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Cruise control |Logan Henderson|
O W N :: Archivos :: Novelas Abandonadas
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Página 4 de 7. • 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7
Re: Cruise control |Logan Henderson|
Me parece que leer esta novela ha causado que tengas que visitar el hospital, ¿te he causado un daño colateral? jajaja, perdón creo que dejaré de escribir.Estoy deacuerdo con Juli es capitulo ha estado Worldwide XD.
Primero me matas con la sinopsis, luego me sorprendes con los personajes (Ame el personaje de Kendall *-*) y luego me das un daño colateral con ese prefacio...Solo me preguntaba ¿Que más sigue? y Boom Boom Boom (Me siento chica mala por haber desobedecido a Logan e.é) Llego el golpe que contra ataco mi día. No dejas de sorprenderme...Juro que cuando escribas un Libro lo compro y lo releo hasta que los ojos me sangre (?.Simplemtente no puedo controlar las ganas de leer otro capítulo por que adoro las cosas inesperadas y de verdad que todo lo que has escrito ha sido totalmente sorpresivo. Así que como buena hermana y amiga estas perdonada por no haberme dicho acerca de tu novela. {OJALÁ NUNCA EN ESTA VIDA SE REPITA ESO KATHERINE y aquí es donde tu dices: Si, mi capitán }...En que iba...A si, los capítulos...Logan, Aww Amo a Logan rebelde, siempre me han gustado los chicos malos {Y Kathe dice: 'No me digas yo no sabía eso'} Ya sabes que siempre he dicho que me encanta tu magnifico ingenio para crear nombres. {A ver si algo de eso se me contagia, este es un foro lleno de enfermedades, unas tan buenas como las tuyas y otras tan raras como las mías }. Ajajajaja me encanta lo directa que es Fallen y al parecer Logan le ha visto su verdadera identidad ¿no? Awiiii!! Fallen estaba en la habitación de Penny y sin ropa por que tenía mucho calor y cuando Logan entro dijo: //Notesé mi alteración de la realidad progresiva de tu novela XD//.
Espero con ansias que me sigas sorprendiendo.De verdad quiero leer uno de esos capítulos tan fenomenales.
PD:Me alegra haber hablado contigo toda la mañana {o gran parte de ella}
PD2: Quiero que sepas que de todas las escritoras que conozco tu eres la primera a quién más admiro {No te diré quienes son las otras ok' quizás no te interese xD}
PD3:Mi largo comentario merece un gran aplauso c: jejeje.
Te amo muchísimo.
Sí, eres una chicas mala desafiando a Logan, a lo mejor tras esto te quiero un poco más, seguramente dirá Dios si Cami estaba viva, ahora no me dice a todo que sí -sabes que es una broma xD-.
Vaya gracias, pero no quiero que te sangren los ojos, te pondrás más fea de lo que eres y entonces Logan sí que no te querrá más y será todo para mí :maloso:
Me encanta cuando pones palabras en mi boca, cada vez que necesites un nombre solo pídemelo. ¡Digas eso!tus ideas son buenas, ya te lo he dicho tropecientas veces.
A mí también me alegró mucho hablar contigo, aunue te esperé y no volviste. Espero que volvamos a hablar pronto, pero ahora estoy llena de exámenes...
Me siento una privilegiada por estar la primera en tu lista, es todo un honor, ¿quiénes son las otras?, me ha picado la curiosidad -que bicho más gracioso-.
Yo te amo muchísimooo más. Gracias por hacerme sonreír.
indigo.
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Re: Cruise control |Logan Henderson|
Claro que me ha gustado, es un detallazo por tu parte haberlo hecho, así que gracias una vez más. Es tu trabajo y no el mío, claro que tenía que ponerlos.No pensé que te fuera a gusta tanto el crackship xD que bueno que te ha gusta, kjjfdj no eran necesarios los créditos pero ya los has puesto así que gracias a ti por ponerlos<3
Son perfectos para las hermanas de Logan, seguramente son un par de brujas xD.
fduhiudf que bueno que Becca sea un personaje...uhm, bueno)? xD
De nada Kathe, que bueno que te gusto, besos de vuelta, y espero que la sigas pronto.
Son dos mini brujas, aunque no tendrán demasiado protagonismo. Y Beccas es buena, ayudará a Logan con Fallen.
Un abrazo <3, espero poder seguirla pronto, ahora tengo todos los exámenes de recuperación.
indigo.
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Re: Cruise control |Logan Henderson|
HOLA KATHE
SOY TU NUEVA LECTORA :'D
ME GUSTA MUCHO TU NOVELA AUNQUE NO SUBAS
CAP´S MUY SEGUIDOS, ENCERIO ESTA GENIAL TU
NOVELA :'3
*SIGUELA PRONTO
CUIDATE BYE
SOY TU NUEVA LECTORA :'D
ME GUSTA MUCHO TU NOVELA AUNQUE NO SUBAS
CAP´S MUY SEGUIDOS, ENCERIO ESTA GENIAL TU
NOVELA :'3
*SIGUELA PRONTO
CUIDATE BYE
RockUp
Re: Cruise control |Logan Henderson|
Hola Rockup, ¿cómo te llamas?HOLA KATHE
SOY TU NUEVA LECTORA :'D
ME GUSTA MUCHO TU NOVELA AUNQUE NO SUBAS
CAP´S MUY SEGUIDOS, ENCERIO ESTA GENIAL TU
NOVELA :'3
*SIGUELA PRONTO
CUIDATE BYE
Gracias por leer y me alegra que te guste. Ojalá tuviera más tiempo para subir, pero no me da más de sí. De todas maneras ahora me pondré a escribir uno.
Besos.
indigo.
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Re: Cruise control |Logan Henderson|
Kathe ~stay strong~ escribió:Hola Rockup, ¿cómo te llamas?HOLA KATHE
SOY TU NUEVA LECTORA :'D
ME GUSTA MUCHO TU NOVELA AUNQUE NO SUBAS
CAP´S MUY SEGUIDOS, ENCERIO ESTA GENIAL TU
NOVELA :'3
*SIGUELA PRONTO
CUIDATE BYE
Gracias por leer y me alegra que te guste. Ojalá tuviera más tiempo para subir, pero no me da más de sí. De todas maneras ahora me pondré a escribir uno.
