Re: "Mia Para Siempre" Nick J. y Tu Terminada

por **Andrea P. Jonas:)** Sáb 31 Mar 2012, 6:53 pm

Capitulo 19 (1/2)

Se estaba muriendo.
___ hacía tiempo que lo había asumido. Desde que fue lo bastante mayor como para entender que la gente se moría, sabía que a ella, al igual que a todos, le tocaría algún día.
Sólo que, a ella, los médicos le habían dicho que sería mucho antes de lo esperado. El tumor que había en su interior le recordó que iba a ser muy pronto.
Su tiempo en la Tierra se estaba acabando, igual que el siglo en que vivía. ___ dudaba de que llegara a ver el amanecer del siglo veinte. De hecho, no creía que ese año pudiera decorar el árbol de Navidad.
Esos pensamientos se le presentaron como hechos consumados. Eran verdad, y no tenía sentido negarlos. Eso no evitaba que deseara poder hacerlo. No impedía que fantaseara sobre una cura milagrosa que le permitiera tener una vida normal junto a su familia, junto a Nick.
Si era sincera consigo misma, tenía que reconocer toda la verdad. Nick, y no su familia, era el principal motivo por el que quería vivir. ¿Estaba mal que fuera así? ¿Era un pecado soñar con que él le diera su sangre al igual que ella le había dado la suya, que la convirtiera en un ser inmortal como él?
No podía haber nada de malo en querer pasar la eternidad junto al hombre al que había entregado su virginidad. El hombre al que amaba.
Hacer frente a eso era mucho más duro que asumir que se iba a morir.
Se había enamorado de un hombre que, cuando ella dejara de existir, seguiría viviendo durante mucho tiempo. Un hombre que había nacido varios siglos antes que ella. Incluso si ella pudiera tener hijos, él no sería el hombre que pudiera dárselos. ___ sabía todo eso y nada le importaba lo más mínimo. Cuando pensaba en Nick, no veía a un vampiro, veía al hombre que se desvivía por hacerla sonreír, que no la trataba como si estuviera hecha de cristal. El la hacía sentir especial, como si fuera la única mujer sobre la faz de la Tierra.
___ lo amaría siempre, sin importar lo que él fuera.
Había pasado una semana desde que habían hecho el amor en el palacio de Buckingham. ___ aún sonreía al acordarse de ello.
Nick llevaría con él ese recuerdo durante mucho tiempo, quizá para siempre. En las horas que habían pasado juntos habían construido muchos recuerdos.
El siempre le concedía todos sus caprichos. No importaba lo que quisiera, lo que deseara hacer, Nick lo hacía posible. Algunas noches volaban, ¡volaban!, hasta otra parte del país para descubrir lugares de Inglaterra que ella no había soñado con conocer jamás. Otras noches se quedaban en la finca y conducían el Daimler de su padre. Ahora sabía conducir mucho mejor, incluso Nick lo creía así. Él ya no le decía que redujera la velocidad o que mantuviera la vista en la carretera.
Su familia se portaba con Nick de un modo maravilloso. Lo trataban como al resto de la gente, a pesar de que sabían que no había nada normal en él. Sus hermanas, que a esas alturas ya deberían haber regresado a sus hogares, seguían allí. Tal vez fuera porque tenían miedo de que se muriera mientras ellas no estuvieran , o simplemente se habían quedado para dejar claro que no les parecía bien que pasara tanto tiempo a solas con Nick. Fuera lo que fuese, le encantaba que estuvieran allí. ___ quería estar tanto tiempo como pudiera con ellas, así que durante el día compartía muchas horas con sus hermanas y su padre. Las noches las reservaba para Nick.
Era un horario agotador, pero no estaba dispuesta a alterarlo. Ese día le había costado mucho levantarse. Lo único que quería era quedarse en el lecho, tumbada, y dormir durante horas. De hecho, si bebiera un poquito de tónico para el dolor se dormiría en seguida. Unas cuantas horas extras de sueño le harían mucho bien. Pero entonces no podría pasar el día con sus hermanas, y quizá tampoco podría estar con Nick, y ella no iba a permitir que nada de eso sucediera. Cuando el cáncer la derrotara ya permanecería mucho tiempo en la cama.
