Un verano para recordar (Harry Styles) ~Terminada

50.
—eso que me dijiste para mi es complicado, haber tratare de nuevo—tome una gran bocanada de aire y lo solté en un gran suspire—yo también… te… te… te... qui… demonios es tan difícil—me quede viendo por un momento todo el lugar.
—Tranquila no pasa nada—dijo y beso mi frente, un grito proveniente de su casa se escuchó—ya me tengo que ir mi madre me habla ya es hora de la cena—sonrió—te veo mañana Alex—me abrazo por última vez, y salió por la ventana, al momento de salir yo la cerré.
— ¿Por qué es tan difícil?—dije y en ese preciso momento una idea loca se me ocurrió—si no puedo decirlo tal vez lo haga de otra manera— Salí corriendo hacia abajo, y revise en uno de los armarios donde mi tía tenía una montaña de revistas.
— ¿Alex?—dijo ella al verme cargar con todas estas.
— ¿Puedo usarlas o las necesitas?—le pregunte.
—no… úsalas las iba a tirar de todas maneras—volvió a la cocina que era en donde se encontraba, subí corriendo, llegue a mi habitación y cerré rápido tome uno de los lienzos y lo puse en piso, al igual que el Resistol y las tijeras comencé a cortar letras, que con ellas formara “te quiero” muchos pero muchos “te quiero”, después de un rato termine vi la hora y eran las 11:15, no baje a cenar.
—no importa al menos termine con esto—lo recargue en una de las sillas que tenía hay adentro, dejando que se seque, tome mi pijama que la había dejado al pie de mi cama, corrí al baño para tomar un ducha llegue y cerré rápidamente, no puedo tardarme mucho ahora tengo que dormir o si no ahora si pareceré zombie mañana en la mañana, 5 minutos debajo del agua, me cambie, los lentes de contacto ya no me molestaban tanto ya me estaba acostumbrando, corrí de la misma manera a mi habitación pero como las plantas de mis pies estaban mojadas resbale casi caía pero me sostuve del picaporte de la puerta—idiota—me dije a mi misma estaba demasiado nerviosa, ¿hice bien al hacer el cartel?, bueno no lose pero es que aquellas dos palabras no salen de mi boca ¿Por qué es tan difícil? Me decía a mí misma, me tumbe en la cama tome el celular y puse la alarma, al menos dormiré ocho horas, me quite los lentes de contacto y los puse en su estuche, suspire un par de veces y cerré los ojos con la intensión de dormirme, y así lo hice porque la verdad ya no me acuerdo de nada, la alarma me despertó salte del susto, llevándome una mano al pecho—maldito aparato—le dije al celular, apague la alarma y me levante, tome nuevamente el uniforme, o más bien mis jeans, la blusa no la encontraba—cielos no la lave—me di un golpe en la frente y corrí escaleras abajo.
—Buscas esto—dijo mi tía mostrándome la blusa, definitivamente amo a mi tía, hablo enserio—deberías pedir otra ya sabes por qué de tantas lavadas se gastara muy rápido la tela—asentí y bese su mejilla.
—Gracias—subí rápido las escaleras para poder cambiarme, tome toda la ropa que había dejado al pie de la cama y corrí al baño, cerré muy fuerte la puerta.
— ¡Alex!- grito mi madre.
—lo siento mami—estaba quitándome la pijama, cuando creí que por poco me caía—Alex basta contrólate, estas a muy buen tiempo así que… relájate con calma—suspire unas cuantas veces y me cambie, cepille mis dientes, me puse desodorante, al igual que perfume y crema en los brazos, me ate el cabello en una coleta y baje corriendo a la cocina para tomar un desayuno.
—traes mucha energía hoy ¿cierto?—me lleve una gran susto.
— ¡Papa!—suspire, él se encontraba en un sillón leyendo el periódico, mire mi reloj de mano, ya eran las 8:00, no le preste atención tome un tazón, me serví cereal y leche, agarre un cuchara y me senté en la silla dejando que todo se fuera, mire el plato y comencé a comer.
—calmada no jugamos carreras—dijo mi tía, mientras reía, el timbre sonó, me sobresalte un poco derramando lo que tenía en la cuchara.
—Alex por favor ya tranquilízate—mi madre me reprendió y tenía razón debo de tranquilizarme, tome la última cucharada de cereal y fui hacia la puerta, papa ya había abierto y el moreno hay estaba.
—hey aun estas enfermo ¿Qué haces aquí?—me cruce de brazos y él sonrió.
—si claro Alex, buen día me da mucho gusto verte, también estoy muy bien ya me cure, gracias a los tés raros de mama—dijo todo en un tono sarcástico, me acerque a él y lo mire fijamente mientras entrecerraba los ojos.
—mmm… si te vez mejor que ayer, el verde pálido se fue de tu piel—solté un risita y el me fulmino con la mirada y esta vez el cruzo sus brazos.
—si… si… como digas piel perfecta—lo mire mal, y calme mi risa.
—buenos días zayn—Helen salía de la cocina limpiándose las manos con una franela.
—Buenos días Helen, paso por la loca de Alex para ir al trabajo—le pegue levemente en el hombro y él sonrió,
—Si bueno… solo deja subir por algo y nos vamos—corrí escaleras arriba en dirección a mi habitación tome mi bolso, y eche mi celular, audífonos y uno de los libros que aún no termino, baje de la misma manera que subí llegando hasta donde estaba zayn.
— ¿Estás bien?—me pregunto asentí mientras trataba de recobrar el aire, estaba bastante nerviosa y la verdad no sabía porque, nos despedimos por última vez y salimos de casa, en dirección al trabajo.

51.
—te veo luego Alex—al escuchar eso mi piel se erizo y comprendí porque estaba nerviosa, si porque el cartel que hice para Harry.
—si de acuerdo Harry adiós—tome la mano de zayn y tire fuerte de ella casi corríamos la verdad íbamos trotando hacia el trabajo al estar a dos cuadras de Music World el me soltó y me miro confundido.
—Ya enserio ¿Qué te pasa?—lo mire e intente formar una sonrisa, al parecer mi tic volvía tan nerviosa estaba me tape el ojo el ojo izquierdo ya que este comenzaba a temblarme.
—nada estoy de maravilla ¿Qué no se nota?—pero al momento que mi mano derecha comenzó a temblar ya no pude ocultarlo más—Harry me dijo que me quiere y yo no pude se me hizo bastante difícil no podía articular palabra, así que hice un cartel, que dice “ te quiero” como cuarenta veces y no sé si hice bien en hacerlo tal vez sea demasiado y los nervios me están masacrando por dentro, hasta mi tic ha vuelto—quite mi mano y apunte a mi ojo, soltó una leve carcajada, me talle el ojo y este volvió a la normalidad.
—Alex calma es normal, no fuéramos humanos si no sintiéramos cariño o amor por los demás—me abrazo.
—si pero… -- me miro—de acuerdo ya me calmare además comparado con la carta que me dio mi cartel no es mucho—suspire trataba de tranquilizarme y al parecer lo logre, llegamos al trabajo, Richard aun no llegaba, pero Janeth ya venía cruzando la calle, nos sonrió y saco las llaves de su bolsillo, todos los empleados entramos en cuanto ella abrió la tienda, algunos empezaron a limpiar estantes y otros a barrer y trapear el piso.
— ¿Qué hace esta Gibson aquí?—dijo zayn, él se tomaba muy enserio su trabajo, reí al recordar lo que hicimos Harry y yo ayer, nuestro concierto improvisado.
—nada tranquilo yo la moví solo ponla en su lugar y listo no es necesario que te alteres—sonreí.
—si claro me dice la que hace 3 minutos tenía un tic nervioso—soltó una carcajada mientras acomodaba la guitarra, las horas pasaron, nos fue bastante bien vendí varios CD, pero eso no quita que no estuviera leyendo, la verdad no me decían nada, dieron las 3:00 p.m. y Salí casi corriendo de la tienda, los nervios nuevamente invadieron mi cuerpo al ver a aquel chico de cabello rizado venir hacia mí.
— ¡Zayn!—grite, el rápido salió corriendo hacia mí.
— ¿Qué pasa?—dijo asustado.
—hay viene, hay viene—el miro a todos lados.
— ¿Quién viene?—dijo al no poder saber a qué me refería.
—ah… hola Harry—el chico ya estaba hay parado justo a un lado de nosotros, mi tic estaba por volver, así que trate de reprimir aquellos nervios que me estaban invadiendo, demonios, demonios, demonios, trágame tierra, no sabía qué hacer, Alex ya cálmate contrólate, me pegue una bofetada, los dos abrieron los ojos como plato y me miraron fijamente me senté en la banca afuera de la tienda, inhale y exhale, ¿Cómo puede ser posible que esto me suceda a mí?¿porque estoy tan nerviosa? Solo… es un chico, tan solo eso así que Alex por milésima vez ya cálmate demonios, respire hondo y suspire.
—vamos Alex a casa—zayn me extendió la mano y la tome.
—en realidad…-dijo Harry—quería invitarte a comer—paso sus dedos por su cabello, estoy a punto de desmayarme las piernas ya me temblaban.
—emm… si bueno claro nada mejor que la comida ¿verdad?—los dos me miraron fijo y a la vez confundidos, mi cara de seguro ya estaba roja como un tomate, ya dejen de mirarme así imploraba en mis adentros, zayn se despidió y se fue a casa dejándome sola con Harry.
—te parece si vamos mm… a McDonald muero por una hamburguesa—sonrió, asentí y los dos caminamos hacia el lugar, después de unos segundo sentí como él tomaba mi mano y entrelazaba nuestro dedos, un hormigueo recorrió de mi mano hacia todo mi cuerpo me estremecí un poco, pero seguí caminando tratando de disimular que todo estaba bien, llegamos al sitio, mientras yo fui a buscar una mesa, él fue a pedir la comida, nerviosa golpeando la mesa con mis uñas esperaba al chico, en cuanto llego me sobresalte un poco, comimos y los nervios se fueron, la plática me tranquilizo, luego volvimos a casa, él se fue a la suya y yo a la mía, una idea loca recorrió mi mente si el entro a mi cuarto por la ventana porque yo no haría lo mismo y le dejaba el cartel, tome el lienzo con los recortes de revista, abrí la ventana, Salí de ella me sujete bien con cuidado abrí la suya agradecí por que estuviera abierta, entre cautelosamente, pero tumbe una pelota que esta hay.
—Shhh—decía ¿a quién carajo le decía shh? Alex cielos te volverás loca, bueno más aun, deje el cartel en su cama tome un bolígrafo y en una parte escribí: “ atentamente Alex”, lo deje en el lugar que lo encontré y rápido Salí de su cuarto me resbale, solté un pequeño grito de los nervios, cuando me percate, no… no… yo debo de dárselo así que volví a entrar y tome el cartel, en eso la puerta se abrió y puse el lienzo en mi rostro, me asome por un lado de este y hay estaba Harry, que venía seguido por scarlet, los dos sonrieron aunque después ella hizo una seña empujo a Harry cerró la puerta y se marchó—no hallaba como decírtelo y fue la única manera que se me ocurrió—sonreí tímida, él se acercó a mí me quito el cartel, y lo dejo en su cama, después me tomo por la cintura y me abrazo.
—no importa de qué manera lo hagas, lo importante es que puedas decirlo—dijo mientras me estrujaba en sus brazos.
—Harry no tan fuerte necesito respirar—dije, el sonrió de una forma tonta y tierna a la vez, sus ojos estaba cristalinos—no… no llores, perdón si dije algo malo, pero no llores—el tomo mi barbilla me guio hasta sus labios y me dio un beso tierno en ellos, se separó dejando que nuestra frentes chocaran el seguía con los ojos cerrados, y con una sonrisa en sus labios.
—Eres la mejor chica que he conocido en la vida—me ruborice un poco, al parecer era lo único que podía hacer últimamente.
—¡harrisito!—gritaron y de sorpresa abrieron la puerta—¿Qué haces aquí jones?—dijo Cloe mientras cruzaba sus brazos.
— ¿Qué quieres?—dijo este poniéndose enfrente de mí.
—Harry amor, no me trates mal sabemos que me quieres a mí—su miraba se fue al cartel lo vio soltando una carcajada—por favor enserio crees que con eso podrás ganártelo—dijo burlándose, las lágrimas ya salían de mis ojos, ya estaba sentimental y nerviosa solo faltaba que esta chica me atacara—por favor, el jamás me dejaría por algo como tú—Harry me abrazo y beso mi cabello.
—Largo de mi habitación Cloe quien te dio derecho de tratarla así—estaba furioso, la chica indignada y sorprendida salió y cerró la puerta—no te preocupes ¿sí? No llores no me gusta que llores—dijo besando nuevamente mi cabello, lo abrase con fuerza y hundí mi rostro es su pecho—ya linda no llores por favor no vale la pena que lo hagas—me abrazo fuerte.

