Enemigos con Derechos ( Harry Styles y Sky Anderson )

Nooo, porque el más aburrido de la historia? Está bueno!!! Amanda es ... no mala amiga, pero no la ayuda!!! Le tiene que dar la razón, que es asqueroso (Bueno, yo por lo menos trato de que mis amigas hagan eso e.e)

comoooo que aburrido señorita ????? no fue el mejor pero si esta buenooo, me encanto con amanda se levanto solo por saber que era Harry el que ella beso.
jajajaja a mi tambn me pasa eso cuando estoy con amigas en pijamadas y no me duermo, siempre pero siempre soy la ultima en dormir y todas me dejan hablando solaaa, si es algo frustrante, entonces las tengo que despertar muahahaha soy una persona muy mala :twisted: pero bno sube una maratoncitaaa, mañana, no me vendria mal, me encantariaaaaaa

Besos, laura
pd: no puedo esperar la accion, estoy un poco pervertida :oops: lo sientooo

lau5997 escribió:comoooo que aburrido señorita ????? no fue el mejor pero si esta buenooo, me encanto con amanda se levanto solo por saber que era Harry el que ella beso.
jajajaja a mi tambn me pasa eso cuando estoy con amigas en pijamadas y no me duermo, siempre pero siempre soy la ultima en dormir y todas me dejan hablando solaaa, si es algo frustrante, entonces las tengo que despertar muahahaha soy una persona muy mala :twisted: pero bno sube una maratoncitaaa, mañana, no me vendria mal, me encantariaaaaaa

Besos, laura
pd: no puedo esperar la accion, estoy un poco pervertida :oops: lo sientooo

hahahahaha, si , a mi tambien suele ocurrirme, pero normalmente soy la que se queda dormida primero e.e, algunas veces trato de quedarme despierta y hacerle maldades a las que se duermen. soooo, seriamos el duo malvado(? ok no._. , ya veras, esta novela se pondrá muy interesante, creeme y no falta mucho para la verdadera accion ññ.
Besos, cuidate (:

Clarísima escribió:Nooo, porque el más aburrido de la historia? Está bueno!!! Amanda es ... no mala amiga, pero no la ayuda!!! Le tiene que dar la razón, que es asqueroso (Bueno, yo por lo menos trato de que mis amigas hagan eso e.e)

Coincido totalmente contigo sobre Amanda, xD
Besos xx

Aburrido? tu estar loca ._.
Fue muy bueno ._.
aaaaaaaaaaaaaaaaaah
nose que decirte :c
Siguela! :D

SI ESO ES ABURRIDO ME ENCANTA EL ABURRIMIENTO !! SIGUELAAAAAAAAA!! :D

Capitulo 5
Cuando estaba en el jardín de infancia, tuve una experiencia traumática. Estaba a mitad de camino, cuando mis piernas temblaron, mis manos sudorosas me hicieron resbalar. Y sentí que faltaba una milla para aterrizar contra el suelo. Todos los niños de cinco años se rieron de mí y de mi rodilla raspada y ensangrentada.
Todos excepto uno.
Amanda Blithe salió del grupo de niños boquiabiertos y caminó hasta ponerse delante de mí. Incluso en aquel entonces, yo sabía que ella era hermosa. Su cabello rubio, ojos color avellana, sus mejillas rosadas... era la imagen de la perfección a los cinco años de edad. Ella podría haber estado desfilando en una pasarela.
— ¿Estás bien? —preguntó.
—Estoy bien —le dije con lágrimas gruesas y calientes. No estaba segura de si estaba llorando por el dolor en mis rodillas o debido a que todos los compañeros de clase se reían de mí.
—No, no lo estás, estás sangrando, déjame ayudarte —. Extendió una mano y tiró de mí hacia arriba. Luego se volvió y les gritó a los chicos que se burlaban de mí.
Después de eso, básicamente, se nombró mi guardaespaldas personal, no me dejaba ni a sol ni a sombra, decidida a mantenerme lejos de los problemas. A partir de ese momento, fuimos las mejores amigas.
Por supuesto, eso fue antes de su popularidad y de que yo estuviera involucrada en lo de Duff. Ella terminó siendo alta, delgada y hermosa. Terminé viéndome como... bueno, casi todo lo contrario. Pero al vernos por separado, nadie pensaría que fuéramos cercanas. Nadie diría que la linda reina de la fiesta estuviera con la chica que era la del rincón.
Pero fuimos las mejores amigas. Ella había estado allí para mí, a pesar de todo. Se había mantenido conmigo el primer año, después de que yo hubiera tenido el corazón roto por primera vez y aunque no hubiera nada que hacer, sólo darle tiempo. Ella nunca me dejó aislarme o ahogarme en mi propia miseria. A pesar de que ella podría encontrar fácilmente a alguien más lindo, más cool, tener amigas populares, pero ella se quedo conmigo.
Así que cuando me pidió que la llevara a su casa después de la práctica de las animadoras la tarde del miércoles, estuve de acuerdo.
Es decir, después de todo lo que ella había hecho por mí en los últimos doce años, lo menos que podía hacer era llevarla de vez en cuando.

