Miss Movin' On |Harry Styles|Nuevo Capitulo|

No podía hacer nada encontra de este beso. Dios moriría si alguien nos estuviese viendo en este mismo instante. Harry hizo que abriera un poco más la boca para darle paso a su lengua, lo cual en ningún momento rechace. Teníamos una guerra y eso no era lo peor, lo peor era que me creía fuerte pero esto se pasaba de los límites. Reacciona idiota sino lo haces el te terminara lastimando otra vez ¿acaso no lo vez? Hablo mi mente ocasionando que entrara en razón. Tenía razón mi subconsciente. Abrí de golpe los ojos y empuje al ruloso lejos de mis labios. De mí. El me miro algo confundido en lo que acababa de hacer en este momento, pero tenia que sino quería volver a salir lastimada nuevamente y todo por un idiota de cuarta que no valía la pena alguna-¿Pasa algo?-pregunto mirándome con aquellos verdes y esmeraldas ojos tan penetrantes que lograban romper de a poco el hielo y la dureza que me invadía-Si, pasa que me volveré loca si te vuelvo a besar nuevamente-dije acomodando un mechón de mi cabellera y caminando por su lado. Me detuvo sosteniendo mi brazo. Voltee a verlo con una mirada asesina que logro preservar como nada amistosa por mi parte-¿Pero tu no dijiste nada hace cinco minutos?-dijo algo enojado y, como no estarlo si hace unos minutos atrás hacia lo que el quería, lo que el mandaba. Ahora solo era nuevamente Dove Irwin. La chica ruda de la preparatoria y no una idiota que había caído en sus encantos por segunda vez consecutiva-Mejor ahórrate tus estupideces y vete sino quieres que te corte las bolas-le dije indiferente. Harry frunció el ceño y dando una patada contra los loquers se fue re fuñando.

Suspire levemente y camine asía las canchas. Necesitaba pensar porque le había seguido su juego. No, no, no, no puede estarme pasando ¡NO! Esto era una locura total. Con las yemas de mis dedos toque mis labios pensando que debía haber perdido un tornillo o incluso la cordura al besar a un patán como el lo era. Cerré los ojos en un breve instante dando por terminado esto, mis sentimientos –cuales no creía tener hasta ahora- estaban más confundidos y mi cabeza daba vueltas y vueltas como una montaña rusa. Necesitaba aclarar todo lo que había pasado, no podía solo volver a sentir algo por Styles cuando el nunca sintió o sentirá algo por mi. Debo grabarme muy bien en mi mente toda esa frase que alguna vez me dijo mi prima: Siempre piensa que los hombres te engañaran, eso evitara que te enamores de uno y termines en la cama con un bote de helado llorando por algo que nunca debió ser. Nunca debió ser me recordó mi mente. Levante la vista un momento admirando a todos los que se encontraban en las canchas, algunos me veían como si algo estuviera mal. Era obvio, siempre estaba rodeada de mis amigas pero cuando necesitaba tiempo era solo yo, algo así como un lobo solitario que no necesita de su manada para ser el mejor. Les mande una mirada asesina y aquellas chicas volvieron a lo suyo. Divise a mis amigas cerca por lo cual levante una mano y ellas me sonrieron para venir asía mi. No diría nada, aun. La primera en llegar fue Aria quien se sentó al lado mío seguida de Charlotte, quien se sentó a mi derecha y, por ultimo Helen quien se sentó al lado de Aria. Minutos después llegaron Harz y Zana sentándose en el escalón de abajo-¿Por qué hasta ahora llegan chicas?-pregunto Charl mirando a ambas. Harz y Zana se miraron rápidamente y después a nosotras-No encontraba a Zana-respondio Harz-Y, yo estaba en una graaaan fila para el agua-hablo algo nerviosa Zana- ¿Así? Y, ¿Dónde esta el agua?-pregunte yo-Tenia sed en el camino-respondió nuevamente Zana defendiéndose. Aria casi se avienta encima de ella, era obvio que se moría de sed mi rubia amiga. En eso veo a los idiotas de Lou y Colton quienes venían sonrientes junto a un castaño quien llevaba una chaqueta algo colorida. Louis volteo a vernos y pareció saludar a alguien, voltee y vi que era a Zana a quien saludaba-No es lindo-susurro la castaña observándolo-¿Te gusta?-pregunto Helen lo que la puso algo nerviosa y fingió no haber escuchado eso.

