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Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
Gráficos por y codes hechos por Kaffei e Insxne.
Breakeven {Audiciones Cerradas}
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Re: Breakeven {Audiciones Cerradas}
Mavick escribió:Ohhh que genial esta tu tema me encanta ya estoy maquinando la historia en mi cabecita pero mi ficha tardara un pocito porque me gusta hacer una buena historia y eso, pero mientras tanto:
- Parpadea si quieres ser mío :
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Haha gracias por decirlo y espero tu ficha con ansias para ese rubeo (;
Kurisu
Re: Breakeven {Audiciones Cerradas}
Y por último me voy diciendo:
AY DIOS la ficha de Ems ya quiero leerla completa
AY DIOS la ficha de Ems ya quiero leerla completa
Kurisu
Re: Breakeven {Audiciones Cerradas}
- sexy gif de Louis e.e:
- [Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
Ashley Winchester
Nombre: Ashley Winchester.
Edad: 18 años.
Descripción Psicológica: Ashley es una chica sencilla y humilde. No le llama la atención lo ostentoso o lo reluciente puesto que es consciente de que bajo la superficie sólo podemos encontrar a personas vacías o solitarias. En cambio, le encanta disfrutar de las pequeñas cosas hermosas que muchos pasan de largo: la belleza de las estrellas en una noche despejada, los atardeceres anaranjados y violáceos, estar con amigos frente a una fogata y demás.
Es muy lista, por lo que busca poder conseguir una beca universitaria y hacer sentir a sus padres orgullosos mediante sus logros académicos. También es muy leal y, si le caes bien, no duda en brindarte su ayuda.
Fue criada en un ambiente hogareño por lo tanto su máximo tesoro es su familia ya que son su cable a tierra y su soporte. Odia profundamente cuando alguien los insulta y no duda ni un momento en defender a sus padres o a sus dos hermanos más pequeños, lo que la convierte en la "leona" de la casa.
Suele ser muy sensible y muchas veces un suceso puede marcarla profundamente pero siempre logra salir adelante como la luchadora que es, también ayuda a los que se encuentran en una situación similar.
Por otro lado, le gustan los chicos que son sensibles y graciosos. No suele ser la clase de chica que se enamora "a primera vista", de hecho le lleva un tiempo aceptar sus sentimientos. Cuando lo logra y reconoce que está enamorada, no duda en darlo todo por esa persona especial. Sin embargo, suele ser un poco celosa y tiende a depender de la persona a la que quiere, lo que en el futuro puede traerle problemas.
Entre sus gustos se encuentra la lectura, la fotografía, la cocina y hacer manualidades, ésta última la heredó de su abuela que murió hace unos años atrás y a quien Ashley aún extraña. No puede estar sin hacer nada y por eso siempre busca trabajos de medio tiempo en tiendas, además así puede ayudar con la economía familiar.
Sin duda alguna le encanta visitar a niños enfermos en el hospital -de hecho es voluntaria-, pintar escuelas u organizar eventos a beneficios de los desamparados. De esta forma cree que no sólo está dando una mano, si no que puede denunciar las grandes diferencias en la sociedad.
Representante: Lucy Hale.
Rol: Diferencias de "Clase social" | Louis Tomlinson.
Pequeña historia: Ashley proviene de una familia de clase obrera, sus dos padres trabajan jornadas completas para poder pagar las cuentas y llevar el pan a la mesa. Aún así, son felices a su manera y muy unidos.
Todo parecía marchar con normalidad en la vida de la castaña hasta que una persona entró en ella. Y no cualquier persona: se trataba de nada más y nada menos que de Louis, el reluciente primogénito de la familia Tomlinson y heredero de toda su fortuna. Su padre es un reconocido político a nivel nacional y su madre una diseñadora de moda exclusiva.
Ambos se conocieron durante un curso de ciencias. Louis, al ser el típico chico popular con terribles calificaciones, decidió pedirle ayuda a Ashley para no aplazar esa materia. Ella aceptó y pronto comenzó a darle clases particulares. De esta manera, y casi sin que los dos se dieran cuenta, comenzaron a saber sobre la vida del otro. Él descubrió en ella una chica muy diferente a todas las que conocía: era lista, servicial y, por sobre todo, muy hermosa. Ashley, por su parte, aprendió que Louis debajo de su imagen de flamante millonario adolescente no era más que un niño pequeño que necesitaba amor de sus padres y pedía a gritos un poco de la atención que jamás le habían dado.
Luego, decidieron dar el siguiente paso y pasaron a formar una pareja estable. Todo parecía ir genial porque mientras estaban juntos los dos sentían que todos sus problemas se esfumaban por arte de magia y la felicidad los inundaba. Así, verse diariamente se convirtió en su actividad favorita. No podían esperar para volver a encontrarse otra vez.
Sin embargo, como se sabe, todo lo bueno dura poco. La familia de Louis decidió que era hora de que Louis empezara a fijarse en chicas de la alta sociedad y por ello quisieron presentarle a Allison Benson, la hija de un colega muy importante de su padre. El castaño se negó y rápidamente aclaró que tenía novia. De hecho, llevó a Ashley a una fiesta organizada en su casa por su familia. Los Tomlinson no tardaron en mirar despectivamente a la castaña y rechazarla luego de enterarse de que provenía de una humilde familia de los suburbios. Ella no podía negar que ese suceso la había entristecido y se regañó mentalmente por haber pensado que quizás podría haberles caído bien.
Pero luego llegó un problema más grave. Los padres de Ashley no tenían fondos para pagar la hipoteca de su casa y eso significaba que se quedarían en la calle si no conseguían el dinero. Louis, al enterarse de eso, decidió tomar una parte de la fortuna de sus padres y dársela a los Winchester, a pesar de la negativa de su novia. Cuando los Tomlinson se enteraron de esto, se enfurecieron puesto que el dinero había sido dado a "pobres" y le hicieron -literalmente- la vida imposible a los Winchester. Debido a esto, un Louis muy arrepentido por los daños decidió terminar con Ashley ya que quería lo mejor para ella.
Debido a la ruptura, Ashley se hundió en una depresión durante unas semanas. Sentía que su vida estaba vacía sin aquel ojiazul con una sonrisa hermosa. Sus días estaban llenos de nada, prácticamente no salía de su casa lo que preocupó mucho a sus padres ya que ella era una persona muy activa.
Finalmente, para evitar cualquier tipo de problema y por el bien de sus nervios, tomó la decisión de alejarse por completo de Louis y por ello se cambió de instituto. Jamás volvió a ver a aquel castaño que había sido su único amor verdadero.
Escrito de tu autoría:
- ¿Y el pequeño Harry? | One Direction:
- ✯By 'Mily.♡¿Y el pequeño Harry?Y tu, ¿te atreverías a invocar a un espíritu en el espejo?
Corría el día 31 de octubre en una pequeña ciudad cuyo nombre muchos no logran recordar. Era la Noche de Brujas, mejor conocida como Halloween, en donde según diversas leyendas los espíritus de los difuntos volvían del más allá y se instalaban en el mundo mortal por una noche.Los niños se encontraban exepcionalmente emocionados puesto que aquel día conseguirían recolectar la cantidad de dulces que desearan.Ese era el caso del pequeño Harry Styles y sus amigos: Liam, Louis, Niall y Zayn. Los cinco vestían sus disfraces y recorrían la ciudad entera al grito de “¡Dulce o truco!” esperando a que los adultos abrieran las puertas de sus casa y les dieran sus preciados caramelos o, de lo contrario, les jugarían una broma pesada.Una vez que se cansaron de hacer aquello, el ruloso Harry propuso:—¡Vamos a mi casa a contar nuestras golosinas!Los otros cuatro aceptaron la invitación de su nuevo amigo y se encaminaron casi hasta la entrada del bosque puesto que allí vivía el pequeño.—Vaya Harry, tu casa es muy bonita —exclamó Liam mientras observaba la acogedora sala de aquel hogar, que contaba con un reluciente juego de sillones y una gran chimenea— y algo silenciosa.—Si, debes invitarnos más seguido —agregó Louis— ¡Hey! ¿Qué les parece si hacemos una competencia de quien ganó más dulces?—¡Suena genial! —aceptó emocionado Niall— Seguro les ganaré a todos ustedes.—No lo creo —repuso Louis— con tu traje de calabera no conseguiste nada —todos rieron— Apuesto a que yo les ganaré, nadie puede superar a mi disfraz.—Mejor dejen de pelear y cuenten los dulces —intervino Zayn.—Sí, y el que tiene menos cantidad deberá que hacer una prenda —propuso Harry. Todos asintieron.—Bien, yo tengo 147 —declaró Louis luego de unos minutos.—Yo 135 —dijo Niall.—Yo 131 —ese fue Zayn.—Y yo 139 —manifestó Liam— ¿Qué hay de ti, Harry?—Pues... conseguí 110—¡No lograste casi nada! ¡Debes hacer la prenda! —exclamó Louis.En ese momento se escuchó un ruido proveniente de la cocina. Los cinco niños se miraron entre sí y sus rostros dejaban entre ver su miedo.—Yo... yo creí que no iba a ver nadie en c-casa —susurró Harry— Vayamos a ver que pasó.—¡Ve tú, es tu casa!—Louis —lo reprendió Liam— Vamos todos.En silencio, los chicos se pusieron de pie y caminaron despacio hasta la cocina que se encontraba en penumbras. Harry hizo un ademán y les indicó a los otros que se quedaran en sus lugares. Rápidamente, y sin previo aviso, una figura esquelética se abalanzó sobre él.—¡BUUUUUUUULos cinco gritaron aterrados. Harry hizo lo mismo hasta que reconoció a aquel extraño ser.—¡Gemma!—¡Jaja, te asusté tonto! —dijo entre risas la chica de no más de trece años— Los asusté a todos con esta fea máscara ¡deberían haber visto sus caras!—¡Tu eres la tonta! —le contestó Harry— ¡Mejor vete con tu novio!—¡No te enojes hermanito! No fue para tanto... bueno en realidad sí —volvió a reír— Y no me iré de aquí porque también es mi casa, además oí que tienes que hacer una prenda.—Porque siempre te entrometes en lo que no debes.—Yo tengo una idea —comenzó a decir Gemma— Hay una leyenda que dice que puedes invocar a un espíritu usando un espejo ya que se los consideran portales a otros mundos.—No lo sé —dudó Liam— Suena peligroso...—¡Suena perfecto para una prenda! —comentó Louis— ¡Anda Harry, házlo!—Pero...—Vamos, no seas gallina hermanito —se burló Gemma—Además ni siquiera debe ser cierto.—Tu hermana tiene razón, tal vez sea sólo una leyenda más—intervino Zayn.Harry dudó unos segundos, pero acabó aceptando. Tal vez todo era sólo un engaño como decían su amigo y su hermana. Intentó pensar en eso para calmarse y darse ánimos mientras entraba en el baño.—Debes encender las velas de mamá para que funcione —le indicó Gemma— Y decir frente al espejo: “Creo en ti, espíritu. Creo en ti. Sal ya de allí” nueve veces. No olvides apagar las luces.El niño asintió y cerró la puerta del baño. Sus cuatro amigos y la joven se quedaron afuera esperándolo. Ellos estaban nerviosos y temían que algo le pasara a su amigo, después de todo eran más susceptibles a creer en aquellas cosas.—Creo que no deberíamos haberle insistido para que lo haga —murmuró arrepentido Zayn.—Sí... está tardándose mucho —repuso Niall.—Ay, esto se puso muy aburrido —dijo Gemma— Yo me largo.—¿Pero y si le pasa algo? —preguntó Louis preocupado.—Niños es sólo un cuento, no puedo creer que se lo hayan creído —contestó y sin más salió de allíEn ese preciso momento se escuchó un cristal romperse. Los niños se miraron entre sí confundidos y asustados. Le preguntaron a Harry reiteradas veces si estaba bien pero él no daba señales de vida. Al no obtener respuestas, Liam fue quien se envalentonó y con decisión abrió la puerta del baño y encendió las luces.No había nadie.Observaron con detenimiento el lugar y descubrieron que el espejo estaba parcialmente roto y las velas apagadas. El miedo viajó rápidamente por todo su cuerpo y sus rostros quedaron pálidos, como si su sangre hubiera migrado hasta sus pies en cuestión de segundos. También comenzaron a tiritar aunque no de frío precisamente.Antes de que pudieran formular alguna palabra, vieron que en la parte sana que había quedado del cristal se proyectaba una imagen. Y ésta resultó ser nada más y nada menos que su amigo Harry, sólo que él ahora tenía arañazos en todo su rostro, de donde brotaba sangre de un color rojo oscuro; sus facciones se encontraban duras y sus ojos habían sido reemplazados por una especie de hoyos negros y profundos.—Vengan conmigo —susurró con una voz sepulcral que los demás jamás habían escuchado— Ustedes me hicieron esto.Notaron como la figura comenzó a retorcerse, como si intentara escapar de su prisión. Sin pensarlo dos veces, los chicos salieron corriendo y gritando de aquella casa. Ninguno se detuvo para retomar el aliento hasta que llegaron sanos y salvos hasta sus hogares. Allí les contaron con desesperación y arrepentimiento a sus padres todo lo que había sucedido. Los adultos, como era de esperarse, pensaron que todo era producto de la mente infantil.Al día siguiente los padres decidieron visitar el lugar en donde los hechos habían ocurrido, más cuando llegaron no se encontraron con una bonita casa sino con los restos de lo que parecía haber sido una cabaña en el pasado. Los niños no podían creerlo: ¡ellos habían estado en esa casa la noche anterior! ¡Esa era la casa de su amigo! Pero lo cierto es que nadie había conocido a la familia Styles y tampoco se sabía que vivían en el bosque.Para evitar traumas y demás, se decidió que los niños debían asistir a un psicólogo infantil y evitar que vivieran situaciones de miedo que pudieran alterarlos.En cuanto al pequeño Harry, nadie supo nunca más que sucedió con él. Algunos dicen que un espíritu lo atrapó en el espejo para siempre; otros, que en realidad era un travieso fantasma buscando asustar a los demás mientras era libre en el mundo mortal por una noche. En cambio, los menos supersticiosos sostienen que todo fue producto de la imaginación de los cuatro niños luego de haber ingerido mucha azúcar ese día.
- Autumn weather {Prólogo de un proyecto}:
- autumn weather
Una de las razones por las que odio a Louis Tomlinson es porque es el mayor patán y mentiroso de todo este gran y jodido mundo. ¿Te imaginas a alguien que te atrape con sus palabras pero que estas fueran una completa basura? Bueno, eso es típico de él.
Simpático, carismático, encantador y seductor son otros adjetivos que podrían describirlo, y créeme que esa combinación de rasgos lo convierten en un hombre único y también en el peor y más detestable ser que haya pisado la tierra.
Y lo peor de todo es que he estado obnubilada por él durante meses, sin darme cuenta de lo que sé ahora. Me encuentro en este momento de mi vida en donde miro hacia atrás y me abofeteo mentalmente por ser tan idiota.
