Conectarse
Últimos temas
miembros del staff
Beta readers
|
|
|
|
Equipo de Baneo
|
|
Equipo de Ayuda
|
|
Equipo de Limpieza
|
|
|
|
Equipo de Eventos
|
|
|
Equipo de Tutoriales
|
|
Equipo de Diseño
|
|
créditos.
Skin hecho por Hardrock de Captain Knows Best. Personalización del skin por Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
Viaje al Infierno (Joe y tu)
O W N :: Archivos :: Novelas Terminadas
Página 2 de 6. • Comparte
Página 2 de 6. • 1, 2, 3, 4, 5, 6
Re: Viaje al Infierno (Joe y tu)
Capitulo 2
Por primera vez desde su llegada a la villa, cuando despertó _________ experimentó la alegría del día que estaba naciendo. Se dio una ducha rápida, se puso una camisa corta de mangas anchas y pantalones de caqui; buscó un bikini limpio, un albornoz que hacía juego, así como una toalla y guardó todo en un maletín de lona.
No tenía idea de cuáles serían los planes de Joe para ese día, pero no quería ser tomada por sorpresa si él sugería el detenerse en algún sitio para nadar. Se daba cuenta de que a una joven menos recatada era probable que no le hubiera preocupado llevar o no bikini.
Él llegó en el momento que María servía el desayuno en la terraza. _________ escuchó el sonido del coche y caminó hasta la puerta principal.
Cuando abrió, Joe salía de un Mercedes convertible color escarlata. Al percatarse de la presencia de la chica su expresión torva desapareció para dar lugar a una de admiración.
—Si hubiera sabido que eres tan hermosa por las mañanas, no habría regresado anoche al hotel.
Habló con lentitud a la vez que se le acercaba. Le puso un brazo sobre los hombros e inclinó la cabeza para interrumpir el paso de los rayos del sol mientras la besaba.
_______ controló el deseo de besar la bronceada columna de su cuello.
—El desayuno está servido —dijo, con los labios temblorosos después del breve contacto con los de él—. Llegaste a tiempo.
—¿Quién sabe? —le dirigió una aturdidora mirada de soslayo que le aceleró los latidos del corazón—. No me hubiera importado arribar más temprano para encontrarte, como la Bella Durmiente, en espera del beso del príncipe que te haría despertar.
Se sintió ridícula por perturbarse con aquellas palabras y trató de recobrar la compostura mientras lo conducía hacia la terraza.
Se alegró de la meticulosidad con la que había arreglado la mesa cuando vio que él la observaba.
"Parecemos una tranquila pareja recién casada", pensó, ________ media hora después cuando le servía una segunda taza de café. Él, observaba fascinado el panorama desde la terraza.
—¿Qué quieres hacer hoy? —preguntó ________, enrojeciendo al ver la manera como la miraba—. Quiero decir: ¿debo preparar el almuerzo o?…
—Por supuesto, si no es mucha molestia, aunque te confieso que, en este momento, en lo último en que pienso es en comer.
Disculpándose por tener que limpiar la mesa y llevar la loza a la máquina lavaplatos, lo dejó solo en la sala.
—_________.
No lo había escuchado entrar en la cocina y por poco deja caer el cuchillo con el que estaba rebanando el pan para untarle mantequilla.
La expresión de sus ojos la desconcertó. Parecía preocupado, como si en su mente hubiera algo más que un día de paseo.
—Es probable que ésta no sea una buena idea —continuó.
Él le daba la espalda, cosa que agradeció la chica, porque en esa forma no podía ver la humillación que se reflejaba en sus ojos. ¿Qué quería decir? ¿Cambió de opinión y ya no desea pasar el día con ella? "¿Habrá descubierto que no soy la mujer que él pensó en Roma?", se preguntó.
—Si tú lo dices… —se las ingenió para hablar con calma e indiferencia—. Nunca imaginé que fueras un hombre que dudara en el último minuto.
De súbito se habían convertido en dos extraños. Ella había emitido las últimas palabras con el objeto de burlarse y de herir. Observó un cambio en el rostro de él y se dio cuenta con sorpresa que estaban a punto de reñir.
—Es evidente que tú no las tienes —en sus palabras había una dureza que la hizo temblar—. ¿Eres siempre tan impulsiva con todas las personas… o solamente con los hombres?
El propósito de Joe era lastimarla, y lo había conseguido.
Él regresó a la sala y ella lo siguió, a sabiendas de que el día estaba ya arruinado.
—Creo que es mejor que cancelemos nuestro paseo —empezó a decir él.
Se detuvo de pronto junto a un retrato enmarcado que estaba en una de las mesas, en el que aparecían su padre, ella y uno de los más antiguos amigos de aquél. Joe miraba la fotografía con una atención que la dejó perpleja, mantenía los labios apretados.
—Un viejo amigo de mi padre —le explicó _______—. Murió… el año pasado —titubeó e hizo un esfuerzo enorme por controlarse.
No había tenido mucha amistad con Paul Jonas, a pesar de que su padre sí y durante muchos años, pero aún le resultaba doloroso hablar de su muerte. Lo habían secuestrado y finalmente asesinado. A pesar del tiempo transcurrido, le era difícil liberarse del horror que se apoderaba de ella al recordar la odisea de Paul. Jamás le había confesado a su padre el temor que sentía de ser secuestrada.
Suponía que se había originado cuando murió su madre. Al ocurrir el fallecimiento, ella estaba en un internado, ignorando lo acontecido. Dos desconocidos la sacaron de la escuela sin darle ninguna explicación. Después se enteró de que se trataba del ayudante de su padre y su secretaria. Estos le informaron de la muerte de su madre, y quedó una herida emocional que jamás curó por completo.
—Fue secuestrado por terroristas —dijo, como si al pronunciar la tan temida palabra pudiera desembarazarse de sus temores.
—Es trágico —Joe parecía hablar con sinceridad.
Durante una fracción de segundo, ________ recordó la pena de su padre.
—No lo sé… ¿No es la muerte violenta la fantasía de cada quien?
Era el tipo de comentario que se acostumbraba entre su pandilla y ella lo había usado, en forma defensiva, en el pasado, sin importarle las conclusiones a las que llegaran sus compañeros. En ese momento sí le importó y, al observar la expresión de Joe, deseó con amargura no haber pronunciado esas palabras que, en apariencia, revelaban dureza de corazón.
—¿Joe?
Su voz y sus ojos le suplicaron comprensión, y el perdón que su orgullo le impedía solicitar abiertamente. En forma milagrosa la expresión de Nico cambió.
—¿En cuánto tiempo podrás terminar los preparativos?
No hizo mención de que, diez minutos antes, había insinuado la cancelación del paseo, pero Saffron estaba tan feliz que omitió comentarlo.
—Diez minutos —prometió.
Cumplió con su palabra. Observó con alegría cómo Joe guardaba la canasta con la comida en el portaequipajes del auto, y abría la puerta para que ella subiera.
Por la carretera, ________ se relajó, disfrutando las caricias de la brisa de verano. Dejaron atrás las plantaciones de olivos.
Se encontraban en lo alto de las colinas, más allá de la villa. Abajo, el mar resplandecía, confundiéndose en el horizonte con un cielo color lila.
La joven se sentó con la barbilla apoyada sobre las rodillas, para sentir los rayos de sol en los hombros. Media hora antes Joe se había salido de la carretera para entrar en ese lugar hermoso y desolado. Ahora estaba a su lado, tendido sobre el pasto, contemplando el cielo, sin pantalones ni camisa. ________ se regañó por no haber seguido su ejemplo; pensó que debió haberse puesto el bikini debajo de la camisa y los pantalones. Como si él leyera sus pensamientos, le sugirió:
—¿Por qué no vas a cambiarte?
"Quiero hacerlo. Pero, ¿por qué siento esta extraña timidez que me hace resistirme a que me vea en bikini?"
—Pareces una virgen cristiana que prefiere ser arrojada a los leones en lugar de entregar la inocencia a su captor romano. Es una experiencia nueva para mí —continuó él.
_______ bajó la vista temerosa de que él descubriera el secreto de su virginidad. ¿Por qué deseaba de pronto no tenerla?
—¿Por qué la inocencia atrae siempre a los hombres? —inquirió Joe—. Al verte, es difícil creer que otro hombre ha hecho algo más que besarte —la expresión de Joe cambió y entonces murmuró—: ¿Estaré perdiendo mi eficiencia? —se inclinó sobre ella—. Sé que me arrepentiré, pero en este momento no soy capaz de reprimir el impulso que me recuerda que soy en primer lugar hombre y segundo, un ser pensante. ¿Qué es lo que están suplicando tus dulces ojos? ¿El indulto? ¿O esto?
________ había adivinado desde su primer encuentro que era un hombre que conocía todo acerca del sexo femenino, pero parecía que la había juzgado mal, porque la feroz presión de sus labios, el deseo que él no intentaba ocultar, la atemorizaron en lugar de excitarla.
Como si captara sus pensamientos, de súbito cesó la presión de los labios de Joe. Le dio al oído disculpas y la acarició con gentileza.
—Perdóname, cara, estaba siendo demasiado impulsivo porque mi deseo por ti es demasiado fuerte.
A pesar de sus palabras y de la expresión de sus ojos, __________ tuvo la impresión de que estaba diciendo lo que no sentía. Esa impresión desapareció casi en el momento que él retiró la frágil barrera de la camisa para llegar con la mano a la suave redondez de los senos. Sus labios rozaron los de ella sin la furia anterior.
La respuesta de su propio cuerpo la atemorizó y trató de liberarse.
—Debemos irnos —murmuró con voz temblorosa—. Yo…
Joe miró el reloj y después pareció contemplar el paisaje: el cielo sin nubes, la carretera vacía.
—Todavía no —contestó con dulzura. Cuando _________ prosiguió con sus protestas, la ignoró.
Inclinó la cabeza para rozar con los labios la tibieza que había dejado al descubierto entre los senos. El contacto provocó movimientos corporales en ________, a manera de protesta, pero sintiendo al mismo tiempo una oleada de placer.
Los dedos de Joe retiraron el sostén.
—Joe… —pronunció el nombre con dificultad.
—Lo sé —aceptó él con voz pastosa—. Aquí no… Pero lo haces muy difícil para mí… Muy difícil —repitió.
Sus labios se movieron provocativamente, pero se interrumpió al percibir el temblor que era incapaz de dominar la chica. ________ palideció por las sensaciones extrañas que estaba experimentando por primera vez. Deseaba mantener a Joe cautivo junto a su cuerpo, pero la timidez y la inexperiencia se lo impedían. De pronto él se levantó y la ayudó a incorporarse; le arregló la camisa y le indicó con la cabeza que se dirigiera hacia el coche.
________ no tuvo oportunidad de protestar. Cuando estaba esperándolo en el Mercedes, comprendió que Joe, con una agudeza de oído superior a la suya, debió haber escuchado que se aproximaba un Land Rover.
El vehículo se detuvo junto a ella y tres personas bajaron con rapidez. Eran dos hombres y una mujer; todos llevaban la misma ropa informal: pantalones vaqueros sucios y los tres le apuntaban con rifles.
♫ Laura Jonas ♥
Re: Viaje al Infierno (Joe y tu)
Como si se tratara de una pesadilla, desamparada, los miró aproximarse. Escuchó a sus espaldas los pasos de Joe, y experimentó un alivio al recordar que no estaba sola. Se volvió hacia él, pronunciando su nombre.
—¡Sal del coche!
Fue la mujer la que dio la orden.
—Joe…
Murmuró el nombre con dificultad y no ocultó su sorpresa al ver la expresión fría de él.
—Haz lo que te indican, ________ —le aconsejó.
—Pero…
La cruel risa que emitió la mujer armada al observar la expresión de asombro de ________ y la cara despiadada de Joe, fueron como un puñal.
—¡Mírenla! ¡No acaba de creerlo! Debes haber hecho un excelente trabajo para persuadirla, Joe. Aún no acepta la verdad. ¡Tonta! —se burló de ________, sonriendo con malicia—. Joe es de los nuestros, no te ayudará.
