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the survival kit | nc.
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Re: the survival kit | nc.
me encantó el capítulo, enserio . corina es genial, ah. me causó gracia harry, es como que la ama pero hace que la odia (?) no sé explicarlo (?). am, no sé que más decir bc cero inspiración para comentar, pero que sepas que leí el capítulo en la mañana y me emocioné un montón (?) ah que. esop, espero el próximo
aurelia.
Re: the survival kit | nc.
Amo a Cory bc's así pensé que sería mi pj, muy calmada y asdfghjklñ nada ruda como las demás, estoy deacuerdo con Aaron, a Harry le gusta Cory y son tan bellos juntos, los Shippeo, el capítulo te quedo hermoso, simplemente hermoso lo ame de pies a cabeza es muy asdfghjklñ
wasteland
Re: the survival kit | nc.
Capitulo 005
Nessa Gröen & Jace Cahill.
CODE BY DEZZA.
Vanessa
Vanessa podía sentir los sofocos que traía el comienzo del verano junto a las altas temperaturas que tanto detestaba. Aún estando refugiada bajo uno de los pocos árboles frondosos que sobrevivían a la modernización del recinto escolar, podía sentir los rayos de sol que buscaban hasta el más mínimo espacio entre la espesa capa de hojas y envolvía su pálida piel bañada en bloqueador factor ciento veinte. Una de las cosas que más extrañaba de su querida Zeebrugge — Localidad perteneciente a la ciudad de Brujas, ubicada en la costa oeste de Bélgica, su país natal — era las leves temperaturas veraniegas que rara vez superaban los treinta grados. Desde pequeña Ness había odiado el verano y no solo por las altas temperaturas y su aversión al sol, sino que tampoco le agradaba mucho estar tres meses libre de labores escolares ni exámenes, tres meses en que no se hacía necesario dedicar dos horas en el día al estudio. El verano “desordenaba su vida y alteraba su rutina”, como ella solía decirlo.
Intentó salir de sus pensamientos nostálgicos tratando evitar recordar Bélgica y todo lo que había dejado allí, incluyendo a su madre. Sin embargo fue demasiado tarde ya que cada vez que su mente le llevaba viejos recuerdos de su país natal, despertaba en ella un sentimiento doloroso que prefería mantener oculto y dormido en un rincón de su mente. Recordar el verdadero motivo por el que su padre, su hermano pequeño y ella residían en Estados Unidos no le hacía para nada bien para su integridad mental. Desde que habían pisado tierra Americana —gracias a la ayuda del hermano mayor de su madre— se habían inventado la historia de “Asunto del trabajo de papá”, cuando que el verdadero motivo era que habían huido de Bélgica al hallarse en bancarrota tras la magna deuda que les heredó el financiamiento de los tratamientos del cáncer de estómago fulminante de su madre. Lo más doloroso de todo aquello no era el simple hecho de haber abandonado el país en donde nació y vivió hasta hace cuatro años atrás, sino que nisiquiera podía dejar flores frescas en la tumba de su madre todos los sábados o domingos por la mañana por la simple razón de que si su familia —o lo que quedaba de ella— ponía un pie en tierras belgas, su padre sería automáticamente arrestado por morosidad y fraude.
Ness sacudió su cabeza obligándose a alejar sus pensamientos del rumbo que estaban tomando. En lugar de dar pie a su mente para que le invadieran malos recuerdos, centró su atención en el libro de matemáticas que le había regalado su padre y continuó desarrollando los ejercicios de geometría que tanto amaba. Las matemáticas eran el área en el que mejor le iba a la muchacha y también el que más le gustaba, tanto así, que había decidido estudiar Ingeniería Civil.
Estar en último año de secundaria y ser la mejor de su promoción por seis años consecutivos —tanto en Bélgica como en Estados Unidos— no era un logro fácil de obtener, puesto que se requería de esfuerzo, compromiso y, por sobre todo, dedicar demasiado tiempo a los estudios. Sin embargo, aquello no era problema para la chica ya que uno de sus pasatiempo favoritos era estudiar, por lo tanto, no era extraño el hecho de que ya tuviera la matrícula prácticamente asegurada en la Universidad de California, ubicada en el lugar números dos del ranking mundial de las instituciones de educación superior respecto a la Ingeniería.