Recuerda: las personas más peligrosas son aquellas capaces de dártelo todo, haciendo que te eleves por lo alto, y en unos segundos quitártelo, dejando que mueras lentamente como las hojas en la época de otoño. Y, a pesar de todo eso, sabes que no puedes dejar de quererlas.- Forever yours {Niall Horan.:
- Forever yours fuiste mi comienzo, dos veces[Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]Comenzó a nevar otra vez.Dejo de lado el libro que llevaba leyendo hace un rato y me acerco, lentamente, hacia el gran el ventanal del salón.Observo con cautela como los copos caen con parsimonia, sin apuro. Al principio son unos pocos, pero luego empiezan a sumarse más y más. Algunos quedan atrapados en las ramas desnudas de los árboles; otros chocan con el vidrio en donde mi mano se encuentra apoyada o logran finalizar su camino hasta impactar contra el suelo frío.Dicen que cada copo de nieve es único, es imposible que existan dos exactamente iguales. Cada uno posee una forma singular, como si hubieran sido tallados minuciosamente por una mano experta.Una sonrisa se forma en mi rostro porque me es imposible pensar aquello sin recordarte. Sin duda alguna, al igual que un copo, desde el momento en el que viniste a este mundo fuiste único y especial.Mi mente sigue divagando, entonces recuerdo la primera vez que te vi. ¿Cuántos años teníamos? Nueve, quizás. Sólo sé que fue hace mucho, mucho tiempo; y que tú no dejabas de tomar la mano de tu madre. Tenías miedo de hablar con una chica, o quizás conmigo particularmente, pero yo estaba muy ansiosa por conocerte. A esa edad lo que más deseaba era un amigo, después de tantas mudanzas me era imposible tener uno.Me acerqué lentamente a ti, pero tú solo volteaste tu cara. Tu madre te retó y te obligó a que vinieras a jugar conmigo en la casa del árbol. Te resististe, pero no tuviste otra opción. Subimos a aquel lugar al que yo consideraba mi escondiste y un silencio se formó entre nosotros. Pero no era incómodo, a esa edad era difícil sentirse de esa manera para mí. Te pregunté tu nombre.“Niall” respondiste tímidamente mientras bajabas tu mirada azul.Yo te dije el mío y luego sonreí. Te pregunté a qué escuelas ibas y resultó que yo asistiría a la misma. Te pregunté si tenías hermanos y asentiste con tu cabeza. Te pregunté si, por favor, serías mi amigo. Acabaste diciendo que sí.Pero nuestra amistad no duró ni siquiera seis meses porque tuve que marcharme, otra vez. Aunque debo admitir que en ese lapso te tomé mucho cariño, demasiado quizás. Sin embargo, tú te quedaste por siempre con algo que me pertenecía: mi primer beso.Los años pasaron y las cosas no iban bien conmigo. Ya no era la misma niña de antes. Me encontraba sola, sin ningún motivo aparente por el cual seguir. Aquellos pensamientos me atormentaban a todas horas: “¿El mundo tendría más sentido sin mí en él?”, “¿A caso hay alguien a quien le importe?”. Llegué a la posible solución de que la primera afirmación era verdadera y la segunda falsa.¿Por qué había perdido por completo el rumbo de mi vida? Dicen que en la adolescencia es normal sentirse de esa manera, pero cuando mis dieciocho años llegaron decidí que eso no podía seguir así. Debía acabar con el dolor. Y sólo había un alivio para una persona como yo.Me dirigí hasta el parque de mi antigua ciudad en una noche de diciembre. El frío calaba mis huesos a pesar de todo el abrigo que llevaba puesto. Sin embargo, eso ya no importaría en unos momentos. El lugar se encontraba iluminado por unas cuantas farolas y estaba totalmente desierto. Era la oportunidad ideal.En aquel espacio verde había un puente, y debajo de este un lago considerablemente profundo cuyas aguas seguramente estarían heladas. Suspiré y recordé que no sabía nadar, eso haría las cosas más fáciles. Subí a la valla, mi respiración estaba agitada y podía notar el humo que salía por mi boca debido al clima frío. Miré el agua y me pregunté si esta era una buena forma de terminar. Pero eso no importó, de todas maneras ya era tarde para echarse atrás.Cerré mis ojos e instintivamente recuerdos de toda mi vida comenzaron a invadir mi mente: mi cuarto cumpleaños; cuando terminé el jardín de niños; cuando me mudé por décima vez; cuando te conocí; cuando te besé; cuando te dejé; cuando mis padres se divorciaron; cuando mi padre se borró de la faz de la tierra; cuando casi repruebo todas las materias; cuando decepcioné a mi madre; cuando todos mis falsos amigos me abandonaron; cuando me quedé sola para siempre y rememoraba al único amigo que alguna vez tuve.Inhalé por última vez y me impulsé hacia adelante, saltando hacia las profundidades. “Adiós” fue mi último pensamiento.Pero mi plan no salió como lo había previsto. Dos fuertes y grandes manos se posicionaron en mi cintura y evitaron que cayera al agua. Me impulsaron hacia atrás y caí sobre aquella persona que había salvado mi vida, aunque no se lo hubiera pedido.Me quejé en voz baja y pude notar como el individuo que frustró mi despedida del mundo mortal me tendía su mano. La miré, dudé y luego la tomé. Me puse de pie y vi su cara. A pesar de la oscuridad, pude distinguir dos enormes ojos azules y una reluciente cabellera rubia que le pertenecían a un hombre de aproximadamente mi edad.Y me llevó como aproximadamente seis segundos reconocerte.No habías cambiado en nada, tus facciones de niño y tu rostro sereno seguían siendo igual que antes.“¿Estás loca? ¡No debes hacer eso! ¡Podrías haber muerto!” gritaste, intentando que entre en razón.“Ese era el plan” respondí sin inmutarme y sonreí levemente. “Hola otra vez, Niall”Me miraste con una expresión de duda y desconcierto. A ti te llevó más de un minuto saber que se trataba de mí.“¿Eres tú?” fue lo único que atinaste a preguntar con un hilo de voz. Yo sólo asentí.De pronto, pude sentir como tus brazos rodeaban mi frágil cuerpo. Con ese gesto me brindaste calor en aquella noche helada; tus lágrimas hicieron que mi corazón se achicara y tus palabras me hicieron darme cuenta de que era una idiota.“¿En qué rayos estabas pensando?” preguntaste antes de quebrarte otra vez “Si algo te pasaba… jamás me lo hubiera perdonado. Es que, ¡demonios! ¿¡Cómo podría haber vivido luego de saber que te habría perdido para siempre antes de poder encontrarte!?”Pero eso no paso, mi querido Niall, porque tú siempre aparecías en el momento indicado como mi ángel de la guarda, sin duda alguna. Tú me salvaste de la soledad en mi niñez y de la muerte en mi adolescencia. ¿Es raro, verdad? Pero tan cierto como que te amé desde la primera que te vi tomando la mano de tu madre.Y, desde ese día en el que te volví a ver, quise dejar de ser la rescatada para poder hacerte feliz como pudiera. Tú me diste la vida en dos ocasiones y yo quería entregarte la mía completamente puesto que, después de todo, siempre te perteneció.No puedo evitar llorar al recordar cuando demostraste que mis sentimientos por ti eran correspondidos. Creo que ese día fue el más feliz de toda mi existencia. Junto a la orilla del mar me hiciste prometerte que jamás haría otra estupidez como la de aquella vez. Acepté totalmente de acuerdo e, inesperadamente, me besaste con una dulzura imposible de explicar. Los nervios hicieron que mis manos temblaran y las mariposas en mi vientre no tardaron en aparecer. Luego, te correspondí y rodee tu cuello con mis brazos, tu hiciste lo mismo con mi cintura. Ese era nuestro segundo beso que siempre había ansiado.A partir de ese momento, ambos comenzamos a crecer juntos.Luego, el compromiso y la boda no tardaron en llegar. Todos pensaban que estábamos locos, pero ellos no entendían cuánto nos amábamos en verdad. Al ser tan cerrados de mente jamás conseguirían nada en esta vida. Y pensar que yo era un poco como ellos, pero por suerte ya no.Después llegaron Derek y Lucy, las luces de nuestras vidas. Hicimos lo mejor posible y formamos una hermosa familia de la cual siempre estaré orgullosa.Los años pasaron rápido junto a ti. Por supuesto que no todo fue color de rosas, tuvimos nuestros altibajos y varios obstáculos se toparon en nuestros caminos. Sin embargo logramos sortear cada uno de ellos, porque juntos podíamos hacer cualquier cosa que nos proponíamos. Éramos un equipo que siempre estuvo destinado a ser y así fue.De repente, Lucy impide que siga navegando por mis pensamientos y me avisa que la cena ya está servida. Le sonrió y le pregunto si Derek y los niños ya llegaron. Ella niega con la cabeza pero me dice que él la llamó avisando que está en camino. Le agradezco, le recuerdo que la amo y le digo que en un segundo voy a la mesa.Es nuestra tercera navidad sin ti, Niall. Ya nada es igual desde que partiste, te tenemos presente en cada segundo de nuestras vidas; lloramos en ocasiones al recordarte, pero luego sonreímos al acordarnos tu risa contagiosa porque sabemos que te pondría triste vernos derramar lágrimas que no sean de felicidad.Intenté salvarte, pero creo que nada puede hacerse cuando tu propio cuerpo dice ‘basta’ y decide tomar un descanso eterno. A pesar de todo, siempre rezo por ti y porque estés bien en donde sea que tu alma haya partido.Por último, mi amor, quiero recordarte algo fundamental: te amo. Te amo infinitamente.Te amo, porque fuiste mi principio a los nueve años. Te amo, porque fuiste mi segundo comienzo a los dieciocho. Te amo, porque fuiste el único que me abrazaste cuando hacía frío y me sentía perdida. Te amo, porque junto a ti pasé los mejores años de mi vida. Te amo, porque sé que siempre serás mi ángel de la guarda. Y aunque te extraño tanto que duele, me reconforta el saber que muy pronto volveremos a estar juntos en un nuevo lugar en donde nada ni nadie podrán dañarnos o separarnos.Y recuerda: yo seré por siempre tuya.
Última edición por belen0311 el Sáb 28 Dic 2013, 12:01 am, editado 4 vecesDiamandis.
Re: Breakeven {Audiciones Cerradas}
Owww GRACIAS !!! Y ... FELIZ.Steph. escribió:Heart Attack escribió:_________Aqui la ficha ladie_________
- SPOILER SEPSI REGLAMENTARIO:
[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]
- SEPSI FICHUS:
Celeste Benson
Nombre: Celeste Camille Benson
Edad: 18
Descripción Psicológica: Ella es una chica rebelde , ama defender lo que es suyo y por ello pelea hasta la muerte .Le gusta estar en perfil medio , sabe mucho de los demás y los demás no saben mucho de ella .No es muy abierta , no le gusta que vean como es , por eso muestra una actitud dura y fuerte ... aunque por dentro no lo es ella es frágil , le afecta todo pero lo reprime y lo deja guardado en una caja de cristal que por momentos se rompe y suelta en tristeza y odio .Siempre intenta animar y escuchar a los demás , porque sabe que ellos podrán ayudarla cuando no este bien .Varias veces se cayo y supo levantarse con firmeza .Es decidida , le gusta tener la ultima palabra .Aprende de sus errores , es humilde y algo orgullosa de sus logros .Intenta ser independiente , no le gusta demostrar debilidad , ama hacer las cosas por si misma aunque aveces la salgan mal y no lo reconozca. Frente a los chicos es provocativa y conquistadora , pero no es ninguna fácil , apenas le presten un poco de atención ella se vuelve el problema mas difícil de su vida ,los ignora quiere que luchen con ella porque no es una muñeca desechable , ya lo han hecho varias veces y no quiere mas ser el objeto de nadie .Por lo general es de relaciones serias , si viniste a buscar otra cosa es mejor dar la vuelta .SI es un chico atractivo y que le guste ella se pone roja y nerviosa .En su grupo de amistades no tiene elecciones , ama tener amigos nuevos con historias nuevas ,pero cuidado con tocar su pasado porque como mencione la caja de cristal se rompe y saca su tristeza afuera . Cuando se siente incomoda no pasa desapercibida comienza a mirar a todos lados buscando algo interesante que la saque de la situación .No le gusta que las personas sean de hablar mucho , le molesta demasiado ya que ella es una persona muy callada y aveces solitaria .Si debe defender a sus amigas es capaz de dar su vida por ello ya que es lo único que tiene .Aveces insulta pero con cariño y solo a sus amistades , nunca la veras insultando a un mayor .Con ellos habla cual princesa , con respeto y con las palabras que si eres su amigo nunca creerás escuchar . Cada día lo vive como el ultimo porque la vida es corta y el cielo es el limite , y nada la puede parar hasta llegar a ello
Representante: Barbara Palvin
Rol:Harry Styles - Rumores
Pequeña historia: Estaba devastada, habíamos luchado mucho por esta relación, habíamos construido nuestra historia paso por paso y ahora se derrumbaba por simples rumores. Al principio no quería dejar que me vencieran pero ya me habían cansado. Ya todo me había cansado desde los rumores mas ridículos como "Harry, Brandon y Celeste hicieron un trió en el cumpleaños de Stacy y usaron un envoltorio de sándwich como condón" hasta los mas dolorosos "Celeste es una prostituta que esta con Harry solamente porque él le da buena ganancia". Antes aquellos eran motivo de risa para ambos pero ahora solo producían la situación en la que estábamos en ese momento. Juntos acurrucados, sintiendo como las lagrimas se deslizaban por nuestras mejillas y como el silencio quemaba nuestras almas. Este era el fin, esta vez era definitivo.
Pasamos semanas ignorándonos, intentando siquiera cruzarnos. No funcionaba hasta que finalmente decidimos acabar con esta mierda y definitivamente enamorarnos de otra persona que nos haga bien. Y asi fue como hice yo. Un mes luego de nuestra ruptura entro un chico nuevo de España se llamaba Ruben Doblas y definitivamente era un chico excelente. Desde que me levantaba hasta medianoche con sus mensajes tiernos sacaba una sonrisa en mi rostro. Finalmente luego de una semana de puro "coqueteo cursi", como le llamábamos, pusimos comienzo a nuestra relación. Hasta hoy nuestra relación no ha sufrido de ningún tipo de problema, es mas en algún momento fue llamada "La pareja del año" porque congeniábamos como ninguno. Era feliz, ni siquiera pensaba en Harry hasta que me entere que me extrañaba y una gran parte de mi corazón quería correr hacia él y decirle. "Yo tambien te extraño"
Escrito de tu autoría:
- AQUI MI PROLOGO DE UN PROYECTO:
Era de noche. La penumbra invadía las calles vacías de Holmes Chapel. George Lanius era al parecer el único hombre despierto, trabajaba. Se encargaba de llevar las cajas del nuevo pedido para el supermercado al depósito. Su rutina era incansable. Caja por caja tomaba del camión y bajaba los fríos escalones hacia las estanterías del depósito donde las acomodaba.
Sus ojeras eran notorias, tenia los anteojos empañados por la mezcla de calor y frio. El clima era de unos dos grados y su temperatura corporal al menos veinte grados mayor, no ofrecía una buena combinación. Sus arrugas y músculos se tensaban al tomar las pesadas cajas. Su única preocupación era no caerse de las escaleras, asique se percataba de pisar bien los escalones.
Estaba a punto de terminar su trabajo. Quedaban solo dos cajas en el camión. Miro su reloj con desgano. Doce y cuarto. Limpio el sudor de su frente con la manga bordo de su uniforme y tomo una gran bocanada de aire para luego exhalar pesadamente esperando terminar.
- ¿Quieres ayuda?
La voz capto la atención de Lanuis quien se sobresalto y se tomo el pecho del susto. Lentamente giro sobre su eje y observo a un lado del camión a cuatro hombres de aspecto familiar. Quito su expresión de susto al reconocer los rostros sus vecinos.
- Me han dado un susto - expreso con calma y los cuatro se inmutaron.
- ¿Podrías responder?
Su expresión era fría, su rostro parecía piedra. Los ojos de los cuatro eran completamente negros, esto le parecía extraño ya que recordaba perfectamente los ojos celestes de dos de ellos.
- Podrían ayudarme con alguna de estas cajas.
Dudaba de pedirles ayuda pero accedió ya que su cansancio se lo imploraba y sus problemas de él ciático también.
- De acuerdo - dijo uno de ellos y tomo una de las cajas y se volteo para luego volverse – Dime donde ponerla.
Lanius respondió hostilmente indicando con una mano la puerta del camino.
