Conectarse
Últimos temas
miembros del staff
Beta readers
|
|
|
|
Equipo de Baneo
|
|
Equipo de Ayuda
|
|
Equipo de Limpieza
|
|
|
|
Equipo de Eventos
|
|
|
Equipo de Tutoriales
|
|
Equipo de Diseño
|
|
créditos.
Skin hecho por Hardrock de Captain Knows Best. Personalización del skin por Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
"Amor en Horas de Trabajo"-(Nick y Tu)
O W N :: Archivos :: Novelas Terminadas
Página 9 de 16. • Comparte
Página 9 de 16. • 1 ... 6 ... 8, 9, 10 ... 12 ... 16
Re: "Amor en Horas de Trabajo"-(Nick y Tu)
chicas me olvide del cap sorry,
ahora no puedo subirles porque son casi las 9 de la noche y me estoy aprontando
para resivir la navidad con mi familia, el 25 de noche o el 26 subo capitulo ok?
besotes
FELIZ NAVIDAD A TODAS!!
y pasenla GENIAL :D :D :D
" alt="" />
ahora no puedo subirles porque son casi las 9 de la noche y me estoy aprontando
para resivir la navidad con mi familia, el 25 de noche o el 26 subo capitulo ok?
besotes
FELIZ NAVIDAD A TODAS!!
y pasenla GENIAL :D :D :D
" alt="" />
maru!!
Re: "Amor en Horas de Trabajo"-(Nick y Tu)
Capítulo 9
Debería haber imaginado que Nick encandilaría a Dora y a Emily. Era un seductor, desde luego. Cuando entraron en la cocina, con la niña recién bañada, tenía a Dora comiendo de su mano.
En cuanto a su hija... el propio Santa Claus no podría haberla emocionado más. Emily insistió en sentarse al lado de Nick, que la trataba como no la había tratado nadie. Como si fuera una princesita.
Pero la preocupación de __(Tn) por si su hija se encariñaba demasiado con un hombre que sólo iba a estar temporalmente en su vida desapareció cuando vio lo contenta que estaba. Cuando llegó la hora de irse a la cama, mucho más tarde de lo normal, Emily le suplicó a Nick que le leyese un cuento. Y lo hizo. Muy bien, además.
Naturalmente, cuando terminó el primer cuento, le pidió otro. Herencia familiar, pensó __(Tn), las Denton siempre querían más.
Nick le leyó otro cuento. Y otro más hasta que, por fin, se quedó dormida.
—Ya puedes dejar de leer —murmuró __(Tn) desde la puerta, donde había estado observando.
Nick levantó la mirada.
—¿Qué? Pero tengo que descubrir si Willie Wombat encuentra a su padre —protestó, con un brillo burlón en los ojos y la más encantadora de las sonrisas.
__(Tn) apartó la mirada.
—Muy bien. Llévate a Willie Wombat al saloncito y termina el cuento mientras yo la arropo. Enseguida te acompaño a la puerta.
—¿No me invitas a un café?
—No. Es tarde y mañana tengo que ir a trabajar. Y tú también.
—Soy el jefe. Puedo llegar tarde.
—Pero yo no. Estoy a prueba durante tres meses.
—¿Quién ha dicho eso?
—Michelle. Aparentemente, es una regla de Harry Wilde. Si un nuevo empleado no lo hace bien durante los primeros tres meses, le dan la papeleta de despido.
—No sabía eso —murmuró Nick—. Pero, claro, Harry no esperaba que yo tuviera que contratar a nadie... ¿Lo de estar a prueba te preocupa?
—No, sé hacer mi trabajo. No hay problema.
—Estoy seguro de que no habrá ningún problema.
Nick se incorporó, mirando la camita que había al lado de la de Emily. Pero __(Tn) lo empujó hacia el saloncito. Se alegraba de compartir habitación con su hija... y también de que su cama fuera individual. Eso eliminaba tentaciones.
—No te pongas demasiado cómodo —le advirtió, burlona—. Iré enseguida.
Nick no contestó, pero la miró de una forma...
No debería haber dicho nada. Durante la cena apenas había abierto la boca porque Dora y Emily se encargaron de animar la conversación. Y Nick, claro. Cuánto hablaba ese hombre.
