"Friends, Lovers Or Nothing" (Zayn Malik) TERMINADA

El tema era… que debía hacer ahora? Por un lado, estaba el chico que me había hecho sentir cosas que nunca había sentido antes, pero me había traicionado, y ya no era lo mismo que antes, mas aún lo seguía queriendo. Y por otro lado, Zayn. Ese morocho que me volvía loca, que con tan solo sonreír volteaba mi mundo, y lo ponía de cabeza. Sus ojos miel, que me transmitían dulzura. Él siempre estuvo ahí para todo, se preocupó por mí, y no me hirió. Y luego de su confesión, no hacía otra cosa que no fuese pensar en él… tenía que solucionar las cosas. Así que tomé mi celular, y llamé a Liam. Quedamos en encontrarnos en la misma panadería a la que fuimos el otro día.
Estaba sentada, esperándolo. Miraba los autos que pasaban, los pajaritos que volaban. Intentaba tranquilizarme, focalizando la atención en otra cosa.
-Hola Aldi- dijo sentándose enfrente mío. Sonrió. –Parece que traes buenas noticias.-
-Liam tengo que hablar con vos.- Dije poniéndome seria. Era un tema delicado, y tenía que pensar bien las cosas que iba a decir.- Estuve pensando en lo que hablamos el otro día y me di cuenta de que… de que me causaste demasiado dolor este último tiempo. No quiero nada con vos.- lo miré. Atónito, bajo la cabeza. Parecía un poco molesto.
Es por ese estúpido de Malik, no? Tendría que habérmelo imaginado.- Su tono de voz no era el que solía usar.-Ese idiota se aprovechó de la situación y te llenó la cabeza. Está bien, andáte con tu amiguito ese.- Se puso de pie.
-No! no es verdad- Liam me fulminó con la mirada.-Solamente es que… no siento lo mismo que antes. pero podemos seguir siendo amigos. –Liam negó suavemente con la cabeza.- yo no quiero pasar por lo mismo dos veces.-
-Aldana, te conozco demasiado. Ya sé que me estás mintiendo, así que prefiero que te calles y dejemos las cosas como están. Okey? Adiós.-
- Ok Liam, tenés razón en que te mentí. Pero es porque no quiero lastimarte.. Largué un suspiro. -Todo el tiempo que estuve mal fue Zayn quien estuvo conmigo acompañándome, haciéndome sentir que había razones para seguir adelante, ayudándome a ver que sí había gente que me quería.-
-Yo te quería, Aldi.-
-no lo supiste demostrar.-Dije seria. Liam pareció comprender.
-Te dejo para que seas feliz con el tarado ese, yo me voy.- y sin decir otra cosa, se dio media vuelta y se fue.
Puesto que Liam no se veía interesado en recomponer nuestra amistad y se fue, probablemente odiándome de por vida, me vi obligada a pagar la cuenta. Al fin y al cabo, en parte me lo merecía, lo había llamado para rechazarlo por algo así como su archienemigo. En fin, tomé mis cosas y me dirigí a casa.

Estaba llegando a mi casa, cuando para cortar camino, decidí cruzar la pequeña placita...Aquella misma donde, hacía aproximadamente un día, mi vecino, mi mejor amigo, el chico por quien morí me dijo que estaba enamorado de mí. No tenía intenciones de cruzármelo, me preguntaría de dónde venía y no tenía intenciones de contarle que había ido a hacer que mi ex me odiara por amarlo a él.
Para mi desgracia, ese día la suerte no estaba a mi favor. Ahí se encontraba, apoyado contra un árbol mirando a Devon que corría entre las plantas. No iba a cruzar por ahí. Me dispuse a caminar hacía la vereda de enfrente, pero como los augurios no estaban de mi lado, me vio. Vino corriendo con una sonrisa. Perfecto, encima ponía esa cara que me derretía.
-Aldi! ¿Cómo andás?- se acercó, con cierta intención de besarme.
-Hola Zayn, bien y vos?- Lo miré a los ojos... gran error. Caí en la tentación y acabé por hacer realidad sus intenciones.
-Y de dónde venías? Digo, si se puede saber - preguntó. Hizo la maldita pregunta. Sin embargo, no me animé a mentirle.
-Vengo de ver a Liam, necesitaba hablar con él - vi como su cara se desmoronaba, se puso pálido y agachó la mirada.
-Eso quiere decir que lo que te dije ayer no sirvió de nada.- Frunció los labios un poco, y me volvió a mirar.
-Pero le dije que...-
-Mira Aldi, no quiero ser parte de tu juego, si no me querés, me lo hubieses dicho desde el principio, no me hubieses mentido y todo estaría perfecto.- Largó un suspiro, tomó a Devon por la correa, y dejándome con las palabras en la boca, se dirigió a su casa. Esto no podía estar pasando, nada estaba saliendo bien últimamente. Quería gritar. Necesitaba decirle al mundo lo molesta que estaba, pero no lo hice. Conté hasta diez, me calmé, y casi inconscientemente, mis pies comenzaron a moverse uno delante de otro, justo en dirección a casa.
Rendida ante semejante reacción, muriéndome por dentro, me tiré sobre mi cama. No me había querido ni escuchar. Era increíble cómo los chicos se hacían la cabeza tan rápidamente. Lo peor de todo, y lo más doloroso, fue que me trató de mentirosa. Dijo que le mentí sobre mis sentimientos, cuando yo en verdad lo amo. ¿Cómo es posible que tu vida de un giro drástico en tan solo 24 horas? La cabeza me dolía, el corazón me dolía... Mis pensamientos daban vueltas por mi confundido cerebro... A caso no me quería? porque de ser así, me hubiera escuchado. Hubiese escuchado cada detalle de lo que tenía para contarle, pero no había sido así.
Me puse de pie y fui por el botiquín a la cocina, para buscar un ibuprofeno que calmara mi agudo dolor de cabeza, y luego volví directo a la cama. A mi lado, tenía mi celular. Lo miraba inmóvil, esperando alguna señal de Zayn. Tarde o temprano lo iba a volver a ver, y arreglaría las cosas con él, a la fuerza si era necesario.
El vibrar de mi celular me despertó. Desesperada, lo tomé. Casi lo tiro contra la pared cuando leí que era mi madre para decirme que baje a poner el fuego para hervir el arroz, que ella en unos minutos llegaba y seguía preparando la comida. Desganada, bajé a hacer lo que me habían pedido, pero volví a mi habitación al momento de la cena. tenía un nudo en el estómago, por lo que me puse mi pijama, y sin pensarlo dos veces, me sumergí bajo mis sábanas con el aire acondicionado prendido, y rápidamente, quedé completamente dormida.