Re: Venganza Equivocada HOT (Ziall, Larry)

por **ParadojaViva** Dom 19 Ene 2014, 1:49 pm

Gaby_PaylikHST escribió:Sigueeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeeee
porfaaaaa estoy que muero, Dios pobre
Hazza. :c tenia ganas de entrar y darle un buen golpe a josh y a zayn, estaba como
que: Zayn no lo hagas despues no podras estar con NI :0 y Liam no me esperaba eso
mas le vale a Josh que se calle y no diga
NADA ;)

Bye
Gabriela

HOOOOOOOOOOOOOOOOOOOLA

La seguire <3 y sip subire 2 capitulos a compensacion, ugh, yo tambien pero que puedo hacer. En ocasiones los personajes se mandan a si solos. JAJAJAJ lo se, pero NTP ZIALL 4-EVER <3

<3

por **ParadojaViva** Dom 19 Ene 2014, 1:51 pm

thebraveisLouis escribió:Este fic se ve interesante :) habra mpreg? uyy me encanta eso, ojala haya bottom Louis en Larry xD

JOJOJOJOJO si, <3 En esta historia HARRY TOPS <3

por **ParadojaViva** Dom 19 Ene 2014, 1:52 pm

Alexis4Life escribió:Lo has vuelto a hacer paradojita
Siguela pronto
Bye Bye

:D Que bueno que te guste en momentos la seguire <3

por **ParadojaViva** Dom 19 Ene 2014, 1:53 pm

AbbyHoranPayne escribió:Realmente se ve muy interesante y llamativoesta novee siguela pronto porfiis eres una muy buena escritora baay girl besos y abrazos desde Chile!

HOLA BIENVENIDA!

:D La seguire en momentos y muchas gracias es lindo que lo digas <3

Awww.. besitos desde mexico!

por **ParadojaViva** Dom 19 Ene 2014, 1:55 pm

CAPITULO 03

*continuación del capítulo 1*

--No Lou, no quiero fiesta, por favor apresúrate se nos hace tarde. -dijo Niall replicando.

Lo habían obligado a levantarse temprano, lo acarrearon por toda la casa y ¿Para qué? Para que el castaño lo haga llegar tarde de todos modos. ¡HA! No lo creía. «Si no se apresura lo dejare y tomare un taxi» pensó, no obstante no osó a decirle.

Niall salió por la puerta principal de su casa; era hermosa no había duda; blanca con unos enormes poste estilo romano antiguo. En realidad era una mansión, pero a él le gustaba decir que era una casa normal; esta nunca fuese su hogar.

Se encaminaron hacia su Audi; un viejo regalo de cumpleaños que sus papas del año pasado a pesar de no tener la mínima edad legal para poder sacar su carnet.

--Tranquilízate duende, estas exagerando demasiado además aún tenemos 30 minutos.

--Sí, pero si solo quedan 30 minutos eso significa que manejaras muy atropellado, y tomando en cuenta que te costó 9 intentos sacar tu carne y que aun así conduces horrible, no quiero ser grosero, pero siento que Bob Esponja conduce mejor que tú. No quiero ir contigo en lo que eso que posiblemente se convierta en mi ataúd movible. -Louis tenía que estar loco si realmente creía que porque sea el auto más seguro del mundo garantiza que no van a chocar.

--Ugh, pero que marica me saliste. -dijo Louis mientras le abría la puerta. --Entre por favor su majestad, -dijo haciendo una reverencia dramatizada. --No se moleste en bajar los cristales, que solo por usted pondré el aire acondicionado, no sea que los impuros aires de la carretera dañen su peinado mi princeso. -y le obsequio a Niall su maldita sonrisa de lado.

«Petardo, pincha floja... Grrr, espero que su trasero engorde con las hamburguesas que se coma».

Niall se subió enojado con él al auto, la escuela quedaba a 5 km, era un poco cerca si tomabas de referencia la universidad que estaba a 15 km.

Una vez adentro trato de cambiar de estación pero Louis le pego en la mano. « ¡Que maldito, pero si es mi carro! ¡Mío!»

--Mantén tus manos quietas duende. -sonrió con suficiencia.

--Es mi carro. ¡Mío Lou! -le recordó el rubio.

--Cunado aprendas a conducir decides la estación de radio, por el momento solo puedes admirarme. -Niall solo bufo exasperado, detestaba cuando su primo se ponía en el plan 'soy mejor que tú y lo sabes' «lo detesto, ugh ojala que cuando compre su desayuno hoy en el comedor, le salga podrido, se lo merece.» --Aunque cuidado y te enamoras de lo que vez, -continuo- ya sabes que eso del incesto no se me da. -el castaño volteo a ver al rubio quien se encontraba completamente rojo ya que su comentario le había hecho recordar su incidente en el baño hace poco.

--Lo-Louis, deja de decir esas cosas. -percibía como le ardían las mejillas, cruzo los dedos. «Que no lo note, que no lo note, que no lo note, por favor que no lo note».

--Awww... Pero miren que leeendooo, se puso otra vez el pequeñín sonrojado, ¡Pero qué bello! -como le molestaba a Niall que dijeran eso, o que lo notaran. Pero aún más porque cuerpo solo reaccionaba a sonrojarse.

«Ugh hay días como este en el que desearía ser negro».

Niall se cruzó de brazos y ambos siguieron la mayoría del camino en silencio hasta que ya estaban varias cuadras cerca del colegio, Louis hablo.

--¿Qué planeas hacer este año para tu cumpleaños? –soltó el castaño sin más preámbulos.

--No, no planeo nada Lou, entiende que no quiero.

--Vamos, solo se cumplen una vez 17 es decir, ya estas más cerca de ser mayor de edad, -lo volteo a ver, la mayoría de edad era a los 21.

« ¿De qué cojones estaba hablando?»

--En otros países claro está, además aún falta mucho te puedes arrepentir. -dijo lo último en referencia a la fiesta que realmente no deseaba.

Louis estaciono el auto cerca de la entrada, no se les hizo difícil encontrarlo ya que la escuela tenía un concurso en donde el espacio especial que solía pertenecer a los visitantes de les daba cada año a el alumno que donara más a caridad y recolectara firmas, Niall había participado el año pasado solo porque Louis lo había obligado.

No esperaba ganar el puesto y mucho menos una mención por haber sido el chico que más dono a caridades en la historia de la escuela. Y eso que el sentía que estaba siendo tacaño.

Al inicio todos lo vieron mal porque pensaron que era todo por el puesto, pero cuando se enteraron que él ya lo hacía con anterioridad a nombre de la escuela y sin decir nada.

Se callaron.

No tenían nada contra que protestar con el rubio. Además, Louis había sido el que consiguió las firmas, Niall solo continuo algo que ya hacía.

---No, créeme nunca recibo lo que quiero además ese día tal vez esté ocupado. -dijo adentrándose a la escuela en busca de su casillero junto al de su primo.

--Vamos Niall, no me voy a creer esa de que no quieres una fiesta ¡Todos siempre quieren una! Hay que compensar la del año pasado que te deje hacer lo que querías y el resultado que obtuviste fue un enorme dolor estomacal y yo sosteniendo tu cabeza y cabello mientras tenías arcadas en el baño.

Era verdad.

El año pasado Niall había decidido que hacer lo que él quería y sus padres le dieron permiso -ya que sabían que su hijo no se atrevería a ir a un Club de strippers o a beber hasta quedar perdido, daban por sentado que su seguridad tampoco permitiría que eso pasara- a lo que el rubio hizo nada más y nada menos que ordenar todo el menú de Nando's -su restaurante favorito- a su casa, y como cumplía 16 ordeno probar un poco de alcohol, y convenció a su primo que llevara 5 botellas.

Mala idea.

Louis termino casi en coma etílico, bailando sobre la mesa mientras hacia un intento fallido de cantar “Rata de dos patas” de paquita la del barrio porque tuvo la magnífica idea de llevar Vodka, Ron, Whisky, Bourbon, y Tequila.

Y Niall más que ebrio -con solo 4 caballitos- y con un fuerte dolor estomacal.

--Boo, esa es una de las principales razones por las que no quiero hacer una fiesta, y si la hiciera, no te invitaría, dalo por hecho. -dijo el rubio soltando una risita.

--¡Auch! Eso dolió, Niall James Horan me rompes el corazón. -dijo haciendo muecas de dolor. --¡NO! ¡No podré vivir si tu amor!

--Louis podrías... Las perso... -el rubio no termino la frase porque los largos y finos dedos de él castaño sobre sus labios lo hicieron callar.

--¡No mi amado Liam! ¡No dejes que nuestro amor sea callado! Pero no te preocupes mi amor que siempre te amare aunque este sentimiento no sea correspondido. -valla que Louis de verdad era un buen actor, merecía un Oscar por tremendo berrinche que le armo delante de todos los demás compañeros.

Niall se sonrojo abochornado por lo que su primo decía, cualquiera que los viese pensaría que ellos estaban en una clase de relación, la cual aparte de homosexual, seria incestuosa.

El continuo con las mejillas enrojecidas hasta que se dio cuenta de lo que había sucedido.

Louis se reía al mirar los cachetes de mil y un colores de su primo, era algo muy común en él, y que su piel pareciera tan blanca como la nieve, eso le ayudaba a facilitar saber cuál era su estado de ánimo.

Si su rojo era solo en los ojos había llorado, en la nariz, se encontraba terriblemente enfermo, en las orejas y mejillas estaba furioso, en el cuello, tenía posiblemente una reacción alérgica que tendría que atender a la de ayer, pero cuando era solo en sus mejillas y sus ojos brillaban, era porque estaba sumamente avergonzado o muy excitado, él lo sabía perfectamente esto último ya que en una ocasión descubrió al rubio intentando masturbarse en su habitación mientras leía una revista sobre “cómo dar placer” cuando era más pequeño...

El pobre no le vio a la cara ni le hablo en una semana, se sentía realmente avergonzado. Aunque había sido algo excitante observarlo masturbarse.

--Awww... Que lindos cachetitos. -dijo jalándole los mismos.

--¡Déjame! -gruño Niall dándole un manotazo en cada mano para alejarlo de sus mejillas.

--Uy pero que delicado, disculpa no quería arruinar tu maquillaje. -el susodicho volteo a verlo con los ojos abiertos por sorpresa... --Espera un momento... -Niall se sonrojo y maldijo por lo bajo- ¡Usas maquillaje! -lo acuso Louis. --Cuando pensé que no podías se mas femenino y delicado... Jajajaja, no te preocupes, está bien, muchos lo hacen, aunque deberías de usar esa cosa larga que utilizan en los labios, siempre los tienes resecos.

--Tenía pero se me acabo y no he ido de compras... -murmuro inconscientemente.

Louis se quedó en shock, Niall pareció haberse dado cuenta de lo que acababa de revelar y Louis también, porque este se empezó a descojonarse en su cara no podía respirar, era demasiado.

Cuando logro parar solo vio a un Niall caminando por el pasillo por el lado opuesto al que le tocaba, ya habían dado el toque. Lo vio alejarse con los puños cerrados, definitivamente estaba cabreado, luego lo arreglaría pensó, tal vez con una cena en Nando's.

Louis saco su bolso de ejercicio porque su primera clase era Gimnasia, como la aborrecía, era preferible tomar Futbol, pero en este colegio no la impartían como clase. Solo como deporte extra, ugh.

Louis siguió ensimismado en sus pensamientos y no se percató hasta que ya estaba en los vestidores de varones que algo no andaba bien.

Miro su reloj en su celular 9:35 a.m. A decir verdad ya hasta estaba llegando tarde y no había nadie, tal vez hoy al ser el último día de clases antes del verano, el profesor con suerte y falto. Una sonrisa no tardó en aparecer en su rostro, pero así como llego, se esfumo.

--¿Esos son gemidos? -preguntó en voz alta, pero más para sí mismo, porque... Era el vestidor de varones, no debía haber mujeres aquí, entonces... Oh.

Estaba decidido a salir y darles intimidad a los hombres que se encontraban ahí, él sabía lo que era cuando te atrapaban en un momento incomodo como ese. Pero algo lo detuvo.

“--Si... Sigue, ya casi... Sigue Eleonor.” -era la voz de Alec, y ese era el nombre de su novia, pero... Ellos... No, no podía ser posible, no había cavidad humana.

El cerebro de Louis hizo un corto circuito, no podía ser lo que él creía y como sonaba, no tenía que ser una mentira.

Se acercó al origen de los gemidos lastimeros y maldiciones que al parecer venían de la ducha. Y deseo no hacerlo, nunca hacerlo.

El acto que vio fue lo peor; su novia, la chica con la que había salido los últimos 2 años y había sido su primer beso, su primer faje, y su primer oral, el amor de su vida lo engañara de eso modo. ¿Que estaba mal, que fue lo que hizo mal para llegar a este punto?

La escena era desagradable y grotesca, Alec se encontraba recargado en la pared de las regaderas, y abajo en el medio de sus piernas se encontraba su novia, su amor, su vida; Eleonor.

Estaba chupando la asqueroso polla de Alec, y yo no podía dejar de verlo, caso pude escuchar como el corazón se partía en mil pedazos o más bien el hueco donde se supone que estaba mi corazón, no podía respirar sentía el pecho muy pesad. Me dolía demasiado empecé a temblar no podía ser verdad, esto era una mentira, había sido atropellado al bajar camino a la escuela, y esto era solamente un mal sueño, no podía ser verdad.

(...)

Alec estaba cegado por el placer. Llevaba aproximadamente 2 meses acostándose con Eleonor la puta del estúpido de Louis, realmente la detestaba pero era muy buena en la cama y aun mejor haciendo flagelaciones.

Oh, si ella sí que sabía llevarlo al cielo.

Alec entreabrió los ojos y observo a Louis, si... Esto era cada vez mejor; sonrió. Sabía que hacer, le gustaba hacerlo sufrir casi como a Niall, pero Niall, era un caso especial por lo que provocaba en él. Detestaba lo que provocaba en él, lo odiaba desde la primera vez que lo vio cuando tenía el 9 y el rubio 6, tan inocente, tan lindo, muy blanco, su piel como la nieve, labios rosados, pero siempre los tenia medio resecos chiquito, robustito, siempre sonrojado, y caminaba moviendo las caderas, con su mochila verde y su uniforme...

Era tan...

¡Ugh! ¡Lo hacia otra vez! Como lo detestaba, y lo peor era que había disfrutado aún más el oral que me estaba haciendo Eleonor, solo con pensar en ese pequeño culito blanco...

