Re: You steal my pain. (Draco Malfoy y tú)

por **C.J. Potter** Lun 29 Jul 2013, 10:34 am

Milapotato escribió: AJNSDSKJDNFSKJNFKJSDNSDF, ¡volví!, pero no traigo capítulos. ah
Quiero saber (esto me carcome la cabeza siempre, en serio) si hay lectoras fantasmas, ¿las hay? ¿Eh, eh? Ah, quiero saber :c
REPÓRTENSE, MIERDA.
Con mucho amor, Mila <3

JAJAJAJAJAJAAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA, esa es la actitud Mila. Un amor vos :33

Che, sabes que te quiero y todo pero, ¿para cuándo el cap? SIGO ESPERANDO MILA, SIGO ESPERANDO.

Eso no más :3 Besitos con sabor a James.

por **C.J. Potter** Lun 29 Jul 2013, 10:36 am

PASÉ DE PÁGINA, PASÉ DE PÁGINA!!! Nunca me pasó eso :')

AGRADECEME. ah.

P.C: Cuando vi tu nove en la primera página pensé que actualizaste, pero entré y NADA. Así no Mila, así no. ah

P.C.2: Eso de nuevo: seguila. Ya. Ahora. Now, now.

Besos de nuevo :33

por **Milapotato** Mar 30 Jul 2013, 12:08 pm

Ay, ¿extrañan mi novela? ah JAJAJAJJAJA.
Soy un desastre :c Creo que las amo demasiado como para no haber abandonado la novela todavía.
Ahora mismo me pongo a escribir (o al menos intentaré)
Las amo, yeguas <3

Pd: gracias, Ju, por pasar de página, eres la mejor. AHÍ TE AGRADECÍ. ahq
Pd2: Disfruto de tus besos con sabor a James :3

por **TamiaUnbroken** Dom 18 Ago 2013, 12:38 am

Holaaaa, me encanta tu nove! :D
Siguelaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa! :) Por favor! :3

por **#Naty** Dom 18 Ago 2013, 10:51 am

Paso para informarte que sigo atenta a que subas cap ¬¬ Besos xx

por **C.J. Potter** Miér 21 Ago 2013, 11:16 pm

Milaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa!! (ah, te plagié ;))

Te extrañoseo lok :c (No, no existe esa palabra). Cuándo pretendes seguir la novela? En el último capítulo no apareció Draquis, y comienzo a extrañarlo -__- No hagas enojar a Julie, Mila.

Ah, eso no más. A falta de Facebook y Twitter, una soga en el cuello :DD JAJAJAJAJAJAJAJA, pero como no soy una loca suicida, es Only Wn mi método de comunicación (?) Ahora que no tengo conexión con el mundo me acuerdo más de las novelas que leo. Es muy terapéutico.

Entonces... Eso (?

Me voy, dejo de llenar espacio xD Beshos turra ;3 (<<< ES UN GATITO TIERNO QUE TE GUIÑA UN OJO, AMALO! ahq. Me hace falta un celular con Twiter para descargar esta cosa de loca).

por **Ally Malfoy Black** Jue 22 Ago 2013, 2:19 am

ok, me perdi y por mucho tiempo TT^TT lo siento pero es ke mi PC se descompuso hace meses y la arreglaron hace poco y acabo de entrar a clases y es una verdadera pesadilla, bueno te keda genial la nove y espero y la sigas pronto...

Au Revoir

por **Milapotato** Jue 19 Sep 2013, 4:56 pm

Chicas, ¡no lo van a creer! ¿Se los digo? ¿Sí? ¿No? Bueno, se los digo.

¡MILA TRAJO CAPÍTULO!!!!!!!!!!!!!!!!

¿No se lo creen? Bueno, les dejo la prueba aquí abajito.

Pero primero, MIL PERDONES!!!!!!!!!!!!!!! Las re mil quiero, chicas, sepan perdonar esta alma buena. Si no les gusta el cap háganmelo saber, así no la sigo más. ahno, mentira, si no les gusta diganme y veo si puedo arreglar o tratar de mejorar las cosiñas. ¡A leer! Si quieren, y si siguen...

Pd: Mina, te robo el gif. Love ya <3

Bai.

You steal my pain. (Draco Malfoy y tú) - Página 18 Tumblr_ml5xqnxe9e1rtzxnco1_r2_500

Capítulo veinte: Nuevas cosas.

Suspirando, suelto el lápiz sobre la mesa.

—Otro para la colección —murmuro, agarrando la hoja y estudiando la perfección que alguien puede poseer hasta en dibujos.

Los rasgos del rostro de Draco están trazados sobre ella. Elegantes y finos. Su mandíbula perfecta, sus labios que reclaman ser besados a cada momento y sus ojos, profundos, penetrantes y hermosos. Tan grises como un cielo nublado. Un perfecto cielo nublado. A diferencia de los otros dibujos, es que en este sonríe. Sonríe de una manera tan embriagadora, tan perfecta y tan seductora.

Suelto otro suspiro y cierro mi cuaderno de dibujos. Pronto necesitaré otro, este está a punto de explotar de tantas hojas trazadas con las imágenes de cualquier cosa o persona que encuentre y guste. Como el que hice de mamá. No tengo ni idea cómo logré hacerlo, sólo recuerdo haber agarrado un lápiz, pensar en ella y en cuanto la quiero, y ¡bam! Allí estaba ella, delicada y elegante, algo que jamás podré obtener de ella.

Un golpeteo en la ventana logra hacerme dar un respingo. Miro hacia ésta para luego ver una lechuza con una carta atada a sus pequeñas patitas. Con mi ceño fruncido, preguntándome de quién será, me levanto de la silla y me dirijo hacia ella. Abro el cristal y dejo que entre. La lechuza se posa sobre la mesa en la que estaba ubicada dibujando hace unos segundos y agita sus alas, ululando. Tomo el pergamino y lo extiendo, para luego leerlo:

Querida ______,

Pasaré por usted a las cinco p.m. para llevarla a la Madriguera de los Weasley, prepare sus maletas y despídase del señor y la señora Fanning.

Responda si cambia de opinión mediante la lechuza que envió esto.

Atentamente,

Albus Dumbledore.

Oh, al fin. He esperado esto por tres días. Tres malditos días en los que tuve que vivir en esta casa, encerrada en mi cuarto, sola, dibujando y escuchando música. Sólo bajaba para cenar. Sólo en ese momento les daba el lujo a los mentirosos de verme la cara, al menos una parte de ella, porque jamás los miro a los ojos y siempre los esquivo. Han intentado hablar conmigo, explicarme, pero yo sólo los ignoro y subo de vuelta hasta mi cuarto donde escribo cartas a mis amigos preguntándoles cómo están y cosas triviales.

Tina dijo que al final no podré pasar estos meses en su casa debido a que surgieron unos problemas de los cuales no quiso contarme, dijo que era algo delicado con su familia, y está bien, no puedo presionarla con algo así cuando ella tampoco lo hace al no haberle contado aún sobre mi verdad. Aunque me debo admitir que cuando leí que no podría pasármela con ella, me sentí mal, realmente quería pasarla bien con ella y su hermano, en vez de estar aquí. Pero luego se pasó, gracias a que Dumbledore mediante una carta que había conseguido ya un hogar para habitar: Los Weasley. Y realmente me emocioné, ya que podría irme de aquí y estaría con Ron, Ginny y los gemelos, y apuesto a que también irán Harry y Hermione.

También le he enviado cartas a Draco, preguntando cómo está y qué hace, y diciéndole que lo extraño. Pero no ha respondido a ninguna, lo cual me molesta, frustra y me preocupa. Si bien no es cosa de vida o muerte que conteste a su tonta e insoportable novia, pero al menos tiene la obligación de responder a una, ¿no?

Y lo extraño tanto que me empalago hasta a mí misma. He estado dibujando en estos días cada parte del rostro de Draco que recuerdo, cada gesto, sus muecas, su forma de arrugar la nariz cuando veía a un Gryffindor y rápidamente borraba eso al ver de la manera severa en que lo miraba, regañándolo por ser tan malo. Ya van al menos cinco dibujos. Estúpido amor, y yo que creía que éste jamás llegaría luego de que mi ex novio, Ian Brand el idiota-lame-culos, como lo llamábamos con mis amigas al ser que siempre estaba tras los profesores y halagándolos para conseguir buenas notas, me metiera los cuernos con otra de las princesitas de Beauxbatons. Realmente odio a todas las chicas, excepto mis amigas Francesca y Claire, pero esta chica no era tan zorra como las demás y también había sido engañada como yo, por lo que no la odié tanto y sentí lástima por ella al ser tan idiota como yo. Así que, cuando nos enteramos, nos pusimos manos a la obra para crear un plan para humillarlo tanto como él lo hizo con nosotras. Y vaya que funcionó. Luego de haberle pagado a uno de los chicos para que robara sus ropas mientras él se duchaba en los vestuarios luego de entrenar quidditch, y de haberle encantado el agua para que saliera de un color rosa chillón –que dejó teñido su cuerpo por completo-, jamás volvió a meterse en nuestras vidas. O bueno, al menos en la mía, quién sabe de la pobre Sophie.

El ulular de la lechuza llama mi atención y entonces recuerdo que tengo que responderle al profesor. Dejo mis pensamientos de lado y vuelvo a sentarme en la silla, agarrando pergamino y tinta, para luego escribir afirmando que iré, que no me arrepiento, estoy decidida, y que lo espero para salir de esta… casa. Enrollo el pergamino y lo ato a una de las patas de la lechuza. Abro nuevamente la ventana dejándole salir y veo cómo sale por esta volando. La veo hasta que se pierde de mi vista y entonces me tiro a la cama boca abajo y con los brazos extendidos a mis lados, ocupando la cama de dos plazas que tengo.

Me encantaría ser como una lechuza. Volar, ser libre, o al menos sentirme, ya que la mayoría de ellas trabajan para llevar las cartas, pero qué más da, debe ser hermoso volar. Sin preocupaciones. Volar, volar, volar.

Otro golpe se escucha, pero este proviene de mi puerta. Bufo al saber que son Katherine o Jace, o ambos. Entierro mi cara en las colchas y trato de ignorar el suave y frecuente golpe que ocasionan sobre el pedazo de madera. Con la paciencia ya acabada, me levanto de golpe y abro de manera brusca la puerta. Me sorprendo al ver que no hay nadie, si apenas recién habían golpeado. Miro a los costados en busca de algún alma, pero nada, los pasillos están solitarios y aburridos con sus paredes marrones. Gruño al pensar en que fue el niño que es el diablo en persona que tengo como prim… sobrino de Katherine. Ese niño que es peor que yo con las bromas, y se la pasa siempre aquí, ya que es el favorito de Katherine. Bien, pues yo no sé por qué es así, ese pequeño es un demonio que sólo sirve para acabar con la paciencia de las personas.

Estoy dispuesta a dar un paso hacia atrás y cerrar la puerta, pero me detengo al ver que en el suelo hay una caja plateada con un moño sobre ella. Frunzo el ceño. Hecho otro vistazo al pasillo y lo veo completamente desierto. Agarro la caja con mis manos y me regreso a mi habitación. Me siento sobre la cama, con aquel cuadrado gris sobre mi regazo, y vuelvo a fruncir el ceño. ¿Qué es esto? No, espera, la pregunta sería ¿Quién me trajo esto?

Con sumo cuidado deslizo la cinta que mantiene cerrada la caja, esperando que lo peor salga de ella. Pero no es así. Un pequeño libro color salmón se sitúa dentro. Se ve delicado y viejo. El material que lo rodea parece ser cuero y muy bien cuidado. Me atrevo a pasar mi mano sobre este para acertar a mi duda. Lo saco con extremada delicadeza y lo contemplo, tomo la tapa y abro. Esto me sorprende y me emociona.

Propiedad de Madeleine Marcie Gray.

La letra sobre las viejas hojas de pergamino es redonda, elegante, perfecta. El diario de mi madre es hermoso, me pregunto cómo habrá durado tantos años. Pero, esperen, ¿cómo llegó esto hasta aquí?

—¿Quién trajo esto? —pienso en voz alta, totalmente concentrada en el pequeño diario.

—Yo, señora —una voz chillona me sobresalta. Ahogo un grito y llevo una mano a mi corazón, que late a gran velocidad debido a la sorpresa—. Lo siento si la asusté, señora —vuelve a hablar la elfo, arrepentida.

—¿Qué haces aquí, Winky? —pregunto realmente confundida, una vez que logro regular mi pulso. ¿Qué hace mi elfo favorito en mi habitación?

—Vine a traerle eso —señala al diario con sus pequeñas manitos.

—¿Tú lo trajiste? —pregunto incrédula. ¿Qué rayos hacía Winky con el diario de mi madre?

—El profesor Dumbledore me dijo que se lo traiga —asiente con sus grandes ojos bien abiertos—. Olvidó dárselo en Hogwarts, así que me ordenó a que se lo traiga yo misma a usted —sonríe tímida.

Le devuelvo la sonrisa, y dejo el diario sobre la cama para luego abrazar a Winky. Sus bracitos me rodean, devolviendo el gesto. Nos separamos y ambas nos sentamos en la cama. Nos quedamos charlando un largo rato, hasta que la linda elfo me dice que tiene que marcharse, así que nos despedimos y nos prometemos vernos en el colegio al regresar. Vuelvo a quedarme sola en mi cuarto. Miro el diario y rápidamente lo tomo con mis manos, ansiosa, vuelvo a deslizar mis dedos sobre la cubierta y comienzo a hojear con delicadeza por si el viejo papel se rompe.

Después de un largo momento de nostalgia, vuelvo a tirarme a la cama muy cansada. Pasarme unas tres horas leyendo el diario me dejó agotada. De las tantas hojas que leí, me di cuenta de que le encantaba escribir, o bueno, al menos eso da a entender, porque no creo que alguien pueda escribir tantas cosas tan detalladamente sobre lo que sucedía en el día. También me enteré de que mamá era mortífaga, lo cual me sorprendió mucho, pero también me decepcionó. No creí que pudiera llegar a hacer eso. Ahora creo que la frase de ‘las apariencias engañan’ es puramente real, ya que mamá parece una princesa que espera a su príncipe encantado en su caballo blanco, aunque supongo que era una princesa oscura y que sólo se aburrió del príncipe, por lo que buscó a la bestia que en su lugar flotaba de magia negra.

