Somewhere Only We Know [Fred Weasley & Nicole Blackwell]

—Despierta. —Llamaba una voz a lo lejos.—Debes llegar a tiempo.
—Si ya voy…

Ella se despertó con parsimonia, y luego se puso de pie tomo una ducha, aun era temprano, y el le hizo el desayuno. Café y huevos fritos, ella sonrio al verlo cocinar, sentía que crecia demasiado rápido y volver a la escuela era algo que no quería.
Ella lo tomo por detrás pero era demasiado alto asi que apunto con la varita y subió unos centímetros. —Te extrañare.

Nada se parecía a lo que pasaba el año pasado, era tan distinto, George abrió la puerta con un poco de desanimo, cerró los ojos y se puso a lado de ella. —¡Hey!— Saludo.
Ella empacaba el baul, tomo todo lo que necesitaba y tomo el Pygmy Puff poniéndolo dentro de una pequeña petaca anaranjada.
“Freddie Stuff” se leia al frente de esa cosa, y lo empaco, tomo sus viejas cosas Muggles y las llevo a la chimenea las tiro y se quemaron de a poco.
George hablaba un poco de aquella chica, y le susurraba cosas a su hermano, quien ponía cara de incredulidad, y luego sonreían planeaban algo, Eso era seguro.

La chica se movía sin parar, y sabia que debían llegar a King’s Cross en poco tiempo, miraba la sortija y de pronto algo entro en su sentir. No quería dejar a Fred y el se acerco, la cara de Nick detono en tristeza y lo abrazo, era tan pequeña a su lado, unos 30 cm más grande que ella estaba Fred, y la abrazo, también le salieron unas lagrimas pero sabía que esto era por el bien de la familia y de la orden y todo pasaría rápido.
Mas pronto de lo que pensaban estarían juntos, lo que tenían entre los dos era algo demasiado grande y no podía pasar nada malo con eso, estarían juntos hasta el final.

El seco las lagrimas de las mejillas de la chica, mirándola a los ojos, y George entro..

—¿Puedo hablar contigo un segundo?—Ella acepto con un cabezazo un tanto seco y Fred los dejo solos.
—Nick…—Miro a la chica a los ojos, y aquel sentimiento que compartía hace un tiempo exploto dentro de el. —Yo sé que Fred te esperara, se que estarán juntos y se cuanto te ama, por eso.. te he y le he hecho esto, se el secreto que guardan— Ella lo miro impactada.
—¿Qué?—Apenas dijo la chica con los ojos puestos en el Gemelo.
—Se porque portas eso.. —Miro la sortija. —Mamá dira que son Jóvenes pero se cuanto te ama. —Por algo somos Gemelos.

Ella lo miro, y el la abrazo…

—Quiero que tengas esto… —Ella abrió su mano, y el le dio un colgante era un corazón.–El tendrá esta… esta.—Era otro colgante parecido al suyo.
—Gracias—Apenas logro decir ella, George le dio el corazón y miro a su hermano dándole el otro colgante.

La piel se le erizo y dio vuelta Fred la esperaba con ese abrigo purpura que ella le había regalado, se veía muy lindo y demasiado Muggle ella llevaba un lindo vestido y lo tomo de la mano.
Salio por la puerta con los ojos aguados y le sonrió con determinación George le dio un calido abrazo de despedida mientras Fred se adelantaba al caldero chorreante, ella dejo escapar las lagrimas y el le dijo. —Sé que te esperara…—Suspiro y la dejo ir.
Caminaron por el Callejón de la mano y el baúl encantado a su lado, no dirían Nada era alejarse de eso, se despidió de George con la mano, y sonrió.
Todo el camino estaban callados algo los abrumaba, el era su felicidad, el era su todo y debía dejarlo para volver a Hogwarts la única forma de volver a salvar a todos.
Sus mejillas estaban rojas, para cuando tomaron el taxi su corazón palpitaba intensamente debajo de aquel saco.
—Demasiado seria… —Le dijo el sacándole media sonrisa, y la abrazo por el costado. —Animate, nos veremos en Hogsmeade para tomar una cerveza de mantequilla.
—Lo sé…
—No le des aquel filtro a Flitch. —Ella rió a medias.
—¿Estaras aquí para mi cierto?
—Por supuesto… —Le dijo el con una sonrisa.