- Si, ven por aquí.
Tartamudeaba. Por fuera se notaba mucho su miedo a pesar de estar con conocidos.
Otro de los vecinos tomo la ultima caja y bajo tras Lanius, los otros dos sin cajas se quedaron arriba, cerca de el camión. Lo único que se podía escuchar eran los pasos de los tres bajando hasta el depósito. Al llegar al final de la escalera se pararon en seco ambos hombres. Lanius freno rápido antes de llevarse puesto a Carlos el hombre que tenia adelante.
- Hey, ¿que pasa?.
Estaba inquieto, no sabía que pasaba. El miedo se apodero completamente de él. Ya no se sentía seguro de sus vecinos, estaba aterrado. Su corazón latía a mil pero en vez de sudar sentía frio.
Dos estruendos resonaron en el depósito. Ambos vecinos soltaron las cajas solo con estirar sus manos, estaban quietos, parecían estatuas.
- Ya me dan miedo chicos – toco el hombro de Carlos esperando que fuese un acto gracioso - ¿Por qué no se mueven? Así …
- Silencio - grito Wagls, el hombre a sus espaldas, pero los músculos de su cara no hicieron expresión alguna. Seguía con la mirada perdida, sus ojos negros y hecho piedra.
Carlos giro sobre su eje y miro hacia la puerta. La puerta se cerro y se puso cerrojo por si sola. Su mirada bajo y se encontró con la de Lanius que se hecho para atrás del susto y se choco con Wagls.
- ¿Cómo has hecho eso? – no respondió y comenzó a dudar que su amigo estuviese en algún tipo de trance psicológico - ¿Eres tu Carlos?
- Aquí no hay ningún Carlos – le respondió y bajo las escaleras por completo para luego perderse entre las estanterías de el depósito. Quedo pensando la respuesta del hombre el cual tenia el aspecto de su vecino pero afirmaba no serlo. Ese hombre que parecía una piedra y movía cosas solo con los ojos. Ese hombre, sea quien sea, no era su vecino pero era la copia exacta.
- Y tu? … -pregunto a su otro “compañero” aun con miedo. Wagls se limito a seguir con su mirada perdida, luego de unos minutos esperando respuesta de un movimiento brusco tiró a Lanius al suelo y bajo los escalones con pie de soldado.
Estaba perdido, ya no sabia quienes eran y porque se comportaban así. Se encontraba entre cuatro paredes, un puerta con cerrojo, dos hombres con comportamiento zombie y desparramado en el suelo. El único hombre que veía le deba la espalda y no se animaba a dirigirle una palabra.
- Lanius, ¿se puede saber donde están tus hijos en este momento? – uno de ambos hablo pero bien no se sabía quién era. Frunció el seño buscando un lugar proveniente pero al pensar lo que le habían preguntado se extraño.
- ¿Hijos? – respondió con una pregunta al no saber a donde iba la conversación.
- Karen y Joe, ¿no?- el hombre salió de las penumbras con el rostro relajado, ya no tenia aspecto de piedra pero sus ojos seguían completamente negros. Carlos era quien hacia el escalofriante cuestionario.
- ¿Quiénes son ustedes?- debía sacarse la duda inquietante.
Wagles se acerco a él y lo ayudo a levantarse. Lo tomo con fuerza de los brazos y lo obligo a mirar a sus ojos. Este miro con miedo, los ojos eran completamente negros pero algo lo empujo hacia lo profundo de ellos y vio una imagen aterradora. Su mujer degollada y sus hijos tirados alrededor de ella llorando. Una lagrima se deslizo en sus mejillas y volvió a través de los aterradores ojos.
- ¿Dónde están? – la preocupación era sofocante, no podía soportarlo. Era desgarrador pensar en esa escena que acababa de ver. Dudaba entre la realidad y su imaginación pero era tan real.
- Cierra tu boca y déjame explicar.- Lanius sollozo en silencio –Como ya te he dicho no somos tus vecinos.
- Solo díganme de una vez quiénes son y que hicieron con mi esposa y mis hijos –reclamo haciéndole frente.
- Te dije que escucharas y te quedaras callado – Carlos se descontrolo por unos segundos levantando la voz. –Wagles abofetéalo.
Wagles obedeció y le pego duramente lo que hizo que a Lanius se le partiera el labio.
- ¿Ahora si vas a escuchar? Si cooperas podrás ver a tu familia. –solo hizo silencio – Perfecto. Tus vecinos están muertos.
Los ojos de Lanius se abrieron dejando caer otra lagrima, era demasiado doloroso, era una tortura. Todos los vecinos eran sus conocidos, desde hace veinte años que trabajaba trayendo los cargamentos al pueblo y esos veinte años lo hicieron formar parte de un lindo pueblo.
- Pero, ¿ustedes? – tartamudeo, no querría saber las atrocidades que harían con él. Lo que ahora rondaba en su cabeza era porque esas personas se veían como sus vecinos.
- Se lo que piensas no hace falta que preguntes.
- ¿Cómo?.
- Eso es fácil de deducir. Pero no te lo diré, solo te diré que tomamos prestados los cuerpos de tus vecinos.
- Eso no es factible. No es algo natural.
- ¿Quién dijo que yo era natural? –hubo silencio de parte de los tres-Mira, matamos a tus vecinos y Wagles y yo nos apoderamos de sus cuerpos. No podemos cumplir todas nuestras funciones comunes en estos cuerpos pero es adaptable.
- Funciones, ¿se podría saber cuales?
- No exactamente, pero como hablar en Wagles … a tu vecinito se le dio de complejo gritar mientras tomábamos su cuerpo y quedo mudo al igual que su cuerpo.
Lanius se arrastro por el piso hasta un rincón y tomo su cabeza –esto no es real- se repetía a si mismo e intentaba hacer que todo fuese un sueño.
- Esto es real, tanto como que vas a morir a la vista de tus hijos.
Se detuvo y miro fijamente a Carlos.
- ¿Que demonios dices?
- Mucho cuidado con nombrarme en vano. Ser demonio y que me uses con insultos contribuirá a que tu muerte sea mas lenta y dolorosa.
Wagles salió de el deposito, ambos permanecieron callados hasta que este regreso con una gran bolsa de correo marrón claro que tenia movimiento en su interior. Lanius sospechaba demasiado de que dentro de esa bolsa se hallaba una persona.
- ¿Que llevas allí?- señalo con el menton la bolsa.
- Te dije que iba a ser en presencia de tus hijos.
Una fiera salió dentro de él y se abalanzo sobre la bolsa arrebatándosela a Wagles y liberando a los dos pequeños. Los miro con ternura y estos dos lo abrazaron.
- Mama está muerta – dijo el mayor Joe al oído de su padre. Casi como un susurro doloroso que le partio el alma. Todo era real, lo que vio a través de los ojos negros y oscuros era verdad. Con todo el dolor en sus palabras musito:
- Mama está en un lugar mejor.
Lanius rompió en llanto, tenía miedo, miedo de que algo les pasara a sus hijos. Su vida no importaba solo la de sus hijos.
- Ah que bellos últimos momentos con tus hijos –dijo Carlos con una sonrisa amarga y sarcástica.
- ¿Porque? No les basto con destruir a un pueblo entero y quieren destruirme. ¿Cuál es la razón de una gran masacre?
- Diversión. –fue sutil- Tanto tiempo rondando a su alrededor, ingenuos, ninguno se dio cuenta. Tan entretenidos con su mundo feliz, eso no existe.
- ¿Cómo han llegado?
- Mira solo te lo contare porque tu te llevaras tus secretos a la tumba ¿no? –rio- la fuente que esta en el medio de la ciudad conduce a Satanás, estamos a punto de hacer entrega de un libro especial para nosotros. Se llama Librum Gosh en tu lengua seria El libro de Gosh contiene los secretos mas oscuros de nuestro "reino" y fue escrito por el propio Lucifer.
- Por favor no me maten. –imploro intentando procesar la historia recientemente contada.
- Es tarde.
Una campanada se escucho y los ojos de Carlos y Wagles se hicieron rojos y se abrieron por completo, sus rostros se deformaron. Una sonrisa grande y oscura se asomo en sus caras y una lengua larga salió de ellas.
Lanius tiro a sus hijos por detrás de él y les ordeno que se escondieran y que no vieran lo que pasaba. Se paro en frente de Wagles quien lo agarro de la cabeza y se la giro completamente. Carlos saco su lengua y lo lamio con ella luego lo hizo elevar completamente y lo apretó contra el techo para luego soltarlo. Ambos demonios tomaron de sus brazos y tiraron de ellos haciendo que su cuerpo se partiese en dos.
La sangre era lo mas presente en la escena, era la peor escena de terror. Escalofriante y desgarradora escena que los niños no observaron, solo escucharon los gritos agonizantes de su padre hasta que cesaron por un ruido que se aproximaba a tirar una botella de agua que en este caso era la sangre y una risa aterrorizante irrumpió en la habitación seguido de el completo silencio.
Joe el mayor de tan solo ocho años intento calmar a su hermana quien lloraba desesperadamente en su pecho. Busco ideas con cosas a su alcance para distraerla hasta que se le ocurrió algo. Lo que le encantaba a ella eran … los cuentos.
- ¿Karen quieres que te lea un cuento?- dijo su hermano mientras sus lagrimas caían.
Ella asintió. Joe tomo lo más cercano que tenia, un morral con un libro dentro.
- No sé cómo …
- Joe, ¿Cómo se llama el libro?
- Su nombre es – observo el dorso – El libro de Gosh.Ficha Aceptada
El drama :sir:amo el drama la historia esta llena de drama y eso lo amo ¡Suerte!
darkness.
Re: Breakeven {Audiciones Cerradas}
Audicionare por Niall
En un rato dejo mi ficha. XOXO<3
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Re: Breakeven {Audiciones Cerradas}
Elizabeth Steele
Nombre: Elizabeth Destiny Steele.
Edad: 19 años.
Descripción Psicológica: Bipolar, la palabra clave para descifrar el extraño carácter de Elizabeth Steele. El mas simple e inofensivo comentario que la haga sentirse amenazada o humillada puede llegar a irritarla a sobremanera y cambiar su estado de tranquilo a explosivo. Sin embargo, para ser mas claros y no dar una definición mas larga, su personalidad se puede describir en cuatro sencillas fases:
•Estoy feliz: La fase uno muestra a una chica divertida y carismática, con la que puedes mantener una sana conversación. En esta clase de humor Elizabeth se caracteriza por ser simpática y amable, siempre haciendo reír a los demás con sus ocurrencias y ese espíritu aventurero que heredo de su padre. Igualmente se comporta con inmadurez y tiende a utilizar el llamado "sarcasmo" con regularidad.
•No estoy bien: Aquí la situación cambia, sigue manteniendo su buen humor y simpatía pero notas algo diferente en ella. Sus ojos celestes ya no tienen ese brillo de siempre, y su actitud se torna un poco mas seria y tranquila. En esta fase, Elizabeth tiende mucho a alejarse de los demás.
•Estoy mal: ¡Alerta roja!, Elizabeth esta mal, lo que significa que estará un poco irritable y violenta, cualquier cosa que le moleste, por mas pequeña que sea, lograra que pase a la fase cuatro.
•Estoy furiosa: Aquí la cosa cambia radicalmente. Violenta, mal hablada, impulsiva, vengativa e hiriente. Si la encuentras de este humor será mejor que retrocedas lentamente mientras puedas esquivar los objetos que te lance para lastimarte. Odia profundamente que la vean llorar, eso la hace sentirse débil y vulnerable. Tienes que ser una persona muy especial para que Elizabeth te deje verla triste.
A veces puede aparentar ser una chica vacía, pero ella es buena y gentil, con las personas que lo merecen claro. No le gusta ver a sus amigos o familiares sufrir, puede llegar a hacer miles de tonterías e incluso hacer el ridículo por tan solo sacarte una simple sonrisa.
Si no eres una persona de su agrado no hay ningún problema, la vida sigue y ella puede ignorarte, así de sencillo. Pero si la buscas la encuentras y si le haces algo que la haga enojar o sentirse humillada hay problemas, y graves, se vengara de ti sin importarle las consecuencias que eso pueda acarrear, porque si la humillas ella te humilla el doble, si te burlas ella se burla el doble, si la lastimas ella te lastima el doble, así que por conveniencia es mejor tenerla de aliada que de enemiga.
No hay poder humano que pueda hacer cambiarla de parecer, desde el principio tienes que dar una buena primera impresión ya que eso definirá como te tratara en el futuro, con ella no puedes enmendar ningún error, si hiciste una tontería desde el inicio que no fue de su agrado, Elizabeth se encargara de recordartelo todos los días de tu vida.
Representante: Perrie Edwards.
Rol: Niall Horan - Mejores amigos.
Pequeña historia: Elizabeth y Niall se conocieron en el jardín de niños. Beth era la típica niña ordenada que siempre entregaba sus trabajos, mantenía su lugar limpio y comía su almuerzo con cubiertos y una servilleta para evitar mancharse. Mientras que Niall era todo lo contrario: desordenado, incumplido y problemático. Como se podía predecir, su primer encuentro fue un completo desastre, Niall termino con el delicioso almuerzo de Beth en la cabeza y la pequeña Elizabeth con su uniforme manchado por la bebida sabor chocolate del rubio. Desde ese momento ambos niños se declararon la guerra. No había un día en el que no pelearan por la mas mínima provocación por parte de el, ya que molestar a la rubia se había convertido en un hobbie. A Niall le llamaba mucho la atención aquel carácter tranquilo pero a la vez explosivo de Elizabeth, mientras que la pequeña niña se preguntaba porque Niall era tan desordenado y repugnante. Claro, estaba en la edad de pensar que los niños tenían germenes y que lo mejor era no tocarlos o acercarceles. Aunque, secretamente, Beth siempre pensó que Niall era un niño muy lindo.
Pasaron los años y para la sorpresa de todo ser viviente que los conociera, esa rivalidad entre ambos termino convirtiéndose en una hermosa amistad. Al llegar a la pubertad, ambos se dieron el tiempo de hablar y notaron que congeniaban y tenían varias cosas en común. Tuvieron que provocar una pelea de comida en la cafetería escolar, recibir un fuerte regaño por parte del director y pasar dos horas castigados en detención para poder hablar, pero al final todo resulto bien para ellos y terminaron convirtiéndose en muy buenos amigos.
¿Quien diría que una relación tan mala termino por ser buena al final de todo?, Niall se había convertido en el confidente de Beth y viceversa. ¿Alguien se atrevía a romperle el corazón a Elizabeth? ¡No!, porque sufriría las consecuencias al enfrentarse cuerpo a cuerpo con Niall. ¿Alguien se atrevía a humillar a Niall? ¡Ni siquiera lo piensen!, porque a Elizabeth le salia el lado salvaje y era seguro que la cosa terminaba en pelea. Este par de mejores amigos se cuidaban las espaldas el uno al otro, no había nada que no se contaran, y gracias a su tan similar mentalidad sabían cuales eran las mejores palabras para decir en cada situación. Incluso, las personas a su alrededor pensaban que los dos formarían una hermosa pareja, pero cada vez que salia el tema Elizabeth se ruborizaba y a Niall le entraba una risa nerviosa. Los mejores amigos eran mejores amigos y punto, nada de cosas de novios, ¿Que tal si terminaban por alguna razón?, las cosas ya no serían como antes y Elizabeth y Niall no querían perder su amistad. Pero no enamorarse era inevitable, pasaban cada minuto del día juntos, no había día en el que no se comunicaran, y las mariposas en el estomago comenzaban a incrementar cada vez que se miraban a los ojos, por lo que, seis años de amistad fue lo suficiente como para que ambos decidieran confesarse lo que sentían por el otro y terminaron por ser novios.
