"Chico travieso" (Joe y tú)

hay mi jonasss!!! que capp mi nena!!! la temperatura subió un 1000° no crees?? jaja!!
oh! dios! eso no fue bien?!??? pobre me va a matar. pss no importa, con mi joe a donde sea!

no hagan caso a mis pensamientos.......

PD: sigueeee...!!!

ujuuuuu pase de pagina!!!!! :bounce: :D

"Hacerlo bien" (?) Que mierda acaso no fue bien?? Dios ese chico me va a matar!!! Pero que será cuando logre la perfección?? :twisted: :twisted:

Ay
Maldito hijo de puta... 8)
LO AME!!
La perfeccion???
Me muero en el instante!!
ADE!!
M encanto!!
Fue perfecto!!
SIGUELA!!
Quiero ver que hace Joe para alcanzar la perfeccion..
Muajaja :twisted:

ForJoeJonas escribió:Muchisimas gracias por sus coments, corazoncitos mios! Son grandiosas!

Flor, quiero una camiseta con el micro estampado! xD

Quieren cap?? COMENTEN MAS!!!!!!

AAAAAAAAAAAAAAAAAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJ
YA ME PUEDO IMAGINAR ESO JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJ
DESDE YA TE DIGO QUE NO SE SI TE VA A ENTRAR EN LA CAMISETA, VOS VISTE QUE EL MICROFONO ES XXXL :| (?
JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJ

ForJoeJonas escribió:

F l r e n c i a. escribió:

ForJoeJonas escribió:Muchisimas gracias por sus coments, corazoncitos mios! Son grandiosas!

Flor, quiero una camiseta con el micro estampado! xD

Quieren cap?? COMENTEN MAS!!!!!!

AAAAAAAAAAAAAAAAAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJ
YA ME PUEDO IMAGINAR ESO JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJ
DESDE YA TE DIGO QUE NO SE SI TE VA A ENTRAR EN LA CAMISETA, VOS VISTE QUE EL MICROFONO ES XXXL :| (?
JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJ

Ay! Flor! Si no cabe en la camiseta imaginate ahi... Ni con una excavadora para abrir mas el agujero va a caber ese microoo!!! xDDDD
El mundo se queda sin "X" con el tamaño de Joe xD

DE QUE AGUJERO ME ESTAS HABLANDO?
FLORENCIA NO ENTENDER
:|











(??????
JAJAJAJAJAJAJJAJAJAJAJAJ
SI ES EL QUE ME IMAGINO, NI SOÑANDO ENTRA |:
JAJAAJJAJAJAJAJ
ME PARECE QUE YA NOS FUIMOS DE TEMA :face:
JAJAJAAJAJAJA

S I G U E L A ! !
S I G U E L A ! !
S I G U E L A ! !
S I G U E L A ! !
S I G U E L A ! !
S I G U E L A ! !
S I G U E L A ! !
S I G U E L A ! !
S I G U E L A ! !
S I G U E L A ! !
S I G U E L A ! !
S I G U E L A ! !
S I G U E L A ! !
S I G U E L A ! !
S I G U E L A ! !
S I G U E L A ! !
S I G U E L A ! !
S I G U E L A ! !
S I G U E L A ! !
S I G U E L A ! !
S I G U E L A ! !
S I G U E L A ! !
S I G U E L A ! !
S I G U E L A ! !
S I G U E L A ! !
S I G U E L A ! !
S I G U E L A ! !
S I G U E L A ! !
S I G U E L A ! !
S I G U E L A ! !


(:

siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :)

siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :) siguela :)

nueva lectora.........................siiguelaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa

______ había perdido la cordura mucho antes de la liberación de Joe. Temblaba después del orgasmo, débil, agotada por la emoción, el placer que había explotado a través de ella. Lo sintió desplomarse detrás de ella, todavía enterrado dentro de su coño, su respiración jadeante, sus brazos apretados mientras la empujaba hacia su pecho húmedo.
—Respira, nena —le canturreó en la oreja mientras una mano le masajeaba el pecho, recordándole que contenía la respiración mientras la soltaba en una ráfaga, enviando estrellas que estallaron ante los ojos—. Ahí vas, cosita dulce —murmuró, los labios en el hombro mientras su polla daba un tirón dentro de ella—. Descansa un poco. Solo un poquito. Entonces lo intentaremos otra vez y veremos si lo podemos hacer bien.
¿Hacerlo bien? Querido Dios, si eso no era bien entonces la mataría si él alcanzaba alguna vez la perfección.