_________ observó el rostro tenso de Joe y se dio cuenta de que era verdad. Él volvió la cabeza. La fría expresión de los ojos grises borraba toda la amabilidad que había existido en su rostro. Entonces abrió la puerta del Mercedes y salió aturdida. Tropezó con una piedra y hubiera caído de no ser porque Joe la sujetó de un brazo. Se liberó de la mano con un gesto de rechazo y disimuló el dolor.
—¡No me toques! —gritó, presa de la desesperación.
Una vez más la mujer rió con sorna.
—Joe, Joe —dijo con desdén—. Has destrozado sus sueños. Creía que la querías, siendo que lo único que anhelas es el dinero de su padre. ¿En cuánto tiempo crees que pagará el rescate? Sería mejor que no tardara mucho porque Roma está urgida de fondos para comprar el equipo que necesitamos para…
Se interrumpió, tragando saliva con dolor y enfado. Joe se había alejado de __________, se volvió y sujetó a la otra mujer de una muñeca, haciéndola volverse.
—¡Mide tus palabras, Olivia! —le advirtió.
La mirada de advertencia abarcó a las dos mujeres. _______ sintió que se le helaba la sangre en las venas cuando Olivia sacudió la cabeza y preguntó:
—¿Para qué? Hay maneras efectivas para garantizar que tu amiga jamás repita lo que ha escuchado. ¿Has perdido la devoción a nuestra causa, amigo? Este es el segundo día consecutivo que venimos a este lugar.
Joe encogió los hombros.
—Me retrasé.
Fue notorio que ella no quedó satisfecha con esas dos palabras; frunció el ceño y miró a la joven.
—¿Por esa? Joe…
—El retraso ocurrió en Roma —explicó Joe. Tenso se volvió hacia ella y le dijo con suavidad—: Trata de recordar que estoy a cargo de este asunto, Olivia, y que no te corresponde juzgar mis acciones. Lleva a la joven al Land Rover. Ya hemos perdido demasiado tiempo en este lugar.
—Ven —apoyó el rifle en el pecho de _______—. Bonita pero débil —comentó Olivia. La sonrisa reveló dientes pequeños—. ¡Mira cómo tiembla! Este rifle es muy sensible —le dijo a _______—. Las sacudidas de tu cuerpo son suficientes para…
—Muerta no nos es útil, Olivia —expresó Joe con aterradora calma.
Había cambiado tanto que Saffron casi no lo reconocía. Su encanto había desaparecido. En su lugar estaba la amenaza que le provocó un escalofrío a _______.
—Muerta quizá no —aceptó Olivia—, pero Sir Richard pagará bien por su hija, a pesar de que la mutilemos. Hiciste muy bien al escogerla, Joe.
Esperemos por el bien de ella que a su padre le importe tanto como afirmaste. Hemos leído en los periódicos acerca de ti, ________ Wykeham —le dijo a la joven—. Estamos enterados de tus aventuras y de la fortuna de tu padre. Supimos que ibas a venir a Italia y preparamos con cuidado nuestros planes. Joe nos dijo que no le sería difícil ganar tu confianza. Tienes debilidad por los hombres apuestos.
—Deja de perder el tiempo, Olivia —ordenó Joe—. Regresen a la granja. Tengo que devolver el Mercedes y enviarle un télex a su padre.
Necesitamos obtener resultados rápidos. Recuerda: cuando lleguen a la granja todo debe parecer normal.
—¿Cuándo regresarás?
________ frunció el ceño por la posesiva pregunta de Olivia.
—Lo ignoro. Depende del tiempo que me lleve.
—¿Y ella? —preguntó Olivia, señalando con el rifle en dirección de ________.
—Aténganse al plan —le indicó Joe—. Sin violencia. No tiene objeto…
—¿Por qué no quieres que se le estropee su delicada piel?
De pronto _________ comprendió que Olivia estaba celosa. ¿Cómo sería su relación con Joe? ¿Eran amantes? Le asombró el dolor que sintió.
—Su piel no me interesa, salvo por el precio que podemos pedir por ella —afirmó Joe con indiferencia—. Deberías saberlo. También, que es preciso proporcionarle a su padre las pruebas de que está viva. Esa es la razón por la cual no quiero que se le toque en lo absoluto… por lo menos por ahora. Le tomaré unas instantáneas cuando regrese.
Miró el reloj de pulsera, ________ sintió náusea al comprender cómo había obtenido el dinero para tales lujos.
Antes de dejarla en manos de los tres captores armados, le dijo:
—No caigas en la tentación de hacer alguna tontería. Olivia tiene instrucciones de disparar en caso de que lo hagas.
—No a matar —le previno Olivia, sonriendo con crueldad—. Estarás menos atractiva con las rótulas destrozadas.
Le fue imposible a _________ contener el estremecimiento de horror. La risa maligna de Olivia quedó ahogada por el ruido del motor del Mercedes. La pintura de éste resplandeció un momento por el sol antes de desaparecer en la dirección que había llegado con Joe poco tiempo antes.
Lo que estaba ocurriendo era que sus pesadillas más espantosas se habían vuelto realidad.
Mientras permanecía bajo el ardiente sol, sus emociones fueron golpeadas por la realidad. El deseo y el amor se convirtieron en sed de venganza. "No porque me hayan secuestrado", pensó ________, "sino por la forma en que se llevó a cabo. ¡Con qué facilidad se introdujo Joe en mi vida! Fui tan vulnerable ante él. Me usó con insensibilidad. Haré que pague por esto aunque tenga que emplear toda mi vida para lograrlo".
Una insaciable sed de venganza la inundó e hizo que se desvanecieran el temor y el pánico; su mente empezó a funcionar en forma febril para encontrar una vía de escape. Se esforzó en ignorar el ominoso silencio de sus captores y los dos rifles que le apuntaban a la espalda, mientras Olivia se adelantaba hacia el polvoriento jeep.
—¡Sal del coche!
Fue la mujer la que dio la orden.
—Joe…
Murmuró el nombre con dificultad y no ocultó su sorpresa al ver la expresión fría de él.
—Haz lo que te indican, ________ —le aconsejó.
—Pero…
La cruel risa que emitió la mujer armada al observar la expresión de asombro de ________ y la cara despiadada de Joe, fueron como un puñal.
—¡Mírenla! ¡No acaba de creerlo! Debes haber hecho un excelente trabajo para persuadirla, Joe. Aún no acepta la verdad. ¡Tonta! —se burló de ________, sonriendo con malicia—. Joe es de los nuestros, no te ayudará.
_________ observó el rostro tenso de Joe y se dio cuenta de que era verdad. Él volvió la cabeza. La fría expresión de los ojos grises borraba toda la amabilidad que había existido en su rostro. Entonces abrió la puerta del Mercedes y salió aturdida. Tropezó con una piedra y hubiera caído de no ser porque Joe la sujetó de un brazo. Se liberó de la mano con un gesto de rechazo y disimuló el dolor.
—¡No me toques! —gritó, presa de la desesperación.
Una vez más la mujer rió con sorna.
—Joe, Joe —dijo con desdén—. Has destrozado sus sueños. Creía que la querías, siendo que lo único que anhelas es el dinero de su padre. ¿En cuánto tiempo crees que pagará el rescate? Sería mejor que no tardara mucho porque Roma está urgida de fondos para comprar el equipo que necesitamos para…
Se interrumpió, tragando saliva con dolor y enfado. Joe se había alejado de __________, se volvió y sujetó a la otra mujer de una muñeca, haciéndola volverse.
—¡Mide tus palabras, Olivia! —le advirtió.
La mirada de advertencia abarcó a las dos mujeres. _______ sintió que se le helaba la sangre en las venas cuando Olivia sacudió la cabeza y preguntó:
—¿Para qué? Hay maneras efectivas para garantizar que tu amiga jamás repita lo que ha escuchado. ¿Has perdido la devoción a nuestra causa, amigo? Este es el segundo día consecutivo que venimos a este lugar.
Joe encogió los hombros.
—Me retrasé.
Fue notorio que ella no quedó satisfecha con esas dos palabras; frunció el ceño y miró a la joven.
—¿Por esa? Joe…
—El retraso ocurrió en Roma —explicó Joe. Tenso se volvió hacia ella y le dijo con suavidad—: Trata de recordar que estoy a cargo de este asunto, Olivia, y que no te corresponde juzgar mis acciones. Lleva a la joven al Land Rover. Ya hemos perdido demasiado tiempo en este lugar.
—Ven —apoyó el rifle en el pecho de _______—. Bonita pero débil —comentó Olivia. La sonrisa reveló dientes pequeños—. ¡Mira cómo tiembla! Este rifle es muy sensible —le dijo a _______—. Las sacudidas de tu cuerpo son suficientes para…
—Muerta no nos es útil, Olivia —expresó Joe con aterradora calma.
Había cambiado tanto que Saffron casi no lo reconocía. Su encanto había desaparecido. En su lugar estaba la amenaza que le provocó un escalofrío a _______.
—Muerta quizá no —aceptó Olivia—, pero Sir Richard pagará bien por su hija, a pesar de que la mutilemos. Hiciste muy bien al escogerla, Joe.
Esperemos por el bien de ella que a su padre le importe tanto como afirmaste. Hemos leído en los periódicos acerca de ti, ________ Wykeham —le dijo a la joven—. Estamos enterados de tus aventuras y de la fortuna de tu padre. Supimos que ibas a venir a Italia y preparamos con cuidado nuestros planes. Joe nos dijo que no le sería difícil ganar tu confianza. Tienes debilidad por los hombres apuestos.
—Deja de perder el tiempo, Olivia —ordenó Joe—. Regresen a la granja. Tengo que devolver el Mercedes y enviarle un télex a su padre.
Necesitamos obtener resultados rápidos. Recuerda: cuando lleguen a la granja todo debe parecer normal.
—¿Cuándo regresarás?
________ frunció el ceño por la posesiva pregunta de Olivia.
—Lo ignoro. Depende del tiempo que me lleve.
—¿Y ella? —preguntó Olivia, señalando con el rifle en dirección de ________.
—Aténganse al plan —le indicó Joe—. Sin violencia. No tiene objeto…
—¿Por qué no quieres que se le estropee su delicada piel?
De pronto _________ comprendió que Olivia estaba celosa. ¿Cómo sería su relación con Joe? ¿Eran amantes? Le asombró el dolor que sintió.
—Su piel no me interesa, salvo por el precio que podemos pedir por ella —afirmó Joe con indiferencia—. Deberías saberlo. También, que es preciso proporcionarle a su padre las pruebas de que está viva. Esa es la razón por la cual no quiero que se le toque en lo absoluto… por lo menos por ahora. Le tomaré unas instantáneas cuando regrese.
Miró el reloj de pulsera, ________ sintió náusea al comprender cómo había obtenido el dinero para tales lujos.
Antes de dejarla en manos de los tres captores armados, le dijo:
—No caigas en la tentación de hacer alguna tontería. Olivia tiene instrucciones de disparar en caso de que lo hagas.
—No a matar —le previno Olivia, sonriendo con crueldad—. Estarás menos atractiva con las rótulas destrozadas.
Le fue imposible a _________ contener el estremecimiento de horror. La risa maligna de Olivia quedó ahogada por el ruido del motor del Mercedes. La pintura de éste resplandeció un momento por el sol antes de desaparecer en la dirección que había llegado con Joe poco tiempo antes.
Lo que estaba ocurriendo era que sus pesadillas más espantosas se habían vuelto realidad.
Mientras permanecía bajo el ardiente sol, sus emociones fueron golpeadas por la realidad. El deseo y el amor se convirtieron en sed de venganza. "No porque me hayan secuestrado", pensó ________, "sino por la forma en que se llevó a cabo. ¡Con qué facilidad se introdujo Joe en mi vida! Fui tan vulnerable ante él. Me usó con insensibilidad. Haré que pague por esto aunque tenga que emplear toda mi vida para lograrlo".
