Perfect Enemies. (Zayn Malik) ~Adaptada~ (Terminada)

Capítulo dedicando a iT's OnLy DiAnA MaLiK por ser mi fiel lectora y no faltan sus comentarios en cada capítulo:D. Disfruten de éste!
-A



Cap 5.

— ¡No puedo creerlo! —Exclamaba indignada, Fiama— ¡Se comportaron como si tuvieran 5 años!
—Mamá ya deja…—Zayn estaba más que hastiado con los reclamos de su madre, que solo revoloteaba los ojos.
—Fiama, lo mejor será que tú y mi madre se encarguen de la organización…
—Concuerdo con eso —interrumpió Zayn.
—Como decía…—carraspeé— Háganlo a su manera, se que tienen buen gusto.
—Lo único que pido, es que las cosas no sean en tonos rosas —bufó nuevamente el demonio.
Nos adentramos los tres en el auto. Yo en el copiloto, y Fiama en el asiento trasero. Mientras Zayn manejaba, Fiama hablaba por teléfono con mi madre respecto a nuestro comportamiento. Paralelo, yo planeaba mi procedimiento mafioso para esta noche.
—Zayn…—murmuré lo más dulce que pude.
—Estoy manejando —respondió tajante.
—Pero puedes escucharme —inquirí.
Soltó un soplo, así me dio el paso para continuar.
—Quería saber… ¿Si tenías planes para esta noche?
Paro el coche en luz roja, y giro su cabeza hacia mi rostro. Estaba estupefacto, sus ojos eran dos platos enormes. Yo solo reí ante su expresión, y probablemente me sonrojé.
— ¿Es una broma, cierto? —frunció el ceño.
Pase de sentir risa, a estar decepcionada. Todo en cosa de segundos, por culpa de Zayn.
—Simplemente olvídalo —rodeé mis ojos.
—Pero…—se le notaba curioso, pero seguiría con mi postura.
—No tiene importancia, de verdad que no —dirigí mí vista hacia el frente, evitando la del idiota que estaba a mi lado.
Y el resto del viaje fue en mutis. No hallaba la hora de llegar pronto a mi departamento, y estar lejana de Zayn. ¿Cómo mi vida pudo convertirse en un infierno, en tan escaso tiempo?
El automóvil se detuvo, y ya nos encontrábamos fuera de mi hogar. Me despedí de Fiama, y baje inmediatamente. Pero antes que pudiera ingresar al edificio, una mano tomo de mi brazo.
—Espera —me giré a verle— No me vas a dejar con la curiosidad rondándome en mi mente.
—Y si lo hago ¿Qué?—dije molesta.
— ¿Cuál es tu plan? —sonrió, pero esta vez de una manera infantil. Incluso me pareció tierna de su parte. Que raro.
Respire unos momentos, para decidir si lo que haría estaba bien o no.
—Vamos, no tengo todo el día para esperarte —dijo ya impaciente.
— ¿Quieres cenar hoy? —dije de una vez.
— ¿Tu y yo? —frunció el ceño.
—No, con John Lennon y Yoko Ono también —bromeé.
A lo que Zayn soltó una carcajada imparable, agarrándose las costillas de tanto júbilo.
—Tienes un humor sarcástico muy bueno —dijo respirando profundamente de una vez— Deberías trabajar en algún monologo o algo…
— ¡YA! —grite fuera de mis casillas.
—No te alteres —carcajeó— ¿A qué hora vengo?
—A las 8.
—Muy buen horario, con noche de brisa. Realmente magnífico.
—Tu deberías consultar un médico —deposité mi mano en su frente— Estás perdiendo el juicio.
Saqué mi mano de su rostro, y él solo giro hacia el auto. Ni siquiera un adiós me dijo. Maldito bastardo.
Entre al hall de entrada, y presioné el botón para el ascensor. Sé que caminar por las escaleras es mejor, pero no estaba del ánimo para hacerlo. Quería solo holgazanear. Ya en mi morada, deje mi bolso en uno de los sofás que adornaban la fachada. El ambiente estaba fresco, ideal para cenar. Fui en busca de mi laptop, para comenzar con la investigación de alguna cena para esta noche. La cocina no era uno de mis fuertes —tampoco era una rezagada en la materia— Pero no era un chef, al menos me defendía, creo yo. No buscaba algo muy sofisticado ni tortuoso, requería algo simple y fácil de confeccionar. Y nada de lo que encontraba era de mi gusto. Era muy complicado, de ingredientes bizarros, o simplemente no me daba buena impresión de hacerlo. Suspire pausadamente. No quería coger el teléfono y llamar a cierta persona…
Pero como soy débil, ya estaba marcando el número.
—Madre…—insinué con poco aliento.
— ¡Alice! —Decía emocionada— ¡Que alegría el escuchar tu voz! Cuéntame ¿Cómo fue hoy?
—Si te refieres a la planificadora, fue un desastre, gracias —exprese con ironía.
— ¡Ay cariño! Tan horrible no pudo haber sido, Fiama me puso al tanto.
—No necesito hablar de eso ahora mamá… preciso tu ayuda para otra cosa.
—Y bueno, dime.
— ¡Prométeme que no gritarás! —fue lo último que le dije.
Después mi tímpano, agonizó y fue enviado al exilio.
