Re: "Un Simple... Te Amo (Nick Jonas y Tú)"

por **Taescaab** Vie 23 Mar 2012, 7:22 pm

SOLO AMIGOS?? :(
SIGUELA MI REINA DEL DRAMA

por **Belencita** Vie 23 Mar 2012, 8:14 pm

Amigos??

que diablos se le metio a Nick en la cabeza... olvidar, no mencionar cosas del pasado .. quien le lavo el cerebro?

yo lo mato

xoxo

por **Mire** Vie 23 Mar 2012, 10:10 pm

Dios me encanto el capi!
Nick eres un tonto como le puede contar a la rayis sobre su relacion con delta!
y solo son amigos?
nose pero Nick tiene algo raro porque no le quiere decir a la rayis porque termino con ella y no la mira a los ojos mm
please siguela pronto!

por **Belencita** Sáb 24 Mar 2012, 4:27 am

Queremos Maraton!!!:bounce:

por **ama-jonatik** Sáb 24 Mar 2012, 3:41 pm

de por dios como puede comportarse asi con ella

es como si deberdad todo ese tiempo le hubiera valido $·&%&

arggggggggggggggggggggg

kiero saber que pasa por favor no la dejes asi

plissssssssssssssssssssssssssss

por **Rocio_Jonas** Sáb 24 Mar 2012, 3:47 pm

Ahí les subo el cap, pero tendrán que esperar n.n
Gua! no creí tener tantos comentarios :)
jajaja, Belencita intentare darles un maratón, pero para eso debería tomarme bastante tiempo u.u como una semana, excepto que quieran que les haga caps más cortos u.u ahí si podría darles un maratón de cinco o seis caps n.n
Eso están en ustedes :lol:
Las quiero y en la noche supongo que estara el cap publicado... como siempre n.n
Las amoooooooooooo! son grandiosas n.n
Besos :hug:

por **Rocio_Jonas** Sáb 24 Mar 2012, 6:24 pm

Capitulo siete: La luna bajo el manto de lágrimas. (1era parte)

“La Luna siempre brilla más cuando es vista por unos ojos que aman...”
-Víctor Sierra-

