Afraid (Niall Horan)

por **dailyingwithtears** Lun 22 Dic 2014, 10:32 am

Sinopsis:

Niall Horan es un chico normal, sencillo y natural. O al menos lo sería si no participara en The X Factor y fuera ganando cada vez más popularidad. Y también si no hubiera conocido a la extrovertida, descarada, fascinante y autodestructiva Mar Swegther, una famosa actriz adolescente de Hollywood, que lo empujará hacia un estilo de vida que nunca había conocido, dejándolo sin aliento.
Pero Mar no está acostumbrada a enamorarse.
Con un pasado que ocultar, Hollywood representa una escapatoria de sus pesadillas. Poco a poco, ve con pánico como su vida transcurre y todo se va desmoronando. ¿Estará ella dispuesta a arriesgarlo todo por... amor?

Ficha:

Título: Afraid
Autor: Daylingwithtears
Cotenido: -
Advertencias: 1. No se aceptan adaptaciones. 2. Habrá parejas como Payzer y Joshifer. 3. Las chicas que se necesitan son Alexander Ludwig y Harry Styles, pero la de Harry no empezará a salir con él hasta dentro de bastantes capítulos. 4. Saldrán muchas canciones. 5.Subiré dos veces por semana si todo va bien: una el miércoles y otra el fin de semana.
Género: Romance, Drama y algo hot?)
Otros links: Wattpad y Univision

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Holaa! Soy Valeria pero pueden llamarme Val. Es mi primera novela y tengo 15 años. Soy de España y subiré unas dos veces por semana ;)

por **dailyingwithtears** Lun 22 Dic 2014, 10:35 am

Capítulo 1

Estaba en el aire. Era una amenaza tan poderosa que podía olerla, podía sentirla, acechándome desde las sombras. Me hice un ovillo, la mirada del peligro clavada en mi nuca. De repente, ahí estaba. Mi padre asentó el primer golpe, sin piedad, en la cabeza. Sin fuerzas, la silla de ruedas cayó al suelo, y con ello su hija, que era incapaz de levantarse.

El hombre me miró con menosprecio. No llevaba ninguna botella en la mano, no a primeras horas de la mañana. La pelea del alcoholismo vendría después, y también las pagaría con conmigo.

Me asentó una patada en las costillas, haciéndome toser sangre. Eso, no lo paró. Me cogió del cuello de la camisa y me estampó en la pared.

-¡Ah!- grité.

Él solo sonrió. Sabía que aquello era lo que más me dolía, los golpes en la espalda. Por eso no dudó en repetir la acción tantas veces como fuera necesario, hasta que lloré, y ni así se detuvo. Continuó con sus repetidas torturas. No me molesté en suplicar, porque sabía que eso sólo lo enfadaría más. Por dentro me repetía los lamentos y los ruegos, pero nunca los demostraba. Aquel señor que alguna vez llamé padre no le gustaba que le pidiera nada, y menos que le pidiera que parara algo que le servía como desahogamiento.
Pasaron unos minutos agónicos de golpes y heridas, hasta que se cansó. Me dejó tumbada en el suelo, tirándome bruscamente. Me observó desde arriba. Qué fea.

Aquello lo inundó de rabia, pienso yo, y me propagó una patada más en las piernas. Sonrió sadisfactoriamente y miró a su mujer, que estaba en la mesa de la cocina, almorzando tranquilamente, sin dar la menor señal de que su marido acababa de pegar a su hijastra. Él se acercó a ella y la cogió de la mano, besándole los nudillos. La mujer suspiró agradecida, y subió con él las escaleras, no sin antes dirijirme una mirada de asco, a aquella niña que ni tan siquiera era su hija. Pero sí que miró a la suya. Anabelle se untaba mermelada en una tostada, intentando pasar desapercibida. Isabel, conmovida, se separó un momento de su segundo marido y besó a la niña en la frente.

Cuando Anabelle y yo nos quedamon solas, la primera se permitió el lujo de verme agonizar, y yo me permití, simplemente, el lujo de llorar. Nos miramos unos instantes. Me sorprendí cuando Anabelle me pasó la silla de ruedas, dejándola cerca mío, lo justo como para poder volver a subirme. Cuando lo consiguí, Anabelle ya se había ido. Pero sí logré escuchar el grito de mi padre, que me buscaba de nuevo.

. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

Me levanté sudada, con la respiración agitada. Cerré los ojos con fuerza y bruscamente me incorporé. Me había olvidado por completo del chico que dormía plácidamente a mi lado, despertado abruptamente por mi culpa.

-Mar… -murmuró él, sentándose en el colchón- ¿Cariño, qué ocurre?

Negué con la cabeza y enterré el rostro entre las manos, hincando los codos en las rodillas.

-¿Otra pesadilla?-concluyó Josh, mirándome atentamente.