Una insaciable sed de venganza la inundó e hizo que se desvanecieran el temor y el pánico; su mente empezó a funcionar en forma febril para encontrar una vía de escape. Se esforzó en ignorar el ominoso silencio de sus captores y los dos rifles que le apuntaban a la espalda, mientras Olivia se adelantaba hacia el polvoriento jeep.
♫ Laura Jonas ♥
Re: Viaje al Infierno (Joe y tu)
Capitulo 3
—Entra —le ordenó con brusquedad Olivia a _________. :¬¬:
________ se negó a dejarse dominar por el terror que amenazaba invadirla, comprendiendo que eso era lo que quería la otra mujer.
—Recuerden lo que dijo Joe —dijo Olivia al entrar en el vehículo—: Cuando volvamos a la granja todo debe parecer normal.
—¡Joe! —el más moreno de los dos hombres exclamó, escupiendo—. Dio, ¿Quién es Joe para darnos órdenes? Siempre hemos trabajado por nuestra cuenta.
En apariencia, la queja ya había sido formulada varias veces. __________ lo confirmó cuando escuchó a Olivia responder con aspereza:
—Eso era antes. Ahora recibimos órdenes de Roma. Joe está a cargo. ¿No fue él quien sugirió esto? —agregó a la defensiva—. Nos producirá más dinero que…
—Dinero… sí, siempre lo estamos necesitando —estuvo de acuerdo el más alto.
Todos rieron. ________ hizo una mueca de dolor cuando Olivia le sujetó con fuerza la muñeca y ordenó:
—Piero, toma el volante. Guido, ayúdame a esposarla.
Guido era el de estatura más baja y el que más le desagradaba a ________. Cuando se inclinó sobre ella, trató de alejarse por el mal olor que despedía su cuerpo. El hombre sujetó con facilidad las muñecas de _________, y ésta tuvo que aceptar la humillación de ser esposada a uno de los costados del Land Rover.
—Es para evitar que trates de hacer alguna tontería, por ejemplo saltar del coche —la previno Olivia—. De todas maneras, no te creo capaz. No tienes madera de mártir. ¿Nunca te ha preocupado que mientras tú vives bebiendo champaña y comiendo caviar, hay personas en todo el mundo que sufren en la pobreza? ¿Qué las obligan a pagar impuestos de su miserable salario para mantener a sus opresores? Eso terminará pronto.
El fanatismo de la joven aterrorizó a ________. Aún no comprendía de qué estaba hablando Olivia, pero el instinto de conservación la hizo mostrar interés. Le parecía que escuchando a sus captores podría descubrir la clave para su liberación.
—¿Eres comunista? —se aventuró a preguntar.
—Sí —brillaron los ojos negros—. Cada ser humano tiene derecho a la igualdad, pero ese derecho básico le es negado. La riqueza que debería ser distribuida entre todos es acaparada por unos pocos, especialmente por la iglesia, pero eso pronto acabará.
________ no podía creer lo que escuchaba.
—Italia es una nación católica —protestó—. La gente nunca abandonará su religión.
—Tendremos que obligarla —intervino Guido—. Después, comprenderán la sabiduría con que estamos actuando. La iglesia está corrupta. Es un gigantesco negocio que trasquila a las gentes. Tomaremos esa riqueza y la distribuiremos entre los pobres.
"No es posible que crean que eso puede llevarse a cabo", pensó __________ espantada, pero se dio cuenta de que sí era así, por la expresión de cada uno de ellos. ¿Compartirá Joe sus opiniones fanáticas?, se preguntó.
—La organización tiene aliados valiosos en las universidades —le explicó Olivia—. Nuestros jóvenes se dan cuenta de la falsedad de la religión cristiana. "Bienaventurados son los humildes" —citó con burla—. Eso es lo que dicen, pero decir y hacer son dos cosas diferentes, y en este mundo los humildes son pisoteados.
—¿Intentan cambiar la situación?
—Es lo que muchas personas suponen que nos proponemos —intervino Piero con voz triste—, pero siempre existirán los dueños del poder y los que producen para ellos. Antes que podamos reconstruir, tenemos que destruir, y para eso necesitamos dinero, que obtenemos secuestrando a personas ricas como tú.
—Entre todas las llamadas organizaciones terroristas del mundo, nosotros somos la más temida —alardeó Olivia—. Más que la O.L.P. y las Brigadas Rojas. En la actualidad somos los responsables de la muerte de más de mil personas.
—Pero están asesinando, inocentes —opinó _________—. De seguro obtendrían más apoyo para su causa usando argumentos bien elaborados, en lugar de terrorismo insensato.
—¿Como lo hacen los dictadores opulentos? —le respondió con mofa Piero—. Hemos descubierto que un rifle hace más que un millón de palabras inútiles.
—¡Sal!
Había estado tan ensimismada en sus pensamientos que no se dio cuenta de que el Land Rover se detuvo.
—¡Apresúrate! —ordenó Olivia, casi empujándola fuera del vehículo después de quitarle las esposas—. No hagas esperar a Guido —le advirtió—. Se impacienta y cuando eso sucede…
No completó la amenaza; pero no necesitaba hacerlo. _________ observó la sonrisa maligna de Guido.
—¿Por qué no le doy una muestra de lo que soy capaz? —sugirió el hombre, aproximándose a ________.
Ya sus dedos habían sujetado la parte delantera de la camisa de la joven y ésta se había puesto muy tensa en el asiento, antes que Olivia le dijera con desaliento:
—Joe ordenó que no se le tocara.
Guido hizo una mueca.
—¿Porque la quiere para él? —sugirió—. No sería el primer hombre que la poseyera, y ella me parece muy apetitosa.
—Joe no la desea —afirmó Olivia; sus ojos brillaron de furia al mirar el esbelto cuerpo de ______—. La desprecia a ella y a todo lo que simboliza. Ya lo has escuchado… ¡Afuera! —le ordenó de nuevo a la muchacha.
_________, temblorosa, obedeció. El imaginar a Guido acariciándola la hizo sentirse angustiada. "¡Gracias a Dios que ignoran la verdad!", pensó "Si la supieran"… Tembló con violencia, comprendiendo que la pérdida de su virginidad sería algo divertido para un hombre como Guido.
La casa de la granja estaba situada en un olivar cubierto por la maleza, y que abarcaba pocas hectáreas, en las que también habían parras descuidadas y media docena de vacas en un establo.
—Es otra de las ideas de Joe —le explicó Olivia mientras la observaba—. Si llega algún curioso creerá que somos una familia pobre tratando de ganarse la vida con esta pequeña propiedad casi en ruinas. Guido y Piero son mis hermanos.
—¿Y Joe? —preguntó ________ sin pensar. Deseó no haberlo hecho cuando observó la expresión de los ojos de la joven. Se dio cuenta de que había estado esperando esa pregunta.
—Joe representa el mismo papel que en la vida real —le informó con suavidad—. Es mi hombre, mi amante —rió—. ¡Estúpida niña rica! ¿Creíste que un hombre como Joe podía desear a una mujer como tú? ¿Una mujer a quien no le importa nada, salvo sus vestidos y joyas?
Sus labios se torcieron en una mueca burlona y ________ sintió que la furia se apoderaba de ella.
—Por lo menos eso es mejor que las ideas a medio elaborar que tú llamas "causa" —se mofó.
Hizo una mueca de dolor cuando Olivia la agarró del cabello. Quedó una marca en el rostro de ________ cuando además le dio una cachetada.
_________ sintió deseos de vomitar, provocados más por la violencia que por el dolor. Siempre había detestado la violencia. "¿Se habrán reído los dos de mí cuando planeaban mi captura y cómo Joe me haría el amor?"
—Era su deber —le dijo Olivia, leyéndole los pensamientos—. No creas que te deseaba; te odia a ti y a todas las de tu clase. Si no fuera por el dinero que pagará tu padre por tu rescate, él te mataría sin sentir más remordimientos que los que experimentaría al aplastar a una víbora.
Apenas empezaba a comprender ________ que era la prisionera de ésos fanáticos, cuyo respeto por la vida humana era nulo.
Pronto se encontró en el interior de la casa de la granja. La parte inferior consistía en una habitación larga y primitiva. El suelo era de tierra endurecida por el transcurso de los años. En una esquina se hallaba una cocina rústica que tenía un alargado fogón de leña y un grifo de agua.
Habían pasado junto a un cuarto separado. _________ se estremeció al pensar en los sanitarios. "¿Tratarán de adoctrinarme con sus creencias? Si lo hacen me resistiré con todas mis fuerzas", se propuso. Después, pensó que la organización trataría de no convertir a sus víctimas.
♫ Laura Jonas ♥
Re: Viaje al Infierno (Joe y tu)
"Me consideran sólo una fuente de ingresos. Así fue con Joe. ¡Joe! ¿Por qué sigo sintiendo ese dolor intenso cada vez que pienso en él? El hombre que imaginé que era, no existe. Fue un sueño, un ficticio ser romántico creado por mi necesidad de amar".
—¡Ven!
La rudeza de la voz la regresó a la realidad. Olivia le indicaba que debía subir por la desvencijada escalera de madera que conducía al piso superior. Cuatro puertas estaban en el pequeño descansillo, y en una se encontraba un candado nuevo y reluciente. Olivia lo abrió y empujó la puerta, levantando nubes de polvo al hacer entrar a ________. La habitación pequeña tenía una ventana, en una esquina un catre angosto y, junto a éste, en el suelo, un saco de dormir.
—Su dormitorio —anunció Olivia haciendo una venia—. Espero que la signorina encuentre todo a su satisfacción.
Antes que _______ hiciera algún comentario, la puerta estaba cerrada de nuevo con candado.
Corrió hacia la ventana a través de la cual lo único que logró ver fue la árida campiña y el angosto río que serpenteaba por la pradera. "Son profesionales", reconoció. "Cuando mi padre reciba la noticia de mi desaparición, será demasiado tarde para que me localicen". Se desplomó en el catre y amortiguó el sonido de su llanto con el saco de dormir, mientras las lágrimas brotaban. Para aumentar sus desdichas, sintió hambre. Cuando dejó de llorar reconoció que era muy probable que necesitara ese desahogo. Poco a poco dejó de temblar su cuerpo. Su atención fue atraída por unos pasos en la escalera. Frenética se limpió el rostro, deseando que, debido a la poca luz que penetraba en la habitación, nadie se diera cuenta de que había estado llorando. Paralizada por la tensión, escuchó.
—¡Regresa, Guido! —era la voz de Olivia—. ¡Joe está aquí!
El sonido de los pasos se desvaneció y _________ dejó escapar un suspiro de alivio. Los ojos, como de reptil, de Guido, le provocaban repulsión. "Dios mío, si logro escapar, haré que todos paguen por sus culpas… Todos; pero, en primer lugar, Joe. Joe, que me engañó y me hizo creer que yo le importaba, ¡cuando lo que le importaba era mi dinero!"
—¿Has entendido las instrucciones?
Se encontraban en la habitación inferior. Joe y Olivia estaban en un lado de la mesa, vacía y baja, y _______ en el otro, mientras Guido y Piero hacían guardia.
La aurora pronto llegaría. Nunca se había sentido _________ tan contenta porque terminara la noche. No había dormido. Le había sido imposible. Y ahora se encontraba en el piso inferior de esa casa desvencijada, y le estaban informando que si se portaba mal, recibiría un balazo en una pierna… o en un lugar más peligroso.
—¿Por qué no me dejan encerrada bajo llave? —preguntó con voz inexpresiva, sin hacer caso del destello de advertencia que apareció en los ojos de Joe.
—No somos tan estúpidos —respondió Joe con frialdad—. Pueden investigar en este sitio. Si es así, debes comportarte exactamente como se te ha ordenado. Eres la prima de Olivia, de inteligencia escasa, pero útil para los trabajos manuales de la casa. Llegamos hace poco a la granja y estamos esforzándonos para restaurarla… Y trabajaremos —le informó a los otros, dirigiendo de súbito su atención a sus compañeros—. Será una práctica excelente, camaradas, para cuando llegue el día en que todos seamos iguales y el mundo esté convertido en un estado marxista perfecto.