Capítulo 8—parte 52. “Vivir el presente”
—Pero tu Sapo de estanque óyeme bien—dijo Cloe desde fuera de la habitación—tú, yo y todos sabemos que esto no durara mucho—soltó una carcajada y sus pisadas se oían cada vez menos.
En ese momento una oleada de tristeza me invadió, me sentí mal no sabía que hacer me aleje de sus brazos y me di cuenta que esto no duraría tenia fecha limite el día en que mis vacaciones terminaran, el día en que decida a que universidad ir, mande cartas a unas cuantas y a todas fui aceptada gracias a mis calificaciones, y actividades extracurriculares que tome, estuve en el periódico escolar, además de estar en el club de arte, escritura y lectura, sé que se preguntan ¿Cómo hacías todo?, simple no tenía amigos y mi tiempo se lo dedicaba a cada una de esas cosas.
Harry confundido me observaba ¿Por qué me pasa esto? ¿Por qué sentí esto por un chico que sé que cuando me valla tardare años en volver a verlo?, solo me senté en piso lamentándome el haberme fijado en el claro, Alex una amistad no te era suficiente me reclame. <> dijo mi propio corazón.
Mi cabeza, corazón y cerebro tenían una disputa, ya no pude más y grite:
— ¡Basta! Por favor… basta—las lágrimas comenzaron a salir de nuevo, Harry se aproximó a mí y me cubrió con sus brazos—no—dije casi inaudible, alejándome de el— ¿no lo viste venir?—dije, me miraba confundido, extrañado, desconcertado—Harry yo no vivo aquí tan solo estaré unas semanas más y me iré, y cuando eso suceda todo acabara—el negó, con una sonrisa en sus labios acaso ¿era gracioso?
—claro que no jamás acabara, lo que siento por ti es muy grande—su sonrisa se enancho más.
—por favor me conoces hace muy poco como para decir eso, no quiero sonar grosera ni cruel pero es estúpido que lo digas así, además todo acaba en esta vida—suspire.
—no fuiste ni cruel ni grosera pero si negativa—se cruzó de brazos.
—Harry esta es la última vez que vendré en años, no te veré en mucho tiempo y ahora me culpo por esto—dije entre sollozos—debí quedarme encerrada en casa y tan solo compartir tiempo con: Max, zayn y mi tía Helen—suspire.
—Alex por favor no digas eso, podemos lograr pensar una solución—su sonrisa era un poco menos notoria pero aún seguía en sus rostro.
—Harry que no entiendes—dije llevando una de mis manos a mi nuca, y agitando mi cabello—pasaran años y no volveré a verte, cuando me valla me iré con el corazón hecho pedazos aunque es absurdo porque tan solo llevo de conocerte tres semanas, además que… tal vez tú me olvides, consigas una novia o que se yo aunque pensándolo bien no sería una mala idea—dije viendo al techo.
—Estas demente—dijo pero esta vez con hostilidad en sus voz—y por favor Alex cálmate ¿sí? Solo estas alterada, jamás habías sentido algo así además que el que viniera Cloe no fue de mucha ayuda así que inhala y exhala repetidas veces y piensa bien—claro que estoy pensado y mas de la cuenta mi cabeza echara humo por mis orejas y fosas nasales no me sorprendería si también saliera de mi boca.
— ¿Qué no he sentido esto? ¿Cómo sabes que jamás he sentido esto alguna otra vez?—dije un tanto ofendida.
—porque estas más que alterada—soltó una leve carcajada—puedo decir que es normal, viéndote estas sufriendo por el simple hecho de decir “te quiero” y cuando sientas amor, creo que te dará un ataque al decir “te amo”— ¿¡que!? ¿Aún falta esa parte?, en todo caso tiene razón no puedo con esto como estaré cuando llegue ese día cielos soy una chica debería esto ser algo normal para mí, pero los nervios me están consumiendo ¿Por qué me pasa esto a mí?.
— ¿me estas insultando?—dijo algo molesta.
—no solo digo lo que creo que podría pasar—sonrió—ya relájate—dijo.
—no necesito estar relajada—replique—esto es absurdo—dije—solo venía a pasar unas lindas vacaciones con mi tía y mi perro pero no… me tuve que topar contigo—definitivamente estoy frustrada, mi respiración se volvía más y más agitada al transcurso de segundos, abrí la ventana con intención de irme.
— ¿A dónde vas?—tomo mi mano y me llevo a sus brazos, volviéndome a estrujar en ellos por alguna extraña razón me sentí bien así y mi respiración pudo calmarse un poco, al pasar uno o dos minutos me soltó y me tomo por los hombros—Alex calma ¿sí? Pensare en algo pero por favor no des fin a esto que apenas está empezando—acaricio mi mejilla con una de sus manos, sonreí un poco y asentí.
— ¿Tienes chocolate?—fue lo único que pude decir, el asintió y salió corriendo de la habitación.
A los minutos de haberse ido llego, mi tic nervioso daba señales de aparecer me extendió la barra y la tome con cierta rapidez, la abrí con desesperación le di un mordisco al transcurso de segundos me relaje me senté en el suelo mientras él me miraba a los minutos acabe me puse de pie en dirección al bote de basura que se encontraba en la habitación, eche la envoltura, mientras un suspiro de alivio salió de mi boca.

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— ¿Mejor?—pregunto, asentí con una gran sonrisa.
—lamento como reaccione sentí: presión, angustia, tristeza, nostalgia y otras cosas que no sé cómo explicar pero es estúpido todo esto aún sigo nerviosa por eso no paro de hablar—dije llevándome una mano a la boca, el soltó una leve carcajada.
—Ya tranquila inhala y exhala en segundos o tal vez minutos te relajes—sonrió.
Las horas pasaron, los dos seguíamos charlando logro que mi frustración se fuera ¡gracias al cielo!, la puerta se abrió y Anne asomaba su rostro por el pequeño espacio.
— ¿Alex?—dijo sorprendida por el verme en el cuarto de su hijo, a que madre no le sorprendería una mujer bueno claro a menos que su hijo fuese un mujeriego y llevara chicas todos los días y a todas horas.
—si… hola Anne—sonreí, poniéndome de pie—y adiós Anne—mire mi reloj—ya es algo tarde debo irme.
—No Alex quédate un poco más—dijo Harry mientras tomaba mi mano.
—si… quédate venía a decirle a Harry que la cena esta lista podrías quedarte a cenar—sonrió.
Lo pensé por unos segundos y acepte, no me vendría nada mal convivir un poco con los Styles. Aunque me arrepentí al momento en que Cloe llego y tomo asiento en la mesa justamente enfrente mío, sus miradas hicieron que estuviera incomoda en algunos momentos de la cena, aunque Scarlet en cada ocasión que se daba cuenta hacia algo para distraerme. Al terminar la cena me despedí de todos a excepción de la rubia la cual me quería asesinar con la mirada, Harry se ofreció a acompañarme a casa.
— ¿Te gusto?—dijo al llegar a la puerta de mi hogar o bueno al de mi tía Helen pero que ahora esas vacaciones también era mío—delicioso—sonreí—tu madre es muy buena cocinera.
—Lo sé –sonrió—uno de estos días yo cocinare y te invitare, tal vez herede sus dones culinarios.
—ya veremos, buenas noches—me incline y bese su mejilla—que descanses—abrí la puerta y me adentre en casa— ¿enserio? Yo hice eso. Alex jones hiso esto ¿Qué demonios me pasa?—subí resignada a mi habitación—veamos—me decía—a ver Alex: tú nunca has tenido novio, eres algo infantil pero sensata de eso no hay duda, pero algo tímido ¿Qué demonios hice hoy? Ni yo misma me reconozco, fui… valiente aunque después cobarde al ponerme a llorar tipo magdalena en la habitación de Harry, cielos a veces debo seguir los consejos de mi padre y vivir el presente antes de preocuparme por el futuro. Tome ropa cómoda mi pijama no la había lavado, un pants y una blusa manga larga sería perfecto, me dirigí al baño ya estaba bostezando me sentía cansada y mis ojos estaban ya bastante irritados, una ducha de 10 minutos sería perfecto.
Después de tomarla me dirigí a mi habitación, me senté en la cama viendo todo el alrededor mi cabeza seguía pesando y pensando y pensando, no podía dejar de trabajar un poco, cuando de repente me encontraba en el suelo recostada, tocaron la ventana, me gire a ver quién era y hay estaba Harry, al parecer ya se le estaba haciendo costumbre entrar así a casa, me puse de pie y camine hasta ella la abrí.
— ¿Qué pasa?—dije, pero no dijo ni una sola palabra el sonrió y miro hacia adentro paso sus dos piernas adentro de la habitación me hice a un lado para que pudiera entrar completamente. — ¿Harry?—dije, él no me contestaba se encamino a la cama y se acostó.
—No puedo dormir—suspiro— Cloe ha estado haciendo ruidos extraños golpea la pared, rasguña no sé qué cosas, ¿puedo dormir aquí?— ¿Qué acababa de pedirme? ¿Hablaba enserio? ¿Dormir aquí conmigo? Acababa de tranquilizarme, y… los nervios volvían a mí, demonios debería saber si esto era normal.
—Bueno es que… de acuerdo—suspire—iré por una bolsa de dormir al armario del pasillo ya vuelvo—me dirigí a la puerta, camine hasta el armario y saque la bolsa de dormir.
Al volver a la habitación él ya se encontraba dormido, suspire, acomode la bolsa de dormir en el suelo le quite una almohada y me acosté en el piso, estaba por quedarme dormida cuando ¡poom! ¡Max! ¿Dónde está el canino?, me levante fugazmente.
—Max—dije bajo— ¿amigo dónde estás?—y ahí fue cuando escuche sus ladridos, provenían de la habitación en la cual mis padres se estaban quedando—al menos él está bien—regrese a la habitación y me volví a acostar, estire el brazo buscando mi celular en el buro, lo alcance y puse la alarma. Y sin darme cuenta ya estaba dormida, la estruendosa alarma me despertó.
—Demonios—dijo Harry— ¿enserio y aun sigues viva?—me dijo al verme que me estaba despertando, esperen… yo estaba en el suelo y ahora estoy en la cama.
—si sigo viva—sonreí—me estoy acostumbrando, ¿acaso camine sola y me acosté aquí?—lo mire, el sonrió y negó.
—no me desperté en la noche necesitaba ir al baño—sonrió—y te vi en el suelo claro que no te dejaría dormir hay mientras yo estoy muy cómodo durmiendo en tu cama—tomo mi mano entrelazando los dedos—te vez hermosa durmiendo, sabes que me tuve que contener para no llenarte de besos—rio, mientras se acurrucaba en algunos mechones de mi cabello—hueles muy rico ¿Qué shampoo usas?

