Re: Divina Locura || Zayn Malik y Emma Shelley.

por **SCARLET.** Jue 29 Ago 2013, 2:31 pm

Pepaa escribió:oiasjdoaisdjasoidjasdoiasdj
Fue completamente perfectoooooooooooooooo *-*
De inicio a final <3 Lo ameeeeeeeeeeee!!!!
Dios Zayn es lo más tierno de la vida, y aww las amigas de Emma son geniales - cof cof estoyentreellas ksadjsakd- Awwww babe, no sabes como amo tu novela cada vez que leo el cap es como sakldjaslkdjasd <3
Tienes que seguirlaaaaaaaaaaa!!
Love yooooooooooooooooooooou <3!

ajkdhjd qué bueno que te haya gustado <33
Love you moooooooooooooooore <3333

por **SCARLET.** Jue 29 Ago 2013, 2:33 pm

Franny escribió:uno, qué es una pollina
dos, cheryl whatttttt quien la entiende, porque yo no
tres, yo nunca tuve fiesta de quince, tampoco dulces 16 u_u
son muy caras esas weas, oops
cuatro, el detalle de zayn aw aw aw que ternura y la despedida, de película, fue romatinco.
cinco, angel la toma mucho de la cintura mmmmm suspicious
seis, cuidate scar, nos vemos <3

La pollina es como flequillo? así se dice? jajajaja, como lo que tiene taylor en mi foto xd.
yo tampoco, de paso no me gusta prefiero un viaje.
ya la sigo <333

por **SCARLET.** Jue 29 Ago 2013, 2:33 pm

*GinaAgredo escribió:¡Zayn es de lo más lindo! Fue muy tiernoo
Perdóname por no comentar antes, no he tenido el tiempo suficiente, espero que la sigas pronto porque está de lo mejor lkdsjfhjksd
Síguela prontito linda, cuídate y un beso <33

No te preocupes linda <33
Ya la sigo :)

por **SCARLET.** Jue 29 Ago 2013, 3:01 pm

Capítulo 13

Las vacaciones se pasaron volando y dentro de dos días comenzaría exactamente el próximo año de clases, esperaba sacar tan buena nota como en el pasado. Estábamos a Septiembre y cada día que tenía libre hacia lo posible por ir a casa de Zayn, siempre inventando una excusa claro está.

Ahora me encontraba justo en su casa, ya que era 15 y quería pasar el tiempo posible con él, antes de que comenzaran las clases y todo porque mi padre me dio la mala noticia de que se decidió buscarme a la salida porque ya no tenía suficiente dinero para darme para el bus de regreso, si tan solo supiera que Zayn era el que me llevaba y el dinero lo tenía guardado en una cajita.

Pero no podía hacer más nada, no iba a negárselo, porque era mejor que estuviera tranquilo a que sospechara lo que en verdad estaba sucediendo y era que estaba saliendo con Zayn y que lo veía la mayoría del tiempo, más bien piensa que me la paso siempre en donde mis amigas, cuando es todo lo contrario. De hecho, en estos momentos, piensa que estoy en casa de Cheryl reunida, viendo una peli.

Sí hacía lo último, pero acompañada de Zayn, veíamos una película de acción, la cual no me llamaba la atención. Es por eso que andaba concentrada en otras cosas, como en todo el tiempo que hemos estado juntos y ha pasado de manera tan rápida que a veces y puedo imaginármelo. Dentro de tres meses exactamente cumpliríamos el año y estaba tan entusiasmada porque llegara ese día.

Como ahora celebrábamos 9 meses decidimos quedarnos hasta tarde y para que no fuera tan sospechoso le dije a mis padres que me iba a quedar donde Cheryl, cosa que era cierta, porque cuando se hiciera de noche pensaba ir a su casa, de tal manera que si mi padre llamara supiera que no le mentía.

Las palomitas se habían acabado y solo quedaba la perola, me daba risa la cara de concentración que tenía mi novio mientras el protagonista peleaba contra los asesinos más peligrosos de la ciudad. Le dije que iría a lavar la perola y caminé hacia el fregadero, estaba ida mientras dejaba que el agua me fuera cayendo entre las manos.

Una suave caricia en la cintura fue lo que hizo que reaccionara, eran sus suaves manos que iban dejando círculos en mi cintura a la vez que su boca iba besando sutilmente mi cuello, cerré el grifo y me volteé para verlo. Su mirada era neutra, sus ojos me inyectaban una tranquilidad, pero a la vez podía notar como ardían de deseo, como si quisiera besarme como nunca, tenerme entre sus brazos y sentirme tan cerca de él que no pudiéramos separarnos ni un solo centímetro.

Agaché mi cabeza, mientras se iba apegando más a mí y me iba dejando besos exquisitos alrededor de mi clavícula y luego recorrer mis hombros, eché la cabeza hacia atrás para poder disfrutar mejor de aquellos besos placenteros que solo él me podía otorgar.

Sus manos seguían en mi cintura y me dejé llevar por el impulso de atraerlo más hacia mí, lo agarré de la nuca e indiscutiblemente dejé que me besara en mi punto débil, en todo mi cuello. Me gustaba, me gustaba que solo él me hiciera sentir así, que solo él podía hacerme sentir tan dichosa en pocos segundos. Hace un momento pensaba en cosas sin importancia, ahora en estos momentos no sé qué es pensar.

Estábamos completamente solos, pero tenía miedo que en cualquier momento llegasen sus padres y sería algo muy incómodo, pero a la vez quería que no dejara de hacer lo que estaba haciendo, quería que el momento fuera sucediendo según nuestras acciones instintivas, que el deseo fuera más fuerte que la razón.

Dejé escapar un suspiro y subió sus labios hasta mi nariz, me sonrió y cerré mis ojos, cuando despegó sus manos de mi cintura abrí los ojos rápidamente, estaba saliendo de la cocina. Me sentí completamente confundida. Respiré profundamente, en verdad necesitaba algo de aire, me acomodé y lo seguí hasta su cuarto que era adonde había entrado, estaba frente a la cama parado y quieto, me miraba de perfil y pude ver una sonrisa socarrona escapándose de su rostro.

Sonreí a la par de él y me acerqué sin duda, intenté hacer lo mismo que él y dejé un suave beso en su nuca, fue en ese momento cuando se dio la vuelta y me apretó fuerte mente contra él hasta que cayó sentado en la cama. Tenía tantas ganas de que este momento no parara, no me importaba lo que pasara, solo quería seguir sintiendo esto tan único, tan nuevo para mí.

