Sombras del Pasado - NicholasJ&Tu (Adaptación) - TERMINADA

Se quedó dormida mucho tiempo después, mientras la imagen de su triste esposo irrumpía en su sueño. Le veía con aquella expresión de profundo dolor arrugando su frente, y como si una fuerza extraña la empujara a despertar, sintió el incipiente deseo de contemplar a Andrew, como si con ello pudiera acallar la inquietud de su alma. Se irguió, deslizándose con pies descalzos hacia la habitación de su hijo, como si este la llamara en silencio para evitar que algo irremediable sucediera.
Andrew se revolvía inquieto en su cuna, como si pudiera sospechar que aquellas caricias que recibía, fueran en realidad una despedida. La despedida que destrozaba a su madre mientras le veía arroparle con amor, con sus manos fuertes y grandes temblando de emoción contenida.
Habían pasado apenas unas horas desde que Nicholas descubriera las cartas, y desde entonces, no había pronunciado una sola palabra. Vagaba por la casa como un alma atormentada, con el rostro y la mente oscurecidos por misteriosos pensamientos. ____(tn) le espiaba en cualquier ocasión, intentando ver en él algún signo, una señal que la empujara a rogarle que se quedara. Pero aquella señal no se producía, y la hora en que él había decidido partir, se acercaba.
Nicholas la miró una vez más, sintiendo que su alma se rompía en mil pedazos ante la idea de abandonar aquel lugar, y con él, todo cuanto amaba.
- Será mejor que me vaya. Aún he de hacer un largo viaje.- dijo casi en un murmullo, y ella desvió la mirada para que no descubriera el pesar que su anuncio provocaba - No espero que me acompañes a la puerta, ____(tn)... Comprendo que mi partida sea un alivio para ti.
Apretó los labios al no obtener respuesta, herido por la frialdad que ella parecía mostrar.
Podía entender hasta cierto punto su actitud, pero no dejaba de lastimarle aquella indiferencia.
- Sólo quiero que sepas una cosa, ____(tn)...- sujetó los delicados hombros para obligarla a mirarle, y ella aceptó con un suspiro - Lo que dejo aquí, significa toda mi vida... Todo cuanto pude desear alguna vez sin saberlo... Quiero que lo sepas, porque no podría soportar que siguieras odiándome sin haberte dicho esto. Ya sé que no cambiará las cosas entre nosotros, y que no hará que me ames... Pero necesitaba decírtelo de todos modos.
Ella abrió los ojos, sorprendida por la magnitud de su confesión. ¿ Era posible que fuera cierto ? ¿ Era posible que la amara, que hubiera estado equivocada durante todo ese tiempo ?. Escudriñó cuidadosamente la expresión de su rostro, buscando en él un rastro de sarcasmo o engaño. Pero su mirada era sincera, y comprendió que no estaba burlándose de nuevo. Quiso decir algo, responder a su sinceridad con la suya, pero los nervios y la felicidad, hacían que sus palabras se ahogaran y murieran entre sus labios.
- No digas nada... Estás tan hermosa con esa expresión de perplejidad... Permite que me lleve ese recuerdo conmigo. Pensaré en ti así, callada y confusa, con la dulzura de tu persona embriagando mis sentidos. No quiero que tus últimas palabras sean de compasión... Deja que en las noches futuras sueñe contigo imaginando que no me guardas rencor, imaginando que vi una sola mirada de afecto al despedirnos...
- Si pudiera creerte... - su voz sonaba lejana, y él se estremeció al oírla - Si sólo pudiera creer que sientes algo por mí. Algo que no sea un deseo mezquino de poseer, de retenerme para no perder a tu hijo... Quisiera creerlo, Nicholas... Muero por el deseo de hacerlo...
El la miraba deshecho, preguntándose qué era lo que estaba tratando de decirle realmente.
- ____(tn)... No seas cruel, te lo suplico. No podría soportar que jugaras conmigo... a pesar de que lo merezca...- ocultó de la luz su rostro, pero ella le siguió, ansiosa por demostrarle que no deseaba hacerle daño - Enfermo sólo con pensar en que he de marcharme...
- ¿ Acaso no quieres ver crecer a tu hijo ?- preguntó conmovida - ¿ Es tan fuerte tu deseo de huir ?