Besos.
Hi Kathe, perdón por no decirte mi nombre x) me llamo Meel
No importa, aveces creo que el tiempo se vuelve cada vez mas corto :)
Siguela cuando puedas
Muack! :)
RockUp
Re: Cruise control |Logan Henderson|
Capítulo 4: Big and luminous.
Tiré mi mochila en la cama de dinteles, cojines rosa fucsia y edredón de plumas, la chica que dormía aquí debería de ser una pedante con complejo de princesa, pero estaba muy agradecida a esa pedante por tener la misma talla de ropa que yo. Me deshice de mi ropa sucia y llena de barro, tenía bastante tiempo según mi opinión. Se estaba celebrando una fiesta, estaba segura de que la pedante no pisaría su habitación hasta dentro de unas horas.
Comencé a dar vueltas por la habitación en ropa interior, repasando los últimos días como si se tratase de una película: despedirme de Kendall, los dos días de conducción casi temeraria, la horrible caminata por el bosque durante horas y suerte que tuve de que la puerta de servicio de esta enorme mansión estuviese abierta y no se encontrase nadie. Sí, definitivamente estaba teniendo suerte, pero ahora no tenía ni idea de que haría después de salir de este lugar. Tenía que encontrar un lugar para alojarme, pero me temía que sería un hotel de mala muerte, en uno en el que no tuviera que identificarme. Y esperar a que Mossi se pusiera en contacto conmigo.
¿Y hasta entonces qué haría?, la primera vez que estaba sola en dos años, no sabía hasta qué punto eso llegaba a aterrarme, trataba de contentarme a mí misma con la idea de que este sería un receso de mi incansable huida, relajarme, tratar de encontrarle sentido al collar e inventarme una nueva vida. ¿Qué sería esta vez, una chica bailarina, una acróbata rusa?, bueno de no existir era que podía ser quien quisiese. Aunque también tenía su parte triste. Porque no era ni sería nunca nadie.
Mis vueltas por la habitación cesaron en cuento vi a una figura vestida con una perfecto esmoquin negro mirándome con extrañeza mientras de mi boca salía un grito. ¡Perfecto!, Carlos me mataría si pudiera verme ahora, incluso imaginaba sus palabras; “Esto es todo lo contrario a no llamar la atención. La próxima vez te pediré que te subas desnuda al edificio más alto del pueblo, así con suerte me haces caso de una vez por todas”.
-¿Quién eres tú? –preguntó el intruso.
Parecía divertirse, aunque claro estaba semidesnuda y con cara de horror. Decidí relajarme, al parecer este no era ninguno de los dueños porque si no probablemente yo ya estaría en la comisaría. Así que todo estaba bien, no tenía que intimidarme un niño pijo.
-Eso a ti no te importa- dije cortante y pasé por su lado hacia la salida –Pensé que le había echado el pestillo a la puerta –murmuré, ya estaba hablando de nuevo en voz alta, hice girar el pestillo para no tener más sorpresas como esa.
-¿Sabes lo que es el allanamiento de morada? –preguntó con un marcado tono irónico.
Me giré hacia él, para observarle. Era guapo, lo que me llevaba a recordar que le había prometido a Kendall que no mantendría ningún tipo de relación afectiva o no afectiva con chicos. Tenía el pelo negro peinado con gomina hacia arriba, pero de una forma bastante natural. Sus ojos eran marrones y profundos y me escrutaban de arriba abajo en ese momento. Tenía una nariz de tamaño normal, ni pequeña ni grande. Su boca formaba la perfecta forma del arco de Cupido, sus labios eran rosados y finos. No la había visto, pero podía aventurar que tenía una sonrisa grande y luminosa. Pero dejando a un lado su atractivo este chico era un estorbo para mí, no podía perder el tiempo.
-¿Y tú no sabes qué no se mira a las señoritas en ropa interior? –mordí mi labio inferior, no fue un gesto intencionado, simplemente tendía a hacerlo cuando estaba nerviosa e impaciente.
Pasé por su lado de nuevo sin hacerle un caso mayor, está vez me dirigí al armario para coger ropa. Sudadera azul marino con capucha, jeans claros y unas zapatillas del mismo color que la sudadera. No echaría mucho de menos estas prendas, y si lo hacía, mala suerte. Cuando salí del interior del armario tenía al chico en mi espalda, por lo que chocamos. Me aparté de inmediato.
-Te cuelas en una casa que no es la tuya, te importa una mierda que te pillen y robas ropa –enumeró con los dedos.
Trataba de intimidarme, si este defensor de la justicia supiera que me he enfrentado a hombros con dos espaldas más que él armada solo con un palo se pensaría dos veces lo de intimidarme. Aunque de una manera u otra lo estaba consiguiendo, su mirada marrón estaba tan cerca de la mía que me daba la sensación que hurgaba entre los más profundos secretos de mi mente.
-Veo que tienes ojos en la cara, te felicito –hablé con apremio.
Pasé la sudadera por mi cuerpo, los pantalones y las zapatillas. Después metí toda mi ropa en la mochila dispuesta a marcharme de ese sitio lo más rápido posible. Pero el único inconveniente era el chico. Si me marchaba sin más llamaría a la policía y eso sería la catástrofe del siglo para mí. Me colgué la mochila y me senté en la cama, sopesando una vez más mis opciones.
Podía darle un golpe en la cabeza y salir corriendo, pero tendría la excusa perfecta para denunciar y tampoco es que quisiera causarle daño. O podría saltar por la ventana e huir, esa era una opción ridícula fruto de mi mente desesperada, a saber cuántos huesos me rompería. Y la tercera opción, sería contarle la verdad. No había enloquecido, pero a veces la verdad resulta tan incrédula para algunas personas que se piensan que es una tomadura de pelo. Personas escépticas, puede que él fuera una de ellas y si no lo era simplemente me tomaría por una loca.