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—De frutas—dije algo confundida.
—cielos enserio hueles delicioso—dijo mientras besaba mi mejilla—si no te levantas… ahora ten por seguro que no iras al trabajo—rio.
—así… ¿y porque no?—me voltee a verlo.
—porque no te iba a dejar—sonrió—así que ya te advertí, si en 10 segundos no te levantas no dejare que los hagas y el tiempo corre desde ahora 1…2…3…-- estaba totalmente adormilada—6…7…--sus sonrisa se hacía más y más grande hasta que capte y caí de la cama—10—rio—al menos te levantaste—me puse de pie.
—cielos no hagas eso estaba medio dormida—dije sobándome un brazo que fue mi soporte de caída.
Me dirigí a la mesita y saque un frasco con mis pastillas, tome un botella de agua que tenía hay, no bajaría a la cocina en medio de la noche a oscuras a tomar agua, tome una tableta y me empine la botella—no preguntes—le dije, si mis medicamentos raros, lo pensé y creo que por eso fueron los nervios que paso, creo que estas malditas pastillas son como calmantes.
Me gire a buscar el uniforme cuando me percate que no lave la blusa y no pedi otra, ¿Qué demonios pasa conmigo?, tome unos jeans y una blusa azul marino algo ancha, y me fui al baño a cambiarme me recogí el cabello. Al regresar Harry ya no estaba, ¿o en verdad se fue o soñé con ello?
Respire hondo y baje a la cocina con pereza tenia sueño, no había lavado mi camisa, mi cabeza era un lio. Me dirigí a la barrita para tomar unas cuantas frutas y partirlas para hacer una ensalada de frutas. Estaba por sentarme a desayunar cuando llamaron a la puerta, estaba entre ir y no ir, mire mi plato solté un suspiro y decidí ir a ver quién era el idiota que interrumpe mi desayuno. Pero mejor me calle al ver al moreno ojos café claro parado al otro lado de la puerta.
—haber señora irresponsable—paso, sus manos las llevaba en la espalda—¿esa camisa es mía?—dijo al ver lo que llevaba puesto, por reflejo voltee a verla y con algo de pena asentí—te queda bien diría que mejor a ti que a mí—rio—y se porque la traes puesta, ayer vine a ver cómo te había ido con Styles pero me dijo Helen que no estabas, y antes de irme me pregunto si habías pedido otra blusa porque de tantas lavadas se iba a terminar gastando la tela muy rápido y adivina super-malik te consiguió una—sonrió mientras llevaba sus manos al frente de nuevo con la blusa en mano—además aproveche para pedir un yo, porque si… es verdad se terminaría gastando bastante rápido.
—gracias—la arrebate de sus manos y corrí escaleras arriba para cambiarme, baje igual que como subí: corriendo estilo torbellino—listo, ahora desayunare—sonreí, el me miro y se sentó— ¿no has desayunado cierto?—sonrió y con aquella sonrisa me lo dijo todo, puse el plato entre-medio de los dos y le di un tenedor—toma—el sonrió de vuelta y empezó a comer, me pare para tomar algo de jugo, llene dos vasos y le di uno a él.
—ahora… me dirás como te fue con Styles—dijo mientras se llevaba un pedazo de manzana a la boca.
—bien…— dije picando la fruta.
— ¿Tan solo eso?—pregunto.
—si bueno el nerviosismo me gano así que hubo unos cuantos problemitas pero todo resulto bien después—sonreí, pero aún me seguía preguntando aquello ¿enserio Harry durmió conmigo? ¿o tan loca estoy que soñé algo tan vivido?
Después de desayunar, subí al baño a lavarme los dientes seguida por él.
—zayn no tienes cepillo de dientes aquí—reí—eso ya lose pero con enjuague bucal está bien—sonrió, tomo la botella y se empino un poco después comenzó a enjuagar, mientras yo me cepillaba los dientes. Terminamos y fuimos hacia el trabajo, la mañana tarde y noche paso rápido, no hubo mucha emoción solo vi la tele y leí algún que otro libro que me faltaba por terminar.
La alarma sonó como todas las mañana los ojos me ardían, a veces se me olvidaba quitarme los lentes de contacto por la noche ya que últimamente me he sentido demasiado agotada y lo único que quiero es dormir. Me levante con pereza de la majestuosa comodidad que brinda mi cama, dirigiéndome al armario a tomar el uniforme agradecía a zayn que me hubiera conseguido otra blusa para el empleo, tome uno jeans, unos converse, más la blusa del uniforme, sin olvidar las calcetas, me es muy incómodo a veces andar sin ellas siento como el zapato puedo desgarrarme el pie si no las uso. Harry y yo si… seguimos normal hoy vendrá a casa a la hora de comer mis padres se irán, solo estarían unos días conmigo y la verdad los aprecie mucho.
Al cambiarme baje con pereza deje mi pelo suelto mi cabeza no estaba de condiciones para ataduras, No había absolutamente nadie abajo a excepción de mi canino amigo que salto hacia mí.
—yo también te extrañe bola de pelos, aunque parece que mes has cambiado por mi madre—el lambio mis rostro como en signo de no haberlo hecho—ya de acuerdo no lo hiciste, para que me haces cosquillas Max—reí, y él se alejó tomo su tazón, claro no había desayunado a menos que señor invisible le hubiese ya dado algo de comer, tome la bolsa con croquetas de una de las lacenas de abajo vacié un poco en su tazón y el felizmente comenzó a comer, sin ánimos de prepararme algo tome leche, cereal, un tazón y una cuchara—admiro al inventor de esta cosa—dije alzando el tazón ya con la comida—facilita los desayunos y cenas—reí, podría vivir de cereales y frutas el resto de mi vida pero… tuvo que existir la comida hecha con pollo si no hubiese esos manjares enserio que con fruta y cereal viviría mi vida completa, llamaron a la puerta y rápido deduje que era zayn tome la última cucharada de cereal y corrí hasta ella.
—Hey—dijo— ¿eso qué es?—un poco de leche caía por mi barbilla, rápidamente con la mano me limpie y trague lo que tenía en la boca.
—nada de lo que debas preocuparte—reí—pasa—me hice a un lado mientras el pasaba—hoy mis padres se irán vendrás a la comida que hará mi tía por su despedida cierto ya sé que es absurdo ya sabes cómo son las Brooks.
—Calma Alex si vendré al igual que el resto de mi adorable familia, ok… ya soné raro el resto de mi familia—rio—estas de muy buen humor a pesar de que hoy tus papas se van—sonrió burlón.
—no del todo me he levantado con más pereza de lo normal, y aquí míster peludo no me ha dejado ningún segundo sola, me ha de haber extrañado, casi 5 días estuvo alejado de mí, gracias a mama, haber míster peludo a quien amas—el ladro—ves me ama con todo su corazón canino—reí, el volvió a mirar su reloj.