--¡Si...! ¡Si! Sigue... Humn... Si... Ah, sí me vengo... -Eleonor se trató de alejarse de su miembro mas no la dejo; se lo iba a tragar todo, no lo podía desperdiciar.

Alec tomo la cabeza de Eleonor y la obligo a tragarse su semen hasta la última gota, luego de asegurarse de que Louis aún seguía ahí observando... Al parecer seguía en shock.

«Perfecto.»

La levanto a su altura, y cuando ella deliberó que la besaría, en cambio Alec volteo su cara y esta palideció, el solo metió su polla dentro del pantalón y empezó a salir dejando a los dos solo para que discutieran o hicieran lo que sea que hacen las parejas en estas situaciones.

Mientras salía, pudo ver como una lágrima se derramaba por la mejilla izquierda de Louis. Eso solo lo hizo sentir más que feliz, sino que extasiado de felicidad, ahora el sufría como él lo hacía al verlo con... « ¡Mierda no otra vez!» Alec se odiaba a si mismo por los pensamientos que tenía.

Louis se percató de que Alec se había ido, nunca lo vio salir, pero estaba seguro que se fue con su alma... «Maldito. Bastardo.»

--¿Por qué? -pregunto Louis levemente. Su voz estaba a punto de quebrarse.

--¿Es en serio? De todas las preguntas que podías haberme hecho, ¿Escogiste esa? -contesto ella en un tono enojada.

--¿Que, a que te refieres?

--¿Cómo que a que me refiero? Lo sabes muy bien Louis, no te finjamos más, ya estoy cansada de ser solo una barba tuya.

--¿Qué? ¿Cómo que una barba? Eleonor no te entiendo. Realmente que no. Yo te di todo.

--Eso es pura mentira Tomlinson, lo sabes perfectamente.

Louis no sabía en qué punto comenzó a llorar, solo que no podía parar las lágrimas que se escapaban de sus ojos, se odiaba a sí mismo. « ¡No llores!» Se gritaba mentalmente, pero no.

Su cuerpo ya no le obedecía, camino tratando de acercarse a ella, pero esta retrocedió y lo miraba con el ceño fruncido.

--No entiendo a qué te refieres. -respondió finalmente el castaño, con la voz quebrada.

Eleonor soltó una pequeña risa nerviosa, pero se escuchó más sarcástica de lo que esperaba... Camino alrededor de él y ella comenzó a hablar.

--No nos engañemos más Lou, dejemos esto por la paz. -dijo ella con un todo cansado. « ¿Pero de que cojones está cansada?»

--¿A qué te refieres? -al fin sus suspiros abandonaron sus labios.

--Lou, de verdad me estás diciendo ¿Que no lo sabes? O realmente eres tan tonto como los demás creen. -la castaña se detuvo frente a encararlo.

--N-no, pero... Te di todo. -susurro- te di mi primer beso, mi primer noviazgo, mi corazón, tú fuiste la primera en casi todo. Yo te amo Eleonor, eres mi vida. ¿Cómo pudiste hacerme esto?

--No me vengas con falsedades, no hay nadie, no tienes que aparentar.

--Pero... -Louis no termino la oración porque ella lo callo.

--¡DEJA DE MENTIR! ¡No hay nadie más aquí! Estoy cansada... Realmente cansada de ti, ya no quiero ser la fachada de un... De un latente que ni siquiera lo puede aceptar.

Louis se quedó en shock, eso era lo que ella creía, no podía ser cierto.

--Yo no soy ningún latente. -respondió Louis, pero su afirmación sonó más como una pregunta.

Eleonor lo tomo del rostro, y seco las escasas lágrimas de este, y lo miro a los ojos.

--Lou, no mientas, no te mientras, podrás haberme dado “todo” como tú dices, pero nunca me diste lo que yo necesite...

--¡POR ESO ME CAMBIASTE POR ESA PORQUERIA! -grito el castaño sin dejarla terminar de hablar, pero sin apartarse del todo.

--¡Cállate de una puta vez, y escucha Boo!

--NO TIENES DERE...

--¡CALLATE EH DICHO! Y podrás alegarme una vez que termine todo lo que quieras. Louis, mírame, te aprecio mucho, como no tienes idea, siempre fuiste muy lindo y dedicado, pero al mismo tiempo eras... Mas femenino que yo, podrás haberme dado lo que quieras pero sentía un vació que no eras ni serás capaz de llenar, se cómo vez a los otros chicos, sé qué relación tienes con ellos carajo... Eres gay, solo acéptalo.

--No... Yo no...

--No lo niegues, en el fondo lo sabes y ya estoy cansada de ti, y de llevar esta relación monótona.

--¿Cómo osas llamar monótono a el amor que yo siento? Eres... Eres una cualquiera. -dijo cegado por su rabia.

--¿Y apenas lo notas? No me interesa de verdad, solo quiero un hombre de verdad.

--No puedo creerlo, yo estaba dispuesto a casarme contigo, Eleonor ¿Que te sucede? Tú no eres así. Nosotros íbamos a dar el siguiente paso...

--No, nunca lo ibas a hacer porque nunca diste el primer paso en nada. Tampoco me iba casar contigo para vivir siendo la esposa trofeo de alguien más. No voy a ser tu fachada nunca más. Me largo, en parte me alegra que lo descubrieras. Aunque extrañare tus regalos.

Eso fue todo, simplemente se alejó de ella. Era una completa puta, solo le uso. «Ya veo porque le gustaba que fuéramos de compras, pensé que me amaba, yo quería darlo todo por ella, no entiendo cómo es que esto sucedió.»

Salió corriendo de los vestuarios, y en eso logro ver a una persona en el piso, no le prestó atención de seguro se había tropezado y ya o estaba recogiendo algo que se le callo. No era de su verdadero interés no sentía nada, no escuchaba nada, se sentía drogado...

« ¿Que pasaba? ¿Todo había sido una mentira? Puse dos años de mi vida en esa relación, ya había comprado el anillo. Lo traigo en mi bolsillo. Solo esperaba el momento correcto.» Pensó Louis con melancolía. «Esto no puede ser real, no puede pasar, ¿Cómo es posible? Pero... Ella era la persona que mejor lo conocía, mas íntimamente, tal vez su primo...Entonces... ¿Por qué dolía tanto y a la vez sentía un alivio? ¿Qué sucedía, no es posible?... Y si ella tenía razón… ¿Porque se sentía feliz, y tan miserable a la vez...? Esto era una mierda todo era una mierda, lo odiaba, lo odio... Ella... Ella... Ella tenía razón. ¿Es decir, que posibilidades hay? No, espera Tomlinson, detén tu tren ahí, tú no eres gay, no puedes. No debes, eres un hombre no un marica. Pero yo... No Tomlinson tu eres un hombre recto no puedes. ¿Qué pensarían tus padres? ¿Qué pensarían los demás? ¿Porque pensaría en lo que piensan los demás? Eso no importaría a menos de que fuera, pero... Pero yo era... Yo soy heterosexual ¿O no?»

Louis estaba completamente perdido en sus pensamientos, que no se dio cuenta cuando salió del colegio tampoco cuando tomo el carro de su primo y comenzó a manejar; por inercia como robot. Ignoro el sonido que su celular emitía constantemente, solo dejo que las llamadas se fueran a buzón directamente.

No deseaba saber nada ni de nadie, sentía el cuerpo entumecido, hasta que un pitido constante del carro lo saco de su ensoñación -el indicador de gasolina- reacciono, pero ya era muy tarde, su carro... Bueno, el de Niall se había quedado sin gasolina, y él se encontraba en una especie de carretera. « ¿Cómo rayos llegue aquí?» Pensó, mas no obtuvo respuesta.

Camino y camino alejándose del carro, no era una ruta muy usada por los conductores, solo unos cuantos autos pasaban, pero olía raro, olía... Olía a sal.

--¿Pero qué demonios...? -pregunto Louis, y empezó a correr y a correr hacia adelante, en una sola dirección, sin mirar atrás, sin detenerse. No planeaba detenerse.

Era como si correr aliviara todo, escapar de sus sentimientos y problemas, dejar todo atrás.

Lo único que deseaba, que todo lo que había sucedido hace... Tal vez minutos, horas... ¿Días?

Posiblemente no, pero se sentían de ese modo. Era irreal lo que acababa de transcurrir. El solo utilizo su mente y la dejo vagar a la deriva, por más que eso lo reconfortaba, sabía que no huiría de su presente que no lograría cambiar, un pasado que tampoco iba a olvidar, y una realidad que le gustaba mofarse de él.

Sus piernas ardían, ya no las sentía pero aun así no de detuvo, -el dolor le ayudaba como distractor- solo lo hizo hasta que lo vio.

Frente a él había una gran extensión de azules...

El mar, el mar estaba picado, como una tormenta que apenas va a desatarse, pero las nubes eran claras como la calma antes del horror, era una contradicción. Una completa paradoja lo que la naturaleza mostraba ante él, tan surreal, pero factible a la vez.

No había nada que hacer, ya lo había discutido demasiado con el mismo, ya estaba harto del monologo interno que conservaba, no podía ser de otro modo. Solo quedaba una solución... Y esa era...

{Varias horas antes en la mañana}

--No puedo creer que ese petardo se burló de mí, no había nada de malo con embellecerse un poco, me hace sentirme bonito. Y me ayuda a cubrir mis golpes. Ugh, necesito comprar más humectante, me duelen los labios, se me quiebran mucho. -murmuro Niall para sí mismo después de dejar a Louis riéndose solo.

El rubio continúo caminando por el pasillo hasta su clase de “Filosofía”.

Niall era muy inteligente para su edad, y después de un arreglo que sus padres tenían con la escuela, este pudo adelantarse en todas las materias que él quisiera, incluso iba a salir 1 año antes de la preparatoria, se suponía que debería estar en 4to semestre y el año que viene pasar a 5to pero él estaba a punto de entrar a la Universidad junto con su primo, se sentía tan excitado.

Ya sería un chico universitario...

Y ahí los demás no lo molestarían por sus... Preferencias.

--¡Maldita sea! -exclamo el rubio. --Olvide completamente el entrenamiento, Ugh, tendré que caminar otra vez y ver al bobo de Lou y decirle que si me lleva a mis prácticas de Ballet y Gimnasia.

Niall dio la media vuelta por donde venía y camino a los vestidores para hombres en las canchas que habían mientras organizaba sus pensamientos.

«Necesito ir a buscar mis medias puntas, humn, ¡Olvide lavar las mallas! Espero que Elly las allá visto y las lave, porque si no estaré en graves problemas, también mi uniforme de Gimnasia, y necesito terminar la rutina y checar si el traje me queda para la competencia, buscar que voy a comer, demonios hoy es un día agitado... ¿Agitado? ¡Mi rutina! No eh practicado el salto que me pidió Sasha y tampoco las piruetas que me recomendó la Miss, ni el maquillaje que planeo usar... ¿No se supone que mi “palm” me debería recordar estas cosas? Ah, sí... Que se me rego comida sobre ella y necesito pedirle otras a mis padres... Rayos es la 3ra en lo que va del año, se seguro se molestaran conmigo...»

Y Niall choco con una pared. «Idiota» se llamó a sí mismo.

--Fíjate por donde vas imbécil... Oh, pero miren nada más a ¿Quién tenemos aquí? -Niall alzo su mirada y lo observo.

--Tal vez no seas una pared pero eres igual de inteligente que una -pensó en voz alta.

--¿Qué dijiste marica?

--Ni-nada yo-yo lo la-lamentó-to no fue mi in-intención. -se golpeó mentalmente por haber soñado tan débil y perturbado.

Alec sonrió, le gustaba causar ese efecto en él, lo excitaba, era como si estuviese totalmente bajo su poder, y no existía nada mejor que eso...

Otra vez los pensamientos regresaban, no, no podía ser posible, no. Entonces solo hizo lo único que sabía hacer para callarlos.

--Pero miren que putita de farmacia tenemos aquí. -dijo Alec refiriéndose a la melena falsa rubia de Niall. --Vamos suplícame quiero oírte.

Niall se alejaba de él -retrocedía al mismo grado que se acercaba- no quería que lo golpeara, ¡Era el último día, no podía dejar las cosas por la paz! De momento otro se quedó se quedó sin espacio para retroceder.

Alec observaba al pequeño rubio tembloroso mientras este se retorcía en busca de una escapatoria pero no pudo ya que el susodicho coloco sus manos a los costados de los brazos del ojiazul, mientras este empezaba lo miraba con un verdadero rostro de terror.

Eso lo ponía, le ponía mucho. No lo pensó, ni siquiera lo analizo solo puso a Niall de espaldas con un solo tirón ahora podía oír como el pequeño sollozaba.

No sabía el efecto que eso causaba Alec, lo haría pagar por provocarle esas sensaciones. Y sin pensarlo se recargo sobre él. Niall estaba muerto del miedo, usualmente solo lo golpeaba y le quitaba su plata, pero en esta ocasión fue diferente, todo era diferente, no había nadie, ni un alma, y nadie se acercaría porque estaban en la zona más aislada de la escuela, nunca debió regresar, debió enviarle un SMS a Lou y listo, pero no. Tenía que ser tan estúpido y regresar para hablar personalmente y tenía que ser aún más estúpido para no darse cuenta quien estaba frente a él, y que chocaría con el si no se moviera, pero él era un completo retardado mental.

De un momento a otro, Alec lo acorralo contra la pared, algo había en su mirada que no conseguía identificar que era, no sabía que ocultaba, en un solo segundo cambio a ¿Amor? No, de seguro lo interpreto mal, ahora más porque este se mostraba furico, nunca le había mostrado esa mirada, esa miraba que calaba en sus huesos hasta el tuétano y lo estremecía completamente, entonces sucedió.

Estaba mirando hacia la pared, esto era realmente desagradable, pudo sentir su aliento caliente cerca de su cuello, le provocaba asco y de un momento a otro se pegó a contra el cuerpo de Niall quien sentía... Sentía algo duro en medio de culo...

«Pero eso no es posible ¿Verdad? Es decir, a menos de que su celular estuviese ahí creo que era su... No, no, no, no, no, es su celular tiene que ser su celular no puede estar pasando no, no, no, no, me niego a creerlo...»

Alec tomo los brazos de Niall desde abajo posando sus manos sobre su nuca formando una llave de lucha con ellos inmovilizándolo. Niall se retorcía bajo su agarre, pero este al tener sus manos en la cabellera del rubio, y le susurro en el oído.

