Conectarse
Últimos temas
miembros del staff
Beta readers
|
|
|
|
Equipo de Baneo
|
|
Equipo de Ayuda
|
|
Equipo de Limpieza
|
|
|
|
Equipo de Eventos
|
|
|
Equipo de Tutoriales
|
|
Equipo de Diseño
|
|
créditos.
Skin hecho por Hardrock de Captain Knows Best. Personalización del skin por Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
La Chef [Harry Styles y TN__ Lindhagen] TERMINADA.
O W N :: Archivos :: Novelas Terminadas
Página 2 de 26. • Comparte
Página 2 de 26. • 1, 2, 3 ... 14 ... 26
Re: La Chef [Harry Styles y TN__ Lindhagen] TERMINADA.
Capitulo 1: Parte 2.
A la mañana siguiente me levanté a las siete y media, cambié el pijama de pantalón largo y camiseta grande y gastada, por un vestido casual sin mangas por debajo de las rodillas, coral con unas alpargatas blancas a juego, el vestido iba bien con el color de mi piel. No sabía si lo dejaba así o me colocaba un cinturón de color arena, quería lucir amable, me paré frente al espejo de cuerpo completo que poseía en la habitación. Mi cabello castaño oscuro, lacio, hasta las caderas, caía en cascada por mi cara, lo hice para atrás, para que mis ojos color café se distinguieran de entre toda esa masa de cabello, no era tan alta, 1.65 de altura, decidí que, para marcar mi cintura me pondría el cinturón.
Bajé a la cocina y puse música, mi viejo disco remasterizado de The Beatles, One. Las canciones pasaban y me dejaban más enérgica con las voces de Paul, John, George y Ringo, siempre cocinaba de esta forma, bailaba mientras se calentaba en el microondas en agua para el café que tenía planeado hacer para el tal Harry y para mí, mis sándwiches especiales y un poco de galletas caseras. Preparé jugo de naranja, pero en realidad tenía un inmenso antojo de jugo de mango. Cuando lo dejé todo listo, en una mesita redonda acompañada por dos lindos banquitos altos, daban la ocho y veintiocho, un poco nerviosa, por mi primer entrevistado, tomé asiento y como a los treinta segundos, tocaron el timbre.
Fui tranquilamente a abrir la puerta, vi a un hombre de mi edad, o tal vez un poco mayor parado frente al umbral. Llevaba una camiseta blanca de mangas largas remangada, había que admitir que se mandaba un físico deseable, pude notar una cadenita de plata con una medalla de cuchillo, me recordó a Peter Pan. Pantalones bajos, si quería trabajar para mí, debería aprender a utilizar cinturón. Su rostro, por Dios, obra de los mismísimos ángeles, sólo eso podía ser, tenía un pequeño rastro del acné juvenil. Sus ojos verdes, no eran los típicos, atrapantes, parecían una tela de araña diseñada exclusivamente para mí. Sus rizos castaños desordenados y aparentemente húmedos. Suspiré. Era tan hermoso, que me iba a hacer llorar. NO, no TN__, éste chico vino por el trabajo, me dije.
-¿Harry?-pregunté, después de haber babeado mentalmente-.
-Efectivamente, hola-saludó, tenía la sonrisa de niño pequeño, con hoyuelos, de inmediato, le hice pasar al ordenado local-vaya, es un local muy pintoresco, vintage, así le dicen, ¿Cierto?-habló mientras pasaba frente a mí, no tiene trasero, pensé, ¿Qué hago viendo el trasero de un hombre? Lindhagen no hace eso-.
-Sí, está decorado de esa manera, porque me hubiera encantado tener veintitrés durante esa época-expliqué, era cierto, en esa época, en la época de The Beatles, o en los años cuarenta-.
-Alma vieja, me recuerdas a una canción-musitó, hablaba pausadamente, su voz era ronca y sonaba mejor que por teléfono, más grave, se fijaba en cada detalle del lugar, nunca me habían dicho alma vieja-.
-¿Qué canción?-pregunté, interesada, me volteó a ver, me miró directo a los ojos, le sostuve la mirada tratando de que no me fallaran las piernas y de parecer indiferente, pero me estaba alterando-.
-Half the world away, de Oasis-dijo, me evaluó a mí después de haber evaluado el local, genial, si sabía me vestía diferente, Te arrojará al Támesis, ni siquiera yo me daré cuenta, si es sexy es psicópata, la voz de James retumbó en mi cabeza, contuve una gran carcajada-.
-Oh, claro, claro, My body feels young but my mind is very old-cité, conocía la canción, la escuchaba de pequeña-supongo que… ¿gracias?-.
-Exacto, así debes sentirte-dijo, me quedé en silencio, ¿me dijo vieja? No sé, me encogí de hombros al pensar eso, lo guié hasta la mesita donde estaba la comida-.
-Bien, Harry, es momento de hablar del empleo-le ofrecí asiento, lo tomó y apoyo los codos en la mesa-.
-Claro, ¿Cuáles serían mis funciones como ayudante? Me refiero a que se hacer pan…uh, además puedo seguir cualquier instrucción que me des, tú solo ponme una receta enfrente y la hago sin problemas-bien, gran paso, sabía hacer pan-.
-No te preocupes por eso, digo, yo cocino, tú atiendes, yo atiendo, tú cocinas, ocurre que necesito a alguien que me ayude, esto recién comienza-le expliqué, bebí un poco del café de vainilla, me miró pensativo-oh, respecto a la paga, ya sabes el salario mínimo, irá subiendo, claro conforme al éxito que tengamos-creo que soné amigable-.
-¿Esto lo has hecho tú?-señaló con el índice lo que estaba encima de la mesa, hablaba tan lento y pausado, parecía aburrido, asentí-.
-Sí, es que sabes, soy chef y estoy cumpliendo mi sueño y todo eso-le sonreí mientras servía su taza de café-.
-Oh, ¿en serio? Pues creo que te ayudaré con eso, promocionaré tu tienda-aseguró, sonreí-.
-Es muy amable de tu parte, pero dejemos de hablar de eso, es como si se me cerrara el estómago de la emoción, en una semana abrimos-le comenté-.
-Por supuesto, jefa, se ve realmente delicioso-elogió, le sonreí, era un tipo agradable, no un psicópata, como me había dicho Jamie-.
-Por cierto, llámame TN__, me incomoda, me siento vieja y tengo veintitrés-le dije, asintió sonriendo, suspiro mental-.
-¿No eres inglesa cierto?-preguntó, asentí-.
-Vivía con mis padres en Brasil, hasta los quince años, vinimos a Europa después de que papá murió, él era alemán y mi mamá es paraguaya, ya sabes, el país al lado de Brasil, pero por cuestiones de trabajo de ambos se mudaron a la tierra del carnaval, se conocieron y gracias a eso he me aquí-mi lengua estaba floja, detente TN__, demasiada información-, manejo cinco idiomas, al venir, fuimos a Alemania con mis abuelos paternos, pasó el tiempo y fui a París a estudiar gastronomía y te estoy dando demasiada información-suspiré, me miraba atento y con sus grandes manos, sostenía una galleta con chispas de chocolate, por Dios qué largos eran sus dedos-.
-No, en realidad me interesa-dijo, sonreí, negué con la cabeza y me llevé a los labios el café de vainilla, mmmm, me encanta este café-.
-Más bien háblame de ti, que hacías antes de venir a buscar empleo a mi tienda-pregunté, estaba interesada en qué hacía este muchacho de rizos hermosos-.
A la mañana siguiente me levanté a las siete y media, cambié el pijama de pantalón largo y camiseta grande y gastada, por un vestido casual sin mangas por debajo de las rodillas, coral con unas alpargatas blancas a juego, el vestido iba bien con el color de mi piel. No sabía si lo dejaba así o me colocaba un cinturón de color arena, quería lucir amable, me paré frente al espejo de cuerpo completo que poseía en la habitación. Mi cabello castaño oscuro, lacio, hasta las caderas, caía en cascada por mi cara, lo hice para atrás, para que mis ojos color café se distinguieran de entre toda esa masa de cabello, no era tan alta, 1.65 de altura, decidí que, para marcar mi cintura me pondría el cinturón.
Bajé a la cocina y puse música, mi viejo disco remasterizado de The Beatles, One. Las canciones pasaban y me dejaban más enérgica con las voces de Paul, John, George y Ringo, siempre cocinaba de esta forma, bailaba mientras se calentaba en el microondas en agua para el café que tenía planeado hacer para el tal Harry y para mí, mis sándwiches especiales y un poco de galletas caseras. Preparé jugo de naranja, pero en realidad tenía un inmenso antojo de jugo de mango. Cuando lo dejé todo listo, en una mesita redonda acompañada por dos lindos banquitos altos, daban la ocho y veintiocho, un poco nerviosa, por mi primer entrevistado, tomé asiento y como a los treinta segundos, tocaron el timbre.