Pudo captar el pequeño movimiento que hizo al asentir. Suspiró y me abrazó. No se sorprendió cuando me deshice de su cálido abrazo y abrí la luz, dirigiéndome al baño para lavarme la cara. Todavía tumbado en la cama, captó la belleza de su mejor amiga. Con solo catorce años, ya había hecho que muchos chicos fijaran su mirada en ella, y no era de extrañar. Sus piernas desnudas eran estilizadas, delgadas. Su estómago, plano y liso. Todavía no tenía mucha delantera, al fin y al cabo estaba en una parte tierna de la adolescencia. Su pelo, largo hasta el ombligo, caía en finas ondas onduladas de un roja intenso, tal como el fuego. Tenía una tez bronceada, y fracciones agradables. Aunque todavía era muy bajita –no medía más de metro cincuenta y tres- había conseguido que su baja estatura resultara incluso bella.

Tenía mucha suerte de tenerla como amiga, se sentía muy afortunado. No estaba enamorado de mi, esa faceta ya había acabado años antes, pero si sentía un cariño infinito, un amor incondicional, como el que se sentiría por una hermana. Él, que nunca había tenido hermanos, estaba contento de poder tener a alguien como yo a su lado. Y yo, aunque sí que tuviera hermanos y hermanas, estaba muy agradecida de tenerlo a él en mi vida.

Sin embargo, no todo era bueno, y Josh lo sabía mejor que nadie. Desde que me conoció, le había confié un gran secreto: las pesadillas.
Josh no sabía de qué eran, ni por qué las tenía cada noche. No pensaba decírselo. Cuando me despertaba por las pesadillas cada noche, temblando y desconsolada, me ayudaba verlo ahí, aunque odiaba cuando intentaba tocarme. No me gustaba que me tocaran.

Cuando me tumbé de nuevo, dándole la espalda, Josh jugueteó un poco con mi pelo. Respiré profundamente y me dormí, pidiendo entre suspiros no volver a soñar aquella noche.

por **nash grier.** Lun 22 Dic 2014, 10:36 am

hola linda, te aviso que a tu novela le falta la ficha, debes ponerla antes de que te borren el tema. besos xox Afraid (Niall Horan) 1477071114

por **dailyingwithtears** Lun 22 Dic 2014, 10:59 am

.zara. escribió:hola linda, te aviso que a tu novela le falta la ficha, debes ponerla antes de que te borren el tema. besos xox

Graciaas! <3

por **dailyingwithtears** Lun 22 Dic 2014, 11:15 am

Capítulo 2

Aquella mañana se presentaba memorable. Estaba segura.

Me miré al espejo por enésima vez, para revisar que todo estuviera en su lugar. Las medias, bien puestas. El pelo, perfecto. Maquillaje, impecable. Ropa, decente.

Suspiré. Aquel era mi día.

Salí del baño para encontrarme a Josh sentado en el borde de la cama, leyendo una revista que había encotrado entre mis cosas. Levantó la vista y sonrió, sadisfecho con el resultado.

-Estas preciosa, Marie.

Asentí.

-¿Nerviosa?

-Para nada.

"Por supuesto que estoy nerviosa, estúpido".-pensé. Pero no se lo iba a demostrar.

Cogí el bolso y me lo colgué en el hombro, justo al tiempo que me subía a unas sandalias de
tacón que habían aparecido misteriosamente debajo de mi cama.

Un cuarto de hora después, ya habíamos llegado a nuestro destino. No hablamos durante todo el trayecto en coche. Las pesadillas me ponían de mal humor. Josh, por su parte, ya estaba acostumbrado a ello, por lo que tampoco hizo ningún intento de entablar conversación conmigo.

-A trabajar, pequeña. -murmuró él.

Era un edificio grande, y curiosamente, era la primera vez que entraba en él como una de sus participantes, por así llamarlo. Mi mejor amigo, por el contrario, ya había participado una vez, así que no estaba tan inquieto. Al bajar del coche me pasé un mechón rojo detrás de la oreja, y esperé hasta que los guardias de seguridad me hicieron la señal para que saliera. Apenas puse un pie en el asfalto, los fans saltaron y chillaron mi nombre, rogando por una foto o un autógrafo. Josh pasó de largo, pero yo me paré a saludarlos, por lo que llegé con un par de minutos de retraso a la reunión.

Jer ya estaba esperándome en el momento en que aparecí. Me abrazó, y yo me mantuve tensa bajo sus brazos.

-Buenos días, cielo. ¿Cómo has dormido?

-Genial.-mentí.

En el fondo, Jer ya sabía el episodio nocturno que me llevaba cada mañana, pero prefirió no hacer comentarios al respecto. Jerton Gyhall era uno de los grandes directores de Hollywood, con más contactos y que influía más respecto a las masas. Entrados ya sus cincuenta, presentaba un pelo canoso, algo escaso, unos ojos cansados detrás de unas gafas de media luna y arrugas por la cara. Sin embargo, siempre vestía con trajes y zapatos elegantes, y eran muchas las jovenes que se habían acercado para tener una aventura romántica con él, claro está, por el dinero. Jer siempre se había mantenido distante a ellas, nunca le había interesado ninguna mujer excepto la suya, que por desgracia, había muerto.

