Hippie in troubles. {Nick&tú. [Terminada]

Ho-Hola gente :D. ¿Cómo están? Espero que bien. Yo aquí, lamentando que mañana empiezo las clases, pero bueno... sjhajsk.
Ahorita me pongo a escribirles capitulo y dentro de una hora o algo así lo subo, like Alwasy n_n.
Muuuchas gracias por leer, en serio chicas, son las mejores, mucho amours para ustedes!
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JAJAJA i know, créeme que yo también quiero un amigo así. Gracias por leer Fran<3.
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Yo quiero uno, en serio, yo quier un amigo así y lo seguiré diciendo hasta que lo tenga. sjahsj, muchas gracias Kande n_n
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Chocalas, yo también quiero uno así. ¡Sí se me ha pasado por la cabeza eso! pero digo, a la final como sabes que es gay no pasa nada.
Ushush, gracias gracias<3.
¿Odias el rosa, why? A mi me gusta, pero no en ropa. No me queda bien la ropa rosada :/.
Yo también conseguiré un amigo gay, ya verán.
Aw, sí, pero no lo uso mucho. ¿Usas twitter o Skype? esos sí los uso todo el tiempo :D.
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Hey Mel!, JAJAJAJ únete al club, somos muchas que queremos así.
Qué bueno que te halla gustado el capitulo, en serio, muchas gracias <3.
JAJAJA I CAN'T SAY IT. Sí lo digo se arruina todo :'c, pero ten paciencia n_n.
Ohok, solo pasame el link de tu novela.

Chicas me voy a tardar un poco más de lo común, tengo que ayudar a una amiga con su tarea. Pero don't worry, les subiré el capitulo más tarde (Ya llevo la mitad escrita). Discúlpenme.

D::::::::::::::::::::::::::;;;; bueno subiras capitulo NO (??

Capitulo treinta y nueve.

El apartamento se sentía vacío, como sí toda la energía que había tenido fuese sido chupada por una aspiradora gigante. Sabía que sonaba absurdo, pero así se sentía. El apartamento había estado repleto de gente los dos últimos días, incluso cuando la fiesta se acabó Tyron y Cat estaban ahí para ella, pero ahora que sus amigos se habían ido el día anterior, el lugar estaba completamente vacío.
_______. Supo desde el primer día en que se mudó allí en que habrían momentos así. Momentos en los que estaría completamente sola y que el apartamento no se sentiría como su hogar. Estaba preparada para eso desde el primer momento, pero ahora que lo enfrentaba por su cuenta se sentía diferente.
Se secó el cabello rápidamente con la toalla y se envolvió en otra antes de salir a su habitación y dejarse caer sobre la cama, mirando al techo.
El fin de semana con Cat y Tyron había sido hermoso, perfecto. Pasearon todo el sábado, fueron a la playa, a los bulevares, luego en la noche los tres salieron a cenar a un pequeño restaurante ubicado frente al océano. Pero ahora, que acababa de llegar del trabajo, no tenía absolutamente nada que hacer. Le gustaría pensar que debía terminar su columna lo antes posible, pero aún le quedaban cuatro días enteros para hacerlo. Tampoco podía salir y tomar fotos, su cámara brillaba por su ausencia desde que la buscó el sábado por la mañana. Una parte de ella llegó a pensar que quizás alguien en su fiesta se la llevó, pero ya que nadie entró a su habitación, la otra parte más razonable le dijo que quizás la perdió entre la mudanza. De igual manera, solo tenía la cámara del trabajo que le habían prestado para las fotos de su columna.
Estuvo a punto de darse por vencida cuando una pequeña idea le cruzó la mente. Rodó por la cama, teniendo cuidado con la toalla, corrió hasta la sala y desconectó su celular del cargador antes de marcar el número que quería.

