All Over Again [Harry Styles]. Continuación II.

Hola, me paso rapidamnte olrque no tengl tienmpo pero qrueroa decir que amé el capitulo, como todos :)

Ay CarloSSss perdon que no te comente antes estaba en el celular de una amiga YA HACE UN AÑO DE AOA????????? LAgRiMAsS.
Estoy muy DONE con Kate le quiero pegar te juro. Los mensajes de Harry ()(L)(L)(L)(L)(L)L(L)L()L)) KPOooOo en serio y más te vale que el vaya a verla porque si no te mato ok se acerca el final estoy triste chau ojala no salga Zayn ahre 
t kiero

- Buena suerte. -deseó Jenn, abrazándome con fuerza. Envolví mis brazos en su cintura, apretándola contra mi, sonriendo.

Estaba completamente nerviosa, y Jenn lo sabía. Lo notaba y tampoco dejaba de hablar de ello en ningún momento. Ni siquiera me había visto bailar alguna vez, pero ella se mantenía positiva frente al tema todo el tiempo. Tenía tanta confianza en mí que hasta yo comenzaba a tenerla.

- Probablemente esté genial, no hay que aclarárselo. -dijo May, detrás nuestro.

Solté a Jenn para abrazarla. Seguíamos sin ser cercanas, pero la quería. Y me sentía afortunada de tener a dos personas tan increíbles como ellas a mi lado, pese a todos mis engaños diarios. De verdad esperaba que algún día supieran la verdad, pero no quería involucrarlas más en mi vida; después de todo me iría, y no quería dejar atrás a más personas sufriendo.

- Almorzaremos en casa. May, Harry… y yo. Si quieres puedes venir. Harry te alcanzaría hasta tu casa luego.
- No estoy de humor para hablar con Harry, ni soportar sus estúpideces. -Jenn rodó sus ojos y continué.- Esta vez si tengo derecho a enojarme. Déjame. -musité, burlona, y May sonrió.
- Está bien. Prepárate. Llámanos si ganas. Y si no lo haces también.
- Están más entusiasmadas de lo que yo estoy. -reí y Jenn dejó un beso en mi mejilla, antes de separarse para comenzar a caminar en dirección opuesta.
- Hey, ¿eso hacen las amigas, no? ¡Suerte! -gritó, y luego miró hacia su izquierda, de espaldas a mi.- ¡Vamos, Harry!

En realidad hubiera preferido no haber escuchado su nombre, ni haber sentido su cercanía segundos después. Volteé y comencé a caminar de forma disimulada, esperando que nadie interrumpiera en las pocas calles que me separaban de mi hogar. Pero como mis deseos jamás solían materializarse, su largos dedos acariciaron mi hombro, buscando mi atención. Suspiré y volteé, para verlo enfrente mío y mirarlo a los ojos, siendo más de tres días que eso no sucedía. Sus labios se curvaron levemente y mi mirada se desvió, logrando desaparecer todo rastro de alegría de sus facciones.

- Kate…
- No tengo tiempo para esto. No tengo tiempo para discutirlo, ni quiero hacerlo, Harry. La has cagado y lo sabes. No hay nada que hablar. Sin rencores. -dije, y comencé a caminar nuevamente, mientras él me seguía.
- Pero si hay que hablar. Por favor, querría…
- No interesa. Tengo que irme y tú también. May y Jenn te esperan. Adiós.

Continué decidida mi paso rápido, y Harry no volvió a molestarme. Y, pese a que lo agradecía, me fastidiaba que no lo haya hecho. Esperaba tener que lidiar una vez más con él, esperaba sentir su mano tomar la mía para detenerme o al menos sentir algo más que un simple suspiro y sus pasos alejarse. Bien. Me gustaba que insistiera, aunque fuese cansador, en cierto punto. Me molestaba que no lo hiciera y me molestaba, a la vez, que lo hiciera. Entonces, el problema era todo mío. Lo sabía. Pero tampoco iba a aceptarlo, porque, sólo esta vez, tenía razón con lo que estaba reclamándole.
Llegué a mi casa finalmente, quitando mi abrigo y dejándolo en su lugar. Fui directamente a la cocina por algo que almorzar, y me sorprendí al encontrarme con Lily una vez más. Era raro que estuviése allí para el almuerzo, aunque podía haberlo deducido ya que ella me facilitaría su automóvil para viajar a Bradford. Luego de algunas negociaciones y sabiendo que era respecto al baile, accedió. Simplemente porque no tenía otra opción; no por voluntad propia.
Me senté enfrente a su lugar en la mesa luego de saludarla y servir mi comida. Me parecía extraña su presencia y supe por su rostro que tenía algo que decirme. Y probablemente era algo que no me agradaría. Casi seguro que se trataba de Edward. Me dediqué a observarla hasta que sus ojos celestes se posaron en los míos, otra vez revelando nuestro parecido innegable. Suspiré y ella relajó sus facciones, finalmente hablando.