--Niall, Niall, Niall... ¿Pero mira que has provocado? -dijo causando escalofríos en todo su cuerpo. « ¿Que le sucedía? Por favor que solo me golpee y se valla que solo me golpee y se valla.»

Niall empezó a llorar.

No era lo que pasaba por su mente no... No podría ser... No, ni siquiera lo pensaría, no, simplemente no. Se negaba.

--Abre las piernas rubio, ¿Te gustan los hombres? ¿Quieres a un hombre? Bueno, tal vez tendrás a un hombre. -susurro de nuevo en su oído mientras le chupaba y lamia lascivamente.

Niall se mantuvo férreo, no planeaba moverse era mucho más fuerte que Alec, pero su miedo era mayor y no lograba reaccionar. Alec separo las piernas de Niall, colocándose en medio de estas. Y comenzó a restregarse, a pasar su polla por el culito de rubio –a pesar de que solo los separaba varias capas de ropa- este empezaba a lloriquear desesperadamente.

Le encantaba, pero no podía ir más allá. ¿O tal vez sí?

--Niall... ¿Te gusta? -gimió, cuando me jalo el cabello pero era de dolor, no de placer.

Lo detestaba, le hacía sentir sucio, muy muy sucio, no quería que pasara. Sus lágrimas corrían libremente por mis mejillas y comenzó a sollozar más fuerte no quería que su primera vez fuera así, no...

No una violación. No quería pensarlo pero él no se dejaba de restregar contra trasero. Y de un momento otro lo escucho; y se sintió tan bien de que le tratase como una mierda y fuese inferior, nunca se había sentido tan feliz de ser patético.

--Ni que tuvieras tanta suerte putita. -dijo y azoto su cabeza contra la pared.

La verdad es que quería quedarse desmayado y no recordar nada si es que planeaba contradecir lo que acababa de informarle. No quería saber.

Ni siquiera había dado su primer beso.

Solo quería morir.

Alec lo azoto contra la pared y luego lo volteo para que lo viera y empezó a ahorcarlo, odiaba lo que estaba haciendo con él, joder, él no era un jodido marica.

Así que descargo su odio contra el pequeño, inició a golpearlo hasta hacerlo sangrar y se fue de ahí dejándolo en el piso del pasillo.

Había terminado de golpearlo, Niall observaba como se alejaba. Y todo se oscurecía nadie estaba cerca, escuchaba unos gritos que provenían de los vestidores. Solo se colocó en posición fetal, y me deje llevar por la nube negra que oscureció todo al alrededor...

por **ParadojaViva** Dom 19 Ene 2014, 1:56 pm

CAPITULO 04

--¿Dónde estará ese duende? -se preguntó un pelirrojo cuando su reloj marcaba las 9:30 a.m.

--¡Hey! Sheeran, ¿Dónde está mi leperchaum? -cuestiono Alba, esa chica tenía en serio dejar de acosar a Niall, el que sea la más rica y popular no significaba que era una persona agradable. Para nada.

--En primer lugar Alba, Niall no es nada tuyo ni será. En segundo lugar, no tengo la mínima idea y tampoco es de tu interés. -le gruño.

Algo andaba mal. Edd lo sabía, podía sentirlo, algo malo iba pasar solo esperaba que no fuera a su mejor amigo, ese pequeño duende ya tenía demasiados problemas como para aumentarlos por esta clase, si no llega a tiempo el profesor no le aceptara el trabajo y no obtendrá la calificación para graduarse.

«Demonios. Tengo que hacer algo.»

--¡Profe! -llamo la atención al profesor de Filosofía.

--¿Si, Sheeran? ¿Qué se le ofrece?

--¿Puedo salir un momento?

--¿Ira a buscar a Horan no es así? -me sonrió.

--Ptsss... ¿Sinceramente?

--Si, sabe que no me molesta. Mientras regrese antes de las 10:00 todo estará bien. Joven, se da cuenta de no tiene ninguna responsabilidad sobre Horan ¿Verdad? -pregunto conforme se acercaba a él.

El resto del salón al fin pareció notar que el profesor había llegado y que estaban teniendo una plática.

--Si lo sé pero... Él es como mi hermano menor y si tomamos en cuenta que tiene 16 cuando todos aquí tenemos 18 o 19 inclusive uno que otro burro como John de 20...

--¡Cállate Sheeran! Ya sé que me amas pero no tienes que llamar mi atención de ese modo. -respondió el rubio de John. Solo le guiño un ojo y seguía dialogando con el profesor, haciendo caso omiso al alboroto y comentarios.

El profesor se rio, sabía que esas bromas eran comunes dentro de su círculo de alumnos.

--Como le estaba comentando, antes de que un nearnenthal me interrumpirá, -volteo a ver a John quien le envío un beso. Edd solo giro los ojos. --Niall tiene 16 con un comportamiento de 12, una mentalidad de 9 y una inocencia de 6 años, porque seamos sinceros la edad no tiene nada que ver con tu persona y otra prueba seria su primo Tomlinson.

--Oh. Veo perfectamente a que te refieres. Creo que la inmadurez e ingenuidad de los Horan se encuentra arraigado a su estilo de vida y crianza.

--¡Está en su A.D.N! -grito John haciendo que todos se riera incluso el profesor.

Todos sabían perfectamente quienes eras los primos Horan, Louis W. Tomlinson Horan era un chico relativamente pequeño para su edad, pero era todo un deportista. Un increíble futbolista y asombroso basquetbolista también, incluso si lo deseaba, tendría la capacidad de llegar a estar en las ligas profesionales, pero en cambio el planea estudiar actuación.

Con una actitud de chulo y una actitud risueña, definitivamente actuaba como un crio de 5 años gastándoles bromas a los demás sin importar las consecuencias ya que siempre las encaraba incluso si no eran su culpa.

Muchos creían que era un gilipollas porque podía mofarse de casi cualquiera sin tener miedo a represalias, y eso provoco su accidente hace dos años, un accidente que lo dejo en coma por aproximadamente 6 meses y por eso el segundo de la generación en salir con 19 años. Nadie tenía nada que reprocharle, ese día, ese día nadie quería recordarlo, pero tampoco lo olvidaban.

Y por el otro lado estaba Niall J. Horan, sin duda el chico más tierno de la escuela. Ese rubio de ojos azules tenia demasiada inocencia para su edad. Inocencia la cual con el paso de los años y con un poco de perversión por parte de los grados superiores, lograron que Niall tomara el taller de sexualidad. Algo muy normal para todos, pero el pobre se sonrojaba cada vez que el profesor mencionaba la palabra "pene" o "vagina" todos estaban más atentos a sus reacciones que a lo que decía el profesor.

Entonces este entendió lo que sucedía, y hacia que Niall participara en clases, el pobre sufrió todo el semestre, pero lograron que aprendiera lo básico, sobre las ETS y que el coito, aunque el susodicho siempre se refería a esto último como “hacer el amor” o “hacer bebecitos”. O la ocasión que lo encontraron escribiendo “cartitas de admirador secreto” el chico era una monada de inocencia. Y era un dolor punzante en el corazón cuando este lloraba.

La mayoría de la generación lo apreciaba por el hecho de ser un niño dotado con talento, educado y bastante humilde. Niall era un niño en una jungla de pre-adultos.

Y también eran conocidos sus padres claro que sí, Bobby y Maura Horan eran los principales contribuyentes al plantel en las asignaturas de artes, danzas, literatura o música, la mayoría de los estudiantes no los conocen, algunos inclusive en la primaria creían que Niall era huérfano porque en las juntas de padres de familia siempre estaba solo. Y que sus tíos, eran quienes pagaban la matrícula de la escuela.

Pero el día en que Niall, se presentó en su competencia de Gimnasia por parte de la escuela sus padres asistieron, el pequeño estaba tan feliz y nervioso que solo logro conseguir plata, a pesar que siempre tenía Oro y sintió que había decepcionado a sus padres, estos en cambio solo corrieron y lo abrazaron, le dijeron que estaban completamente orgullosos de él, y que nunca lo dudara que ellos lo amaban.

--No se preocupe Sheeran, valla por el pequeño, igual y trae los documentos que le pedí y por eso no puede llegar a tiempo. No se preocupe. -el profesor le guiño el ojo y eso fue todo.

Edd salió apresuradamente en busca de Niall pero este no contestana su teléfono. Eso era raro era imposible, podían ser las 3:58 a.m. Y Niall contestaría siempre su teléfono.

Algo andaba mal.

Corrió a través de los pasillos hasta llegar al estacionamiento de la escuela, y lo vio. Ahí estaba su Audi. « ¿Dónde carajos se metió rubio teñido?» Se preguntó y volvió a entrar al colegio. «Donde, donde, donde, donde...» Y se encendió una idea en su cerebro.

Louis.

Tomo rápidamente su celular y le marco a este, pero tampoco contestaba, de seguro ya había entrado a Gimnasia... ¡Gimnasia, eso era!

--Cuando encuentre a ese pequeño duende lo arrastrare de las greñas por esconderse, ¿Quién se cree ese mocoso que es? -murmuraba aletargadamente buscándolo cuando choco con Alec.

--Fíjate imbécil. -lo empujo contra los casilleros.

--¡Me la sudas gilipollas! -le contesto de, no tenía tiempo por perder, necesitaba encontrar a Niall ya.

--¿Sabes? Es el último día, no me toques los huevos y llevemos la fiesta en paz. -Alec le regalo una sonrisa hipócrita que ni su abuela se la tragaba.

--¿La paz? La paz mis nalga. No me interesa juntarme con una chupa pollas como tú. -la expresión de Alec cambio de una burlesca a otra sombría, de no podía saber qué tipo de sentimiento era ese que atravesaba sus ojos, no entendía que podía ser. «Tal vez... No, no creo.»

--Te callas pelirroja, y vete a buscar a tu putita.

Edd lo miro con odio y siguió de largo, no tenía ni el humor ni el tiempo que perder con ese gilipollas. Subió las escaderas y doblo a mano derecha continuo todo el pasillo hasta llegar al gimnasio.

--Pero qué raro... No hay nadie. ¿Hola? -grito Sheeran en la cancha vacía con la esperanza de que Niall estuviese ahí.

El pelirrojo buscaba y buscaba y de momento escucho sollozos...

Pequeños sollozos que provenían del vestidor de varones. Y corrió hacia ellos, a medida que se acercaba sabía que ese no era Niall y ciertamente tampoco ninguno de sus compañeros, entonces la vio. Eleonor, la novia de Louis. ¿Pero qué cojones hacia ahí?

--¿Eleonor? -pregunto dubitativamente, tenía miedo de asustarla.

--¿Quién está ahí? ¿Alec? Si eres tú, vete bastardo no quiero saber nada ti. -dijo con palpable enojo.

Conforme el pelirrojo entraba a los vestidores se percató de algo extraño... Olía... Olía a... « ¿Olía a sexo? Pero...» No podía ser a menos que...

Oh. Por. Dios. Pensó el errando completamente.

--Eleonor soy Edd el amigo de Niall y Louis, tranquila todo está bien ¿Cómo estás? -idiota, se recrimino. «La chica pudo haber sido abusada y tu preguntando si está bien.»

--Si y no es lo que tú crees. -dijo leyendo su pensamiento.

--¿Entonces...?

--Termine con Louis.

--Oh.

--Oh. Si "Oh" ya deje de ser la barba.

--Cariño no creas eso tu eres muy importante para él.

--¡Claro que no maldita sea! Lloro porque Alec tal vez ya no me haga caso por culpa de ese maldito latente. -gruño y me dio una bofetada. « ¿PERO QUE COJONES? Ella...»

--¿Qué te pasa tía?

--¡Tú no tienes nada que recriminarme, ahora que si dices algo te va a ir muy mal! -le ladro. « ¿Qué mierda le pasaba? Me canse ahora si me va escuchar.»

--Mira perra, ya te eh aguantado demasiado, ¿Crees que no sé qué engañabas a Louis? Todos sabemos que eres una puta que solo buscaba el dinero de Louis, todos lo sabemos, también que te acostaste con medio equipo de futbol, es decir tuviste un trio y pensaste que las fotos no iban a ser publicas ¿En serio? Todos, sabemos quién eres, si te aguantábamos era porque Louis estaba enamorado de ti, ahora yo no tengo porque soportar tu mierda dramática de perra en celo. Escúchame bien, no me interesa, ahora solo estoy buscando a Niall. -dijo mirándola fijamente, la pobre palideció.

--¿To-todos lo-lo sabe-ben? -pregunto incrédula.

--Sí, todos lo sabemos desde hace un año, pero nadie tiene los huevos para decirle a Louis que es lo que has estado haciendo, ¿Por qué crees que muchos te dejaron de hablar? Eres la puta de la escuela, y peor aún por lo que escuche la puta de Alec, en serio. No es mi deber meterme en tu vida, y mucho menos soy nadie para darte ejemplos o consejos de cómo vivir esta, solo se, que ese tío es mala leche, y no es de fiar, cuando decidas cambiar de actitud y pedirle disculpas a Louis, seré tu amigo, y créeme que nunca más volverás a estar sola.

La castaña pareció pensarlo por un mentó y después hablo.

--No necesito tu lastima. -y paso de su lado, pero antes de salir se giró y dijo- Creo que oí a Niall por aquel pasillo. -dijo señalando la dirección opuesta en la que se encontraba.

Edd la vio alejarse y corrió por el pasillo hasta las escaleras y ahí estaba. En el piso. Varios metros abajo de él, el pequeño se “había caído” de las escaleras y se encontraba inconsciente.

Al verlo corrió rápidamente a su lado y checo si aún respiraba. Maldijo por lo bajo, aun no reaccionaba y quien sabe cuánto tiempo llevaba ahí, probablemente la castaña no lo había notado entre sus sollozos. Al menos lo había ayudado a encontrarlo.

El mayor tomo el cuerpo del rubio junto con sus cosas y lo cargo de nupcias teniendo sumo cuidado con su cabeza y camino, o troto mejor dicho hasta la enfermería que se encontraba por suerte cerca de las canchas.

--¡Doctora Emma! ¡Doctora Emma! -grito el pelirrojo alarmando a la señora ya un poco grande.

--¿Qué sucede porque tanto escándalo? -pregunto está saliendo de su consultorio. --¡Oh! -exclamo al ver al rubio- ¿Que le paso a Niall? -pregunto intrigada ya que era su vecina.