Capitulo 12

Estaba todavía oscuro cuando ______ despertó, su cuerpo agradablemente dolorido mientras Joe dormía profundamente a su lado, extendido desnudo sobre el estómago.
El calor se curvó en su estómago mientras miraba fijamente a su ensombrecida forma, un temblor de recordado placer reverberó por su matriz.
Moviéndose silenciosamente, se deslizó de la cama, buscando hasta que encontró la camiseta de Joe, desechada más temprano ese día en una silla cercana, y la empujó sobre su cuerpo desnudo. No podía oír nada abajo, pero dudaba que Kevin y Nick durmieran.
Avanzando por la escalera estrecha y curva, el resplandor débil de la televisión proporcionaba una luz tenue mientras _____ se dirigía al pequeño refrigerador.
Sacó una botella de agua, destapándola mientras se enderezaba y la levantaba a sus labios antes de vislumbrar a Kevin.
Estaba sentado en el ensombrecido rincón entre la mesa y el mostrador, sus ojos brillando en la oscuridad cuando ella se detuvo, mirándolo.
—Joe va a putearte por robar otra de sus camisas —arrastró las palabras calladamente mientras ella sentía que su cara se ruborizaba.
El calor no tenía nada que ver con el hecho de que había sido atrapada robando más ropa de Joe, era la pregunta repentina de sí su boca malvada había sido una de las que la había acariciado antes o no.
—Debería estar acostumbrado. —Se aclaró la garganta incómodamente, sintiendo un hormigueo de calor curvándose alrededor del clítoris.
—Es un chico terco. —Se encogió de hombros con negligencia—. Ya lo sabes.
______ se inclinó contra el mostrador y lo miró curiosamente. Había mucho que todavía no sabía sobre Joe y su relación con sus primos. Todos parecían preocuparse del hecho de que sexualmente, disfrutaran compartiendo sus juguetes.
Agachó la cabeza, sabiendo que no debería haber postergado el aprender más acerca de los tres hombres juntos antes que centrarse solo en Joe. Pero era Joe quien sostenía su corazón, no los otros dos. Aunque sabía, finalmente, que ellos llegarían a ser una parte de la relación que ella y Joe compartían.
—Pareces una pequeña cierva asustada ahí. —Su voz era como seda oscura—. Nos conocemos desde hace mucho para esa cautela en los ojos, pequeña.
Sí, lo habían hecho. Kevin y Nick eran una parte de su vida tanto como Joe había sido, en muchos sentidos. Él había tratado de protegerla cuándo Joe no estaba alrededor, la había cuidado y generalmente la había aguantado. Todos lo habían hecho.
—No estoy asustada de ti, Kevin —suspiró—. No estoy asustada de ninguno de vosotros.
Quizá estaba asustada de sí misma.
—Las personas sugieren demasiado sobre nuestros pequeños placeres —gruñó—. Como si algún insidioso diablo lo causara más que si fuera una elección. —Rió por sus propias palabras—. No hay nada diabólico en ello, ______. Y Joe nunca te presionaría por lo que no quieres. Así que no tienes porque mirarnos como si fuéramos a saltar sobre ti en cualquier minuto.
—Y los tres pensáis que no sabía en que demonios me estaba metiendo cuando esperé a Joe. —Apretó los labios mientras su propia frustración la reconcomía por dentro—. No es un asunto de no quererlo, Kevin, ni incluso si yo lo quiero.
—Quieres ser seducida en ello. ¿Quieres que te quiten la elección de las manos? —Se recostó en la silla, mirándola atentamente.
—No quiero analizarlo hasta la muerte, eso es condenadamente seguro —dijo bruscamente—. Es una maravilla que los tres encontréis una mujer para compartir si habláis con ella hasta la muerte primero.
—Las otras mujeres no importaban, ______. —La asombró con su respuesta—. Fueron diversión y juegos, tú eres el futuro de Joe. No puede haber malentendidos, ninguna seducción, ninguna vacilación ni ocultación de la verdad si lo aceptas. Si lo aceptas, entonces lo aceptas todo.
Incluso el hecho de que finalmente, el hombre que amaba tocaría otra mujer, le daría placer, la follaría. No podría aceptar el toque de sus primos sin ese conocimiento.
—Le amo —susurró.