Tragué saliva al pensar en ello. Por suerte, también era mi gran mentor. El primer director que se fijó en mi, y que me arrastró a Hollywood, que me vio crecer y me apoyó en todo momento. Por eso, lo consideraba como un padre, algo entradito de años, sí, pero un padre al fin y al cabo.

-Bueno, ahora que estamos todos deberíamos empezar con la reunión.

Delante de nosotros estaban los demás representates. Pero de los que conocía, simplemente estaba Jer.

-Como sabéis, este año se va a celeberar la cincuentena edición de los CMA's. Para los más novatos, os lo explicaré. Básicamente, es una competición, que se da cada diez años y dura un período de unos cuatro aproximadamente. La competición va por países, y cada país elije un máximo superior, que són los que estamos reunidos hoy aquí. Yo, por ejemplo, represento a Estados Unidos y Gran Bretaña, ya que nos unimos en este tipo de celebraciones. -se oyó un resoplo general. Esos dos eran los equipos más fuertes, y juntos se convinaban en una especie de arma letal-. Mar, representa a Krystal.

>>Hasta ahí, creo que todos llegamos. El caso es con qué vamos a competir en esta edición. Recordad que es una conmemoración de la música y el cine, y por lo cual tiene que incluir esos dos aspectos -Jer se curzó de brazos, esperando un buen recibimiento que no llegó-. ¿Alguna idea?

Pensé que Jer era demasiado diplomático. En fin.

-Yo he pensado en series y en películas. Podríamos hacer una serie que contuviera material musical, y dos películas, con sus respectivas bandas sonoras. -dijo una mujer de la segunda fila.

-Eso es muy típico.

Una idea cruzó por mi mente. No era mala idea...

-¿Y por qué no lo giramos? Es decir, que actores cantes y cantantes actúen. Además para hacerlo más justo, podríamos hacerlo como en una gira, es decir, con conciertos en vivo para evitar que ciertos países utilicen más autotune que otros por sus estatus economicos o subenciones del estado.

La sala se sumió en un largo silencio. El primero en romperlo se sonó desagradablemente la nariz antes de hablar.

-Esa, niña, es una buena idea. -dijo el señor de la congestión.

-Lo sé. Pero no me llame niña. -mustié.

por **dailyingwithtears** Lun 22 Dic 2014, 11:22 am

Capítulo 3

Llegaron exhaustos al camerino, con sudor aflorando de la frente y corazones desbocados. Se dejaron caer en una silla pequeña, pero cómoda.

-Otra vez más. -susurró Harry.

-Esto es como un sueño.-dijo, soñando despierto, Liam.

Louis respiró pesadamente, agarró un cojín y se lo lanzó a la cara del castaño.

-¡Eh!-protestó este, incorporándose.

-¡No me seas nenaza! ¡Venga, tenemos que grabar los VideoDiaries! ¡Hemos pasado otra ronda, girl!

Zayn se pasó la mano por la cara, exasperado. A veces, Louis tenía tanta energía como para gastar y derrochar, y todavía no se le acababa. De vez en cuando, se preguntaba si no estaba conectado constantemente a un enchufe invisible que le diera energía, o si no era un alien, o un robot. Al fin y al cabo, aquellas eran las explicaciones más lógicas.

-Sólo dejános descansar un rato...-gritó Harry, entre sueños y sonidos guturales propios de quién se está a punto de dormir.

-Oh, no, no, no, Harriet. No me vas a hacer eso a mí.

Seguidamente, soltó su risa malvada, y cogió del tobillo al rizado, lanzándolo al suelo sin cuidado alguno. Harry se despertó de golpe a causa del impacto.

-¡Louis! ¡No te subas encima! -chilló.

-¡¿Qué estáis haciendo?!

Todos se giraron para observar a la morena que acababa de entrar al la pequeña sala de los camerinos de The X Factor. Su larga melena castaña oscura estaba atada en una cola de caballo, resaltando más las fracciones de su cara, tan parecidas a alguien del grupo.

-¡Gemma!-saludó Harry, sacándose de encima a Louis para darle un abarazo a su hermana.

El que se había quedado en el suelo se hizo el ofendido, y a través de sus gritos, consiguió despertar a todos.

Bueno, a casi todos.

-Niall está dormido. -informó Gemma, señalándolo con la cabeza.

Esa fuera quizá la peor cosa que pudiera haber dicho. En cuestión de segundos, Niall estaba

despierto con un sobresalto encima que le duró varios minutos.

-Quería dormir.

-Y yo.

-Vaya, así que resulta que yo soy el único que quería estar despierto. -habló Louis en voz baja, más para sí mismo que para los otros.

-¡Sí!

Gemma soltó una carcajada.

-Louis, déjalos dormir.

-Pero yo necesito actividad...

-He oído que van a hoy es la inauguración de una discoteca. Id a despejaros y a celebrar vuestro logro en el programa. Seguro que Simon os deja.

