Fantasía. One direction y ____ Reeves.

Capítulo ocho. Maratón: 1/3
Todos estábamos sentados en la gran mesa del comedor, en la punta norte está Liam y en la sur mi tía Karen, Niall está a un lado de Liam y Eli está frente a él, haciendo que se sonroje constantemente con una mirada de Harries. Enseguida del irlandés están Louis y Harry mientras que Zayn y yo estamos a un lado de Eliza, la cual está igual de embobada con Niall como él lo esta con ella.

Es una charla típica, Karen les pregunta a todos por sus familias incluyendo a Eli, quién solo dice que me he llevado excelente con sus primos y veo el brillo en los ojos de mi tía, esperanzada en que consiga novio. Hablamos de temas tribales; la ciudad, escuela, películas o series de televisión.

Siento que algo o alguien me acaricia un muslo por sobre los jeans. Me sobresalto un poco y cuando bajo la mirada me encuentro con una mano grande y morena que sube y baja por mi muslo causándome pequeñas descargas eléctricas que bajan por mi espina dorsal. Levanto la vista y me encuentro con unos ojos avellana que me miran fijamente y me dedica una sonrisa que por poco me mata.
— ¿Te quedarás a dormir, querida? — Pregunta Karen, amable como siempre a la rubia cuando ésta termina su pescado al vapor. Ella negó con la cabeza rotundamente y el ceño de mi tía se hizo presente. — ¿Pero por qué, cariño?
— Bueno, Karen. Alguien tiene que cuidar de mis primos o si no incendian la casa.
— ¡Oh, vamos, no puede ser tan peligroso dejarlos por un día! — Exclamé divertida aún sin apartar la mano que reposaba sobre mi muslo.
— ¡No los conoces! — Me dijo con una sonrisa y yo volteé los ojos. — Pero, ¿que dices de quedarte en mi casa, _____? Será divertido y como los tienes encantados de seguro se comportan como gente civilizada por una vez.
Me sonroje y sonreí pero mi sonrisa se borró cuando dejé de sentir el calor de la palma de Zayn sobre mi muslo. Doy una vista panorámica de la mesa y me doy cuenta de que las mujeres somos las únicas que no fruncen el ceño como troll de puente.
— No… ¿Puede ser otro día? — Le pregunto haciendo cara de perrito. — Hoy no me siento de humor para una pijamada y si iré con tus primos tengo que estar con toda la energía posible para que no me terminen rayando la cara en cuanto me duerma.
— Claro. — Me regala una brillante sonrisa y desvía su mirada a su reloj de pulsera, sube las cejas en modo de sorpresa y voltea a ver a mi tía disculpándose con la mirada. — Lo lamento, pero Tweedledum y Tweedledee ya han de estar por llegar a casa y tengo que estar ahí primero que ellos.
— A veces creo que eres más su niñera que su prima, Eli. —Dice Liam en tono burlón y la rubia le da un leve golpe en el brazo. — ¡Oye! — Se quejo aún así con una sonrisa.
— Te lo merecías. — Comenta Niall mientras se aguanta la risa. Eliza le sonríe y él hace lo mismo.
— ¿Necesitas que te lleven? — Pregunte y ella negó.
— Tomaré un taxi.
— ¡Claro que no! — Exclamo Karen. — Liam, lleva a Eliza a su casa.
— En serio no es nece…
— Niall tiene auto, él la puede llevar, ¿verdad Niall? — Interrumpí diciéndole en un tono sugestivo que le saco una sonrisa traviesa a Liam, dándome a entender que había comprendido lo que tramaba.
— _____ tiene razón, tú tienes la Jeep aparcada afuera y es más rápido que si se espera a que yo saque el auto del garaje. — Ambos rubios estaban sonrojados, Niall asintió y se levantó de la mesa seguido por Eliza quien después de despedirse de cada uno con un beso en la mejilla salió por la puerta principal junto al irlandés.
— Bueno, si ya terminaron todos pueden irse a sus cuartos. Descansen. — Y dicho esto todos recogimos nuestros platos y los dejamos en el lavavajillas. Esperen, ¿se quedarán a dormir? Todos pasaron a mi lado dándome las buenas noches y cuando los vi subir las escaleras Zayn volteo hacía mí y me guiño un ojo. No puedo negar que me parece muy atractivo pero aún así solo respondí con una leve sonrisa.