Me senté sobre él y me gustaba tanto escuchar su respiración agitada cada vez que lo besaba o nuestras lenguas chocaban, era una sensación tan exquisita y embriagante que te sumergía como una droga de la cual no quieres dejar de consumir. Como un refresco que no quieres dejar de beber hasta que quedes más que satisfecho, completo.

Sus manos se incorporaron por debajo de mi camisa y dejé que lo hiciera, ambas me iban dejando suaves caricias alrededor de toda mi espalda y rápidamente las enganchó en mi camisa para quitármela. Alcé mis brazos, decidida; y dejé que esta se deslizara a través de ellos.

Ahora estaba completamente en brasier, la primera vez que Zayn me veía así, pero no sé por qué no me dio pena, solo quería que no parara, en verdad lo necesitaba. Su mirada era intensa y no dejaba de mirarme de arriba abajo, en ese momento sentí algo de vergüenza por mi peso y me alzó la cabeza para besarme, era increíble la forma en la que me conocía y hacía que mis ánimos subieran.

Me incorporé y le quité la camisa, entonces un tatuaje en su pecho me llamó la atención, lo repase con las yemas de mis dedos, contemplando lo hermoso que se veía él frente a mí, su cabello tomó un aspecto despelucado lo que me provocó más. Me sonrió de lado y se acostó para voltearme de tal manera que quedara sobre mí.
Sus labios recorrieron mis mejillas, mi oreja, bajó hasta mi cuello, mi pecho, mi barriga y luego se paró en mi abdomen. En ese momento comencé a temblar a la expectativa de lo que pensaba hacer en ese momento, respiré profunda con los latidos del corazón a millón.

Me desabrochó el pantalón y los bajó delicadamente, me acerqué a sus labios, queriendo que fuera solo mío, su mano la colocó en mi espalda pegándome hacia él, podía sentir su pecho sobre el mío, mis piernas rozaban con sus jeans, pero quería algo más, quería sentir sus piernas. Bajé mis manos hacia los botones de su pantalón cuando me detuvo.

Lo miré confundida mientras mi pecho bajaba y subía rápidamente.

– Solo si estás segura –su mirada aún despedía destellos de deseo, pero se notaba la preocupación en sus ojos, quería asegurarse de que esto era lo que quería a continuación.

¿Qué si lo quería? No podía pedir más que eso. ¿Qué era lo indicado? No lo sabía, tenía miedo porque era la primera vez que habíamos llegado tan lejos, así que entré en una confusión de la cual la única manera de escapar era besarlo y dejar que nuestros cuerpos fueran los que decidieran.

– Solo quiero tenerte aquí –dije acelerada.

Nos costaba hablar.

– No quiero hacer algo que no quieras –asentí con la cabeza y no dejó de mirarme pensativo–. Por favor dime si esto es lo que quieres.

– Zayn, esto es lo que quiero, te quiero a ti, junto a mí, quiero… sentirte.

Al instante la cara de Zayn cambió de preocupación a una mirada más profunda, me miró de arriba abajo y continuó besándome hasta el punto en que ambos quedáramos sin ropa por completo, mis piernas temblaban a la vez que su cuerpo se iba acercando más a al mío, llegando aquel momento que por primera vez iba a estar con un hombre y estaba decidida que ese hombre fuera él.

– ¿Estás lista? –Me miró fijamente y dije un sí que sonó tan bajo como un susurro, cuando su virilidad entró en contacto conmigo cerré los ojos, estaba allí a punto de entrar en mí, me beso la frente y comenzó a moverse lentamente, me pidió que abriera más las piernas, pero no podía, estaba demasiada tensa como para poder liberarme. Tuve que parar un momento.

Sus codos se pusieron a cada lado de mi cabeza y abrí los ojos.

– Si no quieres hacerlo.

– En algún momento tendrá que pasar.

– Estás diciendo que…

– Estoy diciendo que quiero que seas el primer y último hombre en mi vida.

– Emma, te quiero tanto.

– No más de lo que yo te quiero a ti.

Entonces lo atraje para que me besara, centré mi mente en otro lado para relajarme un poco más y poder dejar que este momento funcionara. Sus manos fueron bajando hacia mis muslos y luego las subió hasta mi cintura y se balanceó de nuevo, una parte de él se fue introduciendo lentamente en mí y cuando dio otro empujón más fuerte, sentí una punzada terrible y contuve la respiración.

Dejé de besarlo y me mordí los labios mientras que el seguía moviéndose de atrás para adelante una y otra vez, una y otra vez, se introdujo un poco más otra vez y ahogué un grito, las piernas me temblaban y mi respiración estaba acelerada por la desesperación del momento y del dolor terrible que estaba sintiendo, entonces me besó la frente y dejé escapar una lágrima solitaria.

Se detuvo y se quitó para acostarse a mi lado.

– Si tú quieres que sea tu primer hombre lo seré, pero cuando estés preparada, no soporto verte sufriendo.

– Volvamos a intentarlo –dije sintiéndome culpable, viéndome como una completa idiota.

– Podemos esperar –besó mis labios de nuevo y lo abracé, llorando en su hombro, me sentía mal por fallarle, pero justo cuando iba a contarle lo que sentía me dijo al oído:

“No soportaría verte sufrir y menos si yo soy el culpable de ese sufrimiento, haría todo lo posible por hacerte sentir cómoda, porque después de mi familia tú eres lo que más me importa”.

Esa tarde de camino a casa de Cheryl todo fue silencioso, las sencillas pero hermosas palabras de Zayn me habían dejado sin habla, era increíble su manera de ser conmigo, era increíble lo mucho que había cambiado en todo el tiempo que teníamos juntos. Otro hombre se fuera molestado conmigo, pero él no lo hizo, solo porque no quería hacerme sufrir y nada más podía comprobarme que me quería de verdad, solo eso basta.

No cabía duda que había atrapado el corazón de este chico tan especial, dudamos media hora en despedirnos, pero tan solo dándonos besos. Al bajarme me dijo un simple “Te quiero, Reina” y yo lo miré fijamente mientras entraba susurrándole un “Yo también”.

– Estaba algo callado ¿se puede saber qué pasó? –Me preguntó mi amiga mientras hacía zapping en el control remoto. Ambas estábamos en su cuarto acostadas en la cama.

– No pasó nada –dije insegura mientras jugaba con mis manos.

– ¿No me tienes confianza Emma?

– ¿Podías mirarme? –Dije impaciente.

Dejó de cambiar los canales para verme tal y como se lo había pedido.

– ¿Vas a decirme?

– Solo si me respondes una pregunta –suspiró rendida e hizo un movimiento con la cabeza para que le preguntara.

– ¿Eres virgen? –Alzó las cejas mirándome sorprendida.