— ¡TE DIJE QUE NO GRITARAS! —ahora la que gritaba como loca y hecha una fiera, era yo.
— ¡Ay es que invitaste a Zayn a cenar! ¿No es lindo?
—Al contrario… es —pero en realidad no encontraba la palabra para objetar esta vez. Algo me impedía hacerlo— ¡Simplemente! ¿Puedes ayudarme?
—Todo por un lindo matrimonio —expresé una mueca de asquerosidad— Toma nota.
Después de las lindas charlas que mamá me dio —un verdadero tártaro— Me dirigí a la cocina a buscar entre las alacenas, los ingredientes que solicitaba el festín. Precisaba de carne, salsa de soja, aceite, fideos, champiñones, crema blanca, algunas que otras especies y el ingrediente especial: nueces.
Primero que todo, lave mis manos, además de colocarme un delantal para que no se origine alguna mancha
irritable. Y ahora, a seguir la receta de mi madre. Cortar la carne en trozos pequeños. Hervir en una olla el agua, para cocinar las pastas. Calentar el aceite en el sartén, mientras se trituran las nueces. Cortar en rodajas los champiñones. Luego que el aceite haya adquirido el calor necesario, se añade la carne, los champiñones, las especies y las nueces. Alternar con salsa de soja. Se esperan unos minutos, para que todo quede totalmente cocido.
En estos minutillos, me dedique a ordenar un poco el living-comedor. Ordene la mesa principal, con todo lo
necesario. Platos, cubiertos, copas, servilletas, etc. Se veía bien ornamentada.
Y eso me preocupaba.
Me detuve unos segundos. Y pensé en lo que estaba haciendo. Me estaba comportando como una novia
ideal y feliz. Eso no podía estar sucediendo.
—Es sólo una actuación Alice, es solo una actuación —me repetí reiteradas veces, mientras sacudía la cabeza.
Volví a la cocina a terminar mi banquete. Ya que las pastas habían terminado su cocción, y la carne estaba en punto; junte todo en la olla de las pastas, y luego le puse la capa de crema blanca. Un poco de unión, y ¡listo! Mientras buscaba una fuente donde colocar mi plato, sonó el timbre.
—Que puntual es —dije al mirar mi reloj. Las 8 en punto.
Abrí, y obviamente era él. Se giró, mirándome directamente a los ojos, con su mirada seria y desinteresada. Podía percibir el exquisito olor a su perfume. Como tentación de hombre, me estaba mortificando.
—Traje vino blanco—levanto una botella de este elixir. Muy elegante de su parte.
—Pasa, por favor —le abrí completamente la puerta, para dejarlo entrar a mi residencia.
—Bonito departamento —expreso en un tono intelectual, mientras observaba todo detalladamente.
—Gracias —tosí— puedes sentarte, la cena ya está.
Se saco la chaqueta de cuero negra, y quedo en una hermosa, delgada polera de mangas largas, con un cuello casi en V de color beige. Tomó asiento, como si fuera el rey del castillo. Mientras yo, rápidamente fui en busca de la fuente. Ya teniéndola en mis manos, la coloque en el centro de la mesa, para que así sacáramos libremente. Me senté a su mano izquierda; yo sacaba pasta, y él colocaba el vino en las copas.
—Espero que te guste, la cocina no es lo mío —dije, para romper la barrera de hielo entre nosotros.
—Aprecio que lo hayas hecho. Y si está malo... —me miro fijamente— toda la comida llega a un mismo lugar, ¿No?
—Tienes razón —reí.
Ambos comíamos, y alternábamos bebiendo vino. Pero conversación entre nosotros… 100% nula. Por unos momentos, me quede mirándolo inmutablemente. La manera en que su expresión corporal se exponía, era
algo totalmente inquietante. Sería la segunda vez en el día que me planteo lo galán que está Zayn. Su cabellera desordenada, solo me incitaba a querer enlazar mis dedos y jugar con sus ondas traviesas. Los músculos que se traslucían por su polera, me hacían ambicionar sentir el contacto de mi epidermis con la suya. Y sus labios… pretendían hacerme adicta a esa droga dulce. Codiciaba ser rehén de sus manos, de su cuerpo, de su todo. Pero nuevamente la gravedad hacia efecto en mí, y por más apasionante que me pareciera Zayn por fuera, su personalidad siempre me dejaría congelada.
—Estaba muy bueno Alice, te felicito —agregó, mientras tomaba un último sorbo de su copa.
Yo levante todo de la mesa, mientras Zayn se disponía a leer unas revistas en el sofá. Estaba toda serena limpiando los platos, cuando mi oído agudizo escuchar unos gemidos de Zayn.
—¿Estás…—no alcance a terminar de mi frase.
Corrí hacia Zayn, estaba derrumbado en el suelo. Le toque la frente, y estaba hirviendo como volcán en erupción. Estaba horrorizada y arrepentida. Al parecer, se me había pasado la mano con las nueces.