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Me desperté de golpe con el cuerpo lleno de sudor frío de ese que te da cuando tienes pesadillas, y así había sido, no sé porque pero soñé que un payaso horrendo me perseguía mientras reía histéricamente y apretaba una pequeña corneta roja, raro.

Sacudí la cabeza intentando alejar esos horribles recuerdos borrosos de mi pesadilla y palpé el acolchonado buscando el celular y cuando lo tuve entre mis manos lo desbloqueé haciendo que una brillosa luz me diera directamente en la pupila del ojo.
— ¡Mierda! — Grité en un susurro sin separar la vista, porque así mis ojos se adaptarían a la luz más rápido.

Miré el reloj, ¿en serio? Eran las cuatro de la mañana y yo ya estaba totalmente despierta. Decidí comer algo para calmar el hambre de mi estomago, al menos hasta el desayuno así que salí de la cama y puse las plantas de los pies en el frío piso de madera. Me levanté, abrí mi puerta y fui hasta el cuarto de baño que estaba frente la mía. Me miré en el espejo, me quité las lagañas y me lave la cara con la esperanza de que así no me viera tan adormilada, pero bueno, ni que el payaso maldito se fuera a fijar en mi apariencia si se acercaba a matarme mientras deambulaba por la casa. El solo pensamiento me dio escalofríos, odio los payasos.

Caminé hasta la cocina y me prepare un emparedado de jamón junto con un vaso de zumo de naranja. Como no veía nada y no me atrevía a encender la luz y despertar a media casa hice todo a ciegas, dejé primero sobre la isla de la cocina el emparedado y luego cuando iba a dejar unos minutos después el jugo choque contra algo duro, que juro por mi vida no estaba ahí antes. ¡Payaso! Fue el único pensamiento que necesite para lanzarle el jugo encima.
Pero lo único que escuché fue un reproche masculino no perteneciente a ningún payaso de circo.

Capítulo nueve. Maratón: 2/3 HOT

— Oh, dios. Lo siento, creí que eras…
— ¿Un ladrón? — Y supe que era Zayn al que había empapado de zumo de naranja. Él soltó una carcajada cuando no le respondí, ¿que querían que le dijera? Oops, creí que eras un payaso del demonio que venía a matarme. — Si el jugo de naranja es tu única arma no quisiera ser tu enemigo. — Me dijo con sarcasmo y yo fruncí el entrecejo.
— Idiota. — Le dije molesta. — Fue un accidente, tal vez si tú no fueras como un puto ninja yo no tendría problemas.
— ¡Oh disculpe, no me bañes en zumo más de lo que ya estoy!
— Quítate la camiseta.
— ¡Hey, no tan rápido! — Susurró con ironía. — Primero invítame una cena antes de quererme llevar a la cama.
— ¡Zayn! — Le grité en un susurro y en menos de veinte segundos ya tenía la prenda empapada en mis manos. — Quiero hacerte el favor de lavarte la camisa y tú actúas como un gilipollas.

Caminé a una de las puertas que estaba cerca del refrigerador y la abrí para entrar a la lavandería seguida del moreno. Gracias a dios que estábamos en plena oscuridad, no quisiera verlo sin camisa o no me haría cargo de mis acciones. Él encendió el interruptor como si hubiera leído mis pensamientos y yo prepare la lavadora para luego echar su camiseta ahí. Le di la espalda para que no notara que ya había visto su torso desnudo y que mis mejillas estaban más rojas que un labial de ramera.

— ¿Por qué tan sonrojada? — Me preguntó y fue ahí que sentí todo el calor de su cuerpo a centímetros del mío, ahogue un pequeño gritó cuando él me tomo de las caderas y me pego a su cuerpo, haciendo que su erección quedara pegada mi trasero. — ¿Te pongo… nerviosa? — Lo dijo en un tono coqueto que casi me derrite por dentro, gemí por lo bajo cuando hizo un leve movimiento de caderas pegándose aún más. Mordió el lóbulo de mi oreja haciéndome desfallecer, luego paso su lengua por esa misma zona y mis piernas flaquearon. — ¿O excitada? —
No pude más, me di la vuelta y lo enfrente para luego tomar la parte posterior de su cuello y acercarlo hasta que nuestros labios se encontraron en un beso apasionado, mordió mi labio inferior con sus dientes y yo gemí en su boca haciendo que él sonriera, abrí la boca un poco más y Zayn aprovecho para introducir su lengua caliente dentro de mi boca encontrando pelea rápidamente con la mía.