El problema era que siempre contaba cosas interesantes. Y divertidas. Pero no había hablado de sí mismo. Estaba concentrado en Dora y en su hija.
Su casera debía haberle contado la historia de su vida mientras hacía la cena, desde su infancia hasta la muerte de su marido y luego los años cuidando de su madre. Incluso le había contado lo disgustada que estaba con su hermano por no haberla ayudado a cuidar de su madre, algo que ni siquiera le había contado a __(Tn).
Emily le hizo una descripción, minuto a minuto, de lo que hacía en la guardería, deteniéndose de cuando en cuando para recibir una palabra de ánimo o de consuelo. Y Nick estaba muy atento.
__(Tn) sonrió mientras tapaba a su hija con el edredón. Menuda gamberrilla. Y una coquetuela, además, pestañeando como una muñeca mientras hablaba con Nick.
__(Tn) no había pestañeado ni una sola vez en toda la noche. Pero, a pesar de haber mantenido las distancias, seguía afectándola. Una sonrisa aquí, una miradita allá...
Ah, sí, la afectaba. La hacía desear cosas que no quería desear. No sólo sexo, más. Mucho más.
Era un demonio, tentándola, atormentándola. Sabía que debía resistirse, pero temía que fuera una batalla perdida. Lo único que podía hacer era salvar su orgullo no rindiéndose enseguida.
__(Tn) sospechaba que Nick Jonas siempre había ganado con demasiada facilidad. Le sentaría bien tener que esforzarse.
Se preguntó entonces cuántas mujeres habría habido en su vida desde que se divorció. Y, por supuesto, no pensaba contarle que él era el primer hombre al que había mirado desde Lyall...
—Ya está —dijo bruscamente, entrando en el Saloncito—, Vámonos.
Nick estaba sentado en el sofá, frente a la televisión. Se había quitado la chaqueta y la corbata y parecía muy cómodo. Como si estuviera en su casa.
__(Tn) sintió un escalofrío.
—Tienes una hija muy inteligente —dijo Nick, levantándose—. Y encantadora, además.
—Al contrario que su madre, ¿no? —sonrió ella, cruzándose de brazos.
—Bueno, yo sospecho que la madre puede ser incluso más encantadora que la hija —contestó Nick, acercándose un poco más—. En las circunstancias adecuadas, claro.
—No me toques —le advirtió __(Tn).
Nick dio un paso atrás, sorprendido.
—Te estás portando de una forma absurda, ¿no te parece?
—No pienso acostarme contigo estando mi hija en la habitación de al lado.
—Yo no había pensado acostarme contigo. Pero quizá un beso... o dos.
—Los hombres como tú no se contentan con un beso.
—¿Los hombres como yo? Sospecho que eso no es un halago. Ah, ya entiendo, me has colocado junto con los otros divorciados que buscan un trofeo. O quizá con los canallas de los que me has hablado antes, los que creen que una madre soltera es una mujer desesperada. ¿Tengo razón?
—Más o menos.
—Pues te equivocas. Yo no soy así.
—Eso dices tú —murmuró __(Tn).
—No he estado con una mujer desde que me divorcié —suspiró Nick.
Ella parpadeó, sorprendida. Había pasado un año desde que se divorció. No era posible. Un hombre como él, tan guapo, tan viril. Las mujeres se le habrían echado encima.
—¿Por qué? ¿No te interesa el sexo?
Nick rió, bajito.
—Ya te gustaría.
—Pero...
—Después del fracaso de mi matrimonio me volví receloso y muy selectivo. No me apetecía darme un revolcón con una desconocida, quería una relación de verdad con una mujer inteligente que quisiera las mismas cosas que yo.
Una mujer soltera, interpretó __(Tn). Una que le daría compañía y sexo, pero no esperaría que hiciera el tradicional papel de marido y padre de sus hijos.
Pero una madre soltera no podría aceptar eso. Al menos, de forma permanente.
—Y entonces, el viernes pasado, fue como si me golpeara un rayo —siguió Nick—. Apareciste tú y, de repente, me daba igual quién fueras. Sólo quería acostarme contigo, estar contigo, hacerte el amor apasionadamente.