— ¡Deja eso Nessie! — Exclamó su prima arrebatando el libro de sus manos sin darle tiempo de reaccionar para poder sujetarlo. — ¿Me puedes explicar que mierda es esto? — agregó la chica al ojear el libro.
— Se llaman matemáticas, Kenzie — Respondió la castaña.
— Esto no es matemáticas, no tiene números, son solo letras y triángulos — Le contradijo la muchacha que estaba de pie frente a ella mirando el libro como si leyera un diccionario chino.
— Eso es geometría y sería muy gentil de tu parte si me lo devolvieras para seguir ejercitando — Explicó la castaña tendiendo su mano en espera de que su prima accediera a su petición.
— No necesitas ejercitar, Vanessa, ya estas dentro de California — dijo Mackenzie entornando los ojos al tiempo que se sentaba junto a su prima — Además, el verano está a la vuelta de la esquina y tengo una propuesta para usted, señorita Gröen — Agregó la muchacha moviendo sus cejas arriba y abajo reiteradas veces.
— No quiero tus propuestas indecentes — bromeó Vanessa recuperando el libro.
— No es una propuesta indecente, idiota — negó la chica lanzando una carcajada — Se trata de un campamento que quiero organizar — aclaró.
— ¿Tú? ¿Organizando un campamento? — se rió la castaña en la cara de Mackenzie — sinceramente no creo que la idea llegue muy lejos si la que la organiza eres tú —Finalizó volviendo su atención al libro.
— Muy chistosa — dijo Kenzie molesta cerrándole el libro y escondiéndolo tras su espalda. — Pero créeme que esta vez si funcionará, tengo pensado pedirle a Aaron que me ayude.
— ¿Qué tiene que ver Aaron en tu campamento? — preguntó Ness arrugando el entrecejo, cano a entender que no entendía la idea de su prima.
— Quiero juntar a mis amigas con sus amigos — Respondió.
— ¿Te las das de casamentera? — volvió a preguntar la castaña — Además, ¡Por favor, Mackenzie! los amigos de tu novio son unos imbéciles y aunque algunas de tus amigas no se quedan atrás, pienso que sería una terrible idea — Opinó — En todo caso, no cuentes conmigo para tu idea descabellada por tres motivos: El primero, porque no pienso andar metida entre parejas, segundo, porque papá no me daría el permiso para acampar con chicos y tercero, no quiero ir a la cárcel por organizar la matanza del año entre alumnos del instituto — Finalizó.
— Qué dramática eres — se quejó Mackenzie — además, no andarás sola, le diré a Aaron que invite a Cahill.
— ¿Y a mí qué?—
— ¿Como que a ti que? ¡Estás enamorada de él!—
— Kenzie… ¡Eso fue hace dos años! Cuando aún no repetía el último año dos veces — exclamó Vanessa.
— Bueno, eso da lo mismo, el amor puede volver a renacer y punto, no pienso dejarte aquí por todo el verano pudiendo evite que sea un verdadero funeral ¿Me oíste? —
— Como quieras — respondió la futura estudiante de ingeniería para dejar a su prima tranquila y que la chica le devolviera el libro.
— ¡Te Amo! — le agradeció Mackenzie devolviendo el libro a las manos de su prima. Vanessa dejó que la chica se emocionara , después de todo ese dichoso campamento no vería la luz en manos de su prima.
La jornada escolar llegó a su desenlace, finalizando con Cinética, una rama de física. Cada día quedaba menos para que el año escolar se terminara y Nessa temía que llegara aquel día más rápido de lo que ella podía imaginar. No quería que llegara el momento en que se sentaría en el auditorio de su institución escolar junto a su promoción mientras el sudor nervioso humedece su diploma y escucha el emotivo discurso de fin de curso. Solo restaban siete días — contando sábado y domingo— y la chica no se sentía lista para salir por aquella puerta ancha por última vez y no volver a ingresar.
