stay with me || one direction.

Hoy es el inicio de otro año más, de regreso a los días aburridos de clases, cursando de mis últimos años. Bueno, iniciamos tanto nuevos alumnos, y viejos. Conduzco solitaria hasta el lugar en medio de la nada, literalmente, solo hay árboles y más árboles. Pero era lo mejor, mi casa, o mejor dicho, apartamento, quedaba a unos kilómetros. Estacioné el auto justo enfrente de la entrada principal. Revisé la dirección una última vez, y confirmé que ese era el lugar, aunque ya había estado en él muchas veces. Todo era justo igual como cuando me había ido hace tres meses. Suspiré, y comencé a subir las escaleras, abriendo la puerta principal. Di unos tres o cuatro pasos, cuando de la nada, choqué con una chica muy hermosa, rubio cabello corto, y ojos miel. Me sonrió.
—Lo siento, no me fijé. ¿Estás bien? —dijo recogiendo su libro del suelo.
—Eh, sí. Gracias —dije dudosa.
—Soy América, ¿Y tú? —preguntó, mientras me extendía su mano.
—Dime Sky, odio mi nombre —le sonreí, tomando su mano.
—Un gusto, Sky. ¿Te parece si vamos juntas a recoger los horarios? —preguntó amablemente.
—Igualmente, América. Claro, vamos —sonreí.
Caminamos un rato, mientras nos conocíamos un poco más. Al parecer, este era su primer año acá. Con justa razón no la había visto antes por ningún lado. No tenía novio, lo que para mí era una completa ventaja, porque siendo sincera detestaba que hablasen y hablasen de novios como si no existiese otro tema de conversación en mundo. Al llegar, pedimos ambos horarios, y cursábamos mismo año, así que coincidíamos en casi todas, excepto Historia, la materia que más detestaba, pero intentaría hacer algo sola.
—Bueno, parece que estaremos juntas en todas las clases —dijo revisando ambos horarios—. Excepto Historia, por supuesto.
—Sí, pero en las demás estaremos juntas —sonreí, abrimos la puerta de salida, y una chica muy apurada la atravesó, tirando nuestros horarios y alguno que otro libro.
—Lo siento, lo siento mucho —dijo ayudándonos a recoger las cosas.
—No importa, linda —le sonrio mi nueva amiga. Sin duda, se notaba a kilómetros lo agradable que era, su linda sonrisa y la sinceridad de esta. La chica de ojos azules frente a nosotros nos dio una linda sonrisa.
—Soy Helen Evans, ¿Y ustedes? —preguntó extendiendo sus manos hacia ambas.
—Soy América Wilson —dijo la linda rubia tomando su mano.
—Dime Sky, como le decía a América, odio mi nombre. Mi apellido es Roberts —le sonreí, y tomé su mano.
—Un gusto chicas, no sé porque pero tal vez seremos grandes amigas —sonrió Helen dulcemente.
—¿Cómo que tal vez? Digo, ¡Seremos grandes amigas! —le sonrió América con cierto toque de emoción en su voz.
—Ya me siento como una madre —bromeó Helen.
—Siéntete así, pero no me vayas a dejar sin helado —dijo frunciendo el ceño la chica de ojos mieles.
—Me agradan ambas —sonreí.
—¿En serio? —preguntaron al mismo tiempo, lo que causó que todas rieramos.
—¿Les parece si avanzamos a los casilleros, y de ahí a la clase? —preguntó Helen.
—De acuerdo. ¿Números de casilleros? —preguntó América.
—Tengo el C-18 —dije.
—Yo tengo que ir a traer mis papeles, no he ido aún —dijo Helen sonrojándose.
—Anda mujer, ve a por ellos —dijo América apurándola.
La castaña corrió donde estábamos hace unos minutos con mi rubia amiga, que con pocos minutos de conocerla, sentía que sería mi mejor amiga, al igual que la castaña de ojos azules. Esperamos unos minutos haciendo bromitas y riendo, cuando Helen regresó con una sonrisa.
—Tengo el C-14 —dijo sonriente.
—Helen estás más lejos. Yo tengo el C-23 —dijo América.
—Vamos casi al lado —dije a ambas chicas—. Seguimos para las clases, ¿No?
—Sí, no quiero que lleguen tarde. ¿A qué van? —dijo Helen revisando su horario.
—Con esta señorita vamos a Química. ¿Y tú? —pregunté.
—Oh, suertudas, tocarán juntas —dijo frunciendo el ceño.
—¿No vas a Química? —le preguntó la rubia.
—No. Me toca Matemáticas —dijo, fingiendo limpiarse una lágrima—. Tendré que soportar esto, ¿Por qué a mí?
—Oh, no exageres —reí—. ¿Comeremos juntas?
—Osea, digo, ¿Esa pregunta es por molestar? ¡Claro que sí! —dijo la bonita castaña.