55.
—Alex lamento arruinar su cuadro amoroso pero… ya es tarde 8:50, tendremos que correr—tomo mi muñeca y tiro de ella.
—alto, alto espera—dije tirando de mi brazo con fuerza—Max ven—el rápido corrió hacia—amigo… te quiero mucho, cuando vuelva jugaremos te debo un arduo y divertido rato—lo abrase—en unas horas estaré de regreso hazle caso a la tía Helen—sonreí y bese su cabeza—te quiero no lo olvides ya me estoy volviendo loca—reí—ahora si vámonos—tome mi bolso junto con una botella de agua sacando la estúpida medicina.
— ¿tus padres siguen con ello?—dijo zayn, asentí—solo me faltan unos días y termino con esta tortura—reí, al tomar el medicamento, ambos corrimos a toda prisa hasta el sitio “Music World”, me canse necesitaba aire, recargue mis manos en mis rodillas recobrando el aire que había perdido—necesitas hacer más ejercicio—rio zayn—buenos días Richard—me incorpore bien y sonreí.
—buenos días zayn ¿Alex estas bien?—pregunto al ver mi cara de seguro esta ya estaba roja.
—ah sí de maravilla ¿cómo no estarlo señor?—sonreí.
— De acuerdo—dijo confuso, paso la llave por el agujero del picaporte y abrió la puerta dejando entrar a todos.
—estas roja—zayn tomo mi cara—bastante roja en verdad necesitas ir a hacer ejercicio esta misma tarde iremos—sonrió mientras caminaba a su puesto, las horas pasaron esta vez no hubo muchas ventas, dieron las 3:00 pm.
Nos encontrábamos de camino a casa, cuando escuche un choque, ambos corrimos para ver qué pasaba. Me detuve en seco al ver lo que estaba pasando, estaba en shock y rápido corrí hasta donde estaba el “Max” había sido atropellado y se estaba desangrando, no me importo y me acerque a él, viendo cómo ayudarlo no sabía si debía moverlo o si hacia tal vez empeoraría.
—carajo alguien traiga las putas llaves del auto—grite ya con los ojos llenos de lágrimas, todos estaban quietos sin hacer absolutamente nada—amigo resiste ya vuelvo—corrí hasta adentro empujando a quien sea que se interpusiera en mi camino, tome las llaves de la mesita de la sala y corrí hasta la camioneta de Helen abrí una de las puertas y nuevamente me dirigí al canino, trate de cargarlo pero me daba miedo provocarle más daño—ya amigo te ayudare no te preocupes—trataba de ayudarlo el solo estaba callado, con los ojos llorosos—mierda alguien ayúdeme—grite y al parecer con ello todos reaccionaron y se encaminaron a ayudarme zayn tomo a Max en sus brazos y lo adentro en el auto yo me senté con la cabeza de Max en mis piernas, me encontraba cubierta de sangre pero no me importaba—tranquilo amigo todo estará bien—la sangre de su cabeza no dejaba de salir, estaba aliviada y sorprendida a la vez que el siguiera consiente, en menos de lo que pensé todos estábamos en la veterinaria, la doctora se adentró con el perro, estaba asustada, nerviosa, triste, no podía estar quieta moviéndome de una lado a otro mientras jugaba con mis manos nerviosa, a los minutos la veterinaria salió de la habitación a donde a Max habían llevado, al verla corrí hacia ella.
— ¿está bien? Por favor dígame que lo está—las lágrimas ya se habían acumulado nuevamente en mis ojos, ella agacho la cabeza y negó.
—lo siento no pudimos hacer nada ya había perdido mucha sangre, murió—sentí como el peso de todo el mundo callo hacia mí, las lágrimas acumuladas empezaron a salir y con paso decidido pero inseguro me dirigí a la puerta, me tomaron de los brazos mientras pataleaba y me resistía, yo lo quería ver, no él no estaba muerto, negaba con la cabeza—no… no lo está doctora haga algo él no puede morir aun—me desplome en el suelo mientras las lágrimas se apoderaban de mí, esto que siento ahora me paso igual con Kurt, dos seres queridos habían fallecido en tan poco tiempo, me levante y entre lágrimas y tropiezos salí de ahí, ahora con la intención de matar al que había sido el responsable del choque, pero el muy cobarde había huido, así que en realidad no sabía a quién matar en estos momentos.
Estaba en el auto siendo consolada por todo aquel que estuviera dentro de este, pero yo no quería que sintieran lastima o pena, no quería que me dijeran que todo estaba bien porque no lo estaba simplemente no lo estaba, quería gritar, llorar desahogarme, ya no vería jamás a esa bola de pelos. Mi tía se quedó en la veterinaria haciendo un papeleo que ni siquiera quise saber para qué era. Salí del auto sin mirar a nadie casi corriendo entre a mi cuarto cerrando con llave mientras que me tiraba en el suelo ni siquiera en mi cama en el suelo junto a su cama abrazada de tini las lágrimas comenzaron a salir, la imagen de él desangrándose en mis piernas y brazos me era horrible, “Alex” escuchaba “Alex abre”, “Alex mi amor abre todo estará bien” esa voz era Harry, no me importaba quien era, solo quería estar sola, no se irían así que camine con tini en la mano y baje por la ventana llegando abajo sin sufrir daños colaterales por suerte, al estar parada en el punto medio del césped del jardín, solté un grito con todas aquellas fuerzas que quedaban en mí, y al terminar caí al suelo, me sentía débil definitivamente, llore aún más, y en menos de lo que pensé ya estaba rodeada por todas aquellas caras conocidas hasta la de Cloe se asomaba por detrás de Zayn.
—Váyanse por favor—trate de sonar calmada pero era difícil hacerlo.
—Alex—dijeron.
—Que se larguen—grite. Todos confundidos se fueron excepto uno “Harry”—tú también—dije sin mirarlo, pero el hiso caso omiso a mi orden, solo se incoó y me abrazo, por inercia conteste su gesto enrollando mis piernas en su cintura al igual que mis brazos en su cuello, mis ojos eran como cascadas sin límite de agua.
—Ya tranquila—decía mientras acariciaba mi cabello y espalda, ya estaba sentado pero yo seguía en la misma posición, soltando sollozos incontrolables.
Al día siguiente me entere para que eran esos papeles que la tía Helen se había ha quedado a firmar, era para aprobar la cremación de mi perro, sentí como las lágrimas volvían a mí, subí a mi cuarto y me encerré en el:
Una semana dure así, una semana sin ir al trabajo, una semana aislada de las personas a excepción de zayn y Harry, solo a ellos dos podía ver y no sentirme mal si caía a llorar, una semana dure así, ya no tenía trabajo la tía Helen había hablado con Richard sobre la situación el entendió “adiós empleo”, tini se encontraba en la cabecera de mi cama. Encerrada completamente, mientras todos trataban de animarme pero no podían mis padres se habían quedado habían cancelado juntas y no sé qué más cosas no me interesaba el saberlo. Mi depresión era horrible aún más fuerte que la de Kurt, pero esas dos muertes llegaron a mi haciendo que esta vez me fuese peor recordando a mi hermano y perro no podía con esto noches pensando y tratando de estar bien, 6 noches siendo exacta hasta que en la séptima logre dormir y fue cuando mi depresión desvaneció y la Alex de antes volvió, un sueño hermoso que había presenciado en aquel momento de paz y serenidad durante la noche, Kurt y Max jugando en un magnifico parque como antes, un lugar lleno de árboles, césped, flores, bancas, hasta niños, mujeres, hombres habían hay, ellos se veían felices, yo estaba sentada apreciándolos hasta que Kurt se percató de mi presencia y sonrió mientras decía: “hermana estamos bien no te preocupes míranos ya no llores no queremos que lo hagas te queremos mucho, ya extrañaba a la bola de pelos” dijo mientras acariciaba el pelaje del canino “te veremos en mucho pero mucho tiempo princesa tranquila, pero ya no llores siempre estaremos contigo no en cuerpo físico pero si en espíritu”.

56.
Fue lo último que vi cuando un fuerte golpe se escuchó, salí corriendo de la habitación, con tini en mano había estado durmiendo con él todas las noches; un jarrón había caído, pero al parecer eso no importaba todos estaban más atentos a mi presencia porque era la primera vez en una semana que bajaba hasta la planta baja, ya que salía de mi cuarto cada vez que necesitaba ir al baño.
—Alex cariño—dijo mi madre mientras me estrujaba en sus brazos— ¿estas mejor?—se alejó dedicándome un hermosa sonrisa, asentí respondiéndole el gesto.
—mucho mejor—sonreí, mientras caminaba a la cocina por un recogedor y escoba para limpiar.
—no hija yo lo hago—dijo mi padre quitándome las cosas de mis manos, asentí y me senté en una de las sillas de la mesa tomando una pera del tazón de frutas que había en ella-- ¿Cómo te sientes?—pregunto quién me miraba extraño, en realidad todos me miraban de una manera extraña. Si de acuerdo estuve una semana encerrada ¿es normal cierto?, deberé de suponer que sí.
—Mejor—sonreí, en verdad me sentía mucho mejor, aún estoy algo triste, ¿Cómo no estarlo? Pero… algún día la depresión que tenía debía pasar y ese día es hoy, si tampoco actuare como si estuviera de maravilla pero si algo bien. Admito que aún no me acostumbro el que él no este, su oso de peluche sigue en mi mano, su cama y juguetes en mi cuarto y su tazón por alguna razón en la misma esquina de la cocina de siempre.
Mi tía al ver que mi vista estaba fija en aquel objeto la quito. Le sonreí de una manera como diciendo <>.
Tome otra fruta del tazón específicamente una naranja, tome un plato y un cuchillo. Partiendo la parte donde esta tiene la rama y pelándola con la mano me es más sencillo el hacerlo así que con el cuchillo ya que siempre término cortando de más. Comía unos cuantos trozos, cuando llamaron a la puerta, un Harry nervioso, una Scarlet con una sonrisa, una Wendy sorprendida, un Zayn igual de nervioso que Harry y una Perrie con el cabello rosado- alto rosado, cielos cuando Zayn me lo conto no lo pude creer y eso que la conocí con la melena purpura- estaban parados en la puerta, en cuanto me vieron les dedique una sonrisa. Todos corrieron a mí a abrazarme caí al suelo eso me dolió. Me ayudaron a levantarme la verdad me sobaba el trasero, si me dolió.
—Alex—exclamo Wendy mientras me estrujaba—diablos que bueno que has salido del exilio, te extrañe tanto.
—Wendy tan solo fue una semana—sonreí, además tenía mis razones para hacerlo. Todos se encontraba hablando lo cual me provoco una gran confusión.
—Chicos alto—exclamo Scarlet, lo cual le agradecí en verdad—como sea, también te extrañe—sonrió—pero ahora, anda Wendy dile—dijo dándole un golpecito en el hombro haciendo que diera un paso al frente.
— ¿Qué tiene que decirme?—una sonrisa desconcertada había en mi rostro, a veces puedo ser tan… pero tan… extraña al hablar.
—Que nos vamos a una cabaña—dijo zayn.
— ¿e?, ¿una cabaña?
—Idiota—dijo Scarlet—a los que este se refiere y lo que Wendy debe decir pero al parecer no sabe cómo es que…, teníamos pensado irnos a una cabaña cuanto tu… ya sabes te sintieras mejor—sonrió tímida—dos semanas con todos tus amigos.
—Así es—agrego Wendy—mi padre tiene una cabaña a las afueras de Londres, y también irán, logan y Louis como solo les quedan dos semanas aquí, a… y también ele tienes que conocerla es encantadora además Matt—suspiro viendo a la nada <> reí.
—si… y también Niall y Liam—continuo Scar—sé que no los conoces del todo pero te llevaras de maravilla con ellos además que Liam llevara a Danielle—sonrió—también debes conocerla es muy linda, te has perdido de muchas cosas—rio <>.
—bueno… ¿Qué dices? ¿Si vienes cierto?—esta vez hablo Harry quien me miraba de manera insistente como diciendo <> y al final de cuentas dije:
—Sí, ¿Por qué no?—sonreí, todos sonrieron y me abrazaron no me haría mal, el ir unos cuantos día con ellos ¿cierto?
Pero lo que no me habían dicho, es que nos íbamos mañana o sea hoy.-ayer me la pase acomodando ropa en la valija, a veces puedo llegar a ser muy perezosa, así que lo guarde mejor en la mochila, una pijama, casi la mayoría jeans, blusas, uno que otro short, mi cómodos tenis- y tampoco me advirtieron que la glamurosa Cloe Thomnson se dignaría a pasar tiempo con nosotros.—muévanse lerdos—dijo mientras, pasaba con dos grandes maletas, ¿Qué es esto? Tan solo iremos unos días a una cabaña, no meses, rodee los ojos y subí después de ella a la camioneta del padre de Scarlet, quien por suerte nos la presto- no era una camioneta más bien era una vagoneta, si una vagoneta estilo hippie, Scarlet dijo que su padre en sus tiempos cuando era un adolescente de nuestra edad era un hippie sin remedio lo cual me trajo mucha gracia en realidad, imaginarme a su padre con lentes estilo John Lennon, cabello largo y diciendo cuiden el ambiente malditos idiotas, debió ser genial-.
—La odiosa de tu hermana tenía que venir—decía Wendy quien se encontraba de pie a un lado de Scarlet con los brazos cruzados observando el auto (vagoneta).