--No lo sé, lo encontré al pie de las escaleras, creo que se cayó, pero no reacciona. -a este punto Edd ya estaba muy alterado así que decidió llamar a Louis, pero otra vez, solo mandaba a buzón. --Mierda Louis, coge el puto teléfono para algo tiene que servir la porquería de celular inteligente que te compraste. -y colgó terminando así el mensaje de voz, ya habían pasado 10min.

Y Niall no despertaba.

La enfermera Darcy, ayudo a la Doctora a poner a Niall sobre la camilla de la escuela mientras esta checaba sus signos vitales. Y recordé.

--Enfermera, tengo clases ¿Cree que me pueda extender un pase que diga que traje a Niall y que este se encuentra en la enfermería inconsciente? -pregunte algo inseguro.

--Oh. Por supuesto. Deja lo hago y se lo paso a la doctora para que lo firme.

--Muchas gracias -«espero que esto me salve de un castigo. ¿Pero qué clase de gilipollas soy? Espero que Niall se ponga mejor.»

La enfermera volvió y le entrego a Edd una tarjetilla roja, en la cual informaba que el alumno: “Edd Sheeran había encontrado a Niall Horan cerca de las escaleras por las cuales probablemente halla rodado, y que en ese preciso momento aún se encuentra inconsciente.”

Edd corrió a todo lo que sus piernas daban para llegar al otro extremo del colegio y que no tuviese falta porque si no. Ni Dios mismo podría salvarlo de la ira de su madre si se enteraba o creía que se había saltado la clase... Otra vez.

Corrió y corrió y al fin lo veía a lo lejos esa puerta roja que aún estaba abierta. Estaba a unos cuantos metros cuando el profesor el cerro, justo en sus narices haciendo que el pelirrojo se estampara contra el cristal de la puerta.

Los compañeros dentro del salón estallaron en risas al ver la cara estrellada de Edd contra la pared, y el mostrándole un papelito rojo. Ese debía ser un mensaje muy importante.

--Smith, abra la puerta a Sheeran. -dijo el profesor recargándose en su escritorio.

Smith abrió la puerta y un agitado y sudoroso Edd entro mostrando una pequeña hoja roja y una sonrisa triunfante. Ya lo había dejado entrar.

--Ese papelito no significa que lo dejare entrar. -Edd borro su sonrisa pero al instante regreso.

--No, puede que no, no me interesa mucho pero es sobre Horan. -dijo extendiéndole el papelito para que lo leyera.

--Léalo en voz alta.

--Pe-pero...

--Léalo en voz alta Sheeran, ¿no contiene nada malo o alguna mentira verdad? -dijo el profesor jugando ya que él y Horan habían entregado ese tipo de papelitos antes, solo que los anteriores eran sobre dolores estomacales causador por el atiborramiento de comida.

--De-de acuerdo. Dice: "El joven Sheeran...

--¿Al parecer le quitaron años no es así? -interrumpió sin poder evitarlo John. Le encantaba molestarlo.

--¿Podrías cerrar el pico John? Luego discutimos en la alcoba.

--Lo siento amor, sigue.

--Imbécil.

--Loca -canturreo.

--Ya basta, Sheeran prosiga rapidito o lo saco de mi clase -sentencio el profesor mirando su reloj.

--De acuerdo tranquilícese, el joven Sheeran encontró a un compañero cuyo nombre corresponde a Niall James Horan cerca de las escaleras en donde aparentemente el susodicho rodo por ellas. -hubo una especie de suspiro colectivo a este punto- cerca de las canchas de gimnasia en el ala este, y este mismo se encuentra aún inconsciente, le informamos que lamentablemente no continuara con su último día de clases ya que necesita realizarse ciertos estudios para cerciorar que el golpe en la cabeza no provocase ningún coagulo o alguna situación peor.

atte.: la doctora Emma Hidmand.

Toda la clase se quedó en silencio. No podían creer lo que el pelirrojo acababa de decir. El profesor se paró inmediatamente de su silla y se acercó para ver la firma de la doctora, era verdad, el papelito era original, todo estaba en orden entonces...

--Profesor y respecto a los trabajos de Horan, tome su carpeta de su mochila, aquí están. -dijo entregándole una carpeta amarilla con ilustraciones de gimnasia y ballet por todos lados.

Sin duda de Niall.

--De acuerdo. Perdone mi trato pensé que me estaba timando. -se disculpó el profesor admitiendo su error, eso era nuevo, todos se quedaron impactados, nunca habían visto que su profesor se equivocara y mucho menos que este pidiese disculpas por alguna situación. Aunque claro esta lo acontecía.

(...)

Sus ojos se sentían pesados le dolía la cabeza demasiado trato de moverse pero su cuerpo no reaccionaba « ¿Que está pasando? ¿Por qué me duele todo?» Y recordó, recordó todo… «Alec el, él, él trato de…»

Niall no pudo terminar su pensamiento, no quería se negaba, no pudo tampoco evitar que su cuerpo se comenzaba a convulsionar pero no por ataques, si no por el llanto y todo el dolor que le provocaba pensar lo sucedido.

Gimió lastimeramente en voz alta llamando la atención de las enfermeras en turno. Se acercaron para tratar de calmar al pequeño rubio que no dejaba de moverse pero al sentir el toque de las enfermeras este solo logro alterarlo más pensaba que era Alec sentía que era él.

Una voz susurro en su oído.

--Tranquilo mi pequeño ángel. –era una voz dulce, nunca me habían llamado ángel, sonaba lindo, su voz era sedante.

--¿Dónde estoy? –pregunto. «Que no diga hospital, que no diga hospital que no diga hospital.» cruzo los dedos.

--En la enfermería de la escuela. –abrió los ojos. Todo era blanco, casi no creía que no era un hospital pero en efecto, ahí estaba, en la enfermería del ala Este del colegio.

--¿Pero cómo…? –lo último que recuerdo era la sensación, de ser tocado y arrastrado por el piso.

--Un amigo pelirrojo te encontró y se puso como loco cuando te trajo, estaba muy alterado tal vez luego quieras llamarle y decirle que ya despertaste, llevabas 5 minutos aquí inconscientes y los otros 25 durmiendo. Creo que estabas algo cansado pequeño –rio- hasta roncabas.

--¡No-no es ci-cierto y-yo no ronco! –tartamudeo y podía sentir como sus mejillas ardían. «Dios que bochornoso, me quede dormido en la enfermería de la escuela. ¡Pero que oso! ¿Qué acaso nadie planeaba despertarme? ¡Ay, trágame tierra!»

Cubría su rostro con sus manos tratando de que no se notara en su piel el color rojo carmesí que no dudaba que estuviese ahí, necesitan inventar una base que cubra y logre ocultar las chapas. Esa es una idea millonaria, al menos por su parte se aseguraría de comprar una dotación vitalicia.

--Jajaja, pero que monada pareces cuando estas todo sonrojado pequeño. –dijo quitándome las manos de la cara, y luego su cara cambió de semblante, estaba sería. ¿Había hecho algo malo? --Tranquilo pequeño, se lo que paso, vi las marcas en tu cuello y estomago no te preocupes no le diré a nadie, no pasó nada todo está bien, todo estará bien. –le susurraba una tierna enfermera en el odio mientras le acariciaba la cabeza y su frente logrando tranquilizarlo.

--No sé de qué me está hablando señorita. –dijo Niall con la voz rota, todo rastro de humor había abandonado su rostro en cuanto ella toco él tema.

--Tranquilo bebe, estoy aquí para cuidarte, desahógate, no hay nadie más, tranquilo se lo que sientes. –le respondió suavemente, nadie lo había tratado ni tranquilizado de ese modo desde que era un pequeño de 6 años el cuál se acababa de caer de su bicicleta, o se le había caído su tazón de comida.

Se sentía realmente bien, muy tranquilizante, muy pacifico. Niall volteo a ver a la chica, era joven fácilmente de unos 24 años, de seguro acababa de terminar la carrera de enfermería y por eso trabajaba ahí. Pero el tacto que tenía y el calor que esparcía por sus manos lograba calmar cada célula de su ser.

--¿Por qué yo? ¿Qué le eh hecho? –pregunto el rubio aun con voz rota, mientras docenas de lágrimas corrían por sus mejillas sonrojadas, pero en esta ocasión por el esfuerzo de llorar y contener las lágrimas al mismo tiempo.

--No lo sé cariño, pero no tienes que preocuparte más mi trabajo es protegerte y te prometo que lo haré. –y le regalo su mejor sonrisa a rubio con los ojos hinchados y rojos de tanto llorar.

--Sabes, eres un ángel. –la muchacha sonrío y detuvo su mano.

--No, por favor no te detengas. –Suplico más urgido de lo que deseaba, esperaba que la chica no lo mal interpretara- Que-quiero de-decir es que-que tu tacto m-me relaja. -Ella solo sonrío.

--Eres una dulzura, muy inocente. Nunca lo malinterprete, no tienes de que preocuparte. Además, ya te cure, y creo que ya te desahogaste ¿O no?

Asintió con la cabeza.

-Muy bien es hora de que le llames a tu familia para que pasen por ti. –respondió mientras se alejaba caminando a él gran escritorio.

«Probablemente me dé un pase de salida.» pensé. –Aquí está pequeño, ahora solo tienes que llamar a un adulto para que pase por ti, tranquilo no le diré a nadie, tú debes hacerlo por ti mismo.

Perfecto ahora se sentía culpable, porque si ella le hacía prometer que le contaría a alguien él sabía que no cumpliría esa promesa.

Detestaba no hacerlo. Lo odiaba.

Pero contrario a lo que él creía ella no le hizo prometer nada, y tampoco lo obligo a decirle quien fue. Pero ahora había otro problema. ¿A quién llamar? Todos estaban en clases, sus padres. Ni loco, ellos ni siquiera estaban en el país andaban por Isla de Malta o américa, no recordaba exactamente. Demonios, tampoco podía llamar a su nana, esta no dejaría de hacer preguntas y sabía que a ella no le podía mentir.

Esa mujer olía las mentiras a un kilómetro a la redonda. ¿Edd? No, ya le había quitado demasiado tiempo entreteniéndolo con su problema y él no debía faltar a clases o si mama sin duda que lo crucificaría. Louis… ¿Louis? ¡Eso es, Louis!

Ring, ring, ring, ring… “¡Hey, estás llamando al número de Louis el Tommo Tomlinson, si escuchas esto es porque tengo algo mejor que hacer y por eso no te contesto, John si eres tú me debes 25 euros y Niall no comas tanto te vas a poner gordito. Bueno más. Ahora deja tu mensaje después del…” Y colgué, que gilipollas.

« ¿Pero quién se creía que era para llamarme gordo? Eso si no se lo perdonaba, ¡Y LO PUSO COMO MENSAJE DE BUZON! En donde todo el mundo puede escucharlo… Ugh, pero aun así lo necesito.»

Niall marco 6 veces al celular pero este nunca contesto. Solo le quedaba un último recurso. Greg Gallagher, Su guardaespaldas. «Espero que no haga preguntas... Oh, espera Niall, no tiene que hacer preguntas en donde la enfermera solo dice que rodé como burro que soy por las escaleras.» Sonrió y comenzó a teclear su número en el celular.

--¿Niall sucede algo? –pregunto en tono preocupado, él sabía que solamente llamaba cuando era una emergencia como cuando el accidente de Lou o cuando se quebró el tobillo, o los dedos, o la clavícula, o se disloco el hombro. Pensándolo bien lo llamaba bastante seguido...

--Humn… Es que… Quería preguntarte si…

--¿Si qué Niall? ¿Estás bien?

--Sí, bueno, no. Lo que sucedió es que no me fije al bajar de las escaleras y caí por ellas y quede inconsciente.

--¡¿QUEE?! –Me gritó alterado por el teléfono -¡Niall pero cómo es posible, si nadie me informo nada!

--Tranquilo papi Greg, no pasó nada totalmente grave, y no me quebré nada tampoco, y nadie te informo porque no fue tan grave solo fueron como 5 minutos –“y el resto me dormí” me susurro mi conciencia- y ahora estoy bien, pero quiero ir a descansar, ya entregue mis deberes –bueno, fue Edd según la enfermera, pero… Detalles, detalles- así que no tengo otro motivo para estar aquí y ya me dieron mi pase de salida solo tienes que venir por mi… Por favorcito.

--Sé que estás haciendo esa carita de cachorrito. –Y sí que lo estaba- ya voy por ti, llego en 15 estoy cerca.

--Gracias te amo papi Greg.

--Deja de llamarme así me haces sentir más viejo y solo tengo 35. –dijo bromeando.

--Nada, siempre serás papi Greg.

Él era además que un guardaespaldas, era una figura paterna para Niall. Siempre había cuidado de él.

Aunque casi no se vieran, lo que ocasionaba que el ojiazul a veces le preguntaba ¿A quién cuidaba? mofándose de que casi nunca actuaba como los guardaespaldas de la televisión o las películas y que siempre andaba por otros lugares, pero también lo agradecía porque de ese modo el tenia espacio para buscar quien era y lo que quería hacer con su vida.

Y así fue como conoció a su verdadero amor, la danza y la gimnasia aunque también tocaba muy bien la guitarra pero eso era más como un hobby de vez en cuando.

Cuando Greg se percató de que Niall tenía otros gustos que los demás niños, y que dejo de llevarse con estos mismo. Le preocupo, pero cuando dejo de comer y empezó a adelgazar drásticamente lo llevo con un psicólogo, preocupado de que algo pudiese haber afectado su estilo de vida, o que hubiese adquirido alguna enfermedad psicológica por la condición física que se les exige a los niños en ballet y gimnasia. Su sorpresa fue cuando el psicólogo le dijo lo que realmente sucedía. El espero hasta que Niall estuvo listo y le dijo la verdad.

Cuando Niall tenía un evento y sus padres no asistirían siempre estaba Greg, se encargaba de que estuviese a tiempo a sus prácticas y lo acompañaba a sus recitales o competencia. Era un verdadero amigo tomando en cuenta que con las demás personas se llevaba muy poco, su círculo de amigos era bastante cerrado.

Así que no era de sorprenderse que el no asistiera a fiestas o cosas así a pesar de que lo invitaran a estas.

La puerta de la enfermería se abrió y Niall salió de sus recuerdos, era Greg. Había llegado, parecía sorprendido de ver a Niall y un escalofrío recorrió el cuerpo de este, desde la nuca hasta el coxis.

«Él no podía saber lo que sucedió. Se repitió a sí mismo. «El no estuvo aquí, así que no sabe nada, cálmate, todo saldrá bien. Finge, ¿Qué haces con esa mueca? ¡Sonrisa, sonrisa, sonrisa! ¡Vamos! Te pusiste maquillaje, no se nota nada, no te preocupes» se volvió a repetir.