– ¿Qué son esas cosas Emma?

– Cosas naturales de las cuales nacimos nosotras –dije divertida y pude verle asomar una sonrisa.

– Vale, no sé qué decirte, me esperaba hablar de eso con Aída, contigo no.

– Para que veas.

– Digamos que no.

– ¿Y cómo fue? No, no ¿Cuándo fue y por qué nunca me dijiste?

– Calma Emma, si cada vez que Aída hablaba de lo bien que lo hacía Niall tú te cohibías y te alejabas de nosotras para no escuchar la conversación.

– Es diferente –me reí–, yo te estoy preguntando que cuándo pasó, no que cómo te lo hizo, o qué fue lo que hicieron, qué poses practicaron, qué…

– Ok, creo que ya entendí.

– Pero hay algo que no entiendo, si hace dos meses decías que lo eras ¿nos engañaste? O…, espera ¿estás saliendo con alguien?

– Oye te me calmas, primero, ¿por qué me estás haciendo estás preguntas? ¿Tiene que ver con el silencio de ustedes hace rato? ¿Me estoy equivocando?

– No –dije cabizbaja.

– Emma… que no sea lo que estoy pensando.

No sabía qué decirle, porque su rostro cambió completamente a uno más serio, entonces no sabía lo que se imaginaba, o lo que pensaba de esto, así que tomé la suficiente fuerza para contarle lo que había pasado.

Digamos que su reacción fue algo aliviante pero alarmante a la vez, me dijo que yo estaba loca por querer que Zayn fuera el primero como si pensara que yo tenía en mente terminar algún día con él, lo que me molestó mucho de su parte. Me crucé de brazos y no quise seguir hablando al respecto.

– Emma, ¿no ves que eso es lo que está buscando?

– Cheryl ¿no te das cuenta que te acabo de decir que él fue el que paró todo?

– No, tú lo paraste.

– Pero quise continuar y él lo detuvo y me dijo cosas que me hicieron comprobar que me quiere de verdad.
– Hay algo que se llama actuar ¿sabes?

– Sí, sí lo sé y te puedo asegurar que él es malo en eso.

– Por favor –se rió sarcásticamente, lo que me irritó más–, los mujeriegos son expertos en eso.

– Pues él ha cambiado.

– ¿Ah sí? Creo que no has escuchado el dicho “árbol que nace torcido jamás su tronco endereza”.

– ¿Sabes qué? –Me puse en cuclillas mientras la miraba fijamente con mis ojos a punto de estallar en ira–. Tú –la señalé–, no tienes derecho a hablar así de alguien que no conoces y si vamos con dichos, aquí te tengo otro “Nunca juzgues a un libro por su portada”.

Su mirada inyectaba veneno y no me importaba que se molestara conmigo, estaba cansada de quedarme callada y de que ella hiciera sentirme la peor persona del mundo con tan solo un comentario humillante.
Ahora estábamos en una mirada de duelo cuando observé que iba a decir otra cosa.

– Si supieras lo mucho que te quiero porque eres mi amiga tal vez no me estuvieras diciendo esas cosas, así como dices tú que no hay que juzgar un libro por su portada, entonces tú no juzgues a la persona que tienes al frente solo porque por fuera pareciera que fuera una persona valiente, dura, cuando en realidad tiene una historia horrible. Si me permites voy a dormirme, ya fue mucho por hoy y piensa en lo que te dije, no quiero que Zayn se acueste contigo y te deje por otra escoba con faldas, no quiero que te ilusionen como me ilusionaron a mí. Buenas noches.

Mi amiga apagó la luz y me quedé estática en el lugar, con mis manos sobre mis muslos, sin saber qué decir porque ella ya me lo había dicho todo, no tenía ganas de seguir preguntándole más sobre su vida, se veía lo privada que era con sus cosas y me sentí mal por haber tocado un punto débil en ella.

Jamás la había visto tan molesta y juraba que por primera vez había visto sus ojos cristalizados, aunque no lo creía era fuerte, porque aguantar y ser firme ante los demás era sinónimo de una persona fuerte y valiente, algo totalmente diferente de lo que era yo.

Y por otra vez consecutiva, mi amiga con simples palabras sinceras que le salieron del corazón había hecho que mi autoestima quedara por los suelos, haciendo que me viera como una completa inepta y mal amiga que no sabe tomar las decisiones adecuadas, me sentí inferior, deshecha, y por primera vez en 9 meses sentí que Zayn no me quería, cuando hace minutos lo pensaba.

Decidí no comer en la mañana y me fui directamente a mi casa no sin antes agradecerle a sus padres por dejar que me quedara y decirle un simple ‘adiós’ a ella, después de aquello no creo que íbamos a hablarnos como antes por mucho tiempo, ahora se me iba hacer imposible verla sin recordar cada cosa que me dijo a todo pulmón.

Me dio dinero para que me fuera en taxi, pero sin embargo decidí caminar hacia la parada de autobuses y me quedé esperando media hora aproximadamente hasta que llegó, quería que el camino hacia casa se hiciera más largo, porque sabía que si iba a llegar más rápido lo primero que haría era tumbarme a llorar y quería prolongar el tiempo antes de que eso sucediera.

No tenía ganas ni de escuchar música, me sentía tan pequeña entre todos.

Una vez que entré al edificio, toqué la puerta de la casa de Josefa, todavía no me sentía preparada para estar en mi casa, no quería encerrarme y llorar hasta más no poder.

Tardaron como dos minutos en abrirme y a la final la vi.

– ¿Qué te pasó? –Me preguntó preocupada entonces estiré mis brazos para darle un fuerte abrazo, necesitaba el apoyo de alguien en esos momentos.

Una vez que ya estábamos en su cuarto y me había bebido el vaso entero que me trajo de agua, hablé y me desahogué, le conté exactamente todo lo que me dijo Cheryl y lo que pasó esa tarde con Zayn, se quedó callada por un momento sin saber qué decir. Aunque la verdad me importaba poco lo que dijera, lo que único que quería era que alguien me escuchara para poder soltar mis penas.

De nuevo me volvió a abrazar, se sentía estar así con alguien ahora.

Me miró y sabía que comenzaría a decirme algo.

– No tienes por qué sentirte así, tú no eres inferior a nadie. Eres especial.

– Pero es que en cierta parte tiene razón y la hice sentir mal.

– Puede que la hayas hecho sentir mal pero tú no tienes la culpa ¿ok? Tú no sabías que eso iba afectarla.

Bajé la mirada al escuchar eso, sabía que tenía la razón, pero me sentía mal con todo esto, porque a pesar de que por dentro sé lo mucho que mi novio me quiere, aquellas palabras de Cheryl hicieron que una parte de mí desconfiara de él.
– Vamos, dame una sonrisa. ¿sabes una cosa?