Todo era perfecto, a la vista de todos se notaba que ambos estaban profundamente enamorados. La pareja compartía los mismo gustos y pensaban de la misma manera, por lo que en los inicios de su relación, jamas tuvieron una sola pelea.
Lamentablemente, su historia de amor duro menos de lo esperado. Ambos comenzaron a crecer y a madurar. Los gustos y la mentalidad cambiaron. Elizabeth quería hacer una cosa y Niall otra, sin darse cuenta volvían a ser esos pequeños del jardín de niños, como cuando se conocieron. Niall ya no soportaba los repentinos cambios de humor de Elizabeth, le molestaba el hecho de que no sabía que hacer o decir porque al primer error, por mas pequeño que este fuera, ella explotaba y se ponía violenta. Mientras que Elizabeth sentía ganas de ahorcar a Niall cada vez que este hacia algo que a ella no le parecía adecuado, le molestaba a sobremanera que el rubio le recalcara que las peleas eran debido a ella y su falta de paciencia y tacto. Por lo que, con el tiempo, comenzaron a distanciarse. Ya no los podían dejar solos porque estallaba la tercera guerra mundial. Hasta que llego aquel día en el que Niall no pudo mas y dijo esas cuatro palabras que rompieron el corazón de Beth "estábamos mejor como amigos" al ver las primeras lagrimas salir de esos hermosos ojos azules el rubio se arrepintió de lo que había pensado en voz alta y trato de remediar la situación. Pero muy dentro de ella, Beth sabía que Niall tenia razón, así que decidió dejar de luchar, después Niall también lo entendió.
Finalmente la relación llego a su fin, no hubo ninguna pelea, todo fue pacifico, ambos acordaron volver a ser mejores amigos, pero ya nada volvió a ser lo mismo, cambiaron de amistades y dejaron de hablarse. Ninguno dejo de amarse en ningún momento, ambos querían volver, pero sabían que si lo hacían solo lograrían lastimarse mas. Por lo que al terminar sus estudios en ese colegio, cada quien se fue por su camino con ese sentimiento de nostalgia al pensar que jamas iban a volver a verse.
Escrito de tu autoría:
- Spoiler:
- Capitulo 1Mia Frost | Niall HoranKoni
Mi vista se fijó en el horizonte. La puesta de sol lucía hermosa este día, mas a lo lejos la luna comenzaba a apoderarse del cielo, el cual se tornaba de un precioso azul marino. Recargue ambos codos sobre el barandal del balcón y una brisa helada me estremeció. Como un acto reflejo baje las mangas de mi suéter color beige, di un largo suspiro lleno de frustración e impaciencia y me dedique a esperar. Ah seguir esperando.
Los minutos pasaban y yo perdía la esperanza de que el llegará. Era mi cumpleaños y Niall había prometido hacer todo lo posible por venir a verme, pero al parecer no lo había logrado, aunque no me extrañaba, siempre había un motivo por el cual no podíamos estar juntos.
― No vendrá -Dijo una voz masculina detrás mío- Beth.
― Eso no lo sabes -Corregí, sin mirarlo a la cara- el día aún no termina.
Mi hermano soltó una pequeña risa inofensiva ante mi terco optimismo y camino hacia mi, pasando su brazo izquierdo por mi hombro. James era el único que aceptaba, o más bien, soportaba mi relación con Niall. En cambio mis padres y mi otro hermano, todo lo contrario, ellos aborrecían la idea de que una Frost mantuviera una relación con un chico de clase baja. Todos en esa estúpida familia eran iguales: Frívolos y sin sentimientos, interesados solo en lo social y en el dinero, James y yo éramos las tristes excepciones.
― Mamá esta histérica porque te rehúsas a bajar a la fiesta -Hablo James después de una larga pausa.
― Ella sabe la razón por la que no quiero estar ahí -Conteste con resentimiento en mi voz- si no está mi prometido no vale la pena.
― Como tú lo dijiste hermanita, el vendrá.
― Acabas de decir que no lo hará -Recordé, algo confundida.
― En este caso trato de ser optimista por ti, además, ¿Te puedes imaginar la cara que pondría Edward al ver a Niall en la fiesta? -Rio un poco- tal vez hasta lo mata.
― Ni siquiera lo pienses -Refute- francamente, estoy perdiendo las esperanzas de que algún día él y yo podamos ser felices.
― ¡Vamos Mia! Estamos hablando de Niall, el chico que soporta los malos comentarios de la familia, y además, es capaz de brincar una barda de cuatro metros y espantar a los gorilas que tenemos por guardias, solo para verte a ti. ¡Hasta yo quiero uno así!
― Siempre sabes cómo hacerme sonreír Jamie.
― Jamie es nombre de niña -Se quejó.
― Es un apodo, de cariño -Corregí- no seas macho.
― ¿Soy hembra? -Pregunto, dramático.
― ¡James!
― Esta bien, me calmo, uno que trata de portarse bien con su hermana, trayéndole a su novio a la fiesta y tu poniéndome apodos de...
― ¡Trajiste a Niall! -Chille entusiasmada, pero después tape mi boca por miedo a que alguien me hubiera escuchado.
― Ah eso venia -Contesto- a decírtelo.
― ¿Y porque no lo hiciste desde el principio? -Pregunte golpeando su pecho.
― Me cambiaste el tema -Respondió encogiéndose de hombros.
― ¡Yo no te...! -Pare de hablar, no tenía ganas de discutir- ¿Donde esta?
― Afuera, escondido en los arbustos -Informo- más vale que te apures porque si papá lo encuentra no dudara en sacar la escopeta.
― Gracias James, eres el mejor.
Tome la única chaqueta que colgaba del perchero de la puerta del armario y salí de mi habitación lo más rápido que mis pies pudieron permitirme. A lo lejos cuando me encontraba corriendo por el pasillo pude escuchar que James gritaba algo, o más bien advertía, pero estaba tan entusiasmada y apurada en llegar a donde Niall me esperaba que no le presté atención.
Ah pasos torpes y escondiéndome de los invitados que estaban en una de las estancias de la casa, con miedo a que mi madre o mi padre me descubrieran, pude salir al jardín delantero, acto seguido me adentre en los enormes arbustos que cubrían los ventanales de la entrada y al llegar a mi destino comencé a buscar a Niall con la mirada.
― Niall -Lo llame en susurro- ¡Niall!
El corazón se me cayó a los pies cuando sentí que alguien me tomaba del tobillo y me arrojaba al suelo rodeándome con ambos brazos, pero la tranquilidad volvió cuando escuche su voz, esa dulce voz que hacía que mi corazón saltara como un loco cada vez que la escuchaba.
― Si no te agachas te verán y tendré que irme –Advirtió- por cierto, feliz cumpleaños.
Una sonrisa de tonta enamorada se formó en mi rostro y levante la mirada. Ahí se encontraba Niall, detrás de mí, observándome fijamente con la misma expresión con que yo lo observaba a él.
― Creí que no vendrías -Dije girándome y abrazándolo lo más fuerte que pude.
― Como crees que iba a dejarte sola en tu cumpleaños, te dije que llegaría, cumplí mi promesa.
― Te amo.
― Y yo a ti.
Juntamos nuestras frentes y sonreímos. Esta era una de las pocas ocasiones que podíamos vernos desde que les anunciamos a mis padres nuestro compromiso y ellos se pusieron como locos. Ese mismo día me prohibieron seguir viendo a Niall y me ordenaron terminar la relación, pero yo me rehusé, desde entonces hemos sabido aprovechar el poco tiempo que tenemos para vernos.
― Te traje un regalo –Anuncio, sacando una pequeña caja de su pantalón.
― Niall, no era necesario, con tu presencia me basta.
― Solo ábrelo.
Tome la pequeña caja entre mis manos y le quite el moño rojo que la cubría. Tan solo la abrí mis ojos se iluminaron: era un reluciente anillo de compromiso con un enorme diamante incrustado en él, sentí que mis mejillas comenzaban a mojarse y mire a Niall, debió haberle costado meses de trabajo, este tomo mi mano y lo coloco en mi dedo dándole un beso al final.
― Ahora podemos decir que es oficial –Aclaro- con esto quiero que sepas que no dejare que nadie nos separe. Les demostrare a tus padres que valgo la pena.
― No lo necesitas –Dije secando mis lágrimas- con que yo sepa que me amas me conformo.
Nos abrazamos de nuevo y segundos después, pase mis manos por su nuca para acercarlo más a mí, estuvimos a puntos de besarnos cuando un fuerte grito nos sobresaltó a ambos, grite en mi interior, rogando que no fuera quien creía que era pero al parecer solo logre invocarlo.
― ¡ELIZABETH! -Chillo mi padre azotando la puerta de la entrada y acercándose peligrosamente.
― Esto no es bueno -Advertí levantándome del suelo- escóndete antes de que te vea.
― No Beth, no voy a huir, tus padres tienen que entender que...
No pudo terminar su frase porque cayo nuevamente al suelo gracias a un brutal golpe que mi padre le propino en la mandíbula. Quise acercarme pero un fuerte brazo me tomo por la cintura y me levanto por el aire impidiendo que me acercara a Niall.
― ¡Niall! -Grite espantada al notar que no se movía- ¡Suéltame Edward! -Rogué forcejeando.
― ¿Cómo te atreves a regresar a mi casa después de la advertencia que te di? -Pregunto mi padre, esta vez, dándole una patada en el estómago.
― ¡No lo lastimes!
― ¡Cállate! -Ordeno.
― ¿La llevo adentro papá? -Pregunto Edward.
― No -Le contesto- quiero que vea lo que le are a este malnacido por haberme desobedecido.
― ¡Por favor! -Suplique con lágrimas en los ojos- ¡Papá, no le hagas nada!
Ah pesar de mis gritos y suplicas no me escucho, siguió pateando a Niall en el estómago y golpeando su rostro. Mis ojos estaban viendo una completa masacre, y lo peor de todo era que a mi hermano y a mi padre parecía divertirles.
― ¡No vuelvas a acercarte a mi casa, ni a mi hija! ¡¿Escuchaste?! -Pregunto, a lo cual no recibió respuesta, cosa que lo enfureció más y le costó a Niall una patada en el rostro- ¡No te escuche!
No lo resistí más. Con el tacón de mis botas le di a Edward una patada justo en la entrepierna, este me tiro al suelo preso por el dolor y yo me arrastre hasta Niall tomándolo en mis brazos. Estaba desecho y su nariz, frente y boca sangraban con exageración al igual que las heridas en sus brazos.
― Todo va a estar bien amor -Comencé a decirle, pero las lágrimas no me dejaban hablar con claridad- solo no te duermas, quédate conmigo.
― Edward, levántate del suelo, Elizabeth, entra a la casa, los guardias se encargaran de sacar a esta escoria de aquí -Ordeno.
― Déjame llevarlo a un hospital -Suplique.
― ¡Ah la casa dije!
― ¡No papá!
― ¡Ah mí me obedeces! ¡Levántate Edward y llévate a Mia!
Como pudo, mi hermano saco fuerzas para levantarse, quitarme las botas y tomarme en brazos. Este en contra de mi voluntad me llevo hacia la casa donde los invitados de mi madre veían la escena atentos, pasamos por la estancia y todas las miradas se posaron en mí. Lloraba y gritaba sin importarme absolutamente nada más que Niall.
Edward me llevo hasta la biblioteca por órdenes de mi madre y me soltó, al instante me paré e intente salir, pero mi hermano bloqueo la entrada.
― ¡Basta Elizabeth! -Ordeno Edward tratando de detenerme- Mamá está furiosa, tus invitados vieron todo el show que montaste.
― ¡Los odio a todos! –Grite lo más fuerte que pude con toda la intención de ser escuchada y causarle más vergüenza a mi madre.
De pronto la puerta se abrió y James entro a la biblioteca, trate de salir pero Edward fue más rápido y cerró la puerta con llave. Derrotada, me tumbe en uno de los sillones y lleve ambas manos a mi rostro para continuar llorando, James se acercó a mí y me abrazo.
― Fue horrible -Comencé a hablar- papá lo golpeo y Niall sangraba por todas partes.
― Jamás los dejaran en paz si no huyes con el Beth -Propuso James.
― ¡Que tonterías le estas diciendo! -Inquirió Edward alejando a James de mí- ¡¿Cómo puedes...?!
― ¡No es ninguna tontería Edward! -Se defendió- ¡Lo único que están logrando es que Beth los odie!
― Lo hacemos por su bien.
― Si claro, ¿Por su bien golpearon a Niall?, ¿Desde cuando te crees el hermano sobreprotector?.
La puerta se abrió de nuevo, interrumpiendo la pelea entre mis hermanos, eran mis padres y no venían justamente a hablar con serenidad. Tampoco yo, así que furiosa y cegada por el enojo tome fuerzas y le di una fuerte cachetada a mi padre, recibiendo una yo casi al mismo tiempo por parte de mi madre.
― ¡¿Qué te pasa Elizabeth?! -Grito ofendida- ¡No sabes la vergüenza que pase gracias a ti con todos tus invitados!
― ¡Te denunciare Finnick Frost! -Le grite a mi padre ignorando por completo el comentario de mamá- ¡Esto no se va a quedar así!
― ¡Ah mí no me vas a amenazar! -Me contestó.
― ¡Demasiado tarde!, me da repugnancia ser tu hija. Eres un ser humano vil y sin sentimientos ¡Que solo se preocupa por sus propios intereses! -Dije con rencor y odio en mis palabras- ¡¿Dónde está Niall?!
― Donde debe de estar -Hablo Edward- en la calle.
El simple comentario que salió de los labios de mi hermano hizo que la sangre me hirviera y tomara uno de los libros estrellándoselo tan fuerte en la cara que seguramente le rompí la nariz.
― Un día de estos voy a desaparecer -Aclare mirando a mi padre ya que mi madre había ido en rescate de Edward- y ese será el día en el que todos ustedes se arrepientan de todo el daño que me han hecho.
Salí de la biblioteca a paso rápido, dejando a toda mi familia detrás y subí las escaleras para llegar a mi habitación. Sin siquiera saberlo James comenzó a perseguirme, pero no lo deje entrar, cerré la puerta con seguro y como pude moví uno de los muebles para tapar la entrada.
Tenía que hacer esto rápido, iba a irme, no quería estar ni un minuto más en esta casa, tome mi celular y note que tenía cinco llamadas pérdidas de Niall, sin pensarlo dos veces marque su número.
― Amor, ¿estás bien?, ¿te hicieron algo? -Pregunto preocupado, en su voz se podía escuchar el dolor que sentía.
― Me iré de la casa Niall -Respondí- no pienso quedarme ni un minuto más, me iré contigo.
― ¿Estas segura?
― ¿No quieres?
― Nada me haría más feliz.
― Entonces, quédate donde estas, dame 10 minutos para salir de la propiedad, después te llevaré a un hospital -Ordene.
Colgué y apague el celular dirigiéndome al baño para arrojarlo al escusado, así se mojaba y dejaba de servir, ya no tendrían como localizarme. Salí del baño y abrí el armario, tomé una mochila y metí un poco de ropa, en el espacio que quedo guarde un poco de dinero que tenía ahorrado para alguna emergencia, después me coloque unos tenis y la mochila, salí al balcón y mire mi habitación, esta sería la última vez que estaría en este lugar, no lo extrañaría mucho. Me pase al otro lado del balcón y de repente alguien comenzó a tratar de abrir la puerta.
― Beth, abre, soy James -Pidió- solo quiero hablar contigo.
― Te voy a extrañar -Le dije en tono de despedida.
― ¡¿Que estás diciendo?! ¡Elizabeth Frost! -Grito alterado- ¡No hagas una locura!
― Adiós James.
Cerré los ojos para tomar valor y salté.
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Re: Breakeven {Audiciones Cerradas}
belen0311 escribió:
- sexy gif de Louis e.e:
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Ashley Winchester
Nombre: Ashley Winchester.
