"The Boyfriend League" (joejonas & tu)

Demasiados chicos mal humorados en mi vida está noche. Pensé que solo debería ir a la cama, preocuparme por todo en la mañana, pero no estaba conectada desde el juego, desde el altercado.

—¿Recuerdas esa columna con lluvia de ideas? —Pregunte.

—¿La única sobre el hospedaje y el alojamiento?

—Sí. Le envíe la idea a mi editor. Él no lo quiso para mi columna. Quiere un artículo destacado.

—¿Eso es mejor?

—Oh, sí. Es como si yo fuera un periodista de verdad. De todos modos, ya que estas ahí sentado sin hacer nada, ¿podría seguir adelante y entrevistarte?

—No lo sé, ____*. Estoy un poco cansado.

—Podríamos comenzar, pero me detendré cuando sea que me lo digas. Esa es la belleza de que vivas aquí. Siempre podemos seguir más tarde.

Él suspiro. —Está bien.

—¡Grandioso! Voy a correr arriba y tomare la grabadora y mi cuaderno. Ahora regreso.

Me detuve en el dormitorio de mi padres, haciendo mi usual toc, toc, —¡estoy en casa!

—¿Cómo estuvo la fiesta? —Pregunto mamá adormilada.

Reí. Hay algunas cosas que nunca cambian. —Estuvo bien.

—Buenas noches, cariño. —Mamá y papá dijeron al mismo tiempo.

No me tomo mucho tiempo agarrar mis cosas de mi dormitorio. Cuando regrese a la cocina, Joe seguía allí, pero la taza se había ido. La habitación aún seguía un poco oscura.

—¿Estarías más cómodo en algún otro lugar? —Pregunte.

—Esto está bien.

—Todo correcto entonces. —Me senté, gire una página en blanco en mi cuaderno, e hice clic en la grabadora.

—Por lo tanto, es tu primera vez jugando en la liga colegial, ¿verdad?

—Correcto.

—¿Has encontrado dificultades para adaptarte viviendo con… extraños?

—No realmente. Tengo mi propia habitación, mi propio espacio. Puedo pasar un rato fuera de aquí cuando necesito tiempo para mí mismo.

—Tú siempre has vivido con chicos antes, ¿verdad? Hermanos, jugadores del equipo…

—Sí, no contando a mi mamá.

—Para esta pregunta ella no cuenta.
Él sonrió. —Entonces sí. Siempre he vivido con chicos.

—¿Lo has encontrado diferente teniendo chicas en la casa?

Él aclaro su garganta. —Oh, sí.

—¿Te importaría colaborar?

—Nop.

Levante mi mirada de mi escritura. —Sí no colaboras, va a ser un artículo muy corto.

—Mira, ya he metido la pata una vez esta noche.

—¿Estás implicando que es duro vivir conmigo? ¿Es por eso que no haces más comentarios? ¿Por qué crees que me ofenderé? No lo voy hacer.

—No más comentarios.

Suspire, con la tentación de tirar la grabadora hacia él.

—Bien, entonces, sigamos adelante. ¿Cuál ha sido el aspecto más difícil de vivir con nosotros?

Hubo un silencio, pero del tipo donde tú puedes sentir que alguien quiere hablar, pero no lo hace. Joe era tan increíble todavía, como si estuviera pensando en el peso de las consecuencias.

—No besarte. —Dijo finalmente, en voz baja.

Mi corazón me hizo tartamudear un poco. Solo lo miré fijamente mientras la grabadora continuo corriendo, buscando un sonido.

Mi mano estaba temblando mientras la alargaba y la apague.

—Pero tú me besaste, y dijiste que fue un error.

—Porque involucrarme contigo es una mala idea, en muchos niveles.

—¿Te importaría compartir uno de esos niveles?

—Estoy viviendo en tu casa. Tus padres me están dando un techo sobre mi cabeza. Tu mamá trae comida extra a casa. Estoy aquí únicamente por el verano. Entonces regresare a la escuela —él alarga la mano, quitando el hielo de su hombro, y lo pone a la mesa—. ¿Y Nick? Después que fuimos a Dave & Bubba´s, él sale del montículo y me dice que cree que eres ardiente. Y sé que a ti te gusta él, así que estaba dispuesto a hacerme a un lado.

—¿A un lado?

—Dispuesto a sacrificar mi felicidad.

—¿Tú piensas que serías feliz estando conmigo?

—¿Estas bromeando? Eres linda, contigo es fácil hablar. Amas el beisbol. Me haces sonreír, me haces reír. Y ni siquiera vamos a mencionar lo mucho que me gusta besarte.

Él solo lo había mencionado. Y ahora estaba pensando sobre que no debería haberlo hecho.

—Tiffany te hace reír.

—Oh, sí, ella es divertida, dice algunas cosas realmente tontas, pero creo que ella es más lista de lo que deja entrever. Tú, tú eres honesta. Eres generosa. Hablándole a tus padres sobre proporcionar un hogar para un jugador.

No tan honesta, no tan generosa. Mis razones para querer un jugador en casa eran puramente egoístas. Quería alguien que me introdujera en el equipo, introdujera el equipo por mí.

—Vamos a regresar a lo que sucedió en el estadio de beisbol —dije—. Porque todavía no lo entiendo.

Él suspiro. —Mira, él me dijo que te obtendría. Yo me hago a un lado. Él te obtiene. Y ahora él está haciendo su movimiento con Tiffany. ¿Qué pasa con eso? Sé que a ti te gusta. Él es un nueve punto cinco y yo soy un seis…

—¡No! —Extiendo la mano, cubriendo su mano con la mía.

—____*, he visto tu lista esa noche en Dan & Jerry´s, cuando se cayó tu bolsa. Lo desdoble, no debería haberlo hecho, pero lo hice. Vi las puntuaciones sexis.

—No. Quiero decir, sí, te di un seis, pero lo hice porque quería darte un diez.

Él sacudió su cabeza. —Eso no tiene sentido.

—Estaba tratando de convencerme a mí misma de no darte un diez, porque es mucho más difícil vivir con un chico que te atrae viviendo en tu casa que uno que no lo es.

—Espera un minuto. Vamos a ver si lo entiendo. ¿Me diste un seis porque te guste y pensaste que eso dejaría de hacer que te guste?

—Pensé que sería raro que me guste un chico que viva en mi casa. Y le prometí a mamá que no haría eso. Me gusta el chico que vive aquí. Únicamente por eso lo hice.

—Pero tú estás saliendo con Nick.

—En realidad no. He estado besando a Nick.

Puse mis codos sobre la mesa, hundí mi rostro en mis manos. —Dios, he creado un desastre —finalmente levante la cabeza y lo miré—No soy noble. No soy como Tiffany con sus huérfanos. Hable con mi padres de patrocinar a un jugador no porque los chicos necesitaran un lugar para quedarse… lo hice porque quería un novio.

—¿Pensaste que yo sería tu novio?

—No, eso me era demasiado repulsivo incluso para considerar. Quiero decir, tú has visto mi ropa interior. He visto la tuya.
Su boca se torció.

—Pensé que me introducirías alrededor —continúe—. Haciendo cosas con el equipo. Los jugadores podrían conocerme, interesarse. Solo quería un novio.

Sonaba tan patética, tan desesperada.

—Y ahora tienes uno. —Dijo.

—Pero no sé si él es el correcto.

Cogió la bolsa de hielo, levantándose. —Déjame saberlo cuando lo decidas.

Lo miré salir de la habitación.