"The Boyfriend League" (joejonas & tu)

—No, quiero decir, que realmente no hablamos de nada. No compartimos intereses. Es difícil de explicar. Es solo que, no estoy tan feliz como pensé que estaría una vez que tuviera novio.

—Así que tal vez tienes al novio equivocado.

Antes de que pudiera comentar sobre eso, Joe y Brandon se unieron a nosotras y nos dirigimos a Bubba Tub. No había considerado lo incomodo que sería un paseo a pie con otra pareja, una pareja obviamente en modo serio (en verdad). Brandon tenía su brazo alrededor de Bird, quien se acurrucaba contra su lado. Joe y yo estábamos caminando de lado a lado con los brazos libremente. En un momento nuestros dedos se tocaron y creo que ambos saltamos, sintiendo la corriente prohibida.

—Entonces, ¿vienen aquí a menudo? —Pregunto Joe finalmente.

—Un par de veces cada verano. No tan a menudo como para obtener un pase de temporada —me encogí de hombros—. Quiero decir, hay tantos parques acuáticos en el área, ¿Por qué limitar las opciones?

Él sonrió.

—Te entiendo.

Él estaba, por supuesto, sólo llevando su traje de baño, después de haberse quitado la camiseta también. Estaba realmente en muy buena forma, un poco más bronceado de lo que esperaba, así que me imagine que debía de jugar béisbol de vez en cuando sin su camisa. Tal vez todos los chicos lo hacían, porque Brandon estaba bronceado, también.

Llegamos a Bubba Tub y comenzamos a subir los escalones hasta la cima donde se entraba al tobogán y se deslizaban hacia abajo por la tortuosa pendiente. Por su puesto, la larga fila hacia las cosas lentas. Tal vez esta era la razón por la cual Tiffany no le gustaba entra al agua, involucraba estar un montón de pie alrededor, tratando de pensar en una conversación.

Por supuesto, Brandon y Bird estaban usando el tiempo en besarse.

—¿Has visto una película buena últimamente? —Le pregunte, solo para tener algo que decir.

Joe se rió, como si supiera exactamente lo que estaba tratando de hacer. Llenar el aire muerto entre nosotros.

—En realidad no. Entonces, ¿Por qué crees que debemos pasar por esto?

—¿Pasar por qué?

—Esperar en esta larga fila para lo que probablemente será una emoción de un trigésimo de segundo.

—Creo que disfrutar de una emoción de un trigésimo de segundo es mejor que ninguna emoción en absoluto.

—¿Cuál es tu paseo favorito?

—Tengo dos en realidad. La Avalancha y el Río Salvaje.

—¿Cuál es la Avalancha?

—Es la más alta, más rápida… es casi una caída recta en tus espaldas, con los brazos cruzados —me estremecí—. Es realmente una carrera, sin juego de palabras.

—Voy a tener que probarlo.

—Podrías hacerlo después de este. —Le dije antes de que pudiera detenerme, antes de que convenciera de que por lealtad a Nick, debía pasar el día andando sola.

—Está bien. —Dijo Joe.

Parecía un poco divertido, pero era difícil estar segura porque llevaba gafas de sol.

Por supuesto, yo también.

Joe se inclinó y dijo en voz baja:

—Mira, si que estas con Nick. Pero, ¿quién quiere estar en un parque acuático solo? Vamos a divertirnos.

Le sonreí.

—Me gusta tu forma de pensar.

Por fin llegamos a la parte superior y nos metimos en la interior del enorme tobogán. Chico, chico, chica, chica. Por lo que Bird y yo estábamos sentadas una junto a la otra con Brandon junto a ella y Joe a su lado. Tomamos las correas en la parte inferior del salvavidas.

Brandon y Joe llevaban enormes sonrisas.

—¿Te das cuenta que nuestro lado se inclina más que el tuyo? —Dijo Brandon.

—¿Sí y qué? —Dijo Bird.

—Así que vamos a ir más rápido. —Dijo, al igual que un asistente empujaba el salvavidas por el borde.

Bird y yo gritamos y reíamos la mayor parte del camino hacia abajo, mientras que los chicos solo se reían. Nunca había estado en un parque acuático con un chico, y fue divertido, muy divertido, deslizarse por este paseo con los chicos.

—Vamos a hacer el Vacío Negro después. —Dijo Bird, al salir del tobogán en la parte inferior de la ladera.

—Estábamos pensando en la Avalancha. —Dije yo.

—Sí, pero el Vacío Negro está aquí y la Avalancha está del otro lado del parque.

Miré a Joe. Él sonrió y se encogió de hombros.

—Por mí esta bien el Vacío Negro.