Edad: 18 años.
Descripción Psicológica: Ashley es una chica sencilla y humilde. No le llama la atención lo ostentoso o lo reluciente puesto que es consciente de que bajo la superficie sólo podemos encontrar a personas vacías o solitarias. En cambio, le encanta disfrutar de las pequeñas cosas hermosas que muchos pasan de largo: la belleza de las estrellas en una noche despejada, los atardeceres anaranjados y violáceos, estar con amigos frente a una fogata y demás.
Es muy lista, por lo que busca poder conseguir una beca universitaria y hacer sentir a sus padres orgullosos mediante sus logros académicos. También es muy leal y, si le caes bien, no duda en brindarte su ayuda.
Fue criada en un ambiente hogareño por lo tanto su máximo tesoro es su familia ya que son su cable a tierra y su soporte. Odia profundamente cuando alguien los insulta y no duda ni un momento en defender a sus padres o a sus dos hermanos más pequeños, lo que la convierte en la "leona" de la casa.
Suele ser muy sensible y muchas veces un suceso puede marcarla profundamente pero siempre logra salir adelante como la luchadora que es, también ayuda a los que se encuentran en una situación similar.
Por otro lado, le gustan los chicos que son sensibles y graciosos. No suele ser la clase de chica que se enamora "a primera vista", de hecho le lleva un tiempo aceptar sus sentimientos. Cuando lo logra y reconoce que está enamorada, no duda en darlo todo por esa persona especial. Sin embargo, suele ser un poco celosa y tiende a depender de la persona a la que quiere, lo que en el futuro puede traerle problemas.
Entre sus gustos se encuentra la lectura, la fotografía, la cocina y hacer manualidades, ésta última la heredó de su abuela que murió hace unos años atrás y a quien Ashley aún extraña. No puede estar sin hacer nada y por eso siempre busca trabajos de medio tiempo en tiendas, además así puede ayudar con la economía familiar.
Sin duda alguna le encanta visitar a niños enfermos en el hospital -de hecho es voluntaria-, pintar escuelas u organizar eventos a beneficios de los desamparados. De esta forma cree que no sólo está dando una mano, si no que puede denunciar las grandes diferencias en la sociedad.
Representante: Lucy Hale.
Rol: Diferencias de "Clase social" | Louis Tomlinson.
Pequeña historia: Ashley proviene de una familia de clase obrera, sus dos padres trabajan jornadas completas para poder pagar las cuentas y llevar el pan a la mesa. Aún así, son felices a su manera y muy unidos.
Todo parecía marchar con normalidad en la vida de la castaña hasta que una persona entró en ella. Y no cualquier persona: se trataba de nada más y nada menos que de Louis, el reluciente primogénito de la familia Tomlinson y heredero de toda su fortuna. Su padre es un reconocido político a nivel nacional y su madre una diseñadora de moda exclusiva.
Ambos se conocieron durante un curso de ciencias. Louis, al ser el típico chico popular con terribles calificaciones, decidió pedirle ayuda a Ashley para no aplazar esa materia. Ella aceptó y pronto comenzó a darle clases particulares. De esta manera, y casi sin que los dos se dieran cuenta, comenzaron a saber sobre la vida del otro. Él descubrió en ella una chica muy diferente a todas las que conocía: era lista, servicial y, por sobre todo, muy hermosa. Ashley, por su parte, aprendió que Louis debajo de su imagen de flamante millonario adolescente no era más que un niño pequeño que necesitaba amor de sus padres y pedía a gritos un poco de la atención que jamás le habían dado.
Luego, decidieron dar el siguiente paso y pasaron a formar una pareja estable. Todo parecía ir genial porque mientras estaban juntos los dos sentían que todos sus problemas se esfumaban por arte de magia y la felicidad los inundaba. Así, verse diariamente se convirtió en su actividad favorita. No podían esperar para volver a encontrarse otra vez.
Sin embargo, como se sabe, todo lo bueno dura poco. La familia de Louis decidió que era hora de que Louis empezara a fijarse en chicas de la alta sociedad y por ello quisieron presentarle a Allison Benson, la hija de un colega muy importante de su padre. El castaño se negó y rápidamente aclaró que tenía novia. De hecho, llevó a Ashley a una fiesta organizada en su casa por su familia. Los Tomlinson no tardaron en mirar despectivamente a la castaña y rechazarla luego de enterarse de que provenía de una humilde familia de los suburbios. Ella no podía negar que ese suceso la había entristecido y se regañó mentalmente por haber pensado que quizás podría haberles caído bien.
Pero luego llegó un problema más grave. Los padres de Ashley no tenían fondos para pagar la hipoteca de su casa y eso significaba que se quedarían en la calle si no conseguían el dinero. Louis, al enterarse de eso, decidió tomar una parte de la fortuna de sus padres y dársela a los Winchester, a pesar de la negativa de su novia. Cuando los Tomlinson se enteraron de esto, se enfurecieron puesto que el dinero había sido dado a "pobres" y le hicieron -literalmente- la vida imposible a los Winchester. Debido a esto, un Louis muy arrepentido por los daños decidió terminar con Ashley ya que quería lo mejor para ella.
Debido a la ruptura, Ashley se hundió en una depresión durante unas semanas. Sentía que su vida estaba vacía sin aquel ojiazul con una sonrisa hermosa. Sus días estaban llenos de nada, prácticamente no salía de su casa lo que preocupó mucho a sus padres ya que ella era una persona muy activa.
Finalmente, para evitar cualquier tipo de problema y por el bien de sus nervios, tomó la decisión de alejarse por completo de Louis y por ello se cambió de instituto. Jamás volvió a ver a aquel castaño que había sido su único amor verdadero.
Escrito de tu autoría:
- ¿Y el pequeño Harry? | One Direction:
✯By 'Mily.♡¿Y el pequeño Harry?Y tu, ¿te atreverías a invocar a un espíritu en el espejo?
Corría el día 31 de octubre en una pequeña ciudad cuyo nombre muchos no logran recordar. Era la Noche de Brujas, mejor conocida como Halloween, en donde según diversas leyendas los espíritus de los difuntos volvían del más allá y se instalaban en el mundo mortal por una noche.Los niños se encontraban exepcionalmente emocionados puesto que aquel día conseguirían recolectar la cantidad de dulces que desearan.Ese era el caso del pequeño Harry Styles y sus amigos: Liam, Louis, Niall y Zayn. Los cinco vestían sus disfraces y recorrían la ciudad entera al grito de “¡Dulce o truco!” esperando a que los adultos abrieran las puertas de sus casa y les dieran sus preciados caramelos o, de lo contrario, les jugarían una broma pesada.Una vez que se cansaron de hacer aquello, el ruloso Harry propuso:—¡Vamos a mi casa a contar nuestras golosinas!Los otros cuatro aceptaron la invitación de su nuevo amigo y se encaminaron casi hasta la entrada del bosque puesto que allí vivía el pequeño.—Vaya Harry, tu casa es muy bonita —exclamó Liam mientras observaba la acogedora sala de aquel hogar, que contaba con un reluciente juego de sillones y una gran chimenea— y algo silenciosa.—Si, debes invitarnos más seguido —agregó Louis— ¡Hey! ¿Qué les parece si hacemos una competencia de quien ganó más dulces?—¡Suena genial! —aceptó emocionado Niall— Seguro les ganaré a todos ustedes.—No lo creo —repuso Louis— con tu traje de calabera no conseguiste nada —todos rieron— Apuesto a que yo les ganaré, nadie puede superar a mi disfraz.—Mejor dejen de pelear y cuenten los dulces —intervino Zayn.—Sí, y el que tiene menos cantidad deberá que hacer una prenda —propuso Harry. Todos asintieron.—Bien, yo tengo 147 —declaró Louis luego de unos minutos.—Yo 135 —dijo Niall.—Yo 131 —ese fue Zayn.—Y yo 139 —manifestó Liam— ¿Qué hay de ti, Harry?—Pues... conseguí 110—¡No lograste casi nada! ¡Debes hacer la prenda! —exclamó Louis.En ese momento se escuchó un ruido proveniente de la cocina. Los cinco niños se miraron entre sí y sus rostros dejaban entre ver su miedo.—Yo... yo creí que no iba a ver nadie en c-casa —susurró Harry— Vayamos a ver que pasó.—¡Ve tú, es tu casa!—Louis —lo reprendió Liam— Vamos todos.En silencio, los chicos se pusieron de pie y caminaron despacio hasta la cocina que se encontraba en penumbras. Harry hizo un ademán y les indicó a los otros que se quedaran en sus lugares. Rápidamente, y sin previo aviso, una figura esquelética se abalanzó sobre él.—¡BUUUUUUUULos cinco gritaron aterrados. Harry hizo lo mismo hasta que reconoció a aquel extraño ser.—¡Gemma!—¡Jaja, te asusté tonto! —dijo entre risas la chica de no más de trece años— Los asusté a todos con esta fea máscara ¡deberían haber visto sus caras!—¡Tu eres la tonta! —le contestó Harry— ¡Mejor vete con tu novio!—¡No te enojes hermanito! No fue para tanto... bueno en realidad sí —volvió a reír— Y no me iré de aquí porque también es mi casa, además oí que tienes que hacer una prenda.—Porque siempre te entrometes en lo que no debes.—Yo tengo una idea —comenzó a decir Gemma— Hay una leyenda que dice que puedes invocar a un espíritu usando un espejo ya que se los consideran portales a otros mundos.—No lo sé —dudó Liam— Suena peligroso...—¡Suena perfecto para una prenda! —comentó Louis— ¡Anda Harry, házlo!—Pero...—Vamos, no seas gallina hermanito —se burló Gemma—Además ni siquiera debe ser cierto.—Tu hermana tiene razón, tal vez sea sólo una leyenda más—intervino Zayn.Harry dudó unos segundos, pero acabó aceptando. Tal vez todo era sólo un engaño como decían su amigo y su hermana. Intentó pensar en eso para calmarse y darse ánimos mientras entraba en el baño.—Debes encender las velas de mamá para que funcione —le indicó Gemma— Y decir frente al espejo: “Creo en ti, espíritu. Creo en ti. Sal ya de allí” nueve veces. No olvides apagar las luces.El niño asintió y cerró la puerta del baño. Sus cuatro amigos y la joven se quedaron afuera esperándolo. Ellos estaban nerviosos y temían que algo le pasara a su amigo, después de todo eran más susceptibles a creer en aquellas cosas.—Creo que no deberíamos haberle insistido para que lo haga —murmuró arrepentido Zayn.—Sí... está tardándose mucho —repuso Niall.—Ay, esto se puso muy aburrido —dijo Gemma— Yo me largo.—¿Pero y si le pasa algo? —preguntó Louis preocupado.—Niños es sólo un cuento, no puedo creer que se lo hayan creído —contestó y sin más salió de allíEn ese preciso momento se escuchó un cristal romperse. Los niños se miraron entre sí confundidos y asustados. Le preguntaron a Harry reiteradas veces si estaba bien pero él no daba señales de vida. Al no obtener respuestas, Liam fue quien se envalentonó y con decisión abrió la puerta del baño y encendió las luces.No había nadie.Observaron con detenimiento el lugar y descubrieron que el espejo estaba parcialmente roto y las velas apagadas. El miedo viajó rápidamente por todo su cuerpo y sus rostros quedaron pálidos, como si su sangre hubiera migrado hasta sus pies en cuestión de segundos. También comenzaron a tiritar aunque no de frío precisamente.Antes de que pudieran formular alguna palabra, vieron que en la parte sana que había quedado del cristal se proyectaba una imagen. Y ésta resultó ser nada más y nada menos que su amigo Harry, sólo que él ahora tenía arañazos en todo su rostro, de donde brotaba sangre de un color rojo oscuro; sus facciones se encontraban duras y sus ojos habían sido reemplazados por una especie de hoyos negros y profundos.—Vengan conmigo —susurró con una voz sepulcral que los demás jamás habían escuchado— Ustedes me hicieron esto.Notaron como la figura comenzó a retorcerse, como si intentara escapar de su prisión. Sin pensarlo dos veces, los chicos salieron corriendo y gritando de aquella casa. Ninguno se detuvo para retomar el aliento hasta que llegaron sanos y salvos hasta sus hogares. Allí les contaron con desesperación y arrepentimiento a sus padres todo lo que había sucedido. Los adultos, como era de esperarse, pensaron que todo era producto de la mente infantil.Al día siguiente los padres decidieron visitar el lugar en donde los hechos habían ocurrido, más cuando llegaron no se encontraron con una bonita casa sino con los restos de lo que parecía haber sido una cabaña en el pasado. Los niños no podían creerlo: ¡ellos habían estado en esa casa la noche anterior! ¡Esa era la casa de su amigo! Pero lo cierto es que nadie había conocido a la familia Styles y tampoco se sabía que vivían en el bosque.Para evitar traumas y demás, se decidió que los niños debían asistir a un psicólogo infantil y evitar que vivieran situaciones de miedo que pudieran alterarlos.En cuanto al pequeño Harry, nadie supo nunca más que sucedió con él. Algunos dicen que un espíritu lo atrapó en el espejo para siempre; otros, que en realidad era un travieso fantasma buscando asustar a los demás mientras era libre en el mundo mortal por una noche. En cambio, los menos supersticiosos sostienen que todo fue producto de la imaginación de los cuatro niños luego de haber ingerido mucha azúcar ese día.
- Autumn weather {Prólogo de un proyecto}:
autumn weather
Una de las razones por las que odio a Louis Tomlinson es porque es el mayor patán y mentiroso de todo este gran y jodido mundo. ¿Te imaginas a alguien que te atrape con sus palabras pero que estas fueran una completa basura? Bueno, eso es típico de él.
Simpático, carismático, encantador y seductor son otros adjetivos que podrían describirlo, y créeme que esa combinación de rasgos lo convierten en un hombre único y también en el peor y más detestable ser que haya pisado la tierra.
Y lo peor de todo es que he estado obnubilada por él durante meses, sin darme cuenta de lo que sé ahora. Me encuentro en este momento de mi vida en donde miro hacia atrás y me abofeteo mentalmente por ser tan idiota.
Recuerda: las personas más peligrosas son aquellas capaces de dártelo todo, haciendo que te eleves por lo alto, y en unos segundos quitártelo, dejando que mueras lentamente como las hojas en la época de otoño. Y, a pesar de todo eso, sabes que no puedes dejar de quererlas.