– ¿Qué? –alcé la mirada.

– Zayn te quiere, eso te lo puedo asegurar –sonreí indiscutiblemente, al menos ya no me sentía sola, al menos estaba con mi amiga, entonces me di cuenta por qué la escogí a ella de mejor amiga.

por **SCARLET.** Jue 29 Ago 2013, 3:15 pm

Capítulo 14

Los meses pasaron y faltaban tan solo dos horas para que comenzaran las clases, estaba ansiosa por comenzar otro año, así solo me faltaría este y otro para postularme para ingresar a la universidad. Me levanté sin necesidad de que sonara mi despertador, me fui al baño y me enjaboné la cara para luego meterme en la regadera y darme una buena ducha de agua fría.

Mientras iba pasando el jabón por mi cuerpo recordaba cada uno de los besos que me dio Zayn aquella vez, cada caricia, su delicadeza, pero luego recordaba las palabras de Cheryl, su repudio hacia nuestra relación y por último el consuelo de Josefa, que era lo único que me quedaba.

Las gotas caían sobre mí mojando mi prominente cabellera ondulada, eché la cabeza hacia atrás para sentir el agua fría sobre mi cuello y que esta se esparciera por todo mi cuerpo, cerré los ojos y solo me imaginaba a él, a mi novio.

Cuando por fin salí del baño y me vestí fui a la sala en donde me esperaba un gran desayuno, las cosas con mi familia iban mejorando y con Zayn iban empeorando. Por más que trataba de tragarme las palabras de Josefa sobre Zayn, sabía de alguna manera de lo que decía Cheryl era cierto, quizás los mujeriegos nunca cambien. Porque ya están acostumbrados. He escuchado historias de mujeriegos que se han casado y dicen estar profundamente enamorados de su esposa, pero no pueden aguantar las ganas de sentir los labios deseosos de otra mujer. Y aunque la esposa se enteraba, como era el hombre lo perdonaba y la relación continuaba como si nada hubiera pasado.

Yo no podía criticar eso, porque yo no sabía si algún día me iba a tocar a mí, yo no podía juzgar sin conocer.

Tengo una semana que no veo a Zayn, puros mensajes y más de lo mismo, pero he estado muy fría, hasta me he vuelto posesiva, cada vez que encuentro la oportunidad para quedarme sola con su teléfono lo reviso, pero siempre pasa lo mismo. No encuentro nada.

Eso me está enfermando, no quiero volverme compulsiva y hacer que Zayn me deje por mis celos posesivos, incluso hace dos semanas juré que Zayn me había llamado por otro nombre, cuando la realidad era que había sido producto de mi imaginación.

Mi padre me llevó y se despidió recordándome que me vendría a buscar de vuelta. Asentí no muy alegre y pase al instituto. Entonces allí estaba él en el fondo, con sus audífonos, sentado en el mismo banco de siempre y el corazón me saltó, al saber que ahí, en ese lugar, fue cuando empezó a mejorar nuestra relación después de esa súbita discusión en el aula frente a la profesora y los demás compañeros el primer día de clases.

Camino con pasos firmes y me quedo frente a él, su cabello se veía sedoso y lo comprobé al pasar mi mano a través de él, se sobresaltó de sobremanera que se quitó los audífonos para entender mejor qué era lo que pasaba. Quisiera que lo nuestro estuviera mejor, la última vez tuvimos una discusión que no quisiera recordar. Solo porque se me ocurrió la magnífica idea de decirle que él solo quería que tuviéramos relaciones sexuales y más nada. Porque sentí desconfianza en esos momentos.

Quería arreglar las cosas costase lo que costase.

Me saludó con un movimiento rápido de mano y me senté al lado de él, me encantaba como olía y más que su perfume su olor natural. Me traía loca, pero estaba serio y no precisamente porque estaba concentrado en algo, sino porque la discusión quedó inconclusa.

Sabía que él quería que le pidiera disculpas por eso, pero como mi orgullo a veces podía ser grande no sabía por dónde comenzar.

– ¿Y esa cara? –No sé por qué se me ocurrió decir esa estupidez, pero fue lo único que salió en ese momento de mis labios.

– La única que tengo –una sonrisa escapó de sus labios y me sentí aliviada.

– Es que parecía de molesto.

– ¿Hay alguna razón? –Negué con la cabeza dudosa y me agarró las mejillas para plantarme un beso.

Lo empujé riéndome al ver que la recepcionista nos veía, por más que ella no le dijera a mi padre, eran normas del instituto–. Eres un tonto.

Subimos al salón al rato, atendimos a la clase y luego bajamos junto a Aída y Cheryl, nos sentamos en una mesa para hablar de las vacaciones, aunque no teníamos mucho qué contar ya que nos habíamos visto casi todo el tiempo y no nos habíamos ido de viaje o algo parecido. Estaba diciendo algo cuando Zayn volteó el rostro y pude verle un pequeño morado más abajo del ojo, fruncí el ceño y me dejé llevar por mis pensamientos.

– ¿Y bien? –Preguntó Cheryl y titubeando continué con lo que estaba diciendo, pero en mi mente me preguntaba con quién se había peleado o por qué. Él no se había dado cuenta de que lo había visto y no sabía si preguntarle o no sobre lo sucedido.

El timbre sonó y preferimos subir por el ascensor, antes de entrar al salón veo que en la cartelera de anuncios está uno sobre el baile de fin de año. Lo leo detenidamente y entonces me entran ganas de concursar. Escucha unas risillas atrás de mí y veo dos chicas bastante altas y de cuerpo definido mirando al igual que yo el anuncio.

– ¿Q-ué pasa? –Pregunté confundida.

– ¿En serio crees que puedas entrar? Las gordas no soportan ni el primer día de entrenamiento.

Eso me dejó boquiabierta, entonces se alejaron riéndose por todo el pasillo. Cuando me di cuenta, Zayn estaba de espaldas en el salón esperando a que entrara, agaché mi cabeza herida por lo que acababa de escuchar y entré cuando me jaló.

– Ignóralas, tú puedes lograrlo, confío en ti –le di una media sonrisa y nos fuimos a sentar.

La clase fue más de lo mismo, como era el primer día no hicimos nada más que anotar el plan de evaluación y presentarnos, ya que habían nuevos, tanto profesores como alumnos. En la salida me despedí de Zayn antes de cruzar la puerta del instituto y luego arranqué hacia casa junto a mi padre.