__(Tn) apartó la mirada para que no viera el mismo deseo en sus ojos, pero él la obligó a mirarlo.
—Tú también deseas eso —dijo en voz baja—. No lo niegues. He visto el deseo en tus ojos. Y el miedo. Crees que voy a hacerte daño. A ti y a Emily. Pero no lo haré, te lo prometo. Me arrancaría el corazón antes de hacerte daño. Tú eres muy especial... y tu hija también. Confía en mí, no soy una mala persona. Bésame, __(Tn) Denton.
Ella no lo besó. Porque Nick la besó antes, sin esperar mucho para abrir sus labios y explorarla con la lengua. El contacto fue eléctrico, como un incendio que la devoraba por dentro. Sin pensar, Jessie enredó los brazos alrededor de su cuello, apretándose contra él.
Oyó un gemido ronco por parte del hombre, un gemido que era una réplica del suyo. El deseo de un contacto más directo, más profundo, era enorme, pero no podían estar más cerca. Estaban pegados el uno al otro, boca a boca, pecho a pecho, muslo a muslo.
Si no llevase vaqueros... una falda se podía levantar, unas braguitas se podían apartar. Podrían hacerlo allí mismo, de pie. Nunca lo había hecho de pie, nunca había pensado hacerlo así.
Pero lo pensaba ahora y se le doblaban las rodillas. ¿Lo habría notado él? ¿Era por eso por lo que la apretaba contra la encimera de la cocina?
__(Tn) instintivamente separé las piernas para que Nick se restregase contra ella, la fricción exquisita. Pronto estuvo gimiendo de deseo... rendida completamente.
—¡Mamá!
El grito de su hija la devolvió a la realidad.
—Ay, Dios mío. Emily...
La madre que había en ella era más fuerte que la mujer, incluso la mujer lasciva a la que Nick la había reducido. Disgustada consigo misma, se aparté y corrió al dormitorio.
—¿Qué pasa, cariño?
—He tenido una pesadilla —sollozó la niña—. Había un oso muy grande en la habitación... y me daba miedo.
En las pesadillas de su hija a menudo había osos. ¿Por qué habría tantos osos en los cuentos para niños?
—En Australia no hay osos, cariño mío —le explicó, por enésima vez—. Excepto en el zoo, claro. Y no debes tenerles miedo.
—¿Nick sigue aquí?
—Sí. ¿Por qué?
—El no dejará que venga el oso —dijo la niña, convencida.
__(Tn) levantó los ojos al cielo.
—Bueno, pues entonces no tienes que preocuparte, ¿no? Duérmete, cielo —murmuré, acariciando el pelito de su hija.
Emily cerró los ojos y se quedó dormida en unos segundos.
__(Tn) envidiaba esa habilidad. A veces se quedaba dormida en cuanto ponía la cabeza sobre la almohada. Ella nunca había dormido bien porque siempre le daba vueltas a todo... Y esa noche iba a dar muchas vueltas.
Pero estaba claro que luchar contra sus sentimientos por Nick era tarea inútil. Y más bien ridícula. Eran dos adultos y se deseaban. Muy bien, seguramente ella quería más de lo que él estaba dispuesto a ofrecer, pero... ¿qué podía hacer?
Ella siempre había sido una persona decidida, al contrario que su madre, para quien todo era un problema irresoluble. Y le gustaba su vida. Lyall fue un error de juicio, sí, pero las consecuencias de ese error le habían dado múltiples alegrías.
Tener una relación con Nick Jonas seguramente no era muy sensato pero, al fin y al cabo, era humana.
Después de comprobar que Emily estaba dormida, __(Tn) volvió al saloncito, decidida a aclarar las cosas.
Le sorprendió encontrar a Nick poniéndose la chaqueta.
—Lo siento, __(Tn) —murmuré, guardando la corbata en el bolsillo—. No quería llegar tan lejos. En serio. Pero ejerces sobre mí un efecto... aterrador.
__(Tn) arrugó el ceño.
—¿Aterrador?
Nick sonrió.
—No estoy acostumbrado a perder la cabeza. Me enorgullezco de ser una persona pausada, que lo controla todo. No suelo dejar las cosas a medias... y me he quedado a medias.
—Ah, ya. ¿Podrías esperar hasta el viernes?