Pero aún no la había derrotado.
Sí, se iba a morir. No había ningún Santo Grial que pudiera impedirlo, tal vez nunca había existido. Ella y Kevin habían sido sólo unas piezas de cambio para la orden de la Palma de Plata.
Se había hartado de perseguir milagros. Pero éstos salían muy caros. Sólo tenía que fijarse en Nick. Le habían dado el don de la inmortalidad, y él lo consideraba una maldición porque, a cambio, tenía que alimentarse de humanos. Una parte de ella creía que ese hábito era repugnante, pero otra se acordaba de lo maravilloso que había sido sentir los labios de él en su cuello.
A Nick le había gustado tanto beber su sangre como a ella que lo hiciera. ¿Qué pecado había en eso? Si siempre era así de maravilloso, a ___ no le costaba demasiado imaginarse haciendo lo mismo.
___ podía ser como Nick, se veía capaz de hacer todas las cosas que él hacía. El único inconveniente sería ver morir a toda su familia.
Y ése era un precio muy alto.
Aun así, una vocecita en su interior le decía que todo merecía la pena a cambio de pasar la eternidad con Nick. Si estaban juntos, podía enfrentarse a todo.
Eso no era cierto, por supuesto. No podía serlo. ___ no solía ser tan romántica, pero era bonito soñar con pasar los siguientes cuatrocientos años o más explorando el mundo con él a su lado. Seguro que habría ocasiones en que echaría de menos el sol, o en que querría matarlo, pero a pesar de todo, la idea seguía gustándole.
Sin embargo, no tenía sentido pensarlo. ___ volvió a centrarse y llamó a su doncella. Era casi hora de comer y se suponía que iba a reunirse con sus hermanas.
La doncella llegó y la ayudó a vestirse y a peinarse. Una vez lavada y con un vestido color rosa, ___ se sintió mucho mejor. Bajó la escalera y llegó a tiempo de reunirse con sus hermanas en el comedor.
—Ya estaba pensando que tendría que subir a buscarte —le riñó Selena mientras se sentaba—. Eso te pasa por irte a dormir cuando amanece.
No se acostaba hasta el amanecer porque estaba en otra parte del país con Nick, o estaba haciendo el amor con él, o ambas cosas a la vez. Pero no iba a contárselo a sus hermanas. Sólo lograría que se preocuparan por sus paseos por Inglaterra y seguro que acusarían a Nick de aprovecharse de ella.
—Entonces tengo todo el derecho del mundo a llegar tarde. —___ sonrió a sus hermanas—. Siento si habéis tenido que esperarme.
—Bah —dijo Demetria—. No lo hemos hecho. Acabamos de llegar. No le hagas caso a Sele. Siempre está de mal humor cuando tiene hambre.
Todas se rieron y se sentaron alrededor de la mesa, donde había carne, ensaladas y queso esperándolas.
—Pareces cansada, ___. —Danielle cogió un enorme trozo de jamón—. ¿Cómo te encuentras?
Tres pares de ojos de distintos tonos de verde se quedaron fijos en ella esperando su respuesta, todos llenos de preocupación.
___ sacudió la cabeza.
—Estoy bien. Sólo es lo que ha dicho Sele, que me acuesto demasiado tarde. —No iba a decirles que sentía cómo su salud se iba desvaneciendo. Cómo se le iba consumiendo la vida que le quedaba.
Hizo acopio de valor y se sirvió un trozo de jamón. Iba a comer, maldita fuera. Si el cáncer quería alimentarse de su fuerza, haría que tuviera más que de sobra.
Hablaron sobre tonterías, cosas del día a día, de su padre y de los chismes del pueblo. Hubo mucha especulación y muchas risas, las voces fueron subiendo de tono a medida que comían.
Estaban tomando el té cuando Demetria miró a ___ de un modo extraño.
—Cariño, ¿puedo preguntarte algo un poco impertinente?
—Nunca has hecho otra cosa —se rió ___.
Demetria no le encontró la gracia, pero tanto Danielle como Selena se rieron a sus expensas.