Esperé en la cafetería, mirando fijamente las psicodélicas paredes azules y naranjas, la persona que escogió los colores de nuestra escuela debe haber tenido un serio problema con las drogas. Tratando de terminar mis deberes de matemáticas. Yo estaba preguntándome a mí misma la vieja cuestión — ¿dónde se utiliza esto en la vida real?—.
Entonces sentí una mano en mi hombro.
Sentí una sensación espeluznante en mi piel, y supe exactamente quién estaba detrás de mí.
Genial.
Genial.
Genial.
Me moví apartándome la mano de Harry y me giré hacia su cara, agarrando mi lápiz como un cuchillo y apuntando directamente a su cuello.
Ni siquiera se inmutó. Sus ojos verdes examinaron el lápiz con fingida curiosidad y dijo:
—Interesante. ¿Es así como saludas a todos los chicos que te gustan?
—Tú no me gustas.
— ¿Eso quiere decir que me amas, entonces?
Odiaba la forma suave, lenta, y segura en que hablaba. Muchas chicas pensaban que era sexy, pero en realidad era un acosador.
Todo en él gritaba ¡violación en la primera cita!
Ugh.
—Esto quiere decir que te odio —le dije—. Y si no te quedas lejos de mí, te acusaré de acoso sexual.
—Podría ser un caso difícil —reflexionó Harry. Quitándome el lápiz y comenzando a darle vueltas entre sus dedos—sobre todo teniendo en cuenta que fuiste tú quien me besó. Técnicamente, yo si puedo acusarte de acoso.
Apreté los dientes. Seguía odiándolo a pesar de eso, no me molestaría siquiera en recordarle que él había estado más que dispuesto a participar.
—Devuélveme mi lápiz—murmuré.
—No lo sé —dijo—. Contigo esto podría ser clasificado como un arma peligrosa... junto con los vasos de refresco de cereza. Interesante opción.
Lo fulmine con la mirada, esperando su combustión espontánea antes de que yo agarrara los libros de texto y los cuadernos de la mesa. Eludió mi intento de pisar su pie y se quedó mirándome mientras me marchaba por el pasillo. Estaba a medio camino de la gimnasio, donde Amanda, la capitana de las animadoras, debía haber terminando su práctica, cuando me alcanzó.
—Oh, vamos, Duffy. Eso fue sólo una broma. Relájate.
—No fue divertido.
—Tu sentido del humor necesita algo de práctica, entonces —sugirió Harry—. La mayoría de las chicas encuentran mis bromas divertidas.
—Esas chicas deben tener su coeficiente intelectual lo suficientemente bajo como para caer.
Se echó a reír. Al parecer, yo era la divertida.
—Oye, tú nunca me dijiste por qué te enfadaste la otra noche —dijo—. Estabas demasiado ocupada empujando tu lengua en mi garganta. Entonces, ¿cuál era el problema?
—Ninguno de tu...— empecé, pero me detuve de repente— ¡Oye! no... ¡No hubo lengua!
Me recorrió un escalofrío de rabia, cuando me di cuenta de su sonrisa traviesa.
— ¡Estúpido! ¡Lárgate de aquí! Dios, ¿por qué me acechas? Yo pensé que Harry Styles no perseguía a las chicas. Pensé que ellas lo perseguían a él, ¿verdad?
—Tienes razón. Harry Styles no persigue a las chicas, y no te estoy persiguiendo —dijo—. Estoy aquí esperando a mi hermana. Ella está haciendo un examen del Sr. Dalle. Yo solamente te vi en la cafetería y pensé…
— ¿Qué? ¿Pensaste en torturarme un poco más? —Apreté mis puños—. Déjame sola. Ya me has hecho bastante.
— ¿Qué te he echo? —se preguntó, sonando un poco sorprendido. No le respondí. No quería darle la satisfacción de saber que lo de Duff me molestaba a causa de él. Disfrutaba demasiado de ello.
En su lugar, salí corriendo hacia las puertas del gimnasio tan rápido como pude. Esta vez no me siguió, gracias a Dios.
Me apresuré en entrar en el gimnasio azul y naranja ¡Oh, Dios! Los colores brillantes... Yo podía sentir el dolor de cabeza acercándose...y me senté en las gradas más cercanas.