Habian llegado, el bajo del auto dándole la mano para bajar después de haber pagado, ella salió y se paralizo al ver King’s Cross.

—Debería decir que tengo spatergroit —Dio la solución ella.
—Tienes que volver…

Ahí iba aquel vacio de despedida que se formulaba cuando lo sentía lejos, siguieron caminando de la mano, hasta el anden, ella no decía mucho y el solo pensaba en ella llendose.

—Debería quedarme— Ella se Frenó.
—No puedes…
—Por favor —Le suplico ella.
—Imagina, asi será cuando vengamos a dejar a nuestros hijos—El lo soltó con lagrimas en los ojos.
—Oh.. Freddie.


Ella se detuvo ante el muro que daba al andén, y miro la sortija, Los ojos se le aguaron y camino más lento, pero se detuvo, Giro y lo beso era aquel beso de despedida, aquel beso que la hizo derramar las lagrimas, y el se alejo, le vio las mejillas, unas pequeñas lagrimas surcaban por ahí.

—Oh no me hagas llorar… —Le pidió el, pero ya era demasiado tarde.
—Lo siento— Se disculpo ella con más Lagrimas.

Estas lagrimas eran diferentes eran de un sentimiento completamente distinto, tan tristes que se veían.
El la miro a los ojos, el relampagueante cielo los hacia mirarse, ambos tocaron el colgante y entraron al anden 9¾ Ella suspiro, tenia miedo y frio lo tomo mas fuerte de la mano y ahí estaba, aquel expreso escarlata las lagrimas seguían saliendo por sus ojos.
—Te arruinaras el maquillaje. —Le insistió Fred.
—No te vayas nunca Fred…
—No lo hare… —Las lagrimas también le surcaban el rostro.
—Lo siento…
—Recuerda que tenemos algo que cumplir… escríbeme todos los días si es necesario, aunque no creo que tengan tantas lechuzas, comprare una.
—Lo prometo… amor.
—No te olvides de mi…
—No lo hare—Contesto el mirándole la mano y el colgante.
—No lo hagas Freddie.

Ella subió el equipaje, estaba a punto de partir y el vacio se hacía inmenso, ahí estaban los padres de Fred y los chicos, y ahí estaban los ojos de la persona que más amaba en el mundo, la sonrisa, su cabello rojizo tan anaranjado y único, sus labios delgados y su cara pálida. Las cientos de pecas que rodeaban su nariz y sus mejillas durazno, lo beso una última vez, con tanto amor… como solo ellos podían sentirlo.

—Te amo— dijeron ambos al unisonó, y se resguardaron en un abrazo.
—Estaremos bien.— Prometió él, y ella tuvo un espasmo de dolor.
—Hasta pronto Freddy…
—Hasta Pronto…

Lo beso por última vez, y subió al expreso, las lagrimas brotaban por sus ojos más rápido que nunca, sus ojos estaban borrosos y entro al camarote sus cosas ya habían sido guardadas, tomo la caja de “Fred” y entro al camarote, que creyó vacio, pero ahí había una chica de cabello largo, y ojos castaños que apenas logró ver, se sento y se toco el pecho, sosteniendo el colgante miro por la ventana y el Expreso de Hogwarts avanzó, por un momento se puso de pie… Saltaría, Pero la castaña, la nueva la tomo de la mano y la hizo quedarse, ella comenzó a llorar soltar sollozos y miro al pelirrojo quedarse en la estación con lágrimas en los ojos.



