Conectarse
Últimos temas
miembros del staff
Beta readers
|
|
|
|
Equipo de Baneo
|
|
Equipo de Ayuda
|
|
Equipo de Limpieza
|
|
|
|
Equipo de Eventos
|
|
|
Equipo de Tutoriales
|
|
Equipo de Diseño
|
|
créditos.
Skin hecho por Hardrock de Captain Knows Best. Personalización del skin por Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
Tienes derecho a guardar silencio. (One Direction y Tú) Semi-Hot
O W N :: Archivos :: Novelas Terminadas
Página 2 de 20. • Comparte
Página 2 de 20. • 1, 2, 3 ... 11 ... 20
Re: Tienes derecho a guardar silencio. (One Direction y Tú) Semi-Hot
oooooooooookeey.. me gustoo mucho el cap..
Hazza depravado ajja y mm Liam desnudo :O jajaj Qe escena la de Lou y ___ en el baño ajaj.. Pero qe suertee! mm qe siguee??
Seguilaa plz besoos
Hazza depravado ajja y mm Liam desnudo :O jajaj Qe escena la de Lou y ___ en el baño ajaj.. Pero qe suertee! mm qe siguee??
Seguilaa plz besoos
~Malik's.Girl.Greyita~
Re: Tienes derecho a guardar silencio. (One Direction y Tú) Semi-Hot
MARATÓN 1/2 Capítulo 5: Asistente
Cuarto día desde que subí al bus de gira. Cuarta vez que despierto con alguno de los chicos observándome desde la retina de en frente. Cuarta mañana que debo afirmarme con los repentinos frenados del conductor.
— Estúpida máquina… —Murmuro.
Me levanto del suelo recuperando mis botas esparcidas y me sacudo la suciedad de mis pantalones. En estos últimos días he estado relativamente tranquila, Lou la estilista me ayudó a organizarles sus vestimentas y utensilios de aseo en cada camarín individual, las fans cada vez son más entrometidas e intentan averiguar más sobre mi vida para vendérselos a la prensa. Y ellos cinco… solo siguen vigilándome.
— ¿Estás segura que mamá dijo eso? —Le pregunté a Emily cuando llamó después de almorzar.
Me encontraba sentada en el mesón de la cocina mientras comía un pedazo de pastel que Niall trajo la noche anterior, dijo que tenía suficiente para la semana, pero en un solo día ya se había comido la mitad.
— Dijo que varias compañeras de su trabajo le preguntaron por ti, el porqué de tu repentino viaje con una banda famosa. Creen que te fugaste. —Soltó una pequeña risa y yo la imité.
Solté una bocanada de aire y le contesté—: Yo creo que están locas, ellas más que nada me conocen y yo no soy así.
Pataleé lentamente por debajo de la mesa y me apoyé con el codo sobre la superficie, me había gustado mantener una conversación normal con mi hermana.
— Un día yo me fugaré e iré por ti…
— Vendrás por Liam.
Sentí cómo los ruidosos compañeros, que hasta ese momento no recordaba que estuviesen conmigo, pusieron más atención en mi conversación. Yo fruncí el ceño y volteé hacia la ventana.
— Pensé que no te gustaba escuchar mis intereses sobre ellos, ____. —Rió ella.
Bufé y dije—: Son intereses estúpidos, Em. Tienes diecisiete y deberías madurar un poco.
— Y tú tienes diecinueve y estás con ellos. ¡Hasta duermen contigo!
Rodeé los ojos.
— Yo no duermo con nadie.
— Lo que haría por dormir una noche con Niall… dicen que te abraza sin pensarlo.
— ¿En qué planeta vives? No soy una fan como tú.
— Directioner, ____. Directioner.
Suspiré—: Directioner. —Una tos apareció desde algún lugar—. Está bien, lo corrijo, no soy una Directioner como tú.
— Podrías serlo, si solo te dejases cautivar por uno…
— Te lo recuerdo una vez más, tengo a… —Murmuré—. …tengo a quién tú sabes.
Will.
Will era mi mejor amigo por años y continuamente bromeábamos con un romance entre ambos, pero solo era eso, porque a Will no le gustaban las chicas.
Y eso Emily no lo tenía que saber.
— Creo que estás con él solo porque no has conocido a alguien más. Ya libérate, ____. ¡Eres una Ann Sister!
— Oh, por Dios. —Le contesté con rapidez—. Dime que no estás usando ese sobrenombre cuando hablas de mí.
— ¡Ajá! Y lo haré hasta que no te des una oportunidad con uno de ellos.
Dejé caer mi cabeza sobre la mesa y quedé con la vista pegada en mis muslos. Las Ann Sisters era una invención mía de cuando éramos pequeñas pero que con el tiempo comencé a odiar.
— Tal vez… lo piense. —Dije.
Un grito de satisfacción me hizo separar el teléfono de mi oído y Emily dijo—: ¡Seré hermana de la novia de One Direction!
Cerré los ojos y sonreí, Em siempre exageraba todo.
— Debo irme ahora. Te llamaré cuando pueda, ¿De acuerdo? Dales un abrazo a papá y a mamá por mí.
— De acuerdo, y tú dales un beso a los chicos por mí.
— ¿Qué? Un beso…
— ¡Adiós!
Y cortó.
Mantuve mi cabeza baja por varios segundos y solté un gruñido por haberme dejado con las palabras en la boca. ¿Un beso? Emily se había vuelto demente.
— ¿____?
Arrugué la nariz. Justo en aquel momento recordé que toda la conversación fue escuchada por los cinco, y no me sentía muy cómoda en responder a mi llamado.
Disimulé mi molestia y levanté el rostro. Liam estaba sentado frente a mí en la silla continua.
— Lo lamento. —Dije—. No quería que escuchasen mi conversación con mi hermana.
Su sonrisa apareció iluminando todo el salón y negó con la cabeza para decir—: Por mí no es una molestia, solo tenía curiosidad en algo.
Desvié la mirada hacia su espalda, Niall y Louis jugaban en la Play, Zayn apoyaba al rubio y Harry al castaño. Todo tranquilo.
— ¿Curiosidad? —Pregunté.
Demasiado tranquilo.
— Exacto. No pude evitar escuchar que hablabas de… una manera diferente con ella.
Ladeé la cabeza y dejé que mi cabello cayese hacia ese lado, sentí un suspiro por su espalda y observé un momento hacia el resto, todo igual, volví con Liam.
— Yo no veo que sea diferente. —Sí lo era; fría.
Así sería con todos. Todos excepto con mi hermana.
— No te agradamos, ¿O si?
Arrugo mis labios y me cruzo de brazos. Emily tenía razón, Liam era el padre de la madurez.
— No son mis mejores amigos.
Sus ojos encontraron los míos y me arrepentí de haber dicho eso. Tampoco podía ser tan ruda. Le prometí a Em que pensaría sobre darles una oportunidad.
Me levanté de la mesa y caminé hacia el baño, necesitaba aunque fuese unos minutos a solas. Pero cuando pasé por frente al resto, mi espalda se sintió acuchillada con sus miradas.
Habían estado demasiado callados estos días.
Una semana.
Había pasado una semana desde que entré en aquel bus.
— ¿Quieres un café? —Me preguntó Josh al sentarse junto a mí tras bambalinas—. Dicen que es lo mejor para sacar el estrés.
Le sonreí y le acepté la taza que mantenía en su mano.
— No tienes que gastar dinero en comprarme algo.
Bebí un sorbo y disfruté su sabor, el café realmente me gustaba.
— ¿Puedo contarte un secreto? —Me murmuró.
Solté una risita y le asentí, Josh se parecía un poco a Will.
— Harry fue el que me mandó a comprarte uno, piensa que desde el accidente en el baño con Louis… —Me sonrojé—. …deberías de relajarte un poco más.
Desvié la mirada y me fijé en el pasillo, en el fondo podía ver como el rizado y su compañero Zayn, venían hacia sus camarines a mi derecha.
— Deberías de agradecerle a él por preocuparse por ti.
¿Harry preocupándose por mí? Él había sido el que comenzó a tratarme mal desde el principio.
Josh se levantó y fue hacia la parte del escenario, quedé observando unos instantes el caminar del par que venía. Zayn sonreía cada vez que Harry modulaba, y él lo rodeaba por el cuello cada vez que podía para estrangularlo en diversión.
Los ojos de rulos chocaron de inmediato con los míos y yo fruncí el ceño. Se supone que no me encontraría observándolo. Posé mi mirada en mis zapatos.
— No sabía que te gustaba el café.
Levanté mi cabeza y el par se detuvo frente a mí. Zayn mantenía su atención en mi respuesta a su afirmación y el de cabello lleno de ondulaciones solo estaba desinteresado, esperando a su compañero.
Desvié la mirada hacia el final del pasillo y tomé otro sorbo. No iba a contarles sobre mis gustos.
— Estás haciéndolo en vano, estúpido. —Dijo Harry—. Es tan malcriada que no sabe cómo contestar.
Le entregué mi peor expresión de odio, fruncí los labios y pude ver su cínica sonrisa. Se estaba divirtiendo conmigo.
Solté un raspado desde mi garganta, me levanté rápidamente y le entregué con brusquedad la taza que antes me había ofrecido Josh. No quería nada comprado por él.
— Eres un imbécil. —Le declaré.
Caminé hacia el lado contrario a ellos, pero pasando unos segundos pude sentir un corretear en mi dirección y rodeé los ojos, nunca podía estar completamente a solas.
Volteé hacia él, esperando por un enfrentamiento entre ambos, pero no era Harry.
— Necesito besarte. —Soltó un Zayn con la respiración acelerada.
Dijo besarme.
— ¿Q-Qué…? —Le pregunté con mis ojos bien abiertos.
Se acercó un paso más y se inclinó hacia mi altura. Debería de haber corrido, huido, debería de haber vuelto a casa.
Pero cuando declaró—: No puedo seguir ignorándote, he querido besarte desde el primer momento en que te vi. —Mi mente no respondió.
Sus manos tomaron mis mejillas y terminó por fin con la distancia.
Besó lentamente mi labio superior y mis ojos se cerraron; yo ya no existiría en ese mundo nunca más. Me había involucrado inconscientemente en sus vidas y aquel instante era la prueba necesaria. Y basta con negarlo, Emily obtendría su oportunidad.
