how to catch interactive walls.

Hace muchos años -joder, está frase suena tan cliché- el mundo era invadido por los demonios, de apariencia humana y de ojos tan profundos que podías observar el origen de éste. Los demonios -lamento tener que repetir la palabra una y otra vez- esparcían su miedo, divertidos con la cobardía de los humanos. A los más afortunados, los hacían prisioneros y les mantenían sin comida ni agua, enjaulados en grandes construcciones abandonadas a través del tiempo. Los desafortunados simplemente eran atacados, y devorados por los mismos demonios.

La especie humana, aterrada y totalmente acobardada, se escondía, la reacción normal, duh. Cuando un día, simplemente se cansaron de huir y de ser atrapados por los demonios.

La verdad era, que ya hacían muchos humanos que habrían intentado atacarles con las más grandiosas armas creadas por el hombre.

Pero aquello no le hacía ningún daño a los demonios.

Contra ellos, no se podría pelear, golpear, disparar ni mucho menos explotarles. Así que las mejores y más inteligentes mentes científicas y de la estrategia se reunieron y decidieron encerrarles.

Aquella batalla continuó durante años. Ya no quedan humanos que logren recordar exactamente que ocurrió, la gente se guía de la escritura y de dibujos casi indescifrables sobre ello.

Pero eso fue lo que libero a la humanidad.

Y los demonios podrían estar pudriéndose bajo tierra. En sus jaulas.

El mundo sigue la vida, mejoran la tecnología y todo se simplifica para el ser humano.

Y, claramente, el caos se debe desatar.

Los demonios logran escapar -no hay demasiados datos sobre cómo lo logran- simplemente están allí. Fuera, atacando y cobrando venganza.


Entonces, es un día totalmente normal, en una biblioteca pública, y hay diferentes tipos de personas. Cuando alguien -una mujer de 36 años- encuentra la peculiar guía.

Extrañada, se acerca a la bibliotecaria y le toca el hombro. Cuando la mujer da media vuelta, no es ella. Es un demonio.

¿Creen que está bien eso? Por favor, díganme que piensan sobre ello.