 

La lluvia se arremolinaba alrededor del lugar, se sentía el frio y ella solo se había quedado dormida, la chica castaña la miraba, y sabia quien era aunque Nick dormía, era una de las Blackwell si mal no recordaba, se miro por el reflejo de la venta y la miro, estaba segura que era novia de algún Weasley, que por cierto no habían vuelto este año a la escuela.
El carrito de dulces se acerco con lentitud por el vestíbulo y compro varios chocolates y varitas de regaliz, tomo jugo de calabaza y miro el PygmyPuff naranja del regazo de la chica, el gato que tenía estaba a un lado de ella también.
El camino era largo varias horas se hacían al colegio ella era de 8vo grado también, a punto de terminar Hogwarts y era bastante buena, Nick abrió los ojos, el vació seguía latente pero de a poco se llenaba.
—¿Chocolate?—Invito la chica frente a Nick.
—No gracias… —Le dijo Nick con una sonrisa.
—Deberías comer un poco, por lo menos dormirá el sentimiento. — Insistió la chica.
—Está bien. —Asintió Nick tomando un poco y lo llevo a su boca.
—Pygmy Puff, ¿no?—Le dijo La chica a Nick.
—Si…
—Fui a Sortilegios casi compraba uno Azul.
—Wow…
—Nunca vi uno anaranjado. —Aquel Pygmy tenia otro significado, Nick bajo la mano y le dio un poco de varita de regaliz a Ben, el pequeño Pygmy.
—¿No quieres volver cierto?—Le dijo mientras la observaba con detenimiento y Nick negó con la cabeza.
El gato subió al regazo de la joven bruja y miro por la ventana, Nick la observo por unos minutos, y dijo:
—Mayra Hastings—Sonrió.
—Nicole Blackwell…
El sonido proveniente del vestíbulo se hizo más fuerte a cada vez que seguía.
—¿Quisquilloso?—Pregunto Luna Lovegood mirando a Mayra. —¡Hola!—Exclamo con ojos de emoción.
—¡Hola Luna! —Dijo Nick con parsimonia mirando a la chica.
—¡Nick… es excelente que estes aquí! —Luna entro y la abrazo efusivamente.—Creímos que no volverías.
—Por un momento lo creí también.
—Oh es cierto…

May llevaba la mirada de una a la otra… y un minuto después Luna entorno la mirada a ella.
—Hola… Luna Lovegood. —Se presento.

May y Nick se miraron… y Hermione Ron pasarón saludando con la mano, Luna salió del camarote y se fue dando brincos por todo el vestíbulo, Nick miro aquel cielo que se postraba arriba de ella, de un tono obscuro y rosado era el atardecer,Nick se mantuvo callada mirando a Anubis el gato de May.

—¡Deben alistarse!—Dijo Hermione y Nick salió del camarote para vestirse al volver vio a May con la túnica de Hufflepuff.
—Oh…—Exclamo Nick dejando sus cosas. —Confiaba en que serías Gryffindor.
—Oh no.. soy Hufflepuff pero supongo que eso no importará.

Ambas chicas se miraron y sonrieron.

—Bueno, y ¿por qué llorabas?, digo si se puede saber.
—Eh… Bueno, es que exactamente no quería dejar a alguien.
—Un Weasley ¿no es así?
—Bueno si…
—Los pelirrojos no abundan—Soltó una sonrisa.
—Seguro…
—Bueno… pero será genial es el último año y estarás libre… a menos que trabajes para el Ministerio.
—Bueno… no lo creo, uno nunca sabe.
—Si bueno… seguro que será un gran año. —La chica tomo el colgante y sonrio.

El expreso se iba deteniendo poco a poco, hasta quedarse en el lugar correcto ahí estaba Hagrid y varios chicos.

—Dale vamos… —Dijo May tomando a Anubis.

Ambas salieron de ahí pero un chico más se acerco…

—May, el profesor Flitwick me ha mandado a decirte que este año cubrirás el primer puesto como prefecta, Steve no ha vuelto así que comenzaras los Hufflepuff nos aseguraremos de que no quede nadie más en el expreso.
—De acuerdo… —May asintió y Nick se quedo atónita, ojalá Fred usara teléfonos podría llamarlo. —Me quedaré Blackwell, te veo Luego.
—Ok…

Nick se deslizo por la puerta ahí estaba Hagrid.

—Bienvenida… Nick—La estrujo, Ron y Hermione están a punto de partir, solo recuerda que este año hay más normas.

Entrando a los terrenos del castillo Nick observo todo, había nuevas medidas de solución y había muchos Aurores cuidando lo que entraba, ahí estaba Flitwick tomando lista y Flich, entonces recordó lo del filtro ojala estuviera Fred ahí.