— ¿Eso responde tu pregunta? — Le insinué en un tono tan coqueto y atrevido que ni yo me reconocí. Volvió a besarme con la misma intensidad y me tomó por las caderas para ponerme sobre la lavadora que estaba en funcionamiento haciendo cada movimiento más excitante.
Abrí mis piernas y Zayn se posiciono en medio de ellas para comenzar a bajar sus besos por mi cuello, dejando un rastro húmedo y caliente. Llegó al borde superior de mis pechos y comenzó a besarlos lentamente intentando aumentar mi necesidad, gemí de frustración y él quito el pijama del camino para besar mi pezón dándome pequeños lengüetazos que juro harían que cualquier ángel quisiera ser un demonio solo para estar con él.

— ¿Te gusta? — Preguntó antes de succionar uno de mis pezones mientras acariciaba el otro con la yema del dedo. Gemí en respuesta, me estaba haciendo su victima, oh no niño bonito, así no será. Baje la mano por todo su torso desnudo y cuando llegue a su bulto comencé a acariciarlo como sí de eso dependiera mi vida. Aceleró sus besos y lengüetazos en mis senos y yo hice lo mismo, sacándole un gemido ronco, bingo.

Se separo de mi cuello y subió hasta mis labios para comenzar a devorarlos como un animal. Separé más las piernas y él presiono su gran erección en mi feminidad haciéndome tirar la cabeza hacía atrás por el éxtasis dejando mi cuello expuesto hacía él. Me mordió bajo la mandíbula y yo gemí.

— ¡Joder! — Y en ese instante me di cuenta de que Louis estaba plantado con una cara de pocos amigos en el marco de la puerta observando todo. Me ruboricé y Zayn se puso frente a mí cubriendo mis pechos desnudos. — ¡A Liam le va a encantar ésta historia! — Juntó sus manos en un aplauso y sonrío con malicia.
— ¡Mierda, Louis! ¿No sabes tocar? — Exclamó un molesto Zayn.
— Ya te dije que todo menos puertas. — Me guiñó el ojo. — Además, Malik, no deberías hablarme así si no quieres que vaya de vuelta al cuarto gritando que te estás follando a la prima de Payne en la lavandería. — Dijo burlonamente y ahora volteo a verme a mí. — ¿O te gustaría eso, _____?
— Louis, te doy lo que sea, pero si mantienes el pico cerrado. — No sabía si el moreno estaba rojo de la vergüenza o del enojo.
— No tienes que darme nada, solo hacerme un favorcito. — Zayn puso cara de confusión y el ojiazul le dijo que se acercara para luego decirle algo en el oído que no pude escuchar, pero sí noté como la espalda de Zayn se tensaba. — ¿Entendido?

El moreno asintió y volteó a verme con el arrepentimiento en sus ojos para después salir sin decir nada. Me puse la blusa de nuevo y me di cuenta de lo que estaba a punto de hacer, con un amigo de mi primo, en su casa. Me di vergüenza, no puedo creer que acabara de hacer eso. Salí de la lavandería y me puse a limpiar el desastre en la cocina cuando escuché una voz detrás de mí.

Capítulo diez. Maratón: 3/3
— A veces la gente se deja llevar, no tienes por que avergonzarte, _____— Era Louis con un tono bastante comprensivo que me dieron ganas de abrazarlo.
— ¿Qué le has dicho? — Pregunté dejando el vaso del jugo sobre el fregadero. Él se encogió de hombros. — ¡Dímelo!
— Que se aleje de ti. No es bueno usar a una chica para tapar a otra. — Y dicho eso salió como rayo dejándome confundida; ¿Zayn lo hacía por venganza o algo por el estilo? No sé porque pero eso no me dolió en absoluto, me dejo avergonzada conmigo misma. Pero no puedo quejarme, todo el tiempo que sentí las caricias de Zayn me imagine que eran las de Harry. Digo, su voz ronca me dejo pringada a él, eso y su cuerpo, su rostro y su risa eran lo que me encantaba. Ahora que lo pienso fui muy ruda con él, pero faltan cuatro para las cinco así que será mañana, o más bien hoy temprano.

