El ladrón de café.|Capítulo 04 listo, ¡Necesito lectoras!| ♡

ASDFGHJKL me encantó, jaja yo también amo los cheetos me gusta muchísimo la personalidad de cada personaje porque es única y con el toque que tu les das al escribir. ¿Besos? sam y Charlie... assdbfhbsdgvfnfsdmg. Me encanta las ventajas de ser invisible, es una de mis peliculas favoritas. Por favor que se inviten mutuamente a verla juntos ¡Por favor!. Siguela que la amo y quiero saber que mas pasa . Un beso

-¿Enserio? ¡Yo veré esa película por igual!-exclama entusiasmada, el rizado sonríe con sus cejas fruncidas, ¿acaso eso es un señal para invitarla?

El rizado no sabe qué hacer por lo que simplemente ladea la cabeza y ríe, se muerde el labio antes de saber siquiera lo que diría, pero antes de que pudiera pensar, dijo lo primero que se le vino a la mente.-Vaya, creo que de ser así, podríamos verla.-la mira avergonzado por la manera en que se atrevió decir aquellas palabras, pero la pequeña sonrisa tímida de parte de la pelirroja hizo que se relajara un poco y sonriera de la misma manera.

-Creo que sí, pero tengo que llevar estas cosas a mi apartamento.-comenta mirando su carrito, el chico ríe y asiente con la cabeza.

-Te puedo acompañar y de ahí vamos a mi apartamento.-se pasa la mano por la nuca, un signo de nerviosismo, la chica chasquea la lengua y asiente levemente, se da la vuelta y empieza a caminar, empujando el carrito junto a ella, mientras que el chico se queda paralizado con una sonrisa en la cara, nunca pensó que ella aceptaría, la chica se voltea y le mira sonriente y una chispa de diversión, aquella imagen lo dejó paralizado, se veía hermosa, reluciente e inocente.

-¿Piensas quedarte parado? ¡Anda lento que nos llama la diversión!-exclama la pelirroja tomándole de la mano y halándole con cuidado de que sus carritos no choquen o se  vayan a una dirección contraria.

Ambos llegaron a la cajera y mientras aguardaban, hacían silencio, simplemente se daban miradas, miradas significativas dirían algunos, las cuales muestran sentimientos nunca antes mostrados, sentimientos ocultos, los cuales ambos prometieron u juraron que nunca más iban a volver sentir. Al momento de salir del supermercado, ambos cargando con sus respectivas bolsas, se dirigen al apartamento de la pelirroja.
-Em, creo que nunca te dije mi nombre.-se atreve a romper aquel silencio la oji miel, el rizado la mira y sonríe amable.-Soy Alondra Horan, un gusto.-una sonrisa impecable aparece en el rostro de la chica.

-Nickolas Lowell.-el chico sonríe a la pelirroja, la cual se sonroja y asiente con la cabeza-¿Cuántos años tienes?

-19.-murmura, el rizado enarca una ceja y ríe.- ¿Qué tiene tanta gracia?-pregunta con el ceño fruncido.

-Pareces una niña de 15, perdón si te molesta, pero es por tu tamaño.-comenta apenado, la chica sonríe y se encoge de hombros.
-¿Cuántos tienes tú?-pregunta curiosa, el chico se encoge de hombros.

-Casi 21, en febrero los cumplo.-hace una mueca, la chica lo mira con su ceño fruncido y el la mira confundido.- ¿Qué sucede?-pregunta ante la mirada de la chica.

-Nada, es que eres muy alto.-sonríe y mira al frente, su apartamento quedaba justo al cruzar la calle.

El oji verde no dice nada, simplemente la mira y pestañea, ambos giran la esquina y se aproximan al apartamento, el cual, el rizado rápidamente supo que estaban en la casa de las sigmas al ver el gran portal que los conduce a aquella enorme casa, ambos entran y empiezan a caminar, en busca del de la chica. Silencio es todo lo que había en aquellos momentos, no era un silencio incomodo, a decir verdad, era uno agradable.