~

May se quedo, apagando el vagon de Ravenclaw, el más alejado al conductor iba sola, los demás cuidaban por afuera, Luego estaba Hufflepuff y mas adelante Gryffindor, apago todas las luces con la varita y avisaba. —Vacio… —Siguio caminando dentro del Expresso y entro al vagón de los Slytherin.
—Dragón Frito— a Eso era lo que olía aquel vagón, siguió caminando y minutos después tropezó.
Miro al suelo y sintió algo debajo de sus nudillos. —Finite Incantatem—Dijo apuntando al bulto en el suelo, algo respiro y tomo la capa de invisibilidad.
—Hola—Saludo ella, al chico con sangre en la Nariz.
—Hastings—Dijo un chico.
—Ya vamos… —le dijo ella.
Harry se sostuvo de ella unos minutos y caminaron hasta Flitwick.
—¡Potter tu nombre! —Dijo el diminuto profesor.
—¡Profesor me conoce desde primero… ¡–Gruño.
—Nombre…
—Mayra Hastings y Harry Potter. —Ella le sonrio.. y lo miro.
—Parece que tu nariz… —Ella movio los dedos de su mano… cerca de su Nariz.
—Oh… —Harry trataba de contener la Sangre.
—¿Quieres que…?—Ella la arreglaría.
—Bueno…
—Episky—Dijo con una sacudida de varita y la Nariz de Potter se acomodo.

Era doloroso, ambos subieron al ultimo carruaje y siguieron el camino.

La lluvia caia era la primera vez que llovia al llegar a Hogwarts la mayor parte de las veces era normal pero pronto caería una tormenta.
La chica tomo aquel bolso que le recordaba a Fred, y subió al carruaje la chica que había concido dentro del expreso había desaparecido, se sento junto a unos chicos de Ravenclaw y miro por la ventana.
—Eres… ¿Eres nueva? —preguntó un chico de 7mo grado.
—No—admitió ella mirando aun por la ventana.
—Es amiga de Luna, ¿Recuerdas? —Una chica le dio un golpe al chico enfrente a Nick.
—¿La repetidora? —comentó el rubio a lado de ella.
—Si, la de Gryffindor —sentenció Nick con inercia y siguió mirando, llevaba muy poco tiempo lejos de Fred y ya lo extrañaba sintió como la brisa le golpeaba el rostro, mientras los chicos hablaban de los aurores que estaban cerca de ahí.
—Recuerdan a Fernanda, dicen que podría volver.
—Es imposible—dijo la chica que los acompañaba.
—Oh tienes mucha razón ella no volvera—Termino Nick y los observo por un momento.
—Ah tu eres…
—Así es…

El castillo estaba ahí nadie entendía o en realidad nadie sabia por que ella cursaría 7mo o en realidad 8vo, era repetidora pero por un atraso severo en Beuxbatons.

—Vamos—insinuó el chico pregunton y le miro la mano a la chica, que se mantenía en el regazo.

Nick se puso de pie, miro hacia atrás y observo a Tonks, espero a que los chicos se fueran pero…
—¿No subiras? —pregunto un chico del carruaje.
—En un momento.
—Oh… esta bien, soy Alexander Abbott—Concluyo con una sonrisa y se fue.

Tonks miro a Nick, Ella no era la misma desde la muerte de Sirius, algo la mantenía apagada triste hasta distante, después de eso, algo que nadie podría reparar, Nick se tomo la bolsa y camino con tranquilidad hacia la metamorfa.
—¡Tonks! —dijo Nick maravillada.
—Hola Nick—El desanimo de Tonks se podía observar.
—¿Qué hacen aquí? —Parecia una mejor pregunta para el momento.
—Las cosas que han pasado en el mundo de los magos ahora nos dejan estar más cerca el ministerio nos ha mandado hacia aca, a una cuadrilla de Aurores.
—¿Has visto a mi padre? —Preguntó Nick con curiosidad.
—No, dicen que sigue con lo de tu hermana.
—No ha mandado lechuza— Se lamento Nick y miro a Tonks quien estaba opaca.
—Seguro esta bien, bueno entra deberías dejar de mojarte.
—Si—Asintio la chica con parsimonia. —¡Tonks! —La metamorfa, se giró y la miro nuevamente.
—¿Qué ocurre? —Pregunto Tonks.
—¿Podrías mantenerme al tanto con todo?.

