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Mariposas (Harry Styles y _____ Black)
O W N :: Archivos :: Novelas Abandonadas
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Página 1 de 7. • 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7
Mariposas (Harry Styles y _____ Black)
Nombre: Mariposas
Autor: Blue Cherry
Adaptación: Sí, de una chica que escribe GENIAL.
Género: Romance/Drama
Advertencias: Hay escenas de sexo explicito desde el primer capítulo jajaja :P
Otras páginas: http://www.fanfiction.net
Autor: Blue Cherry
Adaptación: Sí, de una chica que escribe GENIAL.
Género: Romance/Drama
Advertencias: Hay escenas de sexo explicito desde el primer capítulo jajaja :P
Otras páginas: http://www.fanfiction.net
Última edición por readergirl el Jue 04 Abr 2013, 8:57 am, editado 2 veces
readergirl
Re: Mariposas (Harry Styles y _____ Black)
Holaaaa :) Aquí vengo con otra historia adaptada. Esta es de una chica que, a mi parecer, escribe genial! Se expresa muy bien y tiene mucha imaginación, aunque sus historias suelen ser pervers jajaja
Creo que no será la única historia que adapte de ella, pero de momento empiezo con esta.
Veréis a un Hazza muy diferente en cuanto a actitud, pero yo creo que os gustará ^^
Nos leemos prontito :)
Creo que no será la única historia que adapte de ella, pero de momento empiezo con esta.
Veréis a un Hazza muy diferente en cuanto a actitud, pero yo creo que os gustará ^^
Nos leemos prontito :)
readergirl
Re: Mariposas (Harry Styles y _____ Black)
¡Primera lectora! Me dejaste enganchada con esto XD Espero que subas pronto el primer capítulo. Lo espero ansiosa C:
disappear.
Re: Mariposas (Harry Styles y _____ Black)
Pistachow escribió:¡Primera lectora! Me dejaste enganchada con esto XD Espero que subas pronto el primer capítulo. Lo espero ansiosa C:
Holaaaa! :D Me alegro que te parezca interesante ! Espero que digas lo mismo cuando leas los capítulo! jajaja Ahora mismo subiré el primero! ^^ Gracias por leer!
readergirl
CAPITULO 1
Mariposas
.
.
.
―¡Ah!―
Era lo único que podía hacer, gemir y jadear y morder mis labios evitando que fueran demasiado altos. No podía olvidar que estábamos en su casa y su padre estaba abajo preparando el almuerzo.
―¿Te gusta?― Pregunto.
―Si, por favor, hazlo― Rogué mientras abría más mis piernas.
Estábamos acostados en su cama. Él tenía su cabeza entre mis piernas, yo estaba con la falda escolar por encima de la cadera y mi ropa interior estaba tirada cerca de la puerta.
Sentí su lengua pasar a lo largo de mi intimidad y llegar hasta mi pequeño botón. Su lengua comenzó a entrar y salir de mi vagina mientras sus dientes chocaban contra mis labios vaginales.
―¡Ah!― Gemía ―Mierda― Mordí mi labio inferior y apreté las sábanas.
―Eso gime, gime mi nombre― Dijo él volviendo a su tarea.
―¡Ah…
.
.
Desperté de golpe, las pequeñas gotas saladas de transpiración caían por mí frente a mis mejillas, mi pecho subía y bajaba y sentía un inmenso calor en mi bajo vientre, no puede ser que soñará otra vez con él. Después de tantos meses seguía pensando en él, debía olvidarlo, aunque ahora sería imposible, iniciábamos el último año de secundaria y estaríamos en la misma clase.
Me di una ducha de agua fría, seque mi largo cabello y me hice una desordenada media cola, algo de maquillaje y me coloque el uniforme, una camisa blanca, manga tres cuartos, que tenía el escudo del instituto en el bolsillo ubicado en mi seno izquierdo, por encima un ajustado chaleco verde oscuro y una falda tableada verde oscuro, medias del mismo tono y de zapatos unas botas cortas blancas por el tobillo.
Baje a desayunar, mi padre ya se había ido a trabajar, cosa que agradecía y mi madre, bueno de eso no quería hablar, no por ahora.
― ¡_____!― Escuche que gritaban a mis espaldas.
Una hermosa rubia de ojos verdes se acercaba corriendo a mí.
―Amber ―
―¿Lista para el primer día de clases?― Yo solo hice una mueca con la cara ―Ya tranquila, después de dos meses y medio volverás a verlo, es normal, estás nerviosa. Pero tranquila― Aseguró mientras sacaba dos barras de chocolate de su bolso, entregándome una.
―Gracias― Susurré mientras lo tomaba ―Este año no estarás conmigo―
―No, pero estarás con la zorra― Dijo divertida ―Aunque la odie, ella es buena amiga contigo y te cuida. Eso sí, si te hace algo, tu dime― Dijo elevando su puño al aire, yo solo reí divertida.
Amber era mi mejor amiga, me llevaba un año. Este año entraría a la universidad y yo me quedaría en el instituto. Amber por su parte tenía dos hermanos, su mellizo Tyler i Zac, que tenía mi edad.
―Hay no, ahí viene la zorra― Susurró Amber ―Bien cariño, hasta aquí llego yo― Comentó mientras se alejaba a paso apresurado.
El complejo de Universidades de todas las materias, quedaba justo frente a nuestro instituto, en varios edificios inmensos.
―¡Frentezota!―
―¡Cerda!―
Luego de nuestro acostumbrado saludo comenzamos a reírnos.
―Oye y tu amiga ya se fue, a mí se me hace que no le caigo bien― Dijo en tono inocente, ese que no le salía para nada.
―Hay Ashley―
Ashley y Amber se odiaban, empezando por el hecho que ambas competían para ser la líder de las porristas; Ashley ganó y Amber le quitó el novio en venganza, claro que luego se enamoró y no quiso dejarlo. A Ashley no le dolió mucho, ella es muy hermosa y tiene muchos chicos detrás de ella. Tiene el cabello largo por la cintura, siempre amarrado en una coleta alta y con un seductor mechón sobre su mejilla. Un maquillaje seductor, que resalta sus facciones y sus hermosos ojos celestes y su uniforme resalta su ejercitado y voluptuoso cuerpo.
―¡Qué hermosas son las colegialas! ¡¿No quieren que les demos clases particulares?― Escuchamos los gritos de los universitarios en la cuadra de enfrente.
―Imbéciles― Murmure, Ashley solo sonreía y saludaba
― Vamos o se nos hará tarde― Mencioné mientras me encaminaba al instituto.
―Frentezota, siempre arruinas la diversión― Menciono divertida, yo solo rodeé los ojos.
Caminamos despacio al interior del instituto, adelante hay un inmenso jardín, a la derecha se encuentra el estacionamiento y hay un pequeño camino de piedras que te guía al interior del enorme edificio.
―¡_____, cuidado!― Gritó Ashley, y un elegante auto negro, último modelo casi nos atropella ―¡Estúpido, aprende a conducir!― Le gritó.
―Ya déjalo, mejor nos apuramos antes de que empiecen las clases y no nos dejen entrar― Comenté mientras tiraba de su muñeca.
Nos dirigimos al salón de clases, todas las materias siempre eran en el mismo salón excepto biología, física y química, que teníamos en sus respectivos laboratorios y siempre nos tocaba los mismos compañeros. Ya habían llegado todos, cuando entramos al salón de este año, observé los mismos rostros del año pasado. Pero yo solo lo buscaba a él.
―______― Sentía su varonil voz a mi espalda.
Era él, bien ¿Ahora qué haría?
.
.
.
Desperté por el sonido del celular, hoy era el primer día de clases en mi nuevo instituto. A mi padre lo habían ascendido y transferido de New York a Inglaterra, por lo que este año viviríamos aquí en Londres.
Tomé una relajante ducha y me coloque el uniforme, una camisa blanca manga larga, pero la doblaba hasta mis codos, tenía el escudo del instituto en el bolsillo del lado izquierdo de mi pecho, un chaleco verde oscuro por encima, pantalones del mismo tono y zapatos negros.
―Harry ¿No vas a desayunar?― Me preguntó mi madre en cuanto pasé por el living.
―No, ya voy tarde― Comente acercándome a la mesa ―Adiós, madre― Dije dándole un beso en la mejilla.
―Ah, que tierno ¿Y para mí no hay?― Comentó Kin, mi prima mientras me hacía ojitos.
Solo la mire y sonreí de lado, si era mi prima, pero eso no impedía que jugáramos un poco.
Tomé las llaves de mi auto y me marché al instituto. Llegue en unos veinte minutos y casi atropello a dos torpes que estaban en el camino. Luego de dejar mi auto en el estacionamiento, me encaminé al interior del inmenso edificio. Los pasillos estaban bastante atestados de gente, me acerqué a dos chicas que estaban conversando, aclaré mi garganta para que notaran mi presencia e inmediatamente voltearon a verme.
―¿Saben donde está la oficina del director?―
―Eh, si― Murmuro una castaña sonrojada. Típico ―Es en el piso superior, subes por la escalera al final del pasillo ¿Si quieres te acompa-―
―Hn― La interrumpí con mi típico gruñido mientras me marchaba.
Subí las escaleras y llegue a la oficina del director, un viejito que estaba más para el "cajón" que para director de una secundaria. Me entregó un mapa del lugar y mis horarios. Primera materia: inglés.
Me encaminé al salón de clases, los pasillos ya estaban vacios.
―Perdón, soy Harry Styles, el nuevo estudiante―
―Oh, si pasa, pasa― Murmuró la profesora ―Siéntate donde quieres―
Observé la clase, varias chicas me devoraron con la mirada y se sonrojaron en cuanto las miré, los lugares libres eran tres. Era una mesa para dos y dos sillas detrás. Uno de los lugares libres, se encontraba al lado de un chico, algo robusto que comía "patatas" a escondidas, el otro, al lado de un extraño chico con un "corte taza" y el tercer y último lugar era al lado de una chica morena de puntas rubias.
Bien, elegía la chica.
Pasé por entre los bancos, la mesa de la morena se encontraba cerca del final del salón. Me senté a su lado pero la chica ni siquiera se giró a verme. Estaba resolviendo unos ejercicios de inglés y por lo que podía ver, la mayoría estaban mal. Su pelo se encontraba atado en una despeinada media cola, el resto del cabello se encontraba por encima de su pecho y llegaba por debajo del seno, los cuales observé bien, no eran muy grandes pero tampoco tan pequeños, el ajustado chaleco remarcaba su pequeña cintura, estaba cruzada de piernas por debajo de la mesa, no podía ver bien su rostro ya que tenía un flequillo de lado izquierdo que impedía ver su rostro, ya que se encontraba con la cabeza gacha.
De un momento a otro, pinchó en la espalda a la chica de enfrente con el lápiz, la chica pego un salto y se dio vuelta.
―¿Qué quieres?― Susurró enojada.
―Ayúdame, no entiendo nada― Murmuro la morena, tenía una voz baja y suave y demasiado dulce para mi gusto.
La chica de enfrente era la castaña de esta mañana, volteó a verme y nuevamente se sonrojo, la morena levantó la vista y la enfocó en mí, por fin pude ver su rostro, no estaba nada mal. Sus ojos eran de un color verde extraño, tenía un color más oscuro al borde del iris y luego el color verde se aclara al llegar a la pupila, jamás había visto unos ojos así, tenía un ligero maquillaje y unos labios carnosos y rosados, facciones delicadas y una cara un poco redonda, pero era bastante bonita.
―¿Vas ayudarme o no?― Desvió su rostro al de la castaña, esta solo asintió y le hizo los ejercicios.
―Ya esta, trata de estudiar― Le dijo la castaña mientras volteaba.
―Hay, Dani, sabes que odio los idiomas― Se quejó.
Estuve la mayor parte de la clase observándola, ella no se dio cuenta de mi presencia, es más me ignoraba y eso me frustraba. Cada vez que movía su cabello un aroma a "frutos rojos" llegaba a mi nariz. En el receso juntó sus cosas y se marchó con sus amigas. Varios chicos se acercaron a mí y salimos al jardín del instituto.
―¿Quien es ella?― Le pregunté a Liam.
―¿Quién. La rubia? Es Ashley, está buena ¿Verdad?―
―No, la otra―
―¿_____? Pues, está bien, es algo rara, muy tímida y reservada pero la verdad está bastante buena―
―Hn―
_____. Me gusta.
Después del receso, nos encaminamos al laboratorio de química.
―Alto, no se sienten. Este año yo seré quien forme las parejas― Dijo la profesora, menciono varios nombres a los cuales no presté atención hasta que llego al mío ―Harry Styles y… _____ Black ―
Me encaminé a la mesa del fondo y sonreí de lado, al parecer el destino nos quería juntos. La morena se sentó a mi lado, en una silla de madera alta, la mesa era de mármol y azulejos blancos, tenía una canilla, un lavabo y varios mecheros y tubos de ensayo.
―Hola, al parecer nos toca de nuevo juntos― Murmuré ella.
―Hn― No me interesaba empezar una conversación, ella solo bufé e infló infantilmente sus mejillas.
Durante toda la clase no me habló, pero vi lo torpe que podía llegar a ser. Se le cayeron varias veces los tubos de ensayo y tuvimos que volver a iniciar el experimento.
―Ten cuidado― Dije mientras sostenía su mano, evitando que tirara el cuarto tubo de ensayo.
Sus manos eran muy pequeñas en comparación con la mía y tenía las uñas pintadas de verde.
―Ya sé― Susurró enojada, pero su voz era demasiado bajita y dulce, como para estar enojada.
El timbre sonó dando la clase por terminada, vi a la morena juntar sus cosas y meterlas en su morral rosado.
―Oye morena― La llamé.
―Tengo nombre― Mencionó enojada.
―Hn, escucha-―
―Hazza ― Me interrumpieron, cuando volteé mi rostro, me encontré con una voluptuosa pelirroja ―¿Y tú que miras, bicho?― Insulto a _____; esta solo agacho la cabeza y se marché ―Hazza. Mi nombre es Karin… Mmm… ¿Quieres que te de un paseo por el instituto?― Mencionó en un tono inocente, que no le quedaba para nada, mientras se inclinaba hacia mí, dejándome a la vista el inicio de sus pechos.
Sonreí de lado y ella me tomo de la mano, guiándome por el pasillo.
―¿Quieres que te enseñe el gimnasio?― Me pregunto mientras abría la puerta.
Entramos despacio y ella se sentó en unas colchonetas. Se cruzó de piernas y sonrió de lado.
Bien, no era mi primera opción pero algo es algo.
A la mañana siguiente me levanté demasiado tarde, apenas me dio tiempo de ducharme y me marche al instituto, pasé por el laboratorio de biología, la clase ya había iniciado, bien esperaría en el salón a la próxima clase. Llegué al salón, solo se encontraba ______, ella levanto la vista para verme y sonrió de lado, bien, eso no lo hizo ayer. Me acerque a la mesa y ella se levanto y se sentó en la mesa.
―Te he estado esperando, Harry ― Susurró.
Me acerqué a su cuerpo y me acomodé entre sus piernas, ella me apretó con sus piernas y subió sus manos a mi cuello, acercó sus labios a los míos y comenzó a besarme despacio y lento, su pequeña lengua acaricio mi labio inferior y como acto reflejo abrí los labios dejando que su lengua entrara en mi boca y chocara con la mía.
Desabotone su chaleco y su camisa, sus senos estaban cubiertos por un sujetador blanco con rosas negras, ella me beso con más ímpetu y bajo una de sus manos a mis pantalones, los desprendió y saco mi miembro, dándole pequeñas caricias.
Pasé mis labios a su blanquecino cuello y metí una de mis manos bajo su sostén, su seno se amoldo perfecto con mi mano y la otra la metí debajo de su falda, toque su intimidad por sobre la tela, estaba muy húmeda, demasiado.
Ella apretó mi miembro cuando uno de mis dedos entró en su pequeña cavidad y continuamos con lo mismo, masturbarnos mutuamente.
Esta chica me estaba matando, necesitaba hacerla mía.
Quite mis dedos de su interior y ella frunció el ceño.
―Quiero correrme dentro de ti― Le susurre al oído y ella tembló entre mis brazos.
La penetre de una sola estocada, sabía que le había dolido ya que me abrazo más fuerte y se quejó, pero así era más fácil.
Me quede quieto unos segundos esperando a que se acostumbrara a mi forzosa intromisión. A los pocos minutos, ella me abrazo más fuerte con sus piernas envolviéndolas en mi cadera y mordió mi cuello.
Comencé un vaivén lento, mis estocadas eran lentas y profundas, quería llenarla de mi. Ella por su parte me quito el chaleco y la camisa y acaricio mi espalda, sentía sus uñas clavarse cada vez más fuerte en mi espalda a medida que la embestía cada vez más rápido y fuerte.
―¡Ah, Harry!― Gimió alto mientras sus paredes apresaban mi miembro.
Ella había llegado pero yo no. La acosté en la mesa y subí sus piernas a mis hombros, quería derrame dentro de ella. Me importaba poco que nos descubrieran y nos expulsaban, valía la pena.
La penetre con más fuerza, ______ se retorcía sobre la mesa y gemía fuerte, sus gritos debían escucharse por toda el instituto, pero yo aún no había llegado.
―Harry― Gimió.
―Harry, Harry ¡Harry!― De pronto su dulce voz se convierto en una mucho más grave y ronca.
―¡Mierda, Harry!―
Desperté de golpe, las gotas de sudor resbalaron por mi frente y mi pecho subía y bajaba, mientras un inmenso calor recorría mi cuerpo.
¡Había sido un sueño, un maldito sueño!
―¿Soñaste algo bonito?― Me pregunto mi hermano Louis mientras reía divertido.
Bajé la vista y vi la enorme erección solo cubierta por la sábana, tomé la almohada y la coloque sobre mis piernas.
―Lárgate― Dije de mala gana, Louis solo soltó una carcajada.
―Mamá dice que te apures o llegarás tarde― Dijo mientras se encaminaba a la salida ―Ah, y yo que tu tomaría una ducha de agua fría, bien fría― Le tiré la almohada pero ésta choco contra la puerta ya cerrada.
Abrí el grifo de agua fría y me metí bajo el chorro helado. Era ridículo tener que hacer esto cuanto tenía tantas chicas detrás de mi, pero al momento de tomar mi miembro entre mi mano derecha, la imagen de _____ vino a mi.
Me terminé de duchar y bajé corriendo, ni siquiera me despedí de mi madre o coqueteé con Kin.
Llegue al instituto, faltaban veinte minutos para terminar la primera clase, todo el salón se encontraba en el laboratorio de biología. Bufé, por culpa de mi dulce sueño, llegue tarde, me dirigí a mi salón, luego tendríamos historia.
En cuanto llegue me encontré con ______, era como en mi sueño.
Pero a diferencia de mi sueño, ella no notó que había llegado, estaba realizando unos ejercicios, supuse que había llegado tarde. Me senté a su lado, ella ni se inmuto, seguía con la cabeza gacha resolviendo ejercicios, me acerque un poco, eran nuevamente de inglés, por dios, ni siquiera sabía conjugar los verbos en Presente Continuo.
―Está mal― Susurré cerca de su oído.
La chica pegó un pequeño saltito y giró su rostro hacía mi, nuestras narices se rozaron.
―¿Qué te pasa? Me asustaste―
Iba a voltear la cabeza pero la tome de la mejilla.
―Es Present Continuos, los verbos regulares terminan en i-n-g― Susurré cerca de sus labios.