— ¡Muy bien el ensayo, chicas! —Gritó Amanda desde el otro lado del gimnasio—. Bueno, el próximo partido de baloncesto es el viernes. Las quiero a todas practicando el baile, y Vikki trabaja las patadas altas. ¿De acuerdo? —todas murmuraron en un acuerdo general.
—Impresionante —dijo Amanda—. Hasta luego, muchachas. ¡Vamos Panteras!
— ¡Vamos Panteras! —Corearon las otras animadoras, ya separadas. La mayoría de las chicas salieron corriendo hacia los vestuarios, unas pocas se dirigieron a las puertas, charlando entusiasmadas con sus amigas.
Amanda salto sobre mí.
—Hola, S —dijo—, lo siento se nos fue el tiempo. ¿Te importa si me cambio antes de salir de aquí? Me siento un poco sucia.
—No me importa —, murmuré.
— ¿Qué pasa? —Preguntó ella, sospechando inmediatamente.
—Nada, Amanda. Ve a cambiarte.
—Sky, qué puedo hacer…
—No quiero hablar de ello. —Yo no estaba de humor para entrar en otro debate sobre Harry con ella. Probablemente acabaría defendiéndolo como la última vez. — Estoy bien, ¿de acuerdo? —Le dije, suavizando mi voz—, un largo día. Dolor de cabeza. —Amanda aún parecía escéptica cuando caminaba, bastante menos animada, hacia los vestuarios.
Fantástico. Me sentía como una estúpida total. Ella sólo quería asegurarse de que yo estaba bien, y la alejé. No debería haberme irritado con ella a causa de Harry, aunque ella pensara que era un maldito príncipe.
Pero cuando salió del vestuario con su sudadera con capucha y los pantalones vaqueros, su alegría habitual había vuelto. Ella se acerco hasta donde estaba sentada con su mochila cargada en el hombro, con una sonrisa pegada en su rostro impecable, sin problemas.
—A veces, no puedo creer la mierda se escucha en los vestuarios —dijo. — ¿Estás lista para irnos, S?
—Claro —Recogí mis libros y comencé a caminar hacia las puertas del gimnasio, con la esperanza de que Harry no estuviera al acecho en los pasillos. Amanda debió haber notado mi ansiedad. Pude ver la tensa mirada de preocupación en su rostro, pero ella no dejó que lo notara esta vez. En cambio, dijo—, así que, de acuerdo, Vikki realmente va a conseguir la reputación de ser una puta.
—Ella ya la tiene.
—Bueno, sí —Amanda admitió—, pero está a punto de empeorar. Ella está saliendo con un jugador de fútbol junior, ya sabes, como se llame, pero ella le dijo a un tipo de la escuela Oak Hill que quería llevarlo a la Fiesta del Baloncesto. No sé por qué se hace estas cosas así misma. Tú, Lu, y yo tendremos asientos en la primera fila para el drama, cuando llegue la noche. Por cierto, ¿qué te pondrás para salir?
—Nada.
—Sexy, pero dudo que te dejen entrar desnuda, S. — Estábamos caminando por el laberinto de mesas en la cafetería para llegar hacia el estacionamiento.
—No. Me refiero a que Lucy y yo no vamos a ir a la Fiesta —, dije.
—Por supuesto que sí, —protestó Amanda.
Negué con la cabeza. — Lucy está castigada. Yo le prometí que iba a ir y que veríamos unas películas para chicas.
Amanda me miró atónita mientras se abrió paso entre la puerta azul y entró al frío estacionamiento de estudiantes. — ¿Qué? Pero si a Lu le encanta la Fiesta del Baloncesto. Es su favorita después de la Fiesta del Fútbol.
Sonreí un poco, a pesar de mí misma. — Y Sadie Hawkins.
— ¿Por qué no sabía yo esto? El baile de bienvenida está cerca. ¿Por qué nadie me lo dijo?
Me encogí de hombros. — Lo siento. Yo ni siquiera había pensado en ello. Y creo que Lucy sigue estando batida. No quiere hablar de no poder ir.
Sadie Hawkins: baile de la escuela secundaria, donde las chicas invitan a los chicos.

