[Solo baila para mi.] ____ Wellington y Harry Styles.

Capitulo 39.
______.
- Toc, toc…
El susurro de la voz de Val junto al olor de tostadas, jalea y jugo se filtraba por debajo de la puerta. Un momento después el crujido del pomo se escucho a mi espalda. Me encontraba bajo mi sabanas, hecha un ovillo. No tenía la fuerza de hablar con nadie sin sentir como un nudo se formaba en mi garganta.
-Vamos, ___. Levántate, te traje tu desayuno. -Hice caso omiso y me tape toda mi cabeza. Escuche como Valeri tanteaba el lugar, hurgaba en mis libros y lanzaba ropa al canasto. -Ok, es suficiente, estoy harta. –Dijo con la voz llena de enfado. Lanzo fuera mis sabanas y con mi antebrazo cubrí mis ojos de la luz que se filtraba por la ventana que recientemente había abierto Val.
- ¿Qué te sucede, Valeri? ¿Has perdido la cabeza?! –grite tratando de agudizar mi voz, sonaba ronca y seca.
- La pregunta es para ti, ___ ¡que te sucede! No puedes estar ahí acostada para siempre, sin comer o respirar el aire puro. ¡Por Dios! Deberías verte en un espejo, tienes una semana y media sin bajar de tu cuarto, a duras penas te bañas. ¡No fuiste al último día de curso y eso era algo que habíamos preparado con tiempo! Tú familia está preocupada y tiene miedo de que vayas a hacer una estupidez.
Las notas de su voz cambiaban en cada oración. Notaba como su cuerpo estaba tenso y realmente estaba preocupada por mí. Se había desvelado conmigo limpiando mis lágrimas y le estaba pagando de una manera cruel.
-Lo… lo siento, Val – mi voz se corto, se hizo un nudo en mi garganta y sentí las lagrimas correr por mi cara -Es que… lo extraño tanto… y sé que soy una idiota egoísta que solo está pensando en sí misma y no en mis abuelos, mi hermano, mi mamá y en ti, pero no puedo salir sin sentir que algo me falta, el aire se me va y todo… completamente todo me recuerda a él. No haré una tontería, pero por ahora no me siento fuerte para poder darle la cara a la gente.
Valeri se sentó en el borde de mi cama y pasó sus manos por su rostro dejándolas en su coronilla. Estire mis brazos hasta ella y la abrace tan fuerte que sentí romperla.
-Perdóname, sé que he sido la peor amiga-hija-nieta del mundo –limpie con el dorso de mi playera las lagrimas y la miré rompiendo el abrazo -Pero te juro que no puedo soportar saber que estaba jugando conmigo y que después se enamoro y sobre todo, que no quiere sentir eso por mí. El no va a volver, se ha ido. Nunca me había enamorado de nadie, porque sabía que me iban a destrozar el corazón, pero el cambio todo en mi. ¡Por Dios Val¡ me enseño a vivir.
-Solo… no te dejes vencer. Cuando estés preparada para salir al mundo de nuevo te estaremos esperando.
-Lo haré pronto, tengo muchas dudas que necesitan ser aclaradas y él es el único que me puede dar las respuestas, aunque no quiera estar conmigo debe enfrentarme y para eso necesito salir.
Por mi mente desfilaban las razones por las cuales el decidió marcharse, pero no había nada solido. El nunca había mencionado algo que desencajara… solamente promesas vacías y cumplidos falsos.
Deje que mis parpados se cerraran, lo necesitaba, a pesar de que había estado en mi habitación no había dormido decentemente gracias a las torpes lagrimas que se presentaban. Val estaba ordenando mi closet y me sentía segura con ella cerca.

