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Re: Time Traveler's | nc | resultados puestos.
por AbrilTomlinson Dom 03 Nov 2013, 3:33 pm
Behati Prinsloo ♥
♥Chica: Behati Prinslo - Mujer del siglo xxi
♥Chico: Harry Styles - Duque del siglo xviii
- BLANCO Y NEGRO ♥ONESHOT♥:
- [Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]NARRA HARRY-
Aparté unas de las cortinas mirando el exterior, la tormentosa lluvia aún seguía y parecía que no tenía intención de detenerse.
Escuché unos pasos provenientes de las escaleras y de inmediato dirigí mi vista hasta esa dirección. Resonando los tacones negros a cada paso en que tomaba un escalón luciendo sus largas piernas vestidas con unas transparentes medías oscuras, una falda corta de cuero negro y una blusa blanca con un estampado de picas de las cartas pocker que colgaba de sus hombros.
-Tardaste demasiado -Siseó mi buen amigo cansado de esperar al levantarse del sillón que conformaba parte de su sala.
-Tranquilo, ya estoy aquí -Recalcó con astio al tiempo en que se colocaba una chamarra gris a juego con su atuendo.
Mientras acomodaba su cabello que ondulado caía en cascada, por primera vez notó mis ojos puestos en ella, es que realmente me parecía atractiva la forma en que lucía que me era inevitable no hechizarme con su apariencia.
-Y tú deja de mirarme de esa forma, me das asco -Murmuró para mí enarcando a la perfección la ceja izquierda.
-Tranquila mocosa, ni que fueras la gran cosa -Resoplé fingiendo total desinterés.
-Por favor, sí babeas por mí.
-Ya quisieras, la mocosas como tú no me ponen -puntualicé -si tuvieras algo de más clase o una mejor personalidad tal vez lo consideraría.
-No gracias, a mí ni me interesan los idiotas como tú.
-¡Ya basta lo dos! -Ordenó Louis para detener lo que iniciaba con nuestra normal guerra de insultos -___, ¿no puedes pasar un día sin tener que pelear con Harry? -Se dirigió a su hermana, que por la expresión que reflejo su rostro era seguro cuan le cabreaba que este la reprimiera frente a mí.
-Es tú culpa por tener un amigo imbécil. Como sea, tan solo vamonos.
Ella caminó frente a nosotros y tomando un paraguas que colgaba a un lado de la puerta se dispuso a salir. Ambos salimos tras ella de la misma manera, cada uno utilizando un paraguas para evitar mojarnos mientras subíamos al auto. ___, por su parte, se acomodó en la parte trasera del coche al momento en que revisaba su maquillaje por el espejo retrovisor, yo subí en el asiento del copiloto y Louis tomó el volante de su auto.
Habíamos acordado salir como cada fin de semana solíamos hacerlo, bailar e ir por unos tragos pero la pesadita de la hermana menor de Louis había insistido en que la lleváramos con nosotros, que ella quedaría con sus amigas en verse allá en el bar y no nos sería de molestia lo único que buscaba era un aventón para llegar al lugar. Aunque solo interactuaríamos unos momentos era suficiente para armar una peleas de gritos entre nosotros. No me soporta y admito que el sentimiento es mutuo.
Tal como lo dijo ella pasaba la noche con sus amigas, se divertía bailando en su circulo, era la que más destacaba, la forma en que se movía era tentadora, meneaba sus caderas de un lado a otro con sensualidad, levantaba los brazos de forma alegre dejándose llevar por el ritmo candente de la música.
Desde el taburete frente a la barra donde me encontraba sentado admiraba de hito en hito su perfecta persona.
Ya entrado con un par de tragos, solo pasaba la noche observándola era suficiente para mí pero la realidad era que no solo era yo quien la miraba, varios buitres asechaban a su alrededor con la intención de devorarla acompañados con sus miradas lascivas, eso era lo que más aborrecía.
El rato fue tranquilo, bebí solo un par de copas y charle con unas cuantas chicas lejos de buscar algo más con ellas, y Louis, estaba ahogado en alcohol, se divirtió más de la cuenta porque su estado lucía por de más deplorable.
-Es hora de irnos -Llamé a ___ que bebía en la barra junto a sus amigas -Louis está muy borracho.
Me miró y como un milagro no soltó ningún reproche, se despidió de sus amigas y salio delante de mí seguida de un Louis tambaleante que con esfuerzo lograba permanecer de pie.
Esta vez fue ___ la que tomó el asiento del copiloto, su hermano se quedo en la parte de atrás y yo decidí llevar el auto.
Tras el trayecto a casa de los hermanos acompañado de balbuceos sin sentido por parte de mi amigo llegamos, estacioné el auto y apagué el motor, bajé de este y lo rodee para ayudar a Louis a bajar, pasé unos de sus brazos por mis hombros y le pedí que se apoyase en mí para entrar, ___ tomo la molestia de abrir la puerta de su casa y seguido continuamos a la habitación de su hermano. Lo deposite en su cama ya dormitando, como buen amigo tuve la calma de quitarle las zapatillas, para cuando hice eso este yacía ya dormido en un profundo sueño. ___ y yo salimos de la habitación, ella cerró la puerta.
-Bien pues, yo me voy. -Cuando me disponía a irme ella sujetó mi mano cosa que me sorprendió.
-Ven un momento -Jaló de mi hasta llevarme a su habitación.
Entramos a la pieza, ella cerró la puerta tras de sí, se deshizo de su chaqueta dejándola caer al piso. De un mueble cerca de ella tomó un pequeño control remoto, presionó uno de los botones señalando un par de bocinas conectadas a su Ipod y la música comenzó a sonar.
-Baila conmigo -Pidió acercándose hasta donde me encontraba. Envolvió sus brazos en mi cuello y apoyo su frente sobre mi hombro derecho -En toda la noche no bailaste conmigo -susurró desilusionada.
-¿Cómo esperabas que lo hiciera? -Tomé su delgada cintura con mis brazos -Louis podía vernos -comencé a moverme junto a ella y pude sentir su sonrisa contra mi cuerpo.
No deslizamos en un ritmo apacible a corde con la canción, sentía el calor de su delgado cuerpo contra el mío, su respiración chocar contra mi cuello mientras que la magia del momento nos consumía. Ahí estábamos perdidos al tranquilo ritmo de la canción Just the way you are. de Bruno Mars
-Harry...-susurró levantando su mirada y clavandola en mis ojos -No me hiciste caso, ¿No te gusto como me veía?
-¿De qué estás hablando? Estuve toda la noche mirándote ni siquiera lo notaste, y por su puesto, te veías hermosa -Sus labios se curvaron.
Rozó su mejilla contra la mía, exhalo y con lentitud desendio a mi boca sin tocarme aún -Bésame -pidió cerrando los ojos.
Fue entonces que nuestras bocas se cruzaron en un dulce beso, primero fueron un par de toques húmedos solo nuestros labios, seguido arremetí sin dudar con mi lengua su boca topandome de lleno con la suya, enredé mis manos en su cabeza sujetándola y Aprisionándola más a mí buscando un beso más salvaje.
Perdiéndome en esa boca adictiva, es esos labios suaves al tiempo en que ella tiraba de mi cabello provocandome un ligero dolor que se sentía exquisito.
Al separarme ___ respiraba agitada, sus mejillas se pintaron de carmín intenso dándole color a su cara.
Sin dejar de mirarme tomó la orilla de su blusa con ambas manos y la levanto pasándola por sus hombros hasta liberarse de ella, seguido la arrojo al suelo para continuar con su falda, destrabo el botón que se hallaba en el lado izquierdo de su cadera, bajo el cierre y esta sola resbalo por sus piernas, salio de ella y prosiguió con sus medias quedando frente a mí con un sujetador oscuro de encaje y unas bragas a juego del mismo modelo.
-Harry... -Las palmas de sus manos viajaron por mi pecho, subieron hasta mis hombros al momento en que acercaba su boca a mí oído, sentí su respiración caliente, después modio mi oreja y tiró de ella -Fóllame.
Al instante sentí la sangre hervir, la excitación en un veloz aumento y la molesta presión de la tela sobre mi entrepierna.
Sin titubear abracé su cintura llevándola contra mi cuerpo, ella gimió por lo brusca que resulto mi acción.
Besé sus labios con vehemencia nuestras lenguas se rozaban buscando más placer, baje mis manos hasta sus nalgas apretándolas con fuerza, ella volvió a gemir ahogándose en el beso. Mientras que seguía moldeando su trasero me restregaba en ella buscando satisfacerme, casi podía sentir en el tacto de mi duro pene, aún sobre las telas, la humedad que existía en su entrepierna.
Corté el beso -Vamos -murmuré con desesperó alzándola a lo que ella abrazo mis caderas con sus piernas. Caminé hasta la cama donde la solté para volver a besarla.
Bese su vientre, baje mis labios hasta sus bragas, deslice mi lengua por debajo del elástico probando su piel mientras que con uno de mis dedos acariciaba sobre la prenda de arriba a abajo distinguiendo la humedad. Ella gemía y eso me mataba.
-Estás mojada para mí -Levante la mirada. ___ me veía totalmente perdida apoyándose en sus antebrazos para observar mis acciones -Me encanta.
Retiré con mis dedos las bragas pasándolas por sus piernas, mismas que abrí para poder admirar con mayor comodidad su sexo, pegajoso y rosado.
Sujeté sus muslos para evitar que ella cerrase las piernas y me acerque a su intimidad para poder provarla, pasé mi lengua por su hendidura degustando el sabor de su morbo, ella gimió fuerte, continué lamiendo pasando mi lengua por todos lados, Complaciendola al mismo tiempo en que saciaba mi propio deseo de devorarla. Mi mente se nublaba queriendo comerla aún más.
Adentre mis dedos indice y pulgar en su vagina, metiendo y sacando con facilidad causa de su gran deseo. Me di cuenta de sus manos sobre mi cabeza empujándome más y noté el movimiento de su pelvis buscando el encuentro de mi boca y su sexo.
-¿Se siente bien? -Pregunté al verla retorcerse.
-Sí... sí... Continúa por favor... -Suplicó con voz ronca.
Me ví en la tarea de proseguir, lamí su hinchado clítoris, ella gimió tan fuerte que me llego a preocupar que pudiera despertar a Louis pero en el estado etílico en que se encontraba eso me parecía casi imposible.
Mis dedos seguían dentro de ella, sentía el calor de su cuerpo, metía y sacaba, los movía dentro una y otra vez. Succionaba sus labios, torturaba su clítoris a sabiendas de que estaba al límite.
-Harry... Mhm... Harry!..
-Vamos, dámelo...
Una, dos, tres lamidas, chupe fuerte y mordí su botón al instante en que el orgasmo feroz la consumía. Los dedos de los pies le retorcieron, su cuerpo tembló ante tal magnitud que debió haber disfrutado. Me levante lamiendo de mis labios el resto de su rico orgasmo.
-Mierda -Farfulló moviéndose a un lado para estirase a la cajonera al lado de su cama, abrió el primer cajón he introdujo su mano, de entre un montón de ropa saco un pequeño paquete de aluminio -Toma -lo extendió hacía mí -Te necesito dentro ahora.