Me pregunte si se dio cuenta de que el Vacío Negro era un viaje para dos personas. Pensé en preguntar quién se iba a montar con quien, pero como Bird ya se encontraba al costado de Brandon, parecía una pregunta sin sentido.

—El Vacío Negro será. —Dije. No dispuesta a admitir que no estaba completamente decepcionada por estar viajando con Joe.

Era un túnel de quinientos metros. El interior del tobogán fue diseñado para que el asiento fuera de dos personas. Me senté en el frente con las piernas estiradas sobre el salvavidas. Joe estaba en el área del asiento detrás de mí, con las piernas a los lados.

Tenía que inclinarme un poco hacia atrás, lo que puso mi espalda contra su pecho. Supongo que él podría haberse sostenido a los lados del salvavidas. Pero en cambio, puso los brazos a mí alrededor.

—¿Estás bien? —Pregunto, en voz baja cerca de mí oído.

—Sí. —Sonaba sin aliento. Estoy segura de que era por la anticipación del viaje, no su cercanía.

Una luz roja en la parte superior del túnel cambio a verde, alguien nos empujó y luego nos sumergimos en el abismo negro.

—¡Impresionante! —Dijo Joe al salir al paseo, cogidos de la mano.

No estoy segura de que ninguna de los dos se había percatado realmente de eso. Nos pareció que era lo que debía hacerse después de haber viajado a través de la oscuridad hasta el chapuzón final.
—Eso fue totalmente genial. —Dijo Joe.

—Totalmente. —Dije.

Bird y Brandon salieron al lado, Brandon llevaba una sonrisa lo suficientemente amplia como para desafiar a la de Joe.

—¿Y ahora a dónde? —Pregunto Brandon.

—¿La Avalancha? —Sugerí.

—Vamos.

—Creo que podría dormir aquí. —Dijo Joe.

Era caída la tarde. Los cuatro estábamos en el interior de salvavidas individuales, flotando a lo largo de Río Salvaje, que era básicamente una estrella con piscinas de tres metros que rodeaban todo el parque. El agua de alguna manera estaba configurada para fluir constantemente y lentamente.

Joe y yo estábamos cogidos de la mano para que nuestros salvavidas no se alejaran uno del otro. Creo que habíamos montado todos los toboganes y piscinas que el parque ofrecía. Habíamos vuelto a la tiendita para almorzar. Joe había traído sándwiches de jamón, que reconocí como provenientes de Ruby Tuesday. Brandon había traído bebidas y patatas fritas. Al parecer se habían esforzado por coordinar sus alimentos. Supongo que imaginaban que íbamos a pasar el rato juntos.

Tiffany había dejado pasar la comida. Estaba entretenida con un par de chicos en la zona de la piscina. Por entretenida, me refiero a hacerles preguntas tontas que eran lo suficientemente estúpidos como para tratar de responder.

Ahora estábamos dejando que nuestra comida se asentara, antes de tomar otro chapuzón por los paseos que más habíamos disfrutado.

—Sé que después de todas las atracciones mecánicas parece extraño que disfrute este paseo, pero me encanta tener unos momentos de calma. —Dije.

—Nah, me gusta, también. —Dijo Joe.

Sus dedos apretaron los míos.

—No estaba seguro de que quisieras pasar el rato conmigo hoy.

Le miré, contenta de que llevaba gafas de sol para que no pudiera leer cualquiera expresión que pudiera ver en mis ojos.

—Soy de la familia, ¿verdad?

—Cierto.

Levanté nuestras manos, salpicando en el agua.

—Me divertí mucho. Me alegro de que me invitaras.

—Me alegro de que hayas venido.

Bueno, ¿podríamos ser más patéticos? Era como que los estuviéramos tratando de decir algo sin decir nada.

Tragué saliva.

—¿Qué habrías hecho si Tiffany hubiera venido con nosotros?

—¿Quieres decir que si hubiera tenido que elegir con quién viajar en los paseos?

—Sí.

—Se podría haber puesto incómodo.

—Sí.

—Eres más divertida. —Dijo él.

Casi dije: “Tú también”. Pero eso hubiera sido totalmente injusto para Nick. Por todo lo que sabía era una bomba en un parque acuático.

Oí el torrente de una cascada y desate mis dedos de los de Joe. El río no tenía este espacio donde el agua caía en cascada en varias capas, pero si guiabas el salvavidas justo adelante, podías deslizarte a través de un espacio abierto donde no eres golpeado por el agua. Empecé a maniobrar por un lado.

Al acercarme a las cataratas, sentí un tirón en mi salvavidas y miré hacia atrás. Joe tenía la mano en él y sonreía ampliamente.

—De ninguna manera vas a ir a través de las cataratas. —Dijo.

—No me gusta “entrar” al agua.

—¿No te gusta “entrar” al agua?