S.O.S!! santo por dioos creo qe se le paso la mano con la nueeces!! mee encaanthaa thu noveelaa enceerio esqee jdhgahgkjahgqlgahg mee atraapastee con la traamaa! sigueela pronto pleeaseeeeeee!!!

Por qué te demoras tanto en subir cap?? :(

Pues planeaba que más personas comentaran, pero 'en vista del éxito no obtenido' lo subiré para no dejar a las que siguen la novela a medias:), disfruten, Love Ya, xx


Cap 6.

Estaba completamente nerviosa. Jugaba con mis dedos frenéticamente, mientras me paseaba de un lado a otro por la sala de espera del hospital. Estaba tan horriblemente preocupada de que le ocurriera algo lamentable a Zayn, que inmediatamente lo lleve a esta institución. De paso llame a mi mamá con urgencia, necesitaba dar aviso a todos los familiares. ¿Cómo carajo puede tomarles tanto tiempo en venir? Pensaba. Estaba a punto de tener una crisis de nervios, y nadie podría estar ahí ayudándome.
— ¡Alice! —giré para ver quién era. Gracias a Dios, era mamá— Pequeña… ¿Qué paso? —me decía, mientras me abrazaba.
— ¡Fue la cena! —dije a medio gritó— Tenía nueces, y…
— Zayn es alérgico a ellas —interrumpió en eso, Fiama— ¿Cuánto fue la ración, Alice?
—Exactamente, no lo sé —bajé la mirada— ¿Es muy grave?
—Eso no lo puedo predecir yo.
¿En que lío me había metido? El asunto principal era que Zayn no se quisiera casar conmigo, no matarlo. Y ahora me estaba arrepintiendo. Porque… no sé si era mi subconsciente, pero sentí que Zayn no estaba tan arrogante conmigo. Talvez me estaba haciendo ilusiones falsas, pero cuando una mujer presiente algo, es por algo.
Cada minuto que pasaba, era una tortura. Me estaba sintiendo peor y más basura. Necesitaba saber si se encontraba bien.
— ¿Familiares del Sr. Malik? —dijo de repente un doctor.
— ¡Nosotras! —levantamos las manos.
Nos levantamos apresuradamente de nuestros asientos para ir hacia el Doctor.
—Dígame Doctor, ¿Cómo esta mi hijo? —la primera en preguntar —la mas preocupada— obviamente, Fiama.
—El Sr. Malik sufrió una intoxicación por medio de ingerir nueces. Lo que en él provocan un gran cuadro alérgico. Pero para su beneficio, esta no fue lo suficiente efectiva. Por lo que solo tendrá unos leves
dolores estomacales, y posible fiebre. Pero nada de que preocuparse— sonrió finalmente.
— ¡Gracias a Dios! —suspiró Fiama.
— ¿Podemos visitarlo? —preguntó mi mamá.
—Si, ¿porque no? Su habitación es la 205.
— ¿Cuándo estará de alta? —pregunté.
—Probablemente mañana en la mañana. Se quedará esta noche en observación. Si me disculpan, tengo que atender a otro paciente.
Nos despedimos del Doc, y nos encaminamos por los pasillos del hospital buscando la 205. Cuando ya nos íbamos acercando, mis manos comenzaron a tambalear y a sudar más de lo normal.
—Pequeña, ¿Estás bien? —preguntó mi mamá preocupada.
—No es nada —mentí. Estaba muerta del miedo de entrar a la habitación y encontrarme con los ojos penetrantes de Zayn— Mamá, entren ustedes primero.
Asintió tratando de entender mi situación. No les tomó mucho tiempo —lamentablemente— Así que ya era mi temido turno de enfrentarme al temperamento de Zayn Malik. Mi mamá me palmeó la espalda,
dándome su apoyo. Antes de pisar un pie en el cuarto, respire tan profundo, como nunca lo había hecho en mi vida. ¡Vamos Alice!
Ya adentro, pude ver su cuerpo cubierto con una liviana sabana blanca. El cuarto era tan blanco, que el contraste de la noche lo hacía relucir mucho más. Menos mal que no estaba conectado a ningún tipo de máquina, porque si no me daría un susto tremendo. Peor que las películas de terror.
—Supongo que ya lo tenías planeado —dijo completamente escéptico, clavando sus ojos —que ahora estaban oscuros— en mi débil mirada.
Antes de que hiciera algún reproche, volvió a hablar.

—Mira te diré algo —se aclaró la garganta— Entiendo que seas una maldita malcriada que no quiere afrontar la vida. Eres débil, Alice. Y no necesito una mujer fracaso a mi lado. Tengo todo el poder que muchos quisieran, y puedo tener a cualquier mujer que se me antoje…
— ¡ENTONCES NO TE CASES CONMIGO! —grité al borde de la desesperación, y con un torrente de lágrimas que salían disparadas por mis ojos.
Por un momento, Zayn me miro absorto. Probablemente mi llanto lo había bajado de sus revoluciones contra mí. Pero, no podía ser así de fácil.
—No sacas nada con llorar. Tus lágrimas no me conmueven en lo absoluto, es más, me parecen patéticas.
Mi corazón estaba siendo clavado con más fuerza cómo una daga fina. Cada segundo, cada palabra que él emitía. Me estaba derrumbando.