Sonreí complacido, tome el paquete que me ofrecía, al fin libere mi pene de la opresión de las tenas y lo envolví con el condón. Me colé entre sus piernas sujetando mi falo ansioso y me hundí en su ser siendo gustosamente recibido.
-Dios ___ -Mascullé alucinado siendo deliciosamente oprimido.
Agarre su brasier y lo levante sin tomar la molestia de quitarlo debidamente dejé sus senos al aire y encanto me dispuse a lamer uno de sus pezones iniciando el movimiento de mis caderas. Mordí el duro pezón, lamí y succione excitado mientras que una y otra vez arremetía contra ella.
___ chillaba más que complacida y yo me sentía enloquecer ante la magnitud del placer que recibía Adentro, afuera, resbaladizo, humedo.
Así continuo durante un rato, nuestros cuerpos se agitaban sincronizados, ella movía sus caderas hacía mí en busca de más y yo encantado le daba lo que quería.
-Más...más... -Pidio jadeante sujetandome fuerte.
Ya lo sentía, la vibración en mi cuerpo, el estremecer de mi piel, el placer.
-Me vengo...
Me aferre con fuerza a sus hombros y poseso me enterré más duro en su ser, gemía, gemía para mí y me sentía enloquecer ante ella, ante su ser, ante su cuerpo, todo mezclado me volvía loco.
Tan duro embestí cayendo en un intenso orgasmo. ___ enredo sus piernas en mi y provo el suyo propio mientras que yo me corría fuerte y jadeando contra su cuello.
Maravillados hicimos el amor con la música de Bruno Mars como fondo
**
-¿Qué tú no tienes casa? Porque parece que te la pasas metido aquí -De nuevo esa manía de levantar su ceja mientras me inspecionaba en la sala de su casa.
-Tranquila que no vengo a verte a tí -Aclaré.
-Gracias a Dios no lo haces -Se burló.
-¡___ ya callaté! la cabeza me esta matando y todavía tengo que soportar que fastidies a Harry -Replicó Louis que se encontraba sentado frente a mí masajeando su sien.
-¿Que yo lo fastidio? ¡Es él quien me fastidía! -Chilló señalandome.
-Ya ya -Se levanto mi amigo caminando fuera de la sala dejandonos atrás -A veces creo que más que odiarlo te gutsa -murmuró fuera de la pieza -Ahora vuelvo, tengo que orinar.
-¿¡Qué me gusta?! ¡No jodas! -Fingio gran molestía.
Volteo su mirada hacía mí, rápidamente se acerco aprovechando la ausencía de su hermano y susurrando a mi oid
Ya sé, soy un mal amigo Louis, pero te o -Te adoro - paso fugazmente sus labios sobre los mios, alejandose con una sonrisa maliciosa abandono el lugar
conosco más que a nadie y sé que sí supieras que tu querida y adorada hermana menor y yo estamos lejos de odiarnos como es que te hacemos creer, no estarías muy contento.
- ♥¿Porque quieres quedar?♥:
Porque me encanta tu idea , siempre quize escribir algo con respecto a la sipnosis que pusiste me gusta la epoca antigua y los viajes en el tiempo *.*
AbrilTomlinson
Re: Time Traveler's | nc | resultados puestos.
por happy drug. Dom 03 Nov 2013, 6:08 pm
¡Nea! escribió:[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]Harry Styles | Duque del siglo XVIII hermano de Charlotte | Rachel Richards {Barbara Palvin} | Mujer del siglo XXI.
{#} ¿Por qué quiero quedar?
Uhm... Effy de my heart, ya tu sabe'. Tú idea es realmente hermosa, genial... perfecta, aparte de que esta basada en una de mis peliculas favorita con la hermosa de la McAdams, y en cuanto vi que habias abierto audiciones y aparte de que el titulo me llamo bastante la atencion, decidi que tenia que audicionar. Y no me arrepiento, sabes que obviamente utilizo a Harbara, aquel ship perfecto, que tú has puesto que es de Maggz y yo... te amo. Gracias, y bueno espero con muchas ansias poder quedar.
- Madly in love with you {Hazza} OS.:
Aquella sonrisa que con tan solo verla alegraba mis días, aquellos ojos azules como el cielo, aquella voz tan hermosa como la de un ángel. Nada es comparado con tu belleza.
Aun recuerdo aquellos momentos que juntos compartimos, aun recuerdo nuestra infancia, aun recuerdo el día en que nos conocimos por primera vez.
¿Por qué no comenzamos por el principio de todo?
Recuerdo aquel día en el que por primera vez nuestras madres nos presentaron, tu tan solo eras una pequeña castaña con los ojos más hermosos del mundo. Aquel día sentí como mi corazón comenzó a latir con rapidez, con locura… tan solo por ti. Recuerdo que no tome en cuenta aquella sensación, porque sabía que era una jodida estupidez.
Y ahí fue el comienzo de toda nuestra historia, los primeros años fueron de pura amistad entre nosotros… sin duda, fueron los mejores años de toda mi vida. Pero todo comenzó a empeorar cuando tú comenzaste a sentir algo más por mí, un sentimiento nuevo. ¿Cómo reaccionar ante eso? Aquel día, cuando tú me dijiste que estabas completamente enamorada de mí. Algo se removía en mi, algo oculto en mi, algo nuevo. Te desprecie, dije que en todos estos años solo estaba contigo por lastima, que tu tan solo eras uno más de mis juegos. Vi tu hermoso rostro empapado por aquellas lágrimas tuyas, y yo tan solo quería correr hacia ti, abrazarte, besarte, decirte que todo aquello que te dije era un farsa, una mentira. Pero mi cobardía me venció, por ser un jodido cobarde te perdí. Comencé alejarme de ti, comencé a salir con otras chicas para intentar olvidarte, algo que no conseguí. ¡Por que tú seguías ahí! ¡Dentro de mí!
Meses y meses, intentando salir con chicas que creía que eran “hermosas” y de buen corazón, intentando quitarte de mi corazón, quitarte de mi mente.
Me decía a mi mismo que deje de pensar en ti, que deje de imaginarme tu rostro en mi mente. No podía, no lo soportaba. Y a la vez algo dentro de mí comenzaba crecer y crecer, y no sabía el que era. ¡No lo sabía! Me daban ganas de romper cosas, de llorar por la rabia e impotencia que sentía… pero sencillamente no tenía fuerzas. Días después, comencé a intentar olvidarte por medio del alcohol, pero sin darme cuenta aquello era mucho más peor, porque seguías en mi mente. ¿Por qué? ¿Por qué no puedo quitarte de aquí? ¿Por qué no desapareces de mi corazón? ¿Qué me sucede? Me estaba volviendo completamente loco, sentía como mi cuerpo necesitaba del tuyo, necesita poder sentirte, tenía las inmensas ganas de correr hacia ti y hacerte mía de todas las formas posibles.
Sentía como mi cuerpo te pedía a gritos, iba al instituto y simplemente veía como ibas agarrada de aquel nuevo chico. Mi cuerpo se encendía de tan solo ver como aquel malnacido de cogía de la mano, y te reclamaba como suya. Mi cuerpo tenía ganas de matarlo a golpes. Me estaba destruyendo a mi mismo por no saber qué rayos me pasaba, mi cuerpo ya no respondía nada, y tú sencillamente me ignorabas. El karma me devolvió todo lo que yo te hice un día, y de la peor manera posible.
Caminaba por los pasillos y tú pasabas por enfrente de mí y yo tan solo olía tu hermoso aroma de vainilla y fresas. Intentaba hacer que prestaras atención en mí, pero no podía. Tú estabas todo el día con aquel imbécil, ¿Qué podía hacer? Tu tenias el derecho de poder estar con quien quieras… pero no quería que estuvieses con otro… yo quería que estuvieras conmigo… tan solo conmigo.
Una impotencia comenzó a apoderarse de mi cuerpo, mi alma comenzó a sentir aquello que las personas siempre sienten cuando quieren tener a otra persona, aquel sentimiento que te hacia querer estar todo el día con la otra persona, aquel sentimiento que te permitía sentir lo más hermoso del mundo… el amor.
Recuerdo que siempre decía que nunca me enamoraría, que mi corazón no era de una sola mujer.
Me di cuenta que te amaba, me di cuenta que yo estaba completamente y locamente enamorado de ti. Pero aquello era demasiado tarde, tu le pertenecías a otro… tu ya no eras mía.
¿Sabes? Si ahora mismo me preguntaran ¿Qué es el amor? No tendría duda de que si podría responderlo, porque gracias a ti pude descubrir aquel hermoso sentimiento, el más puro. Enamorarse es querer besarte, abrazarte, sentir que en este mundo solo existimos tú y yo. Enamorarse es querer matar a quien te toque, es sentir aquellas mariposas revoloteando alrededor de todo mi estomago… por ti. Tan solo por ti, mi amor.
Mi hermosa castaña, si tan solo tu pudieras oír con tus oídos lo mucho que te amo, y lo mucho que quiero estar junto a ti. Mi pequeña, mi hermosa pequeña… ahora es demasiado tarde, lo es. Tan solo tenía miedo a enamorarme, tenía miedo a depender solo de ti… miedo amarte con locura, y no ser capaz de dejarte ningún segundo sola. Si, miedo aquello.
Amarte es lo más hermoso que puede haber, es lo más hermoso que un humano puede hacer en este mundo estúpido y cruel. Me enseñaste grandes cosas con tus hermosos sentimientos, cosas que no sabía que podían existir… cosas realmente inexplicables. Tú con tu melena, con tus hermosos ojos azules, con tus largas pestañas, con tu hermoso rostro de ángel… juntos somos uno, juntos formamos un solo cuerpo, una sola persona. Juntos hicimos una hermosa promesa de amor de pequeños, juntos prometimos estar ahí el uno para otro, prometimos ser amigos inseparablemente unidos… probablemente esto estaba destinado, este era nuestro destino… enamorarnos locamente el uno de otro. Quizás tan solo quizás, tu siempre fuiste mía, pero de algo quiero que estés completamente segura… yo siempre seré tuyo, mi corazón siempre te pertenecerá, mi alma, mi cuerpo… siempre serán tuyos.
Tan solo quería sentir tú hermoso al lado del mío, que cuando despertáramos lo primero que viésemos fuera el rostro del uno y el otro, comernos a besos como unos verdaderos adolescentes, tan solo quería… que estemos juntos ahí, en las buenas y en las malas. Y que cuando tú estuvieses triste, yo habría estado ahí para ti, consolándote con todo mi amor, consolándote con mis abrazos, susurrándote hermosas palabras al oído. Tan solo quería… quería un poco de tu amor. Lamentablemente todo había acabado entre nosotros… todo.
- Cuando sientas que no te amo mira al cielo e intenta contar todas las estrellas. No podrás saber cuántas hay en total… porque sencillamente son infinitas, al igual que mi amor por ti.
Recuerdo que aquel día intente buscarte a tu casa, y confesarte todo lo que tenía guardado dentro de mí. No hubiese querido hacerlo, por que cuando llegue todo fue totalmente lento… lamente haber ido a tu casa, lamenté haberte herido, lamenté… no haber estado contigo.