Me levanté de la cama, el chico de esmoquin esperaba paciente, con los brazos cruzados haciendo que se le acentuaran los bíceps. No me quita los ojos de encima, ahora mismo me sentía como un animal en cautiverio.
-Es una historia algo complicada, -me arriesgué finalmente –pero no he venido aquí con la intención de robar nada más importarte que la ropa que llevo puesta. Necesito salir de aquí sin que nadie me vea y encontrar un sitio donde dormir.
No me atreví a contarle nada más, no sé por qué pero él dejaba de encajarme dentro del grupo de personas escépticas. Y desvelarle la verdad, sería meterle en la boca del lobo y buscarme problemas. Los chicos no querían que saliese con nadie por este motivo, si alguien conoce lo suficiente, ellos lo encontrarían y lo torturarían hasta que les desvelase nuestro paradero.
-¿Qué te hace pensar qué voy a ayudarte? –preguntó ahora sin ironías ni toques de humor, verdaderamente parecía querer un motivo.
-No has llamado al dueño de la casa cuando me has visto aquí, ni me has impedido coger la ropa del armario. Es más, ahora estás ahí parado esperando a que te dé una explicación de porqué no has hecho nada de lo anterior –respondí segura de mis palabras, no sabía a qué era debida esa seguridad.
Pasaron unos segundos en los que parecía luchar contra sí mismo. Finalmente suspiró y volvió a fijar esa mirada acusadora en mí.
-De acuerdo –sentenció por fin -, pero cuando te saque de aquí me contarás porqué lo has hecho.
Asentí, ya me inventaría una excusa luego. Ahora solo importaba salir de este lugar, ayudada por un completo desconocido. Salimos al suntuoso pasillo, lleno de esculturas y cuadros en los que no había reparado antes. Me condujo por el lado contrario por donde yo había entrado. Recorrimos tres pasillos en completo silencio, esperaba fervientemente que supiera realmente por dónde íbamos y también me dedicaba a mirarle. Tenía un perfil bonito, aunque endurecido y también triste. Ahora este chico no me parecía un niño rico y pijo. Rico tal vez, pero pijo para nada.
-¡Logan!
Iba tan embobada observándole que no me percaté de que una persona había en la última esquina, afortunadamente mi guía, que al parecer se llamaba Logan, sí lo hizo. Abrió una puerta y me empujo dentro, haciendo que cayera al suelo. Me incorporé para acercarme a la puerta.
-Peter tengo prisa, lo siento –escuchaba el murmullo de su voz a través de la madera de la puerta, me gustaba su voz…
-Vamos a irnos todos a casa de Brandon a seguir con la fiesta, esto ya es un muermo, Penny acaba de irse a su habitación y con ella el espectáculo y… -esa voz era más grave y dañaba mis oídos.
-Tengo prisa, nos vemos otro día –insistía Logan.
Logan, bonito nombre también, ahora que lo pensaba, ¿por qué todo lo qué tiene que ver con este chico me resulta bonito o atractivo?
En ese momento abrió la puerta y me animó a salir, con una media sonrisa dibujada en su cara. No me equivocaba, tenía una sonrisa grande y luminosa, y sí, también bonita.
Al girar dos veces más a la derecha (eso sí era una verdadera mansión), llegamos a otras escaleras, parecidas por las que subí yo antes. Bajamos a una especie de sótano lleno de coches, de unos coches de lujo, James se sentiría en la gloria aquí dentro. En el fondo a la derecha también había unas escaleras, las subimos y salimos al exterior por fin. Me sentía libre y segura, ahora podría salir corriendo o robar algún coche si las cosas se ponían feas.
-Gracias por ayudarme, ahora… -comencé a decir.
-¿Sabes dónde vas a quedarte esta noche? –me interrumpió.
No tenía ni idea, no sabía tampoco si en un lugar tan suntuoso como era Woodlands encontraría algo apartado del centro de la ciudad. Negué con la cabeza.
-Yo conozco un sitio donde puedes quedarte –respondió otra vez con una media sonrisa.
-No hace falta, no quiero aburrirte más, basta con que me des la…
-Estás haciendo que mi tarde sea muy divertida, y lo siento pero no pienso irme sin que me cuentes tu historia –me interrumpió de nuevo.
Tenía que irme, salir corriendo sin mirar atrás y olvidarme de él, de Logan. Pero el caso era, que me sentía muy tentada de mirar hacia atrás, además porque le olvidase unas horas más tarde no pasaría nada.
-¿Tampoco te han dicho que a las señoritas no se las interrumpe cuándo están hablando? – bromeé mordiendo mi labio inferior de nuevo, solo que está vez fue a propósito.
Río, con una risa contagiosa.
-Me temo que no sé mucho sobre señoritas.
Comencé a dar vueltas por la habitación en ropa interior, repasando los últimos días como si se tratase de una película: despedirme de Kendall, los dos días de conducción casi temeraria, la horrible caminata por el bosque durante horas y suerte que tuve de que la puerta de servicio de esta enorme mansión estuviese abierta y no se encontrase nadie. Sí, definitivamente estaba teniendo suerte, pero ahora no tenía ni idea de que haría después de salir de este lugar. Tenía que encontrar un lugar para alojarme, pero me temía que sería un hotel de mala muerte, en uno en el que no tuviera que identificarme. Y esperar a que Mossi se pusiera en contacto conmigo.
¿Y hasta entonces qué haría?, la primera vez que estaba sola en dos años, no sabía hasta qué punto eso llegaba a aterrarme, trataba de contentarme a mí misma con la idea de que este sería un receso de mi incansable huida, relajarme, tratar de encontrarle sentido al collar e inventarme una nueva vida. ¿Qué sería esta vez, una chica bailarina, una acróbata rusa?, bueno de no existir era que podía ser quien quisiese. Aunque también tenía su parte triste. Porque no era ni sería nunca nadie.