—Ahora, yo por lo menos me considero un hombre honesto y limpio en los negocios. Así que si me comprometí a casarme contigo, lo haré. Pero solo tendremos una convivencia como si fuéramos vecinos, o algo parecido. Si quieres amor, búscate un amante. No me importa, porque yo haré lo mismo, si así lo requiero.
¿Con que eso era? ¿Un sucio negocio? Era un objeto, algo que se compra en cualquier lugar al menor precio. Una basurilla, nada interesante. En este preciso momento me sentía como si un camión hubiese pasado por encima de mi cuerpo. Poco a poco, las palabras de Zayn no llegaban a mis oídos. No le escuchaba. Ladeaba mi cabeza, tratando de entenderlo, pero me sentía muy perdida. Veía como su
cara se desfiguraba a causal de sus gritos, de su furia. Pero todo se volvió negro.
—Alice, estás aquí conmigo —Zayn, me miraba muy preocupado, y trataba de calmarme jugando con mi cabello.
No pude sostener más. Lloré con todo el fervor que pude. Mis sollozos se confundía con gritos de desesperación. Me sentía sola, extraña, necesitaba calor. Calor humano. Calor de amor. De verdadero amor.
Y caí en la cuenta, que Zayn me estaba abrazando. Me separé lo más rápido que pude de él.
— ¿Cuál es tú problema? —frunció el ceño.
—Tú eres mi problema —dije secamente, retirándome rápidamente del cuarto. Dejando a Zayn con las palabras en su boca. No me interesaba en lo más mínimo.
Salí del hospital lo más rápido posible. Cogí un taxi, y me fui a mi departamento. No podía más. Esto recién estaba comenzando y ya me sentía arrastrada a un abismo de perdición. Me dolía tanto el corazón, y el causal era mucho peor aún: mi futuro esposo, me había humillado. Me había tratado como la peor cosa existente del planeta.

muuuy maaal hechoo fuee muy duroooo D: aww te juro qee se me salieron las lagrimas tambn a mii pobree Aliceee solo quieree un vddero amoor pero zayn es su vddero amoor jfhgkajlkjaljalgsjslg tienes qe seguirlaaa!! besoos

Siento un vacio en el estomago, quede muy triste, :( no te preocupes por quienes no comentan, hay cientos de fantasmas por ahi que seguro aman tu novela como nosotras quienes nos tomamos el tiempo para comentar.
Esta buenisima asi q sigue!

itsxamie escribió:Siento un vacio en el estomago, quede muy triste, :( no te preocupes por quienes no comentan, hay cientos de fantasmas por ahi que seguro aman tu novela como nosotras quienes nos tomamos el tiempo para comentar.
Esta buenisima asi q sigue!

Gracias:') supongo que sí. Y no estés tristeeee:(, jajaja, yo también me siento triste por Alice, pero bueeh:/. Jajajaja, graciaaas:)

LalaHoran escribió:muuuy maaal hechoo fuee muy duroooo D: aww te juro qee se me salieron las lagrimas tambn a mii pobree Aliceee solo quieree un vddero amoor pero zayn es su vddero amoor jfhgkajlkjaljalgsjslg tienes qe seguirlaaa!! besoos

Asksldskdldlsdsd, lo sé, pobre Alice, a veces llego a odiar a Zayn, jajaja, gracias por comentar:)

se fue de tema un toque la rayis con lo de las nueces, pero tampoco era para que zayn le hable así! seguilaaaaa!

Wawawawawa i'm back baby! Jajajajaja, aquí un capítulo, love yooou, gracias por leer y tomarse la molestia de comentar:)


Cap 7.

Me encanta! Siguela pronto

Hello! Sigue sigue sigue sigue

nhjdkgjskjgdhsjgdjkghshsk solameentee sigueelaa muero de curiosiidaad!!!

Jeloou girls! Lo siento por dejarlas abandonadas, pero entré a clases desde el 20, sólo que hasta días después me dejaron tarea y blah, blah, blah. Buuuueeeno, las adoro, bye:*


Cap 8.