—Esto no será fácil para ninguno de nosotros. —Levantó los hombros pesadamente—. Nick y yo también te amamos, ______, no como Joe pero te amamos. Hemos ardido con él por tocarte. Pero el día llegará cuándo uno o ambos de nosotros encontraremos a la mujer que deseamos como propia. El compartir no es una cosa de todas las veces, pero sería seguro como el infierno que lo echaríamos de menos si paráramos.
Sería un hambre que los atormentaría. El repentino pensamiento hizo que su pecho se tensara. Por alguna razón, los tres hombres estaban irrevocablemente atados. Y era un vínculo que solo la muerte cortaría.
— ¿Te ha pedido alguien que pararas, Kevin? —preguntó—. ¿Lo has considerado alguna vez?
Algo peligroso destelló en su expresión antes de irse igual de rápido.
—Pararía si alguien a quien ame me lo pidiera. Si supiera que la mujer a la que amo no lo pudiera manejar. —Encogió los hombros anchos.
—No sé si podría soportar verle tocar a otra mujer, Kevin. —Una sonrisa de autoburla le curvó los labios—. ¿Cómo es la hipocresía?
—No hipocresía, cariño, honestidad —le dijo calladamente—. Eso es lo que hace que una relación como esta funcione, siendo honesto sobre ello. Es ser honesta contigo misma y con Joe. Nosotros no podríamos pedir nada más que eso.
—No lo haré solo por Joe —exhaló ruidosamente—. No le permitiré tocar a otra mujer simplemente porque sé que es lo que él quiere. Tiene que tener sentido para mí. Tengo que poder vivir con ello.
—Eso es bastante cierto. —Asintió con comprensión—. Cualquier relación es hacer concesiones mutuas. Tú das un poco, Joe da un poco, y viceversa. —Se levantó de la silla, acortando la distancia donde ella estaba, dominándola.
______ tragó profundamente mientras lo sentía rodeándola, su calor, el hambre sensual que se construía dentro de él.
—Kevin… —no había manera de retirarse.
Tembló mientras el se estiraba, los dedos callosos recorriendo su brazo y llenándola con emociones opuestas. ¿Lo podría hacer? Fantasear acerca de ello era una cosa, y el Señor sabía que había fantaseado acerca de ello a menudo. Pero dar realmente ese paso era otro asunto.
—Te deseo —susurro—. Incluso te amo, ______. No como Joe, pero te amo, y no te veré herida. No por nada.
—Para. —Protestó, sacudiendo la cabeza mientras la negación comenzaba a rabiar dentro de ella. Una sensación asustada de molestia comenzaba a construirse. Quizás era lo qué Joe deseaba, pero este no era Joe. No era su cuerpo calentándola, su necesidad rodeándola.
—Está oscuro y en sombras. Muchas verdades pueden ser ocultadas en las sombras. —La voz de Kevin era más oscura que la noche—. Como las mentiras.
El aliento se le atascó en la garganta mientras él bajaba la cabeza, los labios demasiado cerca de los suyos.
—Podría seducirte —susurró—. Puedo darte eso, _______. No tengo que despertarme contigo por la mañana. No tengo que encarar el saber que utilicé tu cuerpo contra ti. ¿Es eso lo que quieres?
—Imbécil. —Empujó contra su pecho, las manos golpeando en los duros músculos mientras una risita oscura era susurrada alrededor de ella—. Aléjate de mí. Eres tan divertido como la gripe, Kevin.
— ¿Lo he dejado claro? —Los dientes destellaron en una sonrisa.
Ella respiró con desdén.
—No era necesario. No cometas el error de pensar que no comprendo tus razones. Pero también soy una mujer, Kevin, no un juguete. Él puede ponerse serio acerca de esto o puede olvidarse.
— ¿Puede ponerse mas serio, _____? Permitió que uno de sus primos lamiera tu trasero. Eso es malditamente serio para mí.
Su cara llameó mientras entrecerraba los ojos.
— ¿Eras tu?
Él cruzó sus brazos sobre el pecho, mirándola con la insinuación de una sonrisa.
—Uno lamió, el otro miraba con anticipación. No te voy a contar quien fue quien.
¿Y eso no la sorprendió, por qué? Lo que la sorprendía era el sentimiento de negación que rabiaba por su recuerdo. No era una fantasía, era la realidad, y no estaba cómoda con ello, por más que deseara estarlo.
—Sabes, Kevin, un día de éstos vais a morder mas de lo que podéis abarcar en una mujer. ¿Qué vais a hacer entonces?