Y el aroma a chicle de cereza golpeo mi rostro cuando abrió sus labios inconscientemente. La bese y ella intentó apartarse, pero lo evite agarrándola por la cabeza. A los pocos minutos comenzó a corresponderme. Subió su mano derecha a mi cabeza, acariciando mi nuca y tirando de mi cabello y coloco la otra mano en mi abdomen, acariciando mis marcados abdominales. Yo por mi parte coloque mi mano derecha en su espalda, acariciando lentamente de arriba a abajo, baje mi mano de su cabeza y la apoye en su rodilla, mantenía las piernas cruzadas.
Ella apretó más mi cabeza contra su rostro, haciendo el beso más profundo y yo subí mi mano acariciando su pierna. La metí debajo de su falda, ahogue su gemido en mi boca y la hice separar las piernas, toque su intimidad por sobre su ropa interior y ella tironeo de mis cabellos, indicandome que le gustaba.
Llevábamos un buen rato besándonos y no pensaba parar, iba a cumplir mi fantasía con ______ Black, hoy mismo.
Corrí su ropa interior, estaba por meter uno de mis dedos en su vagina…
―¡Hazza!―
¡Maldición!
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Quien habrá sido el capu.llo que los habrá interrumpido? djikdicsdj! jajajaja Bueno, aquí está el primer capítulo!! :)) Es larguito e introductorio, se irá poniendo más bueno! ;) jajajaaja
Alguien se atreve a adivinar quien puede ser el posible "amigo" de _____? mmm.... Esta historia dejará muchas intrigas al principio, pero se irán resolviendo a medida que pase el tiempo :3
Nos leemos pronto! Besos
readergirl
CAPITULO 2.
capítulo II:
―¡¿Lo dijiste si o no?―
―No, ya te lo expliqué yo-―
―¡Eres un mentiroso, confié en ti, eras el único, aparte de Ashley, que lo sabía!―
―¡Joder, ya cállate! Todos nos están viendo, ya te dije que yo no fui―
―No te creo, es más, ya no quiero volver a verte―
.
.
¡Mierda! Otra vez. ¿Por qué últimamente soñaba tanto con él?
Me levanté despacio, estaba bastante agitada y transpirada, tomé una pequeña ducha, me cambié y bajé las escaleras al living.
―Papá― Susurré mientras lo veía tirado en el sillón, tenía una botella de vodka, media vacía en su mano y otras más regadas en el suelo.
Tomé una cobija y lo tape con ella.
―Descansa, papá― Susurré mientras besaba su frente.
La verdad la relación con mi padre era pésima, más después de lo de mi madre, pero no dejaba de ser mi padre.
―¡______!― Escuché el grito en cuanto puse un pie en la acera.
―Amber―
Nos encaminamos al instituto, bueno, yo al instituto, ella a la universidad.
―Tengo un rato libre ¿Te quedas conmigo?― Mencionó Amber haciendo ojos de cordero degollado.
―No, tengo clases―
―Anda, si eres una de las mejores de la clase. Además es biología, a ti te va super bien. Por favor, aquí todos son unos cerebritos, no tengo amigos― Comento de forma dramática
―Ok, vamos― Dije mientras rodaba mis ojos y nos encaminábamos al interior de la universidad.
La verdad era que me iba muy bien en clases, claro menos en los idiomas, pero dejando eso de lado, me iba muy bien en el instituto. En el camino nos encontramos con Rin, la hermana mayor de Ashley y por alguna razón, yo no le caigo bien.
―Las colegialas no pueden estar aquí― Remarcó con su chillona voz mientras meneaba su lacio cabello.
―Me acompaña a mí y yo si estudio aquí. Muévete― Dijo Amber mientras pasábamos por su lado y nos encaminamos al jardín ―Idiota― Murmuró fastidiada viendo a Rin con sus amigas ―¿Por qué dejas que te trate así? Si sigues de tonta, te pasaran por arriba―
―No importa, además no es como si la opinión de Rin fuera muy importante en mi vida―
―Como sea― Dijo rodando sus ojos ―¿Cuidas bien de Zayn? No quiero que la zo- perdón Ashley, se le acerque― Mencionó divertida.
Unos minutos después Amber entró a clases. Como era de esperarse, la clase de biología ya había empezado y me tocó ir al salón. Terminé haciendo la tarea de inglés, materia que por cierto odio.
Flash back
―Ah ¿Qué haces?―
―Te acaricio― Dijo mientras besaba mi cuello y sus manos se adentraron en mi falda ―Me encanta cuando no usas ropa interior― Murmuró contra mi cuello y sentí mi cara arder.
Sus dedos atraparon mi pequeño botón mientras lo pellizcaba y acariciaba mi entrada. Estábamos en casa de Amber, él me había llevado hasta su habitación alegando que teníamos que estar un rato solos. Estaba bastante húmeda y la verdad lo necesitaba, hasta el momento nuestros "juegos" no habían pasado de nivel, pero cada vez sentía que lo necesitaba más y más.
―¿Pero que hacen?― Gritó Tyler abriendo la puerta de golpe y nosotros nos congelamos. Unos minutos más tarde nos encontrábamos en el piso de la habitación de Amber, riéndonos a carcajadas.
End flash back
―Está mal― Susurraron en mi oído.
Di un pequeño brinco en mi propio asiento mientras lo observaba.
―¿Qué te pasa? Me asustaste―
Iba a voltear la cabeza pero me tomó de la mejilla.
―Es "Present Continuos" los verbos regulares terminan en i-n-g― Susurró cerca de mis labios.
Lo conocía, era el chico nuevo ¿Cómo se llamaba?
Harry.
Ayer, poca importancia le había dado, es más la única vez que intente ser amable me dejó con la palabra en la boca y lo peor, Karin ya lo había marcado como su territorio.
Lo miré fijamente, su cabello castaño y ruloso y, a simple vista brilloso y sedoso, caía con elegancia a cada lado de su rostro formando un pequeño flequillo; su piel era más blanca que la mía, firme y cremosa, un rostro varonil y llamativo, labios carnosos y finos a la vez y unos hermosos ojos verdes.
No sé en qué momento sus labios tocaron los míos, intenté resistirme y alejarme pero su mano atrapó mi cabeza, acariciando mis cabellos y ejerciendo más presión en mí, para acercar nuestras bocas. No sé en qué momento comencé a corresponder el beso, solo sé que se sentía muy bien. Sus manos me acariciaban en el lugar exacto, su mano viajó tan adentro de mi falda que rozo mi intimidad; mi "pequeño recuerdo" me había dejado bastante húmeda y este chico era un verdadero dios. Sus brazos eran firmes y musculosos y tenía una espalda muy ancha, abdominales perfectos… por dios Harry Styles era un maldito dios griego. Su mano derecha corrió mi ropa interior ¿En qué momento deje que abriera mis piernas? Estaba por tocarme cuando...
―¡Hazza!―
¡Mierda! Volteé la cabeza, solo para encontrarme con la pelirroja que echaba lumbre por los ojos. Me levante apresurada y me aleje de allí ¡Maldición! Ni siquiera oímos el timbre.
.
.
―Frentezota, oye ¿Qué te paso? Estás muy roja―
―Na-nada Ashley, solo venía corriendo, llegué tarde― Mencioné nerviosa mientras sonreía falsamente.
―Claro, vamos al jardín― Comentó no muy convencida.
Caminamos en silencio y nos sentamos debajo de un frondoso árbol.
―¿Sabes? Este sábado haré una fiesta en mi casa ¿Vendrás temprano ayudarme, cierto?―
―Cierto ¿Quien más te ayudaría?― Mencioné con sarcasmo y recibí un abrazo marca Ashley que casi rompe mi clavícula.
Ash dejó de abrazarme y sus ojos se enfocaron en alguien detrás de mí, di media vuelta y mis ojos chocaron con unos verdes, él sonrió de lado y se alejó.
―Me sonrió, me sonrió― Mencionó Ashley alegre ¡Oh, no! ―Es guapísimo ¿No lo crees―
―Eh, si supongo, no es feo― Murmuré.
―Por dios, frentona ¿Estás ciega? Sabía que tenías mal gusto pero no tanto― Exclamó dramática.
―¡Oye!― Me quejé ―Es solo que el chico, se ve frío y déspota y arrogante, a mi me gustan más románticos y dulces-―
―Y tontos― Me interrumpió.
―Karin, ya lo nombró como su propiedad―
―Me da igual Karin― Dijo frunciendo el ceño ―Como sea, lo invitare a mi fiesta, que suerte tienes frentona, lo tienes al lado―
―Claro― Murmuré.
―¿Crees que vaya?― Preguntó mientras nos encaminábamos al salón.
―No sé, pregúntale―
No pensaba decirle a Ashley lo que había pasado, además no paso nada. Solo un beso. El chico debe tener complejo de superioridad o algo y quiere que todas las mujeres lo veneren. Me da igual, Ashley se encargará de él, lo tendrá en la palma de su mano y ese estúpido beso nunca se sabrá.
El cual por cierto no causo ni el más mínimo efecto en mí.
Evite a Harry todo el día. No es como que el chico me gustara o algo, bueno, Harry estaba muy bueno, ni un ciego podría negarlo, pero sencillamente él no me gustaba, yo ya estaba enamorada y no lo cambiaría por nada.
A parte Ashley ya puso sus ojos en Harry y si en algo es buena mi amiga, es en el amor o por lo menos, en atraer al sexo opuesto, ningún chico se le resiste, es extrovertida, divertida, graciosa, sensual, perfecta, si, Karin tendrá una dura pelea por el chico nuevo.
.
.
―¡¿Dónde estabas?―
―En clase― Susurré mientras entraba a casa.
―Salí temprano esperando encontrar algo de comer y resulta que la señorita no estaba ¡Maldición! Ni para eso sirves, _____―
―Ya te dije que estaba en clase― Murmure arrinconándome en la pared.
Distinguí varias botellas en el piso y sabía que lo que se venía no era bueno.
―¡Ah!― Grité cuando sentí el agarre en mi cabello y me llevo a rastras a la cocina.
―Ahora prepara algo― Siseó entre dientes destellando furia por los ojos y su aliento a alcohol chocó con mi rostro ―Vienen unos amigos y quiero que los atiendas bien ¿Escuchaste?― Yo solo asentí con la cabeza evitando las lágrimas de dolor por los tirones en mi cabello ―¡Cocina!― Gritó mientras me empujaba y mi vientre choco contra la encimera.
.
.
.
―¡Hazza!―
¡Maldición! Vi la cara furibunda de Karin pero volteé rápido a ver a _____, esta solo agachó la cabeza y salió lo más rápido de la clase, no iba a dejar que se me escapara y salí corriendo detrás de ella.
―Hazza ― Me llamó Karin sosteniendo mi brazo ―¿Qué hacías besándote con el bicho ese?― Reclamo como novia celosa, me solté de mala gana de su agarre y caminé a la puerta ―¡Contéstame!― Gritó mientras volvía a tomar mi brazo.
Di media vuelta rápido y la empotre contra la pared.
―Escucha y escucha bien porque no pienso volver a repetírtelo― Susurré contra su rostro y ella me miró con miedo ―Que hayamos tenido sexo no significa que te metas en mi vida ¿Escuchaste?― Ella solo asintió con miedo ―Bien, nos vemos luego― Murmuré mientras besaba sus labios.
Salí del salón en busca de ______ y la halle con la rubia amiga de ella, vi sus mejillas sonrojarse, seguro recordando el beso y sonreí de lado mientras daba media vuelta.
Me evitó el resto del día, cosa que me frustro por completo pero _____ Black iba a ser mía, como que me llamo Harry Styles.
Al día siguiente ______ no llegó a clases, a nadie pareció sorprenderle que la chica faltara, es más, ni siquiera los profesores preguntaron algo. Me encaminé a mi auto a la salida y me encontré con una "sorpresita" apoyada en mi auto.
―Hola, Harry. Soy Ashley, vamos al mismo salón― Menciono la rubia, incorporándose.
―Hn―
―Bueno― Se apresuró a decir ―El sábado voy a hacer una fiesta en mi casa y... No sé, si te gustaría ir― Susurro lo último tendiéndome una hoja con su dirección.
Una fiesta. Seguro ______ iba, después de todo, ella y la rubia son buenas amigas o algo así.
―Claro, ahí nos vemos― Murmuré mientras abría la puerta del auto y me iba.
Ella solo se quedó callada y sonrojada.
Nuevamente ______ faltó los días siguientes. Por dios, solo había sido un beso, si faltaba por eso, ya me daba cuenta que era una mojigata, sería divertido pervertir a ______ Black.
El sábado llegué hasta la casa de la chica. Era una inmensa casa, se nota su dinero y su posición social. Tenía un enorme jardín, que esta noche funcionaba como estacionamiento. Había varios chicos tirados en el pasto bebiendo, besándose o simplemente durmiendo. Por lo visto la fiesta ya había empezado. La verdad, poco me importaba, por eso había decidido ir tan tarde.
En cuanto ingresé a la amplia casa, el aroma a cigarro, alcohol y droga inundó mis sentidos. Había más gente allí que en todo el instituto. Caminé despacio intentando buscar a ______, esta noche sí que no se me escapaba.
Sentí un pequeño agarre en mi muñeca y pronto me encontraba acorralado contra la pared por una voluptuosa rubia.
―Hazza, me alegro que hayas podido venir― Mencionó bastante ebria mientras acercaba su rostro a mi cuello
―Hn, Ashley ¿Que-― Pero sus labios me interrumpieron, me besó demandante y pasional mientras acariciaba mis brazos y se colgaba de mi cuello.
Nos encaminamos hasta una habitación sin deshacer el beso y entramos. Ella me tiró sobre la cama y comenzó a desvestirse.
―¿Sabes? Me has gustado desde que llegaste pero nunca me hiciste caso― Mencionó con un puchero mientras gateaba sobre mi ―Esta noche no te me escapas, Harold― Ronroneó y comenzó a desprender mi camisa.
Le di media vuelta y sonreí de lado, restregué mi miembro contra su intimidad y ella gimió satisfecha.
―Ah, Harry―
Besé su cuello y fui bajando por sus pechos mientras sentía como sus manos acariciaban mi cabello, pero de un momento a otro sus manos resbalaron por mi espalda hasta caer sobre el colchón, me acerque a su rostro y note que se había quedado dormida; demasiado alcohol. Me quité de encima y me marché.
Bien, ahora a buscar a mi primera opción.
Caminé por los largos y oscuros pasillos. En cuanto llegue al living, donde se desarrollaba la fiesta, había varios chicos compitiendo por quien bebía más y varias chicas se besaban, eso me gustó. La fiesta estaba fuera de control y la verdad no estaba de humor y mucho menos lo suficientemente ebrio como para soportar esta banda de inútiles. La verdad había llegado tarde a la fiesta pensando en que quizás encontraría a ______ media ebria y podría tirármela para dejar de soñar con ella.
La mayoría estaban en un estado deplorable, bebían, vomitaban, se subían sobre las mesas.
Hasta pude ver como Liam se besaba con Karin, por lo visto es cierto, del odio al amor hay un solo paso.
En cuanto salí al jardín la brisa veraniega acaricio mi rostro, estaba completamente vacío, a excepción de alguien acostada en una hamaca paraguaya que se encontraba entre dos espesos árboles. Me acerque despacio, ______ no notó que había llegado, tenía uno de sus brazos por detrás de su cabeza y en el otro una botella de cerveza que apoyaba en su vientre, llevaba unos convers blancos, un simple jean desgastado y una blusa negra manga corta, con estampados de letras blancas y plateadas, estaba sencilla, pero jamás una ropa tan poco provocativa me había excitado tanto.
Se llevó la botella a la boca, su garganta se movió tragando el líquido y una pequeña gota resbalo de entre sus labios por su cuello. Suspiró y volvió a cerrar sus ojos apoyando la cerveza en su vientre.
La verdad había mujeres más hermosas y seductoras que ______ Black, de eso no había duda.
En realidad, la niña era bastante bonita, pero simple y sencilla, digo, no destacaba mucho, no eran sensual, hermosa o provocativa, pero había algo en ella que me atraía demasiado. Me acosté su lado y ella al fin notó mi presencia ¿Por qué era tan distraída?
―¿Qué haces aquí?― Murmuró medio asustada y enfoqué mi vista en sus ojos de un verde tan extraño.
―Hn ¿Por qué faltaste?― Mencioné mientras me acomodaba sobre su pequeño cuerpo, ella corrió la botella y yo puse una pierna entre las suyas y mis manos a cada lado de su cuerpo.
―Me sentía mal― Contestó encogiéndose de hombros ―Ahora, si me disculpas― Murmuro empujándome por el pecho pero yo no me moví ―Muévete―
―No― Le dije mientras sonreía y ella se sorprendió ―No creo que eso sea lo que quieres―
―¿Y qué es lo que quiero según tu?―
―A mi― Le dije para besarla, ella no me correspondió, pero no por eso iba a parar.
______ me traía loco, jamás había soñado esas cosas tantas veces con la misma mujer y jamás había sentido tal atracción por una. Sus labios apenas se movían y ella me empujaba por el pecho, la apreté más contra mí y pronto sentí el frío líquido bañar mi espalda.
―¿Qué haces?― Murmuré enojado mientras sentía la humedad de mi camisa, me había echado la cerveza encima.
―Te dije que te quitaras―
Le saqué la botella de las manos, ella intento resistirse pero al fin se la logre quitar, tome un trago y luego lo vertí en su cuello y su pecho.
―Idiota ¿Qué crees que haces?―
―Apuesto a que de tu piel sabe mejor― Murmure besando su cuello.
Pase mi lengua absorbiendo el frío líquido y la escuche suspirar, subí hasta sus labios y sonreí de lado, ella entrecerró sus ojos, iba a besarla.
―¡Permiso!― Grité empujándome y saliendo corriendo directo al interior de la casa.
¿Qué había sido eso? ¿Cómo se atreve a dejarme así?
Me levanté frustrado de la hamaca y me acerqué a la casa. La mayoría seguía en lo mismo ¡Maldita, niña! Cuando la encontrará iba a ver quién era Harry Styles, oh si, la castigaría la noche entera.
Caminé despacio por los pasillos y subí las escaleras al piso superior, escuché varios gemidos y susurros del interior de las habitaciones, no eran de _____, los conocía, bueno de mis sueños, pero si eran de ella, mataría al idiota que se atreviera a tocarla.
Vi la luz del baño prendida y la puerta semi abierta, la abrí despacio y allí estaba la morena, sentada al lado del inodoro, su espalda estaba apoyada en la pared y sus piernas flexionadas. Se veía pálida y transpirada, su pecho subía y bajaba y sus ojos estaban vidriosos y a medio cerrarse.
―Hola― Murmuró acomodando su desordenado cabello, por lo visto la chica odiaba peinarse.
―Hola― Le contesté sentándome a su lado.
―Deberías irte, esto tomará su tiempo― Murmuró y se volvió rápidamente hasta el inodoro, su vientre se contrajo arrojando todo el líquido alcohólico de su sistema y se mantuvo en la misma posición unos minutos para luego volver a sentarse a mi lado.
―En serio, vete―
―Está bien, la fiesta esta aburrida―
―Tonto― Susurró y nuevamente volvió a meter su cabeza en el inodoro.
No sabía que hacer, así que solo se me ocurrió tomar su cabello evitando que se ensuciara.
―Gracias― Murmuro ―Abajo hay muchas chicas que quieren estar contigo, es más divertido que verme vomitar, anda vete― Susurró sentándose en el frió suelo.
