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Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
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"Mi más preciado tesoro..." (Joe&Tu)
O W N :: Archivos :: Novelas Abandonadas
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Página 9 de 16. • 1 ... 6 ... 8, 9, 10 ... 12 ... 16
Re: "Mi más preciado tesoro..." (Joe&Tu)
Pobresito Joe :(
Se siente usado por culpa de Nick ¬¬
Aunque supongo que yo pensaria lo mismo que Nick
Ya quiero el otro cap!
Se siente usado por culpa de Nick ¬¬
Aunque supongo que yo pensaria lo mismo que Nick
Ya quiero el otro cap!
Lulajonatica
Re: "Mi más preciado tesoro..." (Joe&Tu)
Siguela!!!! Espero que no nos dejes mucho tiempo sin cap ;(
claudia12
Re: "Mi más preciado tesoro..." (Joe&Tu)
Capítulo 11-.
-Siento no haber llegado juntos a la ceremonia –bebió un sorbo de café.
Levante mi mirada, lo observe por un instante y continué desayunando en silencio.
-¿No dirás nada?
Respire hondamente.
-No, debí habérmelo esperado –deje los cubiertos sobre la mesa.
-Oye, sé que te lo prometí, pero una cosa paso a otra, me olvide de todo por completo.
-¿Tan fácil soy de olvidar?
-No amor –tomo mi mano-, no me malinterpretes, fue la presión porque todo saliera bien.
-Está bien –aleje mi mano.
-¿Está bien? ¿Qué debo entender por eso?
-Lo que quieras entender Matt –me puse de pie.
-¿Podemos terminar de hablar?
-No. Ahora soy yo la que no quiere hablar.
Cruce el comedor para después salir por la puerta del jardín. Un auto estaba estacionándose en la cochera. De él bajo Joseph, un poco apresurado y colocándose su saco.
De la nada una sonrisa lleno mi rostro. Acomode mi ropa y cabello. Era algo extraño pero recordar el beso de esa noche me hizo comportarme torpe y nerviosa.
-Hola –llame su atención.
-Señorita -se detuvo-, ciento haberme retrasado de nuevo.
-No te preocupes, entiendo que no has descansado mucho.
-Sí –menciono serio.
-¿Cómo estás?
-Listo para trabajar –respondió cortante.
-Ah…por supuesto –balbucee-, pero no hay mucho que hacer hoy, solo necesitaba ir por unas cosas al centro comercial, ¿irías conmigo?
-Ese es mi trabajo.
Asentí confundida. Su silencio e indiferencia dolieron, no esperaba nada pero en realidad si lo hacía, mi mente y corazón lo esperaban con ansias. Como lo había escuchado antes: “cuánto más te ilusionas más fuerte es el golpe que te ganas”.
-Ahora regreso –di medio vuelta.
Cuanto espere el momento para verla, la noche se me había pasado con tan solo pensar en ella, pensar en ese beso que había logrado revivir los sentimientos que se mantuvieron tanto tiempo sepultados dentro de mí y ahora simplemente la rechazaba.
-Joseph.
El señor Bomer llamó mi atención.
-¿Sí…? –respondí nervioso.
-¿Te sucede algo?
-No. Nada señor.
-De acuerdo –giro su vista-. ¿Hablaste con mi esposa?
-Sí, me menciono que necesita ir al centro comercial.
-Ah –se quedó en silencio-, en unos días tendré que salir de la ciudad y necesito que cuides de mi esposa las 24 horas del día.
-No se preocupe, cumpliré con mi trabajo.
-No, no entiendes, tienes que quedarte aquí, necesito que estés al pendiente de ella todo el día.
-Pero…tengo una hija.
-¿Y? ¿Cuál es el problema? Tráela contigo, pueden quedarse en la casa del jardín.
-¿De verdad?
Asintió.
-Pero recuerda que esto es un trabajo serio, no quiero niños corriendo por toda la casa.
-De eso tampoco se preocupe.
-Bien, entonces yo te avisare con tiempo –camino hasta su auto-. ¡Ah! Dile a mi esposa que la veo más tarde.
-Claro señor.