Fui tranquilamente a abrir la puerta, vi a un hombre de mi edad, o tal vez un poco mayor parado frente al umbral. Llevaba una camiseta blanca de mangas largas remangada, había que admitir que se mandaba un físico deseable, pude notar una cadenita de plata con una medalla de cuchillo, me recordó a Peter Pan. Pantalones bajos, si quería trabajar para mí, debería aprender a utilizar cinturón. Su rostro, por Dios, obra de los mismísimos ángeles, sólo eso podía ser, tenía un pequeño rastro del acné juvenil. Sus ojos verdes, no eran los típicos, atrapantes, parecían una tela de araña diseñada exclusivamente para mí. Sus rizos castaños desordenados y aparentemente húmedos. Suspiré. Era tan hermoso, que me iba a hacer llorar. NO, no TN__, éste chico vino por el trabajo, me dije.
-¿Harry?-pregunté, después de haber babeado mentalmente-.
-Efectivamente, hola-saludó, tenía la sonrisa de niño pequeño, con hoyuelos, de inmediato, le hice pasar al ordenado local-vaya, es un local muy pintoresco, vintage, así le dicen, ¿Cierto?-habló mientras pasaba frente a mí, no tiene trasero, pensé, ¿Qué hago viendo el trasero de un hombre? Lindhagen no hace eso-.
-Sí, está decorado de esa manera, porque me hubiera encantado tener veintitrés durante esa época-expliqué, era cierto, en esa época, en la época de The Beatles, o en los años cuarenta-.
-Alma vieja, me recuerdas a una canción-musitó, hablaba pausadamente, su voz era ronca y sonaba mejor que por teléfono, más grave, se fijaba en cada detalle del lugar, nunca me habían dicho alma vieja-.
-¿Qué canción?-pregunté, interesada, me volteó a ver, me miró directo a los ojos, le sostuve la mirada tratando de que no me fallaran las piernas y de parecer indiferente, pero me estaba alterando-.
-Half the world away, de Oasis-dijo, me evaluó a mí después de haber evaluado el local, genial, si sabía me vestía diferente, Te arrojará al Támesis, ni siquiera yo me daré cuenta, si es sexy es psicópata, la voz de James retumbó en mi cabeza, contuve una gran carcajada-.
-Oh, claro, claro, My body feels young but my mind is very old-cité, conocía la canción, la escuchaba de pequeña-supongo que… ¿gracias?-.
-Exacto, así debes sentirte-dijo, me quedé en silencio, ¿me dijo vieja? No sé, me encogí de hombros al pensar eso, lo guié hasta la mesita donde estaba la comida-.
-Bien, Harry, es momento de hablar del empleo-le ofrecí asiento, lo tomó y apoyo los codos en la mesa-.
-Claro, ¿Cuáles serían mis funciones como ayudante? Me refiero a que se hacer pan…uh, además puedo seguir cualquier instrucción que me des, tú solo ponme una receta enfrente y la hago sin problemas-bien, gran paso, sabía hacer pan-.
-No te preocupes por eso, digo, yo cocino, tú atiendes, yo atiendo, tú cocinas, ocurre que necesito a alguien que me ayude, esto recién comienza-le expliqué, bebí un poco del café de vainilla, me miró pensativo-oh, respecto a la paga, ya sabes el salario mínimo, irá subiendo, claro conforme al éxito que tengamos-creo que soné amigable-.
-¿Esto lo has hecho tú?-señaló con el índice lo que estaba encima de la mesa, hablaba tan lento y pausado, parecía aburrido, asentí-.
-Sí, es que sabes, soy chef y estoy cumpliendo mi sueño y todo eso-le sonreí mientras servía su taza de café-.
-Oh, ¿en serio? Pues creo que te ayudaré con eso, promocionaré tu tienda-aseguró, sonreí-.
-Es muy amable de tu parte, pero dejemos de hablar de eso, es como si se me cerrara el estómago de la emoción, en una semana abrimos-le comenté-.
-Por supuesto, jefa, se ve realmente delicioso-elogió, le sonreí, era un tipo agradable, no un psicópata, como me había dicho Jamie-.
-Por cierto, llámame TN__, me incomoda, me siento vieja y tengo veintitrés-le dije, asintió sonriendo, suspiro mental-.
-¿No eres inglesa cierto?-preguntó, asentí-.
-Vivía con mis padres en Brasil, hasta los quince años, vinimos a Europa después de que papá murió, él era alemán y mi mamá es paraguaya, ya sabes, el país al lado de Brasil, pero por cuestiones de trabajo de ambos se mudaron a la tierra del carnaval, se conocieron y gracias a eso he me aquí-mi lengua estaba floja, detente TN__, demasiada información-, manejo cinco idiomas, al venir, fuimos a Alemania con mis abuelos paternos, pasó el tiempo y fui a París a estudiar gastronomía y te estoy dando demasiada información-suspiré, me miraba atento y con sus grandes manos, sostenía una galleta con chispas de chocolate, por Dios qué largos eran sus dedos-.
-No, en realidad me interesa-dijo, sonreí, negué con la cabeza y me llevé a los labios el café de vainilla, mmmm, me encanta este café-.
-Más bien háblame de ti, que hacías antes de venir a buscar empleo a mi tienda-pregunté, estaba interesada en qué hacía este muchacho de rizos hermosos-.
Última edición por Harry's Cupcake♥ el Vie 28 Dic 2012, 7:03 pm, editado 2 veces
hearmeroar
Re: La Chef [Harry Styles y TN__ Lindhagen] TERMINADA.
Narra Harry.
Mierda, acababa de preguntar que hacía, Tal vez debía decirle ‘’Oye, ¿no sabes quién soy? Pues bien, te explico, era integrante de una banda muy famosa pero nos separamos, Niall y yo fuimos olvidados y somos más pobres que unas ratas’’, tentador. No, mejor que no sepa de donde vengo, rápido Harry, de dónde vienes: Holmes Chapel; ¿Estudiaste? No, actor frustrado; Trabajaste en una pastelería antes de venir a Londres y por eso crees que eres el indicado para el trabajo. Perfecto. Pensé
-No hay mucho que decir, vengo de Holmes Chapel y soy un actor frustrado-traté de dar la mejor sonrisa, ella asintió y vi algo de reproche en su mirada, ¿por qué?-.
-Vaya, debes seguir tu sueño, yo seguí el mío y ahora mírame, voy a abrir una tienda-dijo y deshizo una galleta con sus finos dedos, debía admitir que lo que preparó era delicioso y el desayuno más decente y completo de los últimos meses-.
-¿Siempre quisiste alimentar a la gente?-pregunté, curioso,ella bebió su café, se le quedó una gota del mismo en la comisura de los labios, con su lengua la retiró, esa lengua podría hacer maravillas, concéntrate Harry, es tu jefa, quieres un trabajo-.
-La verdad es que sí-rió, música para mis oídos-quiero tener éxito en esto, porque me he esforzado bastante y me gusta hacer feliz a la gente, que mejor que alimentándola-se encogió de hombros, me miró con esos ojos marrones, orgullosa de sus palabras y me dedicó una sonrisa, enseñando sus perlas, ¿estoy experimentando atracción hacia mi futura jefa?-No has comido casi nada, ¿no te gustó? Necesito que me lo digas, así evalúo el menú-habló rápido, preocupada, negué instantaneamente, eso era manjar de los dioses-.
-No, no, claro que me gustó, estaba escuchándote, eso estodo-le dirigí una sonrisa, me devolvió el gesto y se levantó-.
-Bien, yo quiero algo más, voy a preparar fondue, se me antojó-se quedó parada frente a mí, pensativa, mientras tanto la evalué, sus torneadas piernas, sus finos brazos, su cintura diminuta, su lindo cabello, me encantó su cabello, brillante y castaño, simplemente hermoso, sus ojos, por más de que tratara de verlos comunes, no pude, tenían una pequeñísima aureola negra rodeando el iris, sus labios eran normales, pero hermosos de igual manera, lo mejor: estaba demasiado bien proporcionada, juraría que no heredó nada de su padre, más bien de su madre, muy latina-acompáñame a la cocina, trae tu taza y lo que quieras comer de ahí-me sacó de mis pensamientos, obedecí, me levanté, ella no estaba más frente a mí, la seguí por detrás del mostrador-.
-Tiene buen tamaño-dije al ver su jugoso trasero, me miró confundida-la…la cocina-asintió, uff, deja de pensar en voz alta, me reproché-.
