Re: Rightfully his (Zayn y Clare/tu) TERMINADA

por **Carla.** Vie 07 Dic 2012, 9:25 am

Nueva lectora c:
Me encanto la novela, es tan perfecta, los capítulos están vgabhvgfctrgsyjhnbrgr LOL, de verda, ojala la sigas luego c:
Bye <3

por **kariAC** Vie 07 Dic 2012, 11:29 am

CAPITULO 5- I PARTE

Sin que Clare se dé cuenta, añadió para sus adentros, justo en el momento en que la puerta se abría y ella entraba en la casa.
—Zayn, ¿se puede saber qué está pasando? —preguntó Clare, quitándose la cazadora—. Te presentas de repente, después de tres meses, y dices que te quedas hasta Acción de Gracias, como si me lo fuera a creer.
Clare se volvió hacia él, remangándose el suéter, como enfadada, pero lo cierto era que se alegraba de que James se hubiera ido. Y más aún de que Zayn estuviera allí. Incluso si su comportamiento había puesto a James prácticamente en la calle.
—He venido para Acción de Gracias —insistió él inocentemente—. ¿Verdad, niñas?
—Sí, mamá, nosotras se lo pedimos —respondieron las dos gemelas al unísono.
—Sí, mamá, te preguntamos si podíamos llamarlo por teléfono, ¿te acuerdas?, hace unas semanas. Y dijiste que sí —le recordó Mary.
—Es verdad, lo había olvidado.
Clare miró de nuevo a Zayn, preguntándose por qué tenía la extraña impresión de que su cuñado estaba tramando algo con sus hijas.
—Bueno, ¿qué hay para cenar? —preguntó Zayn, metiéndose una aceituna en la boca y sonriendo—. Estoy muerto de hambre.
—Es agradable saber que algunas cosas nunca cambian —dijo Zayn—. Tú sigues preparando la mejor lasaña del mundo.
—Gracias —dijo ella, poniéndose en pie para retirar los platos—. Lo que siento es que James no haya tenido la oportunidad de probarla.
—Clare.
Divertido, Zayn estiró una mano y la sujetó de un brazo. Tenía la piel tan suave y tan cálida que Zayn notó un estremecimiento en el estómago. Con gesto ausente, la acarició con el pulgar.
—Siento haberte estropeado los planes —dijo, haciendo un esfuerzo para no reír.
—No te creo —le respondió ella con una ligera carcajada.
—Y haces bien —dijo él, suspirando—. Ya sabes que mentir nunca se me ha dado muy bien.
—Lo sé, pero gracias por intentarlo. Supongo que es duro reconocer que a la tierna edad de casi treinta años, he echado a perder mi primera cita —explicó ella, apilando los platos para llevarlos a la cocina—. Prepararé el café.
¿Primera cita?, pensó Zayn. A juzgar por el mensaje de las niñas, tenía la impresión de que Clare llevaba bastante más tiempo saliendo con Beardsley.