A tan solo unos metros de mi, tú te encontrabas tirada en el suelo con grandes manchas de sangre en tu corazón, sentí que mi corazón se paralizaba, sentí que ya no latía. Y como pude, corrí hasta ti y cogí tu hermoso y bello cuerpo entre mis manos, apoye tu cabeza entre mis piernas y comencé a sollozar como un imbécil, como el imbécil que soy. Y ahí todo comenzaba a desmoronarse, toda mi vida paso en tan solo un segundo al verte ahí… tú ya no estabas, tu cuerpo ya no respiraba.
Millones de lagrimas comenzaron a caer alrededor de mi rostro… yo fui el culpable de todo esto, yo tuve la culpa de todo… no te pude decir lo mucho que te ama, vi tu rostro pálido, tus hermosos ojos estaban cerrados y nunca más se volverían abrir, tus labios estaban rojos acusa de tu palidez, tu nariz ya no respiraba mi aire… tu ya no estabas.
Y en ese preciso momento… me di cuenta de que estaba locamente enamorado de ti.
- Prom? {NC}:
Capitulo 4
[justify]Rachel caminaba al lado de su mejor amigo cabizbaja, algo que realmente le jodia era que alguien la mirase. ¿Acaso, tiene algo en la cara? Miro de reojo a Harry, y se pregunto a si misma ¿Cómo Harry puede ser su mejor amigo? Sin duda, aquel ruloso siempre ha estado en los momentos más bonitos y más tristes, y aunque, las personas crean que es un chico arrogante y seductor, no lo es. ¡Para nada! Rachel sabe muy bien como es su amigo, por algo es su mejor amigo ¿no?
- Y eso, Rach – Siguió comentándole Harry a su mejor amigo, la cual miraba hacia el suelo.
- Entonces, ¿harás el trabajo de sociales? - Rachel miró detenidamente a su amigo.
- No lo sé, pequeña. Esa materia se me da fatal – Harry pasó nerviosamente sus manos por todo su pelo.
- Hazza, cuenta para nota ¿lo sabías? – Le preguntó Rachel, con el entrecejo fruncido.
- Claro que lo sé, solo que… agh – Exclamó el ruloso, cansado de aquella materia, algo que profundamente odia son las estúpidas Ciencias Sociales.
- Deberías conseguirte algún tutor – Le animó Rachel, intentando subirle el animo a su amigo.
- Ya veremos – Dijo su amigo mirando a otro lado, totalmente distraído. Dios mío, pensó Rachel para sus adentros.
Siguieron caminando totalmente en silencio hasta el patio del instituto, estaban en recreo.
- ¡Hola chicos! – escuchó chillar a una chica, se giro sobre sus talones y vio a –lamentablemente– Destiny. Iba a seguir caminando rápidamente, para no encontrarse con aquella… chica, pero su mejor amigo la cogió por lo hombros, y ambos se quedaron quietos en sus lugares. Vio como Destiny la mirada un poco mal, estaba claro, que ambas se caían mal, muy mal.
- Eh… y hola Rachel – Oyó decir a Destiny un tanto incomoda.
- Hola… Destiny – Le sonrió, o más bien, le hizo una mueca.
No soportaba aquella chica, y lamentablemente su mejor amigo, era amigo de ella, vaya trola. Vio como los demás chicos salían de sus respectivas clases, rápidamente cogió a su amigo de la mano y se dirigieron a coger sus respectivas comidas.
- Así que, ¿te cae mal Destiny, verdad? – Le habló su amigo, yendo al grano.
- Como me conoces – Dijo Rachel sarcástica – Si, me cae mal – Le sonrió forzosamente.
- ¿Por qué? – Le preguntó Harry, para el Destiny era una persona chillona pero muy amable, al menos para él lo era.
- Ósea, ¿la has visto? Mejor no hablemos de ella, no quiero que la comida me siente mal – Bromeo Rachel, y los dos partieron de risa. Sin duda ambos siempre captaban lo del otro, mejores amigos por siempre.
Cogieron sus bandejas y se dirigieron a sus respectivos asientos, los dos solos, algo mejor para Rachel, como he dicho antes, odia que la gente se le quede mirando.
- Uhm… esto esta delicio – Oyó como decía su amigo, pero a mitad de la última palabra se quedo sin habla, mirando a un solo objetivo, su amiga siguió la mirada del ruloso, y capto –claramente- su objetivo, estaba mirando a una castaña, la chica mas aplicada, sin duda, a la cual no sabía su nombre.
- Eh, Hazza – Le dijo Rachel pasando la mano de un lado para otro, frente la cara de él, pero nada, el rizado seguía mirándola como un increíble estúpido. Miro como se levantaba rápidamente y caminaba hasta la castaña. ¿La estaba dejando sola? ¿Por ella? Vaya amigo, pensó Rachel. Siguió comiendo sumida en sus pensamientos, cuando de pronto sintió un aliento cerca de su oído. Aroma varonil, podía percibirlo.
- Hola, hermosa – Enseguida reconoció aquella voz, otra vez aquel morocho jodiendola. Siguió comiendo, como si nada pasase. Hacía ya algunos días, había notado la mirada insistente de aquel morocho, siempre en ella, y aun así, Rachel la había ignorado completamente.
- Eh, estoy aquí – Oyó que decía nuevamente, ¿es que acaso no entendía que no quería hablar con él? Imbécil, pensó Rachel.
- ¿Qué quieres? – Preguntó lo más seca posible, cogió el tenedor apretándolo fuertemente.
- Nena, tranquila no me hables así – Le reprochó aquel chico, dios mío, uno, dos, tres, cuatro…
- No me llames nena – Deletreó cada letra según corresponda, se está comenzado a impacientar, y obviamente eso no le gusta a Rachel.
- Wau, si que eres como dicen los demás – Se burló el morocho queriendo hacer enfadar a Rachel.
- ¿Qué te han dicho? – Le preguntó lo más tranquila posible.
- Reservada – Le dijo el morocho, sin ningún pudor.
- Vete a la mierda – Dijo Rachel, para después poder coger su mochila y un café y largarse rápidamente. Dios, como la desquiciaba ese chico, sin duda alguna, quería hacerla cabrear, algo que no logro. Siguió caminando, ignorando las miradas acusadoras de los demás, cuando de pronto sin querer derramo su café encima de alguna persona, enseguida noto como chillaba de dolor, obviamente el café estaba muy caliente. Giro su cabeza para encontrarse con una Destiny, cabreada, oh Rachel estas en problemas, se dijo a sí misma. ¿Por qué la vida es tan injusta con ella? Más de 300 alumnos hay, y viene ella y derrama su café encima de la odiosa de Destiny, preferiría mil veces a la castaña, por la cual Harry babeaba.
- ¡Rachel! – Gritó Destino furiosamente. Cerró sus ojos, para no querer verla más, es que ¿acaso no podía parar de gritar?
- Lo siento – Murmuró Rachel cabizbaja, queriendo no poder mirarla.
- ¿Lo sientes? Querida, esta camisa era de una marca muy importante – Le chillo Destiny mostrándole la etiqueta que autentificaba que su camisa era verdadera, dios.
- Lo siento mucho, Dest – No pudo continuar, cuando noto como algo caliente recorría su cuerpo, súper caliente, como le ardía, que no pudo contener un grito de dolor.
- Eso es por mi camisa – Se burló Destiny, al ver como Rachel se retorcía de dolor.
- Eres una perra – Le gritó Rachel en su cara, iba a darle una bofetada cuando unos brazos musculosos cogieron su cuerpo, enseguida lo reconoció, era Harry.
- Sh, tranquila – Intentó calmarla su mejor amigo, vio como Destiny se iba contoneando sus caderas y coqueteando con los chicos, estúpida, pensó Rachel.
- Ya, ya – Dijo Rachel, intentando zafarse de los brazos de su mejor amigo.
Y todavía comienza el día.
- Give me Love {NC}:
¡Oh mierda! ¡Joder, joder! Mentalizó Harry al ver que nuevamente soñaba con su adorada, Rachel. Hacía ya años, que siempre soñaba con ella, con su sonrisa, con besarla tan solo sean unos minutos, hasta con hacerle el amor. Se levantó, gruñendo para sí mismo, por no poder quitarse a aquella muchacha de la cabeza. Tuvo que irse a tomar una ducha, ya que en sus sueños eróticos se la imaginaba desnuda, gimiendo su nombre mientras él la penetraba a fondo, y obviamente su miembro tuvo una pequeña erección. Abrió el grifo de la bañera, y dejó que el agua pasase por todo su cuerpo, y nuevamente pensó en ella. No entendía como ella no querría estar con alguien como él, el gran Harry Styles. Hazza siempre se categorizaba como un muchacho guapo, popular y orgulloso, cualquier chica estaría dispuesta a estar con él. Pero claramente, Rachel era la excepción, esa chica ha sido la primera en pisar todo su orgullo, sin duda estaba tan enamorado por Rachel, sino no hubiera hecho esas cosas. La vida es tan injusta, que por una vez en el mundo, Harry había aprendido a amar a una persona, sin duda el karma le estaba devolviendo todo lo que el les hizo a aquellas antiguas “amigas”. Su pequeña Rachel, es como… lo único que tenia, aquella chica ha conseguido poder robarle toda su mente, su corazón y sus suspiros. Y anhelaba poder tenerla entre sus brazos, o por lo menos ser amigo de ella, tan solo cualquiera de esas dos cosas.
Salió de la ducha, nuevamente regañándose por no dejar de pensar en ella, pero ¡Joder! Es que era tan difícil, solo podía pensar en ella, en su chica, porque aunque ella lo negaba, había algo en el que le decía que ella era suya, solamente suya. Bajo las escaleras, ya cambiado de ropa, para encontrarse con su madre preparando el desayuno, a un lado estaba su padrastro, y al otro lado de la mesa se encontraba su hermana tecleando en su móvil. Una sonrisa forzada paso por todo su rostro, no dejaría que sus padres o su hermana lo viesen triste.
- ¡Buenas días, familia! – Exclamó, aparentando emocionado. Todos subieron su mirada, y lo vieron con cierta rareza. Anne, su madre, le ofreció una hermosa sonrisa, la cual dejaba ver una hilera de diente blancos.
- Buenos días, hijo – Le dijo su madre, mientras terminaba de preparar el café y las tostadas. Harry se reprimió a sí mismo, por mentir que estaba feliz, o en todo caso, emocionado.
- Ah, hola Harry – Le dijo su padrastro levantando la mirada del periódico, y viéndolo de arriba abajo con una mirada rara. Vio de reojo como su hermana hacia un ademan con su mano, sin duda estaría hablando con su novio o algo si, pensó Harry.
Se despido de todos, una vez terminado todo su desayuno. Salió a la calle, y vio el coche de su mejor amigo, Louis, aparcado en un lateral de la calle de su casa, se dirigió hacia su amigo, y pudo distinguir que en el asiento de atrás venían Niall y Liam, los cuales venían hablando muy animadamente, mientras el rubio comía deliciosamente su barra de chocolate, sin hacerles caso a los demás, tan solo concentrado en la comida. Por primera vez en todo el día, Harry sonrió.