La semana pasó igual de aburrida. Pero el Sábado decidir salir junto a mi amiga Josefa y Ángel que quería verme como en los viejos tiempos, me conecté un rato en Facebook para ver qué mensaje tenía y todo estaba en blanco, al menos dos notificaciones en donde todo estaba en envíos de juegos. Lo iba a cerrar hasta que me llamó la atención ver el nombre de Zayn marcado con el circulito en verde. Así que esperé un poco más para que me escribiera.

Estoy viendo la hora cuando en segundos me escribe preguntándome qué estaba haciendo en esos momentos y le conté sobre la salida de Ángel y Josefa. No pasaron dos segundos cuando recibí su respuesta corta y sencilla.

“Avísame cuando estés lista, iré con ustedes”

El mensaje me llegó de sorpresa y justo cuando pensé contestarle se había desconectado, entonces lo único que hice fue peinarme, maquillarme un poco e ir para la sala para avisarle a papá que saldría con mis amigos, no puso peros y en unos instantes toqué la puerta de mi amiga, me abrió sonriente, estaba vestida sencilla pero bonita, me dio un beso en la mejilla y ambas salimos a coger un taxi.

Le escribí a Zayn diciéndole que lo esperaría en el Wall Center y al rato me respondió con un simple ‘ok’, me extrañaba mucho su actitud, en la mañana juraría que estaba molesto conmigo por lo de la última vez, pero luego de haber visto su golpe en el almuerzo podría jurar que difería a otra persona y estoy dispuesta a descubrirlo cuanto antes.

Llegamos al centro comercial y recorrimos algunas tiendas antes de encontrarnos con Ángel en la feria de comida, le di un gran abrazo, me ha hecho tanta falta últimamente, toda chica necesita por más que sea de aquella amistad masculina que siempre te salva de muchas cosas, o al menos así pensaba yo.

Teniendo de amistad con un chico podían evitarse cosas como los chismes o la envidia.

Nos sentamos y pedimos una pizza grande. Calculé que Zayn ya estaría por llegar así que escogimos la del tamaño familiar, mi amiga y yo tan solo comeríamos tres pedazos y Zayn con Ángel como cuatro, aunque en realidad fueran tres los pedazos que comía siempre para sentirme satisfecha, pero con el comentario de aquellas chicas quise proponerme dejar de comer mucho por mi propio bien y por rendir en los entrenamientos, además que no quería ser la única gorda del grupo de bailarinas.

En el momento que nos llamaron para entregarnos la pizza veo a Zayn a lo lejos caminando como si estuviese huyendo de alguien que lo viene acechando desde que cruzó la puerta de su casa. Mis amigos voltearon para ver hacia donde se dirigía mi mirada.

– Supongo que ese es tu novio –dice Ángel–, espero que me caiga bien para darle mi aprobación.

– Oye ¿quién te crees? –espeté jugando–. No eres mi padre o algo así.

– ¿Tú papá lo aceptó? –Y me di cuenta de lo que había dicho hace unos momentos.

– No, no lo acepta pero es porque está loco ¿ok? –Lo miré desafiante y mi amiga nos calló diciéndonos que nos concentráramos en la deliciosa pizza, eso me causó más risa aún.

Zayn llegó a nuestro lado y saludó a mi amiga con un beso en la mejilla, luego se acercó a mí y me da un casto beso en los labios. Se sentó en la única silla que quedaba vacía por ser mesa para cuatro personas y le estrechó la mano a mi amigo, me puse tensa en ese momento, estaba segura que cuando dijo lo de aprobación lo estaba diciendo en serio.

– Soy Zayn ¿y tú? –Me causó algo de gracia la forma en la que le dijo eso.

– Ángel, mas te vale que la trates bien –respondió burlón y todos los presentes nos reímos. La pizza estaba deliciosa y cada pedazo que daba se sentía como el mismo paraíso, entonces llegó el momento en el que me estaba comiendo el último trozo del último pedazo.

Mastiqué lentamente saboreando cada especia preparada en ella, cada salsa, el queso mozzarella, el maíz, los pepperoni y cuando terminé de comerla sentí ansias de más, eso no me había llenado por completo, pero tenía que ser fuerte. Mi amiga se comió su segundo pedazo y cayó rendida en la silla, sobándose la barriga como si se fuese comido toda la pizza.

Estaba comenzando a sentirme mal por eso, ojalá yo no comiera tanto, ojalá me llenara tan rápida como ella, ojalá yo fuese igual de delgada, alta y linda que ella.

Me apreté mis brazos debajo de la mesa para controlar las increíbles ganas que tenía de seguir comiendo, el estómago todavía me crujía y eso me estaba molestando de sobremanera porque cada vez que alzaba la vista podía ver a los chicos masticando con toda satisfacción.

Zayn me tocó el hombro y me señaló un pedazo de pizza que quedaba en el plato–. ¿Quieres?

Dudé por un instante en la respuesta, pero me prometí a mi misa que tendría fuerza de voluntad y eso era lo que iba hacer, no tenía que dejarme caer por nada del mundo. Además yo ni debería estar comiendo Pizza por la cantidad de carbohidratos y grasa que tiene, lo que no ayuda para tener una figura esbelta.

Negué con la cabeza algo triste–. Mejor come tú –dije–, estás flaco –completé para que se riera un poco.

– ¿Estás segura? –Su mirada era inquisitiva.

– Segura –suspiré. Mis palabras salieron firmes como si en verdad no quisiese morder un pedazo más de aquel delicioso platillo, cuando la realidad era todo lo contrario. Me recliné en el asiento y esperé a que mi novio terminara de comer, mi amigo Ángel ya había terminado y se estaba casi atragantando con el vaso de refresco.

Una vez que hubo terminado llevamos la bandeja a su lugar y decidimos caminar por el centro comercial para relajar un poco las piernas. Zayn juntó nuestras manos mientras observábamos cada tienda, lo que me entusiasmó a hacer una salida de compras muy pronto, habían ropas de todas las tallas, hermoso colores y muchas que iban con mi estilo.

Me caracterizaba por las camisas holgadas y pantalones ajustados, amaba las vans y las zapatillas, además que siempre que podía cambiaba mi maquillaje antes de que este se acabara, técnicamente no podía vivir sin él.

Tenía planeado venir la próxima vez con Aída o con Rachel, ellas eran más mi tipo para las compras, Josefa odiaba ir de compras, porque le daba fastidio tener que cambiarse a cada rato para escoger una que le gustase y Cheryl era muy crítica, por lo cual me hacía sentirme mal por mis gustos y lo que menos quería en esos momentos era eso.