―Ya te dije, la fiesta es una mierda―
―Hmp, como quieras― Susurró cerrando sus ojos.
Apoyó su cabeza en mi hombro y a los pocos minutos se quedó dormida, se veía tan tranquila y pacífica, se veía bastante frágil, su remera se subió a causa de sus movimientos para acomodarse mejor en el incómodo suelo, su piel era muy blanca aunque no tanto como la mía, pero pude ver varios moretones cerca de su cintura, algunos se adentraban en el jean, otros en la blusa oscura. Pasé uno de mis brazos atrayéndola hacia mí y la levanté despacio para acomodarla entre mis piernas. La morena pasó sus brazos por mi cintura y hundió su cabeza en mi cuello. Sentía los acompasados latidos de sus corazón sobre mi pecho, su aliento en mi cuello y sus brazos apretar mi cintura cada vez más fuerte mientras sus piernas se enredaban con las mías.
―Te he estado esperando... Harry― Susurró entre sueños mientras se acomodaba sobre mí.
Sonreí de lado y la abrace más fuerte, la música poco a poco fue cesando, ya de la fiesta solo se oían murmullos y poco a poco me fui quedando dormido.
Holaa! Segundo capítulo!! ^^ Pues si chicos, el padre de _____ no la trata muy bien.. pero todo esto tiene un fondo que se irá descubriendo poco a poco :) Os dejo con la instriga :3 Chaaaau
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MARIPOSAS
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Golpes y cerveza
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MARIPOSAS
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Golpes y cerveza
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―¡¿Lo dijiste si o no?―
―No, ya te lo expliqué yo-―
―¡Eres un mentiroso, confié en ti, eras el único, aparte de Ashley, que lo sabía!―
―¡Joder, ya cállate! Todos nos están viendo, ya te dije que yo no fui―
―No te creo, es más, ya no quiero volver a verte―
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¡Mierda! Otra vez. ¿Por qué últimamente soñaba tanto con él?
Me levanté despacio, estaba bastante agitada y transpirada, tomé una pequeña ducha, me cambié y bajé las escaleras al living.
―Papá― Susurré mientras lo veía tirado en el sillón, tenía una botella de vodka, media vacía en su mano y otras más regadas en el suelo.
Tomé una cobija y lo tape con ella.
―Descansa, papá― Susurré mientras besaba su frente.
La verdad la relación con mi padre era pésima, más después de lo de mi madre, pero no dejaba de ser mi padre.
―¡______!― Escuché el grito en cuanto puse un pie en la acera.
―Amber―
Nos encaminamos al instituto, bueno, yo al instituto, ella a la universidad.
―Tengo un rato libre ¿Te quedas conmigo?― Mencionó Amber haciendo ojos de cordero degollado.
―No, tengo clases―
―Anda, si eres una de las mejores de la clase. Además es biología, a ti te va super bien. Por favor, aquí todos son unos cerebritos, no tengo amigos― Comento de forma dramática
―Ok, vamos― Dije mientras rodaba mis ojos y nos encaminábamos al interior de la universidad.
La verdad era que me iba muy bien en clases, claro menos en los idiomas, pero dejando eso de lado, me iba muy bien en el instituto. En el camino nos encontramos con Rin, la hermana mayor de Ashley y por alguna razón, yo no le caigo bien.
―Las colegialas no pueden estar aquí― Remarcó con su chillona voz mientras meneaba su lacio cabello.
―Me acompaña a mí y yo si estudio aquí. Muévete― Dijo Amber mientras pasábamos por su lado y nos encaminamos al jardín ―Idiota― Murmuró fastidiada viendo a Rin con sus amigas ―¿Por qué dejas que te trate así? Si sigues de tonta, te pasaran por arriba―
―No importa, además no es como si la opinión de Rin fuera muy importante en mi vida―
―Como sea― Dijo rodando sus ojos ―¿Cuidas bien de Zayn? No quiero que la zo- perdón Ashley, se le acerque― Mencionó divertida.
Unos minutos después Amber entró a clases. Como era de esperarse, la clase de biología ya había empezado y me tocó ir al salón. Terminé haciendo la tarea de inglés, materia que por cierto odio.
Flash back
―Ah ¿Qué haces?―
―Te acaricio― Dijo mientras besaba mi cuello y sus manos se adentraron en mi falda ―Me encanta cuando no usas ropa interior― Murmuró contra mi cuello y sentí mi cara arder.
Sus dedos atraparon mi pequeño botón mientras lo pellizcaba y acariciaba mi entrada. Estábamos en casa de Amber, él me había llevado hasta su habitación alegando que teníamos que estar un rato solos. Estaba bastante húmeda y la verdad lo necesitaba, hasta el momento nuestros "juegos" no habían pasado de nivel, pero cada vez sentía que lo necesitaba más y más.
―¿Pero que hacen?― Gritó Tyler abriendo la puerta de golpe y nosotros nos congelamos. Unos minutos más tarde nos encontrábamos en el piso de la habitación de Amber, riéndonos a carcajadas.
End flash back
―Está mal― Susurraron en mi oído.
Di un pequeño brinco en mi propio asiento mientras lo observaba.
―¿Qué te pasa? Me asustaste―
Iba a voltear la cabeza pero me tomó de la mejilla.
―Es "Present Continuos" los verbos regulares terminan en i-n-g― Susurró cerca de mis labios.
Lo conocía, era el chico nuevo ¿Cómo se llamaba?
Harry.
Ayer, poca importancia le había dado, es más la única vez que intente ser amable me dejó con la palabra en la boca y lo peor, Karin ya lo había marcado como su territorio.
Lo miré fijamente, su cabello castaño y ruloso y, a simple vista brilloso y sedoso, caía con elegancia a cada lado de su rostro formando un pequeño flequillo; su piel era más blanca que la mía, firme y cremosa, un rostro varonil y llamativo, labios carnosos y finos a la vez y unos hermosos ojos verdes.
No sé en qué momento sus labios tocaron los míos, intenté resistirme y alejarme pero su mano atrapó mi cabeza, acariciando mis cabellos y ejerciendo más presión en mí, para acercar nuestras bocas. No sé en qué momento comencé a corresponder el beso, solo sé que se sentía muy bien. Sus manos me acariciaban en el lugar exacto, su mano viajó tan adentro de mi falda que rozo mi intimidad; mi "pequeño recuerdo" me había dejado bastante húmeda y este chico era un verdadero dios. Sus brazos eran firmes y musculosos y tenía una espalda muy ancha, abdominales perfectos… por dios Harry Styles era un maldito dios griego. Su mano derecha corrió mi ropa interior ¿En qué momento deje que abriera mis piernas? Estaba por tocarme cuando...
―¡Hazza!―
¡Mierda! Volteé la cabeza, solo para encontrarme con la pelirroja que echaba lumbre por los ojos. Me levante apresurada y me aleje de allí ¡Maldición! Ni siquiera oímos el timbre.
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―Frentezota, oye ¿Qué te paso? Estás muy roja―
―Na-nada Ashley, solo venía corriendo, llegué tarde― Mencioné nerviosa mientras sonreía falsamente.
―Claro, vamos al jardín― Comentó no muy convencida.
Caminamos en silencio y nos sentamos debajo de un frondoso árbol.
―¿Sabes? Este sábado haré una fiesta en mi casa ¿Vendrás temprano ayudarme, cierto?―
―Cierto ¿Quien más te ayudaría?― Mencioné con sarcasmo y recibí un abrazo marca Ashley que casi rompe mi clavícula.
Ash dejó de abrazarme y sus ojos se enfocaron en alguien detrás de mí, di media vuelta y mis ojos chocaron con unos verdes, él sonrió de lado y se alejó.
―Me sonrió, me sonrió― Mencionó Ashley alegre ¡Oh, no! ―Es guapísimo ¿No lo crees―
―Eh, si supongo, no es feo― Murmuré.
―Por dios, frentona ¿Estás ciega? Sabía que tenías mal gusto pero no tanto― Exclamó dramática.
―¡Oye!― Me quejé ―Es solo que el chico, se ve frío y déspota y arrogante, a mi me gustan más románticos y dulces-―
―Y tontos― Me interrumpió.
―Karin, ya lo nombró como su propiedad―
―Me da igual Karin― Dijo frunciendo el ceño ―Como sea, lo invitare a mi fiesta, que suerte tienes frentona, lo tienes al lado―
―Claro― Murmuré.
―¿Crees que vaya?― Preguntó mientras nos encaminábamos al salón.
―No sé, pregúntale―
No pensaba decirle a Ashley lo que había pasado, además no paso nada. Solo un beso. El chico debe tener complejo de superioridad o algo y quiere que todas las mujeres lo veneren. Me da igual, Ashley se encargará de él, lo tendrá en la palma de su mano y ese estúpido beso nunca se sabrá.
El cual por cierto no causo ni el más mínimo efecto en mí.
Evite a Harry todo el día. No es como que el chico me gustara o algo, bueno, Harry estaba muy bueno, ni un ciego podría negarlo, pero sencillamente él no me gustaba, yo ya estaba enamorada y no lo cambiaría por nada.
A parte Ashley ya puso sus ojos en Harry y si en algo es buena mi amiga, es en el amor o por lo menos, en atraer al sexo opuesto, ningún chico se le resiste, es extrovertida, divertida, graciosa, sensual, perfecta, si, Karin tendrá una dura pelea por el chico nuevo.
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―¡¿Dónde estabas?―
―En clase― Susurré mientras entraba a casa.
―Salí temprano esperando encontrar algo de comer y resulta que la señorita no estaba ¡Maldición! Ni para eso sirves, _____―
―Ya te dije que estaba en clase― Murmure arrinconándome en la pared.
Distinguí varias botellas en el piso y sabía que lo que se venía no era bueno.
―¡Ah!― Grité cuando sentí el agarre en mi cabello y me llevo a rastras a la cocina.
―Ahora prepara algo― Siseó entre dientes destellando furia por los ojos y su aliento a alcohol chocó con mi rostro ―Vienen unos amigos y quiero que los atiendas bien ¿Escuchaste?― Yo solo asentí con la cabeza evitando las lágrimas de dolor por los tirones en mi cabello ―¡Cocina!― Gritó mientras me empujaba y mi vientre choco contra la encimera.
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―¡Hazza!―
¡Maldición! Vi la cara furibunda de Karin pero volteé rápido a ver a _____, esta solo agachó la cabeza y salió lo más rápido de la clase, no iba a dejar que se me escapara y salí corriendo detrás de ella.
―Hazza ― Me llamó Karin sosteniendo mi brazo ―¿Qué hacías besándote con el bicho ese?― Reclamo como novia celosa, me solté de mala gana de su agarre y caminé a la puerta ―¡Contéstame!― Gritó mientras volvía a tomar mi brazo.
Di media vuelta rápido y la empotre contra la pared.
―Escucha y escucha bien porque no pienso volver a repetírtelo― Susurré contra su rostro y ella me miró con miedo ―Que hayamos tenido sexo no significa que te metas en mi vida ¿Escuchaste?― Ella solo asintió con miedo ―Bien, nos vemos luego― Murmuré mientras besaba sus labios.
Salí del salón en busca de ______ y la halle con la rubia amiga de ella, vi sus mejillas sonrojarse, seguro recordando el beso y sonreí de lado mientras daba media vuelta.
Me evitó el resto del día, cosa que me frustro por completo pero _____ Black iba a ser mía, como que me llamo Harry Styles.
Al día siguiente ______ no llegó a clases, a nadie pareció sorprenderle que la chica faltara, es más, ni siquiera los profesores preguntaron algo. Me encaminé a mi auto a la salida y me encontré con una "sorpresita" apoyada en mi auto.
―Hola, Harry. Soy Ashley, vamos al mismo salón― Menciono la rubia, incorporándose.
―Hn―
―Bueno― Se apresuró a decir ―El sábado voy a hacer una fiesta en mi casa y... No sé, si te gustaría ir― Susurro lo último tendiéndome una hoja con su dirección.
Una fiesta. Seguro ______ iba, después de todo, ella y la rubia son buenas amigas o algo así.
―Claro, ahí nos vemos― Murmuré mientras abría la puerta del auto y me iba.
Ella solo se quedó callada y sonrojada.
Nuevamente ______ faltó los días siguientes. Por dios, solo había sido un beso, si faltaba por eso, ya me daba cuenta que era una mojigata, sería divertido pervertir a ______ Black.
El sábado llegué hasta la casa de la chica. Era una inmensa casa, se nota su dinero y su posición social. Tenía un enorme jardín, que esta noche funcionaba como estacionamiento. Había varios chicos tirados en el pasto bebiendo, besándose o simplemente durmiendo. Por lo visto la fiesta ya había empezado. La verdad, poco me importaba, por eso había decidido ir tan tarde.
En cuanto ingresé a la amplia casa, el aroma a cigarro, alcohol y droga inundó mis sentidos. Había más gente allí que en todo el instituto. Caminé despacio intentando buscar a ______, esta noche sí que no se me escapaba.
Sentí un pequeño agarre en mi muñeca y pronto me encontraba acorralado contra la pared por una voluptuosa rubia.
―Hazza, me alegro que hayas podido venir― Mencionó bastante ebria mientras acercaba su rostro a mi cuello
―Hn, Ashley ¿Que-― Pero sus labios me interrumpieron, me besó demandante y pasional mientras acariciaba mis brazos y se colgaba de mi cuello.
Nos encaminamos hasta una habitación sin deshacer el beso y entramos. Ella me tiró sobre la cama y comenzó a desvestirse.
―¿Sabes? Me has gustado desde que llegaste pero nunca me hiciste caso― Mencionó con un puchero mientras gateaba sobre mi ―Esta noche no te me escapas, Harold― Ronroneó y comenzó a desprender mi camisa.
Le di media vuelta y sonreí de lado, restregué mi miembro contra su intimidad y ella gimió satisfecha.
―Ah, Harry―
Besé su cuello y fui bajando por sus pechos mientras sentía como sus manos acariciaban mi cabello, pero de un momento a otro sus manos resbalaron por mi espalda hasta caer sobre el colchón, me acerque a su rostro y note que se había quedado dormida; demasiado alcohol. Me quité de encima y me marché.
Bien, ahora a buscar a mi primera opción.
Caminé por los largos y oscuros pasillos. En cuanto llegue al living, donde se desarrollaba la fiesta, había varios chicos compitiendo por quien bebía más y varias chicas se besaban, eso me gustó. La fiesta estaba fuera de control y la verdad no estaba de humor y mucho menos lo suficientemente ebrio como para soportar esta banda de inútiles. La verdad había llegado tarde a la fiesta pensando en que quizás encontraría a ______ media ebria y podría tirármela para dejar de soñar con ella.
La mayoría estaban en un estado deplorable, bebían, vomitaban, se subían sobre las mesas.
Hasta pude ver como Liam se besaba con Karin, por lo visto es cierto, del odio al amor hay un solo paso.
En cuanto salí al jardín la brisa veraniega acaricio mi rostro, estaba completamente vacío, a excepción de alguien acostada en una hamaca paraguaya que se encontraba entre dos espesos árboles. Me acerque despacio, ______ no notó que había llegado, tenía uno de sus brazos por detrás de su cabeza y en el otro una botella de cerveza que apoyaba en su vientre, llevaba unos convers blancos, un simple jean desgastado y una blusa negra manga corta, con estampados de letras blancas y plateadas, estaba sencilla, pero jamás una ropa tan poco provocativa me había excitado tanto.
Se llevó la botella a la boca, su garganta se movió tragando el líquido y una pequeña gota resbalo de entre sus labios por su cuello. Suspiró y volvió a cerrar sus ojos apoyando la cerveza en su vientre.
La verdad había mujeres más hermosas y seductoras que ______ Black, de eso no había duda.
En realidad, la niña era bastante bonita, pero simple y sencilla, digo, no destacaba mucho, no eran sensual, hermosa o provocativa, pero había algo en ella que me atraía demasiado. Me acosté su lado y ella al fin notó mi presencia ¿Por qué era tan distraída?
―¿Qué haces aquí?― Murmuró medio asustada y enfoqué mi vista en sus ojos de un verde tan extraño.
―Hn ¿Por qué faltaste?― Mencioné mientras me acomodaba sobre su pequeño cuerpo, ella corrió la botella y yo puse una pierna entre las suyas y mis manos a cada lado de su cuerpo.
―Me sentía mal― Contestó encogiéndose de hombros ―Ahora, si me disculpas― Murmuro empujándome por el pecho pero yo no me moví ―Muévete―
―No― Le dije mientras sonreía y ella se sorprendió ―No creo que eso sea lo que quieres―
―¿Y qué es lo que quiero según tu?―
―A mi― Le dije para besarla, ella no me correspondió, pero no por eso iba a parar.
______ me traía loco, jamás había soñado esas cosas tantas veces con la misma mujer y jamás había sentido tal atracción por una. Sus labios apenas se movían y ella me empujaba por el pecho, la apreté más contra mí y pronto sentí el frío líquido bañar mi espalda.
―¿Qué haces?― Murmuré enojado mientras sentía la humedad de mi camisa, me había echado la cerveza encima.
―Te dije que te quitaras―
Le saqué la botella de las manos, ella intento resistirse pero al fin se la logre quitar, tome un trago y luego lo vertí en su cuello y su pecho.
―Idiota ¿Qué crees que haces?―
―Apuesto a que de tu piel sabe mejor― Murmure besando su cuello.
Pase mi lengua absorbiendo el frío líquido y la escuche suspirar, subí hasta sus labios y sonreí de lado, ella entrecerró sus ojos, iba a besarla.
―¡Permiso!― Grité empujándome y saliendo corriendo directo al interior de la casa.
¿Qué había sido eso? ¿Cómo se atreve a dejarme así?
Me levanté frustrado de la hamaca y me acerqué a la casa. La mayoría seguía en lo mismo ¡Maldita, niña! Cuando la encontrará iba a ver quién era Harry Styles, oh si, la castigaría la noche entera.
Caminé despacio por los pasillos y subí las escaleras al piso superior, escuché varios gemidos y susurros del interior de las habitaciones, no eran de _____, los conocía, bueno de mis sueños, pero si eran de ella, mataría al idiota que se atreviera a tocarla.
Vi la luz del baño prendida y la puerta semi abierta, la abrí despacio y allí estaba la morena, sentada al lado del inodoro, su espalda estaba apoyada en la pared y sus piernas flexionadas. Se veía pálida y transpirada, su pecho subía y bajaba y sus ojos estaban vidriosos y a medio cerrarse.
―Hola― Murmuró acomodando su desordenado cabello, por lo visto la chica odiaba peinarse.
―Hola― Le contesté sentándome a su lado.
―Deberías irte, esto tomará su tiempo― Murmuró y se volvió rápidamente hasta el inodoro, su vientre se contrajo arrojando todo el líquido alcohólico de su sistema y se mantuvo en la misma posición unos minutos para luego volver a sentarse a mi lado.
―En serio, vete―
―Está bien, la fiesta esta aburrida―
―Tonto― Susurró y nuevamente volvió a meter su cabeza en el inodoro.
No sabía que hacer, así que solo se me ocurrió tomar su cabello evitando que se ensuciara.
―Gracias― Murmuro ―Abajo hay muchas chicas que quieren estar contigo, es más divertido que verme vomitar, anda vete― Susurró sentándose en el frió suelo.
―Ya te dije, la fiesta es una mierda―
―Hmp, como quieras― Susurró cerrando sus ojos.
