Los Ojos del Demonio (Harry Styles)

-¿Me extrañaron? – pregunto mirándolos aun a ambos.

Gemma estaba de pie frente a ellos, con sus brazos cruzados sobre su pecho. Sonreía como si de una broma se tratase.

-Ha pasado tanto tiempo – dijo la chica mirando a su alrededor. El ático estaba lleno de escarcha, escarcha que ella había provocado. Harry sintió un escalofrió al escuchar de nuevo su voz, esa voz suave y delicada, pero a la vez con algo de autoridad.

-Demasiado – susurro Harry mirándole. El chico estaba sorprendido, pero no tanto como Gemma esperaba.

-Te he estado siguiendo todos estos años… – comento con calma – cuidándote – agrego después de una pausa. – Pero claro, tu no podías sentirme, el escudo de Borniter sirvió a la perfección, muy poderoso – sonrió mostrando sus dientes.

-Habías muerto – susurro Louis desde su lugar.

-Mi querido Louis – actuó un puchero al mirarle – jamás morí, no encontraron mi cuerpo y me dieron por muerta – susurro tajante. – Me llevo con él. – murmuro acercándose un poco al estante. – Les contare un poco… - sonrió tomando asiento al lado de Louis, invito a Harry a que hiciera lo mismo, el rizado obedeció tomando asiento al lado de su hermana. – El día había comenzado muy bien, incluso después de que Harry salió de mi habitación aquella tarde… - se giro a ver a su hermano - ¿lo recuerdas? – Harry asintió recordando cada parte, desde la breve conversación que tuvo con Louis sobre la broma para Gemma. – Yo vi el fuego llenar nuestro hogar…

“La mirada de Gemma se nublo cuando los gritos llenaron sus oídos, pudo ver a Louis en el suelo arrojando agua por la boca, sus brazos estaban sobre su cuello. Ella sintió el fuerte dolor en su cuerpo, sintió congelarse por dentro a pesar de que el fuego estaba cerca de ella. “Hija mía…” escucho en su cabeza mientras caía en un profundo sueño…”

-Cuando desperté estaba en una casa al este de Londres – murmuro sumida en los recuerdos…

“Gemma salió de la habitación en la que se encontraba, mujeres con atuendos humildes caminaban de un lado para otro. Una de ellas, de pequeña estatura le tomo por el brazo algo asustada.

-¿Qué hace fuera de su habitación? – pregunto la mujer al ver a Gemma.

-¿Dónde estoy? – la mujer le condujo de nuevo a la habitación donde había estado minutos antes.

-Esta en un lugar seguro ahora – la chica no comprendió cuando las palabras de la mujer le hicieron sentirse mejor.

-Pero… - veía a la criada dejarle unas ropas sobre la cama, ella frunció el ceño.

-Tendrá una visita dentro de unos minutos, debe vestirse deprisa – la mujer comenzó a quitarle el vestido sucio que traía puesto, Gemma le miraba sin comprender aun.

-¿Quién me visitara? – pregunto mientras la criada le colocaba el limpio vestido y el corset.

-El señor Nerky – susurro la criada.

Después que la criada le arreglo su cabello, le dio indicaciones para que se comportara en la visita del “gran señor” como había dicho la mujer después de irse. Gemma se encontraba confundida, incluso se sentía diferente.

Espero un par de horas sentada en la cama. Contemplo el lugar negando con la cabeza, ni siquiera ella sabía ¿Por qué estaba tan tranquila? Ella no se comportaba así, pero en esos momentos no sabia que esperar. Esta no era ella. Se levanto de la cama yendo a la puerta, iba a salir sin que nadie se lo impidiera. Claro, ella era Gemma Styles, nadie le encerraba en una habitación.

Su mano se posiciono en la manija de la puerta, pero alguien del otro lado hizo girarla antes que ella. La puerta se abrió, un enorme y elegante hombre entro con una fingida sonrisa. Gemma le miro sobre las pestañas.

-Lamento la tardanza – se disculpo haciéndole entrar en la habitación de nuevo. Le invito a sentarse en un sofá carmesí al lado del gran ventanal que había en el cuarto, Gemma obedeció sentándose a su lado.

-¿Dónde estoy? – él hombre sonrió.

-Gemma ¿cierto? – Ella asintió – Soy Fernin Barlones – sonrió extendiéndole la mano, ella la tomo con rapidez.

-Creí que recibiría la visita de alguien mas – murmuro.

-El señor Nerky no pudo asistir el día de hoy, pero me envió a mi… - Gemma suspiro, daba igual de quien se tratase del tal Nerky, ella solo quería saber que hacia en ese lugar. – Respondiendo a tu primer pregunta – el hombre le veía atentamente mientras hablaba – estas en la mansión de Nerky, al este de Londres. Sé que tienes preguntas, demasiadas, pero no soy el indicado para responderlas, ya pronto sabrás como es que acabaste aquí y el porque… - la chica no comprendió ninguna de sus palabras, pero aun así se limito a preguntar – solo me queda decirte, bienvenida a la familia – él hombre sonrió levantándose de su lugar.”