A veces cuando me encontraba mirando el perfil de Zayn veía todavía el morado y me daban ganas de preguntarle en ese instante el por qué de eso, necesitaba una razón, una explicación lógica a eso. Pero en realidad lo único lógico que tenía qué hacer era dejar que él confiara en mí y me lo contara y si iba a preguntárselo no tenía por qué hacerlo delante de los demás.

Solo él y yo. Como tiene que ser.

La tarde fui divertida, me pareció excelente que Zayn y Ángel se llevaran tan bien, ambos escuchaban el mismo tipo de música, tenían los mismos pensamientos y descubrieron que ambos les gustaba apostar en los partidos de futbol. Eso último ni lo sabía, como dicen por ahí, uno nunca termina de conocer a las personas.

Hubo un momento en los que estábamos por separados; mi novio con Ángel y yo con Josefa, ellos se quedaban mirando tiendas de relojes, o artefactos eléctricos, mientras nosotras veíamos tiendas de accesorios y librerías. Ambas éramos adictas a leer. Lo que me hizo acordarme que desde que había salido con Zayn no había tomado ni un solo libro, creo que tendría que hacerlo cuanto antes, tal vez cuando estemos molestos por alguna razón puedo refugiarme en ellos y olvidarme de la pena.

Ya estaba en mi casa y lo que hice fue acostarme para descansar un rato, había sido una tarde interesante, pero sin embargo me preguntaba la actitud de Zayn, podía sentir que había algo diferente en él, no era el mismo, es como si fuese reemplazado por un gemelo o algo, solo que estoy segura de que es él. Pero no entendía su estado de ánimo.
Miré mi celular en la recamara y me dieron ganas de agarrarlo y marcarle para ver qué estaba haciendo, pero rápidamente me arrepentí y me acosté de nuevo.

Un toqueteo estrépito sonó en la ventana y me levanté de nuevo asustada, me acerqué y de nuevo volvió a sonar, como si estuvieran lanzando una piedrita para que me asomara. Cuando la abrí cuidadosamente vi al moreno algo preocupado.

– ¿Qué pasó? –Pregunté en susurro y mirando a la ventana de al lado donde quedaba el cuarto de mi hermana y la ventana que le seguía era la de sala, donde se encontraban mis padres–. ¿Qué hubieras hecho si viviese un el primer piso o en el segundo?

– Solo quiero que salgas.

– Me fueses escrito.

– No traje el teléfono conmigo –ambos hablamos tan despacio que apenas y lo único que podía escucharse más era el sonido del viento a través de los árboles.

Volteé hacia la puerta nerviosa, como si mi madre fuese a entrar en cualquier momento, o peor aún, mi padre.

– Vete inmediatamente, espérame en el lugar de siempre.

Cerré la ventana y cogí una chaqueta de lana que se encontraba sobre el escritorio del ordenador. Me lo puse y me armé de valor para mentirles de nuevo. En ese momento se me ocurrió que saldría un momento con Josefa a caminar por la urbanización. En realidad teníamos tiempo que no hacíamos eso y en estos momentos extrañé hacerlo.

Cuando se convencieron salí disparada y cerré la puerta haciendo que estaba tocando en la puerta de mi amiga para que me creyeran un poco más, esperé un minuto contado mentalmente y me metí entre las matas del jardín para que no me viera saliendo sola del edificio. Si es que me estaba vigilando.

Esperaba que no.

Atravesé la puerta del edifico y bajé las pequeñas escaleras hasta llegar a la calle que separaba la urbanización en dos hileras. Era una urbanización abierta, así que más bien podría tener el nombre apropiado de vecindario, pero le llamaban de la primera manera, ya que cada cuadra tenía un nombre. Ya sea desde cuadra Selfey, hasta cuadra Grey. Todos eran apellidos.

Me arropé más al suéter mientras el sol se veía cayendo a través de las montañas que se encontraban alrededor, pintando el cielo de unos tonos anaranjados con rosado, que hacían de la vista una forma espectacular de admirar nuestra naturaleza.

El ambiente era fresco y mientras en mi mente iba pensando en la visita repentina y abrupta de Zayn, llegué a caminar las mismas dos cuadras para encontrarnos en el lugar donde siempre me deja, donde siempre nos encontramos, donde siempre nos vemos, para luego partir a dónde fuera que él me llevase. Casi siempre solía decirme a dónde iríamos, pero esta vez me mataba la curiosidad ya que ni me había contado algo al respecto.

Había algo que no estaba bien aquí y cuando lo descubrí me quedé petrificada en el sitio, sin mover mis pies hacia ninguna dirección, no sabía si esto era alucinación, pero la verdad estaba ante mis ojos.

Estaba solo, y cuando digo solo me refiero sin su moto, no sabía exactamente si se había venido en bus, en taxi o caminando, pero por su estado físico pareciera que más bien fuese lo último, sus ojos marcaban unas grandes ojeras que no había logrado distinguir debido a lo nerviosa que estaba hace unos instantes. Tenía otro morado bajo la barbilla y el cabello desordenado hacía parecer que estuviese vagando por las calles desde hace mucho tiempo.

Era increíble el cambio drástico que dio desde hace unos momentos. Caí en cuenta de lo mal que se encontraba y me acerqué rápidamente a él, no para besarlo, no para abrazarlo. Sujeté su cara entre mis manos y me sobresaltó cuando hizo un gesto de dolor.

– ¿Qué te pasó? –Pude susurrar apenas y él fue quién me abrazo. Me apretó fuertemente y no me tocó más que el consuelo de también hacerlo. Pero mi mente formulaba miles de preguntas que quizás no serían respondidas en una hora, ni en un día entero.

– ¿Puedes mentirle a tus padres? ¿Puedes decirle que dormirás donde Aída y te quedas conmigo hasta el amanecer? ¿Puedes hacerlo? –Formuló las preguntas unas seguidas de otras con la voz quebrada. Era la primera vez que lo veía tan acelerado y sus ojos estaban cristalizados, algo que me partió el alma. Y me hizo volverme más confundida de lo que estaba. Necesitaba saber qué le pasaba.

– ¿Para qué o por qué? –Dije también a punto de estallar en lágrimas, me hacía bastante mal verlo así y no saber qué decirle para calmarlo, porque no sabía lo que sucedía. La angustia por saberlo, era mucho peor.

– No importa el por qué, solo te necesito, te necesito realmente Emma.

– Pero quiero saber qué te pasa, la preocupación me está matando.

– Solo te diré que no me pasará nada malo si me quedo contigo, esta noche.

– ¿Pero en dónde vamos a quedarnos? Zayn no te entiendo.

– Dónde sea, llamas a un taxi y que nos deje donde sea, solo quiero estar contigo.