—Pero…pero ¿con quién voy a ir al baile ahora?
—Um, un chico —sugerí—, Amanda, no es que sea difícil que tú puedas conseguir una cita —.Cogí las llaves del coche de mi bolsillo trasero y abrí las puertas de mi Saturn.
—Bien, ¿quién demonios querría ir con esta bestia?
—Tú no eres eso.
Se subió en el asiento del copiloto y se envolvió en la manta que Lucy había usado un par de noches antes.
—Maldita sea, S. Tú, realmente, necesitas conseguir una calefacción de mierda.
—Y tú necesitas, realmente, conseguir tu propio coche.
Ella cambió de tema. —Está bien, de vuelta al baile. Si ustedes dos no van... ¿se molestarían si les estropeo la fiesta de películas? Podría ser una noche de chicas. No hemos hecho una desde hace mucho tiempo.
A pesar de mi estado de ánimo de mierda, le sonreí. Amanda estaba en lo cierto. Nosotras no habíamos tenido una noche de películas juntas en mucho tiempo, y sería agradable pasar el rato sin el drama de los chicos o música tecno fuerte. Por una vez, en realidad podríamos divertirnos en la noche de viernes.
Así que, bajé el volumen de mi auto radio y le dije:
—Estás invitada.


Para que no se aburran y digan "esta novela es demasiado aburrida, no la leere más" , aqui les dejo un adelanto de lo que está por venir :D


Sin hablar, sin dudar, le quité la camisa y la tiré al suelo. Un segundo más tarde estaba sentada a horcajadas sobre él y nos besábamos de nuevo, nos besábamos desesperadamente, como si nuestras vidas dependieran de eso. Sus dedos ahora me desabrochaban el sujetador que se unió a mi camiseta en el suelo. No me importaba.

THAT´S ALL GIRLS, besos

aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaah siguelaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa !!!!!!!!!!!!!!!

Chicas,Directioner,leean esto,es por Niall:
NOTICIA IMPORTANTE!
¡Chicas! el 23 de julio todas las directioners del mundo se tienen que vestir como algunos de los chicos de 1D, y en la muñeca derecha poner #LNS que significa #LETS NIALL SING porque el manager {Estupido} de los chicos insiste en que Niall no cante mas en la banda y solo toque la guitarra cosa que es MUY MUY MUY injusto, todas amamos a Niall y estoy segura que lo haremos por el. Ese mismo dia haremos un TT y suban una foto de su muñeca a la pagina oficial de los chicos {Ya sea en Twitter, facebook, otro} con un mensaje a su parecer.
Los managers de One Direction quieren sacar a Niall de la banda (eso ya lo savemos tod@s) y dicen que es muy probable que en la
proxima gira no este Niall .
Por eso vamos a poner we Love Niall Horan of One Direction, LNS(let Niall Sing); porfavor Directioners One Direction no seria lo mismo sin Niall!!!sigan la cadena!!!

Lala Me gusto.. No esta aburrido y Seguilla

estoy pensando muy seriamente en hacer una huelga para que subas maratooon, mujerrrrr me dejas con una intriga que que que ugh, quiero leer mas, me matas... y peor me dejas iniciada con esos adelantos tan aefjnaeirvna, un dia de estos vas a perder un lectora por "execeso de intriga" okno
sublea prontoooooo.
besos, laura

jaosjaosjoasjaos ><
Esta muy buena yo no se porque sigues diciendo que es aburrida xD
estas loca ._. Me caes bien! :D
Siguela si?