Apoyó su cabeza en mi hombro y a los pocos minutos se quedó dormida, se veía tan tranquila y pacífica, se veía bastante frágil, su remera se subió a causa de sus movimientos para acomodarse mejor en el incómodo suelo, su piel era muy blanca aunque no tanto como la mía, pero pude ver varios moretones cerca de su cintura, algunos se adentraban en el jean, otros en la blusa oscura. Pasé uno de mis brazos atrayéndola hacia mí y la levanté despacio para acomodarla entre mis piernas. La morena pasó sus brazos por mi cintura y hundió su cabeza en mi cuello. Sentía los acompasados latidos de sus corazón sobre mi pecho, su aliento en mi cuello y sus brazos apretar mi cintura cada vez más fuerte mientras sus piernas se enredaban con las mías.
―Te he estado esperando... Harry― Susurró entre sueños mientras se acomodaba sobre mí.
Sonreí de lado y la abrace más fuerte, la música poco a poco fue cesando, ya de la fiesta solo se oían murmullos y poco a poco me fui quedando dormido.
Holaa! Segundo capítulo!! ^^ Pues si chicos, el padre de _____ no la trata muy bien.. pero todo esto tiene un fondo que se irá descubriendo poco a poco :) Os dejo con la instriga :3 Chaaaau
readergirl
Re: Mariposas (Harry Styles y _____ Black)
magic directioner forever escribió:AAAAAAAAAAAAAAHHHHHHH ME ENCANTO SIGUELA
Ahora pongo el siguiente capítulo ! :) Gracias!
readergirl
CAPÍTULO 3
capítulo III:
―¡Boo!―
―¡Ah! ¡Ashley!― Grité mientras me levantaba de la banca donde la esperaba.
―¿Te asusté?― Preguntó fingiendo inocencia mientras rodeaba la banca y se colocaba a mi lado.
―¿Tú qué crees? ¿Por qué has tardado tanto?― Le pregunté sujetando mi pecho ―¿Mucha resaca?― Mencioné entre risas y ella sonrió de lado.
―Ni te imaginas lo que me pasó anoche― Dijo con una sonrisa pícara.
Y tú tampoco; pensé, esta mañana había despertado entre los brazos de Harry Styles.
―Ven, vamos a comer algo― Dijo Ashley tirando de mi mano.
Y nos alejamos del pequeño parque donde la esperaba. Las luces de las calles comenzaron a prenderse a medida que caía la noche, serían cerca de las siete de la tarde. Pasamos frente a una tienda de vestidos de novia y me quede embobada en la vidriera viendo el hermoso y blanco vestido en el maniquí.
―Chan-chan-chachan― Cantó la marcha nupcial en mi oído Ashley, yo solo lancé una risa baja, algún día me casaría de blanco ―Ven, vamos― Comentó entre risas tirando de mi mano.
Entramos en la enorme tienda y pronto una vendedora se acerco a nosotras.
―Buenas tardes ¿En qué puedo ayudarlas, señoritas?― Comentó una señora de no más de cuarenta años.
―Buenas, mi amiga va a casarse y bueno, queríamos ver algún vestido― Dijo Ashley seria.
―Claro, vengan por aquí― Nos dijo para que la siguiéramos.
―¿Qué haces?― Susurre.
―Siempre miras los vestidos de afuera, ahora te probarás uno― Me respondió en un susurro.
Elegimos un vestido cada una y entramos al mismo probador. Ashley se quitó la ropa poniéndose el hermoso vestido de novia que había elegido y yo hice lo mismo con el mío.
―Wow, ya quiero casarme― Dijo Ashley viéndose en el espejo de cuerpo entero y poniendo sus manos en su cintura, simulando una pose de modelo.
Yo solo lancé una risa baja y acabe de ponerme el vestido.
―Amo ese tatuaje― Dijo Ashley subiendo el cierre del vestido y observando el tatuaje en mi espalda, en el hombro derecho.
Me miré en el espejo, tenía el pelo algo revuelto y atado en una despeinada media cola, los ojos algo cansados, ojeras y estaba algo pálida, típica cara luego de emborracharse, pero de la cabeza para abajo estaba perfecta. El vestido era un hermoso y ajustado corsé, que se ataba al cuello dejando media espalda descubierta, por donde podía observar mi tatuaje: Una mariposa azul con las alas extendidas, como volando.
Debajo era una ancha falda que rozaba el suelo y tenía una delicada tela por encima, el corsé tenía unos delicados bordados en forma de mariposas y algunas pequeñas perlas.
―Estás hermosa, el chico que se case contigo será muy afortunado― Dijo Ash sonriendo sincera.
―Gracias... Mejor vámonos, además ¿Qué le diremos ahora a la vendedora?―
―Tú tranquila― Dijo haciendo un ademán con la mano.
Salimos despacio de los probadores con los vestidos en mano.
―Bien ¿Cuál fue de su agrado?― Dijo la vendedora acercándose a nosotras.
―Este― Dijo Ashley entregándole el vestido que yo me había probado.
―Bien ¿Contado o con tarjeta?―
Yo mire a mi amiga preocupada pero esta solo sonrió de lado.
―Bueno, estuvimos pensando y mi amiga se casa dentro de cinco meses, se casa de apuro. Ud. entiende, está embarazada, así que mejor volvemos cuando le crezca la panza. Muchas gracias, adiós― Dijo dejando una cara desencajada en la vendedora y tirando de mi mano.
Salimos corriendo de la tienda entre risas.
―Estás loca― Asegure mientras reía.
―¿A poco no fue divertido?― Aseguro antes de largarse una carcajada.
Llegamos a un pequeño café y pedimos algo para merendar.
―¡Ayer casi me acuesto con Harry!― Grito Ashley emocionada provocando que todos los que se encontraban en el café voltearán a verla.
―Shh― Dije para que bajara el tono de voz y la idea de contarle lo que paso anoche se me fue completamente ―¿Cómo que casi?―
―Bueno― Dijo revoleando el bizcocho que estaba a punto de llevarse a la boca ―Como casi, casi, me quede dormida a la mitad― Dijo y yo me largue una carcajada ―No te rías―
―Perdón, perdón― Dije más calmada ―Pero ¿Cómo?―
―Bueno ya, tome mucho, no sé, solo nos besamos y cuando estábamos en la cama, me dormí, ni siquiera logre quitarme la ropa―
―Bueno al menos no se aprovecho de ti―
―Eso habla de que es un buen chico― Dijo con ojos soñadores y una pequeña culpa me invadió, yo no buscaba a Harry, era él, pero si le decía a Ash se podía llegar a enojar y eso era lo que menos quería, tendría que hablar muy claro con Styles.
Llegué bastante noche a mi casa, como era costumbre todo estaba tirado, mi padre dormía en el sillón rodeado de botellas. Apagué la televisión y me di una ducha para poder dormirme.
A la mañana siguiente me desperté bastante temprano, me cambié colocándome el uniforme y al bajar mi padre estaba terminando de desayunar y me había dejado servido el desayuno.
―Hola, ______― Me saludó, lo observe unos minutos, estaba sobrio.
―Hola papá― Comenté besando su mejilla.
―Ya debo irme, hoy trabajo hasta tarde así que no me esperes― Esa era la clave para: "Me emborrachare con amigos y espero no verte o descargare toda mi furia en ti".
―De acuerdo papá, cuídate―
―Claro, por cierto, ten― Dijo entregándome un pequeño fajo de billetes ―Para tus cosas, no los gastes todos de una ¿Si?―
―Sí, gracias papá. Adiós― Le dije viéndolo salir por la puerta.
La verdad que mi padre era un caso verdaderamente extraño, cuando no bebía era otra persona, pero era como si el alcohol lo convirtiera en alguien completamente distinto y pasaba de ser un buen padre a ser ese monstruo que me odiaba tan solo por ser parecida a ella.
Terminé mi desayuno y me encaminé al salón de clases, Harry llegó bastante tarde y no me habló en casi todo el día, supongo porque me fui ayer dejándolo solo y dormido.
―Espera― Me dijo cuando me dirigía a la salida del instituto ―Ayer te fuiste y-―
―Si era muy tarde― Lo interrumpí, cosa que no le gusto ya que frunció el ceño ―Igual que ahora, debo irme― Le dije encaminándome a la salida, pero sentí su agarre en mi brazo y pronto me vi entre los casilleros y su cuerpo.
―¿Qué te pasa?―
―¿Qué te pasa a ti?― Me respondió molesto.
―Mira Harry― Hablé más tranquila, quizás así me lo sacaba de encima ―Eres un chico muy guapo y todo― Él sonrió de lado afianzando sus manos en mi cintura ―Pero no me interesas ―Dije y él frunció el ceño ―El beso no significó nada, es más fuiste tú quien me lo dio-―
―Tú me respondiste― Me interrumpió.
―Si, pero era porque estaba confundida― No pude continuar cuando escuche su carcajada resonar por el desolado corredor.
―¿Confundida?―
―Sí, yo, termine hace poco con mi... Novio, así que fue eso, mejor quédate con Ashley. Además ya me enteré que casi estuvieron juntos en la fiesta y-―
―Estás celosa― Dijo sonriendo de medio lado e interrumpiéndome ―Pues Ashley no es mi primera opción, ______― Murmuró cerca de mis labios.
―Yo...― Me perdí observando sus carnosos y apetecibles labios pero reaccioné cuando los vi curvarse en una tonta sonrisa superior ―Lo siento, no me gustas. Será mejor que te mantengas alejado de mi― Dije seria empujándolo y me aleje a toda prisa de él.
Harry solo se mantuvo callado con el entrecejo fruncido y dejó de hablarme y buscarme el resto de la semana.
Así era mejor, Ashley estaba realmente enganchada con Harry y yo no estaba interesada en él. Con el pasar de los días Ash consiguió una cita con Harry, él no volvió ni siquiera a mirarme.
El viernes fui a casa de Ashley a ayudarla a escoger la ropa que usaría para su cita con Styles. Después de eso volví a mi casa a paso lento, la casa de Ashley quedaba bastante lejos por lo que debía tomarme un autobús que me dejaba a siete cuadras de mi casa.
―¿Papá?― Llame en cuanto ingrese a mi casa totalmente a oscuras, era muy extraño ―¿Papá?―
―¿Dónde estabas? ¡Maldita sea!― El grito resonó por toda la habitación mientras veía su imponente figura acercarse a paso lento a mí.
―Yo... Yo estaba en casa de Ashley ¿Recuerdas? Te pedí permiso antes de irme― Dije temerosa caminando hacia atrás.
―Mentira― Aseguro ya más cerca de mi y volví a dar unos pasos hacia atrás ―Mentirosa, estabas con él― Mi espalda choco con la pared. ―Maldita, prostituta barata― Sentí su aliento alcohólico chocar con mi rostro.
―Papá-―
―¡No me digas así!―Me interrumpió sujetándome del cabello con fuerza ―Estabas con él, Elisabeth― Aseguró y nuevamente me confundió con mi madre.
―No, yo no, soy ______ papá― Le dije llorando y sentí el impacto al ser tirada con fuerza contra el suelo ―Papá― Susurre poniéndome de pie y su puño impacto en mi mejilla.
―¡Mientes! ¡Estabas con él, perra!― Gritó pateándome en el estómago ―Gastando mi dinero con él― Una nueva patada se incrustó en mi vientre, lo sujete con ambas manos mientras me arrollaba en el piso de dolor.
―¿Por quién me tomas, Elisabeth?― Nuevamente su pie impacto en mi espalda, me arrastre por el suelo escupiendo sangre mientras escuchaba sus insultos.
―No, papá, no― Dije sujetándome del sillón e intentando ponerme en pie ―Estaba con Ashley―
―¡Mentirosa!― Grito intentando acercarse pero su estado de ebriedad afectaba su estabilidad.
Corrí lo más rápido que pude a la salida, escuchando sus insultos de fondo pero no me importó, siempre era lo mismo, me confundía con mi madre y luego de una de sus borracheras me daba una paliza.
Me sostuve de la pared más cercana cuando una punzada traspaso mi estómago y me arrolle en el suelo intentando en vano calmar ese insoportable dolor que sentía en el vientre. Ya era bastante tarde y estaba bastante alejada de mi casa, la calle estaba desolada y había muy poca iluminación, respire muy lentamente ya que me dolía hacerlo y sentí el tibio líquido bajar por mi boca y mojar mi cuello.
―_______― Escuche una voz masculina de fondo, intente levantar la cabeza pero solo logre ver borroso y apenas distinguí una figura masculina arrodillarse a mi lado.
―¿______, qué te ocurrió?― Dijo sujetando mi mentón.
―Na... Nada― Susurre.
Él me tomo en brazos y me depositó en algo suave, pronto descubrí que era su auto, intente abrir mis ojos, intente ver quién era, pero termine desmaya en el auto de un desconocido.
Abrí los ojos despacio encontrándome con una amplia y ordenada habitación, estaba sobre una cama de dos plazas, tapada con unas mantas. Me levanté despacio sintiendo el dolor al sentarme, las mantas rodaron por mi cuerpo dejando mi torso al descubierto, no llevaba mi ropa, llevaba una camisa de hombre color roja y un varonil perfume inundaba mis fosas nasales, levante un poco el cuello de la camisa y cerré los ojos sintiendo el aroma masculino que ya conocía a la perfección.
―Ya despertaste― Pegue un pequeño salto al sentir su voz tan cerca.
―¿Qué hago aquí?― Dije volteando mi rostro y encontrándome con sus verdosos y filosos ojos.
Se sentó a mi lado y acaricio mi mejilla, justo donde tenía el golpe. Él me había cambiado de ropa y seguro había visto todas mis cicatrices, mejor, así ya no le gustaría tanto.
―Te encontré media desmayada en medio de la calle ¿Qué te ocurrió?― Dijo con su tono frío y característico.
―Yo... Lo siento, Harry... Me robaron―
―Hn ¿Estás bien?― Preguntó preocupado y yo solo asentí despacio con la cabeza.
―¿Quien me cambió de ropa?― Él solo sonrió de lado y se acerco más a mi ―Harry-― No pude continuar ya que sus labios sellaron los míos, era un beso lento y delicado como si no quisiera lastimarme.
―Será mejor que te lleve a tu casa― Dijo levantándose de la cama.
―¡No!― Él me miro sorprendido por mi grito ―Digo... No quiero preocupar a mi padre ¿Me puedo quedar a dormir aquí?― Pregunte en un susurro y lo vi sonreír arrogante.
―Pero tendrás que dormir conmigo, si mis padres se enteran que traje una chica a dormir me pedirán explicaciones y jamás se las he dado, no empezaré ahora― Dijo sentándose a mi lado, yo solo lo mire sorprendida, no quería dormir en la misma cama con él ―No te haré nada― Aseguró quitándose la ropa ―Por ahora― Susurro entrando al baño.
Yo me recosté en la cama, sintiendo su perfume rodearme, todo estaba a oscuras y lo único que iluminaba la estancia era la luz de la luna que se colaba por la ventana, a los minutos Harry salió del baño, llevaba solo el pantalón pijama y su trabajado torso al descubierto, abrió las mantas y se acostó a mi lado.
―¿Cada cuando te roban?― Dijo mirándome fijamente y entre la penumbra distinguí esos ojos únicos que solo él tiene.
―¿Ah?―
―Tienes demasiadas cicatrices en todo el cuerpo ¿De qué son?―
―Son... De cuando era niña, era bastante torpe y-―
―¿Soy idiota?― Me interrumpió con el ceño fruncido
―No― Conteste confundida.
―Mejor no digas nada― Dijo y nos sumimos en un silencio sepulcral.
―Tu cita― Dije de golpe y él me miro detenidamente ―Tú tenías una cita con Ashley―
―Tenía― Repitió ―No iba dejarte allí tirada, así que le cancele―
Genial, por mi culpa Ashley había perdido su cita con Styles.
―No pongas esa cara, cerecito, no estoy enojado por lo que dijiste el otro día, tu amiga no me interesa― Dijo cerca de mis labios, se acercó a besarme pero me di media vuelta, dándole la espalda.
―Tú a mi tampoco, mejor quédate con ella― Él solo lanzo una risa baja y paso su brazo por mi cintura atrayéndome a su cuerpo.
―Di lo que quieras pero si no te interesara no responderías a mis besos ―Susurró cerca de mi oído y acariciando mi vientre ―Tranquila, no te haré nada― Volvió a susurrar cerca de mi oído.
―Harry-―
―Duerme― Me interrumpió ―Mejor duérmete, mañana todo será mejor―
Eso era lo que decía mi madre luego de que mi padre la golpeaba.
Mañana todo será mejor.
Pero lamentablemente jamás lo fue.
Holaaa! :D Esto ya empieza a ponerse interesante! :ilusion: Que le pasará a Hazza con esta chica??
Sé que es una historia un poco liosa pero cada punto se irá resolviendo con el tiempo y el paso de los capítulos, lo prometo :) De momento, disfrutad del tercer cap! besos
.
.
MARIPOSAS
.
.
Mañana todo será mejor
.
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.
MARIPOSAS
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.
Mañana todo será mejor
.
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―¡Boo!―
―¡Ah! ¡Ashley!― Grité mientras me levantaba de la banca donde la esperaba.
―¿Te asusté?― Preguntó fingiendo inocencia mientras rodeaba la banca y se colocaba a mi lado.
―¿Tú qué crees? ¿Por qué has tardado tanto?― Le pregunté sujetando mi pecho ―¿Mucha resaca?― Mencioné entre risas y ella sonrió de lado.
―Ni te imaginas lo que me pasó anoche― Dijo con una sonrisa pícara.
Y tú tampoco; pensé, esta mañana había despertado entre los brazos de Harry Styles.
―Ven, vamos a comer algo― Dijo Ashley tirando de mi mano.
Y nos alejamos del pequeño parque donde la esperaba. Las luces de las calles comenzaron a prenderse a medida que caía la noche, serían cerca de las siete de la tarde. Pasamos frente a una tienda de vestidos de novia y me quede embobada en la vidriera viendo el hermoso y blanco vestido en el maniquí.
―Chan-chan-chachan― Cantó la marcha nupcial en mi oído Ashley, yo solo lancé una risa baja, algún día me casaría de blanco ―Ven, vamos― Comentó entre risas tirando de mi mano.
Entramos en la enorme tienda y pronto una vendedora se acerco a nosotras.
―Buenas tardes ¿En qué puedo ayudarlas, señoritas?― Comentó una señora de no más de cuarenta años.
―Buenas, mi amiga va a casarse y bueno, queríamos ver algún vestido― Dijo Ashley seria.
―Claro, vengan por aquí― Nos dijo para que la siguiéramos.
―¿Qué haces?― Susurre.
―Siempre miras los vestidos de afuera, ahora te probarás uno― Me respondió en un susurro.
Elegimos un vestido cada una y entramos al mismo probador. Ashley se quitó la ropa poniéndose el hermoso vestido de novia que había elegido y yo hice lo mismo con el mío.
―Wow, ya quiero casarme― Dijo Ashley viéndose en el espejo de cuerpo entero y poniendo sus manos en su cintura, simulando una pose de modelo.
Yo solo lancé una risa baja y acabe de ponerme el vestido.
―Amo ese tatuaje― Dijo Ashley subiendo el cierre del vestido y observando el tatuaje en mi espalda, en el hombro derecho.
Me miré en el espejo, tenía el pelo algo revuelto y atado en una despeinada media cola, los ojos algo cansados, ojeras y estaba algo pálida, típica cara luego de emborracharse, pero de la cabeza para abajo estaba perfecta. El vestido era un hermoso y ajustado corsé, que se ataba al cuello dejando media espalda descubierta, por donde podía observar mi tatuaje: Una mariposa azul con las alas extendidas, como volando.