- Ey, hola – Le dijo Louis, una vez que Harry se montó en el coche, y comenzó a manejar directamente hacia el instituto. Harry hizo un ademan con la mano, y se dispuso a mirar por la ventana, pensando una vez más en ella. Esa chica lo traía tan loco, que en cualquier momento lo haría matarse a sí mismo. Se rió, de tan solo pensar en morirse por ella, no sería la primera vez, pensó en el libro de Romeo y Julieta, ese sí que fue un amor tan sincero y hermoso, ese chico, sin mal no lo recuerda, murió por su Julieta, realmente nunca ha tenido el valor de leer un libro así, solo concuerda con algunos pensamientos de los chicos, tanto, que se siente identificado con el personaje, ósea con Romeo, la diferencia era que Julieta no lo ignoraba como lo hacía su Rachel.
- Ey, Hazza – Giró su cabeza para encontrarse a Nialler, mirándolo fijamente.
- ¿Qué? – Susurró por lo bajo Harry, aun con la mirada perdida.
- ¿Está pensando en la Foster, eh? – Bromeó Liam, mirando al rizado. Este se giró y le dio una mirada fulminante.
- Imbécil – Le dijo Harry, dándole una colleja en su adoraba cabeza – Aunque, si. Si estoy pensando en ella – Suspiró, una vez más. Y sin darse cuenta, el tiempo paso y ya estaban en el instituto, bajaron del auto, y cada quien se fue por su lado. En cuanto pisó el piso, Harry pudo verla, venia caminando junto a una castaña, conversando tranquilamente, optó por esconderse entre los arbustos, y poder escuchar la conversación que mantenían las dos muchachas.
- Es enserio, Rach – Dijo la castaña, la cual desconocía su nombre.
- Si, te digo que ese imbécil solo se me pasa jodiendo y jodiendo – Oyó decir a su amada, un poco frustrada.
- Pues métele una buena patada en todas sus bolas – Harry tuvo que reprimir una carcajada, ante lo dicho por la castaña.
- La próxima vez que joda, lo haré – Se burló Rachel. Styles rodó los ojos, ante lo que dijo su pequeña, estaban hablando de él, eso estaba claro.
- Bueno, Rach, nos vemos luego tengo clase de matemáticas, me tengo que encontrar con ese estúpido – Gruñó la castaña, e hizo un ademan con la mano hacia su amiga, y camino a paso lento, gruñendo para sí misma. Rachel, definitivamente se había quedado sola, vio de reojo como ojeaba su móvil. Esta era su oportunidad, ahora o nunca. Se situó detrás de ella, y cogió su cintura, la castaña reacciono girando violentamente la cabeza, para encontrar con aquel rizado, su pesadilla.
- ¿Qué haces, imbécil? – Exclamó Rachel, intentando zafarse de su agarre, Hazza la apretó más contra él.
- Cogerte, ¿Acaso no lo ves? – Se burló, mirándola.
- Déjame, no tienes ningún derecho a cogerme – Dijo Rachel, enfadada por la actitud de aquel bastardo que tenía en frente suyo.
- No, mi amor – Le dijo el rizado, con sinceridad, si por él fuera la tendría agarrada toda la vida.
- ¡No me llames amor! – Chilló Rachel, notando como sus mejillas se enrojecían, ante aquel gesto, el rizado sintió ternura - ¿No me vas a soltar? – Dijo Rachel, con una mirada malvada.
- ¡No! – Exclamó el rizado.
- ¿Seguro? – Le preguntó una vez más, la castaña.
- ¡No! – Exclamó por lo bajo, Harry. Rachel giró su cabeza, para encontrarse a unos centímetros de los labios del chico, Harry cerro sus ojos por un momento, esperanzado por poder sentir aquellos labios. Rachel se burló mentalmente, y se logro zafar de su agarre, con toda la fuerza del mundo, le planto un puñetazo en todo el estomago del rizado, se carcajeó al ver que Harry se retorcía de dolor.
- ¡Esta me la pagaras, pequeña! – Gritó el rizado al ver que su amada se alejaba, meneando las caderas seductoramente.
Sin duda, estas pequeñas cosas, hacían que el rizado la amara más y más. Sin duda la ama, con todo su corazón, su Rachel.
Audición aceptada
¡Hárbara rlz! solo de Rach y MagzAmo que decidieras audicionar, amo tu avy, tu nombre, tu firma y te amo a ti :meh:
¿Tres capítulos? juro que no era necesario, tu escribes hermoso y yo eso lo se
oc, ahora el one shot, plz es el mejor shot que he leido in my laif, srsly. Hasta las lagrimas se me salieron 
porque no le dijo antes cuanto la amaba, ah. La narracion su definicion de amor, como describe el como se siente es tan úncio, simplemente hermoso 
El capítulo de, prom? plz, maldita Destiny todo por culpa del morocho :juay:ahque, el Hazza en lugar de defenderla estaba babeando por aquella chica e.é pero que amigo...
Y que me dices del capítulo de Give me love, ahora si puedo morir en paz. Deo meo Rach, escribes simplemente perfecto. La forma en que escribes es unica, admirable.
Tu audición es mas que aceptada, suerte Rachelsita of my heart.
happy drug.
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por happy drug. Dom 03 Nov 2013, 6:14 pm
CamiiBeliberStyles escribió:[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]|Travis Mills| Hombre del siglo XXI| Hayley Williams | Dama del siglo XVIII|¿Por qué quiero quedar? Simplemente, la idea me encanto, amo todo esto de los siglo anteriores, revoluciones, historia. Me encanto, me tocaste el corazón(? Y no sé, me encantaría quedar, amo ponerle mucho esfuerzo a una novela, especialmente si es colectiva, y siento que lo estoy haciendo con esta. Tal vez no, no sé kvfsnvljfnl. Supiste desde el primer momento que me encantaba estos temas, supe yo, desde el principio que esta novela es la ostia! Men me encanta, haría un canción sobre esta n.c ahq. No sé fue como orgasmo fuerte cuando vi la novela,
- Lydia.:
- capitulo:
Espero la canción sobre la novelaahquelepasaba (?
Gaaad, ¿como supiste que amo a Travis?es simplemente perfecto. Well, el capítulo estuvo al go corto but me gusta mucho como escribes
Plz, obviously tu audicion esta aceptada, suerte Camz.Los gifs, my hermosa Holland sale perfecta
happy drug.
Re: Time Traveler's | nc | resultados puestos.
por happy drug. Dom 03 Nov 2013, 6:18 pm
AbrilTomlinson escribió:
Chica: Behati Prinslo - Mujer del siglo xxi
- BLANCO Y NEGRO
Aparté unas de las cortinas mirando el exterior, la tormentosa lluvia aún seguía y parecía que no tenía intención de detenerse.
Escuché unos pasos provenientes de las escaleras y de inmediato dirigí mi vista hasta esa dirección. Resonando los tacones negros a cada paso en que tomaba un escalón luciendo sus largas piernas vestidas con unas transparentes medías oscuras, una falda corta de cuero negro y una blusa blanca con un estampado de picas de las cartas pocker que colgaba de sus hombros.
-Tardaste demasiado -Siseó mi buen amigo cansado de esperar al levantarse del sillón que conformaba parte de su sala.
-Tranquilo, ya estoy aquí -Recalcó con astio al tiempo en que se colocaba una chamarra gris a juego con su atuendo.
Mientras acomodaba su cabello que ondulado caía en cascada, por primera vez notó mis ojos puestos en ella, es que realmente me parecía atractiva la forma en que lucía que me era inevitable no hechizarme con su apariencia.
-Y tú deja de mirarme de esa forma, me das asco -Murmuró para mí enarcando a la perfección la ceja izquierda.
-Tranquila mocosa, ni que fueras la gran cosa -Resoplé fingiendo total desinterés.
-Por favor, sí babeas por mí.
-Ya quisieras, la mocosas como tú no me ponen -puntualicé -si tuvieras algo de más clase o una mejor personalidad tal vez lo consideraría.
-No gracias, a mí ni me interesan los idiotas como tú.
-¡Ya basta lo dos! -Ordenó Louis para detener lo que iniciaba con nuestra normal guerra de insultos -___, ¿no puedes pasar un día sin tener que pelear con Harry? -Se dirigió a su hermana, que por la expresión que reflejo su rostro era seguro cuan le cabreaba que este la reprimiera frente a mí.
-Es tú culpa por tener un amigo imbécil. Como sea, tan solo vamonos.
Ella caminó frente a nosotros y tomando un paraguas que colgaba a un lado de la puerta se dispuso a salir. Ambos salimos tras ella de la misma manera, cada uno utilizando un paraguas para evitar mojarnos mientras subíamos al auto. ___, por su parte, se acomodó en la parte trasera del coche al momento en que revisaba su maquillaje por el espejo retrovisor, yo subí en el asiento del copiloto y Louis tomó el volante de su auto.
Habíamos acordado salir como cada fin de semana solíamos hacerlo, bailar e ir por unos tragos pero la pesadita de la hermana menor de Louis había insistido en que la lleváramos con nosotros, que ella quedaría con sus amigas en verse allá en el bar y no nos sería de molestia lo único que buscaba era un aventón para llegar al lugar. Aunque solo interactuaríamos unos momentos era suficiente para armar una peleas de gritos entre nosotros. No me soporta y admito que el sentimiento es mutuo.
Tal como lo dijo ella pasaba la noche con sus amigas, se divertía bailando en su circulo, era la que más destacaba, la forma en que se movía era tentadora, meneaba sus caderas de un lado a otro con sensualidad, levantaba los brazos de forma alegre dejándose llevar por el ritmo candente de la música.
Desde el taburete frente a la barra donde me encontraba sentado admiraba de hito en hito su perfecta persona.
Ya entrado con un par de tragos, solo pasaba la noche observándola era suficiente para mí pero la realidad era que no solo era yo quien la miraba, varios buitres asechaban a su alrededor con la intención de devorarla acompañados con sus miradas lascivas, eso era lo que más aborrecía.
El rato fue tranquilo, bebí solo un par de copas y charle con unas cuantas chicas lejos de buscar algo más con ellas, y Louis, estaba ahogado en alcohol, se divirtió más de la cuenta porque su estado lucía por de más deplorable.
-Es hora de irnos -Llamé a ___ que bebía en la barra junto a sus amigas -Louis está muy borracho.
Me miró y como un milagro no soltó ningún reproche, se despidió de sus amigas y salio delante de mí seguida de un Louis tambaleante que con esfuerzo lograba permanecer de pie.
Esta vez fue ___ la que tomó el asiento del copiloto, su hermano se quedo en la parte de atrás y yo decidí llevar el auto.
Tras el trayecto a casa de los hermanos acompañado de balbuceos sin sentido por parte de mi amigo llegamos, estacioné el auto y apagué el motor, bajé de este y lo rodee para ayudar a Louis a bajar, pasé unos de sus brazos por mis hombros y le pedí que se apoyase en mí para entrar, ___ tomo la molestia de abrir la puerta de su casa y seguido continuamos a la habitación de su hermano. Lo deposite en su cama ya dormitando, como buen amigo tuve la calma de quitarle las zapatillas, para cuando hice eso este yacía ya dormido en un profundo sueño. ___ y yo salimos de la habitación, ella cerró la puerta.
-Bien pues, yo me voy. -Cuando me disponía a irme ella sujetó mi mano cosa que me sorprendió.
-Ven un momento -Jaló de mi hasta llevarme a su habitación.
Entramos a la pieza, ella cerró la puerta tras de sí, se deshizo de su chaqueta dejándola caer al piso. De un mueble cerca de ella tomó un pequeño control remoto, presionó uno de los botones señalando un par de bocinas conectadas a su Ipod y la música comenzó a sonar.