Zayn mordió levemente mi labio y lo dejé profundizar el beso, introdujo su lengua para investigar cuán moldeable sería la mía y solo dejé que pasase todo, mis manos subieron con lentitud por su pecho y rodearon su cuello para cruzarse sobre su nuca. Un fuerte gemido salió desde el fondo de su garganta, yo levanté mis talones y mis caderas fueron tomadas por sus callosas manos apretándome aún más a su cuerpo.
Estaba besando a Zayn Malik, y él me respondía con mayor fuerza.
Bajó sus labios por mi cuello y tiré de su cabello, eso no era posible que estuviese ocurriendo. No a mí.
Me separé con rapidez de sus garras y toqué la zona donde antes había dejado un mordisco, aquello me hizo reaccionar.
— ¿¡Por qué me besaste!? —Le reclamé.
Sus ojos estaban observándome. Mis mejillas podrían haber estado muy rojas y también sentía latir con fuerza mi corazón, pero él solo tenía desordenado su cabello.
— Yo ya no soy parte del trato. —Dijo—. Quiero saber más de ti, quiero hablarte, quiero tocarte, besarte, todo lo que una asistente “real” nos dejaría hacerle.
Quedé atónita. ¿Acaso estaba alucinando?
— ¿D-De qué estás hablando? —Tartamudeé.
Limpió sus labios con la palma de su mano y me sonrió. Si yo no era una asistente “real” como él había dicho, ¿Entonces qué era?
— Si a Liam no se le hubiese ocurrido la regla de no acercarnos a ti, estarías en el suelo justo ahora mismo conmigo tocando tus piernas.
Alto. ¿Acaso dijo “tocar” y “piernas” en la misma expresión?
Retrocedí con nerviosismo y choqué con la pared, Zayn frunció el ceño y se pasó las manos sobre el cabello. Estaba en una decisión personal, al parecer.
— No quiero que me temas, ____. Nunca había deseado besar a alguien tanto como lo hago contigo. Yo sabía que terminaría rindiéndome en algún momento pero fue totalmente tu culpa.
Arrugué mi frente. ¿Mi culpa? ¿Yo tenía la culpa de que él viniese y me besase sin mi consentimiento?
— Me estás culpando. —Le gruñí.
— Llamaste a Harry un imbécil sin tartamudear y él te dejó escapar sin un rasguño. Con eso simplemente tuve el empuje que necesitaba. —Me sonrió—. Le gustas, ____. Y a Harry nadie le gusta.
En ese momento sí que me enfurecí. Yo no le gustaba, él me odiaba y lo tenía bien claro.
Zayn dio un paso más hacia mí y tocó mis labios con su dedo índice, delineándolos suavemente como si los estuviera replicando en su boca.
— Ahora dime, Ann Blair. ¿Serías mi asistente?
— Estúpida máquina… —Murmuro.
Me levanto del suelo recuperando mis botas esparcidas y me sacudo la suciedad de mis pantalones. En estos últimos días he estado relativamente tranquila, Lou la estilista me ayudó a organizarles sus vestimentas y utensilios de aseo en cada camarín individual, las fans cada vez son más entrometidas e intentan averiguar más sobre mi vida para vendérselos a la prensa. Y ellos cinco… solo siguen vigilándome.
— ¿Estás segura que mamá dijo eso? —Le pregunté a Emily cuando llamó después de almorzar.
Me encontraba sentada en el mesón de la cocina mientras comía un pedazo de pastel que Niall trajo la noche anterior, dijo que tenía suficiente para la semana, pero en un solo día ya se había comido la mitad.
— Dijo que varias compañeras de su trabajo le preguntaron por ti, el porqué de tu repentino viaje con una banda famosa. Creen que te fugaste. —Soltó una pequeña risa y yo la imité.
Solté una bocanada de aire y le contesté—: Yo creo que están locas, ellas más que nada me conocen y yo no soy así.
Pataleé lentamente por debajo de la mesa y me apoyé con el codo sobre la superficie, me había gustado mantener una conversación normal con mi hermana.
— Un día yo me fugaré e iré por ti…
— Vendrás por Liam.
Sentí cómo los ruidosos compañeros, que hasta ese momento no recordaba que estuviesen conmigo, pusieron más atención en mi conversación. Yo fruncí el ceño y volteé hacia la ventana.
— Pensé que no te gustaba escuchar mis intereses sobre ellos, ____. —Rió ella.
Bufé y dije—: Son intereses estúpidos, Em. Tienes diecisiete y deberías madurar un poco.
— Y tú tienes diecinueve y estás con ellos. ¡Hasta duermen contigo!
Rodeé los ojos.
— Yo no duermo con nadie.
— Lo que haría por dormir una noche con Niall… dicen que te abraza sin pensarlo.
— ¿En qué planeta vives? No soy una fan como tú.
— Directioner, ____. Directioner.
Suspiré—: Directioner. —Una tos apareció desde algún lugar—. Está bien, lo corrijo, no soy una Directioner como tú.
— Podrías serlo, si solo te dejases cautivar por uno…
— Te lo recuerdo una vez más, tengo a… —Murmuré—. …tengo a quién tú sabes.
Will.
Will era mi mejor amigo por años y continuamente bromeábamos con un romance entre ambos, pero solo era eso, porque a Will no le gustaban las chicas.
Y eso Emily no lo tenía que saber.
— Creo que estás con él solo porque no has conocido a alguien más. Ya libérate, ____. ¡Eres una Ann Sister!
— Oh, por Dios. —Le contesté con rapidez—. Dime que no estás usando ese sobrenombre cuando hablas de mí.
— ¡Ajá! Y lo haré hasta que no te des una oportunidad con uno de ellos.
Dejé caer mi cabeza sobre la mesa y quedé con la vista pegada en mis muslos. Las Ann Sisters era una invención mía de cuando éramos pequeñas pero que con el tiempo comencé a odiar.
— Tal vez… lo piense. —Dije.
Un grito de satisfacción me hizo separar el teléfono de mi oído y Emily dijo—: ¡Seré hermana de la novia de One Direction!
Cerré los ojos y sonreí, Em siempre exageraba todo.
— Debo irme ahora. Te llamaré cuando pueda, ¿De acuerdo? Dales un abrazo a papá y a mamá por mí.
— De acuerdo, y tú dales un beso a los chicos por mí.
— ¿Qué? Un beso…
— ¡Adiós!
Y cortó.
Mantuve mi cabeza baja por varios segundos y solté un gruñido por haberme dejado con las palabras en la boca. ¿Un beso? Emily se había vuelto demente.
— ¿____?
Arrugué la nariz. Justo en aquel momento recordé que toda la conversación fue escuchada por los cinco, y no me sentía muy cómoda en responder a mi llamado.
Disimulé mi molestia y levanté el rostro. Liam estaba sentado frente a mí en la silla continua.
— Lo lamento. —Dije—. No quería que escuchasen mi conversación con mi hermana.
Su sonrisa apareció iluminando todo el salón y negó con la cabeza para decir—: Por mí no es una molestia, solo tenía curiosidad en algo.
Desvié la mirada hacia su espalda, Niall y Louis jugaban en la Play, Zayn apoyaba al rubio y Harry al castaño. Todo tranquilo.
— ¿Curiosidad? —Pregunté.
Demasiado tranquilo.
— Exacto. No pude evitar escuchar que hablabas de… una manera diferente con ella.
Ladeé la cabeza y dejé que mi cabello cayese hacia ese lado, sentí un suspiro por su espalda y observé un momento hacia el resto, todo igual, volví con Liam.
— Yo no veo que sea diferente. —Sí lo era; fría.
Así sería con todos. Todos excepto con mi hermana.
— No te agradamos, ¿O si?
Arrugo mis labios y me cruzo de brazos. Emily tenía razón, Liam era el padre de la madurez.
— No son mis mejores amigos.
Sus ojos encontraron los míos y me arrepentí de haber dicho eso. Tampoco podía ser tan ruda. Le prometí a Em que pensaría sobre darles una oportunidad.
Me levanté de la mesa y caminé hacia el baño, necesitaba aunque fuese unos minutos a solas. Pero cuando pasé por frente al resto, mi espalda se sintió acuchillada con sus miradas.
Habían estado demasiado callados estos días.
Una semana.
Había pasado una semana desde que entré en aquel bus.
— ¿Quieres un café? —Me preguntó Josh al sentarse junto a mí tras bambalinas—. Dicen que es lo mejor para sacar el estrés.
Le sonreí y le acepté la taza que mantenía en su mano.
— No tienes que gastar dinero en comprarme algo.
Bebí un sorbo y disfruté su sabor, el café realmente me gustaba.
— ¿Puedo contarte un secreto? —Me murmuró.
Solté una risita y le asentí, Josh se parecía un poco a Will.
— Harry fue el que me mandó a comprarte uno, piensa que desde el accidente en el baño con Louis… —Me sonrojé—. …deberías de relajarte un poco más.
Desvié la mirada y me fijé en el pasillo, en el fondo podía ver como el rizado y su compañero Zayn, venían hacia sus camarines a mi derecha.
— Deberías de agradecerle a él por preocuparse por ti.
¿Harry preocupándose por mí? Él había sido el que comenzó a tratarme mal desde el principio.
Josh se levantó y fue hacia la parte del escenario, quedé observando unos instantes el caminar del par que venía. Zayn sonreía cada vez que Harry modulaba, y él lo rodeaba por el cuello cada vez que podía para estrangularlo en diversión.
Los ojos de rulos chocaron de inmediato con los míos y yo fruncí el ceño. Se supone que no me encontraría observándolo. Posé mi mirada en mis zapatos.
— No sabía que te gustaba el café.
Levanté mi cabeza y el par se detuvo frente a mí. Zayn mantenía su atención en mi respuesta a su afirmación y el de cabello lleno de ondulaciones solo estaba desinteresado, esperando a su compañero.
Desvié la mirada hacia el final del pasillo y tomé otro sorbo. No iba a contarles sobre mis gustos.
— Estás haciéndolo en vano, estúpido. —Dijo Harry—. Es tan malcriada que no sabe cómo contestar.