Debajo era una ancha falda que rozaba el suelo y tenía una delicada tela por encima, el corsé tenía unos delicados bordados en forma de mariposas y algunas pequeñas perlas.
―Estás hermosa, el chico que se case contigo será muy afortunado― Dijo Ash sonriendo sincera.
―Gracias... Mejor vámonos, además ¿Qué le diremos ahora a la vendedora?―
―Tú tranquila― Dijo haciendo un ademán con la mano.
Salimos despacio de los probadores con los vestidos en mano.
―Bien ¿Cuál fue de su agrado?― Dijo la vendedora acercándose a nosotras.
―Este― Dijo Ashley entregándole el vestido que yo me había probado.
―Bien ¿Contado o con tarjeta?―
Yo mire a mi amiga preocupada pero esta solo sonrió de lado.
―Bueno, estuvimos pensando y mi amiga se casa dentro de cinco meses, se casa de apuro. Ud. entiende, está embarazada, así que mejor volvemos cuando le crezca la panza. Muchas gracias, adiós― Dijo dejando una cara desencajada en la vendedora y tirando de mi mano.
Salimos corriendo de la tienda entre risas.
―Estás loca― Asegure mientras reía.
―¿A poco no fue divertido?― Aseguro antes de largarse una carcajada.
Llegamos a un pequeño café y pedimos algo para merendar.
―¡Ayer casi me acuesto con Harry!― Grito Ashley emocionada provocando que todos los que se encontraban en el café voltearán a verla.
―Shh― Dije para que bajara el tono de voz y la idea de contarle lo que paso anoche se me fue completamente ―¿Cómo que casi?―
―Bueno― Dijo revoleando el bizcocho que estaba a punto de llevarse a la boca ―Como casi, casi, me quede dormida a la mitad― Dijo y yo me largue una carcajada ―No te rías―
―Perdón, perdón― Dije más calmada ―Pero ¿Cómo?―
―Bueno ya, tome mucho, no sé, solo nos besamos y cuando estábamos en la cama, me dormí, ni siquiera logre quitarme la ropa―
―Bueno al menos no se aprovecho de ti―
―Eso habla de que es un buen chico― Dijo con ojos soñadores y una pequeña culpa me invadió, yo no buscaba a Harry, era él, pero si le decía a Ash se podía llegar a enojar y eso era lo que menos quería, tendría que hablar muy claro con Styles.
Llegué bastante noche a mi casa, como era costumbre todo estaba tirado, mi padre dormía en el sillón rodeado de botellas. Apagué la televisión y me di una ducha para poder dormirme.
A la mañana siguiente me desperté bastante temprano, me cambié colocándome el uniforme y al bajar mi padre estaba terminando de desayunar y me había dejado servido el desayuno.
―Hola, ______― Me saludó, lo observe unos minutos, estaba sobrio.
―Hola papá― Comenté besando su mejilla.
―Ya debo irme, hoy trabajo hasta tarde así que no me esperes― Esa era la clave para: "Me emborrachare con amigos y espero no verte o descargare toda mi furia en ti".
―De acuerdo papá, cuídate―
―Claro, por cierto, ten― Dijo entregándome un pequeño fajo de billetes ―Para tus cosas, no los gastes todos de una ¿Si?―
―Sí, gracias papá. Adiós― Le dije viéndolo salir por la puerta.
La verdad que mi padre era un caso verdaderamente extraño, cuando no bebía era otra persona, pero era como si el alcohol lo convirtiera en alguien completamente distinto y pasaba de ser un buen padre a ser ese monstruo que me odiaba tan solo por ser parecida a ella.
Terminé mi desayuno y me encaminé al salón de clases, Harry llegó bastante tarde y no me habló en casi todo el día, supongo porque me fui ayer dejándolo solo y dormido.
―Espera― Me dijo cuando me dirigía a la salida del instituto ―Ayer te fuiste y-―
―Si era muy tarde― Lo interrumpí, cosa que no le gusto ya que frunció el ceño ―Igual que ahora, debo irme― Le dije encaminándome a la salida, pero sentí su agarre en mi brazo y pronto me vi entre los casilleros y su cuerpo.
―¿Qué te pasa?―
―¿Qué te pasa a ti?― Me respondió molesto.
―Mira Harry― Hablé más tranquila, quizás así me lo sacaba de encima ―Eres un chico muy guapo y todo― Él sonrió de lado afianzando sus manos en mi cintura ―Pero no me interesas ―Dije y él frunció el ceño ―El beso no significó nada, es más fuiste tú quien me lo dio-―
―Tú me respondiste― Me interrumpió.
―Si, pero era porque estaba confundida― No pude continuar cuando escuche su carcajada resonar por el desolado corredor.
―¿Confundida?―
―Sí, yo, termine hace poco con mi... Novio, así que fue eso, mejor quédate con Ashley. Además ya me enteré que casi estuvieron juntos en la fiesta y-―
―Estás celosa― Dijo sonriendo de medio lado e interrumpiéndome ―Pues Ashley no es mi primera opción, ______― Murmuró cerca de mis labios.
―Yo...― Me perdí observando sus carnosos y apetecibles labios pero reaccioné cuando los vi curvarse en una tonta sonrisa superior ―Lo siento, no me gustas. Será mejor que te mantengas alejado de mi― Dije seria empujándolo y me aleje a toda prisa de él.
Harry solo se mantuvo callado con el entrecejo fruncido y dejó de hablarme y buscarme el resto de la semana.
Así era mejor, Ashley estaba realmente enganchada con Harry y yo no estaba interesada en él. Con el pasar de los días Ash consiguió una cita con Harry, él no volvió ni siquiera a mirarme.
El viernes fui a casa de Ashley a ayudarla a escoger la ropa que usaría para su cita con Styles. Después de eso volví a mi casa a paso lento, la casa de Ashley quedaba bastante lejos por lo que debía tomarme un autobús que me dejaba a siete cuadras de mi casa.
―¿Papá?― Llame en cuanto ingrese a mi casa totalmente a oscuras, era muy extraño ―¿Papá?―
―¿Dónde estabas? ¡Maldita sea!― El grito resonó por toda la habitación mientras veía su imponente figura acercarse a paso lento a mí.
―Yo... Yo estaba en casa de Ashley ¿Recuerdas? Te pedí permiso antes de irme― Dije temerosa caminando hacia atrás.
―Mentira― Aseguro ya más cerca de mi y volví a dar unos pasos hacia atrás ―Mentirosa, estabas con él― Mi espalda choco con la pared. ―Maldita, prostituta barata― Sentí su aliento alcohólico chocar con mi rostro.
―Papá-―
―¡No me digas así!―Me interrumpió sujetándome del cabello con fuerza ―Estabas con él, Elisabeth― Aseguró y nuevamente me confundió con mi madre.
―No, yo no, soy ______ papá― Le dije llorando y sentí el impacto al ser tirada con fuerza contra el suelo ―Papá― Susurre poniéndome de pie y su puño impacto en mi mejilla.
―¡Mientes! ¡Estabas con él, perra!― Gritó pateándome en el estómago ―Gastando mi dinero con él― Una nueva patada se incrustó en mi vientre, lo sujete con ambas manos mientras me arrollaba en el piso de dolor.
―¿Por quién me tomas, Elisabeth?― Nuevamente su pie impacto en mi espalda, me arrastre por el suelo escupiendo sangre mientras escuchaba sus insultos.
―No, papá, no― Dije sujetándome del sillón e intentando ponerme en pie ―Estaba con Ashley―
―¡Mentirosa!― Grito intentando acercarse pero su estado de ebriedad afectaba su estabilidad.
Corrí lo más rápido que pude a la salida, escuchando sus insultos de fondo pero no me importó, siempre era lo mismo, me confundía con mi madre y luego de una de sus borracheras me daba una paliza.
Me sostuve de la pared más cercana cuando una punzada traspaso mi estómago y me arrolle en el suelo intentando en vano calmar ese insoportable dolor que sentía en el vientre. Ya era bastante tarde y estaba bastante alejada de mi casa, la calle estaba desolada y había muy poca iluminación, respire muy lentamente ya que me dolía hacerlo y sentí el tibio líquido bajar por mi boca y mojar mi cuello.
―_______― Escuche una voz masculina de fondo, intente levantar la cabeza pero solo logre ver borroso y apenas distinguí una figura masculina arrodillarse a mi lado.
―¿______, qué te ocurrió?― Dijo sujetando mi mentón.
―Na... Nada― Susurre.
Él me tomo en brazos y me depositó en algo suave, pronto descubrí que era su auto, intente abrir mis ojos, intente ver quién era, pero termine desmaya en el auto de un desconocido.
Abrí los ojos despacio encontrándome con una amplia y ordenada habitación, estaba sobre una cama de dos plazas, tapada con unas mantas. Me levanté despacio sintiendo el dolor al sentarme, las mantas rodaron por mi cuerpo dejando mi torso al descubierto, no llevaba mi ropa, llevaba una camisa de hombre color roja y un varonil perfume inundaba mis fosas nasales, levante un poco el cuello de la camisa y cerré los ojos sintiendo el aroma masculino que ya conocía a la perfección.
―Ya despertaste― Pegue un pequeño salto al sentir su voz tan cerca.
―¿Qué hago aquí?― Dije volteando mi rostro y encontrándome con sus verdosos y filosos ojos.
Se sentó a mi lado y acaricio mi mejilla, justo donde tenía el golpe. Él me había cambiado de ropa y seguro había visto todas mis cicatrices, mejor, así ya no le gustaría tanto.
―Te encontré media desmayada en medio de la calle ¿Qué te ocurrió?― Dijo con su tono frío y característico.
―Yo... Lo siento, Harry... Me robaron―
―Hn ¿Estás bien?― Preguntó preocupado y yo solo asentí despacio con la cabeza.
―¿Quien me cambió de ropa?― Él solo sonrió de lado y se acerco más a mi ―Harry-― No pude continuar ya que sus labios sellaron los míos, era un beso lento y delicado como si no quisiera lastimarme.
―Será mejor que te lleve a tu casa― Dijo levantándose de la cama.
―¡No!― Él me miro sorprendido por mi grito ―Digo... No quiero preocupar a mi padre ¿Me puedo quedar a dormir aquí?― Pregunte en un susurro y lo vi sonreír arrogante.
―Pero tendrás que dormir conmigo, si mis padres se enteran que traje una chica a dormir me pedirán explicaciones y jamás se las he dado, no empezaré ahora― Dijo sentándose a mi lado, yo solo lo mire sorprendida, no quería dormir en la misma cama con él ―No te haré nada― Aseguró quitándose la ropa ―Por ahora― Susurro entrando al baño.
Yo me recosté en la cama, sintiendo su perfume rodearme, todo estaba a oscuras y lo único que iluminaba la estancia era la luz de la luna que se colaba por la ventana, a los minutos Harry salió del baño, llevaba solo el pantalón pijama y su trabajado torso al descubierto, abrió las mantas y se acostó a mi lado.
―¿Cada cuando te roban?― Dijo mirándome fijamente y entre la penumbra distinguí esos ojos únicos que solo él tiene.
―¿Ah?―
―Tienes demasiadas cicatrices en todo el cuerpo ¿De qué son?―
―Son... De cuando era niña, era bastante torpe y-―
―¿Soy idiota?― Me interrumpió con el ceño fruncido
―No― Conteste confundida.
―Mejor no digas nada― Dijo y nos sumimos en un silencio sepulcral.
―Tu cita― Dije de golpe y él me miro detenidamente ―Tú tenías una cita con Ashley―
―Tenía― Repitió ―No iba dejarte allí tirada, así que le cancele―
Genial, por mi culpa Ashley había perdido su cita con Styles.
―No pongas esa cara, cerecito, no estoy enojado por lo que dijiste el otro día, tu amiga no me interesa― Dijo cerca de mis labios, se acercó a besarme pero me di media vuelta, dándole la espalda.
―Tú a mi tampoco, mejor quédate con ella― Él solo lanzo una risa baja y paso su brazo por mi cintura atrayéndome a su cuerpo.
―Di lo que quieras pero si no te interesara no responderías a mis besos ―Susurró cerca de mi oído y acariciando mi vientre ―Tranquila, no te haré nada― Volvió a susurrar cerca de mi oído.
―Harry-―
―Duerme― Me interrumpió ―Mejor duérmete, mañana todo será mejor―
Eso era lo que decía mi madre luego de que mi padre la golpeaba.
Mañana todo será mejor.
Pero lamentablemente jamás lo fue.
Holaaa! :D Esto ya empieza a ponerse interesante! :ilusion: Que le pasará a Hazza con esta chica??
Sé que es una historia un poco liosa pero cada punto se irá resolviendo con el tiempo y el paso de los capítulos, lo prometo :) De momento, disfrutad del tercer cap! besos
readergirl
CAPITULO 4.
Aviso: en este cap hay escena de sexo.
capítulo IV:
―Mamá... Mamá―
Abrí los ojos lentamente, sentí ese aroma a cerezos y canela impregnar en mi nariz y ese peso extra sobre mi abdomen, cuando pude enfocar la vista, la vi. _______.
―Mamá―
Se removía inquieta mientras me abrazaba con más fuerza, su rostro se contrajo en una mueca de dolor y angustia.
―Mamá― Volvió a gemir.
―_____... _____ despierta― La llame moviéndola levemente.
―¿Harry?― Dijo abriendo los ojos lentamente.
―¿Estás bien? Parecías tener una pesadilla―
―Estoy bien― Murmuro agachando la cabeza.
―Quédate aquí, subiré algo de comer―
―No, yo... Ya debo irme― Dijo levantándose de apuro, tomo su ropa y se encerró en el baño.
Me senté en la cama mientras apoyaba mis codos en mis piernas y agachaba la cabeza, no sé por qué razón esta niña me atrae tanto, es tan... Tierna y distinta, estoy consciente que en cuanto pueda tenerla en mi cama, no como la tuve anoche, esta atracción que siento por ella desaparecerá.
―Harry― Levante la cabeza encontrándome con Kin demasiado cerca de mí.
¿Cómo entró sin que la escuchara?
Observe la puerta del baño, _____ aún seguía allí.
―¿Qué haces aquí?―
―Has estado actuando extraño estos últimos días, no hemos podido "jugar"― Susurró sensual cerca de mi oído mientras se inclinaba para quedar a mi altura y mostrarme el inicio de sus senos.
―Yo... Mejor vete, estoy muy ocupado― Murmuré levantándome y ella dio unos pasos para atrás.
―Harry-―
―Que te vayas― La interrumpí, no quería que_____ la viera y mucho menos que Kin viera a ______.
Sabía cómo era Kin y no pensaba exponer a ______ ante una persona como ella. Kin solo bufó enojada y salió enfurruñada de mi cuarto, en cuanto la puerta se cerró ______ salió del baño ya vestida y arreglada.
―¿Te acuestas con tu prima?― Murmuro acercándose a mi ―Eso es enfermo―
―No lo hago― Dije rápido ―A veces, solo, jugamos, ya sabes― Ella solo sonrió de lado.
―Como quieras― Susurro colocándose las convers.
Agarré algo de ropa y me metí en el baño, me di una ligera ducha y cuando salí ______ estaba tendiendo la cama.
―No tienes que hacer eso, la empleada lo hará―
―No me molesta―
―Tú eres molesta― Ella solo entrecerró los ojos intentando en vano intimidarme.
―¿Cómo me voy?―
―Ven― Dije tomándola de la mano.
Salimos despacio del cuarto y llegamos al garaje. Encendí el auto y nos marchamos de mi casa.
―¿Te llevo a tu casa o quieres hacer algo?―
―¿Y ese algo, que sería?― Dijo ella mientras reía
Yo solo sonreí de lado y la lleve a desayunar a una cafetería, pasamos casi todo el día juntos, no sé por qué razón ______ me llama tanto la atención, es molesta y cargosa y un tanto bipolar, pero cada vez que estoy con ella no quiero dejarla ir, es como si quisiera conocerla, saber que ocurre con ella, que piensa, porque es así, tan distraída, a veces pareciera que se encerrará en su mundo y dejará a todos afuera.
―Bien, aquí es mi casa― Susurro quitándose el cinturón de seguridad ―Gracias por traerme y... Gracias por el peluche― Dijo haciendo ademán con el pequeño gato, que le había comprado cuando fuimos al parque de diversiones.
―De nada― Dije, la vi abrir la puerta ―______― La llamé.
―¿Qué-―
No deje que continuara solo la agarre de la nuca y la besé, ella se sorprendió pero en menos de un minuto ya me estaba correspondiendo, sus manos soltaron el peluche y subieron a mis hombros mientras la apretaba más contra mi cuerpo abrazándola de la cintura. Al separarnos apoye mi frente contra la suya y sonreí de lado cuando vi su bonito rostro sonrojado y jadeando.
―Nos vemos en el instituto, molesta― Susurré, ella solo asintió aún atontada por el beso, espere a que entrará a su casa y me marche.
.
.
―Harry ¿Donde estuviste todo el día?― Mencionó mi madre en cuanto cruce la puerta de entrada.
―Salí― Contesté secamente.
―¿Con una chica?― Pregunto Kin con picardía.
―Oh por dios mi niño tiene novia― Chilló mi madre emocionada.
―No, yo... Salí con unos amigos. No tengo hambre, me voy a acostar― Murmure subiendo las escaleras.
―A mi no me engañas, sé que saliste con una chica, Harry― Me reclamó mi "primita" antes de poder entrar en mi habitación.
―¿Y si así fuera, qué?― Ella solo me miro indignada y se cruzo de brazos. No sabía a qué venía esta estúpida escena de celos.
―Averiguaré quien es―
―Haz lo que quieras― Murmuré entrando en mi habitación y cerrando la puerta detrás de mí.
.
.
.
―Dicen que las mariposas son las almas de los niños― Susurró mi madre mientras una hermosa mariposa se posaba en su dedo índice. ―Sabes... Si le cuentas tu deseo a una mariposa, ella lo llevará al cielo y te lo hará realidad―
―¿En serio?― Susurré emocionada, no tendría más de cuatro años.
―En serio― Susurró ella asintiendo con la cabeza mientras soltaba la mariposa y esta volaba al cielo.
―¡ Elisabeth! ¡ Elisabeth! ¿Dónde mierda estás metida?― Escuchamos el grito de mi padre desde la planta baja.
―Quédate aquí, cariño― Dijo mi madre mientras entraba por la ventana a mi habitación y bajaba a la planta baja.
Yo solo me quedé sentada en el tejado de mi casa, escuché sus gritos y sus insultos, mis padres siempre se habían llevado así y desconocía el porqué. Mi padre siempre tomaba demasiado, le gritaba y decía cosas hirientes, incluso muchas veces llego a golpearla, mi madre siempre que me veía sonreía y decía que solo eran simples peleas pero a mi corta edad yo sabía que no.
Una hermosa mariposa de un extraño color azul se poso en mi dedo índice, cerré los ojos y desee con todas mis fuerzas.
―Quiero que mi mamá sea feliz―
Y lo fue, solo que no conmigo.
.
.
Desperté de golpe mientras el celular seguía sonando, era lunes, debía ir a clases. Intente borrar ese tonto sueño de mi cabeza y me levante despacio. Me di una ducha y me coloqué el uniforme. Amber pasó por mí y me acompaño al instituto.