Sentí su cuerpo rodeando el mío en un abrazo, y aunque le había correspondido mi llanto se profundizaba al saber que solo obtendría un abrazo y un beso en la mejilla de su parte. Me dolía tanto saber que él jamás me amaría como antes que deseaba morir antes de seguir día a día sintiendo el dolor dentro de mi corazón, el cual parecía que concordaba conmigo después de todo lo que estaba pasando.
- Sera mejor irme… en media hora tengo que saber cual fue el resultado de mi examen -. Respondí dejando de abrazarlo y él poso sus manos sobre mis mejillas húmedas, las cuales seco con sus dedos pulgares a medida que me sonreía.
- Sí quieres puedo acompañarte -. Dijo y negué sacando con lentitud mi rostro entre sus manos. Sentía tanta la necesidad de besarlo que debía salir cuanto antes de ahí y tomar aire puro, y así recapacitar lo que estaba pensando. Iba a cometer una locura y necesitaba estar acorde para después no arrepentirme, y no seguir a mis impulsos los cuales me harían pasar una mala pasada como cuando decidí aceptar ser su amiga.
- No, quiero estar sola… -. Replique incorporándome y tomando mi bolso, el cual lo coloque sobre mi hombro -. Adiós…
- Dirás hasta pronto -. Me interrumpió con una sonrisa en su rostro como esperando que yo también sonriera. Que lamentable era que no se diera cuenta de que nada de él me hacia feliz, no si sabía que ya era solo un recuerdo de un supuesto amor.
Aun no me cabía en la cabeza como podía amarlo si él no me amaba; porque siempre me dijeron que uno no puede amar cuando ese amor no era correspondido. Y mi duda era: por qué no podía olvidar ese querer que era imposible que fuera amor. No podía entender mis propios sentimientos y esto me hacia caer en una insoportable depresión.
- Sí… hasta pronto -. Respondí sin mucho ánimo, ya que estaba muy mal. No estaba como par disimular una sonrisa que no decía nada… solo era una mentira más. Estaba tan cansada de disimular que quería huir e ir a ningún lado, en donde nadie estuviera más que yo y mi propia soledad.
Camine unos cuantos pasos hasta llegar a la puerta, y cuando iba a abrirla él volvió a tomar mi mano para hacer que lo viera a los ojos. Estos decían tantas cosas que apenas podía entenderlas, y aunque quería comprender todo lo que le estaba sucediendo, mi estado depresivo no dejaba que viera las cosas como eran en verdad.
- Te quiero… ______ -. Murmuro acercando sus labios cerca de mis labios, aunque llego a besar la comisura de los mismos. Sentí como mis impulsos querían controlar mis brazos, creando una escena de como quería que terminara ese momento. En mi mente pasaba las miles de veces en que él me besaba mientras mis brazos rodeaban su cuello y él rodeaba mi cintura, terminando con un hermoso beso que era un nexo entre nuestro mutuo amor.
Con mis ojos cerrados, hice fuerza de no dejarme llevar por la mala jugada de mis impulsos y deseos sosteniendo con fuerzas mi bolso con una de mis manos y mi otro brazo manteniéndolo contra mi cuerpo. No podía controlarme, me era imposible controlar mis impulsos, por lo que lo empuje bruscamente y salí corriendo de su departamento, y del mismo modo baje las escaleras a toda prisa hasta llegar fuera del hotel; en donde respire hondamente con mis ojos abiertos y desorientados, mirando a ningún lado ya que mis lágrimas lo impedían. Era cierto lo que una vez leí en uno de mis libros de novela, las lágrimas nos hacia ver el mundo desde otra perspectiva. Todo era gris, y aunque en Londres siempre estaba así de gris, yo veía todo lo que me rodeaba sin color ni sentido, incluso no comprendía como la gente podía sonreír en un día así.
- ¡_______! -. Escuche que gritaba Nick y antes de que él saliera a donde estaba yo, comencé a correr hasta mi departamento. Sabía que me seguía pero no podía parar de correr y así, a la misma velocidad, sentir mis lágrimas recorrer mis mejillas, hacia frío pero al correr no sentía nada más que querer perderme o llegar cuanto antes de mi departamento.
Parecía que vivía al otro lado del mundo, porque nunca llegaba a mi departamento y era porque realmente me había perdido. Al no estar segura por donde iba, me detuve y pude observa que me encontraba en el Trafalgar Square, en una de las plazas de Londres. Estaba llena de gente a pesar del día, y supuse que – aunque – estuviera el día radiante vería el lugar del mismo modo en que se encontraba ese día.
- ______ -. Murmuro Nick detrás de mí, mientras me abrazaba a mi misma sintiendo que todo lo que me pasaba era algo que no podía aguantar. Deseaba no existir y tampoco que él estuviera conmigo. De lo único que no me arrepentía era de haberme enamorado de él, de eso estaba segura. Fue lo mejor que pude sentir mientras perduro -. ¿Estas bien? -. Pregunto sintiéndolo muy cerca de mi espalda, hasta el punto de que su mano rodeo con cuidado mi brazo y volvió a girarme, para estar enfrente suyo.
- Desearía no existir… que no estuvieras aquí. ¿Acaso hice algo malo como para sufrir de esta manera? -. Pregunte con mis ojos derramando sin cesar mis lágrimas, las cuales no dejaban de acumularse y recorrer con dolor mis mejillas -. Ya no quiero llorar, quiero ser feliz… quiero reír sin mentir ni disimular una maldita sonrisa, Nick -. Inquirí cayendo en sus brazos, en donde refugie mi rostro en su pecho. Me sentía tan sola, que quería que alguien me abrazara aun así se tratara de la persona que más daño me causara, como lo era Nick.
- Perdóname… -. Murmuro mientras acariciaba mi cabello y sentía que su mentón estaba sobre mi cabeza. Sin poder evitarlo lo abrace con fuerzas mientras seguía con mi llanto que no cesaba en ningún momento -. Te quiero mucho…
- No digas nada, solo abrázame -. Susurre mientras escuchaba los latidos de su corazón. Como extrañaba escucharlos, así como aquellos abrazos en donde me permitía escuchar el latido de su corazón que eran la melodía perfecta para calmarme. Todo lo que quería, era estar con él aun así la realidad era que siempre lo tendría, pero no como una vez lo tuve… sino como amigos.
Sentía el viento rodearnos, pero su cuerpo disminuía el frío. Por un momento me perdí en el tiempo, ya no sabía que iba a suceder después de aquel hermoso abrazo como no recordaba del por qué había llorado. Estaba entre sus brazos, estaba disfrutando y reviviendo lo que una vez había olvidado como se sentía tenerlo así de cerca.
Cuando una gota de agua callo sobre mi mejilla, fue cuando abrí mis ojos y caí bruscamente en la realidad. Entre toda la gente, éramos dos personas que se diferenciaban de ellas y era porque estábamos viviendo una vida diferente a las de ellas. Aunque así también nosotros nos diferenciábamos, ya que él no me amaba y en cambio yo, sí lo amaba con toda mi alma.
- Esta comenzando a llover -. Susurro cerca de mi oído y asentí separándome de él, quien dejo sus brazos al costado de su cuerpo -. Sí quieres podemos ir a mi departamento -. Sugirió y aunque sabía que debía decir no, asentí. Antes de comenzar a ir a su departamento, él se quito su abrigo de cuero para ponerlo sobre mis hombros y así no mojarme.
- Te mojaras -. Dije intentando devolvérselo, pero no me lo permitió poniendo su brazo izquierdo sobre mis hombros.