Si no hubiera tenido antecedentes, _________ habría jurado que había un dejo de burla en las últimas palabras. De inmediato Olivia objetó:
—Nosotros nunca labraremos la tierra como campesinos, Joe. Eso no…
—Creo que el postulado más importante del comunismo es que todos debemos ser iguales, no debe existir una minoría selecta —interrumpió _________.
Olivia le dirigió una mirada fulminante.
—Siempre existirán los dirigentes. Nuestra organización ya está preparando a hombres y mujeres para esos cargos. Ellos no estarán guiados por la avaricia o por el deseo de poder, como es el caso de los gobiernos capitalistas actuales. Nos encargaremos de guiar a las personas por su propio beneficio…
—Así hablan los dictadores —se burló __________.
—¡Ya es suficiente! —espetó Joe—. Como te estaba informando: si viene la policía a buscarte, un movimiento en falso y ellos morirán junto contigo.
—Es mucha matanza —comentó con amargura _________—. ¿Lo justifica cualquier causa?
—Pregúntale a tu gobierno capitalista —sugirió Olivia—. Se han enriquecido con la muerte de otros. Pregúntales si es justo.
—Descubrirás que es difícil convencerla —interrumpió Joe—. Olvidas que su padre es uno de esos capitalistas.
________ le pudo haber dicho que su padre edificó su imperio mediante esfuerzos, pero decidió no mencionarlo. "¿Me atreveré a delatar a estos maleantes a la policía, si ésta se llegara a presentar?" Tuvo que reconocer que no lo haría. Arriesgaría su propia vida y pondría en peligro la de todos.
—Es una sabia decisión —se burló en forma odiosa Joe, interpretando bien la expresión de ________—. Recuerda, Guido y Piero tienen órdenes precisas, y no vacilarán en obedecerlas, y, a propósito, Olivia me informó que has estado tratando de seducir a Guido. Por tu propio bien te aconsejo que dejes de hacerlo. Él es leal a la causa y aunque tiene debilidad por las mujeres, serías por completo insensata si creyeras que podrías aprovechar esa debilidad para escaparte. Guido es capaz de hacerte el amor y matarte al minuto siguiente. Para él eres un cuerpo, no una persona. Es mejor que lo recuerdes.
—¿Cómo olvidarlo? —replicó con amargura __________—. Es algo que tienen en común él y tú. Es probable que sea parte de lo que enseñan en tu organización —sugirió con sarcasmo.
Tuvo la satisfacción ver palidecer a Joe "Conque, después de todo, tiene puntos vulnerables. No le gustó que lo comparara con Guido", se dijo. "¡Qué bueno!"
"¿Qué haré si viene la policía? ¿Podré atraer su atención? ¿Me reconocerán?". La esperanza la reanimó. Como si lo hubiera descubierto en sus ojos, Joe opinó:
—Necesitamos hacer algo con respecto a su apariencia —la observó unos instantes y luego le ordenó a Olivia—: Tan pronto como le tome las fotografías para enviarlas a su padre, le puedes cortar el cabello.
"¡Mi cabello!" Lo cubrió con las manos, como si quisiera protegerlo. Siempre lo había usado largo. Pocas semanas antes su padre le había dicho que parecía una cascada de fuego. Notó la mirada triunfal de Olivia y supo que gozaría cortándoselo.
Para tomar las fotografías que iba a enviarle a su padre, Joe hizo que se sentará en una silla de madera. Oliva la esposó de nuevo y le torció los brazos con rudeza. Un quejido escapó de los labios de ________ y Joe entrecerró los ojos al presenciar la escena.
—Ya es bastante —le advirtió a Olivia—. No nos conviene que su padre se llene de pánico ante la foto de su muchachita llorosa.
—¿Por qué no? —objetó Olivia—. Eso hará que se apresure a pagar el rescate.
—O bien el terror lo hará cometer tonterías —corrigió Joe—. Recuerda lo que pasó con Paul Jonas.
El corazón de ________ palpitó con fuerza al escuchar el nombre del gran amigo de su padre.
—¿Mataron ustedes a Paul Jonas? —preguntó apesadumbrada, con los ojos fijos en el rostro de Joe.
—Personalmente, no —se burló con ligereza.
—Joe no se ocupa de matar —intervino Piero—. Es muy amable.
—Soy demasiado sensible —dijo Joe con calma—. Asesinar a Jonas no fue conveniente, ya que nunca pagaron el rescate. Tenemos que destruir las pruebas —miró con frialdad y sin emoción el tenso rostro de ________—. Pero antes asegurémonos de que vamos a recibir nuestro dinero.
"Es peor que los otros", pensó con amargura _________. "Ellos tienen por lo menos la excusa de su creencia en su causa, si es que puede llamársele excusa, pero creo que Joe no comparte su doctrina. Es demasiado cínico y reservado. ¿Por qué se confabularía con estas personas? ¿Qué está haciendo con ellos? Es por dinero", fue la única explicación que encontró. "¿Podré convencerlo de que me deje en libertad, ofreciéndole un soborno? Puedo insistir en que mi padre le pagará si me regresa a su lado sin haberme hecho daño".
—Sonríe —le ordenó él persuasivo—. Para tu papá. :¬¬:
—¡Ven!
La rudeza de la voz la regresó a la realidad. Olivia le indicaba que debía subir por la desvencijada escalera de madera que conducía al piso superior. Cuatro puertas estaban en el pequeño descansillo, y en una se encontraba un candado nuevo y reluciente. Olivia lo abrió y empujó la puerta, levantando nubes de polvo al hacer entrar a ________. La habitación pequeña tenía una ventana, en una esquina un catre angosto y, junto a éste, en el suelo, un saco de dormir.
—Su dormitorio —anunció Olivia haciendo una venia—. Espero que la signorina encuentre todo a su satisfacción.
Antes que _______ hiciera algún comentario, la puerta estaba cerrada de nuevo con candado.
Corrió hacia la ventana a través de la cual lo único que logró ver fue la árida campiña y el angosto río que serpenteaba por la pradera. "Son profesionales", reconoció. "Cuando mi padre reciba la noticia de mi desaparición, será demasiado tarde para que me localicen". Se desplomó en el catre y amortiguó el sonido de su llanto con el saco de dormir, mientras las lágrimas brotaban. Para aumentar sus desdichas, sintió hambre. Cuando dejó de llorar reconoció que era muy probable que necesitara ese desahogo. Poco a poco dejó de temblar su cuerpo. Su atención fue atraída por unos pasos en la escalera. Frenética se limpió el rostro, deseando que, debido a la poca luz que penetraba en la habitación, nadie se diera cuenta de que había estado llorando. Paralizada por la tensión, escuchó.
—¡Regresa, Guido! —era la voz de Olivia—. ¡Joe está aquí!
El sonido de los pasos se desvaneció y _________ dejó escapar un suspiro de alivio. Los ojos, como de reptil, de Guido, le provocaban repulsión. "Dios mío, si logro escapar, haré que todos paguen por sus culpas… Todos; pero, en primer lugar, Joe. Joe, que me engañó y me hizo creer que yo le importaba, ¡cuando lo que le importaba era mi dinero!"
—¿Has entendido las instrucciones?
Se encontraban en la habitación inferior. Joe y Olivia estaban en un lado de la mesa, vacía y baja, y _______ en el otro, mientras Guido y Piero hacían guardia.
La aurora pronto llegaría. Nunca se había sentido _________ tan contenta porque terminara la noche. No había dormido. Le había sido imposible. Y ahora se encontraba en el piso inferior de esa casa desvencijada, y le estaban informando que si se portaba mal, recibiría un balazo en una pierna… o en un lugar más peligroso.
—¿Por qué no me dejan encerrada bajo llave? —preguntó con voz inexpresiva, sin hacer caso del destello de advertencia que apareció en los ojos de Joe.
—No somos tan estúpidos —respondió Joe con frialdad—. Pueden investigar en este sitio. Si es así, debes comportarte exactamente como se te ha ordenado. Eres la prima de Olivia, de inteligencia escasa, pero útil para los trabajos manuales de la casa. Llegamos hace poco a la granja y estamos esforzándonos para restaurarla… Y trabajaremos —le informó a los otros, dirigiendo de súbito su atención a sus compañeros—. Será una práctica excelente, camaradas, para cuando llegue el día en que todos seamos iguales y el mundo esté convertido en un estado marxista perfecto.
Si no hubiera tenido antecedentes, _________ habría jurado que había un dejo de burla en las últimas palabras. De inmediato Olivia objetó:
—Nosotros nunca labraremos la tierra como campesinos, Joe. Eso no…
—Creo que el postulado más importante del comunismo es que todos debemos ser iguales, no debe existir una minoría selecta —interrumpió _________.
Olivia le dirigió una mirada fulminante.
—Siempre existirán los dirigentes. Nuestra organización ya está preparando a hombres y mujeres para esos cargos. Ellos no estarán guiados por la avaricia o por el deseo de poder, como es el caso de los gobiernos capitalistas actuales. Nos encargaremos de guiar a las personas por su propio beneficio…
—Así hablan los dictadores —se burló __________.
—¡Ya es suficiente! —espetó Joe—. Como te estaba informando: si viene la policía a buscarte, un movimiento en falso y ellos morirán junto contigo.
—Es mucha matanza —comentó con amargura _________—. ¿Lo justifica cualquier causa?
—Pregúntale a tu gobierno capitalista —sugirió Olivia—. Se han enriquecido con la muerte de otros. Pregúntales si es justo.
—Descubrirás que es difícil convencerla —interrumpió Joe—. Olvidas que su padre es uno de esos capitalistas.
________ le pudo haber dicho que su padre edificó su imperio mediante esfuerzos, pero decidió no mencionarlo. "¿Me atreveré a delatar a estos maleantes a la policía, si ésta se llegara a presentar?" Tuvo que reconocer que no lo haría. Arriesgaría su propia vida y pondría en peligro la de todos.
—Es una sabia decisión —se burló en forma odiosa Joe, interpretando bien la expresión de ________—. Recuerda, Guido y Piero tienen órdenes precisas, y no vacilarán en obedecerlas, y, a propósito, Olivia me informó que has estado tratando de seducir a Guido. Por tu propio bien te aconsejo que dejes de hacerlo. Él es leal a la causa y aunque tiene debilidad por las mujeres, serías por completo insensata si creyeras que podrías aprovechar esa debilidad para escaparte. Guido es capaz de hacerte el amor y matarte al minuto siguiente. Para él eres un cuerpo, no una persona. Es mejor que lo recuerdes.
—¿Cómo olvidarlo? —replicó con amargura __________—. Es algo que tienen en común él y tú. Es probable que sea parte de lo que enseñan en tu organización —sugirió con sarcasmo.
Tuvo la satisfacción ver palidecer a Joe "Conque, después de todo, tiene puntos vulnerables. No le gustó que lo comparara con Guido", se dijo. "¡Qué bueno!"
"¿Qué haré si viene la policía? ¿Podré atraer su atención? ¿Me reconocerán?". La esperanza la reanimó. Como si lo hubiera descubierto en sus ojos, Joe opinó:
—Necesitamos hacer algo con respecto a su apariencia —la observó unos instantes y luego le ordenó a Olivia—: Tan pronto como le tome las fotografías para enviarlas a su padre, le puedes cortar el cabello.
"¡Mi cabello!" Lo cubrió con las manos, como si quisiera protegerlo. Siempre lo había usado largo. Pocas semanas antes su padre le había dicho que parecía una cascada de fuego. Notó la mirada triunfal de Olivia y supo que gozaría cortándoselo.
Para tomar las fotografías que iba a enviarle a su padre, Joe hizo que se sentará en una silla de madera. Oliva la esposó de nuevo y le torció los brazos con rudeza. Un quejido escapó de los labios de ________ y Joe entrecerró los ojos al presenciar la escena.