57.
—corrección prima y tu escuchaste, ella tenía que venir para que Harry y yo pudiéramos ir—rodeo los ojos.
—Solo por eso la paso—dijo Wendy.
—pero Wen mírale el lado bueno a esto, dos semana de bromas para Cloe y diversión para nosotros—rio, ambas chocaron las manos y se dedicaron miradas cómplices.
—Súbanse que ya hace calor en esta hojalata—dijo Cloe quien se hecha aire con un abanico de mano. ¿enserio?, todos subieron a la camioneta Louis conduciría ya que fue al único quien Connor le dio su confianza para cuidarla: Rachel- si ese era el nombre del auto-.-- ¿listos chicos?—todos asentimos, se preguntaran como 14 personas cambian en ese auto, simple, uno encima de otro, si…, Wendy encima de Matt, Cloe de Niall, Danielle de Liam, Scarlet de Logan, Perrie de Zayn, Eleanor de Harry, Louis conducía y yo… en una de las esquinas de la vagoneta leyendo, en la radio se escuchaba “Raise Your Glass de Pink”.
Mientras veía absolutamente todo, sentada con las piernas cruzadas y el libro en mis piernas, era algo imposible el concentrarme -ademas que estaba mas que incomoda-en el texto así que solo estuve atenta a los demás, gracias al cielo ya me había acostumbrado a los lentes de contacto. No hubo muchas quejas durante el camino, tan solo de parte de Cloe diciendo “Niall deja de comer me caen todas la migajas” pero hacia casi omiso a sus peticiones y seguía comiendo. Mi duda era “¿Cómo le cabía tanto en tan poco?” el chico no es tan grande ni tan ancho complexión normal, agradecí estar hasta atrás porque Niall de tanta comida, su estómago comenzó a hacer ruidos extraños que fue producto de gases mortales, Cloe chillo, mientras los demás se quejaban. Cuando ya no pudieron más con el olor, Louis detuvo el auto y todos bajaron como si su vida dependiera de ellos mientras Niall, solo reía sin cesar, todas las chicas respiraban de una manera exagerada aire puro “Limpio”, subí arriba de la vagoneta. Si desde chica fui un maldito mono para escalar. Me gustaba siempre poder apreciar todo el panorama.
Wensy, Scarlet, Danielle y Eleanor hablaban entretenidamente mientras que volteaban de vez en cuando a mirar a los chicos y soltaban risitas nerviosas. Los chicos Matt, Logan, Louis, Niall, Liam, Zayn y Harry platicaban de… en verdad no se tan solo conversaban entretenidamente. Cloe son su abanico de mano, mientras hacía gestos con la cara, el día estaba nublado hermoso a mi parecer ¿no les dije que hace 3 días mi tortura medicinal acabo? Si… ya no más pastillas. Además me traje a un infiltrado en mi mochila a tini, si… es lo único que conserve, las demás cosas de Max se fueron al ático de la casa de tía Helen.
Después de minutos todos subieron retomando sus puestos seré sincera fui la primera en hacerlo no quería que me ganaran el lugar. El transcurso siguió igual todos hablaban a excepción de mí que solo me denominaría espectador del viaje. Llevaba los audífonos puestos. Llegamos fui la última en bajar bueno penúltima Cloe seguía adentro tan solo llevaba un auricular puesto el otro se engancho en uno de los asientos Cloe al querer salir tiro de él rompiéndolo.
—Maldita sea—exclame, lo había roto—Cloe ¿Qué? Pero…-- la chica solo rio y se fue, suspire resignada tomando el audífono roto en una mano y con la otra mi mochila llevándola a uno de mis hombros—estas serán las dos semanas más largas de mi vida—suspire por ultima caminando hacia la cabaña.

58.
La cabaña era una cabaña: normal, madera, ventanas, iluminación pero aun si completamente hermosa, chimenea hasta una barda, muy bien cuidada. Durante el camino aprecie una vías del tren algo de esa parte me llamo bastante la atención, la magnitud de árboles que había, la flora silvestre en verdad es lo mejor un día me vendré a vivir aislada de los ruidos de la ciudad aun lugar así, aunque después la pienso y digo mejor no, tal vez tenga un vecino psicópata maniático salido del psiquiátrico o de prisión por ser asesino y me arrepiento, veo demasiadas películas de terror con razón mi madre siempre me ha dicho que no es bueno para la mente ni mi cuerpo ya que según esto dejan sensaciones horribles en él y gastas energía, mi madre es algo así como diré se lleva mucho por las cosas espirituales acepto que me ha pasado algunas costumbres.
Entre a la cabaña, todos ya traían un verdadero desastre la parte de afuera se veía más limpia y eso que había defecación de pájaros afuera aunque en un lugar así esto es normal pero no le quita que esto sea algo realmente increíble, si Wendy me dejara al igual que el padre de Wendy me quedaría a vivir aquí el resto de mi vida, a Max le gustaría mucho, demonios ya me pondré a llorar, Alex no inhala y exhala todo estará bien, pero en ese instante la canción “Infinite de Arshad” sonó, esta canción sobre una película que me encanto al igual que el libro, y unas de las estrofas fueron las que me hicieron ponerme algo triste:
“Querido amigo…
He estado intentado de empezar otra vez, pero se siente como si estuviera cayendo. Y no puedo recordar porque, pero sé que alcanzare, porque en este momento estamos vivos, querido amigo. Estando feliz, estando triste. Tratando de averiguar lo que hay en mi cabeza. Estos sentimientos abruman mi mente. Pero sintiéndome triste y sintiéndome deprimido, aunque estos desaparecen cuando estoy contigo. Y en este momento somos infinitos. Pero las cosas que pasan en nuestra vida. Y los momentos que llegan de sorpresa. Nosotros debemos intentar avanzar…
Querido amigo…
He estado intentado de empezar otra vez, pero se siente como si estuviera cayendo. Y las cosas cambian y los amigos se van. La vida no se detiene para nadie…”
La canción me hace de una manera sentirme vulnerable ante la pérdida porque tener un amigo así y que de un momento a otro ya no este es algo catastrófico las lágrimas se asomaban por mis ojos pero me estoy diciendo, Alex se fuerte él está mejor, no llores, él está muy bien donde esta con Kurt ellos no quisieran que lloraras, apreté los puños con fuerza y cerré lo ojos igual, suspire con dificultad, camine a la habitación donde la voces de las chicas mandaban, inhale y exhale un par de veces antes de entrar me percaté de que mi cara pareciera normal y con toda la valentía que poseía entre, sin decir nada solo fui a una de las camas, había cuatro literas no era de esperarse que Cloe compartiera ya que se adueñó de una completa, Perrie al parecer compartiría conmigo, deje la mochila en la cama de abajo ella ya había ganado la de arriba saque mi libro de esta al igual que a tini acomodándolo en la cama, me recosté junto a él, cuidando de no dañar mi otro audífono y volviendo a reproducir la canción. Las chicas desempacaban ferozmente, las voces de los varones se escuchaban solo afuera diré que si los escucho ya que mi otro oído esta libre, esperando con ansias a que estas salieran, para poder desahogarme como tanto quería, no caería en depresión pero si quería llorar, solo eso llorar y dormir, estaba cansada mi trasero entumido no mentiré tres horas de viaje, mi boca seca por no beber agua así que me puse de pie y fui a la cocina por algo de aquella sustancia gloriosa para la vida, si me pongo filosófica algunas veces, después de tomar unos cuantos litros- no sé pero a veces creo que tengo problemas en los riñones por tanta agua que tomo pero me dijeron que es porque mi cuerpo está acostumbrado- unas ganas incontrolables de ir al baño llegaron a mí con dificultad camine al baño, al entrar deje el celular y audífonos en uno de los muebles que estaban hay y ya sabrán número uno, estas cosas simplemente no se describen, a veces puedo será tan… rara lo he de saber no es tan malo cuando yo lo digo. Tome mi pertenencias y salí de este, me fui de nuevo a la habitación no había nadie agradecí por ello, me tumbe en mi cama estruje muy pero muy fuertemente a tini en mis brazos mientras seguía escuchando aquella canción eso de cambiar la configuración de repetición para que solo escuchara esta bueno… que podría decir a pesar de todo es una de mis favoritas.
—declaro que tu serás mi nuevo confidente, mi nuevo querido amigo—le dije a tini en uno de sus pequeños oídos en forma de susurro. Tan solo podría decir que me sentía algo sola aunque no lo estaba el perder a alguien es simplemente terrible cuando en verdad lo quieres en mi caso yo amaba a Max.

Capítulo 9—parte 59. “Dear Friend…”
Como dice la canción estoy tratando de volver a comenzar, pero siento caer, así que diré, querido amigo sea donde quiera que estés te extraño con todo el corazón desearía que estuvieras aun conmigo en vida, pero sé que al menos estás conmigo en mi recuerdos y corazón, tenlo por seguro. Metida en mis pensamientos pero un grito me hizo exaltarme y caer al suelo.
—Autsssh—me puse de pie sobándome el brazo—en estas semanas me he golpeado más que en años.
—Alex sal los chicos hicieron una fogata—ya era de noche a qué horas creen que nos venimos a las 6:00 de la tarde, así es Louis se había quedado dormido y no había hecho el equipaje. Salí de casa con pereza pero antes me fije que cara traía un interrogatorio era lo menos quería, me cerciore de mi audífono el que funciona siguiera vivo y así era, camine hasta un tronco al parecer los chicos se tomaron bastante enserio esto de la cabaña y el aspecto silvestre.
— ¿de dónde sacaron los troncos?—pregunte en cuanto me senté—del bosque da…-dijo niall, mientras se echaba un puñado de Doritos a la boca y tomaba un trago de refresco de cola, no le tome mucha importancia a su comentario y dirigí mi vista al cielo, es verdad lo que dicen que cuando te alejas de la ciudad el cielo se vuelve más hermoso y las estrellas se dan más a notar, una luz relámpago paso podría jurar que fue una estrella fugaz sin desperdiciar la esperanza de que esta fuera una, pedí un deseo: “señor por lo que más quieras cuida de mis seres queridos, amigos, familiares no podría hablarte más sinceramente que ahora, que aún sigo destrozada por aquella perdida si Max está contigo dile que lo quiero eso es todo, por cierto tú también cuídate”.
Los chicos bromeaban, mientras yo seguía conectada a aquella canción, parece que me aferro a todo y al parecer eso es lo peor que puedo hacer. Suspire niall dejo la comida de lado y tomo su guitarra en mano.
—Niall podría pedirte un favor—al verme su sonrisa de “hey amigos que rica estuvo esa comida” paso a “claro que si Alex” una sonrisa tierna que me hiso sentir bien-- ¿te sabes la canción de Infinite de Arshad?—el miro al cielo por unos segundos y asintió—¿podrías cantarla por favor?—sin decirme más nada, afino las cuerdas de su guitarra y al parecer Harry decidió hacer un dueto con él, no sabía porque me hacía esto, se perfectamente que llorare con ello, ¿porque me hago más daño? Las lágrimas no tardaron en salir, lleve mis manos a mi rostro cubriéndolo totalmente.
—no Alex no llores—dijo Scarlet y me abrazo.
—lo siento no debo ponerme así—dije entre sollozos, me aleje de ahí—solo… solo... en un rato vuelvo—me miraban de una manera comprensiva, excepto uno siempre Harry, era el que me miraba preocupado y triste, camino hacia mi tomo mi mano.
—ya no llores preciosa él está bien, sé que lo está—me dedico una sonrisa encantadora que me hizo instantáneamente dedicarle otra, tomo mi mejilla y me dio un beso en los labios, me abrazo fuertemente, todos miraban la escena tiernamente, pero solamente una no ya sabrán quien “Cloe” era de esperarse que ella no lo tomara a bien, soltó un fuerte “Demonios” y se fue de ahí.
—por un momento pensé que esta chica tenia alma—dijo Scarlet quien estallo en carcajadas después—calma amiga, la Barbie Malibu no te tocara ni un pelo—las horas pasaron y entre canciones y conversaciones me hicieron sentir mejor de eso se trataba o eso fue lo que Wendy y Scarlet me dijeron, tenía sueño así que me despedí de todos pero un olor atrajo mi atención guiándome por este seguí el rastro olor a quemado era, cuando voy viendo la melena rubia de Cloe con uno de mi libros y un encendedor en la mano, lo estaba quemando.
— ¿Qué demonios haces?—dijo al reaccionar, la sangre me subió a la cabeza, con furia, me había cabreado enserio lo había logrado, la empuje y le quite mi libro tratando de apagarlo le eche tierra encima, después lo que quedaba lo sacudí pero lo había arruinado— ¿Cómo pudiste? ¡Estas enferma!—concluí y me fui, lo había quemado uno de mis libros favoritos el cual estaba leyendo de nuevo, “Las ventajas de ser invisible” claro que podría conseguir otro pero lo había quemado, ¿Qué le había hecho yo? Absolutamente nada por lo cual se desquite de esta manera conmigo, estaba sentimental y ahora enojada, furiosa, entre a la cabaña yendo a la cocina por algo de agua empinándome el vaso, algunas gotas se deslizaron por mi barbilla. Y las lágrimas no tardaron en salir, nunca fui tan fuerte jamás lo he sido y me duele que esta chica sea así conmigo sin razón, no es mi culpa que sea como es y el chico que le gustaba o lo que sea la haya dejado si ella quisiera hubiese cambiado o hubiese hecho el intento pero con manipulaciones solo lo quería tener a su lado, ¿ella creía que así seria siempre? Claro que no jamás, que nunca ha leído libros o visto películas siempre las malas las que usan ese tipo de métodos salen perdiendo no es algo nuevo ya lleva mucho tiempo de trascendencia.