- No te preocupes por mí, estaré bien -. Inquirió besando mi sien, y así caminamos hasta su departamento en donde nuevamente entramos aunque con la diferencia de que estábamos mojados por la lluvia.
Él se acercó a su baño en donde saco dos toallas, la cual una me alcanzó para que me secara. Sin verlo a los ojos, comencé a secarme aunque algo me decía que debía dejar todo e irme cuanto antes. Sabía que estaba haciendo mal al quedarme en su departamento, pero no podía salir… ya era demasiado tarde como para retractarme, porque la lluvia comenzó a caer con más fuerzas hasta el punto de que los truenos y relámpagos se hicieron presentes.
Ya no parecía un día normal, puesto que la tormenta había oscurecido por completo la ciudad de Londres, la cual de un minuto a otro se ilumino por las luces de los faroles de las calles. Me acerque al ventanal y vi el cielo negro, el cual me hacia tener miedo y más cuando recordaba cuando había tenido mi accidente en Alemania.
Instintivamente atine a acariciar mi pecho, específicamente en donde se encontraba mi cicatriz. Aun sentía al simple tacto su relieve, y esto me causo más dolor de lo que ya sentía. Parecía que mi vida no dejaba de dar vueltas y siempre dar en la franja en donde se encontraba predominando el dolor, la soledad y la tristeza.
Estaba harta de esa vida, quería un año de felicidad… pero era ilógico pensar eso, ya que no se puede vivir un año de plena felicidad. Tal sentimiento se siente pero en cada ocasión y no todos los días, además – si sucedería eso – la vida sería totalmente aburrida y sin ningún sentido, ya que uno vive buscando una felicidad plena aun así no este consciente de buscarla.
- ¿Pasa algo? -. Pregunto Nick, que estaba a mi lado observando como acariciaba mi cicatriz, sabía que él recordaba la vez que le había contado de mi accidente y que su pregunta se dirigía a si me dolía la cicatriz.
- Hace mucho que no recordaba el accidente… y hoy pesaba en querer morir -. Susurre mirando fijamente el ventanal, viendo como la tormenta azotaba a todo su alrededor y a todo Londres -. Pero ahora que lo pienso… no quiero morir, quiero vivir para encontrar la felicidad que cada tanto se escapa de mi vida -. Proseguí viéndolo a los ojos, los cuales estaban inundados de lágrimas. Me pregunte si era la primera vez – después de tres años distanciados – en que sus ojos se aguaban deseando llorar.
- Tampoco quiero que mueras, _____ -. Respondió acercándose a mí. Quise dar un paso hacia atrás, pero ya no era dueña de mis propios movimientos, por lo que mis pies dieron un paso hacia delante y quedar enfrente de él -. Y quiero que encuentres esa felicidad -. Murmuro muy cerca de mis labios, los cuales sentían sus rozamientos deseando posarse en ellos y terminar con un beso que deseaba tener desde hacia mucho tiempo.
- No tengo control de mí, Nick -. Sincere, sabiendo que él sí podía evitar que yo cayera en sus labios y besarlo, aunque estaba cien por ciento segura de que él no lo correspondería -. Aléjate… eres el que puede evitar que te bese -. Explique intentando retener mis brazos contra mi pecho, mientras él no hacia ningún intento de dar un paso hacia atrás.
- Tampoco tengo control de mí -. Dijo posando sus manos sobre mis mejillas, sintiendo que de a poco mis ojos se cerraban y mi cabeza se inclinaba hacia sus labios, los cuales a penas se rozaban.
Mi cabeza decía que no lo hiciera, pero era más fuerte el impulso de mi corazón, porque yo también quería lo mismo que él. Y aunque me preguntaba a que se refería él a que no tenía control de sí mismo, no podía estar concentrada a la respuesta o supuesta respuesta ante esta duda, ya que estaba concentrada en terminar enredada en sus labios, llegando a obtener un beso suyo después de tres años de su ausencia.
Cuando había posado mis manos sobre sus hombros y él rodeado mi cintura, escuche el sonido de mi celular… y aunque quería atender no pude, puesto que Nick me había robado un beso.
Cuando sus labios tuvieron contacto con los míos, ya no tenía ninguno de mis cinco sentidos despiertos, ya que estos se adormecieron al concentrarme únicamente a corresponderle aquel beso. Sabía que estaba haciendo mal, que esta actitud me acabaría por destruir; pero hacia caso omiso a ellas, ya que la sensación de sentir un beso de su parte lo era todo. Ya no me importaban las secuelas que dejarían ese acto, tan solo pensaba en lo maravilloso que se sentía al sentir sus labios unidos con los míos. Aun sabían a caramelos, como lo recordaba… aunque eso no era lo mágico, porque lo que realmente me encantaba cuando él me besaba, era sentir mi estomago lleno de cosquillas que hacia que sintiera una sobredosis de felicidad. ¡Por Dios! Estaba buscando la felicidad cuando él era lo que buscaba en cada rincón de mi corazón. Sentía que una sustancia recorría con plenitud por todo mi pecho, causando que los cosquilleos fueran más seguidos y sonriera a medida que mis brazos rodeaban su cuello.
No quería separarme de él nunca más, no me importaba si me faltaba el aire, el cual realmente necesitaba pero aun así seguí besándolo respirando por mis fosas nasales, las cuales aspiraban su mismo aire y su exquisita lesión, la cual era nueva pero aun así, sobre su piel olía deliciosa.
Pero no pudimos mantenernos unidos en un beso, el aire cada vez era más necesario; por lo que él dejo de oprimir sus labios contra los míos, aunque seguían rosándose a medida que nuestros pechos subían y bajaban al mismo compás, mientras que nuestros pulmones recibían la cantidad exacta de aire que necesitaban.
- Esto no es correcto -. Susurro y hubiera preferido no oírlo decir tal cosa. Sabía que no era correcto, pero quería estar con él… quería ser feliz porque en él estaba mi felicidad, eso no lo podía dudar ni negar.
- Lo sé -. Inquirí susurrando dejando de rodear su cuello para bajar la mirada y dirigirme hasta donde estaban las banquillas. Con mis codos sobre la mesada y mi rostro bajo mis manos, intente recapacitar. Pero era tan difícil. No podía dejar de escuchar en mi cabeza que lo amaba y que quería estar con él. Quería no escuchar eso, quería creer que podía llegar a amar a Sebas, pero parecía que era imposible tal cosa.
- No es solo tu culpa… también es mía -. Dijo sentado a mi lado, mientras acariciaba mi espalda. No podía pensar con claridad todo lo que tenía que hacer y no hacer, no mientras él causara una falsa esperanza de estar juntos y ser feliz con él.
- Yo soy la que sigue amando… es mi culpa, no puedo controlar ni siquiera mi propio cuerpo -. Murmure mirando hacia el frente, en donde estaba la heladera. Y no sé por qué en ese momento recordé a Joe, pero aun así quería que estuviera a mi lado para poder sonreír con sinceridad. Solo con él podía sonreír sin disimular mi felicidad.
- Creo que estuvo llamando Sebas… -. Cambio de tema y aunque odiaba que hiciera eso, era verdad… cuando escuche el celular sonar, era la melodía que había puesto como identificador cada vez que me llamaba Sebastián. Y a pesar de que necesitaba su compañía, no tenía cara ni voz como para hablarle después de haber besado a Nick.