—Ya es bastante —le advirtió a Olivia—. No nos conviene que su padre se llene de pánico ante la foto de su muchachita llorosa.
—¿Por qué no? —objetó Olivia—. Eso hará que se apresure a pagar el rescate.
—O bien el terror lo hará cometer tonterías —corrigió Joe—. Recuerda lo que pasó con Paul Jonas.
El corazón de ________ palpitó con fuerza al escuchar el nombre del gran amigo de su padre.
—¿Mataron ustedes a Paul Jonas? —preguntó apesadumbrada, con los ojos fijos en el rostro de Joe.
—Personalmente, no —se burló con ligereza.
—Joe no se ocupa de matar —intervino Piero—. Es muy amable.
—Soy demasiado sensible —dijo Joe con calma—. Asesinar a Jonas no fue conveniente, ya que nunca pagaron el rescate. Tenemos que destruir las pruebas —miró con frialdad y sin emoción el tenso rostro de ________—. Pero antes asegurémonos de que vamos a recibir nuestro dinero.
"Es peor que los otros", pensó con amargura _________. "Ellos tienen por lo menos la excusa de su creencia en su causa, si es que puede llamársele excusa, pero creo que Joe no comparte su doctrina. Es demasiado cínico y reservado. ¿Por qué se confabularía con estas personas? ¿Qué está haciendo con ellos? Es por dinero", fue la única explicación que encontró. "¿Podré convencerlo de que me deje en libertad, ofreciéndole un soborno? Puedo insistir en que mi padre le pagará si me regresa a su lado sin haberme hecho daño".
—Sonríe —le ordenó él persuasivo—. Para tu papá. :¬¬:
♫ Laura Jonas ♥
Re: Viaje al Infierno (Joe y tu)
Apretando con fuerza los labios, ________ se negó, incluso, a mirar hacia la máquina fotográfica. Con un breve suspiro Joe se aproximó y le sujetó la barbilla con fuerza, haciendo que volviera el rostro.
—¿Por qué estás tan complaciente? —le reclamó Olivia, entrecerrando los ojos en actitud de sospecha—. Te estás volviendo blando, amigo mío.
Como si quisiera refutar esas palabras, Joe apretó la barbilla de __________ hasta causarle dolor. Sus ojos grises adquirieron la frialdad del hielo cuando la hizo volver la cabeza hacia la máquina fotográfica.
—Sonríe, _______ —le ordenó—, o puedo cambiar de opinión y estar de acuerdo con Olivia en que las lágrimas convencerían a tu padre.
—¿Cómo es posible que hagas esto? —le preguntó entre dientes ___________, olvidando la promesa que se había hecho de no hablar con él.
—Muy fácil, cuando se trata de personas crédulas y tontas como tú —se burló sin alzar la voz Joe, observando cómo desaparecía el color del rostro de ella.
—¡Eres un… un sádico! —exclamó _________, sintiendo náuseas—. Supongo que tu mente retorcida piensa que debes vanagloriarte de cómo me engañaste y cómo caí en la trampa. ¡Hazlo! —gritó con amargura—. ¡Díselo! Estoy segura de que ellos lo aprobarán. ¡No mereces formar parte de la raza humana! —terminó sollozando.
—Ten cuidado —le advirtió Joe con voz tensa—, de lo contrario, consideraré necesario el probarte lo antisocial que puedo ser.
Miró significativamente sus senos y __________ se molestó por ruborizarse.
Joe cambiaba de posición, retratándola con rapidez antes que pudiera mirar hacia otro lado. Ella se vio obligada a aceptar que había sido más listo que ella. "¡Lo odio, lo odio!", se dijo.
—Ahora grabemos —_________ regresó a la realidad al escuchar la voz enérgica de Joe, que habló con la propiedad de un hombre de negocios—. Necesitamos un mensaje para tu querido papá, en el que le comentes lo mucho que estás disfrutando.
—¡Vete al diablo! —le espetó cuando él extrajo del bolsillo una grabadora miniatura—. ¡No diré nada!
Nico se le aproximó en forma amenazadora.
—Creo que sí lo vas a hacer.
La unión de actitud y voz debilitó por completo la determinación de ella.
—Podemos lograrlo de dos maneras —continuó diciendo Joe—, tranquilamente, sin que nada te ocurra, o…
Calló, esperando; ________ supo que no estaba haciendo amenazas vanas. Le llegó el impulso fugaz de repetir su comentario, pero el sentido común se impuso.
—¿Qué es lo que debo decir?
Trató de no hacerle caso a su orgullo herido por tener que rendirse con facilidad ante la amenaza de la fuerza.
La grabación fue breve. En media docena de frases le informaba a su padre que estaba en grave peligro, que no debería acudir a la policía y que sería mejor que hiciera lo que los secuestradores ordenaran.
—Excelente —se burló Joe cuando ella terminó de hablar—. ¿Ves qué fácil es todo cuando cooperas?
En ese momento ella dio rienda suelta a sus emociones.
—¡Cómo te odio!
Lo único que logró fue que la mirara con fijeza. Se sonrojó y fue incapaz de sostener la mirada hostil.
—Ahora cada quien se ocupará de sus labores —dijo Joe después de guardar la grabadora—. _________, ayudarás a Olivia con el almuerzo. ¿Qué? —preguntó calmado cuando Saffron empezó a protestar diciendo que la habían secuestrado, pero que no la podían obligar a comportarse como una esclava—. ¿Te parece el trabajo en la casa demasiado bajo? Es probable que prefieras trabajar junto con Guido en los emparrados.
Paralizada por el espanto, negó con la cabeza y siguió a Olivia hacia el fregadero, mientras la perseguía la risa burlona de Joe.
Era notorio que Olivia no era mujer hogareña. Con una mueca, empujó hacia ________ el tazón con verduras.
—Toma, prepáralas.
Inició una conferencia sobre el papel que su organización le asignaría a la mujer. ________ dedujo que no incluiría tareas comunes.
Mientras rallaba las zanahorias en forma metódica, la joven observó el cuchillo que tenía en la mano. Pequeño y filoso… "¿Me atreveré a robarlo?"
Miró por encima del hombro. Guido estaba cerca de la puerta, limpiando el rifle. Piero había salido y Olivia hablaba en voz baja con Joe. Su corazón palpitó con fuerza al apretar el cuchillo.
—¿Terminaste?
Olivia tomó la sartén de hierro con rapidez, metió el cuchillo en un bolsillo de sus pantalones mientras el corazón le latía desenfrenado. Durante cada segundo que siguió, esperaba que cualquiera le ordenara con brusquedad que se quedara inmóvil, pero nadie lo hizo.
—¿Cuándo voy a cortarle el cabello? —le preguntó Olivia a Joe—. No podemos arriesgarnos a que siga con ese aspecto.
Joe miró a ___________ y el pulso de ésta se aceleró. "¿Habrá adivinado lo del cuchillo?", se preguntó. Vio una extraña expresión en sus ojos cuando el observó la cascada de cabello.
—No, no debemos arriesgarnos. Llévala arriba.
Guido ahora se hallaba al pie de la escalera y ________ se vio obligada a rozarle el cuerpo al pasar. Él sonrió con lascivia, mirando los senos de _________, y ésta retrocedió.
—¡Fíjate en ella! —la acusó Olivia ante Joe—. Parece una tímida virgen de sociedad, pero sólo es apariencia. ¿Por qué te portas así? —le preguntó a ________—. Guido no es diferente de cualquiera de los hombres con los que has estado. Él ha tenido amantes ricas. Las mujeres adineradas gustan de hombres que sean rudos con ellas. ¿No es así, caro? ¿O es por la presencia de Joe que estás pálida y temerosa? —preguntó entrecerrando los ojos por la sospecha—. Ten cuidado, amico —previno a Joe con suavidad—. Tratará de conquistarte. Conozco a las de su calaña.
Arriba, en su pequeña prisión, Olivia la empujó para que se sentara en la única silla que había. A pesar de su escasa estatura Olivia era fuerte. _________ hizo una mueca de dolor por la presión de los dedos. Trató de no parpadear cuando Olivia le haló el cabello con brutalidad y cortó los mechones sin miramientos.
—No es precisamente tu estilo de peinado —se burló Olivia cuando terminó—. Leí que en Irlanda del Norte tienen la costumbre de emplumar a las traidoras. Supongo que la única manera de quitar el alquitrán es cortando el pelo a raíz, ¿o no?
—¿Por qué me preguntas? —_________ se enorgulleció de la firmeza de su voz—. ¿Estás pensando en que tu organización podría adoptar esa costumbre con las traidoras?
—Lo que creo es que tu padre pagará más pronto si en las fotografías que le enviemos apareces sin cabello y emplumada. Hablaré con Joe.
Fue demasiado para _________. Sacó el cuchillo y amenazó a Olivia con él. Escuchó la protesta de ésta y los gritos de auxilio; la voz de Joe ordenando a Guido que permaneciera de guardia y a él subiendo veloz por la escalera. Entró al dormitorio y al dar un vistazo comprendió lo que ocurría.
—¡__________, dame el cuchillo!
Se le aproximó por la espalda y le sujetó con firmeza la muñeca, pero sin lastimarla. Le presionó los dedos para que soltara el cuchillo. Olivia empezó a insultarla y le arrojó a la cara el pelo que le había cortado.
—¡No sigas, Olivia! —ordenó Joe.
—¡Mira lo que me hizo! —protestó Olivia, mostrándole a Joe un rasguño en el brazo—. ¡Me pagará esto! :grupo:
Tomó las tijeras. Con felina agilidad se movió Joe y realizó la misma operación que había hecho unos segundos antes con _________.
—¿La registraste? —le preguntó a Olivia con voz calmada.
—¡Ella no me volverá a tocar!
Las palabras salieron de la boca de _________ antes que pudiera evitarlo. Se dio cuenta de su error al percibir la expresión de los ojos grises, y luego la voz de Joe.
—Me parece bien; yo te registraré.
—¡No!
La explosiva protesta provocó la risa de Olivia.
—Entrégame las tijeras —le ordenó Joe a Olivia—. Luego, baja y ayuda a Guido en su vigilancia.
_______ se dio cuenta de que la muchacha italiana se negaba a dejarlos solos, pero que no se atrevía a desobedecer a Joe.
Pasaron unos segundos después de la salida de Olivia sin que él se moviera.
—Ven acá. Terminemos con esto —dijo al fin.
—¡Tú no me tocarás!
Había menos seguridad en su voz. A pesar de que Joe no se había movido, ella empezó a retroceder, hacia una esquina de la habitación.
Y, de pronto, Joe caminó con tanta rapidez, que ella se vio atrapada en sus brazos sin poder impedirlo. El aliento de Joe, fresco, le, abanicaba la frente.
—¡No! —le rogó.
—¿Por qué estás tan complaciente? —le reclamó Olivia, entrecerrando los ojos en actitud de sospecha—. Te estás volviendo blando, amigo mío.
Como si quisiera refutar esas palabras, Joe apretó la barbilla de __________ hasta causarle dolor. Sus ojos grises adquirieron la frialdad del hielo cuando la hizo volver la cabeza hacia la máquina fotográfica.
—Sonríe, _______ —le ordenó—, o puedo cambiar de opinión y estar de acuerdo con Olivia en que las lágrimas convencerían a tu padre.
—¿Cómo es posible que hagas esto? —le preguntó entre dientes ___________, olvidando la promesa que se había hecho de no hablar con él.
—Muy fácil, cuando se trata de personas crédulas y tontas como tú —se burló sin alzar la voz Joe, observando cómo desaparecía el color del rostro de ella.
—¡Eres un… un sádico! —exclamó _________, sintiendo náuseas—. Supongo que tu mente retorcida piensa que debes vanagloriarte de cómo me engañaste y cómo caí en la trampa. ¡Hazlo! —gritó con amargura—. ¡Díselo! Estoy segura de que ellos lo aprobarán. ¡No mereces formar parte de la raza humana! —terminó sollozando.
