Sombras del Pasado - NicholasJ&Tu (Adaptación) - TERMINADA

____(tn) ladeó la cabeza sobre la almohada, todavía con los párpados entornados. No estaba segura de que lo ocurrido no fuera más que un sueño hermoso que la noche había dejado, pero la nota garabateada que descubrió junto a ella, le dijo que no era así. Se mordió los labios. No sabía si alegrarse o llorar por ello. Lo cierto es que recordaba la noche anterior como lo más bello que le había sucedido nunca, y el alivio se apoderó de ella al no tener que enfrentarse a él tan pronto. Se sentía avergonzada y pletórica de felicidad a la vez, y se apresuró a leer las rápidas palabras que él había dejado para ella.
“Cariño: tenemos que hablar. Por favor, no salgas hasta que yo vuelva. Tuyo, Nicholas”.
Nicholas... El nombre que la había aterrorizado hasta hace poco, repiqueteaba en su cerebro ahora como una plegaria llegada del cielo. Se revolvió entre las sábanas con pereza. ¿ Porque sentía al recordar su facciones que todo flotaba a su alrededor ? Era como si de pronto, todos sus miedos se esfumaran con solo pronunciar su nombre, y la envolvió una sensación de tranquilidad inexplicable.
Estaba vistiéndose y su imagen se reflejó en el espejo, devolviéndole una sonrisa que la hizo enrojecer. Parecía como si la figura que aparecía frente a ella, fuera la de otra persona, la de alguien mucho más maduro... ¿ más feliz ?. La idea le pareció ridícula, y aún pensaba en ello, cuando el sonido del teléfono la hizo correr escaleras abajo, convencida de que se trataba de él.
Descolgó el auricular, respirando con dificultad, y respondió con alegría a la llamada.
<< - ¿ ____(tn) ? ¿ Te ocurre algo, querida ? Pareces alterada.>>
Alterada... Sí, tal vez fuera esa la palabra que describía su estado de ánimo después de los últimos acontecimientos. Pero no disponía de tiempo para explicarlo.
- ¿ Sr. Williams ?. ¡ Qué alegría oírle !- acercó más el aparato a su oído, pues el sonido parecía llegar desde muy lejos- Intenté ponerme en contacto con usted cuando...
<< Lo sé, querida, y lo siento. Pero tuve que atender un asunto muy importante. De cualquier manera, regresaré mañana. Quería llamarte para que lo supieras. Aún tenemos que hablar de la disposición de bienes de tu padre, ¿ recuerdas ?.>>
____(tn) frunció el ceño sin comprender. Creía que todo estaba ya dispuesto. El mismo lo había dicho así en su carta...
- No entiendo. Usted dijo...
<< - Lo sé, niña... Pensé que el sr. de Graissier ya te había dado la buena noticia. Le envié un telegrama nada más llegar a Londres rogándole que te lo explicara todo... ¿ Es que aun no lo sabes ?. Después de todo, parece que subestimamos la inteligencia de tu padre... >>
- Un momento, ¿ puede explicarme con detalle a qué se refiere ?- el asombro y la furia se iban apoderando de ella, a medida que comprendía que algo terrible iba a serle revelado.
<<- Verás, chiquilla... Después de que el sr. de Graissier se ofreciera tan generosamente a pagar todas las deudas, creímos que se había perdido hasta el último centavo de tu fortuna. Pero, por suerte, tu padre había invertido mucho dinero durante todos estos años en antigüedades para Charlotte, y descubrimos que ella había puesto todo a tu nombre antes de morir... >>
- ¿ Antigüedades ?- repetía como una autómata tratando de asimilar lo que decía- ¿ No estoy arruinada ?
El anciano lanzó una carcajada condescendiente.
<< - Bueno, hija, no eres millonaria. Pero, si mis cálculos sobre los resultados de la subasta son correctos, podemos decir que disfrutas aún de una posición bastante acomodada.... Pero, ¿ es que ese joven no te ha informado de todo aún ?. Tendré que hablar con él cuando regrese... >>
____(tn) colgó, incapaz de continuar con aquella conversación. Sus dientes estaban tan fuertemente apretados que le dolían las mandíbulas, y abrió la boca para tomar aire, como si la noticia acabara de producir en sus pulmones y en su corazón una dolorosa asfixia.