Harry.
Me levante antes de que mi despertador sonara. Estaba por cumplir dos semanas donde mi sueño no precisamente era el mejor, me abrumaban las pesadillas. Todo se concentraba en ___. Me maldije a mi mismo por haber hecho una promesa que me estaba quitando la felicidad, yo mismo estaba haciendo de mi vida un infierno.
Unos ligeros golpes en la puerta de entrada me hicieron incorporarme. Sabía que era Kate con el periódico del día. Ultimadamente se tomaba muchas molestias, casi podía sentir su respiración en mi nuca, pero no lo tomaba mal, incluso su compañía me hacía olvidar por momentos a ___.
-Hola –dijo con una sonrisa radiante, usaba unos jeans rotos de las rodillas y una blusa de tirantes azul marino. Entro directamente a la cocina y dejo caer el periódico en el comedor. Se devolvió rápidamente y deposito un beso en mi mejilla. –Lo siento lo olvide. Pero es que este desorden no me deja siquiera prestarte atención. ¿Ya has desayunado? No respondas, sé que no lo has hecho. Te preparare un café y tostadas. ¿Te gustan? Ay por favor no debí preguntar eso, a quien no le gustan las tostadas. –Puso agua en la cafetera y encendió la estufa con un movimiento único. Se giro para verme, me estudio más de la cuenta y sonrió. –Harry, ¡tienes unas ojeras espantosas! Sé que no has dormido bien, mi habitación esta junto a la tuya y escucho el compás de tus pasos de aquí a halla toda la noche. ¿Sucede algo? –Pregunto ansiosa, sonaba realmente preocupada.
-Nada importante, solo he tenido unos problemas.
De nuevo, ___ apareció en mi mente. Quizá era momento de contarle al menos cierta parte de la historia a Kate, me fiaba de ella y necesitaba contarle a alguien como me sentía, si no iba a explotar en un mar de lágrimas. La boca de Kate se abrió al instante en el que comencé a hablar, la cerro haciendo una seña con la mano de que prosiguiera.
-Bien, mi novia y yo hemos terminado.
El rostro de Kate pareció iluminarse y supe que había hecho mal en empezar por ahí. No pretendía que se hiciera ilusiones. No quería jugar con sus sentimientos.
-¿Por qué? Que sucedió.
Dejo los platos con la comida en la mesa y me senté frente a ella con las manos entrelazadas.
-Bueno, ¿recuerdas el día que nos conocimos? –Ella asintió y frunció el ceño.
-Eso… ¿a dónde nos lleva?
-Pues mentí. Cuando llegue a Londres, ya había terminado con ella y fue por algo complicado. Es duro para mí hablar sobre esto…
Alargo su mano hasta las mías y les dio un apretón suave. Sonrío y me miro directo a los ojos sin coqueteo, estaba siendo solidaria.
-No te forzare a hablar sobre algo que no es de mi incumbencia.
-No, quiero hacerlo. Necesito hacerlo.
Le comencé a platicar sobre el día que la conocí, la promesa hacía mi abuelo, nuestro primer beso, la forma en la que nos tratábamos: con indiferencia aunque el deseo se desbordara de los dos. De mi abuelo y de su abuela, incluso le mencione a Max. Mi huida había quedado implícita hasta que me arme de valor y le conté todo.


Gracias por leeeeer:)

AAAEEE WEEE!!!!!!

Kate se esta comportando muy bien pero que no se pase de.......…………

Ya sabes

En fin

S
I
G
U
E
L
A

Buen, espero q Kate no haga ninguna tactica cn Hazza xq sino voy y en serio la mato. Espero q rayita lo encuentre y el le diga todo asi terminan cn esto de una vez, que les cuesta ser felices dios, seguila cuando puedas, besotes y feliz año!

Hola Honey como estas? Bien? Me alegro! Como describir este capitulo? Ah si! PERFECTO! Harry es un estupido, tiene que volver con la rayis! No tienes que dejarme con la intriga, quiero saber que pasa luego!

Por cierto! Me habia olvidado.. FELIZ AÑO NUEVO !!!!

¡HOLA! soy nueva lectora bueno la verdad no era una fantasma pero es que lei por mi telefono y bueno comentar era un problema y ademas no tenia cuenta.
SIGUELA ME ENCANTA TU NOVELA "LA AMO" :love: Podrías pasarte por la mía es nueva, bueno obvio ya que soy nueva en el foro ahi te dejo el linck:
https://onlywn.activoforo.com/t28082-nunca-me-lo-imagine-zayn-malik-y-_____-parker#1550706

tienes que seguilaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa! esta muy buena nos vemos pronto te amo! ♥ Besos con mucho amorrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrr ! :)

Capitulo 40.