Mis vueltas por la habitación cesaron en cuento vi a una figura vestida con una perfecto esmoquin negro mirándome con extrañeza mientras de mi boca salía un grito. ¡Perfecto!, Carlos me mataría si pudiera verme ahora, incluso imaginaba sus palabras; “Esto es todo lo contrario a no llamar la atención. La próxima vez te pediré que te subas desnuda al edificio más alto del pueblo, así con suerte me haces caso de una vez por todas”.
-¿Quién eres tú? –preguntó el intruso.
Parecía divertirse, aunque claro estaba semidesnuda y con cara de horror. Decidí relajarme, al parecer este no era ninguno de los dueños porque si no probablemente yo ya estaría en la comisaría. Así que todo estaba bien, no tenía que intimidarme un niño pijo.
-Eso a ti no te importa- dije cortante y pasé por su lado hacia la salida –Pensé que le había echado el pestillo a la puerta –murmuré, ya estaba hablando de nuevo en voz alta, hice girar el pestillo para no tener más sorpresas como esa.
-¿Sabes lo que es el allanamiento de morada? –preguntó con un marcado tono irónico.
Me giré hacia él, para observarle. Era guapo, lo que me llevaba a recordar que le había prometido a Kendall que no mantendría ningún tipo de relación afectiva o no afectiva con chicos. Tenía el pelo negro peinado con gomina hacia arriba, pero de una forma bastante natural. Sus ojos eran marrones y profundos y me escrutaban de arriba abajo en ese momento. Tenía una nariz de tamaño normal, ni pequeña ni grande. Su boca formaba la perfecta forma del arco de Cupido, sus labios eran rosados y finos. No la había visto, pero podía aventurar que tenía una sonrisa grande y luminosa. Pero dejando a un lado su atractivo este chico era un estorbo para mí, no podía perder el tiempo.
-¿Y tú no sabes qué no se mira a las señoritas en ropa interior? –mordí mi labio inferior, no fue un gesto intencionado, simplemente tendía a hacerlo cuando estaba nerviosa e impaciente.
Pasé por su lado de nuevo sin hacerle un caso mayor, está vez me dirigí al armario para coger ropa. Sudadera azul marino con capucha, jeans claros y unas zapatillas del mismo color que la sudadera. No echaría mucho de menos estas prendas, y si lo hacía, mala suerte. Cuando salí del interior del armario tenía al chico en mi espalda, por lo que chocamos. Me aparté de inmediato.
-Te cuelas en una casa que no es la tuya, te importa una mierda que te pillen y robas ropa –enumeró con los dedos.
Trataba de intimidarme, si este defensor de la justicia supiera que me he enfrentado a hombros con dos espaldas más que él armada solo con un palo se pensaría dos veces lo de intimidarme. Aunque de una manera u otra lo estaba consiguiendo, su mirada marrón estaba tan cerca de la mía que me daba la sensación que hurgaba entre los más profundos secretos de mi mente.
-Veo que tienes ojos en la cara, te felicito –hablé con apremio.
Pasé la sudadera por mi cuerpo, los pantalones y las zapatillas. Después metí toda mi ropa en la mochila dispuesta a marcharme de ese sitio lo más rápido posible. Pero el único inconveniente era el chico. Si me marchaba sin más llamaría a la policía y eso sería la catástrofe del siglo para mí. Me colgué la mochila y me senté en la cama, sopesando una vez más mis opciones.
Podía darle un golpe en la cabeza y salir corriendo, pero tendría la excusa perfecta para denunciar y tampoco es que quisiera causarle daño. O podría saltar por la ventana e huir, esa era una opción ridícula fruto de mi mente desesperada, a saber cuántos huesos me rompería. Y la tercera opción, sería contarle la verdad. No había enloquecido, pero a veces la verdad resulta tan incrédula para algunas personas que se piensan que es una tomadura de pelo. Personas escépticas, puede que él fuera una de ellas y si no lo era simplemente me tomaría por una loca.
Me levanté de la cama, el chico de esmoquin esperaba paciente, con los brazos cruzados haciendo que se le acentuaran los bíceps. No me quita los ojos de encima, ahora mismo me sentía como un animal en cautiverio.
-Es una historia algo complicada, -me arriesgué finalmente –pero no he venido aquí con la intención de robar nada más importarte que la ropa que llevo puesta. Necesito salir de aquí sin que nadie me vea y encontrar un sitio donde dormir.
No me atreví a contarle nada más, no sé por qué pero él dejaba de encajarme dentro del grupo de personas escépticas. Y desvelarle la verdad, sería meterle en la boca del lobo y buscarme problemas. Los chicos no querían que saliese con nadie por este motivo, si alguien conoce lo suficiente, ellos lo encontrarían y lo torturarían hasta que les desvelase nuestro paradero.
-¿Qué te hace pensar qué voy a ayudarte? –preguntó ahora sin ironías ni toques de humor, verdaderamente parecía querer un motivo.
-No has llamado al dueño de la casa cuando me has visto aquí, ni me has impedido coger la ropa del armario. Es más, ahora estás ahí parado esperando a que te dé una explicación de porqué no has hecho nada de lo anterior –respondí segura de mis palabras, no sabía a qué era debida esa seguridad.
Pasaron unos segundos en los que parecía luchar contra sí mismo. Finalmente suspiró y volvió a fijar esa mirada acusadora en mí.
-De acuerdo –sentenció por fin -, pero cuando te saque de aquí me contarás porqué lo has hecho.
Asentí, ya me inventaría una excusa luego. Ahora solo importaba salir de este lugar, ayudada por un completo desconocido. Salimos al suntuoso pasillo, lleno de esculturas y cuadros en los que no había reparado antes. Me condujo por el lado contrario por donde yo había entrado. Recorrimos tres pasillos en completo silencio, esperaba fervientemente que supiera realmente por dónde íbamos y también me dedicaba a mirarle. Tenía un perfil bonito, aunque endurecido y también triste. Ahora este chico no me parecía un niño rico y pijo. Rico tal vez, pero pijo para nada.
-¡Logan!
Iba tan embobada observándole que no me percaté de que una persona había en la última esquina, afortunadamente mi guía, que al parecer se llamaba Logan, sí lo hizo. Abrió una puerta y me empujo dentro, haciendo que cayera al suelo. Me incorporé para acercarme a la puerta.