– ¿Por qué estás golpeado? ¿Quién te hizo eso? –Le pregunté y me miró directamente a los ojos, una mirada de tristeza, de pena y luego seguido de una lágrima que se esparció por su mejilla hasta que la atajé en mi dedo índice y recostó su cabeza en mi hombro para llorar por completo.

– Estoy harto de ser una mierda de persona, estoy harto de no poder hacer nada, estoy harto de ser conocido como el peor mujeriego del callejón, estoy…

– Shhh –le sostuve el rostro entre mis manos para que me mirara fijamente–. No vuelvas a repetir eso, dime quién te golpeó, por favor, necesito saberlo.

Hubo un silencio sepulcral y en ese instante no comprendía las palabras emitidas anteriormente ¿qué tenía que ver que las personas dijeran que él es mujeriego con que tuviera golpeada la cara?

Nos quedamos un rato largo en silencio hasta que habló de nuevo.

– Olvídalo, mejor hagamos como si no pasó nada y ahorita te vas para tu casa.

– ¿Y tú Zayn? ¿Por qué carajos no me respondes? ¿Por qué no me dices quién coño te hizo esto? ¿No ves que me estás matando de angustia? Zayn yo…

Las ganas de seguir gritando a los cuatro vientos por mi desesperación fueron sustituidas por un beso de Zayn, un beso combinado con pasión y desesperación. Él estaba roto y no sabía qué hacer para ayudarlo.

Las horas pasaban lentas y la noche era fría y fresca, al final decidí mentirle a mis padres por segunda vez ese día y llamé a un taxi, al principio no teníamos claro a dónde iríamos, pero después pensé que el sitio más seguro era el mirador que estaba cerca de su casa, a pesar de que chistó porque lo que menos quería era estar cerca de ese lugar, terminó aceptando.

Nos encontrábamos acostados en el césped y con la luna resplandeciente en lo ancho del cielo, no mencionamos nada al respecto de lo sucedido, no hablamos en ese momento, solo nos concentramos a ver todo lo hermoso que había sobre nosotros. Las estrellas titilaban adornando el cielo de cada una de ellas. Era increíble que algunas de ellas ya no existiesen y sin embargo aún la estuviésemos observando.

Fui cerrando mis ojos poco a poco hasta que caí completamente rendida con mi cabeza sobre el pecho de Zayn y su brazo alrededor de mi cintura sintiéndome protegida, cuando en realidad, yo era la que tenía que protegerlo a él.

Al amanecer desperté sola y observé a Zayn sentado más allá, solo, contemplando el paisaje que tenía alrededor. Me estiré y restregué los ojos para ir a su lado.

– Mi madre me ha estado llamando, está preocupada por mí –me dice al ver que estoy cada vez más cerca de él.
– Quizás deberíamos ir a tu casa.

– No quiero que veas algo que te impresione Reina.

– Por favor Zayn –me senté a su lado con la cabeza recostada en su hombro.

Minutos después nos habíamos decidido ir a su casa, para nuestra mala suerte tuvimos que ir a pie el resto del camino, esa carretera daba miedo y a veces Zayn hacia como si me fuera lanzar por al acantilado y me terminaba riendo de lo asustada que estaba. Cuando pasó una hora exactamente llegamos a su callejón, exhaustos y sudados.

Comenzamos a caminar más lento y sin darnos cuenta ya estábamos frente a la puerta de su casa, suspiró fuertemente y ambos pasamos. Me sorprendió al ver la casa patas arriba. Había un florero esparcido en el suelo con las flores marchitas, el televisor estaba a punto de caerse si no fuera por la pared que lo estuviese sosteniendo. Papeles rotos. Estaba comenzando a asustarme.

Escuché unos pasos acercándose hacia nosotros, cuando logré distinguir a la mamá saliendo de la cocina, estaba molesta y me apartó bruscamente de su hijo para darle una cachetada. Mis ojos se agrandaron y no supe qué hacer o qué decir, solo vi a Tricia agarrándole los hombros a Zayn y preguntándole por qué no había dormido en casa y por qué se había escapado.

No sabía si defenderlo o si salir corriendo en ese instante.

– Tricia ¿ya llegó? –La voz del padre de Zayn se hizo presente desde su cuarto y tragué saliva por no comprender nada. Tal vez debí haberle hecho caso y no venirnos o quedarme aquí y descubrir qué era lo que pasaba con Zayn.

– Enciérrate en tu cuarto –le dice fijamente Tricia y él inmediatamente me agarra del brazo y salimos disparados hasta su cuarto en donde lo trancó con seguro.

– Acuéstate, quédate tranquila, no dejaré que te haga daño.

– Zayn, tengo miedo.

Estaba en una esquina de la cama aterrada por todo lo que estaba sucediendo, de pronto los gritos de Yaser se prolongaron y me contuve un grito ahogado, escuché como le gritaba a Tricia y el pánico me atacó, Zayn se sentó conmigo y me agarró de la mano para tranquilizarme.

Mi cuerpo tiembla incontrolablemente y mis nervios se alteran aún más cuando escucho al papá de Zayn tras de la puerta, llamándolo insistentemente, Zayn le pide que se vaya pero este no hace caso.

Sigue tocando una y otra vez hasta que se cansa y comienza a dar patadas sin parar, la mamá de Zayn gritando le pide que se calme y Zayn me aprieta más a su pecho tranquilizándome. Los gritos se intensifican.

– Ábreme Zayn si no quieres que esto se ponga peor.

Zayn me besa en la frente y me deja en la esquina, me arropo con las piernas y estoy a la expectativa de lo que pueda pasar. Zayn camina con pasos lentos pero decididos y en el momento que abre la puerta Yaser intenta arremeter contra él, pero rápidamente lo esquiva.

– ¡Mira lo que me hiciste! –El hombre reclamándole a Zayn le muestra una gran cortadura alrededor de la frente.

– Papá cálmate, no tienes que hacer un espectáculo, hay visitas.

– ¡Me vale mierda si hay visitas! Que se entere que su novio es un falta de respeto que es capaz de tirarle un florero en la cabeza a su padre.

– Yaser –se acercó Tricia–, te he dicho que lo hizo sin culpa.

– Deja de estar defendiéndolo –con el codo le da un golpe a Tricia y mi corazón latió más rápido que hace unos instantes. No había visto mal, el padrastro de Zayn le había pegado a su mamá.

– ¡¡Eres un imbécil!! –Le grita Zayn y en un instante Yaser se embiste contra él, y ambos se están agarrando de los brazos por toda la habitación, el padre de este logra sostenerlo más fuerte y lo lleva hasta la pared donde intenta ahorcarlo. Grito fuertemente. Quiero salir de ahí, pero no sin antes ayudar a Zayn.