-Y, así es como llegue aquí…
-Uau, eso fue… duro.
-Lo es, Kate. Lo es.
-Pienso que debes dejarlo pasar. Si estas tan seguro de no volver ¿Por qué no empiezas desde cero, aquí en Londres? Puedes encontrar a alguien que te quiera, y probablemente más que ella. Más que __.
Nadie nunca me va a querer más que ___.
Las palabras se quedaron atoradas en mi garganta. ¿La razón? Sus ojos brillaron y por un instante me perdí en sus ojos grises. Llenos de dulzura y jovialidad. Kate era un año más joven que yo y demasiado más madura a su vez que divertida.
-Por ahora, es muy rápido. Y no es tan fácil, no existen muchas personas como ___. Me he enamorado como un loco, para ser la primera vez se siente como una montaña rusa.
Su mirada cayó y se apresuro a levantar los trastos de la mesa. Sentí como se tensaba y supe que había tocado, o mejor, dicho algo que no era correcto.
- No es necesario que lo recojas, lo haré por mí mismo.
Tome su muñeca y ella lentamente dejo todo en la mesa.
-Entonces… ¿fue la primera vez que te enamoraste?
Asentí y deje caer mis brazos a mis costados. Me sentí pésimo por haberla lastimado, quería devuelta su sonrisa contagiosa. Definitivamente no me gustaba la Kate seria.
-Bien, da igual ahora eso. Háblame de ti, ¿qué hay de tu fabulosa abuela? Entre más hablas de ella más ganas me dan de conocerla. Pero su turno es cuando yo salgo y en las noches no escucho más que sus gritos hacía una tal Dona.
Kate rio junto a mí y se dejo caer en el sillón. Palmeo el lado y yo imite su acto.
-Pues… Mi abuela es el casero de aquí y yo la cubro por una módica cantidad. El dueño de estos aposentos se llama James Tucker es un empresario muy rico en Londres, es el mejor amigo de mi abuela. Hace un año mi abuela cumplió 67, la despidieron de su trabajo y después de eso no pudo conseguir otro. Por magia del destino, el casero de ese entonces consiguió un mejor trabajo en Manchester, James vino por una papelería y cuando visito a mi abuela ella le conto su desempleo. James es un hombre caritativo y desde luego cuando vio la oportunidad de que mi abuela trabajara allí no dudo en darle el trabajo. Así que por eso estamos aquí, no pagamos el departamento. Si no fuera así créeme, no estuviera en la preparatoria.
Termino con una sonrisa, algo había en ella que irradiaba luz. Como un ángel guardián, pero algo no estaba bien. Mis padres siempre dijeron que las personas que más sonríen son las que más problemas tienen. Tome su mano y le dedique una cálida sonrisa. Ella vibro bajo mi contacto.
- Debió ser algo pesado que tu abuela pasara por eso…
-¡Y que lo digas! Después de que mis padres murieran, ella se hizo responsable de mí, y la veo como mi todo.
-Lo siento…
-¿Por qué?
Su sonrisa tan genuina no caía, ¿Cómo era posible que no le doliera que sus padres hayan muerto?
-Tus padres…
-¡OH! No, bueno si, duele porque no llegue a convivir con ellos nunca, murieron cuando apenas tenía un año en un accidente automovilístico. Pero a mis 18 años creo que ya lo voy terminando de asimilar.
- ¡Eres una persona fuerte! Estoy muy asombrado de ti.
Ella se ruborizo hasta las orejas y me gustaba el efecto que ejercía en ella. Las comisuras de mis labios tiraron hacía arriba formando una sonrisa. Su mirada encontró la mía y fue como si una ola de tranquilidad cruzara por mi cuerpo.
-Gracias, Harry. –Suspiro y se aliso la blusa que traía- Vine aquí para hacerte una invitación. Quiero que esta noche vengas a cenar con mi abuela y conmigo, hará su tarta.
-Eso sería genial, Kate.