60.
Al parecer no, esto era demasiado, trate de calmarme y poco a poco lo fui logrando sentada en el suelo de la cocina, tomando agua ya ni sabía cuanta cantidad había ingerido solo trataba de ahogar mis penas con “agua” hasta para mí esto es patético, las carcajadas de los chicos se escuchaban, excepto los gritos de Scarlet y Cloe. Me limpie a cara con mi blusa, tome un poco más de agua respire profundo, contuve el aire y después lo solté junto con un eructo, el agua me hacía eructar ¿pueden creerlo? Ni el refresco lo lograba solo el agua, mi cara se ruborizo me sentía avergonzada por si alguno de los presentes me escucho.
— ¿Qué fue eso?—dijo Niall mientras soltaba una risa leve—demonios me ha ganado, quiero conocer a mi contrincante—dijo comenzando a indagar, me levante con un sonrisa avergonzada.
—lo siento—dije—el agua provoca eso en mi—de seguro los ojos los tenia hinchados, mi cara roja, Cloe sonrió de una manera no agradable.
—Aparte de lerda puerca me das asco—dijo yendo a la habitación, pero antes dejo el encendedor en la barra de la cocina enfrente mío.
—en verdad lo siento—dije soltando un suspiro pero esta vez el pecho me dolió, tome un poco más de agua acabándome lo que quedaba en el vaso, deje el recipiente al lado del que hace fuego si el maldito encendedor que ayudo a Cloe a arruinar una de mi más preciadas posiciones los libros, ya van dos veces que lo hace aquel dibujo que Harry y ahora este libro, había hecho otro que aún no se lo entregaba pero no tenía ganas en este momento ayer decidí me di valor para poder dárselo pero ahora no tengo ganas, entre a la habitación y fui directo a mi mochila, no me había percatado de aun los audífonos los traía puestos dejándolos en la cama junto con el celular, tome mi pijama, cepillo de dientes y me dirigí al baño necesitaba de una ducha si eso era lo que necesitaba me relajaba de una forma que no se imaginan, será porque es la versión artificial de la lluvia porque la lluvia en verdad me fascina aunque esta no creo que mismo efecto que la verdadera, el olor a ramas y tierra mojada es único además aquella brisa fresca que deja es gloriosa, cada vez que llueve me gano un resfriado no me gusta cubrirme ni huir de ella porque en verdad me fascina amo la lluvia, no sé porque las personas dicen eso y corren a esconderse, y en esos instantes me pregunto cuando dicen te quiero o te amo ¿en verdad lo dicen de verdad? Porque a la lluvia se lo dijeron y corrieron a esconderse de ella. Al terminar me cepille los dientes y salí del baño con la toalla enrollada en mi cabello, mi cabeza pesaba aún más pero no importa entre a la habitación las chica ya tenían sus pijamas en mano, todas corrieron a la pequeña puerta, pero Eleanor les gano, tome mi cepillo de mi mochila y comencé a deslizarlo por mi cabello, me gustaba tenerlo largo, no recuerdo algún instante haberlo tenido corto a excepción de cuando era bebe y apenas me estaba creciendo, me lo seque mejor con la toalla la puse a secar en una silla que estaba ahí y me recosté en mi cama tome el libro que si estaba leyendo “Atrapada de Casa de la noche” en verdad te atrapa voy en el capítulo 15 pagina 150, con esto me sentía llena desaparecer de la realidad es fantástico pero a la vez duro cuando regresas a ella, otro apodo que tenía era “ Traga libros” no entendía aquel empeño que mis compañeros tenían al hacerme sentir mal pero no lo lograban, jamás llore por lo que ellos me decían en realidad solo recapacitaba y bastante hasta el punto en que no le hallaba sentido a las cosas, mi madre dice que soy demasiado profunda con mis razonamientos acerca de todo, que su amada “cerebrito” al menos era su amada, los deportes casi no me gustaban pero es bueno practicarlos todos mis pasatiempos el leer, dibujar y escribir tan solo eso y el que mis padres lo aprecien me es muy grato para mí. Recordé de nuevo el dibujo de Harry mejor lo entrego de una vez se me olvidara seré toda una cerebrito pero a veces soy demasiado despistada, me puse de pie y hurgue toda la mochila hasta sacar el bloc de esta y arrancar el dibujo, guarde el bloc de nuevo y camine hasta la habitación de los chicos no me sentía intimidada ni nada, mis pijama era una pantalón(de pijama) y una camisa manga larga porque sentirme intimidada si estoy vestida de esa manera, pero Cloe quien ya se había bañado traía un short un poco por debajo del trasero y una blusa de tirantes que tan solo por estirar su cuerpo se le notaba el ombligo me cacho observándola, esbozó una sonrisa malvada y dijo:
—Celosa lerda—y se fue. Sacudí mi cabeza y toque la puerta de los chicos y fui recibida por mi mejor amigo zayn.
—Hey—dijo y me abrazo, hace días que no me abrazaba exactamente dos.
—Hola—sonreí—bueno… este… ¿esta Harry?—al decir eso, los chicos solo empezaron a decir “eeee… Harry… anda hombre sal”, “Harry y Alex, ee…” o “Harry mata corazones styles” ese último me hiso reír, zayn se hizo a un lado dándole el pase a Harry hacia afuera, al salir este cerró la puerta y con ello se oyó “claro prívanos de saber” ese fue Louis.
—venía a darte este—dije entregándole el dibujo—trabaje para que este quedara muy bien, como el anterior Cloe lo rompió además de que ya no tuve tiempo de dártelo la verdad es que no sé por qué no tuve—reí, él lo tomo y una sonrisa majestuosa se formó en su rostro.
—es genial gracias—me abrazo—te quiero demasiado—me soltó lentamente, me miro a los ojos y solo dijo—ya no llores por favor, tus ojitos se gastaran, son demasiado hermosos quiero que sigan así—solté una risita nerviosa, y me aleje.
—Buenas noches Harry—él sonrió.
—buenas noches Alex—y con esto me fui a la cama, recostándome con una sonrisa que en verdad no se cómo era pero era una sonrisa y me dormir con tini en mis brazos.

61.
De nuevo aquellas ganas de ir al baño me abrumaron enserio debo dejar de tomar tanta agua, mire la pantalla del celular las 3:37 de la mañana, no lose pero desde que vi aquella película el exorcismo de Emily Rose despertarme a estas horas me da un terror, en serio mi madre tiene razón con eso de las películas, pero no puedo con ello tengo que ir no quiero que mi vejiga se dañe y cuando este anciana tenga que usar pañal demonios a veces es demás toda la imaginación que puedo llegar a poseer aunque no me quejo, casi corriendo fui al baño el cual estaba ocupado aquellos ruidos si no fuera porque sé que estoy a kilómetros de casa diría que es papa, pero al escuchar esa voz tambores por favor. Trtrtaratsrta “Niall Horan” señoras y señores, eso pasa cuando comes demasiado y tienes el metabolismo de este chico, no en realidad no se tal vez algo de toda aquella montaña de comida que ingirió de hizo daño.
—Niall ¿estás bien?—pregunte, pero porque lo hice de tan solo escuchar cielos sé que él no está bien bueno en parte si purifica su organismo pero Alex mejor ya cállate, haber pensemos en otra cosa…
— Si solo… estoy un poco ocupado—dijo desde adentro.
—oh si… eso ya lo sé tú tranquilo puedo esperar—en verdad no puedo mi vejiga estallara, haber algo en que pensar ya se a lugares que quiera ir, esta parís el lugar del amor siempre he querido viajar haya, o también las cataratas del Niágara demonios no quita esa imagen de tu mente ahora ya, hay ya me duele la vejiga.
—Niall sin presiones pero demonios ¿cuánto te falta?—ya hacia fuerza en la piernas apretando la entre pierna diablos, diablos, por eso siempre he dicho que cuando yo tenga casa al menos tendrá dos baños mínimo, los minutos pasaron y el chico no salía, tumbada en el suelo haciendo fuerzas, demonios durare toda la noche con un dolor interminable, de pronto la puerta se abrió dejando Salir a un Niall junto con un aroma que ni les cuenta.
—demonios ¿Qué comiste?—me lleve una mano a la nariz apretando las fosas nasales y con la otra ahuyentando ese olor.
—comida bastante comida, espera solo un poco—rio—antes de entrar, buenas noches—bostezo y fue hasta la habitación de los chicos, esperar enserio estoy esperando hace bastante tiempo como para esperar otro microsegundo más, me adentre ferozmente al baño y sin respirar ya saben.
Salí de él tratando de recobrar todo aquel aire que mis pulmones necesitaban, el sueño se había ido, si soy tipo sonámbulo despierto me agrada más estar caminando por la casa en la noche que de día tal vez sea un iniciado vampiro azul, cielos el libro de atrapada en verdad que no me deja, aunque no tengo ganas de ese así que una buena porción de las gloriosas palabras de J.K.Rowling me animen un poco, saque el libro “Harry Potter y el príncipe mestizo” sabrán que estas mágicas palabras fueron mi infancia completa, al igual que las películas, me dirán completamente loca pero siempre en vacaciones me sentaba aun lado de la puerta esperando ver aquella carta de Hogwarts.
Tome asiento en uno de los sillones pero antes una taza de café encendí la linterna y a leer, en este momento el que Emily Rose aparecía hablando de 7 maneras diferentes me daba igual.
Las horas pasaron y yo seguía leyendo y leyendo hasta que el sueño me gano. Caminando torpemente llegue a la habitación y me arroje a la cama dejando el libro en la misma silla donde reposaba la toalla con la que me seque, tomando a copito en mis brazos, pero antes de todo eso ya me había dado cuenta que estaba amaneciendo ¿Quién en su sano juicio dándose cuenta de que puede apreciar el amanecer lo deja para irse a dormir? Bueno… yo por poco pero de todas maneras mis instintos me ganaron y Salí de casa para poder verlo con algo de dificultad por culpa de los arboles hacia algo de frio ¿Cómo no hacerlo? Rodeada de grandes árboles de diferentes tipos a las 5:48 de la mañana.
Ya recostada en la cómoda cama y tini en brazos dormida plácidamente me encontraba, al parecer dormí varias horas por que al despertar note a todos mirándome detenidamente tenía varios mechones de cabello en la cara, con una sonrisa entre bostezo me levante y los mire.
— ¿Qué?—fue lo que dije y todos rieron.
—Les dije que no había muerto—concluyo Scarlet—puedes seguir durmiendo—sonrió.
—Que no… nada de eso, hay que aprovechar el día—dijo Danielle.
Tenía razón pero lo único que quería yo era seguir leyendo con pereza tome el libro de la silla y me dirigí al baño, cepille a mis dientes, lave mi cara y me ate el cabello en una coleta, fui a la cocina por otra taza de café, sentándome a un lado de la ventana dejando reposar la taza en el borde al igual que libro aprecie el día tan solo un momento tome el libro en mi manos y a comenzar a leer, aunque ya lo he leído un millón de veces no me importa cuando un libro me gusta demasiado lo leo tantas veces que ya he perdido la cuenta, aunque esa sensación que siempre tengo esperando que el final sea distinto que Dombledore no muera, siempre me ha pasado y cada vez que llego a esa parte lloro. Pero antes de seguir leyendo es mejor que me vaya a cambiar si no se me olvidara.