La casa de la familia Gröen no se hallaba tan lejos del instituto así que Nessa no se tomaba la molestia de meterse en aquella lucha de salvajes por subirse al primer autobús que estuviera aparcado fuera del instituto. Apenas llegó a su casa, recogió las cartas del buzón y entró.
— ¡Llegué, papá! — Gritó la muchacha tirando las llaves en la mesita de arrimo que estaba junto a la puerta de acceso para después dirigirse a la cocina donde probablemente estaba su padre.
— Hola cariño ¿Por qué te has tardado tanto en volver? — Preguntó el padre de la chica en su idioma natal —como era de costumbre— mientras lavaba las verduras para la cena.
— Acabo de salir del instituto, papá — Explicó la chica en el mismo idioma arrugando el entrecejo.
— ¿Recién? — preguntó el hombre mirándola e imitando el gesto de la chica. — ¿Y como es que Mackenzie ha estado aquí hace un rato y me ha perdido permiso para llevarte a un campamento con sus amigas? — Agregó.
— Mackenzie es Mackenzie, papá, se salta clases sin importancias — se rió la chica. — En todo caso,no te preocupes, ya le dije que no me darías el permiso ya que van chic… —
— Las amigas de ella, y no te preocupes por el permiso cariño, ya te he autorizado — le interrumpió. La boca de la chica por poco va a dar al piso al escuchar aquella respuesta de su padre.
— ¡¿Qué?! — Gritó la chica. — Pero…pero…—
— Nada de peros, cariño, eres una buena chica y te mereces unas buenas vacaciones antes de entrar a la universidad — le volvió a interrumpir guiñando un ojo — Ahora ve a lavarte las manos para que me ayudes con la cena — Finalizó.
Jace
Lo malo de haber repetido el mismo curso dos años consecutivos, era que Jace ya se sabía los discursos de fin de año de memoria, en los que los maestros les deseaban suerte en la nueva vida que se les venía encima: La universidad. Desgraciadamente las buenas vibras de los maestros no habían resultado en los dos último años al muchacho ya que aún no ingresaba a la universidad cuando supuestamente tendría que estar cursando el segundo año en la universidad de Cambridge —donde su padre le exigía ingresar—.
Ser el hijo pródigo de un hombre rico era trabajo difícil, sobre todo ser el hijo menor, teniendo cuatro hermanos mayores que representaban la responsabilidad y emprendimiento de su familia. Jace se preguntaba si acaso era adoptado o algo por el estilo, sin embargo, aquella idea era imposible ya que era el más parecido físicamente a su padre entre todos su hermanos.
— Pss — susurró una voz tras su espalda. De seguro se trataba de Aaron que una vez más se aburría en clases y comenzaría a mandar sus característicos papeles donde comentaba sobre los enormes pechos de la maestra de química. Jace no entendía por qué su amigo no le imitaba y se dormía en clases cuando se aburría — Pssss — Volvió a susurrar insistente. El chico despegó su cabeza de la mesa escondida entre sus brazos y se enderezó para escuchar lo que su amigo quería decirle. — Toma — Jace tendió su mano hacia atrás esperando que Aaron depositara el papel en su mano y luego lo abrió por debajo del banco, lo estiró con sus dedos y se dispuso a leerlo. En el papel, su amigo le hablaba de un supuesto campamento que su novia había organizado junto a sus amigas y claramente le invitaba.
—“¿Crees que andaré de ánimos para un campamento de muchachitas? Por favor hermano, por fin he aprobado ultimo año y me largo de este instituto de mierda, ocuparé todo mi verano celebrándolo.”— Anotó el chico en el papel y se lo devolvió. La respuesta no tardó en llegar.
— “No seas antisocial, estará la prima de Mack” — decía la leyenda.
— “Vale, acepto, pero solo si se permite alcohol y cigarrillos” — Escribió Jace.
