Confía en mí (Harry)

Alisé por tercera vez la falda del uniforme y arreglé el lazo que sujetaba mi flequillo a un lado y tomé mi bolso, colgándolo en mi hombro mientras salía de la habitación bostezando. Anoche me la había pasado hablando por teléfono con Harry hasta tarde y por tanto, el sueño me estaba pasando factura, pero para ser así, la verdad no me importaba tanto.
Dejé el bolso en el sofá y entré en la cocina, donde estaban los mellizos en la mesa coloreando animales con sus crayolas, Colin conversando con Isabelle, mamá bebiendo una taza de café mientras hojeaba una revista y reía por algo que para mi sorpresa Harry le decía. Sí, estaba allí mordiendo una tostada con los codos apoyados en el desayunador y hablando con mi madre como si tuvieran años de amistad.
Saludé a cada uno con un beso en la mejilla. Harry rodeó la mesada y se acercó a mí, me atrajo con una mano en mi cintura y dejó dulcemente un beso en mi frente. ¿Qué no sabía que me derretía cada vez que hacía eso?
—Buen día, hermosa—sonrió mientras le daba otra mordida a la tostada que tenía en la otra mano. Levanté la mirada ya que era más alto que yo y sonreí.
—Tan buenos no son, tengo sueño—rezongué.
—¿Quieres un poco de café?—preguntó mamá señalando su tasa.
—Con leche—dijimos las dos al unísono, a lo que ella sonrió.
Terminamos de desayunar entre risas y conversaciones animadas.
—¿Nos vamos ya?—Harry preguntó mirando su reloj.
—Sí, vamos.
—Cuídense—dijo mamá para volver la vista hacia la revista que estaba en sus manos.
Caminé detrás de Harry hasta la entrada de la casa. Cerré la puerta y él me tomó de la mano suavemente y nos dirigimos hacia su auto, el cual estaba aparcado justo detrás del mío.
—Esta será una buena excusa para pasar más tiempo contigo, tengo que traerte a casa—él sonrió de lado, subiéndose en el asiento del piloto.
—Ya no tienes que inventar excusas, Harry—reí.
—¿Y por qué será eso?—él se hizo el desentendido. Entrecerré los ojos y le miré, siguiéndole el juego.
—Quizás porque eres mi novio—se sentía raro pronunciar aquellas dos palabras. Mi novio. Mío.
—Así es, todo tuyo—él se inclinó y presionó sus labios en mi mejilla, suavemente.
El trayecto a la escuela pasó realmente rápido. Harry hacía todo lo posible por molestarme y hacerme reír cada vez que paraba en un semáforo en rojo. En una de esas, al parar el vehículo, yo miré hacia la ventana y él simplemente me mordió en el brazo. Al preguntarle el por qué, solo arguyó que lo encontraba de lo más divertido, ganándose un golpe de mi parte en el brazo mientras él solo reía.
Aparcó el auto en un sitio vacío y nos bajamos. El caminó a mi lado y entrelazó nuestras manos. Yo le dirigí una mirada y él simplemente sonrió, revolviendo los rizos con la mano libro.
—¿Qué?—preguntó ante mi mirada—. Quiero que todos se den cuenta de que estás conmigo, y que por tanto, no estás disponible—él dijo encogiéndose de hombros.
—Solo te gusta ser el centro de atención, ahora nos están mirando—me burlé.
—No, nena, me gusta ser el centro de tú atención—él replicó recalcando el “tú”, luego se inclinó y dejó un beso en mi frente.
—Wow, wow, wow.
—Hola a ti también, Stace—saludó Harry.
—¿Qué clase de amiga eres?—me pegó suavemente en el brazo.—No me cuentas nada, aunque ya sabía que pasaría—se encogió de hombros.—Qué hermosos se ven juntos.
—Ya ya cariño, no los agobies—apareció Zayn de la nada, pasando un brazo por sus hombros.
—Cállate, aguafiestas—ella le gruñó, a lo que él le respondió con un corto y brusco beso en los labios, haciendo que ella refunfuñara, haciéndonos reír tanto a Zayn como a los demás.
—Já, te lo dije, alguien me debe dinero—canturreó Niall mientras se acercaba a nosotros con Susan.
—Maldición—gruñó ella dejando el dinero en la mano del rubio.
—¿Qué apostaron ahora?—preguntó Zayn divertido.
—Hace unas semanas le dije a Sue que estos dos estarían juntos antes de que terminara el mes. Y ella dijo que no, y ¿quién ganó? ¡Pues yo!—hizo un extraño baile que solo hizo a Sue rodar los ojos.
—En fin, me alegra que estén juntos por fin—comentó Sue mirándonos con una sonrisa.
Harry y yo solamente nos miramos sonriendo, y él apretó ligeramente mi mano.
La campana sonó, indicando el comienzo de la jornada. Zayn, Niall y Louis—que se sumó al grupo segundos después—, Harry y yo nos dirigimos hacia el salón de Historia y Geografía. Yo me senté al lado de Niall, detrás de nosotros Harry y Louis y al lado Zayn con una chica que creía se llamaba Joey.
—Que estés con Styles no significa que te vas a olvidar de mí, ¿cierto?—murmuró Niall en mi oído cuando el profesor había comenzado la clase.
—Claro que no Nialler. ¿Acaso no recuerdas quién fue mi primer amigo cuando llegué?—sonreí al recordar aquella—. Exacto, tú. Hace tiempo que no pasamos un día tú y yo. ¿Qué te parece si salimos a ver una película, o a tomar algo luego de la escuela?
—Me parece genial, te extraño hermana de otra madre—me abrazó rápidamente.
—Recuerda Horan, propiedad privada—murmuró Harry desde atrás.
—Cállate, Styles—él replicó en voz baja, a lo que Harry soltó un bufido.
—Ya cállense los dos—rodé los ojos.