La bruja asintió y se despidió de Nick con un insípido abrazo, subió las escaleras y miró los nubarrones en el cielo, pronto llovería más fuerte.
Entro al castillo, el aroma tan peculiar embargo sus pulmones y su nariz, el calor de hogar la mantenía a salvo y resguardada miro a la profesora Mcgonagall y ella le hizo una seña.

—Blackwell, bienvenida seas espero que este año sea de lo mejor.
—¡Gracias profesora! —Le dijo asintiendo y sonriéndole.
—Blackwell ¿podrías ayudarnos con los alumnos de nuevo ingreso?, el señor Weasley y la señorita Granger son prefectos, y me gustaría que también lo fueras.
—Seguro profesora, le ayudaremos en lo que puedas.

La profesora le dio la insignia y un sobrero rojo que debían usar los prefectos, camino dentro del lugar y se sento donde solia hacerlo Fred y George.
—¡Nick! —saludó Ginny quien se puso de pie.
—¡Ginny! —La abrazó

Los demás la saludaron también y Hermione le abrazó.

—Me da gusto que estes aquí.
—Oh… Gracias Mione.
—De Nada.

Los chicos se sentaron y Nick se colgó la insignia de Prefecto.

—Sabia que la Profesora McGonagall te la daría, Ron y yo también lo somos, y Gryffindor tiene como a capitán a Harry. —dijo Hermione emocionada.
—Genial.

La cena había comenzado la lluvia se había incrementado y era casi completamente un diluvio, el cielo del comedor estaba nublado y a decir verdad se podía sentir la fría lluvia pero era una sensación de inercia.
—¿Y Harry? —Preguntó Nick tomando un bocado de pastel de nueces.
—No lo sé—Dijo Hermione con el ceño fruncido, sin en cambio Ronald seguía comiendo pastel y Hermione giró.

—¡Deja de comer Ronald, Tu-mejor-amigo-esta-perdido! —Separó cada una de esas palabras por un golpe en el hombro de Harry.
Quien había entrado corriendo y sin inmutarse se sento junto a Nick.
—¡Tienes sangre! —Le espetó Hermione.
—¿Dónde estabas Harry? —Pregunto Nick con asombro y lo miro.
—Eh… un intercambio en el expreso.

Nick miro alrededor y vio a Mayra quien le sonrio y se sento junto a sus compañeras.

—¡Bonita Nariz Potter! —Dijo Draco quien acababa de entrar.
—¿Tie…

Comenzaba a decir la chica cuando de pronto Dumbledore se puso de pie, no faltaba absolutamente nadie para que los aurores cerraran la puerta Dumbledore alzo las manos y tranquilamente comenzó.
—¡Sean todos bienvenidos a Hogwarts! —Miro a su alrededor ysiguio. —Debemos recordar que como cada año este es uno distinto, el Que no debe ser nombrado ha recabado fuerzas. —Harry miro a Draco y Nick lo imito—El mundo mágico esta en asecho pero tengan por seguro que este año, todos y cada uno de nosotros estará a salvo dentro del colegio, no deben preocuparse por nada. —Miró a Nick y ella asentio.
—Para algunos esto será nuevo, mientras que para otros… todo será parecido más no igual, y debemos recordar a sus profesores.

Nick conocía casi todas las caras sobre la mesa de los profesores, Snape, Flitwick,McGonagall, Trewlany, pero había alguien más, Nick se percato de que hablaban de el.

—El profesor Horace Slughron, Ocupara el cargo de profesor de pociones, y el antiguo lugar del profesor Severus Snape.

—Snape—dijo Ronald y miro a Harry quien también mio a Hermione y todos miraron a Nick.

La cena había terminado las advertencias de Flich estaban listas y Nick recordó lo del filtro de amor, Nadie le recordaba a Fred más que sus hermanos, y bueno es que eran sus hermanos.