lau5997 escribió:estoy pensando muy seriamente en hacer una huelga para que subas maratooon, mujerrrrr me dejas con una intriga que que que ugh, quiero leer mas, me matas... y peor me dejas iniciada con esos adelantos tan aefjnaeirvna, un dia de estos vas a perder un lectora por "execeso de intriga" okno
sublea prontoooooo.
besos, laura

hahahaha, esque, tu sabes, cuando no veo muchos comentarios no me motiva a seguirla :( he pensado varias veces en cancerlarla, diriamos que no hay una razon para hacer maraton, bueno tu si, y las demas chicas que la leen tambien pero ademas de ustedes... cuatro? no la lee nadie mas :(

Hola nueva lectoraa, síguela me gusta tu nove.. besos☻

Capítulo 6
Cuando el viernes, la noche de chicas estuvo alrededor, yo estaba más que preparada para una buena y relajada tarde con mis mejores amigas. En mi bolso había metido la copia de Tres Metros Sobre el Cielo que Lucy me había regalado por navidad, un par de pijamas que apenas utilizaba —sí, duermo desnuda en casa, ¿y qué?—y mi cepillo de dientes en la mochila.
Amanda trajo las palomitas y Lucy nos prometió grandes cantidades de helado de chocolate.
Pero, naturalmente, el día no podía ser del todo bueno. La señora Samuels, mi profesora de inglés, se aseguró de ello durante el cuarto bloque.
—Harán un nuevo trabajo — Dijo.
Hubo quejas por lo bajo, en negativo, pero la señora Samuels no pareció darse cuenta.
—Quiero que cada uno escriba un ensayo relacionado con la novela que estamos leyendo—ignoró los ruidosos suspiros—. El ensayo puede ser sobre alguna parte del libro, un personaje, una escena, un tema. Pero quiero que esté muy bien pensado. También se les permite trabajar en pareja —la clase zumbó con excitación— que yo voy a asignar —le excitación desapareció.
Yo sabía que estaba en problemas cuando la señora Samuels sacó su hoja. Eso significaba que podía asignar parejas de hombres y mujeres, entonces...
—Sky Anderson trabajará con Harry Styles.
Mierda.
Había conseguido mantenerme al margen de Harry por una semana y media —desde el día en que me había acosado después de la escuela— pero la señora Samuels tenía que ir y decir eso.
Recitó los últimos nombres de la lista, antes de decir:
—Espero que los informes sean de no menos de cinco hojas de largo. La fuente es de doce puntos, a doble espacio, Vikki, no use ese truco de nuevo.
Ella sonrió de buen humor.
—Ahora, quiero que las parejas trabajen juntas. Ambos deben contribuir al reportaje. ¡Y sean creativos, gente! ¡Diviértanse!
—No es probable —susurré a Lucy, que estaba sentada en el siguiente pupitre al mío.
—Oh, yo creo que tienes suerte, Sky —dijo ella—. Yo estaría encantada si Harry fuera mi pareja. Pero mi corazón pertenece a Ashton. Es tan injusto que Amanda tenga que trabajar con él… —miró hacia el sitio asignado a Amanda, al final de la clase—. Probablemente, verá su casa, su habitación, todo. ¿Crees que le dirá algo bueno sobre mí si le pregunta? Tal vez ella va a ser mi cupido.
No me molesté en responder.
—El ensayo tiene que durar exactamente una semana —anunció la señora Samuels por encima de las charlas—. Así que, por favor, trabajen en ello este fin de semana.
La campana sonó y todos nos levantamos al mismo tiempo. Lucy y yo nos unimos a la multitud y Amanda nos atrapó cuando acabábamos de salir al pasillo.
—Esto es una mierda —dijo—. ¿Un ensayo sobre la nada? No quiero elegir un tema. ¡Es su maldito trabajo! ¿Cuál es la cuestión de esta maldita asignación que ni siquiera nos puede dar algo para escribir? Es ridículo.
—Pero tú vas a trabajar con Ashton y…
—Por favor, Lucy. No empieces con esa mierda —Amanda pestañeó—. Él. Es. Gay. No va a suceder, ¿de acuerdo?
—Nunca se sabe. Así que, ¿no vas a jugar a cupido para mí?
—Oigan, necesito tomar unas cosas primero—dije—.
—Entonces vamos —Amanda agarró a Lucy por la muñeca y tiró de ella hacia el otro pasillo—. Nos encontraremos en la maquina de los refrescos, ¿vale? Vamos, Lu —y me dejaron sola en el pasillo lleno de gente.
Bueno, no realmente lleno. Holmes Chapel High tenía alrededor de cuatrocientos estudiantes o algo así, pero considerando el bajo número, los pasillos parecían bastante más llenos esa tarde. O quizá yo estaba estresada y volviéndome claustrofóbica. De todas maneras, mis amigas se fueron, y yo me quedé entre las bestias.