-La verdad es que con tres personas aquí dentro parece un mercado, pero sí, tiene un buen tamaño, me gusta-sacó de la alacena una barra de chocolate para fundir, me apoyé a una de las mesadas que rodeaban la mesa de
madera que estaba en medio-.
-Ya veo, ¿cuál es el nombre? No vi ningún cartel-señalé, ella seguía buscando los materiales para el fondue-.
-El nombre es TB, son las siglas de varias cosas, pero lo dejo para que le pongan el nombre que quieran-explicó, probé uno de los sándwiches, realmente sabroso, ella estaba de espaldas derritiendo el chocolate, dejándome la maravillosa vista de sus caderas, cabello y trasero-.
-¿Siglas? ¿De qué?-sentí como si estuviera haciendo demasiadas preguntas, bueno, la mayoría de las veces, hacía mucho tiempo, a mi me hacían mil preguntas, me estaba descargando con ella-.
-The Bakery, The Beatles, Take a Breath, hasta ahora se me ocurrieron esas, tendrán que ver con lo que habrá aquí, buena música, para que la gente coma y se dé un respiro-cortaba las fresas y las ponía delicadamente en brochetas de metal, intercaló las fresas con bananas, yo seguía con el café, quería disfrutarlo-.
-Eres muy creativa-felicité, no había conocido a una chicaasí, ella tenía vida y tenía claro lo que quería-vas a tener mucho éxito, lo prometo, esto está increíble, y lo que estas preparando ahora, también se ve delicioso-volteó y me sonrió, probó el chocolate con una cuchara, se le cayó-.
-Mierda-se quejó, ese chocolate era un maldito hijo de puta, se resbalaba por su busto, con un dedo se quitó el chocolate, ya había manchado su vestido-esto duele y me gustaba el vestido-suspiró y fue al lavabo a mojar un paño y ponérselo en el pecho-.
Me quedé como idiota viendo lo rápido que se movía en la cocina. Era como Flash en una cocina, hermosa, sensual, latina, perfecta, con talento exagerado para cocinar y ser sexy a la vez. Puso música y yo seguía comiendo, preferí quedarme quieto en vez de ayudar, me sentí idiota, así que me ofrecería a lavar todo lo que usó, que era mucho, pero valía la pena, además ese sería mi trabajo, ayudarla, no desnudarla y hacerla mía en esa mesa, como quería en ese preciso momento hacer. Maldición que estaba buena. Preparó ocho brochetas en diez minutos, equivalentes a cinco canciones de The Beatles, el disco que estaba escuchando, fue muy gracioso como olvidó que estaba ahí. Hizo una pequeña coreografía para Love Me Do.
-Love, love me do, you know I love you, so ple e e ease, love me doo, tu ru rurururu-hizo un giro y un corazón con las manos-lo…lo siento, es que estabas muy callado... olvidé que estabas aquí-se excusó, al oír mi risa y voltear a verme-ya está por estar, me faltan unas frutas más y termino-agregó, ruborizada, de verdad olvidó que me tenía ahí-.
-No hay problema, es tu cocina, por cierto, yo lavo los trastes, comenzaré a ayudar desde hoy-dije, ella asintió, siguió cortando en julianas las bananas y tarareando-.
-Gracias, no sabes cuánto odio lavar trastes, lo hacía obligada y a regañadientes en la escuela de cocina-dijo, con una media sonrisa, que perfecta era, sincera y segura de sí misma-.
-Es raro, bueno a nadie le gusta lavar, pero siendo chef debes estar acostumbrada a lavar-al salir las palabras de mi boca quise golpearme o que la tierra me tragase, le estaba diciendo lavaplatos, dispárame ahora-.
-De hecho soy muy rara, solo quiero una vida tranquila, tener éxito en esto y ser feliz, no quiero lujos, dinero, fama, nada de eso, es muy complicado ese mundo para mí-dijo, si supieras lo complicado que es, un día lo tienes todo, al instante estás en el piso, TN__, mi jefa, en realidad era una persona increíble, totalmente distinta a las que me rodeaban, antiguamente-.
-Lo tienes muy definido, eso está bien, yo quisiera lo mismo…-suspiré, ella dejó sobre la mesa de la cocina el fondue, fue hasta el refrigerador y sacó un tuper que contenía duraznos en cubos, los colocó en un plato-.
-Depende de ti, de lo que quieras ser, y si algo te gusta, conseguirlo es lo que debes hacer, no importa ganar dinero, lo que te gusta lo haces porque te gusta, lo demás viene solo-dijo, era como Nietzsche, solo que hermosa y chef. La Chef-Ven, acércate, prueba el fondue, te veo flaco y no me gusta-frunció el ceño y rió-.
-Es mi contextura física, no te preocupes, si así van a ser mis días laborales de ahora en adelante, pues me verás más gordito en unos meses-provoqué una carcajada en ella, se sentía bien estar rodeado de felicidad después de tanta inmundicia, su risa fue contagiosa-.
-Pues serán mejores, créeme que improvisé el menú-le echó chocolate a una brocheta, se la llevó a la boca-come, me molesta comer sola-murmuró, concentrada en su manjar, obedecí, si Niall estuviera en mi lugar, se comería toda su despensa-.
Pasé toda la mañana hablando con ella, conociéndola más, colocando unos muebles según me indicaba, también aprendí dos recetas nuevas, como hacer brownies sin el preparado y decorar magdalenas, mi jefa, siendo menor, era mil veces más madura que yo, como hubiera deseado conocerla antes de todo, antes de la banda, era perfecta, responsable y sería mi amiga, no iba a intentar siquiera tener algo con ella, ni una sola noche de pasión. Bueno, en el caso de que ella me rogara follarla duro en la mesa de la cocina no podía negarme… No lo haría, muy a mi pesar, era demasiado correcta, no de ese tipo de mojigatas que al fin y al cabo lo quieren todo, ella destilaba pureza, emanaba paz, felicidad, vitalidad. No era una puta. Era muy linda, sexy e interesante.
-Bien, creo que eso es todo por hoy-limpiándose las manos con un trapo, asentí, me guió hacia la puerta de madera tallada de la salida-.
-Entonces, te veré el lunes a las nueve de la mañana como dijiste-estábamos ya en el umbral, ella adentro y yo afuera, uno frente al otro-.
-Ha sido un placer, Harry Swan-me tendió la mano en signo de despedida, llevé mis labios al dorso de su mano, la besé, ojalá fueran tus labios TN__-.
-Por el contrario, el placer ha sido todo mío, TN__ Lindhagen-me estaba comportando como un coqueto-.
Le había mentido sobre mi apellido, si no sabía quién demonios era yo y mi pasado, le caería mejor, no quería que pensara mal de mí y que se enterara de mis errores, los rumores que inventaron los paparazzi, y mi horrorosa caída. Fui a la estación de trenes y tomé el metro, me llevó a casa, miseria. Hacían seis meses Niall y yo seguíamos igual, viviendo en las zonas bajas de Londres, lo mejor era que hasta el momento nadie nos había reconocido, éramos Edward y James Horan, hermanos. Construimos una vida a base de mentiras para no ser localizados, nos convertiríamos en la comidilla farandulera de todo el bendito país si alguien sabía de nuestra situación. Ni Louis, ni Liam estaban interesados en ayudarnos, o al menos eso respondieron sus secretarias, ‘’el señor Tomlinson no dispone de tiempo para atenderle’’ o ‘’Lo lamento Harry, Liam está muy ocupado como para velar por tu estado financiero, ya suficiente hizo por ti en el pasado’’. Maldito Simon. ¿Cómo fue capaz de desampararme de ese modo? Viendo el lado positivo, había conocido a TN__, ella era tan buena persona, que no iba a juzgarme, y yo le mentí. Mientras más lo pensaba, más como rata me sentía. Para mi suerte, llegó el borracho número uno, Niall, regresó de sus clases particulares de guitarra.
Mierda, acababa de preguntar que hacía, Tal vez debía decirle ‘’Oye, ¿no sabes quién soy? Pues bien, te explico, era integrante de una banda muy famosa pero nos separamos, Niall y yo fuimos olvidados y somos más pobres que unas ratas’’, tentador. No, mejor que no sepa de donde vengo, rápido Harry, de dónde vienes: Holmes Chapel; ¿Estudiaste? No, actor frustrado; Trabajaste en una pastelería antes de venir a Londres y por eso crees que eres el indicado para el trabajo. Perfecto. Pensé
-No hay mucho que decir, vengo de Holmes Chapel y soy un actor frustrado-traté de dar la mejor sonrisa, ella asintió y vi algo de reproche en su mirada, ¿por qué?-.
