Breakeven {Audiciones Cerradas}

Melocotón escribió:

 

¡Nea! escribió:

Meghana Richards.

Nombre: Rachel Meghana Foster Richards.
Edad: Dieciocho años.
Descripción Psicológica: Básicamente siempre ha sido definida por una sola palabra, ternura. Nunca ha cambiado, aún después de aquella ruptura de puros rumores con su antigua pareja, seguía siendo la misma chica de siempre. Un joven que ante todo siempre tiene un estupenda sonrisa en la cara, será por eso que nunca ha tenido una doble cara, como muchas de las jóvenes de hoy en día las tienen. Suele ser una muchacha tranquila y despreocupada, será por eso que en cuanto ve algún problema intenta asimilarlo con cierta tranquilidad procurando no llevar las cosas al extremo, solo una vez ocurrió que no pudo llevar el problema tranquilamente, la vez en la que ella y Harry, su novio, rompieron. A pesar de todo Meghana siempre será la chica dulce e inocente que todos conocen, la jovencita que es incapaz de tocar un mosquito, porque eso sí Meghana siempre es justa ante todo, no permite que alguien se sobrepase con ella o con las demás personas que ella conozca. Es una chica soñadora, será por eso que ella siempre ha soñado con tener algún príncipe azul a su lado, si, se supone que eso es para niñas, pero ella siempre había querido tener algún chico así, como el que ella soñaba, y pensó encontrarlo en Harry.
Aunque en algunas ocasiones Meghana suele ser la típica chica desconfiada se si misma, pero aquello casi nunca le sucede, solo en esas ocasiones en las que no sabe que hacer. Ante todo Meghana es una chica totalmente diferente de las demás, porque, ¿quien no cambiaría después de romper con su ex-novio? Muchas pensaron que en cuanto ambos muchachos rompieron ella cambiaría, pero se llevaron una gran sorpresa al ver que la misma Meghana seguía en pie, como siempre. Pero ella es así, si le gustas bien, sino también. Realmente no le importa el que dirán los demás, solo le importa su opinión. Nunca podrás verla destruida. Una vez solo sucedió, y se prometió que jamás estaría de ese modo. Al igual que siempre se prometió ser la Meghana dulce, y así es.
Representante: Barbara Palvin.
Rol: Rumores.
Pequeña historia: Meghana y Harry se conocieron gracias a un parque en el que ambos pasaban la mayor parte de su tiempo: Harry, pensando acerca de su vida y de lo que pasaba a su alrededor, y Meghana, pensando acerca de aquel príncipe azul que algún día quisiera tener, y así fue como aquella tarde ambos se encontraron hablando acerca de "Perdona si te llamo amor" aquel libro que, minutos antes ambos leían. El primer encuentro se convirtió en la primera cita, la primera cita se convirtieron en grandes noches en las que ambos pasaban saliendo a varias fiestas, las varias fiestas en las que ambos asistían se convirtieron en el primer beso, y aquel primer beso fue el primero de muchos más. Los días junto a Harry fueron los mejores de toda su vida, ambos se la pasaban juntos la mayoría del tiempo. Y así se enamoraron, ambos jóvenes descubrieron qué era el amor, aquella palabra que muchas veces se dedicaron el uno al otro, los "te amo", los "siempre estaré a tu lado" fueron los grandes testigos del amor tan fuerte que ambos se tuvieron.
¿Pero no todo es alegría y amor, no? Y así fue. Aquel día fue en el que sus vidas comenzaron a cambiar. Rumores, aquella palabra que siempre traía varios problemas e inseguridades. La pareja comenzó a tener problemas a causa de esos rumores que se sembraban cada vez que estaban juntos. Ambos creían que podían superarlo, pero se equivocaron. Los rumores comenzaron a ser más fuertes de lo normal, los dos comenzaron a tener inseguridades entre ambos, comenzaron a distanciarse, a darse el típico "Necesito tiempo", y aquello fue lo último, porque después de que ambos se dieran ese tiempo, descubrieron que si seguían juntos los rumores acabarían destrozándolos a los dos, más de lo que ya estaban. Terminaron. Un día prometieron que siempre estarían juntos, un día prometieron que a pesar de todo nada sería más fuerte que su amor, pero aquello no se cumplió...
Escrito de tu autoría:

You are the love of my life} Harry Styles:

¡Nea! escribió:¡pues ya está! Recien salida de mi mente, todo escrito ahorita mismo. Estoy inspirada

AnaPaulaHoran escribió:ya da resultados plz   

Cami escribió:¿Ya cerraste? :c

.Steph. escribió:

Cami escribió:¿Ya cerraste? :c

En un momento más c: tengo que leer aún C: hay tiempo (?