--Le mientes a las personas que amas… -susurro su conciencia, maldita, siempre estaba tranquila y callada y justo ahora tenía que aparecer. «No pasa nada.»

--Hola muy buenos días, soy Greg Gallagher, vengo por Niall Horan, soy su cuidador a cargo.

--Oh. Claro que sí, pase a mi oficina, le informare lo hechos y los exámenes a realizar. –le contesto la enfermera, « ¿Acaso le estaba coqueteando a Greg?»

--De acuerdo. Niall, el carro está en la entrada, Bouhanna está conduciendo, dile que voy en 20.

Asintió con la cabeza.

Mala idea. Se mareo, pero no lo dio a notar solo fue un pequeño mareo, nada de qué preocuparse.

Camino por toda el ala Este de la escuela hasta llegar a la estrada en donde efectivamente había una Traiblazer negra americana. Sin duda el carro al que tenía que ir, se acercó a la ventanilla del acompañante delantero y está bajo.

--Hola joven Horan. –saludo Bouhanna.

--Hola, Greg me dijo que te dijera que estaría adentro otro 20 minutos más y que mientras podíamos ir a Nando’s. –le dio la mejor sonrisa, «espero que me crea.»

Se rio.

--¿De verdad crees que aún me vas a engañar con esa? –Negó con la cabeza divertida- Sube ya mocoso antes de que me arrepienta.

--JA, JA, JA, pero… Si aún lo recuerdo… ¡Pero aun así me amas! –dijo el rubio emocionado al recordar sus travesuras de pequeño.

--Estoy empezando a dudar de mi cordura, la cual acabas poco a poco, si quieres recuéstate, tu nana Elly se encargó de ver lo de tus mallas y licras no tienes por qué preocuparte. Descansa un rato hoy prometiste que le ayudarías a enseñarías a los niños pequeños piso y barras.

Niall asintió con la cabeza y prosiguió a meterse a la parte trasera del automóvil.

--¿Quieres un poco de música pequeño? –pregunto más en un susurro al ver que este se estaba acomodando para dormir.

--Si por favor. –Respondió pestañando aletargadamente mientras se acomodaba para dormir- ¿Si no es mucha molestia podrías pedir el réquiem en re menor de Mozart?

--Claro, la traigo en mi reproductor. –le dijo sarcásticamente.

Niall le tendió con los ojos adormitado su iPhone para que lo conectara en el reproductor. Pronto se empezaron a escuchar las suaves notas de Mozart pero para esto Niall ya se encontraba semi-dormido. Casi no se dio cuenta cuando Bouhanna hablaba con alguien, de seguro Greg. No le tomo mucha importancia. La música lo transportaba a su lugar feliz.

“Estaba en un cuarto lleno de espejos… Solo veía mi reflejo, a donde sea que volteara solo me veía a mí mismo, y no me guastaba lo que observaba un chico pálido, sin mucho cuerpo, demasiado delgado tal vez pero por más que comiera no engordaba.

--¿Hola? –Llamo el rubio- ¿Hay alguien ahí…?

Los espejos empezaban a desaparecer… Ahora se encontraba corriendo por un bosque… ¿Por qué corro? Se preguntó pero aunque deseo parar su cuerpo no se lo permitió, unas antorchas se extendieron aparecieron a lo largo como formando un camino que lo llevaría a algún lugar. Continuo corriendo hasta que se topó con una especie de cueva, era caliente y húmeda, inclusive dificultaba el respirar. Las paredes eran rojas y estaban grabadas de dibujos –o al menos eso creía Niall- pero aunque la cueva parecía antigua el piso era de mármol nuevo pulido… Una dulce melodía empezó a sonar a lo lejos… Era parecida a aquella que sonaba en su cajita musical con unas bailarinas… Ese sonido era hermoso… Lo atraía, no se pudo resistir y comenzó a seguirlo. Mientras lo seguía, las paredes se hacían más pequeñas, pero la música era irresistible.

Se encontró de un momento a otro enfrente de una puerta. --¿Hay alguien en casa? –pregunto mientras tocaba delicadamente la puerta, esta se abrió. --¿Puedo pasar?

Por un momento se sintió tonto preguntar… Una corriente fría paso por toda la cueva logrando que los vellos de su cuerpo se erizaran, algo andaba mal, el lugar ya no parecía agradable. Ahora era inhóspito, lo sintió agresivo, la música le provocaba ganas de correr. Algo paso por sus piernas dejando un rastro de baba.

--¡¿Pero qué demonios?! –grito Niall completamente asustado. Algo no estaba bien algo no estaba nada bien, comenzó a correr y a medida de que trataba de huir de ese lugar el pasillo se hacía más largo logrando el efecto de que Niall no hubiese avanzado absolutamente nada estaba totalmente desesperado y solo.

Eso era. Estaba completamente solo.

Una melancolía invadió su corazón, el dolor en el pecho era muy profundo… Demasiado, estos sentimientos no eran suyos, esto no podía ser… Algo estaba mal, tenía que despertar. Y lo comprendió… Él estaba soñando nada de esto era real… Nada era real, todo estaría bien. Logro escapar de la cueva y ahora se encontraba en un bosque, los árboles se retorcían a su alrededor como si tuviesen vida propia.

--¡AYUDA! ¡¿Alguien puede escucharme?! –grito a todo lo que sus pulmones daban, pero aun así era inútil, nadie podía escucharlo, nadie lo escucharía. Una figura blanca rubia paso por entre los arboles con un vestido blanco… Una mujer, pensó.

--¡Hey, por favor ayúdame! No puedo salir de aquí. –trato de hablarle a la chica. Pero esta solo seguía eludiéndolo.

--No podemos conocernos aun, no es hora. –le susurro. Pero parecía más como si los árboles se encontraran hablando con él.

--¿Pero qué cojones? Definitivamente cuando despierte dejare los caramelos para el desayuno y el Danonino, hoy sabia raro, o tal vez fue ese sándwich raro que me comí… o el pie de manzana. –se dijo a sí mismo, algo estaba totalmente mal. Ahora no sentía su cuerpo y súbitamente fue transportado a un cuarto blanco… Y sintió como su piel se caía. –-No es posible. –murmuro. Su piel se comenzaba a caer, luego sus uñas, era como si estuviese hecho de cera, y se empezara a derretir, sus dientes se caía… Pero dolía, dolía como si fuera real, sentía que estaba siendo quemado en carne viva y entonces…”

Despertó.

Niall se encontraba bañado en sudor, definitivamente ya no comería más chatarra, esas cosas se le estaban empezando a subir a la cabeza.

--¿Pero qué cojones acaba de suceder…? –Miro que ya no traía su ropa de la escuela ahora solo estaba en sus boxers, era algo raro que su nana lo haya cambiado, no lo hacía desde que estaba en cuarto de primaria, bajo su mirada a sus muslos y noto que estos ahora poseían moretones nuevos que se confundían con los verdosos antiguos, aunque la mayoría se lo debía al caballo en gimnasia, ese aparato sí que era difícil, pero luego noto el rasguño en su brazo derecho, era exactamente como el que se provocado en el sueño…

--No eso es imposible. De seguro fue la golpiza que me dio Alec, ¿Pero porque estos moretones? –dijo tocándose la piel de las piernas. --Esto no está bien, se supone que estoy aun en el coche, tal vez este durmiendo y solo sea uno de esos sueños dentro de otros sueños. –susurro mirando nuevamente sus piernas, no escucho los pasos de botas que se acercaban a él hasta que ya era demasiado tarde. --¿Pero, como llegue aquí?

--Sencillo aprendiste a tele transportarte. –dijo una gruesa voz.

Niall dio un brinco sobre su cama buscando como cubrirse el cuerpo para que Greg no notara sus moretones. --¿Me vas a decir quién te golpeo? ¿Oh voy a tener que averiguarlo yo por mis medios? Y sabemos que en la segunda opción no te beneficia porque esa incluye a tus padres. –demonios, ahora si estaba en problemas. «Greg de seguro vio todos mis moretones mientras estaba dormido.» --Niall y ni te atrevas a mentirme, sabes que te doy tu espacio hasta ciertos límites pero esto es demasiado. Si no me hubiese querido asegurar que la enfermería no había dejado pasar ningún hematoma o hueso fisurado de seguro que no me hubieras comentado nada ¿O me equivoco? –volteo a verlo a los ojos. Error, esos profundos ojos verde-azulados eran penetrantes, no podías mentirle, no podía mentirle a su casi padre.

Niall bajo la mirada avergonzado sonrojándose y jalando las sabanas que habían a su alrededor tratando de cubrirse como si eso fuese a hacer que Greg olvidara que los moretones estaban ahí.

Greg se acercó a la orilla de la cama de Niall eh hizo que este alzara su mirada.

--Niall, todo está bien, sé que algunos son de la gimnasia, –Sonrió- te eh visto y lo que eres de bueno en piso te falta en caballo. -Soltó una pequeña risa y se rio con él.

--Es cierto, pero mi belleza lo compensa. –dijo tratando de hacer una broma. Que o le salió muy bien o muy mal porque Greg empezó a descongonarse su mi cara.

--Tú eres tierno e inocente no hermoso. Aunque suena muy tierno que lo digas.

«Oh que horror, no otra vez.» Solo sintió que el calor recorrió toda su piel. « ¡Qué vergüenza! Jamás llegare a ser sexy o atractivo para algún chico. Pero bueno, estaré esperando a mi príncipe. El llegara.»

--Awww… ¡QUE LINDO! Estas todo sonrojadito. –grito Greg mientras agarraba sus mejillas con ambas manos para agitarlas como si fuera un bebe.

--¡GREG POR DIOS NO TAMBIEN TU! –contesto molesto, y alejando sus manos de sus cachetes. --Ya tengo suficiente con soportar a Louis, no tu por favor, no tú. –dijo haciéndole un pucherito.

--Tranquilo no lo hare, solo que es irresistible, ahora cámbiate y toma tu maletín de danza, cargue tu teléfono que lo tenía Bouhanna, dijo que querías escuchar música, recuerda que hoy tienes…

--Si, si, si ya se tengo dos horas de ballet, media de descanso, dos de gimnasia y ayudare a Sasha con el grupo de niños ya que Sergei está enfermo. No te preocupes, no lo olvide, además solo enseñare piso y aros…

--Barras… -corrigió.

--Sí, sí, sí, eso. Ahora sal por favor que necesito cambiarme. –dijo empujándolo lejos de su cama para que ya se fuera.

--Niall te eh visto todo –volvía a sonrojarse.

--¡GREG! ¡¿Es que acaso tú y Louis disfrutan haciéndome sentir abochornado, como siquiera pueden decir eso con tanta naturalidad?! –grito escandalizado, « ¿Es que estos dos no conocían lo que era la palabra intimidad?»

--Claro, lo dice el rubio de ojos azules que solía correr por toda la casa, desnudo peleando porque no se quería bañar. –recrimino.

--¡Eso sucedió hace años cuando era más pequeño! Ahora es borrón y cuenta nueva. –dijo cubriendo su rostro. « ¡Que oso!»

--JAJAJAJA, ¿Recuerdas cuando te escapabas de la casa y tenía que irte a buscarte fuera de la casa y luego regresabas corriendo sonrojado tratando de taparte la entrepierna? –sonrió «está tratando de hacer que me sintiera peor. ¡Y está funcionando!»

--Ugh, solo fueron unas cuantas veces. –dijo mirando hacia otro lado.

--Niall, era todos los días a la misma hora. Ahora vístete y apúrate que te están esperando. Te quedan quince minutos. Y no quiero que llegues tarde, no planeo quedarme más tarde solo porque al señorito se le ocurrió hacerse el flojo y llegar más tarde, además al final, el que tiene que hacer 500 plies es otro. –dijo Greg no solo queriendo que Niall se apurara, si no que tenía que buscar a Louis también y llevarlo ante la junta del credo de los asesinos, ya tenía 18 años, era la hora de su llamado y que empezara con su iniciación o que su padre cambiase de opinión.

Detestaba férreamente al credo, pero no podía hacer nada, «Ojala y su padre solo lo coloque en uno de los puestos de los caballeros de la sala roja. Louis no era un chico que pudiese asesinar a alguien. ¡Por dios era un crio, aun lloraba con la muerte de Mufasa y el inicio de Up!»

Niall corrió por toda la habitación buscando sus mallas negras y sus medias puntas mientras trataba de acomodarse el cabello de tal modo que la miss no se diera de cuenta que había estado durmiendo en lugar de practicar sus piruettes, se colocó sus mallas, cada vez le quedaban más apretadas. « ¿O me estaba creciendo el culo, o la mucama las lavo con el detergente equivocado y por eso se estaban encogiendo? Si definitivamente era la segunda.»

Se colocó su playera y en sima su camisa holgada con el logotipo de la escuela sobre su corazón y a los lados en la manga una tira bordada dorada que significaba el nivel en el que solía competir.

Oro.

Después de comprobar que estaba presentable se puso sus convers y cogió su maletín, no se molestó en ponerse un short, al final así se sentía libre, no le gustaba usar ropa interior solo llevaba el protector, así que no afectaba en nada realmente. Salió corriendo de su habitación con su maletín; que más bien era una mochilita donde cabía absolutamente todo. Realmente no deseaba hacer plies, pero lo que menos deseaba era ver a Greg enojado. Se subió al coche y mientras Bouhanna arrancaba él se colocaba sus audífonos…

--¿Joven le puedo hacer una pregunta? –dijo Bouhanna. Eso era raro en él, generalmente no le gustaba entablar conversaciones, si acaso bromas.

--Claro dime. –contesto con una sonrisa.

--¿Para qué se coloca los audífonos? ¿Por diversión, costumbre o por aislamiento? –pregunto mirándole por el espejo retrovisor. Se quedó sin habla, nunca se lo había planteado.

--¿Po-porque-que lo pre-pregunta? -contesto nervioso, claramente podía sentir como mi mejillas se teñían de ese tono carmesí al cual ya debería de estar acostumbrado. «Joder... Últimamente pareciera que las personas conspiraban para hacerme sentir abochornado. Decidido, me haría un bronceado para ver si con eso se notaba menos.»

--Solo por curiosidad, siempre eh visto que se los coloca casi todo el tiempo. –dijo mientras paraban en un semáforo.

--Lo que pasa es que no creo que mis gustos sean de su agrado. –dijo con una tímida sonrisa.