Sé que todos hemos experimentado esto alguna vez. En la vida tenemos momentos en los que dos corazones, uno que ya sabes cómo late y otro que estás conociendo su latir mueven el tuyo y no sabes por qué. La sensación de algo nuevo siempre invade y llena de emoción. Hay cosas en la vida y decisiones que se toman que en el momento parecen equivocadas, injustas, puede que sea verdad pero otras veces es lo mejor que se puede hacer, pero hoy estaba decidida a algo; no dejar este nuevo sentimiento, que tal vez solamente fuera una equivocación, una tentación, conocer algo diferente, no importaba, era mío y quiero conocerlo a fondo.
-Estoy lista –sonreí observándolo.
Asintió. Tan solo asintió pasando frente a mí para llegar al auto, abrió la puerta trasera y extendió sus manos cediéndome el paso. Respire hondamente y subí de prisa para ocultar mi disgusto. Él subió después de unos minutos, logre captar su mirada por el retrovisor, la misma que había llamado mi atención la noche anterior.
-¿Al centro comercial? –encendió el auto.
-Por favor –respondí.
Guarde silencio por unos instantes, en otros hacía preguntas, comentarios, algo para que la tensión no hiciera tan evidente y pesada, más sin en cambio solo obtenía respuestas frías y cortantes. Era evidente que aquella situación puso frente a mi cara la respuesta.
Al fin parecía que todo actuaba con normalidad de nuevo, o más bien nunca habían cambiado las cosas. Ella caminaba frente a mí, yo mantenía distancia.
-¿Termino sus compras? –pregunte tomando varias bolsas.
-Sí, ¿te parece si vamos por un helado?
-Si usted lo desea –cedi el paso.
-¿Podemos caminar juntos por favor? –tomo mi brazo.
-No. Creo que es mejor así –me aleje.
-¿Pasa algo? Creí que éramos amigos.
-Lo siento, eso no puede ser posible –observe su rostro.
-¿Por qué?
-No sé si usted se ha dado cuenta pero, yo solamente soy su empleado, para eso fui contratado.
-Lo sé pero a mí no me molesta ser algo más –sonrió.
¿Algo más? ¿Con eso se refería a una amistad o algo más como el beso de anoche? Aunque las dos eran totalmente contrarias, mi idea de alejarme estaba dictada a cualquiera.
-Pero a mí si –gire mi vista.
-Ah…bueno…yo…-guardo silencio-, quiero irme a casa.
Cerré mis ojos por un momento, en segundos la situación cambió por completo.
-¡Papá! –Ángel se acercó abrazando mis piernas.
-¡Ángel! –Kevin y Nicholas gritaron en una misma voz.
Bueno chicas este es el primer capitulo de los tres que subire, por ahora les dejare este ya que es muy tarde y mañana tengo escuela, pero tan pronto como puedo subire los otros. Las quiero♥
Karely Jonatika
Re: "Mi más preciado tesoro..." (Joe&Tu)
Espera, que?
Angel estaba en el centro comercial o...?
Bueno, me confundi XD
Me molsta que Joe ande tan seco :S
Pero bueno, lo entiendo, pero nisiquiera amigos?
Seguila!
Angel estaba en el centro comercial o...?
Bueno, me confundi XD
Me molsta que Joe ande tan seco :S
Pero bueno, lo entiendo, pero nisiquiera amigos?
Seguila!
Lulajonatica
Re: "Mi más preciado tesoro..." (Joe&Tu)
Capítulo 12-.
-Princesa, ¿qué haces aquí?
Deje las bolsas de la señorita ___(Tn) sobre el suelo para arrodillarme a la altura de Ángel. Ella me miro sonriente. Kevin y Nicholas llegaron a mi lado con una respiración agitada.
-¡Ángel no vuelvas a hacer eso! –Nicholas levanto un poco su voz.
-Pero…-hizo un puchero-, lo siento –bajo su vista.
-Todo está bien, ella quería ver a Joseph –Kevin intervino.
-Aun así no está bien Kevin, logro que me preocupara.
-Tu cuando no estas preocupado –Kevin rió.
Nicholas lo observo con seriedad.
-Bueno, no importa –Rompí el silencio-, ¿qué hacen por acá?
-Kevin necesita comprar unas cosas para su trabajo.
-Sí, pero le estaba diciendo a Nicholas que hubiera sido mejor ir a una papelería, o algún lugar donde vendan cosas para el trabajo, en un centro comercial tardaremos horas.