— “No hay problema, Cahill, mientras sea moderado y corra por tu cuenta” — El muchacho lanzó una leve risa. Sabía que esa sería su respuesta pues todos tenían conocimiento de la gran cantidad de dinero que circulaba por la familia Cahill.
La biblioteca estaba atestada de fracasados que estudiaban como desquiciados para superar los exámenes optativos de final de año para cursar al nuevo año y no repetir. Por suerte Jace no tenía que imitarlos como lo había hecho el año pasado y el antepasado. Ahora se reía en sus caras.
Se dirigió a la sección que le indicó la bibliotecaria, donde supuestamente podría encontrar un libro de Cambridge para buscar la documentación que se necesitaba para postular. Estaba extremadamente atrasado en el tema de la solicitud y solo le quedaban tres días para que las postulaciones cerraran. Tomó el pesado libro entre sus manos y buscó el lugar más apartado para leer, donde pudiera encender un cigarrillo sin ser pillado mientras anotaba en el único cuaderno que había utilizado durante todo el año. Sinceramente era un milagro que el chico no hubiera reprobado el último año por tercer vez.
— Disculpa — Habló una vocecilla a su lado. El chico desvió la mirada hasta la muchacha — No está permitido fumar en la biblioteca, ni siquiera se permite en el recinto escolar — continuó tímida mientras jugaba con sus manos para disimular su nerviosismo.
— Bien — asintió Jace antes de volver su atención al libro e ignorar las palabras de la chica que continuaba de pie en el mismo lugar, atónita ante la indiferencia del chico.
— Hey, es enserio, apaga esa cosa — Insistió la chica con voz más firme y brusca. El chico la miró nuevamente esbozando una sonrisa burlesca que denotaba sorpresa.
— Vaya, la pequeña Alemana ha sacado la voz — se burló el chico levantándose de la silla.
— No soy Alemana, y apaga esa cosa, por favor, sino me veré con la obligación de avisarle a la bibliotecaria. — Amenazó la castaña.
— Obligarme — Le desafió el muchacho. La chica le fulminó con la mirada y se dio la media vuelta dispuesta a acusar a Jace. Sin embargo, no llegó tan lejos ya que el chico le tomó de la cintura y la pegó a su cuerpo — Dije obligarme — reiteró. La chica se quedó estática, sus manos comenzaron a sudar de nervios y sus cuerdas vocales no emitían sonido alguno, cohibida por la proximidad del cuerpo del chico al suyo. Cuando su cuerpo respondió, alzó una mano para arrancarle el cigarrillo de las manos inútilmente ya que el chico fue rápido y alzó la mano por sobre la cabeza. La chica escondió su cabeza en el pecho del chico al ver que un resto de ceniza caía directamente a sus ojos. Se separó e intentó arrebatar la colilla de sus dedos pegando un pequeño salto.
— Bonitos senos, Gröen — comentó el chico esbozando una sonrisa con la mirada fija en los senos de la chica. Vanessa se separó del chico de un empujón y lo fulmino con la mirada.
— Cerdo — le espetó la castaña mientras cogía un libro del estante antes de darle la espalda y comenzar a alejarse.
— ¿Que hay del cigarro? — Se burló Jace.
— Vete al infierno, Cahill — Le gritó la muchacha sin detener su huida.
Jace se rió ante la reacción de la chica observándola hasta que le perdió de vista, le dio la última calada al cigarrillo mientras aún observaba por donde había desaparecido la castaña y lo apagó contra la mesa. Como le gustaba sacar de quicio a las chicas como Vanessa Gröen. Mientras volvía a lo suyo, se preguntó como sería sacarla de su papel de chica recatada y responsable… Un arduo trabajo pero no imposible.
- Click:
- Okay, aquí está el capítulo, es un asco, la inspiración nunca llegó pero no pensaba retrasarlas más as{i es que decidí publicarlo. Estoy abierta a críticas y lamento hacerlas leer algo tan tedioso :/
Última edición por Mess. el Jue 31 Jul 2014, 5:07 pm, editado 3 veces
Mess.
