I Want You To Stay With Me (Ziam)

¡NO CAIGAS EN LA RED LIAM! 

¡NO LO HAGAAAAAAAAAAAAAAAAAAS!

        

siguela siguela siguela 

CUANDO PUEDAS

Perdon por mi feo comentario la otra vez es que me habia quedado re enganchada .-. 

chau ^^

Paso ha avisarles que mas tarde responderé comentarios y como prometí (y espero cumplir) publicare mas seguido, así que haré lo posible para dejarles el cap. #10 esta semana

Hola Andy. Ya mismo la sigo, siento mucho la espera.

Vale, es que Liam es un masoquista de shit. LOL claro que el irlandés entrara en la historia, pero eso va dentro de unos cuantos capítulos (no sabría decir exactamente cuantos) lamento hacerte esperar tanto, idk matame, en verdad lo siento y espero te guste el capitulo de hoy.

Na' perdoname a mi por no actualizar seguido, es que la paja me gana ahque? Ya mismo sigo esta Fic, espero te guste el estropicio de capitulo que hice.

Adry, no sabes cuanto me alegra que te guste la porquería que hago. Curiosamente siempre he pensado que tu creas una atmósfera al escribir que... siendo sincero yo no logro crear ni aunque la pesada de mi nana me traiga maní (re gomelo el niño. Na' mentira que buda me libre de eso). Tu tienes la capacidad de crear tramas originales y muy concisos por lo que si dices que mi trama es buena es bc algo estoy haciendo bien.
Eres la única colombiana que conozco en el foro (miento ya he visto a otra, pero re loca la nena) y por ello te tengo un gran aprecio, tu vision del mundo es bastante directa y idk me caes muy bien.
Vale que ilysm. bby

Hi! Pues, no se si es pronto, pero hoy actualizare... wujuuu. espero te guste la cosa rara de capitulo que hice.
  

Vale. Que ya mismo la sigo Pipe (he de suponer, tu nombre es Felipino ok, no.)
Es un chiste idiota. No te lo tomes a mal.
  