-Baila conmigo -Pidió acercándose hasta donde me encontraba. Envolvió sus brazos en mi cuello y apoyo su frente sobre mi hombro derecho -En toda la noche no bailaste conmigo -susurró desilusionada.
-¿Cómo esperabas que lo hiciera? -Tomé su delgada cintura con mis brazos -Louis podía vernos -comencé a moverme junto a ella y pude sentir su sonrisa contra mi cuerpo.
No deslizamos en un ritmo apacible a corde con la canción, sentía el calor de su delgado cuerpo contra el mío, su respiración chocar contra mi cuello mientras que la magia del momento nos consumía. Ahí estábamos perdidos al tranquilo ritmo de la canción Just the way you are. de Bruno Mars
-Harry...-susurró levantando su mirada y clavandola en mis ojos -No me hiciste caso, ¿No te gusto como me veía?
-¿De qué estás hablando? Estuve toda la noche mirándote ni siquiera lo notaste, y por su puesto, te veías hermosa -Sus labios se curvaron.
Rozó su mejilla contra la mía, exhalo y con lentitud desendio a mi boca sin tocarme aún -Bésame -pidió cerrando los ojos.
Fue entonces que nuestras bocas se cruzaron en un dulce beso, primero fueron un par de toques húmedos solo nuestros labios, seguido arremetí sin dudar con mi lengua su boca topandome de lleno con la suya, enredé mis manos en su cabeza sujetándola y Aprisionándola más a mí buscando un beso más salvaje.
Perdiéndome en esa boca adictiva, es esos labios suaves al tiempo en que ella tiraba de mi cabello provocandome un ligero dolor que se sentía exquisito.
Al separarme ___ respiraba agitada, sus mejillas se pintaron de carmín intenso dándole color a su cara.
Sin dejar de mirarme tomó la orilla de su blusa con ambas manos y la levanto pasándola por sus hombros hasta liberarse de ella, seguido la arrojo al suelo para continuar con su falda, destrabo el botón que se hallaba en el lado izquierdo de su cadera, bajo el cierre y esta sola resbalo por sus piernas, salio de ella y prosiguió con sus medias quedando frente a mí con un sujetador oscuro de encaje y unas bragas a juego del mismo modelo.
-Harry... -Las palmas de sus manos viajaron por mi pecho, subieron hasta mis hombros al momento en que acercaba su boca a mí oído, sentí su respiración caliente, después modio mi oreja y tiró de ella -Fóllame.
Al instante sentí la sangre hervir, la excitación en un veloz aumento y la molesta presión de la tela sobre mi entrepierna.
Sin titubear abracé su cintura llevándola contra mi cuerpo, ella gimió por lo brusca que resulto mi acción.
Besé sus labios con vehemencia nuestras lenguas se rozaban buscando más placer, baje mis manos hasta sus nalgas apretándolas con fuerza, ella volvió a gemir ahogándose en el beso. Mientras que seguía moldeando su trasero me restregaba en ella buscando satisfacerme, casi podía sentir en el tacto de mi duro pene, aún sobre las telas, la humedad que existía en su entrepierna.
Corté el beso -Vamos -murmuré con desesperó alzándola a lo que ella abrazo mis caderas con sus piernas. Caminé hasta la cama donde la solté para volver a besarla.
Bese su vientre, baje mis labios hasta sus bragas, deslice mi lengua por debajo del elástico probando su piel mientras que con uno de mis dedos acariciaba sobre la prenda de arriba a abajo distinguiendo la humedad. Ella gemía y eso me mataba.
-Estás mojada para mí -Levante la mirada. ___ me veía totalmente perdida apoyándose en sus antebrazos para observar mis acciones -Me encanta.
Retiré con mis dedos las bragas pasándolas por sus piernas, mismas que abrí para poder admirar con mayor comodidad su sexo, pegajoso y rosado.
Sujeté sus muslos para evitar que ella cerrase las piernas y me acerque a su intimidad para poder provarla, pasé mi lengua por su hendidura degustando el sabor de su morbo, ella gimió fuerte, continué lamiendo pasando mi lengua por todos lados, Complaciendola al mismo tiempo en que saciaba mi propio deseo de devorarla. Mi mente se nublaba queriendo comerla aún más.
Adentre mis dedos indice y pulgar en su vagina, metiendo y sacando con facilidad causa de su gran deseo. Me di cuenta de sus manos sobre mi cabeza empujándome más y noté el movimiento de su pelvis buscando el encuentro de mi boca y su sexo.
-¿Se siente bien? -Pregunté al verla retorcerse.
-Sí... sí... Continúa por favor... -Suplicó con voz ronca.
Me ví en la tarea de proseguir, lamí su hinchado clítoris, ella gimió tan fuerte que me llego a preocupar que pudiera despertar a Louis pero en el estado etílico en que se encontraba eso me parecía casi imposible.
Mis dedos seguían dentro de ella, sentía el calor de su cuerpo, metía y sacaba, los movía dentro una y otra vez. Succionaba sus labios, torturaba su clítoris a sabiendas de que estaba al límite.
-Harry... Mhm... Harry!..
-Vamos, dámelo...
Una, dos, tres lamidas, chupe fuerte y mordí su botón al instante en que el orgasmo feroz la consumía. Los dedos de los pies le retorcieron, su cuerpo tembló ante tal magnitud que debió haber disfrutado. Me levante lamiendo de mis labios el resto de su rico orgasmo.
-Mierda -Farfulló moviéndose a un lado para estirase a la cajonera al lado de su cama, abrió el primer cajón he introdujo su mano, de entre un montón de ropa saco un pequeño paquete de aluminio -Toma -lo extendió hacía mí -Te necesito dentro ahora.
Sonreí complacido, tome el paquete que me ofrecía, al fin libere mi pene de la opresión de las tenas y lo envolví con el condón. Me colé entre sus piernas sujetando mi falo ansioso y me hundí en su ser siendo gustosamente recibido.
-Dios ___ -Mascullé alucinado siendo deliciosamente oprimido.
Agarre su brasier y lo levante sin tomar la molestia de quitarlo debidamente dejé sus senos al aire y encanto me dispuse a lamer uno de sus pezones iniciando el movimiento de mis caderas. Mordí el duro pezón, lamí y succione excitado mientras que una y otra vez arremetía contra ella.
___ chillaba más que complacida y yo me sentía enloquecer ante la magnitud del placer que recibía Adentro, afuera, resbaladizo, humedo.
Así continuo durante un rato, nuestros cuerpos se agitaban sincronizados, ella movía sus caderas hacía mí en busca de más y yo encantado le daba lo que quería.
-Más...más... -Pidio jadeante sujetandome fuerte.
Ya lo sentía, la vibración en mi cuerpo, el estremecer de mi piel, el placer.
-Me vengo...
Me aferre con fuerza a sus hombros y poseso me enterré más duro en su ser, gemía, gemía para mí y me sentía enloquecer ante ella, ante su ser, ante su cuerpo, todo mezclado me volvía loco.
Tan duro embestí cayendo en un intenso orgasmo. ___ enredo sus piernas en mi y provo el suyo propio mientras que yo me corría fuerte y jadeando contra su cuello.
Maravillados hicimos el amor con la música de Bruno Mars como fondo
**
-¿Qué tú no tienes casa? Porque parece que te la pasas metido aquí -De nuevo esa manía de levantar su ceja mientras me inspecionaba en la sala de su casa.
-Tranquila que no vengo a verte a tí -Aclaré.
-Gracias a Dios no lo haces -Se burló.
-¡___ ya callaté! la cabeza me esta matando y todavía tengo que soportar que fastidies a Harry -Replicó Louis que se encontraba sentado frente a mí masajeando su sien.
-¿Que yo lo fastidio? ¡Es él quien me fastidía! -Chilló señalandome.
-Ya ya -Se levanto mi amigo caminando fuera de la sala dejandonos atrás -A veces creo que más que odiarlo te gutsa -murmuró fuera de la pieza -Ahora vuelvo, tengo que orinar.
-¿¡Qué me gusta?! ¡No jodas! -Fingio gran molestía.
Volteo su mirada hacía mí, rápidamente se acerco aprovechando la ausencía de su hermano y susurrando a mi oid
Ya sé, soy un mal amigo Louis, pero te o -Te adoro - paso fugazmente sus labios sobre los mios, alejandose con una sonrisa maliciosa abandono el lugar
conosco más que a nadie y sé que sí supieras que tu querida y adorada hermana menor y yo estamos lejos de odiarnos como es que te hacemos creer, no estarías muy contento.
Porque me encanta tu idea , siempre quize escribir algo con respecto a la sipnosis que pusiste me gusta la epoca antigua y los viajes en el tiempo *.*
Audición aceptada
Holú Abril, me ha fascinado tu audicion. Los gifs
is Dydia, bitch. Ahque.Me encanto el shot y mas aun bc fue largoooo y me encanta los escritos largos. Ya estas audicionando linda, suerte.
happy drug.
Re: Time Traveler's | nc | resultados puestos.
por happy drug. Dom 03 Nov 2013, 6:27 pm
HidePeek escribió:[Tienes que estar registrado y conectado para ver esa imagen]Matt Bomer| Duque del siglo XVIII | Rachel Hurd-Wood | Mujer del siglo XXI - Prima de Niall Horan.
- Sayvendi:
La melodía que inunda la sala es suave; el baile aún no ha comenzado. Las luces colgantes irradian luminosidad con vigor, la decorada y lujosa habitación cegaba a los invitados. La hermosa joven vuelve la mirada a aquella enigmática figura y la desvía al no poder sostenerla. El carmín tiñe sus mejillas.
— ¿Quién es aquel?—pregunta suavemente ladeando la cabeza en su dirección a un caballero con el que mantuvo una interesante conversación minutos atrás. El sigue la mirada de la muchacha y se tensa por un momento.
— ¿Él?—pregunta inseguro. Ella asiente—Él es Sir Thomas Laverweed—dice rápidamente.
Sir Thomas Laverweed: un joven admirado, codiciado y deseado por jóvenes damas; temido y respetado por reconocidos caballeros; odiado y repudiado por la minoría y poco conservadora alta sociedad. Su gran posesión de terrenos se debía a la herencia dejada por sus difuntos padres, años atrás. Su fortuna era malgastada y derrochada vilmente en fiestas y bailes. No obstante, nunca pertenecía a la diversión que el mismo ofrecía. La desgracia se cernía sobre él y era visible su infelicidad, palpable en su mirada.
Repentinamente los músicos cambian la melodía y se sabe que el baile ha comenzado. Parejas se extienden por la sala y empiezan a danzar de acuerdo al ritmo con el que los músicos efectúan sus instrumentos. La claridad de la habitación disminuye. La música es acompañada de las leves pisadas y pequeños roces de largos vestidos en el encerado parqué.
La muchacha se retira a una esquina alejada. La gran mayoría del tiempo, odiaba este tipo de actuaciones. Hoy fue una excepción y obligación. Ignoraba su propia pertenecía a la alta sociedad, detestaba el hecho de pertenecer a ella.
—Leyah—pronuncia una voz profunda en medio de la baja luz. Ella voltea rápidamente.