-Te dije que Ángel quería algo de comer, después podremos ir a la papelería cerca de casa.
-¡Sí! Quiero comer –Ángel comenzó a saltar-. Papi, ¿vendrás con nosotros?
-Ah…yo no puedo amor.
Observe de nuevo a la señorita ___(Tn). Después de todo lo sucedido me había olvidado por completo que me encontraba aun en hora de trabajo. Me puse de pie y tome de nuevo las bolsas de compra. Los chicos la observaron también, ambos con tal asombro en sus rostros. Al parecer no era el único que se deslumbraba por su belleza. Ella cambio su expresión de seriedad por una sonrisa.
-Lo siento señorita.
-¿Es tu hija? –menciono al fin.
-Eh…sí –respondí confundido.
-Es hermosa.
Se inclinó a la altura de Ángel para acariciar su mejilla. Su sonrisa entonces se tornó distinta, al igual que su mirada, me hizo recordar por un momento a la de Ángel cuando tuvo por primera vez a nuestra hija entre sus brazos.
-¿Quién es ella papá? –Pregunto confundida.
-Ella es mi jefa princesa.
-Mi nombre es ___(Tn) –sonrió-, supongo que ellos son tus hermanos o ¿me equivoco?
-No, en efecto ellos son mis hermano, Nicholas –lo señale-, y Kevin –hice lo mismo.
-Mucho gusto –saludo a ambos con una sonrisa.
-El gusto es nuestro.
Kevin la miro y sonrió con picardía. No me pareció nada fuera de lo normal, siempre había sido el más coqueto y ojo alegre de los tres. Supongo que me molesto un poco, ya que tuve que apartar la mirada por un momento. Nicholas al contrario se mostraba como siempre, serio y tímido.
-Supongo que tenemos que irnos –Nicholas hablo por fin-, Joseph debe seguir trabajando.
-¡No! ¡Quiero que papá venga a comer con nosotros! –Me abrazo.
-Princesa, no puedo.
-Sí Án –tomo su mano-, papá debe seguir trabajando.
-Bueno, yo ya no tengo nada más que hacer Joseph –me observo-, puedes ir con ellos, yo puedo regresar a casa.
-¡Sí! –Ángel brinco de nuevo.
-No lo sé, yo no puedo dejar que usted se vaya sola.
-Entonces que nos acompañe –Kevin propuso.
-Claro que no Kevin, ella debe tener que hacer cosas mucho más importantes.
Ella levanto una ceja al escuchar mi respuesta.
-En realidad me encantaría ir con ustedes –sonrió.
-Vamos entonces.
Kevin extendió sus manos cediéndole el paso. Conocía a mi hermano, esa mirada brillante y su gran muestra de caballerosidad, no decía más que estaba interesado, interesado por la mujer que había revivido todo en mí.
Hacía ya tanto tiempo que no comía entre risas y anécdotas que me había convertido en una persona de pocas palabras, en realidad de la única manera en que me comunicaba era por medio de preguntas que ellos hacían, pero más sin en cambio estaba segura que esta comida se convertiría en algo para recordar.
-Cuando Joseph nos dijo que trabajaría como un guardaespaldas no pudimos creerlo a la primera –Kevin comenzó a reír.
-Pues ha hecho un gran trabajo –tomo un sorbo de agua.
Joseph giro su vista. En todo el transcurso de la comida se había mantenido en silencio, tan solo logro mantener una charla con su hija. La cual se mantenía sonriente y cariñosa con él.
-Solamente porque heredo mi carácter –Kevin continúo.
-¿De verdad? –Fingí asombro.
-Sí –sonrió.
-Kevin, ¿quieres dejar de decir mentiras? –Joseph hablo por fin.
-No son mentiras hermano –lo miro fijamente-, no creas lo que dice –ahora me miraba a mí.
-Claro que no –reí-, confió en ti.
-Lo vez –miro de nuevo a Joseph-, ella si confía en mí.
-Porque no te conoce de verdad –contesto sonriendo.
Ambos rieron después de unos segundos, al parecer también sabían comunicarse con la mirada.
-Ya es tarde –Mire el reloj.
-Sí, lo mejor será irnos –Joseph pidió la cuenta.
-Toma –saque dinero de mi cartera.
-No se preocupe señorita, yo invito –entrego el dinero a la mesera.