-Vaya, debes seguir tu sueño, yo seguí el mío y ahora mírame, voy a abrir una tienda-dijo y deshizo una galleta con sus finos dedos, debía admitir que lo que preparó era delicioso y el desayuno más decente y completo de los últimos meses-.
-¿Siempre quisiste alimentar a la gente?-pregunté, curioso,ella bebió su café, se le quedó una gota del mismo en la comisura de los labios, con su lengua la retiró, esa lengua podría hacer maravillas, concéntrate Harry, es tu jefa, quieres un trabajo-.
-La verdad es que sí-rió, música para mis oídos-quiero tener éxito en esto, porque me he esforzado bastante y me gusta hacer feliz a la gente, que mejor que alimentándola-se encogió de hombros, me miró con esos ojos marrones, orgullosa de sus palabras y me dedicó una sonrisa, enseñando sus perlas, ¿estoy experimentando atracción hacia mi futura jefa?-No has comido casi nada, ¿no te gustó? Necesito que me lo digas, así evalúo el menú-habló rápido, preocupada, negué instantaneamente, eso era manjar de los dioses-.
-No, no, claro que me gustó, estaba escuchándote, eso estodo-le dirigí una sonrisa, me devolvió el gesto y se levantó-.
-Bien, yo quiero algo más, voy a preparar fondue, se me antojó-se quedó parada frente a mí, pensativa, mientras tanto la evalué, sus torneadas piernas, sus finos brazos, su cintura diminuta, su lindo cabello, me encantó su cabello, brillante y castaño, simplemente hermoso, sus ojos, por más de que tratara de verlos comunes, no pude, tenían una pequeñísima aureola negra rodeando el iris, sus labios eran normales, pero hermosos de igual manera, lo mejor: estaba demasiado bien proporcionada, juraría que no heredó nada de su padre, más bien de su madre, muy latina-acompáñame a la cocina, trae tu taza y lo que quieras comer de ahí-me sacó de mis pensamientos, obedecí, me levanté, ella no estaba más frente a mí, la seguí por detrás del mostrador-.
-Tiene buen tamaño-dije al ver su jugoso trasero, me miró confundida-la…la cocina-asintió, uff, deja de pensar en voz alta, me reproché-.
-La verdad es que con tres personas aquí dentro parece un mercado, pero sí, tiene un buen tamaño, me gusta-sacó de la alacena una barra de chocolate para fundir, me apoyé a una de las mesadas que rodeaban la mesa de
madera que estaba en medio-.
-Ya veo, ¿cuál es el nombre? No vi ningún cartel-señalé, ella seguía buscando los materiales para el fondue-.
-El nombre es TB, son las siglas de varias cosas, pero lo dejo para que le pongan el nombre que quieran-explicó, probé uno de los sándwiches, realmente sabroso, ella estaba de espaldas derritiendo el chocolate, dejándome la maravillosa vista de sus caderas, cabello y trasero-.
-¿Siglas? ¿De qué?-sentí como si estuviera haciendo demasiadas preguntas, bueno, la mayoría de las veces, hacía mucho tiempo, a mi me hacían mil preguntas, me estaba descargando con ella-.
-The Bakery, The Beatles, Take a Breath, hasta ahora se me ocurrieron esas, tendrán que ver con lo que habrá aquí, buena música, para que la gente coma y se dé un respiro-cortaba las fresas y las ponía delicadamente en brochetas de metal, intercaló las fresas con bananas, yo seguía con el café, quería disfrutarlo-.
-Eres muy creativa-felicité, no había conocido a una chicaasí, ella tenía vida y tenía claro lo que quería-vas a tener mucho éxito, lo prometo, esto está increíble, y lo que estas preparando ahora, también se ve delicioso-volteó y me sonrió, probó el chocolate con una cuchara, se le cayó-.
-Mierda-se quejó, ese chocolate era un maldito hijo de puta, se resbalaba por su busto, con un dedo se quitó el chocolate, ya había manchado su vestido-esto duele y me gustaba el vestido-suspiró y fue al lavabo a mojar un paño y ponérselo en el pecho-.
Me quedé como idiota viendo lo rápido que se movía en la cocina. Era como Flash en una cocina, hermosa, sensual, latina, perfecta, con talento exagerado para cocinar y ser sexy a la vez. Puso música y yo seguía comiendo, preferí quedarme quieto en vez de ayudar, me sentí idiota, así que me ofrecería a lavar todo lo que usó, que era mucho, pero valía la pena, además ese sería mi trabajo, ayudarla, no desnudarla y hacerla mía en esa mesa, como quería en ese preciso momento hacer. Maldición que estaba buena. Preparó ocho brochetas en diez minutos, equivalentes a cinco canciones de The Beatles, el disco que estaba escuchando, fue muy gracioso como olvidó que estaba ahí. Hizo una pequeña coreografía para Love Me Do.
-Love, love me do, you know I love you, so ple e e ease, love me doo, tu ru rurururu-hizo un giro y un corazón con las manos-lo…lo siento, es que estabas muy callado... olvidé que estabas aquí-se excusó, al oír mi risa y voltear a verme-ya está por estar, me faltan unas frutas más y termino-agregó, ruborizada, de verdad olvidó que me tenía ahí-.
-No hay problema, es tu cocina, por cierto, yo lavo los trastes, comenzaré a ayudar desde hoy-dije, ella asintió, siguió cortando en julianas las bananas y tarareando-.
-Gracias, no sabes cuánto odio lavar trastes, lo hacía obligada y a regañadientes en la escuela de cocina-dijo, con una media sonrisa, que perfecta era, sincera y segura de sí misma-.
-Es raro, bueno a nadie le gusta lavar, pero siendo chef debes estar acostumbrada a lavar-al salir las palabras de mi boca quise golpearme o que la tierra me tragase, le estaba diciendo lavaplatos, dispárame ahora-.
-De hecho soy muy rara, solo quiero una vida tranquila, tener éxito en esto y ser feliz, no quiero lujos, dinero, fama, nada de eso, es muy complicado ese mundo para mí-dijo, si supieras lo complicado que es, un día lo tienes todo, al instante estás en el piso, TN__, mi jefa, en realidad era una persona increíble, totalmente distinta a las que me rodeaban, antiguamente-.
-Lo tienes muy definido, eso está bien, yo quisiera lo mismo…-suspiré, ella dejó sobre la mesa de la cocina el fondue, fue hasta el refrigerador y sacó un tuper que contenía duraznos en cubos, los colocó en un plato-.
-Depende de ti, de lo que quieras ser, y si algo te gusta, conseguirlo es lo que debes hacer, no importa ganar dinero, lo que te gusta lo haces porque te gusta, lo demás viene solo-dijo, era como Nietzsche, solo que hermosa y chef. La Chef-Ven, acércate, prueba el fondue, te veo flaco y no me gusta-frunció el ceño y rió-.
-Es mi contextura física, no te preocupes, si así van a ser mis días laborales de ahora en adelante, pues me verás más gordito en unos meses-provoqué una carcajada en ella, se sentía bien estar rodeado de felicidad después de tanta inmundicia, su risa fue contagiosa-.
-Pues serán mejores, créeme que improvisé el menú-le echó chocolate a una brocheta, se la llevó a la boca-come, me molesta comer sola-murmuró, concentrada en su manjar, obedecí, si Niall estuviera en mi lugar, se comería toda su despensa-.
Pasé toda la mañana hablando con ella, conociéndola más, colocando unos muebles según me indicaba, también aprendí dos recetas nuevas, como hacer brownies sin el preparado y decorar magdalenas, mi jefa, siendo menor, era mil veces más madura que yo, como hubiera deseado conocerla antes de todo, antes de la banda, era perfecta, responsable y sería mi amiga, no iba a intentar siquiera tener algo con ella, ni una sola noche de pasión. Bueno, en el caso de que ella me rogara follarla duro en la mesa de la cocina no podía negarme… No lo haría, muy a mi pesar, era demasiado correcta, no de ese tipo de mojigatas que al fin y al cabo lo quieren todo, ella destilaba pureza, emanaba paz, felicidad, vitalidad. No era una puta. Era muy linda, sexy e interesante.
-Bien, creo que eso es todo por hoy-limpiándose las manos con un trapo, asentí, me guió hacia la puerta de madera tallada de la salida-.
-Entonces, te veré el lunes a las nueve de la mañana como dijiste-estábamos ya en el umbral, ella adentro y yo afuera, uno frente al otro-.
-Ha sido un placer, Harry Swan-me tendió la mano en signo de despedida, llevé mis labios al dorso de su mano, la besé, ojalá fueran tus labios TN__-.
-Por el contrario, el placer ha sido todo mío, TN__ Lindhagen-me estaba comportando como un coqueto-.