Re: the survival kit | nc.
odio que pongan edito ;-;
✦ ausente.✦
pixie.
Re: the survival kit | nc.
debs; empezaste con una frase que me encantó
ella sin embargo la admiro por su comportamiento tan adecuado, pero corina tiene paciencia por que yo le hubiera dado una hostia con sus contestaciones. No tengo mucho que decir, si no te gusto no entiendo el por que por que lo escribiste de una forma agradable y dejaste clara su relación.
Mess; tengo que decir que me declaro fan de el padre de nessa.
¿que padre hace eso? yo quiero uno jo. ahque ella me parece encantadora y muy dulce. En cuanto a Jace es bastante todo lo contrario, además de directo "Bonitos senos, Gröen" y un tanto pervertido. ah juro que tus capítulos logran hacer que me incomode, tu forma de escribir es genial c;mess escribió:
— Las amigas de ella, y no te preocupes por el permiso cariño, ya te he autorizado.
{xxx}
— Nada de peros, cariño, eres una buena chica y te mereces unas buenas vacaciones antes de entrar a la universidad — le volvió a interrumpir guiñando un ojo — Ahora ve a lavarte las manos para que me ayudes con la cena .
✦ ausente.✦
pixie.
Re: the survival kit | nc.
Hermoso capítulo<333
Me encantó, ah y ella esperaba no ir al campamento xDD
Se le arruinaron los planes.
Me encantó, ah y ella esperaba no ir al campamento xDD
Se le arruinaron los planes.
deutch.
Re: the survival kit | nc.
me encantó el capítulo pobre vanessa, su papá le dio permiso para ir al campamento (?). jace es un pervertido, ah. idk, no tengo mucha inspiración para comentar, pero escribes hermoso y el capítulo fue genial
aurelia.
Re: the survival kit | nc.
Amo a Nessa definitivamente y Jace es tan tarado como Dean, pero los dos son muy lindos y no puedes dejar de amarlos aunque sean idiotas
Última edición por Pevensie el Jue 07 Ago 2014, 8:57 pm, editado 1 vez
Pevensie
Re: the survival kit | nc.
chicas, estaré ausente, por favor continúen con la colectiva, esta novela es de todas y no quiero que se estaque. las quiero mucho a todas<33.
tobias.
Re: the survival kit | nc.
luego comento el cap de mess. y tranquila, cosi, mantendremos esto a flote. <3
khaleesi.
---
Re: the survival kit | nc.
Capitulo 006
Kat Bianchi & Josh Gray
CODE BY DEZZA.
Katia.
El intenso calor ya había empezado a ser una molestia para mí, siempre me perseguía por todos lados, aunque era lógico, ¿no?, estábamos en verano y todo parecía ser más feliz. Para mí, no. Las vacaciones no me salvaban de una madre obsesiva a los modales, no sé si cree que ella es la próxima reina de Inglaterra, y sí lo cree es mejor que empiece a bajar de esa nube. Cada vez que me ve, quiere que camine como toda una dama. ¿Quién en este mundo come hamburguesa con tenedor y cuchillo? Es insano, o al menos para mí.
Bajé las escaleras tratando de no hacer ningún ruido, para que mi mamá no tuviera que saludarme o decirme que mis modales son un asco. Bajé, bajé, y la última escalera hizo un crujido, oí el chillido de mi mamá de felicidad. Fulminé con la mirada la última escalera, y después le di una sonrisa falsa a mi madre. Ella canturreo la frase.
–Querida, ahora que sales a vacaciones pasaremos todo el tiempo juntas. Y lo mejor de todo ver los capítulos de “Cómo ser una dama correcta” Y ahora en Blu-Ray.–Mi mamá me abrazó con felicidad, y yo quería matarme ahí mismo. O al menos salir corriendo de esa casa. Todos en acá están locos.
–Mamá tengo que irme. Así que si no te importa....–Dije poniendo un pie sobre la puerta dispuesta a largarme. Pero, escuché un bufido de parte de mi mamá, y me di cuenta que estaba molesta, me gire y la mire.