“No estaba arruinada...”. Su cerebro iba dando poco a poco forma a lo que acababa de oír, negándose a pensar lo que estaba pensando. Aquella historia sobre el testamento de Charlotte, la cláusula que los obligaba a convivir juntos, todo, incluyendo la noche de pasión vivida hacía unas horas, no eran más que una farsa... Una mentira urdida para humillarla, para satisfacer sus propios deseos de venganza en un plan digno de la mente más retorcida. Cerró los ojos, esforzándose por retener en su mente la imagen dulce de sus manos recorriendo con ternura su piel. Pero la furia y el dolor que sentía eran superiores al deseo de recordar en él algo que no fuera mezquino y cruel.
Se retorció las manos con nerviosismo, luchando por contener el llanto que amenazaba con inundar sus ojos... ¿ Cómo podía haber sido tan estúpida ?
- Maldito... ¡ Maldito, maldito, mil veces maldito ! - se arrojó vencida por la evidencia sobre el sofá, pensando en cómo enfrentarse a su rostro triunfal cuando descubriera que por fin había descubierto la verdad... La amargura invadió su alma. Era como si en un segundo, y con un sólo gesto, alguien hubiera partido en dos su corazón, dejando que se escapara hasta la última gota de sangre... dejando su pecho tan vacío que apenas podría volver a sentir.
Aún lloraba, cuando le vio acercarse a ella en silencio. Parecía extrañado, y ____(tn) se controló como pudo... ¿ Cuánta hipocresía era capaz de demostrar aquel canalla ?
Nicholas desvió su mirada confundido hacia la nota arrugada que había caído a sus pies, y la recogió, desdoblándola con cuidado. ____(tn) se la arrebató furiosa de los dedos, volviendo a arrojarla violentamente, esta vez contra su cara.
- ¡ Embustero, no eres más que un farsante !- golpeó con todas sus fuerzas el rostro impávido del hombre, sin conseguir que el golpe alterara una sola de sus pétreas facciones.- ¿ Cómo has podido caer tan bajo ? Tú...
Levantó de nuevo la mano, dispuesta a golpear nuevamente aquel rostro despreciable, pero los dedos de él sujetaron con fuerza su muñeca, haciendo que se retorciera de dolor.
- No sé a qué te refieres.- pronunció las palabras con suavidad, tratando de mantener la calma - Pero será mejor que te tranquilices, antes de que hagas o digas algo de lo que puedas arrepentirte.
- ¿ No lo sabes ? - se soltó con dificultad, frotándose con los dedos la piel dolorida - Si no estuviera tan furiosa, perdería mi tiempo refrescándote la memoria... Pero creo que no lo mereces.
- ____(tn).. te juro que no...
La furia que veía en ella, hizo que sus labios quedaran sellados. Se sintió confuso, desorientado ante la violencia de sus palabras... Sospechaba que al fin ella hubiera descubierto alguno de sus engaños, y pensarlo le enloquecía.
- Basta, no quiero oír ni una sola palabra más que salga de tus labios. No sé cómo he podido creer que había algo honesto en ti....
Nicholas abrió la boca, con la intención de exigir de ella una respuesta, algo que le hiciera comprender lo que había ocurrido con toda aquella dulzura ¿ Qué había hecho que de pronto, la mujer que había abandonado con el rostro resplandeciente hacía apenas una hora, clavara en él aquella mirada insultante y llena de desprecio ?. La expresión de su cara lo hería como nunca antes nada había conseguido hacerlo, y la curiosidad y el temor se adueñaron de él.
- No es necesario que sigas fingiendo- le acusó con fiereza - El sr. Williams ha tenido la delicadeza de comunicarme lo que tú, tan inteligentemente, has sabido ocultarme hasta ahora. Así que ya puedes dejar de mentir... Supongo que estarás orgulloso de tu victoria, ¿ no es así ?. Al final, has vencido. Has conseguido tenerme donde querías, dócil y humilde, reclamando en ti algo que tú, con toda tu necedad, eres incapaz de dar... Pues, bien, espero que lo disfrutes, porque te aseguro que has logrado destrozar mi vida...
Nicholas ató todos los cabos sueltos que aquellas palabras llenas de odio iban dejando tras de sí, y el miedo se apoderó de él. Quería responder a sus acusaciones, defenderse de su ataque, y decirle que nada de aquello importaba... Que todo pertenecía al pasado, a un pasado que se había jurado dejar atrás aquella misma noche, y que debía darle la oportunidad de intentarlo. Pero la furia que había en ella no admitía réplica alguna.
____(tn) le apuntó con el dedo, en actitud inquisidora. En el fondo de su corazón, deseaba que él tuviera el valor de admitir su engaño, que por una vez en su vida, fuera sincero y reconociera la vileza de sus actos. Tal vez así podría perdonarle, aunque sólo fuera por el pequeño atisbo de sincero arrepentimiento que creía ver en sus ojos.