-Pero, no me molesta pagar.
-A mí tampoco –menciono cortante.
Y ahora está de nuevo con sus frases cortantes.
-Fue un gusto comer con ustedes chicos –me despedí de ambos con un beso en la mejilla-, y tu hermosa –acaricie sus mejillas-, ¿qué puedo decir? Eres preciosa.
-Usted también señorita –respondió sonrojada.
-Muchas gracias –sonreí.
-¿Vamos? –Joseph pregunto.
-Sí –tome mis cosas y me aleje un poco.
Joseph se despidió de sus hermanos y de su hija, en instantes caminaba detrás de mí. Subió las cosas al auto, abrió la puerta trasera esperando a que subiera.
-Fue una gran tarde Joseph, gracias por todo.
-No tiene que agradecerlo señorita.
-Si tengo, de verdad la pase muy bien, hace tiempo que no lo hacía.
-Puedo entender por qué.
-¿Ah sí?
-Disculpe, debí ahorrarme ese comentario.
-No, está bien, quiero escuchar lo que tú “entiendes”.
-No tengo nada que decir.
-¿Por qué?
-Soy un empleado señorita, mis comentarios sobran.
-Para mí no eres solamente un empleado, hay algo en ti que llama mi atención –mire directamente sus ojos.
Guardo silencio.
-¿Por qué no dices nada? –pregunte irritada.
-De nuevo, no tengo nada que decir.
-No hemos hablado de lo que paso anoche.
Cerró sus ojos al instante, aparto sus manos del auto y se alejó unos centímetros.
-Eso fue un error señorita, algo que no tenía que suceder –abrió sus ojos.
-Pero sucedió, y no puedo olvidarlo.
-Esto no es correcto –negó varias veces.
-¿Sabes? Estoy harta de pensar en lo correcto, nunca ha servido de nada hacerlo, solo quisiera por una vez en la vida hacer lo que desee, lo que siento, y creí que ese beso era un buen comienzo, lo hice porque lo desee Joseph, ¿acaso no lo entiendes?
Karely Jonatika
Re: "Mi más preciado tesoro..." (Joe&Tu)
Joe anda muy testarudo ¬¬
Osea, la rayis medio se le declaro en la cara y el dici que no es correcto ¬¬
Siguela!
Osea, la rayis medio se le declaro en la cara y el dici que no es correcto ¬¬
Siguela!
Lulajonatica
Re: "Mi más preciado tesoro..." (Joe&Tu)
Que le pasa a este hombre entiende joe ella te quiere :( Siguela porfa
Suzzey
Re: "Mi más preciado tesoro..." (Joe&Tu)
Capítulo 13-.
-Lo entiendo –mencione después de un tiempo-, pero entonces ¿qué pretende que haga yo? ¿Qué quiere de mí? ¿Qué quiere oír?
-Quiero que digas lo mismo, que no pienses en lo correcto, no me importa que seas un empleado, quiero ser algo más Joseph.
-Está usted queriendo decir ¿qué le gusto?
Ella se quedó en silencio al escuchar mi pregunta. Tal vez no debí ser tan directo, pero en cierta forma eso me ayudaría a conocer mi propia respuesta. En sus ojos se notaba la sinceridad en cada una de sus palabras, era valiente al pronunciarlas.
-Si eso necesitabas escuchar –arqueo una ceja-, sí, me gustas.
Cruzamos miradas, su respuesta no la esperaba, había pasado toda la noche y mañana pensando en que ese beso habría sido tan solo un juego para ella, y ahora ella tomaba la iniciativa. Yo me había permanecido firme todo este tiempo, el tiempo en que pensé besar de nuevos sus labios, algo tal vez hubiera permitido que sucediera.
-Ahora es tu turno.
Cerro la puerta del auto, la misma que me servía como escudo, porque con el simple hecho de verla acercarse, mi garganta se resecaba y de nuevo mi cuerpo reaccionaba, reaccionaba mostrándome que aún estaban esos deseos que cualquier hombre sentiría por una belleza tan natural, como la suya. Ese brillo en sus labios, tan exquisitamente formados.
Intente emitir un sonido de mi garganta pero esta se encontraba en completo desconsuelo. Jamás me considera un hombre con debilidades o miedos, pero ella se convirtió en mi debilidad, en el miedo de su deslumbrante mirada.