--Pruébeme, solo que en música clásica soy un completo ignorante. -Dicho eso le pase mi iPhone para que lo colocara en las bocinas. Counting Stars de One Republic sonaba como el soundtrack del viaje mientras miraba por la ventana e imaginaba vidas y posibilidades distintas mis manos bailaban al ritmo de la música formando figuras que simulaban ser un ave que volaba dentro del carro.

Le gustaba jugar, aun tenia imaginación. Volteo a ver a Bouhanna y se dio cuenta de que le estaba sonriendo al verle jugar.

Se sonrojo, pero esta vez no le importo.

Niall era completamente ajeno a lo que sucedería esa noche…

por **thebraveisLouis** Dom 19 Ene 2014, 6:29 pm

ay dios pobres de mis bebés no se merecen eso :misery: y Harry sera tops? soy feliz!!!11

por **lizbeth_NH** Mar 21 Ene 2014, 5:01 pm

¡Hello!,ya lo lei(?.
Amo esta novela mas de lo que pordrias imaginar askjhakjshakjsa. :niña:
De tus novelas,esta es la que mas me gusta,no sé creo que fue porque la lei primero. Venganza Equivocada HOT (Ziall, Larry) - Página 3 1608199403

Venganza Equivocada HOT (Ziall, Larry) - Página 3 1608199403

O porque trata de venganza,Idk. Venganza Equivocada HOT (Ziall, Larry) - Página 3 4162775227

Te quiero mucho,y espero que la sigas proooonto Venganza Equivocada HOT (Ziall, Larry) - Página 3 961472736

por **loveanime_or** Miér 22 Ene 2014, 5:15 pm

hoo yo quiero a un niall asi a mi lado este em

tan tierno he inocente y todos lo aman y ese maltito lo odio

eso mi imaginacion se fue por ahora

beso y abasos

por **ParadojaViva** Lun 27 Ene 2014, 9:20 am

thebraveisLouis escribió:ay dios pobres de mis bebés no se merecen eso :misery: y Harry sera tops? soy feliz!!!11

Awwww.... Lo se pero para experimentar la felicidad hay que sufrir primero. sino, ¿Como sabrias que es la felicidad? Y sip, Harry tops :B

por **ParadojaViva** Lun 27 Ene 2014, 9:22 am

lizbeth_NH escribió:¡Hello!,ya lo lei(?.
Amo esta novela mas de lo que pordrias imaginar askjhakjshakjsa. :niña:
De tus novelas,esta es la que mas me gusta,no sé creo que fue porque la lei primero.
O porque trata de venganza,Idk.
Te quiero mucho,y espero que la sigas proooonto

Awwwww... Gracias por leerme y comentar... Pronto la continuare en wattpad... Subire nuevo episodio pero shhhh... y En lo que refiere aqui, pondre el siguiente :D espero que les encante... <3 BESOS, y la venganza como el sabotaje es facil y divertido.

por **ParadojaViva** Lun 27 Ene 2014, 9:23 am

loveanime_or escribió:hoo yo quiero a un niall asi a mi lado este em

tan tierno he inocente y todos lo aman y ese maltito lo odio

eso mi imaginacion se fue por ahora

beso y abasos

JAJJAJA, no importa gracias por comentar... ¿Como estas segura de que es taaaaan tierno? O:

por **AlexaSwag.** Lun 27 Ene 2014, 10:25 am

Hi
Pense que ya habia comentado, pero no TT
LOUISS SERA BOTTOM SIIIIIIIIII
La verdad no se que le ven a Harry de Bottom, por que culo no tiene
Siguela pronto
Venganza Equivocada HOT (Ziall, Larry) - Página 3 961472736

por **ParadojaViva** Lun 27 Ene 2014, 10:40 am

Alexis4Life escribió:Hi
Pense que ya habia comentado, pero no TT
LOUISS SERA BOTTOM SIIIIIIIIII
La verdad no se que le ven a Harry de Bottom, por que culo no tiene
Siguela pronto

Si... Louis es siempre bottom, exepto en venganza cristalina, la princesa es harry <3 pero igual, son muy monos <33
Espero que te guste, e hice una novela nueva. ZIAMM... dale click aqui... Asesino a sueldo y me dices que te oarece? :D *subire capi en momentos aqui*

por **ParadojaViva** Lun 27 Ene 2014, 10:47 am

CAPITULO 05

Greg salió de la habitación de Niall por el corredor, tomo su celular, checo sus correos y luego tecleo el número de Morovoz, y así confirmar el itinerario de Niall. -Sí no lo hacía, y él conseguía otro ayudante sus planes del resto del día podrían irse por la borda-.

--Habla Sasha Morovoz. –contesto un hombre de voz gruesa con un muy marcado acento ruso en las "r".
--Sasha, habla Greg Gallagher. –contesto con una sonrisa, no importa cuántos años trabajase con este, aun le seguía dando risa su nombre, es prácticamente todo lo opuesto a él.
--Oh. Si, ¿Pasa algo con Niall? –pregunto preocupado, él sabía cuál era el secreto de él rubio y lo había ayudado a protegerlo por casi 12 años.
--No, tranquilo Sasha. Solo llame para confirmarte que Niall se quedara después de las 2 horas de gimnasia que tiene.
--¡Oh, por supuesto! Qué bueno usted confirma, mi compañero Sergei se encuentra indispuesto y no hay nadie mejor que mi hombre Baryshnikov para ayudarme. -a pesar de los años el hombre no perdía su fuerte acento y tampoco terminaba de aprender bien el idioma, pero era uno de los mejores entrenadores de toda Inglaterra.
--Me alegra que estés de acuerdo. –contesto.
--¿De acuerdo? Pero si me encanta tener a mi zvezda conmigo, ¿Quién no amaría a ese comelón? Usted sabe que Sasha no trata bien a cualquiera, pero mi Baryshnikov es la excepción a todo. –dijo aquel hombre con singular alegría, claro que haberlo visto crecer, y este tenía la mentalidad de que Niall le pertenecía y conforme crecía este solo le decía que si (sin saber las consecuencias que esto podría traerle) y Niall siempre trataba de complacer a su entrenador siendo el mejor.
--No se preocupe, comprendo totalmente a lo que se refiere. Y sobre eso, necesito que no deje a Niall salir de edificio. –dijo totalmente serio.
--¿El credo llamara a su primo no es así? Si se pregunta cómo lo se mi zvezda me pidió ayuda para comprarle un regalo el año paso en Diciembre y me comento que tenía que algo así como súper especial porque su primo cumplía los 18, y creo que ya es hora de que sea un verdadero hombre. –dijo con notable pena y melancolía en su voz gruesa, sin duda él también sabía lo que eso significaba.

Un nudo se formó en la garganta de Greg, no quería creer lo que el hombre le decía, pero era verdad hace meses que Louis debió atender el llamado de su padre, pero este solo espero hasta el último momento para informarle que se tendría que unir a uno de sus “sociedades” como le gustaba llamar para aparentar, solo esperaba que su padre tuviese compasión de su propio hijo, no podía ser posible que lo aventara a la boca del lobo.

--Si, así es. Lamentablemente ahora mismo debo llevarlo. Detesto esto. –confesó.
--No lo dudo, nunca tuve el placer de conocerlo, pero lamento su destino si es el que creo. –Se quedó callado por unos segundos- sabe, en la madre Rusa tenemos un dicho “море лежит не только мертвые рыбы плавают”, que significa; “En el mar de las mentiras no nadan más que peces muertos”.

Greg sabía exactamente a qué se refería.

--No le pasara nada, de eso me encargo yo –Greg suspiro y llevo una de sus manos al tabique de su nariz. --Mi preocupación ha dejado de ser el sí vivirá hasta los 18, porque sé que lo hará, y daré mi vida por ello si es necesario. Mi preocupación es la cantidad de enemigos que acumulan sus padres, y que la seguridad no llegue a ser suficiente y lo encuentren. Estoy entre un estado de paranoia y alerta completa.
--Sasha comprende lo que quieres decir mi amigo. Pero debes tener en cuenta que la verdad al final sale a flote, tal vez, ya es hora de que lo sepa… No digo que yo valla a hablar, eso no es de mi responsabilidad…
--No, no lo es. –gruño Greg.
--Lo se amigó mío, lo que quiero decir es… Que si él se llegase a enterar de otro modo, mi pequeño Baryshnikov podría verse influenciado e incluso romperse, no me gusta pensar que es débil, pero si es muy vulnerable y lo sabes. No quiero que un día se entere y piense que su vida es una mentira o una actuación y que todos a su alrededor le mintieron, que crea que nadie le mostro amor verdadero. –suspiro pesadamente.

La tensión que esa llamada estaba generando se podía cortar con una hoja.

--Lo sé, sabes… No… No deseo hablar de esto, además no es seguro, lo que ahora necesito es que me asegures de que Niall no va a salir -continuo Greg tratando de cambiar el tema- y que todos los encubiertos estarán listos ¿De acuerdo?
--Sí, no se preocupe. Por mi madre que nada le ocurrirá a Niall en este día. –dijo, y Greg sabía que era en serio.

Termino la llamada y entro a su centro de comando, alcanzo a observar como Niall salía corriendo por la puerta principal en busca de Bouhanna para llegar a sus clases.

«Perfecto.»

Ahora solo tendría que localizar a Louis, sus fuentes le informan que este se encuentra en la playa Brighton, solo tiene que apurarse para tomar la carretera 8 antes de que la interestatal se congestione y tarde más en llevarlo a casa con su padre y acompañarlo a la sala roja.

Encendió el chip rastreador de Louis y lo confirmo, el seguía en el mismo lugar que hace un parte de horas. Tomo su pistola y la guardo en su funda junto con dos cartuchos –nunca se sabe cuándo serán necesarios- tomo las llaves de su carro, salió por la puerta principal de la casa tecleando el código de seguridad después de él y se subió a la Range negra dejando que su mente lo llevasen a viejas memorias que había compartido con los dos pequeños.

--Que rápido pasa el tiempo. –ojala se detuviera, susurro. Aunque nadie lo podía oír.

El mayor estaba consciente del efecto que el rubio solía causar en las personas, sobre todo cuando era aún más pequeño. Todavía recuerda la primera vez que lo llevo al gimnasio, y este se reusaba por flojo, sin pensar que terminaría siendo su pasión.

*flash back*

--Vamos dormilón, tienes hoy tu primera clase apúrate, ponte tu uniforme. –susurro Greg al oído de Niall tratando de despertarlo.
--Ño. –y se volvió a acurrucar.
--Vamos, vamos, vamos, ¿no quieres ir a tu primer día? -insistió ahora jalando al pequeño rubio que se escondía cada vez más entre su mar de sabanas.
--Ño Greg, quiero dormir.
--Tienes que levantarte ¿O quieres que te cargue pequeño? –me acerque a él porque ya sabía la respuesta. De entre la sabanas salió un pequeño rubio con el cabello muy largo, los ojitos azules medio abiertos aun somnoliento y estirando sus bracitos para que lo cargara.

«Tan predecible mi flojo querubín.»

--Cámbiame si quieres, pero aún tengo sueño y hambre. –reí ante su respuesta y luego le quite cuidadosamente la camisa junto con sus pantalones, cuando trate de jalar sus boxers una pequeña manita me detuvo y un rubio sonrojado y escandalizado me pregunto.
--¡¿Pero qué haces, ño, ño, ño, ño, mis boxers ño?! –dijo ahora si despertó y con las sabanas hacia una especie de capullo como tratando de protegerse. Solo se veían mechones de cabello rubio, sus ojos azules como el océano y mus mejillas que se tornaban de un color rojo carmesí.

--Niall ya lo discutimos tu entrenador dijo que no debías llevar ropa interior, son las reglas al igual que en ballet. –dije tratando de negociar con el pero sabía que era imposible. A este lo tendría que sobornar.
--Ño Greg, ellos… Ellos podrían ver mi Willy… -dijo con las mejillas totalmente rojas y mirando a donde se supone están sus piecitos.
--¿Willy, quien es Willy Niall? –«acaso este sería… No… No puede ser.»
--Es mí… “ya sabes” –dijo en un susurro- le digo así porque no quiero que los demás sepan de qué hablo, y no me gusta decirle pajarito, es muy común.
--Awww… Niall no tienes por qué preocuparte, pensé que dirías eso así que te compre esto –le dije para luego mostrarle su protector. -- ¿Sabes lo que es? –el negó repetidas veces con su cabeza.
--Es un tipo de “calzoncito” si lo quieres llamar así que cubre tus partes… ¿Quieres probártelo? Créeme que son cómodos.
--Ño, eso solo es un pedacito de tela, ño cubre nada.
--Vamos, pruébatelo y te compro un helado cuando salgas o vamos a Nando's. –El rostro de Niall se ilumino al instante, sin pensarlo dos veces tomo el protector y salió corriendo a su vestidor para probárselo.

Minutos después regreso un pequeño Niall con el rostro sonrojado y tratando de taparse, al parecer si le había quedado bien, usualmente esos protectores se usaban en el soccer, futbol y el rugby pero como estaba seguro de que su pequeño jamás accedería a ir con solo el uniforme a sus clases decidió buscar una alternativa.

Busco uno que solo fuera tela y no plástico como usualmente son.

--Greg, esta cosa no sirve, mi traserito esta al aire mira. –dijo Niall para luego voltearse y mostrarle que en efecto, lo único que cubría su protector era la parte de enfrente. --Pero ño importa, es mejor que nada, además quiero comer ese helado y más vale que sea el más grande gigantorme de toda la tienda.

Ahí estaba el truco; solo lo hacía por su helado. No importaba al final su uso seria el mismo, Greg termino de vestirlo y lo llevo con Sasha, un entrenador de Gimnasia ruso, que no solo era eso, si no también uno de los guardaespaldas infiltrados por sus padres quienes ahora le encargaban el hecho de cuidar y educar a este pequeño rubio.

Desde el momento en que Greg noto la conexión de Sasha y Niall, él sabía que estaría bien cuidado, pero no por eso bajo la guardia, es más implanto a los hijos de sus guarda espaldas en la academia de gimnasia y ballet –a modo de “beneficios para sus hijos”- para que estos tuvieran una excusa y beneficio por estar ahí.

Y con el paso de los años se convirtió en una especie de rutina, en la que casi todos los días el ojiazul practicaba por las tardes mientras era vigilado.

Al final Niall termino amándolo.

*fin del flash back*

Greg manejaba a pocos metros de donde se encontraba el Audi de Niall, y a lo lejos distinguía una pequeña y bronceada figura sentada en la arena alejada de todos y mirando hacia la nada, como creyendo que era lo más interesante y hermoso que alguna vez fuese a ver, era Louis.