- ¿Aló? -La dulce voz de Carly le respondió al segundo timbrazo.
- Hola persona del universo. ¿Cómo estás?
- Hey, hola tú. Estoy bien gracias, tratando de cuidar a mi hermanito. ¿Cómo va tu vida?
- Bien, no me quejo. Trabajo y pongo pan en la mesa. -Bromeó ______.
- Toda una mujer. -Carly rió al igual que ella- No me mal interpretes, pero no esperaba una llamada tuya.
- Lo sé. -______. suspiró y prosiguió- ¿Está Marcus contigo?
- Sí, dame un momento. ¡Eh, Marcus, te llaman!

______. Escuchó unos pasos que se acercaban al celular así como la voz de la misma Carly alejándose del mismo. Por un momento llegó a pensar que la habían dejado colgada cuando la voz masculina de Marcus respondió.

- ¿Diga?
- Oh, tu voz suena más profunda por celular. Hola, Marcus, soy ________. -Dijo, sentandose sobre el sofá- ¿Te acuerdas? La peliazul.
- Sí, claro, claro. ¿Cómo estás? -Preguntó amablemente.
- Bien, gracias... Vale no. No tengo absolutamente nada que hacer. Estoy en uno de esos momentos de desesperación donde solo trato de no pensar en...
- Él. -Completó el castaño- Vale cariño, te entiendo. ¡Hey, Tommy, deja eso! ¿Dame un momento sí, _____.? -La peliazul escuchó unos gritos sobre una pasta quemándose y pronto la voz del castaño regresó- Disculpa.
- Tranquilo. ¿Está todo bien?
- Sí, solo que Carly no tiene idea de como cuidar a un niño. -Marcus rió y siguió con la conversación- Como decíamos. ¿Te parece salir alrededor de las ocho?
- Sí, sí, claro. ¿A donde vamos?
- Es una sorpresa, resulta que se como animar a la gente. ¿Entonces, paso por ti a esa hora?
- Vale, te espero a las ocho. -______. sonrió y esperó unos segundos- Y Marcus...
- ¿Qué?
- Gracias por hacer ésto. -Escuchó la risa del castaño al otro lado.
- No hay de qué. Nos vemos.

______. Colgó la llamada antes de salir disparada hacia su habitación. Por suerte su cabello ya estaba lavado y casi seco, así que solo tenía que secarlo con el secador y estaría presentable.
Se introdujo en el baño, secándose el cabello con tranquilidad. En menos de treinta minutos ya tenía el cabello lacio de nuevo.
Gracias a que no sabia a donde rayos iría esa noche optó por colocarse un jean oscuro, una camisa holgada de un hombro color blanca, sandalias y una chaqueta negra por si acaso. Se alborotó un poco el cabello, escogió un par de aretes plateados y buscó su bolso junto con las llaves antes de apagar todas las luces del apartamento para bajar a esperar a Marcus en la entrada del edificio.
Bajó las escaleras dando un saltito de escalón en escalón hasta que llegó a la puerta principal. No hacía frío ni calor, solamente una brisa fresca que embargaba ese lado de California. _______. no tuvo que esperar mucho rato más pues a los pocos minutos el auto plateado de Marcus apareció frente a ella.
El castaño se bajó del auto, lo rodeó y la saludo con un beso en la mejilla, luciendo la misma sonrisa simpática del viernes anterior.

- ¿Lista para irnos? -Preguntó mientras le abría la puerta del copiloto y le ofrecía la mano para entrar.
- Oh, no sabes cuanto. ¿Pero no me dirás a donde vamos? -Tomó su mano y subió al auto- Gracias.

Marcus cerró la puerta antes de rodear nuevamente el auto y subir por su lado. El motor sonó suavemente ante el acelerador y pronto tomaron la calle principal. ______. se giró en el asiento para poder al castaño frente a frente y notó una leve sonrisa en su rostro.

- ¿Qué? -Preguntó con curiosidad.
- Nada. Es que es la primera vez que una chica se sube a ese asiento. -Le contestó, conduciendo con tranquilidad.
- Aw, me siento honrada.