Las personas cuchicheaban a medida que Harry y yo pasábamos de la mano por el pasillo de camino a la salida del edificio.
—¿Qué no se van a callar nunca?—musité fastidiada.
—Ignóralos, disfrutan metiéndose en la vida de los demás—Harry se encogió de hombros, restándole total importancia.
—Hazza, iré con Niall a tomar algo, ¿ok?
—Ok, te veré luego, ¿sí?—él me miró con dulzura, parándose delante de mí. Levanté la mirada para poder mirar sus ojos verdes. Asentí.
—Claro—susurré.
—Entonces te llamo luego—él cerró los ojos y se inclinó, presionando sus labios suavemente con los míos. Dejó otro casto beso en mis labios antes de separarse y soltar casi con desgana mi mano. Se alejó bromeando con Louis hacia su auto.
—¿Nos vamos?—preguntó el rubio mi lado.
—Claro—asentí mientras caminábamos con paso tranquilo hacia el café que estaba cercano la escuela. En el trayecto hablamos de cosas que habían pasado en clases, con los chicos, cosas triviales en una típica conversación con un amigo.
Unos minutos después estábamos sentados en una mesa para dos personas justo al lado de la ventana. El con un café mocha en su mano y yo por mi parte con un capuchino. Un platillo con algunos pastelitos reposaba en el centro de la mesa.
—Vamos Niall, dime lo que me vas a decir—dije una vez que me harté del silencio y de observarlo a él mirar su café como la cosa más interesante que había.
—¿Qué?—preguntó desorientado.
—Te conozco, sé que me quieres decir algo. Dímelo—di otro trago a mi café.
—Es que… me avergüenza.
—¿No confías en mí?—preguntó entrecerrando los ojos—¿Quieres que me cubra los ojos y así me dices?—dije con voz burlona.
—Ya no te burles de mí. Te diré—tomó aire y se mordió el labio inferior, nervioso.—¿Crees que…? Bueno… como eres una chica… porque lo eres…
—Bueno, esta mañana cuando vi todavía lo era—alcé las cejas, casi considerando la opción de caerle a cachetadas para que terminara la una oración.—¡Dime de una vez!
—¿Crees que le guste a Susan?—dijo tan rápida y atropelladamente que entendí lo que dijo unos segundos después. Una sonrisa se escapó de mis labios.
¿Los chicos eran ciegos o qué? Cada vez que él contaba un chiste, por más estúpido que fuese, Sue se reía; cada vez que lo miraba, sonreía como boba. ¡Incluso se habían besado más de una vez! ¿Y todavía preguntaba eso?
—No creo ser yo la que deba responder eso, Nialler—dije dulcemente, alzando su rostro con mi mano, para que dejara de mirar la taza humeante de café.—Pero ella te gusta, y mucho. ¿Cierto?
—¿Tan obvio soy?—preguntó torciendo el gesto.
—Bueno, soy tu amiga, me doy cuenta—le sonreí.
—¿Qué debo hacer, Beth?—preguntó con gesto triste.
—Decirle lo que sientes. Decirle cómo te sientes con respecto a ella. Sorpréndela, sé que sabrás cómo hacerlo—le di un leve apretón a su mano, para luego tomar un pastelillo y morderlo.
—Pronto es su cumpleaños. Y pues aún no sé si sigue en pie lo de ir a la casa de Stace en la playa y hacerle una sorpresa.
—A mí me gusta la idea. Sea lo que sea, tienes mi apoyo, Niall.
—¿Sabes? Me alegro de que seamos amigos, después de tanto sin tener uno verdadero—él dijo poniéndose rojo al instante.
—Qué tierno eres—dije enternecida—. Yo también me alegro.
Su teléfono sonó y un minuto después me miró.
—Tengo que irme… lo siento—pero veía un brillo en sus ojos.
—¿Susan?—pregunté. El asintió tímidamente—. ¿Qué esperas? ¡Buena suerte, tigre!—le sonreí abiertamente—. Yo me quedaré un rato más aquí—le sonreí.
—Vales oro, Beth—me abrazó y dejó un sonoro beso en mi mejilla, para después salir casi corriendo del local.