Estaciono el carro, bajo y corrió para alcanzarlo a las orillas de la playa en donde se encontraba. Al llegar pudo notar que sus ojos estaban rojos como si hubiese llorado por horas y estaba a punto de quedarse dormido por el cansancio. No soportaba verlo así, era como su segundo hijo, se acercó a él y a pesar de ser algo muy poco común en él lo abrazo.

--¿Greg-Greg eres tú? ¿Qué haces aquí, como me encontraste? –Pregunto con la voz ronca… «Debe llevar horas llorando.»
--¿Qué sucede Louis? ¿Qué está mal? «Esos detalles no importan, mis fuentes me mantienen bien informado» –pregunte con un verdadero tono preocupado.
--Si te lo dijera me odiarías, yo me odio. ¿Por qué no había de odiarme todo el mundo? Merezco ser castigado, soy una abominación… -murmuro mirando al horizonte como si este fuese a desaparecer en el momento en que dejara de verlo.
--¿Pero de que hablas, Lou? ¿Qué es lo que te tiene así, paso algo con Eleonor? –y al momento en que la menciono empezó a llorar con más fuerza. «De acuerdo, ya entendí ese es un punto delicado.» --¿Le sucedió algo? –Insistía odiándose porque sabía que le hacía daño, pero tenía que enfrentar esto ahora, tenía que sacarlo todo y no prolongarlo más, más y más… --¿Terminaron acaso?

Greg dio en el blanco, porque en ese momento Louis se soltó a llorar sobre su pecho desconsoladamente.

--Ella termino conmigo. Al parecer solo me quería por mi dinero. –dijo recordando las últimas palabras de la castaña, eso realmente le había dolido, su pobre corazón quedo hecho añicos bajo sus zapatilla Burberry, que irónicamente él había comprado.
--¿Por qué decidieron terminar?
--La encontré en el baño… Con Alec…
--Pero pudo haber sido cualquier cosa, tal vez… -trato de buscar una excusa pero fue interrumpido por Louis.
--No Greg, no hay ninguna excusa. Ella tenía su boca, en el pene de él, dudo mucho que hayan excusas como “Oh, es que me tropecé y mi boca callo en su polla por accidente” –dijo haciendo una mueca de disgusto, realmente estaba dolido. –Pero eso no fue lo peor.
--¿Qué fue entonces, porque no creo que haya algo peor que eso Louis, o si? –Louis comenzó a llorar más y más. « ¿Es que aquella muchacha tenía una ETS y se la había contagiado…? ¿O tal vez, solo tal vez ella…?» --Louis ¿Ella estaba embarazada? –pregunte temiendo la respuesta.

Louis miro a Greg como si a este le acabaran de crecer 2 cabezas y tuviese la piel verde antes de exclamar.

--¡No dios no! ¡Nunca tuvimos relaciones, yo quería que ella se casara conmigo antes de eso! –metió su mano a su bolsillo y saco una pequeña cajita. –-Ya lo había planeado, yo creí que era la correcta, creí que debía hacerlo dado a toda la historia que llevamos. –confeso admirando aquel anillo. --Ya lo había hablado con mis padres y los suyos, hasta mi padre había decidido cambiar mi elección de “sociedad por lo mismo” pero creo que ahora, simplemente no va, y eso no es lo peor. –dijo empezando a llorar otra vez sobre el hombro de Greg mientras hacia un pequeño hoyo en la arena.
--¿Qué es lo peor Lou? –susurro en el oído de Louis. Sabia, que eso no era lo peor, o al menos lo presentía.
--Si te dijera, nunca más me verías igual, me tratarías diferente.
--Louis lo que sea que sucede puedes decírmelo, los dos sabemos la verdad de toda tu familia, el oscuro secreto que tenemos que callar para Niall…. Dime, ¿Qué puede ser peor que eso? –lo separo un poco para observar su rostro, me miraba con una profunda tristeza en sus ojos… «Es similar a la de… Pero no podía ser posible… A MENOS QUE…»

--Créeme, me odio a mí mismo por lo que siento, no es natural, no está bien. –«sí, definitivamente es lo mismo que Niall.»
--Ya sé lo que es Louis, el que tu orientación sea diferente no equivale a que seas una mala persona, y tampoco es anti natural, simplemente es.

Louis al escuchar eso se alejó de Greg y lo miro a los ojos, ¿Cómo era posible que lo supiera? ¿Es que Eleonor tenía razón y todo el mundo lo sabía? No, no podía ser… Entonces ¿Cómo es que el sabia?

--¿Co-como es que-que sabe-bes? Pregunto un Louis muriéndose de pena, nunca se había sentido tan avergonzado e intimidado ante la penetrante mirada de Greg. «Guau, ahora se a lo que se refiere Niall con que no puede mentirle».

Greg sonrió abiertamente, ya sabía cómo manejar esta situación. --Lo mismo le sucedió a tu primo cuando tenía 5 años. –dijo Greg tranquilamente.
--¿QU-QUE? ¿OSEA QUE NIALL…? ¿ES…? –dijo Louis sin dar mucho crédito, aunque en realidad ya lo veía venir por… Por cómo era en general... Todo él.
--Si, tu padre también lo sabe, y no tiene nada en contra si eso es lo que te preocupa, te sorprendería saber que en su juventud él también fue bisexual, hasta que se enamoró de tu madre y se casaron, pocos años después llegaste tú como fruto de su amor. –dijo con una total tranquilidad, casi como si hablara con Louis todos los días sobre las aventuras sexuales de su padre… «Oh. Por. Dios» pensó el castaño.
--¿Mi padre es bisexual pe-pero el siempre, ha lucido tan varonil?
--Louis, créeme que era varonil, en una ocasión un amigo mío fue pasivo suyo.
--¿Qué significa eso? –pregunto Louis con inocencia. «Mierda, eso no se supone que deba saberlo.» Se regañó Greg.
--Lo aprenderás en cuanto accedas a ir con el psicólogo. Se lo que piensas y déjame decirte que no, no es esa clase de psicólogo, este más bien te ayuda y te orienta a definir tu sexualidad.

Louis estaba petrificado acaso él estaba mal, al parecer la cara que había puesto había sido muy rara o muy graciosa porque pronto Greg no lo pudo evitar y se empezó a reír, Louis sonaba tan inocente al hacer esa pregunta y más con el tono de voz que había utilizado.

--Louis, lo lamento, pero tendrás que aceptar esto poco a poco, es algo común que suceda, y para aclarar tus dudas te puedo llevar con el psicólogo, repito este solo te aclara y te informa si tienes tendencias homosexuales de acuerdo a la escala de Kinsey, según la homonormatividad de 1950, aunque si me lo preguntas, yo solo creo que deberías amar a un ser humano.

--¿Te refieres a una mujer no? ¿Y cómo es que sabes tanto? –cuestiono Louis intrigado por la basta información que le presentaba Greg.
--Te lo dije, ahora toma tus cosas que debemos ir con tu padre, hoy es el día donde va escoger a que sociedad pertenecer, si te da a escoger… Elige a los caballeros, de entre todas es la más viable para ti y la menos peligrosa... Y Niall solo fue un año con el psicólogo, dijo que él había resuelto todas sus dudas, y que si sentía que era gay. Pero no por eso mi amor por el cambio... –lo volteo a ver fijamente y le dijo- Te amo, quiero que sepas eso, no me importa tus preferencias, eres un ser humano y como tal, mereces y necesitas ser amado, créeme que no seré ni el primero ni el ultimo que lo hará, pero así como hay personas que lo aceptan otra gran parte lo rechaza, y tienes que entender que no debes odiarte por cualesquiera que sean tus preferencias y tampoco castigarte creyendo que eres una abominación… -tomo un respiro y continuo ahora con una sonrisa en el rostro. --Cuando les digas a tus padre, antes haz un pastel, no. No me veas raro solo hazlo, dáselo y diles la noticia al final o escríbela, pero asegúrate de que sepan que lo único que quieres recordar de malo en ese día será el sabor del pastel que cocinaste.
--¿Y cómo estás seguro de que cocino mal? –preguntó juguetón.
--Me estás diciendo que de toda la plática lo primero que me vas a preguntar ¿Cómo se si cocinas mal? Louis por favor, no se te quema el agua solo porque es agua.
--….
--Oh, ya veo lo que hiciste –me sonrió- muy bonito, más original. Cuando lleguemos a casa veremos todas esas películas que les encantaban cuando eran pequeños y comeremos sus postres favoritos.

Los dos se percataron que llevaban más tiempo del que creían ahí en la playa, Louis le dio una última mirada al mar para observar como el sol se ocultaba tras este, se agacho y en el hueco que había cavado enterró el anillo, para enterrar simbólicamente su pasado.

El ocaso lucia casi como si las olas pudiesen alcanzar al sol pero nunca tocarlo y apagarlo, y comprendió que el dolor que siente y que probablemente la gente le ocasionaría por sus gustos era inevitable, pero el sufrimiento era opcional.

(...)

Bouhanna estaciono el auto afuera del gran edificio de la academia de Niall, -sin que el menor se diera cuenta mientras recogía sus cosas y se ponía las medias puntas- espero la señal que indicaba que todo el perímetro había estado asegurado, solo que habían más personas de las que esperaban pero era normal ya que era la temporada de competencias y todos los padres traían a la familia para que vieran el progreso o de sus hijos, o como otros que los exhibían como trofeos.

--Adiós Bouhanna, diviértete o come un helado. –se quedó pensativo. --El helado hace a las personas felices, y tú necesitas un poco de felicidad. –sonrió sin darse cuenta del doble sentido de sus palabras.
--Lo que necesito es tirarme una buena noche. –contesto sonriendo lascivamente. --Pero no creo que entiendas.
Se giró a verlo y se quedó pensativo. --¿Te refieres a dormir, no?, como sea… Adiós, besos nos vemos más al rato, recuerda que hoy salgo más tarde.

Niall bajo del carro con su mochilita de danza y Arctic Monkeys sonando en sus audífonos pero se sentía algo raro… Como si fuese observado aunque no era algo realmente nuevo considerando que las competencias estaban a poco de iniciar y todo mundo quería estar en la liga de seleccionados.

El ya no tenía que preocuparse de eso, Sasha siempre lo escogía de entre los primeros no solo por derecho de piso, si no por ser uno de los más destacados, al igual que en ballet, sentía algo de pena por esos chicos a los que sus padres forzaban a ser los mejores, solo se deprimían cuando no lograban algo y crecían sintiéndose fracasados, justo como en la escuela. Irónico.

Cruzo la puerta de la entrada para encontrarse con un claro ejemplo de lo que se refería; Ellie su pareja en ballet se encontraba peleando con su madre otra vez era la cuarta en lo que va de la semana y solo la jaloneaba demasiado fuerte del brazo, seguro dejara moretones, «Eso no es amor, eso debe ser una tortura…» pero en cuanto lo vieron su madre la soltó y ella escapo corriendo lo más rápido que pudo.

--Buenos días Niall. –dijo la madre de Ellie. --¿Cómo te encuentras? –regándole una de sus sonrisas hipócritas. Casi podía leer que ella solo era amable conmigo porque los padres de Niall eran sus jefes, al nunca le agrado la forma en que trataba a su propia hija.
--Muy bien señora Goulding, gracias por preguntar, pero con su permiso… Tengo que practicar. –no deseaba hablar con ella, era realmente una señora demasiado desagradable, Niall no podía mentirle y fingir que aceptaba lo que hacía.

Cuando entro al salón note que la chica nueva Natasha, estaba hablando con un chico pelinegro bastante atractivo a pesar que no logro verlo bien desde el Angulo que tenía. «Su novio o su hermano de seguro.»

Ella era una pelirroja con una piel blanca como el mármol pero se notaba que le gustaba broncearse, no hablaba con muchos, se dedicaba a tratar de ser la mejor; aunque en ocasiones sentía como si frenara su propio potencial.

Alta para el promedio de las chicas, cuando uno se acercaba a ella podía notar unos ojos grises de un color casi como de tormenta, con carácter muy fuerte y totalmente diferente al estereotipo de una bailarina clásica; el resto de las chicas vestían los clásicos tutus y leotardos rosas, y ella era el cisne negro en representación, única… Salvaje…

Su estilo de baile era el más fascinante del que alguna vez los ojos de Niall hubiesen presenciado. La miss estaba encantada con ella a pesar de su actitud… Pero bajo la mirada de aquel hombre extraño y el tacto que ejercía en su brazo, ella lucia vulnerable…

Era algo completamente fascinante, como si el lograra ejercer cierto poder sobre ella, nunca había visto nada igual, ni siquiera la miss lograba ejercer ese control con las amenazas de sacarla del salón. No tuvo oportunidad de observarlo bien a él porque y ella se dirigió a las barras para empezar a calentar.

Niall dejo su mochilita en el casillero especial que tenía, se quitó su polera y estaba solo con el uniforme de la academia pero sentía otra vez esa mirada sobre mí…

Era única sin duda distinguía entre las demás, pero no logro encontrar al dueño.

Se acercó lentamente al espejo y se observó… No era el más musculoso, ni siquiera el más guapo, ese era Jerry, pero su consuelo era la persona que podía saltar más alto y el más flexible de toda la clase gracias a las dobles articulaciones que poseía por “defecto genético” que en realidad le resultaban como una bendición.

«Hoy toca una hora de esfuerzo o como es más conocida como pero menos dolorosa que la inquisición española…»

Se abría completamente de piernas y estiro lo más que pudo en Split y luego en squash, se mantuvo unos momentos así en la misma posición, su pecho y barbilla tocando el suelo, dolía sin duda alguna pero le gustaba el dolor. Ellie entro abruptamente al salón, tenía los ojos rojos… había llorado… «Ella es mi pareja de baile, todo lo que le suceda me afecta, no por el baile, sino porque siento que es como mi hermana pequeña, siempre sentí una especie de conexión desde que la conocí hace casi 12 años». Lo curioso es que ambos son muy similares. Corío y se acercó a ella.

--¿Estás bien? ¿Qué está mal? –dijo Niall con sus manos en el rostro de ella no quería que le mintiera.
--Nada, solo estoy cansada. Ya no quiero hacer esto, lo odio, nunca creí odiarlo tanto, estoy harta de ser solo un trofeo.