—Ya sabes que he leído muchos libros sobre vampiros.
—¡Morbosa! —exclamó Danielle, y se tapó la boca para disimular. Las demás se rieron. La afición de Demetria por las novelas góticas no era ningún secreto.
La buena de Demetria fulminó a sus hermanas con la mirada. Danielle había acertado al señalar una de sus debilidades.
—Al menos yo leo.
Sus hermanas se rieron también de eso. Danielle puso los ojos en blanco. ___ sacudió la cabeza y captó la atención de Demetria de nuevo
.—¿Qué pasa con los vampiros, Demi?
Ésta frunció sus pálidas cejas y acarició la taza de té con el dedo.
—Por lo que he leído, pueden convertir a un ser humano en vampiro bebiéndose su sangre y reemplazándola por la de ellos.
No tenía ningún sentido mentir.
—Sí, al parecer así es.
Demetria se aclaró la garganta y la miró insegura.
—¿Está Nick haciendo eso contigo?
—¡Demetria! —exclamó Selena.
___ ignoró a la mayor de sus hermanas. Selena actuaba como si todo aquello no fuera asunto suyo, o como si fuera horrible siquiera pensar en ello, cuando en realidad tenían todo el derecho a preguntárselo.
—No, Demi. No lo está haciendo.
Demetria no se dio por satisfecha. Se acercó a ella, como si temiera que alguien entrara en la habitación y pudiera oírlas. Bajó la voz.
—¿Lo hará?
Tampoco tenía sentido mentir sobre eso. ___ se llevó la taza de té a los labios.
—No. Dice que no quiere maldecirme.
—Por maldecirte, quiere decir convertirte en una criatura como él. —Selena abrió los ojos de par en par y empezó a temblar—. Una criatura que bebe sangre humana.
—Él no es ninguna criatura —la riñó ___, y la miró a los ojos—.No es diferente del resto de nosotros.
Su hermana enarcó una ceja.—Es un vampiro, _______. Te guste o no, eso lo hace diferente.
Selena tenía algo de razón.
—En lo que importa no es distinto. No podemos olvidar que nos salvó la vida.
—No lo he olvidado ni voy a hacerlo —contestó Selena—. Le estaré agradecida durante el resto de mi vida. Cariño, no estoy atacando al señor Nick, lo único que digo es que convertirte en alguien como él no va a solucionarlo todo.
—No creo que convertirme en alguien como él lo «solucione» todo. —No todo, pero casi.
Ahora fue el turno de hablar de Danielle.
—¿Te gustaría convertirte en lo que él es?
Oh, Dios. Aquella conversación iba a convertirse en algo muy serio. ___ suspiró y dejó la taza en el plato.—No lo sé. Mi yo egoísta no quiere nada más que vivir, pero no quiero ni imaginarme lo que sería seguir aquí para siempre mientras mi familia...
No pudo terminar. Sólo pensar que sus hermanas se harían mayores y se morirían era demasiado doloroso. No quería perderlas. No quería asistir a eso.
Demetria se acarició su redondo vientre, su mirada vagó por el pequeño montículo como si pudiera ver al ser que había dentro.
—Pero estarías aquí para cuidar a mis hijos, y a los de ella, y a los hijos de nuestros hijos. —La miró a los ojos con los suyos llenos de lágrimas—. Eso me gustaría.
Danielle se quedó sorprendida ante esa idea.
—Siempre tendrías una parte de nosotras contigo.
Selena frunció el cejo y las lágrimas también se agolparon en sus ojos.
—Nuestros tataranietos conocerían nuestra historia a través de ti, ___. Podrías hablarles de nosotras. Dios santo, no había pensado en eso.
—Y podrías protegerlos —añadió Demetria—. Protegerlos de verdad.
Sus hermanas se estaban imaginando cosas que ___ no se había atrevido ni a plantear. Se sintió un poco mareada. Y emocionada.
—Es imposible —les informó ___ sin preámbulos, no quería que se hicieran más ilusiones—. Nick no quiere hacerlo. Me voy a morir. Es mejor que todas lo aceptemos.
—Tal vez —dijo Demetria con un sorprendente brillo en la mirada—. Pero eso no significa que tenga que gustarnos.
___ se rió, fue una risa amarga y seca.
—Créeme, Demi. A nadie le gusta menos que a mí.