Nicholas apretó los labios, controlando el único deseo que le asaltaba en ese momento, y que no era otro que el de estrecharla entre sus brazos.
- ¿ Huir, dices ?- su voz tenía el tono de las palabras que un reo pronuncia en el instante previo a la ejecución y ella quería ponerle fin - Estoy condenándome, ____(tn), al dejaros... Me condeno al más absoluto destierro, a la más angustiosa de las torturas... Pero lo hago con todo el amor que soy capaz de sentir...
- No tienes porqué hacerlo...
- ¿ Eso crees ?- parecía ofendido, dolido por sus palabras - Te equivocas, ____(tn). Tengo que hacerlo porque te amo con toda mi alma... Y me mataría antes de aceptar de ti una sola caricia forzada, una sola mirada compasiva... No puedo quedarme, aunque lo esté deseando más que cualquier otra cosa en el mundo. No me conformaría jamás, y terminaría por hacer que me odiaras, ¿ comprendes ?... No puedo tomarte sin más, no sin amor...
Había escuchado aquello en otra ocasión, y no pudo evitar sonreír por su torpeza. Entonces había creído que él estaba hablando de él, que le estaba diciendo que nunca llegaría a amarla, y que por eso la rechazaba... Sintió que una inmensa felicidad la embargaba, al comprender lo equivocada que estaba. El pensaba que ella le despreciaba, y por eso se alejaba de allí... Le amó aún más, al pensar en el sacrificio que estaba dispuesto a hacer para complacerla.
Nicholas apretó los puños, furioso por la amplia sonrisa con que ella le agradecía su marcha. ¿ No podía fingir siquiera que le echaría de menos ? Sabía que era demasiado pedir, pero aún así le revolvía las entrañas pensar que ella se burlara de su dolor.
- ¿ Quieres herirme, ____(tn) ?. Porque te aseguro que lo estás consiguiendo...
Ella le rodeó el rostro con sus manos, sin dejar de sonreír ante la sorpresa que leía en él.
- Por supuesto que sí... Quiero herirte, quiero golpearte por ser tan necio... Quiero reír durante toda la noche mientras me amas...- a cada palabra suya, él temblaba como un niño, tratando de asimilar lo que ella intentaba decirle - ¿ Porqué no has tenido el valor de ser sincero mucho antes ?. Hubiera caído a tus pies con sólo pedírmelo, mi amor.... Pero tenías tanto miedo a ser rechazado... ¿ Aún no lo entiendes, cariño ?. Hemos perdido mucho tiempo desconfiando el uno del otro...
- ¿ Qué quieres decir ?. Es posible que tú...- los labios de la joven acallaron sus dudas, y él los tomó hambriento, sintiendo que desfallecía ante el torrente de ternura que brotaba de ellos. La apartó de sí unos segundos más tarde, rogando porque aquello no fuera un sueño que se desvanecería en cualquier momento. Pero no ocurrió. Ella le miraba feliz, aferrándose a su cuerpo con fuerza, demostrándole que aquello estaba sucediendo realmente.
- Por Dios, ____(tn), dime que esto es cierto... Dime que quieres que me quede, y te prometo que nada podrá alejarme de aquí...
- Te amo... Te he amado siempre, aún cuando creía odiarte... ¿ Puedes dudarlo siquiera al mirar a nuestro hijo ?. - él la estrechó ansioso contra su pecho - No podía dejar de pensar que algún día descubrirías mi secreto... Enloquecía ante la idea de que quisieras alejarme de él... Pero, sobre todo, temía que me arrebataras el único recuerdo tuyo que poseía...
- ____(tn), mi pequeña... He deseado tantas veces esto que no puedo creer que esté ocurriendo... Te he causado tanto daño, tanta amargura... No he hecho nada para merecer tu amor, pero Dios sabe que no podría vivir sin él.
- Y no tendrás que hacerlo... - le besó una vez más, logrando que el tiempo se detuviera a su alrededor - Este es tu hogar. Y nosotros somos tu familia... No debes buscar la paz lejos de nosotros, mi amor... No lo consentiré.