–¿Y ahora, qué?–Ella puso una cara de indignación, y me di cuenta que entre más grosera no saldría de la casa, así que di una sonrisa falsa y me senté a su lado.
–¿Qué pasa, amada madre?–Traté de sentarme correctamente, pero lo que conseguí fue caerme del asiento. Mi madre soltó un grito de horror.
–Pequeña, estás bien?–Yo asentí con la cabeza. Y me paré.
–¿Dices, madre?–Ella me miró con los ojos brillando, y dio una sonrisa tonta. Yo estaba confundida.
–Pensaba que hoy me podías presentar a tu novio.–Mis ojos se salieron de mi sus órbitas, y me di cuenta que me había olvidado que le había dicho a mi madre que tenía novio, era eso o quemaba todos mis libros, en especial
“maravilloso desastre”.
–Ah, sí. Pero hoy no es el día indicado.–Me acerqué a la puerta lo más que pude, pero un gruñido de desaprobación me paró.
–¿No me estarás mintiendo, Katia? ¿Tienes novio, sí o no?–No podía dejar que quemara mis libros, asentí con la cabeza rápidamente.
–Claro, claro. ¿Cómo no, madre?–Ella me miró con ojos curiosos y me acusó con la mirada. Y puso los brazos a la altura de su pecho, y me amenazó con el dedo.
–Si no me estás diciendo la verdad, sabré. Hoy recojo a tu novio y a ti.–Abrí los ojos, no, no, no.
–¿Q-que? No, no yo tengo mi auto. No te tienes que preocupar, sabia madre.–Ella rodó los ojos.
–Que tengas un lindo día, hija. Te recojo más tarde.–Me sacó de la casa, genial.
Al llegar al colegio, volteé los ojos. También odiaba ir al colegio. Hay veces que pienso que todo sería mejor si dejo de estudiar y me dedico a vender chicles en las calles, y vivir bajo un puente; la verdad, el sueño de todos.
La primera hora era lo peor, historia. A ese profesor no se le entendía, era mejor que estuviera haciendo lo que todos los viejos hacen a su edad; jugar bingo y dormir todo el día. No balbucear palabras sobre la segunda guerra mundial y después dormirse sobre el escritorio derramando baba.
–Hoy hablaremos queridos jóvenes, sobre la madre Teresa, un ejemplo para todos.–Lo primero que pensé fue, taparme los oídos y después salir fuera del salón. Pero era inútil, tocaba esperar a que el profesor se durmiera. Me recosté sobre el escritorio y después sentí una nota me pegaba levemente sobre la espalda. Volteé y me di cuenta que había sido Josh, ese imbécil me jodía la vida cada vez que podía.
Abrí la nota, decía: “Linda tanga, Bianchi”.
¿De qué mierda hablaba? Después me di cuenta, no me había subido bien los pantalones dejando descubierta mi ropa interior. Me giré con rabia y le mostré el dedo de la mitad y con un susurro dije “Pudrete, Gray”
Era hora de irme, el profesor se había quedado dormido. Era ahora o nunca, todos los estudiantes con cautela se hicieron por la puerta y la abrieron, después todos salieron afuera. Antes que me fuera, una ira entró sobre mí cuando sentí una mano en el culo.
–Hijo de.. Me vuelves a tocar y te juro que te pateo el trasero.–Josh se rió, y después se acercó hacia mi oído.
–El rojo vuelve locos a los hombres.–Se me erizó la piel, y después se vino un agudo pensamiento sobre mi cabeza, ¿de qué está hablando?. Me di cuenta de qué, era mi tanga, era roja. Lo cogí de la oreja y lo puse sobre el locker.
–Eres un hijo de la..–Mi voz se interrumpió cuando escuché una voz familiar, era mi mamá. Mierda, mierda. ¿Que hacía acá?