listo! chicas nos leemos mañana! la quiero! :hug:

por **chelis** Sáb 31 Mar 2012, 7:19 pm

aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaiiiii!!! .. en esa epoca ya existian esas cosas????..
wuuuaaauuuuu!!!.. y nick la lleevoo???
y luego hicieron... aaaaaiiiiiii !!! ......... y luegooooo!! eso que dijeron sus
hermaaanaaasss!!!!.. yo tampoco lo habia pensadooo
otroo porfaaaa

por **Karli Jonas** Dom 01 Abr 2012, 1:45 am

Waaaaaaaaaaaaa tienes que seguiría ya
En verda muero por curiosidad si Nick la convertirá
Ahhh tiene que hacerlo ambos se aman
Y las hermanos de la rayis le han dado una buena
Razón ahhhhhhhplis siguelaaaa!!

por **ElitzJb** Dom 01 Abr 2012, 7:38 pm

ahahahahaha tuvieron sexo la rayis y nick en el palacio nah q fino :)
x fitas tenes q seguirla me encanto los 2 capitulos estan super genial
adoro siguelaaaaaaaaaaaaa

por **Dorin** Dom 01 Abr 2012, 9:05 pm

capitulo =)

por **Karli Jonas** Lun 02 Abr 2012, 3:18 am

CAP CAP CAP CAP CAP
CAP CAP CAP CAP
CAP CAP CAP
CAP CAP
CAP
:)

por **chelis** Lun 02 Abr 2012, 1:43 pm

UN CAAAPIIISSS

por **ElitzJb** Lun 02 Abr 2012, 6:10 pm

SIGUELAAAAAAAAAAA

por **Pamm Jonas** Lun 02 Abr 2012, 8:25 pm

Jaja gracias! y si me la pasé super!! muy padre y mi chambelán principal uff! es una lindura de persona!! !! jaja y SIGUELAAA!! jaja

por **Karli Jonas** Mar 03 Abr 2012, 3:16 am

CAP Plis!!

por **Andrea P. Jonas:)** Mar 03 Abr 2012, 7:05 pm

mi niñas hermosas!! perdon por no subirles caps estos dos dias pero se me borro uno de los q iba a subir el domigo! ._.' casi me arranco el cabello cuando me paso!!!! :P y como tengo q editarlo otra vez me tardo un poco y como no he tenido oportunidad para ponerme a editar! pues no tengo nada para subirles! :| pero prometo q si alcanzo hoy les subo aunque sea uno! ok! si no mañana es mas seguro q suba y les subire maraton! :D bien chicas queria avisarles por si hoy tampoco puedo y no esten sin noticias mias ok! la quiero!!! :hug:

por **Mire** Mar 03 Abr 2012, 8:26 pm

La nove esta genial!
no comentaba antes porque la escuela no me deja mucho tiempo
me encanta todo lo que ha pasado
siguela pronto please

por **chelis** Miér 04 Abr 2012, 3:32 pm

OOKISSSSS

por **Andrea P. Jonas:)** Miér 04 Abr 2012, 6:08 pm

holaaa mis niñas como estan!!! espero q esten muy bien! :)
chicas les tengo dos noticias una buena :D y una mala "Mia Para Siempre" Nick J. y Tu Terminada - Página 17 3619577255

"Mia Para Siempre" Nick J. y Tu Terminada - Página 17 3619577255

la buena esq ya termine de editar los capitulos q me faltaban y les voy a subir su maraton hoy!!!!
la mala esq... ya solo quedan DOS capitulos de nove, sin contar obviamente el maraton de hoy!
bueno en realidad son tres capitulos si tomamos en cuenta q el ultimo capitulo lo partire en dos pero tecnicamente pues son dos, en fin como ya todas sabemos todo lo que empieza tiene que terminar y pues esta nove no es la excepcion! sinceramente disfrute mucho de subir esta nove en lo personal es una de mis favoritas y espero q tambien allan difrutado leerla!
bueno ahora mismo les subo su maraton espero q les guste!!! :D

por **Andrea P. Jonas:)** Miér 04 Abr 2012, 6:16 pm

Maraton..!
1-5

Capitulo 19 (2/2)