Nicholas alzó el ligero cuerpo en sus brazos, recorriendo con ella la corta distancia que les separaba de la alcoba. La depositó con delicadeza sobre las sábanas, observándola con silenciosa adoración, como si apenas tuviera el valor de poner sobre ella sus manos.
- Te miro, ____(tn), y veo tanto amor en tus ojos que me asusta... No soy digno de poseerte. Y sin embargo, el deseo de hacerlo me consume cada minuto que pasa...
Ella extendió sus manos hacia él, invitándole a que la cubriera con el calor de su cuerpo.
El titubeó antes de obedecer, temiendo que su cercanía destruyera su intención de ser tierno y paciente.
Pero su anhelo por tenerla venció cualquier temor que pudiera albergar, y la noche se cerró sobre ellos, cubriendo sus cuerpos desnudos con la luz de la luna, mientras el sonido del viento golpeaba celoso contra la ventana para acallar sus suspiros.
Mucho tiempo después, ____(tn) ladeaba la cabeza sobre la almohada para observar mejor el atractivo perfil de su esposo. Recordó con un estremecimiento las horas de pasión que había vivido, y él abrió los ojos al notarlo.
- ¿ Ha amanecido ? - preguntó, mientras deslizaba sus dedos por la espalda femenina.
Ella negó con la cabeza, parpadeando para alejar de sí las muestras de cansancio.
- No podía dormir... - comentó en voz baja, y él la acurrucó en su hombro conmovido - Estaba pensando en cuánto le debemos a Charlotte... Creo que ella sabía que el destino nos reuniría en algún momento... Presiento que, desde algún lugar, cuidaba de mí hasta tu llegada... ¿ Te parece una locura ?
- En absoluto. Sospecho que, en realidad, ella esperaba que esto ocurriera... Unir a las dos personas que amaba para mantener vivo su recuerdo...
____(tn) se irguió sobre un codo, mordiéndose los labios pensativa.
- Si pudiéramos agradecer de algún modo su cariño... Me siento como una ladrona por ser tan feliz, al pensar en todo su sufrimiento... Al mirar a Andrew, comprendo el dolor que debió sentir al perderte... ¿ Crees que es justo que haya ocurrido así ?
- No lo es. Pero debemos aprender a vivir con el pasado sin sentir pena, ____(tn)...
Ella arrugó la nariz, con la mente muy lejos de dónde se encontraba, y Nicholas comprendió que esperaba que se le ocurriera algo para contentarla.
- Eres muy testaruda, querida...- rodeó con ternura el pálido rostro, besando los suaves labios con vehemencia - ¿ Qué te parece si le damos a Andrew una hermanita ?. Una Charlotte de cabellos claros que ondeen al viento con rebeldía, con tu hermoso rostro, y toda la bondad de tus ojos...
- Y tu fuerza, y todo tu carácter... Y tu voluntad para conseguir cuánto quiera- sonrió feliz.
- Espero que no... - la acompañó con su risa, sintiendo que la vida estaba siendo demasiado generosa con él. La observó largo rato, mientras ella se esforzaba por mantener los ojos abiertos y no dejarse vencer por el sueño.
Su respiración era tranquila, y se sintió orgulloso de ser el causante. Ni en el mejor de sus sueños había podido imaginar que la tendría así, dormida plácidamente en sus brazos. El deseo de protegerla de cualquier mal hizo que la rodeara fuertemente, provocando una somnolienta protesta en la joven. Dirigió la mirada hacia la ventana, y su rostro se suavizó por completo. Estaba amaneciendo. La luz brillaba sobre ella, haciendo que la palidez de su piel resplandeciera, blanca y radiante, tan hermosa que lastimaba su vista. Sus pensamientos volaron junto a sus ojos, buscando algo en el azul que comenzaba a colorear el horizonte.
<< Gracias. Gracias por cuidarla para mí... Sé que puedes oírme, Charlotte... Gracias por todo >>. Una ráfaga de aire le golpéo el rostro, como una caricia afectuosa que respondía a su plegaria. Cerró los párpados, dejando que aquella brisa siguiera su camino, y sintiendo, inexplicablemente y en lo más hondo de su corazón, que con la llegada del amanecer, alguien le decía adiós para que pudiera dar la bienvenida a la vida.