―Frentezota― Lloriqueó Ashley mientras se sentaba en mi mesa, el profesor aún no había llegado ―Harry me canceló― Chilló y una fuerte culpa me embargó.
―Yo, hay Ash lo siento― Dije sin querer.
―¿Por qué?―
―Es que-―
―Permiso― Escuchamos su varonil voz detrás de Ashley.
Al voltear allí se encontraba Harry, con su típica pose, tan arrogante y superior como de costumbre.
―Hola, Harry― Saludo Ashley sonrojada mientras se levantaba de la mesa.
El profesor entró a los minutos y todos nos fuimos a sentar.
―¿Le ibas a contar a Ashley lo que pasó el viernes?― Me susurró Harry evitando que los demás o el profesor escucharan.
―Yo... No lo sé ¿Tú sí?―
―No― Contesto serio y volvió a prestar atención a la clase.
.
.
―¿Papá? ¿Papá?― Grite mientras entraba a casa, ya era bastante tarde.
Ashley había insistido en almorzar juntas con Danielle y no pude negarme. Supuse que como de costumbre mi padre estaría emborrachándose, me quité el uniforme colocándome el pijama, una blusa manga tres cuartos, negra, un short blanco y una bata rosada larga por el tobillo, que deje desatada y me quede descalza, amaba andar descalza.
El sonido del timbre me despertó de mi pequeña siesta, observe el reloj; las nueve y media, de seguro era mi padre que no podía poner la llave en la cerradura. Camine despacio a la puerta y la abrí sin siquiera ver quién era.
―¿Qué haces aquí?―
―Al menos invítame a pasar, molesta― Dijo con su tono arrogante y paso sin que lo invitará.
―Escucha Harry-―
―Ya cálmate― Me interrumpió ―Solo venía a ver qué estuvieras bien― Dijo sentándose en el sillón.
―¿Y eso?―
―Por lo del viernes―
―Pues estoy bien― Contesté seca mientras me sentaba a su lado en el sillón.
Estuvimos unos minutos en silencio, lo único que escuchaba era el sonido de la televisión.
―¿Me puedes decir que haces aquí? Pero la verdad― Dije rompiendo el silencio y el rodó los ojos y sonrió de lado.
―Bien... Yo vine para esto― Dijo y en menos de un minuto sentí sus labios chocar los míos.
No quería corresponderle pero besaba demasiado bien, sus labios se movían despacio y lento y su lengua acariciaba mi labio inferior buscando acceso a mi boca, estuvimos besándonos unos minutos mientras sentía sus manos colarse por mi blusa y acariciar mi espalda desnuda, yo por mi parte solo acariciaba su torso por sobre la camisa.
―¿Tu cuarto?― Dijo cortando el beso.
―Arriba― Señalé con mi mano mientras intentaba recuperar la respiración.
Volvió a besarme e hizo que enredara mis piernas en sus caderas mientras subíamos las escaleras. Me bajo en el pasillo y lo guíe hasta mi dormitorio. Cerró la puerta de un portazo y me tomo de la muñeca tirando de ella y haciendo que me impactará contra su cuerpo.
Me quitó la bata despacio mientras me empujaba hacia atrás, mis piernas chocaron con el borde de la cama, su boca pasó a mi cuello y sus manos se colaron por dentro de la blusa acariciando mis senos desnudos, por mi parte le logre quitar la camisa y los pantalones. Harry me quito la blusa y me tiro en la cama acomodándose sobre mí y me sonroje al ver la forma tan descarada en que miraba mis senos.
―Son tan hermosos― Susurró justo antes de meterse uno en la boca.
Lo succiono varias veces, dibujando círculos alrededor del pezón mientras acariciaba el otro con su mano.
―Harry― Gemí cuando una de sus manos bajo de mi pecho a mis pequeños short y se metieron dentro de mi ropa interior estimulando mi clítoris.
Jamás había sentido tanto placer en mis diecisiete años, cambie los papeles con un leve movimiento y rodamos en la cama, ahora me encontraba sobre él, mis piernas a cada lado de su cuerpo, sintiendo como su miembro se erectaba contra la fina tela de mi short.
Fui bajando despacio por su pecho dejando pequeños besos y mordiscos y le quite los boxers, tome su miembro entre mis manos y pase mi lengua por la punta. Harry solo echó la cabeza para atrás mientras apretaba sus labios evitando gemir, en ese momento olvide todo, sentía algo muy extraño por Harry, físico o no, lo quería y quería estar con él.
Metí su miembro en mi boca mientras lo succionaba lenta y profundamente y con mi mano acariciaba su testículos, Harry abrió más las piernas permitiéndome acomodarme mejor entre ella y enrosco su mano en mi cabeza marcando el ritmo que quería que siguiera, escuchaba sus roncos gemidos cargados de pasión que solo me estaba dedicando a mí, aumente el ritmo sintiendo como su miembro aumentaba de temperatura y Harry jadeaba más rápido y pronto se corrió en mi boca, dejando ese sabor pastoso y agrio en mi garganta, me tomó de los brazos y me subió hasta quedar acostada sobre su pecho, me tomo de la nuca y me beso, pero fue un beso distinto, más calmado, no pasional o lujuriosos sino cariñoso y tierno.
Nuevamente cambiamos de posiciones y sus manos recorrieron mi cuerpo llegando hasta la parte inferior.
―Estás muy húmeda, ______― Susurró cerca de mi oído y luego pasó la lengua por el lóbulo y lo mordió.
―Ah, Harry―
Mi gemido solo logró excitarlo de nuevo, me quitó la poca ropa que me quedaba de un tirón y se acomodó entre mis piernas, tomó un preservativo y se lo colocó. Me miró directo a los ojos y sonrió, pero esa sonrisa no era arrogante o cargada de orgullo y prepotencia sino una sonrisa sincera, tierna, depositó un casto beso en mis labios y sentí su miembro rozar mi entrada, una corriente eléctrica recorrer mi espalda. Susurró algo en mi oído que no logre escuchar y poco a poco su miembro fue entrando en mí, sentí un ligero dolor cuando atravesó el himen que me mantenía virgen.
―Harry― Lo llamé.
Este levantó la cabeza ya que se encontraba besando mi cuello, lo tome de la nuca y lo bese, su miembro entro por completo en mí y se mantuvo quieto unos minutos, supongo que esperando a que me acostumbrara. Poco a poco fue moviéndose, primero lo hacía lento y despacio, sentía como su miembro salía y entraba provocando un inmenso placer que abarco el espacio del dolor ya inexistente, sus movimientos aumentaron de nivel a medida que sentía como mis jugos vaginales aumentaban provocando que su miembro resbalará más dentro de mí, las embestidas eran profundas, certeras y rápidas.
Una de sus manos masajeaba mi seno mientras que la otra acariciaba mi pierna y su boca mordisqueaba mi cuello, yo solo clavaba mis uñas en su espalda cada vez que me embestía y gemía su nombre, cada vez que decía su nombre era como si lo motivará a embestirme con más fuerza.
Sentí mis músculos tensarse mientras las embestidas eran cada vez más rápidas, cerré mis ojos sintiendo como mis paredes vaginales se contraían ya apresaban su miembro y clave mis uñas en su espalda mientras gemía su nombre.
―Ah, Harry―
―______― Gimió ahogado en una última embestida.
Se recostó sobre mí, recuperando el aire perdido, mientras mis manos resbalaban por su espalda hasta caer en el colchón, me dio un pequeño beso en el cuello mientras salía de mí y en ese momento me sentí muy vacía, pero Harry solo se recostó a mi lado mientras quitaba las sábanas y nos cubría con ellas, la luz de la luna se filtraba por entre las cortinas iluminándonos en la cama.
No sabía que decir en ese momento, solo lo abrace apoyando mi cabeza en su pecho y sentí sus leves caricias en mi espalda.
―______― Me llamó, me levante un poco para poder verlo a los ojos ―Yo-―
―¡______!― Lo interrumpió el grito de mi padre desde la planta baja.
―Yo... ya vuelvo― Susurre levantándome de la cama.
Busqué mi ropa en la oscuridad, encontrando la blusa y el short y logre ponérmelo, al bajar, encontré a mi padre tirado en el sillón con una botella en la mano.
―¿Papá?― Pregunte temerosa mientras me acercaba pero para mi suerte ya se había quedado dormido.
Le quite la botella y los zapatos y lo tape con una manta. Besé su frente y volví a subir a mi dormitorio, pensé que Harry estaría vestido y pronto para irse pero cuando entre, él seguía recostado en mi cama, sabía que estaba desnudo ya que la sábana apenas le cubría hasta las caderas, tenía los brazos detrás de su nuca, la mirada clavada en el techo y el ceño fruncido.
―Lo siento― Dije mientras me sentaba a su lado.
―¿Así que por eso son los golpes?― Murmuró sentándose en la cama.
―No, yo-― Intente negarlo pero solo coloco su dedo en mis labios.
―Está bien que quieras protegerlo pero... ¿Por qué dejas que te golpee?― Murmuró frunciendo el ceño.
―Es mi padre... Él...― Sentí mi voz quebrarse mientras bajaba la cabeza y lo siguiente que sentí, fueron los brazos de Harry envolverme en un protector abrazo.
―Está bien, tranquila― Susurro acariciando mi cabeza ―Ven― Dijo quitando las sábanas y me acomode a su lado.
Él paso su brazo por mi cintura y me acerco a su pecho. Podía escuchar sus calmados y acompasados latidos y su cálida respiración.
―Harry― Murmuré levantando un poco la cabeza, él solo me miro dándome a entender que me escuchaba ―Gracias―
―Hn― Murmuró sonriendo de lado ―Yo... ¿Fui el primero?― Preguntó luego de unos minutos en silencio y gracias a la oscuridad pude esconder mi sonrojo.
―¿Es importante para ti ser el primero?―
―No... Solo quiero saberlo―
―...Si... Lo eres―
Chán chán! ¡Esto empieza a ponerse bueno! Hazza ya descubrió lo que pasa en casa de ______. ¿Que hará? ¿Y ahora que ya estuvo con ella, la dejará de buscar como él dice? mmmm.... ¿Que pensáis?
¡SIENTO HABER TARDADO TANTO EN ACTUALIZAR! Me habia olvidado de esta novela.. ¡Soy lo peor! jajaja
Besos.
ReaderGirl.
capítulo IV:
.
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MARIPOSAS
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El primero
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MARIPOSAS
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El primero
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―Mamá... Mamá―
Abrí los ojos lentamente, sentí ese aroma a cerezos y canela impregnar en mi nariz y ese peso extra sobre mi abdomen, cuando pude enfocar la vista, la vi. _______.
―Mamá―
Se removía inquieta mientras me abrazaba con más fuerza, su rostro se contrajo en una mueca de dolor y angustia.
―Mamá― Volvió a gemir.
―_____... _____ despierta― La llame moviéndola levemente.
―¿Harry?― Dijo abriendo los ojos lentamente.
―¿Estás bien? Parecías tener una pesadilla―
―Estoy bien― Murmuro agachando la cabeza.
―Quédate aquí, subiré algo de comer―
―No, yo... Ya debo irme― Dijo levantándose de apuro, tomo su ropa y se encerró en el baño.
Me senté en la cama mientras apoyaba mis codos en mis piernas y agachaba la cabeza, no sé por qué razón esta niña me atrae tanto, es tan... Tierna y distinta, estoy consciente que en cuanto pueda tenerla en mi cama, no como la tuve anoche, esta atracción que siento por ella desaparecerá.
―Harry― Levante la cabeza encontrándome con Kin demasiado cerca de mí.
¿Cómo entró sin que la escuchara?
Observe la puerta del baño, _____ aún seguía allí.
―¿Qué haces aquí?―
―Has estado actuando extraño estos últimos días, no hemos podido "jugar"― Susurró sensual cerca de mi oído mientras se inclinaba para quedar a mi altura y mostrarme el inicio de sus senos.
―Yo... Mejor vete, estoy muy ocupado― Murmuré levantándome y ella dio unos pasos para atrás.
―Harry-―
―Que te vayas― La interrumpí, no quería que_____ la viera y mucho menos que Kin viera a ______.
Sabía cómo era Kin y no pensaba exponer a ______ ante una persona como ella. Kin solo bufó enojada y salió enfurruñada de mi cuarto, en cuanto la puerta se cerró ______ salió del baño ya vestida y arreglada.
―¿Te acuestas con tu prima?― Murmuro acercándose a mi ―Eso es enfermo―
―No lo hago― Dije rápido ―A veces, solo, jugamos, ya sabes― Ella solo sonrió de lado.
―Como quieras― Susurro colocándose las convers.
Agarré algo de ropa y me metí en el baño, me di una ligera ducha y cuando salí ______ estaba tendiendo la cama.
―No tienes que hacer eso, la empleada lo hará―
―No me molesta―
―Tú eres molesta― Ella solo entrecerró los ojos intentando en vano intimidarme.
―¿Cómo me voy?―
―Ven― Dije tomándola de la mano.
Salimos despacio del cuarto y llegamos al garaje. Encendí el auto y nos marchamos de mi casa.
―¿Te llevo a tu casa o quieres hacer algo?―
―¿Y ese algo, que sería?― Dijo ella mientras reía
Yo solo sonreí de lado y la lleve a desayunar a una cafetería, pasamos casi todo el día juntos, no sé por qué razón ______ me llama tanto la atención, es molesta y cargosa y un tanto bipolar, pero cada vez que estoy con ella no quiero dejarla ir, es como si quisiera conocerla, saber que ocurre con ella, que piensa, porque es así, tan distraída, a veces pareciera que se encerrará en su mundo y dejará a todos afuera.
―Bien, aquí es mi casa― Susurro quitándose el cinturón de seguridad ―Gracias por traerme y... Gracias por el peluche― Dijo haciendo ademán con el pequeño gato, que le había comprado cuando fuimos al parque de diversiones.
―De nada― Dije, la vi abrir la puerta ―______― La llamé.
―¿Qué-―
No deje que continuara solo la agarre de la nuca y la besé, ella se sorprendió pero en menos de un minuto ya me estaba correspondiendo, sus manos soltaron el peluche y subieron a mis hombros mientras la apretaba más contra mi cuerpo abrazándola de la cintura. Al separarnos apoye mi frente contra la suya y sonreí de lado cuando vi su bonito rostro sonrojado y jadeando.
―Nos vemos en el instituto, molesta― Susurré, ella solo asintió aún atontada por el beso, espere a que entrará a su casa y me marche.
.
.
―Harry ¿Donde estuviste todo el día?― Mencionó mi madre en cuanto cruce la puerta de entrada.
―Salí― Contesté secamente.
―¿Con una chica?― Pregunto Kin con picardía.
―Oh por dios mi niño tiene novia― Chilló mi madre emocionada.
―No, yo... Salí con unos amigos. No tengo hambre, me voy a acostar― Murmure subiendo las escaleras.
―A mi no me engañas, sé que saliste con una chica, Harry― Me reclamó mi "primita" antes de poder entrar en mi habitación.
―¿Y si así fuera, qué?― Ella solo me miro indignada y se cruzo de brazos. No sabía a qué venía esta estúpida escena de celos.
―Averiguaré quien es―
―Haz lo que quieras― Murmuré entrando en mi habitación y cerrando la puerta detrás de mí.
.
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―Dicen que las mariposas son las almas de los niños― Susurró mi madre mientras una hermosa mariposa se posaba en su dedo índice. ―Sabes... Si le cuentas tu deseo a una mariposa, ella lo llevará al cielo y te lo hará realidad―
―¿En serio?― Susurré emocionada, no tendría más de cuatro años.
―En serio― Susurró ella asintiendo con la cabeza mientras soltaba la mariposa y esta volaba al cielo.
―¡ Elisabeth! ¡ Elisabeth! ¿Dónde mierda estás metida?― Escuchamos el grito de mi padre desde la planta baja.
―Quédate aquí, cariño― Dijo mi madre mientras entraba por la ventana a mi habitación y bajaba a la planta baja.
Yo solo me quedé sentada en el tejado de mi casa, escuché sus gritos y sus insultos, mis padres siempre se habían llevado así y desconocía el porqué. Mi padre siempre tomaba demasiado, le gritaba y decía cosas hirientes, incluso muchas veces llego a golpearla, mi madre siempre que me veía sonreía y decía que solo eran simples peleas pero a mi corta edad yo sabía que no.
Una hermosa mariposa de un extraño color azul se poso en mi dedo índice, cerré los ojos y desee con todas mis fuerzas.
―Quiero que mi mamá sea feliz―
Y lo fue, solo que no conmigo.
.
.
Desperté de golpe mientras el celular seguía sonando, era lunes, debía ir a clases. Intente borrar ese tonto sueño de mi cabeza y me levante despacio. Me di una ducha y me coloqué el uniforme. Amber pasó por mí y me acompaño al instituto.
―Frentezota― Lloriqueó Ashley mientras se sentaba en mi mesa, el profesor aún no había llegado ―Harry me canceló― Chilló y una fuerte culpa me embargó.
―Yo, hay Ash lo siento― Dije sin querer.
―¿Por qué?―
―Es que-―
―Permiso― Escuchamos su varonil voz detrás de Ashley.
Al voltear allí se encontraba Harry, con su típica pose, tan arrogante y superior como de costumbre.
―Hola, Harry― Saludo Ashley sonrojada mientras se levantaba de la mesa.
El profesor entró a los minutos y todos nos fuimos a sentar.
―¿Le ibas a contar a Ashley lo que pasó el viernes?― Me susurró Harry evitando que los demás o el profesor escucharan.
―Yo... No lo sé ¿Tú sí?―
―No― Contesto serio y volvió a prestar atención a la clase.
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―¿Papá? ¿Papá?― Grite mientras entraba a casa, ya era bastante tarde.
Ashley había insistido en almorzar juntas con Danielle y no pude negarme. Supuse que como de costumbre mi padre estaría emborrachándose, me quité el uniforme colocándome el pijama, una blusa manga tres cuartos, negra, un short blanco y una bata rosada larga por el tobillo, que deje desatada y me quede descalza, amaba andar descalza.
El sonido del timbre me despertó de mi pequeña siesta, observe el reloj; las nueve y media, de seguro era mi padre que no podía poner la llave en la cerradura. Camine despacio a la puerta y la abrí sin siquiera ver quién era.
―¿Qué haces aquí?―
―Al menos invítame a pasar, molesta― Dijo con su tono arrogante y paso sin que lo invitará.
―Escucha Harry-―
―Ya cálmate― Me interrumpió ―Solo venía a ver qué estuvieras bien― Dijo sentándose en el sillón.
―¿Y eso?―
―Por lo del viernes―
―Pues estoy bien― Contesté seca mientras me sentaba a su lado en el sillón.
Estuvimos unos minutos en silencio, lo único que escuchaba era el sonido de la televisión.
―¿Me puedes decir que haces aquí? Pero la verdad― Dije rompiendo el silencio y el rodó los ojos y sonrió de lado.
―Bien... Yo vine para esto― Dijo y en menos de un minuto sentí sus labios chocar los míos.
No quería corresponderle pero besaba demasiado bien, sus labios se movían despacio y lento y su lengua acariciaba mi labio inferior buscando acceso a mi boca, estuvimos besándonos unos minutos mientras sentía sus manos colarse por mi blusa y acariciar mi espalda desnuda, yo por mi parte solo acariciaba su torso por sobre la camisa.
―¿Tu cuarto?― Dijo cortando el beso.
―Arriba― Señalé con mi mano mientras intentaba recuperar la respiración.