Nick acababa de bañarse, estaba despierto y nervioso al entrar en la biblioteca para encontrarse con __. Había recibido una carta de Molyneux en la que le decía que, gracias a sus contactos, él y Kevin estaban a punto de dar con la orden de la Palma de Plata. Molyneux también le decía que esperaba que Bishop les ayudara. Este último llevaba siglos cazando monstruos, tanto humanos como no. Si alguien podía atrapar a esa orden era él.
Esas noticias le animaron mucho y aligeraron el peso que sentía sobre los hombros. Entró en la habitación y se acercó a la mujer que le esperaba sentada en el sofá.
—¿Qué quieres hacer esta noche? —Por primera vez en mucho tiempo Nick estaba ansioso por pasar sus veladas entre los humanos. Con __ a su lado ya no temía a las multitudes. Con la sangre de __ en su interior, no se sentía agobiado por la esencia de la vida, del miedo, de las esperanzas de los humanos que lo rodeaban.
__ lo miró y dio unos golpecitos a los cojines que había junto a ella. Parecía cansada, la delicada piel bajo sus ojos se veía oscura e hinchada.
—He pensado que quizá esta noche podríamos quedarnos en casa.
Aunque no hubiera tenido ese aspecto, al oír esas suaves palabras Nick se habría dado cuenta de que no se encontraba bien.__ nunca quería «quedarse en casa». Quería salir, ver cosas, hacer cosas. Ella quería vivir al máximo, y lograba que él quisiera estar a su lado cuando lo hacía.
Aunque su corazón y sus pulmones no funcionaban como los de los humanos, reaccionaron del mismo modo. Al ver que ella no estaba bien, que su vida estaba llegando a su fin, a Nick le costó respirar y el corazón se le paralizó hasta el punto de que pensó que él también iba a morirse. Si supiera que iba a acabar a su lado, moriría con ella.
Se sentó junto a __, cogió una de sus pequeñas manos entre las de él. Tenía los dedos helados y eso le asustó.
—¿Has tenido otro ataque? —Nick odiaba las horas en que no podía cuidarla.
__ negó con la cabeza y unos rizos le acariciaron las mejillas.
—No, solo estoy cansada. Creo que esta última semana he tenido demasiadas emociones fuertes. No estoy acostumbrada.
¿Era eso o había algo más? Nick no detectó la mentira en sus palabras pero por alguna razón tampoco creía que le dijera toda la verdad. Su esencia no desvelaba nada, pero al haber bebido su sangre, Nick detectaba antes el aroma de ella que el de su enfermedad.
—¿Estás segura?
Los dedos de __ apretaron los suyos con fuerza.
—Estoy bien, Nick. De verdad.
Decidió creerla, no sólo porque quería hacerlo, sino porque deseaba con todas sus fuerzas que lo que decía fuera cierto.
Miró alrededor y buscó por las estanterías un libro que a ella pudiera gustarle. Su aguda mirada podía leer los títulos desde donde estaban sentados.
—¿Te gustaría que te leyera algo?
__ se movió en el sofá para tumbarse, con la cabeza recostada en los muslos de Nick. Sujetaba su mano como si temiera que él se fuera.
No iba a irse a ningún lado. No esa noche, no durante mucho tiempo. Deseaba estar con ella durante el resto de su vida, si __ lo dejaba.
—Cuéntame tu vida —le pidió ella con los ojos cerrados—. Eso me interesa más que cualquier libro.
Con la mano que tenía libre, Nick empezó a quitarle las horquillas del pelo. Le encantaba su cabello, cómo le caía suelto alrededor de la cara y por encima de los hombros. El color era suave, tan vibrante... Reflejaba la luz como brasas ardientes y ricas sedas.Quitó otra horquilla del elaborado recogido.
—Ya te lo he contado casi todo.
__ no abrió los ojos pero sonrió.
—No me has contado lo de los últimos seiscientos años.