Le había mentido sobre mi apellido, si no sabía quién demonios era yo y mi pasado, le caería mejor, no quería que pensara mal de mí y que se enterara de mis errores, los rumores que inventaron los paparazzi, y mi horrorosa caída. Fui a la estación de trenes y tomé el metro, me llevó a casa, miseria. Hacían seis meses Niall y yo seguíamos igual, viviendo en las zonas bajas de Londres, lo mejor era que hasta el momento nadie nos había reconocido, éramos Edward y James Horan, hermanos. Construimos una vida a base de mentiras para no ser localizados, nos convertiríamos en la comidilla farandulera de todo el bendito país si alguien sabía de nuestra situación. Ni Louis, ni Liam estaban interesados en ayudarnos, o al menos eso respondieron sus secretarias, ‘’el señor Tomlinson no dispone de tiempo para atenderle’’ o ‘’Lo lamento Harry, Liam está muy ocupado como para velar por tu estado financiero, ya suficiente hizo por ti en el pasado’’. Maldito Simon. ¿Cómo fue capaz de desampararme de ese modo? Viendo el lado positivo, había conocido a TN__, ella era tan buena persona, que no iba a juzgarme, y yo le mentí. Mientras más lo pensaba, más como rata me sentía. Para mi suerte, llegó el borracho número uno, Niall, regresó de sus clases particulares de guitarra.
Última edición por Harry's Cupcake♥ el Vie 28 Dic 2012, 7:02 pm, editado 1 vez
hearmeroar
Re: La Chef [Harry Styles y TN__ Lindhagen] TERMINADA.
Está muy interesante, siguela cuando puedas :3
;)
;)
Charlie.
Re: La Chef [Harry Styles y TN__ Lindhagen] TERMINADA.
OMG! como la dejas asiiiii! tienes que seguirla esta buenisimaaa!!
ya quiero otro cap!!!
Siguelaaaaaaaaaaaaaaa!
ya quiero otro cap!!!
Siguelaaaaaaaaaaaaaaa!
lorena1D
Re: La Chef [Harry Styles y TN__ Lindhagen] TERMINADA.
Paula Hockin escribió:¿Quieren cap? :P
siiiiiii cap! :P
lorena1D
Re: La Chef [Harry Styles y TN__ Lindhagen] TERMINADA.
Para NeverLand y Lore(always in my heart)
_________________________________________________________
ahí esta el cap
:P
Ya aparecerán nenas, solo que en unos capitulos más.
Capitulo 2: Your body rockin, keep me up all night, one in a million, my Lucky Strike
-Harry-saludó al entrar al pequeño departamento, dejó su guitarra a un lado y se dirigió al refrigerador-.
-Hola a ti, ¿cómo te fue hoy?-pregunté, estaba más feliz, luego de la cita con TN__, ella irradiaba esa contagiosa felicidad-.
-Como siempre, mi alumna casi me viola y estoy tan necesitado que casi me dejo-dijo con cerveza en mano y un improvisado sándwich, esa era Janice, su alumna de quince años, dispuesta a violar a mi pobre amigo-¿y tú? La entrevista con la cocinera de veinte toneladas, cuéntamelo todo, ¿quieres? Muero de la curiosidad-insistió él-.
-En realidad nuestras teorías se fueron al tacho en el preciso momento en el que abrió la puerta-mi amigo de cabello caramelo abrió exageradamente los ojos-.
-¡¿Qué?!-exclamó-¿Cómo es?-exigió saber-.
-Tienes que verla, parece sacada de la portada de una revista, pero no hay nada en particular-mentí, tenía mucho en particular, toda ella parecía sacada de la mitología griega-.
-¿Está tan buena que no me lo quieres decir? Sabes que puedo llevarla a la cama si me lo propongo y tú quieres evitarlo porque ¡maldito maricón te la quieres follar! ¡Quieres darle duro a tu jefa!-se carcajeó en mi cara, yo estaba serio, él dejó de reír-¿conseguiste el trabajo, no?
-Claro que sí, idiota-Niall suspiró, y se recostó en el diminuto sofá después de encender la televisión, ahí vimos a nuestro querido amigo-.
-Vaya, Liam siempre pasándosela en grande, ¿no crees?-resopló, devoró su sándwich y bebió un largo trago de su cerveza-.
-No sé, me da igual ahora, no les tengo rencor, solo quiero saber qué ha sido de Zayn, él nos hubiera aconsejado para evitar lo que nos pasó, pero ahora da igual-suspiré, estaba harto de que en cada programa saliera una noticia de Liam Payne-.
-Ahora tenemos trabajo, vamos a salir de esta-dijo, estaba siendo positivo, no lo veía así desde hace tiempo, quizás empezamos a distinguir la luz al final del túnel, ya era hora-.
-Eso mismo pienso-murmuré, quería perderme en mis pensamientos, recordarla e imaginar que la conocí cuando aún trabajaba en esa pastelería en Holmes Chapel, ironías de la vida, mi último trabajo fue en una pastelería, ahora volvería a dedicarme a eso-.
-Ahora cuéntame, ¿te reconoció? ¿Está buena? Quiero verla-le arrojé un cojín, se carcajeó con cerveza en mano-.
-Deja de fastidiar, no creo que me haya reconocido, mentí sobre mi apellido y sí, es ardiente, morena, de estatura media, hermosa y muy simpática, eso es todo-mi amigo me miró sarcástico, yo me encogí de hombros-.
-¿Algo más? ¿Te gusta?-preguntó, negué con la cabeza, mantenía la vista fija en la televisión, pasaba la noticia de Liam, no prestaba atención pero fingí hacerlo-.
-Tiene lindo cabello-dije, restándole importancia, en realidad el cabello más precioso que había visto, era espectacular, increíble y sí, sí me gustaba, pero ella sería mi amiga, no era mi tipo de mujer, y aún así, me gustaba-.
-Como digas-abolló la lata de cerveza y la arrojó a televisión, justo cuando salía la cara de Liam-JA! ¡Triple para el equipo de Niall!-gritó, seguidamente insultó en irlandés-.
Narra TN__.
Invité a almorzar a Euge y a Maggie, para que me contaran como les había ido en su cita doble. La cita de Maggie era un cirujano, y la de Eugenia un fotógrafo. Al sentarnos a almorzar me contaron todo lo que hicieron, como se comportaron sus citas, que llevaban puesto.
-Ya sabes lo que dicen-Maggie sonrió de lado-los cirujanos son unos leones en la cama, necesitan liberar las tensiones-sonrió pícaramente de lado, Eugenia y yo soltamos una sonora carcajada-no se burlen, leí en Cosmopolitan que es cierto-dijo frunciendo el ceño-.
-Como sea, ¿Y tú? ¿Cómo era el fotógrafo?-pregunté a Eugenia, que seguía riendo, negó con la cabeza-.
-Sumamente tierno, es increíble, nos seguiremos viendo, al menos eso espero, nunca conocí a alguien tan dulce como él-con un toque de melancolía en la voz, respondió a mi pregunta-.
-Ojalá tengan suerte con sus chicos, que empiecen a salir, que vivan juntos luego y así, que sean felices-dije, todos merecíamos ser felices, yo quería que estas locas lo fueran-.
-Tú ves la vida de una manera tan sencilla, y siendo positiva, todo te sale bien, si el mundo pensara como lo haces, habrían menos infelices-habló Maggie, la tomé de las manos-.
-Si todos pensaran como yo, todos seríamos iguales, siendo iguales el mundo no sería mundo-dije, las dos se quedaron mirándome-¿qué? ¿No puedo amanecer poética un día?-nos carcajeamos-.
-Bueno ¿y tú? ¿Conseguiste a tu ayudante?-preguntó Eugenia, interesada-.
-Sí, lo conseguí, se llama Harry y tiene nuestra edad, creo, no se lo pregunté-confesé, se quedaron viéndome-.
-¿Podrías dar detalles?-preguntó Maggie, ahí venía, lo sabía, querían saber si el chico estaba bueno, la verdad sí pero no era para que yo lo diga, suspiré resignada, mejor decirles que si estaba buenísimo-.
-Está…bien, creo, tiene unos ojos bellísimos y es encantador, pero eso es todo-dije restándole importancia, la dos enarcaron las cejas-.
-Es encantador-me imitó Eugenia haciendo movimientos con los brazos y volteando los ojos, Maggie y yo reímos-.
-Pero eso es todo-me imitó Maggie también, le arrojé la servilleta de lino que tenía sobre las piernas-.
-¡Basta! No tiene nada fuera de lo normal-mentí, estaba más bueno que el pan, él hace pan, pobre Harry, iba a toparse con estas locas y James al trabajar para mí-.
-Claro-dijo Eugenia-.