-¿Entonces? –Rozo su muñeca con la mía.
-Señorita yo no lo sé –negué un par de veces.
-No me llames más así, mi nombre es simplemente ___(Tn) –continuo con su roce.
Aparte su mano pero no la solté, la sujete frente a mi rostro y la lleve cerca de mis labios para después dar un pequeño beso sobre ella.
Sus mejillas se enrojecieron al instante. Sé que capto mi respuesta, quizá con mis palabras no hubiera recibido la misma reacción.
No quedaba ninguna duda, acaba de meterme a una calle sin salida.
Debo estar loca, esto no es normal pero que bien me hace…Cómo se explica que tan sólo unas horas te den tanta felicidad. Felicidad que tanto tiempo se mantuvo retenida, agobiada por el resentimiento y tristeza. Y pensar que perdí momentos como estos antes, inútilmente esperando un cambio o un giro de mi vida, cuando desde un principio pude hacerlo por mí misma.
-Buenos días hermosa –Matt sonrió a mi lado.
Esquive su mirada.
-¿Puedo saber qué te sucede ahora? –Se colocó frente a mí.
-Nada –mentí.
-¿Nada? Llevas días con esa actitud.
-No tengo nada Matt.
-De acuerdo –se sentó sobre el respaldo de la cama-, entonces ven aquí y abrázame.
-Tengo cosas que hacer –me incorpore también.
-¿Cosas que hacer? ¿Desde cuándo tienes tú cosas que hacer?
-Desde hoy.
Tome mi cepillo de la mesa de noche, cepille un par de veces mi cabello al mismo tiempo que me encargaba de tomar un cambio de ropa del closet.
Matt llego a mis espaldas abrazándome por la cintura y beso mi cuello revolviendo a un lado mi cabello. Lance un suspiro por su contacto, a pesar de querer parecer fuerte, con sus caricias mi cuerpo se rendía al instante. Tomo mi barbilla y giro mi rostro para alcanzar mis labios.
-Te amo linda –beso rápidamente mis labios.
-Y yo –admití.
-Cuéntame, ¿qué planes tienes para hoy? –continuo abrazándome.
-Iré a tomar café con unas amigas –respondí inquieta.
-¿Cuáles amigas?
-Tengo amigas Matt.
-No lo dudo amor –se quedó en silencio-, y…si lo cancelas ¿y salimos a comer tu y yo?
-¿Solos? –Sonreí.
-Es lo que dije –beso mi mejilla-, ¿qué dices? ¿Aceptas?
-Ah…no sé.
Recordé mi pequeña mentira. En realidad la salida con mis “amigas”, significaba un encuentro con Joseph. Uno de los tantos encuentros después de lo ocurrido aquella tarde. Eran sencillos, se habían basado principalmente en charlas y un millón de besos.
-Por favor –me beso de nuevo.
-Me encantaría, de verdad pero, ya había quedado con ellas desde hace ya tiempo, no puedo cancelarles de nuevo, no me lo perdonarían.
-Bueno, pero mañana no acepto un no por respuesta, tenemos que estar juntos los momentos que nos quedan antes de que tenga que irme.
-¿Irte? –Pregunte confundida.
-Sí, olvide mencionarte que pasado mañana saldré de la ciudad por unos días.
-¿Lo olvidaste? ¿Cómo puedes olvidar mencionar algo así?
-He estado muy ocupado, incluso lo olvide yo mismo –rió-, pero no serán muchos días, recuerda que no puedo vivir sin ti mucho tiempo.
-Sí –fingí una sonrisa.
-No te molesto más entonces –se alejó-, te dejo en libertad –extendió sus brazos.
Asentí de nuevo, tome las cosas necesarias y entre al cuarto de baño.
-¿Desde cuándo te perfumas tanto?
Nicholas me observo desde la puerta de mi habitación. Su expresión no era la mejor.
-No tiene nada de malo –deje la loción sobre la cómoda.
-No –entro y se sentó en el filo de la cama-, pero entiendo que lo que tú estás haciendo si tiene algo de malo.
-¿De qué hablas? –evite su mirada.
-Sabes perfectamente a que me refiero, en estos días te has comportado tan extraño que debí habérmelo imaginado desde que me contaste de aquel beso entre tu jefa y tú.
Me quede inmóvil frente al espejo. ¿Cómo pretendía evitar que él se enterara? Quizá el fuera mi hermano menor pero, siempre ha sido el que suele preocuparse más, el más correcto, el que siempre intuye cuando algo no está saliendo bien. De haberlo pensado así, hubiera sido mejor actuar de la manera más natural y no preocuparme de que me descubriría en cualquier momento. El momento que ahora se presentaba.
-¿Qué es lo que te imaginas? –Capte su mirada en el espejo.
-Caíste en su trampa –menciono seguro.
-¿Cuál trampa, Nicholas?
-En la misma en que te metiste cuando la besaste por primera vez.
-Eso no fue una trampa, lo hice porque quería.
-Claro, ¿y cuántas veces más la has besado porque tú quieres?
Gire mi vista de la suya y continué arreglándome.
-No ignores mi pregunta Joseph.
Suspire totalmente irritado por su cuestionamiento. Jamás me había permitido mentirle a alguno de mis hermanos, pero ahora todo era totalmente diferente, empezando porque yo mismo sabía que lo que estaba haciendo no estaba bien. Una mentira sería mejor que su desilusión.
-No la he besado desde lo que te conté –mire a un lado.
-Mírame a los ojos y dímelo.
Apreté mis puños buscando la tranquilidad interior.
-No la he besado –mire sus ojos.
-No creo ni media palabra de lo que dices –continuó seguro.
-¡Por Dios! –Tome la chaqueta de mi traje-. Mejor me voy ahora, porque seguramente seguirás con tus preguntas sin sentido.
-Solamente necesito que seas sincero.
-Lo estoy siendo Nick, como tú me lo dijiste antes, estoy alejándome de ella lo más que puedo.
-Está bien –se colocó de pie-, ya no te molestare.
-No es que me molestes, de verdad créeme, no tienes por qué preocuparte de nada.
-De acuerdo –sonrió-, ¿pasaras por Ángel hoy?
-No lo sé, tal vez alcance para la hora de la comida.
-Trata hermano, por lo menos una vez a la semana, ella lo extraña.
-Sí –Salí de la habitación-, te llamo cualquier cosa.
Matt se había marchado al terminar su desayuno mientras yo esperaba con ansias la llegada de Joseph.
En un principio imagine que no sería nada más que un simple juego, algo para olvidar las penas amargas gracias a Matt, pero no, era algo más que eso. Tan solo habíamos compartido momentos de charlas y unas cuantas muestras de afecto, afecto que crecía cada día más. Su manera de ver la vida es tan diferente a la mía que me hace soñar que algún día será igual. Sus besos y las pequeñas carias que brotaban de la nada, me cubrían y refugiaban en mis momentos de soledad.
Sí la vida lo puso en mi camino para hacerme feliz, no me permitiría perderlo…no por ahora.
-Lo entiendo –mencione después de un tiempo-, pero entonces ¿qué pretende que haga yo? ¿Qué quiere de mí? ¿Qué quiere oír?
-Quiero que digas lo mismo, que no pienses en lo correcto, no me importa que seas un empleado, quiero ser algo más Joseph.
-Está usted queriendo decir ¿qué le gusto?
Ella se quedó en silencio al escuchar mi pregunta. Tal vez no debí ser tan directo, pero en cierta forma eso me ayudaría a conocer mi propia respuesta. En sus ojos se notaba la sinceridad en cada una de sus palabras, era valiente al pronunciarlas.
-Si eso necesitabas escuchar –arqueo una ceja-, sí, me gustas.
Cruzamos miradas, su respuesta no la esperaba, había pasado toda la noche y mañana pensando en que ese beso habría sido tan solo un juego para ella, y ahora ella tomaba la iniciativa. Yo me había permanecido firme todo este tiempo, el tiempo en que pensé besar de nuevos sus labios, algo tal vez hubiera permitido que sucediera.
-Ahora es tu turno.
Cerro la puerta del auto, la misma que me servía como escudo, porque con el simple hecho de verla acercarse, mi garganta se resecaba y de nuevo mi cuerpo reaccionaba, reaccionaba mostrándome que aún estaban esos deseos que cualquier hombre sentiría por una belleza tan natural, como la suya. Ese brillo en sus labios, tan exquisitamente formados.
Intente emitir un sonido de mi garganta pero esta se encontraba en completo desconsuelo. Jamás me considera un hombre con debilidades o miedos, pero ella se convirtió en mi debilidad, en el miedo de su deslumbrante mirada.
-¿Entonces? –Rozo su muñeca con la mía.
-Señorita yo no lo sé –negué un par de veces.
-No me llames más así, mi nombre es simplemente ___(Tn) –continuo con su roce.
Aparte su mano pero no la solté, la sujete frente a mi rostro y la lleve cerca de mis labios para después dar un pequeño beso sobre ella.
Sus mejillas se enrojecieron al instante. Sé que capto mi respuesta, quizá con mis palabras no hubiera recibido la misma reacción.
No quedaba ninguna duda, acaba de meterme a una calle sin salida.
Debo estar loca, esto no es normal pero que bien me hace…Cómo se explica que tan sólo unas horas te den tanta felicidad. Felicidad que tanto tiempo se mantuvo retenida, agobiada por el resentimiento y tristeza. Y pensar que perdí momentos como estos antes, inútilmente esperando un cambio o un giro de mi vida, cuando desde un principio pude hacerlo por mí misma.
-Buenos días hermosa –Matt sonrió a mi lado.
Esquive su mirada.
-¿Puedo saber qué te sucede ahora? –Se colocó frente a mí.
-Nada –mentí.
-¿Nada? Llevas días con esa actitud.
-No tengo nada Matt.
-De acuerdo –se sentó sobre el respaldo de la cama-, entonces ven aquí y abrázame.
-Tengo cosas que hacer –me incorpore también.
-¿Cosas que hacer? ¿Desde cuándo tienes tú cosas que hacer?
-Desde hoy.
Tome mi cepillo de la mesa de noche, cepille un par de veces mi cabello al mismo tiempo que me encargaba de tomar un cambio de ropa del closet.
Matt llego a mis espaldas abrazándome por la cintura y beso mi cuello revolviendo a un lado mi cabello. Lance un suspiro por su contacto, a pesar de querer parecer fuerte, con sus caricias mi cuerpo se rendía al instante. Tomo mi barbilla y giro mi rostro para alcanzar mis labios.
-Te amo linda –beso rápidamente mis labios.
-Y yo –admití.
-Cuéntame, ¿qué planes tienes para hoy? –continuo abrazándome.
-Iré a tomar café con unas amigas –respondí inquieta.
-¿Cuáles amigas?
-Tengo amigas Matt.
-No lo dudo amor –se quedó en silencio-, y…si lo cancelas ¿y salimos a comer tu y yo?
-¿Solos? –Sonreí.
-Es lo que dije –beso mi mejilla-, ¿qué dices? ¿Aceptas?
-Ah…no sé.
Recordé mi pequeña mentira. En realidad la salida con mis “amigas”, significaba un encuentro con Joseph. Uno de los tantos encuentros después de lo ocurrido aquella tarde. Eran sencillos, se habían basado principalmente en charlas y un millón de besos.
-Por favor –me beso de nuevo.
-Me encantaría, de verdad pero, ya había quedado con ellas desde hace ya tiempo, no puedo cancelarles de nuevo, no me lo perdonarían.
-Bueno, pero mañana no acepto un no por respuesta, tenemos que estar juntos los momentos que nos quedan antes de que tenga que irme.
-¿Irte? –Pregunte confundida.
-Sí, olvide mencionarte que pasado mañana saldré de la ciudad por unos días.
-¿Lo olvidaste? ¿Cómo puedes olvidar mencionar algo así?
-He estado muy ocupado, incluso lo olvide yo mismo –rió-, pero no serán muchos días, recuerda que no puedo vivir sin ti mucho tiempo.
-Sí –fingí una sonrisa.
-No te molesto más entonces –se alejó-, te dejo en libertad –extendió sus brazos.
Asentí de nuevo, tome las cosas necesarias y entre al cuarto de baño.
-¿Desde cuándo te perfumas tanto?
Nicholas me observo desde la puerta de mi habitación. Su expresión no era la mejor.
-No tiene nada de malo –deje la loción sobre la cómoda.
-No –entro y se sentó en el filo de la cama-, pero entiendo que lo que tú estás haciendo si tiene algo de malo.
-¿De qué hablas? –evite su mirada.
-Sabes perfectamente a que me refiero, en estos días te has comportado tan extraño que debí habérmelo imaginado desde que me contaste de aquel beso entre tu jefa y tú.
Me quede inmóvil frente al espejo. ¿Cómo pretendía evitar que él se enterara? Quizá el fuera mi hermano menor pero, siempre ha sido el que suele preocuparse más, el más correcto, el que siempre intuye cuando algo no está saliendo bien. De haberlo pensado así, hubiera sido mejor actuar de la manera más natural y no preocuparme de que me descubriría en cualquier momento. El momento que ahora se presentaba.
-¿Qué es lo que te imaginas? –Capte su mirada en el espejo.
-Caíste en su trampa –menciono seguro.
-¿Cuál trampa, Nicholas?
-En la misma en que te metiste cuando la besaste por primera vez.
-Eso no fue una trampa, lo hice porque quería.
-Claro, ¿y cuántas veces más la has besado porque tú quieres?
Gire mi vista de la suya y continué arreglándome.
-No ignores mi pregunta Joseph.
Suspire totalmente irritado por su cuestionamiento. Jamás me había permitido mentirle a alguno de mis hermanos, pero ahora todo era totalmente diferente, empezando porque yo mismo sabía que lo que estaba haciendo no estaba bien. Una mentira sería mejor que su desilusión.
-No la he besado desde lo que te conté –mire a un lado.
-Mírame a los ojos y dímelo.
Apreté mis puños buscando la tranquilidad interior.
-No la he besado –mire sus ojos.
-No creo ni media palabra de lo que dices –continuó seguro.
-¡Por Dios! –Tome la chaqueta de mi traje-. Mejor me voy ahora, porque seguramente seguirás con tus preguntas sin sentido.
-Solamente necesito que seas sincero.
-Lo estoy siendo Nick, como tú me lo dijiste antes, estoy alejándome de ella lo más que puedo.
-Está bien –se colocó de pie-, ya no te molestare.
-No es que me molestes, de verdad créeme, no tienes por qué preocuparte de nada.
-De acuerdo –sonrió-, ¿pasaras por Ángel hoy?
-No lo sé, tal vez alcance para la hora de la comida.
-Trata hermano, por lo menos una vez a la semana, ella lo extraña.
-Sí –Salí de la habitación-, te llamo cualquier cosa.
Matt se había marchado al terminar su desayuno mientras yo esperaba con ansias la llegada de Joseph.
En un principio imagine que no sería nada más que un simple juego, algo para olvidar las penas amargas gracias a Matt, pero no, era algo más que eso. Tan solo habíamos compartido momentos de charlas y unas cuantas muestras de afecto, afecto que crecía cada día más. Su manera de ver la vida es tan diferente a la mía que me hace soñar que algún día será igual. Sus besos y las pequeñas carias que brotaban de la nada, me cubrían y refugiaban en mis momentos de soledad.
Sí la vida lo puso en mi camino para hacerme feliz, no me permitiría perderlo…no por ahora.
Aquí les dejo este capitulo chicas, espero les guste y espero ver firmas para seguir subiendo(: Las quiero♥. Un beso.
Karely Jonatika
Re: "Mi más preciado tesoro..." (Joe&Tu)
me encanta la noev enseiro
espero que joe no termine herido con esto siguelaa
espero que joe no termine herido con esto siguelaa
andreita
Re: "Mi más preciado tesoro..." (Joe&Tu)
Continualaa!!!!
Continualaa
Continualaa
Continualaa
Continualaa
Continualaa
Continualaa
Continualaaa
Continualaa
Continualaa
Continualaa
Continualaa
Continualaa
Continualaa
Continualaa
Continualaa
Continualaaa
Continualaa
Continualaa
goree!
Re: "Mi más preciado tesoro..." (Joe&Tu)
Espero que Nick no trate de convencerlo de que la rayis solo juega con el :S
Y espero que Joe no se enoje si se entera de que la rayis va a salir con Matt
Aunque cuando se vaya van a poder estar todo el dia juntos :¬w¬:
Jaja,siguela!
Y espero que Joe no se enoje si se entera de que la rayis va a salir con Matt
Aunque cuando se vaya van a poder estar todo el dia juntos :¬w¬:
Jaja,siguela!
Lulajonatica
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