- Forever yours {Niall Horan.:
Forever yours fuiste mi comienzo, dos veces[Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]Comenzó a nevar otra vez.Dejo de lado el libro que llevaba leyendo hace un rato y me acerco, lentamente, hacia el gran el ventanal del salón.Observo con cautela como los copos caen con parsimonia, sin apuro. Al principio son unos pocos, pero luego empiezan a sumarse más y más. Algunos quedan atrapados en las ramas desnudas de los árboles; otros chocan con el vidrio en donde mi mano se encuentra apoyada o logran finalizar su camino hasta impactar contra el suelo frío.Dicen que cada copo de nieve es único, es imposible que existan dos exactamente iguales. Cada uno posee una forma singular, como si hubieran sido tallados minuciosamente por una mano experta.Una sonrisa se forma en mi rostro porque me es imposible pensar aquello sin recordarte. Sin duda alguna, al igual que un copo, desde el momento en el que viniste a este mundo fuiste único y especial.Mi mente sigue divagando, entonces recuerdo la primera vez que te vi. ¿Cuántos años teníamos? Nueve, quizás. Sólo sé que fue hace mucho, mucho tiempo; y que tú no dejabas de tomar la mano de tu madre. Tenías miedo de hablar con una chica, o quizás conmigo particularmente, pero yo estaba muy ansiosa por conocerte. A esa edad lo que más deseaba era un amigo, después de tantas mudanzas me era imposible tener uno.Me acerqué lentamente a ti, pero tú solo volteaste tu cara. Tu madre te retó y te obligó a que vinieras a jugar conmigo en la casa del árbol. Te resististe, pero no tuviste otra opción. Subimos a aquel lugar al que yo consideraba mi escondiste y un silencio se formó entre nosotros. Pero no era incómodo, a esa edad era difícil sentirse de esa manera para mí. Te pregunté tu nombre.“Niall” respondiste tímidamente mientras bajabas tu mirada azul.Yo te dije el mío y luego sonreí. Te pregunté a qué escuelas ibas y resultó que yo asistiría a la misma. Te pregunté si tenías hermanos y asentiste con tu cabeza. Te pregunté si, por favor, serías mi amigo. Acabaste diciendo que sí.Pero nuestra amistad no duró ni siquiera seis meses porque tuve que marcharme, otra vez. Aunque debo admitir que en ese lapso te tomé mucho cariño, demasiado quizás. Sin embargo, tú te quedaste por siempre con algo que me pertenecía: mi primer beso.Los años pasaron y las cosas no iban bien conmigo. Ya no era la misma niña de antes. Me encontraba sola, sin ningún motivo aparente por el cual seguir. Aquellos pensamientos me atormentaban a todas horas: “¿El mundo tendría más sentido sin mí en él?”, “¿A caso hay alguien a quien le importe?”. Llegué a la posible solución de que la primera afirmación era verdadera y la segunda falsa.¿Por qué había perdido por completo el rumbo de mi vida? Dicen que en la adolescencia es normal sentirse de esa manera, pero cuando mis dieciocho años llegaron decidí que eso no podía seguir así. Debía acabar con el dolor. Y sólo había un alivio para una persona como yo.Me dirigí hasta el parque de mi antigua ciudad en una noche de diciembre. El frío calaba mis huesos a pesar de todo el abrigo que llevaba puesto. Sin embargo, eso ya no importaría en unos momentos. El lugar se encontraba iluminado por unas cuantas farolas y estaba totalmente desierto. Era la oportunidad ideal.En aquel espacio verde había un puente, y debajo de este un lago considerablemente profundo cuyas aguas seguramente estarían heladas. Suspiré y recordé que no sabía nadar, eso haría las cosas más fáciles. Subí a la valla, mi respiración estaba agitada y podía notar el humo que salía por mi boca debido al clima frío. Miré el agua y me pregunté si esta era una buena forma de terminar. Pero eso no importó, de todas maneras ya era tarde para echarse atrás.Cerré mis ojos e instintivamente recuerdos de toda mi vida comenzaron a invadir mi mente: mi cuarto cumpleaños; cuando terminé el jardín de niños; cuando me mudé por décima vez; cuando te conocí; cuando te besé; cuando te dejé; cuando mis padres se divorciaron; cuando mi padre se borró de la faz de la tierra; cuando casi repruebo todas las materias; cuando decepcioné a mi madre; cuando todos mis falsos amigos me abandonaron; cuando me quedé sola para siempre y rememoraba al único amigo que alguna vez tuve.Inhalé por última vez y me impulsé hacia adelante, saltando hacia las profundidades. “Adiós” fue mi último pensamiento.Pero mi plan no salió como lo había previsto. Dos fuertes y grandes manos se posicionaron en mi cintura y evitaron que cayera al agua. Me impulsaron hacia atrás y caí sobre aquella persona que había salvado mi vida, aunque no se lo hubiera pedido.Me quejé en voz baja y pude notar como el individuo que frustró mi despedida del mundo mortal me tendía su mano. La miré, dudé y luego la tomé. Me puse de pie y vi su cara. A pesar de la oscuridad, pude distinguir dos enormes ojos azules y una reluciente cabellera rubia que le pertenecían a un hombre de aproximadamente mi edad.Y me llevó como aproximadamente seis segundos reconocerte.No habías cambiado en nada, tus facciones de niño y tu rostro sereno seguían siendo igual que antes.“¿Estás loca? ¡No debes hacer eso! ¡Podrías haber muerto!” gritaste, intentando que entre en razón.“Ese era el plan” respondí sin inmutarme y sonreí levemente. “Hola otra vez, Niall”Me miraste con una expresión de duda y desconcierto. A ti te llevó más de un minuto saber que se trataba de mí.“¿Eres tú?” fue lo único que atinaste a preguntar con un hilo de voz. Yo sólo asentí.De pronto, pude sentir como tus brazos rodeaban mi frágil cuerpo. Con ese gesto me brindaste calor en aquella noche helada; tus lágrimas hicieron que mi corazón se achicara y tus palabras me hicieron darme cuenta de que era una idiota.“¿En qué rayos estabas pensando?” preguntaste antes de quebrarte otra vez “Si algo te pasaba… jamás me lo hubiera perdonado. Es que, ¡demonios! ¿¡Cómo podría haber vivido luego de saber que te habría perdido para siempre antes de poder encontrarte!?”Pero eso no paso, mi querido Niall, porque tú siempre aparecías en el momento indicado como mi ángel de la guarda, sin duda alguna. Tú me salvaste de la soledad en mi niñez y de la muerte en mi adolescencia. ¿Es raro, verdad? Pero tan cierto como que te amé desde la primera que te vi tomando la mano de tu madre.Y, desde ese día en el que te volví a ver, quise dejar de ser la rescatada para poder hacerte feliz como pudiera. Tú me diste la vida en dos ocasiones y yo quería entregarte la mía completamente puesto que, después de todo, siempre te perteneció.No puedo evitar llorar al recordar cuando demostraste que mis sentimientos por ti eran correspondidos. Creo que ese día fue el más feliz de toda mi existencia. Junto a la orilla del mar me hiciste prometerte que jamás haría otra estupidez como la de aquella vez. Acepté totalmente de acuerdo e, inesperadamente, me besaste con una dulzura imposible de explicar. Los nervios hicieron que mis manos temblaran y las mariposas en mi vientre no tardaron en aparecer. Luego, te correspondí y rodee tu cuello con mis brazos, tu hiciste lo mismo con mi cintura. Ese era nuestro segundo beso que siempre había ansiado.A partir de ese momento, ambos comenzamos a crecer juntos.Luego, el compromiso y la boda no tardaron en llegar. Todos pensaban que estábamos locos, pero ellos no entendían cuánto nos amábamos en verdad. Al ser tan cerrados de mente jamás conseguirían nada en esta vida. Y pensar que yo era un poco como ellos, pero por suerte ya no.Después llegaron Derek y Lucy, las luces de nuestras vidas. Hicimos lo mejor posible y formamos una hermosa familia de la cual siempre estaré orgullosa.Los años pasaron rápido junto a ti. Por supuesto que no todo fue color de rosas, tuvimos nuestros altibajos y varios obstáculos se toparon en nuestros caminos. Sin embargo logramos sortear cada uno de ellos, porque juntos podíamos hacer cualquier cosa que nos proponíamos. Éramos un equipo que siempre estuvo destinado a ser y así fue.De repente, Lucy impide que siga navegando por mis pensamientos y me avisa que la cena ya está servida. Le sonrió y le pregunto si Derek y los niños ya llegaron. Ella niega con la cabeza pero me dice que él la llamó avisando que está en camino. Le agradezco, le recuerdo que la amo y le digo que en un segundo voy a la mesa.Es nuestra tercera navidad sin ti, Niall. Ya nada es igual desde que partiste, te tenemos presente en cada segundo de nuestras vidas; lloramos en ocasiones al recordarte, pero luego sonreímos al acordarnos tu risa contagiosa porque sabemos que te pondría triste vernos derramar lágrimas que no sean de felicidad.Intenté salvarte, pero creo que nada puede hacerse cuando tu propio cuerpo dice ‘basta’ y decide tomar un descanso eterno. A pesar de todo, siempre rezo por ti y porque estés bien en donde sea que tu alma haya partido.Por último, mi amor, quiero recordarte algo fundamental: te amo. Te amo infinitamente.Te amo, porque fuiste mi principio a los nueve años. Te amo, porque fuiste mi segundo comienzo a los dieciocho. Te amo, porque fuiste el único que me abrazaste cuando hacía frío y me sentía perdida. Te amo, porque junto a ti pasé los mejores años de mi vida. Te amo, porque sé que siempre serás mi ángel de la guarda. Y aunque te extraño tanto que duele, me reconforta el saber que muy pronto volveremos a estar juntos en un nuevo lugar en donde nada ni nadie podrán dañarnos o separarnos.Y recuerda: yo seré por siempre tuya.Ficha Aceptada
Louis :juay:ya me puse sentimental again :juay:me gusto mucho tu ficha ¡Suerte!Kurisu
Re: Breakeven {Audiciones Cerradas}
CataMalikHoran escribió:en un rato o mañana te dejo mi ficha linda:)
Espero
Kurisu
Re: Breakeven {Audiciones Cerradas}
Heart Attack escribió:Owww GRACIAS !!! Y ... FELIZ.Steph. escribió:Heart Attack escribió:_________Aqui la ficha ladie_________
- SPOILER SEPSI REGLAMENTARIO:
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- SEPSI FICHUS:
Celeste Benson
Nombre: Celeste Camille Benson
Edad: 18
Descripción Psicológica: Ella es una chica rebelde , ama defender lo que es suyo y por ello pelea hasta la muerte .Le gusta estar en perfil medio , sabe mucho de los demás y los demás no saben mucho de ella .No es muy abierta , no le gusta que vean como es , por eso muestra una actitud dura y fuerte ... aunque por dentro no lo es ella es frágil , le afecta todo pero lo reprime y lo deja guardado en una caja de cristal que por momentos se rompe y suelta en tristeza y odio .Siempre intenta animar y escuchar a los demás , porque sabe que ellos podrán ayudarla cuando no este bien .Varias veces se cayo y supo levantarse con firmeza .Es decidida , le gusta tener la ultima palabra .Aprende de sus errores , es humilde y algo orgullosa de sus logros .Intenta ser independiente , no le gusta demostrar debilidad , ama hacer las cosas por si misma aunque aveces la salgan mal y no lo reconozca. Frente a los chicos es provocativa y conquistadora , pero no es ninguna fácil , apenas le presten un poco de atención ella se vuelve el problema mas difícil de su vida ,los ignora quiere que luchen con ella porque no es una muñeca desechable , ya lo han hecho varias veces y no quiere mas ser el objeto de nadie .Por lo general es de relaciones serias , si viniste a buscar otra cosa es mejor dar la vuelta .SI es un chico atractivo y que le guste ella se pone roja y nerviosa .En su grupo de amistades no tiene elecciones , ama tener amigos nuevos con historias nuevas ,pero cuidado con tocar su pasado porque como mencione la caja de cristal se rompe y saca su tristeza afuera . Cuando se siente incomoda no pasa desapercibida comienza a mirar a todos lados buscando algo interesante que la saque de la situación .No le gusta que las personas sean de hablar mucho , le molesta demasiado ya que ella es una persona muy callada y aveces solitaria .Si debe defender a sus amigas es capaz de dar su vida por ello ya que es lo único que tiene .Aveces insulta pero con cariño y solo a sus amistades , nunca la veras insultando a un mayor .Con ellos habla cual princesa , con respeto y con las palabras que si eres su amigo nunca creerás escuchar . Cada día lo vive como el ultimo porque la vida es corta y el cielo es el limite , y nada la puede parar hasta llegar a ello
Representante: Barbara Palvin
Rol:Harry Styles - Rumores
Pequeña historia: Estaba devastada, habíamos luchado mucho por esta relación, habíamos construido nuestra historia paso por paso y ahora se derrumbaba por simples rumores. Al principio no quería dejar que me vencieran pero ya me habían cansado. Ya todo me había cansado desde los rumores mas ridículos como "Harry, Brandon y Celeste hicieron un trió en el cumpleaños de Stacy y usaron un envoltorio de sándwich como condón" hasta los mas dolorosos "Celeste es una prostituta que esta con Harry solamente porque él le da buena ganancia". Antes aquellos eran motivo de risa para ambos pero ahora solo producían la situación en la que estábamos en ese momento. Juntos acurrucados, sintiendo como las lagrimas se deslizaban por nuestras mejillas y como el silencio quemaba nuestras almas. Este era el fin, esta vez era definitivo.
Pasamos semanas ignorándonos, intentando siquiera cruzarnos. No funcionaba hasta que finalmente decidimos acabar con esta mierda y definitivamente enamorarnos de otra persona que nos haga bien. Y asi fue como hice yo. Un mes luego de nuestra ruptura entro un chico nuevo de España se llamaba Ruben Doblas y definitivamente era un chico excelente. Desde que me levantaba hasta medianoche con sus mensajes tiernos sacaba una sonrisa en mi rostro. Finalmente luego de una semana de puro "coqueteo cursi", como le llamábamos, pusimos comienzo a nuestra relación. Hasta hoy nuestra relación no ha sufrido de ningún tipo de problema, es mas en algún momento fue llamada "La pareja del año" porque congeniábamos como ninguno. Era feliz, ni siquiera pensaba en Harry hasta que me entere que me extrañaba y una gran parte de mi corazón quería correr hacia él y decirle. "Yo tambien te extraño"
Escrito de tu autoría:
- AQUI MI PROLOGO DE UN PROYECTO:
Era de noche. La penumbra invadía las calles vacías de Holmes Chapel. George Lanius era al parecer el único hombre despierto, trabajaba. Se encargaba de llevar las cajas del nuevo pedido para el supermercado al depósito. Su rutina era incansable. Caja por caja tomaba del camión y bajaba los fríos escalones hacia las estanterías del depósito donde las acomodaba.
Sus ojeras eran notorias, tenia los anteojos empañados por la mezcla de calor y frio. El clima era de unos dos grados y su temperatura corporal al menos veinte grados mayor, no ofrecía una buena combinación. Sus arrugas y músculos se tensaban al tomar las pesadas cajas. Su única preocupación era no caerse de las escaleras, asique se percataba de pisar bien los escalones.
Estaba a punto de terminar su trabajo. Quedaban solo dos cajas en el camión. Miro su reloj con desgano. Doce y cuarto. Limpio el sudor de su frente con la manga bordo de su uniforme y tomo una gran bocanada de aire para luego exhalar pesadamente esperando terminar.
- ¿Quieres ayuda?
La voz capto la atención de Lanuis quien se sobresalto y se tomo el pecho del susto. Lentamente giro sobre su eje y observo a un lado del camión a cuatro hombres de aspecto familiar. Quito su expresión de susto al reconocer los rostros sus vecinos.
- Me han dado un susto - expreso con calma y los cuatro se inmutaron.
- ¿Podrías responder?
Su expresión era fría, su rostro parecía piedra. Los ojos de los cuatro eran completamente negros, esto le parecía extraño ya que recordaba perfectamente los ojos celestes de dos de ellos.
- Podrían ayudarme con alguna de estas cajas.
Dudaba de pedirles ayuda pero accedió ya que su cansancio se lo imploraba y sus problemas de él ciático también.
- De acuerdo - dijo uno de ellos y tomo una de las cajas y se volteo para luego volverse – Dime donde ponerla.
Lanius respondió hostilmente indicando con una mano la puerta del camino.
- Si, ven por aquí.
Tartamudeaba. Por fuera se notaba mucho su miedo a pesar de estar con conocidos.
Otro de los vecinos tomo la ultima caja y bajo tras Lanius, los otros dos sin cajas se quedaron arriba, cerca de el camión. Lo único que se podía escuchar eran los pasos de los tres bajando hasta el depósito. Al llegar al final de la escalera se pararon en seco ambos hombres. Lanius freno rápido antes de llevarse puesto a Carlos el hombre que tenia adelante.
- Hey, ¿que pasa?.