____.
Sentí mis piernas doblarse y me obligue a detenerme aunque en mi cabeza una vocecilla gritaba “no pares, sigue corriendo”. Ultimadamente me agitaba rápido y pensaba que había perdido la condición.
Queen grito desde la barra donde estaba haciendo calentamientos. Era la tercera vez que lo hacía dándome ánimos. Pulse el botón de Stop y la caminadora detuvo su paso con una sacudida. Me erguí de nuevo y me encontré con su mirada, ella negó un par de veces y giro su cuerpo 360 grados al este en un pirouette.
Camine hacía la esponja que utilizan para hacer mortales y me deje caer como un saco. Estaba realmente cansada, cerré mis ojos un momento y la silueta de un rostro con ojos verdes llegó como flashes. Harry. ¿Qué estará haciendo en este momento? ¿Dónde estará? ¿Pensará en mí? No lo creo.
Deje que mi mente vagara como una camarita por todo su cuerpo, me detuve observando su cara, sus facciones bien delineadas casi como si estuvieran talladas. Sus labios rosados y delgados que siempre estaban con una sonrisa. Sus hoyuelos y la forma en que se arrugaban cuando movía la nariz. Sus ojos verdes que atrapan pero no dejan que los atrapes, reciben mucho y ellos no dan nada.
Ayer que Valeri fue a mi casa y me hizo abrir los ojos decidí que hacer las paces con mi familia era lo que necesitaba. Durante todo el día no me había permitido pensar en él. Aunque una pequeña parte de mi lo odiara, otra necesitaba completamente de él, tenerlo en mi presente eran como fuerzas.
Me había planteado en pensar en mi vida antes de conocerle, pero no podía recordar algo bueno de aquello. Entendí que Harry le dio un pequeño sentido a mis días y que ese empujoncito a la sociedad hizo de una mejor ___. Una chica normal de Londres con muchos sueños y esperanzas.
La relación con mi madre la sentía más fuerte que nunca, ella estaba muy al pendiente de mí. Indiscutiblemente se sentía culpable por haberme dejado en el tiempo que más la necesitaba. Eso daba igual para mí, pero al parecer a ella se le hacían años perdidos que quería recuperar en horas.
Tome un respiro y exhale fuerte, no debía pensar en él de nuevo, al menos no de esa forma. Lo más seguro era que el ya me estaba olvidando y esperaba, por mi bien que así fuera.
Patearon mi costado y abrí los ojos de golpe. Queen estaba con sus brazos cruzados y me miraba.
-¿Seguirás tirada ahí perdiendo el tiempo? O ¿vas a levantar tu trasero y seguirás estirando? Tú decides.
Doble mis rodillas y me levante en Cambré. Ella dio un aplauso y se giro.
-Ese Cambré estuvo excelente. – Musito con una sonrisa.
-Lo aprendí de la mejor.
Había extrañado tanto el Ballet, me lamentaba el haberlo dejado tanto tiempo. Camine hasta la barra y me permití calentar en ella, deje que mis músculos se liberaran y adiós tensión. Aprovecharía al máximo cada clase, como si fuera la última.
Las vacaciones habían llegado y por su puesto mi plan de ir a Londres seguía en pie. Necesitaba saber la verdad y sabía que solo Harry la tenía.
Cerré los ojos y la alarma de mi celular resonó en las cuatro paredes del estudio. Camine con pesadez hasta mi bolso y lo deslice fuera, tenía dos llamadas perdidas de Max. Lo más seguro era que necesitara ayuda con los preparativos de la fiesta de esa noche. Era el cumpleaños de Terrence e íbamos a festejarla en nuestra casa. Cogí mis cosas y me despedí de Queen con un abrazo.
Como era de esperarse Valeri y Max se paseaban estresados por toda la casa. Me detuve en el marco de la puerta y silbe tan fuerte que ambos voltearon.
-Gracias a Dios que has llegado, ___. – Dijo Max pasándose las manos por su cabello largo y oscuro.
-Por favor, prepara los bocadillos, -rogo Val-. Esto es un desastre. Acabo de llegar y me encuentro con Max tirado en el sofá. ¡Se ha quedado dormido! Repréndelo, eso ha sido irresponsable.
Su labio temblaba y me miraba suplicante. Yo había insistido en faltar a clase pero ambos negaron diciendo que todo iba a estar bajo control.
-Necesito tomar una ducha. Huelo horrible.
-Eso es falso, hermana. Hasta tu sudor huele a vainilla. Ahora mueve tu trasero y ayúdanos por favor. En media hora llegan todos, quizás Louis traiga toda la cerveza y…
-Espera un momento, idiota –le corte furiosa- ¿Dónde están mis abuelos y mamá? Ellos te mataran si saben que traerán cerveza.
-____ -comento Val- relájate. Tu mamá sabe que Max y los idiotas de sus amigos beberán y tus abuelos fueron a un retiro, bueno eso nos ha dicho tu mamá.
Suspire resignada y deje mi peso en un pie.
-¿Entonces preparo los bocadillos?