Pero quizá hasta ahora sólo habían sido amigos. Quizá la situación no era tan terrible como había imaginado.
—¿Tienes algún dulce casero por ahí? —preguntó Zayn desde el salón.
En la cocina, Clare sonrió. Detestaba admitir que siempre le había gustado cocinar para Zayn. Seguramente porque siempre había tenido un buen apetito, y sobre todo porque siempre había sabido apreciar sus dotes culinarias.
Ahora que Zayn estaba otra vez en casa, Clare volvía a sentirse especialmente vulnerable. Pero esta vez iba a hacer un esfuerzo para controlar sus sentimientos y emociones, pensó con firmeza, mientras elegía dos tazas para el café.
Porque en la última visita de Zayn, ella se había permitido desear algo más, y todas sus esperanzas y emociones se convirtieron en añoranza, desesperación y dolor cuando Zayn se fue, como siempre hacía.
Esta vez no ocurriría lo mismo.
Al menos eso esperaba.
Mientras se hacía el café, Clare colocó unos dulces que había preparado aquella misma tarde en una bandeja, junto a unas servilletas y las tazas vacías, y se dirigió de nuevo al salón.
Zayn había apagado algunas luces, y encendido de nuevo las velas. La luz de las velas unida al suave resplandor de la chimenea daban de nuevo al salón una sensación acogedora y casi tan romántica como cuando Zayn había llegado y estropeado los planes de James.
Clare ignoró las campanillas de advertencia que empezaron a repicar en su cabeza.
—He pensado que podemos tomar aquí el café y contamos que ha sido de nuestras vidas —dijo él, tomando la cafetera de entre las manos de Clare y dejándola en la mesa, junto con la fuente de dulces—. Ah, esto ya me gusta más —dijo Zayn, llevándose uno de los dulces a la boca—. Tú cocinas mucho mejor que en el hospital.
—¿Hospital? —dijo alarmada Clare y se sentó en el sofá a su lado—. Sabía que te había pasado algo, Zayn. Lo sabía. Te hirieron, ¿verdad? Por eso has venido.
—Clare —Zayn suspiró, arrepintiéndose de haber dejado escapar lo del hospital—. No fue nada.
—La última vez me dijiste que alguien te había metido dos balas en las costillas —le recordó ella.
—Sí, es verdad, fue toda una experiencia —dijo él con una sonrisa—. Y gracias a ella conseguí unas fotos fabulosas.
—Seguro. Da gracias de que no estés haciendo fotos en una silla de ruedas —dijo Clare. Y respiró profundamente antes de hacer la siguiente pregunta, para estar segura de que estaba preparada para la respuesta—. Está bien, Zayn, exactamente ¿qué es exactamente lo de «no fue nada» esta vez?
Zayn se encogió de hombros y continuó comiendo dulces.
—Digamos que me encontré por casualidad en medio de un enfrentamiento armado entre dos señores de la guerra en una zona fronteriza de un país de Oriente Medio mientras iba haciendo unas fotos —. sacudió la cabeza pensativo y bebió un sorbo de café—. También habrían sido unas fotos fantásticas.
—¿Enfrentamiento armado? —Clare frunció el ceño—. Oh, Dios mío, ¿quieres decir que se estaban disparando y tú estabas en medio?
Zayn le dirigió una sonrisa encantadora.
—Más o menos, sí, así fue.
Ausente, Clare posó una mano en el brazo de Zayn, sintiendo el calor masculino a través de la tela.
—Y si te pilló en medio, ¿te hirieron? —preguntó ella, llevándose la mano libre al pecho para respirar hondo.
—Más o menos, sí, así fue —respondió él con toda tranquilidad, inclinándose hacia la mesa para to¬mar otro dulce.
Ella le dio un manotazo en la mano.
—No más dulces hasta que me cuentes la verdad, toda la verdad, y nada más que la verdad —dijo ella seria, cruzando los brazos—. Ahora mismo.
Zayn se dio cuenta de que si quería seguir comiendo dulces tendría que contárselo.
—Está bien, de acuerdo. Pero no hay de que preocuparse.
Se acomodó en el sofá, estirando las largas piernas debajo de la mesa. La expresión de miedo en el rostro femenino le hizo suspirar, y le tomó la mano entre las
suyas.
—Clare, escucha. No te preocupes. Estoy bien, en serio.
—¿Cuántas veces te dispararon, y dónde? —quiso saber ella, ignorando sus comentarios tranquilizadores.
—Tres veces —reconoció él, y vio cómo los ojos femeninos se abrían de terror—. Pero no fue para tanto, Clare, de verdad —insistió él, apretándole la mano—. Hubiera podido ser mucho peor. Y si no estuviera recuperado, los médicos jamás me habrían dado el alta.
—Contéstame —insistió ella—, ¿dónde te dispararon?

por **kariAC** Vie 07 Dic 2012, 11:32 am

Carla. escribió:Nueva lectora c:
Me encanto la novela, es tan perfecta, los capítulos están vgabhvgfctrgsyjhnbrgr LOL, de verda, ojala la sigas luego c:
Bye <3

