"Friends, Lovers Or Nothing" (Zayn Malik) TERMINADA

En fin, Zayn se fue y yo me dispuse a bajar a comer. El almuerzo pasó rápido y tranquilo...sin preguntas sobre la espontánea visita de mi amigo ni cargadas por parte de mi padre. Simple pero efectivo.
Terminamos de comer a eso de las 2 y decidí darme un baño para aliviar el calor del mediodía de verano. Así estaría más descansada para la tarde de paseo en bicicletas, que al parecer venía prometedora. Como soy de las que demoran mucho en bañarse, cosa que me traía seguido las quejas de mi mamá, salí a las 3. Me cambié y fui a revisar las ruedas de la bici, para ver si estaban bien infladas. Le faltaba un poco de aire a la delantera así que tuve que buscar el inflador. En eso tocaron el timbre.
-Pasaaaaa! estoy buscando el inflador!-
A los 20 segundos tenía a alguien abrazándome por atrás sonriendo.
-Holaaa! Necesitas ayuda?- dijo el morocho.
-Nono, está bien... lo que pasa es que no encuentro el inflador y mi bici tiene una rueda floja.
-Querés que busquemos el de mi casa?. Lo usé recién así que sé donde está.-
-Ok, mejor, porque si esperamos a que aparezca el mío, vamos a salir pasado mañana.- Se rió de mi estúpido comentario y cruzamos a su casa.
Encontramos lo que buscábamos en menos de la mitad del tiempo que demoramos en mi casa. Agarramos nuestras cosas, un par de botellas de agua que gentilmente la mamá de Zayn nos dio y nos fuimos.
Después de pedalear como media hora, empezamos a perder de vista las pocas casas y nos adentramos en un campo. Como el paisaje era lindo, supongo que nos distrajimos y seguimos, otra media hora después, ya estábamos perdidos en el medio de la nada.
-Che Aldi...me parece que nos perdimos...- Agregó observador mi amigo.
-Nooooo, a vos te parece? Si boludo, es obvio que nos perdimos! que vamos a hacer ahora?- pregunté algo preocupada.
-Hey!, tratame un poco mejor que se supone que vos sos la que conoce...yo soy el nuevo. Ya fue, esperemos a que se haga de noche para ver las luces de la ciudad, y entonces empezamos a pedalear en esa dirección.- Además de observador, era inteligente
-Em, dale, otra opción no se me ocurre. Pero vamos a sentarnos abajo de ese arbolito porque de acá a las 8 de la noche nos horneamos querido. A todo esto, después vas a ser vos el que le explique a mi mamá por qué llegué tan tarde.-
-Es un trato- dijo Zayn suspirando. Dejó la bici a un costado y se sentó bajo la sombra del árbol. Lo imité. Ambos quedamos sentados sobre el verde césped, enfrentados. Me miró y sonrió. Desvío su vista hacia el césped para comenzar la tan no cómoda conversación.
-Así que, cuándo me viste?.- preguntó. Tome aire y comencé.
-Ayer en la feria, estabas en el banco junto a la última tienda…- dije. Zayn no despegaba la vista del suelo. -Ahora que estamos más tranquilos, hablemos. Por qué no me dijiste nada?.-
-No lo sé, Aldi. La verdad que no lo sé. No la conozco hace mucho tiempo. Vive a tres cuadras de mi casa. Su nombre es Clara.- Dijo sonriendo, como si estuviese recordando la primera vez que la vio. No les voy a mentir. Sentí celos. De qué podría sentir celos? No lo sé. O sea, Zayn era mi mejor amigo. Además, yo estaba saliendo con Liam. Qué era lo que me pasaba? La voz de Zayn me hizo volver a tierra. -La conoces, no?- parecía interesado.
-Si, un par de veces hable con ella… parece simpática.- No me funcionaba la cabeza para pensar. No sabía que sentía. Fingí una falsa sonrisa lo miré. Él hizo lo mismo, y sonrío.
-Pero igual no estamos en nada serio. – Aclaró.- Solamente fue un beso- “Y un muy buen y profundo beso” pensé, ya que por poco no se traga a la pobre chica.
-pero por qué me estás aclarando eso? no tenés que darme explicaciones a mi Zayn.- Dije sonriendo. El movió la cabeza de lado a lado.
-Aldi, sos mi mejor amiga, si tengo que darte explicaciones.- Dijo sonriendo. Se abalanzó sobre mí y me dio un fuerte abrazo.- Sos como la hermanita menor que nuca tuve. Te quiero- dijo despeinándome brutamente los cabellos. Lo empujé riendo, y me peiné con las manos como pude. “Genial” pensé. “solamente me quiere como hermana”. Pero no necesito que me quiera como algo más…
-Yo también te quiero “hermanito mayor”.- dije haciendo las comillas con los dedos, resaltando la última palabra. Él solo sonrío, y se recostó sobre el pasto. Hice lo mismo, y quedamos mirando el cielo, limpio de nubes. Giró su cabeza y me miró.

-Y ese collar en forma de corazón? No te lo había visto nunca.- preguntó sonriendo.- Es muy bonito, te lo compraste en la feria?.-
-No, me lo regaló Liam.- Puse mis manos sobre aquella cadenita.- me lo regalo por nuestro aniversario el sábado. Sobre la rueda de la fortuna. Fue muy romántico. Prometió serme fiel, uererme y no herirme.- dije sonriendo al recordar las palabras exactas de aquel mágico momento. Zayn estalló en risas.