(….)
-¡No se vale, el debería de estar con Sam no con la budista!-exclama la chica al ver como Charlie y la “budista” se besaban, el rizado ríe y niega con la cabeza, la pelirroja lo mira preocupada.-Es que, Sam y ella se besaron y yo pensé que estarían juntos, pero no, no lo están, sigo pensando que Charlie debería de estar con Sam.-se queja la chica asiendo pucheros.

Después de que dejaron las cosas en el apartamento de la pelirroja, ambos tomaron camino al apartamento del chico, en donde al llegar, la oji miel y este entablaron una gran amistad y confianza rápida mientras preparaban de comer, y al ver la película, la chica  desprendía entusiasmo  y ansiedad mientras la veían, pero al llegar la parte del primer beso entre Sam y Charlie, ambos se miraron, para luego sonrojarse y seguir mirando la película.
-Que no ves que Charlie está con ella porque no sabe cómo reaccionar ante sus sentimientos.-dice el rizado divertido, la chica da un bufido y ríe.

-Tienes razón.-comenta con una sonrisa, se acomoda en el sillón, en el cual ambos tienen los pies encima de este, la chica frunce sus labios, “¿Y si recuesto mi cabeza en su hombro?” piensa, pero su conciencia la mira de manera negativa, por lo que descarta aquella idea. Suspira y se acerca un poco más al rizado, mira la película y sonríe al ver que el chico hace lo mismo.

Por un momento se olvidaron de la película y se dedicaron a aquel juego, cuando ambos estaban lo suficiente cerca, hombro con hombro, la pelirroja recuesta su cabeza en el hombro del chico, y este pasa su brazo por los hombros de la pelirroja, la chica levanta la mirada y lo mira a los ojos, aquellos ojos de color esmeralda que tanto le aparecían en su mente en momentos de distracción, el rizado por su parte, le miraba aquellos ojos mieles con admiración, una sonrisa aparece en sus labios.
-¿Sabías que tienes unos ojos mieles hermosos?-susurra con admiración, las mejillas de la chica se sonrojan al escuchar aquello.

-No lo sabía.-murmura perdida en su mirada, el rizado mira los labios de la oji miel para luego mirarla a los ojos, pidiendo permiso algo que no se debe de cumplir, la pelirroja cierra los ojos al sentir la respiración del oji verde cerca de sus labios, entonces sus labios se rosaron hasta que ambos encajaron, un beso lento, el cual hizo estremecer a la pelirroja ante aquel tacto. Su pequeñas y delgadas manos se enredaron en el cabello del rizado, las grandes y fuertes manos del muchacho se posaron en su cintura,  poco a poco la chica quedó recostada en el muele y el rizado sobre ella, con cuidado de aplastarla, una de sus manos fue utilizada como soporte, la falta de aire llegó, rompiendo aquel viaje a las estrellas, ambos se miraron a los ojos, los cuales brillaban como 4 bombillas, la chica sonrió tímidamente mientras que el rizado  rozo su nariz con la de ella y le besó la nariz, ante aquel gesto la chica sonríe tiernamente, el rizado afinca su frente con la de ella y se quedan en silencio, un silencio el cual no quieren romper.

Ahre :

Hola c: No te ignoré, es que recién me levanto porque me sentía horrible ayer y me hicieron salir igual y ahora me enfermé :/
Ahora, ese gif lo amé porque vi la película y bueno, esta mis sensual novio Dean McMullen
Ok, Sam tiene que estar con Charlie, eso lo dejaste claro
El ladrón de café la invitó a su departamento
Na, no es rapido... Bueno si pero igual SE BESARON Y después el beso de la nariz
Bueno, el es alto y ella parece una niña de quince Son perfectos juntos
Me gustó mucho Den, espero ansiosa la continuación