Hola, gracias por leerla <3
ya la seguí (:

por **kariAC** Vie 07 Dic 2012, 11:33 am

Nialler :) escribió:
kariAC escribió:
Nialler :) escribió:Siguelaaa!! si me dedicaste el cap me ilusionaste con lo de: AQUI ESTA LA COMIDA...MENTIRA
Casi me pongo a llorar Okno hahaha siguela

jajajajaajajaja lo se, fui un poco mala? jaja
un poco¿? CASI ME DA UN INFARTOOO

JAJAJAJAA :D

por **kariAC** Vie 07 Dic 2012, 11:37 am

Maru... escribió:Kari Me encanto la nove tienes que seguirla!!
por cierto nueva lectora!! besos!!

Hola Maru, gracias por leerla. (:

por **kariAC** Vie 07 Dic 2012, 11:38 am

ivannaac escribió:Nueva lectoraaaaaaaaaaaaaaaaaaa :)
me gusta mucho mucho mucho tu novela :D
siguela pronto linda

Holaaaaa. Me da mucho mucho mucho gusto que te haya gustado :)

por **BlueyesN** Vie 07 Dic 2012, 12:03 pm

Debes seguirlaaaa pero antes estudia e.e

por **{Maru.}** Vie 07 Dic 2012, 2:14 pm

aay tienes que seguirla me encanto!! besos!!

por **kariAC** Vie 07 Dic 2012, 5:23 pm

Maru... escribió:aay tienes que seguirla me encanto!! besos!!

gracias linda, mañana o más tarde la sigo (:

por **kariAC** Vie 07 Dic 2012, 5:26 pm

Nialler :) escribió:Debes seguirlaaaa pero antes estudia e.e

mas tarde o mañana la sigo :). Ya estudie un poco pero me falta psicología (no me gusta nada nadita)

por **Deyca <3** Vie 07 Dic 2012, 6:14 pm

Kariiiiiiiiii la nove esta increíble! En serio debes de subir la segunda parte PRONTOO!!! sino hago huelga y no subo en la mía jajaja :)

Dey xx

por **kariAC** Vie 07 Dic 2012, 10:01 pm

Deyca <3 escribió:Kariiiiiiiiii la nove esta increíble! En serio debes de subir la segunda parte PRONTOO!!! sino hago huelga y no subo en la mía jajaja :)

Dey xx

Me alegra mucho mucho que te guste.
Dey, eso se llama chantaje jajaja. Ya la sigo (:

por vanee *o* Vie 07 Dic 2012, 10:03 pm

aaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaw zayncito *o* si todo es amor :333333 pero falta el segundo beso dfghjkrtuiopfghjkldfghjk zayn lo desea yo lo se >.< el me lo dice por mensaje con kevin(? sdfghjklasdfghjklzxdcfghjkl
es que... es que ahora zayn puede hacer de todo...
SE FUE JAMEEEES!!!!!!!!!!
aprobecha por dios >.<
aay :'3 siguela esta buenisima :D