—Ten cuidado —le advirtió Joe con voz tensa—, de lo contrario, consideraré necesario el probarte lo antisocial que puedo ser.
Miró significativamente sus senos y __________ se molestó por ruborizarse.
Joe cambiaba de posición, retratándola con rapidez antes que pudiera mirar hacia otro lado. Ella se vio obligada a aceptar que había sido más listo que ella. "¡Lo odio, lo odio!", se dijo.
—Ahora grabemos —_________ regresó a la realidad al escuchar la voz enérgica de Joe, que habló con la propiedad de un hombre de negocios—. Necesitamos un mensaje para tu querido papá, en el que le comentes lo mucho que estás disfrutando.
—¡Vete al diablo! —le espetó cuando él extrajo del bolsillo una grabadora miniatura—. ¡No diré nada!
Nico se le aproximó en forma amenazadora.
—Creo que sí lo vas a hacer.
La unión de actitud y voz debilitó por completo la determinación de ella.
—Podemos lograrlo de dos maneras —continuó diciendo Joe—, tranquilamente, sin que nada te ocurra, o…
Calló, esperando; ________ supo que no estaba haciendo amenazas vanas. Le llegó el impulso fugaz de repetir su comentario, pero el sentido común se impuso.
—¿Qué es lo que debo decir?
Trató de no hacerle caso a su orgullo herido por tener que rendirse con facilidad ante la amenaza de la fuerza.
La grabación fue breve. En media docena de frases le informaba a su padre que estaba en grave peligro, que no debería acudir a la policía y que sería mejor que hiciera lo que los secuestradores ordenaran.
—Excelente —se burló Joe cuando ella terminó de hablar—. ¿Ves qué fácil es todo cuando cooperas?
En ese momento ella dio rienda suelta a sus emociones.
—¡Cómo te odio!
Lo único que logró fue que la mirara con fijeza. Se sonrojó y fue incapaz de sostener la mirada hostil.
—Ahora cada quien se ocupará de sus labores —dijo Joe después de guardar la grabadora—. _________, ayudarás a Olivia con el almuerzo. ¿Qué? —preguntó calmado cuando Saffron empezó a protestar diciendo que la habían secuestrado, pero que no la podían obligar a comportarse como una esclava—. ¿Te parece el trabajo en la casa demasiado bajo? Es probable que prefieras trabajar junto con Guido en los emparrados.
Paralizada por el espanto, negó con la cabeza y siguió a Olivia hacia el fregadero, mientras la perseguía la risa burlona de Joe.
Era notorio que Olivia no era mujer hogareña. Con una mueca, empujó hacia ________ el tazón con verduras.
—Toma, prepáralas.
Inició una conferencia sobre el papel que su organización le asignaría a la mujer. ________ dedujo que no incluiría tareas comunes.
Mientras rallaba las zanahorias en forma metódica, la joven observó el cuchillo que tenía en la mano. Pequeño y filoso… "¿Me atreveré a robarlo?"
Miró por encima del hombro. Guido estaba cerca de la puerta, limpiando el rifle. Piero había salido y Olivia hablaba en voz baja con Joe. Su corazón palpitó con fuerza al apretar el cuchillo.
—¿Terminaste?
Olivia tomó la sartén de hierro con rapidez, metió el cuchillo en un bolsillo de sus pantalones mientras el corazón le latía desenfrenado. Durante cada segundo que siguió, esperaba que cualquiera le ordenara con brusquedad que se quedara inmóvil, pero nadie lo hizo.
—¿Cuándo voy a cortarle el cabello? —le preguntó Olivia a Joe—. No podemos arriesgarnos a que siga con ese aspecto.
Joe miró a ___________ y el pulso de ésta se aceleró. "¿Habrá adivinado lo del cuchillo?", se preguntó. Vio una extraña expresión en sus ojos cuando el observó la cascada de cabello.
—No, no debemos arriesgarnos. Llévala arriba.
Guido ahora se hallaba al pie de la escalera y ________ se vio obligada a rozarle el cuerpo al pasar. Él sonrió con lascivia, mirando los senos de _________, y ésta retrocedió.
—¡Fíjate en ella! —la acusó Olivia ante Joe—. Parece una tímida virgen de sociedad, pero sólo es apariencia. ¿Por qué te portas así? —le preguntó a ________—. Guido no es diferente de cualquiera de los hombres con los que has estado. Él ha tenido amantes ricas. Las mujeres adineradas gustan de hombres que sean rudos con ellas. ¿No es así, caro? ¿O es por la presencia de Joe que estás pálida y temerosa? —preguntó entrecerrando los ojos por la sospecha—. Ten cuidado, amico —previno a Joe con suavidad—. Tratará de conquistarte. Conozco a las de su calaña.
Arriba, en su pequeña prisión, Olivia la empujó para que se sentara en la única silla que había. A pesar de su escasa estatura Olivia era fuerte. _________ hizo una mueca de dolor por la presión de los dedos. Trató de no parpadear cuando Olivia le haló el cabello con brutalidad y cortó los mechones sin miramientos.
—No es precisamente tu estilo de peinado —se burló Olivia cuando terminó—. Leí que en Irlanda del Norte tienen la costumbre de emplumar a las traidoras. Supongo que la única manera de quitar el alquitrán es cortando el pelo a raíz, ¿o no?
—¿Por qué me preguntas? —_________ se enorgulleció de la firmeza de su voz—. ¿Estás pensando en que tu organización podría adoptar esa costumbre con las traidoras?
—Lo que creo es que tu padre pagará más pronto si en las fotografías que le enviemos apareces sin cabello y emplumada. Hablaré con Joe.
Fue demasiado para _________. Sacó el cuchillo y amenazó a Olivia con él. Escuchó la protesta de ésta y los gritos de auxilio; la voz de Joe ordenando a Guido que permaneciera de guardia y a él subiendo veloz por la escalera. Entró al dormitorio y al dar un vistazo comprendió lo que ocurría.
—¡__________, dame el cuchillo!
Se le aproximó por la espalda y le sujetó con firmeza la muñeca, pero sin lastimarla. Le presionó los dedos para que soltara el cuchillo. Olivia empezó a insultarla y le arrojó a la cara el pelo que le había cortado.
—¡No sigas, Olivia! —ordenó Joe.
—¡Mira lo que me hizo! —protestó Olivia, mostrándole a Joe un rasguño en el brazo—. ¡Me pagará esto! :grupo:
Tomó las tijeras. Con felina agilidad se movió Joe y realizó la misma operación que había hecho unos segundos antes con _________.
—¿La registraste? —le preguntó a Olivia con voz calmada.
—¡Ella no me volverá a tocar!
Las palabras salieron de la boca de _________ antes que pudiera evitarlo. Se dio cuenta de su error al percibir la expresión de los ojos grises, y luego la voz de Joe.
—Me parece bien; yo te registraré.
—¡No!
La explosiva protesta provocó la risa de Olivia.
—Entrégame las tijeras —le ordenó Joe a Olivia—. Luego, baja y ayuda a Guido en su vigilancia.
_______ se dio cuenta de que la muchacha italiana se negaba a dejarlos solos, pero que no se atrevía a desobedecer a Joe.
Pasaron unos segundos después de la salida de Olivia sin que él se moviera.
—Ven acá. Terminemos con esto —dijo al fin.
—¡Tú no me tocarás!
Había menos seguridad en su voz. A pesar de que Joe no se había movido, ella empezó a retroceder, hacia una esquina de la habitación.
Y, de pronto, Joe caminó con tanta rapidez, que ella se vio atrapada en sus brazos sin poder impedirlo. El aliento de Joe, fresco, le, abanicaba la frente.
—¡No! —le rogó.
♫ Laura Jonas ♥
Re: Viaje al Infierno (Joe y tu)
lo siento por no pasarme pero .....
con la escuela llego muy tarde y solo comento
en las primeras noves que vea :risa:
Me anencantado los cap!
ya siguelaaaaaaaa!
con la escuela llego muy tarde y solo comento
en las primeras noves que vea :risa:
Me anencantado los cap!
ya siguelaaaaaaaa!
☎ Jimena Horan ♥
Re: Viaje al Infierno (Joe y tu)
omj no puedo creer lo que hace
joe lo odio
odio odio
suepr odio
es un animal
joe lo odio
odio odio
suepr odio
es un animal
andreita
Re: Viaje al Infierno (Joe y tu)
Jimee Jonas <3 escribió:lo siento por no pasarme pero .....
con la escuela llego muy tarde y solo comento
en las primeras noves que vea :risa:
Me anencantado los cap!
ya siguelaaaaaaaa!
No te preocupes eso me ha estado pasando a mi, por eso no he podido subirles capi tan a menudo
♫ Laura Jonas ♥
Re: Viaje al Infierno (Joe y tu)
andreita escribió:la nove va suepr
no desaparscas denuevo
siguela
Lamentablemente desaparezco por las tareas, los deberes en mi casa, ensayos del grupo en donde canto, el curso de ingles, todas esas cosas se vuelven obstaculos cada vez que quiero subirles capis, pero cuando les subo, pongo dos o tres
♫ Laura Jonas ♥
Re: Viaje al Infierno (Joe y tu)
Oh por dios se me había olvidado que habías subido esta adaptación
Joe que sinico!!
siguelaa
Joe que sinico!!
siguelaa
JB&1D2
Re: Viaje al Infierno (Joe y tu)
Capitulo 3
—Entra —le ordenó con brusquedad Olivia a _________.
_________ se negó a dejarse dominar por el terror que amenazaba invadirla, comprendiendo que eso era lo que quería la otra mujer.
—Recuerden lo que dijo Joe —dijo Olivia al entrar en el vehículo—: Cuando volvamos a la granja todo debe parecer normal.
—¡Joe! —el más moreno de los dos hombres exclamó, escupiendo—. Dio, ¿Quién es Joe para darnos órdenes? Siempre hemos trabajado por nuestra cuenta.
En apariencia, la queja ya había sido formulada varias veces. ________ lo confirmó cuando escuchó a Olivia responder con aspereza:
—Eso era antes. Ahora recibimos órdenes de Roma. Joe está a cargo. ¿No fue él quien sugirió esto? —agregó a la defensiva—. Nos producirá más dinero que…
—Dinero… sí, siempre lo estamos necesitando —estuvo de acuerdo el más alto.
Todos rieron. _______ hizo una mueca de dolor cuando Olivia le sujetó con fuerza la muñeca y ordenó:
—Piero, toma el volante. Guido, ayúdame a esposarla.
Guido era el de estatura más baja y el que más le desagradaba a _________. Cuando se inclinó sobre ella, trató de alejarse por el mal olor que despedía su cuerpo. El hombre sujetó con facilidad las muñecas de ________, y ésta tuvo que aceptar la humillación de ser esposada a uno de los costados del Land Rover.
—Es para evitar que trates de hacer alguna tontería, por ejemplo saltar del coche —la previno Olivia—. De todas maneras, no te creo capaz. No tienes madera de mártir. ¿Nunca te ha preocupado que mientras tú vives bebiendo champaña y comiendo caviar, hay personas en todo el mundo que sufren en la pobreza? ¿Qué las obligan a pagar impuestos de su miserable salario para mantener a sus opresores? Eso terminará pronto.
El fanatismo de la joven aterrorizó a __________. Aún no comprendía de qué estaba hablando Olivia, pero el instinto de conservación la hizo mostrar interés. Le parecía que escuchando a sus captores podría descubrir la clave para su liberación.
—¿Eres comunista? —se aventuró a preguntar.
—Sí —brillaron los ojos negros—. Cada ser humano tiene derecho a la igualdad, pero ese derecho básico le es negado. La riqueza que debería ser distribuida entre todos es acaparada por unos pocos, especialmente por la iglesia, pero eso pronto acabará.
Saffron no podía creer lo que escuchaba.
—Italia es una nación católica —protestó—. La gente nunca abandonará su religión.