Frente a ella se encuentra Nikolavish Petrovev, con dorados cabellos y ojos esmeraldas. Él pertenece al Ejército y ejerce cómo Sargento del Tercer Corregimiento. Nikolavish era un muchacho en el apogeo de su juventud, apenas unos años mayor que Leyah. Su amistad se remontaba a su infancia. Sin embargo, las veces que se vieron, poca era la conversación que tenían. Casi siempre— por las responsabilidades domésticas, la influencia familiar, el prestigio desequilibrado entre ambas y diferentes familias o el propio sentimiento de molestia— se veían obligados a separarse. De uno u otro modo, de no ser por esos impedimentos, ambos jóvenes hubieran podido encontrar oportunidad para el sentimiento que ambos retenían y suprimían en sus corazones.
—Nikolavish— Sus ojos resplandecen bajo su antifaz plateado y sonríe al verlo.
Leyah era una bella y apacible joven. Sus bucles castaños bajaban ondeando por su espalda y sus ojos oscuros brillaban con alegría. La influencia que ella podía producir en la alta sociedad era trascendente. Sin embargo, ella tenía otras preocupaciones y no hacía provecho de esta facilidad.
— ¿Me permites bailar contigo?—pregunta con una melodiosa voz mientras extiende su mano, haciendo una reverencia. La joven parpadea ante la propuesta, confusa. Ella baja la cabeza respondiendo a aquella reverencia y finalmente toma la mano del rubio.
Nikolavish baila con ella mientras la melodía de los violines se desvanece y el coro de los violonchelos y clarinetes empieza. Leyah siente la presión en su pecho, aquel sentimiento olvidado emerge de nuevo. Él mira a sus hermosos y oscuros ojos. Ella le devuelve la mirada con fulgor.
La melodía cambia otra vez, las parejas se deshacen y cambian. Leyah baila ahora con un caballero de máscara vienesa con mirada cansina y amable. Luego danza con un joven alto y corpulento con una sonrisa que resplandece blanquecina. Nikolavish nunca pierde de vista a Leyah, aún cuando está bailando con bellas damas atestadas de delicados adornos en sus vestidos, meneando sus melenas en el aire. Repentinamente, Nikolavish —que no consideraba a ninguno que había bailado con Leyah cómo algún pretendiente o alguien a quien ella pudiera prestar demasiada atención—le invade un interés extremado por aquel joven sin máscara que baila ahora con Leyah.
Sir Thomas acerca más a él a la hermosa castaña, sujetando firmemente su cintura y tomando suavemente de su mano. La fragancia de él inunda a Leyah y su imprevista proximidad le causa un sentimiento extraño. Ella sólo sostiene su mirada y poco a poco logra ver el brillo de esos ojos azules. Thomas se embelesa de los suyos, oscuros y serenos. Ambos cautivados con el otro; mirar de lejos no es lo mismo que admirar de cerca.
— ¿Me recuerdas?—pregunta repentinamente Thomas, sus pupilas se dilatan aún más. Leyah la mira extrañada y el misterio que emana del joven de cabello cobrizo la aprisiona.
— ¿Me recuerdas?—vuelve a pronunciar suavemente, pero esta vez se inclina y sus labios encuentran los de ella. Su mano viaja a los rizos de la castaña sujetos en un elegante moño y la atrae a él, profundizando el beso.
Nikolavish, que se encontraba al otro lado de la sala, intenta hacerse paso entre las parejas para llegar hasta Sir Thomas. Rabia y decepción lo invaden, intentando en vano avanzar entre las personas.
Sir Thomas se separa de la castaña y la mira intensamente. Sus ojos brillan y se oscurecen ante ella.
—Recuérdame, por favor—suplica, y su voz suena tan diferente a la anterior, seductora y calmada. Él besa su mejilla y desaparece entre la multitud de personas, que impiden que Leyah pueda alcanzarlo o verlo.
Y sólo puede pensar en lo que dijo: “Recuérdame”. “Por favor”.
- Lydia<33:
¿Por qué quieres quedar? Ví siglo XVIII y me enamoré (? En serio, amo completa y locamente todo lo que se ambiente o salga de esos años . Además, es una idea muy chula He leído libros y visto películas sobre esas épocas, soy una experta (? La cuestión es que es una muy buena idea, una convivencia entre personas de otro siglo, que tienen diferentes ideas sobre el mundo, que desconocen varias cosas. Sólo es genial e.e
Audición aceptada
Holis Peéko
plz, Matt es tan sensual 
Bien, ame el gif mi hermosa Holland es hermosa, ah (?). Y que decir de tu cápitulo, simplemente me fascino. Ya estas audicionando linda, suerte.
happy drug.
Re: Time Traveler's | nc | resultados puestos.
por happy drug. Dom 03 Nov 2013, 6:30 pm
I want to more auditions :meh: spam y cierro las audiciones el proximo domingo 
ahquelepasaba.
ahquelepasaba.happy drug.
Re: Time Traveler's | nc | resultados puestos.
por ceonella. Dom 03 Nov 2013, 7:21 pm
Waaaaaaaaaaaaaaaa, gracias.
Te amo te amo te amo, por amar a Travis y por ser genial. lml
Perdón si fue corto es que la imaginación, inspiración, o como quieras decirle, se esta yendo de parranda la bien perra y deja mi cerebro solo, ahq.
TU, Lydia es hermosa, lo admito.
Las canciones están abajo, osea ¿conoces aquella película? ¿Proyecto X? Bueno esa :D
Bueno amo escribir con música, son una de mis cosas favoritas y juntarlas es como, pizza y Sprite. oshea.(?
Spam, Spam, Spam.
Te amo te amo te amo, por amar a Travis y por ser genial. lml
Perdón si fue corto es que la imaginación, inspiración, o como quieras decirle, se esta yendo de parranda la bien perra y deja mi cerebro solo, ahq.
TU, Lydia es hermosa, lo admito.
Las canciones están abajo, osea ¿conoces aquella película? ¿Proyecto X? Bueno esa :D
Bueno amo escribir con música, son una de mis cosas favoritas y juntarlas es como, pizza y Sprite. oshea.(?
Spam, Spam, Spam.
ceonella.
---
Re: Time Traveler's | nc | resultados puestos.
por LiamPayne Dom 03 Nov 2013, 7:48 pm
njrngujgntujj ya quiero los resultados alguien quiere audicionar para mi novela?:3
LiamPayne
Re: Time Traveler's | nc | resultados puestos.
por mariistyles Dom 03 Nov 2013, 7:59 pm
omg omg me encanto la sinopsis , la ame , audicionare , pero mañana te subo mi ficha porque estoy desde mi tablet, besos.
mariistyles
Re: Time Traveler's | nc | resultados puestos.
por Invitado Dom 03 Nov 2013, 8:04 pm
Ya te mando la mia.
Invitado
Invitado
Re: Time Traveler's | nc | resultados puestos.
por Invitado Dom 03 Nov 2013, 8:15 pm
Rachel Marianne Foster
Niall Horan | Hombre del siglo XXI | Rachel Marianne Foster{ Lily Collins | Dama del siglo XVIII
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¿Por que quieres audicionar?: Bueno, primero que nada, me encanto la idea. Me pareció interesante y original. Una Nc sobre viajeros en el tiempo es algo que realmente vale la pena.
Y segundo, te amo. Audicionaria en cualquier cosa que hicieras, por que se que se excelentes escritora y tus ideas son mas que geniales. Independientemente de esto, y como siempre digo, sos vos la que decidís, y no me voy a enojar sino quedo. Aunque realmente me gustaría. No soy muy buena en estas cosas, solo digo la verdad y listo.
- Spoiler:
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- Spoiler:
- Me haces bien:
- Prologo
“Un esquizofrénico es una persona que ya tiene una tendencia natural para ausentarse de este mundo, hasta que un hecho-grave o superficial, dependiendo de cada caso hace que cree una realidad solo para el. El caso puede evolucionar hasta un punto en que el paciente te ausenta totalmente de la realidad, que llamamos catatota, o por el contrario puede ir mejorando y permitir que el paciente trabaje y desarrolle una vida prácticamente normal. Depende tan solo de un factor: el ambiente. ”- Verónica decide morir, Pablo Coelho.
“Veinticinco, veinticuatro, veintitrés, veintidós, veintiuno, veinte…”. La castaña contaba los minutos para marcharse de ese horrible lugar. Había pasado tres años de su vida concurriendo a esas monótonas sesiones con su psicólogo en aquella oficina gris que solo contaba con un gran ventanal, dos amplios sillones negros y una biblioteca repleta de libros, algo viejos y polvorientos.
Estaba aburrida. Nunca había logrado entender como el joven de no mas de veintiocho años podía llevar una vida tan organizada y meticulosamente planeada.
Se podía identificar que era un hombre estructurado de familia adinerada, seguramente casado, y con uno o dos hijos. Su psicólogo no era la persona mas divertida del mundo, al igual que sus sesiones no eran tan gratas como las de la Doctora Smith, su psiquiatra.
Pero la había ayudado, ese hombre que estaba sentado frente a ella, observándola, con una mano sobre su pierna, sujetando un anotador y una lapicera, y la otra alrededor de su barbilla, con su dedo índice cruzándole los labios, la había ayudado.
-Aun faltan un par de minutos Coraline… Entiendo que consideres que ya estas curada, es una patología muy común… Pero tu madre…-
-Mi madre cree que aun es conveniente que asista para afinar asperezas-lo interrumpió la castaña con voz suave y algo pausada- Se cual es su opinión, ella misma se encarga de dejarme bien en claro que mi locura ha afectado su vida hasta el punto de llegar a corromper su matrimonio, con mi padre…-continuo, fijando su vista en algún punto indeterminado en la pared.
-Ya hemos hablado acerca de eso Cora-dijo su psicólogo.- Creí que habíamos dejado en claro que lo que te paso debe quedar en el pasado… Ni tu ni nadie podrá remediarlo-
-Lo se.-susurro Coraline mordiéndose el labio inferior para seguir conectada con esa realidad que todo el mundo compartía, pero que para ella solo era un pasatiempo, luego de su sesión, probablemente volvería a su realidad, esa donde se sentía segura.-Pero mi madre se encarga de recordármelo todos los días, ¿Usted no puede hablar con ella?-pregunto.
-¿Y que quieres que le diga, Cora?-pregunto el psicólogo escribiendo rápidamente cada palabra que salía por la boca de la castaña junto con alguna que otra observación que luego lo ayudarían a analizar su progreso.
Si algo estaba seguro era que su comportamiento era influenciado, en gran parte, por su madre.
Susan, no era no persona mal. Simplemente no había podido perdonar a su hija por cosas que, como bien sabia, no había hecho intencionalmente. Pero la odio y el rencor que sintió en ese momento la cegó, desquitándose con Coraline.
-No lo se… Que ya me ha dado el alta-respondió Coraline haciendo una mueca que bien podía interpretarse como sonrisa, pero que no lo era del todo, aun se podía ver el dolor detrás de sus ojos.
-No puedo hacer eso… Eres tu la que debe decirle cuando parar.-dijo el, observando como la castaña ponía los ojos en blanco.
-¿A usted le parece fácil?-soltó Coraline sin prestarle atención a la pequeña sonrisa que surcaba los labios de su psicólogo.