Aunque ella no pudo verlo, Nick también sonrió.
—Supongo que no. ¿Me creerías si te dijera que no hay mucho que contar?
—Sí.
Al oír su impertinencia, él soltó la carcajada. Lo hacía reír, lo llenaba de alegría.
—Eres muy mala. ¿Qué quieres saber?
—¿Estabas unido a tu familia?
—Mucho. —De hecho, aun después de tanto tiempo se acordaba de sus caras, de sus voces, de su modo de ser.
__ abrió los ojos, y él vio la oscuridad de su mirada.
—Tuvo que ser muy doloroso ver cómo envejecían y morían.
—Sí. —No iba a mentirle—. Pero también ha sido fascinante ver nacer a las nuevas generaciones, verlos crecer y vivir.
—¿Eso hace que sea más fácil?
—A la larga hace que la pena sea más soportable. Cuando pienso en ellos, lo único que siento ahora es cariño.
—Pero tú me dijiste que ver morir a la gente que amabas era la cosa más dura por la que habías pasado jamás.
—Lo es. Pero el dolor que siento lo siento por mí, __, no por los que se han ido. Ese dolor tiene que irse con ellos o nos volveríamos locos.
Eso pareció tranquilizarla por un instante. Se quedó en silencio, como si meditara lo que Nick había dicho. Tal vez no había sido del todo sincero con ella; pero eso hacía que la idea de convertirse en vampiro fuera aún más atractiva ante sus ojos. Ella no lo veía como era en realidad. Sólo le parecía un modo de evitar la muerte.
Fue exactamente lo mismo que él vio en el Grial Maldito; un modo de posponer algo que le daba mucho miedo.
—¿Tienes miedo a la muerte?
O ella podía leerle la mente o los dos pensaban de modo muy similar.
—A veces —reconoció él—. La mañana en que te traje desde las ruinas, tenía miedo de morir sin poder verte una vez más.
Eso la hizo sonreír.
—Yo también temía morir sin verte de nuevo. Yo no tengo miedo a la muerte, es sólo que no quiero que sea tan pronto.
A Nick no se le ocurrió nada que decir para hacer que se sintiera mejor, por lo que se limitó a quitarle la última horquilla del cabello y a deslizar los dedos por sus espesos mechones. Se los desenredó hasta que la melena de ella cayó por encima de sus muslos hasta el sofá.
__ cerró los ojos.
—Humm. Me gusta.
También le masajeó la cabeza. Ella suspiró y Nick empezó a dibujarle pequeños círculos en la frente.
—¿Cómo eras de joven?
La palabra «juventud» tenía otro significado para él.
—¿Te refieres a cuando era humano?
__ tenía aún los ojos cerrados y se encogió de hombros.
—Lo que tú prefieras.
Nick pensó en ello un instante e intentó acordarse de cómo era hacía tantos años.
—Impulsivo. Testarudo. Arrogante.
—¿En serio?
—¿Por qué te sorprendes tanto?
__ volvió a encoger los hombros y se movió contra sus muslos.
—Porque ahora no eres ninguna de esas cosas.
¿No lo era?
—Aún puedo serlo, pero de un modo distinto.
Ella esbozó una suave sonrisa.
—No lo creo.
—Es por la melancolía. Oculta todo lo demás.
—No me hagas reír.
Nick sonrió al ver su reacción. __ se atrevía a decirle cosas que nadie antes le había dicho. Tampoco nadie había creído nunca que él fuera divertido.
—Si por mí fuera, nunca dejarías de hacerlo.
__ abrió los ojos, que seguían risueños.
—Pero si nunca dejara de reírme, no podríamos hacer nada más.
Al entender a qué se refería, a Nick le hirvió la sangre.
—Ya encontraríamos el modo.
__ lo miró con aquellos ojos tan tiernos. Él haría cualquier cosa para hacer que desaparecieran sus ojeras.
—¿Echas de menos a Miley?
¿Por qué insistía en hablar de Miley? Ella era un recuerdo doloroso, algo sobre lo que él aún se sentía muy culpable, pero ¿echarla de menos?
—No lo sé.