por **Rocio_Jonas** Sáb 24 Mar 2012, 6:26 pm

"Un Simple... Te Amo (Nick Jonas y Tú)" - Página 15 IMG_0128

Este es Trafalgar Square, No es hermoso n.n a mi me gusta jajaja

por **Rocio_Jonas** Sáb 24 Mar 2012, 6:32 pm

Hermosas lectoras, quiero hacerles una propuesta y espero su repuesta:
Les parece si escribo más cortos los caps, porque en la temporada anterior - cuando escribia en el Word, escribia tres hojas - y eran cortos y entonces podía subirles más seguido los caps además de que ya estaba terminada. Por lo que creo que sería más beneficioso hacer lo mismo en esta temporada, así puedo hacerle un maratón n.n es que veo que realmente les encanta mi nove y eso me hace saltar de alegría, por lo que quería agradecérselos con un maratón xD
Eso si ustedes quieren.
Las amooooooooo :(L):
Y amo sus comentarios n.n me hacen muy feliz, si puedo mañana... las veo n.n
Besos :hug:
ah, y espero que les guste el cap ;) lo hice pensando en su reacción :D y en ustedes obviamente.
Bye :(L):

por **ama-jonatik** Sáb 24 Mar 2012, 6:42 pm

ami me encantariaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa

dios ya esta terminada!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!

hay no tienes que seguirla plissssssssss

me enamora esta nove esta temporada he llorado como nunca

plis siguela

por **Belencita** Sáb 24 Mar 2012, 7:48 pm

OMG!!

OBVIO QUE QUIEROOOOO MARATON CHICO... LARGO... CORTOOO COMO SEA...

Y CON RESPECTO A NICK... COMO SE LE OCURRE DECIR ES UN ERROR...