—No, no me gusta “entrar” en las cascadas.

—Oh, sí, te gusta.

Conmigo pataleando y gritando, me empujo fuera de mi curso y me envió a través de las cataratas. A propósito, me lancé hacia el otro lado y estaba de pie, esperando, para cuando él llegara. Puse mis manos debajo de su salvavidas y lo lance del mismo.

—¡Hey! —Grito antes de que se fuera a pique.

Me reía mientras removía a través del agua para engancharme a mi salvavidas. Me alcé en él, sonriendo cuando lo vi braceando a través del agua, arrastrando su salvavidas detrás de él para lograr alcanzarme.

—No quieres meterte conmigo. —Le advertí, incapaz de detener mi sonrisa.

—No, supongo que no. —Él se metió en su salvavidas, se echó hacia atrás y me tomó de la mano.

—Eres reamente divertida para pasar el rato, ____*. —Dijo Joe.

Casi parecía como si estuviera diciendo otra cosa. Algo más profundo, más intenso.

Algo que no le dices a una chica que tiene novio.

Nos quedamos hasta que el parque cerró a las ocho. Gane la apuesta, así que me senté en la parte delantera en el camino a casa.

Pero era como si el parque acuático había sido un lugar mágico donde Joe y yo podíamos reír, divertirnos, tomarnos de las manos.

Pero no era real.

La magia desapareció tan pronto como salimos por la puerta.

—¿Sobre qué están hablando? —Pregunto Bird—. Nunca he visto a un lanzador y un receptor pasar tanto tiempo en el montículo. Esta, es, qué, ¿la tercera vez en este turno?

Eran Joe y Nick, me pregunte si ellos estaban hablando de mí. Y quizás no quería saber de lo que estaban diciendo.

Nick había regresado a Ragland después de la tarde, justo a tiempo para que los grandes Cascabeles vinieran a una fiesta que mi papá hacía en nuestro patio trasero, lo suficiente temprano para que los jugadores pudieran unirse a nosotros antes del juego y tomar un par de hamburguesas asadas a la parrilla.

Me alegre de ver a Nick, pero sintiéndome culpable, también. No podía olvidar cuan divertida había estado con Joe en el parque acuático, el tacto de su mano en la mía, la manera en la que él parecía tan triunfante y contento cuando me empujo por las cataratas. No podía olvidar la apreciación y la admiración en su voz mientras camino a través de mi dormitorio y miró todas las cosas que eran importantes para mí. Y lo sabía, ¡Lo sé! Que si invito a Nick a ver mi habitación, él pensaría que estaba ofreciendo otro tipo de invitación.

Nick no me conocía en la manera en la que Joe lo hace. Pero él era mi novio. ¿O no lo era?

Pero si él lo era, ¿Por qué estaba viéndolo dándole indicaciones a Tiffany en el golf en miniatura en la fiesta de papá? Sus brazos alrededor de ella, sus manos sobre ella mientras ellos se apoderaron de club del golf. Era demasiado similar a nuestro encuentro en Dave & Bubba´s.

Pero lo que de verdad me molestaba era que no estaba enojada. ¿No debería de estar alterada?

Pongan a Tiffany en el asiento delantero del auto con Joe, y estaría como un balístico porque ella esta tan cerca de él.

Nick y Joe estaban, obviamente, en desacuerdo con algo. Que ambos estuvieran en el montículo no tenía sentido. Joe estaba lanzando un juego casi-perfecto.

Él árbitro les grito.

Nick se sacudió la cabeza y camino de vuelta hacia la base. Joe hizo su pre-lanzamiento de calentamiento. Entonces él lanzo la bola con tanta fuerza que el sonido cuando llegó al guante de Nick fue más fuerte que de costumbre.

—¡Strike tres! ¡Estas fuera! —Grito el árbitro.

Era la tercera eliminación de la segunda entrada. Los Cascabeles se dirigían a la caseta. Cuando Nick se acercó a Joe, él empujo su hombro. Joe lo empujo de regreso. Nick se dio la vuelta…

Joe se abalanzo sobre él.

La multitud se puso de pie y comenzó a gritar, pero era. ¿Por qué gritábamos? Porque eso era lo hacían los chicos a los jugadores de equipos contrarios.

¡Estos chicos juegan en el mismo equipo!

Los entrenadores corrieron hacia el campo, mientras el árbitro los separaba. Luego los entrenadores les gritaron.

Uno los llevo de regreso a la caseta, gritándoles a medida que se alejaban. El árbitro y el primer entrenador oficial hablaron.

El entrenador oficial regreso a la caseta mientras en árbitro grito: —¡Que siga el juego!

—¿Que fue eso? —Pregunto Bird mientras tomábamos nuestros asientos—. Nunca he visto algo como eso antes.