El la miró, sorprendido.
—¿Quieres decir lo que yo creo que quieres decir?
—Supongo que sí.
—Vaya. Eso es mucho mejor que leer cuentos —sonrió Nick.
—He decidido que tienes razón. Estaba portándome de una forma absurda. Pero quiero que entiendas que esto no puede ir a ningún sitio. Yo no soy la mujer que buscas, Nick. Tengo a Emily, para empezar. Y un trabajo. Podríamos ser amigos y... amantes a tiempo parcial.
Ya estaba. Lo había dicho. Se había hecho cargo de su vida.
Nick no dijo nada. Se quedó mirándola, en silencio.
—Muy bien. Si eso es lo que quieres —murmuró por fin.
Ojalá supiera lo que estaba pensando. Y planeando, pensó Jessie. Algo en su expresión le decía que sus planes eran muy diferentes de los suyos.
—Por cierto, el viernes no podré dormir contigo. Tenemos desde las siete hasta las doce. Dora no puede encargarse de Emily después de medianoche.
—Podría contratar a una niñera —sugirió él.
—No, de eso nada. O Dora o nadie.
—Muy bien. No pienso discutir. Pero creo que estás a punto de convertirte en una madre superprotectora.
—Piensa lo que quieras. No voy a cambiar.
—Ya lo sé —sonrió Nick—. Admiro a las mujeres que saben lo que quieren.
—Y yo admiro a los hombres que respetan los deseos de una mujer.
—Lo recordaré.
Sí, pero ¿durante cuánto tiempo?, se preguntó Jessie.
Hasta el viernes, naturalmente. Ese era el objetivo del juego: llevársela a la cama. Después, Nick podría no ser tan complaciente.
Pero cruzaría ese puente cuando llegase a él.
Hasta entonce iba a costarle mucho pensar en algo que no fuera el viernes por la noche.
ESPERO QUE LES GUSTE EL CAP
Mañana subo otro :D
que pasen bien
besotes
COMENTEN
bye :D
Debería haber imaginado que Nick encandilaría a Dora y a Emily. Era un seductor, desde luego. Cuando entraron en la cocina, con la niña recién bañada, tenía a Dora comiendo de su mano.
En cuanto a su hija... el propio Santa Claus no podría haberla emocionado más. Emily insistió en sentarse al lado de Nick, que la trataba como no la había tratado nadie. Como si fuera una princesita.
Pero la preocupación de __(Tn) por si su hija se encariñaba demasiado con un hombre que sólo iba a estar temporalmente en su vida desapareció cuando vio lo contenta que estaba. Cuando llegó la hora de irse a la cama, mucho más tarde de lo normal, Emily le suplicó a Nick que le leyese un cuento. Y lo hizo. Muy bien, además.
Naturalmente, cuando terminó el primer cuento, le pidió otro. Herencia familiar, pensó __(Tn), las Denton siempre querían más.
Nick le leyó otro cuento. Y otro más hasta que, por fin, se quedó dormida.
—Ya puedes dejar de leer —murmuró __(Tn) desde la puerta, donde había estado observando.
Nick levantó la mirada.
—¿Qué? Pero tengo que descubrir si Willie Wombat encuentra a su padre —protestó, con un brillo burlón en los ojos y la más encantadora de las sonrisas.
__(Tn) apartó la mirada.
—Muy bien. Llévate a Willie Wombat al saloncito y termina el cuento mientras yo la arropo. Enseguida te acompaño a la puerta.
—¿No me invitas a un café?
—No. Es tarde y mañana tengo que ir a trabajar. Y tú también.
—Soy el jefe. Puedo llegar tarde.
—Pero yo no. Estoy a prueba durante tres meses.
—¿Quién ha dicho eso?
—Michelle. Aparentemente, es una regla de Harry Wilde. Si un nuevo empleado no lo hace bien durante los primeros tres meses, le dan la papeleta de despido.
—No sabía eso —murmuró Nick—. Pero, claro, Harry no esperaba que yo tuviera que contratar a nadie... ¿Lo de estar a prueba te preocupa?
—No, sé hacer mi trabajo. No hay problema.
—Estoy seguro de que no habrá ningún problema.