— ¿Perdiste la cabeza? —Refunfuñé— Soy la única mujer en el mundo que no te besará el trasero, Malik. NUNCA.
—Me dan ganas de matarte, Alice —expresó con resquemor, mirando el techo, esquivando mi mirada.
— ¿Puedes hacerme un favor? —dije, interrumpiendo el silencio.
—Si, claro —bajó la mirada— Con cuidado, no soy el hada madrina.
—Si era un chiste, no logro contagiarme —farfullé— Tú y Niall son amigos, ¿Cierto?
— ¡Somos casi hermanos! —respondió con magnánima felicidad.
— ¿Puedes llamarlo?
—Seguro —tomó el teléfono y marcó— Jane, puedes comunicarme con Niall. No tomó muchos minutos, cuando el teléfono volvió a sonar.
— ¡Niall! ¿Qué tal te va viejo? —colocó el teléfono en alta voz.
— ¡Magnífico! He tenido unas fiestas, pff ya quisieras estar aquí conmigo Malik.
—Dalo por hecho, somos compañeros de parrandas.
— ¿Me puedes decir la encantadora idea de llamarme? ¿Mi hermanita tiene que ver en eso?
—Tú hermanita esta presente aquí, Nialler —espeté un poco irritada.
— ¡Alice! ¿Qué tal todo pequeña?
— ¡Perfecto! Me casaré en menos de 1 mes, obligada con un completo desconocido que me detesta a muerte —dije simulando mucha felicidad— ¿Lo sabías, cierto? —cambié mi tono, a uno más irritable.
—Pues…—suspiró— Si, lo sabía. Le prometí a mamá no decir nada.
— ¡Woah! Gracias hermanito —exclamé.
—Cómo veras, querido amigo… no se lo tomó muy bien —prosiguió la bestia a mi lado.
— ¡Niall! Quiero que mañana a primera hora tomes un vuelo de Irlanda hacia aquí. No hay objeciones —dicho esto último corté la llamada.
Los ojos de Zayn se había salido de orbita por el asombro que le provocó mi acción. Yo por mí parte, emanaba furia. Ya veía que me saldría humo de las orejas.
— ¡¿Te volviste loca?!
— ¡Suficiente Zayn! —Busqué mi cartera, y la tomé rápidamente— Me largo de aquí.
—Esta bien. Lárgate, la puerta es bastante grande —me sorprendía su serenidad, y la manera en la cual efectuaba un ademán con su mano.