MAS ENCIMA NOS BESA... QUE LE PASA

QUE ES QUE LO QUE QUIERE?

NO ENTIENDO?

XOXO

por **Orne Jonas.** Dom 25 Mar 2012, 12:52 am

Rochi. Ya estoy avanzando en la nove. :) Me puse al día con la de tami, y ahora me dedico de lleno a la tuya. Seguro que hoy domingo tengo tiempo, y me la leo toda así después ya quedo al día y puedo comentar cada vez que subis, aunque no creo poder dejar mensajes tan hermosos como los tuyos. Te quieroooooo. Beso

EXCELENTE NOVE. :) xxx

por **Taescaab** Dom 25 Mar 2012, 2:21 pm

nick nos besa jajaja BELENCITA y sus frases jaja (lo digo porque siempre me topo con sus comentarios en otras noves) ay roci ojala orne se ponga al dia con tu nove asi como en la mia y ame ese beso que me robo y yo deje que me robara
SIII me beso ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh (maripositas) capitulos de 3 paginas es buena idea aunque si sta nove acaba se que sera un Increible final y la que venga despues ayayayai
PD: YA TE COMENTE VES JAJJAJA TE AMOO AMIGA VIRTUAL

por **Rocio_Jonas** Dom 25 Mar 2012, 2:31 pm

taescaab escribió:nick nos besa jajaja BELENCITA y sus frases jaja (lo digo porque siempre me topo con sus comentarios en otras noves) ay roci ojala orne se ponga al dia con tu nove asi como en la mia y ame ese beso que me robo y yo deje que me robara
SIII me beso ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh (maripositas) capitulos de 3 paginas es buena idea aunque si sta nove acaba se que sera un Increible final y la que venga despues ayayayai
PD: YA TE COMENTE VES JAJJAJA TE AMOO AMIGA VIRTUAL

jajaja es verdad! espero que Orne llegue n.n
siiiiiiiii, esperaba un comentario tuyo n.n princesita del Drama xD
Ahí les subo un cap largo, antes de empezar a escribirlos cortos n.n
Ah! otra cosa: Me van a tener que esperar para hacer el maratón, quizás mañana me ponga a hacer el maratón por lo que no podre subirle u.u cuando lo tenga terminado, les aviso ;)
Besos

por **Rocio_Jonas** Dom 25 Mar 2012, 3:59 pm

Capitulo ocho: La luna bajo el manto de lágrimas. (2da parte)

“La Luna siempre brilla más cuando es vista por unos ojos que aman...”
-Víctor Sierra-