—Tendremos que obligarla —intervino Guido—. Después, comprenderán la sabiduría con que estamos actuando. La iglesia está corrupta. Es un gigantesco negocio que trasquila a las gentes. Tomaremos esa riqueza y la distribuiremos entre los pobres.
"No es posible que crean que eso puede llevarse a cabo", pensó _______ espantada, pero se dio cuenta de que sí era así, por la expresión de cada uno de ellos. ¿Compartirá Joe sus opiniones fanáticas?, se preguntó.
—La organización tiene aliados valiosos en las universidades —le explicó Olivia—. Nuestros jóvenes se dan cuenta de la falsedad de la religión cristiana. "Bienaventurados son los humildes" —citó con burla—. Eso es lo que dicen, pero decir y hacer son dos cosas diferentes, y en este mundo los humildes son pisoteados.
—¿Intentan cambiar la situación?
—Es lo que muchas personas suponen que nos proponemos —intervino Piero con voz triste—, pero siempre existirán los dueños del poder y los que producen para ellos. Antes que podamos reconstruir, tenemos que destruir, y para eso necesitamos dinero, que obtenemos secuestrando a personas ricas como tú.
—Entre todas las llamadas organizaciones terroristas del mundo, nosotros somos la más temida —alardeó Olivia—. Más que la O.L.P. y las Brigadas Rojas. En la actualidad somos los responsables de la muerte de más de mil personas.
—Pero están asesinando, inocentes —opinó ________—. De seguro obtendrían más apoyo para su causa usando argumentos bien elaborados, en lugar de terrorismo insensato.
—¿Como lo hacen los dictadores opulentos? —le respondió con mofa Piero—. Hemos descubierto que un rifle hace más que un millón de palabras inútiles.
—¡Sal!
Había estado tan ensimismada en sus pensamientos que no se dio cuenta de que el Land Rover se detuvo.
—
¡Apresúrate! —ordenó Olivia, casi empujándola fuera del vehículo después de quitarle las esposas—. No hagas esperar a Guido —le advirtió—. Se impacienta y cuando eso sucede…
No completó la amenaza; pero no necesitaba hacerlo. ________ observó la sonrisa maligna de Guido.
—¿Por qué no le doy una muestra de lo que soy capaz? —sugirió el hombre, aproximándose a ________.
Ya sus dedos habían sujetado la parte delantera de la camisa de la joven y ésta se había puesto muy tensa en el asiento, antes que Olivia le dijera con desaliento:
—Joe ordenó que no se le tocara.
Guido hizo una mueca.
—¿Porque la quiere para él? —sugirió—. No sería el primer hombre que la poseyera, y ella me parece muy apetitosa.
—Joe no la desea —afirmó Olivia; sus ojos brillaron de furia al mirar el esbelto cuerpo de ________—. La desprecia a ella y a todo lo que simboliza. Ya lo has escuchado… ¡Afuera! —le ordenó de nuevo a la muchacha.
______, temblorosa, obedeció. El imaginar a Guido acariciándola la hizo sentirse angustiada. "¡Gracias a Dios que ignoran la verdad!", pensó "Si la supieran"… Tembló con violencia, comprendiendo que la pérdida de su virginidad sería algo divertido para un hombre como Guido.
La casa de la granja estaba situada en un olivar cubierto por la maleza, y que abarcaba pocas hectáreas, en las que también habían parras descuidadas y media docena de vacas en un establo.
—Es otra de las ideas de Joe —le explicó Olivia mientras la observaba—. Si llega algún curioso creerá que somos una familia pobre tratando de ganarse la vida con esta pequeña propiedad casi en ruinas. Guido y Piero son mis hermanos.
—¿Y Joe? —preguntó ______ sin pensar. Deseó no haberlo hecho cuando observó la expresión de los ojos de la joven. Se dio cuenta de que había estado esperando esa pregunta.
—Joe representa el mismo papel que en la vida real —le informó con suavidad—. Es mi hombre, mi amante —rió—. ¡Estúpida niña rica! ¿Creíste que un hombre como Nico podía desear a una mujer como tú? ¿Una mujer a quien no le importa nada, salvo sus vestidos y joyas? :¬¬: :¬¬:
Sus labios se torcieron en una mueca burlona y __________ sintió que la furia se apoderaba de ella.
—Por lo menos eso es mejor que las ideas a medio elaborar que tú llamas "causa" —se mofó.
Hizo una mueca de dolor cuando Olivia la agarró del cabello. Quedó una marca en el rostro de _______ cuando además le dio una cachetada.
_________ sintió deseos de vomitar, provocados más por la violencia que por el dolor. Siempre había detestado la violencia. "¿Se habrán reído los dos de mí cuando planeaban mi captura y cómo Joe me haría el amor?"
—Era su deber —le dijo Olivia, leyéndole los pensamientos—. No creas que te deseaba; te odia a ti y a todas las de tu clase. Si no fuera por el dinero que pagará tu padre por tu rescate, él te mataría sin sentir más remordimientos que los que experimentaría al aplastar a una víbora.
Apenas empezaba a comprender ________ que era la prisionera de ésos fanáticos, cuyo respeto por la vida humana era nulo.
Pronto se encontró en el interior de la casa de la granja. La parte inferior consistía en una habitación larga y primitiva. El suelo era de tierra endurecida por el transcurso de los años. En una esquina se hallaba una cocina rústica que tenía un alargado fogón de leña y un grifo de agua. Habían pasado junto a un cuarto separado. ________ se estremeció al pensar en los sanitarios. "¿Tratarán de adoctrinarme con sus creencias? Si lo hacen me resistiré con todas mis fuerzas", se propuso. Después, pensó que la organización trataría de no convertir a sus víctimas.
♫ Laura Jonas ♥
Re: Viaje al Infierno (Joe y tu)
"Me consideran sólo una fuente de ingresos. Así fue con Joe. ¡Joe! ¿Por qué sigo sintiendo ese dolor intenso cada vez que pienso en él? El hombre que imaginé que era, no existe. Fue un sueño, un ficticio ser romántico creado por mi necesidad de amar".
—¡Ven!
La rudeza de la voz la regresó a la realidad. Olivia le indicaba que debía subir por la desvencijada escalera de madera que conducía al piso superior. Cuatro puertas estaban en el pequeño descansillo, y en una se encontraba un candado nuevo y reluciente. Olivia lo abrió y empujó la puerta, levantando nubes de polvo al hacer entrar a _______. La habitación pequeña tenía una ventana, en una esquina un catre angosto y, junto a éste, en el suelo, un saco de dormir.
—Su dormitorio —anunció Olivia haciendo una venia—. Espero que la signorina encuentre todo a su satisfacción.
Antes que _______ hiciera algún comentario, la puerta estaba cerrada de nuevo con candado.
Corrió hacia la ventana a través de la cual lo único que logró ver fue la árida campiña y el angosto río que serpenteaba por la pradera. "Son profesionales", reconoció. "Cuando mi padre reciba la noticia de mi desaparición, será demasiado tarde para que me localicen". Se desplomó en el catre y amortiguó el sonido de su llanto con el saco de dormir, mientras las lágrimas brotaban. Para aumentar sus desdichas, sintió hambre. Cuando dejó de llorar reconoció que era muy probable que necesitara ese desahogo. Poco a poco dejó de temblar su cuerpo. Su atención fue atraída por unos pasos en la escalera. Frenética se limpió el rostro, deseando que, debido a la poca luz que penetraba en la habitación, nadie se diera cuenta de que había estado llorando. Paralizada por la tensión, escuchó.
—¡Regresa, Guido! —era la voz de Olivia—. ¡Joe está aquí!
El sonido de los pasos se desvaneció y Saffron dejó escapar un suspiro de alivio. Los ojos, como de reptil, de Guido, le provocaban repulsión. "Dios mío, si logro escapar, haré que todos paguen por sus culpas… Todos; pero, en primer lugar, Joe. Joe, que me engañó y me hizo creer que yo le importaba, ¡cuando lo que le importaba era mi dinero!"
—¿Has entendido las instrucciones?
Se encontraban en la habitación inferior. Joe y Olivia estaban en un lado de la mesa, vacía y baja, y _______ en el otro, mientras Guido y Piero hacían guardia.
La aurora pronto llegaría. Nunca se había sentido ________ tan contenta porque terminara la noche. No había dormido. Le había sido imposible. Y ahora se encontraba en el piso inferior de esa casa desvencijada, y le estaban informando que si se portaba mal, recibiría un balazo en una pierna… o en un lugar más peligroso.
—¿Por qué no me dejan encerrada bajo llave? —preguntó con voz inexpresiva, sin hacer caso del destello de advertencia que apareció en los ojos de Joe.
—No somos tan estúpidos —respondió Joe con frialdad—. Pueden investigar en este sitio. Si es así, debes comportarte exactamente como se te ha ordenado. Eres la prima de Olivia, de inteligencia escasa, pero útil para los trabajos manuales de la casa. Llegamos hace poco a la granja y estamos esforzándonos para restaurarla… Y trabajaremos —le informó a los otros, dirigiendo de súbito su atención a sus compañeros—. Será una práctica excelente, camaradas, para cuando llegue el día en que todos seamos iguales y el mundo esté convertido en un estado marxista perfecto.
Si no hubiera tenido antecedentes, ________ habría jurado que había un dejo de burla en las últimas palabras. De inmediato Olivia objetó:
—Nosotros nunca labraremos la tierra como campesinos, Joe. Eso no…
—Creo que el postulado más importante del comunismo es que todos debemos ser iguales, no debe existir una minoría selecta —interrumpió ________.
Olivia le dirigió una mirada fulminante.
—Siempre existirán los dirigentes. Nuestra organización ya está preparando a hombres y mujeres para esos cargos. Ellos no estarán guiados por la avaricia o por el deseo de poder, como es el caso de los gobiernos capitalistas actuales. Nos encargaremos de guiar a las personas por su propio beneficio…
—Así hablan los dictadores —se burló _______.
—¡Ya es suficiente! —espetó Joe—. Como te estaba informando: si viene la policía a buscarte, un movimiento en falso y ellos morirán junto contigo.
—Es mucha matanza —comentó con amargura _________—. ¿Lo justifica cualquier causa?
—Pregúntale a tu gobierno capitalista —sugirió Olivia—. Se han enriquecido con la muerte de otros. Pregúntales si es justo.
—Descubrirás que es difícil convencerla —interrumpió Joe—. Olvidas que su padre es uno de esos capitalistas.
__________ le pudo haber dicho que su padre edificó su imperio mediante esfuerzos, pero decidió no mencionarlo. "¿Me atreveré a delatar a estos maleantes a la policía, si ésta se llegara a presentar?" Tuvo que reconocer que no lo haría. Arriesgaría su propia vida y pondría en peligro la de todos.
—Es una sabia decisión —se burló en forma odiosa Joe, interpretando bien la expresión de _______—. Recuerda, Guido y Piero tienen órdenes precisas, y no vacilarán en obedecerlas, y, a propósito, Olivia me informó que has estado tratando de seducir a Guido. Por tu propio bien te aconsejo que dejes de hacerlo. Él es leal a la causa y aunque tiene debilidad por las mujeres, serías por completo insensata si creyeras que podrías aprovechar esa debilidad para escaparte. Guido es capaz de hacerte el amor y matarte al minuto siguiente. Para él eres un cuerpo, no una persona. Es mejor que lo recuerdes.
—¿Cómo olvidarlo? —replicó con amargura _________—. Es algo que tienen en común él y tú. Es probable que sea parte de lo que enseñan en tu organización —sugirió con sarcasmo.
Tuvo la satisfacción ver palidecer a Joe "Conque, después de todo, tiene puntos vulnerables. No le gustó que lo comparara con Guido", se dijo. "¡Qué bueno!"
"¿Qué haré si viene la policía? ¿Podré atraer su atención? ¿Me reconocerán?". La esperanza la reanimó. Como si lo hubiera descubierto en sus ojos, Joe opinó:
—Necesitamos hacer algo con respecto a su apariencia —la observó unos instantes y luego le ordenó a Olivia—: Tan pronto como le tome las fotografías para enviarlas a su padre, le puedes cortar el cabello.