Me levanto para quitar a Yaser cuando la mamá de Zayn me agarra para que me vaya, no quiero hacerlo, no quiero dejarlo allí y que le pase algo, pero en pocos segundos, todo comenzó a darme vueltas y mis ojos se cerraron sumergiéndome en la confusión.

____________________________________________________________
Disculpen la demora. Espero que les guste <3
Creo que el papá de Emma no es el único malo en esta historia uh oh.

por **caami** Vie 30 Ago 2013, 6:28 pm

Oh! Pedazos de capítulos me encantaron(:
Desde el principio tuve una leve sospecha de que Yaser le pegaba a Zayn :/
Emma me da pena que sea taan insegura ): ya está viendo cosas donde no hay nada que ver
Cheryl tiene que colocarse un filtro onda puede decir lo mismo pero con otras palabras porque de alguna manera ella sabe que le afectan a Emma :s
Siguela cuando puedas(:

por **{Maru.}** Vie 30 Ago 2013, 7:33 pm

Ay dios maldito Yaser justo Emma tuvo que presenciar todo eso que fea situacion! no me gusta que Em se sienta mal con su cuerpo y no quiera comer! Cheryl es un poco brusca en decirle las cosas Zayn si la quiere o al menos eso da a entender! me encantaron los cap seguila cuando puedas besos!

por **Pepaa** Sáb 31 Ago 2013, 9:43 am

Diooooooooooooooooooooos mio
estos dos capítulos han sido To much ._.
Es que aaaaaaaah!
Primero lo que paso entre ellos dos, lo lindo que se comporto Zayn, la extraña reaccion de la amiga :G
y luego esto?
Yaser es un maaaaaaaalote :c que le esta haciendo a nuestro Zayn y su familia.. dios yo veo eso, y me muero :c
Emma se desmayo D:??
Aaaaaay dios, tienes que seguirla babe, esta demasiado buena!
Espero que todo este mejorando en tu casa babe <3
Loveeeeeee you!!!

por **Franny** Sáb 31 Ago 2013, 10:17 pm

Siento que me perdí de algo
fucking god
el papa de zayn, omg tengo miedo
que horrible encontrarse en esa situacion
te soy completamente sincera, tenía varias cosas buenas y/o graciosas sobre el primer capítulo y el comienzo del segundo pero nope
todo eso se fue a la mierda porque el final me dejo shockeada?
pensar que hay familias que realmente pasan por esto me revuelve el estomago
scar, creo que te identificas por añadirle esa pizca de drama a tus historias cuando TODO VA BIEN
Y LUEGO QUÉ, TODO ESTÁ PATAS ARRIBA
y ahora se nos desmaya Emma? Jesus, despierta que sin ti no sabemos qué pasa
PD. qué pasó con el foro mientras no estaba :|

por **SCARLET.** Lun 02 Sep 2013, 5:19 pm

caami escribió:Oh! Pedazos de capítulos me encantaron(:
Desde el principio tuve una leve sospecha de que Yaser le pegaba a Zayn :/
Emma me da pena que sea taan insegura ): ya está viendo cosas donde no hay nada que ver
Cheryl tiene que colocarse un filtro onda puede decir lo mismo pero con otras palabras porque de alguna manera ella sabe que le afectan a Emma :s
Siguela cuando puedas(:

El papá de Zayn es un idiota :z y pues sí, Emma tiene que quererse más :c
Y bueno, con respecto a Cheryl es demasiado dura con sus palabras y afecta a la pobre Emma.
Voy a escribir el capi :}

por **SCARLET.** Lun 02 Sep 2013, 5:20 pm

{Maru.} escribió:Ay dios maldito Yaser justo Emma tuvo que presenciar todo eso que fea situacion! no me gusta que Em se sienta mal con su cuerpo y no quiera comer! Cheryl es un poco brusca en decirle las cosas Zayn si la quiere o al menos eso da a entender! me encantaron los cap seguila cuando puedas besos!

Bueno, Cheryl es demsiado dura :c
Y Yaser es un imbécil.
Ya escribo el capítulo :}

por **SCARLET.** Lun 02 Sep 2013, 5:23 pm

Pepaa escribió:Diooooooooooooooooooooos mio
estos dos capítulos han sido To much ._.
Es que aaaaaaaah!
Primero lo que paso entre ellos dos, lo lindo que se comporto Zayn, la extraña reaccion de la amiga :G
y luego esto?
Yaser es un maaaaaaaalote :c que le esta haciendo a nuestro Zayn y su familia.. dios yo veo eso, y me muero :c
Emma se desmayo D:??
Aaaaaay dios, tienes que seguirla babe, esta demasiado buena!
Espero que todo este mejorando en tu casa babe <3
Loveeeeeee you!!!

JAJAJAJA. Todos contra Yaser o/ xd.
Siii, se desmayó :(
Love youuuuuuuu more babe<33

por **SCARLET.** Lun 02 Sep 2013, 5:25 pm

Franny escribió:Siento que me perdí de algo
fucking god
el papa de zayn, omg tengo miedo
que horrible encontrarse en esa situacion
te soy completamente sincera, tenía varias cosas buenas y/o graciosas sobre el primer capítulo y el comienzo del segundo pero nope
todo eso se fue a la mierda porque el final me dejo shockeada?
pensar que hay familias que realmente pasan por esto me revuelve el estomago
scar, creo que te identificas por añadirle esa pizca de drama a tus historias cuando TODO VA BIEN
Y LUEGO QUÉ, TODO ESTÁ PATAS ARRIBA
y ahora se nos desmaya Emma? Jesus, despierta que sin ti no sabemos qué pasa
PD. qué pasó con el foro mientras no estaba :|

JAJAJA es que a mí me pasa lo mismo que a ti xdd.
Siii, creo que me gusta algo el drama.
PD: No sé, pero me gusta más como se ve así, idk
Ya escribo :}

por **nadiita** Miér 04 Sep 2013, 6:19 am

Babe! Que capítulos!
Me encantan!
Qe malo que es Yaser!! Pobre morocho lindo!
Seguila pronto!
Besitos :)

por **Andrea_Horan** Jue 05 Sep 2013, 7:21 pm

Omg

Divina Locura || Zayn Malik y Emma Shelley. - Página 21 1187795894

Lamento no haberme pasado por aqui antes es que estaba de viaje, YO DIJE QUE ANDABAN EN COSAS RARAS *LO SABIA* hay Dios me preocupa Zayn omg y ahora Emma preocupada ¿se desmayo? Estoy tan preocupada, tienes que seguirla babe, besos :) xx

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