Le entregué mi peor expresión de odio, fruncí los labios y pude ver su cínica sonrisa. Se estaba divirtiendo conmigo.
Solté un raspado desde mi garganta, me levanté rápidamente y le entregué con brusquedad la taza que antes me había ofrecido Josh. No quería nada comprado por él.
— Eres un imbécil. —Le declaré.
Caminé hacia el lado contrario a ellos, pero pasando unos segundos pude sentir un corretear en mi dirección y rodeé los ojos, nunca podía estar completamente a solas.
Volteé hacia él, esperando por un enfrentamiento entre ambos, pero no era Harry.
— Necesito besarte. —Soltó un Zayn con la respiración acelerada.
Dijo besarme.
— ¿Q-Qué…? —Le pregunté con mis ojos bien abiertos.
Se acercó un paso más y se inclinó hacia mi altura. Debería de haber corrido, huido, debería de haber vuelto a casa.
Pero cuando declaró—: No puedo seguir ignorándote, he querido besarte desde el primer momento en que te vi. —Mi mente no respondió.
Sus manos tomaron mis mejillas y terminó por fin con la distancia.
Besó lentamente mi labio superior y mis ojos se cerraron; yo ya no existiría en ese mundo nunca más. Me había involucrado inconscientemente en sus vidas y aquel instante era la prueba necesaria. Y basta con negarlo, Emily obtendría su oportunidad.
Zayn mordió levemente mi labio y lo dejé profundizar el beso, introdujo su lengua para investigar cuán moldeable sería la mía y solo dejé que pasase todo, mis manos subieron con lentitud por su pecho y rodearon su cuello para cruzarse sobre su nuca. Un fuerte gemido salió desde el fondo de su garganta, yo levanté mis talones y mis caderas fueron tomadas por sus callosas manos apretándome aún más a su cuerpo.
Estaba besando a Zayn Malik, y él me respondía con mayor fuerza.
Bajó sus labios por mi cuello y tiré de su cabello, eso no era posible que estuviese ocurriendo. No a mí.
Me separé con rapidez de sus garras y toqué la zona donde antes había dejado un mordisco, aquello me hizo reaccionar.
— ¿¡Por qué me besaste!? —Le reclamé.
Sus ojos estaban observándome. Mis mejillas podrían haber estado muy rojas y también sentía latir con fuerza mi corazón, pero él solo tenía desordenado su cabello.
— Yo ya no soy parte del trato. —Dijo—. Quiero saber más de ti, quiero hablarte, quiero tocarte, besarte, todo lo que una asistente “real” nos dejaría hacerle.
Quedé atónita. ¿Acaso estaba alucinando?
— ¿D-De qué estás hablando? —Tartamudeé.
Limpió sus labios con la palma de su mano y me sonrió. Si yo no era una asistente “real” como él había dicho, ¿Entonces qué era?
— Si a Liam no se le hubiese ocurrido la regla de no acercarnos a ti, estarías en el suelo justo ahora mismo conmigo tocando tus piernas.
Alto. ¿Acaso dijo “tocar” y “piernas” en la misma expresión?
Retrocedí con nerviosismo y choqué con la pared, Zayn frunció el ceño y se pasó las manos sobre el cabello. Estaba en una decisión personal, al parecer.
— No quiero que me temas, ____. Nunca había deseado besar a alguien tanto como lo hago contigo. Yo sabía que terminaría rindiéndome en algún momento pero fue totalmente tu culpa.
Arrugué mi frente. ¿Mi culpa? ¿Yo tenía la culpa de que él viniese y me besase sin mi consentimiento?
— Me estás culpando. —Le gruñí.
— Llamaste a Harry un imbécil sin tartamudear y él te dejó escapar sin un rasguño. Con eso simplemente tuve el empuje que necesitaba. —Me sonrió—. Le gustas, ____. Y a Harry nadie le gusta.
En ese momento sí que me enfurecí. Yo no le gustaba, él me odiaba y lo tenía bien claro.
Zayn dio un paso más hacia mí y tocó mis labios con su dedo índice, delineándolos suavemente como si los estuviera replicando en su boca.
— Ahora dime, Ann Blair. ¿Serías mi asistente?
Creo que lo haré semi-hot todo esto. Veré cómo me va el escribir así y lo seguiré escribiendo :)
Última edición por Cassedy el Miér 19 Jun 2013, 3:36 pm, editado 1 vez
Cassedy
Re: Tienes derecho a guardar silencio. (One Direction y Tú) Semi-Hot
MARATÓN 2/2 Capítulo 6: Está bien, lo haré.
Y así fue todo. Asistente real significaba ser más que solo una niñera. Una asistente debía de ir con ellos fuesen donde fuesen, comer con ellos, dormir e incluso salir de compras con ellos. Pero eso no era lo más extraño.
Podían abrazarte, tocarte, besarte y hacer lo que quisiesen contigo, solo cuando las cámaras de los paparazis no estuviesen acosando.
Es lo que Zayn me estaba pidiendo ser.
— ¿A-Acaso están locos? Yo…
— Piénsalo. —Me interrumpió.
El timbre sonó anunciando la salida hacia el escenario y él solo sonrió, guiñó uno de sus ojos y corrió por el pasillo. Otra vez quedé sola.
— Te dijo la verdad. —Escuché una voz tras de mí.
Volteé y apareció Lou, la estilista. Tenía un brazo lleno de papeles y su rostro reflejaba una gran sonrisa hacia mi persona, le devolví el gesto por cortesía.
— No sé realmente si te ha contado toda la verdad pero eso espero, así que, ¿Qué piensas de todo esto?
Ambas nos encontrábamos en el camarín general de la banda, todos se encontraban en el primer tercio del concierto y podía escucharlos desde mi posición.
Miré a Lou con confusión y dije—: ¿Qué que pienso? No creo que decir: Oh, de acuerdo; esté en mis pensamientos ahora.
Fruncí el ceño y ella dejó el montón de papeles sobre la mesa principal, se sentó frente a mí y apoyó su cabeza sobre sus codos y manos.
— He estado con ellos el tiempo suficiente, ____. Soy una excepción a lo que ellos llaman “Asistente” porque los productores me asignaron al grupo, pero he visto chicas salir corriendo desde que les cuentan todo esto y las obligan a guardar el secreto, tú eres la primera que no ha huído.
Estaba estupefacta, ¿Habían traído a otras chicas también?
— ¿Otras…?
— Todas renunciaron al par de horas. Por mucho que les gustasen estar alrededor de ellos no pudieron con la presión de ser descubiertas, es como un reto tener una chica que los “controle”, si es que sabes a lo que me refiero.
Me sonrojé. Desde el momento en que escuché a Niall con tanta sinceridad tenía mis sospechas, y mucho más cuando todas las mañanas veía como ellos me observaban mientras dormía.
Nadie, hasta ese momento, había tenido la misma intimidad con ellos que como yo lo estaba teniendo. Si Emily hubiese estado en mi lugar, habría terminado con el corazón roto, ella no iba a pasar por eso si yo no me entrometía. Siempre cuidé de mi hermana como todo el mundo lo hacía, y ahora había tomado su puesto por una buena causa.
— Estás diciendo que debo ser casi una prostituta por hacer que sus hormonas se apacigüen.
Ella negó con la cabeza y respondió—: No, solo llegarán al punto de tocar. Nada de relaciones. Por aquello es llamado “Asistente”, si quisiésemos una prostituta solo le pagaríamos a una por acostarse con ellos, no es tu caso.
En realidad estaba ocurriendo eso.
No estaba soñando.
— Has controlado sus desastres por toda una semana, ____. Y ni si quiera los has besado.
Arrugué los labios recordando el beso anterior con Zayn. Lou abrió los ojos y su sonrisa fue más ancha.
— ¿Los besaste? Vaya, con razón Niall ni quiere parar a comprar una hamburguesa.
Desvío la mirada y le niego con la cabeza—: Solo… besé a Z-Zayn…
Aquello lo susurré. La mujer frente a mí soltó una carcajada y buscó mis ojos.
— Y yo que pensé en que Harry o Niall serían los más débiles. —Suspiró—. Está bien, entonces ¿Estás considerando ser la Asistente de One Direction?
Mamá diría “Estás demente”
Papá negaría de inmediato.
Emily aceptaría.
Pero, ¿En realidad quería seguir aceptando lo que decían mis padres?
Sonreí y me crucé de brazos. Iba a aceptar, pero solo con una condición: ellos no debían de saber que acepté.
— ¡Dime que Liam se encuentra soltero!
Emily llamó esa noche, preguntándome por alguna razón si es que la soltería del maduro del grupo aún se mantenía intacta, y a decir verdad, ni si quiera yo lo sabía.
Me recosté en el camarote y volteé hacia la pared, si ellos estaban cerca sería mejor que no escuchasen mis conversaciones personales.
— No he visto a nadie escapándose del escenario, Em. Tu querido Liam ha estado en todo momento con sus cuatro idiotas compañeros. —Mantuve alejado el teléfono para el grito de alegría que vino después—. Además, si ellos quieren salir con alguien yo no puedo negárselos.
— ¡Puedes poner las reglas! Una estilista siempre tiene una opinión dentro del grupo.
Reí y volteé otra vez hacia el techo. Cerré los ojos y dije—: Soy una chica de diecinueve años. No tengo tanto control.
Escuché unos pasos por mi lado y al posar la mirada en el origen, el torso desnudo de Harry entró a su retina justo frente a mí.
— ¿Estás escuchándome? —Dijo Em.
Arrugué mis labios y me concentré en nuestra conversación. Sentía subir la temperatura sobre mis mejillas cada vez más al percatarme de los instantes de la piel tatuada del rizado. Hasta mis propias hormonas me hacían enloquecer.
— Ya es tarde, Emily. Dile a mamá que deje de molestarse por idioteces, ella debe de llevarte a tus clases.
Escuché su risotada y dijo—: Está bien, pronto se le pasará. Papá dice que te extraña.
Cerré los ojos con esfuerzo. Él siempre dice eso.
— Yo… —Murmuré—. También.
El sonido de alguien moviéndose en su camarote me alertó y volteé otra vez. Harry se encontraba sentado y apoyado en el borde con su mirada fija en mí. Sostuve nuestros ojos por unos buenos segundos antes de despedirme otra vez de mi hermana. Bajé el móvil y levanté una ceja en confusión.