- Tengo que pedirte algo.
- ¿Sobre qué? -pregunté, indagando en su preocupación.
- Tienes que llamar a tu padre...
- No. -interrumpí, antes de que continuara con su pedido.- Si necesita algo, debería llamarme.
- Escucha. -espetó, ahora algo más ruda conmigo, y su reacción de estrés me recordó perfectamente a mi.- No vamos a discutir esto otra vez. No lo llames, pero habla con su asistente. Es sobre la beca y sobre el dinero que llega a tu cuenta bancaria. Al parecer es algo insistente al respecto.
- ¿Donde está ahora? -pregunté, mi voz sonando casi en un susurro.
- Francia. Quizás viaje a Estados Unidos en la semana. Está concretando algunos negocios que aún compartimos y el dinero es realmente necesario, Katelyn. Sólo llámalo y arregla lo de la maldita beca.

Lily ya parecía irritada al respecto, y no me sorprendía en absoluto. Disimular que nuestra relación era completamente normal sólo por el dinero que Edward nos otorgaba era algo que nos fastidiaba a ambas, porque sabíamos que la hipocresía estaba latente todo el tiempo. Se levantó segundos después, finalmente tomando sus cosas. Me saludó de forma seca y ni siquiera gasté mis energías en devolver el saludo. Podía ser mi madre, pero si sólo lo interesaba el dinero y que no fuese feliz a mi forma, no tenía motivo alguno por el cual comportarme de forma adecuada con ella. Después de todo, era principalmente mi padre quien aún me mantenía y a nivel afectivo ninguno de los dos hacía su papel. Principalmente porque Lily me detestaba prácticamente desde que había nacido y mi padre había enloquecido tanto por ella que comenzaba a sentirme de la misma forma que a su ex esposa. Y no era mi culpa. En absoluto.
Intenté volver a concentrarme en lo que realmente necesitaba hacerlo ese día. Terminé mi almuerzo y corrí por las escaleras hasta llegar a mi habitación. Tomé mi bolso, y coloqué dentro ropa, y lo que necesitaría para quedarme un día completo allí. Me vestí con ropa deportiva y una musculosa blanca, cubriéndome con un gran abrigo por el frío invernal que hacía afuera. Supuse que en Bradford estaría peor, y lo confirmé cuando Mandy me envió un mensaje al respecto.
Bajé las escaleras y le avisé a Nath que estaba en camino. Envió la dirección, y reí. Como si no supiera a donde ir. Recordaba aún la primera vez que había entrado en el cuarto donde ensayábamos y cuando había visto el escenario, con el presentimiento de que toda mi vida se había armado para que esté allí en ese momento. También recordaba lo cómoda que me sentía y lo fácil que era expresarme con mi cuerpo, luego de cada ensayo. Podía recordar sin que doliera, porque era lo único en mi vida que era neutral y siempre lo sería.
Entonces, si. Estaba decidida. Me miré en el espejo antes de salir y supe quien era la que se reflejaba en el cristal. Era yo. Era la que debía ser; estaba segura de mi misma y feliz de estarlo. Estaba convencida de que daría mi máximo durante la competencia y de que haría hasta lo imposible por ganarla. No sólo por mí, sino por mi autoestima. Porque sabía que podía hacerlo… y yo iba a hacerlo.

---

Spoiler:

Subo una parte porque se me hizo tarde, pero voy a seguir escribiendo. Quizás mañana suba algo más. Gracias por los comentariosssss, y falta muy poco para que se termine. Charlie loves you♥.

ak lloran2, me encanta esta Kate decidida pero no mg q perjudique a Harry pero bueno.
ay para q no quiero q termine, voy a sufrir mucho lo re presiento!!!
dale hacela ganara kt y que Harry la este esperando ahi con flores y nada eso. Soñar se puede no?!?!?!?!
te dejo pq muero del sueño y esperaba esto para irme a dormir.