-Todo eso te dijo? No te preguntó si querías casarte con él, o si querías ser la madre de sus hijos?.- preguntó divertido. Lo fulminé con la mirada.
-No sabes nada Zayn, así que no opines. Eso es ser romántico.-
-Ya Aldi, hablando en serio.- dijo volviéndose a sentar. Su rostro se torno serio.- No confío en Liam.-
-Solamente lo viste una vez en tu vida.-
-Lo sé, pero no me cayó bien, y tiene algo que no me gusta.-
-Opiniones son opiniones, no me vas a hacer cambiar de parecer.- contesté secamente.
-Ya sé, solamente te quería hacer saber lo que pienso.- Tomó mi mano.- si te hace algo, lo voy a ir a buscar para desfigurarle la cara. Nadie rompe el corazón de mi hermanita.- Ahí va con el “hermanita” de nuevo. Sonreí.
-Gracias por ofrecerme tus dotes de artes marciales, pero no van a ser necesarias. Gracias por preocuparte por mí.- Sonreí. Me devolvió la sonrisa.
La tarde se paso volando, cuando el sol se estaba ocultando por el oeste, vi cómo a lo lejos las luces de las casas se iban prendiendo una por una. Sabíamos que teníamos que ir en aquella dirección. Tomamos las bicicletas y encontramos el camino de vuelta. Al llegar, Zayn me acompañó, y el mismo se disculpó con mi madre por la hora de llegada. Ya era la hora de la cena. Se despidió de mí con un sonoro beso en la mejilla y me susurró al oído: Te prometo que no va a haber más secretos entre nosotros. Sonreí. Él giro, y caminó hasta entrar a su casa.
Los días pasaron, y cada vez estaba más aburrida.
-Hola?- Sentí su suave voz detrás del tubo del teléfono.
-Mi amor, cómo estás?.- le pregunté a Liam. Se estaba recuperando de un terrible resfriado.
-Mejor, vos cómo estás? Te extraño mucho.- dijo. Casi muero. Me extrañaba.
-Yo también te extraño, bebé. Bien, Bien aburrida se podría decir.- largué una corta risita.- Te gustaría que salgamos esta noche? Claro, si estas mejor-
-Estoy mejor, pero todavía no como para salir. Te prometo que apenas me recupere salimos a comer.- “Genial” pensé. Otro día mas encerrada en casa.
-Está bien, no te preocupes. Te llamo mañana, Un beso enorme, te amo.-
-Dale, nos vemos mañana, adiós.- Colgó el teléfono. Me quedé esperando el “Yo también te amo” Pero pareció nuca llegar. No le di importancia, quizás estaba tan mal de salud que no pensaba bien. Me tiré sobre el acolchado morado que cubría mi cama. Otra noche más aburrida. De repente, el morocho, mi “hermano” se me cruzó por la cabeza. Me puse de pie y me crucé a la casa de enfrente. Toqué timbre y me abrió su mamá. Sonrió al verme y me dejó pasar. Zayn estaba sentado en el living mirando Two & A Half Man. Sus risas se sentían desde el corredor. Me acerqué de un salto y lo abracé fuerte. Se sorprendió al verme, pero me sonrió y me saludó con un beso en la mejilla.
-Mi hermanito mayor tiene que hacer algo esta noche? .- pregunté haciendo pucherito.
-Tengo gente a comer en casa. Mis tíos vienen desde Buenos Aires, y mis papás quieren que esté en casa para verlos.-
-No me digas eso!.- dije bufando. -Me aburriré otra noche.- dije riendo. Obviamente reí sin sentir alegría, la misma rutina de los pasados días no me gustaba para nada…
-Perdón Aldi.- dijo. Su carita me lo decía todo. Se sentía culpable.
-No te preocupes, voy a encontrar algo divertido para hacer, aunque sea lo último que haga!.- Zayn rió ante tal expresión. Me despedí de él y volví a casa.
Al entrar se me acerca mi mamá, apurada.
-Antes que me olvide, te llamo Lucas.- me dijo. Lo pensé unos segundos. Lucas? Mi primo? Qué querrá ahora… Tomé el teléfono, y marqué su número.
-Hola?.-
-Lucas, cómo andas?-
-Aldi, la mejor primita del mundo… todo bien, vos?-
-bien, aburrida de mi verano.- dije sonriendo. Aunque claro estábamos hablando por teléfono, aquella sonrisa no la pudo ver.
-Y para qué estoy yo? Para solucionarte los problemas… Mis amigos organizan una fiesta en la casa de Franco hoy a la noche… te gustaría venir? Yo vendo las entradas.-
-Me encantaría, pero no tengo con quien ir.-
-te quedás conmigo, lo importante es que vayas, necesitamos gente.-
-Está bien.- dije al fin.- Reservame una entrada, a las 9 paso por tu casa, así vamos juntos.-
-Cuántas veces te dije que te quiero mucho?.-
-Pocas- dije riendo.- Adiós Lucas, nos vemos.- Colgué. A pesar de todo, no iba a aburrirme tanto como creía.