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Desperté con el no tan suave sonido de un traste de porcelana quebrándose a lo lejos, volteé a mi costado y tome el reloj de la mesita y vi que eran las siete y media de la mañana. Bufé sonorosamente recordando lo sucedido pocas horas atrás y sentí mis mejillas arder. Me levante de la cama y me acerque al tocador para cepillarme el cabello. No solo tenía que disculparme con Harry, sino que también tenía que aclarar las cosas con Zayn. Me gusta la idea de hacerme amiga de ellos, digo, son bastante apuestos, pero después de verlos más “ellos” no creo que saldría con ninguno de ellos, bueno tal vez solo con Harry.

Me asome a la ventana después de arreglar mi cabello y vi que el vidrio estaba un poco empañado por el frío, me puse un sweater blanco con puntos negros sobre la pijama negra y salí a ver que rayos habían roto en la cocina. Mientras más me acercaba más se escuchaban los gritos enojados de Liam y las disculpas de Harry, fruncí el ceño y entré para ver cientos de pedazos de porcelana regados por el suelo mientras que Louis y Niall recogían el desastre pedazo por pedazo. Fingí toser y todos voltearon a verme. Liam, Louis, Niall y Harry me sonrieron pero cuando volteé a ver a el moreno vi que solo me veía con vergüenza de él mismo supongo yo.
— ¿Qué paso? — Me acerque a Liam esquivando el desastre.
— El irlandés tenía hambre y cuando iban a sacar los platos este idiota, — Señalo a Harry quien solo agacho la cabeza. — los tiro todos.
— Fue un accidente, Leeyum. — Le dije viéndolo a los ojos. — No tienes que gritarle al pobre Hazza.
— Pero…
— Vamos, no te enojes. — Lo abrace y él roló los ojos para luego soltar un leve suspiro. — Bien, no debí gritarte rulitos, ¿me disculpas?
— Todo bien. — Le sonrió enormemente y Liam me apretó más contra él. — ¿Qué les parece ir a desayunar fuera? — Preguntó moviendo la mirada por todos nosotros.
— ¡Nando’s! — Grito un rubio emocionado. Todos asintieron y el ojiazul se levanto del suelo con los pedazos del que solía ser un plato y después de que los tiro en el bote de basura se acerco al rubio.
— ¡Vámonos! — Exclamó Zayn apresurando el paso.
— ¡Esperen!
Todos voltearon a verme confundidos.
— No podemos ir en pijamas. — Torcí la boca. — Todos vayan a cambiarse y estén aquí en diez.

Y así todos salimos corriendo, yo a mi cuarto y ellos al de mi primo. Me puse unos pantalones entubados negros y una blusa pegada de tirantes con encaje, me faje para que quedara el pantalón por fuera ya que era de esos que llegan hasta la cintura y arriba me puse una chaqueta de mezclilla. Agarre el teléfono y vi que aún me quedaban tres minutos. Apresure el paso y me puse unos converse negros.

Salí de ahí con el celular en la mano y a los treinta segundos un chico rubio paso como rayo frente a mí.
Sentí como minutos después una mano tomaba la mía y me arrastraba con él. Levante la mirada y vi a un Louis sonriente y con el cabello despeinado. Estaba tan concentrada viéndolo que no me di cuenta que habíamos salido al porche hasta que sentí el frío chocar contra mis mejillas. Caminamos hasta la Jeep de Niall quien ya estaba al volante viendo su reloj con desesperación. Subí en el asiento de copiloto liberando mi mano de la de Louis y él se sentó en el asiento de atrás.
Luego llegaron los otros tres y al verme en el frente del carro bufaron y se subieron junto al castaño.