Sin responder, volví a bajar la mirada y escuchar como la tormenta no cesaba. Esto causaba que deseara no haber tomado la decisión de volver al departamento de Nick, ya que estaba arrepentida de haber acabado enredada en sus besos. Con mis ojos cerrados, comencé a llorar nuevamente sintiéndome la peor persona que podía existir en la tierra. No podía pensar que era una persona y que como tal, podía cometer cualquier error; me había auto fallado y así a Sebastián, a quien le había dicho que mi decisión era intentar amarlo y olvidar a Nick.
Estaba destrozada en todos los sentidos, y el hecho de recordar lo que mi cuerpo sintió cuando correspondí el beso de Nick lo hacia mucho peor. Él no dijo ni hizo nada, solo se mantuvo a mi lado acariciando mi espalda como consuelo.
- Esto no ayuda… Nick -. Solloce y él me abrazo con su frente recargada en mi sien -. Me siento de lo peor… le falle a Sebas -. Inquirí abrazándolo, olvidando por completo lo que sentía por él.
- Y yo a Delta -. Respondió y ahí me separe de él, para verlo a los ojos los cuales decían la verdad. Estaba igual que yo por haberle fallado a Delta. Cuando iba preguntarle del por qué me beso, su celular comenzó a sonar -. Discúlpame -. Inquirió contestando su celular -. Hola, mi amor -. Respondió dándome la espalda, y yo me preguntaba como podía hablar con total naturalidad cuando me había besado. Me sentí totalmente usada al llegar a la conclusión de que para él fue un simple beso y nada más. Incluso estaba segura de que él no había sentido nada de lo que yo había experimentado cuando sus labios comenzaron a endulzar mis labios -. Sí, no te preocupes… yo fui a buscarla para saber como le fue en el examen, y entonces… -. Se mantuvo un momento en pausa, como intentado encontrar las palabras exactas para mentirle de la peor manera -. Comenzó a llover, por lo que le propuse que viniera a mi departamento ya que queda más cerca -. En ese momento se incorporo dirigiéndose hasta el ventanal, en donde apoyo su cuerpo sobre el borde de la pared, viendo por el vidrio como seguía la tormenta azotando a todo Londres -. Debería ir a ver el resultado de su examen, pero con esta tormenta es imposible e incluso para llevarla hasta ahí -. Prosiguió y ahí entendí que Delta se encontraba en mi departamento, de seguro con Clarise, Joe, Kevin, Danielle y Frankie -. ¿Toda la noche seguirá lloviendo así? -. Pregunto preocupado, mientras por el rabillo de sus ojos me veían. La verdad que no quería pensar en nada, ni siquiera en la idea de que llovería toda la noche y que debía quedarme a dormir en su departamento. Ya era insoportable estar media hora ahí, ni imaginarme como sería cerrar los ojos sabiendo que él estaba en el mismo lugar y espacio que yo. No podría pegar ni un ojo al pensar que estaría en ese departamento -. Entiendo, no te preocupes… dile a Clarise que la cuido. No escuches nada de lo que te diga Joe, es mentira. Adiós, besos. Te amo -. Termino y colgó sin dejar de ver la pantalla de su celular. Estaba pensativo y la verdad que no quería saber lo que por su cabeza pasaba. Mire mi bolso, el cual estaba a mi lado y vi que mi celular hacia un típico ruido avisando que ya no tenía batería. ¡Perfecto!, tampoco tenía mi celular como para poder llamar a Clarise y pedirle que hiciera cualquier cosa, pero que me sacara de ahí cuanto antes.
Decepcionada, volví a guardar mi rostro entre mis manos e intentando saber como iba salir de ahí o de esa situación. No quería permanecer toda la tarde y toda la noche en su departamento hasta el día siguiente. Deseaba con el alma que acabara de llover y así salir de ahí para dirigirme en mi departamento, pero aunque se lo pidiera a Dios, eso era imposible.
- Al parecer lloverá toda la noche -. Comentó y asentí con mi cara entre mis manos -. Clarise me dijo que te quedaras… Delta se quedara en tu departamento a dormir, y entonces me dijeron que tu hagas lo mismo -. Inquirió y lo mire, realmente no quería saber que tendría que quedarme ahí, pero no podía hacer nada… los relámpagos parecían que atacaban la ciudad.
- Sí, de otra no me queda -. Respondí y me incorpore -. ¿Puedo usar tu baño? -. Pregunte y él asintió mientras me alcanzaba una toalla seca y nueva.
- Deberías bañarte, si quieres puedo prestarte algo de ropa… Delta fue de compras hace unos días y se olvido de llevar la ropa para su departamento -. Explico y asentí, aunque la verdad que deseaba no usar nada de ella. No era que la odiara, pero creía que no era lo correcto; pero no podía mantenerme con mi ropa mojada, eso implicaría que me enfermara y no deseaba contraer una gripe -. Espera, así te la traigo -. Inquirió dirigiéndose hasta su placar, en donde saco tres bolsas en donde busco una ropa -. Creo que esto te queda -. Me entrego una camisa blanca y un jeans azul. Dejando de lado mis pensamientos, los tome y me dirigí hasta el baño.
Deje la ropa y la toalla sobre el retrete mientras en llenaba la tina con agua tibia. Una vez que sentí el agua entibiando mi cuerpo, me sentí relajada. La verdad que en ese momento entendía a la perfección cuando las amigas de mi madre le recomendaban tomar un relajante baño, el cual siempre sacaba la pesadez y el estrés del cuerpo.