-¿Fácil?-repitió el- Debemos primero analizar su significado. Es una palabra muy amplia que debe ser usada con respeto… Depende de quien lo mire sera mas o menos fácil, Cora... Por ejemplo, para algunos amar es fácil, pero hay quienes, pasan su vida buscando a quien amar, a su alma gemela o a un gran amigo con quien compartir momentos y nunca lo consiguen... Y eso, no es por falta de sentimientos o por que no sean seres humanos... Ese "algo" llamado destino lo quiso así... Y ellos no tienen otra opción mas que aceptarlo.... Por eso, fácil, no es la palabra que yo usaría Coraline.-explico el hombre parándose de su asiento para servirse un poco de café que lo esperaba, caliente, sobre una pequeña mesa a la orilla de la puerta de entrada.
-Entonces… ¿Qué palabra usaría?-pregunto la castaña, volviendo a repasar lo minutos que le faltaban para salir corriendo de ese lugar.
-Preparado… Yo me preguntaría si ya estoy preparado-le respondió dando un sorbo a su café.
-¿Estoy preparada para ponerle un limite a mi madre?-dijo ella pensando seriamente en las palabras que el hombro le había dicho- No, no estoy preparada… Aun no.
-¿Entonces?-
-¿Entonces, que?-
-Entonces por que sigues quejándote de tus secciones semanales conmigo, si aun no eres capaz de enfrentar a tu propia madre…-le respondió el, quitándole las palabras de la boca a la castaña, que ya sabia de antemano cual seria su respuesta.
En esos tres años había llegado a analizar al joven hombre mas que a cualquier otra persona. No lo conocía… ¡Por supuesto que no lo conocía!, pero ella podía ver a través de sus ojos azules cuando el estaba alegre o triste, e incluso cual seria el rumbo de su conversación.
-¿Cree usted que seré capaz de encontrar a mi alma gemela?-pregunto la castaña cambiando de tema. Esa pregunta le había quedado rondado en su mente luego que el mencionara la palabra "amor", además, Cora ya estaba cansada del mismo discurso. No quería hablar de su madre, ni de su pasado.
-¿Es fácil para ti el amor?-respondió el psicólogo, aun de pie frente a la puerta. Cora advirtió que esas serian las ultimas palabras que cruzarían por esa semana. El reloj ya había marcado las cuatro en punto y sus sesión acababa de terminar.
-Yo amo a alguien-soltó la castaña, esta vez formando una verdadera sonrisa.
-Afortunada seas Coraline, no hay nada mas saludable en esta vida que al amor…-
-¿Pero usted cree que alguien pueda llegar a amarme? Soy una esquizofrenia en pleno proceso de rehabilitación… Es casi imposible-hablo Cora, recordando las palabras que su madre le había dicho en mas de una ocasión sobre amar y ser amada.
-Cualquier ser en este mundo que posea sentimiento es libre de amar Coraline… Y ya te he dicho que no me trates de usted, me haces sentir viejo, y solo tengo seis años mas que vos…-dijo el joven, revisando su reloj pulsera para asegurarse que aun le quedaban un par de minutos para llegar a la importante reunión planificada por su prometida desde, hacia ya, un mes.
-Lo siento, Niall. No volverá a pasar, lo prometo-dijo la castaña, poniéndose de pie para despedirse de su psicólogo hasta la siguiente semana.
El joven, rubio y de grandes ojos azules del color del cielo luego de una tormenta, le abrió la puerta a su ultima paciente. Coraline, la joven que había llegado hasta su consultorio un frió día de invierno, inmersa en su propia realidad intentando salir adelante luego de su traumática experiencia.
"Ayuda", fue lo primero que escucho salir de sus labios, y automáticamente, Niall Horan entendió que ella lo necesitaba.
- Me haces bien:
- Capitulo 1
Deje mi alma presa en el pasado, mientras mi cuerpo vaga en este presente incierto en busca de un futuro mejor.
El frío viento de esa noche de verano entraba por la habitación de la pequeña Coraline interrumpiendo sus sueños.
Se sentía indefensa en ese gran cuarto de paredes rosas, cama con dosel, y millones de juguetes que su madre le compraba a diario para hacerla sentir mejor.
Pero lo que nadie entendía, era que la pequeña solo necesitaba el amor de su padre. Solo eso.
Como la noche anterior, la anterior a esa, y todas las noches desde hacia ya un año, su padres discutían en la planta baja, inconscientes de que su hija de apenas doce años los estaba escuchando, culpándose a si misma por ser la causante de todas sus discusiones.
“Eso es lo que dice mi padre”, se repitió una vez mas, cerrando sus ojos mientras se escurría una pequeña lagrima. “Es mi culpa, todo esto es mi culpa”. Presiono sus pequeñas manos sobre sus oídos tratando de callar a su propia mente, pero no tuvo suerte.
Ella tenia la culpa.
Coraline sintió como unos fuertes pasos subían las escaleras y se aproximaban hacia ella.
“Otra vez no”, sollozo la pequeña haciéndose un ovillo para protegerse de lo que iba a suceder.
La puerta blanca se abrió de par en par dejando ver a su progenitor. A su maldito y borracho progenitor.
-Déjala Norbert, te lo pido por favor… ¡Déjala!-grito su madre detrás de el mientras hacia fuerza para detener al hombre de casi cuarenta años.
-No te metas en esto, Susan-logro articular el hombre mirando a la niña que se hacia mas y mas pequeña sobre su cama.
-Norbert, ¡es tu hija!-insistió la mujer intentado detenerlo. El hombre giro sobre si mismo tomando entre sus manos el cuello de su esposa. En un rápido y ágil movimiento la mujer colisiono contra la pared del pasillo y callo al suelo casi inconsciente.
-Es mi hija…-susurro entrando a la habitación para luego cerrar la puerta, que tenia detrás de el, con llave. Coraline ahogo un grito ante la acción de su padre. No quería enfrentase a eso nuevamente.
-No papá, no…-dijo casi en un susurro llevando sus rodilla hasta su pecho aun mas. Por mas que quisiera, no podía huir. Ya lo había intentado una vez, y su suerte empeoro aun mas.
-Shhh-la callo el hombre aproximándose hasta su cama- Te prometo que todo va a estar bien.
La castaña despertó agitada en esa gran cama con dosel y con lagrimas en su rostro. Otra vez había soñado con su progenitor, con ese hombre que la había llevado a aislarse del mundo y hasta de su propia familia.
Casi sin pensarlo, se levanto de su cama y corrió hasta las latas de pintura que había sobre lo que antes supo ser un escritorio.
Su cuarto había cambiado, y mucho. Las paredes ya no eran rosas, grande manchas de colores las cubrían dejándole a Coraline un recordatorio de todos su ataques de nervios, pero sobre todo, de cada pesadilla donde Norbert se hacia presente.
El único mobiliario que había en la habitación era la cama, un pequeño ropero, y el escritorio… tapado por potes de pintura, pinceles y las demás cosa que ella utilizaba a diario para plasmar su arte.
Cora tomo un pincel entre sus manos y lo unto en la pintura negra, para luego llevarlo hacia la pared mas cercana y perderse en cada trazo que iba dando a medida que una nueva figura se formaba. Se sentía sucia, desesperada… adolorida, al igual que todas esas noche en la que se enfrentaba a su padre.
Las lagrimas no dejaban de caer por sus mejillas a medida que avanzaba dejando rastros de su horrible pesadilla. Su mano viajaba por la pared que utilizaba como lienzo y a medida que de pintaba sentía como su peso se alivianaba y volvía a ser la misma Coraline… o lo que quedaba de ella.
La castaña se sobre salto al sentir un ruido seco en la puerta. Dejo caer el pincel volviendo a la realidad. Su madre la estaba llamando.
-Coraline… Ya es tarde. Debes estar a las nueve en el negocio… ¡Te quedan quince minutos!-grito Susan desde el otro lado de la puerta. Rápidamente Cora se limpio las lagrimas que humedecían sus mejillas y comenzó a juntar sus cosas para prepararse para su trabajo.
Louis Tomlinson había sido muy generoso en dejarla trabajar en su tienda de música. Casi la mitad de la cuidad la había rechazado solo por conocer su historia, sin mencionar sus antecedentes en la Clínica Psiquiátrica de New Porland. Coraline estaría eternamente agradecida con el.
Giro sobre sus talones y camino hacia su pequeño armario donde guardaba las pocas prendas que se había comprado después de salir de ese horrible lugar donde solo usaba batas y camisones blancos.
Corrió los cuadros que obstruían el paso, deteniéndose a observarlos atentamente. Ninguno de ellos le gustaban. Aun no había alcanzado la perfección. Coraline sabia que aun le faltaba algo.
La simetría del rostro estaba perfecta al igual que el tono de piel. El cabello alborotado, pero a su vez refinado y profesional eran del color exacto, lo sabia. Pero los ojos… Aun no había conseguido encontrar ese color azul… Ese que solo se encuentra entre el limite de una tormenta y el arco iris. Esos ojos aun no eran nada parecidos a los de el.
-¡Apúrate Coraline!-volvió a gritar su madre, esta vez desde la planta baja.
-Enseguida bajo-se limito de decir ella dejando de lado los cuadros.
Se puso una remera blanca y una camisa a cuadros junto con un par de jeans negro y algo desgastados. Acomodo un poco su cabello y se cepillo los dientes para luego bajar corriendo las escaleras para buscar sus converse negras que su madre había puesto a lavar.
Una vez lista, salio al patio trasero en busca de su vieja bicicleta que se madre le había comprado para que pudiera trasladarse hacia su trabajo.
Amaba sentir el sol sobre su rostro o como el viento jugaba con su cabello. Eso la hacia sentir viva, y que todavía había una esperanza.
Llego en un abrir y cerrar de ojos hasta Tomlinson’s, el negocio de música donde trabajaba y donde estaba su único y mejor amigo. Encadeno la bicicleta a uno de los árboles que estaban afuera del local y saludo desde afuera a su amigo que comenzaba a levantar la persiana de la ventana.
Soltó un largo y pesado suspiro levantando la mirada hacia el enorme edificio que estaba en frente donde asistía semanalmente a sus sesiones con Niall, su psicólogo… y salvador. Sonrío al darse cuenta que solo le quedaban dos días para volverlo a ver. A pesar que se aburría demasiado en ese lugar, el simple hecho de que el estuviese ahí escuchándola, le hacia bien.
-¡No piensas entrar?-dijo Louis abriéndole la puerta.
-En un segundo-le contesto ella terminando de asegurar su bicicleta.
-Este será un gran día-exclamo su amigo mientra acomodaba un par de cajas que obstruían el paso. El local no era muy gran, pero Louis se había encargado que luciera lo suficientemente bien para atraer a los clientes.
-¿Por qué lo dices?-pregunto Coraline colocándose la ridícula gorra que Louis le hacia usar como uniforme.
-Por que estamos en temporada de verano. Todos los chicos están de vacaciones y no tendrán nada que hacer mas que venir a comprar un par de discos…-explico el chico sonriente.
-Oh-soltó Coraline sin darle mucha importancia a sus palabras. Louis podía ser su amigo, pero muchas veces era mas inmaduro que ella misma.-Yo que pensaba no esforzarme tanto-comento haciendo reír al castaño.