La peliazul sonrió y pronto entablaron conversación nuevamente. No le importaba a donde la llevara el chico, pues sabía que a donde fuera ambos la pasarían de lo mejor.

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Ah, deben estar odiándome en éste momento, pero es que sigo ayudando a mi amiga con su tarea y además mañana empiezo clases, lo que significa que debo acostarme temprano.
Ésta es la mitad del capitulo que había escrito, mañana les subo la continuación y además el capitulo del día, I promise.
En serio, disculpen que no pueda subirles el capitulo completo. Las quiero y muchas gracias por leer <3.

hay dios , como que marcus , esta en sospechas , dudo mucho que sea gay el :/ Lo dudo.

Continuación.

- Vamos, por favor, por favor.

_____. se inclinó sobre la ventana del asiento y miró hacia afuera con los ojos completamente abiertos. La lluvia suave inundaba las calles, refrescandolas gota a gota. No se imaginó que llovería esa noche, pues sí bien no había hecho el típico calor nocturno de esos lados de California, tampoco había hecho frío. Por suerte la lluvia los agarró de regreso, y pudieron disfrutar de un club nocturno al aire libre toda la noche.
Ya eran pasada la una de la mañana. Habían bailado hasta agotar la última gota de energía restante en su cuerpo. La pasaron de maravilla, y hasta Marcus consiguió al menos dos números telefónicos de posibles citas en el futuro. El castaño se comportó perfectamente con ella, se sentía refrescante preguntarle sobre las cosas de hombres, pues sorprendentemente Marcus tenía un agudo radar para identificar quienes estaban solteros y quienes solo pretendían. Cosa que podía ser bastante útil en realidad.
Su cabeza no había alcanzado el punto de ser insoportables así como tampoco veía las cosas borrosas aún, pero los tres tragos de alcohol puro que consumió le estaban pasando efecto; sentía un divertido cosquilleo en el estomago y encontraba todo extrañamente gracioso.

Pegó la nariz del cristal de la ventanilla, como sí quisiera traspasarla e introducirse directamente en la lluvia. Sintió el auto detenerse pues ya se encontraban de nuevo en la entrada de su edificio.

- Mira la lluvia, ¿No quieres mojarte en ella? -Susurró sin despegar la vista de la ventanilla.
- No, gracias. -Marcus apagó el motor y le tocó el hombro, llamando su atención- Sacaré el paraguas de la maleta y luego te bajas ¿Sí? Por favor espera, no te vallas a mojar.
- Hum, tranquilo, no me bajaré. -Le aseguró ______.

El castaño asintió con la cabeza sin decir más. Abandonó el calor del auto para mojarse un poco la camisa negra mientras lograba sacar el paraguas de la maleta del auto. Pero fue inútil, cuando volteó se encontró con la figura de _______. abriendo los brazos hacia el cielo, dejando que cada gota invadiera su cuerpo, empapándose hasta el último hueso. Cerró la parte trasera del auto y caminó hasta que llegó a ella y la cubrió con el paraguas.

- ¡No, no! -La peliazul se apartó de un tirón y volvió a extender los brazos al cielo con una sonrisa en su rostro- ¿No quieres sentir las gotas de lluvia en tu cara, Marcus? ¿Por qué no quieres dejarte llevar por unos segundos?
- Llevo una camisa de Carolina Herrer...
- ¡Olvídate de eso, ven!

_______. Lo jaló por el brazo e hizo que el paraguas cayera al suelo, inútil. Le sonrió de oreja a oreja a su amigo y empezó a bailar graciosamente por la acera. Él necesitaba dejarse llevar un poco por los impulsos, relajarse y disfrutar de las pequeñas maravillas del universo. Y sí él pudo ayudarla esa noche, ella haría su mejor esfuerzo por hacer lo mismo.