-Peter tengo prisa, lo siento –escuchaba el murmullo de su voz a través de la madera de la puerta, me gustaba su voz…
-Vamos a irnos todos a casa de Brandon a seguir con la fiesta, esto ya es un muermo, Penny acaba de irse a su habitación y con ella el espectáculo y… -esa voz era más grave y dañaba mis oídos.
-Tengo prisa, nos vemos otro día –insistía Logan.
Logan, bonito nombre también, ahora que lo pensaba, ¿por qué todo lo qué tiene que ver con este chico me resulta bonito o atractivo?
En ese momento abrió la puerta y me animó a salir, con una media sonrisa dibujada en su cara. No me equivocaba, tenía una sonrisa grande y luminosa, y sí, también bonita.
Al girar dos veces más a la derecha (eso sí era una verdadera mansión), llegamos a otras escaleras, parecidas por las que subí yo antes. Bajamos a una especie de sótano lleno de coches, de unos coches de lujo, James se sentiría en la gloria aquí dentro. En el fondo a la derecha también había unas escaleras, las subimos y salimos al exterior por fin. Me sentía libre y segura, ahora podría salir corriendo o robar algún coche si las cosas se ponían feas.
-Gracias por ayudarme, ahora… -comencé a decir.
-¿Sabes dónde vas a quedarte esta noche? –me interrumpió.
No tenía ni idea, no sabía tampoco si en un lugar tan suntuoso como era Woodlands encontraría algo apartado del centro de la ciudad. Negué con la cabeza.
-Yo conozco un sitio donde puedes quedarte –respondió otra vez con una media sonrisa.
-No hace falta, no quiero aburrirte más, basta con que me des la…
-Estás haciendo que mi tarde sea muy divertida, y lo siento pero no pienso irme sin que me cuentes tu historia –me interrumpió de nuevo.
Tenía que irme, salir corriendo sin mirar atrás y olvidarme de él, de Logan. Pero el caso era, que me sentía muy tentada de mirar hacia atrás, además porque le olvidase unas horas más tarde no pasaría nada.
-¿Tampoco te han dicho que a las señoritas no se las interrumpe cuándo están hablando? – bromeé mordiendo mi labio inferior de nuevo, solo que está vez fue a propósito.
Río, con una risa contagiosa.
-Me temo que no sé mucho sobre señoritas.
Última edición por Kathe ~stay strong~ el Miér 10 Abr 2013, 8:30 am, editado 1 vez
indigo.
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Re: Cruise control |Logan Henderson|
KATHE!!!
OMG AME EL CAPITULO!!!
UUU LA RAYIS SE SIENTE ATRAIDA POR LOGAN!
Y EL TAN LINDO Y LSJADLASDNAJDB Y SI TAMBIEN LINDO XD
AWW PLIS SIGUELA CUANDO PUEDAS!!
BESOS!
OMG AME EL CAPITULO!!!
UUU LA RAYIS SE SIENTE ATRAIDA POR LOGAN!
Y EL TAN LINDO Y LSJADLASDNAJDB Y SI TAMBIEN LINDO XD
AWW PLIS SIGUELA CUANDO PUEDAS!!
BESOS!
Daneiva S.
Re: Cruise control |Logan Henderson|
Naa tranquila, me gusta tu nombre, es muy bonito xD.Hi Kathe, perdón por no decirte mi nombre x) me llamo Meel
No importa, aveces creo que el tiempo se vuelve cada vez mas corto :)
Siguela cuando puedas
Muack! :)
Sí, pienso exactamente igual que tú, aunque siempre que tengo un hueco trato de escribir.
Espero que te guste el capítulo, besos.
indigo.
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Re: Cruise control |Logan Henderson|
Andy, eres nueva lectora ¿o me equivoco?Me encanta tu novela síguela por favor!!!
Me alegra que te guste, intentaré seguirla hoy. Besos
indigo.
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Re: Cruise control |Logan Henderson|
Hola Dañe. Sí, ¿quién no se siente atraída por Logan Henderson? xDKATHE!!!
OMG AME EL CAPITULO!!!
UUU LA RAYIS SE SIENTE ATRAIDA POR LOGAN!
Y EL TAN LINDO Y LSJADLASDNAJDB Y SI TAMBIEN LINDO XD
AWW PLIS SIGUELA CUANDO PUEDAS!!
BESOS!
Muchos besos, gracias por leer <3.
indigo.
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Re: Cruise control |Logan Henderson|
Capítulo 5: Isn't a movie.
Su pelo rubio se mecía como una bandera al viento, de manera acompasada pero salvaje, igual de salvaje que su mirada azul, una que ahora se perdía por las praderas de Woodlands. Parecía añorar algo, estar preocupada por alguien. Quería decirla que todo iría bien que yo la ayudaría, más de lo que ya lo estaba haciendo.
Mi comportamiento de locos, había ayudado a salir de la casa de los Baltimore, familia a la que conocía desde niño, a una posible ladrona. Ella me había perjurado que solo quería algo de ropa, la había creído sin poner en duda su palabra. La palabra de una completa desconocida que me tenía cautivado por completo. Ni siquiera conocía su nombre.
-No me has dicho tu nombre –murmuré encendiendo el estéreo, había demasiado silencio.
Ella se incorporó un poco en el asiento olvidando sus pensamientos y preocupaciones para centrarse en el presente. Por el rabillo del ojo observé que sus ojos estaban clavados en mí mirándome con lupa, eso me puso nervioso. Todo en ella me ponía nervioso, su forma de hablar, de caminar, pero sobretodo el halo de misterio que la envolvía.
-No puedo decírtelo –respondió al fin con un cierto remordimiento en la voz.
Tal vez ese era el motivo por el que la había ayudado, por su negativa a que la viera nadie, su necesidad de esconderse en sitio remoto de la ciudad, cuando aquí todo el mundo quería llamar la atención. Pero ella vino por el bosque (a juzgar por el aspecto de su ropa).