Su cabello se encontraba desalineado a diferencia de su siempre y pulcro chongo, su maquillaje algo corrido bajo los ojos y manchones al final de este, no le gustaba verla así, le rompía el corazón, sin pensarla dos veces la acerco y la abrazo enterrando su cabeza en el hueco de su cuello.

Quería que ella se sintiera en un capullo, protegida y amada aunque solo fuese por él, su madre era una perra siempre la hacía sentir menos, en más de una ocasión tuvo que presenciar como su madre la humillaba delante de las demás chicas, estúpidas.

Eso es lo que eran creyendo que solo con ser bonitas y poner una sonrisa haría que bailaran bien, patéticas y superficiales eso es lo que ellas son.

Niall en ocasiones creía que esa mujer no había dado a luz a Ellie porque ella no tenía ni un gramo de su ADN así, solo le había tocado conocer su lado hipócrita y detestable, eso no estaba bien.

--Cariño, eres hermosa. No te preocupes, esto terminara y veras que pronto estaremos comiendo helados en la bodega a escondidas de la miss… -le dio una sonrisa, o eso creía aunque era más como una mueca.
--¿Por qué eres tan lindo conmigo? ¿Te gusto? –Niall se sonrojo. «Demonios es en serio Niall… ¿Te sonrojas por eso? Patético. Aunque eso no me lo esperaba, pero se me hizo muy tierno.»
--No me gustas, pero no porque no seas hermosa, es otro motivo que no estoy listo para decirlo; lo siento. Te trato bien porque eres un ser humano y como tal mereces y necesitas ser amado –dijo citando las palabras de su psicólogo, mas como recordatorio para él, que para conforte de ella, pero funcionaba de cualquier modo.
--Gracias, es lo más bello que me han dicho, muchos aquí me odian y ni siquiera sé si es por lo que soy o por lo que creen que soy… Ya no me interesa lo que piensan de mi porque… Porque… -no pudo completar la frase, aunque ya la conocía, sabía cuál era ese sentimiento que compartían.

Sus lágrimas corrían sin su permiso sobre sus mejillas, solo pude abrazarla, ella necesitaba amor, tal vez aún más del que yo le podía ofrecer.

--Porque al final siempre terminamos pensando lo peor de nosotros, -finalizo la frase por ella en un susurro cerca de su oído, ahora si todos los estaban viendo, pero ya no me importaba un carajo.
--Si… -contesto con la voz quebrada, con un nudo en la garganta, de esos que no importa cuanto lo intentes, sabes que si no haces algo en ese momento te vas a quebrar delante de todos. –-Todos me odian y creo que yo también estoy empezando a odiarme, y ni siquiera sé porque…. Bueno si lo se… Creo que estoy enamorada de un amigo, pero él nunca me va a hacer caso porque todos creen que soy una falsa y superficial puta pero no es así. Tú me conoces, tú lo sabes, pero ellos no… Y nunca va a saber la verdad porque todo mundo miente y creen que yo lo hago… Mi madre piensa que también lo soy. –agrego lo último con ira. --Nunca seré perfecta, nunca seré perfecta como tu… -Y ese era el verdadero asunto, ella creía que él era perfecto.
--Te prometo que hablare con el… No sé quién es, pero lo hare y no soy perfecto.

Niall se separó de ella para limpiarle los rastros de lágrimas que quedaban en su rostro, le tomo de la mano y la llevo lejos de los demás para tener más intimidad para decirle su secreto…

--¿Niall que haces? –pregunto curiosa. --¿Por qué me trajiste aquí?
--Soy gay. –soltó sin preámbulo, era a la primera persona que le contaba, tal vez debía de haber suavizado la noticia. Pero ella solo se le quedo viendo como si me estuviese de coña.
--¿Estas esperando que te crea? Que gracioso –quiso pasar del pero no la dejo.
--Estoy hablando en serio, es mi secreto. No soy perfecto como creen, soy inseguro, algo tímido y muy estúpido para la mayoría de las cosas y situaciones… ¿Te acuerdas cuando tome la clase de sexualidad es semestre pasado? –ella se comenzó a reír. –Exacto cariño. Ahora volvamos y mostrémosle a esos críos quien es la mejor bailarina de esta academia. –me sonrió abiertamente.
--Claro que si Niall. –me tomo de la mano y comenzamos a andar de regreso.

--Pero claro siempre después de mí. -le guiñe el ojo. -me regalo un golpe en la cabeza, nos apresuramos a regresar y justo unos segundos después de que entramos llego la miss...

«De la que me había salvado. La tortura de reforzamiento empezó.»

{30 minutos antes}

Un hombre pelinegro se encontraba fumando a lo lejos de la academia observando donde se encontraría su nuevo juguete, sin duda disfrutaría conocerlo en personal, pero un no era el momento, por ahora solo se conformaría con acercarse lo suficiente para corroborar que era él.

Los Horan tenían muy bien protegido a su sucio secretito ya que a Zayn le había llevado casi 5 años investigar en donde se encontraba incluso al inicio se sorprendió de su existencia, y la cantidad de barreras que ponían sus padres para que este no fuese encontrado. Incluso tuvo que torturar y asesinar –en ocasione con sus propias manos- a más personas de las que su padre en vida ejecutaba al año, pero todo lo valía porque necesitaba que ellos sintieran el mismo dolor que el sintió al perder lo que más amaba, a sus padres, sus hermanas, su familia.

Exhalo el humo de sus pulmones para después tirar la colilla de cigarrillo y aplastarla con su bota, observando como un depredador a su presa a aquel pequeño y delgado rubio tal y como decía en su itinerario de actividades, al parecer le debía una vida al último bastardo que interrogo, pobre chico, pero… Ya era demasiado tarde no importaba, él estaba en la cabeza y se había asegurado de mantenerse así durante los últimos 5 años y medio que había ocupado el puesto de su padre…

Cada día recordaba ese horrible acontecimiento…

Se odiaba a si mismo por no poder haberlo evitado. Que no fue lo suficientemente bueno para llegar a tiempo.

Su celular sonó, era un mensaje; “Señor, es seguro entrar.”

Sin dudarlo se dirigió a la entrada trasera donde se encontraría con subordinada Natasha, -con la que se encontraría para tener el último informe- una chica pelirroja, perteneciente a los caballeros de la sala roja, a la que había infiltrado hace unos 3 meses para tener una excusa y así ver el nivel de seguridad con la que se tenía conseguir a ese chico, nunca había estado con un hombre además de Liam, y eso solo había sido un beso hace muchos años, ahora el sale con ese chico llamado William que pertenecía a Cosa Nostra, nada mal... «Al menos no era del credo.»

Zayn había estado esperando a lo lejos, en donde nadie pudiese notarlo desde hace casi media hora antes debió a que se encontraba excitado ante la idea de conocer a ese ¿Cómo se llamaba? Amm... Neil, no... Niam, no... No creo que ese sea un nombre, pero su segundo nombre era James, James Horan.

Ya quería conocer a su nuevo juguete.

Después de dos años de intensa investigación y soborno a ciertas personas y dar muertes a otras descubrió una cuenta la cual resulto pertenecerle a los Horan en Rusia, lo extraño era la fuerte seguridad que tenían en esta, ante los ojos de cualquiera incluso de la sociedad secreta de los Caballeros de la Sala Roja y El credo de los asesinos.

Eso era extraño, nadie protegería tanto una simple cuenta.

Entonces hizo que un equipo especializado comenzara a escarbar en los datos y cantidades de pasivos y activos circulantes que tenía constantemente, y lograron sacar las facturas y los datos que corrían en ella. Fue impresionante descubrir que ellos estaban –según lo indicaban las facturas- pagando un colegio privado, el mismo durante años, pero no era cualquiera este era el más importante de todo Londres…

Los materiales de construcción de una casa y equipos de seguridad, gastos a escuelas particulares de idiomas, un club de natación unos años, pero mayoritariamente la academia que se encontraba enfrente de él y demás gastos menores, al inicio creyó que eran extraños, como si de esa cuenta abierta hace casi 16 años –curiosamente cuando los Horan decidieron casase y retirarse 2 años como luna de miel- fuese una tercera vida secreta.

Y entonces Zayn comprendió que no era una tercera vida secreta…

Era la vida de otra persona la que mantenían en secreto ante los demás, probablemente por temor a las sociedades secretas a las que ellos se encontraban unidos, y a las represalias que alguien pudiese tomar…

Que alguien en algún día encontrara su sucio secreto… Alguien como Zayn Malik, que tenía las excusas suficientes para hacerlo, y los huevos para cumplirlo.

--Lástima que no fueran lo suficientemente buenos, -dijo Zayn en un susurro entrando por la puerta trasera se la academia para no ser interceptado por los guardias de James, tenía que ser sumamente cuidadoso y no cometer alguna estupidez, en este punto de su plan podía incluso morir, al parecer si lo tenían lo suficientemente protegido… Pero por la forma en la que actuaban escondiéndose, es casi como si no quisieran que él lo notara, extraño.

Zayn entro al gran salón en donde se encontraba su pelirroja subordinada. Al estar a la cabeza de los caballeros de la sala roja, la mayoría de las mujeres e incluso hombres lo buscaban para conseguir estar a su lado y con suerte pensaban ellos, Zayn se interesara en alguno y se comprometiera con aquella persona, aunque ellos nunca lo amaran.

Solo lo buscan por el poder que ejerce a su corta edad sobre el resto y la gran cantidad de dinero que tiene gracias a las mismas.

--Zayn Malik… Mi señor, pensé que no vendrías. –ronroneo Natasha como una gatita caminando y moviendo exageradamente sus caderas como un gato en cuanto lo vio llegar.

El morocho se acercó sigilosamente a la pelirroja. Para besarla –no como si le importara, pero era el pago que recibía, entre otros… Por los servicios que prestaba- se separó y la tomo del brazo, necesitaba saber si era seguro que él se encontrara ahí, se sentía expuesto sin su máscara, y ahora que la veía a ella, tenía un rostro verdaderamente hermoso, adornado con esas enormes pestañas –no más grande que las de él, muchas mujeres matarían por sus pestañas, él lo sabía- y sus ojos grises lucían aún más brillantes, sin duda era hermosa, pero no quería unir su alma con ella, no era la indicada.

--Nunca rompo mi palabra, lo sabes. ¿Estas segura que no habrá problemas si estoy aquí? –pregunto el morocho volteando a ambos lados, realmente le preocupaba que su fachada se callera, por el momento solo quería comprobar si lo que decían del chico era cierto.

Ella asintió con la cabeza, perdida en la mirada de Zayn.

--De acuerdo, ahora dime, ¿Qué es lo que sabes de él? ¿Cómo luce, necesito estudiarlo? –Zayn arqueo una ceja en señal de que estaba esperando una respuesta. Ella batió sus pestañas como si estuviese en un trance.
--Es algo bajo para ser un varón, probablemente de 1.65-1.70mts. Viene a practicar todos los días a la misma hora, su chofer lo deja en la entrada no sin antes asegurarse que los demás le digan que el perímetro es seguro, y antes de que preguntes sí, sí es seguro que estés aquí, en estos días todas estas perras baratas están estresadas ya que vienen muchas personas a evaluarlos y dependiendo de su comportamiento los escogen para ir a competir, hay demasiadas persona y no todos se conocen, además de que ya me encargue de correr el rumor de que mi novio vendría a verme… -dijo eso en un susurro sonrojándose.
--Bueno si hubieses dicho que soy tu hermano y alguien nos estuviese mirando dirían que cometiste incesto ¿No crees? Además, no es de mi interés y tampoco me afecta. Continua. –ella se sonrojo, pero me sonrió como si el hecho de ser su novio falso por un día fuera la cosa más importante que le sucedió. Patética, pero la necesito.
--Si, si… Bueno, mallas negras, medias puntas negras, grado de oro, estilo con demasiada delicadeza y gracia para ser un hombre, si me lo preguntas… -Zayn no entiendo ni mierda de lo que dijo.
--No te estoy preguntando y tampoco entiendo de lo que me estás hablando, yo no sé de estas porquerías de maricas. Ahora solo dime quien es. –gruño acercándose a ella, ya estaba cansado de eso y ella solo sonreía, « ¿Qué era lo que le causaba tanta risa?»
--De acuerdo señor delicadeza, -me sonrió, demonios no podía enojarse con ella, esa sonrisa siempre le hacía feliz. --Ahora él está justo detrás de mí, no lo mires. El cree que no nos damos cuenta, nos está observando, tiene esa tendencia. Es el rubio que nos está observando fijamente, de seguro preguntándose “¿Quién es este hermoso chico morocho que tengo enfrente?” –dijo lo último coqueteando.
--¿Ah que te refieres? –cuestiono Zayn confundido.
--Tiene tendencias homosexuales, ahora vete antes de que empiece mi clase y la miss te regañe porque ahí sí que vas a llamar la atención. –Zayn asintió con la cabeza y quito su mano de su hombro. --Ah, y ella también, como el entrenador Sasha de gimnasia, ten cuidado, que ellos no te vean mucho, o sospecharan actúa normal, sal a fumar si quieres y regresa a verme como todos los demás padres y campesinos hacen, no se dará cuenta.
--De acuerdo, adiós… Quiero verlo.

Se alejó sin que la chica se pudiese quejar o antes de que le pidiera un beso, el rubio ahora se encontraba caminando como si nada a unos casilleros. Era realmente fascinante, tenía algo… No podía dejar de observarlo…

Se colocó al lado de las demás madres y novios que esperaban a que la clase comenzara y así poder observar sus niños perfectos. «Qué asco. Nunca entendí porque enloquecen tanto por esto, pero a decir verdad Safaa y Waliyha disfrutaban mucho verlo y practicarlo, Doniya era más de gimnasia.»

Estar ahí le recordaba lo mucho que extrañaba a sus hermanas y que daría lo que fuese por verlas bailar o pelear porque una había tomado el Safaa había tomado las zapatillas esas de Waliyha y está ahora ya no las encontraba.

Una lágrima se escapó de su mejilla, le dolía en el alma haberlas pedido, sobretodo de aquel trágico modo, el suicidio nunca debería ser una opción pero al final Doniya tomo la mejor decisión que vio a su alcance. Una ira profunda inundo a Zayn haciendo desaparecer a la melancolía. Volvió a fijar su mirada en aquel rubio y justo en el momento en que sus ojos se posaron en él, este se abrió completamente de piernas… Era ¿Asombroso? Tal vez… Pero, ¿Cómo podía abrirse así si era un hombre? Y entonces lo vio, sus miradas se conectaron por un segundo y…

N/A: Espero que les halla gustado. Besos. :D gracias por leeeme...

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