Zayn, Louis, Harry e incluso Liam se mostraron encantados con el plan. Excepto Niall, que odiaba la música alta, las chicas insinuadoras y las manos toqueteando cosas ajenas. Pero al final, pudieron convencerle, y a regañadientes, se arregló, sin saber que aquella misma noche, en aquel lugar, iba a conocer a aquella chica que iba a volverlo loco durante mucho tiempo.

por **Fab.** Lun 22 Dic 2014, 11:31 am

Camila Jones.

"Si no tienes nada bueno que decir, no digas nada"

Representante: Aurora Mohn.

Nombre: Camila Jones.

Apodos: Cami, Camilucha, Camilita, etc.

Edad: 17.

Orientación Sexual: Amorosa y atrevida.

Chico: Harry Styles.

Descripción Física

Soy algo alta, digamos que mido 1,72. Cabello lacio y rubio hasta la cintura, ojos celestes. Tengo unas piernas largas y delgadas, no demasiado, lo normal. Un busto plano y con unas caderas bien definidas. Mi sonrisa es mi parte favorita de mi cuerpo, luego mis labios que son lindos de un color rosado, siempre parece que los tengo pintados.

Descripción Psicológica

Yo creo que soy una buena persona, que muchas veces suelo ayudar a la gente, una persona a la que le gusta reír, y tiene mucha gracia.
También creo que soy una persona sincera porque casi nunca miento.
También soy una persona en la que se puede confiar porque algunos amigos me lo han dicho.
Soy algo dura y fría cuando algo me molesta y algo que no me gusta es llorar en público.
También soy una persona que presiente si algo bueno o malo va a pasar. Y mas que nada, soy la persona mas bipolar que existe.

Historia

Mi familia no es tan unida, es decir, mis padres son los típicos empresarios que se la pasan trabajando y casi nunca están en casa. Aparte de que mamá es diseñadora de ropa.
También tengo un hermano menor, Facundo, el tan solo tiene 4 años y es solo atendido por mi, ya que mi mamá no esta casi nunca en casa. Pero obvio tengo la ayuda de las niñeras de él que me enseñan muchas cosas.
En fin, mi vida es normal, soy una chica normal. Soy la chica la cual le gusta divertirse con amigas y amigos. Pero mas que nada con mis mejores amigos, Nash, Matt, Josh y Micaela.
De vez en cuando vienen a visitarme ya que soy una chica con muchos problemas.

¿Cuál es mi problema? La bipolaridad.
Puedo ser la persona mas dulce del mundo al principio, pero luego pueden decir una mínima palabra que no me agrada y me enojo de la nada. Y enojarme de la nada hace que me enoje aun mas conmigo misma.
Y bueno, pues ademas soy la chica con el corazón roto; después del suceso que tuve con uno de mis ex-novios no volví a creer en el amor. Pensaba todo el tiempo que era una estúpida y solo vivía apagada sin ganas de nada.

Familia y Amigos

Facundo.|| Hermano. || 4 años.

Isabelle. || Mamá. || 40 años.

Rodrigo. || Papá. || 46 años.

Nash. || Mejor amigo. || 17 años.

Matt. || Mejor amigo. || 17 años.

Josh. || Mejor amigo. || 18 años.

Micaela. || Mejor amiga. || 16 años.

Extras

Perforación en su oreja. Perforación en su ombligo.
Le encanta cantar y más que nada su sueño es convertirse en actriz.

Estilo:

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By Me

ABREME:

por **Fab.** Lun 22 Dic 2014, 12:16 pm

Siguela pronto, me encanta! Afraid (Niall Horan) 2686721104

por **dailyingwithtears** Lun 22 Dic 2014, 12:43 pm

Cami13 escribió:Siguela pronto, me encanta!

Graacias! Sí, pronto la sigo! Afraid (Niall Horan) 2686721104

por **dailyingwithtears** Mar 23 Dic 2014, 11:51 am

Capítulo 5

Sin duda, y tal como esperaba, la música estaba demasiado alta. El rubio estaba sentado en el sofá de la discoteca con los brazos lo más juntos a su cuerpo, tanto como le era posible. Intentaba hacerse invisible en un lugar algo oscuro, aunque cargado de luces de colores que enfocaban a la pista de baile y a la barra de bebidas.

No hacía nada, solo observaba. Observaba como los cuerpos sudorosos de aquellos desconocidos se mezclaban entre ellos, bailando al ritmo de la música. También tenía cuidado de los chicos. Aunque él no fuera especialmente maduro, los demás todavía lo eran menos. Liam había desaparecido de la faz de la tierra siguiendo a aquella chica... Y por lo que veía, los otros se lo estaban pasando muy bien. Harry bailaba muy pegado a una deslumbrante rubia con poca ropa, Louis hacía reír a unas chicas, y Zayn conversaba con una joven muy mona en la barra. Al parecer, estaban todos acompañados, con excepción de él.

Pero él tampoco quería tener compañía aquella noche. Hacía un mes que lo había dejado con su novia de Irlanda, y no estaba de ánimos para nadie más a excepción de él mismo y el vaso que sostenía en su mano izquierda. La música le había servido para desconectar durante esas semanas, pero cuando estaba alejado de los escenarios todo volvía a una normalidad tan monótona, que resultaba casi agónica. Era consciente de que necesitaba un cambio en su vida, y lo necesitaba ya.