–Oh, Katia. ¿Dónde estás, querida?–Josh me miraba confundido, y yo lo fulminé con la mirada. Le dije con los labios que se callará. La voz de mi madre empezaba a ser más audible, y cada vez se acercaba más. Tomé un poco de aire, nunca que pensé que fuera a hacer esto. Pegué mis labios junto a los de ese imbécil, y él hizo un gesto de confusión y después me cogió de la cintura, yo gruñí sobre sus labios. Después el entró sobre mi boca, sin ningún permiso; típico de él. Traté que el beso fuera suave y cariñoso, pero el me empezó a besar con una hambre voraz como si nos fuéramos a acostar sobre el piso. Oí un suspiró de parte de mi madre, escuché un “entonces no me estaba mintiendo”. Fue algo estúpido, no podía despegar mis labios sobre los de él, eran tan cálidos tan..–Kat, hija mía.–Tan hora de alejarme de sus labios. Cuando me separé estaba desconcertada al igual que él, el beso había sido.. no sé, especial. ¡No, no! Eso nunca.
–Madre.–Dije volviendo de la luna a la tierra otra vez. Ella dio un grito de emoción.
–¿Él es tu novio, querida?–Yo tragé en seco, Josh estaba confundido.
–¿Nov..?–Lo pellizque por detrás y él asintió.
–Sí, sí, sí. Novio, soy su novio. Su novio.–Dijo marcando las palabras para que me escuchará y lo dejará de pellizcar. Mi madre le besó ambas mejillas.
–¡Oh, querido! Nunca pensé que mi hija tuviera un hijo tan guapo como tú.–Fruncí el ceño.
–¿Qué quieres decir mamá? ¿Qué soy un alien?–Ella rodó los ojos.
–Claro que no, querida. Sólo que tu humor ahuyenta a los chicos guapos. Siempre de mal genio y ese idioma sarcástico.–Yo bufé, y después oí a Josh hablar.
–Es un alago, señora Bianchi. Pero eso es lo que más me atrae de ella, su mal genio. Es tan sexi.–Lo fulminé con la mirada, y después volví a sentir como su mano apretaba mi trasero. Cogí mi mano y la estampé en su cara. Estaba furiosa.
–¡Querida! ¡Los novios no hacen eso!–Me di cuenta de lo que había echo. Solté una risa nerviosa.
–¿No? Digo, es un juego que hacemos los dos. Yo le pegó y después le doy un beso en la mejilla.–Acerqué mis labios a su mejilla, ¿Oh, por qué Dios? ¿Qué hice para merecer esto? Volví a dar una sonrisa.
–Acuérdense que pasaré a recogerlos, quiero saber más de ti.–Señaló a Josh, y después salió del pasillo. Solté un suspiro.
–¿Ahora soy tu novio?–Rodé los ojos. Y me apoyé sobre el casillero.
–¡Por favor, Gray! Finge que eres mi novio, haré lo que sea.–El levantó una ceja curioso.
–¿Lo que sea?–Asentí con la cabeza. El alzó la ceja otra vez con cierta diversión.
–Quiero sexo salvaje contigo.–Le pegué en el hombro, y me abalancé sobre él. Quería pegarle tanto hasta que le sangrara la carota.
–Eres un hijo de perra. Maldito imbécil.–Le pegué una cachetada, y salí de ahí con mi maldito orgullo. Cuando iba por el camino, vi a Mackienzie pasar con una sonrisa en la cara, seguro era por su novio. Bufé, mientras ella me abrazaba.
–¡Katy, Kat! ¡Tengo buenas noticias!–Yo rodé los ojos.
–Te dije que odio que me llames Katy. ¿Cuáles son esas increíbles noticias? ¿Tu novio y tú se van a casar?–Dije no dandole tanta importancia al asunto.
–Iremos de campamento. ¿No te parece genial?–Yo asentí, pero después la miré.
–Iremos, nuestras amigas y tú, cierto?–Ella negó con una sonrisa en la cara.
–Ustedes, y los amigos de Aaron.–La pu.. No tenía ganas de decir groserías e hice un gesto de desagrado.