- Abre tus brazos, así como yo. -Dijo, estirando sus brazos para coger los de Marcus.
- ¿Qué?
- ¡Así, ábrelos y grita al cielo!
- No, linda, no.... -El castaño se echó hacia atrás pero los brazos de ella lo detuvieron.
- ¡Grita al cielo lo que quieras! ¡Libérate un poco!

Marcus la miró con cara de pocos amigos pero al ver lo feliz y relajada que ella estaba así, danzando bajo la lluvia solo porque la hacia remotamente alegra el también quiso intentarlo. Abrió los brazos de par en par y gritó, gritó como sí su vida dependiera de ello. No creyó que se sentiría tan bien, tan natural, dejar salir toda esa frustración. Soltó una risa y empezó a caminar con pasos exagerados, dejándose llevar por el momento.
_______. lo miraba de vez en cuando y no pudo evitar sonreír al ver lo tranquilo consigo mismo que parecía el castaño.

- Puedo bailar, puedo bailar. -Canturreó la peliazul, haciendo pasos de ballet como sí fuera una bailarina- Puedo... -Piso mal en la acera mojada y se calló de trasero, terminando en el suelo.
- Oh por dios, ¿Estás bien, ______.? -Marcus corrió hasta a ella pero pronto supo que no pasaba nada malo.

Ella se rió a todo pulmón y negó con la cabeza, asegurando entre risas que estaba más que bien, que no pasaba nada. Pero él entendió que ya había sido suficiente por una noche. Se agachó y con una mano la levantó del suelo para luego cargarla entre sus brazos.

- No, yo quiero seguir allí, en la lluvia. -Murmuró _______. estirando el brazo.
- Yo creo que es suficiente por hoy. Dime, ¿Donde están tus llaves?
- En el bolsillo externo de mi cartera.
- Vale, te voy a bajar para abrir la puerta principal, ¿Bien? trata de no caerte otra vez.

_______. Asintió y esperó hasta que el castaño abrió la puerta de su edificio. Se dejó cargar nuevamente sin rechistar todo el camino de subida en las escaleras de regreso a su apartamento. Marcus la bajó para poder abrir la puerta del lugar y ella entró directamente para tirarse en el sofá.

- ¿Estás segura de que no te duele nada? Sé que me reí, pero tu caída fue fea. -Dijo Marcus de camino a la cocina.
- Estoy bien, solo me duele un poco la nalga derecha. -Le aseguró la peliazul.

Pronto Marcus regresó con una compresa de hielo que consiguió en el refrigerador en la cocina y se la ofreció. ______. la tomó entre sus manos y con la derecha la presionó sobre su nalga adolorida. Sabía que la situación daba más risa que dolor, así que no le importó escuchar la disimulada risa del castaño ante su golpe tan inusual. Se acomodó sobre el sofá, sentándose y lo miró.

- Lamento ver que mojaste tu camisa Carolina Herrera.
- No te preocupes, tengo más. -El castaño se encogió de hombros, restando importancia a la cosa.
- No, no. Métela en la secadora, se te va a dañar. Ven, yo la llevo.

_______. se levantó del sofá en un solo movimiento demasiado rápido para la cantidad de alcohol que corría por su sangre cosa que la llevó a caerse sobre el sofá. Marcus negó con la cabeza y la ayudó a acomodarse antes de erguirse otra vez.

- Dime donde está, yo la encuentro solo.
- La última puerta, a la izquierda. Métela en la secadora y presiona el botón azul. -Le indicó ella.
- Bien, no intentes levantarte. Voy, pongo esto allá y vengo a llevarte hasta tu cama. Has estado maravillosa hoy.
- ¿Bailé bien? -Preguntó la peliazul, alzando una ceja.
- Mejor que yo.