. . . . . . . . . . . .

Me arreglé el labial rojo, y lo guardé de nuevo en su bolso. Estaba lista.

Salí del baño de mujeres de la discoteca. El último chico me había destrozado el maquillaje con sus besos bruscos. Al final le había exijido que parara, me hacía daño.

Por un momento, la imagen de Justin cruzó por mi mente como un relámpago, feroz y repentino, pero fugaz. Me recordé, de nuevo, que podía besar a quién quisiera. No estábamos saliendo juntos, sólo pasábamos el rato. Un poco de diversión. Sí, eso era todo lo que el canadiense suponía para mí: una diversión espontánea. No tenía por qué preocuparme por sus sentimientos, porque no existían. Y aquella era una gran comodidad.

Forcé la vista justo a tiempo para ver a Allison morreándose con un chico muy apuesto en un rincón. Y Clara... no la veía, pero estaba convencida de que iba por el mismo camino. Mis mejores amigas siempre desaparecían cuando habían chicos a la vista. En fin, eso era lo que hacían las hormonas. Al ser unos cinco años mayores que yo, tenían otro tipo de necesidades... ¿biológicas? Sí, esa es la palabra que estaba buscando.

Caminé firmemente a la pista de baile, con el vodka en la mano. ¿Qué los menores de dieciocho no podían conseguir alcohol? No tenía ni los quince y vaya que lo conseguía. Cerré los ojos cuando escuché los primeros acordes de una canción que conocía muy bien resonar el ambiente cargado.

We are the crowd

We're c-coming out
Got my flash on it's true
Need that picture of you
It's so magical
We'd be so fantastico

El que también sonrió al escuchar la canción fue Niall, sentado en el sillón. Aquella había sido su canción favorita durante semanas, hasta que la escuchó demasiado y la acabó odiando. Pero entonces, no supo por qué aquella canción le pareció tan perfecta como la primera vez.

Leather and jeans

Garage glamorous
Not sure what it means

El rubio hizo una mueca cuando dos chicas se acercaron hasta él y se sentaron justo a su lado. Hubiera sido una buena experiencia, si no fuera porque estaban besándose apasionadamente con dos chicos con cabezas rapadas y brazos que podían ser perfectamente el doble de sus piernas. Estiró el cuello para evitar verlos, pero a su otro lado tenía justamente lo mismo. ¿Es qué no había espacio en la discoteca que se tenían que poner justo a su lado? Ah, cierto, lo olvidaba. Al parecer la última moda en las fiestas era no respetar el espacio vital.

Dio unos cuantos traspiés en un intento patético de caminar. ¿Por qué la gente se la acercaba tanto? Resultaba incluso intimidante.

But this photo of us
It don't have a price

Ready for those flashing lights
'Cause you know that baby I

Espera, ¿cómo había llegado hasta la pista de baile? Ah, no, no, no, no. Era un no rotundo. Niall se miró horrorizado la mano: su bebida había desaparecido. Alguien se había estado divirtiendo róbandosela cuando estaba distraído intentando no caerse en plancha por el suelo gracias a un tropezón. Intentó mantener la compostura, la decencia, pero en esas condiciones, sólo e inmóvil con todos bailando alocadamente a su alrededor no podía sentirse más fuera de lugar.

Fue por eso que un golpe de un bailarín que se creía experto le hizo caer, y fue a parar a las espaldas de una chica con un corto vestido azul marino. Tuvo el tiempo justo para ver su pelo rizado, rojo fuego, deslizarse por sus hombros antes de situar sus manos en las caderas de la pelirroja en un intento desesperado de mantenerse de pie. Y fue justo en ese momento cuando de chocó con ella.

I'm your biggest fan
I'll follow you until you love me
Papa-paparazzi
Baby there's no other superstar
You know that I'll be your
Papa-paparazzi

Me di la vuelta y pude ver a un chico con los ojos cerrados y apoyado sobre mi pecho por una caída. Sonreí de medio lado. Lo ayudé a equilibrarse, y pude ver que él todavía tenía los ojos cerrados cuando estuvo derecho por lo que supuse que era un chico tímido.

Promise I'll be kind
But I won't stop until that boy is mine
Baby you'll be famous
Chase you down until you love me
Papa-paparazzi

Bajé la mirada hasta sus manos. El pobre aún no las había sacado de mis caderas. Solté una carcajada, rodeé su hombro y me moví al ritmo de Lady Gaga, con los ojos fijos en todo lo que aquel extraño personaje, tímido y patoso, hacía con su cuerpo al bailar.

I'll be your girl
Backstage at your show
Velvet ropes and guitars
Yeah cause you'll know
I'm staring between the sets
Eyeliner and cigarettes

Niall abrió los ojos lentamente, parpadeando. ¿Aquella chica estaba bailando... con él? Tuvo que contener el aliento cuando la vio en primer plano. Su cara estaba a unos veinte centímetros. Arqueó una ceja, esperando su reacción. Niall sólo la miró de arriba a abajo. No le pasó desapercibido como los otros chicos de la fiesta lo miraron celosos. ¿Era él el único que no se había fijado en ella? Por lo que veía, sí. Y eso no era lo sorprendente. Lo sorprendente es que existiera una chica que, aún no ser la reina de la belleza ni tener un cuerpo de modelo, resultara tan irresistible.