El tener sus brazos alrededor de mi cuerpo y su respiración tan cerca. Hacían que mi cerebro le costara pensar. Era imposible decirle que se aparta ya que en el fondo deseaba tenerlo así de cerca pero algo se debatía por salir en ese momento.
— ¡Zayn! —dije tontamente mientras soltaba un gemido, haciendo un intento en vano de soltarme. Sus brazos se cerraban en mi abdomen con la fuerza de un león—. ¿Qué haces?
—No quiero salir de aquí sin haber hecho ese algo —dijo mientras sus brazos se cerraban más sobre mi cuerpo. — ¿No me digas que no sabes qué es?
—Basta, no creo que sea lo correcto —dije mientras hacía intentos vanos para escapar de sus fuertes garras fieras—. La verdad creo que no deberíamos hacer nada, nada de lo que pretendes hacer…
— ¿Sabes?  Hablas mucho, pero…no me has dicho que te suelte —dijo con presunción, dibujando en sus labios aquella media sonrisa que me deleitaba—. Será porque en verdad me deseas, me quieres.
—Serás engreído Zayn, por… por… ¡mejor suéltame! —balbucee las primeras palabras ya que me había pillado, y no tenía una respuesta razonable para eso. Se comportaba como un pequeño caprichoso al cual nadie le había dicho un no «uno de tantos los hábitos suyos que me enloquecían»—. En serio...
En un movimiento igual de ágil y más brusco que el anterior, me aproximo contra la pared. En esta posición tenía su cuerpo más próximo al mío, solo centímetros nos separaban. Su respiración acariciaba mi rostro de manera incesante, podía sentir su aliento caliente. Las manos sujetaban mis muñecas impidiendo que me moviera, era su prisionero; débil, a la espera de las torturas que mi verdugo quisiera propinarme.
—No creo que quieras irte sin jugar un poco —comento con una picardía que irradiaba calor—. De hecho, creo que te haces el fuerte… falta muy poco para que pruebe todo esto otra vez… ¿Por qué te resistes tanto?
En ese momento sus manos se posaron sobre mis glúteos, aproximando más su cuerpo al mío. Nuestros sexos se rozaban y con lentitud su respirar se empezó a sincronizar con el mío, todo ello provocaba que mis sentidos se alterasen y sintieran que en pocos momentos, me derretiría, resbalando por entre sus brazos.
—Dime entonces que te soy indiferente —susurro mientras su mirada penetrante y excitada examinaba las fracciones de mi rostro—, no sabes cuánto te deseo en este momento, solo quiero sentirte, hacerte mío como la primera vez… maldición que eres mío. Quiero jugar con mi juguete. No te resistas pequeño Liam.
Lo último había sonado más a una confesión que no podía guardar, una verdad que surgía desde el fondo de su lujurioso subconsciente. En ese momento se me aclararon las ideas. No quería que habláramos sobre lo ocurrido, quería repetir eso que se negaba a creer, tener sexo una vez más. Quería usarme. Como podía no haber llegado a esa conclusión una vez que me propuso "hablar en privado". Trague saliva sintiendo como se mezclaban dos sentimientos en mí ser: el dolor y el deseo.
Reprimí mi furia sacudiendo la cabeza para recobrar la razón. Mi mente ya había tomado una decisión que aunque no quería cumplir, debía  hacerlo. Si solo era otra estrategia desde el principio, si una vez que cogiéramos se arrepentiría nuevamente… no podría soportarlo. No quería sufrir otra vez por su desprecio o indiferencia, en esta ocasión de seguro la herida sería fatal. Porque aunque no tuviera muy claro, estaba muy enamorado de él, como una niña tonta.
Guarde todo los recuerdos bien guardados y por primera vez, me comporte como un hombre que quería dejar algo bien en claro.
— ¿Qué quieres que te diga? —le solté, mientras usaba mis propias fuerzas para escapar. Me aleje unos pasos. Odie dañar ese momento tan excitante mientras me veía sorprendido por la decisión de mis palabras, pero no sería más el juguete de nadie. No permitiría que Zayn volviera a utilizarme como si de un plato desechable habláramos.
— ¿Qué te pasa? —Pregunto presumidamente—. No me digas que quieres jugar a hacerte la difícil.
—Vale idiota, ¡Será "el" difícil! —Le dije, nunca me gusto que me tomara en comparación con el otro género, como solía hacer en algunas discusiones que teníamos—. He pensado que esto está mal. Desde un principio estuvo mal. Estoy harto de ti y me desespera que solo estés pensado con la otra cabeza.
— ¿Qué? —pregunto.
—Fue difícil decirlo la primera —conteste mientras dirigía mi mirada fuera de su rostro ya que de por sí, sus facciones de confusión e ira me traumaban—, no hagas que lo vuelva a repetir.
—Pero... que no, que no entiendo —confeso— ¿que solo pienso con qué? ¿Qué estuvo mal, qué…?
—No espero que lo entiendas ahora. Después me lo agradecerás cuando sigas tu vida normalmente —Susurre. Mis palabras perdían fuerza, y al ver ese pasillo desierto que culminaba en una puerta que daba al recibidor de la farmacia donde nos encontrábamos, solo una ventana pequeña me indicaba que era el crepúsculo, el cielo me incitaba a correr por el hasta perderme de vista, hasta que el mundo mismo olvidara el hecho de que yo tenía una existencia.
El silencio fue prolongado mientras Zayn, en su burbuja, intentaba comprender palabras que yo mismo no entendía, pero sabía lo que significaban y la finalidad de ellas.
—Liam Payne, dices y te contradices. Te molestaste cuando te dije lo mismo, y me dijiste que estuvo mal. Ahora tú eres el que repite las mismas palabras y esperas que entienda…Realmente no te entiendo —dijo después de un momento, en tono más agresivo y razonable, mientras se apoyaba de la ventana, esta no estaba muy alta. La luz del atardecer lo ensombrecía a medio cuerpo.
—Solo digo lo que creo —musite. Entre el dolor y el deseo, el dolor parecía prevalecer— Deberíamos buscar la forma de salir e irnos de aquí, si es que aún podemos salir.
Mientras caminaba hacia la puerta pensaba en la oportunidad que se había perdido. Las imágenes que pudieron haber sido, se habían desvanecido como el humo de un cigarrillo que se eleva en el viento. Zayn probablemente se daría cuenta que lo que le decía era verdad y su instinto de hombre que yo bien conocía, saldría y lo advertiría que  era mejor así. No lo sentía detrás.
Decir que estaba contento por la decisión que había tomado era mentirles. Me sentía como un niño que se negaba a hacer algo que quería pero que, por ser malcriado, no lo hacía.
Antes de salir de la habitación sentí un jalón. Zayn con sus manos fuertes me dio vuelta para que lo viera, esta vez más delicadamente y yo al ir desarmado, pensativo, gire fácilmente como si fuera un pluma. Ni siquiera sentí sus pasos cuando se me acercaba. Sus ojos irradiaban excitación y se reía de esa manera tan perversa que… supuse no había entendido nada.
—No digas que no quieres —dijo en el mismo tono fiero que expresaban sus ojos— porque es difícil creerte…
—Zayn lo que quiero decir es… —Me di una pausa para explicarle de razones que ni yo comprendía, sin perder el control ante esa mirada ¿Por qué me debatía tanto? — Mira lo que paso la última vez…llegaste a arrepentirte de algo que bien sabemos fue mutuo. Vi en tus ojos el reflejo del asco al hablarme. No te dolía romperme el corazón, en cambio, yo no sentí lo mismo. Tus palabras fueron lo que más…me dolió. En realidad no quiero pasar por eso nuevamente.
—Olvida eso —dijo— Pienso en lo que quiero ahora y lo que quiero es a ti…
Era tan estúpidamente testarudo como solo Zayn Malik podría serlo.
Sus palabras flaquearon mis esfuerzos de hacer lo correcto. Era fácil irse por la tangente y sucumbir al mencionar que me quería a mí. No pude evitar un conjunto de escalofríos que recorrieron mi cuerpo, tarde en descubrir que eran de placer.
—No estás pensando con la cabeza —Susurre en tono de súplica— y lo sabes.
—Pero si tú tienes razón. Con la otra es con la pienso ahora ¿no fue eso lo que trataste de decir? —respondió con el mismo tono de voz; tenue. Percibí esos matices de fuego en su voz, a tan escasos centímetros de mi rostro— Ven no te resistas, sé que lo quieres…lo deseas. Te ves ridículo resistiéndote…ven.