Estaba inquieto, no sabía que pasaba. El miedo se apodero completamente de él. Ya no se sentía seguro de sus vecinos, estaba aterrado. Su corazón latía a mil pero en vez de sudar sentía frio.
Dos estruendos resonaron en el depósito. Ambos vecinos soltaron las cajas solo con estirar sus manos, estaban quietos, parecían estatuas.
- Ya me dan miedo chicos – toco el hombro de Carlos esperando que fuese un acto gracioso - ¿Por qué no se mueven? Así …
- Silencio - grito Wagls, el hombre a sus espaldas, pero los músculos de su cara no hicieron expresión alguna. Seguía con la mirada perdida, sus ojos negros y hecho piedra.
Carlos giro sobre su eje y miro hacia la puerta. La puerta se cerro y se puso cerrojo por si sola. Su mirada bajo y se encontró con la de Lanius que se hecho para atrás del susto y se choco con Wagls.
- ¿Cómo has hecho eso? – no respondió y comenzó a dudar que su amigo estuviese en algún tipo de trance psicológico - ¿Eres tu Carlos?
- Aquí no hay ningún Carlos – le respondió y bajo las escaleras por completo para luego perderse entre las estanterías de el depósito. Quedo pensando la respuesta del hombre el cual tenia el aspecto de su vecino pero afirmaba no serlo. Ese hombre que parecía una piedra y movía cosas solo con los ojos. Ese hombre, sea quien sea, no era su vecino pero era la copia exacta.
- Y tu? … -pregunto a su otro “compañero” aun con miedo. Wagls se limito a seguir con su mirada perdida, luego de unos minutos esperando respuesta de un movimiento brusco tiró a Lanius al suelo y bajo los escalones con pie de soldado.
Estaba perdido, ya no sabia quienes eran y porque se comportaban así. Se encontraba entre cuatro paredes, un puerta con cerrojo, dos hombres con comportamiento zombie y desparramado en el suelo. El único hombre que veía le deba la espalda y no se animaba a dirigirle una palabra.
- Lanius, ¿se puede saber donde están tus hijos en este momento? – uno de ambos hablo pero bien no se sabía quién era. Frunció el seño buscando un lugar proveniente pero al pensar lo que le habían preguntado se extraño.
- ¿Hijos? – respondió con una pregunta al no saber a donde iba la conversación.
- Karen y Joe, ¿no?- el hombre salió de las penumbras con el rostro relajado, ya no tenia aspecto de piedra pero sus ojos seguían completamente negros. Carlos era quien hacia el escalofriante cuestionario.
- ¿Quiénes son ustedes?- debía sacarse la duda inquietante.
Wagles se acerco a él y lo ayudo a levantarse. Lo tomo con fuerza de los brazos y lo obligo a mirar a sus ojos. Este miro con miedo, los ojos eran completamente negros pero algo lo empujo hacia lo profundo de ellos y vio una imagen aterradora. Su mujer degollada y sus hijos tirados alrededor de ella llorando. Una lagrima se deslizo en sus mejillas y volvió a través de los aterradores ojos.
- ¿Dónde están? – la preocupación era sofocante, no podía soportarlo. Era desgarrador pensar en esa escena que acababa de ver. Dudaba entre la realidad y su imaginación pero era tan real.
- Cierra tu boca y déjame explicar.- Lanius sollozo en silencio –Como ya te he dicho no somos tus vecinos.
- Solo díganme de una vez quiénes son y que hicieron con mi esposa y mis hijos –reclamo haciéndole frente.
- Te dije que escucharas y te quedaras callado – Carlos se descontrolo por unos segundos levantando la voz. –Wagles abofetéalo.
Wagles obedeció y le pego duramente lo que hizo que a Lanius se le partiera el labio.
- ¿Ahora si vas a escuchar? Si cooperas podrás ver a tu familia. –solo hizo silencio – Perfecto. Tus vecinos están muertos.
Los ojos de Lanius se abrieron dejando caer otra lagrima, era demasiado doloroso, era una tortura. Todos los vecinos eran sus conocidos, desde hace veinte años que trabajaba trayendo los cargamentos al pueblo y esos veinte años lo hicieron formar parte de un lindo pueblo.
- Pero, ¿ustedes? – tartamudeo, no querría saber las atrocidades que harían con él. Lo que ahora rondaba en su cabeza era porque esas personas se veían como sus vecinos.
- Se lo que piensas no hace falta que preguntes.
- ¿Cómo?.
- Eso es fácil de deducir. Pero no te lo diré, solo te diré que tomamos prestados los cuerpos de tus vecinos.
- Eso no es factible. No es algo natural.
- ¿Quién dijo que yo era natural? –hubo silencio de parte de los tres-Mira, matamos a tus vecinos y Wagles y yo nos apoderamos de sus cuerpos. No podemos cumplir todas nuestras funciones comunes en estos cuerpos pero es adaptable.
- Funciones, ¿se podría saber cuales?
- No exactamente, pero como hablar en Wagles … a tu vecinito se le dio de complejo gritar mientras tomábamos su cuerpo y quedo mudo al igual que su cuerpo.
Lanius se arrastro por el piso hasta un rincón y tomo su cabeza –esto no es real- se repetía a si mismo e intentaba hacer que todo fuese un sueño.
- Esto es real, tanto como que vas a morir a la vista de tus hijos.
Se detuvo y miro fijamente a Carlos.
- ¿Que demonios dices?
- Mucho cuidado con nombrarme en vano. Ser demonio y que me uses con insultos contribuirá a que tu muerte sea mas lenta y dolorosa.
Wagles salió de el deposito, ambos permanecieron callados hasta que este regreso con una gran bolsa de correo marrón claro que tenia movimiento en su interior. Lanius sospechaba demasiado de que dentro de esa bolsa se hallaba una persona.
- ¿Que llevas allí?- señalo con el menton la bolsa.
- Te dije que iba a ser en presencia de tus hijos.
Una fiera salió dentro de él y se abalanzo sobre la bolsa arrebatándosela a Wagles y liberando a los dos pequeños. Los miro con ternura y estos dos lo abrazaron.
- Mama está muerta – dijo el mayor Joe al oído de su padre. Casi como un susurro doloroso que le partio el alma. Todo era real, lo que vio a través de los ojos negros y oscuros era verdad. Con todo el dolor en sus palabras musito:
- Mama está en un lugar mejor.
Lanius rompió en llanto, tenía miedo, miedo de que algo les pasara a sus hijos. Su vida no importaba solo la de sus hijos.
- Ah que bellos últimos momentos con tus hijos –dijo Carlos con una sonrisa amarga y sarcástica.
- ¿Porque? No les basto con destruir a un pueblo entero y quieren destruirme. ¿Cuál es la razón de una gran masacre?
- Diversión. –fue sutil- Tanto tiempo rondando a su alrededor, ingenuos, ninguno se dio cuenta. Tan entretenidos con su mundo feliz, eso no existe.
- ¿Cómo han llegado?
- Mira solo te lo contare porque tu te llevaras tus secretos a la tumba ¿no? –rio- la fuente que esta en el medio de la ciudad conduce a Satanás, estamos a punto de hacer entrega de un libro especial para nosotros. Se llama Librum Gosh en tu lengua seria El libro de Gosh contiene los secretos mas oscuros de nuestro "reino" y fue escrito por el propio Lucifer.
- Por favor no me maten. –imploro intentando procesar la historia recientemente contada.
- Es tarde.
Una campanada se escucho y los ojos de Carlos y Wagles se hicieron rojos y se abrieron por completo, sus rostros se deformaron. Una sonrisa grande y oscura se asomo en sus caras y una lengua larga salió de ellas.
Lanius tiro a sus hijos por detrás de él y les ordeno que se escondieran y que no vieran lo que pasaba. Se paro en frente de Wagles quien lo agarro de la cabeza y se la giro completamente. Carlos saco su lengua y lo lamio con ella luego lo hizo elevar completamente y lo apretó contra el techo para luego soltarlo. Ambos demonios tomaron de sus brazos y tiraron de ellos haciendo que su cuerpo se partiese en dos.
La sangre era lo mas presente en la escena, era la peor escena de terror. Escalofriante y desgarradora escena que los niños no observaron, solo escucharon los gritos agonizantes de su padre hasta que cesaron por un ruido que se aproximaba a tirar una botella de agua que en este caso era la sangre y una risa aterrorizante irrumpió en la habitación seguido de el completo silencio.
Joe el mayor de tan solo ocho años intento calmar a su hermana quien lloraba desesperadamente en su pecho. Busco ideas con cosas a su alcance para distraerla hasta que se le ocurrió algo. Lo que le encantaba a ella eran … los cuentos.
- ¿Karen quieres que te lea un cuento?- dijo su hermano mientras sus lagrimas caían.
Ella asintió. Joe tomo lo más cercano que tenia, un morral con un libro dentro.
- No sé cómo …
- Joe, ¿Cómo se llama el libro?
- Su nombre es – observo el dorso – El libro de Gosh.Ficha Aceptada
El drama :sir:amo el drama la historia esta llena de drama y eso lo amo ¡Suerte!LOUISIDADOkno. FELIZ NAVIDAD !!!!! WOOO. Que pases linda noche y que recivas muchos regalos sepsis.
Gracias e igualmente, aunque haya respondido mucho tiempo después de navidad xddd lol
Kurisu
Re: Breakeven {Audiciones Cerradas}
MiaElizabeth escribió:Audicionare por Niall
- Soooo Cute:
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En un rato dejo mi ficha. XOXO<3
Espero
Kurisu
Re: Breakeven {Audiciones Cerradas}
MiaElizabeth escribió:
Elizabeth Steele
Nombre: Elizabeth Destiny Steele.
Edad: 19 años.
Descripción Psicológica: Bipolar, la palabra clave para descifrar el extraño carácter de Elizabeth Steele. El mas simple e inofensivo comentario que la haga sentirse amenazada o humillada puede llegar a irritarla a sobremanera y cambiar su estado de tranquilo a explosivo. Sin embargo, para ser mas claros y no dar una definición mas larga, su personalidad se puede describir en cuatro sencillas fases:
•Estoy feliz: La fase uno muestra a una chica divertida y carismática, con la que puedes mantener una sana conversación. En esta clase de humor Elizabeth se caracteriza por ser simpática y amable, siempre haciendo reír a los demás con sus ocurrencias y ese espíritu aventurero que heredo de su padre. Igualmente se comporta con inmadurez y tiende a utilizar el llamado "sarcasmo" con regularidad.
•No estoy bien: Aquí la situación cambia, sigue manteniendo su buen humor y simpatía pero notas algo diferente en ella. Sus ojos celestes ya no tienen ese brillo de siempre, y su actitud se torna un poco mas seria y tranquila. En esta fase, Elizabeth tiende mucho a alejarse de los demás.
•Estoy mal: ¡Alerta roja!, Elizabeth esta mal, lo que significa que estará un poco irritable y violenta, cualquier cosa que le moleste, por mas pequeña que sea, lograra que pase a la fase cuatro.
•Estoy furiosa: Aquí la cosa cambia radicalmente. Violenta, mal hablada, impulsiva, vengativa e hiriente. Si la encuentras de este humor será mejor que retrocedas lentamente mientras puedas esquivar los objetos que te lance para lastimarte. Odia profundamente que la vean llorar, eso la hace sentirse débil y vulnerable. Tienes que ser una persona muy especial para que Elizabeth te deje verla triste.
A veces puede aparentar ser una chica vacía, pero ella es buena y gentil, con las personas que lo merecen claro. No le gusta ver a sus amigos o familiares sufrir, puede llegar a hacer miles de tonterías e incluso hacer el ridículo por tan solo sacarte una simple sonrisa.
Si no eres una persona de su agrado no hay ningún problema, la vida sigue y ella puede ignorarte, así de sencillo. Pero si la buscas la encuentras y si le haces algo que la haga enojar o sentirse humillada hay problemas, y graves, se vengara de ti sin importarle las consecuencias que eso pueda acarrear, porque si la humillas ella te humilla el doble, si te burlas ella se burla el doble, si la lastimas ella te lastima el doble, así que por conveniencia es mejor tenerla de aliada que de enemiga.
No hay poder humano que pueda hacer cambiarla de parecer, desde el principio tienes que dar una buena primera impresión ya que eso definirá como te tratara en el futuro, con ella no puedes enmendar ningún error, si hiciste una tontería desde el inicio que no fue de su agrado, Elizabeth se encargara de recordartelo todos los días de tu vida.
Representante: Perrie Edwards.
Rol: Niall Horan - Mejores amigos.
Pequeña historia: Elizabeth y Niall se conocieron en el jardín de niños. Beth era la típica niña ordenada que siempre entregaba sus trabajos, mantenía su lugar limpio y comía su almuerzo con cubiertos y una servilleta para evitar mancharse. Mientras que Niall era todo lo contrario: desordenado, incumplido y problemático. Como se podía predecir, su primer encuentro fue un completo desastre, Niall termino con el delicioso almuerzo de Beth en la cabeza y la pequeña Elizabeth con su uniforme manchado por la bebida sabor chocolate del rubio. Desde ese momento ambos niños se declararon la guerra. No había un día en el que no pelearan por la mas mínima provocación por parte de el, ya que molestar a la rubia se había convertido en un hobbie. A Niall le llamaba mucho la atención aquel carácter tranquilo pero a la vez explosivo de Elizabeth, mientras que la pequeña niña se preguntaba porque Niall era tan desordenado y repugnante. Claro, estaba en la edad de pensar que los niños tenían germenes y que lo mejor era no tocarlos o acercarceles. Aunque, secretamente, Beth siempre pensó que Niall era un niño muy lindo.
Pasaron los años y para la sorpresa de todo ser viviente que los conociera, esa rivalidad entre ambos termino convirtiéndose en una hermosa amistad. Al llegar a la pubertad, ambos se dieron el tiempo de hablar y notaron que congeniaban y tenían varias cosas en común. Tuvieron que provocar una pelea de comida en la cafetería escolar, recibir un fuerte regaño por parte del director y pasar dos horas castigados en detención para poder hablar, pero al final todo resulto bien para ellos y terminaron convirtiéndose en muy buenos amigos.
¿Quien diría que una relación tan mala termino por ser buena al final de todo?, Niall se había convertido en el confidente de Beth y viceversa. ¿Alguien se atrevía a romperle el corazón a Elizabeth? ¡No!, porque sufriría las consecuencias al enfrentarse cuerpo a cuerpo con Niall. ¿Alguien se atrevía a humillar a Niall? ¡Ni siquiera lo piensen!, porque a Elizabeth le salia el lado salvaje y era seguro que la cosa terminaba en pelea. Este par de mejores amigos se cuidaban las espaldas el uno al otro, no había nada que no se contaran, y gracias a su tan similar mentalidad sabían cuales eran las mejores palabras para decir en cada situación. Incluso, las personas a su alrededor pensaban que los dos formarían una hermosa pareja, pero cada vez que salia el tema Elizabeth se ruborizaba y a Niall le entraba una risa nerviosa. Los mejores amigos eran mejores amigos y punto, nada de cosas de novios, ¿Que tal si terminaban por alguna razón?, las cosas ya no serían como antes y Elizabeth y Niall no querían perder su amistad. Pero no enamorarse era inevitable, pasaban cada minuto del día juntos, no había día en el que no se comunicaran, y las mariposas en el estomago comenzaban a incrementar cada vez que se miraban a los ojos, por lo que, seis años de amistad fue lo suficiente como para que ambos decidieran confesarse lo que sentían por el otro y terminaron por ser novios.
Todo era perfecto, a la vista de todos se notaba que ambos estaban profundamente enamorados. La pareja compartía los mismo gustos y pensaban de la misma manera, por lo que en los inicios de su relación, jamas tuvieron una sola pelea.