— ¡No es justo! — Reprocho Harry en un tono infantil. — ¿Por qué ella va adelante?
— Para no tener que soportarlos a todos ustedes. — Les contestó Niall antes de arrancar la camioneta y comenzar a manejar como un loco desquiciado.
— ¡Hey! — Se quejó ahora Louis viendo todo con una sonrisa divertida. — ¡Ella me adora!, ¿verdad, ____?
— Oh, pero claro. — Dijo Liam en un tono irónico y burlón. Todos menos Louis reímos hasta que el celular de Liam comenzó a sonar fuertemente con la canción Revolution de los Beatles. Guardamos silencio y él contestó con una sonrisa.
— ¡Harries! — Dijo con un tono feliz. Se quedo callado por unos segundos, supongo que escuchando a uno de los gemelos. — Claro, sí, aquí esta. — Luego me miro y murmuro silenciosamente “Finn” y yo sonreí. — Cuidadito con lo que haces, Tweedledum. — ¿Así era como todos le llamaban? ¿Ó solo Eliza y él?
Me acerco el celular y yo lo tome dudosa. Me lo lleve a la oreja y espere a que dijera algo.

AHÍ ESTA! ¿Qué les pareció? Sé que soy mala con esto de lo hot, pero no estuvo taaaan mal, ¿o sí?
Comenten chicas, asdfghjkl.
Besos. :hug:

Dios ese capítulo Hot saklsfñkfsñas me dio risa cuando Louis llegó, pobre ___ y Zayn u_u
Extrañaba tus capítulos :(
Eso, síguela <3

Kimmo escribió:Dios ese capítulo Hot saklsfñkfsñas me dio risa cuando Louis llegó, pobre ___ y Zayn u_u
Extrañaba tus capítulos :(
Eso, síguela <3

Que bueno que te gusto lo hot porque estaba dudando de mis habilidades pervertidas.
Pobres, pero pronto entenderás que más que una maldición fue una bendicionque hubiera aparecido antes de que cometieran un error. Subo al rato
Besos. :hug:

Kaathi escribió:jashajhsjahs deos Anna! tienes que seguirla!!!!

Me encanta, me encanta!!!!

La seguiré más tarde. A mi me encanta que te encante.
Chica me estaba preocupando por ti, como no aparecía por ningún tema me temí lo peor.
Besos. :hug:

Kaathi escribió:Anna ¿Donde estas metida? me tienes preocupada, no has aparecido por ningún lugar...POR FAVOR APARECE, DA ALGUNA SEÑAL DE VIDA :sad:

¡DIOS, SOY UN MONSTRUO!

Perdóname la vida, es que estoy con toda la mierda de la graduación, exámenes, encontrar vestido, hacer esto y lo otro. Ya mismo les subo capítulo, es que casi no he estado en casa y escribir en el celular ni hablar. Además mendigos libros me tienen enganchada hahaha Oops.
Cuídate y no te preocupes ;) 
Besos. :hug:

Capítulo once. 
Me acerco el celular y yo lo tome dudosa. Me lo lleve a la oreja y espere a que dijera algo.