-Nosotras te, te creemos, claro, claro-sarcástica habló Maggie, reí-.
-Es lindo, pero no es mi tipo-confesé, me miraban atentas mientras yo esculcaba en mi cabeza algo que decir-es todo un Casanova por así decirlo, además no estoy interesada en tener una aventura con mi ayudante, por favor chicas-finalicé, ellas solo asintieron-.
Cuando mis amigas se fueron, la tarde pasó, vi una película, bajé a la cocina, preparé un pastel de chocolate, magdalenas, galletas, profiteroles y Crème brulée, al darme cuenta ya eran las ocho de la noche, llamé a mi madre, todavía no estaba dormida, le conté que por la tarde estuve con las chicas y que conseguí ayudante, también me molestó con Harry, ¿qué pasa con mis seres queridos que ven cosas donde no las hay? Pensé. El domingo pasó tranquilo, por la mañana fui al parque a trotar con Downey, mi pastor alemán. Preparé pasta para el almuerzo, llamé a James y me dijo que tenía una reunión familiar pero que podía ir con él, pero me negué, quería estar en casa. Por la tarde, comí lo que preparé el día anterior, tomé un baño relajante y me dispuse a descansar.
Narra Harry.
Desperté con el sonido horrible del despertador, las ocho de la mañana del lunes. Por más que quisiera no podía seguir durmiendo, me pareció interesante ir a ver a TN__, ella era agradable y me hacía ver por un momento que no había gente mala en el mundo. Estar con ella era como estar en otra época, no sólo por la decoración del local, sino por su madurez y manera de pensar, después de unos minutos de recordar la felicidad que me hizo sentir, me deshice de esos pensamientos, no era conveniente pensar esas cosas de ella, porque terminaría gustándome demasiado y siempre la cagaba cuando me pasaba eso. Había dos razones grandes para no cagarla con ella, quería una amiga como ella y necesitaba el trabajo. Me levanté, tomé una ducha rápida y me coloqué unos jeans bajos, una camiseta de mangas cortas cuello V, dejaba ver mis tatuajes, muchos, el más significativo lo tenía en el costado Smile More Cry Less, esa era la filosofía de TN__, la del viejo y engreído Harry. Me arrepentía a cada momento de haber desperdiciado mi vida, me torturaba en el metro sobre eso. Luego de bajar en la estación, caminé un poco y llegué a Beak Street, doblé en Lexington, toqué el timbre una vez, nada, estaba por volver a timbrar cuando abrió la puerta, se me abrió la boca, tenía puesto unos pantalones cortos de cintura alta, le tapaba el ombligo, una camiseta corta, converse, su atuendo le dejaba tan joven, tanto que me excitó.
Narra TN__.
Desperté tarde, a las ocho y treinta, corriendo fui a darme un baño, lo primero que encontré me coloqué y fui a la cocina, al comenzar a preparar el desayuno, el timbre sonó, maldije en español, alemán y portugués. Odiaba quedarme dormida, odiaba llegar tarde, odiaba la impuntualidad. Fui hasta la puerta, la abrí, suspiré y babeé mentalmente. Llevaba una camiseta de mangas cortas cuello V, dejaba su pecho a la vista, hermoso, unos pantalones de mezclilla bajos, ya no importaba, le quedaban tan bien que le dejaría vestirse así para el trabajo, su cabello desordenado le daba un toque salvaje y tierno a la vez, él me estaba mirando con una mueca rara. Reacciona, reacciona tonta, me dije.
-Oi, como vai voce?-saludé en portugués, sin darme cuenta-.
-Hola, yo también te quiero-dijo riendo, se me contagió la risa y le indiqué que se adentrara al local-¿qué idioma era ese?-preguntó-.
-Portugués, significa “hola ¿cómo estás?’’, lo siento-reí, me dirigí a la cocina, seguida por él-estaba preparando el desayuno, espero que no lo hayas tomado aún, quiero que me acompañes-agregué y volteé a mirarlo, estaba apoyado, en la misma mesada y la misma postura sensual del sábado-.
-Oi, soy Harry, señorita-mezcló portugués con español, solté una carcajada-Eso es todo lo que sé…oh en alemán: kindergarten-dijo, negué con la cabeza y me concentré en el desayuno, tostadas francesas, magdalenas, galletas de vainilla, café y jugo de fresas-.
-Bien-tomamos asiento en la mesa de la cocina, en la silla me senté con las piernas cruzadas sobre la misma-hoy vamos a mover algunas cosas, en el local y me vas a acompañar a hablar con algunos proveedores, pero primero comamos-dije, el asintió y nos dispusimos a desayunar-.
Fuimos primero con los proveedores, de quesos, panes, aceite de oliva, harina, frutas naturales, entre otras materias primas, nos confundieron con esposos y eso fue incómodo.
-Hola señores Lindhagen, soy Vitorio, ahora pasemos a ver los quesos y panes-con acento italiano, dijo el dependiente de la tienda, Harry y yo nos miramos, luego al hombre, me encogí de hombros, no me quedó más que sonreír y seguirle la corriente, entramos a la bodega de quesos, me quedé maravillada con la variedad de quesos-No saben lo feliz que me hace ver a una pareja joven queriendo abrir una tienda, me recuerdan a mi finada esposa Giannina-se quitó el sombrero, parecía una letanía-con ella abrí cuesta tienda-suspiró, “mi esposo’’ y yo nos miramos-.
-Bien, no se preocupe, ella está en un lugar mejor-consolé, me dirigió una mirada cálida-.
-Se ve que se aman niña-me tomó de la mano, luego miró a Harry-cuídala-dijo-no tienes idea de cómo te dolerá cuando ya no la tengas-.
-Lo haré-sonrió, ¿le siguió el juego tratando de conseguir un precio especial?-créame que lo haré señor Vitorio-el italiano asintió y nos llevó al fondo de la bodega donde escogimos los quesos que me enviaría el miércoles-.
Luego vimos los panes y nos interrogó sobre nuestra luna de miel, yo le comenté que fuimos a París, pero Harry me contradijo y según él fuimos a Barcelona, así que le dijimos que pasamos una semana en cada destino, antes de que siguiera con el interrogatorio, salimos sonrientes de la tienda. Efectivamente. Conseguimos un precio especial, gracias a que éramos “una pareja bellisima’’. Recorrimos unas cuantas tiendas más, ya no nos confundieron con un matrimonio, por suerte. Todos los pedidos llegarían entre el miércoles y el jueves. El diseñador gráfico me tendría ya listo el cartel para el martes y lo colocarían el mismo día. Nos quedaba solo ir a casa a reubicar los muebles, pero primero almorzaríamos, ya que toda la mañana la pasamos en tiendas buscando proveedores, llegamos y nos metimos en la cocina, él me ayudó a preparar comida mexicana, tenía antojo de ella, que casualmente era su comida favorita.
-¿Cómo logras que la salsa de carne te quede así, no tan salada?-preguntó al probar un taco-.
-Simple, salas la carne antes de cocinar, la condimentas antes de freírla-expliqué él asintió y comimos-.
-Así que…estamos casados-dijo riendo, reí con él-.
-Claro bebé, recién casados-le miré desde el otro lado de la mesa-.
-Conseguimos un buen precio gracias a eso, realmente me conmovió-habló lento y bajo, casi un susurro, que desquiciante y suave era su voz, no me molestaría estar casada con alguien así. ¿Qué? ¡No TN__!-.
-Sí…-susurré, me concentré en la salsa de guacamole que vertíasobre un burrito-.
Al terminar de almorzar, ubicamos los muebles. Si solo fuera una persona normal y Harry no tuviera calor por mover los muebles todo hubiera sido más fácil. Demonios, después de media hora de ubicar muebles, se despojó de la camiseta que llevaba puesta. Madre de Dios. Delgado, pero entendí por qué, todos sus músculos estaban marcados, estaba sudado, lleno de tatuajes, lo hacían más sexy. Morí. Me dirigí a la cocina y me lavé las manos, abrí el refrigerador y saqué una botella con agua, la bebí, estaba fría, luego él entró a la cocina, toda lo que me enfríe se volvió a calentar, se quitó sudor de la frente, se acercó peligrosamente a mí y cogió la botella que tenía yo en las manos.
-Uy, está fría-jadeó, bebió y se la pusó en el pecho, yo traté de mirar a otro lado, de pensar en cachorros muertos o en angelitos, pero veía sus enormes y hermosos ojos verdes, esa maldita gota de sudor que viajaba por su cuello y sentí que las piernas me fallaban-.
-Sí…fría, el agua…eh yo voy al depósito a…buscar…buscar los frascos para las repisas-dije y como un rayo salí de ahí-.