Shadow is burnt
Yellow dance and return
My lashes are dry
Purple teardrops I cry
It don't have a price
Loving you is cherry pie
'Cause you know that baby I

Mar era pelirroja, de labios rojos y pestañas largas. Era delgada, y bastante bajita. Aún su falta de estatura, en sus piernas y en su abdomen se habían empezado a formar las primeras curvas de mujer, que se acentuaban más de las que había visto en las otras. Tenía rubor en las mejillas, pero no era sonrosado. Su confianza en ella misma era algo que se palpaba a años luz. Y, por último, aquellos ojos verdes. Verdes esmeraldas, que se notaban incluso a metros de distancia. Fijos. Grandes. Brillantes.

I'm your biggest fan
I'll follow you until you love me
Papa-paparazzi
Baby there's no other superstar
You know that I'll be your
Papa-paparazzi

Promise I'll be kind
But I won't stop until that boy is mine
Baby you'll be famous
Chase you down until you love me
Papa-paparazzi

Lo ayudé a bailar. Le consiguí una nueva bebida, y tal vez le hice beber algo más de la cuenta. Lo justo para que se soltara.

-¿Cómo te llamas? -pregunté, moviendo las caderas.

-Niall. ¿Y tú?

Vacilé. No podía revelar mi auténtica indentidad. ¿Qué diría la prensa si se entera que la que consideran una de las grandes actrices del momento está en una discoteca, bebida, y bailando con un extraño? Eso sin tener en cuenta la ropa y el maquillaje.

-Georgia. Mi nombre es Georgia Rose.

Esa era un buen papel. A los diez, hice un papel en una obra de teatro de la escuela, y la protagonista era Georgia Rose. Y su padre... ¿De qué trabajaba?

-Y mi padre es dentista. -susurré para mí misma. Niall tampoco me hizo mucho caso, aunque estaba convencida que me había escuchado. Ojalá no pensara que estuviera loca por hablar del trabajo de su padre en una discoteca bailando con un desconocido.

Real good

(We dance in the studio)
Snap, snapped
(That shit on the radio)

Una bebida.

Dos. Tres. Cuatro.

Y ahí fue cuando ambos perdieron la cuenta.

Don't stop for anyone

Were plastic but we'll still have fun!

-¿Puedo llevarte a casa?

Me acerqué más de lo políticamente permitido a su cara, y le susurré:

-Ni en tus sueños más salvajes.

I'm your biggest fan
I'll follow you until you love me
Papa-paparazzi
Baby there's no other superstar
You know that I'll be your
Papa-paparazzi

Promise I'll be kind
But I won't stop until that boy is mine
Baby you'll be famous
Chase you down until you love me
Papa-paparazzi

A la mañana siguiente Niall se despertó dentro de un coche, con los chicos dentro. Se preguntó si todo había sido un sueño, pero al incorporarse el dolor de cabeza le negó sus sospechas. Vaya, había sido todo real. ¿Había bebido tanto? Vio por la ventanilla que el sol se alzaba entre los edificios de cemento, y debió entrecerrar los ojos para ocostumbrarse a ese nivel de luz. A su lado, Harry también dormía la mona, muy abrazado a la chaqueta de Zayn. Louis estaba a su izquierda, leyendo un mensaje en el teléfono. Zayn, de copiloto, cambiaba las presintonías de la radio, y Liam apuntaba algo en su agenda.

-¿Qué ha pasado? -Niall se sorprendió por lo ronca que sonó su voz.

-¡Buenos días, bello durmiente!-gritó Louis. Harry ronroneó, medio dormido medio despierto.

-Shhh -lo mandó callar Zayn-. El ricitos está dormido.

Niall abrió la boca para repetir la pregunta, pero Liam se avanzó.

-Te emborrachaste, tío. Y estuviste con esa chica. Te salvamos cuando te encontramos devolviéndola a su casa.

El irlandés respiró hondo. Georgia Rose tampoco había estado un sueño. Se miró los pies, y sonrió.

por **dailyingwithtears** Mar 23 Dic 2014, 12:11 pm

Capítulo 6

Me había despertado hacía horas, pero continuaba metida en la cama y mirando al techo. Había sido una noche rara. Niall y yo habíamos bailado, habíamos bebido, habíamos salido y él me había llevado hasta la esquina de su casa a una hora muy alta de la madrugada. Luego, trepé por la cañería que daba hasta la ventana de mu habitación y me dormí. Y las escasas horas que había conciliado el sueño habían sido totalmente plácidas. Eso era lo más raro. Nunca dormía sin pesadillas, nunca dormía bien. Aunque aquella noche, ni un tren express podría haberme despertado.