"¡Mi cabello!" Lo cubrió con las manos, como si quisiera protegerlo. Siempre lo había usado largo. Pocas semanas antes su padre le había dicho que parecía una cascada de fuego. Notó la mirada triunfal de Olivia y supo que gozaría cortándoselo.
Para tomar las fotografías que iba a enviarle a su padre, Joe hizo que se sentará en una silla de madera. Oliva la esposó de nuevo y le torció los brazos con rudeza. Un quejido escapó de los labios de ________ y Joe entrecerró los ojos al presenciar la escena.
—Ya es bastante —le advirtió a Olivia—. No nos conviene que su padre se llene de pánico ante la foto de su muchachita llorosa.
—¿Por qué no? —objetó Olivia—. Eso hará que se apresure a pagar el rescate.
—O bien el terror lo hará cometer tonterías —corrigió Joe—. Recuerda lo que pasó con Paul Jonas.
El corazón de _________ palpitó con fuerza al escuchar el nombre del gran amigo de su padre.
—¿Mataron ustedes a Paul Jonas? —preguntó apesadumbrada, con los ojos fijos en el rostro de Joe.
—Personalmente, no —se burló con ligereza.
—Joe no se ocupa de matar —intervino Piero—. Es muy amable.
—Soy demasiado sensible —dijo Joe con calma—. Asesinar a Jonas no fue conveniente, ya que nunca pagaron el rescate. Tenemos que destruir las pruebas —miró con frialdad y sin emoción el tenso rostro de ________—. Pero antes asegurémonos de que vamos a recibir nuestro dinero.
"Es peor que los otros", pensó con amargura ________. "Ellos tienen por lo menos la excusa de su creencia en su causa, si es que puede llamársele excusa, pero creo que Joe no comparte su doctrina. Es demasiado cínico y reservado. ¿Por qué se confabularía con estas personas? ¿Qué está haciendo con ellos? Es por dinero", fue la única explicación que encontró. "¿Podré convencerlo de que me deje en libertad, ofreciéndole un soborno? Puedo insistir en que mi padre le pagará si me regresa a su lado sin haberme hecho daño".
—Sonríe —le ordenó él persuasivo—. Para tu papá.
—¡Ven!
La rudeza de la voz la regresó a la realidad. Olivia le indicaba que debía subir por la desvencijada escalera de madera que conducía al piso superior. Cuatro puertas estaban en el pequeño descansillo, y en una se encontraba un candado nuevo y reluciente. Olivia lo abrió y empujó la puerta, levantando nubes de polvo al hacer entrar a _______. La habitación pequeña tenía una ventana, en una esquina un catre angosto y, junto a éste, en el suelo, un saco de dormir.
—Su dormitorio —anunció Olivia haciendo una venia—. Espero que la signorina encuentre todo a su satisfacción.
Antes que _______ hiciera algún comentario, la puerta estaba cerrada de nuevo con candado.
Corrió hacia la ventana a través de la cual lo único que logró ver fue la árida campiña y el angosto río que serpenteaba por la pradera. "Son profesionales", reconoció. "Cuando mi padre reciba la noticia de mi desaparición, será demasiado tarde para que me localicen". Se desplomó en el catre y amortiguó el sonido de su llanto con el saco de dormir, mientras las lágrimas brotaban. Para aumentar sus desdichas, sintió hambre. Cuando dejó de llorar reconoció que era muy probable que necesitara ese desahogo. Poco a poco dejó de temblar su cuerpo. Su atención fue atraída por unos pasos en la escalera. Frenética se limpió el rostro, deseando que, debido a la poca luz que penetraba en la habitación, nadie se diera cuenta de que había estado llorando. Paralizada por la tensión, escuchó.
—¡Regresa, Guido! —era la voz de Olivia—. ¡Joe está aquí!
El sonido de los pasos se desvaneció y Saffron dejó escapar un suspiro de alivio. Los ojos, como de reptil, de Guido, le provocaban repulsión. "Dios mío, si logro escapar, haré que todos paguen por sus culpas… Todos; pero, en primer lugar, Joe. Joe, que me engañó y me hizo creer que yo le importaba, ¡cuando lo que le importaba era mi dinero!"
—¿Has entendido las instrucciones?
Se encontraban en la habitación inferior. Joe y Olivia estaban en un lado de la mesa, vacía y baja, y _______ en el otro, mientras Guido y Piero hacían guardia.
La aurora pronto llegaría. Nunca se había sentido ________ tan contenta porque terminara la noche. No había dormido. Le había sido imposible. Y ahora se encontraba en el piso inferior de esa casa desvencijada, y le estaban informando que si se portaba mal, recibiría un balazo en una pierna… o en un lugar más peligroso.
—¿Por qué no me dejan encerrada bajo llave? —preguntó con voz inexpresiva, sin hacer caso del destello de advertencia que apareció en los ojos de Joe.
—No somos tan estúpidos —respondió Joe con frialdad—. Pueden investigar en este sitio. Si es así, debes comportarte exactamente como se te ha ordenado. Eres la prima de Olivia, de inteligencia escasa, pero útil para los trabajos manuales de la casa. Llegamos hace poco a la granja y estamos esforzándonos para restaurarla… Y trabajaremos —le informó a los otros, dirigiendo de súbito su atención a sus compañeros—. Será una práctica excelente, camaradas, para cuando llegue el día en que todos seamos iguales y el mundo esté convertido en un estado marxista perfecto.
Si no hubiera tenido antecedentes, ________ habría jurado que había un dejo de burla en las últimas palabras. De inmediato Olivia objetó:
—Nosotros nunca labraremos la tierra como campesinos, Joe. Eso no…
—Creo que el postulado más importante del comunismo es que todos debemos ser iguales, no debe existir una minoría selecta —interrumpió ________.
Olivia le dirigió una mirada fulminante.
—Siempre existirán los dirigentes. Nuestra organización ya está preparando a hombres y mujeres para esos cargos. Ellos no estarán guiados por la avaricia o por el deseo de poder, como es el caso de los gobiernos capitalistas actuales. Nos encargaremos de guiar a las personas por su propio beneficio…
—Así hablan los dictadores —se burló _______.
—¡Ya es suficiente! —espetó Joe—. Como te estaba informando: si viene la policía a buscarte, un movimiento en falso y ellos morirán junto contigo.
—Es mucha matanza —comentó con amargura _________—. ¿Lo justifica cualquier causa?
—Pregúntale a tu gobierno capitalista —sugirió Olivia—. Se han enriquecido con la muerte de otros. Pregúntales si es justo.
—Descubrirás que es difícil convencerla —interrumpió Joe—. Olvidas que su padre es uno de esos capitalistas.
__________ le pudo haber dicho que su padre edificó su imperio mediante esfuerzos, pero decidió no mencionarlo. "¿Me atreveré a delatar a estos maleantes a la policía, si ésta se llegara a presentar?" Tuvo que reconocer que no lo haría. Arriesgaría su propia vida y pondría en peligro la de todos.
—Es una sabia decisión —se burló en forma odiosa Joe, interpretando bien la expresión de _______—. Recuerda, Guido y Piero tienen órdenes precisas, y no vacilarán en obedecerlas, y, a propósito, Olivia me informó que has estado tratando de seducir a Guido. Por tu propio bien te aconsejo que dejes de hacerlo. Él es leal a la causa y aunque tiene debilidad por las mujeres, serías por completo insensata si creyeras que podrías aprovechar esa debilidad para escaparte. Guido es capaz de hacerte el amor y matarte al minuto siguiente. Para él eres un cuerpo, no una persona. Es mejor que lo recuerdes.
—¿Cómo olvidarlo? —replicó con amargura _________—. Es algo que tienen en común él y tú. Es probable que sea parte de lo que enseñan en tu organización —sugirió con sarcasmo.
Tuvo la satisfacción ver palidecer a Joe "Conque, después de todo, tiene puntos vulnerables. No le gustó que lo comparara con Guido", se dijo. "¡Qué bueno!"
"¿Qué haré si viene la policía? ¿Podré atraer su atención? ¿Me reconocerán?". La esperanza la reanimó. Como si lo hubiera descubierto en sus ojos, Joe opinó:
—Necesitamos hacer algo con respecto a su apariencia —la observó unos instantes y luego le ordenó a Olivia—: Tan pronto como le tome las fotografías para enviarlas a su padre, le puedes cortar el cabello.
"¡Mi cabello!" Lo cubrió con las manos, como si quisiera protegerlo. Siempre lo había usado largo. Pocas semanas antes su padre le había dicho que parecía una cascada de fuego. Notó la mirada triunfal de Olivia y supo que gozaría cortándoselo.
Para tomar las fotografías que iba a enviarle a su padre, Joe hizo que se sentará en una silla de madera. Oliva la esposó de nuevo y le torció los brazos con rudeza. Un quejido escapó de los labios de ________ y Joe entrecerró los ojos al presenciar la escena.
—Ya es bastante —le advirtió a Olivia—. No nos conviene que su padre se llene de pánico ante la foto de su muchachita llorosa.
—¿Por qué no? —objetó Olivia—. Eso hará que se apresure a pagar el rescate.
—O bien el terror lo hará cometer tonterías —corrigió Joe—. Recuerda lo que pasó con Paul Jonas.
El corazón de _________ palpitó con fuerza al escuchar el nombre del gran amigo de su padre.
—¿Mataron ustedes a Paul Jonas? —preguntó apesadumbrada, con los ojos fijos en el rostro de Joe.
—Personalmente, no —se burló con ligereza.
—Joe no se ocupa de matar —intervino Piero—. Es muy amable.
—Soy demasiado sensible —dijo Joe con calma—. Asesinar a Jonas no fue conveniente, ya que nunca pagaron el rescate. Tenemos que destruir las pruebas —miró con frialdad y sin emoción el tenso rostro de ________—. Pero antes asegurémonos de que vamos a recibir nuestro dinero.
"Es peor que los otros", pensó con amargura ________. "Ellos tienen por lo menos la excusa de su creencia en su causa, si es que puede llamársele excusa, pero creo que Joe no comparte su doctrina. Es demasiado cínico y reservado. ¿Por qué se confabularía con estas personas? ¿Qué está haciendo con ellos? Es por dinero", fue la única explicación que encontró. "¿Podré convencerlo de que me deje en libertad, ofreciéndole un soborno? Puedo insistir en que mi padre le pagará si me regresa a su lado sin haberme hecho daño".
—Sonríe —le ordenó él persuasivo—. Para tu papá.
♫ Laura Jonas ♥
Página 2 de 6. • 1, 2, 3, 4, 5, 6
Temas similares
» ~Tan solo un viaje a Londres Nah un viaje a mi nueva vida~Liam Payne (CANSELADA)
» Un mes en el infierno {H.S} *HOT*/
» El infierno de Joseph Joe y tu
» EL CHAT DEL INFIERNO.
» Un amanecer en el infierno.
» Un mes en el infierno {H.S} *HOT*/
» El infierno de Joseph Joe y tu
» EL CHAT DEL INFIERNO.
» Un amanecer en el infierno.
O W N :: Archivos :: Novelas Terminadas
Página 2 de 6.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
Miér 20 Nov 2024, 12:51 am por SweetLove22
» My dearest
Lun 11 Nov 2024, 7:37 pm por lovesick
» Sayonara, friday night
Lun 11 Nov 2024, 12:38 am por lovesick
» in the heart of the circle
Dom 10 Nov 2024, 7:56 pm por hange.
» air nation
Miér 06 Nov 2024, 10:08 am por hange.
» life is a box of chocolates
Mar 05 Nov 2024, 2:54 pm por 14th moon
» —Hot clown shit
Lun 04 Nov 2024, 9:10 pm por Jigsaw
» outoflove.
Lun 04 Nov 2024, 11:42 am por indigo.
» witches of own
Dom 03 Nov 2024, 9:16 pm por hange.