Sus labios formaron una línea recta y apuntó hacia su ojo izquierdo.
No entendía lo que estaba haciendo, ¿Por qué quería que viese…? Toqué rápidamente mi mejilla y la vi.
Una pequeña lágrima había caído sin previo aviso por culpa de un descuido, fruncí el ceño y la sequé con rapidez, no quería que me viesen tal y como era.
— ¿Te rendirás? —Soltó su ronca voz.
Lo fulminé con la mirada y me senté al igual que él.
Tomé aire y dije—: ¿Rendirme en qué?
— En pretender ser fría con nosotros.
— Yo no pretendo nada.
— Acabas de llorar por tu familia, eso demuestra tu debilidad.
— Piensa lo que quieras, no me conoces.
Ladeó su cabeza y una sonrisa de lado apareció en su rostro, bajó su vista y subió desde mis pies colgando hasta volver a mis ojos. Por alguna razón me sentí desnuda y volví a arrugar mis labios, aquello llamó su atención y se mantuvo ahí; inspeccionándome.
— ¿Q-Qué es lo que tanto miras? —Tartamudeé. Oh Dios.
Saltó hacia el suelo con tanta velocidad que no me dio suficiente tiempo de haber escapado a su agarre. Abrió mis piernas y se instaló entre ellas acercándome a su cuerpo para quedar cara a cara.
— Estoy mirando a la dueña de mis molestosas mañanas.
— S-Si son molestosas… —Murmuré—. Entonces deberías de ignorarme.
Rió y se inclinó un poco. Sus manos sostenían con fuerza mis caderas.
— Créeme, he estado ignorándote lo más que pude.
Pude sentir un bulto creciendo entre sus pantalones y me sonrojé. Creí que había una regla entre ellos de no acercarse.
— Acércate un solo centímetro más y te arrepentirás. —Le advertí.
— Me encantaría terminar con este espacio, hermosa, pero hay reglas que debemos seguir.
Ahora yo reí. ¿Quería seguir las reglas? Bien, pues entonces las rompería.
— Tal cual y como Zayn las siguió. —Le susurré con una sonrisa.
Listo. Estaba hecho. Había aceptado ser su Asistente, entonces sería la Asistente.
Lentamente rodeé su cuello con mis brazos y lo acerqué lo suficiente para rozar nuestros labios, sus ojos se cerraron y apretó aún más mis caderas.
— ¿De qué hablas…? —Susurró con su voz ahora increíblemente profunda.
Rocé una vez más nuestros labios y dije—: Zayn solo tuvo que acercarse y pedírmelo, Styles.
Apenas terminé de decir su apellido, retrocedió con brusquedad y chocó con la madera del borde de su camarote, soltó un gruñido y pude ver como su estómago se comprimía. Frunció tanto la frente que fue lo último que pude ver antes de que entrase al baño al final del pasillo.
Justo ahí devolví el aire a mis pulmones que no había respirado. El corazón me latía a mil por hora, nunca antes había experimentado aquella emoción en un enfrentamiento, y solo había sido una pequeña jugarreta para comenzar.
— Sabes todo.
Di un salto que me hizo caer de pies al suelo. Louis estaba apoyado en el borde del armario de en frente y tenía sus brazos cruzados frente a su pecho.
Desvié la mirada y me abracé a mí misma, aun no asimilaba muy bien lo que acababa de suceder.
— Besaste a Zayn, ¿No es así? Llegó un poco diferente cuando subimos a cantar, —Levantó una de sus cejas—. Sobre todo cuando casi todo el concierto tocaba sus labios con una sonrisa.
Estúpido disimulado.
— Solo fue un beso.
— ¿Entonces dejas que chicos que apenas conoces y que quieren besarte, lleguen y lo hagan?
Era igual a mamá. Me estaba regañando… o por lo menos eso creí que hacía.
— Eso es el ser una Asistente para nosotros, ____. Tenemos derecho a hacer contigo lo que nos sea necesario para equilibrarnos.
Toqué mi cabello que caía sobre mi estómago y lo peiné con los dedos, los zapatos de Louis llegaron a la par con los míos y levanté la mirada. Esperaba ver un rostro de desaprobación o incluso una risa burlona de su parte, pero al ver la preocupación saliendo desde sus ojos me hizo ver realmente qué estaba pensando.
— Tú… ¿Querías besarme? —Su asentimiento me lo confirmó y yo aliviané mi semblante.
Me estaba pidiendo permiso.
— Fui el primero en descubrirte, en la esquina de la calle Berkeley St. apoyada como si realmente fueses una modelo de revistas.
Tocó mis mejillas con sus manos y sonrió. Se inclinó lo suficiente para dejar sus labios besando mi frente, luego se alejó y dijo—: Cuando aceptes, no tendrás oportunidad de arrepentirte. Serás nuestra por el tiempo que sea requerido.
Mordí mi labio inferior y asentí. Aquello había sido lo más amable y generoso –pero provocante- que alguien me había dicho en todo este tiempo.
— Y para que lo sepas, de todos, Harry es el que más está reprimiéndose.
Podían abrazarte, tocarte, besarte y hacer lo que quisiesen contigo, solo cuando las cámaras de los paparazis no estuviesen acosando.
Es lo que Zayn me estaba pidiendo ser.
— ¿A-Acaso están locos? Yo…
— Piénsalo. —Me interrumpió.
El timbre sonó anunciando la salida hacia el escenario y él solo sonrió, guiñó uno de sus ojos y corrió por el pasillo. Otra vez quedé sola.
— Te dijo la verdad. —Escuché una voz tras de mí.
Volteé y apareció Lou, la estilista. Tenía un brazo lleno de papeles y su rostro reflejaba una gran sonrisa hacia mi persona, le devolví el gesto por cortesía.
— No sé realmente si te ha contado toda la verdad pero eso espero, así que, ¿Qué piensas de todo esto?
Ambas nos encontrábamos en el camarín general de la banda, todos se encontraban en el primer tercio del concierto y podía escucharlos desde mi posición.
Miré a Lou con confusión y dije—: ¿Qué que pienso? No creo que decir: Oh, de acuerdo; esté en mis pensamientos ahora.
Fruncí el ceño y ella dejó el montón de papeles sobre la mesa principal, se sentó frente a mí y apoyó su cabeza sobre sus codos y manos.
— He estado con ellos el tiempo suficiente, ____. Soy una excepción a lo que ellos llaman “Asistente” porque los productores me asignaron al grupo, pero he visto chicas salir corriendo desde que les cuentan todo esto y las obligan a guardar el secreto, tú eres la primera que no ha huído.
Estaba estupefacta, ¿Habían traído a otras chicas también?
— ¿Otras…?
— Todas renunciaron al par de horas. Por mucho que les gustasen estar alrededor de ellos no pudieron con la presión de ser descubiertas, es como un reto tener una chica que los “controle”, si es que sabes a lo que me refiero.
Me sonrojé. Desde el momento en que escuché a Niall con tanta sinceridad tenía mis sospechas, y mucho más cuando todas las mañanas veía como ellos me observaban mientras dormía.
Nadie, hasta ese momento, había tenido la misma intimidad con ellos que como yo lo estaba teniendo. Si Emily hubiese estado en mi lugar, habría terminado con el corazón roto, ella no iba a pasar por eso si yo no me entrometía. Siempre cuidé de mi hermana como todo el mundo lo hacía, y ahora había tomado su puesto por una buena causa.
— Estás diciendo que debo ser casi una prostituta por hacer que sus hormonas se apacigüen.
Ella negó con la cabeza y respondió—: No, solo llegarán al punto de tocar. Nada de relaciones. Por aquello es llamado “Asistente”, si quisiésemos una prostituta solo le pagaríamos a una por acostarse con ellos, no es tu caso.
En realidad estaba ocurriendo eso.
No estaba soñando.
— Has controlado sus desastres por toda una semana, ____. Y ni si quiera los has besado.
Arrugué los labios recordando el beso anterior con Zayn. Lou abrió los ojos y su sonrisa fue más ancha.
— ¿Los besaste? Vaya, con razón Niall ni quiere parar a comprar una hamburguesa.
Desvío la mirada y le niego con la cabeza—: Solo… besé a Z-Zayn…
Aquello lo susurré. La mujer frente a mí soltó una carcajada y buscó mis ojos.
— Y yo que pensé en que Harry o Niall serían los más débiles. —Suspiró—. Está bien, entonces ¿Estás considerando ser la Asistente de One Direction?
Mamá diría “Estás demente”
Papá negaría de inmediato.
Emily aceptaría.
Pero, ¿En realidad quería seguir aceptando lo que decían mis padres?
Sonreí y me crucé de brazos. Iba a aceptar, pero solo con una condición: ellos no debían de saber que acepté.
— ¡Dime que Liam se encuentra soltero!
Emily llamó esa noche, preguntándome por alguna razón si es que la soltería del maduro del grupo aún se mantenía intacta, y a decir verdad, ni si quiera yo lo sabía.
Me recosté en el camarote y volteé hacia la pared, si ellos estaban cerca sería mejor que no escuchasen mis conversaciones personales.
— No he visto a nadie escapándose del escenario, Em. Tu querido Liam ha estado en todo momento con sus cuatro idiotas compañeros. —Mantuve alejado el teléfono para el grito de alegría que vino después—. Además, si ellos quieren salir con alguien yo no puedo negárselos.
— ¡Puedes poner las reglas! Una estilista siempre tiene una opinión dentro del grupo.
Reí y volteé otra vez hacia el techo. Cerré los ojos y dije—: Soy una chica de diecinueve años. No tengo tanto control.
Escuché unos pasos por mi lado y al posar la mirada en el origen, el torso desnudo de Harry entró a su retina justo frente a mí.
— ¿Estás escuchándome? —Dijo Em.
Arrugué mis labios y me concentré en nuestra conversación. Sentía subir la temperatura sobre mis mejillas cada vez más al percatarme de los instantes de la piel tatuada del rizado. Hasta mis propias hormonas me hacían enloquecer.
— Ya es tarde, Emily. Dile a mamá que deje de molestarse por idioteces, ella debe de llevarte a tus clases.