No pude evitar suspirar de alivio cuando sentí el impacto del agua remojando mi rostro. Me sentía tan tranquila que ya no recordaba en donde estaba ni nada, mi cabeza estaba en blanco y eso me hacia sentir bien.
Cuando salí de la tina, me envolví en la toalla y cuando estaba completamente seca me puse la ropa de Delta. La verdad que ella era un poco más alta que yo, por lo que tuve que darle unos ruedos a los jeans. La camisa me quedaba a la perfección, y con mi pelo aun húmedo, salí del baño. El departamento se encontraba iluminado por las luces del lugar. Por lo que significaba que la tormenta no había producido un apagón en toda la ciudad. Muy a menudo era de cortarse la luz cuando había cargas de electricidad a causa de los relámpagos, por lo que no me sorprendería que en cualquier momento se cortara la luz.
- Te queda bien -. Respondió Nick al verme, y en ese momento lo mire a los ojos. En ese mismo instante esboce una sonrisa, la cual no tenía ni una pizca de mentira. Era tan pura que hasta a mi me sorprendía.
- Ella es más alta, pero pude usar su jeans… espero que no se enoje cuando sepa que lo use -. Respondí caminando descalza hasta donde estaba él, quien estaba detrás de la mesada preparando algo de cenar; ya que eran las 9 p.m. Sí, hasta a mi me sorprendía como pasaban las horas y a su vez, el tiempo.
- No lo hará, siempre compartió su ropa con Danielle -. Inquirió con una hermosa sonrisa, la cual me dejo perdida en el tiempo. En esos momentos me volvía a sentir como cuando todo había comenzado, cuando había vuelto – después de seis años – a L.A en busca de la felicidad que guardaba Nick para mí, creyendo que lo quería como un amigo… hasta que los sentimientos cambiaron -. Hice un poco de puré y filetes, espero que tengas apetito de eso -. Replico y sonreí asintiendo, mientras tomaba asiento en uno de los banquillos.
- Sin duda alguna -. Respondí sonriendo de la mejor manera. Durante mi relajante baño me había dispuesto a tomar la misma actitud que cuando estuvimos en L.A, en donde aún no aceptaba los verdaderos sentimientos que sentía por él. Ya no quería llorar, porque no solucionaba nada con llorar. Por lo que estaba dispuesta a luchar por encontrar una felicidad al lado de Sebastián. Pero aun así, aunque haya podido lograr esa meta… no perdure por mucho tiempo así, volviendo nuevamente al principio.
- Me alegra -. Inquirió sacando los filetes del horno, en donde salía el rico aroma causando que sintiera hambre como si nunca hubiese comido antes. Con cuidado me alcanzo mi plato y así después se sirvió él -. Si Joe estuviera aquí, de seguro no le alcanzaría un plato como para saciar su “súper hambre”, como él siempre dice -. Comento mientras le daba un bocado a mi filete, ya que realmente tenía hambre y nunca había probado tal cena como la hacia él.
- Ya lo creo… a veces me pregunto cual es su receta para comer tanto y mantenerse en forma -. Replique bebiendo mi bebida, ya que por la risa que me había causado su comentario anterior, hizo que me atragantara con la cena -. Trata de no ser culpable de que me atragante, Nick -. Inquirí con una mirada de poco amigos, aunque termine por reír a su par. La verdad que haber tomado la decisión de intentar tener una relación amistosa, evadiendo mis verdaderos sentimientos por él, hacia que todo fuera distinto y agradable.
- No es mi culpa que te cause risa… -. Dijo entre carcajada, y cuando iba a tomar un sorbo de su bebida me observo con detenimiento -. Me alegra de que estés mejor…
- Y no solo eso, sino que intentare encontrar la felicidad en Sebas… -. Respondí con una sonrisa mientras cerraba mis ojos, creyendo – por primera vez – en mis palabras. Sabían tan verdaderas, que mi cabeza no se detenía ni siquiera a pensar cada palabra que decía.
- Eso me hace sentir aun mejor -. Respondió aunque no con muchos ánimos. Y aunque me preguntaba miles de veces del por qué su animo cambio tan radicalmente, no quise en llenarme de falsas esperanzas como el hecho de que él estaba celoso de Sebas o del qué intentara ser feliz con Sebastián. Deseaba desilusionarme miles de veces, pero en esa vez no quise arriesgarme.
Con una sonrisa negué, quitando tales pensamientos de mi mente. Cuando terminamos de cenar, yo me dedique a levantar la mesa.
- Deja que lo hago yo, tengo manos para lavar los platos Nick -. Dije mientras él se volvía a sentar -. Además, es lo menos que puedo hacer después de dejarme quedar en tu departamento y de haber hecho la cena. La cual te quedo exquisita -. Inquirí y él sonrió mientras ponía sus codos sobre la mesada, mientras observaba con detenimiento como lavaba los platos. Era un poco incomodo la situación, por lo que respiraba con lentitud mientras sentía que mi corazón – en cada latido – se saldría de mi cuerpo. Cuando termine de lavar los platos, seque mis manos y como reflejo tome un mechón de cabello que estaba sobre mi mejilla y la puse detrás de mi oreja -. ¿Por qué me miras tanto? -. Le pregunte sentándome a su lado. La verdad que ser el punto blanco de su mirada, me incomodaba bastante.