por **kariAC** Vie 07 Dic 2012, 10:17 pm

CAPITULO 5- II PARTE

—Contéstame —insistió ella—, ¿dónde te dispararon?
Zayn suspiro, consciente de que aquella vez iba a tener que confesar la verdad, le gustará o no.
—Una bala me rebotó en las costillas y me rompió tres, pero los médicos me han dicho que estaré perfectamente dentro de otro mes. Sólo tengo que tenerlas vendadas y por supuesto procurar no darme golpes ni rozarlas.
—Oh, cielos —gimió ella, mirándole al pecho.
El vendaje no se veía porque estaba cubierto por la camisa.
—¿Dónde más? —preguntó ella.
Clare lo miró con detenimiento, pero no pudo ver indicios de otras heridas. Además, Zayn tenía años de experiencia en ocultar sus lesiones, que aseguraba eran sólo gajes del oficio.
—Otra bala me alcanzó en la parte posterior de la pantorrilla —dijo Zayn, y sonrió—. ¿Lo ves? No soy tan tonto. En cuanto me di cuenta de que estaba en medio del fuego, intenté poner pies en polvorosa. De ahí la herida detrás de la pantorrilla —y la que más le había dolido, habría podido añadir—. Los médicos me extrajeron la bala la primera noche en el hospital. Ahora sólo me queda una horrible cicatriz. Nada importante.
—Qué tranquilizador —le espetó ella, sarcástica—. Bien, en las costillas y en la pantorrilla. ¿Dónde más?
—Clare —dijo él, frunciendo el ceño—, tampoco es para tanto.
—¿Quieres otro dulce? —preguntó ella, alzando la fuente en el aire, justo fuera del alcance de Zayn—. ¿O los guardo?
—Eres una mujer muy dura —dijo él, mirando la fuente—. Está bien, la última bala me rozó la clavícula —admitió, con un estremecimiento al recordar el fatídico momento—. Primero fracturó la clavícula, pero no mucho, así que no te preocupes. Duele mucho menos ahora que entonces.
Zayn estiró el brazo derecho, lenta y cuidadosamente, lo flexionó despacio y agitó los dedos, ignorando la punzada de dolor que le recorrió todo el brazo, en un intento de demostrar que estaba perfectamente.
—¿Lo ves?
—Sí, claro. Te han disparado tres veces, por lo visto has estado al menos un mes en el hospital, y yo sin saber absolutamente nada.
—No quería que te preocuparás, Clare.
—Vale. Lo recordaré la próxima vez que pase algo por aquí y no te lo cuente para no preocuparte—dijo ella.
— Clare —protestó él, tomándole la mano otra vez—. No es lo mismo.
—¿Ah, no? —Clare se volvió hacia él, furiosa—. Zayn, ¿te das cuenta de lo mucho que nos preocupamos las niñas y yo por ti? ¿No crees que ya es hora de que empieces a pensar en hacer algo menos peligroso?
Clare sabía que era inútil preguntar. Zayn vivía para y por su trabajo, y pedirle que lo dejara sería cómo pedirle que renunciará a la esencia de su vida y de su personalidad, cosa que a ella jamás se le ocurriría, a pesar de lo mucho que se preocupaba por él.
—La verdad, Clare, es que he estado pensándolo —reconoció él—. Por eso precisamente he venido. Aparte de que necesito descansar, también quiero pensar en otras opciones. Y cuando llegué a casa y escuché el mensaje de las niñas, pensé que éste sería el momento perfecto para hacer ambas cosas.
Clare no estaba muy segura de poder creerle. Quizá sus heridas eran más graves de lo que le había dicho.
— Clare, escúchame, he hecho prácticamente todo lo que deseaba. Tengo los premios, los reconocimientos, la fama y los trabajos que deseo. Es mucho más de lo que consigue mucha gente, y quizá ahora sea el momento de plantearme otras cosas —Zayn sonrió—. En la vida hay cosas más importantes que el trabajo.
Sin lugar a dudas, ése no era el Zayn que ella conocía; el Zayn siempre impaciente por acudir a buscar el testimonio gráfico de los puntos más calientes del planeta.
—Parece que has estado pensando un poco —dijo ella, frotándose la nuca.
—Sí, un poco —reconoció él—. Últimamente he estado pensando en muchas cosas, Clare. Cosas a las que no había prestado demasiada atención.