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Después del receso me dirigí junto a Helen y Harz asía la clase de Artes de la maestra Jennifer, quien a decir verdad me caía bien y no como los demás maestros que nos tocaban. Todo iba bien hasta que quise no haber tomado ese camino. Ahí estaban ellas platicando seguramente de que harían el fin de semana, seguramente cogerse a un chico. Las chicas me miraron pero les hice una seña de que no hicieran ningún ruido y proseguimos a caminar, pero al parecer me noto por lo cual volteo-¿Qué hay Irwin?-pregunto sarcásticamente. Rodee los ojos y voltee a verla. Para ser como es tenia suerte de no tener una voz chillona o como digo de puta. Era linda, incluso más que yo; cabellera rubia hasta más debajo de los hombros completamente rizados, ojos celestes grande y un cuerpo de modelo, lo único que la regaba era su personalidad. A ella le gustaba todo lo que tuviera pene –Oh perdón, no te había notado es que estas tan plana que pareces tabla-hable formando una sonrisa sínica en mi rostro al ver su expresión -¿Disculpa? No creí haber hablado con alguien suicida o ¿si?-se cruzo de brazos. ¡Rayos como lo supo! -¿Qué? ¿Te comió la lengua el ratón?-pregunto divertida. Rodee los ojos y soltando una maldición voltee a verla nuevamente-Disculpa Paris Hilton pero por si no lo notas yo no necesito cirugía para ser… ¿puta? O ¿prefieres zorra, querida?-dije ocasionando que diera un gruñido y se fuera junto a sus iguales amigas, claro que no sin antes decirme de que me arrepentiré de haberle dicho eso. ¡Ja! Ya quiero verlo-Es odiosa-dijo Helen y asentí para que nos dirigiéramos a nuestro salón.

Mire por reojo a Zayn quien estaba dibujando algo en su libreta. Desde ayer no había parado de dibujar, cosa por la cual no pudimos jugar videojuegos o salir a comer donde el duende quería- Harry que hace Zayn-me susurro Niall al oído para evitar que el profesor de Matemáticas lo escuchara –No tengo ni la mas remota idea-susurre en su mismo tono. Trate de acercarme para ver pero el coloco su brazo para evitarlo. Bufe y volví mi vista al viejo canoso que explicaba creo que ecuaciones, la verdad no quiero hacer nada. Dios ese beso me había gustado y aun mas viniendo de ella, aunque aun no entiendo su comportamiento bipolar. Era como la nieve, hermosa pero fría. Dove era algo difícil de alcanzar, no la reconocía. Tal vez si fui un idiota al no decirle lo que sentía desde el primer día de secundaria, era distinta a la chica que conocía, amable y siempre con una vibra positiva. Ahora solo era fría y negativa pero ¿Qué pudo ocasionar que se volviera así? Tal vez el hecho de gritarle insultos y decirle en cara que “nunca” saldría con ella por el estúpido hecho de que a mi mejor amigo, que era como mi hermano estuviera enamorado de ella y no de su prima como todos decían. Que hubiera sido un cobarde y haber salido con la chica a quien ella odiaba fuera malo y tonto. Tenia que hacer algo pronto, no importa que tanto me odiara o me detestara tanto como para arrojarme de un precipicio si se le propusiera o si simplemente me golpeara por decirle un simple “Hola”, haría lo que sea necesario para recuperar a la Dove pasiva de la secundaria. Lo lograría. Iría, tal vez recibiría golpes de parte suya, la convencería, lograría enamorarla otra vez y nunca la dejaría ir –Nunca-susurre para mi mismo, esa era una palabra fuerte, tanto como “Para siempre” pero lo lograría. Eso si.