¿Huiría de alguien?, puede que de un padre maltratador o era la fugitiva de alguna prisión, bueno en todo caso de un centro de menores, no parecía ser mayor que yo.
-Me has prometido contarme tu historia si te sacaba de la fiesta –la recordé tomando la siguiente curva.
La llevaría al hostal que hay en el lado oeste del lago, allí solo acuden escritores en busca de inspiración, grupos de alpinistas y alguna que otra pareja de jubilados. Además, la señora Jones no formularía preguntas mientras le pagase y no causara problemas.
-Mi nombre no es una parte relevante de ella –contraatacó con la mirada puesta en la carretera.
Suspiré, otro de los motivos por los que estaba aquí eran porque no era igual que las chicas a las que estaba acostumbrado. Para ella no era el jugador del equipo de rugby o de vela, ni el chico rico. Para ella solo era Logan, un estúpido Logan que la seguiría al fin del mundo si se lo propusiera.
¿Por qué?, no cesaba de preguntarme a mí mismo. Por qué tenía un nudo en el estómago, una neblina que me aturdía la mente y sentía que me sudaban las manos. No había pasado ni una hora desde que la conocía, por qué demonios no sentía un túmulo de sensaciones cada vez que la miraba.
-Me debes tu nombre al menos –insistí nuevamente.
Se quedó callada otra vez, muestra de que estaba pensando, por lo que había supuesto. En ese lapso de tiempo tomé el desvío que nos conducía al lago. Subí la capota del coche para que no se llenase de polvo. Ahora estábamos en un ambiente más íntimo aquí dentro.
-¿A dónde me llevas? –preguntó eludiendo mi comentario.
La miré dispuesto a preguntarle de nuevo pero esa idea se esfumó de mi mente en el acto al ver su mirada. No confiaba en mí, a pesar de lo que había hecho por ella hasta ahora, no confiaba en mí. Parecía sentirse encerrada, con ganas de salir corriendo a la primera oportunidad, era como si se estuviese ahogando. Lo que hizo que se me partiera el corazón.
-Te estoy llevando a un hostal que hay en el lago, está apartado de todo. No te preocupes, no te llevaré a la comisaría y haré como que no te he visto si alguien pregunta –traté de tranquilizarla.
Al parecer mis palabras funcionaron, porque me regaló una tímida sonrisa. Ahora no parecía la chica envalentonada de antes, su imagen ahora era la de una chica frágil y asustada.
-¿Y qué has venido a hacer aquí? –no esperaba que me respondiese, solo quería un poco de conversación, me estaba volviendo loco con el silencio que se había formado después de mis últimas palabras.
-Huir –respondió no muy segura de sí era lo correcto –Me estoy escondiendo.
Algo había parecido cambiar entre nosotros, tal vez fueron mis palabras. Efectivamente era como yo había pensado.
-¿De qué estás huyendo? –pregunté.
Escuché un fuerte suspiro y al girar le vista vi en su mirada que había vuelto a perderse en sus recuerdos.
-No puedo decirte más, es lo mejor para ti. –sentenció, sabía que a partir de esas palabras no me diría nada más.
-Pareces sacada de una película –traté de bromear.
Escuché una débil risa que llegó a mis oídos como un soplo de aire fresco. Eso era esa chica, un soplo de aire fresco en mi vida o al menos en mi aburrida tarde.
-A veces pienso que vida es una película.
Antes de poder responderla la estructura de madera y piedra apareció ante nosotros. Al lado se podía ver la mancha negra que era el lago, solo iluminado por los farolillos que la señora Jones había puesto a modo decorativo en el lago.
La chica se bajó del coche, me dio la sensación de que saldría corriendo por lo que yo también lo hice, situándome frente a ella. Esperando una explicación un poco menos escueta que la de hacía unos minutos. No quería que esto fuera una despedida, no podía despedirme de la persona que había despertado tantas cosas en mí en tan poco tiempo, la persona que me había hecho sentir que la vida podía seguir sorprendiéndome.
-Logan, de verdad que no sé cómo agradecerte esto. Puede que lo mejor hubiese sido que no me encontrarás en la habitación, que no me vieras, por tu seguridad y por la mí. Pero me alegro de que lo hicieras.
Sus palabras me sonaban a despedida, yo no quería que lo fuera pero al parecer ella sí.
-No quieres que vuelva aquí para molestarte, ¿no? –me aventuré a decir.
Su sorpresa me confirmó que así era. “Por tu seguridad y por la mía”, ¿hasta dónde alcanzaban a llegar sus problemas?
-No puedes hacerlo, como te he dicho, ni siquiera deberíamos estar teniendo esta conversación –su mirada estaba tan cargada de miedo, de prudencia… -Prométeme que no volverás por aquí.
No quería prometerlo, pero siendo sinceros, eso no era una película de amor en la que el protagonista y el protagonista se conocen y surge el amor a primera vista. Ella se sincera con él contándole sus más oscuros secretos. Ni yo era el chico torturado que también le contaba lo vacía que era su vida, lo perdido que estaba.
Esta chica había sido una entretención, una que no quería dejar escapar y que si por mí fuera vendría a visitar mañana. Pero tampoco quiero meterme en lo que sea que está metida.
-Te lo prometo –dije con una sonrisa que ella me devolvió.
Se acercó a mí y me besó en la mejilla, provocando que todas mis extremidades temblasen. Inhalé su olor en el poco tiempo que la tuve junto a mí, olía a frescura y a colonia de rosas.
¿Qué acababa de pasarme?, yo no temblaba porque una chica me besara en la mejilla.
-Espero que encuentres a otra damisela en apuros a la que salvar.
Esas fueron sus últimas antes de darse la vuelta y comenzar a andar hacia las escaleras de entrada, iba a ser difícil rechazar la tentativa para venir a verla. Pero no podía ser, yo seguiría con mi vida después de este episodio irreal y ella con su al parecer, irreal vida.
-Logan –me giré al escuchar su voz.
Estaba de pie en el tercer escalón de madera, con las manos puestas en las tiras de la mochila.