Oí los pasos por las escaleras y tuve el tiempo justo de cerrar los ojos y cubrirme con la manta hasta la nariz. Jer abrió la puerta. Caminó hacia mí, y me apartó un mechón de pelo rebelde de su frente, besando la coronilla. Me hice la dormida, respirando pausadamente.

-Me alegro que hoy no hayas tenido pesadillas. -dijo en voz baja, más para él que para mí.

Si él supiera. Jer ni sospechaba que su angelito se escapaba por la ventana de su habitación para ir a fiestas de mayores de dieciséis años, beber hasta emborracharse y bailar pegada a chicos demasiado hormonados.

Jer abrió las cortinas, dejando que la luz del sol le diera directamente a mi cara, y yo finjí estar despertándome por segunda vez en menos de una hora.

. . . . . . . . . . . . . . . . .

Horas después, ya nos encontrábamos trabajando. Así que una serie, y una película. Tenía que encontrar actores con buena voz, y cantantes con talento para la actuación. Sin duda, en aquellos instantes odiaba mi espontaniedad para soltar las cosas, que sólo las ponía más difíciles. Estaba encerrada en un despacho de la tercera planta, la que me tocaría durante los cuatro años en que se celebraran los CMA's.

Solté un sonido de queja con la boca cerrada, y dejé que su cabeza golpeara ruidosamente la madera de la elegante mesa que me habían ofrecido. A mis catorce era todo un récord ser la dirigente del equipo de Krystal en una competición tan importante, pero me sentía algo intimidada por la grandeza de la situación.

Aunque no quería pensar en eso ahora.

Saqué el teléfono de su bolsillo, y pensé que ya encontraría a alguien después. Encendí el movil, y este le costó colaborar.

-Oh, Petunia, no me falles.

Petunia -el nombre de mi teléfono, de mi televisión, de mi futuro coche y de todas las cosas que poseía- no quiso encenderse. Tenía que cambiar de mobil. Después de muchos intentos, pudo acceder.

Un pitido. Dos. Tres. Y una voz de respuesta.

-Hola, Marie. -saludó Justin.

-Jus, ¿qué tal? Estoy aburrida aquí sin hacer nada, ¿me sacas de este tormento de desesperación y estrés y me llevas a tomar un café?

Se escuchó una risa al otro lado, que hizo que sonriera con cariño.

-Pasó a por ti en dos minutos. Estate lista.

-Hecho.

-No, enserio.

Hice un puchero.

-¿Enserio, qué?

-Que estés lista para cuando llegue.

-Creo... que ya te he dicho que sí. -dije, finjiendo estar confundida.

-Ya, pero resulta que siempre que llego todavía te faltan dos minutos.

Rodé los ojos, consciente de que él no podía verme. Justin consideraba una gran falta de respeto rodar los ojos, así que me cuidaba de no hacerlo delante de él.

-Al menos no soy como la mayoría de las chicas. Ellas dicen que les quedan cinco minutos, y en realidad son treinta. Considerate afortunado, Bieber.

El castaño lanzó un largo suspiro, que escuché atentamente, intentando descifrar.

-Me resignaré. Hasta luego.

-Hasta luego.

. . . . . . . . . . . . . . . . .

-¡No, Jus! ¡Las mariposas no muerden!

-¡Te digo que me mordió una mariposa!-repitió él.

Sonreí y me paré delante del chico, cruzándome de brazos.

-Pero las mariposas no tienen dientes. ¿Cómo te va a morder?

-Esa sí tenía dientes. -respondió avergonzado.

-Mutación genética. -concluí volviendo a andar. Justin tuvo que seguirme el paso a grandes zancadas para evitar quedarse atrás. Llegamos a un Starbucks del centro, entre risas y enfados finjidos. Nos sentamos en una mesa. Siempre era fácil conversar con Justin, tal vez por eso me gustaba pasar tiempo con él. Sonreí cuando la nariz le quedó manchada de nata de su Frapuccino. Estiré el dedo y se la limpié delicadamente. Él no perdió ningún detalle de los movimientos que hacía. Me acercó cogiéndome de la cintura, y me plantó un beso en los labios, que no tardé en responder.

-¡AAAAAAAHHH!

El grito nos separó. Delante nuestro, podíamos ver a unas fans adolescentes. Llevaban escrito JB en la frente, y una gran fotografia mía estaba impresa en sus camisetas blancas. Iban todas a conjunto, y nos miraban como si fuéramos dos hombres de las tabernas en pleno siglo XXI tomándonos nuestra bebida en Starbucks.

En seguida nos acosaron a preguntas y a autografos, a fotografias y a chillidos. Justin se echó para atrás en un par de ocasiones, pero yo me mantuve a pie del cañón durante todo el tiempo. Mis fans eran lo mejor que me podía haber sucedido en mi vida. A decir verdad, fueron ellos los que me salvaron del infierno por el que estaba pasando.

por **Fab.** Mar 23 Dic 2014, 1:54 pm

Me encanta, me encanta , ME EN CAN TA y lo voy a seguir repitiendo millones de veces!
Siguela pliis! el capítulo tan esperado estubo genial!!

por **dailyingwithtears** Miér 24 Dic 2014, 2:30 am

Cami13 escribió:Me encanta, me encanta , ME EN CAN TA y lo voy a seguir repitiendo millones de veces!
Siguela pliis! el capítulo tan esperado estubo genial!!