- Quiero que salgas de “mi casa” y de “mi vida” cuanto antes.- pretendió infundir un tono de amenaza a sus palabras, a pesar de que la voz vibraba en su garganta a causa del dolor- No quiero volver a verte nunca más, ¿ me oyes ?

Nicholas intentó acercarse a ella, pero la joven retrocedió tan rápido como si se tratara del mismo diablo.
- ____(tn)...- no sabía cómo explicar la larga lista de embustes que precedían a aquella pelea, pero aún así, la mirada apesadumbrada en sus inocentes ojos, hizo que continuara- Sé que ahora estás demasiado furiosa para entenderlo... Pero quiero que sepas que realmente nunca he deseado hacerte daño. Quizá al principio creyera que era así, pero estaba equivocado... Yo sólo quería jugar un poco, ¿ entiendes ?. Estaba demasiado resentido contra todo lo que tú representas, como para darme cuenta de que no eras responsable de nada de lo ocurrido...
- ¿ Jugar, dices ?- ella apretó los puños, deshecha por el descaro que había en su confesión - ¿ Me pides comprensión después de tener el valor de decirme que no he sido más que un juego para ti ?... Todo ese circo que montaste en torno a la herencia, todas tus arrogancias y desplantes, incluso ese breve interludio amoroso para seducirme... ¡ Todo mentira !... ¿ Y aún te atreves a mirarme ?... Me avergüenzas, me humillas al seguir aquí, ¿ no te das cuenta ?... Pensar en lo ocurrido me hace sentir tan sucia que siento deseos de morir... Espero que al menos consideres tu venganza satisfactoriamente cumplida, y puedas regresar feliz a tu mezquino mundo...
- No es así, ____(tn)... nunca lo ha sido- replicó, en un intento de que viera cuánto había cambiado gracias a ella - Yo estaba confundido, hambriento de todo... Te miraba y pensaba: “Ahí está, tan orgullosa y altiva, repleta de vivencias agradables arrebatadas a mi vida”. Y Quería que sufrieras por lo que yo había sufrido... No podía entender, no admitía que las cosas quedaran como estaban. Pero te juro que a cada palabra tuya, mi odio se aplacaba, y creaba una confusión en mí que me enloquecía por momentos. He sido un necio, lo sé, pero, ¿ acaso no merezco siquiera la oportunidad de explicarte ? ¿ Vas a condenarme sin que pueda decirte lo que siento realmente ?.
Ella se mordió los labios, reflexionando en silencio. ¿ Sentir ? No estaba segura de que fuera capaz de sentir nada por nadie. Estaba tan perdido en aquel universo de odios y traiciones, que jamás podría comprender el alcance que sus actos tenían sobre ella. Le dolía reconocerlo, pero a medida que él hablaba, era cada vez más consciente de cuánto le amaba. Descubrirlo, le helaba el corazón, pues sabía que él nunca debía averiguar su secreto... Había tanta amargura en la sombría mirada que tenía ante sí, que dudaba que fuera posible arrojar una sola bocanada de felicidad en aquellos ojos torturados... Ni amándole como le amaba, podría curar jamás las heridas que el tiempo y la ignorancia habían dejado en él.
- Si he de serte sincera, - murmuró apenas con un hilo de voz - no me importa lo más mínimo lo que tú sientas. Me has utilizado, me has humillado con tus mentiras... Es una locura, pero desconfío de cada cosa que ha sucedido estando tú cerca...
Los ojos masculinos volaron sin querer hacia el pulcro delantal que reposaba cuidadosamente doblado sobre el sofá, y ____(tn) los siguió, ahogando en sus labios la exclamación de asombro cuando su mente reaccionó ante el gesto.
- Tú...
- Sólo quería doblegar tu orgullo, que dependieras de mí aunque fuera por poco tiempo... Tu altanería me volvía loco, quería enfurecerte... Pero cuando vi lo que ese hombre te había hecho... Te doy mi palabra de que sólo pretendía protegerte, ____(tn)... Pensar que pudiera volver a ocurrir me enfermaba...
- Santo Cielo, Nicholas... ¿ cuántas mentiras más ha habido ? ¿ Hasta dónde has sido capaz de manipular la realidad para herirme ?- se dejó caer lentamente, deslizando su espalda sobre la pared, y quedando casi arrodillada a sus pies - No eres Dios, no tienes derecho a jugar con todo y con todos, a hacerles partícipes de tus inmundicias, ¿ es que no lo comprendes ?.