Volvió a besarme e hizo que enredara mis piernas en sus caderas mientras subíamos las escaleras. Me bajo en el pasillo y lo guíe hasta mi dormitorio. Cerró la puerta de un portazo y me tomo de la muñeca tirando de ella y haciendo que me impactará contra su cuerpo.
Me quitó la bata despacio mientras me empujaba hacia atrás, mis piernas chocaron con el borde de la cama, su boca pasó a mi cuello y sus manos se colaron por dentro de la blusa acariciando mis senos desnudos, por mi parte le logre quitar la camisa y los pantalones. Harry me quito la blusa y me tiro en la cama acomodándose sobre mí y me sonroje al ver la forma tan descarada en que miraba mis senos.
―Son tan hermosos― Susurró justo antes de meterse uno en la boca.
Lo succiono varias veces, dibujando círculos alrededor del pezón mientras acariciaba el otro con su mano.
―Harry― Gemí cuando una de sus manos bajo de mi pecho a mis pequeños short y se metieron dentro de mi ropa interior estimulando mi clítoris.
Jamás había sentido tanto placer en mis diecisiete años, cambie los papeles con un leve movimiento y rodamos en la cama, ahora me encontraba sobre él, mis piernas a cada lado de su cuerpo, sintiendo como su miembro se erectaba contra la fina tela de mi short.
Fui bajando despacio por su pecho dejando pequeños besos y mordiscos y le quite los boxers, tome su miembro entre mis manos y pase mi lengua por la punta. Harry solo echó la cabeza para atrás mientras apretaba sus labios evitando gemir, en ese momento olvide todo, sentía algo muy extraño por Harry, físico o no, lo quería y quería estar con él.
Metí su miembro en mi boca mientras lo succionaba lenta y profundamente y con mi mano acariciaba su testículos, Harry abrió más las piernas permitiéndome acomodarme mejor entre ella y enrosco su mano en mi cabeza marcando el ritmo que quería que siguiera, escuchaba sus roncos gemidos cargados de pasión que solo me estaba dedicando a mí, aumente el ritmo sintiendo como su miembro aumentaba de temperatura y Harry jadeaba más rápido y pronto se corrió en mi boca, dejando ese sabor pastoso y agrio en mi garganta, me tomó de los brazos y me subió hasta quedar acostada sobre su pecho, me tomo de la nuca y me beso, pero fue un beso distinto, más calmado, no pasional o lujuriosos sino cariñoso y tierno.
Nuevamente cambiamos de posiciones y sus manos recorrieron mi cuerpo llegando hasta la parte inferior.
―Estás muy húmeda, ______― Susurró cerca de mi oído y luego pasó la lengua por el lóbulo y lo mordió.
―Ah, Harry―
Mi gemido solo logró excitarlo de nuevo, me quitó la poca ropa que me quedaba de un tirón y se acomodó entre mis piernas, tomó un preservativo y se lo colocó. Me miró directo a los ojos y sonrió, pero esa sonrisa no era arrogante o cargada de orgullo y prepotencia sino una sonrisa sincera, tierna, depositó un casto beso en mis labios y sentí su miembro rozar mi entrada, una corriente eléctrica recorrer mi espalda. Susurró algo en mi oído que no logre escuchar y poco a poco su miembro fue entrando en mí, sentí un ligero dolor cuando atravesó el himen que me mantenía virgen.
―Harry― Lo llamé.
Este levantó la cabeza ya que se encontraba besando mi cuello, lo tome de la nuca y lo bese, su miembro entro por completo en mí y se mantuvo quieto unos minutos, supongo que esperando a que me acostumbrara. Poco a poco fue moviéndose, primero lo hacía lento y despacio, sentía como su miembro salía y entraba provocando un inmenso placer que abarco el espacio del dolor ya inexistente, sus movimientos aumentaron de nivel a medida que sentía como mis jugos vaginales aumentaban provocando que su miembro resbalará más dentro de mí, las embestidas eran profundas, certeras y rápidas.
Una de sus manos masajeaba mi seno mientras que la otra acariciaba mi pierna y su boca mordisqueaba mi cuello, yo solo clavaba mis uñas en su espalda cada vez que me embestía y gemía su nombre, cada vez que decía su nombre era como si lo motivará a embestirme con más fuerza.
Sentí mis músculos tensarse mientras las embestidas eran cada vez más rápidas, cerré mis ojos sintiendo como mis paredes vaginales se contraían ya apresaban su miembro y clave mis uñas en su espalda mientras gemía su nombre.
―Ah, Harry―
―______― Gimió ahogado en una última embestida.
Se recostó sobre mí, recuperando el aire perdido, mientras mis manos resbalaban por su espalda hasta caer en el colchón, me dio un pequeño beso en el cuello mientras salía de mí y en ese momento me sentí muy vacía, pero Harry solo se recostó a mi lado mientras quitaba las sábanas y nos cubría con ellas, la luz de la luna se filtraba por entre las cortinas iluminándonos en la cama.
No sabía que decir en ese momento, solo lo abrace apoyando mi cabeza en su pecho y sentí sus leves caricias en mi espalda.
―______― Me llamó, me levante un poco para poder verlo a los ojos ―Yo-―
―¡______!― Lo interrumpió el grito de mi padre desde la planta baja.
―Yo... ya vuelvo― Susurre levantándome de la cama.
Busqué mi ropa en la oscuridad, encontrando la blusa y el short y logre ponérmelo, al bajar, encontré a mi padre tirado en el sillón con una botella en la mano.
―¿Papá?― Pregunte temerosa mientras me acercaba pero para mi suerte ya se había quedado dormido.
Le quite la botella y los zapatos y lo tape con una manta. Besé su frente y volví a subir a mi dormitorio, pensé que Harry estaría vestido y pronto para irse pero cuando entre, él seguía recostado en mi cama, sabía que estaba desnudo ya que la sábana apenas le cubría hasta las caderas, tenía los brazos detrás de su nuca, la mirada clavada en el techo y el ceño fruncido.
―Lo siento― Dije mientras me sentaba a su lado.
―¿Así que por eso son los golpes?― Murmuró sentándose en la cama.
―No, yo-― Intente negarlo pero solo coloco su dedo en mis labios.
―Está bien que quieras protegerlo pero... ¿Por qué dejas que te golpee?― Murmuró frunciendo el ceño.
―Es mi padre... Él...― Sentí mi voz quebrarse mientras bajaba la cabeza y lo siguiente que sentí, fueron los brazos de Harry envolverme en un protector abrazo.
―Está bien, tranquila― Susurro acariciando mi cabeza ―Ven― Dijo quitando las sábanas y me acomode a su lado.
Él paso su brazo por mi cintura y me acerco a su pecho. Podía escuchar sus calmados y acompasados latidos y su cálida respiración.
―Harry― Murmuré levantando un poco la cabeza, él solo me miro dándome a entender que me escuchaba ―Gracias―
―Hn― Murmuró sonriendo de lado ―Yo... ¿Fui el primero?― Preguntó luego de unos minutos en silencio y gracias a la oscuridad pude esconder mi sonrojo.
―¿Es importante para ti ser el primero?―
―No... Solo quiero saberlo―
―...Si... Lo eres―
Chán chán! ¡Esto empieza a ponerse bueno! Hazza ya descubrió lo que pasa en casa de ______. ¿Que hará? ¿Y ahora que ya estuvo con ella, la dejará de buscar como él dice? mmmm.... ¿Que pensáis?
¡SIENTO HABER TARDADO TANTO EN ACTUALIZAR! Me habia olvidado de esta novela.. ¡Soy lo peor! jajaja
Besos.
ReaderGirl.
readergirl
Re: Mariposas (Harry Styles y _____ Black)
estuvo tan el capitulo espero subas pronto quiero saber que va a pasar despues sube pronto si
||Hazzy||
CAPITULO 5.
capítulo V:
―¿Qué haces aquí?― Me preguntó sorprendida mientras salía de su casa.
La verdad ni yo sabía que hacía aquí. Pensé que luego de acostarme con ella mi obsesión desaparecería pero en lugar de eso, lo único que quería era volver a verla.
―Sube― Ordené desde el auto.
Ella frunció el ceño pero aún así me hizo caso, abrió la puerta del co-piloto y su perfume a cerezos y fresas inundaron el ambiente.
―Pensé que después de lo que paso, no volverías a hablarme― Mencionó divertida.
Creí que estaría furiosa conmigo, ya que el martes cuando desperté me escape por la ventana sin esperar a que despertara, falte a clases y no la llame en todo el día.
―Al menos podrías saludarme correctamente― Le dije más calmado y me acerque a sus labios para besarla, la sentí sonreír contra mis labios mientras sus manos pasaban a mi cuello.
―Hola― Dijo divertida al separarnos.
Esta chica de verdad me confunde, más con sus cambios de humor, es tan... Bipolar. Arranqué el auto y nos marchamos al instituto. La observe de reojo varias veces, solo para asegurarme que ese mal nacido no la hubiera tocado, pero a simple vista no poseía ningún golpe. Estacione el auto y _____ se bajó casi corriendo, termine de aparcar el auto y me baje tras ella.
―¿Qué te ocurre?― Le pregunte sujetándola del brazo.
―No quiero que Ashley nos vea y piense mal― Murmuró soltándose de mi agarre.
―Hablaré con ella―
―Bien, porque tú hiciste este lío, tú resuélvelo― Dijo enojada picando mi pecho con su dedo índice.
Dio media vuelta y su cabello desprendió un aroma a frutos rojos que se impregno en mi nariz y la vi desaparecer por la entrada del instituto. Como dije, la morena iba a terminar volviéndome loco con sus cambios de humor.
.
.
―Ashley― La llamé a la salida.
______ ya se había ido y el corredor escolar estaba casi vacío.
―Harry― Murmuró con voz sensual mientras se acercaba a mi contorneando las caderas ―¿Quieres arreglar la cita para otro día?―
―No― Vi su sonrisa desaparecer y frunció su ceño ―Estoy saliendo con alguien―
―¿Con quién?― Chilló histérica.
Claro que no le diría que era su mejor amiga. La verdad nunca quise jugar con las dos, solo creí que ______ se pondría celosa si le daba cabida a su amiga, cosa que no ocurrió.
―Eso no es de tu incumbencia―
―¡Tú no me puedes dejar!― Grito, retumbando su chillona voz por todo el pasillo.
―Tú y yo nunca fuimos nada, así que técnicamente, no te estoy dejando―
―Nos besamos e íbamos a salir-―
―Corrección― La interrumpí ―Tú me besaste, porque estabas ebrias y luego te quedaste dormida y no salimos―
―Pero Harry― Chilló taconeando sus zapato contra las baldosas ―Solo dime quien es―
―Pronto lo sabrás― Murmure alejándome de ella.
.
.
―¿Y qué te dijo?― Me bombardeó ______ en cuanto ingrese al auto.
Le había dado las llaves para que me esperara allí.
―Ya está todo claro― Dije mientras me acercaba a besarla, pero volteó su rostro y termine besando su mejilla, bufe contra su sonrosada piel.
―¿Ahora qué, molesta?―
―Deja de llamarme así― Chillo ―¿Le aclaraste a Ashley, todo lo que paso?―
―No hablé de nosotros―
―Harry―
―Solo dije que no me gustaba y ya―
―¿Y ya?― Repitió enojada ―Ustedes se besaron y luego la invitaste a salir-―
―Ella me invito a salir― La interrumpí ―Y ella me beso, porque estaba ebria y yo estaba soltero, podía hacer lo que quisiera―
_______ entrecerró sus ojos y frunció la boca, pensé que diría algo más como que coqueteé con las dos o que yo las busqué, pero solo se cruzo de brazos y observo por la ventana.
―Vamos a tu casa― Murmuré contra la piel de su cuello mientras dejaba algunos besos.
Ella no me contestó pero la vi por el rabillo del ojo fruncir el ceño, seguí besando su cuello y pasé mi lengua lentamente por la fina piel, sus suspiros fueron en aumento solo provocando una punzada en mi entrepierna.
―Mi... Mi padre llegará cerca de las seis― Gimió sin mirarme.
Sonreí de lado mientras me alejaba y vi la pequeña marca en su cuello, luego me encargaría de hacerla más grande para que todos la vieran.
.
.
No entendía que era lo que me atraía de ella, desde que la vi en la clase sentía algo extraño por ella, sabía que me gustaba como mujer, pero había algo más, era bonita, no podía negarlo y por eso creí que luego del sexo esta atracción por ella se iría pero las ganas de verla y de tenerla solo aumentaron luego de pasar por su cuerpo, más al saber que fui el primero.
―Ah, Harry―
Y tenerla desnuda y agitada debajo de mi cuerpo era la mejor experiencia que había tenido. El día de ayer me la pase pensando en ella y en lo que había sentido cuando estuvimos juntos y sin lugar a dudas era una experiencia que quería volver a repetir.
―Harry―
Más rápido.
Más fuerte.
Y me vacíe en su interior, sabía que no cuidarnos estaba mal pero había comprado la pastilla para que luego se la tomará, sin lugar a dudas, estar en su interior era la mejor sensación que había sentido, incluso esta vez fue mejor que la anterior.
Me quité de encima de ella aún agitado y me acosté boca arriba observando el blanco techo, la sentí removerse a mi lado y cuando volteé la cabeza la encontré boca abajo respirando aún agitadamente, la sábana únicamente cubría su trasero y algo de su espalda, dejando sus largas y bronceadas piernas y su pecosa espalda a la vista.
―¿Qué haces?― Preguntó mientras lanzaba una risa baja.
―Te beso, pensé que era obvio― Mencioné contra la piel desnuda de su espalda baja.
Fui subiendo despacio depositando pequeños besos en toda su pecosa espalda hasta que llegue a su omóplato derecho y observe la mariposa azul.
―¿Y este tatuaje?―
―Me lo hice el año pasado ¿Te gusta?―
―Me encanta―
Cuando iba a continuar con la tarea de besar a la morena mi celular comenzó a sonar, no pensaba contestarlo, de seguro era mi madre o peor aún, Kin, solo para saber porque no llegué a almorzar. Seguí besando el cuello de la morena mientras corría sus largos cabellos con mi mano.
―Contesta, parece importante― Dijo ______.
Yo solo bufé mientras me alejaba de ella y me sentaba en la cama, busque a tientas mi pantalón -donde tenía mi celular- en medio de la penumbra de la habitación, hasta que logré hallarlo debajo de la cama. Mis ojos se abrieron de la sorpresa al ver el nombre en la pantalla.
―¿Quién es?―
―Nadie importante― Murmuré dejando el aparato en la mesita de noche pero ______ lo tomó rápido en cuanto lo deje.
―¿Ashley?― Murmuró viendo la pantalla del celular ―Pensé que habías hablado con ella―
―Hablé con ella―
―Contesta― Dijo entregándome el dichoso aparato y sujetando la sábana para cubrirse el pecho desnudo ―Anda, contesta, ella no dejará de llamar, la conozco―
Tomé el celular de mala gana y me levante de la cama, caminando despacio, alejándome de ______.
―¿Qué quieres?― Contesté de mala gana.
―Averiguaré quien es tu noviecita y va a desear no haberse metido en mi camino―
―Ashley-― No pude continuar hablando cuando escuche el tono de colgado.
―¿Qué quería?― Murmuro la morena sentándose en la cama y tapándose con la sábana blanca.
―Nada, molestar― Dije mientras me acercaba a ella y pude notar sus mejillas sonrojadas al verme desnudo.
―Ella no sé cansará hasta tenerte, Ashley siempre consigue lo que quiere― Dijo, cambiando su expresión a una más seria y se recostó nuevamente en la cama.
―No a mí, molesta― Susurré cerca de su oído mientras apoyaba mis manos en la cama y besaba su cuello.
―Deja de decirme molesta― Se quejó entre suspiros.
―¿Por qué? Los novios se ponen apodos cariñosos―
―Cariñosos, Harry― Reprochó y luego se separo de mi de inmediato ―¿Dijiste novios?― Pregunto mirándome a los ojos.
En realidad no tenía idea de porque había dicho eso, fue como un acto reflejo, un error del inconsciente, muy inconsciente. Me levanté de la cama y busque mi ropa en la semi-oscuridad de la habitación.
―Debo irme, tu padre llegará pronto― Dije sin mirarla mientras me colocaba los pantalones.
―¿Somos novios?― Volvió a preguntar acomodándose mejor en la cama.
―Yo... No lo sé, mañana hablamos― Le dije mientras terminaba de abotonar mi camisa, me acerque a la cama y deposité un pequeño beso en sus labios.
Tome mi mochila y abrí la ventana.
―No tienes que salir por la ventana, no hay nadie en casa― Dijo divertida mientras reía.
―Sí, pero así es más excitante. Me siento como tu amante― Murmuré mientras le guiñaba un ojo, ella solo lanzo una carcajada y negó con la cabeza.
Salí por la ventana, caminando por un pequeño tejado bastante inclinado hasta un enorme árbol que quedaba justo frente a la casa de _____, baje de él y me encamine a mi auto.
.
.
.
Sentí el frío recorrer mi cuerpo, estábamos en pleno invierno, la ventana estaba congelada y por ella se colaba una ráfaga de viento. Abrí los ojos despacio y vi a mi madre sentada a mi lado, acariciaba mi cabello y lloraba en silencio, como lo hacía desde hace años.
―¿Mamá?― Murmure.
Tenía diez años, lo recuerdo perfectamente porque hacía una semana los había cumplido. Ese día mamá quiso llevarme a festejarlo, fuimos al parque de diversiones y regresamos cerca de la medianoche. Papá estaba ebrio y peleo con mamá y fue la primera vez que presencie como la golpeaba. Mi madre siempre me encerraba en mi habitación para evitar que él se desquitara conmigo pero ese día la tomo de improvisto, en cuanto ingresamos a la casa, la tomo del cabello y comenzó a insultarla, diciéndole que era una zorra, que lo engaña y otras cosas más que no quiero recordar.
―Mariposa― Susurro ella, con la voz entrecortada.
Mariposa...
Mariposa, así era como mi mamá me llamaba, desde que tengo memoria.
―Yo... Yo debo irme, ______, pero volveré por ti― Dijo mientras se limpiaba el rastro de lágrimas de sus mejillas sonrojadas.
―Yo no quiero que te vayas, mamá― Murmure mientras sentía las lágrimas aparecer en mis ojos.
―Lo siento, lo siento, mariposa... Yo te amo, prometo volver por ti, _____, no te dejare-―
―Llévame contigo― La interrumpí ―Por favor― Dije llorando y temblando.
―No puedo, aún no sé a dónde iré y no tengo un lugar donde llevarte, es mejor que te quedes aquí―
―Mamá―
―Te amo, mariposa, volveré por ti, lo prometo―
Mi mamá jamás volvió y no sé si se fue con otro, como asegura mi padre o si simplemente se olvido de mi.
.
.
Desperté de golpe bastante agitada, mi pecho subía y bajaba y sentía las tibias gotas en mis mejillas, genial, otra vez lloraba en sueños. Últimamente soñaba demasiado con mi madre.
Respire profundo y volví a recostarme, cerré mis ojos y en ese momento sonó la alarma del despertador. Observe el reloj, las seis y media. Me levanté cansada y me encerré en el baño para darme una ligera ducha y cambiarme para ir al instituto.
―Buenos días, papá― Dije mientras entraba a la cocina y me sentaba a desayunar.
―Buenos― Dijo serio ―¿Quién es el del elegante auto?― Pregunto viendo por la ventana con el ceño fruncido.
Me atragante con el café, escupiendo un poco sobre la mesa y tosiendo.