—Me parece que Joe ya lo ha conseguido —rió entre dientes mientras su mirada se disparaba más allá de ella—. Y aquí esta para ver cuánto más puede hundirse en la felicidad monógama.
______ giró rápidamente, refrenando apenas un gemido ante la vista de Joe, desnudo, duro, los ojos brillando con interés mientras estaba a los pies de los escalones. Una cosa que podía decir acerca de él, desnudo o vestido, era que la confianza rezumaba de cada poro de su cuerpo. La confianza y pura lujuria.
Él inclinó la cabeza mientras la miraba, su mirada moviéndose hacia su primo, luego de vuelta a ella lentamente. Había un desafío allí, un destello astuto en los ojos que le aseguraba que era bien consciente de que ella estaba mojada y excitada.
—Ahí vas robando mi ropa otra vez. —Sacudió la cabeza con el castigo simulado—. Esperaba que aprendieras mejor, nena.
—Pienso que necesita ser zurrada —murmuró Kevin detrás de ella, acelerando su pulso con la sugerencia.
Ella arqueó la ceja mientras sostenía la mirada de Joe. Él le sonreía, una sonrisa torcida y segura llena de intención carnal.
No tenía excusas para quien era, o lo que era. Juguetón, malvado, determinado a tener su propio camino. Pero por la seguridad en sí mismo y la determinación ella vio algo más también. Vio su amor por ella. La amaba, como ella lo amaba, y a pesar de sus temores y a menudo sus inseguridades, supo que Joe no era un hombre de amar ligeramente.
Mientras lo miraba, fue consciente de Nick moviéndose por detrás del camarote, mirando la escena curiosamente. La testosterona se derramó por el cuarto, pesada con la malvada hambre e intención pecadora. Tres machos depredadores, por mucho que intentaran ocultar los instintos primitivos que corrían justo bajo la superficie de su humor perezoso, ______ lo vio.
Convergieron en ella, altos, anchos, excitados. Joe era el único completamente desnudo, pero los otros dos le siguieron rápidamente. Nick se quitó la camisa, mientras detrás de ella oyó los movimientos de Kevin, el susurro de su ropa.
Los nervios rasgaron por ella, enviando estremecimientos de la respuesta instintiva más abajo del estómago antes de quemar un sendero de destrucción erótica por sus zonas erógenas. Sus pezones alcanzaron el máximo. Los labios dolieron y su sexo lloró.
—Quítate la camisa, nena —susurró Joe mientras sus manos agarraban el dobladillo, atrayéndolo lentamente hacia arriba.
Detrás de ella, Kevin dio un paso más cerca, la sorpresa de sus manos desnudas recorriendo sus muslos la hizo tensarse de placer. Estaba tan mojada que podía sentir humedecerse sus muslos ahora, corriendo libremente desde su coño lloroso mientras ellos la preparaban para futuras posesiones.
—Mira que bonita eres… —susurró Joe reverentemente mientras levantaba los brazos, permitiéndole quitarle la camisa del cuerpo—. Tus pezones están tan duros, excitados. Amo saborearlos, ______. La sensación de ellos en mi boca, las pequeñas puntas tensas latiendo en mi lengua.
Ellos latían ahora ante ese pensamiento.
La camisa fue tirada aparte, pero no fueron las manos Joe las que acunaron los globos firmes, fue Kevin. Se deslizaron a su alrededor hasta que ambas manos estuvieron llenas con su carne, el índice y el pulgar de cada mano agarraron una dura punta, jugando con ellas, girándolas exquisitamente.
La cabeza cayó contra su pecho mientras los dedos se apartaron. Joe se movió, haciendo sitio a Nick mientras ambos hombres bajaban las cabezas a los picos que empujaban hacia arriba.
______ se puso de puntillas mientras la sensación estallaba por ella. Un grito desigual se deslizó de sus labios mientras una inundación de debilitadora lujuria rasgaba por ella.
_____ perdió la capacidad de hablar, ver, hacer algo excepto sentir dos conjuntos de duros labios masculinos cubriendo los picos sensibles. El fuego la tragó mientras lenguas húmedas y calientes como la lava empezaban a golpear sobre la carne apretada, y duras bocas masculinas comenzaban a amamantarse eróticamente.