Bufé tal como lo hubiese hecho un toro en pleno combate con su adversario. Eso era Zayn para mí. Mi adversario, el enemigo. Cuando me retiré de la oficina, nuevamente las miradas despectivas de las
“asistentes” se fijaron en mí. No podría aguantar esto. Así que junté todo el valor e ira que recorría mi menudo cuerpo, y apresure el paso con el mentón en alto. Mi orgullo nunca se vería destruido. Jamás me lo perdonaría.
Baje hasta el primer piso del edificio, y pase por delante de la rubiecita. Esta me miraba con cara de burla. ¿Qué se creía? Maldita oxigenada, refunfuñé. Ya afuera del condenado edificio, frene mis pasos.
— ¿Y ahora que, Alice? —deposité una mano en mi frente.
Necesitaba escapar, irme lejos y no pensar en nada. Absolutamente nada.
—Estar así, no es muy bueno… ¿Sabes? —escuché una aterciopelada voz masculina no reconocida. Subí mi mirada, para buscar el dueño de tan armoniosa voz. Un joven de cabellera castaña enrulada, y profundos ojos verdes. Ocupaba un elegante saco gris. De seguro era un empresario, o algo por el estilo. Su sonrisa me había cautivado de primera impresión. Era realmente hipnotizante.
—Si supieras por lo que estoy pasando…
—Si quieres, puedo escucharte. No se me da muy bien lo de los consejos, pero lo intento —carcajeó. Era tan dócil, y eso lo hacía enfermamente atractivo.
—No quisiera importunarte con mis tragedias griegas—sentía como un leve calor se asomaba por mis pómulos. De seguro estaba un poco (bastante) avergonzada.
—Jaja, descuida. ¿Qué te parece un café?
— ¡Acepto! —exclamé muy emocionada.
—Soy Harry Styles —me estrechó la mano.
—Alice Russo —le devolví una sonrisa.
Caminamos ambos hacia su transporte. Un elegante y deportivo Mazda negro. No podía creer lo que estaba haciendo. Alice Russo, nunca se subía al auto de un desconocido. Era algo improbable en mi vida. Pero no sé que tenía Harry, que me entregaba seguridad, y confianza. Algo que no me pasaba con Zayn.
No me sentí culpable por estar con otro hombre. Ya que Zayn y yo, no tenemos ningún símbolo de compromiso. Aún era la chica soltera.
Llegamos a un Starbucks, y pedimos dos frapuccinos de distinto sabor. Harry, insistió que el quería pagar mi café, así que no pude seguir con mi batalla. Buscamos una mesa desocupada en la terraza del local.
—Cuéntame Alice, soy todo oídos.
Le explique la desbocada idea que mi madre, y la familia de mi futuro prometido —eso suena muy horrible— habían ideado a lo largo de todos estos años. Harry solo asentía educadamente, a toda la información que le entregaba. Era tan atento y comprensivo, que me estaba agradando mucho esas características tan propias de su ser.
Finalicé mi relato, y tomé un sorbo de mi café helado.
—Resulta bastante desafortunado todo lo ocurrido. Probablemente, yo estaría en tu misma posición si me obligaran a hacer locura de tal tamaño.
Asentí.
—Y dime Alice, ¿Quién es este energúmeno con el cual te quieren casar?
— Zayn Malik.