Harry.
Cerré el último botón que faltaba de mi camisa y tome las llaves de mi departamento. No tenía muchos ánimos para ir a cenar con Kate, pero se lo había prometido y ella había estado tan emocionada al respecto que no vacile ni un instante en decirle que no. Tome el ramo de rosas que estaba sobre la mesa del comedor y cerré la puerta tras de mí.
Kate vivía a un lado de mi departamento. Su puerta a diferencia de las otras no tenía número y su pintura era de un rosa pastel. Una hilera de flores diferentes desfilaba al costado del pasillo. Era obvio que había acertado al comprar aquellas rosas en una jardinera cerca del parque donde ya se me había hecho costumbre correr cada mañana.
Presione mis nudillos en la puerta y toque un par de veces. Una feliz Kate apareció frente a mí al cabo de unos segundos. Tenía una sonrisa amplia y usaba un vestido de vuelo hasta las rodillas azul. Su cabello rubio estaba alzado en una coleta corta. Sonreí y ella me invito a pasar con la mirada.
-Qué guapo te vez, Harry –Exclamo- Me gusta cómo te va esa ropa.
-Gracias, Katherine. Tú te ves hermosa, igual que todos los días.
Ella se ruborizo y se giro hacía un pasillo.
-Ven, te presentaré a mi abuela. Debo decirte que ha estado ansiosa en conocerte.
De pie a una alacena estaba una señora delgada y de baja estatura con el pelo blanco. Se giro hacía mí y me tendió su mano derecha. La estreche y sonrió. Era la misma sonrisa de Kate, llena de dulzura.
-Un placer –dije- Me llamo Harry, soy su vecino.
-OH! El gusto es mío cariño. Mi nombre es Sara, pero puedes decirme abuela. De antemano se tu nombre, Kathe no para de hablar de ti.
-¡Abuela! –protesto Kate.
-Calla Katherine. Ya veo porque… Eres un muchacho muy guapo, Harry. En fin, me da gusto que hayas venido, semanas aquí y apenas te conozco. ¡Kate! Pon la vajilla de porcelana sobre la mesa, seremos cuatro. Dona también viene a cenar.
-Le ayudare a Kathe, si no le molesta Sara.
-Para nada, pero insisto dime abuela. Apuesto que a Kate le encantaría escuchar ese nombre de tu boca. Bueno, no solo para eso le gustaría tú boca.
Kate abrió los ojos como platos y yo reí por lo bajo. Tiro de mi codo y me llevo al pasillo, fulminando con la mirada a Sara.

________.
-¡Louis, la cerveza va en el frigorífico!-Grito Max desde el otro lado de la casa. Yo reí y me deje caer sobre el sillón. Estaba cansada, había ayudado a Valeri a limpiar los pasillos de la casa y a guardar cualquier artículo de vidrio o filoso en el sótano. El piso estaba reluciente y toda la despensa estaba en su lugar dentro de la cocina.
-Max, y ¿si mejor guardas las bebidas en una cubitera? –Sugerí-. Todo el mundo manoseara el frigorífico y me mate limpiándolo.
-Buena idea, sparksfly.
Me tense al escuchar ese nombre y toda la rabia que había mantenido baja durante el día iba a explotar. Me incorpore en un movimiento y Val noto mi molestia por que hizo lo mismo, preparada para cualquier ataque de parte mío.
-No me digas así nunca más. ¿Está bien? Tomaré una ducha, bajaré cuando la fiesta este en ambiente, si necesitan algo déjenme un mensaje en el celular.
Valeri abrió la boca para protestar pero no lo hizo. Max frunció su entrecejo y se encogió de hombros. –Como quieras entonces, ___.
Se giro y Louis lo detuvo a mitad del umbral susurrándole algo en el oído.
No sé porque, pero algo me decía que hablaban sobre mí.

Lo siento por la tardanza, pensé que ya había subido! D:

besos:B.

¡SIGUELA!

OHH!! Me encantó el cap honey!! Harry es un idiota!! Tiene que volver con ____..¿Se estará enganchando con Katherine?? NOOO!! Tonto Harry!! Por favor siguelaa!!

me encanta!
aunque no me encanta que Harry este pasando tanto tiempo con Kate ¬¬'
el es solo de la rayis!! grrrh!
en fin... siguela

Holiwinkys!! me llamo Majo y soy una nueva y fiel lectora...... me encanta solo eso puedo decir!! Kate me da muy mala espina :¬¬:
Grrrrrrrrr....... no te has preguntado si existen los unicornios porque yo si, lo medito toda la noche.....
Siguela hermosa besos, chocolates, unicornios, gatos y zanahorias CUIDATE!!! :hug: (chocolates)

Estas de broma, HAY SIGUELSAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA :)