Despertar en Grecia [Justin Bieber y One Direction]

-¿dónde me llevas?- le pregunté dudosa. Quería saber pero sin embargo amaba las sorpresas, para mi eran muy hermosas ya que eso significaba que la persona se esmera en encontrar un buen lugar o ocasión, lo cual me parece algo muy tierno.
-no te diré, te dije que era una sorpresa- me sonrió
Seguimos caminando con dirección al norte. Hace unos cuantos días tengo la incertidumbre de tratar de leer el pensamiento de Niall, pero son embargo algo me dice que no debo hacerlo, que es algo indebido. Por una parte, esta mi angelito, que me dice que hacerlo es algo inmoral y una violación a la privacidad, pero por otra parte, mi diablillo me incita a hacerlo, para saber si el solo busca jugar conmigo o es de verdad que quiere tratar de lograr algo, aunque lo más probable, es que esto se quede solo en un amor de verano, mi madre no me dejaría dejar mi puesto como bella genio, es muy apasionada con su oficio y nuestros dones, tanto así que nos arrastra a mí y a mi hermana de 15 años, Anastasia, por cuyo futuro, temo, sea como el mío, sin poder vivir su adolescencia como es debido
-cierra los ojos- la voz de Niall me saco de mis pensamientos
-¿llegamos?- pregunté
-casi, ciérralos- cerré los ojos y de pronto sentí su mano tomar la mía para guiarme- cuidado, hay una escalerilla, sube un pie a la vez- me indicó, obedecí.
Luego de guiarme bastante rato, me indicó que abriera los ojos. Al abrirlos quedé maravillada. Siempre he amado la naturaleza, por lo que fue imposible no quedar maravillada con el paisaje. Era una reserva natural, llena de arboles, los cuales se aliaban a cada lado del sendero de piedrecillas y arena que estaba pisando. El canto de los pajarillos era una melodía digna de escuchar con los ojos cerrados y una verdadera terapia para los nervios. De pronto una ardilla pasó por delante de nosotros con una nuez, seguida de otra que la iba siguiendo
-¡mira Niall! ¡son ardillas! ¡son ardillas!- grité tan emocionada que parecía un niño en navidad
-sí, Lu… son ardillas- se rió, sin embargo no le presté atención y me dispuse a seguirlas, pero él me detuvo tomando mi mano- ¿Dónde crees que vas?- preguntó
-quiero ir a verlas- dije aún emocionada
-no, déjalas en paz, pronto veremos más, además, tenemos una cita, ¿recuerdas?-
-pero… pero…-
-vamos- tiró de mi mano para seguir el sendero, llegamos a una laguna situada al centro de la reserva, compramos algodones de azúcar, anduvimos en unos botecitos, anduvimos en bicicletas y cuando ya estábamos cansados de tanto jugar, nos compramos helados y nos sentamos al borde del lago. De pronto recordé la historia de desamor de Niall que me había contado Belle, de su novia enamorada de su padre.
-¿Niall?- pregunté indecisa
-dime…- se giró para observarme
-¿q… quién es Mabelle?- pregunté. Al momento que lo dije me arrepentí, pues yo ya sabía quien era, Belle me lo había contado. Su expresión se ensombreció y se puso serio
-M… Mabelle… ella- Dios, me sentía de lo peor en estos momentos, yo y mi bocota- es mi ex suspiró. Asentí con la cabeza e hice un gesto de Huhu.
-¿aún la quieres?- pregunté, e instantáneamente mordí fuerte mi lengua, ¿Por qué podía controlar mis palabras?-
-pues… con lo que me hizo… se me fue el amor por ella- dijo serio. Miré profundamente en sus ojos, ¿lo hago o no lo hago? Mi pequeño diablillo ganó, la curiosidad y la incertidumbre me gano, me concentré y vi dentro de su mente…. Mientes Niall… Tragué saliva costosamente
-y… ¿quieres comenzar algo con alguien más solo para olvidarla?- pregunté
-claro que no, ella es mi pasado- agregó. Miré más profundo en sus ojos. Mentiroso…
-yo, creo que es tarde- dije de pronto nerviosa. No quería seguir aquí, de cierta manera estaba molesta, si hay algo que odio, es la mentira y lo peor, que jueguen con las personas.
-pero, aún nos queda mucho por ver- indicó
-pues no quiero seguir recorriendo, estoy cansada y creo pesqué un resfriado- traté de sonreír, pero más bien me salió una mueca. No lo puedo culpa, él está enamorado.
Me di la vuelta para alejarme pero él se pudo delante
-por lo menos déjame llevarte al hotel- pidió
-me gustaría estar sola, me gusta caminar sola, nos vemos otro día ¿vale?-
-pero- pasé por el lado y me fui a toda prisa. El viento comenzó a jugar con mi cabello, me dolía el pecho, era una sensación extraña. Luego de 20 minutos y algo, llegué al Hotel. Cerré la puerta de la habitación, me apoyé en ella y me deslice. ¿Por qué me afectaba tanto si lo conocía hace apenas 2 o 3 días? Fue en ese momento cuando recordé las palabras de mamá
“….-estamos maldecidas, Lucero, por una antigua enemiga de madre, estamos condenadas a querer y enamorarnos rápidamente sin embargo, estamos condenadas a que esa persona no nos ame como nosotras quisiéramos-
-¿a que te refieres con “querer y enamorarnos rápidamente”?- pregunté
- nos enanchamos rápido de una persona, pero eso es relativo-
-¿relativo?- pregunté
-depende de la experiencia que tengamos en el amor…”
Un sollozo se me escapó… yo no tenía ni una experiencia de amor…