El la sujetó por los hombros con cuidado, obligándola a levantarse hasta casi quedar a su misma altura. Observó la palidez de sus mejillas, el leve temblor que agitaba sus labios, y quiso tener el poder de desvanecerse en el aire. Las palabras culpa y canalla golpeaban en su cerebro, aniquilando cualquier pensamiento condescendiente que pudiera infundirle algún ánimo. Se odió por ser el causante de aquella tristeza, por poner en aquel rostro dulce aquella expresión de dolor que entumecía sus sentidos.
- ____(tn), lo de anoche no fue una mentira....- sus dedos temblaron al recorrer los húmedos párpados de la joven - Pudo ser cualquier cosa menos eso, lo juro... Y maldigo mi nombre por haber sembrado en ti con mis actos esa duda... Te he tenido tan cerca, tan mía... Y he sido tan estúpido como para estropearlo... ¿ Qué puedo hacer para que me perdones ?...
- Sal de mi vida, te lo suplico...- el susurro femenino fue como un latigazo para sus oídos. ¿ Porqué se sorprendía ?. Era responsable de cuanto quisiera acusarlo, y tenía todo el derecho del mundo a odiarlo... Y sin embargo, ¿ porqué se sentía morir al escuchar como ella le pedía que se alejara ?. Salir de su vida... No volver a escuchar nunca aquella risa nerviosa, ni a oler el suave perfume de su piel al pasar junto a él... Estaba pidiendo mucho realmente, y a pesar de que significara enviarlo a un destierro más doloroso que cualquier tortura, sabía que debía concedérselo...
- ____(tn)... mi valiente y dulce adversaria- sus palabras hacían tanto daño a sus oídos, que los cubrió con las palmas de sus manos para evitar escucharle, pero él insistía, torturándola con su voz - ¿ Me envías de nuevo al infierno, cuando apenas he saboreado el paraíso que me ofrecías...?. ¿Ni siquiera vas a mirarme antes de alejarme por fin de tu vida?
Nicholas trató de controlar el temor que la respuesta que adivinaba en los ojos femeninos causaba en él.
- No sigas, te lo suplico, Nicholas. Si aún queda algo de honestidad en ti, ve en paz y déjame sola...
El quiso gritar que no podía. ¿ Dejarla sola ?. Condenarse a sí mismo a una soledad mayor que la que le había llevado a aquella casa...
- ¿ Me pides que me vaya ?- preguntó y su voz sonó como el lamento de un animal herido - ¿ Me pides que no vuelva a mirarte, que no vuelva a sentir la calidez de tu piel, ni la dulzura de tus labios calmando mi sed ?... Es mucho lo que solicitas de mí, ____(tn)... Y sin embargo, sé que he de otorgártelo... Te lo debo. Pero antes, júrame que no has deseado ni por un instante, que fuéramos dos personas distintas, dos personas limpias de todo recuerdo amargo... Júrame que quieres que esto que tenemos desaparezca... y te prometo que haré que así sea.
____(tn) sacudió la cabeza, como si con ello pudiera evitar que sus palabras se adentraran como dagas en su cerebro.
- Esto que tenemos...- repitió en un susurro, incapaz de sostener su brillante mirada - ¿ Y, qué tenemos, Nicholas ? ¿ Unas pocas horas de placer para acallar tus fantasmas ?. No he sido yo quien ha jugado a ser Dios...Ha sido tu odio, tu deseo de venganza lo que hace que te mire, y me pregunte qué clase de monstruo triste y perverso eres... Ya has elegido, Nicholas, y has elegido la mentira y el rencor una vez más... No me pidas que te perdone, porque ni siquiera sé si podrás perdonarte tú mismo...
Su tono era decidido y él sabía que nada podía hacer ya contra lo que él mismo había provocado. Deseaba estrecharla en sus brazos, suplicarle que olvidara su canallada y viera cuánto amor había en él. Sin embargo, se alejó de ella, luchando consigo mismo por no sucumbir a la tentación de abrazarla. Era el peor de los cobardes, por esperar de ella una llamada, una palabra que le detuviera antes de que cruzara el umbral de su puerta para siempre. Pero no sucedió... El silencio le golpeaba en la cara con crueldad, y volvió el rostro hacia ella por última vez, con la esperanza de encontrar en ella un sólo gesto que le hiciera correr a su lado...
____(tn) ocultó la cara entre sus manos, incapaz de verle marchar, consciente de que al cerrarse la puerta tras él, su corazón no volverían a latir jamás. El sonido del pesado portón se clavó en su alma como una puñalada, y un lamento silencioso se ahogó en su garganta, al comprender que se había ido para siempre.