— ¿Seguro que no te comiste la lengua, Finnepto? — Pregunté burlona, ninguno más que yo y él entendimos  la broma interna entre ambos, el se río sarcásticamente y luego lo deje hablar.
— No me gusta que me llames así, nueva. — Recalcó la última palabra y yo reí.
— Es lo que hay, muFinn. — No sé ni de donde rayos lo saqué, pero supe que le gusto cuando rió tiernamente. — Bien, desde hoy eres muFinn.
— Me parece bien, nuevita. — Reí aún más fuerte, olvidando que no estaba sola y cuando volteé de nuevo todos fruncían el ceño. — ¿Lo ves? Yo también puedo ser cariñoso.
— Claro… ¿Dónde estás? — Tuve que preguntar ya que se escuchaba mucho ruido, y si no vivía en un zoológico debe de estar en otro lugar. — ¿Están los tres mosqueteros juntos?
— Sip. — Recalco la “p” y me pareció adorable. — Estamos en nando’s. Eli se niega a cocinarnos, ¡Nuevita, dile algo!
— Es problema de Eliza el cocinarles o no, no me metas a mí.
— ¡Así se habla, ____! — Escuche gritar a la rubia. Y supe que todos dentro de la camioneta habían escuchado porque todos sonreían y de repente Niall estaba entrado en escuchar la conversación.
— ¡_____! — Gritó igual de fuerte Jack.
— ¡Jack! — Respondí entusiasmada. Fije la vista fuera de la ventana y pude ver que estábamos a dos locales de Nando’s así que me despedí y colgué. En cuanto paro el coche todos salieron corriendo al interior del lugar y estaba a punto de hacer lo mismo cuando noté que Niall me estaba tomando por la muñeca, lo miré a los ojos y le sonreí. — ¿Pasa algo?
— Gracias, por lo de Eliza… — Y salió del coche conmigo pisándole los talones. Entramos y un olor a comida me inundo las fosas nasales haciendo que mi estomago rugiera. Vi a lo lejos a los chicos en una mesa lo suficientemente grande para todos y a Niall caminando o más bien corriendo hacía ellos, comencé a caminar pero de la nada mis pies ya no estaban en el suelo y el pánico se apodero de mí.
— ¡Suéltame! — Le grite a quien quiera que fuera, estaba sobre el hombro de un chico y cuando levante la mirada me tope rápidamente con la mesa de los Harries donde dos de ellos me miraban divertidos, luego comprendí, o era Finn o Jack el que me cargaba. — ¡muFinn, bájame!
— ¡No quiero, nuevita!
— Bájala. — Escuche la fuerte voz de Zayn que ahora tenía un tono más tenebroso y firme que el que había escuchado una hora atrás. La espalda del gemelo numero uno se tensó y me bajo de su hombro con delicadeza. En cuanto puse mis pies en el suelo sentí una mano grande en mi cintura y al darme cuenta de que era la de Finn me ruborice. El moreno fijo su mirada en esa acción y frunció el ceño. — Harries.
— Javadd. — Dijo Finn con un pequeño tono de molestia pero aguantándose la risa, Zayn solo frunció más el ceño. El gemelo se puso frente a mí, impidiéndole al moreno que me viera y me abrazó con fuerza. Vi por sobre el hombro como todos los chicos nos miraban desde la mesa y como Niall se levantaba y caminaba hasta nosotros. — ____, ¿quieres comer en nuestra mesa?
— Finn, ¿intentas alejar a mi prima de mí? — Preguntó Liam quien traía como siempre a los demás tras de él. Finn me soltó y se acerco para darle un abrazo masculino a mi primo, luego repitió el acto con todos a excepción de Zayn que seguía parado haciendo nada.
— Probablemente, Liam. — Le dio una sonrisa enorme. — ¿Por qué no se sientan con nosotros?
— ¡Claro! — Contestó un entusiasmado rubio y Finn volteó los ojos con diversión.
— El rubio ha hablado. —Exclamó Louis antes de tomar a Harry del antebrazo y sentarlo a un lado de él frente a Jack.

Todos asentimos, Zayn gruñó con frustración. Los chicos tomaron una mesa desocupada y la juntaron con la de los Harries, luego todos nos sentamos. No quería estar cerca de Malik así que aproveche y me senté al lado de Harry quien solo me vio de reojo y me dio una débil sonrisa. Ordenamos, pero fue todo menos “orden” porque todos estábamos pensando en voz alta que comer y además cuando les toco el turno a Niall y a Eli tardaron como cinco minutos en apartar la vista el uno del otro, haciendo molestar a la mesera y a nosotros reír.
— Harry. — Le susurré por lo bajo con la cabeza agachada él estaba en la misma posición así que en cuanto me escucho volteó lentamente la cabeza hacía mí.
— ¿Sí? — Preguntó él tan amable como siempre, moví mi mano por debajo de la mesa hasta encontrarme con la de él y le di un pequeño apretón haciendo que se sobresaltara una poco.
— No quise ser grosera, es sólo que a veces soy un poco irritante. — Le regale una de mis mejores sonrisas e hizo lo mismo junto a un pequeño apretón en mi mano. Negó con diversión, como desmintiendo lo que acababa de decir. — ¡En serio! Pregúntale a Liam.
Le di un leve golpe en el hombro y ambos nos sonreímos.
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Estaba en mi cuarto tirada boca arriba sobre la cama viendo el techo. Estaba sonriendo gracias al peso que Zayn me había quitado horas atrás.

En cuanto habíamos salido del restaurante él me tomo del brazo y sin importarle lo que Liam o los demás pensaran me llevo lejos de ellos y me miró por primera vez en el día con tristeza, quise abrazarlo pero me tuve que contener cuando él soltó un suspiro largo y pesado, luego subió su mirada y sus ojos encontraron los míos. Deje que pasara otro minuto y al ver que no sacaría tema de conversación decidí preguntar si lo que había dicho Louis era verdad, tomé aire y fije la mirada en él.