Me abrí paso entre los atletas fuertes y las parejas besándose —son tan desagradables— y me dirigí al pasillo de ciencias. Sólo me tomé un minuto en mi casillero que, como el resto del colegio, estaba pintado de azul y naranja. Giré mi combinación y abrí la puerta de un tirón. Detrás de mí, un grupo de animadoras corría a través de los gritos.
— ¡Vamos, Panteras! ¡Panteras! ¡Panteras! —
Acababa de coger mi abrigo y mi mochila y cerrado la puerta cuando él apareció.
Honestamente, lo había esperado más pronto.
—Parece ser que somos socios, Duffy.
Di un golpe al casillero con un poco de excesiva fuerza.
—Desafortunadamente, sí.
Harry sonrió, pasando los dedos por sus rizos oscuros mientras se apoyaba en el siguiente casillero al mío.
—Bueno, ¿en tu casa o en la mía?
— ¿Qué?
—Para hacer la asignación este fin de semana —dijo él, estrechando los ojos. —No es ninguna de tus ideas, Duffy. No te estoy persiguiendo. Sólo estoy siendo un buen estudiante. Harry Styles no persigue a las chicas, ellas…
—Te persiguen a ti. Sí, lo sé —me puse el abrigo sobre la camiseta.
—Si tenemos que hacer esto, he estado pensando…
— ¡Harry! —una flaca morena que no reconocí (parecía estudiante de primer año) se arrojó sobre él. Lo miró fijamente, con sus grandes ojos sensibleros—. ¿Bailarás conmigo en la fiesta esta noche?
—Por supuesto, Megan —dijo, pasando la mano por su espalda. Era tan alto como para mirar su escote sin ningún problema. Pervertido bastardo —
— ¿De verdad?
— ¿Podría mentir?
— ¡Oh, gracias, Harry! —él se agachó y ella le dio un rápido beso en la mejilla antes de irse corriendo, sin mirarme ninguna vez.
Harry volvió su atención hacia mí.
— ¿Qué estabas diciendo?
—Creo que tenemos que quedar en mi casa —gruñí, apretando los dientes.
— ¿Qué problema hay con mi casa? —preguntó—. ¿Tienes miedo de que te persiga, Duffy?
—Por supuesto que no. Sólo que prefiero trabajar en mi casa. Dios sabe qué tipos de enfermedades podría coger poniendo un pie en tu dormitorio —sacudí la cabeza—. Así que en mi casa, ¿de acuerdo? Mañana por la tarde, como a las tres, llama antes de venir.
No le di oportunidad de que respondiera. Si tenía algún problema con eso, me escribiría una nota. Así que, olvidando decirle adiós a propósito, me fui, lanzándome entre los grupos de chicas cotilleando, apresuradamente hacia la cafetería.
Encontré a Amanda y a Lucy esperándome en la vieja máquina expendedora.
—No lo entiendo, Amy —estaba diciendo Lucy. Insertó un dólar en la única máquina que funcionaba y esperó que su Coca-Cola cayera al fondo de la ranura.
— ¿No tienes que animar el partido?
—Nop. Les dije a las chicas que no podía hacerlo esta noche, así que una de las suplentes, esa estudiante guapa de primer año, ha tomado mi lugar. Ha estado queriendo animar todo el año, pero no ha habido lugar para ella hasta ahora. Van a estar bien sin mí.


