Bad Boys, Bad Boys {Larry Stylinson} -HOT- TERMINADA

Capítulo 12

—Te estoy dando una oportunidad más—, anunció el Jefe Whitlow cuatro horas más tarde.

—¿Los novatos no funcionaron para ti?—, preguntó Louis.

—Harry y tu lárguense allí. Dominic acciona una intervención telefónica en el teléfono de la oficina. Hay una reunión detrás de la escuela primaria en Hemlock esta noche. Los necesito a los dos en posición y ocultos antes de que caigan, —dijo Whitlow, ignorando el sarcasmo de Louis—. No la jodan esta vez.

—Ya lo tienes, —respondió Harry, su mandíbula como hierro y las manos metidas en sus pantalones como si estuviera apuntalando su terquedad. Sin contacto visual.

Bien. Dos pueden jugar al mismo juego. ¿Pensaba Harry que a Louis le gustaba sentirse atraído por un hombre que insistía en ser un idiota terco?

Louis permaneció en silencio en el camino. Se estacionaron en la calle frente a una gasolinera y caminaron por un camino indirecto hacia la escuela. La oscuridad total caería en menos de una hora y, encontrar una cubierta en las desnudas ramas de los arbustos, no iba a ser fácil. Harry sopesó el peso de las mantas de vigilancia y la mochila, caminando en silencio mientras lo hacía.

La parte trasera de la escuela se extendía clara y abierta. Una reunión aquí podría ser tanto en el borde de la línea de árboles como en contra de la construcción. Pero el edificio proveía un importante punto ciego desde la calle y un fácil acceso al estacionamiento.
Acercarse sería un reto.

Harry pareció relajarse una vez que se tranquilizó y se dio cuenta de que Louis no insistiría en el tema de su cambiante relación.

Después de su último intercambio, cuando Harry confesó que no quería ver a Louis con una mujer para tener relaciones sexuales, Louis tenía la esperanza que habían llegado a una encrucijada. Luego Harry había quedado en silencio.

¿Qué estaba pensando? ¿La pregunta de Louis sobre dónde se encontraban parados llegó demasiado pronto?

Louis se arrastró sobre los codos y levantó los binoculares a la cara. Las ramas crujieron a su lado cuando Harry hizo lo mismo. A centímetros de distancia que bien podrían haber sido un muro que los separaba.

—Una mamada genial no hace una relación—, suspiró Harry, como si estuviera a una gran distancia—. Mierda. Nunca pensé que tendría que decir eso después de la universidad.

—¿Te pedí que te casaras conmigo?

Harry soltó un bufido. Louis sentía a Harry mirarlo, pero él mantuvo sus entrenados ojos en la parte trasera del edificio. Un segundo resbalón le costaría su placa.

—¿Qué quieres?— Harry pidió cautelosamente.

—Yo no soy tu esposa. No necesito eternas confesiones.— Él sólo necesitaba que Harry admitiera su atracción. Eso sería un comienzo.

—¿Sexo?

—Podría ser agradable— aceptó Louis, sonriendo.

El silencio se estableció de nuevo entre ellos. La parte trasera de la escuela quedó limpia. Un par de niños corriendo junto con sus padres, señalaron el equipo del patio y siguieron adelante.

—No estoy seguro de que pueda compartirte si hay sexo—, dijo Harry, por último.

—¿Exclusividad Física? ¿Y si quiero hablar con alguien? —Louis tragó saliva, tratando de sonar indiferente cuando la línea de conversación de Harry hacia que el corazón de Louis latiera con una esperanza renovada.

Harry dejó los binoculares y tomó una cámara. Realizó dos fotografías al coche que acababa de arribar. —Adolescentes besándose—, murmuró. —Ellos van a joder la investigación.

—Regístralo.— Louis dejó a la investigación entrometerse. Esto alivió la tensión, dándole a ambos espacio para reflexionar sobre sus palabras.

Harry sacó el libro, tomó nota de la hora y el número de las fotografías realizadas. La pareja se fue después de veinte minutos de mecer el carro. Una completa oscuridad descendió. Harry le entregó los binoculares nocturnos.

—Somos compañeros. Deberías hablar conmigo cuando tienes cosas dando vuelta.— murmuró Harry mientras pulía la lente de noche de su cámara.

—El sexo y la comunicación. Suena como una serie. —Una vez más, Louis rogaba que su voz sonara firme como si fuera un hecho y ocultó su emoción cada vez mayor. ¿Podría Harry estar recobrando los sentidos?

—Hombre, eres mi mejor amigo. ¿Se supone que debo dejar de hablar contigo a causa de esta mierda? —Harry no parecía tan contento con las conclusiones que sacó para sí mismo.

Louis dejó los binoculares y lo miró por encima del hombro.

—No. Tendría que patear tu culo si me dejas de hablar. Pero lo que estás pidiendo se parece mucho más a una relación que sólo a un tipo que quiere una mamada.

Harry se encogió de hombros. Ya que ambos yacían sobre sus estómagos, el gesto le salió más como el de un encorvado.

Louis regresó a su vigilancia. Besárlo para alejar la confusión, probablemente no sería lo mejor. Pero él quería. Mucho.

—Extraño hablar contigo.— Harry gruñó las palabras de mal humor.

Louis quería reír. —Puedes tomar el teléfono en cualquier momento que desees, sin importar lo que decidas.

—Me gustaría que me llamaras.

—¿Ahora quién está siendo una niña?

Harry se zambulló sobre él, tomando a Louis por la espalda. —Retráctate.

—No. Estás jugando duro para conseguir un poco de diversión, —dijo Louis. Sexy, especialmente con ese puchero con la sombra de la noche en su barba y el crecimiento de un día.

—Dios, te deseo. —Las palabras salieron de Harry como una revelación.