— ¿En quien pensabas anoche? — Él abrió los ojos como platos y su boca se abrió queriendo decir algo.
— ¿Quién te dij…? Louis. — No fue una pregunta fue una afirmación. Me cruce de brazos y me encogí de hombros como si fuera poca cosa aquello, porque en realidad lo era, Zayn no es una potencial pareja y no me hace sentir nada especial que no sea excitación, ¿por qué hacerme la victima de todo esto?
— ¿Sabes, Zayn? No debes de hacer eso. — Su vergüenza aumento y agacho la mirada. — Por que en una de esas te encuentras con  una reina del drama y no te la acabas. — Posé mi mano sobre su hombro, levantó la mirada y me sonrió de lado. — ¿Quieres hablar de ello?
— Se llama Perrie. Es muy linda y tiene unos ojos azules que te hipnotizan y todo en ella es tan… Wow. — Sonrió y yo hice lo mismo. Hablaba de ella como si fuera un niño hablando sobre su golosina favorita. Lo entiendo, lo que sientes por una persona a veces sólo tú sabes como es y cuando intentas explicarlo siempre te quedas corto. — Pero ella esta enamorada de Finn, o eso me han dicho.
— ¿Entonces no lo has comprobado? — Arqué una ceja y él se ruborizo y negó con la cabeza rotundamente. — ¿Qué esperas, entonces? ¡Invítala a salir!
— ¿No te molesta? Digo ayer estuvimos a punto de…
— Ni lo menciones. Borrón y cuenta nueva. — Le dije estirando mi mano hacía él. Cuando la estrecho ambos nos sonreímos. — _____ Reeves.
— Zayn Malik. Espera, ¿no eres la prima de Liam? — Los dos reímos y le di un abrazo tomándolo por sorpresa pero rápidamente me siguió el abrazo. — ¿Me perdonas?
— ¿De qué hablas? — Me hice la desentendida y él sonrió. Me pasó el brazo por el hombro y yo por su cintura mientras caminábamos de vuelta a los caras de confundidos que nos veían raro.
— ¿Vámonos? — Preguntó Zayn apretándome con más fuerza.

Capítulo doce. 

Me felicite a mí misma, digo, ¿Cuántas mujeres se sienten bien después de haber sido “utilizadas”? Me agrada la idea de no ser una reina del drama.

Mi celular vibro en la mesita de noche y torci la boca, solo podían ser dos personas; Sammy o Finn así que lo tome y me encontré con un mensaje de un numero desconocido, lo abrí y una sonrisa apareció en mi rostro.
“Hey, ___! ¿Cómo está mi Payne favorita? – Jack H.”
Sonreí y justo cuando iba a preguntarle como había conseguido mi numero él me mando un nuevo mensaje.
“Le robé tu numero a Finn ;)- Jack H.”
“Hey, Jack! Estoy bien, que educado eres al preguntar ;)Decidido, desde hoy le pongo contraseña a mi teléfono. - ____ Xx.”
“¡No copies mis saludos! – Jack H.”
“¡Muy tarde! - ____ Xx.”

Seguimos hablando por unos cuarenta minutos más hasta que me dijo que tenía que hacer algo en su computadora así que nos despedimos y yo me estire en toda la cama quedándome dormida.

Louis Pov:
— ¡Quítate de mí sofá, culón! — Me grita el duende y yo me carcajeo negando con la cabeza y comiendo más frituras. Él voltea los ojos y se deja caer a un lado de mí con una gran sonrisa. Como yo ocupo dos plazas de las tres del sillón lo golpeo en el brazo con mi pie y él intenta pegarme pero no lo logra.
— ¡Niall y Eli sentados en un árbol, dándose besitos y haciéndose cariñitos! —Canturreo y Niall se pone rojo como tomate así que yo me río más fuerte y él me golpea, esta vez dándome cerca de mi amiguito, hago una mueca de dolor y con el talón se la devuelvo, solo que a él si le di ahí.
Esta vez se pone rojo como nunca pero por el dolor y se cubre con las manos sobre el pantalón mientras suelta un gruñido que me suena a victoria, MÍ victoria. Así es, Niall, no te metas con el rey.
— ¡Mierda!
— ¡Esa boquita, güerito! —  Le regaño tratando de hacer un asentó de mamá y me acerco a él hasta que le doy un leve golpe en el hombro. Sonrío sínicamente al recordar la escena de la lavandería y él me mira como si me tuviera miedo. Me siento junto a él y me inclino hasta alcanzar una botella de cerveza de la mesita que esta frente a nosotros. La abro y le doy un trago antes de reírme, asustándolo más. — ¿Quieres saber algo divertido?
— S-si, Louis me estás asustando. —Tartamudea.
— Ayer, cuando ustedes dormían Zayn se levantó y se salió del cuarto de Liam. — Se me quedó viendo y luego asintió para que siguiera contándole. — A los minutos me di cuenta de que no volvía, así que baje para ver si estaba bien, no estaba ninguna luz encendida pero cuando entré a la cocina pude ver que la luz de la lavandería estaba encendida y la puerta estaba medio cerrada. ¿Y adivina que me encontré? — Le pregunté con malicia y él se encogió de hombros. — ¡A Malik comiéndose los pechos de ____!