Lucy abrió la puerta azul que conducía hacia el aparcamiento lleno, sonriendo de oreja a oreja.
—Ustedes son las mejores. Realmente, las mejores. No sé que haría sin ustedes.
—Llorar en tu almohada toda la noche—dijo Amanda.
—Pensar que tus otras amigas son realmente las mejores —aconsejé, devolviéndole la sonrisa.
No había una jodida forma de que Harry me arrastrara hacia abajo. ¡De ninguna manera! ¡Esta era la noche de chicas! Y no me la iba a perder por ningún jodido idiota como él.
— ¿No olvidaste el helado prometido, no, Lucy?
—Lo recuerdo. ¡Torbellino de chocolate!
Cruzamos el estacionamiento abarrotado y subimos a mi coche. Instantáneamente, Lucy se envolvió en la vieja manta. Amanda, temblando visiblemente, la fulminó con la mirada con envidia cuando se puso el cinturón de seguridad. Con una rápida pisada al acelerador, reducimos al lote de estudiantes de la carretera y con exceso de velocidad nos alejamos de Holmes Chapel High, como prisioneros corriendo de sus celdas, que era una especie de lo que éramos.
—No puedo creer que no estés nominada a reina de la fiesta esta vez, Amanda —dijo Lucy. — Estaba segura de que lo serías.
—Nah. Me votaron como reina de la fiesta del fútbol. Hay una regla sobre la gente que gana más de una vez el mismo año. No puede ser nominado otra vez. Van a ser o Vikki o Angela, estoy segura.
— ¿Crees que se pelearán si alguna gana? —Lucy sonó preocupada.
—Lo dudo —dijo Amanda—. A Angela no le importa nada esa clase de mierda. Vikki es más competitiva… realmente, tenía ganas de ver un drama esta noche. ¿Te dije que Vikki estaba pensando en Harry Styles, también?
— ¡No! —dijimos Lucy y yo al unísono.
—Sip —dijo Amanda, asintiendo—. Supongo que está intentando poner a su novio celoso. Ella afirma que lo engañó después de una fiesta recientemente que supongo que su novio aún no lo sabe y está pensando en hacerlo de nuevo. Dijo que fue increíble.
— ¿Él se acostó con ella? —jadeó Lucy.
—Él se acuesta con todo el mundo —dije, girando el coche en una calle
— ¡Eh, Sky! —Gritó Lucy—. No digas eso.
— Se acuesta con todo el mundo, se acuesta con todo el mundo, se acuesta con todo el mundo —dijo Amanda, categóricamente—. Supéralo, Lu. Y si tú pudieras lo harías.
Las mejillas de Lucy se volvieron del color del tomate.
—No hay ninguna razón para hablar de ello. Es vulgar y… personal.
Amanda la ignoró y me dijo: —Puede ser futbolista, pero es malditamente sexy. Incluso tú lo admites, S. Apuesto a que es increíble besando. Quiero decir, lo hiciste con él. ¿Fue increíble no? ¿Se puede culpar a Vikki por querer acostarse con él?
— ¿Lo hiciste con Harry? —Gritó nuevamente Lucy, asfixiada en su propia emoción—. ¿Qué? ¿Cuándo? ¿Por qué no me lo dijiste?
Amanda me lanzó una mirada.
—Está avergonzada —explicó Amanda—. Apuesto a que volaba por besarlo.
—No volé —dije.
— ¿Era bueno besando? —Preguntó Lucy—. ¡Dímelo, dímelo, dímelo! Quiero saberlo.
—Sí, debes saberlo. Era bueno. Pero eso no le hace menos desagradable.
—Pero —intervino Amanda— con tu experiencia, responde a mi última pregunta. ¿Se puede culpar a Vikki de querer estar con él?
—No se puede —cambié mi señal de giro—. Ella se culpará a sí misma cuando contraiga alguna enfermedad venérea o cuando su novio se entere. Lo que ocurra primero.
—Y eso es exactamente por lo que quería ir a bailar —protestó Amanda—. Podríamos haber sido testigos de primera mano. Como nuestro propio episodio de Gossip Girl de Holmes Chapel. El novio de Vikki podría enfadarse y tratar de vengarse de su novia que se ha enrollado con el chico más caliente de la escuela, y Sky, ocultando su amor por Harry, se habría desanimado y lo odiaría, mientras suspira por su súper sexy y caliente beso de nuevo.
Mi mandíbula se abrió.
—No podría suspirar por nada de eso.
Lucy soltó una carcajada desde el asiento trasero, tirando de su cola de caballo hacia delante de la boca para ocultar su sonrisa cuando fruncí el ceño por el retrovisor.
—Oh, bueno —habló Amanda—. Estoy segura de que oiremos todo sobre el drama el lunes.
—O mañana si la historia es suficientemente buena —dijo Lucy.
—Angela y Jeanine nunca guardan los cotilleos para sí mismas. Si se vuelven locos, ya sabes que van a llamarnos y a decirnos lo que nos perdimos. Estoy segura de que lo harán —sonrió—. Espero que nos den muchos detalles. No puedo creer que me esté perdiendo mi última fiesta.
—Al menos no te la estás perdiendo sola, Lu.
Aparqué en la entrada de la casa de Lucy y dije:
—La noche de chicas comienza oficialmente.
— ¡Woohooo! —Lucy saltó fuera del sillón trasero y prácticamente bailó en frente de su porche. Empujó la puerta y Amanda y yo la seguimos dentro, sacudiendo las cabezas con diversión. Me quité la chaqueta y la colgué en el gancho justo detrás de la puerta.
Sus padres eran súper exigentes con el orden.
Amanda hizo lo mismo.
—Quiero que mi mamá pueda mantener una casa bien o que contrate una criada o lo que sea. Nuestra casa parece una pocilga —dijo.