Muchiiiisimas graciaas! Sí, pronto subo otro capítuloo Afraid (Niall Horan) 1477071114

por **dailyingwithtears** Miér 24 Dic 2014, 11:16 am

por **dailyingwithtears** Miér 24 Dic 2014, 11:17 am

Capítulo 7

Estábamos completamente solos en la habitación. Adan también era pelirrojo, de nariz aguileña y los rizos le caían graciosamente sobre la frente. Pero aquel día él estaba muy asustado. Se cubría con las mantas la cabeza, y lloraba. Yo aguantaba las lágrimas. Tenía la oreja enganchada en la puerta, para escuchar lo que se decían.

Aunque, en realidad, no se decían nada. Sólo se golpeaban. De vez en cuando se escuchaban gritos, insultos y sollozos. Pero lo que más se oía eran los golpes.

Nuestros padres rompían con todo lo que encontraban. Y no eran sólo lámparas, jarrones y sillas, sino también a ellos mimos. Los moratones en la piel de la madre se hacían cada vez más notables.

-Cállate. -dijo ella.

Peter no le hizo caso. Continuó hablando, matándola lentamente con sus palabras.

-Eres inútil. No haces nada bien. Ni la cena, ni el desayuno, ni tan siquiera eres una buena ama de casa. Y hace unos cuantos años, no eras ni buena estudiante. Ni de las más guapas, ni de las más populares. Todavía no sé qué te encontré, pero volvería atrás en el tiempo para darme una buena bofetada y fijarme en cualquier otra chica. ¡Me has arruinado la vida, Katherine!

Katherine estaba tendida en piso, y lo miró con desdén al hablar.

-¡Si no me hubieras dejado embarazada eso no hubiera ocurrido!
Otro sonido sordo rompió el silencio. Un bofetón.

-No lo vuelvas a repetir. Nuestros hijos son las únicas bendiciones que tenemos en la vida. -dijo Peter, agarrándole con demasiada fuerza el brazo. -¿Me entiendes?

-Los amo. Pero a veces pienso que... tuvimos a los gemelos con dieciséis años. No estábamos preparados para ser padres entonces, ni lo estamos ahora. Si tan sólo los hubieramos dado en adopción... Tal vez tuvieran una mejor vida.

Cerré los ojos en mi cuarto en señal de resignación. Lo habían dicho muy bajito, pero era lo suficientemente astuta como para saber cómo escuchar conversaciones ajenas. Hacía meses que se discutían. No sabía por qué, ni cómo había cambiado todo, porque antes eran una familia muy feliz. Pero un buen día, algo sucedió. No sabía el qué, ni qué efecto había tenido sobre sus padres, pero las consequencias eran horribles. Peleas a todas horas, llantos, y maltrato. Aunque nunca nos habían puesto la mano encima: ya se estaban haciendo demasiado daño el uno al otro.

Me senté al lado de mi hermano, y lo abracé..

-Tranquilo, Adan. Están haciendo las paces. Todo va a salir bien. -prometí.

Él sacó su cabecita pelirroja de debajo de las sábanas y abrió sus ojos celestes.

-¿Segura?

-Te lo prometo.

Adan sonrió y me abrazó del cuello. A pesar de que tenían la misma edad, yo era mucho más fuerte que mi hermano gemelo.

Cuando él se durmió, y la casa se sumió en el más sincero silencio, ya entrada la noche, bajé con cuidado las escaleras, hasta llegar al primer piso. Abrí la puerta del baño, con los ojos cerrados. No soportaba la oscuridad. Cuando le di al interruptor, pudo abrirlos. Me senté en el frío suelo, y reposé mi cabeza en mis rodillas. Me di un tiempo, unos segundos, minutos quizá. Luego, me levanté, y abrí el cajón de mi padre. En él estaba todo lo que un hombre necesitaba: cepillo de dientes, colonia, desodorante y cuchillas de afeitar.Mi mano se dirigió a las últimas, y las cogí curiosa.

Me subí la manga, temblorosa. En mi pálida piel se apreciaban los arañazos que yo misma me había hecho, en la madrugada, cuando todo el mundo dormía y sentía que no podía soportarlo más. Pero los arañazos ya no eran suficiente. Indecisa, pasé la cuchilla por la muñeca.

Primero, no sentí absolutamente nada. Era un vacío inquietante.

Después, vino el dolor. Era un dolor agudo, dando en pinchazos donde el metal había pasado.

Y por último, el alivio. La sangre cayó, roja y líquida. El dolor en mi pecho menguaba a medida que el de mi muñeca iba en augmento.

Aquella noche, me metí en la cama y me miré la herida. Me la había curado yo misma después de hacérmela. Y por primera vez en muchos meses, dormí feliz. Fue entonces cuando los cortes se hicieron cada vez más habituales.

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Afraid (Niall Horan)

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