A pesar de que el clima comenzaba a enfriar, me había gustado caminar hasta casa, tomarme mi tiempo en ver alrededor y simplemente dejar relajarme por la fría brisa que hacía volar mis cabellos. Lo tejí en una rápida trenza como pude, ya que en una mano tenía una bolsita con algunos pastelitos con crema que había comprado.
Abrí la puerta de la casa con mi llave y la cerré una vez adentro. No había nadie en el piso de abajo, pero se escuchaban voces y gritos en el piso superior. Subí las escaleras y me dirigí hacia la sala donde se encontraba el televisor.
Me sorprendí un tanto al ver a Colin y a Harry jugando en la consola como si fueran viejos amigos, distrayéndose, empujándose y riendo para que el otro perdiera, mientras Isabelle leía una revista y se reía con cada cosa que hacían.
—He traído pastelitos—dejé la bolsa en la mesa frente a ellos, los cuales replicaron cuando estuve obstruyéndole la vista. Reí entre dientes y saludé a Isabelle. Luego me acerqué por detrás del sofá y besé las mejillas de los dos. Me retiré para poder quitarme el uniforme y darme una ducha.
Pero antes pasé por la habitación de los mellizos. Estaban con un nuevo libro para colorear cada uno y pintaban, cada uno en su mundo. Sonreí de lado y me dirigí a mi habitación. Dejé el bolso a un lado y me quité los zapatos, las medias largas, la falda, la chaqueta y la blusa, hasta quedar en ropa interior, para darme la tan esperada ducha.
Al salir me puse unos pantalones cortos y una blusa color lila, mientras bostezaba, sentándome en la cama.
La puerta se abrió.
—Hola preciosa, ¿cómo te fue con Niall?—Harry se recostó a mi lado en la cama, apoyando su peso con su codo.
—Bien—me encogí de hombros—. Está con este lío de que le gusta Sue y no sabe si es correspondido, y bla bla bla. Pero ya pondrá manos a la obra—sonreí de lado. Harry terminó su pastelito y observé el resto de crema que quedaba en la comisura de su labio.
Me incliné y lo besé, quitando los restos de crema de paso. El se dejó caer en la cama hasta quedar totalmente acostado y puso una de sus manos en mi nuca y la otra en mi baja espalda, acercándome más a él.
El no tuvo intenciones que ir más allá de aquel beso, cosa que lo agradecí al saber que no era de esos chicos que a la primera tomaban ventaja y te lo hacían en cualquier sitio. Sus labios jugaron con los míos de manera suave y tierna y sus manos hacían cosquillear mi piel por donde pasaban. Nos miramos a los ojos al separarnos y mordí mi labio, reprimiendo una tonta sonrisa.
Harry acarició mi mejilla suavemente.
—Te amo, pequeña.

Aquí Rose! Awwww Nialler tan tierno, obvio le gustas a Su...a quién no le vas a gustar! xD Harry y rayis se quieren casar pero no lo hacen...la verdad no sé por qué pero bueh....Sigueeela! BESOS xoxo

Awwwwwwwwwwwwwwwwww muero de ternura *o* fdjgvhfidjkghvisdf Yo tambien te amo Harry hahahahhaha. Que belleza de capitulo, y el Niall es otro amor tambien *o* fjvhfskjvdnjv *------*

Hola!! Nueva lectora, me llamo Claudia, pero dime Clau!! :D
lajksghdkhasd es hermosa tu novela y le dijo que la amaba aklshjgdkjhsad, mas tierno imposible!
Me encanta!
Espero un capitulo pronto!! :D

hola!! lo siento por no comentar antes, pero no había estado y hasta ahora lo acabo de leer!!! me encantó! la verdad cada vez me parece más lindo Harry, es demasiado hermoso, y como la entiende es lo mejor...

amé el capítulo, espero que la sigas pronto, quiero ver que responde Beth al te amo de Harry... porque el le había dicho que la queria no TE AMO.. espero que ella no se asuste y le responda igual, porque es de verdad...

bueno creo que quedo claro que me gustó mucho... está super lindo!!!

SIGUELA!!!!

UN BESOO

Aw. Me muero de amor.
Me alegro que hayas vuelto. Y espero ver capítulos más seguido, realmente me gusta la historia.
Creo que el mundo entero desearía tener a un Harry Styles como el de esta novela. xx