62.
Los chicos afuera jugando y yo acá leyendo miraba el reloj 4:00 de la tarde tan rápido pasa el tiempo cielos, el estómago me rugía pedí a Dios que hubiera fruta y si había naranjas tome dos y un cuchillo, sentándome en el mismo sillón y empezando a leer nuevamente. A veces mi rareza llega a un extremo demasiado inmaduro, lo digo porque a veces mi forma de pensar es demasiado distinta a la demás, aunque dice mi madre que soy muy madura para mi edad. Me parece extraño porque yo no me siento así, mi imaginación se va a los extremos de locura y la verdad me ha ayudado bastante como cuando un profesor en mi anterior escuela no me agradaba siempre me lo imaginaba como un ogro estilo shrek todo amargado, verde y gordo, dientes chuecos y amarillos.
—Alex—gritaron, lo cual me hiso exaltarme—no hemos venido hasta acá solo para que te la pases leyendo libros todo el tiempo deja eso hay y vamos a divertirnos como la situación lo demanda—Eleanor tomo mi mano y Perrie la otra.
—Pero… si la situación demanda que me quede acá leyendo—sonreí, ellas negaron al mismo tiempo eso me dio algo de escalofríos. Arrastrándome hasta afuera, los chicos tenían una cámara de video en mano y Louis llevaba una mochila en la espalda, no se para que en realidad, pero… después me explicaron absolutamente todo, las chicas querían ir a indagar por el bosque, pero Niall no decidió quedarse dijo que no se sentía del todo bien como para ir a caminar le dolía el estómago. Era de esperarse con pereza acepte la invitación y tras horas de pasear por el bosque con los chicos nos detuvimos al ver otra cabaña, se oyeron gritos la verdad todos estábamos asustados ya que también fue algo así como un disparo, pero mi maldita curiosidad gano, quería saber que era aunque los demás se negaban rotundamente a que fuera, Harry me sostenía del brazo demasiado fuerte, pero logre soltarme al caminar lento y cuidadosamente llegue hasta el lugar proveniente de los ruidos esto era estúpido yo me imaginaba un charco de sangre con un cuerpo a lado y eran un par niños jugando con unos fuegos artificiales aunque su madre se los quito y los regaño, no me sorprende mi madre hubiese hecho lo mismo, regrese hasta donde estaban los demás reía a carcajadas me miraron confundidos.
—sí que ven demasiadas películas de terror es tan solo una familia, y los niños están jugando con unos fuegos artificiales exagerados, espero hayan grabado toda la escena—reí, si… bueno yo también exagere pero vamos, los gritos más ese ruido no son muy buena señal, todos soltaron un suspiro aliviado Harry camino hacia paso su brazo por mis hombros y beso mi frente.
—Ni loca te vas de nuevo sola—dijo asentí, era extraño esta preocupación, al regresar otro grito se escuchó un grito de hombre versión chica ya sabrán Niall gritando tal vez una pandilla de ardillas le quiso quitar sus nueces, pero al entrar nos percatamos al rubio con una laptop en las piernas y su cara horrorizada.
—Horan pero… ¿Qué haces?—dijo Perrie quien se aproximó a el— ¿Qué demonios estás viendo?—achico los ojos y sin previo aviso soltó un grito junto con Niall— idiota deja eso no podrás dormir—le pego en la cabeza y se alejó a la cocina, mi curiosidad de nuevo apareció y fui a sentarme junto con él.
—No se supone que hemos venido acá para dejar todo esto de lado—me refería a la tecnología pero bueno… somos adolescentes que puedo decir.
—Hay amigo Slenderman por favor—dijo Zayn, quien estaba tras de él recargando sus antebrazos en el respaldo del sillón, Niall hizo la cabeza para atrás y sonrió.
— ¿Qué? Es divertido—rio.
—Si es divertido pero solo para sacarle un buen susto a alguien—dijo Harry—ya dame eso yo si quiero dormir y de seguro no podre por tu culpa—cerro la computadora.
—aguafiestas, saben que sería grandioso vivir una experiencia terrorífica estas dos semanas, habría algo entretenido—dijo el rubio.
—Mejor ya cállate—le pegue en el hombro—no sé porque juegas eso yo no pude soportar más de 10 minutos en el juego—reí—ese hombre sin rostro demonios me lleve un gran susto—suspire.
—ya preciosa solo es un videojuego—sonrió Harry, los chicos trajeron algo de comer “chatarra” como era de esperarse pero yo con una manzana y una pera en mano, no volvería a comer comida chatarra tan solo chocolate y helado tan solo eso. Mire el reloj ya media noche, ya estaba bostezando la caminata hizo efecto temprano en mí, por cierto una duda aún tenía sobre Zayn ¿Qué demonios paso con su empleo?
—Zayn ¿Cuánto tiempo te dio Richard?—le pregunte, él sonrió.
—sí que andabas en otro mundo—rio—yo ya no trabajo e juntado el dinero Alex, te lo conté hace 4 días—lo mire confundida y después asentí de la misma manera, las chicas hablaban en la cocina, Cloe en el baño duchándose y los chicos con la computadora en mano al parecer Niall los convenció de seguir jugando, todos soltaron un grito.
—Mierda—exclamo logan—déjame jugar, Niall muévete—empujo al rubio a un lado y le quito la laptop poniéndosela en las piernas.
—chicas no sean aguafiestas—dijo Matt—vengan y tu Alex pon tu lindo trasero en el suelo hay que contar historias de terror—en ese momento tanto Wendy como Harry lo miraron de una manera aterradora, si lo matarían con la mirada, Logan tenía la cámara en mano ¿enserio? Hasta parecía que haría un documental de todas las vacaciones, extrañada me senté a lado de Harry, recargando mi cabeza en su hombro mientras él me abrazaba con uno de sus brazos por la cintura, Cloe ya no volvió a la sala con nosotros de seguro se encerró en la habitación, después de varias historias de terror Niall decidió contarnos la leyenda urbana del tan famoso hombre sin rostro y traje conocido como “Slenderman” este solo habitaba en sitios boscosos, escondido a lo lejos entre ramas y árboles, acechando a su víctima, siempre en la oscuridad, mirando por la ventanas según es de origen alemán no está seguro sus grandes brazos largos que hipnotizan a las personas y sus poderes que juegan y torturan las mentes de las personas, Louis se había ido hace ya bastante rato y Eleanor ya se mostraba ansiosa, de pronto las luces se apagaron haciendo que las chicas gritaran fuertemente, yo tan solo arrugue la camisa de Harry, de pronto un ruido llevo nuestra atención a las ventanas, mientras Eleanor gritaba “Louis regresa” una y otra vez parecía grabadora humana. Zayn mostrándose como el más valiente soltando las manos de Perrie se aproximó a la ventana y ahí fue cuando una persona sin rostro piel blanca de traje apareció todos gritamos y Zayn cayó al piso del susto, Niall estallo en carcajadas y aquella persona igual, caminando hasta la puerta se quitó aquella tela blanca dando el rostro de nuestro gran y amado Louis.
—Idiota—dijo Eleanor quien furiosa se fue a la habitación.
—Pero bebe—dijo Louis que aún no podía contener la risa caminando tras de ella.
—Horan eres hombre muerto—Liam salió corriendo tras de él, ya que el rubio al ver todas las mirabas en el salió huyendo.

63.
La noche paso lenta, los chicos explicaron s u broma una y otra vez orgullosos de esta, aunque cada uno recibió su castigo Eleanor le había declarado la ley de hielo a Louis y Niall bueno Niall… liam le había echado una cubeta de agua encima lo dejo afuera de la cabaña sin alguna toalla o al menos algo con que secarse media hora calcule podría decir y el chico estaba afuera temblando, me percate después de un buen rato de eso así que Salí a ayudarle los demás parecían estar en sus asuntos y liam al verlo su cara se transformó en un gesto de sorpresa y burla “Se me había olvidado que estabas afuera” paso su mano entre sus cabellos un tanto avergonzado, fue a la habitación por una toalla y arropo el chico abrazándolo y dándole calor, los demás solo burla les echaron, las chicas los miraban enternecidamente, mientras yo seguía empeñada en uno de los libros, les dije que leía rápido, el libro de “atrapada” lo he terminado y ya voy a la mitad de “Harry potter y el príncipe mestizo”, solo traía tres libros para leer no creí que estos los terminaría tan rápido, además que uno Cloe lo quemo. Los bostezos de los chicos se dieron a notar ya se encontraban en pijamas pero querían noches de desvelo para eso habían venido acá, si Louis dijo que le vino para “Librarse de las reglas de la tía Sara” si bueno no es mi tía pero la de el sí, el esmoquin seguía en uno de los sofás era extraño que Jonathan tuviera un esmoquin aquí en una cabaña en medio de la nada.
— ¿no puedes dormir?—dijo aquella voz tan conocida para mis oídos, Harry me susurro aquella pregunta al oído provocando que mi piel se erizara por la sensación de su aliento chocar en mi mejilla, negué y no mentía no podía dormir me sentía cansada pero al parecer mis ojos no lo estaban, cerré el libro pero no sin antes ponerle un separador en la página en que me había quedado.
—no, en realidad no puedo—suspire—me agrada la noche más que el día tiene algo como decirlo pacifico con ello, sabes por eso creo que los asesinos solo atacan a sus víctimas durante la noche bueno la mayoría, el silencio y la oscuridad son muy buenos amigos en esas situaciones—a veces hasta yo me sorprendía por el tipo de cosas que mi cerebro y boca podían articular, podía ser a veces tan fría en los temas que… como he dicho me sorprendía de ello nunca me imaginé que podía ser tan dura, fría, con eso.
—eres bastante… extraña pero en el buen sentido—sonrió, mientras posaba una de sus manos en mi mejilla y guiaba mis labios hasta su boca, un sabor a naranja pude presenciar, me aleje poniendo una mano en su pecho y soltando un suspiro frustrado.
Esto no estaba bien Harry y yo tan solo éramos amigos y no me agradaba tanta libertad que disponía en mí, subí mis piernas al sofá tallándome un poco los ojos y retomando mi lectura, su rostro aún tenía el gesto de confusión, me siento extraña rara por suerte Zayn no ha dicho nada sobre el asunto de Harry, sabe que aún sigo un poco mal por Max sé que Harry no es malo solo que de alguna manera me incomoda lo que hace, jamás en la vida había tenido o vivido algo así y es sumamente extraño ¿se besarían con chicos que no son sus parejas? No es que lo juzgue pero llevo muy poco de conocerlo es lindo pero… no estoy muy cómoda con la situación, siempre he tenido en cuenta que jamás conoces a una persona del todo aunque la haigas conocido, vivido con ella durante toda tu vida siempre tendrán secretos, sentimientos y pensamientos que a excepción del dueño de ellas nadie más los conoce, y ahora… estoy de nuevo con una disputa mental, tal vez Harry no tenga malas intenciones, tal vez si me quiera como lo ha dicho pero vamos salió con Cloe que tal si esta es una broma pesada por estos dos aunque no tengo ninguna prueba o algo por lo que yo opte que él está haciendo esto, de Cloe claro que lo esperaría y tal vez Harry este enamorado ciegamente de ella y haga lo que esta diga con tan solo chasquear los dedos y hay esta mi inseguridad de nuevo otra vez me abruma la mente, otra vez me siento sola, otra vez la depresión trata de volver y tan solo fueron pensamientos que mi cerebro creo y no hechos reales.
— ¿paso algo?—pregunto—¿tan mal beso?—dijo esta vez, lo mire de reojo y su cara en verdad mostraba ansiedad y preocupación—Alex dime—suspire resignada y me gire a verlo.
—No tengo ánimos de hablar —me encogí de hombros.
El tan solo me miraba desilusionado ya que a parte esas 5 palabras no dije ni una más, él se puso de pie y se fue, me sentía algo mal por el hecho de que lo juzgo sin saber pero siempre he tenido esa inseguridad en ese aspecto, nunca pensé en tener novio o casarme ya se es raro para una chica siempre fue de que cuando yo estuviese grande trabajaría no quería tener pareja tendría hijos los adoptaría claro, siempre he querido; me da una nostalgia el ver a aquellos pequeños sin alguien que los ayude o les de cariño, y ahora llega este chico que hace que mi cabeza de vueltas a 100 kilómetros por hora, definitivamente el noviazgo en adolescentes no es bueno las hormonas no ayudan mucho, en verdad somos demasiado impulsivos, debería dejar de pensar tanto o mi cabeza explora o mi locura se incrementara y no quiero volver al odioso medicamento eran como calmantes nerviosos. El sueño jamás llego sé que parecería un zombie en la mañana me dirán loca, maniática, tonta, pero durante la noche tome una linterna, un suéter de rayas grises con azul y Salí al bosque no sé qué paso por mi cabeza de salir y estar sola, a veces me llegaban esas rachas raras de querer estar completamente sola sin que nadie me frustrara o presionara, silencio y paz. En verdad estoy loca ahora hablo sola con mi mente y conciencia. Hacia algo de frio pero no me importaba camine un buen rato en círculos, no quería perderme en la nada y encontrarme con un asesino con una hacha en su mano y que me partiera en pedacitos.