Clare soltó la mano de Zayn para sujetar la taza de café. No quería ser indiscreta, y mucho menos inmiscuirse en su vida personal, pero era evidente que Zayn estaba pensando en algo importante.
—Hace tiempo que tengo ofertas de editoriales interesadas en una biografía de mi vida profesional —continuó explicándole él—. También podría enseñar. He tenido ofertas de varias universidades, pero no creo que las acepte porque enseñar es lo que hacen los que no pueden ejercer la profesión en la vida real.
—Muchas gracias, Zayn —dijo ella.
Zayn se echo a reír, sacudiendo la cabeza.
—Clare, no era mi intención insultarte. Tú enseñas Economía del Hogar no sólo porque te encanta enseñar, sino porque además eres una excelente cocinera.
—Exacto, pero si no pudiera hacerlo, tampoco enseñaría —añadió ella, a la defensiva.
—Clare, ¿qué ha sido de tus planes? Si no recuerdo mal, siempre quisiste montar una empresa de catering. ¿Qué pasó?
—¿Que qué pasó? —repitió Clare con una risita—. A ver si me acuerdo. Matrimonio. Hijos. Responsabilidades. La vida, eso fue lo que pasó, supongo. Cuando Ethan y yo nos casamos, tuve que continuar trabajando porque necesitábamos el dinero. Después encontramos esta vieja casa —dijo con un suspiro de felicidad—, y los dos nos enamoramos de ella. Pero necesitaba mucha inversión. Todavía la necesita —corrigió con una sonrisa.
Clare se apoyó en el respaldo del sofá, dobló las rodillas y metió las piernas bajo ella. Probablemente era la primera vez que estaba relajada en toda la velada. Con Zayn podía relajarse y ser ella misma, lo que era muy agradable.
—Aún queda mucho que hacer —continuó ella—, pero ahora, si tengo dinero, no tengo tiempo, y cuando tengo el tiempo, nunca tengo el dinero —sacudió la cabeza y se echó a reír—. Hace más de dos años que prometí a las niñas hacer un cuarto de juegos abajo. Pero de momento se ha quedado en una promesa.
—¿En el sótano? —preguntó Zayn.
-Sí.
—Yo no soy un carpintero profesional, Clare, pero mientras esté aquí, estaré encantado de ayudarte a arreglarlo. Y también el desván, si quieres.
—Te lo agradezco, de verdad, pero ¿cuándo piensas hacerlo, antes o después de recuperarte?
Zayn soltó una carcajada.
—Escucha, nuestra casa es tu casa —le aseguró ella—, pero eso no significa que cada vez que vienes a hacernos una visita tengas que ponerte a trabajar. Ahora mismo lo más importante es que descanses y te recuperes por completo.
—Lo haré, pero no quiero que pienses que lo único que sé hacer son fotos —Zayn le sonrió—. Además, las niñas pueden ayudar. Será estupendo hacer algo entre los tres.
—Supongo que lo que me resulta difícil de creer es que te quedes lo bastante para tener tiempo de terminar nada. Los dos sabemos que no aguantarás aquí mucho tiempo.
—Puede —dijo él—. Pero ya te he dicho que de momento pienso quedarme por lo menos hasta Acción de Gracias.
«Ya lo veremos», pensó ella, pero no lo dijo en voz alta.
-Las niñas estarán encantadas —dijo—. Te adoran, ya lo sabes, y es bueno que tengan un modelo masculino en sus vidas.
—Lo sé, y yo también las adoro a ellas. Espero que sepas lo mucho que las quiero, lo importantes que son para mí.
Pero Zayn no quería profundizar en sus sentimientos, y prefirió cambiar de tema de conversación.
—A propósito, ¿qué tal está tu madre? —preguntó con una sonrisa indulgente.
Adoraba a Carmella, la original y poco convencional madre de Clare.
—Tan extravagante como siempre —respondió Clare, riendo—. Ahora está aprendiendo a bailar el tango con el señor Rizzo, el vecino.
—¿Así es como lo llaman ahora? —preguntó Zayn riendo—. ¿Bailar el tango?
—La verdad es que lo pasa muy bien con él, y debo decir que me gusta verla tan contenta.
Zayn se quedó en silencio unos momentos. Clare continuó.