Escuché su risotada y dijo—: Está bien, pronto se le pasará. Papá dice que te extraña.
Cerré los ojos con esfuerzo. Él siempre dice eso.
— Yo… —Murmuré—. También.
El sonido de alguien moviéndose en su camarote me alertó y volteé otra vez. Harry se encontraba sentado y apoyado en el borde con su mirada fija en mí. Sostuve nuestros ojos por unos buenos segundos antes de despedirme otra vez de mi hermana. Bajé el móvil y levanté una ceja en confusión.
Sus labios formaron una línea recta y apuntó hacia su ojo izquierdo.
No entendía lo que estaba haciendo, ¿Por qué quería que viese…? Toqué rápidamente mi mejilla y la vi.
Una pequeña lágrima había caído sin previo aviso por culpa de un descuido, fruncí el ceño y la sequé con rapidez, no quería que me viesen tal y como era.
— ¿Te rendirás? —Soltó su ronca voz.
Lo fulminé con la mirada y me senté al igual que él.
Tomé aire y dije—: ¿Rendirme en qué?
— En pretender ser fría con nosotros.
— Yo no pretendo nada.
— Acabas de llorar por tu familia, eso demuestra tu debilidad.
— Piensa lo que quieras, no me conoces.
Ladeó su cabeza y una sonrisa de lado apareció en su rostro, bajó su vista y subió desde mis pies colgando hasta volver a mis ojos. Por alguna razón me sentí desnuda y volví a arrugar mis labios, aquello llamó su atención y se mantuvo ahí; inspeccionándome.
— ¿Q-Qué es lo que tanto miras? —Tartamudeé. Oh Dios.
Saltó hacia el suelo con tanta velocidad que no me dio suficiente tiempo de haber escapado a su agarre. Abrió mis piernas y se instaló entre ellas acercándome a su cuerpo para quedar cara a cara.
— Estoy mirando a la dueña de mis molestosas mañanas.
— S-Si son molestosas… —Murmuré—. Entonces deberías de ignorarme.
Rió y se inclinó un poco. Sus manos sostenían con fuerza mis caderas.
— Créeme, he estado ignorándote lo más que pude.
Pude sentir un bulto creciendo entre sus pantalones y me sonrojé. Creí que había una regla entre ellos de no acercarse.
— Acércate un solo centímetro más y te arrepentirás. —Le advertí.
— Me encantaría terminar con este espacio, hermosa, pero hay reglas que debemos seguir.
Ahora yo reí. ¿Quería seguir las reglas? Bien, pues entonces las rompería.
— Tal cual y como Zayn las siguió. —Le susurré con una sonrisa.
Listo. Estaba hecho. Había aceptado ser su Asistente, entonces sería la Asistente.
Lentamente rodeé su cuello con mis brazos y lo acerqué lo suficiente para rozar nuestros labios, sus ojos se cerraron y apretó aún más mis caderas.
— ¿De qué hablas…? —Susurró con su voz ahora increíblemente profunda.
Rocé una vez más nuestros labios y dije—: Zayn solo tuvo que acercarse y pedírmelo, Styles.
Apenas terminé de decir su apellido, retrocedió con brusquedad y chocó con la madera del borde de su camarote, soltó un gruñido y pude ver como su estómago se comprimía. Frunció tanto la frente que fue lo último que pude ver antes de que entrase al baño al final del pasillo.
Justo ahí devolví el aire a mis pulmones que no había respirado. El corazón me latía a mil por hora, nunca antes había experimentado aquella emoción en un enfrentamiento, y solo había sido una pequeña jugarreta para comenzar.
— Sabes todo.
Di un salto que me hizo caer de pies al suelo. Louis estaba apoyado en el borde del armario de en frente y tenía sus brazos cruzados frente a su pecho.
Desvié la mirada y me abracé a mí misma, aun no asimilaba muy bien lo que acababa de suceder.
— Besaste a Zayn, ¿No es así? Llegó un poco diferente cuando subimos a cantar, —Levantó una de sus cejas—. Sobre todo cuando casi todo el concierto tocaba sus labios con una sonrisa.
Estúpido disimulado.
— Solo fue un beso.
— ¿Entonces dejas que chicos que apenas conoces y que quieren besarte, lleguen y lo hagan?
Era igual a mamá. Me estaba regañando… o por lo menos eso creí que hacía.
— Eso es el ser una Asistente para nosotros, ____. Tenemos derecho a hacer contigo lo que nos sea necesario para equilibrarnos.
Toqué mi cabello que caía sobre mi estómago y lo peiné con los dedos, los zapatos de Louis llegaron a la par con los míos y levanté la mirada. Esperaba ver un rostro de desaprobación o incluso una risa burlona de su parte, pero al ver la preocupación saliendo desde sus ojos me hizo ver realmente qué estaba pensando.
— Tú… ¿Querías besarme? —Su asentimiento me lo confirmó y yo aliviané mi semblante.
Me estaba pidiendo permiso.
— Fui el primero en descubrirte, en la esquina de la calle Berkeley St. apoyada como si realmente fueses una modelo de revistas.
Tocó mis mejillas con sus manos y sonrió. Se inclinó lo suficiente para dejar sus labios besando mi frente, luego se alejó y dijo—: Cuando aceptes, no tendrás oportunidad de arrepentirte. Serás nuestra por el tiempo que sea requerido.
Mordí mi labio inferior y asentí. Aquello había sido lo más amable y generoso –pero provocante- que alguien me había dicho en todo este tiempo.
— Y para que lo sepas, de todos, Harry es el que más está reprimiéndose.
Escribí dos capítulos y decidí subirlos ahora para tener menos retraso :) Y pregunto, ¿Comenzamos ya con el trato?
Última edición por Cassedy el Miér 19 Jun 2013, 3:37 pm, editado 1 vez
Cassedy
Re: Tienes derecho a guardar silencio. (One Direction y Tú) Semi-Hot
hoolaa soy tu nueva lectora me encanta tu nove
por favor siguelaaaa :ilusion:
me llamo maia , tengo 13 años y soy de argentina.
y por supuesto directioner forever ehaaaaa
por favor siguelaaaa :ilusion:
me llamo maia , tengo 13 años y soy de argentina.
y por supuesto directioner forever ehaaaaa
maia Directioner<3
Re: Tienes derecho a guardar silencio. (One Direction y Tú) Semi-Hot
AY DIOS MIO,, me has dejado sin palabras yo qe ella ni lo pienso ajajja..
BESOO A ZAYN!! DIOOSS DIOOSSS vas a ser la culpable de mi muerte, lo sabes no? jajaja
Seguiilaaa qe esta muy bueenaa aaaaaaahh!!
:)
BESOO A ZAYN!! DIOOSS DIOOSSS vas a ser la culpable de mi muerte, lo sabes no? jajaja
Seguiilaaa qe esta muy bueenaa aaaaaaahh!!
:)
~Malik's.Girl.Greyita~
Re: Tienes derecho a guardar silencio. (One Direction y Tú) Semi-Hot
oh por dios, o por dios!!! me encanta no se como podes escribir tan bien, seguila porfi
Demi Jonas 1D
Re: Tienes derecho a guardar silencio. (One Direction y Tú) Semi-Hot
seguiilaaaaaaaaaaa :D
Besooss
Besooss
~Malik's.Girl.Greyita~
Re: Tienes derecho a guardar silencio. (One Direction y Tú) Semi-Hot
Capítulo 7: Doble personalidad.
Al siguiente día, mi teléfono comenzó a sonar despertándome del sueño que había gozado segundos atrás. Me acomodé lentamente sentándome en el colchón de mi retina y con los ojos aún un poco cerrados respondí al llamado.
— Diga…
— ¿____? —Alcancé a escuchar.
Me preparé para saltar hacia el suelo aun no pudiendo reconocer la voz de la persona al otro lado de la línea y bostecé.
La risa desde el móvil me molestó y caminé hacia la pequeña cocina aprovechando el sueño grueso de los cinco molestosos atrás, lista para beber un poco de agua fresca.
— Apuesto un pollo a las brasas a que te he despertado. —Dijo la voz.
Gemí en aprobación y otra vez su carcajada me hizo poner de malas.
— ¿Se puede saber quién eres? —Dije con rudeza.
Un par de voces femeninas salieron desde el fondo y me sentí aún más confundida, iba a volver a tomar un trago de mi vaso cuando el nombre de aquella persona me hizo soltarlo.
— Soy Will.
El agua quedó esparcida por todo el mesón y no me importó, porque de un momento a otro corrí desde mi lugar hasta la entrada del baño y regresé casi de inmediato.
— ¡Oh, por Dios! ¡Oh, por Dios! ¡Oh, por Dios! —Chillé.
Salté sobre el sillón y empecé a dar pequeños giros de excitación al escuchar su voz. Will ciertamente era mi mejor amigo y novio falso al mismo tiempo, pero de igual manera no lo veía hacía ya un par de meses, él estudiaba y vivía fuera de Londres y muy pocas veces teníamos la oportunidad de vernos.
— ¿Cómo estás? ¿Quién te ha dicho? ¿Lindsay? ¿Hannah? ¿Estás con ellas en este momento? ¡Agradéceles, idiota!
Mis preguntas iban y venían mientras yo solo giraba sobre el sofá, ya todo me daba vueltas para cuando acabé con el interrogatorio y me dejé caer sobre los cojines riendo torpemente.
— ¡Estoy muy contenta de que me hayas llamado! —Junté mis rodillas frente a mi pecho y caí hacia un lado tal cual como en posición fetal, sólo que aquel era el mundo de Will y mío.
Las voces que antes había escuchado ahora se hicieron más fuertes al gritarme al oído—: ¡Te extrañamos, ____!
Lindsay y Hannah habían ido con el chisme a Will cuando llegó a Londres, y tal vez no esperaban por encontrarme.
— Los odio con toda mi alma por haberme despertado. —Dije.
Un par de sonidos llamó mi atención a mi alrededor pero no me dio importancia, yo requería mi tiempo.
La risa aguda de Hannah me hizo sonreír también y luego ella gritó—: ¡Eres una maldita perra! ¡Nos abandonaste por esos cinco bombones!