Nick se incorporó, mirando la camita que había al lado de la de Emily. Pero __(Tn) lo empujó hacia el saloncito. Se alegraba de compartir habitación con su hija... y también de que su cama fuera individual. Eso eliminaba tentaciones.
—No te pongas demasiado cómodo —le advirtió, burlona—. Iré enseguida.
Nick no contestó, pero la miró de una forma...
No debería haber dicho nada. Durante la cena apenas había abierto la boca porque Dora y Emily se encargaron de animar la conversación. Y Nick, claro. Cuánto hablaba ese hombre.
El problema era que siempre contaba cosas interesantes. Y divertidas. Pero no había hablado de sí mismo. Estaba concentrado en Dora y en su hija.
Su casera debía haberle contado la historia de su vida mientras hacía la cena, desde su infancia hasta la muerte de su marido y luego los años cuidando de su madre. Incluso le había contado lo disgustada que estaba con su hermano por no haberla ayudado a cuidar de su madre, algo que ni siquiera le había contado a __(Tn).
Emily le hizo una descripción, minuto a minuto, de lo que hacía en la guardería, deteniéndose de cuando en cuando para recibir una palabra de ánimo o de consuelo. Y Nick estaba muy atento.
__(Tn) sonrió mientras tapaba a su hija con el edredón. Menuda gamberrilla. Y una coquetuela, además, pestañeando como una muñeca mientras hablaba con Nick.
__(Tn) no había pestañeado ni una sola vez en toda la noche. Pero, a pesar de haber mantenido las distancias, seguía afectándola. Una sonrisa aquí, una miradita allá...
Ah, sí, la afectaba. La hacía desear cosas que no quería desear. No sólo sexo, más. Mucho más.
Era un demonio, tentándola, atormentándola. Sabía que debía resistirse, pero temía que fuera una batalla perdida. Lo único que podía hacer era salvar su orgullo no rindiéndose enseguida.
__(Tn) sospechaba que Nick Jonas siempre había ganado con demasiada facilidad. Le sentaría bien tener que esforzarse.
Se preguntó entonces cuántas mujeres habría habido en su vida desde que se divorció. Y, por supuesto, no pensaba contarle que él era el primer hombre al que había mirado desde Lyall...
—Ya está —dijo bruscamente, entrando en el Saloncito—, Vámonos.
Nick estaba sentado en el sofá, frente a la televisión. Se había quitado la chaqueta y la corbata y parecía muy cómodo. Como si estuviera en su casa.
__(Tn) sintió un escalofrío.
—Tienes una hija muy inteligente —dijo Nick, levantándose—. Y encantadora, además.
—Al contrario que su madre, ¿no? —sonrió ella, cruzándose de brazos.
—Bueno, yo sospecho que la madre puede ser incluso más encantadora que la hija —contestó Nick, acercándose un poco más—. En las circunstancias adecuadas, claro.
—No me toques —le advirtió __(Tn).
Nick dio un paso atrás, sorprendido.
—Te estás portando de una forma absurda, ¿no te parece?
—No pienso acostarme contigo estando mi hija en la habitación de al lado.
—Yo no había pensado acostarme contigo. Pero quizá un beso... o dos.
—Los hombres como tú no se contentan con un beso.
—¿Los hombres como yo? Sospecho que eso no es un halago. Ah, ya entiendo, me has colocado junto con los otros divorciados que buscan un trofeo. O quizá con los canallas de los que me has hablado antes, los que creen que una madre soltera es una mujer desesperada. ¿Tengo razón?
—Más o menos.
—Pues te equivocas. Yo no soy así.
—Eso dices tú —murmuró __(Tn).
—No he estado con una mujer desde que me divorcié —suspiró Nick.
Ella parpadeó, sorprendida. Había pasado un año desde que se divorció. No era posible. Un hombre como él, tan guapo, tan viril. Las mujeres se le habrían echado encima.
—¿Por qué? ¿No te interesa el sexo?
Nick rió, bajito.
—Ya te gustaría.
—Pero...
—Después del fracaso de mi matrimonio me volví receloso y muy selectivo. No me apetecía darme un revolcón con una desconocida, quería una relación de verdad con una mujer inteligente que quisiera las mismas cosas que yo.