-Pues… No tendrás suerte hoy… ¡Mira, ya llego el primer cliente!-soltó irónico dándole un empujoncito para que se acercara a la chica rubia que acaba de entrar. Coraline soltó un bufido y de mala gana camino hacia ella.
-¿En que te puedo ayudar?-pregunto la chica haciendo el intento de su mejor sonrisa.
-Estaba buscando el nuevo disco de Coldplay… No es para, se lo quiero regalar a alguien muy importante para mi, así que estoy desesperada… De verdad necesito encontrarlo…-dijo la rubia rápidamente y con una voz un tanto chillona para Coraline.
-Claro… Podrás encontrarlo en la sección de 12. Creo que llego un pedido el otro día-dijo Coraline de la mejor manera posible. Esa chica le producía nauseas.
Observo como la rubia contorneo sus cadera hacia el lugar atenta a cada numero que tenían escritos los estantes llenos de discos, hasta que finalmente llego. Paso el dedo entre ellos buscando el indicado y cuando lo encontró soltó un pequeño grito de victoria. Camino de vuelta hacia Coraline que se encontraba detrás de un pequeño mostrador y le sonrío con gratitud.
-Lo encontré-dijo feliz.
-Que bueno.. ¿Vas a llegarlo?-pregunto la castaña.
-Por supuesto que si no sabes hace cuanto lo estoy buscando…-
-Son veinte dólares- la interrumpió Coraline tecleando un par de números en la caja registradora. La rubia saco de su fina billetera el dinero y se lo dio a Coraline. La castaña lo acepto y luego metió el CD en una bolsa roja con el logo del lugar, para luego dárselo a ella. Quería deshacerse de ella lo mas rápido posible. Hasta su perfume la empalagaba.
-Gracias y que tengas un buen día, Coraline- dijo ella agarrando el paquete.
¿Quién era esa mujer, y como la conocía?, se pregunto la castaña observando atentamente como se marchaba del negocio moviendo sus caderas al copas de sus tacones negros.
Lo único que sabia era que no le agradaba, para nada.
- Prologo. NC.:
- ✯By [Tienes que estar registrado y conectado para ver este vínculo]Prologo
El doctor Joseph Robertson, psicólogo reconocido, se encontraba devastado. Su hijo, su pequeño y único hijo.
¿Qué iban a pensar de el ahora? Si no había sido capaz de rescatar a sus propio hijo ¿Cómo iba a poder rescatar a sus pacientes?
Se dejo caer en el sillón de cuero negro de la biblioteca, que también utilizaba como escritorio, con un vaso de whisky, a medio tomar, descansando en su mano.
Había pasado dos años desde que su hijo había entrado en el vicio de las drogas, y el, como padre y profesional se había encargado de devolverlo a la vida.
Lo llevo a los mejores especialistas, a las mejores instituciones. Pago terapias carísimas, y hasta el mismo intervino, todo por salvarlo.
Pensó que lo había hecho, que lo había logrado. Hasta hace un mes atrás…
Su hijo nunca había abandonado esa vida, el seguía no solo consumiendo, sino también cometiendo delitos para conseguir un par de píldoras.
A sus veintiún años había sido condenado a ocho años de prisión, luego que la policía lo arrestara por comenzar una pelea callejera, que termino sacando al descubierto la verdadera identidad de Matthew Robertson, su hijo.
Joseph se encontraba tan ensimismado en su pensamiento que no se percato de la presencia de su esposa en la habitación.
Molly lo miraba con el ceño fruncido apoyada en el lumbral de la puerta. Su esposo había estado así desde que la sentencia de su hijo, y la mujer no lo lograba entender.
-Dijiste que lo volverías a tomar, Joseph…-le reprocho su esposa. El hombre, cansado de su actitud, dejo el vaso sobre la pequeña mesita ratona que tenia enfrente.
-¿Y que quieres que haga? ¿Quieres que haga como si nada hubiese pasado? ¿Quieres que actúe como vos?-pregunto Joseph con exasperación.
-Yo no actúo como si nada hubiese pasado… También es mi hijo-respondió la mujer.
-Pues… No parece-
-Es lo mejor, Joseph…-
-¿Lo mejor? ¡Ahí adentro lo van a tratar de la peor manera! ¿Cuándo va a abrir los ojos?-soltó el hombre levantándose de golpe. Molly mantenía la misma postura tranquila, mientra el dolor se reflejaba en su rostro.
-Es mejor que lo castiguen ahí adentro antes que lo terminen matando acá afuera… O peor aun, que se muera por una sobredosis-dijo Molly mirando seriamente a su esposo, que parecía desorientado.
-Molly…-
-Ser cocientes de todo lo que perdimos o podemos perder incrementa nuestra ganas de salir adelante, Joe.. Y vos mas que nadie debería saberlo…-se limito a decir.
-¿Que?-
-Que prefiero que este en la cárcel, antes que termine en un cajón muerto Joseph... Es la única manera que tenemos para que el se de cuenta de lo que estaba haciendo... ¿No funciona así en la psicología? Es como hacer terapia...-dijo la mujer. El doctor Robertson miro sorprendió a su esposa. Nunca, en sus veinte años de casados, ella se había metido con su profesión o había hecho algún comentario que se le relacionara.... y aunque le costase admitirlo, tenia razón.
Sus palabras eran tan sabias que sintió admiración por ella. El, el psicólogo reconocido, no había sido capaz de entenderlo hasta ahora... O quizás su dolor lo había impedido.
-Como una terapia-repitió, caminando hacia su esposa que lo miraba como si fuera un loco. El hombre la tomo pos la cintura y le planto un apasionado beso en los labios-Eres un genio, ¿Lo sabias?-soltó, liberándola de sus brazos para luego caminar hasta su escritorio y sentarse tras el mismo en su silla de cuero.
-¿Acaso te volviste loco Joseph?-pregunto Molly sorprendida. Su esposo levanto la mirada y negó con la cabeza para luego volver a su tarea. Había comenzado a escribir teorías que podrían servirle como argumentos cuando lo presentara ante el Ministerio.-La comida estará en una hora-se limito a decir su esposa, aun sin entender que le pasaba. Salio de la habitación, dejándolo solo con sus pensamientos.
-Como una terapia-volvió a repetir.
Su objetivo en cada una de sus terapias era justamente esa: Hacerles ver a sus pacientes cual era su error, o hacia donde debían dirigirse. Eso debía hacer ahora.
No ganaría nada quedándose de brazos cruzados durante ocho largos años, tampoco podrida revertir el hecho de que su hijo se encontrara preso. Quizás podría hacer otra cosa... Ayudar.
Si era capaz de salvar a los adolescentes descarrilados que estaban tirando sus vidas a la basura, seria capaz de perdonarse a si mismo por no haber podido salvar a su propio hijo. Les demostraría que la vida no era como ellos creían.
La droga, el alcohol, y la violencia no eran el camino. Y la única forma era haciéndolos caer. Porque después de todo, uno nunca sabe lo que tiene, hasta que lo pierde.
-Buenas noches Peter, tengo algo importante que decirte...-dijo Joseph luego de haber marcado el numero de su amigo y colega. La terapia de shock seria su próximo experimento.
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Re: Time Traveler's | nc | resultados puestos.
por Invitado Dom 03 Nov 2013, 10:18 pm
EEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEFFY<3
¿Por que quieres estar? Effy me gusto tu idea. Encima que son pocos los pj's fui con grant, no espero quedar, pero bueno. LO LEERÉ IGUAL.
Me dan ganas de escribirla, me imagino ya todo(?) nuestro hijos el perro... (?) no sé que más decirte :3
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Grant Gustin | Duque del siglo XVIII | Florrie Arnold| Mujer del siglo XXI - Prima de Niall Horan.¿Por que quieres estar? Effy me gusto tu idea. Encima que son pocos los pj's fui con grant, no espero quedar, pero bueno. LO LEERÉ IGUAL.
Me dan ganas de escribirla, me imagino ya todo(?) nuestro hijos el perro... (?) no sé que más decirte :3
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- prologo | memories of you.:
- Era el típico nerd o un chico más del montón, que no sobresalía por sus notas. Era más bien, de promedio normal. Mi madre no me regañaba, ademas de ser el hijo invisible, era más que eso, ya que después de la muerte de mi hermano mayor, por las drogas por su querida novia, Louise.Después de aquello mi padre y junto con mi madre, pusieron su futuro en mi. Siempre en esas clases de canto, de fútbol. Si mi madre quería que sea un doctor, mi padre quería que sea un futbolista o un abogado como el, pero nadie me pregunto que deseaba yo, siempre ellos pensaron en si mismo, sus sueños lo ponían en mi. No me quejo, ya que yo no quería nada, estudiaba para después tener un trabajo digno de un chico que termino la secundaria. Pero mis padres, me mandaban a esas clases, ingles, francés, etc.Mi grupo de amigos, no era el adecuado, según mamá. Ya que siempre que la ven a ella, le dicen "piropos" a sus 46 años, parece una de 30. No es que se opere ni nada, se mantiene "natural". La única vez que se ha maquillo, dice que fue en su casamiento.Yo espero encontrar a mi gran "amor", que cursi sueno. Como en una biblioteca, o más bien, esperar a que llegue la indicada, nunca fui de esos que se le acercan a las chicas, ni ellas a mi, no es que sea feo. Estoy en el promedio de 7.50 dijeron las chicas, el que me gana por un 10 es Harry Styles, alias "El rompe corazones" ya que, siempre ellas se enamoran de el, y el no de ellas, no es que esa gay. Si no que, el tiene novia, aunque en una ocasión la engaño.Mis amigas, eran: Cherie, Joan, Mariam y Katie. El club de las "lesbianas". Así lo veían, ellos a ellas. Y en parte era verdad. Ya que Cherie y Joan, eran novias, Mariam y Katie eran amigas, que aceptaban su sexualidad.No era mi razón o mi propósito enamorarme, pero llego el amor. Cuando le conté a Mariam, ella era como un confesionario. Y ella me aconsejaba, no se suponía que yo a ella, por un momento me sentí mujer. Le dije, y blah blah, "Aléjate, lo más posible" me dijo y así lo hice, aunque por momento las veía a Katie y a ella.Mis amigos (Robert, Luke y Jeil) me jodían, por eso. Y por muchas cosas más, pero también me decían "Y te la moviste" decía por cada una de ellas, cuando acepte ser amigos de esto primates, ah cierto la primaria.He aquí, como paso a ser un rechazo silencio, a una amistad... rara.
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Re: Time Traveler's | nc | resultados puestos.
por Invitado Dom 03 Nov 2013, 10:27 pm
- No te salvas de mi:
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Invitado
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Re: Time Traveler's | nc | resultados puestos.
por happy drug. Lun 04 Nov 2013, 1:38 pm
Oc Mari, no te perocupes enviala cuando puedas, tienes tiempo aun.mariistyles escribió:omg omg me encanto la sinopsis , la ame , audicionare , pero mañana te subo mi ficha porque estoy desde mi tablet, besos.
happy drug.
Re: Time Traveler's | nc | resultados puestos.
por happy drug. Lun 04 Nov 2013, 1:40 pm
Leilus of my heart its hereleila.hunter escribió:
- No te salvas de mi:
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esperare anciosa tu hermosa audición happy drug.
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