Sólo pude mover mi cabeza. De ninguna manera podría haber sido por mí. ¿O sí podría?

La fiesta después del juego de Bird fue suave. Habíamos ganado. Todo el mundo debería haber estado celebrando, pero abundaba la tensión. Joe no estaba a la vista.

Si alguien sabía lo que causo la fricción en el campo, nadie lo estaba diciendo. Ni siquiera Nick.

Estábamos sentados en el borde de la piscina, nuestros pies descalzos colgando en el agua. Era la primera vez desde el concierto que besarme no parecía estar en su mente.

De hecho, todo lo que él hizo fue sentarse y suspirar. Y de manera típica, no se me ocurría nada que decirle, porque imagine que él no quería hablar de cualquier tema. Pero finalmente encontré el coraje y pregunte. —¿Qué está pasando entre tú y Joe?

—Dejémoslo pasar, ¿de acuerdo?

—No cuando realmente no lo hemos hablado.

—Y nosotros no vamos a hablarlo.

—Está bien, entonces, ¿Qué tal esto? En la fiesta antes del juego de papá, mientras yo iba a sacar nuestras bebidas, tú fuiste a enseñarle a Tiffany golf. ¿Qué pasa con eso?

—Su bola no entraba en el agujero, eso es todo. Así que pensé en ayudarla. No es la gran cosa.

Mis inseguridades se salieron con una mueca. —Ella es muy bonita.

—Sí. —Él parecía distraído.

—¿Deseas que ella viniera aquí?

—¿Por qué las chicas hacen las cosas más grandes de lo que son? Hice un viaje de cinco horas desde Houston haber regresado ayer. Te llamaré en la noche.

Él me beso en la mejilla, se levantó y se marchó.

Buuuuenooo.

Había llegado a la fiesta con él —en silencio— estaba sin trasporte para ir a casa.

Bird se sentó a mí lado. —Entonces, ¿te dijo lo que está pasando?

—Nop.

—Qué raro.

—Más raro aun, él se va a la cama, y yo no tengo como regresar a casa.

—Te llevare. Esta es la fiesta más aburrida que hemos tenido.

Cinco minutos más tarde, estaba caminando a través de mi puerta principal. La casa estaba a oscuras, pero podía ver la tenue luz procedente de la cocina. Imaginé que tal vez era papá, todavía, esperando por mí.

Únicamente era Joe en la penumbra de la habitación, sentado a la mesa con una camiseta sin mangas. Él tenía una enorme bolsa de hielo alrededor de su hombro izquierdo.

—¡Oh, por Dios! ¿Nick te hirió tan mal? —Pregunte, llegando tan lejos hasta la cocina. Joe había lanzado dos entradas y parte de la tercera después de su encuentro.

—Él no me hirió en absoluto. Algunas veces necesito aplicar hielo en mi hombro después de lanzar, eso es todo.
—¿Estás muy herido?

—Todo irá bien.

Lo cual no era una aceptación o una negación.

—¿Hay algo que pueda hacer? —Como besarte y hacerte sentir mejor. Nunca lo diría en voz alta. Pero odiaba la idea de que él paso por el dolor.

—No.

Su codo izquierdo se apoyó en la mesa. Sus dedos, curvearon alrededor de un pequeño tazón, algo estaba en remojo, olí un aroma picante. —¿Eso es jugo de pepinillos?

Joe sonrió. —Sí. Endurece la piel, ayuda a prevenir ampollas.

—Nunca he escuchado hablar de eso.

—Tu papá lo hace —él señalo un gran frasco en el mostrador—. Él trae los frascos que mantienen en la concesión cuando todos los encurtidos se venden, así que voy a tener un montón de jugo.

Tire atrás de una silla y me senté, decidiendo ir directo al grado. —Entonces, ¿Qué estaban tú y Nick hablando en el montículo esta noche?

—Cosas.

—¿Yo?

—Déjalo pasar, ____*.

—No puedo. Tú me dijiste antes que tú hablaste sobre…

—Mira, solo no me gusto su coqueteo con Tiffany esta tarde, eso es todo. Él se ofendió con mi comentario malinterpretando.

—Oh. —¿Significa que Nick ahora está interesado en Tiffany? ¿Lo estaba Joe? ¿Ellos estuvieron peleando por ella? ¿Estaba a punto de perder a mi novio? Más importante aún, ¿Estaba a punto de perder a Joe como un amigo?

—¿Te gusta Tiffany?

—Por supuesto.

—¿Y a Nick?

—Pregúntale a él.

Demasiados chicos mal humorados en mi vida está noche. Pensé que solo debería ir a la cama, preocuparme por todo en la mañana, pero no estaba conectada desde el juego, desde el altercado.