- No quise incomodarte, es que veo que cambiaste bastante -. Respondió y hubiese preferido que no respondiera, ya que tal respuesta hacia que volviera a sentir la sensación de crear falsas esperanzas de que él aun se sentía atraído por mí; específicamente, que guardaba una pizca de esa llama de mor por mí dentro de su corazón.
- Los años pasaron, todos tuvimos un cambio… mira a Frankie -. Replique recordando a Frankie, quien era el ejemplo ideal como para demostrar que los años pasaron más rápido de lo esperado. A mi pesar, hubiese deseado que los años pasaran lentos para haber podido disfrutar mejor los dos años de noviazgo que había tenido con Nick.
- Sí, es verdad -. Dijo incorporándose, y cuando hice lo mismo la luz se corto. Sin poder evitarlo, por la impresión de ver todo oscuro de repente, me abracé a él, quien al verme aferrada a él se río.
- No te rías -. Le dije alejándome de él y golpearle – a penas – su brazo, haciendo que riera más -. Bueno, ya esta bien -. Dije contagiada por su risa -. ¿Tienes velas o algo para iluminar el departamento? -. Pregunte intentando verlo a través de la minuciosa luz que se traslucía del ventanal.
- Sí… yo las busco -. Dijo pasando a mi lado, en cuyo momento olí su loción. No podía creer que además de morir en cada beso que obtenía de él, también moría cada vez que su perfume me embargaba por completo, causando que fuera parte del aire que inhalaba por mi nariz -. Ya las encontré -. Comento mientras prendía una, la cual la coloco en el centro de la mesada, para después colocar otra en la mesa de noche al lado de su cama.
- Ahora esta un poco mejor -. Comente y él se acercó asintiendo, cuando estaba a un paso de mí sentí que debía impedir que él volviera a estar cerca, por lo que camine a su lado hasta llegar al ventanal.
Cuando me quede enfrente de esta, no pude evitar ver que la luna estaba bajo el manto de las nueve grises, las cuales aun hacían caer algunas gotas, aunque no estaba lloviendo tan fuerte. A pesar de la espesa nube negra que cubría el brillo de la luna, pude verla con claridad. Me sentí aliviada al ver el brillo de la luna, ya que siempre me encantaba ver su resplandor. Era una brillante luz blanquecina, la cual a menudo iluminaba cada lugar de la ciudad de Londres.
Siempre que la veía, me sentía tan pura como ella; aunque en ese momento me atreví a imitar a un poeta al crear una metáfora, ya que estaba comparando la luna bajo las nubes negras con lo que estaba pasando. Porque realmente así me sentía, sentía que mis sentimientos transformados en lágrimas ocultaban mi verdadero ser. Yo no era de llorar y tampoco de dejar de reír, por lo que las lágrimas hacia que vieran el visto malo de la vida. Hacían que deseara acabar con mi vida y que nada tenía sentido; cuando en realidad estaba equivocada, porque todo tiene un sentido y no es de valientes suicidarse para evadir la vida.
En ese momento, más que nunca, quise luchar con todas mis fuerzas. Quería decir que por fin podía vivir sin ni una lágrima, y estaba dispuesta a hacerlo mientras estuviera en plan de guardar todos los recuerdos vividos con Nick, y poder amar a Sebastián. Nick logró guardar sus sentimientos – o eso creía – y por qué yo no lo podría lograr, sí yo lo amaba como una vez él me amo; por lo que creí que podría olvidarlo y dejar de amarlo.
- Ya es hora de dormir -. Dijo detrás de mí y asentí, la verdad que había sido un agotado día que estaba dispuesta a dormir toda la noche. Y ante ese pensamiento, comencé a sonreír al recordar que – ante la llamada de Delta – no quería saber nada de dormir en el departamento de Nick, y que incluso no pegaría ni un ojo al saber que él estaba en el mismo espacio y lugar en donde yo estaba -. ¡Que locura! -. Dije en voz alta y vi como él arqueo uno de sus ceños -. Creerás que estoy loca… y la verdad que yo lo estoy creyendo -. Reí y él negó sin entender, pero dejo mostrar sus hermosos dientes en una esplendida sonrisa.
- Sí no duermes, ahí si lo creeré -. Respondió tomando mi mano y encaminándome con él hasta su cama -. Tú dormirás en la cama…
- ¿Y tú? -. Me anticipe a preguntar y él señalo un sillón de tres cuerpos, el cual no se veía incomodo como para dormir pero me daba pena que él tuviera que dormir ahí solo por querer que durmiera cómoda en su cama -. No, Nick…
- No, nada -. Replico y sin poder negarme acepte sentándome en la cama, mientras él sacaba una almohada y unas sabanas de la cama -. Buenas noches, linda -. Dijo besando mi frente, mientras que sus palabras hicieron que sintiera como mi corazón se expandía, sintiendo esa sensación de sorpresa y de necesidad de querer volver a oírlo decir: “Linda”. Me sentí tan especial que sonreí.
- Buenas noches, MR. President -. Dije y él sonrió yéndose hasta donde estaba el sillón, en donde se acostó. Antes de cerrar sus ojos, me miro y beso su mano para después soplar en ella, haciendo que su beso se dirigía volando hacia mí. Hice que lo atrape en el aire, y riendo comencé a sentir que mis ojos se cerraban con pesadez. Antes de dormirme por completo, escuche en mi mente las palabras de Nick, que fueron como a melodía de cuna para caer en las redes de Morfeo.

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