—Es hora Nick—Le dijo Hermione poniéndose el sombrero rojo, que le dio la Profesora McGonagall.
—Si… —tomo el bolso con los horarios y se puso de pie sobre un taburete.
—Cuando la Prefecta Blackwell diga su nombre den un paso adelante y formen una fila detrás del Joven Weasley—espetó Hermione mirando a los pequeños de primer año.
—Browen, Elisa—Llamo Nick y miro a la pequeña niña.
—Brott Marcus—El pequeño de tez morena la miro y se coloco tras Ron.

Cada uno de los de primer año tenían su pequeño Horario y caminaron para afuera Ron los guio por todo el corredor por cada una de las escaleras diciendo varias cosas aunque sonaba temeroso, Hermione y Nick cuidaban que nadie se rezagara y siguieran todos a la torre, llegaron ahí por donde estaba la señora gorda y Hermione pronuncio. "Babosas de dulce" dejando que todos entraron.
—Las chicas en el dormitorio de la derecha y los chicos en el dormitorio de la izquierda—Pronuncio Nick haciendolos entrar, a todos.
—Buen trabajo—Felicito Hermione con una sonrisa.
—Si.
—Debo decir que espero no haberme visto así... cuando llegamos.
—Lo sé— dijo Hermione sonriente.
—Bueno... —exclamó Nick con un dejo de sorpresa al mirar su horario.
—¿Qué ocurre?—Le dijo Hermione acercandose.
—Si es que tengo mucho tiempo libre, eh digamos que es un horario repetitivo y variado tengo que pasar varias materias adeudadas, y además son pocas.

Pociones, Encantamientos, Transformaciones y Defensa contra las artes obscuras eran las pocas materias que debia cursar 4 a comparacion de las 7 u 8 Originales que se impartian.

—¡¿CUATRO!?—grito Ron.
—¿No puedo creer que hayas venido por cuatro materias—dijo Hermione y Nick alzó los hombros.
—Lo sé, bueno chicos los veo por la mañana debo ir a mandar algo...
—Una lechuza para Fred— exclamó Ginny quien acababa de entrar, Nick asintio y salio para la lechuceria.

La chica camino con tranquilidad por los pasillos obscuros de Hogwarts, le tomo unos minutos llegar a la lechucería estaba resbaloso y se sentía extraña la brisa, 8vo año, 7mo en realidad, pero solo cuatro materias por acreditar, tendría mucho tiempo libre quizá podría convencer a Mcgonagall de que la dejase ir a ver Hogsmeade y salir de ahí para visitar a Fred, tomo una lechuza que da Hogwarts, y escribió en el pergamino de la bolsa.

“Hola Sr. Weasley:
He llegado a Hogwarts hace un par de horas llego el expreso, fue extraño conoci a una chica de Hufflepuff y es muy amable, también es Prefecta al igual que yo, Ron y Hermione, todos estamos bien aunque te extraño, ha sido extraño volver sin ti.
Le serví el filtro de amor a Flitch, parece que las cosas de sortilegios no funcionan, por cierto es una sorpresa solo tengo que cursar lo ultimo del año pasado, estare mucho tiempo libre y no se como utilizarlo, podríamos idear algo para poder vernos, aunque este año las cosas han cambiado, hay demasiada seguridad, apuesto que conseguiré una salida con Mcgonagall, por cierto, ¿podrías comprar una lechuza? Te la pagare cuando te vea, y asi nos comunicaríamos más fácilmente, ah… creo que vere si entro de nuevo a el club de duelo, suena interesante dicen que han modificado todo, no lo sé quizá lo haga, espero que estes bien… te mando muchos besos, recuerda que te ama Nicole.”

La chica cerro la carta y la puso en la pata de una lechuza parda de nombre Tyron, y la dejo irse, se quedo mirando a la lechuza por donde las luces del colegio aun la veian, entonces se quedo ahí unos minutos, y suspiro, extrañaba sentir el calor de los brazos de Fred sosteniéndola por detrás o aquel suspirar o sus susurros, se quedo ahí y de pronto.

—No crees que deberías ir a dormir Blackwell—Le dijo una voz al oído, ella se dio la vuelta y miro al chico que la asechaba.
—Eh la próxima vez deberías ser menos cercano con tu compañero Abbott—Le sentencio ella.
—¿Mandas cartas? —pregunto Alexander con curiosidad.
—Si.