–¿Esos imbéciles? ¡En especial ese maldito de Josh!–Bufé, y ella se fue tirando besos por los aires.
–Sabes que te amo.–Y se fue.
–Lo dudo.–Balbuceé.
Le mande un mensaje a mi mamá, diciendo “Mamá, Mac me invitó de campamento”. Después de unos segundos, recibí respuesta “¿Mac? ¿La compañía de computadores? ¡Claro que sí! ¿Puedo ir contigo?, rodé los ojos y después le escribí. “¡Mamá! ¡Mackenzie! ¡Mi amiga!” Después unos segundos otra respuesta. “Oh.. ¿Irá tu novio?”, solté un suspiro y dije “sí, supongo”, Ella dijo "¡Claro que sí! ¡Vayan! Pero espera, no quiero ser abuela tan joven.” Al ver la respuesta no tuve más remedio que guardar el celular, y después bufar. ¡Iría de campamento, yupi!
Josh.
Primero había sido la tanga, ya hora me estaba besando. Puede que ahora este prestando sus servicios a gente necesitada; si era así yo era muy necesitado. Mientras la besaba no pude dejar de sentir esas ansias de besarla hasta que me muriera. Era estúpido un comentario estúpido.
Me encantaba joder a esa loca cabra, siempre que se ponía brava me daban unas ganas de desnudarla con la mirada. Cuando me separé de ella me di cuenta que ahora salía con ella, loca estúpida. Le mentía a su mamá por esa manía de que no le bote su libro “billy disaster” Algo así, nunca he entendido ese libro. Cuando le toqué el culo, se puso loca como una cabra o más bien el demonio en persona. Siempre la veía así, así que no fue nuevo para mí. Cuando se fue me limité a ir a la parte de afuera del colegio, saqué un cigarillo y empecé a fumar. Esto de verdad me calmaba como nada en el mundo. Me relajaba y me hacía sentirme más vivo; una frase irónica, no? Pero era cierto, me hacía sentir solo, y en paz. Una rubia se acercó a mí, y empezó a coquetear, yo le sonreía encantado, cuando estaba apunto de besarla y llevarla a mi cuarto, apareció la mamá de la cabra.
–¡Querido, querido! Espera..–Aparte a la rubia de mi regazo y ella hizo un puchero.
–Señora Bianchi.–Dije. Ella sonrió, y me besó una de las mejillas.
–Quería decirte que me parece que hacen una hermosa pareja tú y mi hija. ¡Que hermoso que vayan a acampar los dos, y sus amigos, claro!–Fruncí el ceño, y asentí mientras ella se daba la vuelta para irse. La rubia frunció el ceño y me miró.
–¿Andas con la zorra de Bianchi?–Yo negué, pero antes de decir algo, Aaron apareció detrás de mí.
–¿Llamas a Bianchi zorra? Mientras tú te has acostado con la mayoría de hombres de este Instituto.–Ella se fue indignada. Y salió corriendo.
–¿Qué haces, Aaron? Pensaba tirarmela más aurita.–Él hizo un gesto de desagrado, y me miró.
–Eres asqueroso, Josh. Venía a decirte que nos vamos de campamento.–Yo asentí.
–¿Quiénes? ¿Nosotros y las insufribles amigas de tu novia?–Él asintió.
–Estará Kat, sabes que te gustará.
–¿La cabra? No me importa en absoluto, pero iré.–Cogió su teléfono y le marcó a Mackenzie si no estaba mal.
–Sí, irán. ¡Muy bien! Te amo, cuelga tú, no..–Rodé los ojos. Y cogí su teléfono.
–Hasta luego, mac.–Colgué. Y me fui de ahí.
- Abrir.:
- Siendo honesta este capítulo no me impresionó mucho, aparte el p.o.v de Josh es más corto que el de Kat. Bueno no sé, perdonen faltas de ortografía apenas estoy corrigiendo mis errores. Perdón la demora y se que hay mucho dialogo en una parte. Trataré de corregir eso.
deutch.
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Dom 03 Nov 2024, 9:16 pm por hange.