―Un amigo― Logré contestar entre cortado ―Ya me voy, papá― Le dije tomando mi morral y me acerque a darle un beso en la mejilla.
―Cuídate― Mencionó serio llevándose la taza humeante a los labios.
Yo solo asentí mientras salía rápido de esa incómoda escena.
―Hola― Le dije con una sonrisa mientras besaba su mejilla.
Él solo sonrió de lado, arrogante y se puso en marcha al instituto.
―Déjame aquí― Le dije cuando estábamos a una cuadra de llegar.
―Estaciono y vamos juntos― Contestó serio esperando que el semáforo cambiara la luz.
―Mejor no. No quiero que alguien nos vea y se lo diga a Ashley―
El solo rodó los ojos y asintió con la cabeza.
―Gracias― Le dije.
Le di un pequeño beso en los labios y baje apresurada del auto, ya que la luz había cambiado a verde.
.
.
―¡______!― Escuche que gritaban mi nombre en el corredor del instituto.
Al darme vuelta me encontré con un atractivo rubio de ojos azules que corría hacía a mí.
―Niall ¿Cómo estás?― Lo saludé con una sonrisa.
―Bien, hace mucho que no hablamos ―
―Si― Mencioné en un suspiro.
Y nos hundimos en un incómodo silencio mientras caminábamos despacio al salón de clases.
―______― Me llamo, di media vuelta para verlo ―Lo siento―
―¿Por qué?―
―Pues-―
―Aquí estás, molesta― Lo interrumpió Harry llegando a donde nos encontrábamos nosotros.
―No le digas molesta a ______, estúpido― Chillo Niall con voz infantil mientras lo apuntaba con el dedo.
―No me digas estúpido, imbécil― Murmuró él con una sonrisa arrogante, haciendo que Niall se sonrojara de lo enojado que estaba.
―Estúpido―
―Imbécil―
―Estúpido―
―Imbécil―
Niall se encontraba cada vez más rojo y aumentaba su tono de voz, Harry por su parte tenía una sonrisa ladeada como disfrutando de hacer enojar al rubio.
―¡Estúpido!―
―¡Ya cállense!― Grité ―Parecen niños pequeños― Les dije ―¿Ustedes se conocen?―
Ellos solo asintieron mientras entrabamos al salón de clases, el profesor entró detrás de nosotros y ordeno silencio.
―¿De dónde conoces a Niall?― Le susurre a Harry para que el profesor no nos escuchará.
―De niños íbamos al mismo instituto, luego a mi padre lo trasladaron a Nueva York y nos alejamos bastante― Dijo él en el mismo tono de voz.
―Permiso profesor― Murmuro una voz femenina abriendo la puerta despacio.
Mis ojos se abrieron con sorpresa cuando la azabache se paró frente al salón de clases. Su largo y laceo cabello azabache llegaba casi a su cintura, tenía los ojos tan verdes como los de Harry y la piel sumamente blanca, sin mencionar que poseía un cuerpo de infarto. Era como Harry en versión mujer y a pesar de no haber hablado jamás con ella, sabía bien quién era.
―Soy la nueva alumna... Kin Styles―
¡Genial! Lo que me faltaba, la prima de Harry, obsesionada con el incesto.
.
.
MARIPOSAS
.
.
Volveré por ti
.
.
.
.
MARIPOSAS
.
.
Volveré por ti
.
.
.
―¿Qué haces aquí?― Me preguntó sorprendida mientras salía de su casa.
La verdad ni yo sabía que hacía aquí. Pensé que luego de acostarme con ella mi obsesión desaparecería pero en lugar de eso, lo único que quería era volver a verla.
―Sube― Ordené desde el auto.
Ella frunció el ceño pero aún así me hizo caso, abrió la puerta del co-piloto y su perfume a cerezos y fresas inundaron el ambiente.
―Pensé que después de lo que paso, no volverías a hablarme― Mencionó divertida.
Creí que estaría furiosa conmigo, ya que el martes cuando desperté me escape por la ventana sin esperar a que despertara, falte a clases y no la llame en todo el día.
―Al menos podrías saludarme correctamente― Le dije más calmado y me acerque a sus labios para besarla, la sentí sonreír contra mis labios mientras sus manos pasaban a mi cuello.
―Hola― Dijo divertida al separarnos.
Esta chica de verdad me confunde, más con sus cambios de humor, es tan... Bipolar. Arranqué el auto y nos marchamos al instituto. La observe de reojo varias veces, solo para asegurarme que ese mal nacido no la hubiera tocado, pero a simple vista no poseía ningún golpe. Estacione el auto y _____ se bajó casi corriendo, termine de aparcar el auto y me baje tras ella.
―¿Qué te ocurre?― Le pregunte sujetándola del brazo.
―No quiero que Ashley nos vea y piense mal― Murmuró soltándose de mi agarre.
―Hablaré con ella―
―Bien, porque tú hiciste este lío, tú resuélvelo― Dijo enojada picando mi pecho con su dedo índice.
Dio media vuelta y su cabello desprendió un aroma a frutos rojos que se impregno en mi nariz y la vi desaparecer por la entrada del instituto. Como dije, la morena iba a terminar volviéndome loco con sus cambios de humor.
.
.
―Ashley― La llamé a la salida.
______ ya se había ido y el corredor escolar estaba casi vacío.
―Harry― Murmuró con voz sensual mientras se acercaba a mi contorneando las caderas ―¿Quieres arreglar la cita para otro día?―
―No― Vi su sonrisa desaparecer y frunció su ceño ―Estoy saliendo con alguien―
―¿Con quién?― Chilló histérica.
Claro que no le diría que era su mejor amiga. La verdad nunca quise jugar con las dos, solo creí que ______ se pondría celosa si le daba cabida a su amiga, cosa que no ocurrió.
―Eso no es de tu incumbencia―
―¡Tú no me puedes dejar!― Grito, retumbando su chillona voz por todo el pasillo.
―Tú y yo nunca fuimos nada, así que técnicamente, no te estoy dejando―
―Nos besamos e íbamos a salir-―
―Corrección― La interrumpí ―Tú me besaste, porque estabas ebrias y luego te quedaste dormida y no salimos―
―Pero Harry― Chilló taconeando sus zapato contra las baldosas ―Solo dime quien es―
―Pronto lo sabrás― Murmure alejándome de ella.
.
.
―¿Y qué te dijo?― Me bombardeó ______ en cuanto ingrese al auto.
Le había dado las llaves para que me esperara allí.
―Ya está todo claro― Dije mientras me acercaba a besarla, pero volteó su rostro y termine besando su mejilla, bufe contra su sonrosada piel.
―¿Ahora qué, molesta?―
―Deja de llamarme así― Chillo ―¿Le aclaraste a Ashley, todo lo que paso?―
―No hablé de nosotros―
―Harry―
―Solo dije que no me gustaba y ya―
―¿Y ya?― Repitió enojada ―Ustedes se besaron y luego la invitaste a salir-―
―Ella me invito a salir― La interrumpí ―Y ella me beso, porque estaba ebria y yo estaba soltero, podía hacer lo que quisiera―
_______ entrecerró sus ojos y frunció la boca, pensé que diría algo más como que coqueteé con las dos o que yo las busqué, pero solo se cruzo de brazos y observo por la ventana.
―Vamos a tu casa― Murmuré contra la piel de su cuello mientras dejaba algunos besos.
Ella no me contestó pero la vi por el rabillo del ojo fruncir el ceño, seguí besando su cuello y pasé mi lengua lentamente por la fina piel, sus suspiros fueron en aumento solo provocando una punzada en mi entrepierna.
―Mi... Mi padre llegará cerca de las seis― Gimió sin mirarme.
Sonreí de lado mientras me alejaba y vi la pequeña marca en su cuello, luego me encargaría de hacerla más grande para que todos la vieran.
.
.
No entendía que era lo que me atraía de ella, desde que la vi en la clase sentía algo extraño por ella, sabía que me gustaba como mujer, pero había algo más, era bonita, no podía negarlo y por eso creí que luego del sexo esta atracción por ella se iría pero las ganas de verla y de tenerla solo aumentaron luego de pasar por su cuerpo, más al saber que fui el primero.
―Ah, Harry―
Y tenerla desnuda y agitada debajo de mi cuerpo era la mejor experiencia que había tenido. El día de ayer me la pase pensando en ella y en lo que había sentido cuando estuvimos juntos y sin lugar a dudas era una experiencia que quería volver a repetir.
―Harry―
Más rápido.
Más fuerte.
Y me vacíe en su interior, sabía que no cuidarnos estaba mal pero había comprado la pastilla para que luego se la tomará, sin lugar a dudas, estar en su interior era la mejor sensación que había sentido, incluso esta vez fue mejor que la anterior.
Me quité de encima de ella aún agitado y me acosté boca arriba observando el blanco techo, la sentí removerse a mi lado y cuando volteé la cabeza la encontré boca abajo respirando aún agitadamente, la sábana únicamente cubría su trasero y algo de su espalda, dejando sus largas y bronceadas piernas y su pecosa espalda a la vista.
―¿Qué haces?― Preguntó mientras lanzaba una risa baja.
―Te beso, pensé que era obvio― Mencioné contra la piel desnuda de su espalda baja.
Fui subiendo despacio depositando pequeños besos en toda su pecosa espalda hasta que llegue a su omóplato derecho y observe la mariposa azul.
―¿Y este tatuaje?―
―Me lo hice el año pasado ¿Te gusta?―
―Me encanta―
Cuando iba a continuar con la tarea de besar a la morena mi celular comenzó a sonar, no pensaba contestarlo, de seguro era mi madre o peor aún, Kin, solo para saber porque no llegué a almorzar. Seguí besando el cuello de la morena mientras corría sus largos cabellos con mi mano.
―Contesta, parece importante― Dijo ______.
Yo solo bufé mientras me alejaba de ella y me sentaba en la cama, busque a tientas mi pantalón -donde tenía mi celular- en medio de la penumbra de la habitación, hasta que logré hallarlo debajo de la cama. Mis ojos se abrieron de la sorpresa al ver el nombre en la pantalla.
―¿Quién es?―
―Nadie importante― Murmuré dejando el aparato en la mesita de noche pero ______ lo tomó rápido en cuanto lo deje.
―¿Ashley?― Murmuró viendo la pantalla del celular ―Pensé que habías hablado con ella―
―Hablé con ella―
―Contesta― Dijo entregándome el dichoso aparato y sujetando la sábana para cubrirse el pecho desnudo ―Anda, contesta, ella no dejará de llamar, la conozco―
Tomé el celular de mala gana y me levante de la cama, caminando despacio, alejándome de ______.
―¿Qué quieres?― Contesté de mala gana.
―Averiguaré quien es tu noviecita y va a desear no haberse metido en mi camino―
―Ashley-― No pude continuar hablando cuando escuche el tono de colgado.
―¿Qué quería?― Murmuro la morena sentándose en la cama y tapándose con la sábana blanca.
―Nada, molestar― Dije mientras me acercaba a ella y pude notar sus mejillas sonrojadas al verme desnudo.
―Ella no sé cansará hasta tenerte, Ashley siempre consigue lo que quiere― Dijo, cambiando su expresión a una más seria y se recostó nuevamente en la cama.
―No a mí, molesta― Susurré cerca de su oído mientras apoyaba mis manos en la cama y besaba su cuello.
―Deja de decirme molesta― Se quejó entre suspiros.
―¿Por qué? Los novios se ponen apodos cariñosos―
―Cariñosos, Harry― Reprochó y luego se separo de mi de inmediato ―¿Dijiste novios?― Pregunto mirándome a los ojos.
En realidad no tenía idea de porque había dicho eso, fue como un acto reflejo, un error del inconsciente, muy inconsciente. Me levanté de la cama y busque mi ropa en la semi-oscuridad de la habitación.
―Debo irme, tu padre llegará pronto― Dije sin mirarla mientras me colocaba los pantalones.
―¿Somos novios?― Volvió a preguntar acomodándose mejor en la cama.
―Yo... No lo sé, mañana hablamos― Le dije mientras terminaba de abotonar mi camisa, me acerque a la cama y deposité un pequeño beso en sus labios.
Tome mi mochila y abrí la ventana.
―No tienes que salir por la ventana, no hay nadie en casa― Dijo divertida mientras reía.
―Sí, pero así es más excitante. Me siento como tu amante― Murmuré mientras le guiñaba un ojo, ella solo lanzo una carcajada y negó con la cabeza.
Salí por la ventana, caminando por un pequeño tejado bastante inclinado hasta un enorme árbol que quedaba justo frente a la casa de _____, baje de él y me encamine a mi auto.
.
.
.
Sentí el frío recorrer mi cuerpo, estábamos en pleno invierno, la ventana estaba congelada y por ella se colaba una ráfaga de viento. Abrí los ojos despacio y vi a mi madre sentada a mi lado, acariciaba mi cabello y lloraba en silencio, como lo hacía desde hace años.
―¿Mamá?― Murmure.
Tenía diez años, lo recuerdo perfectamente porque hacía una semana los había cumplido. Ese día mamá quiso llevarme a festejarlo, fuimos al parque de diversiones y regresamos cerca de la medianoche. Papá estaba ebrio y peleo con mamá y fue la primera vez que presencie como la golpeaba. Mi madre siempre me encerraba en mi habitación para evitar que él se desquitara conmigo pero ese día la tomo de improvisto, en cuanto ingresamos a la casa, la tomo del cabello y comenzó a insultarla, diciéndole que era una zorra, que lo engaña y otras cosas más que no quiero recordar.
―Mariposa― Susurro ella, con la voz entrecortada.
Mariposa...
Mariposa, así era como mi mamá me llamaba, desde que tengo memoria.
―Yo... Yo debo irme, ______, pero volveré por ti― Dijo mientras se limpiaba el rastro de lágrimas de sus mejillas sonrojadas.
―Yo no quiero que te vayas, mamá― Murmure mientras sentía las lágrimas aparecer en mis ojos.
―Lo siento, lo siento, mariposa... Yo te amo, prometo volver por ti, _____, no te dejare-―
―Llévame contigo― La interrumpí ―Por favor― Dije llorando y temblando.
―No puedo, aún no sé a dónde iré y no tengo un lugar donde llevarte, es mejor que te quedes aquí―
―Mamá―
―Te amo, mariposa, volveré por ti, lo prometo―
Mi mamá jamás volvió y no sé si se fue con otro, como asegura mi padre o si simplemente se olvido de mi.
.
.
Desperté de golpe bastante agitada, mi pecho subía y bajaba y sentía las tibias gotas en mis mejillas, genial, otra vez lloraba en sueños. Últimamente soñaba demasiado con mi madre.
Respire profundo y volví a recostarme, cerré mis ojos y en ese momento sonó la alarma del despertador. Observe el reloj, las seis y media. Me levanté cansada y me encerré en el baño para darme una ligera ducha y cambiarme para ir al instituto.
―Buenos días, papá― Dije mientras entraba a la cocina y me sentaba a desayunar.
―Buenos― Dijo serio ―¿Quién es el del elegante auto?― Pregunto viendo por la ventana con el ceño fruncido.
Me atragante con el café, escupiendo un poco sobre la mesa y tosiendo.
―Un amigo― Logré contestar entre cortado ―Ya me voy, papá― Le dije tomando mi morral y me acerque a darle un beso en la mejilla.
―Cuídate― Mencionó serio llevándose la taza humeante a los labios.
Yo solo asentí mientras salía rápido de esa incómoda escena.
―Hola― Le dije con una sonrisa mientras besaba su mejilla.
Él solo sonrió de lado, arrogante y se puso en marcha al instituto.
―Déjame aquí― Le dije cuando estábamos a una cuadra de llegar.
―Estaciono y vamos juntos― Contestó serio esperando que el semáforo cambiara la luz.
―Mejor no. No quiero que alguien nos vea y se lo diga a Ashley―
El solo rodó los ojos y asintió con la cabeza.
―Gracias― Le dije.
Le di un pequeño beso en los labios y baje apresurada del auto, ya que la luz había cambiado a verde.
.
.
―¡______!― Escuche que gritaban mi nombre en el corredor del instituto.
Al darme vuelta me encontré con un atractivo rubio de ojos azules que corría hacía a mí.
―Niall ¿Cómo estás?― Lo saludé con una sonrisa.
―Bien, hace mucho que no hablamos ―
―Si― Mencioné en un suspiro.
Y nos hundimos en un incómodo silencio mientras caminábamos despacio al salón de clases.
―______― Me llamo, di media vuelta para verlo ―Lo siento―
―¿Por qué?―
―Pues-―
―Aquí estás, molesta― Lo interrumpió Harry llegando a donde nos encontrábamos nosotros.
―No le digas molesta a ______, estúpido― Chillo Niall con voz infantil mientras lo apuntaba con el dedo.
―No me digas estúpido, imbécil― Murmuró él con una sonrisa arrogante, haciendo que Niall se sonrojara de lo enojado que estaba.
―Estúpido―
―Imbécil―
―Estúpido―
―Imbécil―
Niall se encontraba cada vez más rojo y aumentaba su tono de voz, Harry por su parte tenía una sonrisa ladeada como disfrutando de hacer enojar al rubio.
―¡Estúpido!―
―¡Ya cállense!― Grité ―Parecen niños pequeños― Les dije ―¿Ustedes se conocen?―
Ellos solo asintieron mientras entrabamos al salón de clases, el profesor entró detrás de nosotros y ordeno silencio.
―¿De dónde conoces a Niall?― Le susurre a Harry para que el profesor no nos escuchará.
―De niños íbamos al mismo instituto, luego a mi padre lo trasladaron a Nueva York y nos alejamos bastante― Dijo él en el mismo tono de voz.
―Permiso profesor― Murmuro una voz femenina abriendo la puerta despacio.
Mis ojos se abrieron con sorpresa cuando la azabache se paró frente al salón de clases. Su largo y laceo cabello azabache llegaba casi a su cintura, tenía los ojos tan verdes como los de Harry y la piel sumamente blanca, sin mencionar que poseía un cuerpo de infarto. Era como Harry en versión mujer y a pesar de no haber hablado jamás con ella, sabía bien quién era.
―Soy la nueva alumna... Kin Styles―
¡Genial! Lo que me faltaba, la prima de Harry, obsesionada con el incesto.
readergirl
Re: Mariposas (Harry Styles y _____ Black)
holaaaaaaaaaaaa !!!
nueva lectora !
me llamo cintya... ciin en el foro...
wow.. esta novela esta de muerte .. la amoo ♥
la trama, los personajes, todoooooooo !
please siiguelaaaaaaaaa
nueva lectora !
me llamo cintya... ciin en el foro...
wow.. esta novela esta de muerte .. la amoo ♥
la trama, los personajes, todoooooooo !
please siiguelaaaaaaaaa
Ciin :)
Re: Mariposas (Harry Styles y _____ Black)
Ciin :) escribió:holaaaaaaaaaaaa !!!
nueva lectora !
me llamo cintya... ciin en el foro...
wow.. esta novela esta de muerte .. la amoo
la trama, los personajes, todoooooooo !
please siiguelaaaaaaaaa
¡¡Bienvenida Ciin!! :) Amo que ames la novela y sus personajes! :3 jaja
Graciiias por leer y comentar!
Intentaré subir mañana :) Estoy muy atareada con los examenes de la uni :(
Besos.
ReaderGirl
readergirl
Re: Mariposas (Harry Styles y _____ Black)
la prima de harry obsecionada con el insesto me mato esa parte sube pronto sibay
||Hazzy||
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