-Esa fue mi bienvenida, Nerky jamás me dio la cara – murmuro molesta.

-¿Por qué apareces hasta ahora? – Pregunto Harry mirándole molesto - ¿Por qué no decir desde el principio que eras tu?

-Te sientes consternado, supongo, debido a que he estado invadiendo tu territorio. Lo hice porque quería estar cerca de ti, los hermanos deben estar juntos.

-La noche anterior asesinaste a un hombre inocente, he incluso quisiste hacerme creer que yo lo había hecho.

-¿Estas seguro de que tu no lo hiciste? – La sonrisa de Gemma se hizo mas amplia – Tal vez lo hicimos juntos. Pero, ¿desde cuando te preocupas por los inocentes? ¿Recuerdas como mutilas a tus victimas? Sin piedad, solo por diversión y rencor.

-Mi humor no es el mejor esta noche, Gemma – dijo cuando Gemma le miro retándolo.

-El mio tampoco es el mejor del mundo hoy – se levanto del viejo sofá mirando ahora a Louis. – No has dicho nada, ¿acaso la vida eterna te hizo callado?

-Es solo que te desconozco, jamás pensé que te fuera a convertir en esto que eres ahora, una asechadora – dijo Louis sonriendo de medio lado. Gemma frunció el ceño algo molesta.

-No digas nada, Tomlinson, ahora puedo cortarte la lengua si quiero… - Louis se puso de pie, Gemma no se movió solo le vio acercarse.

-Hazlo – le reto, pero la chica rio rodando los ojos.

-Para eso tendré tiempo después, por lo pronto debo hacerle una visita a esa amiga suya, ¿Cómo es su nombre? ¿Dina? – Harry se levanto de inmediato tensando cada parte de su cuerpo.

-Mantente alejada de Dina – ella sonrió mas notando la preocupación en su hermano – No te atrevas a acercarte a ella, sé que has estado espiándole, siguiéndole e incluso presentándotele en sueños – Gemma alzo ambas cejas.

-¿De que te preocupas hermano? Creí que ya chica te era indiferente, ¿Por qué tanto interés?, Eres un egoísta, siempre lo fuiste, ahora también quieres tener a la chica y torturarla tu solo – la chica hizo un puchero junto con un ligero movimiento de cabeza.

-¿Por qué tu interés en ella, Gemma? Habiendo tantas chicas…

-La chica rubia me canso, es débil de mente, fue fácil entrar en su cabeza al igual que en la tuya, solo que contigo fue divertido, podía manejarte a mi antojo – Harry tenso la quijada, el fuego en sus manos se hizo presente de inmediato, ahora podía sentir el fuego recorrer su cuerpo entero.

-Sera mejor que regreses por donde viniste – le dijo Louis sintiendo más la tención en el ambiente.

-No se preocupen por la chica, lo único que quiero es su sangre, eso me servirá, y sé que después me lo agradecerán.

-¿Para eso has venido aquí? ¿Para matar?

-No te opongas a mi, Harry. No importa para lo que vine aquí. Lo que importa es que quiero a Dina, y si intentas impedir que derrame su sangre, te matare.

-Inténtalo – la voz de Harry era impacienté.

Bien sabía que su poder era más grande que los brujos que se encontró a lo largo de los años. No conocía el potencial de su hermana, pero si pudo meterse en su mente y controlarle hasta cierto punto, entonces debía ser precavido, solo que no quería eso, la precaución no era algo que le caracterizara.

-¿Piensas que no puedo hacerlo? No me retes hermanito – Harry sonrió ante sus palabras, no le temía.

-Deseo tanto verte intentarlo siquiera – Gemma sonrió también y miro a Louis.

- Aun estando los dos contra mi, yo podre atacarlos, pero por ahora tengo que causar pánico en otros lados – murmuro – nuestra pelea familiar será en otro momento – y así como llego, se fue. Una corriente de aire salió por la puerta haciendo que Gemma también desapareciera.

La temperatura del ático volvió a su normalidad, ambos se miraron entre si asimilando lo que acababa de ocurrir.

-Esa perra – dijo Harry molesto – todo este estúpido tiempo ella fue…

-Ira tras Dina esta noche, y lo sabes – El rizado se volvió hacia Louis.

-Debemos protegerla, aun no sabemos porque Gemma le quiere matar… - Harry comenzó a teclear el numero de Zayn en su móvil. Louis le miro atento a sus movimientos, era raro que su amigo quisiera proteger a un mirtingasi.

-¿Qué ocurre? – dijo Zayn del otro lado del teléfono.

-No te alejes de Dina, sabemos quien anda detrás de ella – termino la llamada.

-Ahora ¿Qué haremos?

-Esperar… - sonrió Harry – esperar el siguiente movimiento de Gemma.