-Quiero unas cabritas, una bebida grande, unas lays y una barra de chocolate- Le dije a la chica del cine encargada de vende en confitería- ah y agregue unas gomitas, por favor- finalicé
-¿no se te ofrece nada más?- Preguntó Liam irónico
-pues no, solo eso- respondí
-me dejaras en bancarrota- señaló
-pues, te dije que no te convenían las apuestas conmigo- le saqué la lengua
Liam canceló todo y nos fuimos a la sala de cine a ver Breaking Dawn part 2 ssubtitulada, ya que si la veíamos doblada no entenderíamos absolutamente nada. Durante la película Liam no mostró interés, sin embargo, yo estaba más que pegada, concentrada entre la comida y la película que me tenía los bellos de punta y me hacía saltar en mi asiento. Lloraba a mares, lo cual el chico a mi lado notó y me tendió un pañuelo. Dios, que chico y caballero es este niño por dios. Luego de tanto sufrir con el final, me di cuenta de que todo era una visión de Alice, solo ahí pude relajarme, Ese final definitivamente no aparecía en el libro, pero había sido excelente.
Salimos del cine y Liam tenía cara de tuto
-¿no te gustó la película?- pregunté
-pues… no me gusta la saga de los vampiros- se encogió de hombros
-anormal- dije entre dientes
-¿y ahora? ¿Qué quieres hacer?- preguntó
-tengo ganas de comer fideos- mi estómago gruño de hambre
-Se llaman pastas, y no puedo creer que aún quieras comer después de todas las golosinas que comiste- exclamó
-lo siento señor “pasta”- me burlé de su buen vocabulario y de su tono adinerado- pero soy una glotona- finalicé
-no tengo idea como puedes ser tan flacucha- me miro
-¿Por qué no te callas y me llevas a comer? Muero de hambre- me quejé.

Me llevó a un restaurant algo… lujoso para la ocasión. Nos sentamos, y claro, el chico me puso la silla, nos entregaron la carta y casi me caigo de culo al ver los precios
-oye, esto es muy caro- dije
-no te preocupes, yo pagaré- el sonrió amable
-¿tan adinerado eres?- pregunté, el solo rió

Hablamos mucho rato, su vida era interesante, era un niño rico pero muy educado, acudiría a la universidad de Cambridge a estudiar derecho, esto me superaba, el era un chico con un futuro asegurado, mientras que yo tenía que esforzarme para ayudar a mi padre en la casa.
Cuando terminamos de comer, Liam me llevó al Hotel y me dijo que pediría la revancha, mientras que yo le contesté que la tendría, pero nada que incluyera trago.

-no, olvídenlo, no me subiré a esa cosa, es horrible, es… es… es enorme y es tan rápida, así que no, ni lo sueñen- me afirmé del poste de la luz para que no me subieran a la montaña rusa enorme a la que se querían subir.
-Vamos, Antonella, será divertido, es una de las mejores atracciones del parque, tienes que subirte- me dijo Daiana, la hermana del serio Malik. Era muy simpática, todo un amor, lo contrario a su hermano.
-No quiero Anto, no quiero- me aferré con fuerzas al poste de luz
-Dai, déjala, es vergonzoso que la gente vea su show- Dijo Zayn
-no seas tan antipático Zayn- lo retó Dai
-¿subes o no?- me preguntó Harry que estaba impaciente por subirse a esa cosa
-no Hazza, no subiré, lo siento pero de verdad me da terror- dije soltándome del poste
-entonces vamos Dai, Wendy, Josh, Justin y Anna ya están arriba, vamos- Harry tomo a Dai del brazo y la subió con Anna.
-Llévala a la rueda de la fortuna, Zayn- le gritó Daiana mientras le abrochaban el cinturón
Me alejé suspirando, por poco me suben a ese monstruo. Me senté en una banquita para esperar a que se bajaran de la montaña rusa.
-eres una miedosa- dijo de pronto una voz atrás mío que me hizo sobresaltar
-mierda- exclamé tapándome la cara con las manos
-esa boca…- me regañó
-entonces no te aparezcas así de repente- me quejé- y ¿tú? ¿Por qué no te subiste?- enarqué una ceja
-no estoy de humor- dijo serio
-eso no es novedad- susurre
-ven, vamos a la rueda de la fortuna- me tomó del brazo
-no quiero, gracias-
-¿y después yo soy el aguafiestas? Ven, si no te llevo Daiana se enojará- resople y accedí a subirme a la atracción con él. Cuando estábamos arriba, me llegó un mensaje de Belle que decía que se había ido al hotel. ¿En qué momento había desaparecido?
-esta chica definitivamente no es de pasarla ¡BIEEEEN!- grité cuando la rueda se detuvo bruscamente haciendo que el teléfono cayera al piso- ¿Qué mierda sucedió?- pregunté
-creo que se detuvo- exclamó Malik mirando hacia abajo con toda calma
-oh, ¿enserio? Créeme que no lo había notado- dije irónica. De pronto una voz proveniente de un megáfono desde debajo de la atracción nos llamó la atención
-“…es pedimos que mantengan la calma, es solo una falla técnica que probablemente podamos resolver en unos 30 minutos, reiteramos, mantengan la calma, estamos trabajando para arreglarla…”-
Bien… ¡PERFECTO! Tendría que estar media hora encerrada con Mailk, y acaso no les tomaba más tiempo.