64.
Los rayos del sol eran relativamente muy fuertes azotaban en mi cara provocando cierto ardor en ella, no como los cálidos rayos que recibía en mi habitación en la casa de Tía Helen estos quemaban enserio el ardor me hizo levantarme y me percaté de que no estaba en una cama, si… no me di cuenta de eso antes porque a veces tenía la costumbre de dormir en el suelo tengo una cierto manía con el piso ya que o me llevo recostada en este o estoy sentada aunque tenga una silla por un lado desocupada y lista para que me sea ocupada pero nunca lo hago, estaba llena de tierra y algo de loco había pequeños charcos por el alrededor, mi cabello estaba húmedo sinceramente no sé qué demonios me paso, a lo mejor soy sonámbula y me bañe en los charquitos de acuerdo… esa es un idea trivial, entonces y la segunda no… esa opción será descartada el que algún animal haya hechos sus necesidades en mi cabello no… Alex mejor deja de analizar que me dará nauseas, tape mi boca, camine un poco pero esta vez había una charco más grande y adivinen con que me tope una familia de ranas, así es creo que soy la chica más extraña de la tierra bueno de mi edad por que de seguro las niñas más pequeñas jugaban con estos animales creo que mi mente quedo en esa edad estancada y la verdad es que no quiero salir de ahí me siento bien, tome una de ellas en mis manos.
—hola señora rana ¿Cómo ha amanecido?—le dije al ponerla enfrente de mi cara—parece que estas igual de sola que yo en estos instantes ¿cierto?—sonreí, el animal solo pataleaba—te adoptare y te pondré… mm… señora Nitches ¿o eres macho?—dije viendo las partes de su cuerpo, en dirección a la cloaca—creo que si eres hembra—reí—estoy demente en verdad que lo estoy—me dije a mi misma tome la rana en mis manos.
Camine hasta la cabaña tarde bastante tiempo ya que por minutos camine en círculos-de nuevo- hasta que escuche los gritos desesperados de Wendy, si su voz a veces era algo chillona podría decir que un poco más que la de Cloe pero no puedo hacer nada así es su voz a menos que le mande a cirugía ¿se podrá hacer eso? La verdad es que no se y de paso también llevo a Cloe tengo que investigar, aunque nunca he escuchado sobre ellos ¿se podrá?, ven ahora mi preocupación es si existen cirugía para la voz.
—Aquí estoy—grite al salir entre los arboles con la rana en mis manos.
— ¿Qué demonios es eso?—chillo la rubia con un gesto de asco—es una rana demonios Lerda eres repugnante—volteo a ver a Harry y suspiro con pesadez—aún sigo sin comprender como dices que eso—apunto hacia mi persona—te gusta ¿en serio? Es la persona más patética que he visto en mi vida, tu por dios eres Harry Styles uno de los chicos más populares y quieres salir con ella por dios el día que recapacites aun te esperare sé que algún día lo harás y no me dejaras por alguien como ella, mírala por dios como he dicho la persona más tonta, patética, idiota e infantil que he conocido en la vida—me miro con desprecio, a pasos largos y con un portazo entro a la cabaña, ahí fue cuando capte todo lo que había dicho mi cerebro lo procesaba me quede estática pensando ¿en verdad soy patética? Me mire ¿repugnante? ¿Por qué lo soy? Hago lo mismo que ella en todo los sentidos claro descartando su frialdad, arrogancia, su forma egocéntrica y todas aquellas cosas que conforman a Cloe Thomson si… mire a Scarlet la cual me observaba con atención y algo de pena, entendía el por qué como dije se suponía que este viaje era para que yo lograra sentirme mejor pero Cloe se empeñaba a que eso no pasara en cada oportunidad que tenía hacia que me topara con el suelo pero no de forma leve si no estampándome en este.
—lamento la escena señora Nitches, lamento que haigas escuchado esa voz tan chillona ¿no te has quedado sorda verdad?—esta estaba inerte, Wendy se acercó a mi sonriendo de una manera maternal y me quito al animal de las manos, por unos minutos se alejó y volvió.
—no creo que sea buena idea que tengas esa cosa dentro ¿no es venenosa o sí?—dijo alzando una ceja y la verdad es que ni siquiera lo sabía, solo tengo entendido que las ranas de colores llamativos y pequeñas son venenosas, saben tengo un problema cuando no se algo me siento idiota y eso me obliga a leer sin parar enciclopedias, si… creo que por eso soy tan buena en la escuela, pero cuando un profesor me pregunta algo soy un mimo claro si solo señas hago.
—La verdad es que no lo sé—por poco me pasaba una de mis manos por la frente pero Wendy no me dejo.
—mejor hay que lavarnos antes de que pase algo, aunque si fuera venenosa no serviría mucho pero no creo que lo sea—rio nerviosa, y en efectivo al parecer no era venenosa o al menos no derramo sustancias en nosotras, me di una larga ducha, Salí del baño lista cambiada pero saben que quería en estos momentos comer y dormir si… soy una perezosa de lo peor creo que fui un oso perezoso en mi anterior vida, si solo me la llevo sentada, leyendo, y durmiendo por suerte he comido es urgente que me haga el habito de al menos salir a caminar según las teorías de mi querida madre el caminar para la mujer es mucho mejor que otro deporte claro haciendo movimientos para ejercitar la partes de arriba de la cintura.
—Muero de hambre—camine hacia la cocina y la flamante rubia se encontraba muy bien vestida como para este ambiente maquillada, con un vestido muy acentuado a su figura y ni digamos de los flamantes tacones que llevaba puestos.
—demonios solo espero que no salgas con que eres lesbiana—su cara hizo un gesto de asco—me miras mucho, tal vez solo es enviada—sonrió complaciente a su segunda opción, suspire frustrada, ahora me dijo lesbiana, cielos… más vale que me mantenga al margen de la situación, o esta chica acabara conmigo en menos de lo que pensé, saque una manzana y un jugo de durazno, más un paquete de galletas, me senté debajo de la barrita a comer, tan solo el ruido de la envoltura se escuchaba, nadie estaba en la sala, y en realidad no sé dónde se encontraban, estaba bastante entretenida comiendo.
— ¡Alex!—escuche que me gritaron, me levante de golpe estrellándome con la barra.
— ¡Demonios!—exclame, toque mi cabeza y tan solo había sido el golpe si… no me corte ni nada gracias al cielo. — ¿¡Que pasa!?—conteste, tome una bolsa de guisantes que había en el refrigerador y me puse en la cabeza, no encontré otra cosa, camine hasta la habitación y al parecer todos estaban bien vestidas—y… ¿ahora? ¿de qué me perdí?—hice un gesto arrugando mi nariz y juntando mis cejas confusión total, las chicas no me hacían caso así que no soy demasiado paciente cuando no me ponen atención y quiero saber algo, lleve dos dedos a mi boca y solté un silbido.
—no les digo eres una maldita salvaje—cielos ¿enserio? Ni siquiera el insulto viene al caso, mejor me callo.
—¿Qué pasa?—volví a pregunta, Eleanor tomo de mi muñeca me sentó en la silla a lado del tocador, mientras ella buscaba algo en su maleta si maleta al parecer fui la única chica que trajo tan solo una mochila de ropa… si mi pobre mochila parecía explotar creo que si debí traer una maleta, me paso unos jenas, una blusa y una chaqueta ¿de dónde saco todo esto?, todas miraron mi cara de confusión y Wendy le pego un codazo a Scarlet.
—no le dijiste ¿cierto?—se miraron entre sí.
— ¿decirme que?—pregunte.
—hay Scarlet—Wendy negó con la cabeza—que saldríamos de fiesta—sonrió—bueno… Caleb un chico de la escuela ha organizado la última fiesta del año—suspiro—se supone que Scarlet debía decirte para que trajeras algo de ropa extra—suspiro.
—pero como no lo hizo usa lo que te di, así que mueve tu lindo trasero al baño y vístete que nos vamos en 2 horas—dijo Eleanor, reí por tal comentario, solo me cambiare diablos a veces pienso que si soy de otro planeta tal vez venga de marte y aun no lo sepa, me deshice de mi ropa y me vestí, pobre señora Nitches que habrá sido de ella, me alegra no haberme encariñado tanto de ella, Salí del baño acomodándome la chaqueta y al entrar a la habitación un magnitud de manos se posaron en mis brazos jalándome para sentarme en la silla, Danielle saco un polvo, mientras que Eleanor un rímel, Wendy sombras y Scarlet lápiz labial, eso me parecía tan raro y tenebroso al mismo tiempo, pasaron los minutos y solo sentía cada uno de los objetos hacer contacto con mi piel, al final las cuatro suspiraron con satisfacción.