—Cuando el avión de mi padre desapareció, mi madre se desmoronó por completo —recordó con un suspiro—. Era incapaz de ocuparse de nada, porque mi padre era quien se había ocupado absolutamente de todo en vida, y viviendo en una base del ejército durante tantos años, nunca tuvo que preocuparse de hacer muchas cosas por sí misma. Todo estaba allí. Por eso, tras la muer¬te de mi padre, empezó a buscar a otro hombre que diera razón de ser y sentido a su vida. Mi madre lo único que sabía hacer era ser esposa, y nunca tuvo las oportunidades que yo he tenido, ni las que tendrán mis hijas.
Clare suspiró.
—Al menos ahora me alegro de que ya no siga buscando marido. Pero han hecho falta cinco o seis matrimonios fallidos, por no mencionar los numerosos novios que han desfilado por su vida, para que al final se diera cuenta de que para ser feliz no hace falta estar casada con un hombre.
—Probablemente por eso, un hogar propio y la estabilidad han sido siempre tan importantes para ti — comentó Zayn, incapaz de resistirse a acariciar con los dedos las puntas de los mechones rizados de Clare, tan suaves como él los recordaba.
—Probablemente —confirmó ella.
Notar los dedos de Zayn en el pelo le aceleraba los latidos del corazón.
—Cuando era pequeña, cambié tantas veces de casa que me prometí no hacerles eso a mis hijas. Por eso esta casa ha sido tan importante para mí.
Clare observó el rostro masculino, y algo en la expresión de sus ojos le llegó al corazón.
—Cuando Ethan murió —continuó—, una de las cosas más importantes que me planteé fue continuar viviendo en el hogar que habíamos construido para las niñas, y mi madre lo sabía. Para poder mantener esta casa, yo tuve que volver a trabajar, y mi madre no dudó en venir a vivir con nosotras para echarme una mano. No sé qué habría hecho sin ella en los últimos tres años. Su presencia aquí ha dado mucha más estabilidad y seguridad a las vidas de las niñas.
—Lo sé, y ellas la adoran. Igual que yo —dijo Zayn, apartando con los dedos un mechón de pelo rizado que cubría parte de la mejilla femenina—. Siempre has sido una mujer muy responsable, Clare.
En la voz de Zayn había una nota de tristeza, porque sabía que Clare había renunciado a muchos de sus sueños para poder dar una vida mejor a sus hijas.
—No tenía otra alternativa, Zayn.
Clare lo miró, y él aún pudo ver en sus ojos el dolor que su hermano Ethan le había causado. Incluso después de tanto tiempo, aún le dolía saber que su hermano había sido cruel e insensible con una mujer que desde luego no se lo merecía.
Clare se merecía el cariño, el respeto y el amor incondicional de su marido. Algo que Zayn había creído que su hermano podría darle. Pero se había equivocado. Y no sólo en eso, sino también en otras muchas cosas.
—En todas las casas alguien tiene que ser responsable —dijo Clare, recordándole lo irresponsable que había llegado a ser su propio hermano.
—Lo sé, Clare, lo sé. Pero no fue justo, ni contigo ni con nadie más.
—Nadie ha dicho que la vida sea justa, Zayn — dijo ella, encogiéndose de hombros. Al mirarlo, la intensidad de la expresión en los ojos masculinos la sorprendió—. Tengo a mis hijas y a mi madre, y una vida muy estable, y si quieres que te diga la verdad, eso es lo único que me importa. Es lo único que me ha importado siempre. Mientras mis hijas sean felices, yo soy feliz.
—Lo sé, Clare —dijo él con cautela—. Lo sé. Escucha, a mí la felicidad de las niñas también me importa mucho, ya lo sabes. Y de eso también quería hablarte.
—¿Adonde quieres ir? —preguntó ella.
Zayn la miró, y estudió los preciosos ojos negros que parecían atraerle como un imán.
—Creo que ya es hora de que hablemos sobre las niñas.

por vanee *o* Vie 07 Dic 2012, 10:31 pm

aaaaaaw zayn esta super tiernito *o* es tan lindo imaginar que hablan tantas cosas :'3 ojala la sigas luego :33

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