La chica giro y salió a grandes zancadas de ahí Alexander la siguió un poco más y la miro.
—No deberías andar sola por ahí Blackwell ya sabes lo que dicen.
—No, y no me interesa permiso.

La chica bufó y salió caminando por ahí con determinación…



—Te he traido de comer cariño—dijo Molly Weasley en el marco de la puerta.
—Gracias mamá lo comeré en un segundo.
—Fred deberías levantarte ella seguro estará bien, es grandioso tener quien cuide de Ginny y de Ron, aunque no se lo he pedido, pero.. —La señora Weasley hablaba tan rápido que apenas comprendía.
—Si mamá, me parece que lo hará—Intervino George con una mirada que hizo a la madre de ambos detenerse y salir por la puerta.
—Gracias—dijo Fred entre la almohada.
—¡Hey! Deberías comer y ponerte de pie, nadie te había mandado a cama, desde la Bludger que te golpeo el año pasado. —Fred Rio, y se sento en la cama la nariz la traia roja y los ojos igual.
—Eh no fue el año pasado fue hace como 3—Le corrigió y tomo la crema de calabaza y el lomo de carne en su plato y comenzó a comer.
—Eh…¿ recuerdas cuando fuimos a Hogwarts y la viste?
—A Nick… —Le dijo Fred.
—Si… cuando dijiste algo como ufff.. linda—Rió George y su hermano lo siguió.
—Quien diría que por fin iba a pasar algo como esto…
—Fred sabes que lo que paso con Alice fue hace mucho tiempo, y era parecido.
—No—Fred entrecerró los ojos y fulmino a su hermano. —Ella y yo no íbamos a casarnos ¿si?
—Tenias 14 casi 15 y no lo harias a esa edad.
—Sabes, que podría haberlo hecho si lo hubiera sentido, pero ella se ha ido.
—¿Cómo Nick?
—Ella no se ira George—espetó Fred molesto.
—Bien es cierto, pero si mamá se entera de lo que esta pasando entre ustedes se armara una gran revolución, lo sabes.
—Lo se George.
—Pero sabes que mamá…

La señora Weasley escucho pronunciar su nombre y se quedo parada detrás de la puerta y ellos siguieron.
—¿Qué George?
—Sabes que se volverá loca con eso.
—Es imposible dijo Bill que era la mejor opción sabes que si ella no fuera la indicada Bill no habría dicho absolutamente nada.
—La indicada, creo que es cierto, ella es la indicada, ambos se miran distinto, y se aman, ¿pero será la indicada para mamá?
—Eso no importa solo me casare con ella, no lo harán ustedes…

Los ojos de la señora Weasley se empañaron y el vaso que tenía en la mano, le resvalo, pero antes de llegar al piso pronuncio. “Aresto Momentum” y lo paro, recogió el vaso y salió con lagrimas en los ojos de ahí.

—Bueno, lo sabes… ahora me alegra, aunque deberíamos… seguir con las ideas.
—Cierto, espero haya mandado una Lechuza, recuérdame que mañana debemos comprar una en el emporio.
—Si… vamos termina eso y volvamos a casa.
—Seguro…



Fernanda observaba por la ventana donde había algo frío… ahora estaba en la casa de los Malfoy de nuevo, estaba aburrida y sobre todo ahora deseaba volver a Hogwarts pero eso en realidad le daba más miedo que cualquier otra cosa, había matado a un chico y eso no era lo mejor visto pero ahora no sabia como recuperarlo, entonces escribió, debía hacerlo, era magnifico poder hacerlo y mandarlo.

Hola
Se que ha pasado mucho tiempo desde lo que ocurrió con Cedric, pero quería decirte que lo siento, siento haberme separado de ti, ahora que te necesito ya no se puede volver, y eso resulta ser un poco doloroso, recuerdo tu sonrisa cuando íbamos a la lechuceria a contarle cosas a nuestros padres, recuerdo como era tu cabello castaño cuando llovia y me cubrias con un hechizo, sabes te extraño solo un poco pero el me necesita a mi…


Corrio hasta una lechuza que tenían los Malfoy y la envio a Nick, era extraño pero quería hacerlo, se quedo mirando antes de volver a su cama y dormir cuanto más podría hacerlo.

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