Lamentablemente, su historia de amor duro menos de lo esperado. Ambos comenzaron a crecer y a madurar. Los gustos y la mentalidad cambiaron. Elizabeth quería hacer una cosa y Niall otra, sin darse cuenta volvían a ser esos pequeños del jardín de niños, como cuando se conocieron. Niall ya no soportaba los repentinos cambios de humor de Elizabeth, le molestaba el hecho de que no sabía que hacer o decir porque al primer error, por mas pequeño que este fuera, ella explotaba y se ponía violenta. Mientras que Elizabeth sentía ganas de ahorcar a Niall cada vez que este hacia algo que a ella no le parecía adecuado, le molestaba a sobremanera que el rubio le recalcara que las peleas eran debido a ella y su falta de paciencia y tacto. Por lo que, con el tiempo, comenzaron a distanciarse. Ya no los podían dejar solos porque estallaba la tercera guerra mundial. Hasta que llego aquel día en el que Niall no pudo mas y dijo esas cuatro palabras que rompieron el corazón de Beth "estábamos mejor como amigos" al ver las primeras lagrimas salir de esos hermosos ojos azules el rubio se arrepintió de lo que había pensado en voz alta y trato de remediar la situación. Pero muy dentro de ella, Beth sabía que Niall tenia razón, así que decidió dejar de luchar, después Niall también lo entendió.
Finalmente la relación llego a su fin, no hubo ninguna pelea, todo fue pacifico, ambos acordaron volver a ser mejores amigos, pero ya nada volvió a ser lo mismo, cambiaron de amistades y dejaron de hablarse. Ninguno dejo de amarse en ningún momento, ambos querían volver, pero sabían que si lo hacían solo lograrían lastimarse mas. Por lo que al terminar sus estudios en ese colegio, cada quien se fue por su camino con ese sentimiento de nostalgia al pensar que jamas iban a volver a verse.
Escrito de tu autoría:
- Spoiler:
Capitulo 1Mia Frost | Niall HoranKoni
Mi vista se fijó en el horizonte. La puesta de sol lucía hermosa este día, mas a lo lejos la luna comenzaba a apoderarse del cielo, el cual se tornaba de un precioso azul marino. Recargue ambos codos sobre el barandal del balcón y una brisa helada me estremeció. Como un acto reflejo baje las mangas de mi suéter color beige, di un largo suspiro lleno de frustración e impaciencia y me dedique a esperar. Ah seguir esperando.
Los minutos pasaban y yo perdía la esperanza de que el llegará. Era mi cumpleaños y Niall había prometido hacer todo lo posible por venir a verme, pero al parecer no lo había logrado, aunque no me extrañaba, siempre había un motivo por el cual no podíamos estar juntos.
― No vendrá -Dijo una voz masculina detrás mío- Beth.
― Eso no lo sabes -Corregí, sin mirarlo a la cara- el día aún no termina.
Mi hermano soltó una pequeña risa inofensiva ante mi terco optimismo y camino hacia mi, pasando su brazo izquierdo por mi hombro. James era el único que aceptaba, o más bien, soportaba mi relación con Niall. En cambio mis padres y mi otro hermano, todo lo contrario, ellos aborrecían la idea de que una Frost mantuviera una relación con un chico de clase baja. Todos en esa estúpida familia eran iguales: Frívolos y sin sentimientos, interesados solo en lo social y en el dinero, James y yo éramos las tristes excepciones.
― Mamá esta histérica porque te rehúsas a bajar a la fiesta -Hablo James después de una larga pausa.
― Ella sabe la razón por la que no quiero estar ahí -Conteste con resentimiento en mi voz- si no está mi prometido no vale la pena.
― Como tú lo dijiste hermanita, el vendrá.
― Acabas de decir que no lo hará -Recordé, algo confundida.
― En este caso trato de ser optimista por ti, además, ¿Te puedes imaginar la cara que pondría Edward al ver a Niall en la fiesta? -Rio un poco- tal vez hasta lo mata.
― Ni siquiera lo pienses -Refute- francamente, estoy perdiendo las esperanzas de que algún día él y yo podamos ser felices.
― ¡Vamos Mia! Estamos hablando de Niall, el chico que soporta los malos comentarios de la familia, y además, es capaz de brincar una barda de cuatro metros y espantar a los gorilas que tenemos por guardias, solo para verte a ti. ¡Hasta yo quiero uno así!
― Siempre sabes cómo hacerme sonreír Jamie.
― Jamie es nombre de niña -Se quejó.
― Es un apodo, de cariño -Corregí- no seas macho.
― ¿Soy hembra? -Pregunto, dramático.
― ¡James!
― Esta bien, me calmo, uno que trata de portarse bien con su hermana, trayéndole a su novio a la fiesta y tu poniéndome apodos de...
― ¡Trajiste a Niall! -Chille entusiasmada, pero después tape mi boca por miedo a que alguien me hubiera escuchado.
― Ah eso venia -Contesto- a decírtelo.
― ¿Y porque no lo hiciste desde el principio? -Pregunte golpeando su pecho.
― Me cambiaste el tema -Respondió encogiéndose de hombros.
― ¡Yo no te...! -Pare de hablar, no tenía ganas de discutir- ¿Donde esta?
― Afuera, escondido en los arbustos -Informo- más vale que te apures porque si papá lo encuentra no dudara en sacar la escopeta.
― Gracias James, eres el mejor.
Tome la única chaqueta que colgaba del perchero de la puerta del armario y salí de mi habitación lo más rápido que mis pies pudieron permitirme. A lo lejos cuando me encontraba corriendo por el pasillo pude escuchar que James gritaba algo, o más bien advertía, pero estaba tan entusiasmada y apurada en llegar a donde Niall me esperaba que no le presté atención.
Ah pasos torpes y escondiéndome de los invitados que estaban en una de las estancias de la casa, con miedo a que mi madre o mi padre me descubrieran, pude salir al jardín delantero, acto seguido me adentre en los enormes arbustos que cubrían los ventanales de la entrada y al llegar a mi destino comencé a buscar a Niall con la mirada.
― Niall -Lo llame en susurro- ¡Niall!
El corazón se me cayó a los pies cuando sentí que alguien me tomaba del tobillo y me arrojaba al suelo rodeándome con ambos brazos, pero la tranquilidad volvió cuando escuche su voz, esa dulce voz que hacía que mi corazón saltara como un loco cada vez que la escuchaba.
― Si no te agachas te verán y tendré que irme –Advirtió- por cierto, feliz cumpleaños.
Una sonrisa de tonta enamorada se formó en mi rostro y levante la mirada. Ahí se encontraba Niall, detrás de mí, observándome fijamente con la misma expresión con que yo lo observaba a él.
― Creí que no vendrías -Dije girándome y abrazándolo lo más fuerte que pude.
― Como crees que iba a dejarte sola en tu cumpleaños, te dije que llegaría, cumplí mi promesa.
― Te amo.
― Y yo a ti.
Juntamos nuestras frentes y sonreímos. Esta era una de las pocas ocasiones que podíamos vernos desde que les anunciamos a mis padres nuestro compromiso y ellos se pusieron como locos. Ese mismo día me prohibieron seguir viendo a Niall y me ordenaron terminar la relación, pero yo me rehusé, desde entonces hemos sabido aprovechar el poco tiempo que tenemos para vernos.
― Te traje un regalo –Anuncio, sacando una pequeña caja de su pantalón.
― Niall, no era necesario, con tu presencia me basta.
― Solo ábrelo.
Tome la pequeña caja entre mis manos y le quite el moño rojo que la cubría. Tan solo la abrí mis ojos se iluminaron: era un reluciente anillo de compromiso con un enorme diamante incrustado en él, sentí que mis mejillas comenzaban a mojarse y mire a Niall, debió haberle costado meses de trabajo, este tomo mi mano y lo coloco en mi dedo dándole un beso al final.
― Ahora podemos decir que es oficial –Aclaro- con esto quiero que sepas que no dejare que nadie nos separe. Les demostrare a tus padres que valgo la pena.
― No lo necesitas –Dije secando mis lágrimas- con que yo sepa que me amas me conformo.
Nos abrazamos de nuevo y segundos después, pase mis manos por su nuca para acercarlo más a mí, estuvimos a puntos de besarnos cuando un fuerte grito nos sobresaltó a ambos, grite en mi interior, rogando que no fuera quien creía que era pero al parecer solo logre invocarlo.
― ¡ELIZABETH! -Chillo mi padre azotando la puerta de la entrada y acercándose peligrosamente.
― Esto no es bueno -Advertí levantándome del suelo- escóndete antes de que te vea.
― No Beth, no voy a huir, tus padres tienen que entender que...
No pudo terminar su frase porque cayo nuevamente al suelo gracias a un brutal golpe que mi padre le propino en la mandíbula. Quise acercarme pero un fuerte brazo me tomo por la cintura y me levanto por el aire impidiendo que me acercara a Niall.
― ¡Niall! -Grite espantada al notar que no se movía- ¡Suéltame Edward! -Rogué forcejeando.
― ¿Cómo te atreves a regresar a mi casa después de la advertencia que te di? -Pregunto mi padre, esta vez, dándole una patada en el estómago.
― ¡No lo lastimes!
― ¡Cállate! -Ordeno.
― ¿La llevo adentro papá? -Pregunto Edward.
― No -Le contesto- quiero que vea lo que le are a este malnacido por haberme desobedecido.
― ¡Por favor! -Suplique con lágrimas en los ojos- ¡Papá, no le hagas nada!
Ah pesar de mis gritos y suplicas no me escucho, siguió pateando a Niall en el estómago y golpeando su rostro. Mis ojos estaban viendo una completa masacre, y lo peor de todo era que a mi hermano y a mi padre parecía divertirles.
― ¡No vuelvas a acercarte a mi casa, ni a mi hija! ¡¿Escuchaste?! -Pregunto, a lo cual no recibió respuesta, cosa que lo enfureció más y le costó a Niall una patada en el rostro- ¡No te escuche!
No lo resistí más. Con el tacón de mis botas le di a Edward una patada justo en la entrepierna, este me tiro al suelo preso por el dolor y yo me arrastre hasta Niall tomándolo en mis brazos. Estaba desecho y su nariz, frente y boca sangraban con exageración al igual que las heridas en sus brazos.
― Todo va a estar bien amor -Comencé a decirle, pero las lágrimas no me dejaban hablar con claridad- solo no te duermas, quédate conmigo.
― Edward, levántate del suelo, Elizabeth, entra a la casa, los guardias se encargaran de sacar a esta escoria de aquí -Ordeno.
― Déjame llevarlo a un hospital -Suplique.
― ¡Ah la casa dije!
― ¡No papá!
― ¡Ah mí me obedeces! ¡Levántate Edward y llévate a Mia!
Como pudo, mi hermano saco fuerzas para levantarse, quitarme las botas y tomarme en brazos. Este en contra de mi voluntad me llevo hacia la casa donde los invitados de mi madre veían la escena atentos, pasamos por la estancia y todas las miradas se posaron en mí. Lloraba y gritaba sin importarme absolutamente nada más que Niall.
Edward me llevo hasta la biblioteca por órdenes de mi madre y me soltó, al instante me paré e intente salir, pero mi hermano bloqueo la entrada.
― ¡Basta Elizabeth! -Ordeno Edward tratando de detenerme- Mamá está furiosa, tus invitados vieron todo el show que montaste.
― ¡Los odio a todos! –Grite lo más fuerte que pude con toda la intención de ser escuchada y causarle más vergüenza a mi madre.
De pronto la puerta se abrió y James entro a la biblioteca, trate de salir pero Edward fue más rápido y cerró la puerta con llave. Derrotada, me tumbe en uno de los sillones y lleve ambas manos a mi rostro para continuar llorando, James se acercó a mí y me abrazo.
― Fue horrible -Comencé a hablar- papá lo golpeo y Niall sangraba por todas partes.
― Jamás los dejaran en paz si no huyes con el Beth -Propuso James.
― ¡Que tonterías le estas diciendo! -Inquirió Edward alejando a James de mí- ¡¿Cómo puedes...?!
― ¡No es ninguna tontería Edward! -Se defendió- ¡Lo único que están logrando es que Beth los odie!
― Lo hacemos por su bien.
― Si claro, ¿Por su bien golpearon a Niall?, ¿Desde cuando te crees el hermano sobreprotector?.
La puerta se abrió de nuevo, interrumpiendo la pelea entre mis hermanos, eran mis padres y no venían justamente a hablar con serenidad. Tampoco yo, así que furiosa y cegada por el enojo tome fuerzas y le di una fuerte cachetada a mi padre, recibiendo una yo casi al mismo tiempo por parte de mi madre.
― ¡¿Qué te pasa Elizabeth?! -Grito ofendida- ¡No sabes la vergüenza que pase gracias a ti con todos tus invitados!
― ¡Te denunciare Finnick Frost! -Le grite a mi padre ignorando por completo el comentario de mamá- ¡Esto no se va a quedar así!
― ¡Ah mí no me vas a amenazar! -Me contestó.
― ¡Demasiado tarde!, me da repugnancia ser tu hija. Eres un ser humano vil y sin sentimientos ¡Que solo se preocupa por sus propios intereses! -Dije con rencor y odio en mis palabras- ¡¿Dónde está Niall?!
― Donde debe de estar -Hablo Edward- en la calle.
El simple comentario que salió de los labios de mi hermano hizo que la sangre me hirviera y tomara uno de los libros estrellándoselo tan fuerte en la cara que seguramente le rompí la nariz.
― Un día de estos voy a desaparecer -Aclare mirando a mi padre ya que mi madre había ido en rescate de Edward- y ese será el día en el que todos ustedes se arrepientan de todo el daño que me han hecho.
Salí de la biblioteca a paso rápido, dejando a toda mi familia detrás y subí las escaleras para llegar a mi habitación. Sin siquiera saberlo James comenzó a perseguirme, pero no lo deje entrar, cerré la puerta con seguro y como pude moví uno de los muebles para tapar la entrada.
Tenía que hacer esto rápido, iba a irme, no quería estar ni un minuto más en esta casa, tome mi celular y note que tenía cinco llamadas pérdidas de Niall, sin pensarlo dos veces marque su número.
― Amor, ¿estás bien?, ¿te hicieron algo? -Pregunto preocupado, en su voz se podía escuchar el dolor que sentía.
― Me iré de la casa Niall -Respondí- no pienso quedarme ni un minuto más, me iré contigo.
― ¿Estas segura?
― ¿No quieres?
― Nada me haría más feliz.
― Entonces, quédate donde estas, dame 10 minutos para salir de la propiedad, después te llevaré a un hospital -Ordene.
Colgué y apague el celular dirigiéndome al baño para arrojarlo al escusado, así se mojaba y dejaba de servir, ya no tendrían como localizarme. Salí del baño y abrí el armario, tomé una mochila y metí un poco de ropa, en el espacio que quedo guarde un poco de dinero que tenía ahorrado para alguna emergencia, después me coloque unos tenis y la mochila, salí al balcón y mire mi habitación, esta sería la última vez que estaría en este lugar, no lo extrañaría mucho. Me pase al otro lado del balcón y de repente alguien comenzó a tratar de abrir la puerta.
― Beth, abre, soy James -Pidió- solo quiero hablar contigo.
― Te voy a extrañar -Le dije en tono de despedida.
― ¡¿Que estás diciendo?! ¡Elizabeth Frost! -Grito alterado- ¡No hagas una locura!
― Adiós James.
Cerré los ojos para tomar valor y salté.
Ficha Aceptada
Hay dios es todo lo que pensé para el papel de Niall sin duda gracias por audicionar y ¡suerte!
Kurisu
Re: Breakeven {Audiciones Cerradas}
Hooola (? bueno este día me emociona un poco (? quiero decir que a principios de enero se cierran las audiciones, eso entre el cinco o siete así que manden fichas las que faltan o terminenlas
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Kurisu
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