No me gusta que sea asi con harre va a llegar el punto en que el la deje y eso no le va a gustar siguela pleasee<3

OMD!!!! ERES UNA PERRA KATE COMO DESPRECIAS A HARRY ASI  EL TE AMA POR DIOS!!!
ESTOY MUY ENOJADA POR DIOS BUENO SIGUE POR FAVOR SALUDOS  :lloro: :lloro: :lloro: :lloro: :wut: :wut: :wut: :wut: :wut: :gasp: :gasp: :gasp: :gasp: :gasp: :gasp: :imdead: :imdead: :imdead: :imdead: :imdead: :jajajaj: :jajajaj: :jajajaj: :jajajaj: :jajajaj: :muere: :muere: :muere: :muere: :muere: :muere: :ñomñom: :ñomñom: :ñomñom: :ñomñom: :fuckya: :fuckya: :fuckya: :fuckya: :fuckya: :OWO: :OWO: :OWO: :OWO: :OWO:                     

Bueno Charlie tengo mucho para decir! Estuve sin comentar porque primero recuperar mi cuenta despues de que me la intentaron eliminar (esta media inactiva solo entro para leer esta novela) fue un lio y ademas sigo detestando la version movil del foro por eso nunca entro cuando estoy de mi celular solo me fijo si subiste, por eso y ademas, por estar llena de pruebas y finales no estuve comentando, pero solucione todo y tambien ya estoy de vacaciones!
Con respecto a que termine, me da un sentimiento de perdida siento que leo esto hace tanto y entro diariamente a ver si hay algo nuevo qie definitivamente voy a sentir la falta jajaja. Pero estoy amando a Kate como siempre porque amo su personalidad distinta a todas las otras que ya estarían ahí muriendose por Harry jajaja y a el lo amo acá mas que en cualquier otro lado porque es perfecto y tierno pero también tiene su carácter. En fin te felicito por terminar las clases! 
sabes que amo esta novela y me muero yayaya por otro cap!
Besos Charlieeee

Si, Harry la cagó. pero Kate no debía tratarlo tan mal tampoco jaja, esa Kate y su complicada personalidad ajshfksgakgñl De alguna forma, me cae bien. Aunque no, no tanto, pero la entiendo... No se, tengo sentimientos extraños hacia Katelyn. Y de Harry... bueno, a pesar de que insiste como la mierda, lo amo. En la novela también. Bueno, no tengo más que decir jaja.. estoy  evadiemdo hacer tareas ahora mismo xd.

Hubiese estado INCREIBLE que apareciera Louis y la viera con Harry y que se re jodiera, jaja apero bueno ya amo demasiado tu novela no se ni que digo. Seguila! beso enorme!

Doble hacia la derecha en una esquina, por inercia. Parecía manejar con tanta naturalidad que si me preguntasen cuál era el camino, no sabría como responder. Mi mente estaba mecanizada con el recorrido y sabía que estaba cerca; así que bajé el volumen del estéreo, y llamé a mi mejor amiga.

- ¿Estás llegando? Te extraño. -dijo, incluso sin saludarme. Sonreí, mientras mi vista continuaba al frente.
- Estoy a menos de cinco minutos. Yo también, Nath. -reí levemente.
- ¿Estás escuchando? -preguntó, y pude sentir su tono cálido y alegre a través del teléfono. Asentí como si pudiera verme, con una pequeña sonrisa saliendo de mi rostro.
- Si, por supuesto que lo estoy. -Nath soltó uno de sus gritos agudos y estúpidos, que sólo dejaba salir en situaciones como esa, de nerviosismo, ansiedad y felicidad a la vez.
- Convencí a Clarissa que escuchemos Britney aquí también. Aprieta el acelerador. Tenemos mucho de lo que hablar.