-Fallen –fruncí el ceño sin poder averiguar que significaba eso –Me llamo Fallen.
Me dedicó otra pequeña sonrisa y se introdujo en el hostal. Dejándome ahí plantado como un tonto.
-Fallen… -murmuré deleitándome con el sonido de su nombre.
Mi comportamiento de locos, había ayudado a salir de la casa de los Baltimore, familia a la que conocía desde niño, a una posible ladrona. Ella me había perjurado que solo quería algo de ropa, la había creído sin poner en duda su palabra. La palabra de una completa desconocida que me tenía cautivado por completo. Ni siquiera conocía su nombre.
-No me has dicho tu nombre –murmuré encendiendo el estéreo, había demasiado silencio.
Ella se incorporó un poco en el asiento olvidando sus pensamientos y preocupaciones para centrarse en el presente. Por el rabillo del ojo observé que sus ojos estaban clavados en mí mirándome con lupa, eso me puso nervioso. Todo en ella me ponía nervioso, su forma de hablar, de caminar, pero sobretodo el halo de misterio que la envolvía.
-No puedo decírtelo –respondió al fin con un cierto remordimiento en la voz.
Tal vez ese era el motivo por el que la había ayudado, por su negativa a que la viera nadie, su necesidad de esconderse en sitio remoto de la ciudad, cuando aquí todo el mundo quería llamar la atención. Pero ella vino por el bosque (a juzgar por el aspecto de su ropa).
¿Huiría de alguien?, puede que de un padre maltratador o era la fugitiva de alguna prisión, bueno en todo caso de un centro de menores, no parecía ser mayor que yo.
-Me has prometido contarme tu historia si te sacaba de la fiesta –la recordé tomando la siguiente curva.
La llevaría al hostal que hay en el lado oeste del lago, allí solo acuden escritores en busca de inspiración, grupos de alpinistas y alguna que otra pareja de jubilados. Además, la señora Jones no formularía preguntas mientras le pagase y no causara problemas.
-Mi nombre no es una parte relevante de ella –contraatacó con la mirada puesta en la carretera.
Suspiré, otro de los motivos por los que estaba aquí eran porque no era igual que las chicas a las que estaba acostumbrado. Para ella no era el jugador del equipo de rugby o de vela, ni el chico rico. Para ella solo era Logan, un estúpido Logan que la seguiría al fin del mundo si se lo propusiera.
¿Por qué?, no cesaba de preguntarme a mí mismo. Por qué tenía un nudo en el estómago, una neblina que me aturdía la mente y sentía que me sudaban las manos. No había pasado ni una hora desde que la conocía, por qué demonios no sentía un túmulo de sensaciones cada vez que la miraba.
-Me debes tu nombre al menos –insistí nuevamente.
Se quedó callada otra vez, muestra de que estaba pensando, por lo que había supuesto. En ese lapso de tiempo tomé el desvío que nos conducía al lago. Subí la capota del coche para que no se llenase de polvo. Ahora estábamos en un ambiente más íntimo aquí dentro.
-¿A dónde me llevas? –preguntó eludiendo mi comentario.
La miré dispuesto a preguntarle de nuevo pero esa idea se esfumó de mi mente en el acto al ver su mirada. No confiaba en mí, a pesar de lo que había hecho por ella hasta ahora, no confiaba en mí. Parecía sentirse encerrada, con ganas de salir corriendo a la primera oportunidad, era como si se estuviese ahogando. Lo que hizo que se me partiera el corazón.
-Te estoy llevando a un hostal que hay en el lago, está apartado de todo. No te preocupes, no te llevaré a la comisaría y haré como que no te he visto si alguien pregunta –traté de tranquilizarla.
Al parecer mis palabras funcionaron, porque me regaló una tímida sonrisa. Ahora no parecía la chica envalentonada de antes, su imagen ahora era la de una chica frágil y asustada.
-¿Y qué has venido a hacer aquí? –no esperaba que me respondiese, solo quería un poco de conversación, me estaba volviendo loco con el silencio que se había formado después de mis últimas palabras.
-Huir –respondió no muy segura de sí era lo correcto –Me estoy escondiendo.
Algo había parecido cambiar entre nosotros, tal vez fueron mis palabras. Efectivamente era como yo había pensado.
-¿De qué estás huyendo? –pregunté.
Escuché un fuerte suspiro y al girar le vista vi en su mirada que había vuelto a perderse en sus recuerdos.
-No puedo decirte más, es lo mejor para ti. –sentenció, sabía que a partir de esas palabras no me diría nada más.
-Pareces sacada de una película –traté de bromear.
Escuché una débil risa que llegó a mis oídos como un soplo de aire fresco. Eso era esa chica, un soplo de aire fresco en mi vida o al menos en mi aburrida tarde.
-A veces pienso que vida es una película.
Antes de poder responderla la estructura de madera y piedra apareció ante nosotros. Al lado se podía ver la mancha negra que era el lago, solo iluminado por los farolillos que la señora Jones había puesto a modo decorativo en el lago.
La chica se bajó del coche, me dio la sensación de que saldría corriendo por lo que yo también lo hice, situándome frente a ella. Esperando una explicación un poco menos escueta que la de hacía unos minutos. No quería que esto fuera una despedida, no podía despedirme de la persona que había despertado tantas cosas en mí en tan poco tiempo, la persona que me había hecho sentir que la vida podía seguir sorprendiéndome.
-Logan, de verdad que no sé cómo agradecerte esto. Puede que lo mejor hubiese sido que no me encontrarás en la habitación, que no me vieras, por tu seguridad y por la mí. Pero me alegro de que lo hicieras.
Sus palabras me sonaban a despedida, yo no quería que lo fuera pero al parecer ella sí.
-No quieres que vuelva aquí para molestarte, ¿no? –me aventuré a decir.
Su sorpresa me confirmó que así era. “Por tu seguridad y por la mía”, ¿hasta dónde alcanzaban a llegar sus problemas?
-No puedes hacerlo, como te he dicho, ni siquiera deberíamos estar teniendo esta conversación –su mirada estaba tan cargada de miedo, de prudencia… -Prométeme que no volverás por aquí.