La clase era aburrida y lo único que la hacia interesante era que la profesora casi se cae encima de un compañero. Estaba sentado junto a Helen, quien estaba metida en su mundo al igual que mi otra amiga. Suspire. Este seria un buen momento para pensar lo que había pasado el día de hoy. Veamos ¿Qué siento hacia Styles? Tal vez sienta algo de odio, pero también se que nada en absoluto. Lo supere o eso creo haber hecho. ¡Rayos! La puerta se abrió llamando mi atención, un chico entro por ella y seguidamente le entrego una nota a la profesora que ella leyó con atención. Sentía que lo conocía. Cabello pelinegro peinado hacia arriba, ojos color miel, piel blanca casi como nieve, una sonrisa traviesa junto aquel aura de liderazgo. Jasón Mcvey, no podía ser el mismo chico con quien compartió una amistad pequeña o ¿si? –Bien, preséntese ante sus compañeros-dijo la profesora sentándose en la silla negra. El sonrió de costado y se coloco en medio de todos- Hola, mi nombre es Jasón y soy nuevo aquí-dijo jugando con sus manos. Lo examine detenidamente ¿Esto era lo único que me faltaba? Mcvey y Styles en el mismo colegio atormentándome nuevamente. ¿Acaso volvimos al pasado? El camino cerca de los pupitres pero paro un instante al verme y se posiciono atrás de mi por ser el penúltimo pupitre donde nos encontrábamos mi amiga y yo –Dove-susurraron atrás de mi.

Sentía su mirada sobre mí. Aquella mirada posesiva y, que con solo verte a los ojos te hacia inferior a el, eso era algo que me había agradado de el desde un principio. Helen iba a voltear pero la detuve antes de que lo hiciera, no quería que el supiera quien era yo. No lo quería, aunque tal vez Styles se lo diga en cuanto lo vea. Mejores amigos son aquellos dos idiotas sin cerebro – ¿Supongo que no quieres que voltee?-pregunto en un murmuro mi amiga. Asentí levemente con la cabeza y ella solo hizo el mismo acto en señal de que estaba de acuerdo. Este definitivamente era el peor día de mi vida y cuando digo pero es el PEOR. Sentí como tocaban mi hombro derecho, suspire mientras me mordía mi labio inferior y cerraba las manos en forma de puños -¿Qué quieres?-pregunte con cierta frialdad minutos después de que me haya controlado. El me miro algo extraño y formo una curva en sus labios color carmesí formándola casi como una media sonrisa –Es solo…es que recordaste a alguien a quien conocía-dijo entre pausas. Su voz era la misma de siempre, no había cambiado casi nada y aun seguía siendo mas alto que yo –Pues metete en tus asuntos idiota, me vale mucho que te recuerde a alguien o no. Da igual güero-dije elevando un poco mi voz. Estaba mas que harta de los hombres eso era un hecho. Harz solo se mantuvo en silencio viendo como discutía o más bien, agredía a Jasón por un tonto comentario suyo. Me voltee antes de que hablara, prefería no tener nada que ver con los chicos. Era como ellos pero no igual a ellos ¿confuso puede ser? Si, teníamos cosas en común con chicos y no, no quería ser la clase de chica que juega con los corazones en estado de enamoramiento, aunque a veces no cedía ante eso.

No volvería a caer ante el pasado nuevamente.

¿Por qué hacerlo si solo trae recuerdos que deberían permanecer guardados en un baúl dentro de su corazón cubierto de cadenas y paredes irrompibles?

Alce la mirada asía el pizarrón pensando ¿Cómo puede el diablo empujarte a los brazos de alguien que luce lo más parecido a un ángel cuando sonríe? Ahora se que yo nunca le importe, porque haberle dicho un “me gustas” no le abría importado…como ahora mismo, cuando estoy a punto de caer nuevamente en su juego. En los mismos errores.

Narra Ariana:

Esto era lo único que me faltaba. Ser la única que tenia clases de Algebra ahora, odio tanto mi suerte y eso que desde hace días lo único que a hecho es empeorar. Suspire y proseguí a caminar hasta la aula del profesor Mario. Era increíble que haya decido colocar la clase de algebra en el ultimo piso del colegio, camine hasta las escaleras que me llevarían a mi amada clase de Algebra –notase el sarcasmo-.