Una mujer soltera, interpretó __(Tn). Una que le daría compañía y sexo, pero no esperaría que hiciera el tradicional papel de marido y padre de sus hijos.
Pero una madre soltera no podría aceptar eso. Al menos, de forma permanente.
—Y entonces, el viernes pasado, fue como si me golpeara un rayo —siguió Nick—. Apareciste tú y, de repente, me daba igual quién fueras. Sólo quería acostarme contigo, estar contigo, hacerte el amor apasionadamente.
__(Tn) apartó la mirada para que no viera el mismo deseo en sus ojos, pero él la obligó a mirarlo.
—Tú también deseas eso —dijo en voz baja—. No lo niegues. He visto el deseo en tus ojos. Y el miedo. Crees que voy a hacerte daño. A ti y a Emily. Pero no lo haré, te lo prometo. Me arrancaría el corazón antes de hacerte daño. Tú eres muy especial... y tu hija también. Confía en mí, no soy una mala persona. Bésame, __(Tn) Denton.
Ella no lo besó. Porque Nick la besó antes, sin esperar mucho para abrir sus labios y explorarla con la lengua. El contacto fue eléctrico, como un incendio que la devoraba por dentro. Sin pensar, Jessie enredó los brazos alrededor de su cuello, apretándose contra él.
Oyó un gemido ronco por parte del hombre, un gemido que era una réplica del suyo. El deseo de un contacto más directo, más profundo, era enorme, pero no podían estar más cerca. Estaban pegados el uno al otro, boca a boca, pecho a pecho, muslo a muslo.
Si no llevase vaqueros... una falda se podía levantar, unas braguitas se podían apartar. Podrían hacerlo allí mismo, de pie. Nunca lo había hecho de pie, nunca había pensado hacerlo así.
Pero lo pensaba ahora y se le doblaban las rodillas. ¿Lo habría notado él? ¿Era por eso por lo que la apretaba contra la encimera de la cocina?
__(Tn) instintivamente separé las piernas para que Nick se restregase contra ella, la fricción exquisita. Pronto estuvo gimiendo de deseo... rendida completamente.
—¡Mamá!
El grito de su hija la devolvió a la realidad.
—Ay, Dios mío. Emily...
La madre que había en ella era más fuerte que la mujer, incluso la mujer lasciva a la que Nick la había reducido. Disgustada consigo misma, se aparté y corrió al dormitorio.
—¿Qué pasa, cariño?
—He tenido una pesadilla —sollozó la niña—. Había un oso muy grande en la habitación... y me daba miedo.
En las pesadillas de su hija a menudo había osos. ¿Por qué habría tantos osos en los cuentos para niños?
—En Australia no hay osos, cariño mío —le explicó, por enésima vez—. Excepto en el zoo, claro. Y no debes tenerles miedo.
—¿Nick sigue aquí?
—Sí. ¿Por qué?
—El no dejará que venga el oso —dijo la niña, convencida.
__(Tn) levantó los ojos al cielo.
—Bueno, pues entonces no tienes que preocuparte, ¿no? Duérmete, cielo —murmuré, acariciando el pelito de su hija.
Emily cerró los ojos y se quedó dormida en unos segundos.
__(Tn) envidiaba esa habilidad. A veces se quedaba dormida en cuanto ponía la cabeza sobre la almohada. Ella nunca había dormido bien porque siempre le daba vueltas a todo... Y esa noche iba a dar muchas vueltas.
Pero estaba claro que luchar contra sus sentimientos por Nick era tarea inútil. Y más bien ridícula. Eran dos adultos y se deseaban. Muy bien, seguramente ella quería más de lo que él estaba dispuesto a ofrecer, pero... ¿qué podía hacer?
Ella siempre había sido una persona decidida, al contrario que su madre, para quien todo era un problema irresoluble. Y le gustaba su vida. Lyall fue un error de juicio, sí, pero las consecuencias de ese error le habían dado múltiples alegrías.
Tener una relación con Nick Jonas seguramente no era muy sensato pero, al fin y al cabo, era humana.
Después de comprobar que Emily estaba dormida, __(Tn) volvió al saloncito, decidida a aclarar las cosas.
Le sorprendió encontrar a Nick poniéndose la chaqueta.