No quería prometerlo, pero siendo sinceros, eso no era una película de amor en la que el protagonista y el protagonista se conocen y surge el amor a primera vista. Ella se sincera con él contándole sus más oscuros secretos. Ni yo era el chico torturado que también le contaba lo vacía que era su vida, lo perdido que estaba.
Esta chica había sido una entretención, una que no quería dejar escapar y que si por mí fuera vendría a visitar mañana. Pero tampoco quiero meterme en lo que sea que está metida.
-Te lo prometo –dije con una sonrisa que ella me devolvió.
Se acercó a mí y me besó en la mejilla, provocando que todas mis extremidades temblasen. Inhalé su olor en el poco tiempo que la tuve junto a mí, olía a frescura y a colonia de rosas.
¿Qué acababa de pasarme?, yo no temblaba porque una chica me besara en la mejilla.
-Espero que encuentres a otra damisela en apuros a la que salvar.
Esas fueron sus últimas antes de darse la vuelta y comenzar a andar hacia las escaleras de entrada, iba a ser difícil rechazar la tentativa para venir a verla. Pero no podía ser, yo seguiría con mi vida después de este episodio irreal y ella con su al parecer, irreal vida.
-Logan –me giré al escuchar su voz.
Estaba de pie en el tercer escalón de madera, con las manos puestas en las tiras de la mochila.
-Fallen –fruncí el ceño sin poder averiguar que significaba eso –Me llamo Fallen.
Me dedicó otra pequeña sonrisa y se introdujo en el hostal. Dejándome ahí plantado como un tonto.
-Fallen… -murmuré deleitándome con el sonido de su nombre.
indigo.
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Re: Cruise control |Logan Henderson|
wow no me canso de decirlo wooooow jajajjaj creo que ese encuentro casual me encantó, ¡¡¡¡vaya manera de conocerse!!! algo poco usual jajajajjaja Kathe todas tus novelas son "Worldwide" (bueeee...hablo de las que apenas puedo leer, aunque tampoco digo que las demás no lo sean, por que me imagino que lo son)
Un capítulo bastante interesante, que deja mucho de que hablar, y creo que eso fue lo que hice, me dejó mucho de que hablar en qué podría suceder después, pero la verdad no quiero parecer impaciente o desquiciada por leer otros caps (aunque mis adentros lo pidan a gritos) pero creo que la intriga y/o el misterio hacen que una novela mucho mejor de lo que es, y te felicito por siempre tener esto en cuenta :)
La verdad hoy estuve algo inspirada, jjajajaj quizás por que esta es la clase de tiempo que necesito en estos momentos, pero bueno,tendré que acostumbrarme ¬¬
No te aburro mas, jejej creo que ya es obvio que me fascinan tus noves...Síguela cuando puedas Kathe , besos,
-Jul!-
Un capítulo bastante interesante, que deja mucho de que hablar, y creo que eso fue lo que hice, me dejó mucho de que hablar en qué podría suceder después, pero la verdad no quiero parecer impaciente o desquiciada por leer otros caps (aunque mis adentros lo pidan a gritos) pero creo que la intriga y/o el misterio hacen que una novela mucho mejor de lo que es, y te felicito por siempre tener esto en cuenta :)
La verdad hoy estuve algo inspirada, jjajajaj quizás por que esta es la clase de tiempo que necesito en estos momentos, pero bueno,tendré que acostumbrarme ¬¬
No te aburro mas, jejej creo que ya es obvio que me fascinan tus noves...Síguela cuando puedas Kathe , besos,
-Jul!-
juli_leto
Re: Cruise control |Logan Henderson|
Sí ha sido un encuentro poco casual, pero esta novela no es casual. Quiero que sea irreal, ficticia y verás que el amor de Logan y Fallen será una amor de película, de esos que te dejan con el corazón encogido.wow no me canso de decirlo wooooow jajajjaj creo que ese encuentro casual me encantó, ¡¡¡¡vaya manera de conocerse!!! algo poco usual jajajajjaja Kathe todas tus novelas son "Worldwide" (bueeee...hablo de las que apenas puedo leer, aunque tampoco digo que las demás no lo sean, por que me imagino que lo son)
Un capítulo bastante interesante, que deja mucho de que hablar, y creo que eso fue lo que hice, me dejó mucho de que hablar en qué podría suceder después, pero la verdad no quiero parecer impaciente o desquiciada por leer otros caps (aunque mis adentros lo pidan a gritos) pero creo que la intriga y/o el misterio hacen que una novela mucho mejor de lo que es, y te felicito por siempre tener esto en cuenta :)
La verdad hoy estuve algo inspirada, jjajajaj quizás por que esta es la clase de tiempo que necesito en estos momentos, pero bueno,tendré que acostumbrarme ¬¬
No te aburro mas, jejej creo que ya es obvio que me fascinan tus noves...Síguela cuando puedas Kathe , besos,
-Jul!-
No eres impaciente, me gusta que te quedes con ganas de leer otro capítulo de la novela. Y que reflexiones sobre ella, me gusta que mi novela te dé algo en lo que pensar aunque sea insignificante.
Muchos besos Juli, gracias por comentar.
Cuídate <3.
indigo.
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Re: Cruise control |Logan Henderson|
OMG KATHE!!!
ME ENCANTO EL CAPITULO!!!
AAAHH OJALA LOGAN SI VAYA A VISITARLA MAÑANA
ME E-N-C-A-N-T-O EL CAP! NO PUEDO DEJAR DE DECIRLO (O BUENO ESCRIBIRLO XD)
SIGUELA CUANDO PUEDAS PLIS
BESOS!
ME ENCANTO EL CAPITULO!!!
AAAHH OJALA LOGAN SI VAYA A VISITARLA MAÑANA
ME E-N-C-A-N-T-O EL CAP! NO PUEDO DEJAR DE DECIRLO (O BUENO ESCRIBIRLO XD)
SIGUELA CUANDO PUEDAS PLIS
BESOS!
Daneiva S.
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