—Creía que me responderías con un simple sí o no. —Arqueó una ceja.
—¿Ah, sí? Bueno, a veces, supongo. —No era una respuesta demasiado lograda, pero era sincera.
—¿Tienes remordimientos?
Nick le masajeó el espacio entre las cejas con el pulgar.
—¿Respecto a Miley o sobre mi vida en general?
—Elige tú.
—Sí. —Más de los que podía contar.
—¿Sí a qué? —Arqueó la otra ceja.
Él sonrió. Era tan cotilla...
—A ambos. Tengo muchos remordimientos respecto a Miley. Pero aún tengo más sobre mi vida en general, de eso se trata, ¿no?
__ sonrió de medio lado.
—Vaya, hasta ahora todavía no había visto jamás la famosa indiferencia gala.
Nick se rió.
—No estoy seguro de qué esperas de mí.
—Sólo la verdad.
Era lo que él le estaba dando.
—Siempre que te doy parte de mí pareces querer más.
Todo el humor desapareció del rostro de ella.
—Supongo que lo que quiero saber es si valió la pena.
—¿El qué?
—Beber de esa copa. Convertirte en vampiro.
__ frunció el cejo y él intentó borrar esas arrugas con los dedos.
—Si pudieras escoger de nuevo, ¿volverías a hacerlo?
El instinto lo impulsaba a decir que no, pero no pudo hacerlo. De no haber bebido del Grial Maldito, si no se hubiera convertido en lo que era, ahora no estaría allí. No estaría sentado en aquella biblioteca, cálida y acogedora, con aquella preciosa mujer. Haría siglos que se habría convertido en polvo, habría muerto a causa del veneno de aquella daga, o quizá, si no hubiera aceptado la misión del rey Felipe, no habría llegado a viejo.
Se habría casado con Miley, pero ¿habrían sido felices? La sabiduría que le daba haber vivido seis siglos le decía que él no habría sido el hombre adecuado para Miley, que él no le habría dado lo que ella necesitaba; ni ella a él.
—Sí —dijo él—. Volvería a hacerlo.
—Eso es todo lo que quería saber. —Una pequeña sonrisa se dibujó en sus labios.
Nick buscó su mirada, quería ver algo que justificara la satisfacción que había creído detectar en sus palabras, pero no lo vio. Aunque viviera cien años más nunca entendería cómo funcionaba la mente de aquella mujer.
Por desgracia, __ no viviría cien años.
—¿Cómo funcionan tus colmillos?
A menudo pensaba que ella hacía las mismas preguntas que haría un niño, y esa vez no fue la excepción.
—Son retráctiles, como los de una serpiente.
—¿Puedes hacer que salgan?
—Sí.
—Enséñamelo.
Lo hizo y rezó para que ella no se asustara al verlo. __ observó fascinada cómo sus caninos se alargaban. Acercó un dedo y tocó el colmillo que le quedaba más próximo.
—Así que me mordiste con esto.
Nick hizo retroceder los colmillos.
—Así es.
—Ojala tuviera colmillos.
—¿Para qué?
Ésa era otra observación que tampoco había hecho nunca nadie delante de él. Nick no quería que ella los tuviera, pero no fue capaz de decírselo.
—Así podría ser parte de ti del mismo modo que tú eres parte de mí.
A Nick se le rompió el corazón.
—Tú eres parte de mí, __. —Le era casi imposible seguir hablando—. Siempre lo serás.
Ella le acarició la mandíbula con dedos helados. Era tan frágil, tan condenadamente frágil.
—¿Nick?
—¿Sí, mi amor?
—Perdóname, pero espero que tardes mucho tiempo en superar mi marcha.
Lo estaba matando. Tenía que darse cuenta de que le estaba destrozando el alma.
—Puedes estar segura de ello.
Nick no pudo decirle que creía que nunca lo superaría, porque entonces tendría que admitir lo mucho que ella significaba para él. __ lo había sacado de su escondite, y cuando ella muriese, no tenía ni idea de cómo soportaría de nuevo la oscuridad.

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