Su maldito, torneado y perfecto cuerpo. Me obligué a pensar en otras cosas, pero no pude.
-Harry-saludó al entrar al pequeño departamento, dejó su guitarra a un lado y se dirigió al refrigerador-.
-Hola a ti, ¿cómo te fue hoy?-pregunté, estaba más feliz, luego de la cita con TN__, ella irradiaba esa contagiosa felicidad-.
-Como siempre, mi alumna casi me viola y estoy tan necesitado que casi me dejo-dijo con cerveza en mano y un improvisado sándwich, esa era Janice, su alumna de quince años, dispuesta a violar a mi pobre amigo-¿y tú? La entrevista con la cocinera de veinte toneladas, cuéntamelo todo, ¿quieres? Muero de la curiosidad-insistió él-.
-En realidad nuestras teorías se fueron al tacho en el preciso momento en el que abrió la puerta-mi amigo de cabello caramelo abrió exageradamente los ojos-.
-¡¿Qué?!-exclamó-¿Cómo es?-exigió saber-.
-Tienes que verla, parece sacada de la portada de una revista, pero no hay nada en particular-mentí, tenía mucho en particular, toda ella parecía sacada de la mitología griega-.
-¿Está tan buena que no me lo quieres decir? Sabes que puedo llevarla a la cama si me lo propongo y tú quieres evitarlo porque ¡maldito maricón te la quieres follar! ¡Quieres darle duro a tu jefa!-se carcajeó en mi cara, yo estaba serio, él dejó de reír-¿conseguiste el trabajo, no?
-Claro que sí, idiota-Niall suspiró, y se recostó en el diminuto sofá después de encender la televisión, ahí vimos a nuestro querido amigo-.
-Vaya, Liam siempre pasándosela en grande, ¿no crees?-resopló, devoró su sándwich y bebió un largo trago de su cerveza-.
-No sé, me da igual ahora, no les tengo rencor, solo quiero saber qué ha sido de Zayn, él nos hubiera aconsejado para evitar lo que nos pasó, pero ahora da igual-suspiré, estaba harto de que en cada programa saliera una noticia de Liam Payne-.
-Ahora tenemos trabajo, vamos a salir de esta-dijo, estaba siendo positivo, no lo veía así desde hace tiempo, quizás empezamos a distinguir la luz al final del túnel, ya era hora-.
-Eso mismo pienso-murmuré, quería perderme en mis pensamientos, recordarla e imaginar que la conocí cuando aún trabajaba en esa pastelería en Holmes Chapel, ironías de la vida, mi último trabajo fue en una pastelería, ahora volvería a dedicarme a eso-.
-Ahora cuéntame, ¿te reconoció? ¿Está buena? Quiero verla-le arrojé un cojín, se carcajeó con cerveza en mano-.
-Deja de fastidiar, no creo que me haya reconocido, mentí sobre mi apellido y sí, es ardiente, morena, de estatura media, hermosa y muy simpática, eso es todo-mi amigo me miró sarcástico, yo me encogí de hombros-.
-¿Algo más? ¿Te gusta?-preguntó, negué con la cabeza, mantenía la vista fija en la televisión, pasaba la noticia de Liam, no prestaba atención pero fingí hacerlo-.
-Tiene lindo cabello-dije, restándole importancia, en realidad el cabello más precioso que había visto, era espectacular, increíble y sí, sí me gustaba, pero ella sería mi amiga, no era mi tipo de mujer, y aún así, me gustaba-.
-Como digas-abolló la lata de cerveza y la arrojó a televisión, justo cuando salía la cara de Liam-JA! ¡Triple para el equipo de Niall!-gritó, seguidamente insultó en irlandés-.
Narra TN__.
Invité a almorzar a Euge y a Maggie, para que me contaran como les había ido en su cita doble. La cita de Maggie era un cirujano, y la de Eugenia un fotógrafo. Al sentarnos a almorzar me contaron todo lo que hicieron, como se comportaron sus citas, que llevaban puesto.
-Ya sabes lo que dicen-Maggie sonrió de lado-los cirujanos son unos leones en la cama, necesitan liberar las tensiones-sonrió pícaramente de lado, Eugenia y yo soltamos una sonora carcajada-no se burlen, leí en Cosmopolitan que es cierto-dijo frunciendo el ceño-.
-Como sea, ¿Y tú? ¿Cómo era el fotógrafo?-pregunté a Eugenia, que seguía riendo, negó con la cabeza-.
-Sumamente tierno, es increíble, nos seguiremos viendo, al menos eso espero, nunca conocí a alguien tan dulce como él-con un toque de melancolía en la voz, respondió a mi pregunta-.
-Ojalá tengan suerte con sus chicos, que empiecen a salir, que vivan juntos luego y así, que sean felices-dije, todos merecíamos ser felices, yo quería que estas locas lo fueran-.
-Tú ves la vida de una manera tan sencilla, y siendo positiva, todo te sale bien, si el mundo pensara como lo haces, habrían menos infelices-habló Maggie, la tomé de las manos-.
-Si todos pensaran como yo, todos seríamos iguales, siendo iguales el mundo no sería mundo-dije, las dos se quedaron mirándome-¿qué? ¿No puedo amanecer poética un día?-nos carcajeamos-.
-Bueno ¿y tú? ¿Conseguiste a tu ayudante?-preguntó Eugenia, interesada-.
-Sí, lo conseguí, se llama Harry y tiene nuestra edad, creo, no se lo pregunté-confesé, se quedaron viéndome-.
-¿Podrías dar detalles?-preguntó Maggie, ahí venía, lo sabía, querían saber si el chico estaba bueno, la verdad sí pero no era para que yo lo diga, suspiré resignada, mejor decirles que si estaba buenísimo-.
-Está…bien, creo, tiene unos ojos bellísimos y es encantador, pero eso es todo-dije restándole importancia, la dos enarcaron las cejas-.
-Es encantador-me imitó Eugenia haciendo movimientos con los brazos y volteando los ojos, Maggie y yo reímos-.
-Pero eso es todo-me imitó Maggie también, le arrojé la servilleta de lino que tenía sobre las piernas-.
-¡Basta! No tiene nada fuera de lo normal-mentí, estaba más bueno que el pan, él hace pan, pobre Harry, iba a toparse con estas locas y James al trabajar para mí-.
-Claro-dijo Eugenia-.
-Nosotras te, te creemos, claro, claro-sarcástica habló Maggie, reí-.
-Es lindo, pero no es mi tipo-confesé, me miraban atentas mientras yo esculcaba en mi cabeza algo que decir-es todo un Casanova por así decirlo, además no estoy interesada en tener una aventura con mi ayudante, por favor chicas-finalicé, ellas solo asintieron-.
Cuando mis amigas se fueron, la tarde pasó, vi una película, bajé a la cocina, preparé un pastel de chocolate, magdalenas, galletas, profiteroles y Crème brulée, al darme cuenta ya eran las ocho de la noche, llamé a mi madre, todavía no estaba dormida, le conté que por la tarde estuve con las chicas y que conseguí ayudante, también me molestó con Harry, ¿qué pasa con mis seres queridos que ven cosas donde no las hay? Pensé. El domingo pasó tranquilo, por la mañana fui al parque a trotar con Downey, mi pastor alemán. Preparé pasta para el almuerzo, llamé a James y me dijo que tenía una reunión familiar pero que podía ir con él, pero me negué, quería estar en casa. Por la tarde, comí lo que preparé el día anterior, tomé un baño relajante y me dispuse a descansar.
Narra Harry.
Desperté con el sonido horrible del despertador, las ocho de la mañana del lunes. Por más que quisiera no podía seguir durmiendo, me pareció interesante ir a ver a TN__, ella era agradable y me hacía ver por un momento que no había gente mala en el mundo. Estar con ella era como estar en otra época, no sólo por la decoración del local, sino por su madurez y manera de pensar, después de unos minutos de recordar la felicidad que me hizo sentir, me deshice de esos pensamientos, no era conveniente pensar esas cosas de ella, porque terminaría gustándome demasiado y siempre la cagaba cuando me pasaba eso. Había dos razones grandes para no cagarla con ella, quería una amiga como ella y necesitaba el trabajo. Me levanté, tomé una ducha rápida y me coloqué unos jeans bajos, una camiseta de mangas cortas cuello V, dejaba ver mis tatuajes, muchos, el más significativo lo tenía en el costado Smile More Cry Less, esa era la filosofía de TN__, la del viejo y engreído Harry. Me arrepentía a cada momento de haber desperdiciado mi vida, me torturaba en el metro sobre eso. Luego de bajar en la estación, caminé un poco y llegué a Beak Street, doblé en Lexington, toqué el timbre una vez, nada, estaba por volver a timbrar cuando abrió la puerta, se me abrió la boca, tenía puesto unos pantalones cortos de cintura alta, le tapaba el ombligo, una camiseta corta, converse, su atuendo le dejaba tan joven, tanto que me excitó.
