❆ Seven Sisters❆

Nadiaaa!, amé el cap, Norah es genial, amo cuando tienen esa actitud de me importa una mierda el mundo y lo que dicen ;que iluso es blake ajajaja.En fin, ¿quién era ese/a y qué es suyo? Ya quiero leer la continuación

 Actualizo mañana  Reynas C: 

La noche había transcurrido muy rápido, sin darme cuenta la luna se había ocultado y el sol tomó su lugar. Era hora de levantarse y tomar una pastilla para que el dolor de cabeza, proporcionado por la fiesta de ayer, pase y pueda arreglarme para la escuela. Me levanté como pude de la cama, me dirigí hacia el baño para que el agua fría haga su trabajo y termine de despertarme. Luego me vestí, acomodé dichos libros en mi bolso, salí de mi habitación y descendí por las escaleras. Al llegar a la primera planta, pasé por el comedor y pude observar lo mismo de siempre, comida y bocaditos repletos en toda la mesa, que por cierto se encontraba vacía, ya que, mi padre salió a trabajar y mi madre estará por ahí hablando de sus viajes alrededor del mundo.

—Señorita ¿Que desea para desayunar?— La voz de Rita hizo que de un pequeño salto del susto.

—Nada, sólo dame una pastilla para el intenso dolor de cabeza que tengo ahora

Rita dió dos pasos y ya se encontraba en la segunda planta buscando lo que le pedí, luego de 5 minutos de espera, bajó y me entregó la cápsula de color azul que pocos segundos después iba ser digerida. Después de tomar el medicamento salí de casa, encendí el auto y lo puse en marcha hacia la ruta del colegio.


—Bere, la fiesta de ayer estuvo de la puta madre— Esa voz fingida de la tipa que ni su nombre sé, hizo que mi estómago sintiera asco.

—Estoy de acuerdo contigo, eso tiene que repetirse— Interfiere un chico de altura mediana con tatuajes en los brazos.

Yo me abstengo de responder a sus halagos y camino hacia el aula para empezar las clases. Al llegar al salón me encuentro con el grupo de chicos del Break Dance, cuyas miradas se clavaron en mis piernas que se encontraban descubiertas por la corta falda de color celeste que llevaba puesta.

—Berenice D’onadio eres una puta barata— La dolida voz de Daniella hizo que giré a verla y frunce el ceño.

—Si te refieres a mí, demorate un poco al pronunciar mi nombre, estúpida— Rodeé los ojos después de decir eso y fui hacia los asientos junto a los chicos.

—De mi no te libras tan fácil ¡Perra!— Fué lo último que habló la chica que hace 2 semanas era una total desconocida por recién llegar aquí.

No hice caso a su amenaza y tome asiento, ya que, el profesor ingresó e inició su clase. Las horas fueron crueles ya que pasaban lentas. Luego de casi 3 horas de aburrimiento sonó la campana del receso indicando el inicio del descanso, que sólo duraba apenas 20 minutos los cuáles los tome yendo al baño para arreglar mi maquillaje.  

—¡Mira a quién tenemos aquí!— Cogió un mechón de su cabello rosa, los entrelazo entre sus dedos —Es nada más que la Zorra que arruinó ayer mi fiesta, esta vez me las pagarás— Se acercó a mi rostro y sentí su fría mano en uno de mis mejillas, que hizo que se enrojeciera por el impacto.

—No sabes con quien te metes, maldecirás toda tu vida haberme tocado— Amenacé y traté de librarme del agarre de las dos chicas que lucían drogadas.

—¿Que me vas hacer?¿Me irás a pegar con tu bolso?— Las tres rieron

—Te arreglaré ese rostro que tienes, estúpida— Quedó un silencio molesto pero, Daniella sacó una navaja de su bolsillo de la remera que traía puesto.

—Antes te dejare mi marca y nunca te volverás a burlar de mí— La navaja estaba rozando mi mejilla que era guiada por Daniella.

—Si eres tan valiente ¿porque no me sueltan tus “amiguitas”?— Traté de retarla para que bajara su navaja de mi rostro,  ya que, si me lastimaba me iba tomar años de cirugías.

—Sueltenla. Esto lo veremos mañana a la salida del colegio, para que vean todos que yo soy mejor que tu— Habló y salió del baño yendo hacia los pasillos.

Me quedé estupefacta por todo lo que había pasado en tan solo 10 minutos, respire y traté de tranquilizarme para poder salir del baño pero, una pequeño sonido de unos de los cubículos hizo trabajar mi cerebro rápidamente y deduje dos cosas: Alguna persona drogada esté desechando por el orificio por donde se alimenta el exceso de marihuana, ya que, el cuerpo rechaza tanta porquería consumida. O tal vez, una persona que esté exigiendo a su cuerpo desechar lo consumido involuntariamente. El sonido de mi móvil me sacó del trance en el que me encontraba, puesto que, vibró e hizo que respondiera al instante al ver de quien se trataba el mensaje.



Luego de esa noticia salí del baño olvidando todo, caminé hacia el salón con una sonrisa en mi rostro, ya que, David… Mi David pidió traslado hacia Seven Sisters, para estar conmigo y seguir firme con la hermosa relación de 8 meses que llevamos juntos.


Las últimas clases las sentí menos aburridas, ya que, reía con las bromas de los chicos y también por el dejo estúpido que lleva la profesora de Literatura. Estaba por salir cuando fui acorralada por Henry, el líder del grupo de Break Dance.

—¿Estás libre esta noche? Ya sabes… ¿Tu y yo? ..— Giré rápidamente e hizo que mi espalda chocara con la puerta, que estaba cerrada, y pueda sentir su aliento a escasos centímetros de mis labios.

—Henry. ¡Basta! Sabes que solo podemos ser amigos, dejame salir— Empujé su pecho para que se alejara de mí.

—¿Porque te rehusas? Sabes que conmigo serías la más deseada del colegio— Relamió sus labios.

—Es una buena propuesta— Nuestro labios se estaban acercando poco a poco nuevamente. —Pero… No cederé— Lo empujé con más fuerza y salí del salón.

Reí a mis adentros al dejar con ganas de un beso al pobre de Henry, no puedo negar que es simpático y que tiene un buen cuerpo pero, no me iba dejar llevar por una locura pasajera y dejar al aire mi relacion que llevo con David, que por cierto llega mañana. Estaba caminando hacía mi auto cuando me encontré con algunas chicas que ni pararse podían, habían estado tomando y drogándose, era lo típico en este lugar. Llegué al fin a mi auto, lo encendí y lo puse en marcha en dirección a casa.