—Lo siento, __(Tn) —murmuré, guardando la corbata en el bolsillo—. No quería llegar tan lejos. En serio. Pero ejerces sobre mí un efecto... aterrador.
__(Tn) arrugó el ceño.
—¿Aterrador?
Nick sonrió.
—No estoy acostumbrado a perder la cabeza. Me enorgullezco de ser una persona pausada, que lo controla todo. No suelo dejar las cosas a medias... y me he quedado a medias.
—Ah, ya. ¿Podrías esperar hasta el viernes?
El la miró, sorprendido.
—¿Quieres decir lo que yo creo que quieres decir?
—Supongo que sí.
—Vaya. Eso es mucho mejor que leer cuentos —sonrió Nick.
—He decidido que tienes razón. Estaba portándome de una forma absurda. Pero quiero que entiendas que esto no puede ir a ningún sitio. Yo no soy la mujer que buscas, Nick. Tengo a Emily, para empezar. Y un trabajo. Podríamos ser amigos y... amantes a tiempo parcial.
Ya estaba. Lo había dicho. Se había hecho cargo de su vida.
Nick no dijo nada. Se quedó mirándola, en silencio.
—Muy bien. Si eso es lo que quieres —murmuró por fin.
Ojalá supiera lo que estaba pensando. Y planeando, pensó Jessie. Algo en su expresión le decía que sus planes eran muy diferentes de los suyos.
—Por cierto, el viernes no podré dormir contigo. Tenemos desde las siete hasta las doce. Dora no puede encargarse de Emily después de medianoche.
—Podría contratar a una niñera —sugirió él.
—No, de eso nada. O Dora o nadie.
—Muy bien. No pienso discutir. Pero creo que estás a punto de convertirte en una madre superprotectora.
—Piensa lo que quieras. No voy a cambiar.
—Ya lo sé —sonrió Nick—. Admiro a las mujeres que saben lo que quieren.
—Y yo admiro a los hombres que respetan los deseos de una mujer.
—Lo recordaré.
Sí, pero ¿durante cuánto tiempo?, se preguntó Jessie.
Hasta el viernes, naturalmente. Ese era el objetivo del juego: llevársela a la cama. Después, Nick podría no ser tan complaciente.
Pero cruzaría ese puente cuando llegase a él.
Hasta entonce iba a costarle mucho pensar en algo que no fuera el viernes por la noche.
ESPERO QUE LES GUSTE EL CAP
Mañana subo otro :D
que pasen bien
besotes
COMENTEN
bye :D
maru!!
Re: "Amor en Horas de Trabajo"-(Nick y Tu)
no pude subirles cap ayer y ahora me paso para lo siguiente...
FELIZ AÑO NUEVOOOOOOOOOOOOOO!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! :D :D :D
Les deseo lo mejor del mundo en este nuevo año las quiero besotes enormes despues subo cap
byee ;)
FELIZ AÑO NUEVOOOOOOOOOOOOOO!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! :D :D :D
Les deseo lo mejor del mundo en este nuevo año las quiero besotes enormes despues subo cap
byee ;)
maru!!
Re: "Amor en Horas de Trabajo"-(Nick y Tu)
Wow, eso si que es genial...quedé sin palabras, tienes que seguir <3
Annabeth
Página 9 de 16. • 1 ... 6 ... 8, 9, 10 ... 12 ... 16
O W N :: Archivos :: Novelas Terminadas
Página 9 de 16.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.
Miér 20 Nov 2024, 12:51 am por SweetLove22
» My dearest
Lun 11 Nov 2024, 7:37 pm por lovesick
» Sayonara, friday night
Lun 11 Nov 2024, 12:38 am por lovesick
» in the heart of the circle
Dom 10 Nov 2024, 7:56 pm por hange.
» air nation
Miér 06 Nov 2024, 10:08 am por hange.
» life is a box of chocolates
Mar 05 Nov 2024, 2:54 pm por 14th moon
» —Hot clown shit
Lun 04 Nov 2024, 9:10 pm por Jigsaw
» outoflove.
Lun 04 Nov 2024, 11:42 am por indigo.
» witches of own
Dom 03 Nov 2024, 9:16 pm por hange.