Narra TN__.
Desperté tarde, a las ocho y treinta, corriendo fui a darme un baño, lo primero que encontré me coloqué y fui a la cocina, al comenzar a preparar el desayuno, el timbre sonó, maldije en español, alemán y portugués. Odiaba quedarme dormida, odiaba llegar tarde, odiaba la impuntualidad. Fui hasta la puerta, la abrí, suspiré y babeé mentalmente. Llevaba una camiseta de mangas cortas cuello V, dejaba su pecho a la vista, hermoso, unos pantalones de mezclilla bajos, ya no importaba, le quedaban tan bien que le dejaría vestirse así para el trabajo, su cabello desordenado le daba un toque salvaje y tierno a la vez, él me estaba mirando con una mueca rara. Reacciona, reacciona tonta, me dije.
-Oi, como vai voce?-saludé en portugués, sin darme cuenta-.
-Hola, yo también te quiero-dijo riendo, se me contagió la risa y le indiqué que se adentrara al local-¿qué idioma era ese?-preguntó-.
-Portugués, significa “hola ¿cómo estás?’’, lo siento-reí, me dirigí a la cocina, seguida por él-estaba preparando el desayuno, espero que no lo hayas tomado aún, quiero que me acompañes-agregué y volteé a mirarlo, estaba apoyado, en la misma mesada y la misma postura sensual del sábado-.
-Oi, soy Harry, señorita-mezcló portugués con español, solté una carcajada-Eso es todo lo que sé…oh en alemán: kindergarten-dijo, negué con la cabeza y me concentré en el desayuno, tostadas francesas, magdalenas, galletas de vainilla, café y jugo de fresas-.
-Bien-tomamos asiento en la mesa de la cocina, en la silla me senté con las piernas cruzadas sobre la misma-hoy vamos a mover algunas cosas, en el local y me vas a acompañar a hablar con algunos proveedores, pero primero comamos-dije, el asintió y nos dispusimos a desayunar-.
Fuimos primero con los proveedores, de quesos, panes, aceite de oliva, harina, frutas naturales, entre otras materias primas, nos confundieron con esposos y eso fue incómodo.
-Hola señores Lindhagen, soy Vitorio, ahora pasemos a ver los quesos y panes-con acento italiano, dijo el dependiente de la tienda, Harry y yo nos miramos, luego al hombre, me encogí de hombros, no me quedó más que sonreír y seguirle la corriente, entramos a la bodega de quesos, me quedé maravillada con la variedad de quesos-No saben lo feliz que me hace ver a una pareja joven queriendo abrir una tienda, me recuerdan a mi finada esposa Giannina-se quitó el sombrero, parecía una letanía-con ella abrí cuesta tienda-suspiró, “mi esposo’’ y yo nos miramos-.
-Bien, no se preocupe, ella está en un lugar mejor-consolé, me dirigió una mirada cálida-.
-Se ve que se aman niña-me tomó de la mano, luego miró a Harry-cuídala-dijo-no tienes idea de cómo te dolerá cuando ya no la tengas-.
-Lo haré-sonrió, ¿le siguió el juego tratando de conseguir un precio especial?-créame que lo haré señor Vitorio-el italiano asintió y nos llevó al fondo de la bodega donde escogimos los quesos que me enviaría el miércoles-.
Luego vimos los panes y nos interrogó sobre nuestra luna de miel, yo le comenté que fuimos a París, pero Harry me contradijo y según él fuimos a Barcelona, así que le dijimos que pasamos una semana en cada destino, antes de que siguiera con el interrogatorio, salimos sonrientes de la tienda. Efectivamente. Conseguimos un precio especial, gracias a que éramos “una pareja bellisima’’. Recorrimos unas cuantas tiendas más, ya no nos confundieron con un matrimonio, por suerte. Todos los pedidos llegarían entre el miércoles y el jueves. El diseñador gráfico me tendría ya listo el cartel para el martes y lo colocarían el mismo día. Nos quedaba solo ir a casa a reubicar los muebles, pero primero almorzaríamos, ya que toda la mañana la pasamos en tiendas buscando proveedores, llegamos y nos metimos en la cocina, él me ayudó a preparar comida mexicana, tenía antojo de ella, que casualmente era su comida favorita.
-¿Cómo logras que la salsa de carne te quede así, no tan salada?-preguntó al probar un taco-.
-Simple, salas la carne antes de cocinar, la condimentas antes de freírla-expliqué él asintió y comimos-.
-Así que…estamos casados-dijo riendo, reí con él-.
-Claro bebé, recién casados-le miré desde el otro lado de la mesa-.
-Conseguimos un buen precio gracias a eso, realmente me conmovió-habló lento y bajo, casi un susurro, que desquiciante y suave era su voz, no me molestaría estar casada con alguien así. ¿Qué? ¡No TN__!-.
-Sí…-susurré, me concentré en la salsa de guacamole que vertíasobre un burrito-.
Al terminar de almorzar, ubicamos los muebles. Si solo fuera una persona normal y Harry no tuviera calor por mover los muebles todo hubiera sido más fácil. Demonios, después de media hora de ubicar muebles, se despojó de la camiseta que llevaba puesta. Madre de Dios. Delgado, pero entendí por qué, todos sus músculos estaban marcados, estaba sudado, lleno de tatuajes, lo hacían más sexy. Morí. Me dirigí a la cocina y me lavé las manos, abrí el refrigerador y saqué una botella con agua, la bebí, estaba fría, luego él entró a la cocina, toda lo que me enfríe se volvió a calentar, se quitó sudor de la frente, se acercó peligrosamente a mí y cogió la botella que tenía yo en las manos.
-Uy, está fría-jadeó, bebió y se la pusó en el pecho, yo traté de mirar a otro lado, de pensar en cachorros muertos o en angelitos, pero veía sus enormes y hermosos ojos verdes, esa maldita gota de sudor que viajaba por su cuello y sentí que las piernas me fallaban-.
-Sí…fría, el agua…eh yo voy al depósito a…buscar…buscar los frascos para las repisas-dije y como un rayo salí de ahí-.
Su maldito, torneado y perfecto cuerpo. Me obligué a pensar en otras cosas, pero no pude.
_________________________________________________________
ahí esta el cap
:P
Ya aparecerán nenas, solo que en unos capitulos más.
Última edición por Harry's Cupcake♥ el Vie 28 Dic 2012, 7:17 pm, editado 1 vez
hearmeroar
Re: La Chef [Harry Styles y TN__ Lindhagen] TERMINADA.
Siguelaaaa
Hits The Light
Music are the chords of a thought and a feeling words.
Elisa
Re: La Chef [Harry Styles y TN__ Lindhagen] TERMINADA.
sjdgvjaghdsjhbfjdsh me encantooo! siguelaaaaaa!
lorena1D
Re: La Chef [Harry Styles y TN__ Lindhagen] TERMINADA.
Primero que nada, Cata y BeautifullBielectoners99, bienvenidas. Mañana subo capitulo, gracias por leerla :) xx
hearmeroar
Página 2 de 26. • 1, 2, 3 ... 14 ... 26
Temas similares
» Hometown Glory [Harry Styles][Terminada] Harry esta muerto y ¿yo? Tratando de sobrevivir sin el.
» V is for Virgin -Harry Styles- TERMINADA
» "You Da One" [Harry Styles&Tu] [TERMINADA]
» Together || Harry Styles y tu || Terminada
» This is my life (Harry Styles y tu) (Terminada)
» V is for Virgin -Harry Styles- TERMINADA
» "You Da One" [Harry Styles&Tu] [TERMINADA]
» Together || Harry Styles y tu || Terminada
» This is my life (Harry Styles y tu) (Terminada)
O W N :: Archivos :: Novelas Terminadas
Página 2 de 26.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
Miér 20 Nov 2024, 12:51 am por SweetLove22
» My dearest
Lun 11 Nov 2024, 7:37 pm por lovesick
» Sayonara, friday night
Lun 11 Nov 2024, 12:38 am por lovesick
» in the heart of the circle
Dom 10 Nov 2024, 7:56 pm por hange.
» air nation
Miér 06 Nov 2024, 10:08 am por hange.
» life is a box of chocolates
Mar 05 Nov 2024, 2:54 pm por 14th moon
» —Hot clown shit
Lun 04 Nov 2024, 9:10 pm por Jigsaw
» outoflove.
Lun 04 Nov 2024, 11:42 am por indigo.
» witches of own
Dom 03 Nov 2024, 9:16 pm por hange.