Reí y una sombra pasó por mi lado, no quise voltear a mirar porque era mi última oportunidad para tener un poco de privacidad en mis opiniones reales.
— Te extrañé demasiado, Will… No sabes cuánto. —Murmuré.
Su risa estúpida me hizo saltar el pecho y querer poder abrazarlo en ese momento, aunque fuese casi imposible.
— Hace un par de días visité a Emily, ¿Sabes? Y pensé, ¿Puedo decirle que todo lo del novio es falso y…?
— ¡Ni se te ocurra, William Benneck! Luego irá con el chisme a donde mis padres y no quiero hablar de ti protegiéndote del interrogatorio maternal. —Bufé—. No quiero contarles la verdad, Will. Me obligarán a tomar consciencia y traerles hijos lo más pronto posible.
Un par de jadeos, más bien gemidos, aparecieron sobre el silencio del bus y mi pecho saltó de la impresión. No fue una buena idea hablar con Will sobre el novio falso. No si ellos malentendían las cosas.
— Estás exagerando, preciosa. Eres mi mejor amiga y todo chico-caliente- novio tuyo tendrá que hablar conmigo primero, para entablar reglas.
Quedé en completo silencio, mis ojos fueron hasta los cinco pares que observaban desde diferentes posiciones de la sala y que ahora mantenían su atención a todo lo que yo pudiese decir.
¿Qué les ocurría?
— ¿_____? —Llamó Will.
Pestañeé con rapidez e intenté bajar un poco la voz—: L-Lo lamento, me desconcentré un instante.
— Espero que no hayas visto a nadie desnudo…
— ¿¡Viste a Harry desnudo!? —Lo interrumpió Lindsay.
Mis mejillas enrojecieron cuando justo en ese instante junté la mirada del rizado con la mía, encontrándolo por un momento demasiado llamativo para mi gusto el pensar en ver su cuerpo.
— Cállate o me enojaré por las estupideces que estás diciendo. —La amenacé.
Su risa pudo escucharse desde la distancia y puede que por todo el bus. Aparté la mirada hacia mis piernas y sentí como aquel movimiento llamaba más la atención.
— La ____ que conozco no se enoja nunca, querida. ¿Qué te ha pasado? —Will rió también.
Fruncí el ceño, porque tenían razón, yo no era la misma Ann Blair que veía el lado bueno de todo.
— No puedes decir que no lo hago, cuando estoy con Emily…
— Ella es tu hermana, es obvio que te enojes. —Me interrumpió—. ¿Podemos dejar esta conversación tan bipolar para otro momento? No quiero terminar peleándome con mi _____.
Dejé salir un suspiro y acepté, a veces solo necesitas una buena conversación con él para calmar tus humos. Comencé a despedirme, pensando en todas las cosas que podría haberle contado sobre la verdad detrás de la búsqueda de estilistas y el verdadero significado de ser su Asistente, pero luego de un par de segundos la frase emocionada de Hannah en el fondo me hizo recapacitar.
— Si todos van a por ti, ¡Déjales desearte!
— Perra. —Bromeé.
Y corté.
Cerré los ojos y me estiré sobre la superficie del sofá, mis pies descalzos saborearon la tela con gratitud y solté un gruñido de satisfacción cuando me sentí renovada.
— Eres extraña.
Por fin, la voz de Zayn me hizo saltar de mi posición y sentarme sin rodeos. Una estúpida sonrisa abarcaba todo su rostro y me sentí por alguna razón más humillada que de costumbre.
— ¿Por qué dices eso? —Junté mis cejas por la molestia de su comentario y subí mis piernas entrelazándolas entre sí, un poco al estilo de los indios.
El castaño se encontraba sentado en el pequeño sofá de en frente junto con Louis que solo miraba con las curvas de sus labios hacia arriba. Los demás habían desaparecido del lugar.
— ¿Estás pensando lo mismo que yo, Louis? —Le preguntó a su compañero.
El castaño dio una risita y se cruzó de brazos—: Eres tan diferente con tus amigos y familia a como nos tratas a nosotros, que creíamos que no eras la verdadera ____.
Mis mejillas enrojecieron y arrugué los labios, aquella era la manera de hacerles saber qué molesta me encontraba. Desvié los ojos hacia la cocina y apoyé mis manos sobre los tobillos, dejando caer un poco el cabello para demostrar más seriedad. Aunque al parecer, no resultó.
Zayn se levantó para cruzar hasta frente de mí y tomó mis muñecas para levantarlas, yo abrí aún más los ojos de la impresión y terminó en apoyarme sobre el respaldo del sofá con toda la espalda.
— ¿Qué estás haciendo? —Le pregunté.
Él sonrió malévolamente y se sentó a horcajadas sobre mis piernas, sujetó mis manos aún sobre mi cabeza con una sola mano y la otra se acercó a mi cintura, adentrándola por debajo del camisón para dejarla reposar sobre mi estómago.
— ¿Por qué siempre te enojas con nosotros? —Dijo.
Arrugué más la frente y le entrecerré los ojos, ¿Qué tenía relacionado con acorralarme? Es más, estábamos siendo una muy extraña escena para Louis, que solo nos observaba divertido.
— ¿De verdad quieres saberlo? Con solo estar sobre mí se me suben a la cabeza las razones. —Escupí sin descuido.
Su sonrisa se desvaneció y ahora estaba preocupado… y un poco confundido.
— ¿No te gusta que te toquemos? —Escuché la voz del ojiazul, detrás—. Es una de las condiciones para ser nuestra Asistente.
Dejé de arrugar los labios y me mordí el inferior con vergüenza. El tocarme realmente no me afectaba tanto, era algo… distinto.
En realidad, no me disgustaba eso.
— Es cómo lo hacen… —Susurré.
Una cabeza de rizos apareció de la nada y se sentó junto a Louis, sin mirar si quiera el espectáculo que tenía el de ojos pardos frente a él.
Solté un jadeo cuando la mano de Zayn apretó con fuerza mi piel bajo la tela, y comencé a sentir como aquel estímulo hizo despertar su entrepierna sobre la mía.
— ¿Cómo… lo hacemos? —Preguntó Zayn.
Gruñí en molestia. Luego solté aire y dije—: No me gusta cuando… me tocan a la fuerza.
Su cuerpo se separó con rapidez del mío y bajé mis manos para juntarlas entre mis piernas. Harry había sacado a Zayn por la fuerza sobre mí, frunció su ceño al ver mi desconcierto y corrió a su retina cuando descubrió lo que había hecho.
Mi mente estaba en blanco. ¿Qué le hizo actuar de esa manera? ¿Acaso pensó que iría a golpear a su compañero? O tal vez…
— Ese idiota está celoso.
La voz de Liam nos hizo saltar a todos. No pudo haberlo dicho mejor, Harry estaba celoso y lo demostró tal cual como lo haría un chico así.
Tomé mi teléfono y escapé de las consultas que podrían venir luego de eso. Salté en un solo pie hacia mi catre y me recosté en él con la vista hacia la pared, esperando que nadie me molestase.
Volteé medio giro por pura curiosidad, y logré ver sin rodeos el rostro del rizado durmiendo.
O eso parecía.
Mantuve la mirada sobre su cara un par de minutos, se veía totalmente tranquilo a cómo había actuado antes que no divisé cuando sus ojos se abrieron y se juntaron con los míos.
Mi corazón latió el doble de lo normal; quise evitar nuestro encuentro pero no pude hacerlo, me tenía totalmente penetrada en su par esmeralda.
— Necesito tocarte, ____. —Murmuró después de otro par de minutos.
Mis mejillas ardieron, luego abrí la boca y dije—: Solo debes pedírmelo… de eso se trata el acuerdo.
Su rostro se contrajo y lo negó.
— Necesito tocarte, pero no cómo el acuerdo lo dice. —Bajó sus ojos lentamente por mi torso—. Quiero tocarte antes de que todos tengan el privilegio de hacerlo.
En ese instante, ____ Ann Blair dejó caer su muralla.
— Harry… —Llamé—. Solo hazlo y ya.
Su rostro se iluminó y se sentó con tanta rapidez que golpeó su cabeza con la retina de arriba, se sobó el sector adolorido con una de sus manos y saltó hacia el suelo, en ningún momento quitó su mirada de la mía.
— No te vas a escapar esta vez, lo prometo. —Dijo-gruñó- a la vez.
Me sostuvo sobre su hombro lo suficiente para cambiar de retina y caí sobre su colchón con un poco de brusquedad, se impulsó él mismo para taparnos con la cortina que cada camarote tenía y soltó un suspiro al verme al fondo del espacio.
— Si llego a pasarme, puedes golpearme. —Jadeó.
Yo asentí y sus manos se apoyaron sobre mi cadera, apretujándome contra su pecho con todo el espacio reducido que teníamos.
Se inclinó lo suficiente para rozar mis labios y yo cerré los ojos.
Juntó nuestras bocas como si formasen parte de un rompecabezas, pero unos cinco segundos después los separó y mordió con fuerza mi labio inferior, dejándome con un respingo en la garganta cuando volvió a acoplar sus labios con los míos.
Su beso era desesperado, quería más cada minuto que pasaba y yo respondía con urgencia.
Las manos entraron por mi camisón hasta levantarlas poco a poco por sobre mi cintura, me sostuve a su cuello intentando no pensar en escapar, en dejar el secreto a un lado y regresar a casa, pero cuando su lengua pidió permiso de entrar, mis acciones ya no las controlaba.
Succionó cada parte de mi boca como su fuera su dulce, batallábamos en darle movimiento a la otra intrusa cada vez que uno se rendía y el otro continuaba; y pronto su cuerpo se encontró sobre el mío.
Empujó levemente su pelvis contra la mía y gemí por lo bajo, sabía lo que en ese momento quería, aunque le estuviese denegado. Él necesitaba tocarme, pero de una forma más explícita.
Mi mente no respondía, sabía que si seguía así no acabaría nunca y lo peor estaría a la vuelta de la esquina. Harry rozó otra vez su entrepierna y abrió mis muslos con su rodilla para comenzar a “tocarme”.
Con una de sus manos enterró sus dedos en mi cabello y masajeó mi cráneo; la segunda seguía sosteniendo nuestras caderas rozándose, y cuando más tiempo pasaba más gemidos salían de nuestras bocas.
— Dime… que me detenga… —Dijo con la voz entrecortada.
Junté nuestros ojos y vi su determinación. Estaba completamente ido, si no le respondía pronto tendría toda la fuerza para acostarse conmigo sin opción a negarme, y se compondría si se lo impedía.
Abrí la boca para decir algo pero su miedo me provocó, irradiaba miedo a ser rechazado en todo momento y aquello me llenó de angustia por él.
¿Qué le estaba haciendo?
— Harry, ¿Qué te ocurre? —Le pregunté.
Su rostro se alivió y posó su cabeza sobre mi pecho, absorbiendo toda mi respiración como parte de su relajo.
— Eres difícil de predecir. —Sonó ahogado—. La mayoría del tiempo pensé que estallarías y no estaría vivo para contarlo por haberte casi follado a la fuerza.
Mis mejillas se encendieron ante la palabra “follar”, no era muy escuchada antes de todo eso en mi presencia y me provocó un poco de timidez al acto de que lo haya dicho tan fácilmente.
— ¿Me ibas a…? —Me guardé la palabra para otro momento.
Levantó la cabeza y con un fuerte impulso en mi entrepierna con la suya me hizo entender todo.
Harry no solo quería seguir el trato. No solo quería llegar a besarme o tocarme. Quería acostarse y follar conmigo.
— Diga…
— ¿____? —Alcancé a escuchar.
Me preparé para saltar hacia el suelo aun no pudiendo reconocer la voz de la persona al otro lado de la línea y bostecé.
La risa desde el móvil me molestó y caminé hacia la pequeña cocina aprovechando el sueño grueso de los cinco molestosos atrás, lista para beber un poco de agua fresca.
— Apuesto un pollo a las brasas a que te he despertado. —Dijo la voz.
Gemí en aprobación y otra vez su carcajada me hizo poner de malas.
— ¿Se puede saber quién eres? —Dije con rudeza.
Un par de voces femeninas salieron desde el fondo y me sentí aún más confundida, iba a volver a tomar un trago de mi vaso cuando el nombre de aquella persona me hizo soltarlo.
— Soy Will.
El agua quedó esparcida por todo el mesón y no me importó, porque de un momento a otro corrí desde mi lugar hasta la entrada del baño y regresé casi de inmediato.
— ¡Oh, por Dios! ¡Oh, por Dios! ¡Oh, por Dios! —Chillé.
Salté sobre el sillón y empecé a dar pequeños giros de excitación al escuchar su voz. Will ciertamente era mi mejor amigo y novio falso al mismo tiempo, pero de igual manera no lo veía hacía ya un par de meses, él estudiaba y vivía fuera de Londres y muy pocas veces teníamos la oportunidad de vernos.
— ¿Cómo estás? ¿Quién te ha dicho? ¿Lindsay? ¿Hannah? ¿Estás con ellas en este momento? ¡Agradéceles, idiota!
Mis preguntas iban y venían mientras yo solo giraba sobre el sofá, ya todo me daba vueltas para cuando acabé con el interrogatorio y me dejé caer sobre los cojines riendo torpemente.
— ¡Estoy muy contenta de que me hayas llamado! —Junté mis rodillas frente a mi pecho y caí hacia un lado tal cual como en posición fetal, sólo que aquel era el mundo de Will y mío.
Las voces que antes había escuchado ahora se hicieron más fuertes al gritarme al oído—: ¡Te extrañamos, ____!
Lindsay y Hannah habían ido con el chisme a Will cuando llegó a Londres, y tal vez no esperaban por encontrarme.
— Los odio con toda mi alma por haberme despertado. —Dije.
Un par de sonidos llamó mi atención a mi alrededor pero no me dio importancia, yo requería mi tiempo.
La risa aguda de Hannah me hizo sonreír también y luego ella gritó—: ¡Eres una maldita perra! ¡Nos abandonaste por esos cinco bombones!
Reí y una sombra pasó por mi lado, no quise voltear a mirar porque era mi última oportunidad para tener un poco de privacidad en mis opiniones reales.
— Te extrañé demasiado, Will… No sabes cuánto. —Murmuré.
Su risa estúpida me hizo saltar el pecho y querer poder abrazarlo en ese momento, aunque fuese casi imposible.
— Hace un par de días visité a Emily, ¿Sabes? Y pensé, ¿Puedo decirle que todo lo del novio es falso y…?
— ¡Ni se te ocurra, William Benneck! Luego irá con el chisme a donde mis padres y no quiero hablar de ti protegiéndote del interrogatorio maternal. —Bufé—. No quiero contarles la verdad, Will. Me obligarán a tomar consciencia y traerles hijos lo más pronto posible.
Un par de jadeos, más bien gemidos, aparecieron sobre el silencio del bus y mi pecho saltó de la impresión. No fue una buena idea hablar con Will sobre el novio falso. No si ellos malentendían las cosas.
— Estás exagerando, preciosa. Eres mi mejor amiga y todo chico-caliente- novio tuyo tendrá que hablar conmigo primero, para entablar reglas.
Quedé en completo silencio, mis ojos fueron hasta los cinco pares que observaban desde diferentes posiciones de la sala y que ahora mantenían su atención a todo lo que yo pudiese decir.
¿Qué les ocurría?
— ¿_____? —Llamó Will.
Pestañeé con rapidez e intenté bajar un poco la voz—: L-Lo lamento, me desconcentré un instante.
— Espero que no hayas visto a nadie desnudo…
— ¿¡Viste a Harry desnudo!? —Lo interrumpió Lindsay.
Mis mejillas enrojecieron cuando justo en ese instante junté la mirada del rizado con la mía, encontrándolo por un momento demasiado llamativo para mi gusto el pensar en ver su cuerpo.
— Cállate o me enojaré por las estupideces que estás diciendo. —La amenacé.
Su risa pudo escucharse desde la distancia y puede que por todo el bus. Aparté la mirada hacia mis piernas y sentí como aquel movimiento llamaba más la atención.
— La ____ que conozco no se enoja nunca, querida. ¿Qué te ha pasado? —Will rió también.
Fruncí el ceño, porque tenían razón, yo no era la misma Ann Blair que veía el lado bueno de todo.
— No puedes decir que no lo hago, cuando estoy con Emily…
— Ella es tu hermana, es obvio que te enojes. —Me interrumpió—. ¿Podemos dejar esta conversación tan bipolar para otro momento? No quiero terminar peleándome con mi _____.
Dejé salir un suspiro y acepté, a veces solo necesitas una buena conversación con él para calmar tus humos. Comencé a despedirme, pensando en todas las cosas que podría haberle contado sobre la verdad detrás de la búsqueda de estilistas y el verdadero significado de ser su Asistente, pero luego de un par de segundos la frase emocionada de Hannah en el fondo me hizo recapacitar.
— Si todos van a por ti, ¡Déjales desearte!
— Perra. —Bromeé.
Y corté.
Cerré los ojos y me estiré sobre la superficie del sofá, mis pies descalzos saborearon la tela con gratitud y solté un gruñido de satisfacción cuando me sentí renovada.
— Eres extraña.
Por fin, la voz de Zayn me hizo saltar de mi posición y sentarme sin rodeos. Una estúpida sonrisa abarcaba todo su rostro y me sentí por alguna razón más humillada que de costumbre.
— ¿Por qué dices eso? —Junté mis cejas por la molestia de su comentario y subí mis piernas entrelazándolas entre sí, un poco al estilo de los indios.
El castaño se encontraba sentado en el pequeño sofá de en frente junto con Louis que solo miraba con las curvas de sus labios hacia arriba. Los demás habían desaparecido del lugar.
— ¿Estás pensando lo mismo que yo, Louis? —Le preguntó a su compañero.
El castaño dio una risita y se cruzó de brazos—: Eres tan diferente con tus amigos y familia a como nos tratas a nosotros, que creíamos que no eras la verdadera ____.
Mis mejillas enrojecieron y arrugué los labios, aquella era la manera de hacerles saber qué molesta me encontraba. Desvié los ojos hacia la cocina y apoyé mis manos sobre los tobillos, dejando caer un poco el cabello para demostrar más seriedad. Aunque al parecer, no resultó.
Zayn se levantó para cruzar hasta frente de mí y tomó mis muñecas para levantarlas, yo abrí aún más los ojos de la impresión y terminó en apoyarme sobre el respaldo del sofá con toda la espalda.
— ¿Qué estás haciendo? —Le pregunté.
Él sonrió malévolamente y se sentó a horcajadas sobre mis piernas, sujetó mis manos aún sobre mi cabeza con una sola mano y la otra se acercó a mi cintura, adentrándola por debajo del camisón para dejarla reposar sobre mi estómago.
— ¿Por qué siempre te enojas con nosotros? —Dijo.
Arrugué más la frente y le entrecerré los ojos, ¿Qué tenía relacionado con acorralarme? Es más, estábamos siendo una muy extraña escena para Louis, que solo nos observaba divertido.
— ¿De verdad quieres saberlo? Con solo estar sobre mí se me suben a la cabeza las razones. —Escupí sin descuido.
Su sonrisa se desvaneció y ahora estaba preocupado… y un poco confundido.
— ¿No te gusta que te toquemos? —Escuché la voz del ojiazul, detrás—. Es una de las condiciones para ser nuestra Asistente.
Dejé de arrugar los labios y me mordí el inferior con vergüenza. El tocarme realmente no me afectaba tanto, era algo… distinto.
En realidad, no me disgustaba eso.
— Es cómo lo hacen… —Susurré.
Una cabeza de rizos apareció de la nada y se sentó junto a Louis, sin mirar si quiera el espectáculo que tenía el de ojos pardos frente a él.
Solté un jadeo cuando la mano de Zayn apretó con fuerza mi piel bajo la tela, y comencé a sentir como aquel estímulo hizo despertar su entrepierna sobre la mía.
— ¿Cómo… lo hacemos? —Preguntó Zayn.
Gruñí en molestia. Luego solté aire y dije—: No me gusta cuando… me tocan a la fuerza.
Su cuerpo se separó con rapidez del mío y bajé mis manos para juntarlas entre mis piernas. Harry había sacado a Zayn por la fuerza sobre mí, frunció su ceño al ver mi desconcierto y corrió a su retina cuando descubrió lo que había hecho.