Cortó la conversación y solté mi móvil sobre el asiento vacío a mi lado. Volví a subir el volumen y sonreí una vez más. Recordé el momento en que Britney Spears se había convertido en nuestro ritual antes de cada presentación, porque fue precisamente una de sus canciones la que bailamos por primera vez juntas, y fue el comienzo de nuestra amistad. Y podía perder todo lo que tenía, pero sentía que perder a Nathalie me dolería incluso más que todo. Ella era la que solía darle razón a todo, y la que había logrado que mi autoestima no se dirigiera por caminos equivocados y hasta peligrosos. Ella me había salvado de mi misma, o al menos había logrado distraerme de esa destrucción. No podía estarle más agradecida, ni podía sentirla más cercana a mi.
Aparqué finalmente en un estacionamiento semi-vacío aún. Tomé mi bolso, y me adentré en el lugar utilizando la puerta trasera. Las personas circulaban por todo el lugar, entre preparaciones escenográficas, arreglos de sonido y cada modificación para que el espectáculo, precisamente, sea un… espectáculo. Un show que las personas pudieran disfrutar, repleto de sentimientos y expresión al máximo. Porque eso era, después de todo, arte. Pura y en su mejor forma, si se hacía correctamente. Eso era lo que me gustaba, a decir verdad. Saber que podía dar absolutamente todo de mí y abandonar cada recuerdo doloroso o cada momento de plenitud con unos simples movimientos. Conmover a quien me viera. Liberarme de alguna forma.
Subí las escaleras aún sonriendo y no podía sentirme más convencida de lo que estaba haciendo. Doblé a la izquierda, y encontré el salón de nuestro ensayo previo al final sobre el escenario. No necesité buscar a Nathalie con la mirada porque ella ya se había avalanzado sobre mí antes de que pusiera un pie en el lugar. La abracé devuelta, sonriendo y apretándola con fuerza contra mí. Literalmente, no sabría como vivir sin ella. Y no entendía como en mi mente se había cruzado alguna vez abandonarla, por más que fuera por su bien. Era egoísta pensarlo de esa forma, pero no podía alejarla de mí bajo ningún precio.

- Estoy demasiado emocionada que estés aquí. Por un momento, pensé que no vendrías…
- Estoy aquí y… ¿sabes? Me fascina estarlo. Tengo que admitir que realmente había extrañado este lugar.
- No. -negó, sonriéndome.- Este lugar te extraño a tí. Tienes a todo el mundo hablando al respecto y Alexa no deja de presumir que ella estará al frente. En verdad piensa que eso durará. -dijo, casi con pena. Quise abrazarla, porque adoraba su lado sarcástico.- En cuanto Clarissa te vea…
- Si, en cuanto la vea, probablemente la deje sin piernas por no volver en cuatro meses y aún así tener un lugar reservado precisamente al frente.

Escuché su voz rasposa detrás nuestro. Clarissa, ahora rubia, se encontraba observándome con desdén y cariño a la vez, porque ese era el tipo de miradas que, como entrenadora, solía dar. Exigencia y pasión era lo que pretendía y en mí solía encontrarlo; porque cuando ella me reclamaba que perfeccione algún movimiento por una hora, simplemente lo hacía dos. Porque la auto-exigencia estaba en mi sangre y no podía permitir, bajo ningún punto de vista, cometer algún error. Ella lo sabía; y suponía que por eso era su preferida.
Me acerqué a ella y la abracé. Esperaba que no devolviera el gesto afectivo, pero me sorprendí cuando sí lo hizo, de forma parcial. Se separó de mí algunos segundos luego, y me sonrió.

- Se que me has extrañado, Cla. -palmeé su hombro, y ella se alejó.
- Vamos, tienes que mostrarme cuales son tus debilidades. Si lo haces bien, tienes el lugar de Alex.
- Alexa. -corrigió Nath, aguantando su risa. Reí ampliamente por su rostro, y Clarissa rodó los ojos.
- Como sea. Sígueme, te diré quien es tu pareja para el segundo acto.

Corrí para alcanzar su paso, y frenó de repente, logrando que mi frente choque con su espalda. Chasquó sus dedos para que mejore mi postura y así lo hice, completamente desacostumbrada a su regimen casi militar con mi columna vertebral. En frente mío y siendo señalado por su mano, se encontraba un chico, algunos años mayor que yo, estirando los músculos bien formados de su pierna, la cual estaba en alto sobre una barra. Respiró y retomó la posición, sin siquiera dirigirle una mirada a Clarissa. Ella carraspeó, casi refunfuñando, y el bajó su pierna de la altura, sacudiéndola para evitar la presión.
Bien, era gay. Cien por ciento gay. En su forma de caminar hacia nosotras podía verse, igual que en su posición y en su voz afeminada. No sabía si eso era bueno o malo, pero preferí ignorar el hecho y conocerlo al menos por cinco minutos antes de comenzar a practicar. Le sonreí, pero él no devolvió el gesto.

Genial. Era un buen comienzo.

- ¿Qué? -preguntó, mientras tomaba alguna de sus cosas y las dejaba sobre el suelo.
- Ella es Katelyn. Ustedes dos bailarán en Something Stupid juntos. Iniciarán juntos y cerrarán ustedes junto con el dueto de Nathalie y Samuel. Coordinen los cambios. Stanley, trabaja con ella. Sin cambios ni reproches. -agregó rápidamente, cuando lo vio abrir su boca en reclamo. Mi ceja izquierda subió y mi ceño se frunció. ¿quién diablos se creía para querer evitarme de esa forma?- Ella puede hacerlo mejor que cualquier otra aquí. Incluso mejor que tú. Así que deja los dramas de estrella y trabaja.

Entonces, si. Amaba a Clarissa más que a cualquier otra persona en el mundo entero y adoraba su horrendo carácter. Si yo creía no tener filtro, ella ni siquiera pensaba lo que iba a decir antes de decirlo realmente. Y más aún con sus alumnos que se creían estrellas cuando estaban bailando en un competencia que ni siquiera era internacional.
Se despidió luego de hacerle un gesto que no comprendí y Stanley gruñó. Volvió a ordenar sus cosas y pensé que era una especie de señal de nerviosismo. Todos en el ambiente la teníamos, y me gustaba verlo de esa forma por lo arrogante que parecía ser. De todas formas, me acerqué a él, buscando obtener su atención, para comenzar a ensayar de una maldita vez y alejarme de él.

- Soy Kate. -dije, sonriéndole de forma hipócrita. Me gustaba hacerlo con gente que realmente lo merecía.
- No me interesa. ¿Piensas que puedes seguir el ritmo? -preguntó, aún sin mirarme, tomando agua de su botella. Encarné una ceja, mirándolo sinceramente sorprendida.
- Si, claro que puedo hacerlo. ¿Crees que Clarissa me daría el lugar si no fuera así? -pregunté, de forma retórica, indignada con su trato.- ¿Qué sucede contigo?
- Sucede que, linda… Aborrezco a las personas como tú. -soltó, mirándome. Bien. Era más gay de lo que parecía al principio y no tenía nada en contra de ellos, siempre y cuando no tuvieran esa condenada actitud de diva persiguiéndolo por todos lados.
- ¿Como yo? ¿Y qué sabes de mí? -cuestioné, cruzándome de brazos.
- Se que tienes una reputación bastante complicada aquí y que la mayoría del alumnado te tiene respeto, por no decir desprecio o envidia la mayoría de ellos. -espetó y tomó mi cintura, mientras Robbie Williams comenzaba a cantar gracias al botón que él había apretado.- Se que te han drogado en fiestas y que te has acostado con medio instituto Tong. También que no has asistido a ningún ensayo. -comenzó a moverse, y mi concentración aún continuaba en sus palabras, moviendo mis pies a su ritmo.- Y con eso me es suficiente, cariño, para saber que personas como tú son las que suelen ser acomodadas por afectos o dinero, o simplemente se creen que el talento lo es todo.
- ¿Y no lo es, al final del día? -pregunté, y tropecé, segundos después. Sabía que no había sido mi culpa, sin la brusquedad con la que él estaba manejándome, además de la rapidez, en destiempo con la música.
- No es nada sin la técnica. -finalizó, sonriendo altanero.
- Bien, amigo. -me acomodé una vez más, mirando hacia nuestros pies, y moviendo mi cuerpo con mayor conciencia.- Yo también detesto a las personas como tú. -lo observé, mientras él seguía mis pasos.- Los que creen que la técnica lo es todo, y que la práctica te hace perfecto. Y principalmente, detesto lo grosero que puedes ser, sin siquiera conocerme. Supongo que perteneces al grupo de los que envidian y desprecian. Gracias por eso. -dije, y quise pisarlo con fuerza por su maldita sonrisa soberbia.

Clarissa nos interrumpió en el preciso instante en el que Stanley iba a responderme de forma ofensiva, y me separé instantáneamente, acercandome a ella con una sonrisa. Bien, él podía estar entre las personas que detestaba dentro de mi mundo. No tenía necesidad de recordar todo lo que había hecho allí, ni tampoco hablar con tanto desdén de mis habilidades. Simplemente no era correcto ni educado hacerlo.
Practicamos una vez más, mientras ella corregía cada posición del cuerpo que le parecía incorrecta o extraña visualmente. Después de eso, abandonó su lugar a nuestro lado para avisarle al grupo de apróximadamente treinta bailarines, que bajaríamos a ensayar en el escenario una última vez, antes de cambiarnos finalmente. Me acerqué a Nathalie, y me sonrió, abrazándome por los hombros mientras caminábamos hacia la salida.

- Stanley es una perra, pero tiene talento, irás bien con él. -habló y le sonreí.
- Mientras no me hable, no tendré dificultad. Odio a las personas como él.
- Como sea. ¿Sabes? Vas a amar el vestuario.
- Déjame adivinar… ¿los has diseñado tú?
- Bueno… si. Precisamente por eso son geniales. -dijo, y reímos juntas por su ego.

Y con cada segundo que pasaba con ella riendo, más expectativas tenía y más ansia sentía.


Ya. Los ensayos había terminado.Estábamos caminando detrás del escenario, en el salón común que utilizabamos de vestuario y para dejar nuestros bolsos. Si decía que podía caminar de forma correcta y que mi pulso no estaba descontrolado, estaba mintiendo. Me encontraba extremadamente nerviosa, al borde de temblar. Nathalie ya no sabía cómo mantenerme tranquila, y no lo ayudaba recordándome que habría representantes de universidades observando el espectáculo.
Llegamos finalmente a lo que podíamos denominar un camarín conjunto de todas las bailarinas. Había percheros gigantes con pequeños trajes negros que parecían mallas de danza clásica. Observé a Nath y tomó mi mano para acercarme hacia ellos, buscando entre todos el que tenía mi nombre. Acaricié la tela algunos segundos, y la miré, su rostro expectante por mi reacción.

- ¿Te gustan? -preguntó, con esperanza.
- Son preciosos, Nath. Eres realmente talentosa con esto. No se me hubieran ocurrido los detalles…
- Gracias. Quiero ver como queda. Los de las parejas los diseñó Clarissa así que no esperes demasiado… -rió, y acompañé el sonido.- Son vintage. Supongo que no están mal. -su iPhone vibró en su mano, y desvió su atención.- Es Mandy. Pruébatelo.

Se alejó, atendiéndole a nuestra otra mejor amiga con una alegría contagiosa. A Nathalie realmente le emocionaba todo eso y era genial verla de esa forma tan radiante. Volví mi atención al pequeño vestido, el cual tenía un pequeño short dentro por su longitud. Suspiré, con una sonrisa en mi rostro, y entré a uno de los cubículos para cambiarme. Nath no tardó más de algunos minutos en volver y obligarme a salir.

- Me gusta. Me gusta, demasiado. -dije, mientras me miraba al espejo y acomodaba los últimos detalles. Ella sonreía.
- Voy a cambiarme. Mandy está subiendo.

No terminó su frase que ella apareció, mirando todo su alrededor, buscándonos. Me acerqué hacia ella para abrazarla, y devolvió el gesto aunque supuse que ni siquiera había visto mi rostro. Nath, detrás nuestro, se dirigió a cambiarse.

- India. Te he extrañado.
- Hey, yo también. ¿Qué es esta demostración afectiva? -preguntó, desconfiada, y reí.
- Te quiero, ¿no puedo demostrarlo? -pregunté y me separó.
- O bien te has drogado para no estar nerviosa o estás tan nerviosa que se te olvida con quien hablas. -sonrió.- Tengo noticias. Zayn está viniendo.
- Lo sé… hemos hablado la semana pasada. Me ha dicho de… esa chica.
- Kylie. Si. -afirmó, y me observó, pero mis ojos cayeron al suelo. Suspiró, antes de continuar- No la conoces, si eso querías saber. Y no está interesado en ella, tampoco. Pero ella no sería una mala opción, realmente…
- Está bien. No quiero hablar de esto. Se que sería lo mejor que saliera con ella. -solté, y fingí mi sonrisa una vez más. Saber que él estaría afuera, no haría más que generarme aún más pánico escénico, de ese que jamás había experimentado bailando.
- No ahora, pero ya deja de pensar en el resto. Piensa en tí, de vez en cuando, y deja de suponer lo que es mejor para el resto porque no siempre lo es. -aconsejó, dura como siempre era Mandy, y rodé mis ojos.
- Como sea. ¿Qué más?
- Daniel está aquí también. Vino por Nathalie y me pidió por favor que no le diga y blah, blah, blah. -gesticuló, rodando sus ojos y reí.- Son insoportables. En verdad necesitan admitir que no pueden estar sin el otro.
- Él no va a hacerlo, pero Nath está a punto de confesarlo.
- Lo sé. Es cuestión de tiempo. Uh, algo más. Harry está en camino, también.
- ¿Qué? -pregunté, calmada. No había entendido su última oración y juraba que mi cabeza estaba comenzando a colmarse de su nombre, logrando confundirme.
- Um, si. -rió, nerviosa.- Harry está llegando.
- Espera, ¿qué?
- Bien, creo que no tienes problemas de audición, Kay. -bromeó, y quise destrozarla con mi mirada. Entendió mi mensaje, y ni siqueira me observó luego de eso.
- ¿Cómo diablos sabe que es aquí? Hay otros teatros donde pudo haber sido. -hablé, como si fuese Sherlock Holmes en una de sus malditas predicciones, y así fue como la conclusión llegó a mi mente alguien, se lo había dicho.- ¡Nathalie! -grité, y ella salió del vestuario, cambiada y con su maquillaje por la mitad.- ¡¿Le has dicho a Harry donde bailábamos?! -pregunté, exasperada, y ella apoyó una mano en mi hombro.
- No, no lo hice. Cálmate, Katelyn. Relájate.
- ¡No voy a relajarme! ¡Mandy! ¿Por qué le dijiste? -cuestioné, girándome una vez más.
- No fue intencional, um… Su primo me envió un mensaje y realmente no pensé que sería por Harry o en realidad si lo hice pero me dio igual, si, eso fue.
- ¡Mandy! -volví a gritar y ahora si, estaba completamente alterada.
- No pensé que sería la gran cosa, Kay. No lo es, en realidad. Relájate. Lo harás bien de todas formas.
- Tiene razón. -apoyó Nath, mientras continuaba maquillándose.
- No es eso. Estará Zayn aquí. No quiero más problemas ni preguntas ni nada… estoy cansada. -solté, sentándome y mi mejor amiga me observó con disgusto.
-Okay, yo estoy cansada. Para con eso, Kate. Simplemente estará aquí, mirará, te saludará y nos iremos, como siempre, a cenar a algún lugar. No tiene por qué meterse en eso y no es un drama. Deja de hacer que lo parezca. Y maquíllate de una vez porque en menos de media hora comienzan a presentar grupos.

Bueno, esa era mi mejor amiga. Quizás era algo insensible la forma en la que lo decía, pero tenía razón. Estaba allí para hacer lo que más amaba en todo el mundo y nadie iba a arruinarlo, al menos no mientras estuviera sucediendo. Mandy palmeó mi hombro, liberando algo de presión por la discusión con Nathie, y murmuró una despedida. Supuse que iba a sentarse con Dan y Zayn, así que obedecí a mi mejor amiga y comencé a maquillarme a su lado. No estábamos hablando, y ella estaba concentrada en su trabajo, casi finalizando. Abandoné mis elementos una vez que ella había terminado, abrazándola. Pude ver a través del espejo como fruncía sus labios, pero finalmente los curvaba.

- Gracias. -susurré, aferrándome a su cuello.- Te ves increíble y adoro los atuendos.
- No quiero que pienses en nada ahora, ¿está bien? Eso es lo que hacemos. Ambas sabemos por qué comenzamos a hacerlo y que es lo que queremos. Los críticos de afuera no interesan, porque sabemos que conseguirás una beca de todas formas.
- Y tú lo harás también. Juntas. -espeté, y ella tomó mi mano en forma de afecto.
- Si. -dijo, frunciendo sus labios otra vez. Sabía que ella no creía en eso, pero yo tenía certezas de que Nathalie sería convocada.- Como sea. Bajaré, ¿está bien? Termina, respira y ve al segundo cuarto. Aún quedan quince minutos hasta que comience, y un grupo en el medio. Te espero.

Apretó mi mano antes de salir de la habitación. Quedaban aún cinco o seis personas, ordenando y terminando de arreglar sus imágenes. En no más de cinco minutos, todos se habían ido y mi maquillaje estaba en su lugar. Ajusté mis zapatos, y contemplé finalmente mi reflejo. Detalle por detalle, milímetro por milímetro. Interrumpiéndome, sentí unos pasos detrás de mí. Volteé para ver a mi entrenadora, sonriéndome.

- Quedan diez minutos. -apuró, su voz rasposa, y con su característica elegancia al caminar. Siempre envidiaría eso de ella, porque me parecía completamente admirable.
- Lo sé.
- Deberías bajar.
- Lo sé.
- Deja de pensar, Katelyn. -habló, y se posicionó a mi lado. La observé.- Sabes que estás hecha para esto. Nathalie y tú fueron las primeras por las que pidieron hablar los representantes de las universidades. No pienso decirlo en otro momento, pero estoy orgullosa de ambas. -bromeó y reí, bajando mi vista, para que no observara mi debilidad. Sabía que ella detestaba cuando llorabamos por algo tan estúpido como una inseguridad.- Principalmente de tí. -levanté mi mirada húmeda.- Katelyn, no has estado haciendo ningún entrenamiento, ni practicando absolutamente nada, y en sólo un mes tienes un lugar al frente y merecido por completo. Y me lo esperaba. -aceptó, sonriéndome.- Esperaba verte aquí luego de medio año y que sigas como la última vez e incluso mejor, pese a que mucho haya cambiado a nivel emocional. -hizo una pausa, y tragué saliva para evitar llorar.- Confío en tí, porque se que lo lograrás. Me recuerdas a mí a tu edad y eso te da toda la certeza de que ganarás y también lo harás en marzo.

La abracé, porque no quería que hablara más. Devolvió el gesto y no recordaba realmente haber abrazado a alguien con tanta emoción en el último tiempo. Clarissa sólo me conocía hacía dos años y sabía leerme como un libro abierto. Ella sabía que no había bajado porque no me encontraba segura de mi misma, y jamás lo había estado desde que me había ido. Pero sólo sus palabras me aliviaron, y me separó, mientras limpiaba la única lágrima que había salido de mis ojos, gracias a la fuerza que había invertido en no derramar más de ellas.

- Dos minutos y te quiero abajo. No estoy bromeando ahora, Kate. -advirtió, sonriéndome y acarició mi hombro descubierto, antes de marcharse.

Volví mi vista al espejo, observando el reloj que estaba por encima. Mentiría si dijera que no era perfeccionista, porque, por desgracia, lo era. No me sentía cómoda completamente con mi imagen, pero bloquearía todo pensamiento negativo en esa instancia. Porque necesitaba hacer las cosas bien. Recordé una vez más las palabras de mis amigas y de mi padre cuando era pequeña, y también las más recientes de Clarissa. La única forma en la que podría hacerlo, era a través de la concentración. Concentrarme. Encontrar mi centro. Buscar mi objetivo y perseguirlo. Poniendo toda mi energía en ello. Si. Eso era lo que necesitaba. Cerré los ojos y me forcé a bloquear mi mente, y sólo mantener mi energía al máximo. Los abrí minutos después y sonreí a mi reflejo.

Estaba lista.

---

Spoiler:

Si se quejan porque es corto las castro saben. Media pila con los comentarios. Son lo más, igual. No se cuando vuelvo a subir pero pronto, seguramente. Porque el fin de semana voy a desaparecer por mi fiesta de egresados y otros días en el medio quizás tambien. Gracias por todo. Charlie loves you.

wow!!!!!! sigue nena quiero saber que pasa zayn y Harry juntos omd!!! sigue saludos
oye tu sabes algo de si Harry tiene novia???
saludito y besito

Y mi bebe harry?''''''''

PERDON QUE NO COMENTE ANTES AY LA PUTA Q TE PARIO SE ME REVOLVIO EL ESTOMAGO TE ODIO CHAU NO TENGO PALABRAS QUIERO GRITAR LLORAR NO SE LA AMO MUCHO OJALA GANE SE LO MERECE AUNQ ES UNA PERRA OK DE TODAS FORMAS A ELLA Y A NATH LAS AMO MUCHO T JURO Y ZAYN Y HARRY FALTA LOUIS BOLUDA NO LO PUEDO CREER ME ESTOY RIENDO NERVIOSAMENTE, OJALA NO SE ENCUENTREN Y SEAMOS TODOS FELICES SI DALE TE AMO CHAU