luchando por respirar, su pecho se movía por la falta de oxígeno. Apiadándose de él, Harry se detuvo y sonrió a Louis. Sus manos aún se encontraban a los lados del joven. Había paja enredada en el cabello de Louis y lentamente comenzó a retirarla, lanzándola al suelo. La luz de la puerta abierta comenzó a iluminar las facciones del joven y su sonrisa se amplió mientras miraba a esos ojos azules que amaba tanto y que no quería volver a ver tristes.
—Te quiero, Louis—susurró, acercando sus labios a los del joven.
Louis se sorprendió al escuchar las palabras de Harry y las lágrimas aparecieron en sus ojos al escuchar la confesión del gigante. Lo abrazó e intensificó el beso. Sus besos no eran lujuriosos ni apasionados, eran simples y amorosos. Aunque Louis no había dicho las mismas palabras, Harry sintió que el chico le quería de la misma forma. Le llevaría un tiempo poder expresar con palabras dichos sentimientos.
Esa noche surgió otro momento decisivo para su relación, para sorpresa y alegría de Harry. Después de la cena, Gemma se marchó porque tenía una cita con Ty.
Les dijo que no la esperaran, por lo que Harry gruñó y le dijo que esperaba que fuera una broma. La chica rió, guiñó el ojo y salió corriendo de la casa antes que pudiera detenerla.
Otra vez mil disculpas por la tardanza. Ya subire mas pronto, mientras les dejo esos 3 capitulos c: espero y lso disfruten, besos xx
bethlasforh0ran
Re: Tócame despacio (Larry Stylinson) TERMINADA
Te amo por subir¡¡¡
Nononoo, es demasiado para mi ser . Estuvo H-E-R-M-O-S-O este maraton, Louis ya le dijo TODO ha cerca de su pasado y Harry fue un amor con el y después de todo lo siguió amando, y cuando Estaban en el sofá e mm... pues.... esto me paso Y cuando se metieron a la dicha volvió a pasar y estuvo prefecto Llore, llore por la historia de Lucho por las palabras de Harry y por todo el amor que se dieron . Y que mas te puedo decir.... así... Siguela cuando puedas
Nononoo, es demasiado para mi ser . Estuvo H-E-R-M-O-S-O este maraton, Louis ya le dijo TODO ha cerca de su pasado y Harry fue un amor con el y después de todo lo siguió amando, y cuando Estaban en el sofá e mm... pues.... esto me paso Y cuando se metieron a la dicha volvió a pasar y estuvo prefecto Llore, llore por la historia de Lucho por las palabras de Harry y por todo el amor que se dieron . Y que mas te puedo decir.... así... Siguela cuando puedas
paola2134
Re: Tócame despacio (Larry Stylinson) TERMINADA
AAAAAAAAAAAHHHHHHHH DIOS QUE HERMOSOS!!
QUE HERMOSURA!! Harry es mas tierno
Siguela pronto
Besitos Virtuales
QUE HERMOSURA!! Harry es mas tierno
Siguela pronto
Besitos Virtuales
LuciaHoranAvoletta
Re: Tócame despacio (Larry Stylinson) TERMINADA
Creo que estos tres capítulos si que han sido de lo mejor, o sea todo lo que han avanzado ambos es realmente lindo
Síguela cuando puedas
Cuídate
Xx :)
Síguela cuando puedas
Cuídate
Xx :)
Kaathi
Re: Tócame despacio (Larry Stylinson) TERMINADA
Omg estos tres capítulos fueron lo mejor que me paso En la semana,ah. No enserio,me encantaron, dios mío avanzaron mucho y es muy tierno todo lo que hace Harry por Louis.dios seguila. Besos
L(ove)arry Stylinson
Re: Tócame despacio (Larry Stylinson) TERMINADA
dios!! como me gusta tu novela!!!! me tienes totalmente enganchada!!!! siguela!!
locaxlarry
Re: Tócame despacio (Larry Stylinson) TERMINADA
Siguelaaa YAAAA! Please
Besitos Virtuales
Besitos Virtuales
LuciaHoranAvoletta
Re: Tócame despacio (Larry Stylinson) TERMINADA
Te amo por leer :3paola2134 escribió:Te amo por subir¡¡¡
Nononoo, es demasiado para mi ser . Estuvo H-E-R-M-O-S-O este maraton, Louis ya le dijo TODO ha cerca de su pasado y Harry fue un amor con el y después de todo lo siguió amando, y cuando Estaban en el sofá e mm... pues.... esto me paso Y cuando se metieron a la dicha volvió a pasar y estuvo prefecto Llore, llore por la historia de Lucho por las palabras de Harry y por todo el amor que se dieron . Y que mas te puedo decir.... así... Siguela cuando puedas
Lo sé esto da lkfdgsdhksjd y lo que viene omg, ni te imaginas :3
ya la sigo :))
bethlasforh0ran
Re: Tócame despacio (Larry Stylinson) TERMINADA
Lo sé es una cosita :333 o cosota e.eLuciaHoranAvoletta escribió:AAAAAAAAAAAHHHHHHHH DIOS QUE HERMOSOS!!
QUE HERMOSURA!! Harry es mas tierno
Siguela pronto
Besitos Virtuales
ya la sigo besos.
bethlasforh0ran
Re: Tócame despacio (Larry Stylinson) TERMINADA
Si, son los mas especiales y el que viene*-*Kaathi escribió:Creo que estos tres capítulos si que han sido de lo mejor, o sea todo lo que han avanzado ambos es realmente lindo
Síguela cuando puedas
Cuídate
Xx :)
ya la sigo, besos.
bethlasforh0ran
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