La mía no parecía tan genial tampoco. Mi mamá nunca había sido un monstruo de la limpieza, y papá sólo creía en la limpieza una vez al año, durante la primavera.
Además de mi habitación, los platos y el trabajo ocasional del polvo (por lo general, mío) no había que hacer muchas tareas en la casa de los Anderson.
— ¿A qué hora van a llegar tus padres, Lucy? —pregunté.
—Mamá llega a casa a las cinco y media y papá debe llegar un poco después de las seis —nos estaba esperando al pie de las escaleras, preparada para correr a la habitación tan pronto como nos uniéramos a ella—. Papá comenzó a ver un nuevo paciente hoy, por lo que debe tardar un poco más.
El señor Frazer era terapeuta. Más de una vez, Amanda ha amenazado con preguntarle si me aceptaba gratis como paciente, ver si tenía un rato para ayudar a mis “problemas”. No es que yo tuviera problemas, pero Amanda me decía que mi cinismo era el resultado de algún tipo de conflicto interno. Yo le decía que sólo estaba siendo inteligente. Y Lucy, bueno, Lucy no decía nada. Incluso aunque sólo le había hablado una vez en broma, siempre se sentía un poco incómoda cuando surgía el tema. Con todas las psico-escuchas de su padre, probablemente pensaría que mi negatividad constante era parte de una lucha interna. Lucy odiaba la negatividad. La odiaba tanto, de hecho, que nunca decía que la odiaba. Eso podría ser demasiado negativo.
— ¡Deprisa, deprisa! ¿Están listas o qué?
—Que comience la fiesta —gritó Amanda, corriendo detrás de Lucy y subiendo las escaleras.
Lucy parecía una maniática cuando trataba de alcanzar a Amanda, pero yo me quedé atrás, subiendo las escaleras a un ritmo regular. Una vez llegué, pude oír a mis amigas riendo al final de la habitación, pero no seguí sus voces. Otra cosa que me llamó la atención en primer lugar. La puerta de la primera habitación, una de las de la izquierda, estaba abierta de par en par. Mi cabeza me decía que pasara a la derecha, pero mis pies no estaban escuchando. Me quedé en la puerta abierta, dispuesta a mirar hacia otro lado. Mi cuerpo tampoco quería cooperar. La cama estaba perfectamente hecha, en azul marino, confortable. Pósters de súper héroes cubrían cada centímetro de la pared. Oscuridad sobre la cabecera. La habitación estaba exactamente como la recordaba, sólo que no había ropa sucia en el suelo. El armario abierto parecía vacío, y el calendario de Spiderman, que solía colgarse sobre el ordenador, se había caído. Pero la habitación todavía parecía cálida, como si él todavía estuviera allí. Como si todavía tuviera catorce años.
—Jake, no lo entiendo, ¿quién es esa chica?
—Nadie, no te preocupes por eso. Ella no significa nada para mí.
—Pero…
—Shhh. No es gran cosa.
—Yo te quiero, no me mientas, ¿de acuerdo?
—Yo no lo haría.
— ¿Lo prometes?
—Por supuesto. ¿Realmente te habría herido, S…?
— ¡Sky! ¿Dónde diablos has ido?
La voz de Amanda me sobresaltó. Rápidamente, salí del dormitorio, cerré la puerta, sabiendo que no podía volver al pasado cada vez que necesitara hacer pis por la noche.
— ¡Vamos!
Logré mantener mi tono de voz normal.
— ¡Dios! Sé paciente por una vez en tu vida.
Luego, con una sonrisa forzada, fui a ver la película con mis amigas.