Cami escribió:

.Steph. escribió:

Cami escribió:¿Ya cerraste? :c

En un momento más c: tengo que leer aún C: hay tiempo (?

¿Me esperas?

¡Nea! escribió: sip. :ay:la historia de harry y meg será dramática, si quedo claro

escrito:

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Cami escribió:

Elise Armistead

Nombre: Elise Susan Armistead.
Edad: dieciocho años.
Descripción Psicológica: Elise es una jovencita tímida e insegura, a quien las críticas de los demás le afectan de una manera bastante notoria. Si bien puede llegar a ser una gran conversadora en sus momentos de comodidad, prefiere mantener sus labios sellados la mayor parte del tiempo para no resaltar entre la muchedumbre.
La humildad es una de sus mejores armas. Nunca le ha gustado derrochar dinero o presumirlo en momentos de buena racha; sabe cómo pueden llegar a sentirse los demás cuando estas cosas suceden, y francamente no es para nada bonito.  Las experiencias le han demostrado que las clases sociales no hacen la diferencia, sino que el poder que creen tener las unas sobre las otras es factor detonante.
Dado a su gran carácter comprensivo, muchas veces tiende a justificar los errores de los demás haciéndose daño a sí misma. Eso hace que perdone fácil, sí, pero no que olvide: la culpa y los errores siguen carcomiendo su alma hasta que logra cerrar el doloroso capítulo, mucho tiempo después de haber sucedido.
Representante: Freya Tingley.
Rol: Clases sociales.
Pequeña historia: Elise nació en el seno de una familia pobre que no pudo mantenerla por mucho tiempo. Tenía tan solo dos años de vida cuando ingresó al centro de adopción, y unos siete cuando finalmente salió de allí. Una familia ya formada la adoptó, convirtiéndola en la hermana mayor de una pequeña bebe recién nacida.
En su nuevo hogar aprendió las reglas básicas de la vida. El respeto y amor que circulaba por el ambiente era agradablemente palpable para cualquiera ingresara a la residencia, y eso hizo propicio su buena formación. Si bien no tenían todo el dinero del mundo para sustentar un colegio privado o comprar los alimentos en la tienda boutique del pueblo, nunca pasaban hambre ni carencias estudiantiles.
A sus dieciséis años, en la preparatoria, conoció a Louis; un joven que se había trasladado al pueblo en el verano y que ya tenía un centenar de amigos a sus pies. Al principio ninguno de los dos congenió demasiado, puesto que la castaña estaba segura de que una persona como él no querría juntarse con alguien de sus pintas. Pero luego de unas cuantas fiestas, copas de más y presentaciones, decidieron que era hora de comenzar a conocerse un poco mejor. Él podía tener a cualquier chica que se le propusiera, pero tan solo tenía ojos para ella.
Y eso fue, probablemente, lo que le atrajo de él: su lealtad. El castaño la respetaba y le trataba como si fuera una muñeca de porcelana, dando a entender que era muy importante para él. No había minuto en el cual no se presentara a su lado, hiciera chistes o intentara integrarla a su grupo de amigos.
Pero para mala suerte, el intento de volver popular a Elise no funcionó demasiado. Y no solo eso, sino que también existía una barrera aún más importante: la señora y el señor Tomlinson. Ellos no aceptaron la mala educación de la ojiazul ni su cuenta bancaria, y le pidieron a su hijo que la desechara.
Louis estaba entre la espada y la pared: si bien las apariencias eran muy importantes en su mundo, Elise era la única mujer de la que se había enamorado realmente. Pero, viendo lo poco que su amada soportaba las críticas e intentos de sabotaje – y a sabiendas de que era demasiado buena como para terminar con él –, cortó con ella y le dio el pase libre.

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