Mi mente estaba en blanco. ¿Qué le hizo actuar de esa manera? ¿Acaso pensó que iría a golpear a su compañero? O tal vez…
— Ese idiota está celoso.
La voz de Liam nos hizo saltar a todos. No pudo haberlo dicho mejor, Harry estaba celoso y lo demostró tal cual como lo haría un chico así.
Tomé mi teléfono y escapé de las consultas que podrían venir luego de eso. Salté en un solo pie hacia mi catre y me recosté en él con la vista hacia la pared, esperando que nadie me molestase.
Volteé medio giro por pura curiosidad, y logré ver sin rodeos el rostro del rizado durmiendo.
O eso parecía.
Mantuve la mirada sobre su cara un par de minutos, se veía totalmente tranquilo a cómo había actuado antes que no divisé cuando sus ojos se abrieron y se juntaron con los míos.
Mi corazón latió el doble de lo normal; quise evitar nuestro encuentro pero no pude hacerlo, me tenía totalmente penetrada en su par esmeralda.
— Necesito tocarte, ____. —Murmuró después de otro par de minutos.
Mis mejillas ardieron, luego abrí la boca y dije—: Solo debes pedírmelo… de eso se trata el acuerdo.
Su rostro se contrajo y lo negó.
— Necesito tocarte, pero no cómo el acuerdo lo dice. —Bajó sus ojos lentamente por mi torso—. Quiero tocarte antes de que todos tengan el privilegio de hacerlo.
En ese instante, ____ Ann Blair dejó caer su muralla.
— Harry… —Llamé—. Solo hazlo y ya.
Su rostro se iluminó y se sentó con tanta rapidez que golpeó su cabeza con la retina de arriba, se sobó el sector adolorido con una de sus manos y saltó hacia el suelo, en ningún momento quitó su mirada de la mía.
— No te vas a escapar esta vez, lo prometo. —Dijo-gruñó- a la vez.
Me sostuvo sobre su hombro lo suficiente para cambiar de retina y caí sobre su colchón con un poco de brusquedad, se impulsó él mismo para taparnos con la cortina que cada camarote tenía y soltó un suspiro al verme al fondo del espacio.
— Si llego a pasarme, puedes golpearme. —Jadeó.
Yo asentí y sus manos se apoyaron sobre mi cadera, apretujándome contra su pecho con todo el espacio reducido que teníamos.
Se inclinó lo suficiente para rozar mis labios y yo cerré los ojos.
Juntó nuestras bocas como si formasen parte de un rompecabezas, pero unos cinco segundos después los separó y mordió con fuerza mi labio inferior, dejándome con un respingo en la garganta cuando volvió a acoplar sus labios con los míos.
Su beso era desesperado, quería más cada minuto que pasaba y yo respondía con urgencia.
Las manos entraron por mi camisón hasta levantarlas poco a poco por sobre mi cintura, me sostuve a su cuello intentando no pensar en escapar, en dejar el secreto a un lado y regresar a casa, pero cuando su lengua pidió permiso de entrar, mis acciones ya no las controlaba.
Succionó cada parte de mi boca como su fuera su dulce, batallábamos en darle movimiento a la otra intrusa cada vez que uno se rendía y el otro continuaba; y pronto su cuerpo se encontró sobre el mío.
Empujó levemente su pelvis contra la mía y gemí por lo bajo, sabía lo que en ese momento quería, aunque le estuviese denegado. Él necesitaba tocarme, pero de una forma más explícita.
Mi mente no respondía, sabía que si seguía así no acabaría nunca y lo peor estaría a la vuelta de la esquina. Harry rozó otra vez su entrepierna y abrió mis muslos con su rodilla para comenzar a “tocarme”.
Con una de sus manos enterró sus dedos en mi cabello y masajeó mi cráneo; la segunda seguía sosteniendo nuestras caderas rozándose, y cuando más tiempo pasaba más gemidos salían de nuestras bocas.
— Dime… que me detenga… —Dijo con la voz entrecortada.
Junté nuestros ojos y vi su determinación. Estaba completamente ido, si no le respondía pronto tendría toda la fuerza para acostarse conmigo sin opción a negarme, y se compondría si se lo impedía.
Abrí la boca para decir algo pero su miedo me provocó, irradiaba miedo a ser rechazado en todo momento y aquello me llenó de angustia por él.
¿Qué le estaba haciendo?
— Harry, ¿Qué te ocurre? —Le pregunté.
Su rostro se alivió y posó su cabeza sobre mi pecho, absorbiendo toda mi respiración como parte de su relajo.
— Eres difícil de predecir. —Sonó ahogado—. La mayoría del tiempo pensé que estallarías y no estaría vivo para contarlo por haberte casi follado a la fuerza.
Mis mejillas se encendieron ante la palabra “follar”, no era muy escuchada antes de todo eso en mi presencia y me provocó un poco de timidez al acto de que lo haya dicho tan fácilmente.
— ¿Me ibas a…? —Me guardé la palabra para otro momento.
Levantó la cabeza y con un fuerte impulso en mi entrepierna con la suya me hizo entender todo.
Harry no solo quería seguir el trato. No solo quería llegar a besarme o tocarme. Quería acostarse y follar conmigo.
Ahora si he vuelto :D Ojalá pueda subir más rápido esta vez pero no prometo nada, seguiré escribiendo para tener algo avanzado ahora :)
Última edición por Cassedy el Miér 19 Jun 2013, 3:38 pm, editado 1 vez
Cassedy
Re: Tienes derecho a guardar silencio. (One Direction y Tú) Semi-Hot
siiiiiii por fin escribesssss
siguela cuando puedasssss
jejejejejje el harry esta celoso ajjaja
siguela por favoorrr
besssotessss
siguela cuando puedasssss
jejejejejje el harry esta celoso ajjaja
siguela por favoorrr
besssotessss
maia Directioner<3
Re: Tienes derecho a guardar silencio. (One Direction y Tú) Semi-Hot
Aahhh me encantooo seguiilaaa
OH Harry qiere... jajaja
OH Harry qiere... jajaja
~Malik's.Girl.Greyita~
Re: Tienes derecho a guardar silencio. (One Direction y Tú) Semi-Hot
seguiilaaaaaaaaa plzz
~Malik's.Girl.Greyita~
Re: Tienes derecho a guardar silencio. (One Direction y Tú) Semi-Hot
¡HOOOOOOOLAAAAA! Un nueva lectora por acá. ¡Esta novela es genial! ¿Cuándo la seguiras? Espero que pronto, no quiero que sea cancelada... Esa es una de mis grandes preocupaciones en estos momentos, tengo miedo de que eliminen las novelas genialosas. Por favor por favorcito, no la canceles y siguela pronto. Yo TENGO que saber que ocurre. ¡Te ordeno que la sigas! Ok no, pero en serio, siguela. No rompas mi pequeño corazón.
Me tengo que ir, pero por favor ¡siguela!
P.D. ADORO como escribes.
Me tengo que ir, pero por favor ¡siguela!
P.D. ADORO como escribes.
Can´t Be Tamed
Re: Tienes derecho a guardar silencio. (One Direction y Tú) Semi-Hot
NUEVA LECTORA!!!
amo tu novela :(L):
soy vanessa pero puedes decirme vane o flower ;)
la de "entrega la evidencia y nadie saldrá herido" es una de mis favoritas que la eh leído mas de 10 veces y aun asi sigo llorando y riéndome de todo lo que pasa
espero que esta novela sea igual o mejor que la otra
soy tu fan #1 Y POR SUPUESTO FIEL LECTORA
SIGUELAAAA!!!
amo tu novela :(L):
soy vanessa pero puedes decirme vane o flower ;)
la de "entrega la evidencia y nadie saldrá herido" es una de mis favoritas que la eh leído mas de 10 veces y aun asi sigo llorando y riéndome de todo lo que pasa
espero que esta novela sea igual o mejor que la otra
soy tu fan #1 Y POR SUPUESTO FIEL LECTORA
SIGUELAAAA!!!
vanessa031600
Re: Tienes derecho a guardar silencio. (One Direction y Tú) Semi-Hot
VAMOS SIGULAAAAAAAAAAA!!!!!!!!!!
ATT:VANE
PD:si necesitas chicas abisame
ATT:VANE
PD:si necesitas chicas abisame
vanessa031600
Re: Tienes derecho a guardar silencio. (One Direction y Tú) Semi-Hot
vamos síguela!!!!!!!!
ATT:vane
ATT:vane
vanessa031600
Página 2 de 20. • 1, 2, 3 ... 11 ... 20
Temas similares
» Siete minutos en el paraíso (One Direction) Semi-Hot
» Apocalipsis Zombie, ¿Podremos sobrevivir? |One Direction y Tu| Semi-Hot
» "El Dominó" (One Direction y tu, semi-hot) - TERMINADA
» Devil in her heart {One Direction & Tú} Semi hot
» Mi Peter Pan (Louis Tomlinson,One Direction y tu)SEMI-HOT
» Apocalipsis Zombie, ¿Podremos sobrevivir? |One Direction y Tu| Semi-Hot
» "El Dominó" (One Direction y tu, semi-hot) - TERMINADA
» Devil in her heart {One Direction & Tú} Semi hot
» Mi Peter Pan (Louis Tomlinson,One Direction y tu)SEMI-HOT
O W N :: Archivos :: Novelas Terminadas
Página 2 de 20.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
Miér 20 Nov 2024, 12:51 am por SweetLove22
» My dearest
Lun 11 Nov 2024, 7:37 pm por lovesick
» Sayonara, friday night
Lun 11 Nov 2024, 12:38 am por lovesick
» in the heart of the circle
Dom 10 Nov 2024, 7:56 pm por hange.
» air nation
Miér 06 Nov 2024, 10:08 am por hange.
» life is a box of chocolates
Mar 05 Nov 2024, 2:54 pm por 14th moon
» —Hot clown shit
Lun 04 Nov 2024, 9:10 pm por Jigsaw
» outoflove.
Lun 04 Nov 2024, 11:42 am por indigo.
» witches of own
Dom 03 Nov 2024, 9:16 pm por hange.