Al decir esto, los ojos de Harry estaban abiertos en su totalidad. No esperaba que el nombre lo sorprendiera en magnitud.
— ¿Lo conoces? —inquirí.
—Claro que lo conozco —noté un leve dejo de molestia— No somos amigos.
Al contrario, somos grandes rivales. No te puedes casar con un hombre tan descarado como lo es Zayn Malik.
—Ya lo se. Cuéntame, ¿Por qué el odio mutuo? —necesitaba toda la información necesaria respecto al
tema. En una de esas, podría servirme en el futuro.
Harry bebió un sorbo de su café antes de iniciar el relato. Todo comenzó en la secundaria. Harry & Zayn eran los mejores amigos, reyes de la institución. Ambos poseedores de un atractivo atrayente, deportistas, líderes y, dueños de las populares fiestas juveniles. Nunca tuvieron renquillas, ni nunca peleaban por nada que valiera la pena. Hasta que apareció Diana. Una chica sencilla, de rasgos delicados. Cabellera rojiza, y ojos verdes. Cuando Harry la vio por primera vez, quedo encandilado por su belleza innata. A Zayn, no le ocurrió nada. Solo se mostró frío como siempre lo había sido con las chicas. Era de esos que le gustaba pasar el rato, y nada más. Un amante efímero. Se acercaba la época de navidad, por lo que los amigos inseparables querían montar una de sus grandes producciones. Harry le había confiado a Zayn, que en la fiesta conquistaría a Diana.
Ya la fiesta estaba montada, y todos los invitados disfrutando. Unos bebiendo, otros fumando. Algunos, que se escapaban escaleras arribas, etc. Entre tanto océano de personas, Harry fue en busca de Diana. No la encontró por ningún lugar de la casa de Malik. Busco en los baños, en las terrazas, y les pregunto a personas. Y nada. Decidió subir a las habitaciones.
Grave error.
Abrió la puerta del dormitorio de Zayn. Y ahí, en el lugar donde había estado concurridas veces… su amigo, se encontraba besando a su querida amada.
—Y en ese preciso momento, nuestra amistad murió —finalizó serenamente.
—Lo lamento, Harry.
—No hay nada que lamentar, Alice. Solo me sirvió para ver la amistad tan ciega que tenía con Zayn.
Y en su totalidad, era cierto. Solo se había dado cuenta de lo frío y basura que era Zayn Malik.
—Alice, ya es tarde. Es increíble como las horas pasan, ¿No? —sonrió suavemente. ¿Por qué no me podía casar con un chico así? ¿Por qué?
—Si, es realmente genial.
Dejamos la mesita del local, y fuimos en busca de su Mazda. En el camino hacia mi departamento, solo entablamos unas cortas conversaciones sobre trivialidades de la vida. Y cada vez me convencía de lo
maravilloso que era Harry.
—Bueno, princesa. Hemos llegado a tu castillo.
—Jaja, eres increíble Harry ¿Lo sabías?
—Espero verte pronto —dijo cuando ya abría la puerta del copiloto.
—Así será —deposité un delicado beso en su mejilla, y salí de mi corcel metálico.

whyyyyy? se nos va armar la terceraa guerra mundiaaal con estoos chicooooos!! :/ no te preocupees por abandonar la novelaa lo bueno esqee regresaastee y dejastee un maravilloso caaap!! tienes qe seguirlaa cuando puedaaas beesoos lindaaa!