Mi teoría sobre su relación es que se enamoró de Tom –aún no puedo llamarle papá, resulta extraño-, mientras que era una mortífaga, y que él también lo hizo, por lo que terminó la relación que tenía con Jace para irse con Tom. Y luego nací yo. Pero Jace seguía enamorado de ella y también loco, así que intentó matarla, pero el plan fue fallido al aparecer Tom, por lo que intentó una segunda vez y esta vez fue un éxito. Una vez muerta mi madre, me buscó a mí. Pero no pudo hacerme daño porque se encariñó conmigo y le parecía muy indefensa. Así que me robó, crió y mintió.

Estoy tan confundida. Odio esto. ¿Por qué simplemente no me mató y ya? Me habría ahorrado tantos problemas. Estoy decidida a hablarles por primera vez en tres días a los habitantes de esta casa para exigir y aclarar mis dudas sobre qué demonios pasó.

Entonces recuerdo que tengo que hacer la maleta para ir con los Weasley.

Así que opto por ordenar mi baúl. Cobarde. Rápidamente me levanto de la cama y compruebo la hora: 15:23 p.m. Bien, eso es suficiente para que pueda tomar una pequeña ducha y arreglar mis cosas. Busco toallas, ropas y me meto al baño a la luz del sol.

Mi ducha se resume a una limpieza de cabello y cuerpo y a una gran mezcla de pensamientos sobre mi aún no definida identidad, nuevo hogar, un sexy novio y geniales amigos. Cierro el grifo y tomo la simple toalla verde que encontré, con la cual envuelvo mi cuerpo y seco un poco. Una vez seca me visto con mi típica ropa muggle y me hago una trenza en el cabello. Estar en la habitación tan aburrida me hizo aprender cosas, una de ellas cómo trenzar. Salgo del cuarto de baño y me dirijo a mi alcoba. Tan pronto como entro me quedo paralizada.

—¿Sabes? Eres realmente buena —comenta mirando el último dibujo que hice, sin mirarme ni un poco—. Deberías venderlos, o algo.

—¿Qué haces aquí? —escupo bruscamente.

—Hija…

—No soy tu hija —interrumpo, mirándola furiosa. ¿Qué diablos hace aquí Katherine? Le dejé muy claro a ella y a su esposo que no entraran a la habitación.

—Sólo quiero hablar, ______ —dice, con un deje de tristeza en su voz.

—Pues yo no, vete.

—Por favor… —ruega con ahora sus ojos también reflejados de tristeza. Mierda. Odio que haga eso la gente, soy demasiado estúpida y siempre sedo ante esas miradas. Gruño, y a paso lento me dirijo a la cama, donde me siento. Ella deja mis dibujos y se sienta junto a mí—. Bueno, tú sabes todo ya —juega con sus manos mientras dice esto—, y no hace falta que te lo explique, pero debes entender que te queremos…

—Sí, me quieren tanto que me mintieron toda mi maldita vida, ¿no? —digo con ironía.

—______...

—¡No! —exclamo—. ¿Sabes lo que es vivir en una mentira por más de trece años? ¿Lo sabes? No lo creo, ya no creo nada de ti —finalizo dura, y respirando entrecortadamente ante la tensión. Y mis ojos ardiendo, pero me niego a llorar. Ya lloré lo suficiente como para volver a hacerlo.

—En verdad te queremos, ______ —insiste, ahora sus ojos tienen lágrimas—. Siempre lo hicimos. Lo que sucedió hace trece años es otra cosa. Jace estaba muy enfermo, estaba loco, pero luego se curó. Y gracias a ti.

—¿Qué? ¿Gracias a mí? —pregunto burlona. Ni que fuera mágica para arreglar los estados mentales de las personas. Oh, lo olvidaba, sí soy mágica. Sin embargo, no tengo el poder de curar.

—Sí, gracias a ti, porque al verte aquella vez, su corazón se hundió tanto, se arrepintió de haber hecho todo. En verdad que estaba arrepentido. Fue ahí cuando acudió a mí. Me lo confesó todo, me habló de tu madre, de cuánto la quería, y de la locura que había cometido. Y yo lo comprendí. Lo entendí porque lo amaba, con locura, y me era imposible no ayudarlo. Recuerdo la manera desesperada en la que me pedía ayuda. Era horrible, nunca lo había visto tan desesperado y arrepentido por algo —niega con la cabeza mientras sale de la ensoñación en la que se había metido mientras hablaba, con sus mejillas empapadas de agua salada. Yo solo me quedo mirando la pared verde agua de mi habitación. En cierta parte le creo. La comprendo. Si Draco hiciera eso, yo también lo ayudaría, lo entendería, estaría con él a pesar de todo, porque lo amo, y eso es exactamente lo que sucede con Katherine.

—Así que accedí a ayudarlo —prosigue—. Te criamos e intentamos darte lo mejor de nosotros. Todos estos años intentamos ser los padres ideales. Él te quiso tanto —me mira y yo le devuelvo la mirada—, te ama, incluso más que a mí. Debo admitir que por un momento estuve celosa —suelta una risa, lo que me saca una sonrisa también pero que borro enseguida. Esto es serio—. Eres muy importante para él. En serio. Todo lo que ha hecho desde que estás en nuestras vidas, ha sido bueno. Jamás te levantó una mano, o te gritó. Incluso cuando hacías algo mal te encubría para que yo no te castigara.

Esa sonrisa vuelve a mis labios al recordar cómo mentía por mí, siempre haciendo lo posible para que Katherine no me regañara, o me castigara. Fue el padre que toda niña quisiera tener. Todas las noches cantaba o leía por mí. A veces nos dormíamos juntos en mi cama, ya que yo insistía en que iba a aparecer algún monstruo y me iba a devorar, y no quería estar sola en la oscuridad. Así que, él me distraía hasta que yo caía dormida, o ambos.

—Perdónanos, ______ —Katherine toma mis manos entre las suyas, y las aprieta levemente—. Jamás quisimos hacerte daño. Eres muy importante para nosotros. Eres una hija digna de la que estar orgullosa, a pesar de tus bromas que siempre traen consecuencias —bromea, a lo que hago una mueca.

Ya no me siento enojada, traicionada o engañada. Sé que aunque lo que Jace hizo está mal, él realmente lo lamenta. Las lágrimas en sus mejillas eran la evidencia. Cuando Katherine terminó de decirme cuán importante soy para ellos, me di cuenta que Jace estaba allí en la puerta, mirando con melancolía la situación, escuchando cada palabra que salía de nuestras bocas. Y yo no pude contenerme y fui y lo abracé. Lo tomó por sorpresa, pero no dudó en responder ante ello. Me abrazó fuertemente, como si no quisiera dejarme ir, o tal vez para comprobar si era la realidad o un engañoso sueño.

Ahora estoy aquí, frente a una gran casa que es visiblemente mágica, y muy hermosa. La Madriguera. A pesar de que perdoné a los Fanning, no quise quedarme allí, al menos no por un tiempo. Quería cambiar de aire y reflexionar si lo que hice está bien. Y estoy segura de que hice bien. Absolutamente. Todos nos merecemos una segunda oportunidad, a pesar de que tan grave es el error.

Cuando llegó el profesor Dumbledore a la casa por mí, volvió a preguntarme si me iría de allí o me quedaría. Elegí irme, lo que sorprendió a todos, incluso a mí, pero sin embargo aceptaron mi decisión sin rechistar ni preguntar nada.

—¿Lista para conocer a la familia entera de los Weasley? —pregunta Dumbledore a mi lado.

—¡Espere!

—¿Sí?

—¿Ellos saben… sobre, ehm, mi familia y eso?

—Solo Arthur y Molly —responde, y antes de que pueda decir algo él vuelve a hablar—: Son de extrema confianza, ______, no tienes nada que temer.

—De acuerdo. —Si Dumbledore dice que son de confianza, está bien. Confío en él y sé que no me mentiría.

—¿Lista?

Asiento con la cabeza mientras me aferro a mi baúl y a la jaula de Snowie. Golpea suavemente la puerta principal de esta gran y viva casa y esperamos a que aparezca alguien para abrirnos. Rápidamente se escucha cómo se corre el cerrojo y abre una señora regordeta de cabellos pelirrojos. Al vernos sonríe bien grande, una linda sonrisa.

—¡Arthur! —grita hacia dentro la casa—. ¡Arthur, ya llegaron! —nos mira a Dumbledore a mí con su sonrisa y dice—: ¡Pasen, pasen! Los estuvimos esperando.

Miro al profesor y él me devuelve la mirada a través de sus gafas, tranquila y amigable. Levanta un poco las comisuras de sus labios y me hace un leve gesto para que entre a la casa. El olor a hogar me invade. La calidez y el amor se notan presente aquí.

—Molly, esta es ______ —habla Dumbledore.

Antes de que pueda formular palabra alguna, tengo a esta mujer pelirroja envolviéndome cariñosamente con sus brazos. Quedo quieta y aturdida ante su muestra de afecto instantáneo.

—______, como dije, ella es Molly —vuelve a hablar Dumbledore con una linda sonrisa en su cara— y es tu madrina.

Me quedo en shock por unos segundos y miro a Molly. A diferencia de mí, ella no me mira con extremo aturdimiento y desconcertada, ella solo está parada frente a mí con una enorme sonrisa que demuestra todo el amor que alguien puede dar. Mis brazos se mueven hasta ella inmediatamente y la abrazan.

—Veo que ya se han presentado —alguien habla a mi espalda.

—¿Tú también eres mi padrino? —formulo emocionada al hombre pelirrojo, que asiente y que también se ve envuelto por mi enorme abrazo.

—Me alegra volver a verte, también.

—Merlín, Arthur, eso fue hace muchos años, no recuerda haberte visto —dice Molly, o mejor dicho mi madrina, lo que me hace reír y enjuagar una lágrima.

—Es cierto —hace una mueca mi padrino, pero rápidamente la cambia por una sonrisa y unos ojos brillosos que me miran—. Te extrañamos mucho.

Esto es fantástico, jodidamente fantástico. Jamás creí tener padrinos, y mucho menos unos como ellos, que son unas de las mejores y cariñosas personas que puedan existir. Lo sé porque tanto mis amigos Weasley’s como Harry y Hermione me han hablado de ellos y de lo maravillosos que son ambos.

—Bueno —interrumpe el profesor Dumbledore—, ya es tiempo de irme. —Se dirige hacia mí—: Me alegra que al fin conozcas a tus padrinos, morían por volver a verte y apuesto a que tú también por conocer a alguien de tu familia.

—Así es —asiento con una sonrisa mientras soy rodeada y apretada por un brazo de mi padrino.

—Bien, me iré así ______ puede bombardear con sus preguntas —bromea y me guiña un ojo y desaparece.

Oh, sí que voy a hacer eso. Comenzando justo ahora.

—¡______!

—¡Insoportables! —exclamo feliz al ver a los gemelos, quienes me abrazan demasiado fuerte al mismo tiempo—. Me asfixio aquí.

—¿Escuchaste, Fred? Quiere que la abracemos más fuerte.

Suelto una maldición por lo bajo hacia George por decir eso y a Fred por seguirle la corriente. Y justo cuando creo que quedaré sin oxígeno, Molly manda a separarlos.

—Gracias —intento tomar todo el aire posible que se les permite a mis pulmones mientras fulmino a los idiotas de mis amigos.

—¿Sabes, George? Creo que por la mirada que nos está dando, no le acaba de gustar nuestro abrazo-sándwich de bienvenida —dice Fred mirando a su gemelo.

—Sí, vaya manera de recibirla y nos paga así, nosotros que tanto amor teníamos para darle —finge limpiar una lágrima de sus ojos, a lo que revoleo mis ojos.

—Idiotas —murmuro, y ahora soy yo la que los abraza.

—Veo que no has crecido nada, enana —George me fastidia revolviendo mi cabello.

—Que tú seas alto no significa que yo sea enana —me pongo a la defensa cruzándome de brazos para una nueva pelea sobre la estatura. Siempre salgo perdiendo, pero son muy graciosas y extraño a estos par de idiotas diciendo de sus idioteces.

—No es tiempo de discusiones —la voz de Molly nos interrumpe—. Busquen a sus hermanos, la cena estará lista en unos minutos.

Los gemelos bufan ante la orden, pero de todas formas van en busca de Ron y Ginny, y supongo que también sus otros hermanos, cuyos nombres no recuerdo en este momento.

—______, querida, ¿te gustan las salchichas con puré de papa y huevos?

—En definitiva —asiento—. Todo lo que sea comestible me gusta, excepto la sopa, es terriblemente asquerosa para mi paladar.

—Igualita a Ron —murmura Arthur.

Suelto una pequeña risa ante el comentario y me dirijo a la cocina, donde mi madrina sigue cocinando.

—Esto es muy agradable —confieso mientras veo los platos y cubiertos ir de aquí para allá.

—¿Qué cosa? —pregunta, aunque su concentración está en las papas que corta.

—Estar aquí —arrastro mi mirada hasta su rostro—. Estoy agradecida de tener a alguien más de familia, y que me acojan como si fuera una de sus hijos.

—Oh —deja las papas y toma mi rostro entre sus manos, y me mira mientras dice—: Siempre serás parte de la familia. Y sé que no nos conocemos nada, pero sí sé que eres una gran persona y que eres digna de querer —aprieta mis mejillas suavemente dándome una de sus sonrisas.

Sigue con las papas y yo sigo viendo. Entonces estoy a punto de preguntar algo sobre mi madre y de cómo se conocieron, y todas esas preguntas que vagan por mi cabeza. Pero otro pelirrojo aparece en la escena haciendo que mi pregunta quede sin formular.

—Tengo hambre —se queja Ron mientras acaricia su estómago.

—Sí, hola a ti —digo divertida.

—¡______! ¿En qué momento llegaste? —pregunta sorprendido mientras da un pequeño abrazo.

—No mucho.

—Ah… ¿Y cuánto falta para la comida?

—Ay, Ron —río y le doy un leve apretón con mis brazos.

—¿Qué?

—Flema va a acabar con mi paciencia —una exasperada Ginny entra a la habitación.

—Deja de llamar así a Fleur, Ginebra —regaña Molly, a lo que Ginny revolea los ojos.

—¿Con que flema, eh? —pregunto divertida.

—¡______! Hola.

—Debo decir que eres buena con los apodos, rojita.

—Sí, bueno, no fue difícil pensar en la flema al escuchar su asquerosa voz —hace una cara al decir esto, provocando que ría.

—Ginny…

—Cállate, Ron, solo la defiendes porque estás muy embobado con ella y su pelo amarillo. Aún no puedo creer que Bill se vaya a casar con ella.

—¿Bill? ¿Tu hermano?

—Ese mismo —bufa la pelirroja—. No comprendo cómo hace para soportarla.

—Basta de charla y reúnanse para la cena. — Y una vez más, es Molly quien interrumpe la discusión.

Nos reunimos todos en la mesa, tal como dijo mi madrina, y comemos.

Debo decir que me sorprende que Fleur, la insoportable que creía tener de prima, se vaya a casar con Bill. Había oído que él le enseñaba español hace un tiempo, pero no creí que fuera más que enseñar. Cuando ésta me vio me abrazó, y creo que eso fue más sorprendente. Jamás nos llevamos bien, ella siempre fue una princesa y yo intentaba al menos ser una dama, por lo que siempre intentaba corregir mis actos y terminábamos en una discusión tonta. Creo que el tema de casarse y demás le afectó la cabeza y se puso algo cariñosa, y más insoportable.

—Bueno familia —comienza George, juntando sus manos de forma dramática.

—Es hora de irnos —Fred termina la oración.

—¿Irse? —pregunto confundida—. ¿No se quedarán aquí?

—No, de hecho sólo vinimos porque tú venías —responde Fred.

—Oh, debo sentirme honrada por ello.

—Lo deberías, pequeña.

—Que no soy pequeña.

—Lo que tú digas, metro cincuenta.

—Para tu información, mido metro sesenta —me cruzo de brazos. Me preparo para otra disputa, la cual se ve interrumpida por Molly rápidamente, como era de esperar.

—Mejor váyanse ahora antes de que se haga más tarde, podría ser peligroso.

—¿Y dónde se quedan?

—Justo arriba de su tienda —contesta Ron—. Sortilegios Weasley. —El orgullo y emoción se nota en su voz.

—Genial. Prometo pasar por su tienda —comento.

—Prometemos hacerte un descuento —dice George, y de vuelta viene aquel abrazo sándwich por parte de los gemelos.

—Cuida de nuestra habitación.

—Y si no quieres que algo desagradable te pase, entonces no toques las cajas —susurra George. No sé si eso es una amenaza o un consejo. Busco en su cara algún indicio de burla, pero él ya se ha alejado de mí y está despidiéndose de los demás.

—Adiós, familia.

Con un poco de polvo flú y sus maletas, se meten en la chimenea. Y luego se han ido.

por **Mina ♡** Vie 20 Sep 2013, 7:57 am

Hola jelou. Creo que te amo. Aunque no aparezca Draco, este es uno de los mejores capítulos. Rayis toda tiernis con Jace -el cual me recuerda horriblemente al Herondale y me lo he imaginado divino de la muerte-. No en serio, al principio pensé 'wtf, cómo puedes perdonar al hombre que mató a tu madre y dijo ser tu padre todos estos años' pero después racioné y dije que era mejor tener a un padre mentiroso que a Lord Voldemort. Lord Voldemort es caca, Tom Riddle no. Tom Riddle es un papasito. No sabes cuánto amo a los gemelos. Yo quería que se quedaran y así la Rayis tener más discusiones sobre su estatura y esas cosas lindas, pero no, los muy putos se van a su tienda. Ya quiero que escribas un capítulo sobre eso. Sería genial. Lo que no es genial es el comportamiento de Draco. Aunque ya imagino por qué. Soy media Trelawney, ya lo sabes. Rayis ahora empieza sexto curso, ¿no? Sí, sí. Uh, Draco se hará mortífago y tendrá que comportarse feo con ella porque 'no quiere hacerle daño', pero ella luchará por su amor, tendrán sexo en la sala de menesteres todo el día y toda la noche y Draco huirá con ella, Harry matará a Voldy y todos serán felices. Sobretodo yo, porque habré visto una novela de Mila acabar. Aunque me daría pena. Pero bueno, disfrutemos mientras la escribes y no pensemos en eso. Aún queda mucho -espero-. Yo tendría que estar respondiendo vuestros comentarios, pero me da muchísima pereza. Además de que las que me dejáis comentarios largos -tú, Ana, Kath y demás-, no sé ni cómo mierda responderos y lo único que acabo haciendo es poneros tonterías y explicaros mi vida. Y bueno, creo que el número de páginas es limitado y no quiero tener que hacer otro tema sino es para empezar la segunda temporada. Así que en el mismo capítulo, si hay algo que comentar, lo pondré. Sí, haré segunda temporada. Y creo que tercera, no lo sé. Eso ya se verá. De momento la segunda está asegurada. Y bueno, retomando el tema a tu capítulo, me ha hecho gracia esta parte: "te ama, incluso más que a mí. Debo admitir que por un momento estuve celosa —suelta una risa, lo que me saca una sonrisa también pero que borro enseguida. Esto es serio". Es como JAJAJAJAJAJAA ME ESTOY RIENDO Y NO PUEDO JAJAJAJAJAno, no, es serio. Idk, pero me hizo mucha gracia. Déjame con mi retraso, ¿vale? Bua, y pensar que en todo el comentario, es la primera vez que pongo palabras en mayúsculas... Creo que estoy madurando, he dejado de decir tonterías, impresionante, impactante, alucinante... ante, ante, ante. Todas las palabras acabadas en ante me dan manía, idk why. Bueno Mila, princesa, linda, amor mío, corazón de melon, cosita, te amo y te adoro por colgar capítulo. Eres la mejor, ya lo sabes. Y sinceramente te has superado respecto al tema de la escritura. Te ha quedado todo súper profesional, todo JK O Cassandra Clare, u know. Hubo una parte en la que dijiste 'alcoba' y yo como 'Mira a Mila toda feel like a sir' asfghjklñ. Y ya, no comento más porque quiero escribir capítulos de la novela del sexy Simon Lewis. Sí, bitch, empecé una del estúpido y sensual daylighter. Solo queda que me de el venazo y la suba. Aunque antes tendría que subir la de Tom Riddle y la de James. S. Potter. Me frustro con tanta idea y poca capacidad para escribirlas. Y pues ya, un beso enorme. Procura no demorarte tanto esta vez para subir capítulo, furcia. ¡Bye, tkmmmmmmmm!<3.

por **Mina ♡** Vie 20 Sep 2013, 7:58 am

Encima soy la primera en comentar. The power of Mina, bitches. Fac da polis. Bueno ya, chau asjdhakjsd<3.

por **tobias.** Vie 20 Sep 2013, 7:25 pm

¡Hola! ¡Hasta que la sigues! Ok, no. Bueno, primero: ¡¿POR QUÉ CARAJO TENÍA QUE LLAMARSE JACE?! Jace es extremadamente hot, candente, sensual y sexy. Y se supone que debo imaginarme a Jace Fanning (no recuerdo si se escribe así, pero tengo flojera de revisar). Continuando, ¡no le pongas Jace! Es como Valentine, quieres odiarlo pero su sensual aspecto te dan ganas de querer violarlo y... Todos en Cazadores de Sombras son demasiado sensuales: Jace, Alec, Simon, Valentine, ¡hasta los hermanos silenciosos son sexys! Yo me los imaginaba más feos a decir verdad, pero al parecer son sensuales, los directores están locos. Pero no tanto como el de mi escuela que me hace entrar a las seis y media de la mañana, ¿está loco o qué? Idk, pero maldito. Ya no sé que más comentarte así que te diré que Draco es demasiado sensual y si yo estuviera en Hogwarts estaría todo el día viéndolo, ¿cómo no hacerlo si es tan extremadamente sensual? Hoy un niño de mi salón me dijo: "Tom Felton es gay" y yo: "Tu puta madre es gay". No se lo dije así, pero lo pensé, ¿quién se cree al insultar a mi esposo de esa manera? Después dijo que se había muerto, mugre idiota.
Sigue tu novela, es demasiado sensual. Si nos subes cap rápido juro sacar a Draco, James, Jace, todos los que quieras, pero síguela.
Besos.

por **Xio** Sáb 21 Sep 2013, 7:44 pm

¡JODERRRRR! Amo esta novela:@, Y te amo a ti (?) Hahahaha, Siguela:(, xx, besos

por **TamiaUnbroken** Sáb 21 Sep 2013, 10:13 pm

SIGUELAAAAAAAA! :D

por **Maria.L** Jue 26 Sep 2013, 8:16 pm

siguela!! amo tu novela ;)

por **Ally Malfoy Black** Miér 02 Oct 2013, 1:26 am

AAAAALELUYA!!! los mortifagos oyeron mis suplicas y te pusieron a escribir, ya estrañaba ver capitulo en este lugar xDD, see estrañaba con s por ke la s es mas poderosa ke la x xDD buaaaano, siguela pronto, sin presiones me encanto el cap

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