Ella soltó una risa apenas audible y vio como Marcus caminaba hasta perderse de vista en el pasillo. Su cabeza empezaba poco a poco a doler. Ella no era de beber, siempre que salía no bebía o sí lo hacía tomaba una sola ronda nada más, pero aquella noche tomó tres rondas completas de Vodka puro, y su cabeza le estaba pasando factura. Rodó sobre el sofá y soltó un suspiro: Nunca más volvería a beber.
A los pocos minutos sintió las manos de Marcus tomarla por la cintura y levantarla del sofá como sí de una muñeca de trapo se tratara. No se molestó en abrir los ojos hasta que sintió su suave colchón dándole la bienvenida.
Se encontró de lleno con los totalmente bien formados abdominales de Marcus frente a sus ojos. No lo había notado antes, pero el chico era realmente guapo, hasta un punto casi absurdo. Pestañeó un par de veces y echó la cabeza hacia atrás.

- Bien, creo que la noche de hoy no nos fue tan mal. Pero recuerdame alejarte de la barra la próxima vez que salgamos. ¿Necesitas algo más antes de que me valla?
- No, no, estoy bien, gracias por subirme hasta aquí. -Dijo ______.
- No hay de qué. Si no te hace falta nada más entonces me voy...
- ¡Espera!

_______. se incorporó sobre la cama, chocando sin querer contra el cuerpo semi-desnudo del castaño. Su primera intención cuando lo llamó había sido pedirle que le prepara una leche tibia, pues la cabeza le explotaría y ella no tomaba café, pero cuando se encontró tan cerca de él no lo pensó dos veces y posó sus labios sobre los suyos.
Se sentó completamente sobre la cama sin dejar de besarle, una parte de ella quería saber que se sentía besar completamente esos labios de él, pero otra se arrepentía de hacerlo. Marcus la tomó por el mentón y la alejó de su rostro.

- Yo, yo... Marcus lo siento.

______. se alejó de él, pasándose hasta el otro lado de la cama y cubrió su rostro con las manos. Se sentía avergonzada pues muy en el fondo sabía a la perfección porque había besado a Marcus. No lo quería admitir en voz alta, pero extrañaba enormemente a Nicholas. Lo extrañaba, extrañaba su amor hacia ella.
Los brazos cálidos del castaño la rodearon por los hombros y ella levantó la mirada para encontrarse con la de él.

- Sé como te sientes. Créeme que lo sé, linda. Pero no puedes buscar ese amor conmigo. -Marcus le sonrió y le besó la frente- Sé que aún lo quieres, sea como sea que se llame.
- Nicholas. -Dijo ella, acomodandose sobre el pecho de él- Se llama Nicholas.
- Pues se nota que aún estás perdidamente enamorada de él. No te culpo, yo también finjo estar bien aveces, es normal. Se siente como si necesitaras amor, de cualquier tipo.
- No quería besarte, digo... -______. levantó el mentón, mirándolo- Eres mi amigo, y me dejé llevar. Pero no quería hacerlo. Es que... Lo extraño. ¿Sabes? Extraño como me hacía sentir que solo tenía amor para mi, y aveces, estar sin amor duele, más cuando sabes que se siente tenerlo.

_______. soltó un suspiro largo y cerró los ojos, apoyando nuevamente la cabeza sobre el pecho de Marcus, el castaño le acarició el cabello y no dijo nada más. Ella estaba a punto de dormirse cuando abrió los ojos.

- ¿Marcus? -Susurró, más dormida que despierta.
- ¿Hum?
- Quédate ésta noche. No quiero quedarme sola, no hoy.
- Tranquila, no me moveré de aquí, te lo aseguro.
- Gracias.

Volvió a cerrar los ojos y esperó a que el sueño la volviera a atrapar mientras pensaba en tu interior que Marcus le había enseñado una valiosa lección aquella noche. Y esperaba, muy en el fondo, que él también pudiera encontrar el amor de nuevo y apreciarlo para siempre.

Bien chicas, allí está la continuación del capitulo, espero les guste y muchas gracias por se pacientes.
El capitulo de hoy se los subo, como de costumbre, más tarde a la noche. Las quiero un montón, gracias por leer <3.
Les respondo tooodos sus comentarios también a la noche, debo irme a hacer tarea ush. ¡ Cuídense n_n!