Enemigos Extraños [Logan Lerman]

No solo había ocurrido lo de Summer el día anterior y ella se sentía avergonzada, Logan por primera vez en años había vuelto a sentir pena por ella. Había terminado por humillarla frente a todos sus amigos y su prometido. Mientras todos almorzaban, subió a la habitación de ella para, de nuevo, disculparse por su indecencia.
— Vete—dijo Summer apenas Logan abrió la puerta de par en par.
— Quiero hablar contigo—contestó entrando con rapidez a la habitación y dándose vuelta para llavear la puerta—. No sales de aquí hasta que diga todo.
— ¿Qué más tienes para decir? ¿Qué me odias? ¿Qué soy una idiota? Porque ya lo sé y ya lo he escuchado.
Logan avanzó hacia la cama donde ella estaba sentada y se colocó al lado de ella, mirando al frente y tratando de evitar los ojos de Summer.
— Yo ahora en este mismo instante me odio y siento que yo soy el idiota—lentamente acercó su mano al ante brazo de ella e intentó consolarla con unas cuantas palmaditas suaves.
— No puedo perdonar lo que hiciste ayer. Lo último que siempre fui es rencorosa, pero tú siempre eres la maldita excepción a todas mis reglas. A todo lo que soy y conozco.
— Tu también, Summer—dijo y volteó a mirarla, lo cual provocó que sus ojos se conectaran—. Tu desconciertas todos mis sentidos. Es como si no pudiera controlarme cuando se trata de ti.
Summer no pudo evitar sentir esa mezcla de sentimientos que le daban un estado de confusión.
— Somos…
— Tan extraños—interrumpió Logan y ambos se sintieron un poco incómodos.
— Sé que en algún momento volverás a arruinarlo todo—dijo Summer y se levantó para ir hasta su tocador.
— Siempre existe el chantajeo para que me perdones.
— Muérete—dijo ella y le arrojó una libreta. Logan la abrió y vio un dibujo de su rostro, de la época en que tenía anteojos—. Pensé que debías verlos antes de que los queme.
— ¿Qué diablos?
— Solía dibujarte y escribir cosas sobre ti. Lo sé, que miedo.
— No, Summer. Eres fantástica dibujando—entonces empezó a leer y soltó de inmediato una risotada escandalosa—. “Es un tarado muy amado” ¿Summer?—preguntó el y levantó la mirada hacía ella.
— Tenía 14, tonto. Las rimas son infantiles—dijo ella sonrojada, pero Logan solo siguió mirando los diferentes dibujos.
— Summer, yo compraría tus cuadros si los hicieras—dijo y empezó a pasar sus manos por un dibujo en especial. Era una chica de la complexión de Summer, estaba bajo la lluvia con un rostro que parecía abatido.
— Eso es un poco personal—dijo Summer poniendo sus manos en la libreta, pero Logan colocó la suya sobre las de ella, provocándola sorpresa de Summer.
— ¿Qué pasa con nosotros, Summer? Podríamos ser…
— No—dijo ella cortantemente—, no quiero ser tu amiga. Sería demasiado difícil.
— ¿Así que prefieres no verme jamás luego de esto?
— Logan—dijo ella agarrando la libreta y cerrándola—. Que no pueda estar en armonía contigo tiene solo una hermosa motivación. Me siento frustrada.
— No me respondiste—dijo interrumpiendo—. ¿volveré a verte luego de estas vacaciones?
— Sería un salto a la muerte no verte jamás—el sonrió y ella le copió.
— Por ahora—dijo el levantándose y removiéndole la libreta a ella de las manos—. Me llevó tus dibujos y los veo en otro lado porque esto me resulta extrañamente agradable, y no me gusta.

— Mira esto, Stacy—dijo Logan sentado al borde del lago y le mostró un dibujo de él y Charlie juntos.
— ¿qué es eso?—preguntó acercándose a él mientras envolvía su cuerpo con una toalla.
— Son dibujos que hizo Summer durante su vida.
— No me gustan mucho—dijo ella y Logan le fulminó con la mirada.
— ¿Cuál es tu problema?—Stacy le miró enojada.
— ¿Cuál es tu asuntó con esa chica? O sea, ¿Estas enamorado de ella? ¿te gusta? ¿fueron novios?
— Lo máximo de contacto que hemos tenido alguna vez fue un abrazo. ¿Qué te pasa, Stacy?
— ¿me dejarías por ella?
El silencio de Logan dijo más que mil explicaciones para ella. Se levantó del suelo y empezó a agarrar sus cosas antes de irse de allí.
— Stacy—dijo Logan levantándose con lentitud.
— ¿Cuál es mi gran propósito de estar aquí si es que me dejarías por una cualquiera?
— No—dijo él y trató de tranquilizarse—. No hables así de Summer.
— Es una maldita zorra. Está comprometida y se te tira encima.
— Anda. Vete si quieres, ya no me importa. Ahora es cuando realmente me doy cuenta de quién eres—dijo Logan y Stacy comenzó a llorar.
— Logan, yo te amo—dijo y Logan rió.
— Tu no me amas, Stacy y ambos lo sabemos—dijo Logan, despiadadamente y levantó los zapatos de la chica en sus manos—. Llévalos. Ya nadie te comprara zapatos así—Stacy arrancó los zapatos de la mano de Logan y volteó para irse.
Se sentó de nuevo al borde del lago y empezó a mirar los dibujos con tranquilidad, pero antes de que Stacy no pudiera escucharlo más gritó:
— ¡Tomate un taxi!—escuchó el gran gruñido de la chica y empezó a reír escandalosamente.
Logan entró a la casa con una libreta en manos, una sonrisa confiada en la cara y una caminata que parecía decir: “Estoy soltero, chicas”
Todos estaban sentados en la sala de estar conversando y tomando diferentes bebidas cuando Logan entró y se sentó al lado de Brenda. Todas las miradas sobre él, con ojos acusadores.
— Stacy apareció por aquí bastante furiosa hace al menos media hora—dijo Nathan y Logan le miró.
— Si—dijo entre risas Logan—. Vi lo que le hizo a mi auto.
— ¿Qué paso?—preguntó Jennifer y Logan abrió la agenda con los dibujos frente a todos. Summer rápidamente se abalanzó hacia él para cerrar la libreta.
— No—dijo Summer y levantó su mirada hacia Logan. Sus ojos terminaron mirándose de forma directa.
— Tienes que mostrar los dibujos. Son demasiado grandiosos para que los escondas—susurró entre dientes mientras ambos se miraban para comunicarse. Summer con lentitud cedió a Logan y removió sus manos de la libreta.
— ¿Qué es?—preguntó William y Logan abrió la libreta con una gran sonrisa.
— Son dibujos—dijo Logan mientras dejaba que sus amigos admiren el dibujo que estaba siendo mostrado en aquel momento.
— ¿Quién los hizo?¬—preguntó Nathan.
— Summer—contestó Logan y Eric le quitó la libreta con la boca abierta.
— Nooo—dijo Eric realmente impresionado por los dibujos y son poder creerlo—. ¿y hay algún dibujo de mí?
— Si—dijo Summer, pero terminó removiéndole la libreta de las manos—. Pero mis dibujos son un tanto personales.
— ¿y por qué puede verlos Logan y yo no?—preguntó William y Summer le miró sorprendida.
— Puedes verlos tú—dijo Summer fingiendo estar tranquila con aquello—. Pero me gustaría mirarlo luego en privado contigo.