Si tan solo pudiera matar a mi profesor, pero no quiero parar a la cárcel tan joven, aun no.

Mientras subía escalón por escalón revisaba que tuviera todos mis libros que me tocarían después del receso. Dios bendiga que esta era la tercera clase antes de nuestro receso ¡Viva! Sonreí y cerré mi mochila para colocarla como minutos antes la tenia, levante la mirada para proseguir a caminar debido a que ya me encontraba en la planta alta pero una puerta me impido el paso golpeando su linda textura de madera contra mi rostro -¡Auch!-me queje una vez que caí al duro piso con azulejos coral. Lleve mi mano izquierda contra mi nariz que tenia un poco de sangre debido al gran impacto que sufrió. Vaya que hoy el destino estaba encontra de mí. Un chico castaño algo preocupado apareció al lado de la puerta abierta, al verme solo se alarmo mas y se acerco hasta a mi con la intención de ayudar. Pero vaya que los idiotas sobran a no dar mas –Enserio lo lamento tanto, no me di cuenta y… ¡dios soy un completo desastre!-se regaño a si mismo. Ahora no me parecía idiota, mas bien tierno –Deja te ayudo-me dijo tomando mi mano derecha para levantarme mientras con su otra mano tomaba mi cintura. Lo mire fijamente, era un chico lindo a mi parecer, cabello castaño desordenado –solamente un poco-, unos hermosos ojos cafés y tenia una chamarra azul junto a unos jeans algo desgastados y unas vans. Solo me limite a decir una palabra y me fui directo a las escaleras, tendría que ir a la enfermería. -¡Espera!-me detuvo antes de bajar el último escalón ocasionando que casi me caiga de espaldas, pero sostuvo mi cintura antes de que eso pasara.

¿Acaso no le fue suficiente romperme la nariz para que me quiera romper una pierna también?

-Déjame por lo menos llevarte a la enfermería, enserio me siento como un idiota. Mi primer día y lo arruino todo-dijo bajando la cabeza, eso hizo que me sintiera algo culpable –Ariana Jones-dije sin pensarlo. El me miro a los ojos algo confundido –Ese es mi nombre-dije sonriendo de costado, me miro e hizo lo mismo –Austin Mahone-dijo al final mostrándome una radiante sonrisa.

Narra Harry:

Parecía que nunca iba a terminar de hablar aquella vieja, pero la campana me había salvado de una pregunta que no quería responder y que, simplemente no sabia su respuesta precisa. Salí antes que los chicos. Me había vuelto un lobo solitario rondando los pasillos del instituto, ya no hablaba con Niall y Zayn casi como antes desde que los conocí hace un par de años, además sabía que ellos estaban perfectamente bien sin mi compañía. Solo quería pensar en lo que había estado haciendo de mi vida durante todo este tiempo.

Me sentía un idiota al saber que Dove puede que jamás me perdone por lo que le había hecho, fue estúpido, lo se. ¿Por qué hacerle algo así a una chica inocente y linda como lo era ella? Y, tiempo después ver que tu obra se convirtió en algo mucho diferente a lo que habías pensado. Supongo que desde un principio nunca lo vi así, nunca vi el daño que podía causarle a una persona con unas simples palabras. ¡Dios me merezco todo esto! Me merezco ser un idiota y que la chica por la que aun sigo enamorado me odie. Lo admito nunca dejo de gustarme siempre hice algo para dejar de pensar en ella desde que se fue aquel día. Tome una moneda de mi bolsillo y la deposite en la maquina de refrescos a la que ya había llegado momentos antes. Me recargue en ella pensando que hubiera pasado si me hubiera dado cuenta de cuanto amor sentía asía esa chica, creo que todo hubiera sido mejor.

No poner a mi mejor amigo primero. No pensar en la felicidad de mi mejor amigo. No acobardarme por mi mejor amigo. No hacer nada por seguir a mi corazón solo por no destruir el de mi mejor amigo.