Sus ojos se abrieron a más no poder y yo puse mi dedo índice sobre mi boca como para decirle que no dijera nada, el asintió y vi como su manzana se movía frenéticamente, como si literalmente intentara tragarse lo que acababa de escuchar. — Oh, y ni siquiera lo viste, Niall. —  Pensé
— ¿Cómo se lo dirás a Harry, Lou? A él le gusta ____ y si se llega a enterar de esto… Le va a doler.
— Yo no se lo voy a decir, ni tú tampoco. Zayn lo hará, de hecho, — Vi mi reloj y di otro trago a mi cerveza. — Él ya debe de estar en caminó hacía acá para decirle todo a Harry.

Harry Pov:
Zayn estaba sentado en el sofá de la sala, enseguida de él estaban Niall y Louis con una expresión seria. Genial, ¿no puedo llegar a casa sin que ellos tengan que entretenerme? Louis me señalo con la cabeza el sofá infividual delante de ellos y yo me senté. Malik se veía nervioso mientras jugaba con sus dedos, Louis y Niall pareciera como si guardaran un secreto y mi cara de confusión era cada vez más notable.
— ¿Pasa algo?
— ¿Te gusta ____? — Respondió Zayn a mi pregunta con otra y yo fruncí el ceño, mierda, por favor, que a él no le guste también. Tragó saliva.
— ¿A ti t-te gu-usta? — Tartamudeo y él niega rotundamente. Suelto un suspiro audible y comienzo a sentirme más relajado cuando Zayn se muerde el labio y ve hacía el suelo. Luego vuelve a levantar su mirada hacía mí.
— Pero… — Siento como el estomago me da vueltas y veo la culpabilidad en sus ojos. Luego vuelve a agachar su cabeza, como sí sintiera miedo de mi mirada. — Harry, te juro que yo no sabía que te gustaba, yo lo hice sin pensar, tu más que nadie sabe como he estado con todo esto de P-perrie… — Habla rápido, como si fuera la ultima vez que me hablara, levanta la vista y me mira a los ojos. — La besé.
— Oh… — Es lo único que puedo decir, aún si a él no le gusta ella, ¿Qué pasa si a ___ le gusta Zayn? Asiento levemente con la cabeza y me levanto para dirigirme a mi cuarto cuando siento que alguien me agarra por el antebrazo, volteo conteniendo las lágrimas de ira que tengo, no odio a Zayn, es mi amigo, mi hermano. Pero sigo sin comprender por que rayos las chicas siempre los escogen a ellos sobre mí. El moreno es quien me sostiene con fuerza y veo tristeza en sus ojos. No puedo resistirme, tengo que preguntarle. — ¿Ella te besó?
— Fui yo. No significo nada, lo prometo.
— Pues al parecer ella piensa que sí, porque los vi muy pegaditos cuando salimos de Nando’s. — No pude evitar que eso saliera con un tono lleno de rabia.
— Somos amigos. Ella, ella me va a ayudar con Perrie. Fue ella la que pidió que olvidáramos todo, Harry.
— ¿Y eso de que mierda me sirve, Javadd? — Le digo soltándome de su agarre. No es solo ____, son todas las chicas, todas prefieren a cualquiera de ellos antes que a mí. — ¡Aún así terminara eligiendo a cualquiera de ustedes! ¡Dios, incluso es más probable que salga con su propio primo a conmigo!